Fonseca Elizabeth. Centroamérica, Su Historia PDF

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f

PRESENTAcrON

Despues de un largo perfodo de preparaci6n que cubri6 todo el ano


de 1990, la Secretaria General de la Facultad Latinoamericana de Cien-
cias Sociales -FLACSO- pudo iniciar formalmente, gracias al apoyo de-
cidido del Ministerio de Relaciones Exteriores del Real Gobierno de No-
mega, el programa de trabajo Historia y Sociedad en Centroamerica.
Cubiertas una serie de actividades centrales del mismo y pOl' razones de
reestructuraci6n interna de FLACSO, adoptadas por sus Organ os Superio-
res de Gobierno, la responsabilidad de continuar la ejecuci6n pas6 a fina-
les de 1992 al Programa Costa Rica de la Facultad, a fin de alcanzar
- siempre con el permanente apoyo del Real Gobierno de Noruega-1as
metas orginalmente propuestas.
En las diferentes fases programadas y a partir de un seminario regio-
nal de historiadores centroamericanos, fue invaluable el apoyo de institu-
ciones universitarias de los paises de la regi6n y de decenas de historiado-
res, antrop610gos y cientfficos sociales d e Centroamerica, Estados Unidos
de Norteamerica y de Europa. S610 ella ha permitido cumplir con una
tare a tan ambiciosa y, pensamos sinceramente, de una importancia
trascendental para Centroamerica como futuro.
La primera etapa concluy6 con la publicaci6n de los seis tomos de la
Historia General de Centroamerica en la que alrededor de treinta y cinco
investigadores participaron en forma directa, con la coordinaci6n de una
Comisi6n integrada por Edelberto Torres-Rivas, Hector Perez Brignoli,
Victor Hugo Acuna, Julio Cesar Pinto y Robert Carmack. Esta fase se arti-
cu16 con otra dedicada a publicar monografias hist6ricas sobre tematicas
relevantes para la configuraci6n de la regi6n. Esta ultima, por razones
especificamente financieras, no tuvo 1a amplitud que se esperaba.
La tercera y ultima etapa termina con la edici6n de este texto 0 ma-
nual - en su mejor sentido- cuyo prop6sito es servir a la docencia de
nivel m edio 0 de estudios generales en e1 universitario, en el campo de

7
la historia centroamericana. Dado el cuidado especial en el tratamiento
pedagogico, ellibro llenara un importante vacfo en la docencia, por el
que los Ministerios de Educacion y Cultura han venido manifestando su
preocupacion durante los ultimos anos.
Ha sido vital para la culminacion de esta ultima fase el hecho de que
la Dra. Elizabeth Fonseca, distinguida historiadora costarricense, haya acep-
tado la propuesta de FLACSO-Costa Rica para hacerse cargo de la dificil
tarea de preparar el texto. Por su formacion, su conocimiento de la re-
gion, preocupacion y capacidad especial para la docencia, por la capaci-
dad de sfntesis mostrada en sus libros anteriores y por haber participado
como investigadora en la Historia General, pocas personas estaban tan
bien preparadas para tal labor como ella. Con tal experiencia logro la
integracion de un equipo de excelencia que la apoyo en la misma: Ana
Paulina Malavassi y Rafael Cordero, historiadores, Marta Virginia Muller,
filologa y pedagoga, y Silvia Melendez DobIes, geografa e historiadora.
Estamos absolutamente convencidos, y ojala ella sea confirmado en
los anos venideros, de la trascendencia de las actividades impulsadas y
articuladas por FLACSO como institucion latinoamericana en el marco del
Programa sobre Historia y Sociedad en Centroamerica. Iniciadas cuando
muchos crefan terminado el terco sueiio unitario y cuando mas se necesi-
taba una perspectiva com partida para superar la crisis, dan pie para con-
tinuar, en nuevas circunstancias, las reflexiones y acciones con un sentido
de unicidad regional. En todo caso es un mejor punto de partida para las
generaciones nuevas y venideras de centroamericanos, las que surgen una
vez superada la peor de las crisis experimentada en la historia del Istmo.
A elIas, como se seiialo en la presentacion de la Historia General, esta
dedicado todo el esfuerzo.
Finalmente, la reiteracion del agradecimiento y reconocimiento de
FLACSO-Costa Rica a todos los que han participado en este esfuerzo. De
manera muy especial, al Real Gobierno de Noruega, por medio de su
Cancillerfa y su Embajada en Costa Rica, no solo por su permanente cola-
boracion sino por haber otorgado fondos a una lfnea de trabajo funda-
mental, para la que dificilmente, ahora en dfa se logra apoyo.

"La Lucha sin fin ", San Jose,


octubre de 1995

Rafael Menjfvar Larin


Director
FLACSO-Costa Rica

8
AGRADECIMIENTOS

La elaboraci6n de este texto ha sido posible gracias al apoyo de mu-


chas personas. En primer lugar deseo agradecer a Rafael Menjivar Larin,
Director del Programa FLACSO-Costa Rica, la confianza depositada al en-
cargarme la realizaci6n de este trabajo. Agradezco tambien a otros fun-
cionarios del Programa que me brindaron su amistad y colaboraci6n.
De manera muy especial quiero expresarle mi gratitud y admiraci6n a
Edelberto Torres Rivas, quien en todo momento me brind6 su apoyo y
me alent6 en esta tarea.
Desde el inicio del proyecto -en julio de 1994- han com partido conmi-
go las satisfacciones y angustias dos magnificos asistentes: Ana Paulina
Malavassi y Rafael Cordero, j6venes historiadores, egrcsados del Progra-
rna de Maestria Centroamericana en Historia que se imparte en la Uni-
versidad de Costa Rica. Ahi tuve el privilegio de tratarlos como estudian-
tes, ahora son mis amigos y colaboradores.
Otras personas se involucraron en esta tarea desde el principio . Silvia
Melendez DobIes, ge6grafa e historiadora, se encargo de la cartograffa con
el esmero y la dedicaci6n que la caracterizan. EI lector podra valorar la
excelencia de su trabajo. Por su parte, Marta Virginia Muller, no solo reali-
zo la revisi6n filologica de los borradores, sino que, en su calidad de peda-
goga, me hizo valiosas sugerencias que, sin duda alguna, han contribuido a
hacer de esta obra un texto sencillo, asequible a un amplio sector del publi-
co interesado en conocer la historia centroamericana. Y Sebastian Vaque-
rano ha tenido la gentileza de asesorarme ace rca de los detalles editoriales,
poniendo a mi disposicion su amplia experiencia en ese campo.
Colegas y amigos tuvieron la paciencia de leer diversas partes del tra-
bajo, hacer valiosas observaciones y prestarme materiales de sus bibliote-
cas privadas. Agradezco su colaboracion al arqueologo Oscar Fonseca, a
la antrop610ga Maria Eugenia Bozzoli de Willie y a los historiadores Hec-
tor Perez, Mario Sam per, Juan Carlos Solorzano, Arturo Taracena y Jose
Antonio Fernandez.

9
AIgunas de las ilustraciones de este libro las debo ala nobleza de Mar-
garita Vannini, Directora del Instituto de Investigaciones Hist6ricas de
Nicaragua, y del historiador nicaragiiense German Romero. EI ge6grafo
Gilbert Vargas, de la Universidad de Costa Rica, tambien ha sido muy
gentil al facilitarme material cartografico.
Finalmente deseo agradecer a mi familia y, en especial, ami hijo Este-
ban, el apoyo y la comprensi6n que me han brindado en todo momento.
AI final del camino, siento que el esfuerzo ha valido la pena.

La autora
San Jose, Costa Rica
18 de setiembre de 1995

10
INTRODUCCION

Este es un libro dirigido especialmente a los estudiantes de los niveles


superiores de ensenanza secundaria y de primer ano de las universidades
de la region. Su objetivo principal es permitir que profesores yestudian-
tes reflexionen juntos ace rca de su historia y del presente de esta parte
del mundo. Es muy importante para el futuro centroamericano que las
nuevas generaciones comprendan cmin amplio es el pasado com partido
por los paises que forman parte de la region; asi mismo, que sean capaces
de cap tar las particularidades de cada uno de ellos.
El hecho de que nuestros pueblos se reconozcan herederos de un
pasado comun contribuini a crear y a reforzar los lazos de solidaridad
entre los centroamericanos. Por otra parte, los ciudadanos del manana
deben estar bien preparados para poder forjar el futuro de Centroameri-
ca, en un mundo don de la interdependencia es cada dia mayor y en el
que se requiere de una profunda valoracion de 10 propio, para no ser
arrastrados por la voragine en el proceso de globalizacion .
En esta introduccion nos plantearemos dos preguntas fundamenta-
les: 2como se define el espacio centroamericano? y 2cmiles son las caracte-
risticas de ese territorio que 10 hacen diferente de otros, y posibilitan, al
mismo tiempo, estudiarlo en su conjunto?

El espacio centroamericano

El espacio al que nos referiremos en este libro es el correspondiente a


los cinco paises que formaron parte del Reino de Guatemala durante el
periodo colonial y que poco tiempo despues de su independencia inten-
taron organizarse como una Federacion, es decir, las Provincias Unidas
del Centro de America: Guatemala, Honduras, El Salvador, Nicaragua y
Costa Rica. As!, el concepto Centroamenca es mas bien de caracter his tori-
co. En cambio America Central es un concepto geografico, utilizado para

11
designar al territorio que une la America del Norte con la America del
Sur; y que se extiende desde el istmo de Tehuantepec, en Mexico, hasta el
Valle del rio Atrato, en Colombia.
La definicion restringida del espacio al cual se refiere este libro deja
por fuera, de manera deliberada, el estudio sistematico de algunos te-
rritorios que, durante diversos periodos de la historia, han conforma-
do espacios economicos 0 socioculturales significativos con algunas areas
de Centroamerica. Por ejemplo, durante la historia antigua de la region,
el sur de Mexico formaba una unidad con la porcion norte de Centro-
america; asi mismo las sociedades indigenas del sur de Centroamerica
compartian muchas caracteristicas con las que ocupaban el actual territo-
rio panameno; y Chiapas, durante la epoca colonial, formo parte del Rei-
no de Guatemala, pero despues de la Independencia decidio anexarse a
Mexico.
Por otra parte, dos paises que no forman parte de Centroamerica, si
son parte de America Central y 10 que acontece en ellos en la actualidad
- al igual que sucedio en el pasado- afecta a sus vecinos, en mayor 0
menor medida. Nos referimos a Belice y Panama. En cuanto a Belice,
desde el periodo colonial su historia ha sido diferente de la de los paises
de Centroamerica. Las autoridades espanolas no lograron un control efec-
tivo sobre la costa Caribe; en consecuencia, los ingleses aprovecharon esa
situacion y se establecieron en Belice desde mediados del siglo XVII. La
Corona Espanola no acepto esta usurpacion facilmente, y el territorio es-
tuvo sujeto a las disputas y a los avatares de las cambiantes relaciones en-
tre Espana e Inglaterra. Belice fue colonia inglesa desde fines del siglo
XVIII hasta 1981, ano en que obtuvo su independencia.
En 10 que se refiere a Panama, su historia esta estrechamente ligada a
la construccion del canal interoceanico, que 10 convirtio en el pais de
mayor importancia geoestrategica de la region. Ya desde el periodo colo-
nial su historia tomo un rumbo diferente: fue ruta de paso en el comercio
transistmico, y nunca formo parte del Reino de Guatemala. Durante el
periodo colonial pertenecio al Virreinato de Nueva Granada y luego de la
independencia a la Gran Colombia y a la Republica de Colombia, hasta
que alcanzo su independencia en 1903, obtenida bajo la proteccion de
los Estados Unidos. Durante el presente siglo Panama se ha mantenido
bastante al margen de los diferentes proyectos integracionistas empren-
didos por los demas paises de la region.
En conclusion, hay paises (Panama y Relice) y territorios (el sur de
Mexico) que geograficamente forman parte de la America Central, pero
no de la Centroamerica «historica». A pesar de esto, ellector no debera
extranarse si en algunos periodos de la historia hacemos referencia a es-
pacios mas amplios, que en la actualidad son parte de Panama, Belice 0

12
T 1 T
87° 84° 81° 78° 75°

21 °

MAPANQ 1

UBlCACION DEL AREA EN ESTUDIO

/ n., f....-·'· ,._._


r-
. 1.,. . - - ,
..... .J
SIMBOLOGIA
18°
/ Ciudad Real .\..... j Limite del Re ina de Guatemala
. ;
GUATEMALA
I -- '
Limite entre Provincias Coloniales

Fronte ra geografica de la Am erica Ce ntral

Guatemala o Capital del Reina


Capital de Provincia
15°

N ICARAGUA

OCEANO MAR

12°
PACffICO CARTBE

o 100 200 Km

9° 9°

96° 93° 90· 87° 75 °


I.
Mexico, en fun cion de experiencias historicas compartidas, 0 poria nece-
sidad de comprender algun aspecto particular de nuestro pasado.

America Central: puente e istmo

El territorio de America Central es al mismo tiempo un puente y un


istmo; en el pasado ambas funciones tuvieron diferente intensidad. Como
puente entre las dos gran des masas continentales, permitio el paso de
especies de norte a sur, y viceversa, las cuales se difundieron hasta donde
las barre ras ecologicas asf 10 permitfan. Asf, America Central se cataloga
como una region biogeografica transicional, don de la cantidad de espe-
cies suramericanas disminuye hacia el norte, y el numero de especies ori-
ginarias de America del Norte se reduce hacia el sur. La flora y la fauna de
America Central son mucho mas ricas que la de cualquier otra parte del
hemisferio occidental de extension similar.
El hecho de ser un puente nO solamente favorecio la dispersion de
especies vegetales y animales, sino que tam bien propicio la movilidad y
las relaciones de las sociedades humanas. Durante la historia antigua de
la region, tal y como 10 estudiaremos en el capitulo primero, las socieda-
des aborfgenes crearon extensas redes de intercambio d e productos, tras-
ladados principalmen te por vfa terrestre, y mantuvieron complejos siste-
mas de relaciones entre elIas, que les permitieron compartir sus creacio-
nes culturales.
A partir de la presencia europea en e l area y, sobre todo, despues del
«descubrimiento» del Oceano Padfico por Vasco Nunez de Balboa, en
1513, la funcion mas importante de estc territorio paso a ser la de istmo.
Los espanoles comprendieron muy pronto la importancia geoestrategica
de America Central y emprendieron la busqueda de las mejores rutas para
pasar de un oceano al otro. Despues del perfodo de dominacion espano-
la, Inglaterra y Estados Unidos tambien mostraron su interes por el istmo,
pues este resultaba clave en sus proyectos de dominacion. Las posibilida-
des de construir un canal interoceanico atizaron las disputas entre ambas
potencias, hasta que Estados Unidos logro imponer su poderfo.
La importancia geoestrategica de America Central es quiza el elemen-
to mas caracterfstico de la region. Por eso no se Ie puede dejar nunca de
lado a la hora de analizar la dinamica historica regional. No se puede
negar que ha habido procesos economicos y sociales compartidos, que
han sido utilizados para e laborar diversas definiciones de la «centroame-
ricanidad», como por ejemplo la incorporacion al mercado mundial a
traves de la exportacion de cafe y banano, 0 la forma en que las crisis
economicas periodicas del sistema capitalista han afectado a nuestros pe-

14
queiios paise s. No obstante, estos procesos no son exclusivos de los palses
centroamericanos, pues tambien afectan a otras sociedades de America
Latina, e incluso del Tercer Mundo, todas las cuales dependen d e la ex-
portaci6n de productos agrfcolas.

Unidad y diversidad

Mientras el factor geoestrategico Ie confiere unidad, desde otros pun-


tos de vista America Central muestra una gran diversidad, e incluso desar-
ticulaci6n. Como punto de partida, revisemos la topografla del istmo . Una
cadena de volcanes cuaternarios se extiende desde Guatemala hasta Pa-
nama. Las principales cordilleras son paralelas a las costas; en el norte del
istmo se orientan de oeste a este, mientras que en el sur van de noroeste a
sureste. La topografla dificulta las comunicaciones y privilegia rutas cla-
yes. Solo existen tres rutas bajas en todo el territorio: Tehuantepec; la ruta
rio San Juan-Lago de Nicaragua-istmo de Rivas; y la ruta panameiia.
El eje montanoso principal marca la divisi6n en dos vertientes, cuya
diversidad flsica y human a resulta asombrosa, en relaci6n con la exten-
si6n del territorio. Existe una clara distinci6n climatica entre la vertiente
del Caribe y la del Pacifico. La vertiente del Caribe, bajo la influencia
continua de los vientos alisios, recibe precipitaci6n abundante durante la
mayor parte del ano, y es afectada por devastadores huracanes proceden-
tes del Caribe; en el Pacifico la estaci6n seca se extiende de noviembre a
mayo, y la cantidad de precipitaci6n que recibe es mucho menor que en
el Caribe.
Las diferencias de altitud influyen en las temperaturas prevalecientes.
Desde el nivel del mar hasta los 800 metros de altura la temperatura pro-
medio anual excede los 24 grados centigrados. Este primer piso recibe el
nombre de basal 0 tropical, y cubre el 60% de la superficie del istmo .
Entre los 800 y los 1800 metros sobre el nivel del mar se encuentra el piso
premontano 0 subtropical, donde las temperaturas promedio oscilan en-
tre los 12 y los 24 grados centigrados. Alrededor de 1/3 del area del istmo
corresponde a este piso. Las cimas de las cordilleras forman los pisos en
los cuales las temperaturas son mas frias.
La diferenciaci6n climatica tambien se refleja en la vegetaci6n natu-
ral. En el Caribe predominan los bosques tropicales de baja altura, aun-
que existen otras formaciones en algunas areas reducidas, como las saba-
nas y matorrales espinosos. Los bosques de coniferas son abundantes des-
de Guatemala hasta Nicaragua, pero no pudieron avanzar al sur de la
depresi6n ocupada por ellago de Nicaragua, porque las condiciones eco-
16gicas no eran las apropiadas. La vegetaci6n natural del Pacifico, en cam-

15
95° 85° 80°

MAPANQ 2

RELIEVE DE AMERICA CENTRAL


(SIMPLIFICADO)

,;::= P

OCEANO MAR
SIMBOLOCIA

• Mis de 3 000 ffi.

10° PACjFTCO CARIBE


• Entre 2 000 Y 3 000 ffi.

D Entre I 000 Y 2 000 ffi.

D Entre 0 y I 000 ffi.

Limites internacionales

o 110 220 Km
~""""!iiiii~


90° 85° 75°
bio, consiste principalmente de bosques tropicales caducifolios, por la
sequia de baja latitud.
Los rasgos ecologic os generales de America Central han brindado di-
ferentes posibilidades a las sociedades humanas que aqui han habitado , y
la experiencia humana tambien se ha caracterizado por su diversidad. Las
sociedades aborigenes que habitaron en tierras bajas tropicales - con la
(mica excepcion de los mayas- fueron sociedades que alcanzaron una
pobre integracion politica, y hasta el momenta de su contacto con los
espanoles se mantuvieron como estados incipientes, senorios, cacicazgos
o como tribus. Las mas importantes sociedades aborigenes se encontra-
ban en las altiplanicies del Pacifico (como tendremos oportunidad d e
analizar con detalle en el capitulo I). Mientras la region del Pacifico resul-
to muy atractiva a los espanoles, tanto por su clima como por los recursos
economicos y human os que ofrecia, las sociedades del Caribe opusieron
tenaz resistencia a la conquista, y la zona en buena parte quedo fuera del
control de la Corona Espanola. Esta ausencia fue aprovechada por los
ingleses, quienes a mediados del siglo XVII no solo se hicieron presentes
en Belice, sino tambien en otros puntos del Caribe, como la Mosquitia.
Despues de la Independencia, la zona Caribe continuo siendo reducto de
las culturas minoritarias, no solo indigenas, sino tambien descendientes
de inmigrantes afrocaribenos, que hablan ingles criollo y practican reli-
giones evangelicas. Las diferencias culturales y el relativo aislamiento d e
sus zonas caribenas han motivado esfuerzos por integrar esos territorios
por parte de los gobiernos de varios paises. El Pacifico, en cambio, es
principalmente zona de poblamiento hispanoamericano, lengua espano-
la y religion catolica.
La fragmentacion y diversidad geogrMica y cultural de Centroameri-
ca hacen indispensable recurrir a la comparacion entre paises e inclusive
entre regiones, para poder elucidar que es general y que es especifico d e
cada pais 0 region en su devenir historico. No obstante, a menudo resulta
imposible establecer comparaciones sistematicas, porque no existen sufi-
cientes estudios de base.
Este libro comprende seis capitulos. El primero, Histona Antigua de
Centroambica, estudia las sociedades aborigenes que se desarrollaron en
la region antes de la llegada de los espanoles. El segundo, intitulado El
regimen colonial, analiza el periodo comprendido desde la irrupcion espa-
nola, hasta mediados del siglo XVIII. El capitulo III, Centroambica: de la
Ilustracion al Liberalismo, trata sobre la historia de la region durante los
anos comprendidos entre 1750 y 1870. Cabe aclarar que en esta division
de los capitulos no hemos seguido la cronologia tradicional, y que, en vez
de hacer el corte en 1821, ano de la Independencia de los paises de Cen-
troamerica, 10 hicimos en 1750, porque la Ilustracion y las Reformas

17
I I I
90° 85° 80°

MAPA N 2 3
I7f
MAPA DE FORMACIONES VEGETALES
DE AMERICA CENTRAL
,p=' p

15 0

Fuente: Vargas . Gi lbe rt: ''Las formaciones


vegetates de America C('nt ral". En
Revista Pa isaj e Geografico . CE-
PEI GE, Ecuador, J 994

OCEANO

SIMBOLoci A
[7:71 Bosq ue tropical lludoso de baja althud PACfffCO MA R
~
~
Bosque Lropi cal caducifolio por la sequia
~ d e baja a ltitu d
CAR/BE
100
P~o9.Q't1
l.'.
Bosque de confferas

r::::l Bosqu e tropicai li uvioso de baja montaiia


~
Bosqu e tropical sem icaducifo lio estacional
D

de baja montaii. a
Bosque tropica l hig rofilo de alta mon tana y
paramo
r-:;m Saban a y matorral esp inoso
Iiii.::.I

Iil1l Manglares y vege taci6 n herbacea pantanosa 100 50 0 100 200 300

• Bosqu e de robles
90° 85 0
Borb6nicas introdujeron procesos de cambio muy significativos, que se
tornaron irreversibles.
El capItulo cuarto, Auge y crisis en las republicas agroexportadoras, analiza
el periodo 1870-1945, en el cuallos palses centroamericanos se incorpo-
raron plenamente a la economia mundial, mediante la exportaci 6n de
productos agrfcolas. El capitulo quinto , De la posguerra a la crisis, abarca
desde el ano 1945 hasta el triunfo de la Revoluci6n Sandinista, en 1979.
Finalmente, el sexto y ultimo capitulo, El pasado reciente, estudia la grave
crisis centroamericana de la decada de 1980, aunque en algunos aspec-
tos, se hacen proyecciones hasta la decada de 1990.
Ellibro contiene, ademas, un glosario en el que se definen algunos
terminos utilizados a 10 largo del texto. En los anexos se incluyen los nom-
bres de las plantas y los animales mencionados en la obra, y su respectivo
nombre cientifico, con el prop6sito de facilitar allector su iden tificaci6n.
La bibliografia comentada no es exhaustiva; salvo en casos absolutamente
necesarios, solo se menciona la bibliografia en espanol, ya que esta es mas
facilmente accesible para los lectores de nuestros paises.
Por supuesto, d ebe quedar claro que en ningun momenta hemos pre-
tendido decir «la ultima palabra», porque en el futuro estos conocimien-
tos podrian ser ampliados e incluso refutados, gracias al aporte de nuevas
investigaciones. Lo mas importante, por ahora, es que han de servir de
base para nuestras reflexiones.

