Rosario Al Señor de La Misericordia
Rosario Al Señor de La Misericordia
Rosario Al Señor de La Misericordia
De nuevo aquí me tienes Jesús mío confuso y humillado ante tu altar, sin saber que decirte, ni que
hablarte, ansioso solamente de llorar vengo del mundo, vengo del combate. Cansado de sufrir y
luchar, traigo el alma cargada de tristezas, y hambriento el corazón de soledad, de esta soledad
dulce, divina que alegra tu presencia celestial, donde el alma tan solo con mirarte te dice lo que
quieres sin hablar. Mis miserias Señor aquí traigo, mirame con ojos de piedad soy el mismo de
siempre. Dueño mío, un abismo infinito de maldad, un triste pecador siempre caído que llora
desolado su orfandad y gime bajo el peso de sus culpas y ansia recobrar su libertad. Soy un alma
sedienta de ventura, un corazón que muere por amar y abrazarse en la llama inextinguible del
fuego de tu eterna caridad, concedeme Señor que a ti me acerque, permite que tus pies llegue a
besar. Dejame que los riegue con mi llanto y sacie el ellos mi ardoroso afán. Oh que bien se está
aquí mi Dueño amado ante las gradas de tu santo altar, bebiendo de la fuente de aguas vivas que
brota de tu pecho sin cesar.
Ayudame para que te alabe debidamente en compañía de los ángeles y todos mis hermanos aquí
presentes. Voy a rezar tu santo rosario con la humildad, pureza, atención, y reverencia que me
sea posible, ya que tú eres fuente de vida, salud del mundo y precio de mi rescate.
Y porque eres infinitamente santo, justo, amable, y perfecto, y un dios que es a la vez mi buen
padre hermano, amigo, señor, maestro y medico soberano, no menos que tesoro medicina,
consuelo, protección, defensa y bienaventuranza mía.
Limpia mi alma de todo pecado mortal o venial y alumbra mi entendimiento recoge mi memoria
enciende mi voluntad y levanta mis pensamientos afectos y deseos.
Refrena mis sentidos y componme todo interior y exteriormente, porque don tuyo es el que yo te
alabe y te alabare por tu gran misericordia hasta el fin de mi vida amen.
Ven espíritu santo y llena los corazones de tus fieles y enciende en ellos el fuego de tu amor,
envía señor tu espíritu y se renovara la fas de la Tierra; oh dios que instruiste los corazones de
tus fieles con la luz del espíritu santo has que por ese mismo espíritu conozcamos el amor a la
divina justicia y llenarnos de celestiales consuelos por cristo nuestro señor amen.
Señor mío Jesucristo dios y hombre verdadero creador, padre y redentor mío, por ser quien soy y
porque te amo sobre todas las cosas, me pesa en el alma de haberte ofendido, propongo
firmemente la enmienda de mi pecador, confesarme, cumplir la penitencia que me fuera impuesta,
ofrezco mi vida, obras y trabajos en satisfacción de mis pecados y así confío en tu bondad infinita
que me perdonaras y me darás gracias para enmendarme en tu santo servicio hasta el fin de mi
vida amen.
Padre nuestro
Padre nuestro, que estas en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase
tu voluntad en la Tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros
perdonamos a los que nos ofenden, no nos dejes caer en la tentación y libranos del mal amen.
El Ave María
Dios te salve María, llena eres de gracia. El señor es contigo. Bendita tu eres entre todas las
mujeres, y bendito sea el fruto de tu vientre Jesús.
Santa María, madre de dios, ruega por nosotros los pecadores, ahora y en la hora de nuestra
muerte amen.
Creo en dios, padre todopoderoso, creador del cielo y de la tierra. Creo en Jesucristo, su único
hijo, nuestro señor, quien fue concebido por obra y gracia del espíritu santo, y nació de la
santa María virgen. Padeció bajo el poder de Poncio Pilato. Fue crucificado, muerto y
sepultado. Descendió a los infiernos. Al tercer día resucito de entre los muertos. Subió a los
cielos, y está sentado a la derecha de dios padre. Desde allí ha de venir a juzgar a vivos y
muertos. Creo en el espíritu santo, la santa iglesia católica, la comunión de los santos, el
perdón de los pecados, la resurrección de los muertos, y la vida eterna amen.
