Cuentos de Refugiados
Cuentos de Refugiados
Cuentos de Refugiados
de otros lados
Cuentos y dibujos de niñas, niños y jóvenes
sobre personas refugiadas 2017
Amigas y amigos
de otros lados
Cuentos y dibujos de niñas, niños y jóvenes
sobre personas refugiadas
2017
Coedición: Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal D. R. © 2017, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los
(cdhdf), Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refu Refugiados
giados (acnur) y Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación Cervantes Saavedra 193, oficina 1402, col. Granada,
(Conapred). del. Miguel Hidalgo, 11520 Ciudad de México
www.acnur.org
Editor responsable: Francisco Javier Conde González.
Cuidado de la edición: Karen Trejo Flores. D. R. © 2017, Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación
Corrección de estilo: Haidé Méndez Barbosa. Dante 14, col. Anzures,
Diseño editorial: Gladys Yvette López Rojas. del. Miguel Hidalgo, 11590 Ciudad de México
Distribución: Sonia Ruth Pérez Vega, Eduardo Gutiérrez Pimentel www.conapred.org.mx
y José Zamora Alvarado.
Dibujo de portada: Refugiados, de Magdalena Castrejón Ocampo,
dibujo ganador del primer lugar en la categoría de 9 a 12 años.
Los cuentos y dibujos contenidos en esta publicación fueron elaborados y
Agradecemos la participación comprometida y solidaria de las y presentados en el marco de la edición 2017 del concurso de cuento y dibujo
los miembros del jurado del concurso: Sandra Lorenzano, Juan sobre personas refugiadas Amigas y amigos de otros lados, organizado
José Vargas Lemus y Francisco Hinojosa en la categoría de cuen por la cdhdf, el acnur y el Conapred. El contenido de los cuentos y dibujos
to; y Gabriela Castañón, Génesis Ruiz Cota y Elías Orta Fermín en no refleja necesariamente las ideas de las instituciones que participan en
la categoría de dibujo. esta coedición sino que es responsabilidad de sus autoras y autores.
D. R. © 2017, Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal Impreso en México Printed in Mexico
Av. Universidad 1449, col. Pueblo Axotla,
del. Álvaro Obregón, 01030 Ciudad de México
www.cdhdf.org.mx
Índice Un hijo de refugiados
Nubia Preciosa Méndez Guerra, 20
Estrellita marinera
19 32
La esperanza de los refugiados La ciudad errante
Aranza Hernández Salmerón Carlos Alfredo Vela Ruiz, Cuauhcoatl
|3
36 54
Rostro de dolor y esperanza Camino a la libertad. Esperanza,
Fabiana Echavarría Rodríguez fuerza y valentía
Itzel Mariana Vargas Contreras, Lezti VC
37
En México no hay muros
59
Kensi Azucena Méndez Guerra, Flor de mayo Construye, no muros
Isaac Ernesto Vázquez Sandoval
43
El brazo que lleva a la felicidad
60
Lucero Facundo Torres ¿Cómo son recibidos los refugiados
que viven en México?
44
El camino difícil a la esperanza Jennifer Nayeli Navarro Soto
Gerardo Ramírez Chávez, la Canica
63
Alegra tu mundo otra vez
49
Conviviendo con nuestros Oliver Montes García
amigos refugiados
Jesús Márquez Valderrábano
50
Un fantasma…
Pedro Joaquín Dascalakis, Sid Stardust
53
Refugiados
Fernanda Carolina Bravo Anaya
4|
Presentación del Distrito Federal; así como con la escritora San
dra Lorenzano, amigas de otros escenarios. Quiero
agradecer a Dolores Beistegui, directora general del
Papalote Museo del Niño, por hospedarnos el día de
hoy; y no hay que olvidar la presencia de las chicas
y los chicos que han tomado su tiempo para parti
cipar en el concurso y que serán premiados el día
de hoy. Me parece apropiado que estemos aquí en
Mark Manly este museo que celebra la creatividad e imaginación
Representante del Alto Comisionado de las Naciones de las niñas y los niños.
Unidas para los Refugiados en México En este noveno concurso de cuento y dibujo
han participado más de 350 niñas y niños de 25 en
Buenos días a todas y a todos. Es un placer estar aquí tidades federativas, entre ellos algunas personas
para celebrar y reconocer el esfuerzo de las chicas y solicitantes de la condición de refugiado que se en
los chicos que han participado en este noveno con contraban en la estación migratoria de Acayucan,
curso de cuento y dibujo ahora denominado Amigas Veracruz. Cabe destacar que, aun cuando este año
y amigos de otros lados. Es un privilegio estar aquí no haya ganado ningún solicitante de asilo o refu
con Alexandra Haas, presidenta del Consejo Nacio gio, el año pasado sí ganó un niño refugiado radica
nal para Prevenir la Discriminación; Rosío Arroyo, do aquí en México.
directora ejecutiva de Educación por los Derechos Para nosotros en el Alto Comisionado de las Na
Humanos de la Comisión de Derechos Humanos ciones Unidas para los Refugiados es muy impor
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tante promover este tipo de ejercicios de reflexión y violencia vivida en los países de Centroamérica, par
solidaridad, porque el tema de las y los refugiados ticularmente Honduras y El Salvador; pero también a
no es un tema fácil; es una causa que siempre re raíz del contexto actual en Venezuela. De hecho, en
quiere de más amigas y amigos. Es una causa que los últimos seis años el número de personas que han
implica darle la bienvenida a este país a personas de venido a México buscando protección como refugia
otros lados y en momentos como el contexto actual, dos se ha incrementado en más de mil por ciento.
luego de los trágicos sismos de septiembre, se vuel México está llamado a responder nuevamente de
ve de particular importancia. Después de este tipo manera solidaria a estas personas. Digo nuevamen
de tragedias es muy común que la sociedad mire ha te porque México tiene una larga tradición de asilo,
cia adentro y es fácil olvidar que hay otras personas de brindar protección a las personas que huyen de la
de otros países que pueden tener necesidad de res persecución y de violaciones a derechos humanos.
puesta solidaria. Por lo tanto, el evento del día de hoy Todos conocemos la experiencia de los españoles en
viene en un muy buen momento. los años treinta y cuarenta, de los judíos europeos
Actualmente, a nivel mundial hay más de 65 mi en la misma época y posteriormente, en los años se
llones de personas que han sido obligadas a salir de tenta, de personas del Cono Sur: Argentina, Chile y
sus hogares debido a la violencia, a la violación a sus Uruguay. Más recientemente, México albergó a más
derechos humanos o a los conflictos armados. Mu de 46 000 guatemaltecos que huyeron del conflicto
chas se encuentran todavía dentro de sus propios paí armado en los años ochenta. Después pensamos
ses, pero más de 22 millones han sido obligadas a huir que las cosas iban mejor en nuestro continente, pero
y buscar protección como refugiadas. Aquí en México lamentablemente no es así. Ahora México está reci
lo estamos viendo con mayor frecuencia a raíz de la biendo de nuevo un número importante de refugia
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dos. De las personas que llegaron en el pasado para estas personas que han perdido todo para que pue
solicitar la condición de refugiado en México casi la dan restablecer sus vidas en este país. Eso nos lleva
tercera parte son niñas y niños. La mayoría llegó con a la importancia de este concurso, ya que busca fo
sus familias, pero hay un número creciente de niños mentar el entendimiento de dicho fenómeno y por
y niñas que han llegado sin familiares: más de 200 ende la solidaridad de la sociedad mexicana. Por eso
en 2016. Son personas no acompañadas; esas perso felicitamos mucho a las ganadoras y los ganadores
nas también requieren una respuesta solidaria. del concurso.
En el marco del concurso es interesante entender Antes de terminar quiero agradecer a Sandra Lo
además cuáles son los factores que han obligado a renzano, Francisco Hinojosa y Juan José Vargas; así
estas personas a salir de sus países. Y nuevamente como a Elías Orta, Génesis Ruiz y Gabriela Castañón,
hay un elemento muy importante para las y los ni miembros del jurado de cuento y dibujo, respecti
ños y jóvenes, porque en gran medida los niños que vamente, por haber apoyado este esfuerzo. Muchas
vemos ahora en México están huyendo del reclu gracias a todos los niños y las niñas por haber parti
tamiento forzado a manos de grupos delincuencia cipado. Felicidades a las y los ganadores y esperamos
les en sus propios países. Es decir, situaciones donde que su ejemplo sea seguido por otros niños, niñas y
pandillas muy bien organizadas y muy fuertes llegan jóvenes en otros concursos.
a reclutar a un niño o una niña por la fuerza y la úni Muchas gracias.
ca solución para esta familia es la salida de su propio
país debido a que ahí no encuentran protección.
Por todo lo anterior es muy importante la res
puesta solidaria de la sociedad mexicana y apoyar a
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creativo llevado a cabo por niñas, niños y jóvenes
entusiastas quienes participaron en el concurso
realizado durante 2017 en el que se recibieron 351
trabajos provenientes de 25 entidades federativas.
Quienes formamos parte de las instancias que
organizan este concurso sabemos que la experiencia
de las personas refugiadas es compleja y dolorosa.
Muchos de sus derechos humanos se ven vulnera
Nashieli Ramírez Hernández dos al salir huyendo de sus países para poner a salvo
Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos sus vidas.
del Distrito Federal Históricamente nuestro país ha sido un lugar de
acogida solidaria para las personas en esa situación;
Para la Comisión de Derechos Humanos del Distrito y como las niñas, los niños y las y los jóvenes lo han
Federal resulta un honor escribir estas líneas en el expresado en sus maravillosos cuentos y dibujos, son
marco del concurso de cuento y dibujo Amigas y ami muchas las acciones cotidianas que podemos poner
gos de otros lados, iniciativa impulsada junto con el en macha para apoyar a las personas refugiadas.
Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación y la Felicidades a las niñas y los niños participantes
Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas que tomaron sus plumas, lápices, crayolas y acuare
para los Refugiados en México. las para imaginar un mundo distinto.
El libro que las y los lectores tienen en sus ma
nos representa la culminación de un largo proceso
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inciden en el fortalecimiento de la cultura de los de
rechos humanos, no es sencilla: implica desandar el
camino de los prejuicios y estigmas que por muchos
años ha hecho aparecer a ciertas personas como
merecedoras de un trato diferenciado y portadoras
de derechos que no son los que corresponden al res
to de la población. Por eso es que el trabajo que se
realice en este rubro con las personas más jóvenes,
Alexandra Haas Paciuc con niñas y niños, resulta fundamental para la lu
Presidenta del Consejo Nacional para Prevenir cha contra la discriminación; sobre todo porque en
la Discriminación este caso son ellas y ellos quienes experimentan de
manera acentuada la vulneración que es resultado
La migración, observada por nuestros niños y niñas. del desplazamiento.
