LIBRO Fundamentos de Fisioterapia
LIBRO Fundamentos de Fisioterapia
LIBRO Fundamentos de Fisioterapia
FUNDAMENTOS DE FISIOTERAPIA
Conceptos de Fisioterapia:
Concepto etimológico:
Phisis-------- Naturaleza
Therapeia----- Curación
Profesionales practicantes-masajistas
“El reconocimiento, la experiencia y madurez alcanzada por estas enseñanzas aconsejan su incorporación a la Universidad para ser impartidas
en Escuelas Universitarias, adaptándose de este modo, a las estructuras organizativas previstas en la Ley General de Educación.”
Amplitud de la Fisioterapia
Realizar una primera visita programada al paciente que le permita obtener una valoración funcional del mismo
Abrir una ficha fisioterapéutica a cada paciente en la que recoja, además de la valoración funcional, todos los aspectos relativos a la
aplicación de tratamientos y evolución del paciente
Tener a su cargo el control de ficheros y demás antecedentes para el buen orden y funcionamiento del servicio
Aplicar los métodos y técnicas fisioterápicas tendentes a conseguir los objetivos propuestos para cada caso clínico
Tratar a los pacientes, según su situación clínica, de manera individual o estableciendo grupos terapéuticos
Aconsejar y adiestrar a los pacientes y/o familias para la realización de actividades que, dentro del plan de fisioterapia, deba realizar
cada paciente en su domicilio, fomentando el compromiso de los usuarios y su entorno para lograr los objetivos fisioterápicos
marcados
En España, la A.E.F. establece el siguiente código ético, similar al de los colegios profesionales:
Los servicios de fisioterapia no se verán restringidos por razones de nacionalidad, raza, sexo, creencias, color, situación política o
social; y compartirá, junto con otros ciudadanos o miembros de diversas profesiones afines, la responsabilidad de hacer frente a las
necesidades del público relativas a la salud, participando en toda iniciativa estatal o voluntaria para subvenir a tales necesidades y
respetando siempre la personalidad de sus pacientes/clientes.
El fisioterapeuta ejercerá su profesión de acuerdo con la legalidad vigente, admitiendo su responsabilidad profesional. Realizará los
tratamientos y atenciones fisioterápicas con la máxima competencia. Los llevará a cabo, hasta conseguir el mayor grado posible de
recuperación biopsicosocial de sus pacientes/clientes o cubrir los objetivos de prevención y conservación de la salud.
El fisioterapeuta ha de cooperar lealmente no sólo con sus colegas de profesión sino también con los miembros de otras profesiones
implicadas en el proceso de la salud.
La información confidencial obtenida en el ejercicio profesional del fisioterapeuta no podrá ser difundida excepto a los profesionales
implicados en sus asistencia y a los que determina la legislación vigente.
El fisioterapeuta no ha de permitir que su nombre figure en anuncios de productos o cualquier otra forma de autopublicidad.
Equipo multidisciplinar.
Equipo interdisciplinar.
Equipo transdisciplinar.
BIBLIOGRAFIA
Alcántara S, Hernández MA, Ortega E, del Valle M. Fundamentos de Fisioterapia. Madrid: Síntesis; 1995.
American Physical Therapy Association. Guide to Physical Therapist Practice. Part 1: A description of patient/client management. Phys
Ther. 2001; 81: 27-39.
Muñoz E. La Fisioterapia. Fundamentos de la Fisioterapia. En: Igual C, Muñoz E, Aramburu C. Fisioterapia General. Cinesiterapia.
Madrid: Síntesis; 1996: 23-38.
Talavera A, Almazán G. Fisioterapia: La Salud en buenas manos. Madrid. Instituto Alcalá de Ciencias y Especialidades de la Salud.
2000.
“Vehículos de energía que pueden provocar modificaciones en células, tejidos y órganos y desencadenar una serie de efectos biológicos, base
de sus aplicaciones terapéuticas.”
BIBLIOGRAFIA
Alcántara S, Hernández MA, Ortega E, del Valle M. Fundamentos de Fisioterapia. Madrid: Síntesis; 1995.
American Physical Therapy Association. Guide to Physical Therapist Practice. Part 1: A description of patient/client management. Phys
Ther. 2001; 81: 27-39.
Muñoz E. La Fisioterapia. Fundamentos de la Fisioterapia. En: Igual C, Muñoz E, Aramburu C. Fisioterapia General. Cinesiterapia.
Madrid: Síntesis; 1996: 23-38.
Talavera A, Almazán G. Fisioterapia: La Salud en buenas manos. Madrid. Instituto Alcalá de Ciencias y Especialidades de la Salud.
2000.
BARRAS PARALELAS
BANCO DE CUADRICEP
MASOTERAPIA
ULTRASONIDOS
TERMOTERAPIA
CRIOTERAPIA
HIDROTERAPIA
TALASOTERAPIA
HELIOTERAPIA
FOTOTERAPIA
Sin entrar en la polémica de establecer un Diagnóstico en Fisioterapia o recibir la denominación de evaluación Fisioterápica, sí podemos afirmar
que su primer objetivo es la Identificación y Cuantificación de los signos y síntomas que presenta el paciente.
La Identificación y Cuantificación de signos y síntomas, va a establecer un determinado grado de actividad y participación del paciente,
situación esta que nos va a permitir diseñar el tratamiento fisioterápico más adecuado.
BIBLIOGRAFIA
American Physical Therapy Association. Guide to Physical Therapist Practice. Part. 2: Tests and measures. Phys Ther. 2001; 81: 41-95.
Argimón JMª, Jiménez J. Medición de variables. En: Argimon JMª, Jiménez J. Métodos de investigación clínica y epidemiológica. Madrid:
Harcourt; 2005: 137-146.
Chartered Society of Physiotherapy. Standards for administering tests and taking measurements. London: CSP; 1994.
Confederación Mundial para la Fisioterapia-Región Europea. Estándares de práctica profesional. Documento policopiado; 2002.
Jones M, Butler D. Razonamiento clínico. En: Butler D. Movilización del sistema nervioso. Barcelona: Paidotribo; 2002: 95-107.
Petty NJ, Moore AP. Exploración física. En: Petty NJ, Moore AP. Exploración y evaluación neuromusculoesquelética: un manual para
terapeutas. 2ª edic. Madrid: McGraw Hill; 2003: 35-112.
Vernon H. Cuestionarios de dolor e incapacidad en la rehabilitación quiropráctica. En: Liebenson C. Manual de rehabilitación de la
columna vertebral. Barcelona: Paidotribo; 1999: 83-99.
Vernon H, Hagino C. Attributes to look for in outcome measures. En: Yeomans S. The clinical application of outcomes assessment.
Connecticut: Appleton & Lange; 2000: 15-22.
Viel E. Diagnóstico fisioterápico. Barcelona: Masson; 1999.
La estática y dinámica humanas acostumbran a definirse desde un posición concreta. Una de las más habituales es la posición anatómica:
"Individuo de pie, frente a nosotros, con los miembros inferiores juntos, mientras que los superiores cuelgan a los lados del cuerpo y las
palmas de las manos se orientan hacia el observador."
Ver ejemplo
Unidad Didáctica 1:
TEMA 1,
TEMA 2
Unidad Didáctica 2:
TEMA 3,
TEMAS 4 y 5,
TEMA 6,
TEMA 7,
TEMA 8,
TEMA 9,
TEMA 10,
TEMA 11,
TEMA 12,
TEMA 13,
TEMA 14,
TEMA 15
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La estática y dinámica humanas acostumbran a definirse desde un posición concreta. Una de las más habituales es la posición anatómica:
"Individuo de pie, frente a nosotros, con los miembros inferiores juntos, mientras que los superiores cuelgan a los lados del cuerpo y las
palmas de las manos se orientan hacia el observador."
Ver ejemplo
Centro de gravedad.
Punto donde todo el peso del cuerpo está concentrado, o, dicho en otros términos, el punto de aplicación de su peso.
Línea de gravedad.
Planos de referencia.