Primer misterio
En este misterio, nos ofrecemos victimas junto con tu divino hijo en desagravio por nuestros
pecados y por los pecados del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de soberbia
y avaricia, y te ofrecemos nuestros dolores angustias, alegrías, enfermedades, trabajos,
nuestras vidas y también te ofrecemos, las de todos los hospitalizados, los que van a ser
operados en este día, por las madres que van a dar a luz, de los heridos, de los confinados a
una silla de ruedas, en muletas, los ciegos, por los ancianos, que no tienen que comer, que no
tienen que vestir, que no tienen hogar, que están enfermos, por los presos hombres, mujeres y
niños, de todas aquellas familias que sufren las consecuencias de las guerras, inundaciones,
terremotos, tragedias de todos aquellos niños huérfanos, desamparados, abandonados que no
tienen que comer, que no tienen que vestir, que sufren los malos tratos de sus padres o de
otras personas, que sufren la separación de sus padres.
Todo esto te ofrecemos en desagravio por todos los pecados de la humanidad, por la
conversión de los pecadores, por todos los sacerdotes, religiosas, religiosos, libralos del mal y
conservalos en tu santo servicio, te pedimos por las vocaciones sacerdotales, danos
sacerdotes santos que sepan gobernar tu santa iglesia, te pedimos por aquellos hermanos que
han perdido la confianza en Ti haz que regresen a ti para que no se pierdan, te pedimos por los
misioneros, haz que sea fructífera su labor, por la paz del mundo, por nuestro santo padre Juan
Pablo II, por las faltas de nuestro propio corazón, de nuestras familias, hermanos, parientes,
conocidos, ahijados bienhechores, padrinos, por toda la jerarquía eclesiástica, danos a todos
tu gracia para que por medio de ella nos arrepintamos de todo lo que te hemos ofendido,
humildemente imploremos tu misericordia y así salves nuestras almas.
TODOS: Mira que te lo pedimos por tu preciosísima sangre de tu divino hijo por tu divina
misericordia y por la intercesión del corazón inmaculado de María santísima, te lo pedimos
señor.
TODOS: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero. (Se repite 10 veces)
TODOS: Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.
Las misericordias de dios son más grandes que todas sus obras.
CANTO: Dios está aquí que hermoso es, él lo prometió donde hay dos o tres, quedate señor,
quedate señor, quedate señor en mí. El espíritu de dios se mueve, se mueve, dentro de mi
corazón.
Segundo misterio
En este misterio nos ofrecemos víctimas, junto con tu divino en desagravio por nuestros
pecados y por los pecados del mundo entero. Principalmente por aquellos pecados de lujuria y
de ira y también te pedimos por todos aquellos hermanos que están agonizando en estos
momentos, que están entregando la cuenta de su vida.
Te pedimos por todos aquellos que vayamos a morir en este día, principalmente aquellos que
estemos en peligro de perderte, danos a todos tu gracia para que por medio de ella nos
arrepintamos de lo que te hemos ofendido humildemente imploremos tu misericordia y así
salves nuestras almas, te pedimos por el eterno descanso de las almas del purgatorio,
principalmente por nuestros familiares, sacalos de su cautiverio y llevales a gozar de tu santa
gloria.
TODOS: Mira que te lo pedimos por tu preciosísima sangre de tu divino hijo por tu divina
misericordia y por la intercesión del corazón inmaculado de María santísima, te lo pedimos
señor.
TODOS: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero. (Se repite 10 veces)
TODOS: Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.
Las misericordias de dios son más grandes que todas sus obras.
CANTO: Vendito, vendito, vendito sea dios, los ángeles cantan y alaban a dios, los ángeles
cantan y alaban a dios. Yo creo Jesús mío que estas en el altar, oculto en la ostia te vengo
adorar.