A manera de presentación del libro Amigas y amigos Las niñas y los niños refugiados, así como aque
de otros lados llos que se enfrentan con el fenómeno de la migra
ción en sus comunidades, deberían ser el foco de
De entre las tareas fundamentales para combatir la nuestros esfuerzos culturales y educativos para
discriminación, particularmente la que afecta a las combatir los prejuicios y estigmas que aún al día
personas refugiadas y a las migrantes, destaca la de hoy enfrentan a muchas personas y colectivos
que se refiere a la educación, la sensibilización y el con la discriminación. El concurso de cuento y di
cambio cultural. Dicha tarea, como todas las que bujo Amigas y amigos de otros lados, convocado por
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el Consejo Nacional para Prevenir la Discriminación niños y las y los adolescentes cuyas obras pueden
(Conapred) junto con la Oficina del Alto Comisio apreciarse en este libro una misma idea: que las
nado de las Naciones Unidas para los Refugiados personas refugiadas son parte esencial de Méxi
y la Comisión de Derechos Humanos del Distrito co y que su incorporación a la sociedad es un paso
Federal y que da origen al presente libro, se inscri fundamental para el desarrollo nacional. Tenemos
be en esa línea. Este esfuerzo colectivo tiene como la convicción de que incluir nos beneficia a todas y
propósito fundamental sensibilizar a niñas, niños todos.
y adolescentes, así como a la población en general, Las personas que han migrado al país se han
sobre la discriminación que las personas refugiadas enfrentado por generaciones a graves prejuicios
viven en México. En general, los trabajos fueron una y estigmas generalizados. La Encuesta Nacional
manera de responder algunas de las preguntas más sobre Discriminación en México 2010, por ejem
urgentes en esta materia: ¿Cómo se recibe a las per plo, arrojó que para dos tercios de la población del
sonas refugiadas que viven en México? ¿Cuáles son país (66.7%) “la gente que llega de afuera provoca
las aportaciones de ellas a la comunidad a la que divisiones”;1 mientras tanto, en 2015 la Universidad
llegan? ¿Cómo promovemos su integración a la so Nacional Autónoma de México mostró que para dos
ciedad en un marco de respeto y no discriminación? de cada cinco personas (42.7%) “los extranjeros debi
¿Cuál es la mejor manera para hacerlas partícipes
del desarrollo, al tiempo que respetamos su autono
mía, cultura e historia particulares? 1
Véase Conapred, Encuesta Nacional sobre Discriminación en
México. Enadis 2010. Resultados sobre personas migrantes, México,
Quienes trabajamos desde el Conapred por la Conapred, 2011, disponible en <https://goo.gl/UmajXn>, pági
no discriminación compartimos con las niñas, los na consultada el 14 de diciembre de 2017.
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litan nuestras costumbres y tradiciones”, y para más Asegurarnos de que este tipo de dinámicas de
de un tercio (35.7%) “generan inseguridad”.2 Los cuen jen de replicarse requiere tanto de un esfuerzo para
tos y dibujos que aquí se incluyen retratan de manera transformar las políticas vigentes como de un ar
adecuada dicho panorama. Estos trabajos muestran duo trabajo de cambio cultural. Necesitamos con
cómo las ideas erradas sobre las personas migrantes vencer y convencernos de que la discriminación
alimentan la discriminación que se enfrenta al inte sólo genera divisiones y desigualdades que alimen
rior de nuestras fronteras. En consecuencia, las y los tan antipatías y destruyen el tejido social. Por eso
refugiados encuentran barreras constantes para ejer es que tanto el concurso como el libro al que dio
cer casi cualquier derecho. Como parte de una vida origen muestran que niñas, niños y adolescentes
marcada por la exclusión y la violencia, estas perso son grandes aliados en la lucha contra la discrimi
nas han experimentado una amplia falta de oportu nación. Frente a los retos que tenemos para el futu
nidades para sobrevivir en sus países de origen, pero ro, sus puntos de vista ayudarán a definir el rumbo
también grandes retos en el camino que les llevó a que tomará nuestro país.
México, así como una considerable oposición a que Por todo lo anterior debemos reconocer la des
desarrollen su potencial en esta nación. treza con la que las y los autores han plasmado la
diversidad que es consecuencia espontánea y afor
tunada de la migración. Sus creaciones muestran
2
Datos de la Encuesta Nacional de Migración. Véase Maritza Cai con gran sensibilidad que la inclusión en las escue
cedo y Agustín Morales, Imaginarios de la migración internacional las, los hogares y los espacios públicos es un deber
en México. Una mirada a los que se van y a los que llegan, México,
iij-unam (Los mexicanos vistos por sí mismos: Los grandes te
indispensable que no podemos relegar por más
mas nacionales), 2015, p. 129. tiempo. Nosotros y nosotras, quienes como perso
| 11
nas adultas tomamos decisiones sobre la inclusión construir el México incluyente que todas y todos
de las personas refugiadas, tenemos que encontrar queremos.
las formas institucionales y democráticas para ga
rantizar y respetar los derechos de ellas; en el en
tendido de que hacerlo es una obligación legal y un
imperativo ético, pero también con la certeza de
que la migración enriquece nuestra cultura, nuestra
identidad y nuestra productividad.
En el Conapred celebramos que este tipo de
concursos nos brinde herramientas para fomentar
la reflexión sobre los retos ineludibles a los que nos
enfrentan los fenómenos de la migración y el re
fugio; y nos alegra que tantos niños y niñas hayan
decidido de modo entusiasta formar parte de esta
conversación. Esperamos que la próxima edición
involucre aún a más personas de más entidades
federativas de la república. Reconocemos el es
fuerzo de cada participante, así como el esmero de
quienes son autoras y autores de la presente obra,
la cual nos permite mirar este fenómeno desde nue
vas perspectivas; su punto de vista es esencial para
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Cuentos y dibujos ganadores
edición 2017
14 |
Regalos culturales • Ángela Granados Chávez • Dibujo ganador del segundo lugar en la categoría de 9 a 12 años.
Manú y Mía* dos años; ahora esto era diferente, ya que tendrían
que ir solos a un lugar desconocido para ellos. Te
Jorge Vladimir García Novela nían planeado llegar a la Ciudad de México alguno
de estos días o al menos el próximo mes.
Al llegar al lugar en donde iban a subir al tren se
despidieron de sus padres y esperaron a que el tren
parara para cargar combustible. Ellos subieron y se
metieron cuidadosamente entre dos vagones que lle
vaban carbón. Su hermana platicó un poco con su
padre antes de que el tren partiera, pero Manú no se
M
anú nació en Honduras, pero ahora no está enteró de nada de eso cuando muchos otros como
allí. Él está tomando un tren en Guatemala ellos empezaron a subir al tren. Se despidieron lenta
con su hermana Mía, pero éste no es cual mente de sus padres; sabían que el viaje no iba a ser
quier tren sino uno que lleva pasajeros aunque no fácil, pero al menos querían intentarlo.
tenga vagones de pasajeros. Sus padres los enviaron Inmediatamente después de que el tren había
a México con sus tíos, pero no les dijeron la razón de salido Mía tropezó, pero su hermano la logró aga
esto. Ellos no estaban preocupados porque ya lo ha rrar de la mochila que tenía en la espalda, y es que
bían hecho una vez, o al menos eso intentaron hace en ese momento mandó un beso a su padre. Ella
vio que estuvo a centímetros de tocar con su pie las
ruedas del tren. Su hermano la tranquilizó dicién
*
Cuento ganador del primer lugar en la categoría de 9 a 12 años. dole que todo iba a estar bien, que no había de qué
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preocuparse, ya que se apoyarían mutuamente. Mía menos cómodos; sin embargo, era el más seguro, ya
decidió ir a buscar un lugar un poco más seguro y que tenía una puerta. Este vagón era de puras provi
empezó a caminar por encima de los vagones del siones para un supermercado, lo malo es que aden
tren mientras todavía iba a baja velocidad en una tro hacía mucho frío, ya que estaba diseñado para
zona con muchos árboles. Ella no se sentía nervio mantenerse así; sin embargo, no estaba tan mal, am
sa, ya que toda su vida había caminado sobre los bos se cubrieron con la poca ropa que habían traído.
tejados de las casas del pueblo en donde vivían. En poco tiempo se quedaron dormidos hasta que
Cuando Mía regresó con Manú decidió contarle lo mucho tiempo después despertaron y vieron que ya
que le dijo su padre: no estaban más en sus tierras sino que se hallaban
—Papá me dijo que ambos nos debemos apoyar al otro lado de las dos fronteras que tenían que cru
y que a mí me tocaba buscar el lugar más seguro zar. Se sorprendieron mucho y decidieron salir del
para el trayecto, así que ya lo encontré: está dos va vagón para ver cómo era su nuevo hogar, México,
gones más adelante. Toma tus cosas, yo te agarro, hasta que se dieron cuenta de que aún no habían
nos moveremos cuidadosamente. Es como cuando llegado, ya que solamente habían dormido por dos
jugamos sobre los techos de las casas, solamente horas.
que esta vez estamos a cinco metros de altura sobre Los días pasaron y llegaron a un lugar que no
un tren que va a 15 km/h. No hay casi diferencia, conocían. Ahí vieron a sus tíos; no los habían visto
¿o sí? en muchísimo tiempo, pero al menos estaban se
Cuando Manú vio lo que había encontrado Mía guros.
se sorprendió mucho, ya que era el único vagón en Pasó una semana y Manú y su hermana entra
el que se podía entrar, lo malo es que era uno de los ron a sus respectivas escuelas. Al inicio se sintieron
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muy preocupados, ya que prácticamente se sentían ños fueron castigados; sin embargo, esto no cambió
fuera de lugar. nada. Un día aprovecharon que Manú estaba solo
Uno de los primeros días que estuvieron en en la salida esperando a que su hermana pasara
México conocieron a sus nuevos amigos: Emilio y por él y planearon empujarlo, golpearlo y patearlo.
Roberto. Manú iba con ellos a la escuela y ellos le Esos niños estaban muy enojados; cuando él estaba
ayudaron a adaptarse a su nueva vida. Sin embargo, a punto de ser golpeado les preguntó:
no todo era color de rosa, pues había una pandilla —¿Por qué me hacen esto? ¿Es sólo porque soy
de niños afuera de la escuela; eran cinco y se hacían de otro país y nada más, o es porque yo les hice algo
llamar La verdadera ley. Ellos muchas veces moles alguna vez? Pregúntenselo. Si me dejan en paz, yo
taban a Manú, ya que al saber que era migrante y podré seguir sin que ustedes me molesten y uste
que estaba ahí viviendo con sus tíos lo empezaron a des no tendrán que preocuparse más por mí. Soy un
molestar; sin embargo, sus nuevos amigos siempre niño de otro país que solamente quiere tener una
lo apoyaban. vida normal como todos ustedes.
