Doctrina de Santidad 1
Doctrina de Santidad 1
Doctrina de Santidad 1
POR
JOSELVIA RODRÍGUEZ
ENSAYO
En cumplimiento parcial de los requisitos para aprobar el curso de “DOCTRINA DE
SANTIDAD I”
Marzo, 2016
Quito, Ecuador
La fuente original de la doctrina de la santidad y la única con autoridad, es la Palabra
escrita de Dios. Hay razones por las que las Escrituras son llamadas la Santa Biblia. La Biblia
es un libro de santidad. El obispo Foster nos dio la descripción clásica sobre este particular:
en las promesas, suplica en las oraciones, irradia en la poesía, resuena en los sal-
principio hasta el fin. ¡La santidad! ¡La santidad necesaria! ¡La santidad requerí-
da! ¡La santidad ofrecida! ¡La santidad posible! ¡La santidad, un deber presente,
villoso tema! Es la verdad brillando por doquiera, mezclándose por toda la revela-
ción; la verdad gloriosa que irradia, susurra, canta y grita en toda su historia, bio-
deren, y que haya algunos que se levanten a poner en tela de duda una verdad tan
La santidad es vital para todo cristiano, la iglesia debe ser instruida, en lo que es la
naturaleza de Dios, sin santidad nadie verá al Señor (Hebreos 12:14). La doctrina de Santidad
es central en el quehacer teológico del wesleyanismo, es por ende, que debe influir en todo lo
que es y hace el cristiano, específicamente los que están de acuerdo con la perspectiva
arminio-wesleyana.
Dios ha revelado por medio de su Palabra que es Santo en su esencia y en relación con
la humanidad y el universo que Él creó. Después de la caída del hombre, es decir, la desobe-
1
Traducción literal de otherness, la característica de ser enteramente otro, aparte, diferente de
todos los demás.
diencia de los primeros padres, ‘Dios entró en su plan de rescatar y restaurar su propósito
original para la humanidad, una relación íntima como producto de una vida de santidad.
Esto se vio reflejado en el tipo de pueblo que Él quiso hacer de Israel y luego este propósito
do nuestro lugar, con el fin de proveernos el perdón de nuestros pecados y libertad del domi-
nio del pecado y la plenitud de la vida eterna. Por medio de su sacrificio y posterior resurre-
cción, Cristo ha hecho posible para toda la humanidad un estilo de vida santa para colaborar
iglesia. El Señor Jesucristo, antes de la ascensión les dejo a los discípulos la promesa del Es-
píritu Santo Juan 14:15-31; la cual se cumplió en el día de Pentecostés, produciendo así el
nacimiento de la Iglesia de Cristo. Es por tal razón, que todo hombre que haya sido llamado
por Dios, para servir debe conocer y manejar de forma indispensable el estudio de las bases
iglesia.
jos prácticos y acertados con relación a este importante tema. Es importante que el creyente
conozca, en primer lugar, cada una de las presupociones que se tienen ante esta doctrina, ya
nismo; en segundo lugar, es importante nutrir sobre las bases bíblicas de la santidad, es decir,
todos los fundamentos que describen y demandan este término, tanto en el Antiguo como en
el Nuevo Testamento. La santidad en el Antiguo Testamento, puede ser tratada desde las en-
señanzas que ofrece los libros de Génesis, Éxodo a Deuteronomio, los libros históricos, los
Salmos y los Proverbios, Los Profetas. Por medio de los Evangelios, se puede observar que la
santidad es enseñada a través del carácter de Jesús; en el libro de Hechos, se encuentra gran-
des enseñanzas sobre la santidad con relación a El Bautismo con el Espíritu Santo y la Santifi-
cación; de la misma manera, se puede observar que la epístola a los Romanos, Corintios, Gá-
latas, Efesios, Filipenses, Colosenses y Tesalonicenses, brindan bases cónsonas sobre la San-
En tercer lugar, una de las formas de difundir la Doctrina de Santidad, es por medio de
los fundamentos históricos, es decir, cada uno de los hechos que trascendieron desde los Pa-
dres apostólicos hasta los inicios del protestantismo, como: el significado del estudio histó-
rico, la Entera Santificación en los primeros cinco siglos de la era cristiana, la doctrina de la
entera santificación en el oeste medieval, en los inicios del Protestantismo; de igual forma,
cado de la santidad de Dios, la santidad del hombre, la maldad del hombre, los efectos racia-
nacer del Espíritu, es decir, la santificación inicial; El Bautismo con El Espíritu Santo: La
Es importante que para la difusión sea estudie previamente el contexto del creyente y
sobre la vida cristina y de santidad en el mundo de hoy día, como madurar, tener carácter
misional en su vida santa, ejercitarse en los valores cristianos, testificar de una vida llena de la
ética personal y social cristiana, es decir, todos aquellos consejos prácticos que le permita
Por último, poder dar respuestas a preguntas frecuentes con relación a la doctrina,
relacionadas con la experiencia y la misma doctrina, como por ejemplo sobre los prejuicios
impaciencia, los deseos impropios, pureza de los motivos, porque hay dos obras de gracia, es
Santificación, si Dios tiene una forma doble para la santidad, si alguien puede ser santificado
Es considerable que el creyente pueda ser bien fundamentado en todos los aspectos
antes ya mencionados, con el fin de que pueda relacionar las bases bíblicas, históricas y teo-