Edificios Barrocos de Guatemala
Edificios Barrocos de Guatemala
Edificios Barrocos de Guatemala
El Convento de Santa Clara en sus inicios comenzó solamente con cinco religiosas y una novicia,
número que con el tiempo fue aumentando. Las religiosas de la Orden de las Clarisas habitaron en
el convento desde el 14 de enero de 1700 —fecha de su fundación oficial—.
La labor de reconstrucción duró aproximadamente 26 años, anulando por completo todos los
rastros de la construcción original.
El convento reconstruido fue inaugurado y consagrado el 11 de agosto de 1734, sin embargo con
los posteriores terremotos de 1773 y 1874 el convento quedó totalmente en ruinas, como se
observa en la actualidad.
El monumento está conformado por cuatro sirenas que sostienen sus senos entre las manos, que
son los lugares de donde sale el agua de la fuente. Con el paso de los años, las cabezas de las
sirenas fueron destruidas.
En la actualidad, la Fuente de las Sirenas es uno de los principales puntos de reunión en la ciudad
colonial.
La ciudad se trazó en forma rectilínea, con las calles orientadas de norte a sur y de este a oeste,
con una plaza central. Para los edificios eclesiásticos y de gobierno fueron designados lugares
importantes alrededor de la plaza central; a la que también se le llamaba Plaza Mayor, Plaza Real y
Plaza de Armas.