Las molestias contra Manú crecieron cada día Marcos, el líder de la pandilla y quien estaba a
más; sus amigos no sabían qué hacer hasta que un punto de pegarle, se detuvo, pero no por lo que dijo
día se encontraron con sus tíos y lograron decirles Manú sino porque Emilio y Roberto llegaron. Rober
todo lo que pasaba, ya que Manú tenía miedo de que to era bastante fuerte y corpulento. Dos miembros
esto fuera más perjudicial para él. Cuando sus tíos de la pandilla retrocedieron asustados; sin embargo,
se enteraron sobre lo que había pasado decidieron el resto no se detuvo y se fue encima de Manú y lo
tomar acciones para evitarlo y fueron a hablar con golpearon hasta que vieron que Emilio corrió a aler
el director de la escuela. Días más tarde, esos ni tar a la Dirección de la escuela. Marcos se quedó solo
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y como estaba superado en número decidió retirar o niña de tu escuela. Ellos tomaron muy malas de
se. Manú se hallaba en el piso con varios moretones; cisiones; siempre tienes que buscar la mejor deci
rápidamente sus amigos lo ayudaron a pararse y sión que puedas —le dijo su tía.
después decidieron acompañarlo a su casa. Cuando Manú regresó a la escuela se encontró
Sus tíos pensaron que lo mejor era que él y su con que de pronto todos lo saludaban, lo abrazaban
hermana no regresaran a la escuela porque podían e incluso hubo dos niñas que le pidieron su autó
ser víctimas de una venganza por parte de los chicos grafo. Honestamente estaba muy sorprendido. No
de la pandilla. Unos días después de que dejaron de sabía qué estaba pasando hasta que les preguntó a
ir a la escuela, la Dirección mandó una carta pidien Emilio y a Roberto qué sucedió esos días en que no
do que volvieran. Al principio los tíos rechazaron la fue a clases.
propuesta, pero Manú se dio cuenta de que en el —Esa pandilla había amenazado a toda la es
reverso había un párrafo que no habían leído: “He cuela, y ahora que no están todo es más tranquilo
mos juntado testimonios de los niños de la escuela. —le dijo Roberto.
Todos dicen que alguna vez fueron agredidos por Más tarde, Manú se encontró con los de la pandi
esta pandilla. Logramos identificar a los integrantes lla en la calle, sólo que no estaba Marcos. Los demás
y desde ahora quedan oficialmente expulsados de le pidieron perdón, ya que se dieron cuenta de que
la escuela”. Manú no estaba muy contento con esto, seguir a Marcos sólo les había traído malos días.
ya que se sentía culpable; sin embargo, sus tíos y su
hermana lo hicieron sentir mejor:
—No te preocupes, esos niños no tenían dere
cho a lastimarte a ti, a tu hermana ni a ningún niño
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La esperanza de los refugiados • Aranza Hernández Salmerón
Dibujo ganador del tercer lugar en la categoría de 9 a 12 años
Un hijo de refugiados* amigos. Su nombre era José Andrés. Vivía con sus
padres en una pequeña casa en una de las colonias
Nubia Preciosa Méndez Guerra, Estrellita marinera de las afueras de la ciudad de Saltillo, Coahuila.
Su mamá era una mujer sencilla, joven y bo
nita que no tenía padres ni hermanos; su nombre
era Isabel. Ella había llegado a esta ciudad cuando
apenas tenía 16 años. Venía huyendo del pequeño
pueblo de Choluteca, en Honduras. Unos caciques
habían asesinado a sus padres para arrebatarles
sus tierras; eso era lo que decían, pero otras versio
L
es contaré la historia del origen de un niño nes contaban que la verdadera causa fue por dife
morenito, delgado y de mirada tranquila. Sus rencias religiosas.
ojos eran grandes, de color verde; de cara re Isabel estaba segura de que al quedarse a vi
dondita y manos grandes; su cabello era lacio, cas vir ahí su vida seguiría en peligro; así que un buen
taño claro, quemado por el sol. Tenía como ocho o día, con mucho más valor que ahorros, salió de la
siete años de edad cuando lo conocí, cursábamos casa de sus familiares donde estaba resguardada.
juntos la escuela primaria y era uno de mis mejores Su intención era llegar a Estados Unidos. Cruzó la
frontera con Guatemala y caminó muchas horas en
compañía de otros hondureños, guatemaltecos, sal
* Cuento ganador del segundo lugar en la categoría de 9 a 12
vadoreños y nicaragüenses hasta llegar a Tapachu
años. la, Chiapas. Ahí conoció a José, quien más adelante
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sería su esposo. Eran como unos treinta centroame Durante el forcejeo con José Isabel intentó ayudar
ricanos que esperaban al tren que mal llamaban la lo, pero desafortunadamente perdió el equilibrio y
Bestia. cayó. Una de las ruedas del tren le arrancó de tajo el
Era la mañana de un martes 14 de enero cuan pie izquierdo.
do lograron trepar a la parte superior de los vago José saltó para ayudarla e inmediatamente pidió
nes del tren. Isabel era muy valiente, pero no era apoyo. La ambulancia de la Cruz Roja llegó y rápida
muy experta subiendo a trenes de carga en cons mente la trasladaron al hospital de la ciudad. Isabel
tante movimiento. Por fortuna José la ayudó y de lloraba desconsolada por lo que le había ocurrido,
pronto ya estaban rumbo al noreste de México. pero más le preocupaba que no tenía documentos pa
Mientras la Bestia seguía avanzando, iban su ra estar en México.
biendo más buscadores de sueños y esperanzas: al La doctora que la atendió escuchó con aten
gunos niños, mujeres, adolescentes y jóvenes. Eran ción y humanidad su situación y le prometió que
como tres centenares de almas persiguiendo al año la ayudaría. En la primera oportunidad pidió apoyo
rado futuro mejor. Algunos rostros sólo reflejaban a través de las redes sociales para la niña hondure
miedo y angustia; el de Isabel era uno de ellos, pero ña que había caído del tren. Los medios de comuni
José adivinó lo que estaba sintiendo y tomándole las cación también hicieron su parte y pronto muchas
manos le dijo: “no temas, yo te cuidaré”. personas acudieron al hospital a llevarle ropa, víve
Cuando iban pasando por Saltillo intentaron su res, medicinas y dinero; hasta una bonita muñeca le
bir más migrantes, pero esta vez la intención no era regalaron a la niña del pie y el corazón rotos.
acompañarlos en el viaje. Comenzaron a atacarlos, La doctora le había tomado mucho cariño a Isa
tratando de quitarles el poco dinero que llevaban. bel y le dijo que los apoyaría a ella y a José para ha
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cer todos los trámites en México y que con los datos cubría los gastos de sus necesidades básicas y hasta
que sabía de su historia les dieran los beneficios de le sobraba para guardar algunos ahorros. José, por
refugiados. su parte, consiguió emplearse como dependiente en
El Alto Comisionado de las Naciones Unidas una farmacia. Llevaban una vida tranquila y en paz.
para los Refugiados le donó una prótesis a Isabel, y Pasó el tiempo y un día José le dijo a Isabel que
una vez que la dieron de alta, ella y José se instala no esperaría más, que se iría a Estados Unidos por
ron en la Casa del Refugiado. Como los dos habían que en Saltillo no se encontraba contento. Le pro
interrumpido sus estudios, los apoyaron para que puso que antes de irse se casaran y en cuanto se
se inscribieran en una preparatoria; sin embargo, a estabilizara mandaría por ella. Isabel lloró mucho y
pesar de que estaban recibiendo el apoyo que brinda le pidió que no la dejara, pero todo fue inútil; él no
México a los refugiados, José no estaba muy satisfe la escuchó y simplemente se fue. Transcurrieron al
cho, pues su plan era continuar el viaje hacia Esta gunos meses sin que tuviera ninguna noticia de él.
dos Unidos. Isabel le comentaba que era preferible Ella continuaba haciendo sus artesanías, bordando
quedarse como refugiados que seguir arriesgando la manteles y también sus sueños. Seguía yendo a la
vida al intentar cruzar una frontera más. Con su li escuela y vendiendo sus productos.
mitación física por el accidente que había sufrido le Cierta tarde, cuando regresaba de sus clases,
resultaba complicado acompañarlo en el viaje. Isabel encontró a José en la casa. Se abrazaron
Por fortuna, Isabel era muy buena para bordar emocionados y él le contó llorando que no había
y tejer. Pronto comenzó a hacer manteles y otras podido cruzar la frontera, que lo había intentado
artesanías bordadas que se vendían a través de la muchas veces, pero que a pesar de que no deseaba
Casa del Refugiado. Con lo que ganaba de las ventas darse por vencido decidió regresar al hogar que le
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había brindado la Casa del Refugiado en México. Le
dijo que se pondrían a trabajar mucho para cons
truir su propia casita y hacer vida en este país que
con calidez y solidaridad les había dado protección
y apoyo. Dos años más tarde nació José Andrés, el
niño morenito de mirada tranquila. Así fue como
inició la historia de un hijo de dos refugiados cen
troamericanos que encontraron un buen hogar en
tierras mexicanas.
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24 | Respeto entre todos • Diana Itzel Bautista Gil • Mención honorífica en la categoría de 9 a 12 años.
Si la vida fuera más fácil* —¿Qué te pasa? —me preguntaron mis papás.
—Se los digo cuando comamos —contesté. Pri
Iker Ocampo Servín, Reki mero quería sentarme. Ya en la mesa les dije lo que
había ocurrido en la escuela.
”Hoy en el salón la maestra nos habló sobre los
refugiados, pero al parecer pocos compañeros saben
de ellos, incluyéndome. La maestra nos preguntó
si alguno de nosotros sabía sobre las personas que
piden refugio en otro país distinto del suyo. Nadie
contestó. Uno de mis compañeros levantó la mano
C
uando llegué a mi casa, mis papás me hicie y dijo muy serio:
ron las dos preguntas de siempre: ”—Yo soy un refugiado —todo el salón se quedó
boquiabierto. Nadie lo sabía, ni yo que lo conocía
—¿Qué tal la escuela? ¿Pasó algo interesante? desde primer grado. Joseth es como yo. Su piel es
—a lo que yo contesté como siempre, casi en auto un poco oscura, pero no tanto; es flaco y de cabello
mático: negro y habla un poco raro, como cortando las pala
—Me fue bien —pero la verdad es que había su bras rapidito, pero nada del otro mundo.
cedido algo que me impactó y no lo pude ocultar. ”Él me dijo un día que era de Honduras, pero
no sabía cómo había llegado a la Ciudad de México.
Nunca me lo pregunté y él no nos dijo nada, hasta
* Cuento ganador del tercer lugar en la categoría de 9 a 12 años. hoy.