Tercer misterio
En este misterio nos ofrecemos victimas junto con tu divino hijo en desagravio por nuestros
pecados y por los pecados del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de gula y
envidia, y también te pedimos por la conversión de los herejes, sistemáticos, ateos, judíos,
masones, comunistas de los sin dios, de los desamparados, de todos aquellos hermanos
separados de la iglesia reúnenos a todos para que seamos un solo rebaño, bajo un solo pastor,
te pedimos por aquellos que están a punto de suicidarse.
Te pedimos por todos aquellos que te odian, que te aborrecen, que te maldicen, que te
ultrajan, nosotros te amamos por ellos y te pedimos que nos des a todos tu gracia para que por
medio de ella nos arrepintamos de todo lo que te hemos ofendido humildemente imploremos tu
misericordia y así salves nuestras almas, te pedimos por las autoridades civiles, militares, y
religiosas, dales un corazón bueno, sencillo prudente y sabio para que gobiernen al mundo
según tu corazón.
TODOS: Mira que te lo pedimos por tu preciosísima sangre de tu divino hijo por tu divina
misericordia y por la intercesión del corazón inmaculado de María santísima, te lo pedimos
señor.
TODOS: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero. (Se repite 10 veces)
TODOS: Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.
Las misericordias de dios son más grandes que todas sus obras.
CANTO: Juntos como hermanos, miembros de una iglesia, vamos caminando al encuentro del
Señor. Un largo caminar por el desierto bajo el sol, no podemos avanzar sin la ayuda del Señor.
Cuarto misterio
En este misterio, nos ofrecemos victimas junto con tu divino hijo en desagravio por nuestros
pecados y por los pecados del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de pereza,
de vanidad, y de impureza, y te pedimos por todos aquellos que no te conocen, permite que
llegue hasta ellos la luz de tu santo evangelio para que te conozcan, te amen, te adoren, te
den su corazón, y te pidan perdón por lo que te hayan ofendido y así salven sus almas, te
pedimos por los ladrones, asesinos, secuestradores, terroristas, narcotraficantes que no
tienen compasión de sus víctimas, por todos aquellos padres de familia que matan a sus hijos,
por las prostitutas, por los adúlteros, por todos aquellos hermanos que viven alejados de ti, por
todos los que propician el aborto, por todos los que manejan vehículos, marítimos, terrestres,
y aéreos, por los estudiantes, por los viajeros, por los profesionistas, por los trabajadores en
general, especialmente te pedimos por aquellas familias que hoy no tiene que comer, que
vestir que no tiene hogar, que están enfermos que no tienen trabajo, socorrelos señor para que
no desfallezcan de hambre, y de miseria y danos a todos tu gracia para que por medio de ella
nos arrepintamos de lo que te hemos ofendido humildemente imploremos tu misericordia y así
salves nuestras almas.
TODOS: Mira que te lo pedimos por tu preciosísima sangre de tu divino hijo por tu divina
misericordia y por la intercesión del corazón inmaculado de María santísima, te lo pedimos
señor.
TODOS: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero. (Se repite 10 veces)
TODOS: Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.
Las misericordias de dios son más grandes que todas sus obras.
CANTO: Cantemos al amor de los amores. Cantemos al señor, dios está aquí. Venir adorares
adoremos. A Cristo redentor. Gloria a Cristo Jesús, cielo y tierra. Bendecir al señor, honor y
gloria a ti. Rey de la gloria, amor por siempre a ti. Dios del amor.