19
Capitulo I

HISTORIA ANTIGUA
DE AMERICA CENTRAL

La Historia Antigua de America Central comprende ellargo periodo


entre la llegada de los primeros grupos humanos a estas tierras y la con-
quista espanola, a principios del siglo XVI. El primer encueiltro entre los
aborigenes de la regi6n y los extranjeros provenientes del otro lado del
oceano Atlantico ocurri6 durante el cuarto viaje de Crist6bal Col6n, en
1502. En esa ocasi6n el Almirante y sus hombres llegaron a las Islas de la
Bahia, en el Golfo de Honduras. De ahi se dirigieron hacia el sureste y
realizaron el reconocimiento de la costa del Caribe, desde el actual terri-
torio de Honduras hasta el litoral de Panama. Durante el recorrido se
detuvieron en algunos puntos y percibieron las marcadas diferencias de
los grupos humanos que los habitaban, en cuanto a lengua, ornamentos,
habitos alimenticios, organizaci6n social y otros detalles que llamaron su
atenci6n.
La existencia de las sociedades indigenas en America Central antes de
la llegada de los europeos, plantea una serie de preguntas claves acerca
de su historia antigua: ~quienes fueron los primeros pobladores de Ame-
rica Central?, ~de d6nde provenian?, ~c6mo lograban conseguir su subsis-
tencia?, ~cuales eran sus formas de organizaci6n social y politica?, ~que
concepci6n del mundo tenian? y ~cuales fueron los logros culturales mas
importantes que alcanzaron? La respuesta a estas inquietudes nos ayuda-
ra a comprender no solo a las sociedades de ese periodo, sino tambien las
etapas posteriores de la historia centroamericana, incluido el presente.
Dada la complejidad alcanzada por las sociedades aborigenes hemos
creido conveniente agruparlas de acuerdo con el espacio donde se desa-
rrollaron: Zona Norte, Zona Central y Zona Sur.

21
HISTORlA ANTIGUA DEL MUNDO MATh

La Zona Norte de America Central fue donde se desarro1l6 la civiliza-


ci6n maya, la cual alcanz6 la complejidad sociopolitica pro pia de los Esta-
dos. El estudio de los mayas ha despertado un gran interes porque pocas
sociedades complejas se han desarrollado en ambientes tropicales de tie-
rras bajas. Ademas, la tradici6n cultural maya plantea numerosas interro-
gantes ace rca de los patrones de interacci6n entre dife rentes grupos y
sobre la naturaleza d e las fronteras culturales.
El mundo maya ocupaba la secci6n sureste d e Mesoamerica. Esta area
cultural comprendia, ademas del norte de America Central, la parte cen-
tral y sur de Mexico. Las sociedades mesoamericanas compartian una se-
rie d e patrones culturales como la religi6n, la visi6n del mundo, el calen-
dario solar de 365 dias, el cicIo adivinatorio de 260 dfas; tambien el juego
de la pelota, actividad ceremonial y deporte al mismo tiempo. Sin embar-
go, esos rasgos presentan variaciones en relaci6n con Mexico. Incluso en
el mismo mundo maya no existi6 una total homogeneidad cultural. Para
alcanzar esos y otros logros fue necesaria una larga experiencia humana,
la cual arranc6 con la presencia de grupos de cazadores y recolectores.

Sociedades cazadoras, recolectoras y


agricultoras incipientes (poblamiento -1000 a. c.)

Los primeros habitantes del continente americano provenian de Asia.


Un descenso en el nivel del mar provocado por las glaciaciones facilit6 el
paso, a traves del estrecho de Bering, de pequeiios grupos de cazadores y
recolectores que se movian en busca de animales y plantas silvestres. Sus
utensilios eran livianos y sus campamentos de corta duraci6n, por 10 que
no dejaron restos arqueol6gicos llamativos. EI territorio de America Cen-
tral fue poblado por esos grupos hace mas de 10000 aiios. Los restos mas
antiguos de ocupaci6n humana han sido hallados en las montaiias de
Totonicapan, en Guatemala.
Durante los milenios siguientes, los grupos de cazadores se fundieron
poco a poco en otros mas amplios, que permanecian en sus campamen-
tos durante mas tiempo. Incluso es probable que en algunas zonas, donde
los recursos eran mas abundantes, llevaran una vida sedentaria. En. este
periodo aument6 el uso de alimentos de origen vegetal y desde muy tem-
prano se inici6 el cultivo de plantas en pequeiia escala. Ya para el cuarto
milenio a.C. la practica de la agricultura incipiente caracterizaba a algu-
nos de los grupos. El cultivo del maiz, producto fundamental en el area

22
mesoamericana, se difundi6 alrededor de 3 000 aiios a.C. Desde ClHon-
ces, e l sistema de roza y que ma se utiliza p ara su cultivo. El grano pas6 a
ser el complemento de otros productos alimentarios ob tenidos por me-
dio de la recoleccion y la caza.

ILUSTRACION NQ 1. SITIO ARQUEOLOCICO (L7 .1-5L), COSTA RICA. Basamento


circular de cantos qu e, hace I 000 anos, sostenia una casa d e m ad e ra y cana brava.

HISTORlA Y ARQUEOLOGIA
Una vision tradicional y eurocentrica concibe la Historia
como el estudio del pasado de las sociedades a partir de la apari-
cion de la escritura. Pero si aceptamos una definicion como la
sugerida por el historiador frances Lucien Febvre (1878-1956)
para quien la Historia es la ciencia del pasado humano, el pano-
rama se amplia al inc1uir a las sociedades agrafas.
La arqueologia es un tipo de historia que estudia el pasado
por medio de restos materiales, denominados artefactos. El acce-
so a los restos se obtiene, por 10 general, realizando excavaciones
en sitios previamente seleccionados en regiones mayores. La ar-
queologia tiene sus propios metodos de reconocimiento, prospec-
cion, excavaci6n e interpretaci6n . Asi, es po sible conocer acerca
del pasado de sociedades que no desarrollaron ningun sistema de
escritura.

23
LA ARQUEOLOGlA MAYA
Los conquistadores espanoles hallaron poco impresionan-
te el mundo maya, pues 10 conocieron cuando ya habia pasado
su apogeo. El in teres por el estudio de los mayas se remonta a
fines del siglo XIX, cuando se iniciaron excavaciones a gran
escala en Copan, ciudad maya localizada en el occidente de
Honduras. Tradicionalmente, los arqueologos se han preocu-
pado poria arquitectura monumental, los textosjerogllficos y
otras manifestaciones propias de las aristocracias mayas. Esa
perspectiva ha producido una vision distorsionada de la histo-
ria antigua de la Zona Norte de Centroamerica, entre otras ra-
zones, porque no se in teresa por los periodos tempranos de su
historia; centra su atencion en los grupos que habitaron en las
tierras bajas, en detrimento de aquellos que poblaron las tie-
rras altas; privilegia el estudio de los sectores aristocraticos y
opaca la comprension de otros estratos de la sociedad maya; y
excluye la posibilidad de utilizar la lengua como uno de los
elementos mas utiles para definir la tradicion maya.
Durante las dos ultimas decadas los mayistas han tratado
de superar esa estrecha perspectiva y sustituirla por otras mas
amplias.

Aldeas de agricultores (1000 a.G.-300 a.G.)

La aparicion de comunidades sedentarias en la mayor parte del mun-


do maya, alrededor del ano lOOO a.C., marca un momenta muy importan-
te de la historia de la Zona Norte. Las primeras comunidades sedentarias
eran de tamano variado; algunas contaban con varios centenares de resi-
dentes, pero entre ellos no existian grandes diferencias, porque eran co-
munidades igualitarias. Su economia no incluia la produccion intensiva
de alimentos, razon por la cual no disponian de abundantes excedentes.
Tampoco habian desarrollado una gran especializacion en el trabajo. Las
innovaciones tecnicas mas importantes observadas en este periodo son la
construccion de habitaciones permanentes y la aparicion de la alfareria.
Se fabricaba fragiles vasijas y figurillas de barro, de variadas formas, deco-
rados y estilos.

24
Esas sociedades aldeanas no eran totalmente diferentes de sus antece-
soras. La continuidad se manifiesta en la economia y en la manufactura
de utensilios de piedra. La subsistencia se obtenia tanto del cultivo como
de la recoleccion, pero la tendencia era a depender cada vez en mayor
grado de las plantas cultivables. Aunque algunos alimentos variaban de
una region a otra, el cultivo del maiz fue importante siempre, pues se
adapto a diferentes dimas, sue los y alturas. Las comunidades costenas
consumian pescado y otros recursos marinos, ademas de los productos
obtenidos mediante el cultivo. Asimismo, algunas comunidades distantes
entre si intercambiaban, ocasionalmente, productos exoticos.
Cuello, cerca de la costa del Caribe, es una de las comunidades seden-
tarias mas tempranas de las tierras bajas mayas. Se presume que su pobla-
cion era de unos 300 0 400 habitantes, agrupados en familias de cinco 0
seis miembros. Sus viviendas eran construcciones de troncos y bahare-
que, con techos de palma, colocadas sobre plataformas bajas. Sus activida-
des economicas eran una combinacion de la caza, la recoleccion y el cul-
tivo, y sus utensilios y ornamentos eran hechos de pedernal, concha y
pigmentos minerales locales. Otros materiales, como la piedra arenisca y
el jade, posiblemente fueron acarreados de lugares distantes. Los entie-
rros revelan que se trataba de una sociedad igualitaria. Pequeiias aldeas
semejantes a Cuello comenzaron a aparecer en diversas partes de la Zona
Norte, como se puede observar en el mapa NQ 4.
Algunas comunidades, como por ejemplo Chalchuapa y Los Naran-
jos, situadas en los limites del mundo maya, se convirtieron en importan-
tes centros politicos y economicos, y presentaban rasgos semejantes a los
del mundo olmeca, de la costa del Golfo de Mexico. Cuando los olmecas
entraron en una fase de declinacion politica, hacia el ano 600 a.C., mu-
chas comunidades mayas estaban creciendo, yen algunas de elIas comen-
zaban a surgir elites y un liderazgo politico centralizado. Las construccio-
nes publicas, probablemente ceremoniales, comenzaron a aparecer en
sitios como Altar de Sacrificios, KaminaljuyU, Komchen, Nakbe y en otras
partes.

Surgimiento de la civilizacion
maya (300 a.G. - 600 d.G.)

Hacia el ano 300 a.C. las sociedades mayas habian alcanzado un consi-
derable grado de complejidad y en elIas habian surgido entidades politi-
cas grandes y poderosas. Las comunidades mas desarrolladas controlaban
las regiones que las circundaban, y comenzaron a aparecer obras arqui-
tectonicas publicas muy elaboradas, fiel reflejo de lajerarquia alcanzada.

25
LAS TEMPRANAS COMUNIDADES
AGRICOLAS MAYAS
• Ozibikhal tllll

(;O IYO ••
m:
fVlI~XICO

••

Trinidad
••

C axacttlll •
Tika l •

C hi a pa Corzo
GOLFO DE
Altar d e Sac rifici os • • Ce ibal
HO NDURA S

••

Sakajul •

• El Port on

• Ka minalju yl'

• Chalc hu apa
OClo'ANO

o 50 100 150 200 Km


~"Iiiiiiiiiiiii~'!"!!Iiiiiiiiiiiiiiii
Los gran des logros in telectuales d e los mayas -como el calendario, rc sul-
tado de los vastos conocimientos astronomicos, y la escriturajerogllfica-
fueron alcanzados durante este periodo.
Para principios de la era cristiana habian surgido pro speros centros
politicos en casi todas las regiones del mundo maya. Algunos, como Tikal,
desarrollaron una considerable centralizacion del poder, pero la mayoria
de las entidades politicas eran, en esencia, inestables. Por tanto, resulta
sumamente dificil identificarlas, determinar sus llmites y conocer como
fueron las relaciones entre las diversas entidades politicas. El mapa NQ5
muestra la ubicacion de los centros mayas disicos.
En cuanto al tamano de la poblacion, las comunidades tipicas tenian
unos 2 000 0 3 000 habitantes; solo unos cuantos estados tuvieron un
crecimiento considerable. Entre ellos sobresale Tikal, pues en su centro y
en sus inmediaciones vivieron entre 20 000 y 30 000 personas.
El parentesco desempeno un papel clave en las redes de alianza polf-
tica, conexiones economicas y obligaciones sociales entre las diferentes
regiones mayas. Tikal, por ejemplo, mantuvo conexiones estrechas con
Teotihuacan, en el centro de Mexico. El sistema de linaje pudo haber
proveido la estructura basic a de la organizacion politica. La cabeza del
linaje dirigente se convertia en rey, y los cargos administrativos del estado
eran desempenados por los funcionarios del mas alto linaje. A los gober-
nantes se les relacionaba con las deidades, con el fin de legitimar su auto-
ridad. La escritura y el sistema calendarico facilitaron el registro de los
asuntos dinasticos.
En los centros politicos mayas situados en las planicies y el piedemon-
te del Pacifico y en todo el istmo de Tehuantepec, hasta la costa del Golfo
de Mexico, se construyeron monumentos con relieves esculpidos, los cua-
les,junto con las estelas, son los mejores exponentes de un arte con fines
politicos, es decir, como medio de legitimacion y control del poder. En las
tierras bajas la iconografia politica aparecio primero como decoracion
arquitectonica, en relieves repellados con estuco y pintados. Estos ador-
naban las fachadas de las plataformas en terrazas sobre las que se levanta-
ban los edificios publicos. Las superestructuras mas antiguas se encuen-
tran muy mal preservadas, pero probablemente las plataformas estuvie-
ron coronadas por templos, dedicados a rendir culto a los dioses y a resal-
tar la relacion de los linajes con esas deidades.

Organizaci6n social

No se conoce con exactitud el sistema de organizacion social, sin em-


bargo, las diferencias en «status» yen riqueza entre los gobernantes y 10i>

27
87'

MAPAN Q 5

UBICACION DE
CENTROS MAYAS CIASICOS
• D zibilch altl"1O 2 1'

Ch ic he n It z,l •

Ux m a l • YaX UI1 ~i.


• Kaba h
GOLFO Sayil •• La bn a

DE . Sa nta Ro sa X t3mpak
D zibilnonac •
MEXI CO • I-I ocho b

Becan •

Com alca lco
• Jo nuta
18' Calak mul •
18'

Tortu gue ro • Mirador.


Laman al •
AIt till I-I a
• Pomona Uaxactllll •
• Pie dras Negras . T ikal
La Mar •• EI Cayo • Na ranjo
Tonim a .
• Yax chi h'i n

Matul d e
Bonampak • San Jose • Car aco l
GOLFO DE
• • Ce ib al
Alt a r de sac rifici os •• IDo s Pilas
/-IONDURA S
Ag uateca