Son superficies reales o imaginarias sobre los que se realiza el movimiento y que sirven para posteriormente realizar el balance articular.
Plano sagital o anteroposterior: Es una plano trazado verticalmente de adelante a atrás. Divide al cuerpo en una mitad derecha y
otra izquierda. Los planos paralelos a este son los planos parasagitales. Ver ejemplo
Plano coronal o frontal: Siendo vertical lleva una dirección de lado a lado (derecha a izquierda). Divide al cuerpo en parte anterior y
posterior. Ver ejemplo
Plano transversal: Siendo horizontal divide al cuerpo en dos partes, superior o craneal e inferior o caudal. Ver ejemplo
Ejes de referencia: son líneas reales o imaginarias alrededor de las cuales se realiza el movimiento. Los ejes son perpendiculares entre sí y
cada uno perpendicular al plano de deslizamiento al que corresponden.
Eje derecha-izquierda: lleva una dirección horizontal de lado (derecha) a lado (izquierda). A través de este eje se realizan los
movimientos del plano sagital (flexión y extensión). Ver ejemplo
Eje longitudinal o vertical: es el único con dirección vertical. A través de él se realizan los movimientos en el plano transversal
(rotaciones). Ver ejemplo
Flexión o antepulsión: es el movimiento que se realiza lanzando la parte móvil de la articulación en dirección anterior a excepción de la
rodilla, el tobillo y los dedos del pie. Ver ejemplo
Extensión o retropulsión: es el movimiento en sentido opuesto a la flexión. Ver ejemplo
Abducción o separación: es el movimiento que aleja el segmento del plano sagital del cuerpo. En la muñeca este movimiento recibe
también el nombre de inclinación radial. Ver ejemplo
Aducción o aproximación: es el movimiento que acerca el segmento del plano sagital del cuerpo. En la muñeca este movimiento recibe
también el nombre de inclinación cubital. Ver ejemplo
Rotación interna: Es el movimiento de giro alrededor del eje longitudinal en el que la cara anterior mira hacia el plano sagital medio.
En el antebrazo, la rotación interna se denomina pronación. Ver ejemplo
Rotación externa: es el movimiento de giro alrededor del eje longitudinal en el que la cara anterior se aleja del plano sagital medio. En
el antebrazo, la rotación externa se denomina supinación. Ver ejemplo
Movimientos articulares
Cada articulación presenta unos grados de libertad de movimiento, determinados por la anatomía, existiendo así:
Particularidades:
Circunducción: movimiento complejo, obtenido por la combinación de flexión, extensión, abducción y aducción. El recorrido del
movimiento es un cono de base distal y eje en la articulación.
Cinemática del tobillo: en la articulación del tobillo, producto de la caída y apoyo de la planta del pie se produce un cambio de ejes y
planos y, por tanto, de movimientos.
Como apuntamos al comienzo del capítulo, existen varias posturas, pero las principales son:
Decúbito supino o dorsal: donde la cara dorsal se encuentra sobre el plano de sustentación. Ver ejemplo
Decúbito supino o dorsal: donde la cara dorsal se encuentra sobre el plano de sustentación. Ver ejemplo
Decúbito prono o ventral: donde la cara ventral se encuentra sobre el plano de sustentación. Ver ejemplo
Decúbito lateral: donde la cara lateral del cuerpo se encuentra sobre el plano se sustentación. Si es la cara izquierda, estaremos ante
el decúbito lateral izquierdo, y si es la derecha, ante el decúbito lateral derecho. Ver ejemplo
Nota: sin ser contenidos específicos de esta asignatura es conveniente recordar la nomenclatura anatómica, así como la división
corporal en partes y segmentos.
BIBLIOGRAFIA
Buckup K. Pruebas clínicas para patología ósea, articular y muscular. Exploraciones, signos y síntomas. 2ª edic. Barcelona: Masson;
2002.
Busquet L. Las cadenas musculares Vol. I. Barcelona: Paidotribo; 2001.
Flórez M. Escalas de valoración funcional. Aplicaciones, características y criterios de selección. Rehabilitación. 1994; 28: 373-376.
Hoppenfeld S. Exploración física de la columna vertebral y las extremidades. 17ª edic. México: El Manual Moderno SA; 2000.
Magee D. Valoración de la postura. En: Magee D. Ortopedia. México: Interamericana-McGraw Hill; 1994: 575-604.
Ricard F, Salle JL. Tratado de osteopatía. Madrid: Mandala; 1995.
Chaitow L. Capacidad de palpación objetiva. En: Chaitow L. Terapia manual. Valoración y diagnóstico. Madrid: McGraw-Hill
Interamericana; 2000: 3-10.
Chavanel R, Janin B, Allamargot T, Bedel Y, Maratrat R. Principios de la Kinesiterapia activa. Encicl Méd Quir (Elsevier-París),
Kinesiterapia-Medicina Física-Readaptación, 26-045-A-10; 2002, 16p.
Genot C, y cols. Kinesiterapia Pasiva y Activa. En: Genot C, Neiger H, Leroy A, Peirron G, Dufour G, Peninou B. Kinesiterapia. Buenos
Aires: Panamericana; 1996: 49-131.
Hoppenfeld S. Exploración física de la columna vertebral y las extremidades. 17ª edic. México: El Manual Moderno SA; 2000.
Peterson F, Kendall E, Geise P. Movimientos articulares. En: Peterson F, Kendall E, Geise P. Músculos. Pruebas, funciones y dolor
postural. Madrid: Marban; 2000: 9-26.
Actualmente, y contando con las limitaciones en cuanto a su fiabilidad y validez, el método goniométrico es ampliamente aceptado, por su fácil
manejo y descripción de sus hallazgos.
La medición de los ángulos se realiza con goniómetros. Existen varios tipos de goniómetros aplicables en función de la anatomía de las
articulaciones a evaluar y de los movimientos que estamos midiendo.
Entre los más empleados se encuentran: brujula, ramas largas, universal, digital, ...
Para realizar una valoración articular en general, y particularmente, una goniométrica, necesitamos ciertas premisas:
1. Conocer las posibilidades normales de cada articulación en los tres planos del espacio, para lo que es necesario conocer de
qué depende esa amplitud.