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”La maestra le preguntó si podía contarnos pués murió. Por eso él y su familia habían decidido
cómo había sido su viaje. Dijo que sí. abandonar el país, pues no querían que eso les pasa
”Nos contó que en Honduras sus papás trabaja ra también al resto de los hermanos.
ban muy duro. Vivían en una casa no muy grande. ”Nos dijo que su familia decidió emprender el
Toda la familia vivía en el mismo lugar, incluyendo viaje. Dejaron todo atrás, pero iban juntos. Hicieron
a sus abuelos. Tenía dos hermanos mayores y una todo el recorrido a pie y pidiendo aventones; también
hermana menor. tuvieron que cruzar las fronteras de forma ilegal y
”Sus papás eran agricultores, sembraban la tie en varios lugares los habían discriminado por ser de
rra y llevaban su cosecha al pequeño restaurante otro país y por no tener dinero. No los dejaban que
de sus abuelos. Todos se repartían las ganancias. darse a dormir en cualquier lugar ni usar los baños.
El lugar era muy bueno, por lo que ganaban dinero Les hablaban mal o los ignoraban.
suficiente para poder mantenerse todos. ”En algunos poblados ni siquiera los dejaron que
”Nos contó que un día a su hermano mayor, Ja darse y tuvieron que seguir caminando o dormir en la
reth, de 17 años, los pandilleros le pidieron que se calle. No tenían casa y siempre estaban hambrientos
les uniera, pero él se negó porque no quería ser cri y con sed. No se podían bañar todos los días ni cam
minal. Entonces, con lágrimas en los ojos, Joseth nos biarse de ropa. Así pasaron varias semanas.
dijo que los pandilleros empezaron a perseguir a su ”Entraron a México; su objetivo era llegar a Esta
hermano todos los días. dos Unidos, pero como ya estaban tan cansados y el
”Un día, para huir de ellos, su hermano se echó a camino era tan difícil se quedaron en la capital.
correr hacia una avenida y ¡zaz!, un camión lo atro ”Dijo que su familia fue a pedir alojamiento al
pelló. Lo llevaron al hospital pero poco tiempo des gobierno y que después de un largo proceso se los
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dieron. Sus abuelos y sus papás pusieron otro ne preguntaron cómo se llamaba el restaurante de mi
gocio de comida aún mejor que el anterior, por lo amigo.
tanto tuvieron dinero suficiente para dejar de vivir —¿Para qué? —pregunté.
en el albergue y rentar una casa para empezar una —Para poder comer ahí —dijeron a coro.
vida normal otra vez. —Se llama Si la vida fuera más fácil —contesté.
”Nos dijo que llevaba ya cuatro años fuera de
su país y que aún extrañaba a su hermano y a su
tierra, pero que al menos aquí podían estar juntos
y sin temor.
”En cuanto terminó su relato todos queríamos
hacer algo para ayudar. Pensamos en hacer una
campaña para ayudar a la gente en esta situación.
Al final acordamos que buscaríamos enviarles car
tas a niños y niñas de otros países. Queríamos saber
todo de ellos: cómo vivían, qué juguetes les gusta
ban, cómo era su escuela y qué soñaban. Nosotros
les contaríamos también. A lo mejor un día podría
mos conocernos y entender todo mejor. La maestra
dijo que nos ayudaría”.
Cuando terminé de contar lo que pasó mis
papás también se quedaron boquiabiertos y me
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28 | Una niña nueva • Dulce Violeta Pacheco Méndez • Mención honorífica en la categoría de 9 a 12 años.
Niños migrantes* Un día se me acercó una persona, yo no estaba
seguro en ese entonces de quién era. Me dijo que
Darío Damián Torres Vázquez si podía vender un polvito blanco a escondidas a
mis amigos. Yo le dije que por qué, que yo no que
ría. Yo sabía que ese polvo era droga, yo tenía una
educación buena y no tenía una razón para vender
algo así. Él se enojó, se encogió de hombros y se
fue. Yo pensé que ahí se acababa todo, pero me
equivocaba.
¡
Cuando llegué a mi casa vi la puerta abierta y
Hola! Me llamo Bennett y soy de Honduras. Les me asusté. Al entrar escuché a mi mamá y a mi
quiero contar mi historia de cómo llegué a Mé- hermana llorando y vi que estaban encerradas en el
xico. cuarto de mi mamá. Les pregunté:
Yo tenía 12 años; en ese entonces vivía con mi —¡¿Qué pasó?!
madre, mi padre y mi hermana. Nuestra comuni Muy tristemente mi mamá me contestó:
dad era tranquila, todos nos ayudábamos. Yo iba en —¡El amigo de tu papá vino y se lo llevó; sólo
sexto de primaria y mi hermana en segundo. quería que vendiera droga!
En ese momento me percaté de que era la mis
ma persona que me había ofrecido vender el polvo
blanco. Entonces mi madre nos dijo a mi hermana y
* Cuento con mención honorífica en la categoría de 9 a 12 años. a mí que tendríamos que irnos del país porque nos
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podría pasar lo mismo. Mi hermana y yo sentimos Después de varios meses lograron traer a nuestra
mucho dolor, pero al final teníamos que hacerlo. madre, pero tristemente ella nunca pudo encontrar a
Cuando estábamos en el tren la despedida fue nuestro padre. En México nos dieron un lugar donde
muy dura, pues tuvimos que dejar a nuestra madre vivir y comenzamos a ir a la escuela. Nuestra madre
y nuestro hogar para estar seguros. Viajamos mu obtuvo un buen trabajo y ahora vivimos muy bien en
chos días y de muchas formas, el trayecto fue muy nuestro nuevo hogar. Todos estamos contentos: los
largo y difícil. No conocíamos a nadie y muchas ve del centro, nuestra madre, mi hermana y yo. Al final
ces tuvimos que trabajar y pedir dinero para comer. gracias al centro de ayuda a los migrantes tuvimos la
Al llegar a la Ciudad de México nos encontramos oportunidad de rehacer nuestras vidas.
con un señor a quien le contamos nuestra historia. Fin.
Entonces nos dijo que nos podía ayudar, dijo que fué
ramos a un centro de ayuda para los migrantes, que
él nos iba a acompañar. Al llegar ahí nos despedimos
de esa persona que nos había ayudado mucho.
Entramos al centro y le explicamos a la perso
na que nos atendió que tuvimos que irnos de nues
tro país. Al principio nos dijo que nos quedáramos
ahí e iría a ver lo que podía hacer con nosotros.
También le pedimos que si podía llamarle a nues
tra madre y dijo que sí, que haría lo posible por
contactarla.
30 |
Esperanza y sueños • Sofía Victoria Rodríguez Pérez • Mención honorífica en la categoría de 9 a 12 años. | 31
La ciudad errante* son diferentes: unos grandes y otros pequeños, de
todos colores; cada errante es único, es diferente.
Carlos Alfredo Vela Ruiz, Cuauhcoatl Los habitantes de la ciudad se han acostumbra
do al transitar de los errantes; se les sirve comida,
se les da techo y trabajo para que tengan dinero
para irse y seguir su camino, para comer o buscar
casa, lo que necesiten.
Un día llegó un grupo enorme de viajeros: altos,
flacos, muy serios, de color muy oscuro y hablando
varios idiomas. Dejaron su país, un país pobre, sin
E
sta ciudad es donde vive la gente errante, un trabajo ni dinero, casi devastado. Antes de llegar a
lugar demasiado raro donde los burros se con Ciudad Errante habían viajado a la Ciudad del Futbol
vierten en cebras y pasean por las calles. Tie para ayudar a montar una gran olimpiada. Termina
ne una esfera gigante y un arco de metal en medio da la famosa olimpiada se acabó también su estan
la ciudad, además de un cerro de colores. cia y empezaron su camino al norte, buscando mejor
Los errantes vienen de todas partes del planeta, vida. Es gente trabajadora, nunca dicen que no a un
unos buscando aventuras o trabajo y otros sólo lle trabajo; no hay duda de eso porque viajaron muchos
gan por error o van hacia el otro lado. Todos ellos kilómetros para llegar a la esquina de otro país.
Los habitantes de Ciudad Errante vieron que los
que llegaron necesitaban ayuda, así que se organi
* Cuento ganador del primer lugar en la categoría de 13 a 17 años. zaron grupos de apoyo para atender a los pobres
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viajeros. Las personas que iban llegando con piel zaron a vivir en la ciudad de manera permanente,
oscura, muy oscura, no tenían en realidad inten era inevitable. El país al otro lado cerró la puerta
ción de quedarse, estaban de paso; sólo llegaron a la de entrada y abrió la puerta de salida. El presiden
puerta de la esperanza y ahí se quedaron, esperando te color naranja del otro lado de la puerta dijo que
permisos prometidos. Primero fueron unos pocos no aceptaría gente de otros lugares y que sacaría a
los que arribaron, luego cientos y luego miles. Pasa- todos los que no debían vivir en ese país, así que la
ron los días, las semanas, los meses y ellos no pu ciudad recibió a los expulsados. Todo ya ha cambia
dieron irse, cerraron la puerta de la esperanza. Los do, Ciudad Errante es ahora un gran refugio.
lugareños empezaron a sentirse inquietos, los ex Los expulsados son menos bien recibidos que los
tranjeros se quedaron más tiempo del programado. errantes, los ciudadanos que piensan en problemas a
Si algún ciudadano en voz alta comentaba que sería veces tienen razón; entre los expulsados, los deliran
un problema, era tachado de racista, señalado y cri tes y los errantes las calles están llenas. Por las ave
ticado, no era civilizado. nidas se ve a gente de piel oscura hablando español
Aunque a Ciudad Errante llegan muchas perso con acento extranjero vendiendo dulces, cuidando
nas de todos lados, esta vez no era lo mismo. Los carros y sirviendo mesas. Y se ve a gente expulsada
establecidos están acostumbrados al inglés, al espa hablando más inglés que español y llorando por su
ñol, inclusive al coreano, japonés y chino, pero no a vida separada; sin familia, sin papeles y sin trabajo.
miles de gentes amontonadas afuera de una puerta No son nada en Ciudad Errante, antes eran personas
cerrada y hablando francés. allá al otro lado de la puerta de la esperanza; ellos
Los errantes que sólo venían de paso a tocar una cruzaron la puerta hacia la desesperanza. Los re
puerta que les prometieron que sería abierta empe sentidos ven con desdén a los expulsados, porque es
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seguro que se creían superiores cuando vivían en el ridad; alegan que roban el trabajo y la comida. Los
otro país con sus casas y sus carros. Con los errantes preocupados reclaman el poco espacio de la ciudad.
es diferente; ellos sí tienen papeles que el gobierno Los justicieros exigen la misma atención para los
les dio y se les ayuda porque no son de aquí cerca y expulsados que son buscados por criminales para
están desamparados. Eso es ser buena gente y se ve que sus penas sean diluidas en drogas, un peligro
bien ayudar. porque por droga roban y hasta podrían matar. Los
Los errantes tuvieron que acostumbrarse al cli piadosos exigen la misma humanidad para los po
ma. Aquí hace frío, calor, llueve y hay vientos fuer bres perdidos en delirios demenciales que recorren
tes en un solo día; en el lugar de donde vienen los las calles hablando solos, en harapos, y por los que
errantes sólo hace calor. Ahí entre dos países cono nadie se preocupa, pero que son ciudadanos. Los de
cieron las chamarras y las cobijas. lirantes viven con indiferencia de muchos años.