La Sierra
Quirigua • • Travesia

• Copan

• Cha 1chllapa

OCEANO

PA c iFICO

o 50 100 150 200 Kill


~~~~~

12' 12'
93' 90' 87'
campesinos, saltan a la vista. Las diferencias de posicion social se mani-
fiestan con claridad en la arquitectura residencial, en los entierros y en
los objetos de valor colocados en los depositos votivos. Los grupos mas
poderosos consumian productos exoticos, adquiridos por medio del in-
tercambio. La produccion especializada estaba desarrollandose, sobre
todo, en la fabricacion de bienes suntuarios. Existen dificultades para sa-
ber como vivian los estratos mas bajos de la sociedad, pues han dejado
pocos restos materiales que permitan realizar inferencias.
Por el momento, no es posible responder con certeza a preguntas
tales como cuantos estratos habia y que posibilidades tenia un individuo
para pasar de un estrato a otro . Sin embargo, los datos disponibles sugie-
ren diferencias regionales en las jerarquias sociales, y permiten afirmar
que las tempranas entidades politicas mayas eran sociedades de clase, en
cuyo sistema de jerarquizacion intervenian factores economicos y de «sta-
tus», heredados u obtenidos mediante el esfuerzo personal. En cuanto a
los patrones matrimoniales, aparentemente las elites promovian las unio-
nes con individuos de otras entidades, mientras la gente comtin practica-
ba la endogamia a nivel de comunidad.

Producci6n y comercio

Los sistemas de subsistencia de los mayas fueron eficientes. Los meto-


dos agricolas fueron mas aHa de la roza y quema y, en algunas areas, ya se
empleo la tecnica de cultivo en campos inundados. Las redes de inter-
cambio favorecieron el trafico de bienes u tilitarios y de subsistencia: sal,
pedernal, obsidiana, conchas marinas y jade, entre otros bienes. La difu-
sion de estilos ceramicos refleja las redes economicas y los patrones de
interaccion que se desarrollaron paralelamente. Por ejemplo, en los si-
glos anteriores a la era cristiana se difundio el estilo ceramico denomina-
do «chicane!» y en los primeros alios de la era cristiana se difundio la
ceramica policromada.
Las redes de intercambio no solo ligaron entre si a las diferentes en-
tidades del mundo maya, sino tam bien pusieron en contacto a estas con
otras de la Zona Central y de la Zona Sur de Centroamerica. Los detalles
acerca de como estaba organizado el sistema de intercambio permanecen
oscuros. Los comerciantes profesionales deben haber desempeliado un
papel clave en los intercambios a larga distancia, pero no se dispone de
pruebas para confirmarlo. Los estados, sin duda, controlaban el trabajo y
los recursos, y los sistemas de redistribucion deben haber servido para
promover la lealtad y la dependencia entre los intermediarios y el pueblo
en general.

29
ILUSTRACION NQ 2. TEMPLO 1. TIKAL. El Templo I d e
T ikal, ta mbien llamado Templo d e lJ aguar Gigante, es uno
d e los seis templos piramidales d e Tikal, la eiudad mas
importante de las tierras bajas d el sur. Nueve te rrazas su-
p erpuestas forman la piramide, sobre la eual fue construi-
do e l te mplo.

Religion

En cuanto a la religion, los mayas contaban con numerosas divinida-


des y con un sacerdocio especializado que se encargaba de organizar el
cuito, con el fin de legitimar a los gobernantes y los sistemas politicos. En
ese sentido, los estados mayas se pueden calificar de teocraticos. Los es-
pectaculares templos demuestran la importancia de la religion publica y
oficial. En cambio, la religion a nivel popular, los sistemas de creencias y
los ritos celebrados localmente, casi no dejaron huellas reconocibles.
La religion de las aristocracias mayas de las diferentes entidades poli-
ticas de las tierras bajas presenta importantes similitudes. Algunos rasgos
forman parte de una herencia religiosa panmaya e, inclusive, pan meso-

30
ILUSTRACION N!2 3. jEROGLIFICOS MAYAS. Las sociedades mayas tardias fueron las lmicas
que desarrollaron la escritura en la America precoJombina. Esto les permiti6 dejar constancia
de aspectos importantes de su hisloria y facilit6 la comunicaci6n entre grupos leu-ados cono-
ced ores de su sistema. En los ultimos allos se ha avan zado mucho en el desciframiento d e los
jeroglificos mayas. Sin e mbargo, el avance no ha sido todo 10 rapido que se quisiera, debido a
que los j eroglificos se prestan a diferentes interpretaciones.
americana. Pero est.o no significa que hubiese uniformidad total, pues las
deidades de los panteones locale s variaban, los rituales tambien eran dife-
rentes y la representaci6n arquitect6nica cambiaba de regi6n a regi6n y a
traves del tiempo.

Florecimiento de la
civilizaci6n maya (600 - 1200 d. C.)

El periodo comprendido entre los anos 600 y 1200 d.C. es considera-


do el de florecimiento de la civilizaci6n maya, pues fue cuando esta consi-
gui6 los mayores logros intelectuales y esteticos.
Durante los siglos VII YVIII d.C., las entidades politicas experimenta-
ron un rapido crecimiento econ6mico y politico en la mayoria de las re-
giones. Como consecuencia las diferencias entre las regiones se profundi-
zaron, y, al mismo tiempo, la interacci6n se volvi6 mas estrecha. El proce-
so de crecimiento fue mas impactante en las tierras bajas del sur, donde
las ciudades lograron mayor control politico sobre las comunidades que
les estaban subordinadas. La poblaci6n creci6, la diferenciaci6n social se
hizo mas marcada, extensas redes comerciales suplieron productos sun-
tuarios para el consumo de las elites, se emprendieron ambiciosos pro-
gramas de construcci6n de edificios publicos y el arte floreci6, siempre
ligado a su funci6n politica y religiosa.
Durante el periodo d e florecimiento las comunidades mayas siguie-
ron siendo relativamente pequenas. El tamano de Tikal era mas bien ati-
pico; la ciudad contaba con unos 60 000 6 100 000 habitantes. En todo el
estado, que controlaba alrededor de 2 500 Km 2 , la poblaci6n era de unos
400000 habitantes. Copan, ciudad de tamano intermedio, controlaba una
extensi6n variable de territorio y en su centro y el valle aledano residian
solo unas 20 000 6 25 000 personas.

Organizaci6n politica

El parentesco y los linajes continuaron desempenando un papel pro-


minente en la organizaci6n politica de los estados mayas, pero ya a fines
del periodo de florecimiento, al menos en Chichen Itza, se daba el paso de
un estado dinastico tradicional a una estructura de poder mas difusa. Este
cambio podria senalar el inicio de la organizaci6n federativa caracteristica
de las entidades politicas mayas al momento de la conquista espanola.
Aunque las form as de organizaci6n politica de las tierras bajas del
norte y del sur eran diferentes de las de las tierras altas, contaron con una

32
ILUSTRACION NQ 4. ESTELA 31 DE TlKAL. Las estelas son grandes bloques de piedra tallados,
los cuales se erigian frente a edificios publicos con el fin d e registrar datos d el calendario y
conmemorar hechos notables del pasado . Los relieves muestran figuras ricamente ataviadas,
e mblem as reales, relacion es entre los gobernantes y las divinidades y textos j e roglificos. La
ilustraci6n re produce figuras talladas que se e ncuentran e n la Este la 31 d e Tikal.

variedad de mecanismos de interaccion, como los vinculos matrimoniales


entre aristocratas, los contactos entre los grupos letrados y las redes eco-
nomicas que permitian la distribucion de materias primas y de bienes
suntuarios. La guerra constituyo otra forma de interaccion entre las socie-
dades mayas. Las actividades guerreras tenian una dimension ritual, pero
en ellas, se presume, murio un numero considerable de individuos. Las
guerras tambien modificaron la extension de las entidades politicas y la
disponibilidad de recursos, al afectar las redes de intercambio. La interac-
cion tambien se intensifico, durante este periodo, con las sociedades mexi-
canas de Mesoamerica y con las del resto de la America Central.

33
ILUSTRACION NU 5. ELJUECO DE PELOTA. COpAN. Eljuego de la pelota - actividad cere-
monial y deporte al mism o tiempo- fue un patron cultural com partido por las sociedades
mesoamericanas. En ese ju ego, dos equipos form ados por tres 0 cinco jugadores se disputa-
ban el control de una pesada pelota de caucho, la cual trataban de introducir en aros de
piedra. PresenciaI' los juegos era una actividad reservada a los nobles.

Resulta dificil, dada la cali dad de las fuentes de informacion disponi-


bles y la diversidad entre las ciudades, estudiar la organizacion interna de
estas. En cuanto a la estratificacion social se refiere, las diferencias de
clases fueron mas marcadas en este perfodo, aunque persistio cierta posi-
bilidad de movilidad social. Mientras las elites propiciaban alianzas matri-
moniales con sus iguales de otras ciudades, la gente comlin se casaba den-
tro de las propias comunidades.
La complejidad y escala de las actividades economicas alcanzaron su
apogeo en este perfodo. Con base en los patrones de asentamiento se pue-
de inferir un amplio crecimiento demografico y la intensificacion de la
produccion agricola, mediante tecnicas variadas: terrenos inundados, te-
rrazas, cultivo de arboles y huertas. La dieta continuo basada en el mafz,
pero se incremento el consumo de proteina de origen animal. En algunas
regiones, estos cam bios tuvieron un impacto ecologico negativo, como re-
sultado del aumento en la tala de bosques, la erosion, la alteracion de la
hidrologfa y la conversion de zonas boscosas en complejos arquitectonicos.
Las redes de intercambio fueron mas activas y extensas en este perio-
do. Los bienes comercializados incluian la obsidiana, el pedernal, eljade,
diversas piedras duras y pigmentos minerales; tambien productos alimen-

34
ticios como la sal y el cacao y artlculos utiles para la o rn amentacion, como
por ejemplo las plumas. El intercambio, con mucha seguridad , tambien
incluia otros productos p e recederos, pero esto no se puede constatar, pues
no dejaron huellas arqueologicas. La ceramica, en cambio, por ser resis-
tente a las inclemencias del tiempo, ofrece una idea mas clara acerca de
su produccion y distribucion. La informacion sobre produccion Utica es
escasa, pero hay indicios claros de que algunas comunidades, con acceso
a ese tipo de recursos, se especializaron en la fabricacion de instrumentos
de piedra.
En esta etapa, muchos de lc-s templos y monumentos funerarios fue-
ron disenados con gran sofisticacion, para responder al interes de algu-
nos monarcas ansiosos e n enfatizar el origen sobrenatural de su poder.

Colapso maya

Ya hacia el siglo IX se inicio un largo proceso de transformaciones


sociales y politicas, conocido como el colapso maya. Los poderosos esta-
dos de las tierras bajas del sur comenzaron a declinar. Los cambios, que se
comenzaron a suscitar gradualmente, fueron producto de una conver-
gencia de factores, entre los cuales sobresalen la presion demografica, la
degradacion del ambiente, la inestabilidad politica y los conflictos beJi-
cos. Los aristocratas y las instituciones estatales fueron afectados con la
decadencia, en tanto que los sectores sociales mas modestos continuaron
con su estilo de vida.
En las tierras bajas del norte, donde el surgimiento de los poderosos
estados centralizados fue tardio, el desarrollo fue diferente. Por ejemplo,
Chichen Itza, la mas grande de todas las entidades politicas mayas, no
empezo a surgir hasta en el siglo IX. El poderio de esta ciudad se reflejo
en su arquitectura publica y su elaborado arte politico.

Los estados mayas tardios


y la invasion europea (1200 d.C. - 1542)

El fin del poderio politico de Chichen Itza, hacia el ano 1200 d.C.,
marca el inicio del ultimo periodo del pasado maya anterior a la domina-
cion europea, que concluye con el establecimiento de capitales colonia-
les en las tierras altas y en el norte de Yucatan (la fundacion de Merida
data de 1542) .
Aunque algunas ciudades mayas de este periodo continuaron siendo
prosperas y poderosas, invertian po cos recursos en la arquitectura monu-

35
ILUSTRACION NQ 6. TEMPLO DE LOS GUERREROS. CHICHEN ITZA.
La arquitectura y el arte de Chichen Itza, con fin es politicos, mues-
tran fu ertes influen cias foraneas. Las image n es de Kukulcan -Ia ser-
piente emplumada, dios y heroe cultural- que aparece n en el Tem-
plo d e los Gue rre ros, reflejan relacion es del grupo gobernante con
el occide nte de Mesoamerica y con la region d el Go lfo d e Mexico.

mental y el arte politico. El dominic de Chichen Itza fue reemplazado


por el de Mayapan, p ero este estado no 10gr6 un control politico centrali-
zado; la nueva estructura polltica pareda mas bien la de un estado federa-
do con un ligero dominio sobre sus provincias. A mediados del siglo xv,
el control de Mayapan habia desaparecido por completo, y las antiguas
provincias eran totalmente independientes. Parad6jicamente, la fragmen-
taci6n polltica de los estados y la falta de prosperidad de las sociedades
locales retrasaron la conquista espanola.

36
I
Hi '

MAPAN Q 6

ESTADOS MAYAS TARDios

.. Dzibilchalttlll
lzamal ...

Mayapan ..
.. .. ..
Tibolon Valladolicl
Chichen
Chumayel ... Itza
GOLFO .. Man!

DE

M/~XJCO

I tzam kanac ...

Lamanai ..

... Topoxte
Toyosal ..

.. Zinacan tan
GOLFO DE

HONDURAS

... Naco
.
Zaculeu

.
Tajumu1co
..
Gumarcaah
.&. Mixeo Viejo
..
Iximche
()C/~ANO

PAciFICO

o 50 100
Las tierras bajas del sur eSluvieron controladas poria confederacion
de Tayasal. Esta region permanecio independiente hasta finales del siglo
XVII. En las tierras altas el poder estaba fragmentado entre diversos esta-
dos, de los cuales el mas grande y poderoso era el Quiche, con capital en
Gumarcaah. Pero su expansion fue interrumpida poria irrupcion espa-
nola. Hacia el oeste, en las areas tzendal y tzotzil, se encontraban otros
pequenos estados independientes, organizados en funcion del linaje y
con importantes conexiones con los mexican os; entre estos sobresale
Zinacantan.
Los estados mayas tardios presentan caracteristicas que los diferen-
cian de los poderosos estados del periodo anterior: el poder de los reyes
no era absoluto, los contrastes sociales eran menos marcados, las oportu-
nidades para la movilidad social eran mayores y las ciudades se volvieron
lugares mas residenciales. Estos cambios se patentizan en la reduccion de
la arquitectura publica monumental, del arte politico y de los textosjero-
glificos dinasticos.
Las redes de intercambio eran mas extensas que en los periodos ante-
riores, y los centros comerciales costeros estaban unidos por dinamicas
rutas comerciales maritimas. POI' un lado, mercaderes profesionales, a
menudo provenientes de sectores aristocraticos, tenian el control de los
intercambios, los cuales se realizaban en los mercados de todas las ciuda-
des principales. Por otra parte, existia la redistribucion de bienes pOI' par-
te de los gobernantes hacia otros sectores sociales, la que tambien funcio-
naba como un medio de asegurar la lealtad de los subditos y de mantener
el poder.
Para este periodo existe informacion abundante sobre los rituales y
las creencias. Sobresale la importancia de la astrologia, pues tanto para la
gente comun como para la nobleza, la influencia de los seres sobrenatu-
rales en los asuntos humanos era un tema fundamental en sus vidas.

LA ZONA CENTRAL: RECIONALISMO E INTERACCION

La Zona Central de Centroamerica abarca los actuales territorios de


Honduras y El Salvador, con exclusion del area maya, el flanco del Pacifi-
co de Nicaragua y los alrededores de los lagos de ese mismo pais. Se trata
de una zona cuyas caracteristicas esenciales son la complejidad cultural y
la segmentacion en pequenas regiones. En ella florecieron diversas socie-
dades originadas principalmente en las migraciones de grupos provenien-
tes del norte. La Zona Central puede ser considerada como la «frontera»

38
cultural con Mesoamerica. Los «limites» entre ambas son muy diffciles de
clefinir, no solo porque fueron muy fluctuantes, sino tambien a causa de
las gran des afinidades culturales. El comercio, la guerra y los movimien-
LOS migratorios fueron factores que favorecieron la difusion cultural. Las
frecuentes intrusiones de grupos mesoamericanos a partir del a110 1500
a.C. se prolongaron practicamente hasta la llegada de los espanoles.
Aparte de las numerosas influencias foraneas, las sociedades de la Zona
Central tam bien tuvieron un desarrollo propio en respuesta a sus necesi-
clades, al medio ambiente en e l cual se desenvolvian y a la interaccion con
grupos vecinos. Una de las caracteristicas mas sobresalientes de la Zona
Central es la variedad de patrones culturales regionales, que se revelan en
clistintos tipos ceramicos y arquitectonicos, en estrategias de sobreviven-
cia y en redes comerciales. Tambien existio una gran cantidad de entida-
des politicas, cada una con su propio caracter y su sistema de comunica-
cion con sus vecinos. Estas particularidades han hecho diffcil establecer la
cronologia de la historia de la Zona.
, ,
90° 87° ~ ~ Plan G rand e

c>
MAli CArUBI,
80 Ac r es

Naco Cuevas d e
Quimistan • • Travcsfa CuyameI •
,ern) Pal en-qu e . • Playa de los lTIucrtos

co~pan
Yamala
.
Gua ijoquilO
o Regi6n de los Naranjos
• Sa lit ron Viejo
Las c rll c it as •

Regi6Jl de Dulct!
• Yarurnela No mbre d e Cutnd
. . :-"'LL! "mpa Masab\l~ll
R.eo'loll '\.(V'"
San ta Ch~ l hu' a
l ;c.:tic ia. ~
L ",
Cuenca· L",\, Esperan za .
~E'i Par"liSO ,erqu lll Tena~lpua .
San Marcos

. •• VaU[ dc~ olil .:i ll


sCa ra. S an ". ~
"
, tlCI a Pedro f
Ptlxlla '"
OClo'ANO PAciFICO

I~ O PRINCIPALES REGIONES
Y SITIOS ARQUEOLOGICOS
EN LA ZONA CENTRAL

SIMBOLOG iA

• Silio arqueol6gico

o 50 100 200 Kill


~==-~~~
INVESTIGACION ARQUEOLOGICA
EN LA ZONA CENTRAL
La investigacion arqueologica en la Zona Central ha teni-
do un avance notable durante los ttltimos al1os. La mayor parte
de la informacion disponible proviene de Honduras y EI Salva-
dor pues en Nicaragua la investigacion arqueol6gica ha queda-
do ala zaga. POI' las caracterfsticas propias de la zona y los inte-
reses person ales de los investigadores, los estudios enfatizan en
las influencias externas, en especial las Mesoamericanas, y mues-
tran poca preocupacion por el desarrollo end6geno. Los inves-
tigadores tambien se han interesado pOI' desentrallar como fun-
cionaban las sociedades complejas y la conexi6n entre los gru-
pos humanos y el medio ambiente en que se desarrollaban. El
estudio de los tipos ceramicos ha sido una de las principales
preocupaciones de los arque610gos, y ha dado origen a la pro-
puesta de diversas cronologias.

Historia temprana de la Zona Central

En los territorios de Honduras y de Nicaragua se han realizado hallaz-


gos que sugieren una temprana presencia humana en la Zona Central.
Por ejemplo, cerca del Lago de Managua se localizaron huellas de pies,
acompal1adas de los cascos de un bisonte, que quedaron impresos en lava
volcanica aun sin solidificar. Algunos investigadores han sugerido que otros
sitios poblados tempranamente par el hombre son los atestiguados por
los petroglifos, comunes en el centro, el sur y el occidente de Honduras.
Estas pruebas fehacientes de presencia human a no han sido datadas con
exactitud .

Desarrollo de la complejidad social

1. En ellitoral Pacifico y en la region de las tierras altas occidentales. Hacia el


ano 900 a .C. aparecieron los primeros asentamientos humanos e n el
norte de la depresi6n central de El Salvador, y en las tierras altas centrales
y el noroeste de Honduras. Esos asentamientos presentaban varias carac-

40
ILUSTRACION N!l 7. PETROGLIFOS DE LA ZONA CEN-
TRAL. Los petroglifos son grandes piedras grabadas y pin-
tadas qu e se han en contrado en lugares geognifi cos estra-
tegicos. Su presencia en un si tio dado constituye una prue-
ba inequivoca de la presencia humana, pero hay difi culta-
des para fec harlos con exactitud. EI pe troglifo de la fo to-
grafia se e ncuentra en la parte central d e Honduras.

teristicas en comun: poseian una estructura social estratificada, contaban


con una tecnologia manufacturera sofisticada y usaban algunos bienes
importados, en especial de jadeita y obsidiana.
Los centros tempranos de la Zona Central concuerdan, cronol6gica-
mente, con el surgimiento de la primera cultura de gran complejidad en
Mesoamerica: la cultura olmeca de la costa central del Golfo de Mexico.
Los olmecas lograron montar una red de interacci6n que abarcaba largas
distancias. El comercio probablemente rue un estimulo para la penetra-
ci6n de elementos olmecas en la Zona Central, del ano 1000 al 400 a.C. La
misma ruta comercial rue utilizada posteriormente por los mayas, quie-

41
nes proIIlovieroIl el desarrollo de prosperos centros regionales, como
Quelepa, en el oriente de El Salvador, con toda probabilidad fundado
por un grupo mesoamencano.
El ana 250 d.c. marca un hito en la historia antigua de la Zona Cen-
tral. Fue entonces cuando hizo erupcion el vol can Ilopango, situado en
las tierras centrales de El Salvador. Como consecuencia de esa catastrofe,
alrededor de 10000 Km 2 de las planicies centrales del Pacifico de la Zona
Central fueron desocupados por los grupos humanos que los habitaban.
Es facil imaginar los trastornos provocados por el movimiento de perso-
nas hacia zonas aledanas. La recuperacion del territorio afectado debe
haber tardado decenas, si no cientos de anos. Sucesivas migraciones de
grupos mayas y mexicanos, entre los siglos VI Y XIII d.C., contribuyeron a
que el territorio se recuperara.
Quelepa no fue afectado por la erupcion del Ilopango, por estar loca-
lizado muy al este de la Lona de desastre. Este centro, que habra logrado
establecer importantes lazos con poblaciones situadas en las tierras altas,
despues de la erupcion, se relaciono con grupos del sur del istmo, pero
posteriormente fue sometido pOl' una elite maya mexicanizada.

2. En las tierras altas centrales y el noroeste. Como resultado de la catastrofe


de Ilopango el comercio maya se desplazo de la costa del Pacifico
hacia las tierras altas centrales y la costa noroccidental del Caribe. Ese
desplazamiento coincidio con el crecimiento de Copan y su conversion
en el estado maya mas oriental. Un rapido crecimiento economico, de-
mografico y polltico se observa en las tierras altas centrales yen el noroes-
te. El asentamiento de Salitron Viejo, en la region de El Cajon, valle del
rio Sulaco, constituye un buen ejemplo de como crecieron esos centros
en tamano y en complejidad. Entre los anos 500 y 1000 d.c. se levantaron
unos cuarenta asentamientos, la poblacion crecio, se establecio una es-
tructura pollticajerarquica y compleja y se estructuro una red de comer-
cio. Se desconoce por que todos esos asentamientos fueron abandonados
hacia el ana 1000 d.c.
En otras partes surgieron centros de ocupacion, pero mas pequenos,
mas dispersos y menos dinamicos. Gualjoquito, en el cursu medio del rio
Ultia, surgio al mismo tiempo que Salitron Viejo y desde el ana 500 d.c.
cayo bajo la orbita de influencia de Copan.
Entre el ana 400 a.C. y el 500 d.C., en el Valle de Sula surgieron cen-
tros regionales, los cuales posteriormente se convirtieron en unidades
pollticas independientes, que interactuaron y compitieron entre si y man-
tuvieron relaciones con los mayas. La ocupacion del Valle de Sula siguio
el mismo patron evolutivo de otros asentamientos de las tierras altas cen-
trales y el noroeste: lento crecimiento, rapido florecimiento y dec aden cia

42
repentina. Mientras el Valle d e SuI a era abandonado, en las ti erras altas
del sur comenzaban a darse cambios importantes; 10 mas relevante fue la
inmigraci6n de grupos m exicanos a la zona. Entre esos grupos sobre salen
los pipiles, hablantes de nahua, de cuya presencia atestiguan la arquitec-
tura d e los dos principales sitios -Cihuatan y Santa Maria, en territorio
hondureno-, la manufactura de artefactos de obsidiana y de pedernal, y
la producci6n cerami ca.
En el siglo XIII, Cihuatan y Las Marias fueron destruidas por el fuego,
probablemente como resultado de un conflicto con los nonoalcas, otro
grupo de origen pipil que, en el momenta del contacto con los espanoles,
controlaba la mayor parte del ce ntro y el oeste del actual territorio de El
Salvador.
En el noroeste, cerca de la costa del Caribe, floreci6 Naco, el mas
grande centro polftico regional y uno de los mas importantes cuando lle-
garon los espanoles. Naco man tenia nexos comerciales con las tierras al-
tas de Guatemala y con la peninsula de Yucatan. Resulta interesante que
mientras la elite polfticamente dominante probablemente tenia afinida-
des con los pipiles, el grueso de la poblaci6n provenia de las tierras altas
del este de Guatemala.

3. En la costa noreste y las tierras altas orientales. Por falta de hallazgos co-
rrespondientes a fechas mas tempranas, las primeras noticias de ocu-
paci6n humana en esta zona son posteriores al ano 600 d.c. Los asenta-
mientos eran pequenos y dispersos, pero hacia el ano 1000 d.c. sumaban
unos doscientos. Los mas representativos y los mejor conocidos se en-
cuentran en las Islas de la Bahia (Honduras), son Eigthy Acres, en Utila,
un complejo habitacional, y Plan Grande, en Guanaja, un centro ceremo-
nial. En la zona costera del noreste, despues del ano 1000 d.C., surgieron
extensos centros de poblaci6n, algunos con areas que sobrepasan las 25
ha., y con grandes obras de arquitectura.
Poco se conoce respecto de los grupos indigenas que poblaron los
bosques tropicales de las tierras altas del oriente de Honduras. En anos
recientes se han realizado estudios arqueo16gicos a 10 largo de los rios
Platano y Aner. Las descripciones de los sitios estudiados hacen suponer
que se dio una distribuci6n continua de los asentamientos hacia el inte-
rior del bosque tropical humedo de las tierras altas. Otros importantes
descubrimientos fueron realizados en las tierras altas regadas por el rio
Pisijire, donde se encontr6 restos arquitect6nicos alrededor de plazas y
construcciones que probablemente fueron juegos de pelota.
La ceramica hallada en todos estos sitios es identica. Algunos estudio-
sos opinan que su forma y tratamiento de la superficie escin asociados
con hablantes de chibcha y que se deriva de alguna tradici6n suramerica-

43
na, pew los proyectos de construcci6n a gran escala y los patrones de
asentamiento sugieren m as bien antecedentes mesoamericanos.
Aunqu e falta mucho por investigar, es posible adelantar que la ocupa-
ci6n de esta parte de Honduras debe h aber sido resultado de tardios
movimientos migratorios y presiones d emograficas provocadas por la ulti-
ma migraci6n pipil hacia el sureste.

4. En la costa pacifica de Nicaragua. Los primeros datos sobre la ocupaci6n


humana d e esta zona datan del ano 350 a.c. Se trata de grupos de
agricultores sedentarios que cultivaban principalmente maiz y comple-

EL APORTE DE LA LINGUISTlCA
El estudio de las lenguas indigenas contribuye al conoci-
miento de la dinamica de las poblaciones, a comprender el ori-
gen de los diversos grupos y los procesos migratorios que em-
prendieron. Gracias al aporte de los lingiiistas, se ha po dido
establecer que, en el territorio centroamericano, los mas im-
portantes movimientos migratorios fueron de norte a sur. Asi-
mismo los estudios muestran la existencia de una frontera lin-
giiistica, aproximadamente entre Nicaragua y Costa Rica.
La Zona Central constituy6 un verdadero mosaico lingiiisti-
co y etnico, tal y como 10 muestra el mapa NQ 8.
En el momenta de la invasi6n de los europeos, en la parte
norte predominaban los grupos con rasgos lingiifsticos y cultu-
rales propiamente mesoamericanos (pipiles y chorotegas); en
los extremos meridionales los grupos de tradici6n cultural y ori-
gen lingiiistico sureno (payas, sum us, miskitos, matagalpas y
ramas), pero tambien existian grupos con identidad dual, es
decir, con lengua de origen mesoamericano y emparentados
culturalmente con grupos de origen sureno, 0 viceversa.
En la puesta en march a de los movimientos migratorios in-
fluyeron los acontecimientos politicos mas relevantes acaecidos
en Mesoamerica, por ejemplo, la expansi6n teotihuacana, em-
prendida hacia el ano 500 d .c . Se han detectado dos vigorosos
movimientos migratorios de hablantes del nahua, como 10 mues-
tra el mapa NQ 9. Las incursiones nahuas en la Zona Central
tuvieron como efecto la introducci6n de variaciones culturales
y cam bios geopoliticos.

44
I
KT'

MAPA N "8

DISTRIBUCION DE LAS PRINCIPALES


LENGUAS INDiGENAS EN LA ZO NA CENTRAL Y SU VECINDAD

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PAciFI CO

o 50 100 150 200 Kill

mentaban su dieta con recursos obtenidos de los lagos y estuarios; por


otra parte, mantenian relaciones comerciales con los habitantes del norte
de El Salvador y con los de la peninsula de Nicoya. La produccion cerami-
ca alcanzo su mayor esplendor entre los aiios 800 y 1200 d .C. Yrefleja una
fuerte influencia mesoamericana.
Cuando llegaron los europeos, la planicie costera del Pacifico - des-
de El Salvador hasta Nicoya- estaba do min ada por los chorotegas, un
grupo de origen mexicano. El area de Rivas y la isla de Ometepe estaban
pobladas por los nicaraos, un grupo de hablantes de nahua que consiguio
desplazar a los chorotegas de ese territorio, empujandolos hacia el sur,
poco antes de la invasion europea.

45
PRINCIPALES TENDENCIAS MIGRATORIAS
DEL NORTE DE MESOAMERICA A LA ZONA CENTRAL
J
t MAR CARIB!,
l.slas de la j Bahia

r;o!fo dr'
- - - C h oro tegas
- - Pipiles
. ".. N icaraos
120 -'- ' -'- Na hu€l ~ pipiks
------ - NO llu alcos

o 50 100 150 200 Km

PA ciFICO

Geopolitica de la Zona Central en el ano 1500 d.C.

En el momenta del contacto con los espanoles, la Zona Central era


un complejo mosaico, poblado tanto por grupos de ascendencia mesoame-
ricana como de tradici6n suramericana. Algunos, como los pipiles, ha-
bian logrado desarrollar tan complejas instituciones politicas que podria-
mos hablar de un estado, otros en cambio funcionaban como seiiorios 0
cacicazgos y algunos eran grupos tribales. Los espanoles tuvieron grandes
dificultades para comprender esas sociedades en toda su complejidad. A
menudo, en las cr6nicas, se les denominaba «provincias» a los senorios
gobernados por un senor 0 cacique principal. Sin embargo, es importan-

46
te cuestionar la validez del uso de este vocablo, a la luz de los hallazgos
arqueol6gicos, dado que podria ocultar diferencias importantes entre las
diversas entidades politicas.
Hacia el ano 1500 d.c. los grupos nahua pipiles ocupaban el area cen-
tral y occidental de El Salvador. Los espanoles, tras la conquista, dividie-
ron ese territorio en dos provincias: IzaIco y CuscatIan. La zona al este del
rio Lempa estaba poblada por los lencas, y las islas del Golfo de Fonseca
estaban ocupadas por len cas y nahuas. En la punta de Cosiguina (Nicara-
gua) habia un grupo de hablantes de nahua; al territorio que ocupaban
se Ie conoce como Nahuatlato. Mas al sur existia un senorlo nahua-nica-
rao denominado pOI' los espa110les provincia de Tezoatega. Un poco mas
al sureste se encontraba la provincia de Nagrando, de lengua subtiava, y
las provincias chorotegas de Imabite y Denocherri. La faja costera del
Pacifico nicaraguense comprendida entre los lagos y el oceano era cono-
cida como Provincia de Nicaragua; colindaba al sur con e l territorio cho-
rotega de Nicoya. La regi6n al norte de los lagos era ocupada pOl' mata-
galpas y ulvas.
El actual territorio de Honduras estuvo ocupado, esencialmente, pOl'
lencas y misumalpas. Existe evidencia de que entre los anos 1300 y 1500
d.c. el Valle de Naco se convirti6 en un territorio multietnico, donde gru-
pos de origen nahua pipil ejercian su hegemonia. Los valles de Aguan y
Agalta, tam bien en el noroeste de Honduras, estuvieron poblados pOl'
hablantes de una variante nahua.