Otros determinantes
C o l o c . E j e G r a d o s
A r t i c u l a c i ó n M o v i m i e n t o P l a n o E j e
G o n i o m . M e d i d a
HOMBRO Flexión Sagital Derecha- Cara lateral art hombro 40º
Extensión izquierda 160º-180º
Separación 180º
Frontal Antero-posterior Cara anterior art hombro
Aproximación 20º-40º
Rotación Interna 70º
Transversal Axial Cara posterior codo
Rotación Externa 70º
Separación en 90º de flexión 40º-50º
Transversal Axial Cara superior hombro
Aproximación en 90º de flexión 135º
Antepulsión: hombro adelante 25º-30º
Retropulsión: hombro atrás 25º-30º
Elevacion de escápula 8 cm
Rotacion de escápula 45º-50º
Flexión Derecha- 150º
CODO Sagital Cara lateral art codo
Extensión izquierda 10º
Pronación 85º-90º
ANTEBRAZO Transversal Axial
Supinación 85º-90º
Flexión Derecha- 60º-80º
Frontal Cara lateral art muñeca
Extensión izquierda 60º-90º
MUÑECA
Inclinación Radial 25º-30
Sagital Antero-posterior Cara dorsal art muñeca
Inclinación Cubital 30º-40º
Flexión 90º
Frontal Antero-posterior Cara lateral art MCF 2º codo
Extensión 10º-30º
MCF
Aproximación Derecha- 10º-15º
Sagital Cara dorsal eje cada dedo
Separación izquierda 10º-15º
DEDOS
Flexión Cara lateral 1ª art IF cada 100º
IFP Frontal Antero-posterior
Extensión dedo 0º
Flexión Cara lateral 2ª art IF cada 90º
IFD Frontal Antero-posterior
Extensión dedo 0º
Aproximación 0º
Trap-MC Separación 70º
Oposición
PULGAR Flexión 90º
MCF Frontal Antero-posterior Cara lateral art MCF
Extensión 10º-30º
Flexión 100º
IF Frontal Antero-posterior Cara lateral art IF
Extensión 0º
C o l o c . E j e G r a d o s
A r t i c u l a c i ó n M o v i m i e n t o P l a n o E j e
G o n i o m . M e d i d a
Flexión Derecha- 130º-140º
Sagital Cara lateral art cadera
Extensión izquierda 0º
Separación 30º-45º
CADERA Frontal Antero-posterior Cara anterior art cadera
Aproximación 20º-30º
Rotación Interna Axial 40º-50º
Transversal Cara anterior art rodilla
Rotación Externa (Rodilla flex 90º) 30º-40º
Flexión Derecha- 120º-150º
RODILLA Sagital Cara lateral art rodilla
Extensión izquierda 5º-10º
Flexión Plantar Derecha- 40º-50º
Sagital Cara lateral art tobillo
Flexión Dorsal izquierda 20º-30º
TOBILLO
Inversión 25º-30
Sagital Antero-posterior Cara dorsal art muñeca
Eversión 30º-40º
C o l o c . E j e G r a d o s
A r t i c u l a c i ó n M o v i m i e n t o P l a n o E j e
G o n i o m . M e d i d a
Flexión Derecha- 35º-45º
Sagital Apofisis
Extensión izquierda 35º-45º
Rotación Derecha 60º-80º
CERVICAL Transversal Axial Parte superior cabeza
Rotación Izquierda 60º-80º
Inclinación lateral derecha 45º
Frontal Antero-posterior Parte posterior del cuello
Inclinación lateral izquierda 45º
Flexión Derecha- 120º-140º
Sagital
Extensión izquierda 30º
Rotación Derecha 30º
Transversal Axial Parte superior cabeza
DORSO-LUMBAR Rotación Izquierda 30º
Inversión 30º-40º
Frontal Antero-posterior
Eversión 30º-40º
Distancia dedos suelo 10-20 cm
C o l o c . E j e G r a d o s
A r t i c u l a c i ó n M o v i m i e n t o P l a n o E j e
G o n i o m . M e d i d a
TORAX Inspiración 3-6 cm
Subaxilar
Espiración
Xifoides Inspiración
Espiración
Inspiración
ABDOMEN Ombligo
Espiración
A C C I Ó N M Ú S C U L O N E R V I O
Abducción Deltoides medio Circunflejo (C5-C6)
de 0º a 90º Supraespinoso Supraescapular C5)
Raquis
de 120º a 180º
A C C I Ó N M Ú S C U L O N E R V I O
de la muñeca
A C C I Ó N M Ú S C U L O N E R V I O
A C C I Ó N M Ú S C U L O N E R V I O
Esta medición en ningún caso aporta información relevante sobre el estado funcional del segmento explorado y puede hacer a través de
múltiples metodologías, como son las de tipo centimétrico, goniométricas, electrónicas,…
Actualmente, y contando con las limitaciones en cuanto a su fiabilidad y validez, el método goniométrico es ampliamente aceptado, por su fácil
manejo y descripción de sus hallazgos.
La medición de los ángulos se realiza con goniómetros. Existen varios tipos de goniómetros aplicables en función de la anatomía de las
articulaciones a evaluar y de los movimientos que estamos midiendo.
Entre los más empleados se encuentran: brujula, ramas largas, universal, digital, ...
Para realizar una valoración articular en general, y particularmente, una goniométrica, necesitamos ciertas premisas:
1. Conocer las posibilidades normales de cada articulación en los tres planos del espacio, para lo que es necesario conocer de
qué depende esa amplitud.
Otros determinantes
La necesidad de un lenguaje común a todos los exploradores, es vital con el fin de que podamos entendernos. Para que esto ocurra, la
secuencia de medición deber ser común a todos los exploradores, tal y como se recoge a continuación:
Instrumentos de medida
Goniómetros Goniometro
Goniometro
Espejo
Lectura del goniómetro a la altura del mismo: medida del recorrido articular
En articulaciones pares, y debido a las variaciones anatómicas y fisiológicas individuales, debe realizarse una comparación contralateral
Examen analítico y global
De igual forma, es importante transcribir lo medido de manera uniforme. Existes varios sistemas de notación dependientes de las diferentes
tradiciones de la Medicina Física y de Rehabilitación. Dos de los más extendidos son:
La notación standard: en la que para cada grado de libertad de movimiento (recordemos que cada grado de libertad corresponde a
la movilidad en un plano básico de movimiento, y por tanto a un rango o recorrido formado a expensas de dos movimientos).
Con este sistema, a cada grado de libertad le corresponden dos dígitos. En cada articulación o complejo articular, los datos de los diferentes
movimientos se anotan en la siguiente secuencia:
1. Extensión / Flexión.
2. Aproximación / Separación.
3. Rotación interna / Rotación externa.
La notación de referencia 0: que trata de eliminar los valores negativos y añade un tercer dígito a cada uno de los grados de
libertad de movimiento. Este tercer dígito es la posición de partida de la medición de cada uno de los movimientos, de manera que en
condiciones normales, esta posición es la anatómica, representada con el valor 0, de donde recibe el nombre.
Múltiples son los factores que van a influir en la objetividad de la medición articular. Todas ellas deben ser controladas con la mayor atención
posible para no cometer sesgos de medida.
BIBLIOGRAFIA
Daza J. Test de movilidad articular y examen muscular de las extremidades. Bogotá: Panamericana; 1995.
Lynn M, Epler ME. Principios de las técnicas de examen. En: Lynn M, Epler ME. Fundamentos de las técnicas de valoración
musculoesquelética. Barcelona: Paidotribo; 2002: 11-46.
Norkin C, White J. Measurement of joint motion. 3ª edic. Philadelphia: FA. Davis Company; 2003.
Viel E, Danowski G, Blanc Y, Chanussot JC. Exploraciones articulares goniométricas y clínicas. Generalidades. En: Encicl Méd Quir
(Elsevier-París), Kinesiterapia-Medicina Física-Readaptación, 26-008-A-10; 2001, 18p.
Concepto:
Tipos:
Analítico:
Global:
Existen diferentes conceptos que, aunque serán estudiados más adelante en esta misma asignatura, es necesario introducir escuetamente en
este punto:
Axioma de Beevor: el sistema nervioso central (S.N.C.) no entiende de acciones musculares individuales, sino de movimientos. Este
hecho dificulta la evaluación analítica, pues el individuo, la mayoría de las veces inconscientemente, tratará de compensar el trabajo de
un músculo deficitario con otros músculos que se encuentren íntegros o en mejor estado.
Para la consecución perfecta del movimiento, es necesaria la integridad del nervio, músculo y articulación.
Tono muscular: es la contracción muscular de reposo. El músculo en reposo presenta una actividad contráctil determinada
(normotonía), necesaria para la realización de la contracción de manera correcta. El aumento patológico del tono se denomina
hipertonía, uno de cuyos tipos más importantes es la espasticidad, y su disminución hipotonía.
Desaxación: pérdida del eje normal de un movimiento.
Movimiento vicariante: movimiento alterado que trata de compensar la pérdida o el déficit del movimiento fisiológico.
ISOCINETICO
BANCO DE CUADRICEP
En nuestro caso y por ser uno de los más extendidos en la actualidad, ya que no precisa de aparataje alguno, resultando fácil de medir y
comparar, estudiaremos el balance muscular analítico de carácter manual, conocido como escala de Lovett a la que Kendall le añadió el factor
de la fatiga también como determinante.
Las condiciones necesarias para mantener la objetividad de cada medición son las siguientes:
Explorador: igual que ocurría con el balance articular, si la exploración se realiza por el mismo individuo, la variabilidad intraindividual
se ve disminuida.
Conocimiento anatómico: con el que identificar los músculos que estamos evaluando y la localización de la resistencia manual que
opondremos al movimiento en determinadas ocasiones.
Órdenes precisas: los estímulos verbales correctos son esenciales para un balance muscular correcto. Debe explicarse al paciente
qué queremos de él y estimularle a que lo haga de la mejor manera posible.
