Un Análisis Emblemático de Águila o Sol de Heriberto Frías
Un Análisis Emblemático de Águila o Sol de Heriberto Frías
Un Análisis Emblemático de Águila o Sol de Heriberto Frías
de
Comenzamos con la idea de que a las cubiertas de los libros se les ha prestado muy
poca atención, y si bien, el análisis de las cubiertas podría parecer ajeno al campo de la
crítica literaria, no deben minimizarse el hecho de que tanto éstas, junto con otros
elementos materiales del libro, tienen una función informativa y publicitaria, es decir,
Nuestra segunda idea es que algunas cubiertas están ilustradas en clave simbólica,
son aquellas que no exponen un vínculo directo con el contenido, en especial, en las obras
literarias, y más específicamente en las novelas. Esta clase de portadas podría considerarse
por Carlos Neve (fig. 1). El estudioso Antonio Saborit la describe así:
desafiante, tras un mandoble de esbelta hoja, con el rostro en alto sobre el erguido
cuello; cubre sus hombros una capa de corte teatral que resalta la desnudez del
cuerpo y de los brazos que tiene cruzados sobre el pecho, si bien los lazos de la capa
ocultan los senos y el sexo. Detrás de ella, en el segundo plano, montada sobre una
roca a manera de pedestal, una enorme águila con las alas desplegadas somete a una
elementos de los dos primeros planos, a la vez que excluye del núcleo de la
La cubierta, además cuenta con texto en la parte inferior, un fragmento de una carta
comentada.
“Treinta y tantos años hace que reina la maldad en México y que todo lo que
es justo, grande y noble, no ha tenido cabida en los gobiernos. Pues bien, parece que
se llega el día de que reinen las virtudes y se proscriban los vicios.” (Carta de
tendría que juzgarse en relación con el carácter alegórico de la novela y con los símbolos
que en ella aparecen: la mujer, el águila y el sol. Se trata, además, de figuras que abundan
en la literatura emblemática. Antes de ello, brevemente vamos a referir algunos datos sobre
el ilustrador.
Carlos Neve
al parecer más de treinta libros, entre los que destacan La tórtola del Ajusco y Azulejos de
Julio Sesto, La sombra de Edgar Allan Poe, y ¿Águila o sol? de Heriberto Frías. (Sánchez
González)
crítica lo ha visto como un modernista tardío, que todavía guarda algún influjo de Julio
Ruelas, pero que tuvo una mayor influencia del Art Nouveau, dentro del cual destacó por
Si tuviera los ojos vendados la mujer que pinta Carlos Neve, podríamos asegurar que se
trata de la dama de la justicia. Tampoco cuenta con una balanza, así que bajo tal hipótesis la
justicia plasmada estaría desnaturalizada: carente de imparcialidad por la falta de venda y
cabe decir que sería más acorde al sentido de la novela, sin embargo, los brazos cruzados y
la mirada indiferente comunican un gran distanciamiento con respecto a las mujeres que en
la parte inferior parecen tristes y desesperadas. ¿Podría la patria distanciarse de esa manera?
Durante el siglo XIX cuando se representaba a la Patria se hacía en una imagen dolorida,
como la pintó Abraham López en 1852, o incluso en una visión satírica: caminando en la
cuerda floja, como la pintó Melchor Álvarez en el tiempo del Imperio de Maximiliano, y ni
qué decir de la caricatura que en la que Porfirio Díaz está a punto de quebrarle la cabeza a
la Patria con un martillo de 1876 (Barajas). En la visión de la patria hay lugar para el
Pero no tiene un aspecto seductor ni maternal y menos como mujer que pudiera ser guía
espiritual, los cuales son los tres aspectos que Cirlot considera esenciales a la figura
Lo único que queda claro con respecto a esta mujer es que se sabe portadora de
apreciar: grecas y espirales que adornan su capa blanca. ¿Serán detalles aztecas? Sería
extraño, pues la mujer no tiene rasgo alguno de indígena. Lo cual tampoco es una razón
definitiva, dado que Carlos Neve llegó a dibujar con penachos a mujeres que difícilmente
El águila
fue el principal animal representado en las banderas de las legiones romanas. Para
Covarrubias era un águila en un alto risco aludía al príncipe retirado que no concedía
audiencias a sus vasallos. Por su capacidad de volar a gran altura fue considerada la reina
de las aves, e incluso un carácter divino, puesto que el águila también se identificó con
Zeus y con Jesucristo. También le fue atribuido el poder de mirar al sol directamente e
incluso se creía que adiestraba a sus polluelos para mirar al sol y que alguno fuera incapaz
de sostener su vista porque le lagrimearan los ojos sería muerto, según Aristóteles. También
simbólica: un águila enredada con una sierpe que le está picando en el pecho es símbolo de
encontramos la empresa cincuenta “Del Zeloso”, en la que una mano empuña una espada
espada el odio que debe dirigirse solamente hacia el pecado, procurando no lastimar al
pecador.