Quinto misterio
En este misterio nos ofrecemos victimas junto con tu divino hijo en desagravio por nuestros
pecados y por los pecados del mundo entero, principalmente por aquellos pecados de
blasfemia de ultraje, pecados sacrilegios y por todos los pecados que vayamos a cometer en
este día o que se vayan a cometer humildemente te pedimos perdón por todas esas faltas con
que ofendemos a tu divina majestad ten misericordia de nosotros, ten piedad de la humanidad,
te pedimos por toda la juventud, que anda descarriada, principalmente por aquellos hijos
pródigos para que regresen a sus casas, no se pierdan y dejen de sufrir sus padres ayudalos
señor, te pedimos por los matrimonios separados, por los que viven en amasiato, en adulterio,
que viven mal, por las viudas, por los viudos por las madres solteras, las madres abandonadas,
por los padres abandonados, por todos los indigentes, los alcohólicos, drogadictos,
pandilleros, ladrones, y delincuentes, danos a todos tu gracia para que por medio de ella nos
arrepintamos de los que te hemos ofendido, humildemente imploremos tu misericordia y así
salves nuestras almas.
TODOS: Mira que te lo pedimos por tu preciosísima sangre de tu divino hijo por tu divina
misericordia y por la intercesión del corazón inmaculado de María santísima, te lo pedimos
señor.
Padre eterno: yo te ofrezco el cuerpo, la sangre, el alma, y la divinidad de tu amadísimo hijo,
nuestro señor Jesucristo en desagravio por nuestros pecados y por los pecados del mundo
entero.
TODOS: Ten misericordia de nosotros y del mundo entero. (Se repite 10 veces)
TODOS: Como era en un principio ahora y siempre por los siglos de los siglos amen.
Las misericordias de dios son más grandes que todas sus obras.
CANTO: Una espiga dorada por el sol, un racimo que corta el viñador, se convierten ahora en
pan y vino de amor, en el cuerpo y la sangre del señor.
Compartimos la misma comunión, somos trigo del mismo sembrador, un molino, la vida nos
tritura con amor, Dios nos hace Eucaristía en el amor.
Como granos que han hecho el mismo pan, como notas que tejen un cantar, como gotas de
agua que se funden en el mar, los cristianos un cuerpo formaran.
Señor mío Jesucristo, te doy gracias por tu inmenso amor, porque nos habéis permitido entrar
a tu corazón, y morar en él porque habéis fundido nuestro corazón al tuyo y porque solo
vivimos con tu propio corazón, por eso queremos aclamar al dios santo y eterno.
(Se repite 3 veces.) Santo Dios, Santo Fuerte, Santo inmortal ten misericordia de nosotros y
del mundo entero.
Padre Eterno por la pasión de tu hijo por lo que el sufrió, por esos dolores tan inmensos, Yo me
uno a esa cruz, ¡Oh Padre mío, Oh! Padre Celestial, mira las llagas de tu hijo y dignate
recibirlas para que las almas se abran a los toques de tu gracia, que los clavos que
traspasaron sus manos y sus pies traspasen los corazones endurecidos por el pecado, que su
sangre los ablande y los mueva a hacer penitencia, que el peso de la cruz sobre los hombros
de tu divino hijo, mueva las almas al descargar el peso de sus delitos en el tribunal de la
penitencia, por la pasión de tu hijo, te ofrezco oh padre celestial esta corona de espinas de tu
amado hijo, por los sacerdotes que su vocación sea más grande , que sean puros, que sean
santos, que sean buenos hijos tuyos, dignos de consagrar los misterios en la santa misa,
también te ofrezco todo lo que sufrió tu hijo clavado en esa cruz, su ardiente sed, y todos los
demás tormentos de su agonía, por todos los pecadores para que nos arrepintamos de
nuestras culpas por esa perseverancia con que tu hijo te rogo por los mismos que lo estaban
crucificando, y con esa humildad te pedía, perdonalos porque no saben lo que hacen te pido
que nos concedas un gran amor al prójimo y que seamos fieles a tu hijo, si dios mío mira que
todo esto te lo ofrecemos y te lo pedimos por tu divina misericordia que contigo vive y reina en
la unidad con el Espíritu Santo por los siglos de los siglos. Amen.
Jesucristo óyenos.
Jesucristo escuchanos.
Jesús rey de misericordia por quien todas las cosas fueron creadas.
Jesús rey de misericordia que nos has revelado el misterio de la santísima trinidad.