Las gentes de piel muy oscura aprendieron La ciudad se dividió en opiniones, todo por los
pronto el español y se les ve ya casi por todas las viajantes de piel muy oscura que llegaron por mi
colonias; siguen siendo tan extraños que todavía les. La tranquilidad de todos los establecidos de
hay niños que piden sacarse fotos con ellos como si Ciudad Errante empieza a esfumarse. La ignoran
fueran artistas de cine. No lo dicen, pero quieren la cia sólo genera prejuicios y los prejuicios gene
foto con un fenómeno; no han notado que el errante ran odio y el odio arrebata la tranquilidad; todo el
de piel muy oscura es como cualquier persona, sólo mundo sabe que la intranquilidad en los barrios
que nació en otro país. es por otras cosas que se publican diariamente en
Los exigentes dicen que los extranjeros no tienen los periódicos, pero los quejumbrosos siempre bus
derecho a vivir aquí, que los establecidos son prio can más culpables.
34 |
Cuando todo parece perdido, siempre existen también vienen y se quedan a vivir gentes del sur.
las voces de la razón. Los conscientes trajeron la Ciudad Errante es una ciudad de brazos abiertos y
memoria de “los olvidados”. La pregunta se hizo ló generosa; finalmente los establecidos han aprendi
gica: ¿quiénes son los olvidados? La gente siempre do a convivir y crecer con lo nuevo. Lo nuevo se con
olvida de dónde viene y hacia dónde va. vierte en viejo al paso del tiempo; los olvidados son
La ciudad se fundó gracias a los viajeros perdi recuerdo presente en los establecidos.
dos o extranjeros también errantes de otros tiempos Ciudad Errante es una ciudad entre montañas,
que prefirieron vivir en un lugar completamente tierra seca y mar junto a una puerta que lleva al sue
nuevo, cambiando su destino, y fueron pasando al ño de mejor vida; cuando ésta se cierra no se acaba
olvido; de pioneros pasaron a ser olvidados. la historia, se crea una nueva. Así como los errantes
La ciudad nació gracias a ellos; es hija de pione de piel oscura llegaron, llegan cada día los expulsa
ros, de errantes que fueron acogidos por una tierra dos o los sureños; siguen los delirantes en las calles.
lejana con puerta a otro país. Unos llegaron con la Es visitada por mucha gente, los establecidos van y
esperanza de entrar por esa puerta; al final se que vienen. Ciudad Errante recibe a todos y aprende de
daron y fundaron primero un rancho famoso que se todos. Ciudad Errante también es esperanza, es una
transformó en pueblo y luego se llamó ciudad. Tiene ciudad mágica que cumple sueños y a veces vive pe
empresas de otros países que generan trabajo. En la sadillas.
calle siempre hay visitantes de piel muy clara o casi Ciudad Errante es la acogedora, la maternal, la
amarilla, oscura o roja. Cerca de la playa viven los dulce, pero desea que se diga muy despacito y que
señores de edad avanzada que no dejan de ver el dito su nombre verdadero: Tijuana.
mar descansando de tanto trabajar en el otro país;
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Rostro de dolor y esperanza • Fabiana Echavarría Rodríguez
36 | Dibujo ganador del primer lugar en la categoría de 13 a 17 años.
En México no hay muros* son significa hogar en francés, que es el idioma ofi
cial de mi país; a veces también conversamos en
Kensi Azucena Méndez Guerra, Flor de mayo lingala, que es una lengua nativa que la mayoría de
la gente de mi pueblo habla.
Yo soy un chico alto. A pesar de tener 16 años
mi estatura es muy elevada, tanto que ya casi al
canzo a mi papá, y eso que él también es un hombre
bastante alto. Soy muy delgado, mis brazos y mis
piernas son largos; mis ojos, grandes y redondos;
mis labios, gruesos; y mi cabello es negro, rizado y
S
oy Omari. Nací y crecí en Isiro, capital de la muy corto.
provincia del Alto Uele, en la República Demo Mi padre es un hombre amoroso, juega conmigo
crática del Congo, un lugar que para mí es de y mis hermanos cuando descansa del trabajo y se
lo más hermoso. Tiene paisajes increíbles que adoro asegura de que siempre estemos contentos. Mi ma
admirar a cualquier hora. La gente que me rodea dre es una mujer muy inteligente y sabia, la admiro
siempre tiene amplias sonrisas en el rostro, hacen porque persistentemente me da consejos y me en
que me sienta muy feliz siempre en mi maison. Mai- seña sobre cómo ser una persona amable, educada
y atenta. Además, cocina delicioso. ¡Me gusta mu
cho ayudarla y aprender de sus recetas!
Mis hermanos menores se llaman Lisa y Samir,
* Cuento ganador del segundo lugar en la categoría de 13 a 17
años. tienen 10 años y son gemelos. Gracias a ellos nues
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tra familia es muy conocida en el pueblo, ya que Estudio primer año de preparatoria y en el futu
dar a luz a mellizos se considera una bendición en ro me gustaría cursar una carrera como medicina
nuestra religión, aunque son muy traviesos y jugue o arquitectura, pero aquí no hay tantos recursos y
tones. Lisa tiene la cara redonda como sus ojos, la no me agradaría irme a estudiar lejos, ya que yo cui
bios delicados y nariz fina; lleva su cabello espeso do de mi familia cuando mi padre trabaja; sin em
siempre en trencitas que ella misma se hace. Samir bargo, lo que más deseo es tener un buen empleo
tiene los ojos tan redondos y grandes como la luna, para poder sacar adelante a mi familia.
es un poco más alto que Lisa y tiene el cabello tan Las cosas en Isiro no están del todo bien. No
corto como el mío. Les encanta que antes de dormir creía que pasara algo tan grave cuando surgieron
les cuente una de las historias que escribo en mis pequeños movimientos rebeldes en contra del go
ratos libres. Son historias que me fascina imaginar; bierno; eran sólo pequeños enfrentamientos arma
habitualmente hablan de mí como un explorador dos y algunos tiroteos, pero con el tiempo todo se
que descubre tierras misteriosas. Mi mamá las lee puso peor. Tal vez ignoraba que había guerrillas, o
tan emocionada que asegura que algún día podré más bien pretendía que lo hacía para no alarmar
publicar un libro con todos los cuentos que he es a mi familia, pero la verdad es que tengo mucho
crito desde niño. miedo de salir de mi casa debido a los combates,
Mi familia es el mejor regalo que me ha dado la violencia, la persecución y los abusos contra los
la vida, es muy importante para mí. Somos estre- derechos humanos que están ocurriendo. He oído
chamente unidos y cuando alguien tiene un pro decir que se están cometiendo torturas, asaltos,
blema, los demás lo apoyamos hasta que pueda trabajos forzados, extorsiones y destrucción de
resolverse. Es por eso que los aprecio tanto. propiedades.
38 |
Mi padre está aterrado de que nos recluten a mi tilo de vida, a una nueva casa y comenzar de nuevo,
hermano y a mí para ir a las guerras, aunque sea estaría dispuesto a eso y más. Así se los hice saber a
mos menores de edad. Simplemente siento pavor de mis padres, respaldando su decisión de marcharnos.
lo que nos pueda pasar, que destruyan nuestra casa Les pregunté a dónde nos iríamos y la respues
y que nos arrebaten lo más preciado que tenemos, ta me sorprendió mucho: México. ¿México? En la
que es nuestra familia y nuestro hogar. secundaria aprendí dónde se ubica y a qué conti
El susto que esto le provocaba a mis padres los nente pertenece, es todo. Estaba algo confundido,
llevó a tomar una gran decisión: abandonar el país no sabía muy bien qué idiomas hablan allá o qué es
para refugiarnos en otro. Al principio no lo podía lo que comen, si las personas nos tratarán bien o de
creer, o más bien no quería creerlo, ¿Cómo iba a de qué manera vamos a vivir. Estaba algo nervioso por
jar el lugar donde crecí, donde generé los recuerdos nuestro cambio, pero era mejor que vivir con miedo,
más felices que tengo? ¿Qué iba a hacer yo en otro con terror y pánico en mi propia casa.
país cuando aquí es adonde pertenezco? ¿Cómo me Llegó el día de despedirme de lo que alguna vez
iba a comunicar si sólo sé hablar francés y lingala? fue mi hogar, empaqué sólo lo necesario como nos
En un momento de pánico todas estas preguntas recomendó mi madre cuando vio que Lisa y Samir
comenzaron a rondar mi cabeza. ¡Yo no quería de querían llevarse todos y cada uno de sus juguetes.
jarlo todo: escuela, casa, amigos…! Pero entonces Una sensación de tristeza invadió mi cuerpo al ele
recordé la situación tan difícil que estaba pasando gir las pertenencias que me quería llevar a mi nueva
mi país y puse en orden mis prioridades: lo que más vida. Entre todas mis cosas hay algunas que son mías
deseaba era la seguridad, mi bienestar y el de mi fa y otras a las que siento que no correspondo; todas me
milia, y si eso implicaba adaptarme a un nuevo es recordaban mis momentos felices antes de los com
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bates, antes de la violencia, antes de que me arreba íbamos a vivir? ¿De dónde sacaríamos el dinero para
tara mi país un grupo de rebeldes sin piedad. ¿Qué comer? ¿Mis hermanos y yo seguiríamos estudian
culpa tenía yo? ¿Qué les habíamos hecho para do? Intentaba no preocuparme, pero era imposible
que se vengaran de esta forma? ¿Por qué mi familia mientras no tuviéramos nada aquí en México.
tenía que huir de su país? Me dije: “mi vida no cabe en A lo lejos vi a mi padre hablando con un hom
cajas de cartón porque está ahí afuera”. bre, alguien a quien había visto en el avión, él tam
Mis padres apenas tenían el dinero suficien bién venía de Isiro a México, su plática se veía tan
te para pagar los boletos de avión hacia México, el profunda y seria que me preguntaba de qué esta
cual obtuvieron con la venta de los objetos que no rían hablando.