Movimiento puro: el movimiento que solicitamos del paciente debe seguir el plano indicado, evitando cambios de eje y
compensaciones con otros segmentos y estructuras.
Presencia de alteraciones: desaxaciones, aparición de movimientos compensatorios o vicariantes, espasticidad,…
Con estas condiciones se establece una gradación, es decir, una escala de medida:
5 – Normal (N). El efecto motor se realiza en toda su amplitud, venciendo gravedad y resistencia extrena sin presentar síntomas de fatiga
(haciendo más de 10 repeticiones).
4 – Bueno (B). Efecto motor completo contra gravedad y resistencia externa, apareciendo en ocasiones fatiga.
3 – Regular (R). Efecto motor completo venciendo tan sólo la resistencia de la gravedad.
2 – Malo (M). Efecto motor completo en ausencia de la resistencia que ofrece la fuerza de la gravedad.
1 – Vestigios (E). No hay efecto motor, aunque sí contracción perfectible, bien sea manual o visualmente.
Resistencia: fuerza que actúa en sentido opuesto al movimiento que genera la contracción muscular. La aplicación de la resistencia se
realiza en la región distal del segmento corporal donde se inserta el músculo explorado.
La aplicación de la resistencia se aumenta de manera gradual y puede aplicarse a lo largo del recorrido articular o como test de
ruptura, es decir, tratando de deshacer el movimiento conseguido por el músculo explorado. Ver ejemplo
RESISTENCIA A LA FLEXION
RESISTENCIA A LA EXTENCION
Línea de fuerza: sentido del movimiento generado por la contracción muscular . Ver ejemplo
LINEA DE FUERZA
Amplitud disponible: arco de movimiento que son capaces de recorrer las palancas óseas por la acción de la contracción muscular.
Este concepto explica la necesidad de realizar el balance muscular posteriormente al balance articular, ya que éste nos va a permitir
conocer en qué rango de movimiento realizar el balance muscular analítico.
La secuencia de exploración debe comenzar en la exploración del grado 3 (movimiento completo en presencia de la gravedad) para en función
de su consecuencia, ascender o descender en la escala de gradación.
Es necesario darnos cuenta de que los grados en los que se aplica resistencia manual (grados 4 y 5) son grados subjetivos, mientras los
grados 0, 1, 2 y 3 son objetivos, pues no interviene agente externo capaz de modificar el resultado final.
Asimismo, y debido a que las distancias entre grados no son uniformes, se hace necesario afinar la gradación con valores + ó – en función de
que el grado en que se encuentra cada músculo sea conseguido con facilidad o no haya llegado a realizarse de manera completa. Los más
utilizados son los valores 2+ y 3- en función de los casos.
Finalmente, no podemos olvidar que a este examen analítico debemos sumar otras exploraciones, como son la observación del estado trófico,
capacidad de relajación, fatiga, palpación de la contracción, estiramiento muscular y la consecución de los diferentes tipos de contracción
(automática, voluntaria o refleja).
BIBLIOGRAFIA
Alcántara S, Hernández MA, Ortega E, del Valle M. Fundamentos de Fisioterapia. Madrid: Síntesis; 1995.
American Physical Therapy Association. Guide to Physical Therapist Practice. Part 1: A description of patient/client management. Phys
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Igual C, Muñoz E, Aramburu C. Fisioterapia General. Cinesiterapia. Madrid: Síntesis; 1996.
Talavera A, Almazán G. Fisioterapia: La Salud en buenas manos. Madrid. Instituto Alcalá de Ciencias y Especialidades de la Salud.
2000.
Como hemos comentado en el tema anterior, es complicado observar que un solo músculo sea capaz de realizar una función. La existencia de
diferentes funciones en cada movimiento (agonistas, antagonistas, sinergistas, estabilizadores,…) así como la existencia de músculos que
realizan diferentes funciones, obligan a realizar un examen global de los músculos.
Cadena cinética muscular es el conjunto de músculos, tanto mono como poliarticulares, responsables de la movilidad de los diferentes
eslabones óseas de las articulaciones.
La realización de cada gesto exige el trabajo organizado de varias cadenas cinéticas, cada una de ellas con una función determinada.
Como vemos el concepto de cadena cinética muscular es un concepto funcional y, por tanto, diferente al de cadena muscular, puramente
anatómico, y que se refiere a la disposición en continuidad de unidades miotendinosas (a modo de eslabones) a lo largo del cuerpo humano.
Cadena cinética abierta: El extremo distal de la cadena es libre (dar una patada) :
Ver ejemplo
CADENA CINETICA ABIERTA
Cadena cinética cerrada: El extremo distal de la cadena permanece fijo, y el proximal es el que va a realizar el desplazamiento con
el movimiento (dominadas en barra):
Ver ejemplo
CADENACINETICA CERRADA
Cadena cinética frenada: Ambos extremos de la cadena, proximal y distal son móviles (ciclista de pie sobre la bicicleta).
Abierta Cerrada
Función Pendular y Oscilar Apoyo
Reaciones Sensitivas No transmite Si transmite
Acción Muscular Origen e Inserción anatómica Plurilocalizada
Gravedad Contra y Por gravedad Extensión-estabilización
Movimiento Sólo una parte del cuerpo Influencia cinética en todo el cuerpo
Debido a la organización funcional en conjunto, la acción de los músculos débiles puede verse reforzada por la acción de los músculos fuertes
de la misma cadena cinética, pasando así las cadenas cinéticas a ser cadena cinéticas facilitadoras o de refuerzo, sean éstas abiertas, cerradas
o frenadas. Este concepto será de gran utilidad en la terapia de las cadenas.
Esta clasificación sólo tiene sentido si admitimos la existencia de dos tipos de músculo (independientemente de la clasificación agonista,
antagonista,…):
Músculos gatillo: aquellos a los que se le solicita la contracción en los primeros eslabones de la cadena.
Músculos diana: aquellos músculos que pretendemos que se contraigan por irradiación del trabajo de los gatillo a los eslabones más
alejados del origen de la cadena.
BIBLIOGRAFIA
Buckup K. Pruebas clínicas para patología ósea, articular y muscular. Exploraciones, signos y síntomas. 2ª edic. Barcelona: Masson;
2002.
Busquet L. Las cadenas musculares Vol. I. Barcelona: Paidotribo; 2001.
Denys-Struyf G. El manual del Mezierista. Tomo I. Barcelona: Paidotribo; 2000.
Denys-Struyf G. El manual del Mezierista. Tomo II. Barcelona: Paidotribo; 2000.
Neiger H. Estiramientos musculares analíticos manuales. Madrid: Panamericana; 1997.
Genot y cols. Kinesioterapia . Madrid. Panamericana. 1988.
Uno de las características inherentes a la raza humana es la posibilidad de desplazamiento sobre tan sólo dos extremidades de manera
prolongada en el tiempo. A pesar de que un análisis del ciclo de la marcha podrías ser objeto de una sola asignatura, trataremos de,
basándonos en conceptos sencillos, realizar una aproximación de su fisiología a través de un recorrido por la cinemática de los movimientos
(ya que un análisis cinético requiere mayor tiempo y dedicación) para finalmente abordar diferentes estados y variaciones de carácter
patológico.
Los conceptos de marcha son múltiples en función del interés de quien los emite. Entre los más empleados se encuentran los siguientes:
Serie de movimientos alternantes y rítmicos de las extremidades y del tronco, que determinan un desplazamiento hacia delante del
centro de gravedad con un mínimo gasto de energía.
Movimientos periódicos en el que el segmento inferior se puede decir que parte de cero, pasando por un arco de movimiento, con una
caída de cero al final de cada paso.
Ciclo de la marcha:
Sucesión de acciones comprendidas entre dos choques de talón consecutivos del mismo pie.
Suele tomarse como principio del ciclo el instante en que uno de los pies toma contacto con el suelo, habitualmente a través del talón.
Fase de apoyo (60% del tiempo de cada ciclo): que comienza con el contacto inicial del talón con el suelo y finaliza con el
despegue del antepié.