Taguzgalpa,o «la casa dond e se funde el oro», se encontraba en la sec-
ci6n oriental del territorio actual de Honduras. Inmigrantes nahuas pobla-
ron ese territorio, a mas tardar, en el siglo XIV. Por razones desconocidas
hasta ahora, 10 abandonaron hacia el ano 1450 d.C., Y10 dejaron en poder
de sus antiguos pobladores, grupos de lenguas misumalpa y chibcha. En la
parte central de Honduras los conquistadores identificaron las provincias
de Naco Cocumba, Papayeca-Chapagua, Peicacura, Zulaco-Maniani, Cho-
luteca-Malalaca, Olancho, Cerquin y Los Lares. (Ver mapa N!2 10)

Patrones institucionales

Produccion local y red regional de intercambio


Los alimentos mas importantes de la Zona Central eran el maiz, los
frijoles y el ayote, complementados con diversos tipos de tuberculos, se-
gun las regiones. Los productos mas relevantes para el intercambio eran
el cacao, el algod6n y la sal. La provincia de IzaIco era la mas importante
productora de cacao, pero tambien se cultivaba en otros puntos, como en
la costa pacifica de Nicaragua, donde 10 producian los nicaraos. El cacao

47
I
900

MAPA N Q 10

PROVINCIAS INDIGENAS Y SUS PRINCIPALES CENTROS POLITICOS

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rOVlIlCla
MAR CARlBE
~ de Papayeca

""

OCEANO PAciFICO

SIMBOLociA

_ _ Limite de provincia

• Cabecera de provincia

r>"-/·:.:':J Plantacion de cacao

o 50 LOO L50 200 Km

87"

era un monopolio detentado por ciertos grupos, que 10 cultivaban y redis-


tribuian a cambio de otros productos.
La provincia de CuscatLin estaba especializada en la producci6n de
algod6n e indigo. En la costa del Padfico de Nicaragua se produda el
tabaco y la coca. Entre los arboles cuyos frutos eran consumidos por los
indigenas de la Zona Central estaban los zapotes, aguacates, maranones,
ciruelos, nances, coyoles y mameyes. El perro y el pavo, los dos animales
domesticos mesoamericanos, tambien existfan en la Zona Central.
Si bien es cierto much os artfculos eran elaborados en forma rudimen-
taria, otros fueron hechos por especialistas, como los cuchillos de obsidia-
na y la ceramica policromada. Tambien hubo una especializaci6n manu-

48
facturera en la produccion de calzado, en la orfebrerfa, en la alfarerfa no
utilitaria, entre otros artfculos. A nivel local el intercambio de produc-
tos se realizaba en los mercados 0 «tianguiz». Entre los nicaraos el comer-
cio estaba exclusivamente en manos de las mujeres. El intercambio co-
mercial a nivel regional conformo extensas y complejas redes. En ese co-
mercio se logro un importante grado de especializacion; as!, pOI' ejemplo,
la provincia de Izalco intercambiaba cacao pOI' textiles provenientes de
Cuscatlan.
El tributo estuvo muy generalizado entre los pipiles, los nicaraos, los
nahuas y los lencas. Se pagaba en especie (cacao, maiz, plumas, petates,
ornamentos), en servicios personales para obras publicas 0 con fines
militares.
La amenaza latente de la guerra contribuyo a mantener el delicado
equilibrio producido por la competencia para obtener ciertas materias
prim as y el intercambio de productos. Las intenciones expansionistas de
grupos vecinos eran coartadas manteniendo ejercitos en constante alerta.

Instituciones politicas y sociales indigenas

Todas las sociedades indfgenas de la Zona Central - con excepcion


de las que poblaban la Taguzgalpa- cran sociedades muy estratificadas.
Los pipiles y los nicaraos estaban organizados en tres estratos: nobles,
indigenas comunes 0 tributarios y esclavos. La pertenencia a esos estratos
era h ereditaria. Sin embargo, existia una restringida movilidad social as-
cendente, con base en los meritos personales; tambien era posible el des-
censo social, resultado del castigo pOI' faltas cometidas. En caso de angus-
tias economicas, los indigenas podian venderse a si mismos 0 a sus hijos
en calidad de esclavos.
Los nobles ocupaban los mas altos cargos civiles y religiosos. En las cro-
nicas se les denomina primero como senores y mas tarde se les llamo «caci-
ques» (palabra de origen arawak). Algunos nobles formaban parte del con-
sejo d e ancianos, organo asesor del senor y de los capitanes de guerra.
Entre los nicaraos y los pi piles los senores eran los encargados de controlar
y distribuir la tierra y gozaban del privilegio de estar eximidos del pago d e
tributos. En algunas provincias se hacia una distincion entre el senor su-
premo de la unidad politica mayor y otros senores de menor rango.
El estrato mas amplio estaba constituido pOI' los tributarios, quien es
practicaban la agricultura, la caza, la pesca, diversas actividades artesana-
les, el comercio y la guerra. La esclavitud no era necesariamente heredita-
ria. Se distinguia entre los esclavos de guerra y los esclavos de rescate, es
decir, obtenidos mediante el comercio .

49
En cuanto al matrimonio, el patron predominante era el endogamico
de clase y de provincia. Entre los lencas el matrimonio era un medio para
establecer alianzas politicas regionales. El sistema legal entre los nicaraos
se basaba en la costumbre (derecho consuetudinario); en tre los pipiles
existia un cuerpo de leyes mas elaborado, aunque tam bien estos se guia-
ban por la costumbre.

Practicas religiosas y cosmovisi6n

Los sacerdotes pi piles, nicaraos y nahuas vivian e n templos 0 en resi-


dencias cercanas a estos. Existia un sacerdote supremo 0 papa; cuando
moria, el sucesor era escogido entre sus hijos 0 los hijos de otros sacerdo-
tes. Entre las tare as fundam entales de los sacerdotes estaban llevar el re-
gistro de los acontecimientos mas importantes, los ritos y los limites de las
tien-as del grupo. Todo ella se consignaba en libros especiales 0 codices,
hechos en pie 1 de venado.
Entre los dioses a los cuales rindieron culto, sobresalen Tamagasted,
dios de la lluvia, y Cipatkonal, creador del ca1endario. Para los pipi1es,
Itzcueye y Quetzalcoatl fueron dos deidades importantes. El sacrificio
humano era practicado como ofrend a a los dioses; tam bien el autosacrifi-
cio, durante e1 cual se extrafa sangre de la 1engua, las orejas y los genita-
les. E1 canibalismo ritual fue practicado por los nicaraos y por los chorote-
gas. Los ritos sagrados eran dirigidos por los sacerdotes, el senor y los
principales. Las danzas tam bien formaban parte de sus celebraciones reli-
glOsas.
Los nicaraos usaban un calendario de 260 dias, correspondiente al
tonalpohualli azteca. Aunque no se tiene certeza, es muy probable que
ese calendario se usara tam bien en otras sociedades de la Zona Central.

EL SUR DE AMERICA CENTRAL

La Zona Sur de la America Central comprende el sureste de Nicara-


gua, Costa Rica y Panama, y forma parte de un area mayor denominada
por los especialistas «Area de Tradicion Chibchoide», ya que uno de sus
rasgos mas sobresalientes es el claro predominio de las lenguas p ertene-
cientes a la familia linguistica chibcha. Aunque se ha logrado detectar la
presencia de rasgos culturales de origen mesoamericano y otros propios
de Suramerica, las sociedades que poblaron esta zona durante la historia

50
- - -- - -- - - - - - - - -- - - - - - - -- _ . _ - - . I

LA INVESTIGACION ARQUEOLOGlCA
EN LA ZONA SUR
La investigacion arqueologica ha tenido un desarrollo con-
tinuo en Costa Rica y Panama, no asi en Nicaragua.
Hasta hace alrededor de veinte anos, los arqueologos se ocu-
paban mas de describir los restos materiales encontrados en las
zonas de estudio, que de explicar cuando y por cuales socieda-
des fueron producidos esos restos. Durante los ultimos anos,
nuevos enfoques teoricos han permitido el paso de la descrip-
cion a la explicacion. Los arqueologos se han preocupado por
salvar evidencias arqueologicas en peligro de desaparecer, y por
emprender estudios sistematicos sobre patrones de asentamiento
y de subsistencia, explotacion de recursos y otros aspectos que
les permitan comprender la dinamica social y cultural de las
sociedades antiguas de la Zona Sur.

antigua desarrollaron rasgos propios. Su pasado se ha dividido en dos gran-


des periodos: la sociedad comunitaria apropiadora (12000-1000 a.C.) y la
sociedad tribal productora (1000 a.c.-1550 d .C. ) Estos a su vez se dividen
en varias etapas, de acuerdo con el tipo de respuesta social ante un deter-
minado ambiente y una determinada estrategia cultural y tecnologica.

La sociedad comunitaria apropiadora

La presencia humana en la Zona Sur de laAmerica Central se remon-


ta al periodo glacial tardio, hacia el ano 10 000 a.C., aunque es posible
que en investigaciones posteriores se obtengan evidencias de fechas mas
tempranas. Los sitios arqueologicos que han permitido obtener informa-
cion para fechas tan antiguas son muy pocos. El mas grande hallado hasta
el momenta es Finca Guardiria, en el Valle del Reventazon, en Costa Rica.
Los arqueologos han encontrado objetos como puntas de proyectil, ras-
padores, cuchillos, perforadores y martillos, de donde se infiere que se
trataba de grupos humanos errantes, pequenos, que vivian en habitats
selvaticos y se dedicaban a la caceria de mamiferos gran des y medianos.
Entre los anos 9000 y 8000 a.C. aproximadamente, ocurrieron cam-
bios climaticos importantes, y las especies animales mas perseguidas por

51
ILUSTRACION NU 8. PUNTAS DE PROYECTIL. Las
puntas d e proyectil mostrad as en la fotografia fu e-
ron localizadas en sitios di sta ntes e ntre si, general-
m e nte en co ntextos arqueol6gicos alte rados. Se trata
d e puntas d e proyec til bifaciales, qu e fueron utiliza-
d as por los cazadores del pe riodo glacial tardio para
m atar animales gran des.

los cazadores paleoindios desaparecieron. Los grupos humanos debieron


adaptarse a esas condiciones; aunque se seguia practicando la caceria, la
recoleccion y la domesticacion accidental de plantas se convirtieron en
actividades cada vez mas importantes. Las palmeras empezaron a desem-
penar un papel relevante en la alimentacion regional, 10 mismo que algu-
nos tuberculos. En esta fase persistio la tradicion de fabricar objetos bifa-
ciales mediante ellasqueo a presion. Tambien comienzan a aparecer pe-
quenas piedras de moler, utilizadas para machacar plantas. En esta etapa,
que se extiende hasta el5000 a.C., se sentaron las bases para la evolucion
hacia la agricultura en milenios posteriores.

52
Entre e15000 y el1000 a.C. se produjo un crecimiento de la poblaci6n
relacionado con la importancia creciente de la domesticaci6n de plantas
y una mayor sedentarizaci6n; por tanto, los ~·_sen tamientos eran mas ex-
tensos que en la e tapa anterior. En ell os aparece una m ayor variedad de
herramientas usadas para la preparaci6n d e alimentos y para la manufac-
tura d e fibras vegetales. Ademas del cultivo de plantas domesticadas en la
Zona, fu e ron introducidas algunas otras, como el maiz y las calabazas,
provenientes del area mesoamericana. Tanto las plantas foraneas como
las nativas eran cultivadas en huertas, en las cuales se usaba la practica d e
roza y quema en la preparaci6n del suelo. De e sta practica existen eviden··
cias en ellitoral d el Pacifico, p ero no se han en contrado pruebas d e que
se hiciera 10 mismo en el Atlantico.
La explotaci6n de man glare s y estuarios, la recolecci6n y la caza fue-
ron actividades complementarias. Las tecnicas de pesca mejoraron du-
rante esle periodo. Sin embargo, el cambio tecno16gico mas sobresalien-
te fue la aparici6n de la ceramica en Panama, en el tercer milenio a.c.
(ceramica Monagrillo). No cabe duda de que la alfareria panamena fue
de origen local, pues muestra unas tecnicas y un estilo propios muy dife-
rentes de los de otras ceramicas tempranas en el resto de America. Los
origenes de la alfareria en el territorio de Costa Rica estan menos claros.
A la mas antigua se Ie conoce con el nombre de «Tronadora» y es un poco
mas tardia que la de Monagrillo. A pesar d e los cambios demograficos y
culturales del periodo, la sociedad sigui6 siendo culturalmente sencilla, y
las comunidades bastante igualitarias.

La sociedad tribal productora (1000 a.G.-155() d.G.)

A partir del ano 1000 a.C., los cambios sociales y culturales fueron mas
abundantes y la dinamica social se torn6 mucho mas compleja. Las socie-
dades dependieron cada vez mas de la domesticaci6n de plantas, por 10
que se dice que el primer milenio a.C. corresponde al modo de vida agri-
cultor. La agricultura dio impulso al crecimiento demografico y, al mismo
tiempo, favoreci6 la concentraci6n de los asentamientos. Los grupos hu-
manos se interesaron por radicar en regiones de suelos fertiles y profun-
dos. Tanto en Panama como en Costa Rica, fueron ocupadas tierras mas
altas, en las faldas del sistema montanoso central que recorre el istmo,
como se puede observar en el mapa NQ 11, que muestra los principales
sitios arqueo16gicos estudiados en la Zona Sur. Cerro Punta, en Panama, y
Tronadora, en Costa Rica, son un buen ejemplo de ese tipo de sitios. La
adaptabilidad del maiz a diferentes habitats facilit6 las migraciones, sin
embargo la vegecultura sigui6 siendo una actividad agricola importante.

53
I ,
8 1° 78°

MAPANQ 11
12°
PRINCIPALES SITIOS ARQUEOLOGICOS DE LA ZONA SUR

MAR CARlBE

go

I. d e l Caiio

oa'ANo PACfflCO .. "D'


ft '
Is. de Perlas

o 100 200 KIn

La Caiiaza
I. Coiba 810 ~tJ.cafe tal
84° 78°
Los artefactos liticos hallados en los sitios e studiados ayudan a enten-
der la importancia del desarrollo del cultivo de granos (semicultura) en
algunas partes. La aparicion frecuente de metates con SllS manos indica
claramente una mayor dependencia del cultivo del maiz. Algunos sitios 0
zonas se especializaron en la fabricacion de esos y de otros instrumentos
de piedra. Las tecnicas de fabricacion ceramica se volvieron mas com ple-
jas, y su decoracion vario e incluso sirvio de medio para la comunicacion
de mensajes.
A partir del ano 500 a.c., aparentemente, los grupos se constituyeron
en entidades politicas diferentes, integradas en el marco de ciertos terri-
torios. Esto se infiere por la diversidad de los sitios y de los artefactos
hallados en ellos. La ceramica adquiere gran sofisticacion, y en el arte
litico destacan los objetos de lujo, como los collares, las mazas y los asien-
tos decorados.
El periodo 300 a.C. - 500 d.C. se caracteriza por la especializacion agri-
cola y el surgimiento de la sociedad cacical 0 compleja. El nuevo modo de
vida se denomina de los agricultores especializados. En los primeros qui-
nientos anos d .c. e l numero de sitios descendio, pero su numero de po-
bladores y su complejidad aumentaron. Los principales asentamientos se
ubi caron en llanuras aluviales y en valles fertiles, en las tierras altas. Para
entonces la agricultura de granos ya estaba consolidada, como se infiere
por la abundante presencia de maiz y de frijoles h allados en las excavacio-
nes arqueologicas. Tambien se han encontrado restos de plantas que de-
muestran la practica de la vegecultura y de la recoleccion. Los objetos
suntuarios minuciosamente confeccionados dan fe de la produccion ex-
cedentaria de alimentos, pues esta permitio que algunos individuos pu-
dieran dedi carse a otras labores. Los restos arquitectonicos de este p erio-
do son de material p ereced ero.
La agricultura intensiva basada en el maiz propicio la formacion de
un mayor numero d e e ntidades sociales y politicas, e ntre las cuales se
generaron tensiones, fruto de la competencia. Las aldeas agricolas indife-
renciadas die ron paso a las sociedades de rango, yal surgimiento de uni-
dades politicas mas complejas, con territorios definidos y centros de con-
trol politico.
La sociedad cacical se consolido durante el periodo 500-800 d. C., Y
conocio su apogeo a partir del ano 800 d.c. Este d esarrollo fue interrum-
pido por la conquista espanola. En esta ultima etapa de la historia antigua
de la Zona Sur, existfa un a amplia experiencia acumu lada en cuanto a la
agricultura y a la explotacion de recursos disponibles en las distintas zo-
nas ecologicas. En algunas de estas, donde las condiciones eran adecua-
das para el cultivo de granos, se producian intensivamente maiz, frijoles v
calabazas. La recoleccion, la vegecultura, la caceria y la pesca tambien

55
eran practicadas por los agriclllto res de granos, aunque en menor medi-
da. En otras zonas, men os apropiadas para los granos, esas actividades
seguian teniendo una importan cia fundam ental. Sin embargo, la interac-
cion entre los diferentes grupos garantizo el acceso a productos propios
de las d istintas zonas altitudinales.
Las especies mas abundantemente cazadas fu eron el venado de cola
blanca, los sainos, el guatuso, el tepezcuintle y el armadillo. En e l litoral
del Atlantico la caza de mamiferos terrestres fue mayor que en el Pacifico.
La fauna acuatica ocupo un lugar importante en la dieta. En el Atlantico
panamet10 se consumian el manati y cliversas especies de tortugas mari-
nas; ademas, se pescaba con anzuelo y cuerda algunas especies de peces
abundantes en los arrecifes coralinos y en los manglares. En los asen ta-
mientos situados en la costa del Pacifico los peces e ran el recurso alimen-
tario por excelencia. Otros procluctos del mar, como moluscos y gastero-
podos, eran un complem e nto en la clieta de los grupos que hahitaron e n
ambos litorales.
Los objetos hall aclos en enterramientos y sitios muestran claramente
la utilizacion de diferentes m aterias primas: oro, tumbaga (aleacion de
oro y cobre), ceramica, piedra, algodon, madera y hueso, entre otros
materiales. Obviamente, de estos se han conservado mejor los resistentes
al tiempo y no asi los de materiales perecederos. Las distintas zonas se
dedi caban al trabajo de alguno 0 de varios materiales, 10 cual condujo a la
especializacion en la fabricacion 0 produccion de algunos bienes. POl'
ejemplo, los articulos d e oro 0 tumbaga, la sal y las perlas solo se trabaja-
ban 0 producian e n ciertas zonas y por eso tuvieron un papel importante
en el intercambio interregional.
La estructura social y politica del periodo se enmarca dentro de la 01:'
ganizacion tribal, la cual esta dominada pOl' las relaciones de parentesco.
Se parte d e un ancestro comun para formal' diversos niveles de integra-
cion: familias, linajes, poblados, subtribus y tribus. Las relacion es y la co-
operacion eran mas intensas en los grupos mas pequenos. Al evolucionar,
el sistema triballlego a alcanzar niveles de integracion cada vez mas com-
plejos, como los cacicazgos y los senorios. En estos existia ya un regimen
politico regional, a cuya cabeza se encontraba un cacique, 0 bien, un senor
de senores. La mayor centralizaci6n del po del' permitiria una organizacion
con mayor capacidad economica, politica, guerrera, productiva y cultural.
Los investigadores han conseguido identificar «provincias estilisticas»,
durante este periodo, en los territorios actuales de Costa Rica y Panama.
Se trata de territol'ios extensos que compartiel'on caracteristicas en la ce-
ramica y la litica; asimismo los simbolismos usados en la decoracion el'an
diferentes de los de otras regiones, y contribuian a formal' una identidad
cultural mas amplia. Los habitantes de las provincias estilisticas intel'ac-

56
ILUSTRACION N!l9. ESCALINATA EN EL SITIO GUAYABO. COSTA RICA. (Fotografia corlesia
del Museo Nacional d e Cos ta Ri ca) . G uayabo de Turrialba es un o de los sitios a rqu eo l6gicos
mas illlporta ntes de Costa Ri ca. Po r su dilll e nsi6n y sus estructuras se infiere que rue un ce nt ro
m u)' illlportante, desde el cll a l seJ'io res 0 caciques controlaba n un a m pli o te rritorio.

tuaban de manera muy compleja. Las relaciones a veces eran de coopera-


ci6n; en otras ocasiones habia antagonismos tan profundos que, inevita-
blemente, conducian a la guerra.
Los asentamientos tenian una ubicaci6n geogni fica acorde con la fun-
ci6n que desempeiiaban: unos se hallaban e n zonas adecuadas para la
agricultura; otros, en sitios d e importancia estrategica para el intercam-
bio; y algunos, en lugares apropiados para algun fin particular, como la
recolecci6n de moluscos 0 la extracci6n de sal. Se pued e concluir que los
sitios nucleares 0 de control administrativo tenian el apoyo de los perife-
ricos, y que estaban comunicados entre si por caminos y calzadas.
La economia estaba fuertemente vinculada con la religi6n, pues esta
establecia la divisi6n en clanes - unos nobles y otros que no 10 eran-.
Cada clan tenia asignado un te rritorio determinado, por 10 que existian
diferencias en el acceso de estos a los bienes materiales, y sus miembros se
encargaban de realizar diferentes trabajos. De ahi la importancia de los
variados mecanismos d e circulaci6n y administraci6n de bienes: la reci-
procidad, el intercambio y la distribuci6n.
La reciprocidad era el intercambio equitativo de bienes entre dos 0
mas grupos, el cual para funcionar adecuadamente requeria de una es-
tructura social basada en grupos similares. EI intercambio se realizaba

57
ILUSTRACION N° 10. TAMBOR DE MADERA. Los objetos d e ma-
dera encontrados e n los sitios arqueol6gicos son rams, pOl·que los
materiales perecede ros no resisten el paso de l tiempo y se destru-
yen. EI tambor de madera de la fotografia fu e hallaclo en el sitio
Retes (Costa Rica), cubierto por una capa de ceniza volcanica que
favoreci6 su conservaci6n.

con base en el valor asignado a los bienes; inclufa desde los que se lleva-
ban a cabo con grupos cercanos hasta los que tenfan lugar dentro de la
misma provincia estilfstica e incluso mas aHa, con sociedades que residfan
en el resto de Centroamerica, Mexico y Colombia. La redistribuci6n con-
sistfa en concentrar los bienes en un centro 0 en manos de un grupo de
mayor jerarqufa, para luego distribuirlos en otras localidades. Los bienes
eran transportados principalmente a pie y, en menor medida, utilizando
la navegaci6n en canoas y balsas.

58
La religion indigena era el fundamento sobre el cual d escansaba la
ideologia y sacralizaba todos los aspectos de la vida social. Se puede afir-
mar que esas sociedades de la Zona Sur de America Central poseyeron un
sistema sagrado de control sociopolitico. Estas sociedades poseian una
religion animista, pues para los indigenas el mundo natural y el sobrena-
tural estaban inseparablemente unidos. En su vision del mundo, la comu-
nicacion se podia establecer entre la persona con su grupo social, con la
naturaleza y con los seres sobrenaturales. La relacion con la naturaleza
era tan estrecha, que ciertos anim ales eran adoptados como simbolos por
diferentes grupos. La estructura circular de casas y templos estaba re1acio-
nada con la cosmovision indigena en los grupos del Area de Tradicion
Chibchoide. La observacion minuciosa de la naturaleza permitio a las so-
ciedades indigenas acumular un acervo importante de conocimientos en
campos como la medicina, la botanica, la zoologia, la astronomia, la ar-
quitectura y la ingenieria.
Como conclusion se puede afirmar que, al llegar los espanoles, las
sociedades indigenas de la Zona Sur (mostradas en el mapa NQ 12) , pre-
sentaban las siguientes caracteristicas: una economia basada en la agricul-
tura y complementada con productos de la caza, la pesca y la recoleccion;
el maiz era el producto agricola mas destacado; la estructura social y poli-
tica se fundaba sobre el sistema de parentesco; los asentamientos eran de
diverso tamano y complejidad; las unidades territoriales se hallaban bajo
la autoridad de senores y caciques; existia especializacion de los grupos
en la produccion de determinados bienes y complejas redes de intercam-
bio; y, finalmente, los conflictos belicos alteraban de tiempo en tiempo el
panorama territorial y politico.

Balance de la Historia antigua

Resulta sumamente dificil establecer una comparacion sistematica de


la historia de las sociedades aborigenes de las Zonas Norte, Central y Sur
de America Central, porque los intereses de los estudiosos han privilegia-
do ciertos campos. En el estado actual del conocimiento solo es posible
lograr algunas conclusiones relacionadas con cada una de esas zonas.
En la Zona Norte, los mayas alcanzaron la organizacion sociopolitica
denominada Estado, con toda su complejidad politica, economica, social
y cultural. Tal complejidad tuvo su mas clara manifestacion en la existen-
cia de una arquitectura monumental. Tambien lograron desarrollar los
sistemas de subsistencia mas intensivos; la agricultura conto con condicio-
nes ambientales propicias y e1 desarrollo de tecnicas como la construc-
cion de drenajes. La Zona Norte logro mayor integracion que otras areas,

59
I I I
84° 8 1° 78°

MAPANQ 12
12°
ZONA SUR: OCUPACION EN viSPERA DE LA CONQUISTA ESPANOLA
NICARAO

SIMBOLociA

N ica rao Toponimia basad a e n cri lerios lin g iiisticos


Bonica Toponimi a basada e n c riL e rios socia-poli ti cos (cacicazgo)

0\
1;3.?~{\ MAR
Corobici . ~
Garablto
. ,, PacoCl
Orot111a ({....., ' 0. CA RIBE
Chomes ~":) 1"0$1
'1'<-1] .
Chorotega Currid aba ""('0 Ip/(,;
Pacaca .~ ~o
"'~ <1,. S
.V CI,} /J
Talamanca
l<is

go TERIBE
OCEA N O PAciFICO

Movere Terareq ue
Tabraba
~~Q'
o 100 200 Km

Fue nte: Ibarra. Eugenia (1994)


84° 8 1°
- - - - -- - - - - - - - - - ---

APORTE DE LA ETNOHISTORIA
La etnohistoria es una disciplina especializada que se ubica
entre la antropologia y la historia. Su aporte ha sido muy im-
portante para conocer como eran las sociedades indigenas an-
tes de la conquista espallola.
Los espanoles prodlueron una gran cantidad de manuscri-
tos, como informes, canas y documentos legales de diverso tipo.
Los mas acuciosos escribieron libros sobre sus vi,~es y conquis-
tas. Aunque todos esos escritos tienen una vision eurocentrica
(como es logico), e l etnohistoriador es capaz de ex traer de ell os
10 que Ie in teresa, apoy{mdose en la teoria antropologica. De
esta forma «descubre» datos sobre la organizacion sociopoliti-
ca de los grupos indigenas, sus tecnicas de trabajo, sus mecanis-
mos de intercambio, SliS lenguas y sus costumbres, la organiza-
cion espacial de los pueblos y el tipo de viviendas que cons-
truian, entre otros aspectos. En algunos casos es posible com-
plemental' la informacion que brindan las fuentes escritas con
la obtenida mediante el trabajo de campo.

producto, en gran medida, de las intensas redes de comunicacion interre-


gion al. Las relacion es extrarregion ales tambien fueron m uy in ten sas, es-
pecialmente con Mesoamerica, y, en m enor grado, con las sociedades de
la Zona Central.
El estudio d el pasad o d e los indigenas d e la Zona Central ha enfatiza-
do en las afinidade s existen tes con la Zona Norte y la naturaleza y el al-
cance d e la interaccio n region al entre las socied ad es complejas de ambas
zonas. Este tipo de interes h a d ado como resultad o que no se haya inves-
tigad o acerca de las e tap as m as tempranas d e su historia, como la existen-
cia d e pequenas socied ad es d e recolectores y cazad o res y el surgimiento
de sociedades agricolas sedentarias. Sin embargo, es p o sible especular
que esas sociedades d ebie ro n d e ser muy similares a las de la Zona Sur.
Los rasgos de orige n m eso americano son reconocibles en las socie d a-
d es d e la Zona Central d esde aproximadamen te el an o 1000 a.C., en tanto
q u e en la Zona Sur se e mpezaba a perfilar una frontera cultural con Meso-
am erica.
A partir del ano 800 d. c. las influencias mesoamericanas en la Zona Cen-
tral tienen su explicacion en los movimientos migratorios que afectaban a1

61
territorio comprendido desde el oeste de Honduras hasta la peninsula de
Nicoya, hoy dia parte de Costa Rica. Los d esplazamientos tambien afectaron
la Zona del Caribe de America Central, aunque en men or medida.
En la Zona Central se desarrollaron sociedades complej as, cacicazgos
y estados incipientes, e inclusive algunas fueron poderosas sociedades ex-
pansionistas por 10 que e l equilibrio entre los grupos vecinos era fragil y a
menudo hubo gue rras. Una extensa red de intercam bios existfa entre di-
versas Zonas, a pesar de las dificultades d e las comunicaciones regionales.
Las sociedades aborigenes de la Zona Sur fueron m as bien producto
d e una evoluci6n end6gena. Su interacci6n con Mesoamerica fue menor,
y conforme se avanzaba en el tiempo se con solidaba la filiacion con el
noroeste de Suramerica. En la Zona Sur la agricultura se vio favorecida
con la introducci6n de diversos cultivos fonineos, especialmente el maiz,
el cual fue sometido a procesos de adaptaci6n . Las sociedades de la Zona
Sur se mantuvieron como cacicazgos y senorfos, como resultado del desa-
rrollo historico propio. En el momenta d el contacto con los espanoles
existian mas de treinta cacicazgos en el actual territorio panameno; en e l
territorio costarricense se ha logrado identificar dieciocho cacicazgos que
inte ractuaban entre s1.
En suma, a principios d el siglo XVI las sociedades aborfgenes d e la
America Central formaban un verdadero mosaico. Algunas habian logra-
do desarrollos sumamente complejos, como los mayas y los pipiles, 0 esta-
dos mas incipientes, como los que hubo en Naco, Nicarao y Taguzgalpa.
Una buena parte d el territorio estaba organizado en senorios y cacicaz-
gos, como los len cas 0 los que existieron en los actuales territorios d e
Panama y de Costa Rica. En las tierras bajas del Caribe, al este de Hondu-
ras y de Nicaragua, habitaban pueblos tribales y cacicales, dispersos, eco-
n6mica y politicamente inde pendientes.
El impacto de la conquista espanola fue mayor en las poblaciones in-
digenas concentradas en las tierras de uso agricola. Paradojicamente, los
bosques tropicales humedos se convirtieron en areas de refugio para los
nativos que intentaban escapar de la dominaci6n colonial. Aunque una
de las consecuencias mas inmediatas de esa dominacion fue el abrupto
descenso de la poblacion autoctona, esta ha logrado, durante cinco si-
glos, sobrevivir y resistir a diversas presiones, y h a brindado un innegable
aporte a la herencia cultural de todos nuestros paises.

62
Capitulo II

EL REGIMEN COLONIAL

A partir de 1502, ano en el cual Cristobal Colon y sus acompanantes


recorrieron la costa Caribe del istmo, se inicio la exploracion del territo-
rio de America Central. Casi dos decadas de exploraciones iniciales ha-
bran precedido al proceso de conquista, que se caracterizo, en un primer
momento, por los enfrentamientos armados entre las huestes invasoras y
las sociedades nativas. Los espanoles disponfan de una vasta experiencia
militar, producto de cinco siglos de luchas contra los musulmanes para
reconquistar la Peninsula Iberica. Contaban, ademas, con los caballos,
que les brindaban una gran movilidad en las batallas y les permitian ate-
morizar a los nativos, y disponfan de armas de fuego y de metal muy supe-
riores a las de estos. Como resultado de esa lucha desigual, el territorio
centroamericano y sus habitantes quedaron sometidos a una situacion
colonial. Esto significa que la potencia conquistadora impuso sus intere-
ses y organizo los espacios conquistados a su conveniencia, sometio a sus
habitantes a diversas formas de explotacion economica e impuso meca-
nismos de subordinacion ideologica, de manera mas 0 menos exitosa.
Este capitulo presentara, en primer lugar, la conquista de Centroame-
rica y sus consecuencias sobre las sociedades autoctonas, sin olvidar la
resistencia que estas opusieron a los invasores europeos. Enseguida se
analizara como se consolido el control espanol en el Reino de Guatema-
la, y tambien cuales fueron las caracteristicas de la economia, las princi-
pales instituciones administrativas y los mecanismos de dominacion de
que se valio Espana para controlar estos territorios.

LA CONQUISTA ESPANOLA

La conquista de Centroamerica se realizo desde tres frentes: de Pana-


ma salieron las expediciones que descubrieron y conquistaron el litoral

63
pacifico d e Costa Rica y Nicaragua; de Mexico las huestes que al mando
