La Tipicidad
La Tipicidad
La Tipicidad
TERMINOLOGIA:
Según Dr. José Francisco De mata Vela; Héctor Aníbal De León Velasco ”…La tipicidad
como elemento positivo característico del delito, y el tipo como especie de infracción penal,
son la versión española más generalizada de los términos alemanes “Tatbestand” y
“deliktypos”, que los autores italianos han denominado “fattispecie” o simplemente “fatto”,
y que los tratadistas hispanos y sudamericanos conocen como “encuadrabilidad” o “delito
tipo”; en nuestro país hablamos de tipicidad cuando nos referimos al elemento delito, y
tipificar cuando se trata de adecuar la conducta humana en la norma legal…”
GENESIS Y EVOLUCION:
Según Dr. José Francisco De mata Vela; Héctor Aníbal De León Velasco”…En cuanto al
concepto de tipo penal es dable afirmar que consiste en la versión más generalizada de la
palabra alemana tatbestand, con la que se alude a un conjunto de hechos dotándolos de una
significación unitaria. Aun cuando para algunos autores sea preferible el uso del término
“hecho” , “ encuadrabilidad” , “ subordinación” o “delito tipo” , en lugar de la tipicidad.
Para los italianos es el fattispecie o el fatto. El origen del concepto de tipo penal con su
actual contenido podemos situarlo a partir de Beling en la dogmática penal alemana, época
en la que dicho autor describe lo que antiguamente era el delito específico en la totalidad de
sus elementos (incluido el dolo y la culpa), a través de la tipicidad en sentido formal.
La práctica jurídico penal del siglo XVIII se había extendido de tal modo en el Poder
Judicial, que el juez podía castigar toda ilicitud culpable. Toda acción antijurídica y
culpable era ya por eso una acción punible. Contra esto dirigió sus ataques el liberalismo
naciente del siglo XVIII, afirmando la inseguridad jurídica que tal sistema importaba. A
falta de una firme delimitación de las acciones que pudieran considerarse punibles, el juez
podía someter a juicio a toda acción desagradable, prescindiendo de la antijuridicidad e
imponiendo arbitrariamente una pena grave o leve. En relación con este movimiento liberal,
la legislación posterior estrechó el concepto de acción antijurídica, en tal virtud fueron
recortados y extraídos determinados tipos delictivos. Para cada uno de tales tipos se previó
una pena concreta y determinada (función de legalidad); quedando como no punibles
ciertas formas de obrar antijurídicamente que no correspondían a ninguno de esos tipos. La
postura iniciada por Beling respecto del tipo, podemos escindirla en dos posiciones; la
primera no distingue entre tipo legal y tipo del delito, empleando ambos términos con
idéntica significación, por lo que el tipo era un concepto neutral, ajeno a toda valoración,
por lo que comprenderá sólo los elementos objetivos. La segunda deriva de la revisión de la
teoría en 1930, lo que le permitió distinguir entre el tipo rector o tipo legal y el tipo del
delito, que hasta entonces se empleaban como sinónimos, el motivo determinante fue
asegurar la necesaria congruencia entre el tipo del injusto y el tipo de culpabilidad, cuya
congruencia no se deducía con la necesidad lógica en su construcción de 1906, es indudable
que el carácter delictivo de una acción no podría afirmarse, sino, a condición de que el tipo
de culpabilidad fuera congruente con el tipo delictivo del injusto. A partir de tal
consideración, el tipo tiene subsistencia en la ley, siendo a un tiempo tipo del injusto y tipo
de culpabilidad, porque los tipos delictivos son tipos de conductas antijurídicas y culpables,
el tipo rector es una mera imagen conceptual que pertenece sólo a la esfera metódica, y si
bien se infiere del tipo de delito, no tiene existencia inmediata en la ley. Aquí vuelve a
insistir Beling en que el tipo rector es únicamente la imagen o reproducción conceptual de
un acontecimiento externo, sin tomar en cuenta para nada lo anímico del sujeto. Para él, el
tipo es objetivo y meramente descriptivo…”
DEFINICION
Según Dr. José Francisco De mata Vela; Héctor Aníbal De León Velasco”… Es la abstracta
descripción que el legislador hace de una conducta humana reprochable y punible”; lo cual
con todo respeto consideramos apartado dela técnica, por cuanto esto sería una definición
de lo que es tipo penal o tipo legal. Es muy importante saber diferenciar la tipicidad del
tipo, este se encuentra en las normas penales, mientras que aquella es la encuadrabilidad de