Jesús rey de misericordia que nos revelaste la omnipotencia de dios.
Jesús rey de misericordia que nos concedes misericordia por tus santas llagas.
Jesús rey de misericordia que nos diste a la santísima virgen María como madre de
misericordia.
Jesús rey de misericordia por la cual has sufrido tu encarnación, pasión, y muerte.
Jesús rey de misericordia por medio de la cual ayudas a todos en todas partes y siempre.
Jesús rey de misericordia por la cual nos has prevenido con tus gracias.
Jesús rey de misericordia la que has manifestado revelándonos los misterios divinos.
Jesús rey de misericordia que habiendo instituido los santos sacramentos nos abriste los
torrentes de tu gracia.
Jesús rey de misericordia que nos has dado los santos sacramentos del bautismo y de la
penitencia.
Jesús rey de misericordia que nos has dado la santísima eucaristía y el sacerdocio.
Jesús rey de misericordia que nos has llamado a nuestra santa fe.
Jesús rey de misericordia que las revelas por la santificación de los justos.
Jesús rey de misericordia que eres el único consuelo de los enfermos y afligidos.
Jesús rey de misericordia que eres el único consuelo de los corazones afligidos.
Jesús rey de misericordia que das la esperanza a las almas que se hallan en la desesperación.
Jesús rey de misericordia que acompañas a todos los hombres siempre y en todas partes.
Jesús rey de misericordia que nos colmas con los torrentes de tus gracias.
Jesús rey de misericordia que eres el refugio de las almas del purgatorio.
Jesús rey de misericordia que eres el gozo celestial de los que se salvan.
Las misericordias de Dios son más grandes que todas sus obras.
Oración
Oh dios cuya misericordia es infinita y cuyos tesoros de compasión no tienen limite, miranos
con tu favor y aumenta tu misericordia, dentro de nosotros para que en nuestras ansiedades
no desesperemos, sino que siempre con gran confianza nos conformemos con tu santísima
voluntad, la cual es igual que tu misericordia, por nuestro señor Jesucristo rey de misericordia
quien contigo y el espíritu santo manifiesta misericordia hacia nosotros por siempre. Amen.
Yo hijo tuyo me consagro a tu corazón adolorido e inmaculado, madre mía yo seré fiel con tu
ayuda y protección, a ti te doy mi corazón para que este junto al de tu divino hijo sea yo
librado del fuego eterno, yo rechazo a satanás y a todas sus pompas porque madre mía siendo
yo tu hijo no podre nunca servir al enemigo de Jesús toma mi libertad tú serás mi guia, yo te
entrego mi vida, mi sangre y todo cuanto soy, dame tu gracia madre mía para que muera para
el mundo y solo viva para ti y así ame los corazones de Jesús y de María hasta la muerte mía.
Amen.
Oh sangre y agua que brotaste del sagrado corazón de Jesús como una fuente de misericordia
para la humanidad.
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo en Dios se recrea en tan grandiosa
belleza, a ti celestial princesa virgen sagrada María yo te ofrezco en este día alma vida y
corazón miranos con compasión, no nos dejes madre mía sin tu santa bendición.
Dulce madre no te alejes tu vista de mí no apartes, ven conmigo a todas partes, y solo nunca
me dejes, ya que me proteges tanto como verdadera madre has que me bendiga el Padre, el
Hijo, y el Espíritu Santo. Amen.
Oración final
Bendice, señor, antes de irme. No me bendigas solo a mí, Señor, sino también a todos los aquí
presentes y a todos los que no pudieron asistir, especialmente a los enfermos, moribundos.
Bendice nuestros hogares y a todos nuestros hijos. Bendice toda nuestra vida y a la hora de
nuestra muerte. Concede el descanso a las almas de los fieles difuntos y llevalas a la luz de tu
gloria divina. Así, también nosotros que te hemos adorado y hemos sido bendecidos por ti en la
tierra, podamos llegar a contemplar la radiante gloria de tu rostro sin velos en el cielo por toda
una eternidad. Amen.