de Pedro de Alvarado sometieron los actuales territorios de Guatemala y
El Salvador; y de Mexico, Panama y las Antillas los grupos que partieron a
explorar y conquistar diversos puntos del Caribe centroamericano. Hon-
duras y la parte oriental d e El Salvador, como veremos mas adelante, fue-
ron escenario d e conflictos entre huestes invasoras provenientes de los
diferentes frentes de conquista.
El primer espacio conquistado en «tierra firme» fu e una parte del
actual territorio de Panama. El mismo Col6n intent6 establecer un asen-
tamiento espanol en la zona (Santa Maria de Belen, en 1503), pero, debi-
do a la resistencia indigena y a la falta de medios, debi6 abandonar la
ciudad . Anos mas adelante, en 1510, Vasco Nunez de Balboa fund6 Santa
Maria la Antigua del Darien, en la costa del Golfo de Uruba, y, en 1513,
comand6 una expedici6n que atraves6 el istmo y descubri6 el Oceano
Pacifico, al cual denomin6 «la mar del Sur».
La Corona, informada del hallazgo del Pacifico y de la probable exis-
tencia de grandes yacimientos de oro en Panama, tom6 la determinaci6n
de fun dar una Gobernaci6n, Castilla del Oro, y a su cabeza nombr6 a
Pedrarias Davila. Este, con el fin de eliminar a Balboa, en quien veia un
rival, mont6 una farsajudicial y Ie conden6 a muerte. Enseguida puso en
ejecuci6n su plan d e establecer una serie de asentamientos, con el fin de
posibilitar la comunicaci6n interoceanica y buscar una ruta hacia el oriente.
Asi surgieron Ada y la ciudad de Panama, en 1519. Panama se convirti6
en punto de partida de las expediciones que se dirigieron hacia el oeste
para llegar hasta los territorios sometidos por Cortes.

Expediciones

Hubo tres importantes expediciones que partieron desde Panama. La


primera, en 1519, sali6 al mando de Juan de Castaneda y de Hernan Pon-
ce de Le6n. Durante este viaje, cuyo objetivo era el reconocimiento del
litoral pacifico, descubrieron la peninsula de Osa, el Golfo Dulce y el Golfo
de Nicoya. Aunque los indigenas mostraron una actitud hostil, no hubo
enfrentamientos armados. Los espanoles 10 evitaron debido al reducido
numero d e hombres de la expedici6n (cuarenta, aproximadamente). Eso
no fue obstaculo para que antes de retornar a Panama, en el Golfo de
Nicoya, lograran la captura de varios nativos, que mas tarde sedan suma-
mente utiles a los espanoles como interpre tes.
La segunda exp edici6n se hizo a la mar en 1523, y fue organizada por
Gil Gonzalez Davila. A la altura de Chiriqui, en Panama, sus miembros se
dividieron en dos grupos: el primero, con el propio Gil Gonzalez a la

64
cabeza, recorrio la costa pacffica de Costa Rica; el segundo, comandado
por Andres Nino, continuo por mar hasta el Golfo de Nicoya, donde am-
bos habian acordado encontrarse. Los hombres que realizaron el recorri-
do por tierra entraron en contacto con los indigenas, con quienes inter-
cambiaron algunas mercaderias de escaso valor por oro. Alllegar a Nico-
ya, Gil Gonzalez, inform ado de la existencia de un cacique mas poderoso,
decidio continuar su marcha hacia el noroeste y descubrio ellago de Ni-
caragua; tambien pudo observar que la poblacion aborigen era mucho
mayor en ese sector dellitoral que en el recorrido anteriormente. Luego
su avance fue obstaculizado por los guerreros del cacique Diriagen. Mien-
tras tanto, Andres Nino continuo su rumbo y descubrio un golfo, al cual
bautizo con el nombre de Golfo de Fonseca.
Desde el punto de vista economico, la empresa de Gil Gonzalez Davila
y Andres Nino fue realmente exitosa, pues los conquistadores lograron
despojar a los indigenas de una gran cantidad de oro. Sin embargo, cuan-
do regresaron a Panama, tal tesoro desperto la codicia de Pedrarias Davi-
la, quien trato de capturar a Gonzalez Davila. Este logro escapar hacia
Nombre de Dios, en el Caribe de Panama, y de alIi partio rumbo a La
Espanola.
Motivado por el exito de Gil Gonzalez, Pedrarias Davila organizo la
tercera expedicion, la cual puso al mando de Francisco Hernandez de
Cordoba. Los barcos se dirigieron directamente al Golfo de Nicoya, don-
de los soldados desembarcaron para continuar su recorrido por tierra.
Uno de los resultados mas importantes de esta expedicion fue la funda-
cion, en 1524, de los primeros asentamientos espanoles situados en la
vertiente del Pacifico de Centroamerica: Villa Bruselas, en la banda orien-
tal del Golfo de Nicoya, hoy territorio de Costa Rica, y las ciudades de
Leon y de Granada, en Nicaragua. Tales fundaciones permitian legitimar
los derechos de los conquistadores, por 10 que Hernandez de Cordoba
procedio a realizar los prim eros repartimientos de indigenas entre sus
soldados.
Otro de los objetivos de Hernandez de Cordoba era explorar el terri-
torio. En 1524, una hueste j efeada por el capitan Andres Garabito realizo
una «entrada» hacia el interior de Costa Rica. En Nicaragua descubrieron
el rio Sanjuan 0 Desaguadero y un grupo al mando de Hernando de Soto
siguio explorando en direccion noroeste y llego hasta la zona de Olancho
(Honduras) . No obstante, tras chocar con otro grupo conquistador al
mando de Gil Gonzalez Davila, decidio retroceder.
Hernandez de Cordoba rompio con Pedrarias y trato de obtener la
Gobernacion de Nicaragua. En 1526, al enterarse de esto, Pedrarias par-
tio rumbo a Nicaragua, con el objetivo de castigar a los rebeldes. Tras un
juicio sumario, Hernandez de Cordoba fue decapitado. Una vez controla-

65
da la situaci6n, Pedrarias se dirigi6 a la conquista de Honduras, pero en
Olancho se encontr6 con otro grupo espanol, al mando de Quesada Saave-
dra, lugarteniente de Hernan Cortes. El choque entre ambas huestes sir-
vi6 de aliciente para una gran sublevaci6n indigena, que logr6 expulsar a
los espanoles de la zona de Olancho, al men os temporalmente .
Pedrarias obtuvo la Gobernaci6n de Nicaragua y, luego organiz6 un
viaje de exploraci6n del rio Sanjuan, del cual encarg6 a Martin de Estete.
Durante esa expedici6n los espanoles atravesaron parte de las llanuras
de! norte de Costa Rica, descubrieron la desembocadura del rio Sanjuan
y recorrieron la costa de la Mosquitia. A su regreso, Estete fue enviado a
explorar hacia el territorio salvadoreno, pero este ya estaba controlado
por los Alvarado y las fuerzas de Estete fueron rechazadas.
La Gobernaci6n de Pedrarias en Nicaragua fue muy conflictiva. Con
el se inici6 el trafico de esclavos indigenas hacia Panama y Peru, y la ex-
tracci6n de oro de los r10S con mana de obra nativa. Estas actividades
tuvieron nefastas consecuencias para los indigenas y originaron grandes
discordias entre los espanoles, quienes competian por obtener riqueza y
poder.

.rl. .-/',
/
j
\/ / \l.. '-'--1 ENTRADAS ESPANOLAS
.f LI . TEMPRANAS
f. I ./'.----
./

I
GUATEMA LA i

HO N DURAS

SIMBOLociA NI CARAGUA

---- - Hern{lIld ez de Co rd oba, 1524


- - - - Hern{lIl Pon ce, I ,~ 16
MAR
......... Alvarado, 1523 - 1524
- - Ni ii o COil Gil G. D~lvila , 1523 CA RIBI,'
_ ._._- Gil G. D,\vil a, 1524
JOo- H ernan COrLes, 1524

OCi'ANO

PAciFICO

o 80 160 Kill
Conquista de los tantonos de Guatemala y El Salvador

En Centroamerica, los conquistadores tuvieron que enfrentarse con


cada sociedad indigena por separado. Sin embargo, lograron tornar ese
factor adverso en una ventaja, al ser capaces de identificar los conflictos y
aprovechar las enemistades y tensiones entre sociedades vecinas, princi-
palmente en Guatemala.
La conquista de los actuales territorios de Guatemala y El Salvador se
puede considerar como una prolongacion de la conquista de Mexico. Fue
el mismo Hernan Cortes quien proyecto continuar el avance hacia el sur,
y encomendo esa tarea a dos de sus capitanes: Pedro de Alvarado y Cristo-
bal de Olid. Al primero Ie encargo avanzar por las tierras situadas cerca
de la costa del Pacifico; al segundo Ie ordeno dirigirse por mar con direc-
cion al Golfo de Honduras.
La tropa al mando de Alvarado salio a fines de 1523, de la ciudad de
Mexico, engrosada por indigenas tlaxcaltecas y mexicanos. Despues de
atravesar el istmo de Tehuantepec, penetraron en Soconusco, donde no
encontraron mayor resistencia de parte de los nativos; pero un poco mas
adelante, cerca de donde esta situada la ciudad de Quetzaltenango, de-
bieron enfrentar a guerreros quiches, al mando de Tecun Uman. A pesar
del gran numero de indigenas en pie de guerra, los caballos y la superio-
ridad de los armamentos de los espanoles causaron estragos entre los
quiches, quienes incluso perdieron a su jefe.
Los cakchiqueles pensaron que una alianza con los espanoles les ayu-
darla a terminar con los quiches, sus enemigos tradicionales. Alvarado
aprovecho la situacion para aprovisionar a su tropa y para conseguir mas
indigenas auxiliares. Los quiches fueron derrotados en un nuevo enfren-
tamiento, y sus jefes decidieron invitar a Alvarado a su capital, Utatlan 0
Kumarcaaj. Alvarado, temiendo una trampa, los capturo y conde no a morir
en la hoguera; tambien ordeno incendiar la ciudad. En Iximche, la capi-
tal de los cakchiqueles, el jefe espanol organizo la conquista de los tzutu-
hiles, cuyo centro mas poderoso era Chuitinamit, en las orillas dellago
Atitlan. A mediados de abril de 1524 los tzutuhiles fueron vencidos.
Las huestes espanolas partieron enseguida a la conquista de Itzcuinte-
pec (Escuintla), con el apoyo de miles de indigenas auxiliares. De nuevo
la superioridad de los espanoles se impuso: los guerreros nativos fueron
vencidos y su capital fue quemada. De alIi, Alvarado y sus hombres se
dirigieron hacia el actual territorio de El Salvador, donde vencieron a los
pipiles en las batallas de Acajutla y Tacuzcalco. Los jefes indigenas se pre-
sentaron ante Alvarado aparentando aceptar su sujecion, pero al mismo
tiempo abandonaron sus poblados. Esta actitud de resistencia pasiva en-
furecio a Alvarado, quien ordeno matar a los dirigentes pipiles, y realizar

67
ILUSTRACION NQ 11. BATALLA DE ESCUINTLA. Ellien-
zo de Tlaxcala describe la conquista de Mexico-Tenochti-
tlan y del norte de Centroamerica, por parte de las fuer-
zas de Hernan Cortes, auxiliadas por indigenas tlaxcalte-
cas. Ellienzo fue dibujado con el fin de justificar la peti-
cion enviada por los tlaxcaltecas a la Corona, para que
les eximiera del pago de tributos, en recompensa por los
servicios prestados. La ilustracion muestra la batalla de
Escuintla.

correrias destinadas ala captura de nativos para esclavizarlos. Sin embar-


go, en esa entrada no pudo someter Cuscatlan, capital de los pipiles.
De regreso a Iximche, Alvarado fund6 la ciudad de Santiago de los
Caballeros, el 25 de julio de 1524. Los enormes tributos en oro exigidos a
los cakchiqueles motivaron la sublevaci6n de estos. Entonces, quiches y
tzutuhiles, movidos por un deseo de venganza, se unieron a las tropas es-
panolas para tratar de exterminar a los cakchiqueles. La hostilidad de los
indigenas hizo que los conquistadores abandonaran Santiago de los Caba-
lleros, pero los espanoles no cejaban en su intento de dominaci6n de otros
grupos nativos. Asi organizaron una expedici6n punitiva contra los poko-
manes, quienes fueron vencidos en la ciudad fortificada de Mixco.
Alvarado regres6 con otro ejercito a El Salvador, y, en mayo de 1525,
estableci6 el primer asiento de la Villa de El Salvador. Ese mismo ano,
mientras Pedro d~ Alvarado y sus hombres se dirigian hacia el actual terri-
torio de Honduras, don de se encontrarian con Cortes, ocurri6 en Guate-

68
mala una sublevaci6n casi general. Al regresar, los espanoles debieron
hacer frente al hostigamiento de los indigenas.
En agosto de 1526 Alvarado se ausent6 de Guatemala, con el fin de
viajar a Espaiia a conseguir la Gobernaci6n de los territorios descubier-
tos. Pedro de Portocarrero, hombre de su entera confianza, qued6 a car-
go de las campanas punitivas contra los indigenas sublevados. En 1527 se
restableci6 la capital en el Valle de Almolonga, pero las rebeliones indige-
nas continuaron y, entre 1528 y 1530, hubo numerosas campanas milita-
res. Estas no cesaron hasta que los cakchiqueles ofrecieron su rendici6n,
en 1530, a Pedro de Alvarado, quien ya se encontraba de regreso en Gua-
temala, tras cuatro anos de ausencia.
El sometimiento de Cuscatlan fue emprendido por una expedici6n
militar que parti6 de Guatemala en 1528. En ese mismo ano se refund6la
ciudad de San Salvador y los indigenas fueron sometidos a encomienda,
10 cual provoc6 rebeliones y el abandono de los pueblos por los nativos,
quienes optaron por refugiarse en las montanas. Otra columna de espa-
noles parti6, en 1530, de Guatemala, con el fin de expulsar a un grupo
proveniente de Nicaragua, que intentaba apoderarse de parte del actual
territorio de El Salvador, para incorporarlo a los dominios de Pedrarias
Davila. Esa misi6n fue cumplida, y, para legitimar la ocupaci6n del territo-
rio por parte de los hombres afines a Alvarado, fue fundada la Villa de
San Miguel de la Frontera.
El sometimiento definitivo de las sociedades aborigenes que habita-
ban en el actual territorio de El Salvador no ocurri6 sino a principios de
la decada de 1540. Al igual que sucedi6 en Guatemala, dos factores se
conjugaron para que la conquista se prolongara: por un lado, la tenaz
resistencia de los indigenas a ser sometidos; y, pOI' otro lado, la inestabili-
dad de los conquistadores, siempre dispuestos a partir hacia otras regio-
nes en busca de fortuna.

Conquista del territorio hondureiio

La primera expedici6n de conquista fue organizada por Gil Gonzalez


Davila, quien arrib6 a la costa norte de Honduras en 1524, proveniente
de Santo Domingo. Despues de recorrer la costa y de realizar la primera
fundaci6n (San Gil de Buenaventura, trasladada luego con el nombre de
Nito), Gonzalez Davila y sus soldados se dirigieron rumbo al Valle de Olan-
cho, en busca de oro. AlIi se encontraron con las fuerzas enviadas desde
Nicaragua pOI' Francisco Hernandez de C6rdoba, a las cuales lograron
derrotar. Gil Gonzalez tambien fue enterado del desembarco de otra hues-
te, cerca de Puerto Caballos. Era un grupo enviado por Hernan Cortes, al

69
mando de Cristobal de Olid, con el fin de que indagara si por esos rum-
bos se hallaba el «estrecho dudoso», que se suponia permitfa el paso en-
tre los dos oceanos. Al desembarcar en Honduras, Olid intento romper
sus nexos con Cortes. Este, al enterarse de la sublevacion, envi6 una fuer-
za punitiva al mando de Francisco de Las Casas, pero fracaso.
Gonzalez Davila cayo en manos de tropas e nviadas a su encuentro por
Cristobal de Olid. No obstante el dominio d e este duro poco, porque en
un descuido suyo Las Casas y Gonzalez Davila lograron capturarlo, y lue-
go 10 juzgaron y condenaron a muerte. Los soldados de ambas expedicio-
nes se unieron y fundaron Trujillo, en 1525.
Cortes, sin noticias de sus hombres, decidio partir el mismo hacia
Honduras por via terrestre. A su llegada logro imponer un poco de orden
y fortalecer la dominacion espanola, para 10 cual importo plantas, ganado
y provisiones de Cuba y de Jamaica. Ademas, las poblaciones indigenas
aledanas a Trujillo fueron controladas. Cuando Cortes se vio obligado a
regresar a Mexico, dejo como lugarteniente a Hernando de Saavedra (0
Quesada Saavedra), pariente suyo y hombre de su entera confianza, quien
organizo varias incursiones al interior del pais. Una de ellas fue a la re-
gion de Olancho, donde los indigenas se sublevaron, debido ala explota-
cion de que eran objeto . Los espanoles se vieron obligados a abandonar
la region de Olancho y Puerto Caballos.
Mientras tanto, la Audiencia de Santo Domingo nombro a Diego Lo-
pez de Salcedo como Gobernador de Honduras, adonde llego en octubre
de 1526. La presencia de Salcedo en territorio hondureno fue n efasta
para los indigenas, porque durante su administracion se incremento la
esclavitud. Salcedo realizo una incursion a Leon de Nicaragua, por consi-
derar que esa ciudad se hallaba dentro de su jurisdiccion. Los vecinos,
temerosos de una sublevacion indigena, primero 10 recibieron bien, pero
mas tarde 10 entregaron a Pedrarias Davila. Este 10 mantuvo prisionero
durante seis meses, y no 10 libero hasta que Ie pago una fuerte suma de
dinero y acepto que el gobierno de ese territorio no Ie correspondia.
Ala muerte de Salcedo, en 1529, Andres de Cerezeda asumio interi-
namente la gobernacion de Honduras. Durante su mandato se continuo
con la practica de esclavizar a los nativos, para enviarlos a las Antillas 0
para utilizarlos en los lavaderos de oro. La poblacion indigena de los alre-
dedores de Trujillo se vio diezmada a tal pun to, que los espanoles decidie-
ron trasladarse a Naco. Entre los espanoles se formaron dos facciones:
una favorable a Cerezeda y otra que se oponla a el. Sus opositores decidie-
ron solicitar ayuda a Pedro de Alvarado, a quien Ie ofrecieron la goberna-
cion de Honduras. Alvarado, considerando que esa oferta era favorable a
sus intereses, d ecidio aceptar. Sin embargo, en 1535 la Corona nombro a
Francisco de Montejo como Gobernador de Honduras-Higueras. Enton-

70
ces Alvarado trato de llegar a un acuerdo con Mon tejo: como este era
Gobernador de Yuca tan , Ie ofrecio Chiapas a cambio de Honduras-Hi-
gueras.
Pedro de Alvarado se presento en Higueras, al mando de una tropa
de ochenta soldados espanoles y alrededor de tres mil indigenas. Los na-
tivos de las planicies cercanas al rio Ulua resistieron, pero finalmente fue-
ron vencidos. En 1536, los espanoles fundaron San Pedro de Sui a, desde
donde organizaron nuevas expediciones hacia otras regiones. Al poco tiem-
po Alvarado debio partir hacia Espana, y los asentamientos de espanoles
quedaron a cargo d e Juan de Chavez, fundador de la ciudad de Gracias a
Dios.
La Corona no acepto el pacto Alvarado-Montejo y ordeno al segundo
asumir la Gobernacion de Honduras-Higueras. Como en ese momenta
no podia hacerse presente , Montejo envio a Alonso de Caceres para que
asumiera la gobernacion en su nombre, mientras el se daba a la tare a de
preparar cuidadosamente la campana de conquista y colonizacion de
Honduras. Montejo adquirio ganado para alimento de las tropas y para
desarrollar la ganaderia en Honduras, consiguio toda clase de provisio-
nes y pertrechos militares, y planeo la estrategia por seguir: el ingresaria
al territorio de su gobernacion por via terrestre y otro grupo 10 haria por
mar.
En marzo de 1537 Montejo llego a Gracias aDios, donde logro impo-
ner su poder. Tambien logro controlar los territorios cercanos a San Pe-
dro de Sula y el Valle de Naco. Uno de los lugartenientes de Montejo,
Alonso de Caceres, partio a completar la conquista del Valle de Comaya-
gua, fundo Santa Maria de Comayagua y repartio encomiendas en tre los
espanules. Caceres lam bien penetro en la region d e Olancho y conquisto
nuevas zonas.
Cuando Montejo creia tener todo el territorio bajo su control, los in-
digenas del sur se preparaban para combatir. Al mando del cacique Lem-
pira, organizaron una coalicion de mas de doscientos pueblos y de miles
de guerreros. A fines de 1537 estallo la gran sublevacion, que d uro hasta
principios de 1539. Los indigenas resistieron largo tiempo en el penol de
Cerquin, pero al final no soportaron el asedio espanol y fueron vencidos.
Montejo se instalo en Santa Maria de Comayagua, en cuyos alrededo-
res se habian descubierto ricos depositos de plata. La mineria de plata fue
el aliciente para que los soldados estuvieran dispuestos a permanecer en
Honduras. Tambien se descubrieron yacimientos auriferos en la provin-
cia de Olancho, 10 que permitio la fundacion de la Villa de SanJorge. Dos
anos mas tarde estallo una rebelion de indigenas y de esclavos negros,
sometidos a brutal explotacion en el trabajo de las minas, pero el orden
pronto fue reestablecido.

71
Conquista tardia del territorio de Costa Rica

La conquista del territorio actual d e Costa Rica -con excepci6n de


Nicoya- fue tardia. Entre el cuarto viaje de Co16n (1502) y la expedici6n
de Diego de Gutierrez (1542) hubo varias campal1as de exploraci6n y
conquista dellitoral caribe costarricense, organizadas a partir de Nicara-
gua, de Panama y de las Antillas. Esas expediciones fueron impulsadas
por la fama de las riquezas de la «costa rica», divulgada a partir del viaje
del Almirante. Pero en vez de riquezas, los espal101es solo encontraron
grupos indigenas dispuestos a resistir para evitar la conquista, y un medio
natural muy adverso, caracterizado por el calor sofocante, las lluvias exce-
sivas y una densa vegetaci6n. Los intentos de conquista pOl' el Caribe re-
sultaron un completo fracaso.
Como consecuencia de las repetidas frustraciones en el Caribe, la con-
quista del territorio de Costa Rica se retraso hasta la dec.ada de 1560. Para
entonces habian ocurrido cam bios polfticos muy importantes, como la
promulgaci6n de las Leyes Nuevas (1 542). Por otra parte, la Corona ha-
bia logrado un control mas efectivo de sus dominios centroamericanos,
mediante la creaci6n de la Audiencia de los Confines. Por 10 tanto, la
conquista de Costa Rica se dio en un contexto diferente. Ahora bien, (que
factores influyeron para que se despertara el interes por dominar esos
territorios?
A mediados del siglo XVI, la costa del Pacifico padecia una seve-
ra crisis, debida a la disminuci6n de la poblaci6n indigena, como con-
secuencia de las enfermedades, el maltrato y la esclavitud. Aunque se
tenia noticias de que la poblaci6n de Costa Rica no era muy abundante,
su numero tampoco era despreciable. Ademas, siempre se manlenia la
esperanza de hallar el oro que este territorio supuestamente escondia.
Un aliciente adicional era el temor abrigado por los espanoles asenta-
dos en Nicaragua de que la conquista de Costa Rica fuera realizada des-
de el sur, pues de ese modo la Audiencia de Panama ensancharia su ju-
risdicci6n. Finalmente, un a condici6n juridico administrativa facilit6
el proceso de conquista desde Nicaragua: la elevaci6n de Nicoya a Alcal-
dia Mayor.
En 1560,juan de Cava1l6n fue nombrado Gobernador de Nicaragua y
Alcalde Mayor de Nicoya, y la Audiencia de los Confines Ie dio el derecho
de organizar la conquista del vecino territorio de Costa Rica. Cava1l6n
organiz6 una tropa compuesta de criollos, (espanoles nacidos en Nicara-
gua) , indigenas, mestizos y algunos esclavos negros; tam bien prepar6 su-
ficientes viveres, pertrechos militares y ganado. Su estrategia era entrar al
interior del pais en dos grupos: el primero, al man do del Padre Estrada
Ravago, ingresaria por el Caribe; el segundo, con Cava1l6n como llder, se

72
clirigiria a Nicoya, bordearia la banda oriental del Golfo, y penetraria en
c1 Valle Central.
De nuevo la campana por el Caribe fracaso, y la del Pacifico tuvo ex i-
tos limitados. Cavallon y su hueste lograron penetrar en el Valle Central,
tal y como se habia previsto. Ahi fundo el primer asentamiento espanol
del centro del pais, Castillo de Garcimunoz. Como era usual al fun dar
una villa 0 ciudad, Cavallon repartio solares a los soldados y se nombro un
cabildo. Castillo de Garcimunoz, como su nombre sugiere, debe de haber
sido mas bien una plaza defensiva, para poder hacer frente a los posibles
ataques de los nativos. Desde ese punto los espanoles se aventuraron a
avanzar hacia el este, para reconocer el Valle del Guarco y para salir en
busca de Garabito, un cacique rebelde. Pero al escasear los alimentos en
la ciudad las cosas se complicaron para Cavallon, porque no tuvo mas
remedio que enviar a sus soldados a arrebatar el maiz de los indigenas del
oriente del valle, y eso fomento la rebelion.
La feroz resistencia de los nativos logro retrasar la conquista efectiva
del territorio de Costa Rica. Cavallon se encontraba en una situacion de-
sesperada, cuando recibio la noticia de que habia sido nombrado fiscal
de la Audiencia de Confines. Tal designacion Ie parecio conveniente a sus
intereses y tomo la determinacion de partir. El Padre Juan de Estrada
Ravago, quien finalmente habia ingresado por el Pacifico y se encontraba
ya en Garcimunoz, que do encargado de la provincia, en calidad de te-
niente de gobernador.
En abril de 1562, Juan Vazquez de Coronado fue nombrado Alcalde
Mayor de Nueva Cartago y Costa Rica, y asumio su cargo a fines de ese
mismo ano. Numerosos pueblos indigenas de la region central del pais
fueron sametidas, pera atras continuaban demoslrando su rebeldia. En-
tonces Vazquez intento una nueva tactica: invito a los caciques a Garcimu-
noz y les obsequio comidas y regalos. De ese modo allanaba el camino
para avanzar hacia el Caribe, donde esperaba encontrar oro en abundan-
cia con el cual contentar a sus soldados.
A principios del ano 1563, Vazquez, acompanado de soldados espano-
les y auxiliares indigenas, emprendio un largo recorrido por la costa paci-
fica, con rumbo hacia el sur. La tropa llego hasta la peninsula de Osa y al
valle del rio Terraba, donde venciola resistencia armada de los indigenas
cotos, y recibio la obediencia de otros grupos. A pesar de haber recibido
de los nativos noticias alentadoras sobre la existencia de yacimientos auri-
feros, Vazquez y su hueste tuvieron que regresar a Garcimunoz, porque
muchos soldados se hallaban enfermos y las provisiones comenzaban a
escasear.
De regreso al centro del pais y con el area oriental del Valle Central
momentaneamente «pacificada», Vazquez ordeno la fundacion de la ciu-

73
dad de Cartago en el Valle del Guarco, y el traslado de los vecinos de
Garcimunoz al nuevo asentamiento. Ese traslado se realizo en su ausen-
cia, mientras se encontraba en Nicaragua en busca de mas recursos para
continuar con la exploracion de yacimientos de oro en el sur. Con ese
objetivo en mente, se dirigio hacia las bocas d el rio Terraba, y de alH se
interno en el territorio, para llegar al Caribe atravesando la Cordillera de
Talamanca. En las margenes del rio Estrella encontro muestras de «finisi-
rno oro» y decidio repartir minas entre sus soldados, antes de regresar a
Cartago.
Al retornar al Valle Central encontraron que la situacion no era nada
ventajosa para los espaiioles: los indigenas se habian sublevado, la ciudad
de Cartago se hallaba sitiada y los soldados estaban a pun to de desertar y
abandonar el territorio. La rebelion fue motivada por las constantes in-
cursiones de los espanoles en busca de alime ntos y por el trabajo forzado
al eual sometieron a los autoctonos con miras a edifiear la eiudad de Car-
tago. Aunque Vazquez intento eontrolar la rebelion, los indigenas siguie-
ron hostiles y los soldados se mostraban insatisfechos, porque no habian
recibido encomiendas ni habian po dido explotar el oro. Decidio enton-
ces trasladarse a Espana, en busca de mayores poderes y eonsiguio apoyo
economico, sold ados y el titulo de Adelantado de Costa Rica. Pero de ese
viaje no regreso, pues perdio la vida en un naufragio.
El territorio de Nueva Cartago y Costa Rica que do a cargo dellugarte-
niente de Vazquez, Miguel Sanchez de Guido. En los siguientes anos rei-
no la inestabilidad, debido a la resistencia indigena. La situaeion era d e-
sesperada, cuando ingreso a la provincia su nuevo gobernador, Perafan
de Rivera, en marzo de 1568. Su gobernacion se caracterizo por usar la
violencia para aplacar a las poblaciones indfgenas rebeladas y porque pro-
cedio a repartir a los indigenas en encomienda, con 10 que violaba las
disposiciones al respecto.
Una vez aplacado el descontento de los soldados mediante la reparti-
cion de los indigenas, Perafan, junto con su esposa, sus dos hijos, y un
fuerte contingente de soldados y de indigenas auxiliares, se dirigieron
hacia el valle del rio La Estrella en busca de oro. Esta expedicion al Cari-
be sur de Costa Rica resulto un completo fracaso, debido a la resistencia
indigena. Los nativos destruyeron sus propias semen teras para obstaculi-
zar la obtencion de alimentos por parte de los espanoles y huyeron hacia
montaiias inaccesibles. La expedicion regreso a Cartago, y Perafan, can-
sado de luchar contra la adversidad, abandono la provincia en 1573.
La «pacificacion» definitiva del Valle Central de Costa Rica se obtuvo
durante la gobernacion interina de Alonso Anguciana de Gamboa. A su
llegada encontro a los indigenas cansados, tras doce anos de guerras de
resistencia. Su plan era impulsar la colonizacion espanola en Costa Rica,

74
por 10 que se comprometi6 a traer ganado y a trasladar labradores experi-
mentados en el cultivo de trigo. Prop6sitos similares inspiraron al siguiente
Gobemador, Diego de Artieda y Chirinos.
En suma, como resultado de la oportuna ayuda brindada desde Nica-
ragua, a principios de la dec ada de 1580 ya se habia logrado consolidar la
colonizaci6n espanola en el Valle Central de Costa Rica y en la banda
oriental del Golfo de Nicoya. En esos anos, para los intereses de los espa-
noles, era conveniente desarrollar actividades agropecuarias en el territo-
rio de Costa Rica, pues existia la posibilidad de exportar viveres hacia
Panama, donde existia una demanda creciente, generada por el comer-
cio transistmico.

CONSECUENCIAS DE LA CONQUISTA

La conquista de las sociedades aut6ctonas tuvo como consecuencias


inmediatas la imposici6n de la encomienda, la esclavitud indigena y el
colapso de la poblaci6n nativa, resultado tanto de la explotaci6n desme-
dida a que esta se vio sometida por parte de los dominadores, como de la
llamada «uni6n microbiana del mundo».

Imposici6n de la encomienda

Una vez conquistado un territorio, los espanoles se sentian merecedo-


res de gratificaciones por los servicios prestados a la Corona, especial-
mente concesiones de indigenas en encomiendas. La encomienda consis-
tia en el otorgamiento de uno 0 mas pueblos al espanol, quien convertido
en encomendero, tenia derecho de cobrarles a los nativos un tributo en
bienes agricolas, productos artesanales como objetos de ceramica, telas y
articulos de algod6n, frutos obtenidos mediante la recolecci6n, como la
miel y bejucos, y tambien aves de corral y trabajo directo. A cambio del
tributo y de los servicios personales de los nativos, el encomendero debia
instruirlos en la fe cat61ica, y ademas prestar servicio militar a la Corona,
cuando asi se requiriera para defender los territorios recien anexados a
sus dominios.
Las primeras concesiones de encomiendas fueron dadas hacia media-
dos de 1524. Los beneficiados fueron los conquistadores y los parientes y
amigos de los primeros gobernadores. Durante alrededor de dos decadas
rein6 la inestabilidad en la concesi6n de encomiendas, porque cada vez

75
que habia un relevo de mando, las autoridades recien nombradas repar-
tfan de nuevo a los indfgenas, para satisfacer ambiciones personales y de
sus allegados; tambien porque la legislaci6n espanola en esos an os era
bastante inestable, 10 cual re£lejaba las disputas entre diversos sectores de
la sociedad dominante pOl' disfrutar de la mana de obra indfgena.
Los encome nderos centroamericanos disfrutaron de encomiendas
de tamano muy variado. POl' ejemplo, Juan de Espinar, LIn sastre que ba-
jo las 6rdenes de Pedro de Alvarado contribuy6 a la conquista d el area
mam, recibi6 de sujefe una encomienda de 3 500 indfgenas, en Huehue-
tenango (Guatemala), en 1525. Con esa cantidad de nativos a su servicio
se convirti6 en un importante minero y propietario de negocios agrfco-
las. En contraste, hacia 1540, los catorce 0 quince encomenderos de Tru-
jillo, Honduras, tenian un total de 150 indigenas a su servicio. Esas dife-
rencias en la concesi6n de encomiendas obedecieron, en parte, a la can-
tidad de poblaci6n indigena existente en cad a zona en e l momenta de la
invasi6n europea. Asi, las mayores y mejores concesiones fueron las otor-
gadas en las tierras altas del norte de Cen troamerica y en la Vertien te del
Pacifico.
Pero cualquiera que fuese el numero de indigenas a su servicio, los
encomenderos siempre trataron de obtener de ellos el maximo prove-