podríamos llevarnos. Tiempo después llegó mi padre con una amplia
Era la primera vez que viajaba en avión y me re sonrisa. Nos presentó al hombre que estaba a su
sultaba triste, ya que era para salir de mi hogar y tal lado; se llamaba Yamal, es como de su misma edad
vez nunca volver. Fue un viaje bastante largo, como y se miraba tan alegre como él. Nos explicó que sa
de 17 horas; al mirar por la ventanilla lo único que bía hablar español y vino a México como refugiado,
veía era agua, sólo agua, ¡era el océano Atlántico! Lo y que aquí teníamos derechos. ¿Derechos? ¿Nosotros
recordaba por mis clases de geografía en Isiro. Duran podíamos tener derechos en un país al que no per
te la mayor parte del vuelo Lisa y Samir se la pasaron tenecíamos? Dijo que tenemos derecho a no ser de
jugueteando y riendo por ahí; me gustaba mucho su vueltos a nuestro país, a que no nos impongan una
actitud ante este cambio. sanción por haber entrado ilegalmente en el territo
Llegamos a México y estábamos bien, nos sen rio, a tener un intérprete –ya que no sabemos hablar
tíamos bien; al fin podíamos respirar. Pero… ¿Dónde español– y a no ser discriminados. Yo estaba sor
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prendido, ¡podríamos vivir como personas normales! compañeros de clase, les explicó que yo venía de la
Sin miedo, sin ser rechazados o excluidos. República Democrática del Congo y todos se por
Junto con Yamal fuimos a un centro de asilo taron muy amables conmigo. Les dijo que no sa
para refugiados donde había personas de distintos bía hablar español y la chica que estaba delante de
países y en la misma situación que nosotros. Al es mí se ofreció a enseñarme y me dirigió una cálida
cuchar sus historias me sentí horrorizado: niños sonrisa. Su cabello era largo, lacio, castaño y usa
huérfanos que habían perdido a toda su familia de ba unas gafas enormes. Me dijo su nombre: Alicia.
bido a los conflictos bélicos. Ahí comprendí que lo Con su ayuda y la de Yamal aprenderíamos muy
que habíamos vivido no se comparaba con lo que rápido. Aunque Alicia se reía muchísimo de cómo
les había pasado a los demás refugiados. pronunciaba las palabras, me corregía siempre y yo
Nos dieron comida, ropa y un lugar para dor no podía estar más agradecido.
mir, pero aún no me sentía en casa. Las personas Las clases aquí son muy diferentes, pero in
encargadas de protegernos ya habían conseguido tento esforzarme para que no sean complicadas.
trabajo para mis padres, una escuela primaria para Soy muy estudioso y hago todas mis tareas, ya
Lisa y Samir y una preparatoria para mí. Estaba feliz que es muy importante mi excelencia académica.
de poder volver a tomar clases, ya que la educación Hice amigos muy rápido y frecuentemente vamos
también es uno de mis derechos como refugiado, y a una cancha que está cerca de la escuela y juga
quizá aquí sí pueda estudiar la carrera que quiero. mos futbol.
El primer día de clases en México me aterraba Los meses fueron pasando, mi familia y yo nos
demasiado, creía que todos me mirarían raro y no sentíamos contentos. Mis padres iban ahorrando
haría ningún amigo. La maestra me presentó a mis el dinero de sus trabajos para comprar una casa,
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aunque estábamos bien en el asilo. Todos hacíamos fiestas para la familia, amigos y vecinos. ¡Hemos he
amigos y yo la pasaba bien en la escuela. cho muchos! En ellas les compartimos algunos de
Sin embargo, a veces me preguntaba qué había los platillos típicos de Isiro y nuestros cuentos tradi
pasado en Isiro. ¿La guerra ya habría concluido? cionales. Lisa y Samir están a punto de entrar en la
¿Acaso los rebeldes decidieron dejar de incitar a la secundaria y sacan muy buenas calificaciones. Alicia
violencia? ¿Tuvieron piedad de los que eran ino es mi mejor amiga y va a estudiar la misma carre
centes? La guerra es la más grande catástrofe que ra que yo. Ahora mi español es muy bueno gracias
azota a la humanidad; destruye naciones, familias, a ella; para corresponderle, le enseño lingala.
vidas, sueños y esperanzas. Es el peor de los males. La nostalgia de mi casa en el Congo aún la con
Me siento triste por todas las personas sin culpa servo, pero México es mi nuevo hogar. Podemos salir
que se quedaron a soportar los abusos, las torturas, a pasear sin miedo de que haya un ataque, podemos
el terror… estar tranquilos justo como estábamos antes de las
Ser un refugiado no es ser un cobarde, es mejor guerras en Isiro, y puedo decir que la mejor decisión
que tolerar la persecución y el terrorismo en tu pro que he tomado hasta ahora fue la de venir a México.
pio hogar. Miro atrás y me siento orgulloso de mi Quiero mucho a este país, ¡lo adoro!: su cultu
decisión de venir a México, porque he podido llevar ra, gastronomía, paisajes y toda la gente a mi al
a cabo una buena educación y con mi familia aquí rededor. No he tenido noticias de lo que ha pasado
estoy tranquilo. en Isiro durante meses, pero no me preocupa tanto
Ya tengo 18 años y voy a estudiar medicina en porque aquí soy muy feliz en mi maison.
una importante universidad. Mis padres al fin tienen
la casa que tanto deseaban; muy a menudo hacemos
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El brazo que lleva a la felicidad • Lucero Facundo Torres
Dibujo ganador del segundo lugar en la categoría de 13 a 17 años. | 43
El camino difícil a la esperanza* conocen, creo que al despegarte del cuerpo terrenal
se te va el avión.
Gerardo Ramírez Chávez, la Canica Bueno, permíteme presentarme. Los mböhö1 me
llaman la Canica, vivo donde no hay más que mi
existencia y mis hijos; no hay color ni sonido. ¡Bien
venido! Siéntete como en casa.
Soy, digámoslo, una pepenadora; pero no como
cualquier pepenadora. Los pepenadores terrena
les buscan entre la basura para intentar encontrar
algo de comer. No, yo no soy así. Yo busco entre
B
ienvenido hijo mío, no esperaba verte tan rá bosques de almas pérdidas intentando encontrar
pido. ¿Cuántos años han pasado desde que te almas bondadosas que puedo salvar y añadir a mi
visité para llevarme a tu hermana?, ¿cinco o familia. Para hacerlo corto sus raíces que los co
seis años? ¡Je je! Parecen recuerdos de una era an nectan con el mundo de los mböhö y los separo de
terior. la maleza para plantarlos en pacíficas chinampas
¿Qué? ¿Qué no me reconoces? Bueno, ya sé que como en la que nos encontramos. Eventualmente
debería perder peso, pero según yo ya estoy en los las almas crecen como si fuesen retoños de árboles,
huesos, ¡je je! Ya veo, no te culpo, casi nunca me re se hacen niñas y niños llenos de luz. Tal como tú,
44 |
estas almas son mis hijos y mi compañía. Yo los otro la situación en la que estaban no podía llamar
crío y les enseño cosas que no pudieron tener por se pobreza, estaban en la ruina; y en un intento por
obstáculos puestos por los mismos mböhö. revivir el espectro de una vida pasada tu padre vio
¿Qué? ¿No lo recuerdas? Bueno, ya ha pasado la posibilidad de irse a trabajar al extranjero y con
mucho tiempo, pero lo recuerdo como si hubiese sideró a un país que parecía una mina de oro para el
sido ayer. Te encontré en Tamaulipas, estabas des trabajo y mejorar su situación: México.
trozado. El sufrimiento de ir desde tu ciudad natal Meses después y con la desesperación encima,
para intentar atrapar la sombra de una esperanza tu padre decidió ponerse en marcha hacia el nor
muerta había sido demasiado fuerte para un inde te. Las cosas estuvieron bien durante sus primeros
fenso niño como tú y terminaste tirado en los calu años hasta que la desgracia cayó sobre la familia,
rosos rieles del tren, aceptando de brazos abiertos el porque el mismo año en que tu padre partió al norte
frío y yerto abrazo de la muerte, de mí. tu hermana hizo lo propio pero al otro mundo, aga
¿Todavía no lo recuerdas? ¡Rayos! No creo poder rrada de la mano de una servidora, esto provocado
dejarte con la duda, ¿verdad? Ponte cómodo, por por el poco dinero que tu padre podía darles. En se
que esto va para largo; y siéntate, porque puede que rio, tu padre daba todo lo que él tenía trabajando
ya seas un niño grande pero tus piernas no están como albañil, en serio los amaba. A pesar de esto,
del todo curadas y necesitas descansar. lo que tu padre ganaba no era suficiente y decidió
Tú vivías en Centroamérica –más específicamen que lo mejor era irse aún más al norte, a Estados
te en Honduras– con tu padre, tu madre y tu herma Unidos, en un peligroso y misterioso viaje a bordo
na. No tenían mucho pero vivían felizmente, hasta el de un coloso de acero en forma de tren que lleva a
día en el que todo se fue para abajo. De un día para los viajeros a buscar esperanza.
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Después de un año por fin recibieron noticias hasta la frontera sur del Ombligo de la Luna. Ahí se
de tu padre: había encontrado un destino mejor y les presentaba otra incógnita entre sollozos y jadeos
deseaba con locura encontrarse contigo y tu madre cansados: ¿cómo atravesar 1 964 000 kilómetros sin
para por fin volver a lo que eran antes de la crisis; ningún transporte y con dinero faltante?
sin embargo, ya no gozarían de la compañía de tu Bueno, al final su respuesta se presentó en pis
difunta hermana. Para ti volver a encontrarte con tones y rieles: un tren llamado la Bestia. ¡Dios nos
los restantes integrantes de tu familia te llenaba de ayude! Ese tren ha traído a la mayoría de mis hijos
una alegría inconmensurable, pero a pesar de ese y sellado varias de las vidas del bosque donde te…
entusiasmo que irradiabas tu madre, que no era la los encontré. Éste es el titán que te mencioné hace
misma después de la partida de tu hermana, estaba algunos momentos, el cual puede ser un viaje hacia
inmóvil y pensativa, preguntándose cómo llegarían a un futuro mejor o a una prolongación de una su
con tu padre. Tú, como inocente chico, jamás sospe puestamente olvidada persecución. Bueno, perdón
chaste de las adversidades de esta travesía, pero a la por desviarme; ahora sí, a lo que nos truje.
vez parecía que lo hacías y que estabas determinado Después de entrar escondiéndose en el tren, tu
a sobrellevarlas. madre se percató de que no eran los únicos que esta
Unos años después, con el dinero necesario para ban en busca de una vida mejor, de una nueva opor
ejecutar su odisea y con la moral en duda, tu ma tunidad para hacer las cosas bien o simplemente para
dre y tú comenzaron el viaje hacia el reencuentro reunirse con seres queridos que ya habían tomado la
con tu padre. Después de cruzar Centroamérica en decisión de emprender el viaje anteriormente.
misteriosas camionetas de contrabando, exponién Justo cuando todos en el tren estaban recupe
dose a abusos y violaciones a su integridad, llegaron rando su aliento después de haber sufrido tanto la
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vida les tenía otra jugarreta, esta vez en forma de esta mujer era la más cálida que viste en tus prime
agentes migratorios: la corrupción por el poder en ros días en el vagón; ella se hizo cargo de tu cuidado
viva forma. Los agentes entraron con armas y bru durante el camino hacia el norte.
talidad, algunos de los polizones fueron echados del Durante la segunda semana de tu viaje pasaste
tren y varios fueron robados de todas sus posesio por un lugar llamado Veracruz, donde fuiste arro
nes. Entre ellos estaba tu madre, fue echada del tren pado por 14 almas bondadosas que te llenaron de
y despojada del poco dinero que tenía mientras que bendiciones en forma de comida y un hombro en el
tú te quedabas desprotegido e indefenso a bordo de que apoyarte. Ver esto te esperanzó para seguir tu
un tren hacia lo desconocido. Lloraste incontrola odisea y te recordó que aún había gente que goza de
blemente mientras tu madre gritaba enjugándose valores y empatía hacia otras personas que pasan
las lágrimas y diciéndote que todo iba a estar bien, por situaciones difíciles. Ellas no tenían ninguna
con mucha duda y desesperación cuando pronun obligación, pero incluso así ayudaban; gente como
ciaba esas palabras. ellas mueve mi muerto corazón.