Fase de balanceo u oscilación (40% del tiempo de cada ciclo): transcurre desde el instante del despegue del antepié, avanzando
el pie en el aire como preparación del siguiente apoyo, hasta el contacto en el suelo.
Si tenemos en cuenta la duración de cada una de las fases, podremos darnos cuenta, que sumando los ciclos que se están produciendo de
manera simultánea en ambos miembros inferiores, en algún momento ambos pies se encuentran en contacto con el suelo. A este nuevo
periodo se le denomina fase de doble apoyo.
Tomado de Igual C, Muñoz E, Aramburu C. Fisioterapia General – Cinesiterapia. Ed. Síntesis. 1996
Dentro de los múltiples aspectos que atañen a la marcha vamos a abordar aquellos que nos pueden ayudar a entender un análisis cinemático
posterior así como entender ciertos patrones patológicos.
Centro de gravedad: Se consigue un mínimo gasto de energía cuando el cuerpo se mueve en línea recta sin que el centro de gravedad se
desvíe.
En este sentido, cuanto mayor sea el desplazamiento del centro de gravedad, mayor será el gasto de energía, por lo que gran parte de la
dinámica de la marcha se supedita a este concepto, que permite repetir el ciclo de la marcha durante largos periodos sin excesivo esfuerzo.
Los desplazamientos del centro de gravedad durante la marcha son dos:
Tomado de Hoppenfeld.
En la marcha, existen una serie de determinantes que permiten realizar los movimientos de manera fisiológica y que, tras sufrir determinadas
alteraciones, generarán patrones patológicos.
Rotación pélvica: En el ciclo de la marcha, la pelvis realiza movimientos relevantes en, al menos, dos direcciones. Por un lado, el
miembro inferior que se adelanta, no sólo lo hace a expensas de una flexión de cadera, sino también por el adelantamiento de la
hemipelvis homolateral, que ayuda al avance de dicho miembro inferior. De igual forma, el miembro inferior que se encuentra
posterior, no sólo presenta una extensión de la cadera, sino na desplazamiento posterior de la misma hemipelvis.
La suma de ambos movimientos lo denominamos rotación pélvica.
Inclinación pélvica: de la misma manera que antes, la hemipelvis del lado que se encuentra en la fase de balanceo, sufre una caída
o descenso respecto a la contralateral. Esta caída debe encontrarse en unos patrones determinados, pues si fuese exagerada podría
considerarse patológica.
Flexión de la rodilla durante la fase de apoyo: a pesar de que se mantiene un estado flexo de 10-20º, permite la minimización del
desplazamiento del centro de gravedad en sentido vertical.
Ancho de la base de sustentación: identificado con la anchura del paso que analizaremos en la práctica del presente tema, tiene la
cualidad de que, cuanto menor sea su dimensión, menor el desplazamiento del centro de gravedad en sentido lateral (menor gasto
energético) y menor estabilidad.
De igual manera, cuanto mayor sea el ancho de la base de sustentación, mayor será el desplazamiento del centro de gravedad (mayor
gasto energético) y mayor estabilidad.
Rotación recíproca de la cintura escapular: la coordinación de cintura escapular y cintura pélvica durante la marcha se produce a
través de una rotación alternante. Este hecho, tal y como indica la figura permite conservar energía potencial que facilite el siguiente
paso.
Marcha en condiciones especiales:
Fisiológicas:
Marcha en el niño: la marcha en el niño, hasta que su ontogénesis permita la normalización adulta de la misma, se caracteriza por:
Ver ejemplos
Marcha en el anciano: curiosamente, algunas de las características de la marcha en el anciano, aun siendo ésta muy variables, son
compartidas por la marcha en el niño. Algunas características son las siguientes:
Ver ejemplos
Patológicos: seguiremos una clasificación etiológica de las modificaciones patológicas de la marcha en la que, en lugar de determinar las
compensaciones y adaptaciones, serán solamente sugeridas para desarrollarse en el trabajo individual del alumno.
Discrepancia de longitud de los MM.II.: toda dismetría obliga al miembro inferior corta a alargarse, al largo a acortarse o a ambas
circunstancias simultáneamente.
Anquilosis o limitación del rango articular: la cinemática articular en la marcha, como en cualquier movimiento complejo sigue el
precepto de que cualquier hipomovilidad, ha de ser compensada por las articulaciones próximas.
Inestabilidad articular: en función del grado, puede llegar a imposibilitar la marcha, o simplemente exigir un trabajo extra a la
musculatura, para realizar un trabajo que cápsula y ligamentos no realizan.
Marcha antálgica: el dolor inhibe la participación del elemento generador del mismo, sea éste tejido contráctil o no.
Ver ejemplos
Marcha patológica secundaria a lesiones del S.N.C.:
Marcha hemipléjica: desarrollada a través de la marcha de segador o los signos del empujador o del tirador.´
Marcha espástica: cuya entidad clínica más representativa es la diplejia espástica.
Marcha atáxica: la incoordinación exige un trabajo extra a todos los elementos involucrados en la misma, llegando a imposibilitar la
marcha.
Marcha parkinsoniana: la enfermedad de Parkinson caracteriza por rigidez, temblor y acinesia determina una marcha lenta, insegura,
de pasos cortos, muy característica.
Espasticidad + ataxia: que genera un patrón típico y frecuente, de grandes desplazamientos del centro de gravedad, denominada
marcha danzante.
Marcha patológica secundaria a lesiones del S.N.P.: caracterizada por parálisis o paresia de músculos concretos por lesión de sus
nervios o troncos nerviosos:
Parálisis de los extensores de cadera: a pesar de que en la marcha fisiológica el glúteo mayor no debe participar, esta limitación
determina pasos cortos y una fase de apoyo más corta e insegura.
Parálisis del glúteo medio: que por sí sola genera el signo y la marcha de Trendelembur.
Parálisis del cuádriceps: provoca una extensión de rodilla por inercia de movimiento a modo de marcha de militar.
Parálisis de los isquiotibiales: que condiciona la flexión de rodilla.
Parálisis de los dorsiflexores del pie: que determina el equinismo del pie y por tanto la marcha equina.
Parálisis del tríceps sural: el cual además de estabilizar la articulación del tobillo, es indispensable para la parte final de la fase de
apoyo, favoreciendo el avance y la amplitud de los pasos.
Ver ejemplos
TEMA 10: Evaluación y análisis de la dinámica vertebral
A pesar de que algunos de los temas ya han abordado la columna vertebral, en éste haremos algunas referencias más de carácter específico,
así como incluiremos el análisis de la articulación temporo-mandibular (ATM).
A T M : la articulación temporo-mandibular presenta una biomecánica compleja de la cual estudiaremos las referencias más evidentes,
siempre de carácter bilateral (ambas ATM funcionan necesariamente al unísono).
La apertura de la boca en ausencia de fuerzas externas se produce de manera pasiva. Ahora bien, si es preciso, los pterigoideos externos, así
como los músculos suprahioideos son capaces de ayudar a dicha apertura.
El cierre, siempre de carácter activo, depende de una gran variedad de músculos (pterogoideos extenos e internos, maseteros, temporales,
etc) cuyas sinergias y secuencias de contracción son esenciales para el correcto funcionamiento de la mandíbula y sus relaciones.
Los movimientos fundamentales de las ATM deben ser estudiados tanto activa como pasivamente, y son los siguientes:
Apertura: ambos cóndilos mandibulares descienden y avanzan al mismo tiempo acompañados de los meniscos articulares.
Cierre: movimiento contrario al precedente, en el cual los cóndilos regresan a su posición original.
Diducciones: izquierda o derecha en función del lado al que se dirige el mentón. La cinemática consiste en la rotación del cóndilo de
una de las ATM, mientras el contralateral se desplaza anteriormente.
Protusión o protracción: que consiste en adelantar el mentón, para lo que es necesario desplazar ambos cóndilo anteriormente de
manera similar a la apertura.
