Crisis Intraeclesial-La Iglesia Oriental
Crisis Intraeclesial-La Iglesia Oriental
Crisis Intraeclesial-La Iglesia Oriental
Cr is is i nt r aec l esi al
La ig l es ia Or i ental
INTRODUCCION
DESARROLLO,
En 1170, Pedro Waldo, mercader que renuncio a su riqueza para vivir una
vida de pobreza, fundo “Los Pobres de Lyons”. Tradujo los evangelios a la
lengua común y predicaba en las calles consiguiendo un sinnúmero de
seguidores. La iglesia considero este movimiento peligroso y procedio a
excomulgarlos, y en 1190 los declaro en herejía.
IGLESIA ORIENTAL
2. De tipo religioso: Las variaciones que, con el paso del tiempo, fueron
imponiéndose en las prácticas litúrgicas, dando lugar al uso de calendarios
y santorales distintos; las continuas disputas sobre las jurisdicciones
episcopales y patriarcales que se originaron a partir de dividirse en dos
el Imperio; la opinión extendida por todo el Oriente de que, al ser
trasladada la capital del Imperio de Roma a Constantinopla, se había
trasladado igualmente la Sede del Primado de la Iglesia universal; las
pretensiones de autoridad por parte de los patriarcas de Constantinopla,
que utilizaron el título de ‘Ecuménicos’ a pesar de la oposición de los
papas, que reclamaban para sí, como obispos de Roma, la suprema autoridad
sobre toda la cristiandad; la negativa de los patriarcas de Oriente a
reconocer esa autoridad sobre la base de la Sagrada Tradición Apostólica y
las Sagradas Escrituras, alegando que el obispo de Roma sólo podía pretender
ser “primus inter pares” (un primero entre sus iguales); y la intromisión
de los emperadores en asuntos eclesiásticos, creyéndose pontífices y reyes,
y pretendiendo decidir ellos solos los graves problemas de la Iglesia.
3. De tipo político: El apoyo que buscaron los papas en los reyes francos
y la restauración en Carlomagno del Imperio de Occidente (s. IX) mermaron
prestigio a los emperadores de Oriente, que tenían pretensiones a la
reunificación del antiguo Imperio romano.
A estas causas de carácter general pueden añadirse los cargos —en realidad,
pretextos— que los patriarcas Focio y Cerulario imputaron a la Iglesia de
Roma, y que pueden resumirse en los cuatro siguientes: Que los papas no
consideraban válido el sacramento de la confirmación administrado por un
sacerdote; que los clérigos latinos se rapaban la barba y practicaban el
celibato obligatorio; que los sacerdotes de la Iglesia Romana usaban pan
ácimo en la Santa Misa, práctica considerada en Oriente una herejía de
influencia judaica; y, en fin, que los papas habían introducido en el credo
la afirmación de que el Espíritu Santo procede del Padre y del Hijo (“Credo
in Spiritum Sanctum qui ex Patre Filioque procedit”), en contra de lo que
Crisis Intraeclesial- La Iglesia Oriental