Segundos después las puertas del vagón se ce Hacia la tercera semana del viaje la mujer cu
rraron y quedaste en la oscuridad, desconsolado, bana había desaparecido misteriosamente. En tu
triste y abandonado, preguntándote por qué habías inocente corazón no le diste importancia, pues a me
emprendido el viaje y dudando si era la mejor op nudo no la encontrabas y al final siempre aparecía
ción. En tu tristeza, fuiste acogido por una mujer en el vagón; pero esta vez fue diferente, no estaba
cubana; tenía piel morena y seca, con una mirada ahí. Estuviste buscándola pasando por los vago
muerta resaltada por ojeras negras como el hollín. nes. Mientras caminabas por el tambaleante tren
A pesar de su apariencia yerta, la personalidad de parecía como si caminaras por los nueve círculos
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del infierno, y mira que te lo digo yo que he estado
ahí para tirar la maleza de almas corruptas de las
que separo a mis hijos. El hacinamiento de algunos
vagones era tal que era difícil moverse de un extre-
mo al otro; esto se vio sobre todo en el último va
gón, donde por asomarte en uno de los bordes fuiste
empujado por algún distraído y caíste estrepitosa
mente en los rieles que destrozaron tus rodillas y
tus brazos.
Al final terminaste de aspirar tu último alien
to, despreciando tus decisiones pero a la vez
agradeciendo y rezando por el bien de todos los
bondadosos que te ayudaron; sobre todo te pre
guntabas por qué los humanos hacen tan difícil
la situación para sus hermanos y no les extien
den la mano para apoyarles.
Y así es como llegaste ahí. He de decir que me ale
gra haberte encontrado, has sufrido mucho y mere
ces descansar. ¿Qué? ¿Que cómo me llamo? Ya te lo
había dicho, pero si quieres un nombre más universal
también me llaman la Muerte. Ponte cómodo.
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Conviviendo con nuestros amigos refugiados • Jesús Márquez Valderrábano
Dibujo ganador del tercer lugar en la categoría de 13 a 17 años. | 49
Un fantasma…* momento podía sentir cada gota del sudor de mi pa
dre y cómo la respiración de todos los del vagón se
Pedro Joaquín Dascalakis, Sid Stardust forzaba demasiado en no resonar. La linterna o lo
que sea que haya sido se fue.
Nunca supimos si era algún oficial o sólo un re
flejo, o quizá sólo una alucinación colectiva. El am
biente entero era muy pesado, una alucinación no
sería muy sorprendente. Estábamos nerviosos porque
queríamos paz y poder construir un presente que nos
regale un futuro digno, cosa que en nuestro país de
E
l rugido de la bestia salvadora era lo último origen no podríamos conseguir.
que yo escuchaba antes de dormir cada noche, Desperté en una cama bastante pequeña pero
cada noche después de la noche. claramente mejor a las tablas de madera del tren.
Era algún día perdido entre el 3 y el 21 de agosto Estaba confundida. En la gran habitación habían
cuando finalmente cruzamos México y estuvimos más niñas, pero ni rastro de un adulto o, aún más
cerca de la gloria, del sueño americano. Mi padre importante, de mi padre. Corrí hacia la puerta y
me retuvo con sus grandes brazos cuando le pare una mujer me detuvo. Traía una sonrisa en la cara,
cía que había una misteriosa linterna cerca. En ese más falsa que aquellas historias del anciano; pero
a diferencia de las historias, ella no tenía nada de
simpatía, daba miedo. Me limité a preguntar por mi
* Cuento con mención honorífica en la categoría de 13 a 17 años. padre, pero la blanca anciana no tenía una mentira
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que valiera la pena; sólo dijo que estaba haciendo asesinados en la calle, discriminados por los ciuda
unos trámites. danos, discriminados por los gobiernos. Jamás pa
Han pasado 13 años y aún no sé qué le ha pa saría por mi cabeza que alguien llegara a hacerme
sado a mi padre, y nada parece indicar que vaya a eso; simplemente yo era una persona a la que iban
haber una respuesta. Diría que a él lo dejaron en a mirar feo, pero no a matar con la excusa de que
México a su suerte, pero aún yo no puedo ir a bus soy terrorista. Simplemente tenía que seguir con mi
carlo. Necesito conseguir más dinero antes y sé que trabajo para conseguir el dinero y llegar con papá.
irme a buscarlo a ciegas sin nada de dinero es lo Nada más buscaba, pero si me respetaran el proce
contrario a lo que él quería para su hijita. Tengo un so sería aún más rápido.
objetivo claro, pero no fácil de alcanzar. Desde que Un día me pidieron hacer el turno nocturno, una
puedo he trabajado, y ahora estoy en una agencia empleada tenía a un familiar accidentado y debía ir
pequeña de bienes raíces. Poco a poco me construyo a verlo. No me molestó, me darían paga extra y no
una vida en este país; a pesar de las miradas con re era como si yo llegara a salir de fiesta o algo así. Ce
pudio por mi piel o por mis rasgos o por mi cultura rré la tienda y caminé una cuadra. El semáforo me
he salido adelante. detuvo, hasta él sabía que no tenía prisa. Realmente
Mi vida fue normal en comparación con lo que no iba a hacer nada más que ver las noticias, cenar
otros grupos estaban sufriendo, pero jamás fui y dormir. Pude sentir la mano de alguien detrás de
respetada como lo eran los ciudadanos blancos. mí, grité brevemente pero nadie escuchó. Me acercó
Jamás logré llegar al nivel de respeto que un hom a un callejón y me tiró al suelo. Me golpeó en la cara
bre blanco heterosexual, pero no me fue mal en varias veces. Podía notar el repudio que me tenía,
comparación con lo que otros vivían. Algunos eran sentía su odio a mi persona como si fueran gotas de
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lluvia en mi cara; era simplemente imposible no no
tarlo. Lo vi sacar un reluciente objeto y antes de que
notara qué era aquel brillante armatoste me había
penetrado el estómago y sólo me quedaría morir so
bre las bolsas de basura.
Nunca supe si me atacó por mi nacionalidad,
por mi piel o por ser mujer; y lo único que queda
es yacer como un alma sobre la gente, esperando
a que un cambio ocurra y entendamos el valor de la
vida.
Un fantasma soy y lo único que puedo hacer es
esperar.
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Refugiados • Fernanda Carolina Bravo Anaya • Mención honorífica en la categoría de 13 a 17 años. | 53
Camino a la libertad. una pequeña pocilga que hacía que te inundaras de
Esperanza, fuerza y valentía* terror y que te llenaras de una brisa helada que cu
bría todo el cuerpo, una pequeña habitación donde
Itzel Mariana Vargas Contreras, Lezti VC cuatro personas dormían en un colchón que rasga
ba tu espalda, noches de disparos que te atormen
taban, además de personas que gritaban y lloraban
al mismo tiempo.
Un dolor profundo colmaba mi interior al ver las
caras de mis padres llenas de miedo. Mi hermano
mayor y yo éramos muy unidos, nos teníamos uno
“
Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre al otro; todavía recuerdo los momentos cuando nos
volverá a brillar”; la frase que te hace pensar que gustaba jugar con una pequeña lata de cerveza y
todo estará bien, una frase que ilumina a toda mi reíamos juntos al ver nuestras caras y cuerpos flá
comunidad de esperanza por encontrar una mejor cidos y sin fuerzas, pero sobre todo la esperanza tan
vida. Mi nombre es Lucy, soy una niña de 16 años grande que mi hermano siempre mostraba.
nacida en el país de Honduras y ésta es mi historia. Pasaron tres años para que me diera cuenta de
Empezaremos ocho años atrás en la pequeña la situación que mi familia y yo vivíamos; sin em
ciudad de San Pedro Sula, en Honduras. Recuerdo bargo, ya me había acostumbrado. En ese tiempo
descubrí el gran amor que mis padres sentían hacia
nosotros, y todas las precauciones que tenían en ese
* Cuento con mención honorífica en la categoría de 13 a 17 años. momento para mantenernos lo más seguros posi
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ble, hasta que llegó el “terrible día”. Ese día mi padre de la zona y mi familia ahorró el dinero suficiente
sólo se rindió y dejó que todo lo malo invadiera su para comprar una casa que pudiera resguardarnos
alma. Después de que la pandilla lo golpeó hasta del frío. Mi hermano era mesero en el mismo res
casi matarlo, mi padre tomó una botella de alcohol, taurante; en mi mente todavía puedo ver esa linda
dos cigarrillos y salió por la puerta de lámina; la muñeca que me regaló con el poco dinero que tenía.
mentablemente fue la última vez que lo vimos. Una de esas noches de verano mi madre y yo
Al día siguiente mi madre se levantó temprano estábamos sentadas cuando escuchamos ese mo
al igual que mi hermano de 16 años y salieron de tor, se oía como el rugido de un león y esa música
nuestra casa para buscar un trabajo, así que me que atormentaba a toda la cuadra. Mi madre y yo
quede sola, con la oscuridad y los ruidos escalo apagamos la luz e intentamos no hacer ruido. To
friantes que atormentaban mi cabeza. En ese ins davía escucho el estruendo que producía al tocar la
tante me era imposible pensar lo peor, hasta que puerta un hombre lleno de tatuajes y acompañado
el atardecer llegó. Mi familia abrió la puerta y yo de muchos más igual a él; un ruido que te llena de
con una sonrisa que dibujaba mi rostro abracé a mi terror y te deja sin aliento. Mi hermano se paró muy
madre hasta el punto de casi lastimarla; mi madre despacio con las manos sudorosas y abrió la puerta.
me dirigió la mirada y con una voz que te iluminaba Los hombres, sin un poco de amabilidad y llenos de
de confianza me dijo “¡jamás te dejaré!”. Ese día fue furia en su interior, golpearon a mi hermano has
uno de los mejores recuerdos de mi vida. ta dejarlo inconsciente. ¡Esas bestias inhumanas
Dos años después por fin podía ver un poco de sin piedad a las que no les importaba nada! Aún se
esperanza en mi vida. Mi madre había tenido éxi halla en mis recuerdos el momento más oscuro y
to en su trabajo como cocinera de un restaurante horroroso de mi vida, el instante en que por más
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que grites y pidas ayuda nadie podría ayudarte, ese dijo que huiríamos del país para encontrar un me
tiempo en el que te encuentras en el infierno y sólo jor lugar para vivir.
pides que todo acabe, momentos en que mi madre Al día siguiente mi madre nos dijo que iríamos
y yo perdíamos poco a poco las esperanzas y nues hasta donde pudiéramos llegar; yo no estaba se
tra alma se llenaba de oscuridad y miedo. Cuando gura, pues eran muchos kilómetros de peligros y
terminó todo, una última amenaza que los hom amenazas. Inmediatamente mi cuerpo se convirtió
bres nos dejaron muy clara es que regresarían en en una alarma sin botón de apagado; sabía que si
tres días por lo que le llaman el impuesto de la guerra aceptaba esta travesía podía perder lo poco que te
y si no cumplíamos con esa cuota, los hombres nos níamos, además de ponernos en riesgo. Sabía que
llevarían a mi hermano y a mí, sin olvidar matar a nuestro compañero fiel de este viaje sería el miedo,
mi madre. pero mi vida ya no era la misma, así que acepté.