Retracción o retrusión: no es otro que el movimiento contrario al precedente, donde los cóndilos vuelven a su posición. En ocasiones
desde la posición de reposo existe cierto desplazamiento postero-superior de los cóndilos, que ha de ser tenida en cuenta y manejada
con precaución, pues puede lesionar el menisco intraarticular si la presión generada es excesiva.
Ver ejemplos
Protrusión Retrusión
Columna c e r v i c a l : el balance articular, la determinación de las flechas sagitales,… constituirá una parte de la evaluación de
este segmento donde, como vemos, se combinan análisis estáticos y dinámicos.
Asimismo deberemos de realizar una identificación y seguimiento de las apófisis espinosas, así como una exploración del esclerotoma
(palpación perióstica) de los diferentes segmentos vertebrales.
Respecto a la movilidad:
Uno de los registros más frecuentes en la columna es la descripción de la estrella de Maigne, que nos permite identificar la limitación de
movimiento para indicar si la limitación articular se encuentra al inicio, a la mitad o al final del recorrido y si ést es o no dolorosa.
Una sola línea indica limitación dolorosa al final del movimiento, dos líneas limitación dolorosa mayor desde la mitad del recorrido, mientras
tres líneas indican una limitación importante y dolorosa del recorrido desde el inicio del movimiento. Asimismo, la inclusión de una X en cada
movimiento indica la limitación de movimiento franca y sin dolor.
Columna t o r á c i c a : el balance articular, la determinación de las flechas sagitales,… constituirá una parte de la evaluación de
este segmento donde, como vemos, se combinan análisis estáticos y dinámicos.
Asimismo deberemos de realizar una identificación y seguimiento de las apófisis espinosas, así como una exploración del esclerotoma
(palpación perióstica) de los diferentes segmentos vertebrales. En este caso, esta evaluación tratará de identificar la existencia de curvaturas
vertebrales en el plano frontal, añadiendo otra serie de pruebas específicas para este despistaje.
El examen dinámico se realizará con el paciente sentado, con los brazos cruzados en el pecho y las manos en los hombros. El evaluador, al
lado del paciente, con su mano anterior controla el hombro más alejado del paciente mientras la otra se encuentra libre sobre la parte dorsal,
limitando, sintiendo, ayudando al movimiento.
En este segmento, realizaremos una evaluación de los movimientos respiratorios de forma muy básica. Así, resistiremos y
asistiremos el movimiento respiratorio costal de forma uni y bilateral en diferentes posiciones.
Columna lumbar: el balance articular, la determinación de las flechas sagitales,… constituirá una parte de la evaluación de este segmento
donde, como vemos, se combinan análisis estáticos y dinámicos.
Asimismo deberemos de realizar una identificación y seguimiento de las apófisis espinosas, así como una exploración del esclerotoma
(palpación perióstica) de los diferentes segmentos vertebrales. En este caso, esta evaluación tratará de identificar la existencia de curvaturas
vertebrales en el plano frontal, añadiendo otra serie de pruebas específicas para este despistaje.
La movilidad activa en bipedestación debe respectar el ritmo lumbo-pélvico que estructura la secuencia de movimientos en esta región. De
esta forma, en la flexión anterior de tronco, la movilidad dependerá en primer lugar de las articulaciones de las caderas, posteriormente entre
en juego la columna lumbar para, finalmente, conseguir los últimos grados de flexión a través de la puesta en tensión de los ligamentos y
articulaciones pélvicas.
La movilidad pasiva puede llevarse a cabo de diferentes formas. Una de las más sencillas es con el individuo en decúbito supino, las caderas y
rodillas flexionadas, de manera que la planta de los pies se apoyan en el plano de sustentación donde se encuentra el paciente. Desde esta
posición es asequible hacer la flexión, rotaciones y lateroflexiones de la columna lumbar. Para la extensión, será suficiente con colocar al sujeto
en decúbito lateral y llevar sus caderas en extensión.
De igual forma a como hicimos en la columna lumbar, podemos detallar una estrella de Maigne del segmento dorso-lumbar, ya que estas dos
porciones raquídeas funcionan biomecánicamente unidas. La notación de la estrecha de Maigne se realiza de igual forma a la columna cervical
BIBLIOGRAFIA
Buckup K. Pruebas clínicas para patología ósea, articular y muscular. Exploraciones, signos y síntomas. 2ª edic. Barcelona: Masson;
2002.
Calais B, y col.: Anatomía para el movimiento I y II. Barcelona: La liebre de Marzo; 1991.
Hoppenfeld S. Exploración física de la columna vertebral y las extremidades. 17ª edic. México: El Manual Moderno SA; 2000.
Jurado A, Medina I. Manual de pruebas diagnósticas. Barcelona: Paidotribo; 2002.
Kaltenborn FM. Fisioterapia manual: Columna. Madrid: Interamericana McGraw-Hill; 2004.
Kapandji AI. Fisiología articular 3: Tronco y raquis. 5ª edic. Madrid: Panamericana – Maloine; 1998.
Petty NJ, Moore AP. Exploración física. En: Petty NJ, Moore AP. Exploración y evaluación neuromusculoesquelética: un manual para
terapeutas. 2ª edic. Madrid: McGraw Hill; 2003: 35-112.
Ricard F, Salle JL. Tratado de osteopatía. Madrid: Mandala; 1995.
Teyssander MJ. Introducción a la exploración clínica programada del raquis. Barcelona: Masson; 1996.
La evaluación de los miembros inferiores se realizará según las funciones para las que están diseñados. En este sentido podemos encontrar
una reseña interesante en la Enciclopedia Médico-Quirúrgica:
“Al principio tenía aun razón de ser elemental y primitiva determinada por la funcionalidad que le era propia, la deambulación.
Con el devenir de la historia se ha ido transformando en el instrumento privilegiado para la realización de dos funciones
importantes, nutrición e higiene, para las que se precisan aptitudes en apariencia contradictorias, pero que van a ser realmente
complementarias: fineza y velocidad, por un parte, fuerza y resistencia, por otra.”
Si bien este tema se refiere exclusivamente a la dinámica, no está de más recordar la situación de los miembros superiores en la estática:
Separación frontal del brazo con respecto a la vertical, teniendo en cuenta en cada caso la morfología del paciente
En el plano frontal, situación del hombro con respecto al busto
Desde el plano frontal, simetría de ambos MM.SS.
Posición de extensión del codo y mano en la vertical
Palma de la mano en dirección anteroexterna del muslo
Dedos en semiflexión (posición funcional)
Los miembros superiores en la marcha, como hemos visto, tienen un comportamiento determinado:
El paciente debe ser capaz de realizar movimientos complejos. De estos, los que nos causan un mayor interés son los movimientos
funcionales, es decir, los que realiza habitualmente el paciente en su vida cotidiana. Si estos movimientos no se efectúan de manera fluida,
alguno de sus componentes estará limitado, permitiendo de manera sencilla y rápida la identificación de múltiples alteraciones:
MANO A BOCA
Unidad Didáctica 1:
TEMA 1,
TEMA 2
Unidad Didáctica 2:
TEMA 3,
TEMAS 4 y 5,
TEMA 6,
TEMA 7,
TEMA 8,
TEMA 9,
TEMA 10,
TEMA 11,
TEMA 12,
TEMA 13,
TEMA 14,
TEMA 15
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La evaluación de los miembros inferiores se realizará según las funciones para las que están diseñados. En este sentido podemos encontrar
una reseña interesante en la Enciclopedia Médico-Quirúrgica:
“Al principio tenía aun razón de ser elemental y primitiva determinada por la funcionalidad que le era propia, la deambulación.
Con el devenir de la historia se ha ido transformando en el instrumento privilegiado para la realización de dos funciones
importantes, nutrición e higiene, para las que se precisan aptitudes en apariencia contradictorias, pero que van a ser realmente
complementarias: fineza y velocidad, por un parte, fuerza y resistencia, por otra.”
Si bien este tema se refiere exclusivamente a la dinámica, no está de más recordar la situación de los miembros superiores en la estática:
Separación frontal del brazo con respecto a la vertical, teniendo en cuenta en cada caso la morfología del paciente
En el plano frontal, situación del hombro con respecto al busto
Desde el plano frontal, simetría de ambos MM.SS.