El águila como símbolo estuvo presente en los arcos triunfales y las exequias
del águila como un ser simbólico; lo cierto es que en México también fue un símbolo
del grupo Borgia, en una imagen el águila y la serpiente se disputan una presa, ya sea un
conejo o una lagartija, en otra la serpiente aparece sangrante y partida. Por eso se puede
conjeturar que ambos animales están asociados al sacrificio humano como ejercicio de
cielo y la tierra, son centrales, sobre todo el águila, en los relatos fundacionales de México-
Tenochtitlán. Al mismo tiempo, el águila se relacionaba entre los mexicas con el sol y con
sobreponiéndose a símbolos europeos. Por ejemplo, 1523 cuando fue ordenado el escudo de
resultaban extraños (un castillo dorado en medio de dos puentes con sendos leones), y
carecía de timbre, las autoridades lo timbraron con un águila devorando a la serpiente: “el
También en los templos el símbolo del águila resurgía, por ejemplo, el franciscano
una imagen apreciada por los indígenas, pero fue ganando terreno, los mestizos la
antes de la Independencia.
águila tendría una carga simbólica diferente a la de esta doble tradición prehispánica y
occidental, puesto que Heriberto Frías hizo del águila en su última obra un símbolo del
poder en el peor de sus sentidos, en el de la destrucción que regresa una y otra vez a la vida
política mexicana:
terror de sus garras aquí abajo, y la amenaza del infierno allá arriba. El tecauhtli, el
acaso, desproporcionada, con un cuello más largo y con las plumas crispadas, da una
apariencia temible.
El sol
El sol es uno de los símbolos más importantes. Son abundantes los cultos solares. Para Jung
el sol simbolizaba la fuente de la vida. El sol también tiene una asociación heroica como sol
de invencible, así como de la salud y de la justicia. El sol es además del iluminador de las
cosas, un trayecto: desaparece y renace. El sol que nos presenta Neve es precisamente un
El sol también podría ser un símbolo del conocimiento intelectivo, dado que gracias
masculino.
Para los mexicas, el tiempo estaba organizado por eras que llamaban soles. Periodos
que terminaban en una catástrofe y un sacrificio para que renaciera otro sol.
por el pueblo, con sus atributos de justicia, libertad y progreso… Después del sol de
Juárez, el águila de Habsburgo; después del águila austriaca, otra vez el sol de
una familia prácticamente de hombres; mientras que la que representa al sol es una mujer
que vive en una familia constituida por mujeres. Entonces en la obra el sol está
de ¿Águila o sol?, veremos una coincidencia en la figura del águila, incluso en la presencia
del sol como algo grande que en el fondo irá surgiendo y ha de transformar la visión de las
cosas; pero en lo que hay una notable divergencia es en la representación de la mujer, pues
en la cubierta de Neve parece una dignataria indiferente en primer plano, mientras que en la
deseable incorporación de las mujeres a la vida pública, reconocer su valor para que puedan
Barajas, Rafael, “La patria dolorida. Imágenes de un periodo turbulento (1821-1909)”, Nexos, Julio,
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Fig. 1 Foto de la cubierta de ¿Águila o sol?
Fig. 2. Códice Borgia, p. 52.