Después de esas palabras que fueron como Mi hermano tomó mi mano y recuerdo claramente
espadas que atravesaban nuestros corazones los sus palabras: “toma lo necesario, nos iremos por la
pandilleros sólo se retiraron y lo último que escu mañana”. Esa noche tomé dos mudas de ropa, corté
chamos fue ese ruidoso motor. Esa noche no dor mi cabello y me puse una vieja camisa de mi padre.
mimos, el miedo nos invadió; nuestra vida se había Eran las 4:00 de la mañana; mi hermano tenía un
vuelto a derrumbar. mapa viejo y arrugado, y mi mama traía un poco de
Los tres sabíamos que nos era imposible pagar alimento.
ese impuesto y que nadie nos ayudaría. Mi madre Salimos sin hacer ruido, era la primera vez
valientemente reunió toda la fuerza para dejar todo que viajaría lejos de mi casa. Tomamos un camión
lo que habíamos conseguido aquí y sin dudarlo nos para llegar a nuestra frontera; todo iba muy bien,
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nos sentíamos libres y aliviados. Fueron dos meses cabeza de mi madre, mientras gritos de sufrimien
atravesando caminos violentos para llegar a Gua to quedaban sepultados. En esos minutos todo mi
temala. Conocimos varias personas; algunas bue cuerpo se sintió débil, lágrimas de dolor e ira co
nas que como nosotros buscaban una esperanza en rrían por mis mejillas y hubo un eclipse total en mi
sus vidas y otras que sólo buscaban beneficiarse de alma.
los demás sin tener bondad. Con el corazón roto, mi hermano y yo conti
Después de días de oscuridad, de noches violen nuamos nuestra travesía por el país de Guatema
tas y días de caminos sin fin, mi familia y yo ya está la. Conocimos a algunas personas que tenían como
bamos exhaustos de escondernos. Vimos entonces objetivo llegar a Estados Unidos y ya habían sido
nuestra oportunidad: la frontera para cruzar a Gua migrantes. Convivimos y nos hablaron de lo per
temala estaba justo enfrente. Nosotros contábamos turbador que era viajar para lograr el sueño ame
con el equivalente a 200 dólares para poder cruzar, ricano. Las peores e inimaginables situaciones que
pero mi hermano y yo sabíamos que teníamos que cada persona nos contaba eran impactantes, desde
ser muy cautelosos y listos para evitar la mayoría el Ejército mexicano hasta los grupos despiadados
de los peligros. Mi madre tenía que mostrar algu como las maras o los narcos.
nos papeles para que pudiéramos pasar. Minutos Mi hermano y yo no podíamos seguir, se presen
después, una inolvidable imagen se presentó al ver tó una barrera invisible que se interpuso y no nos
a mi mamá tirada en el suelo con las manos en la dejó avanzar. No buscábamos ese sueño, sólo bus
cabeza y tres hombre de la mara apuntándole con cábamos un lugar para vivir y no soportaríamos más
una pistola. Mi hermano me tapó la boca. Aún sigo pesadillas ni riesgos; al final sólo buscábamos paz.
escuchando el estruendo de la bala que atravesó la Cruzamos la frontera de México en un pequeño bote,
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sin dinero ni papeles que nos identificaran; nos ha peranza. En el albergue en que nos resguardamos y
blaron de los albergues para refugiados y migrantes a la vez ayudamos se dice una frase que motiva a la
y ése era nuestro destino. gente a seguir adelante y la mencionó una niña que
Al llegar y contarles nuestra historia nos orien como nosotros sufrió diferentes problemas: “no pien
taron para realizar el trámite oficial que nos ayuda ses sólo en la desgracia sino en toda la belleza que
ría a ser reconocidos como refugiados y así dejar de aún permanece”.
sentir la amenaza de regresar y encontrar la muerte
en nuestro país.
Estar en un país extraño y desconocido no es
fácil: se sufre discriminación, los trámites son com
plicados y tardados, y las posibilidades de tener una
respuesta positiva son mínimas, pero también cono
ces personas buenas y amables que devuelven un
poco de la esperanza perdida en aquel infierno que
vivimos.
Ahora estamos a la espera de una respuesta,
mientras tanto siempre quedará en mi memoria el
día en que cambió mi vida, los caminos que atravesé
y los miedos que superé. Mi hermano y yo nos volvi
mos uno mismo y ahora somos conscientes de que
hay personas que sufren cada día buscando una es
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Construye, no muros
Isaac Ernesto Vázquez Sandoval
Mención honorífica en la categoría
de 13 a 17 años.
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¿Cómo son recibidos sida. Sin pensar las cosas y creyendo que era lo me
los refugiados que viven jor para sus cuatro hijas, la madre cometió el más
en México?* grande error de su vida y las dejó con su abuela
paterna. La abuela dejó a sus nietas bajo el cuidado
Jennifer Nayeli Navarro Soto de su hermana porque se fue a Estados Unidos. La
señora, creyendo que estarían en buenas manos,
no se percató de que la hermana maltrataba a las
niñas.
Cuando María Cecilia cumplió ocho años de
edad, la abuela regresó a Honduras porque descu
brió después de tanto tiempo que sus nietas eran
maltratadas. La abuela se fue a vivir con sus nietas
M
aría Cecilia nació en 2001 en algún lugar a casa de una de sus hijas en donde trataban bien a
de Honduras. Al cumplir su primer año de las niñas; eran muy felices hasta que la abuela deci
edad su padre, que era el líder de una dió regresar a Estados Unidos sola, dejando de nue
pandilla, fue vendido por su amante con la pandi vo a las cuatro niñas pero ahora con su hija. Con el
lla contraria. Cuando la niña cumplió cuatro años paso del tiempo la tía comenzó a utilizarlas: hacían
de edad su madre muy triste descubrió que tenía la limpieza; lavaban la ropa de la tía, su esposo y sus
hijos; cocinaban y las mandaba a vender pan para
tener ingresos mientras que los primos no hacían
* Cuento con mención honorífica en la categoría de 13 a 17 años. nada y les hacían bullying a las niñas.
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María Cecilia sólo se divertía cuando iba al co le creyó a ella sino que la culpaba de todo. Corrió
legio; le gustaba platicar con sus compañeros, estar al esposo de la casa pero amenazó a la chica para
en clases y olvidar todos los problemas que tenía en que hiciera todo lo que ella quisiera a cambio de no
casa. Al pasar los años, cuando la niña cumplió 12 decirle a su familia que su matrimonio había aca
años de edad, el esposo de su tía entraba por las no bado por su culpa. María sintió mucha pena de que
ches al cuarto de María para abusar de ella sin que su familia se enterara de esta situación y la culpara
su tía y sus hermanas se dieran cuenta. La niña no también, por eso accedió con su tía. Así vivió tres
sabía qué hacer, se sentía asustada, temía que algo años de maltrato en su vida hasta que se cansó y
peor pasara y por el mismo miedo ella no dijo nada decidió irse a vivir con sus abuelos maternos a los
a nadie y mucho menos con las autoridades, ya que 15 años de edad.
el tío la amenazaba constantemente con matarla si Al pasar el tiempo, aquellos hombres que ha
ella hablaba. bían asesinado a su padre fueron a buscarla para
Siempre deseaba que los encontrara alguien matarla, pero no la encontraron en casa, ya que
para así poder decirlo algún día. No pasó mucho ella se encontraba en el colegio. Al llegar María a
tiempo cuando una noche estaba en su cuarto y la casa sus abuelitos le contaron lo sucedido y sin
se encontraba su primo con ella y fue cuando el más preámbulos ella tomó la decisión de migrar a
tío entró a su habitación. María se asustó demasia México y allá encontrarse con su hermana mayor.
do pero a la vez estaba feliz de que por fin fuera a Luego de que la niña triste huyo de su país sola,
acabar ese episodio de su vida tan indignante. La sin conocer el camino y con poco dinero, pasó un
niña pudo decirles a su tía y primos todo lo que ese día entero sin comer hasta que al fin se encontró
hombre le hacía por las noches, pero la señora no con su hermana. Al estar con ella María se sentía
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un poco más segura y feliz de hallarse con parte de tener una mejor vida. Así como María Cecilia, hay
su familia; sin embargo el gusto no duró mucho muchas personas más que necesitan ser refugiadas
tiempo, ya que Migración las detuvo y las llevó a y tener el apoyo de acnur y otras organizaciones.
la estación migratoria. Ahí les hicieron una serie de Fin.
preguntas y dejaron libre a su hermana por tener
un hijo de nacionalidad mexicana.
María Cecilia, muy asustada de ser deportada y
volver a su país donde las maras la buscaban, no
encontró otra opción más que pedir refugio. Enton
ces le hicieron otras preguntas para comenzar con
el trámite de solicitud de asilo y así no ser deporta
da en el momento. Gracias a su trámite la manda
ron a un albergue donde se encuentra segura; ahí
conoció a más chicos y chicas de su edad, no con
historias iguales pero sí con historias muy fuertes y
de peligro como la de ella.
Esto es lo que pasa cuando alguien cruza ile
galmente, tal vez no sólo por trabajo sino también
por violencia, abuso sexual y muchas cosas más
que hacen que las personas huyan a otro país para
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Alegra tu mundo otra vez • Oliver Montes García • Mención honorífica en la categoría de 13 a 17 años. | 63
bre de 2017 en los ta
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de otros lados.
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Cuentos y dibujos de niñas,
niños y jóvenes sobre personas
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