Posición de extensión del codo y mano en la vertical
Palma de la mano en dirección anteroexterna del muslo
Dedos en semiflexión (posición funcional)
Los miembros superiores en la marcha, como hemos visto, tienen un comportamiento determinado:
El paciente debe ser capaz de realizar movimientos complejos. De estos, los que nos causan un mayor interés son los movimientos
funcionales, es decir, los que realiza habitualmente el paciente en su vida cotidiana. Si estos movimientos no se efectúan de manera fluida,
alguno de sus componentes estará limitado, permitiendo de manera sencilla y rápida la identificación de múltiples alteraciones:
Ver ejemplo
Ver ejemplo
MANO A NUCA
Mano a la espalda, para lo que es necesario los siguientes movimientos:
Ver ejemplo
MANOA A ESPALDA
Unidad Didáctica 1:
TEMA 1,
TEMA 2
Unidad Didáctica 2:
TEMA 3,
TEMAS 4 y 5,
TEMA 6,
TEMA 7,
TEMA 8,
TEMA 9,
TEMA 10,
TEMA 11,
TEMA 12,
TEMA 13,
TEMA 14,
TEMA 15
Volver a Programa de la asignatura
La evaluación de los miembros inferiores se realizará según las funciones para las que están diseñados. En este sentido podemos encontrar
una reseña interesante en la Enciclopedia Médico-Quirúrgica:
“Al principio tenía aun razón de ser elemental y primitiva determinada por la funcionalidad que le era propia, la deambulación.
Con el devenir de la historia se ha ido transformando en el instrumento privilegiado para la realización de dos funciones
importantes, nutrición e higiene, para las que se precisan aptitudes en apariencia contradictorias, pero que van a ser realmente
complementarias: fineza y velocidad, por un parte, fuerza y resistencia, por otra.”
Si bien este tema se refiere exclusivamente a la dinámica, no está de más recordar la situación de los miembros superiores en la estática:
Separación frontal del brazo con respecto a la vertical, teniendo en cuenta en cada caso la morfología del paciente
En el plano frontal, situación del hombro con respecto al busto
Desde el plano frontal, simetría de ambos MM.SS.
Posición de extensión del codo y mano en la vertical
Palma de la mano en dirección anteroexterna del muslo
Dedos en semiflexión (posición funcional)
Los miembros superiores en la marcha, como hemos visto, tienen un comportamiento determinado:
Ver ejemplo
Ver ejemplo
Ver ejemplo
Asimismo, podemos evaluar diferentes acciones correspondientes al miembro superior, y que permiten evaluar otras estructuras diferentes a
las de los movimientos complejos.
Compresiones: la compresión axial del miembro superior necesita coordinación y fuerza, así como la integridad de los cartílagos
articulares, que soportan la presión intraarticular. La inconsistencia de alguno de estos elementos y características, determinará la
limitación en la realización de las compresiones, así como la aparición de dolor en la realización de las mismas.
Tracciones: en este caso, las tracciones axiales de miembro superior precisarán de fuerza muscular y de la integridad de los
elementos estabilizadores periarticulares, como cápsula y ligamentos, encargados de ponerle freno a la distracción articular.
Torsiones: solicitadas a nivel de las diferentes articulaciones, ayudan a comprender los mecanismos de estabilización ligamentaria y
muscular en función de la carga y actividad necesarias
Una de las características específicas del miembro superior es la capacidad de adaptación de sus movimientos, así como la rapidez de los
mismos. Para identificar la conservación de estas características, siempre teniendo en cuenta la naturaleza y estado de cada paciente de forma
específica, realizaremos diferentes tipos de pruebas balísticas, tales como:
Lanzamiento de objetos: en la que aparecen conceptos como la estabilización articular, la aceleración y decelaración, la prensión.
Recepción de objetos: que exige un trabajo de coordinación óculo-motriz muy superior a la acción precedente. Para ello, el paciente
debe ser capaz de orientar los segmentos del miembro superior hacia el objeto que tiene que recibir, identificar su contacto y frenar su
velocidad.
Dentro de la evaluación del miembro superior también podemos incluir mediciones que pertenecen a la estática, pero que no hemos realizado
previamente. Para ello suelen señalarse con un lápiz dermográfico distintos puntos antropométricos, extensamente descritos en la literatura,
como son el punto acromial (parte más postero-externa del acromion), punto radial (aspecto más proximal de la cabeza radial), punto
estiloideo (región más distal de la estiloides radial), punto dedal (no suele marcarse, y coincide con la parte más distal del dedo más largo–
habitualmente el dedo medio). Ver ejemplo
PUNTOS ANTROPOMETRICOS MIENBRO SUPERIOR
Alturas: con el paciente en posición de atención antropométrica (similar a la posición anatómica pero con la palma de la mano
orientada hacia el muslo. Podemos medir las alturas (distancia a la superficie de sustentación):
Longitudes: en la misma posición precedente se mide la longitud de los diferentes segmentos de dos formas: como distancia entre
dos puntos antropométricos, o como diferencia de dos alturas.
Ver ejemplo
LONGITUD BRAQUIAL
Perímetros: se pueden medir diferentes perímetros centimétricos que pueden ayudar a, por un lado, identificar inflamaciones y
edemas y, por otro, a seguir el trofismo de los compartimentos musculares del miembro superior.
Perímetro de brazo relajado: se toma en la mitad de la longitud del segmento braquial (previamente marcado).
Perímetro de brazo contraído: con el individuo en flexión de codo de 90º y contracción isométrica de la musculatura de los
compartimentos anterior y posterior del brazo, se toma el perímetro máximo del brazo.
Perímetro antebraquial: se toma el mayor de los perímetros antebraquiales (suele localizarse en el tercio proximal del antebrazo.
Perímetro de muñeca: a nivel de la interlínea articular
El estudio de las prensiones es un apartado fundamental de la evaluación de los miembros inferiores. Nos ayuda una explicación de la
Enciclopedia Médico-Quirúrgica sobre la prensión:
“La mano humana es un instrumento muy particular, de forma cambieante: masa cerrada y compacta en el puño, tentacular y
ágil en la mano abierta y adapatabilidad a las diversas situaciones (pala, peine, pinza, cuchar, etc.).”
“La mano, al estar situada en un extremo, es libre, perdiendo esta condición cuando se fija para sostener un objeto.”
Cada tipo de prensión se realiza a expensas de diferentes articulaciones y sistemas neuromusculares. Sin entrar de forma específica a evaluar
todos estos aspectos sí definiremos algunas prensiones tratando de diferenciarlas:
Garra palmar direccional Toma de fuerza, dirigida y mantenida Uso del martillo
Prensión lateral pulgar-índice Prensión de fuerza pulgar-índice Girar una llave en una cerradura
0 = Ausencia de trastornos
1 = Mínimo trastorno, que no perjudica la eficacia de la toma (temblor, lentitud,...)
2 = Perturbaciones importantes, puede realizarse una prensión, funcionalmente mal
3 = Imposibilidad de realizar la función requerida
BIBLIOGRAFIA
Blanc Y, Viel E. Comportamiento motor del miembro superior. En: Encicl Méd Quir (Elsevier-París), Kinesiterapia-Medicina Física-
Readaptación, 26-012-D-10; 1994, 16p.
Buckup K. Pruebas clínicas para patología ósea, articular y muscular. Exploraciones, signos y síntomas. 2ª edic. Barcelona: Masson;
2002.
Delprat J, Releer S, Romain M, Xenard J. La prensión. En: Encicl Méd Quir (Elsevier-París), Kinesiterapia-Medicina Física-Readaptación,
26-008-E-10; 2002, 16p.
Hoppenfeld S. Exploración física de la columna vertebral y las extremidades. 17ª edic. México: El Manual Moderno SA; 2000.
Jurado A, Medina I. Manual de pruebas diagnósticas. Barcelona: Paidotribo; 2002.