la conducta humana al molde abstracto que describe la ley (tipo legal, tipo penal o
simplemente tipo)…”
Según Dr. José Francisco De mata Vela; Héctor Aníbal De León Velasco”…Respecto a su
naturaleza, tradicionalmente se ha aceptado en toda la doctrina dominante que la tipicidad
es un elemento positivo del delito , y como tal es dominante, que la tipicidad es un
elemento positivo del delito, y como tal es obvio que su estudio se realice dentro de la
teoría general del delito, postura que fue totalmente indiscutible. Si admitimos que el tipo
es la razón de ser de la antijurídica, hemos de atribuirle un carácter delimitador y de
trascendental importancia en el Derecho Liberal, por no haber delito sin tipo legal (nullum
crimen sine lege, equivalente a nullum crimen sine tipo). Para Luis Jiménez de Asúa, la
tipicidad desempeña una función predominantemente descriptiva que singulariza su valor,
en el concierto de las características del delito y se relaciona con la antijurídica por
concretarla en el ámbito penal. La tipicidad no solo es pieza técnica. Es como secuela del
principio legista, garantía de libertad. Por lo anterior se concluye que la tipicidad describe
el delito para adecuarla en forma práctica a la Ley Penal, y así poder estar en aptitud de
encuadrarlo en las conductas antijurídicas sancionables en dicha ley y plasmadas por el
legislador, y en la que separa el tipo de la tipicidad…”
C) Una función garantizadora: Es una consecuencia del principio de legalidad. El tipo legal
permite al ciudadano un conocimiento seguro en cuanto al límite entre la conducta
sancionada y la atípica, cumpliendo así una función de garantía. De esta manera, el tipo
interviene en la limitación al poder penal. A la tipicidad se le ha encargado el cumplimiento
de una función trascendental para la preservación de la seguridad jurídica, proporcionando
al ciudadano de antemano un catálogo en el que se describen conductas amenazadas con
una sanción penal, obstaculizando el ejercicio arbitrario del poder penal.
TIPICIDAD Y TIPO
El tipo tiene en derecho penal una función triple; una función seleccionadora de los
comportamientos humanos penalmente relevantes, una función de garantía en la medida en
que solo los comportamientos subsumibles en el pueden ser sancionados penalmente y
una función Motivadora general, por cuanto la descripción de los comportamientos en el
tipo penal indica a los ciudadanos que comportamientos están prohibidos y se abstengan de
hacerlos. Por tipicidad se entiende la peculiaridad presentada por una conducta en razón de
su coincidencia o adecuación a las características imaginadas por el legislador y descritas
en el tipo penal. Tipicidad es adecuación típica de la conducta. La tipicidad es la resultante
afirmativa de un juicio de tipicidad. Puede ocurrir que la resultante de este juicio sea
negativa y por tanto no haya lugar a adecuación típica, pues la acción no encaja, no
coincide con los caracteres imaginados por el legislador en el tipo concreto, se dirá que
estamos frente a un evento de Atipicidad. La tipicidad puede ser plural, cuando con una
sola actuación se vulneran varias normas penales (violación e incesto) o puede ocurrir que
en un mismo acto despliegue varias conductas (hurta, mata y viola) o de manera reiterada
incurra en la misma conducta (todos los días hurta).
Si la relación se hace entre el tipo y la antijuridicidad decimos que estamos frente a un tipo
de injusto. La antijuridicidad es un juicio negativo de valor que recae sobre un
comportamiento humano y que es contrario a las exigencias del ordenamiento jurídico en
sentido unitario, pues lo que es antijurídico para una rama del derecho, lo es para todo el
ordenamiento jurídico total. Pero, no todo comportamiento antijurídico es penalmente
relevante, pues además deben ser típicos. Ahora bien, caso contrario, no por ser típico el
comportamiento necesariamente es antijurídico, es solo un indicio de que la conducta puede
ser antijurídica (función indiciaria del tipo) pues el comportamiento típico puede estar
justificado y por tanto no es antijurídico. Por ello se dice que las causas de justificación son
elementos negativos del tipo que hacen que la conducta sea irrelevante. Es aquí donde
radica la importancia de la tipicidad, es necesario hacer la adecuación tipo-conducta para
lograr la antijuridicidad, que de no darse, o de resultar un valoramiento negativo, nos deja
en presencia de una conducta antijurídica.