cho . Aunque en principio la concesi6n de una encomienda no lIevaba
aparejada la cesi6n de las tierras indfgenas, en la practica los encomende-
ros conseguian beneficiarse de ellas. Los nativos eran sometidos a exten-
sas jornadas de trabajo en ellavado de arenas auriferas y se les obligaba a
prestaI' servicios personales, entre los que sobresale e l servicio de «tame-
mes» 0 cargadores, vitales para la economia colonial, debido ala falta de
caminos y de medios de transporte.
La explotaci6n y el maltrato pOl' parte de los encomenderos caus6
numerosas rebeliones indigenas durante las primeras decadas de la do-
minaci6n colonial.

Esclavitud indigena

Tanto los indigenas entregados en encomienda como los que fueron


sometidos a esclavitud fueron victimas de explotaci6n inmisericorde pOl'
parte d e los invasores, por 10 que se dificulta hacer una clara distinci6n
entre la encomienda y la esclavitud propiamente dicha. No obstante po-
dria decirse que a corto plazo, la esclavitud indigena report6 mayores
beneficios a los espanoles, y tambien fue la instituci6n mas destructiva.
Los esclavos indigenas fueron un importante rubro del comercio co-
lonial an tes de la aplicaci6n de las Leyes Nuevas. Desde muy temprano, la

76
costa norte de Honduras fue visitada por cazadores de esclavos, interesa-
dos en trasladarlos a las Antillas, donde los vendian a buenos precios de-
bido a la alarmante disminucion de la poblacion autoctona. Se calcula
que un os 150 mil indigenas fueron sacados de territorio hondureiio en
condicion de esclavos. Sin embargo, donde el comercio esclavista alcanzo
sus mayores dimensiones fue en la costa del Pacifico de Nicaragua y en
Nicoya. Se calcula que entre 200 mil y 500 mil indigenas de esos territo-
rios fueron trasladados a Panama y Peru, donde se les ocupaba principal-
mente como tamemes.
Ademas de exportar esclavos indigenas hacia otros territorios colo-
niales, los conquistadores asentados en Centroamerica utilizaban a sus
esclavos para desarrollar actividades economicas convenientes a sus inte-
reses. En los alrededores de Santiago de Guatemala, pOl' ejemplo , los es-
clavos fueron empleados en actividades agricolas y ganaderas, para satis-
facer la demanda de la ciudad. Los mas importantes conquistadores de
Guatemala tambien dispusieron de esclavos indigenas para trabajar en
los yacimientos auriferos, e inclusive enviaron cuadrillas a trabajar en te-
rritorio hondureiio, donde los depositos eran mas ricos.
La esclavitud constituyo una verdadera tragedia para los indigenas.
La mayoria de los esclavos murieron, no solo por el exceso de trabajo,
sino tambien porque muchas faenas eran peligrosas y porque se les trasla-
daba a zonas con climas insalubres 0 a los cuales no estaban acostumbra-
dos. La esclavitud indigena tuvo consecuencias funestas en dos niveles:
para los afectados significo el desarraigo de sus lugares de origen y la
perdida de sus familias, bienes y cultivos; para las comunidades indigenas
fue causa de una grave desorganizacion y contribuyo al decrecimiento de
la poblacion autoctona.

Decrecimiento de la poblaci6n

Se calcula que en el momento de la invasion europea, en Centroame-


rica vivian unos cinco 0 seis millones de indigenas. Pero ya para fines del
siglo XVI la poblacion nativa se habia reducido considerablemente. (A
que factores se debio la catastrofe demografica de la poblacion nativa?
Observadores de la epoca (como Fray Bartolome de Las Casas) buscaron
la explicacion en el maltrato fisico y la esclavitud que, sin duda, contribu-
yeron al fenomeno. Sin embargo, existio otra causa muy importante: la
union microbian a del mundo, esto es, la introduccion de enfermedades
como la viruela, el sarampion, la gripe y la peste neumonica, contra las
cuales los indigenas carecian de inmunidad, porque esos males eran des-
conocidos en America.

77
ESTRAGOS DE LAS EPIDEMIAS

EI Memorial de Solo la, conocido tambien como los


«Anales de los cakchikeles», es un relato de la conquista y
sus consecuencias escrito desde el punto de vista de los
indigenas, en lengua cakchiquel. Esa cronica fue comen-
zada a mediados del siglo XVI por el indigena Francisco
Hernandez Arana, pero en ella participaron varios auto-
res. En diversas partes de la obra se mencionan los estra-
gos causados por enfermedades de origen europeo entre
los grupos aborigenes. Respecto a la epidemia que asolo
Guatemala en 1521 refiere:

«Grande era la corrupcion de los muertos. Despues


de haber sucumbido nuestros padres y abuelos, la mi-
tad de la gente huyo hacia los campos. Los perros y los
buitres devoraban los cadaveres. La mortandad era te-
rrible. Murieron vuestros abuelos yjunto con ellos mu-
rieron el hijo del rey y sus hermanos y parientes. Asi
fue como nosotros quedamos huerfanos joh hijos
mios! Asi quedamos cuando eramos jovenes. Todos
quedamos as!. jPara morir nacimos!*

* Historia General de Centroamerica, Volumen II, pag. 72.


FLACSO.

Aunque las consecuencias demograficas de la conquista fueron muy


variables de una zona a otra, es posible sacar algunas conclusiones. En
terminos generales, la conquista impacto fuertemente en las tierras altas
y en el litoral del Pacifico, mientras que en las tierras bajas del Caribe,
donde el proceso de conquista fue mucho mas prolongado y los indige-
nas tuvieron mayores oportunidades de sobrevivencia, el impacto fue
menor. Ciento cincuenta aiios despues de la conquista, la poblacion indi-
gena habia disminuido entre un 80 y un 90 % y, en algunas areas, practi-
camente habia desaparecido. Sin embargo, siglos despues, logro recupe-
rarse en algunas zonas, como sucedio en Chiapas y en las tierras altas de
Guatemala, y, en menor medida, en EI Salvador. En cambio en Costa Rica,
el oeste de Nicaragua y la region central y oeste de Honduras, la tenden-
cia fue al decrecimiento.

78
CRAFICO 1
cALCULOS POBLACION INDICENA (MOMENTO DEL PRIMER CONTACTO)
14
D Cifras altas
12 til Cifi'as bajas
r.IJ 10

'Z"" 8
o

Sapper Denevan
INVESTIGADORES

Fuente: Historia General de Centroamerica, Tomo II, pag. 77. FLACSO 1993

CONSOLIDACION DE LA CONQUISTA

En la decada de 1540 hubo gran des cambios en Centroamerica, que


dieron como resultado la consolidaci6n de la conquista y la organizaci6n
definitiva de la sociedad colonial. Nos referimos ala fundaci6n de la Au-
diencia de los Confines, la reducci6n de los indigenas en poblados y la
aplicaci6n de las Leyes Nuevas y de las Reformas del oidor Cerrato.

Fundacion de la Audiencia de los Confines

Con la creaci6n de la Audiencia de los Confines, en 1542, la Corona


se propuso consolidar su dominio sobre el territorio centroamericano y,
al mismo tiempo, reducir los grandes poderes de que habian gozado los
primeros gobernadores designados en estas tierras, como Pedro de Alva-
rado, Pedrarias Davila y Francisco de Contreras. La Audiencia era un or-
ganismo colegiado, conformado por oidores, que cumplia funciones eje-
cutivas, legislativas y judiciales. Aunque sus decisiones podian ser ape la-
das ante el Consejo de Indias, gozaba de suficiente autonomia como para
decidir sobre los principales asuntos. La Audiencia se insta16 en la Ciudad
de Gracias a Dios, Honduras, en 1544, fecha que marca el inicio del 11 a-
mado Reino de Guatemala.

79
Reduccion de los indigenas en poblados

Los estragos causados por la conquista sobre las sociedades aut6cto-


nas preocuparon al primer Obispo de Guatemala, Marroquin, quien pro-
puso la organizaci6n de los indigenas en poblados, como una manera de
facilitar la evangelizaci6n y de evitar los abusos. Esa iniciativa fue recogida
en las Leyes Nuevas y, a partir de su ejecuci6n, las reducciones se convir-
tieron en la pieza maestra para el control de la poblaci6n nativa.
En un esfuerzo conjunto entre la Iglesia y la Audiencia, las primeras
reducciones fueron realizadas en las cercanias de Santiago de Guatemala.
Posteriormente fueron reducidos a poblados los indigenas de diferentes
regiones de Guatemala, El Salvador, Nicaragua y, un poco mas tarde, Hon-
duras. En Costa Rica la reducci6n de los indigenas en poblados debi6
esperar hasta la dec ada de 1570.
Los misioneros usaron la tactica de tratar de convencer a los caciques
y a los principales de las bondades de vivir en pueblos construidos a la
usanza europea. Su razonamiento era que si se lograba su apoyo, los indi-
genas del comlin no osarian negarse al traslado. Sin embargo, el bienin-
tencionado pacifismo de los religiosos no siempre dio resultados positi-
vos, porque los indigenas se negaban a abandonar las tierras donde te-
nian sus casas y sembradios y donde habian vivido sus ancestros. Tambien
se resistian a adoptar los patrones cristianos de la familia nuclear y a aban-
donar el culto a sus dioses. Si a los anteriores motivos se suma la explota-
ci6n de que eran objeto por parte de los espanoles, se comprende por
que much os decidieron huir de los pueblos hacia sitios donde podian
escapar del control de las autoridades civiles y religiosas, y, en algunos
casos, reproducir su antiguo modo de vivir.

Impacto de las Leyes Nuevas y la Reforma de Cerrato

Los reyes de Espana habian dictado disposiciones tendientes a prote-


ger a los nativos, pero estas respondian a inquietudes y necesidades mo-
mentaneas y no eran respetadas en los territorios coloniales. Hacia falta
un cuerpo de leyes coherente, que ordenara la situaci6n, y funcionarios
reales dispuestos a hacerlas cumplir. Con esos objetivos fueron pro mulga-
das las Leyes Nuevas, en 1542.
Las principales medidas contempladas en esas leyes fueron las siguien-
tes: prohibici6n de la esclavitud indigena y liberaci6n de todos los nativos
esclavizados ilegalmente; eliminaci6n de nuevas concesiones de encomien-
das y traslado de las ya cedidas a la Corona, al morir los encomenderos
que entonces las poseian; fijaci6n, por parte de las autoridades de cada

80
territorio, del monto del tributo que cada comunidad debfa satisfacer a
su encomendero, con el fin de evitar los abusos que se daban con la pres-
tacion de servicios personales; supresion del uso de los nativos como ta-
memes, salvo necesidad muy caIificada, pero en tal caso, se les debfa reco-
nocer un salario.
La promulgacion de las Leyes Nuevas, como era de esperar, no fue del
agrado de los encomenderos. Las protestas se extendieron y, en algunos
casos, se tornaron violentas. En Nicaragua, Hernando de Contreras co-
mando una rebeIion, durante la cual fue asesinado el Obispo Valdivieso,
quien ostentaba el cargo de defensor de los indios. Ante tantas presiones,
la Corona se vio obligada a «suavizar» las Leyes, y volvio a autorizar la
concesion de encomiendas por dos vidas.
En Centroamerica, las ordenes reIigiosas se encargaron de dar a
conocer las disposiciones entre los indigenas. Por su parte, los oidores de
la Audiencia trataron de aplicar las leyes, pero sin mucho exito. Fue
necesario esperar la llegada, en 1548, de Alonso Lopez de Cerrato, se-
gundo presidente de la Audiencia, quien dio un notable impulso a la
apIicacion de las leyes. La reforma emprendida pOI' Cerrato incluyo la
abolicion de la esclavitud y la tasacion de los tributos que debfan pagar
las comunidades indigenas. Ademas traslado la sede de la Audiencia de
Gracias a Dios ala ciudad de Santiago de los Caballeros, desde donde Ie
seria mas facil controlar a los poderosos encomenderos radicados en
Guatemala.
No obstante las buenas intenciones de Cerrato, la aplicacion de la
reforma no pudo ser muy profunda, debido a la oposicion de los enco-
menderos. La medida mas exitosa fue la abolicion de la esclavitud indige-
na, pero para entonces la demanda de esclavos en Panama y Peru ya era
decreciente, y los tamemes comenzaban a ser sustituidos por mulas y por
esclavos negros.

TIERRA.: RECURSO VITAL

Desde el periodo colonial, las sociedades centroamericanas se han


caracterizado por poseer una economia basada, fundamentalmente, en
la agricultura y la ganaderia. Por eso resulta indispensable conocer el pa-
tron de poblamiento iberico, como se repartio la tierra, con base en que
tftulos comenzaron a aparecer las propiedades privadas, cual era la situa-
cion de las comunidades indigenas, y otros aspectos relacionados con la
ten en cia de la tierra, la produccion y los conflictos sociales agrarios.

81
"J. J
.,t,lr.iente

~,
. tJ)
>

ILUSTRACION Nil 12. PRINCIPALES ASENTAMIENTOS. REINO DE GUATEMALA.. Un m a pa


d el siglo XVIII muestra los principales asentamientos d e la e poca e n el Reino de Guatemala.
Algunas de las ciudades que a parece n en el mapa fueron abandonadas posteriormente .
Patron de poblamiento iberico

Como mencionamos en la parte relativa a la conquista, los espailo-


les se preocuparon por fundar villas y ciudades, las cuales se conver-
tian en centros desde donde se controlaban las areas circundantes. Cuan-
do se fundaba una ciudad se procedia a elegir a los miembros del cabildo,
institucion encargada del gobierno local; de ese modo se legitimaba la
potestad de tomar decisiones. En el sitio escogido se procedia a trazar el
cuadrante urbano; las cuadras centrales se d estinaban a la plaza, la igle-
sia y el edificio del cabildo, y el resto era repartido en solares 0 lotes ur-
banos a los conquistadores y fundadores, quienes adquirian la categoria
de vecinos. Asimismo se senalaba una porcion de tierras para ejidos, es
clecir, tierras comunales destinadas al pastoreo del ganado, a la obten-
cion de lena, bejuco y otras n ecesidades de los habitantes de la ciudad.
En Centroamerica, muy a menudo se producia una gran confusion entre
las tierras ejidales y las tierras de propios, 0 sea las adquiridas por los
cabildos con el fin de generar recursos para hacer frente a sus gastos de
funcionamiento.

Propiedad individual de la tierra

En la fase inicial de la conquista y la colonizacion, los cabildos se en-


cargaban de repartir las tierras de su jurisdiccion entre los vecinos de la
villa 0 de la ciudad respectiva. Pero a partir de la fundacion de la Audien-
cia, esta asumio la reparticion de las tierras.
Durante el siglo XVI, la merced de tierras fue el titulo legal que p er-
mitio el surgimiento de derechos a la propiedad privada. En principio
todas las tierras eran realengas, 0 sea, pertenecie ntes al rey, en virtud del
derecho de conquista. La merced se otorgaba en nombre del monarca,
como gratificacion a los espanoles que se distinguian por los servicios
prestados a la Corona en la conquista y pacificacion de los territorios
coloniales. Sin embargo, la donacion implicaba algunos compromisos por
parte del beneficiario: la obligacion de explotar las tierras en un plazo
prudencial; no venderlas antes de cuatro anos; no traspasarlas a la Iglesia,
ni a las ordenes religiosas ni a funcionarios reales; no perjudicar a otros
propietarios, sobre todo si se trataba de comunidades indigenas; y mante-
ner el acceso libre a los pastos y las aguas, de acuerdo con la tradicion
medieval.
La concesion de mercedes se paralizo a fines del siglo XVI, cuando la
Corona decidio vender las tierras, en procura de mayo res recursos para
financial' las guerras europeas. A partir de entonces e l titulo legal paso a

83
ser la composicion. Este nuevo marco legal tenia tambien el objetivo de
obligar a algunos propietarios a ponerse a derecho, porque habian acapa-
rado mas tierras de la cuenta, aprovechando la falta de precision de los
titulos en 10 referente a los limites de las propiedades.
Los espanoles introdujeron en America la ganaderia y el cultivo de
productos importados, como el trigo y la cana de azucar, frutas y legum-
bres, propios de la dieta a que estaban acostumbrados. Tambien sembra-
ron productos originarios de America, en especial, el maiz.

Comunidad indigena

Los pueblos indigenas fueron dotados de las tierras necesarias para


que los nativos produjeran sus propios alimentos y tuvieran como hacer
frente al pago de los tributos y otras obligaciones. Cada pueblo tenia su
cabildo, pero las funciones de este eran muy diferentes de las del cabildo
de villas y ciudades espanolas. Una de las tare as principales del cabildo
del pueblo de indios era la administracion de las tierras de la comunidad:
debia senalar a cada familia una parcela destinada a satisfacer sus necesi-
dades y escoger donde se haria la sementera comunal. Los frutos de esa
sementera se comercializaban para alimentar la caja de comunidad, la
cual en teoria estaba destinada a cubrir los gastos ocasionados por emer-
gencias 0 desastres.
Una de las preocupaciones de los funcionarios reales fue obligar a los
nativos a producir, en sus tierras, cantidades suficientes como para garanti-
zar excedentes comercializables. A fines del siglo XVI se creo el puesto de
juez de milpas, con el fin de que supervisara el trabajo de los indigenas y se
incrementara la produccion. Como este funcionario se convirtio en un
nuevo explotador de los indigenas, la Corona tomo medidas para suprimir
ese cargo, pero la Audiencia no fue capaz de hacer cumplir la orden.
Las tierras de la comunidad eran inalienables por ley, es decir, ni los
cabildos ni ninguna autoridad indigena podian venderlas 0 alquilarlas,
salvo en casos extremos, autorizados por los funcionarios espanoles. No
obstante la mayoria de las comunidades indigenas tuvieron problemas
para defender sus tierras. En algunos casos porque se vendian y alquila-
ban terrenos a mestizos pobres, en otros los conflictos enfrentaban a los
pueblos de indios entre si y, en ocasiones, con propietarios privados, de-
seosos de arrebatar tierras a alguna comunidad. La tension fue mayor en
las regiones apropiadas para cultivos comerciales, como sucedio con las
tierras aptas para el cultivo del anil, en El Salvador. En much os casos las
comunidades terminaron sin tierras, 0 con tierras insuficientes para satis-
facer sus necesidades.

84
Propiedad eclesiastica

A pesar de la prohibicion real para que la Iglesia se apropiara d e tie-


rras, las ordenes monasticas y algunos miembros prominentes del clero se
convirtieron en importantes terratenientes. Algunas propiedades pasa-
ron a manos de la Iglesia mediante donaciones piadosas, otras fueron
adquiridas mediante compra a particulares. A principios del siglo XVII,
algunas de las haciendas mas prosperas y mejor administradas del Reino
de Guatemala pertenecian a dominicos y jesuitas. Incluso existieron dos
instituciones que tuvieron relacion con la propiedad y explotacion de las
tierras: las cofradlas y las capellanlas.

Cofradias

La cofradla era una institucion corporativa, introducida al Reino de


Guatemala en el siglo XVI, en la cual se conjugaban aspectos religiosos y
economicos. En el campo religioso las cofradlas se dedicaban al culto de
algun san to 0 de alguna advocacion propios de la fe catolica. En tan to
que en las de los indlgenas florecian el sincretismo religioso y otras mani-
festaciones de la religiosidad popular, las que pertenecian a espanoles y
mestizos se mantuvieron mas apegadas a la religion oficial. Ahora bien,
~de que manera se relacionaba el aspecto religioso con el economico?
Con el fin de hacer frente a los gastos que implicaba el pago de mi-
sas, procesiones, velas, music a y otras expresiones de la religiosidad popu-
lar, en los pueblos indlgenas se solla segregar una parte de las tierras co-
munales, y se explotaba mediante el trabajo gratuito de los nativos. La
mayor parte de las cofradlas se mantenlan con el trabajo agropecuario,
sin embargo hubo algunas cuyos ingresos provenlan del trabajo artesa-
nal. Las cofradlas mas poderosas eran las pertenecientes a espanoles y
mestizos. Algunas llegaron a poseer sus propias haciendas, que explota-
ban con mana de obra indlgena y mestiza, gratuita 0 asalariada, y a veces
con esclavos.
En las cofradias mas ricas, los principales puestos, como el de mayor-
domo, eran ocupados por miembros de la elite colonial. Eso les facilitaba
el acceso a prestamos de dinero en efec tivo, con un interes muy bajo.

Capellanias

Las capellanias consistian en la donacion de bienes muebles e inmue-


bles por parte de personas acaudaladas a a'l guna institucion eclesiastica,

85
con el objeto de costear el mantenimienlo de un sacerdote y facilitar el
paso del donante 0 de sus parientes hacia la eternidad, mediante la cele-
bracion de misas en su memoria. El bien 0 los bienes donados eran alqui-
lados a un 5% anual sobre el valor de la prenda. Muchas propiedades
fundiarias pasaron a estar bajo el control de la Iglesia, por medio de la
fundacion de capellanfas.
En realidad, las capellanfas fueron un mecanismo mas de distribu-
cion de la riqueza entre la elite, porque solo los hijos de las familias mas
acaudaladas podian aspirar al sacerdocio.

EXPLOTACION DE LA MANO DE OBRA

La mano de obra indigena fue el recurso indispensable para poner en


marcha las variadas actividades que sustentaron la economfa colonial. Ya
nos hemos referido ala encomienda y a los servicios personales antes de
que se promulgaran las Leyes Nuevas. En este apartado analizaremos las
modificaciones sufridas porIa encomienda, y nos referiremos al reparti-
miento y a otras obligaciones que recayeron sobre la poblacion indigena
despues d e la promulgacion de esas leyes.
Desde la segunda mitad del siglo XVI hasta las primeras decadas del
siglo XVII, la encomienda fue la institucion clave; pero ya en la segunda
mitad de este (lltimo su importancia comenzo a decaer. Las leyes relativas
ala encomienda fueron variando con el paso de los anos. De modo gene-
ral, se puede afirmar que la categoria de los tributarios variaba de acuer-
do con el sexo, el estado civil y la edad en la cual se comenzaba a pagar el
tributo, 0 se dejaba d e hacerlo. Tambien se introdujeron algunas excep-
ciones a la obligacion de tributar: fueron eximidos d e l pago del tributo
los indigenas con impedimentos fisicos y los miembros de los cabildos de
los pueblos de indios.
Una nueva forma de trabajo forzado, el repartimiento a labores, sur-
gio en 1565. En ese ano, la Audiencia de Nueva Espana autorizo al Cabil-
do de Santiago de los Caballeros para obligar a los indigenas de los pue-
blos cercanos a la ciudad a trabajar en las tierras que los espanoles dedica-
ban al cultivo del trigo. Una cuarta parte del numero de los tributarios de
cada pueblo debian presentarse cada semana ante eljuez re partidor, para
que los distribuyeran entre los propietarios de tierras. Este sistema pron-
to se difundio a otras partes de la Audiencia, y se extendio a otros traba-
jos, como al cultivo de maiz y cana de azucar, y al trabajo en trapiches, la
construccion de edificios publicos y la mineria.

86
Sin embargo, el repartimiento afecto mas a los pueblos situados cerea
d e las ciudades de espafioles, en especial a los del Corregimiento del Va-
Il e, en Guatemala, porque se necesitaba trigo y maiz para abastecer a la
poblacion urbana. Solo unos cuantos indigenas de cada pueblo lograban
escabullirse de la obligacion, ya fuera pagando a otros nativos menos afor-
tunados, huyendo de los pueblos 0 sobornando a los alcaldes responsa-
bles de repartir los turnos. En todo caso, el impacto del repartimiento
sobre la agricultura indigena fue desastroso, pues redujo el tiempo dedi-
cado a las actividades de subsistencia.

GRAFICO 2
LABORES DE TRIGO 1670. CORREGIMIENTO DEL VALLE DE GUATEMALA
25 D Fanegas sembradas
[j Fanegas producidas
20 • Indios repartidos
(/']

~
....J 15
2
10

Chimaltemango Las Vacas


Canales Sacatepequez Jilotepequez
Fue nte : Historia General de Centroameriul, TO!110 II . pa~. 144. FLAeSO 1993

La encomienda y el repartimiento fueron dos instituciones com-


plementarias, legitimadas, de alguna manera, por las leyes. Pero al mis-
mo tiempo funcionaron otros mecanismos de explotacion de los indige-
nas, sin ningun sustento legal. Entre estos destacan el repartimiento de
algodon a las mujeres indigenas, para que 10 hilaran y tejieran (reparti-
miento de hilados), la obligacion de adquirir mercandas no deseadas, a
elevados precios, distribuidas por las mismas autoridades espaiiolas - espe-
cialmente por los corregidores y los alcaldes mayores- y la prestacion de
servicios en las casas de los espaiioles - gratuita 0 casi gratuita- a la cual
se sometio a los indigenas denominados naborlos 0 laborios. Por otra
parte, aunque el trabajo asalariado aparecio desde fines del siglo XVI, este
tambien se caracterizo por su naturaleza compulsiva, es decir, los indige-
nas se veian obligados a trabajar para hacer frente al pago de tributos y
otras obligaciones.

87
Hasta aqui nos hemos referido a los espanoles duenos de tierras y a
los func ionarios civil es como beneficiarios de la explotacion de la mano
de obra nativa. Pero no solo ellos gozaron de ese privilegio. Los religiosos
pertenecientes a diversas ordenes y los curas tambien formaron parte d e
los sectores dominan tes de la sociedad colonial y sacaron ventaja de su
situacion para beneficiarse del trabajo de los nativos. Asi, los indigenas de
los pueblos estaban obligados a pagarles la racion, que consistia en entre-
garles semanalmente cierta cantidad de alimentos y en asignar un nllme-
ro determinado de trabajadores para atender sus labores domesticas.
A partir de la reduccion en pueblos y la puesta en practica de todos
los mecanismos de explotacion mencionados, los indigenas tuvieron mo-
tivos mas que suficientes para buscar formas de resistir la dominacion
espanola. A pesar del control ejercido por las autoridades civiles y ecle-
siasticas para hacerles cumplir con la obligacion de p ermanecer en sus
respectivos pueblos, la huida fue una alternativa empleada por ellos con
frecuencia. Otros indigenas optaban por convertirse en ladinos. Sin em-
bargo, la maxima expresion de la resistencia fue el morin.
Los motines indigenas fueron movimientos de protesta, no premedi-
tados, producto de reacciones colericas ante la explotacion y los abusos.
En algunas ocasiones los indigenas lograban que se les redujeran los tri-
butos, al menos momentaneamente. Pero en la mayoria de los casos las
autoridades espanolas respondian con gran violencia y, una vez controla-
do el movimiento, procesabanjudicialmente a los participantes y los cas-
tigaban con carcel, azotes e, incluso, con la ej ecucion.

PRODUCCION Y COMERCIO

Espana organizo el monopolio comercial de sus territorios coloniales,


y defendio a toda costa la exclusividad, pues no estaba dispuesta a com-
partir las riquezas coloniales con otras potencias europeas. El uso de la
fuerza naval, la designacion de puertos autorizados para el comercio
-tanto en Espana como en Arnerica- y la promulgacion de leyes que,
en unos casos, favore cieron la produccion de ciertos cultivos y en otros
desestimularon el desarrollo de algunas actividades, fueron las principa-
les medidas de que se valio la metropoli para a1canzar su objetivo.
En el marco del sistema comercial espanol, Centroamerica ocupo un
lugar realmente marginal, por dos razones principales. Por un lado, los
conquistadores no encontraron en el istmo riquezas minerales en abun-
dancia, como las que hallaron en Peru y Mexico. El interes por los meta-

88
lcs preciosos se explica porque, segun el mercantilismo (corriente d e pen-
samiento economico imperante en esa epoca), la riqueza de un pais d e-
pendia de la cantidad de oro y plata que lograra acumular. Por otro lado,
Centroamerica presentaba un obstaculo que parecia insalvable: la mayor
parte de la poblacion aborigen y, por tanto, las principales actividades
economicas, se desarrollaban hacia el Pacifico, en una epoca en la cual
los ejes principales del comercio se ubicaban en el Atlantico .

.FaRE J),£ Po.RTO JJZLLO.

ILUSTRAcrON NQ 13. FERIA DE PORTOBELO. Portobelo, en el Caribe de Panama, fue, desde


1597, escenario de una de las ferias comerciales mas importantes de los tiempos modernos,
como punto de entrada de manufacturas europeas y punto de embarque de la plata produci-
da en el Alto Peru. La ilustraci6n corresponde a la feria realizada en 1637, y se public6 por
primera vez en la obra del fraile ingles Thomas Gage, A new survey afthe West Indias.

En consecuencia, la region quedo al margen de las gran des rutas co-


merciales que unian los puertos espanoles de Cadiz y Sevilla con los puer-
tos autorizados en America para el comercio ultramarino: Veracruz, en
Mexico, y Nombre de Dios y Portobelo, en Panama. Trujillo y Puerto Ca-
ballos, en el norte de Honduras, fueron los fondeaderos centroamerica-
nos autorizados para recibir navios procedentes de Sevilla. A principios
del siglo XVII tambien se autorizo el comercio con Santo Tomas de Casti-
lla, en Guatemala, pero los barcos visitaban los puertos centroamericanos
de manera muy esporadica.
En 10 referente al comercio intercolonial, este al principio fue bastan-
te libre, pero muy pronto se vio limitado por numerosas prohibiciones y

89
cargas fiscales abu ltadas. Otros inconven ientes fueron, por una parte, los
pesimos caminos, producto de la topografia accidentada y de las condi-
ciones climaticas adversas, y, por otra, la inseguridad en puertos y costas,
debida a la presencia de piratas y corsarios de naciones enemigas d e Espa-
na, ansiosas de arrebatarle a esta, parte d e las riquezas obtenidas e n sus
territorios coloniales.
A pesar de tantos obstaculos a la produccion y al comercio, una vez
agotados los ciclos extractivos que permitian el enriquecimiento rapido
mediante una inversion muy pequena de capital -como fueron la extrac-
ci6n de oro de placeres y la exportacion de esclavos indigenas- los espa-
noles se preocuparon por explotar sistematicamente algunos productos
agrfcolas cuyo comercio podia resultar rentable. Los principales fuero n:
cacao, anil, cana de azucar, trigo y maiz.

Cultivo y comercio del cacao

El cacao fue el primer producto de origen americano que despert6 el


interes de los espanoles, debido ala facilid ad con que se podia comercia-
lizar, h e rencia del pasado indigena. En el siglo XVI hubo dos importantes
zonas cacao teras: Soconusco (hoy territorio mexicano) , e Izalcos, en El
Salvador. En ambas zonas el cacao se habia cultivado desde antes de la
conquista, y habia sido utilizado para el pago de tributos. Los espanoles
aprovecharon esa experiencia y el comercio de ese fruto conoci6 un auge
repentino. Ya en la decada de 1540, los encomenderos de la provincia de
Izalcos obligaron a los indigenas a ampliar el area sembrada, sin involu-
crarse ellos mismos en la produccion. La posesion de encomiendas en las
areas cacaoteras fue fuente constante de disputas entre los sectores domi-
nantes de la sociedad colonial, debido a 10 lucrativo de ese comercio. La
mayor parte del cacao centroamericano se exportaba con destino a Nue-
va Espana (Mexico), y, en menores cantidades, a Panama y Peru.
La producci6n cacaotera, tanto en Soconusco como en Izalcos, decli-
no rapidamente, debido al descenso de la poblaci6n indigena. La falta de
mana de obra nativa hizo que trasladaran ahi, por la fuerza, a trabajado-
res de zonas templadas, quienes no soportaron el clima calido y murieron
abatidos por las epidemias y la explotacion desmedida de que eran obje-
to. Las plagas, las catastrofes naturales y los metodos agrfcolas inapropia-
dos tambien contribuyeron ala ruina de los cacaotales.
Mas adelante, en la segunda mitad del siglo XVII, se inici6 un ciclo
cacaotero en Matina (Caribe de Costa Rica). La actividad se desarrollo
gracias al empuje de algunos inmigrantes recientes y de espanoles radica-
dos en Cartago, capital de la provincia. Sin embargo, el ciclo cacaotero de

90
YL"CATA0I l'.lAPA NQ 14

REINO DE GUATEMALA: PRINCIPALES RUTAS DE COMERCIO


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OCEANO
S IMBOLOGiA

Po r la co sta a N ueva Espana


PA CWICO
POl' e l anti p lan o a N ue ya Espana

De l Golfo Dulce

A las provincias de l sur

Marina

o 100 200 [(m