Kaltenborn FM. Fisioterapia manual: Extremidades. Madrid: Interamericana McGraw-Hill; 2004.
Kapandji AI. Fisiología articular 1: Miembro superior. 5ª edic. Madrid: Panamericana – Maloine; 1998.
Petty NJ, Moore AP. Exploración física. En: Petty NJ, Moore AP. Exploración y evaluación neuromusculoesquelética: un manual para
terapeutas. 2ª edic. Madrid: McGraw Hill; 2003: 35-112.
Partiendo de este precepto, los miembros inferiores deben ser evaluados tanto en carga como en descarga.
Como hicimos en el tema precedente, aunque no sean contenidos específicos de este tema, recordaremos la situación de los miembros
inferiores en la estática:
Varos y valgos.
Asimetrías.
La EIAS, la rótula y el maleolo interno se encuentran alineados.
Observación de perfil, donde podemos observar si la línea de gravedad sigue el trocánter, el cóndilo externo y culmina en la interlínea
articular de Chopart.
Observación de espalda: que permite evaluar la asimetría pélvica (altura EIPS, pliegue glúteo,…)
No debemos olvidar la exploración de los miembros inferiores durante la marcha, que además nos permite realizar una adecuada exploración
del miembro inferior tanto en carga como en descarga. Podemos añadir en este punto otros tipos de marcha, como la que se produce:
Pista de marcha.
Línea o tabla.
Ascenso y descenso por un terreno en declive.
Subir y bajar escaleras.
Finalmente podemos realizar un evaluación de los miembros inferiores en descarga, para lo que apoyándonos en la antropometría, debemos
localizar y marcar con un lápiz dermográfico varios puntos antropométricos: punto iliaco (a nivel de la EIAS), punto trocantéreo (en la parte
más alta –no la más saliente- del trocánter mayor), punto condíleo (en el punto más distal de cóndilo externo del fémur), punto maleolar
(deben marcarse los dos punto maleolares interno y externo en su aspecto más distal) y punto dedal (no se marca y coincide con el la parte
más anterior de los dedos del pie).
Dismetrías: sin entrar a valorar la etiología diversa de las dismetrías, y teniendo en cuenta que el diagnóstico de las dismetrías
anatómicas (no funcionales), se realiza con una telerradiografía de miembros inferiores, podemos realizar diversas mediciones cuya
alteración debe hacernos pensar en algún tipo de dismetría.
En decúbito supino, y antes de realizar las mediciones, debe llevarse a cabo una equilibración pélvica, que consiste en la flexión máxima pasiva
de ambas caderas, o en la contracción isométrica simultánea de ambas masas glúteas. Una vez equilibrada la pelvis realizamos tres
mediciones:
Ombligo-maleolo interno.
EIAS-maleolo interno.
Trocánter mayor-maleolo interno.
Hasta 1 cm se considera que la dismetría puede ser compensada fácilmente por los diferentes segmentos del miembro. Por encima de este
valor en cualquiera de las tres mediciones se requieren pruebas más avanzadas para discriminar el origen de dicha dismetría.
Ver ejemplos
Equibración pélvica: flexión caderas Equibración pélvica: contracción glútea bilateral
Evaluación dismetrias miembros inferiores: Trocanter mayor-
Evaluación dismetrias miembros inferiores: EIAS-maleolo interno maleolo interno
Alturas: además de las dismetrías, podemos evaluar las diferentes alturas al plano de sustentación (en este caso en carga):
Longitudes: siguiendo la metodología del miembro superior podemos determinar las longitudes de muslo, pierna y pie.
Perímetros: con el objetivo de identificar edemas e inflmaciones, así como determinar el trofismo de los elementos contráctiles se
puede medir diferentes perímetros:
El examen de la sensibilidad es esencial para una correcta identificación de los signos y síntomas que presenta el paciente, así como para
determinar su posterior tratamiento.
Concepto de sensibilidad:
1º sano, 2º enfermo
1º distal, 2º proximal
Evaluación de la sensibilidad:
Sensibilidad táctil:
Grosera (protopática): mediante algodón o pincel se realizan toques y pases sobre la piel. Ver ejemplo
Fina (epicrítica): con el compás de Weber (discriminación entre 2 puntos). Este examen es esencial en las distintas regiones de la
mano. Ver ejemplo
Punta de una aguja (distinción entre el extremo romo y el agudo). Ver ejemplo
IDENTIFICACION SENSIBILIDAD DOLOROSA ALGOMETRIA
Importancia de las respuestas a: ¿dónde duele?, ¿cuándo duele?, ¿cómo duele?,..
Escala visual analógica (EVA), algómetro de presión, cuestionario de McGill,… Ver ejemplo
ALGOMETRIA DE PERSION
Escala visual analógica (EVA), algómetro de presión, cuestionario de McGill,… Ver ejemplo
En todo caso, tendremos que realizar una evaluación de la sensibilidad teniendo en cuenta el mapa dermatómico, la división troncular
periférica, la pérdida total o parcial de cada tipo de sensibilidad.
Ver ejemplos
La evaluación de la función motora es un proceso complejo. En este tema daremos algunas indicaciones básicas para ser capaces de iniciarnos
en dicha exploración.
Lo cierto es que muchos y muy dispares procesos afectan a la función motora y su coordinación.
1. Acción o efecto de concertar medios, esfuerzos,..., para un acción común, en este caso, la consecución con un gasto mínimo de
energía, de los movimientos que permiten andar, saltar, bailar, etc.
2. Capacidad de controlar los movimientos con precisión y suavidad (sincronización de la musculatura agonista, antagonista y
sinergistas).
Cualquier acción motora, voluntaria (consciente) o involuntaria (automática o refleja), supone una acción de coordinación
Características:
La afectación de cualquiera de las estructuras anatomo-fisiológicas implicadas en la actividad motora, afecta a la coordinación.
Coordinación estática: en bipedestación podemos evaluar esta coordinación a través del signo de Romberg (pérdida del equilibrio en
bipedestación:
o Romberg + ojos abiertos: ataxia sensitiva.
o Romberg + sólo con ojos cerrados: ataxia motriz.
Ver ejemplo
Romberg ojos abiertos romberg ojos cerrados
Coordinación dinámica: a través de la ejecución de movimientos. Si tenemos en cuenta uno de los paradigmas de la incoordinación
como es la ataxia cerebelosa, caracterizada por nistagmo, alteraciones de la palabra, marcha atáxica, temblor, asimetría,
disdiadococinesia, disinergia, rebote de Holmes,…
Marcha atáxica: titubeante, inestable, con aumento de la base de sustentación y tendencia a desviarse. Ej: marcha en línea recta,
marcha rápida, marcha talón-punta,…
Temblor: que aumenta con el movimiento voluntario y cesa en el reposo. Ej: durante la ejecución de actividades, pie hacia una marca,
…
Dismetría: incapacidad para controlar la distancia en los movimientos (apuntan más allá del objeto o se quedan cortos).Ej: dedo-nariz,
dedo a una marca. Ver ejemplo
Disdiadococinesia: deterioro de la capacidad de realizar movimientos alternativos repetidos de forma rápida y fluida. Ej: movimiento de prono-
supinación, tocar el suelo con puntera y tacón,… Ver ejemplo
Disdiadococinesia
Disinergia o asinergia: descomposición del movimiento con falta de fluidez (ausencia de sincronización entre agonistas y antagonistas).
Ej: movimientos complejos y alternativos de todo tipo.
Fenómeno de Stewart-Holmes o de rebote: falta de un reflejo de contención para detener un movimiento activo fuerte y evitar golpear
algo en la trayectoria del movimiento. Ej: retirar bruscamente la resistencia aplicada a la resistencia de la flexión del codo. Ver
ejemplo
Otro de los estudios relacionados con la coordinación es el del equilibrio (entendido como conjunto de reacciones automáticas para mantener
la postura), que puede realizarse de múltiples formas, como la estabilometría, el test de Tinetti,…
En el examen de la función motora también debemos estudiar el tono muscular y los reflejos profundos u osteotendinosos (ROT) y los reflejos
superficiales.