~~~
Matina enfrent6 mliltiples prohlemas: falta de mann de ohra, competen-
cia del cacao producido en Venezuela, dificultad de acarrearlo por tierra
hacia el interior de la provincia debido a los pesimos caminos, y saqueo
constante por parte de los piratas y zambos mosquitos que asolaban la
costa caribe de Centroamerica. EI comercio de contrabando se convirti6
entonces en la mejor salida para el cacao de Matina.
Finalmente, en el siglo XVIII se dio un cicIo cacaotero en el istmo de
Rivas, el cual aun no ha sido estudiado con profundidad. Hacia media-
dos del siglo XVIII existian en esa zona alrededor de medio mill6n de
arboles de cacao, cantidad mas que suficiente para satisfacer el consumo
en Nicaragua, y dejar a los duenos de los cacao tales de Matina sin ningu-
na posibilidad de competir con exito en el abastecimiento del mercado
. ..
nlCaraguense.

ILUSTRACION Nil 14. CACAOTALES DE MATINA. Mapa antiguo que muestra los cacaotales de
Matina, en el Caribe de Costa Rica. La produccion cacaotera en esa zona atrajo la atencion de
los piratas y de sus ali ados los zambos mosquitos, con quienes los habitantes de la provincia
establecieron un activo comercio de contrabando.

Cultivo y comercio del anil

El otro producto de importancia para el comercio centroamericano


fue el anil, hermoso tinte azul que se obtiene de una planta llamada anil
o xiquilite, ya conocida por los indigenas. En Europa yen la misma Ame-
rica el tinte tenia buena demanda por parte de la industria textil, 10 cual
propici6 el cultivo en mayor escala. La actividad se desarroll6, principal-
mente, en el territorio de El Salvador, y, en menor medida, en otros pun-
tos de la costa del Pacifico de Centroamerica.
El problema principal que debi6 enfrentar la producci6n anilera
fue la falta de mana de obra. Aunque la demanda de trabajadores era
reducida en la epoca de siembra, porque se utilizaban tecnicas de cultivo

92
muy simples, la necesidad de brazos aumentaba cuando se necesitaba cor-
tarlo, cargarlo y trasladarlo a los obrajes donde se Ie procesaba. La Au-
diencia prohibi6 el trab;:yo de los indigenas en esa actividad, por conside-
rarla danina para la salud. Una orden real de 1563 confirm6 la disposi-
ci6n, p ero los productores inventaron mas de un subterfugio para de-
sobedecer.
No obstante los problemas para abastecerse de mana de obra, la in-
dustria anilera tuvo su primer auge entre 1580 y 1630. El anil era exporta-
do a Espana a traves de Veracruz, 10 cual hacia sumamente onerosos los
costos de transporte; tambien se enviaba en pequenas cantidades al Vi-
rreinato de Peru. Despues de 1630, la industria entr6 en una fase de es-
tancamiento, de la cual no sali6 sino hasta mediados del siglo XVIII .

Dtras actividades agropecuarias

Aparte el cultivo del cacao y del anil, importantes en el comercio colo-


nial de larga distancia, los conquistadores y colon os tambien se preocupa-
ron por introducir cultivos destinados a la producci6n de alimentos, con
posibilidades de ser comercializados en los incipientes mercados urba-
nos. Los principales productos cultivados con ese fin fueron el maiz, el
trigo y la cana de azucar. Ademas desarrollaron la ganaderia de vacunos,
para obtener productos alimenticios, cueros y sebo; la caballar y mular,
para el transporte, y tambien la porcina y lanar. No obstante sus benefi-
cios, la ganaderia se convirti6 en un problema muy grave para muchas
comunidades indigenas, porque los animales andaban sueltos y provoca-
ban graves danos en los cultivos.

Mineria de plata

En el Reino de Guatemala, la actividad minera mas importante tuvo


lugar en el actual territorio de Honduras. Hasta la decada de 1560, la
mineria hondurena estuvo dominada por la explotaci6n de oro de place-
res. La situaci6n cambi6 cuando se descubrieron ricos yacimientos de pla-
ta en Guazucaran, jurisdicci6n de Tegucigalpa (1569), Y en San Marcos,
Agatelca y Nuestra Senora de la 0 (1581). Mas adelante, en el siglo XVII,
tambien se extrajeron minerales de plata en Sanjuan, San Salvador y San
Antonio Yeguare.
La mineria hondurena tuvo serias limitaciones para su desarrollo des-
de el principio. La plata se obtenia solamente de la parte mas superficial,
porque la explotaci6n en profundidades mayores requeria de grandes

93
inversiones d~ capital y mana d e obra para la construccion de galerfas,
drenajes y sistemas de ve ntilacion. Las tecnicas mas usadas fueron que-
mar la superficie del suelo, para suavizarlo, y fundir el metal usando car-
bon de lena. Esos metodos deben de haber ocasionado danos ecologicos
cuantiosos. La tecnica de amalgama fue poco utilizada, porque el mercu-
rio necesario para su aplicacion era un monopolio de la Corona, y su
adquisicion resultaba onerosa. Ademas, los mineros preferian no usar la
amalgama, porque, d e acuerdo con el total de las ventas d e mercurio, las
autoridades podian calcular la cantidad de plata producida y as! cobrar
los impuestos respectivos.
El problema clave de la minerfa fue la falta de mana de obra. Como
hemos visto, a mediados del siglo XVI, la poblacion indigena del territorio
hondureno se hallaba ya muy diezmada. Por otra parte, la Corona intento
restringir el uso d e la mana de obra indigena en las actividades mineras,
por considerar que eran nocivas para la salud de los nativos. De manera
que, aunque se importo mana de obra de origen africano, esta nunca fue
suficiente.
Sin embargo, a pesar de las dificultades, la mineria de plata fue el eje
alrededor del cual giro la vida economica en Honduras. La actividad pro-
picio el desarrollo de la ganaderia, porque se necesitaba grandes cantida-
des de carne, cueros y sebo, para la alimentacion, el transporte de la plata
y las velas para alumbrar las galerias, respectivamente. Tambien estimulo
la industria salin era en el Golfo de Fonseca. La mineria imprimio caracte-
rfsticas especiales al territorio hondureno, las cuales son perceptibles aun
en el presente.

Crisis del comercio atlantico y sus repercusiones en Centroamenca

En el curso del siglo XVII, el sistema d e flotas de galeones que servia


para realizar el comercio a traves del Atlantico entre Espana y sus territo-
rios american os entro en una fase de decadencia. Dos causas principales
explican ese fenomeno: pOl' un lado, la produccion minera en el Alto
Peru (hoy Bolivia) disminuyo considerablemente y el transito de mercan-
das y de plata a traves del istmo de Panama se altero de manera irreme-
diable; pOl' otro, la Corona se vio involucrada en guerras europeas que
distrajeron los recursos, y la armada espanola no pudo brindar seguridad
a los barcos que realizaban el comercio ultramarino.
El vado dejado por Espana fue aprovechado por las potencias enemi-
gas. Piratas y otros aventureros se dedicaron a asolar las desprotegidas
costas centroamericanas, especialmente en el Caribe. En algunos puntos
los ingleses se instalaron de manera p ermanente, como en Belice, las Islas

94
de la Bahia y del Maiz y el territorio de la Mosquitia. La ocupaci6n d e
Jamaica por Inglaterra, en 1655, fue clave, pues se convirti6 en el centro
de las actividades piraticas y del comercio de contrabando en el Caribe.
En la actualidad existe una discusion, entre especialistas, ace rca de
cuales fueron las consecuencias de la crisis del comercio atlantica y del
debilitamiento de Espana como potencia maritima. Segun algunos, Cen-
troamerica quedo sumida en una profunda crisis economica y monetaria.
Otros, en cambio, pensamos que mas bien las provincias y regiones se
volvieron mas autosuficientes, pues, como hemos visto paginas atras, el
comercio ultramarino nunca tuvo gran significado para el Reino de Gua-
temala, puesto que este se hallaba alejado de las principales rutas mariti-
mas. Ademas, los comerciantes se abastecieron de bienes importados ilf-
citamente y aprovecharon para vender productos locales a los ingleses. EI
comercio intercontinental en la costa del Pacifico tambien aumento, a
juzgar por el numero de barcos y por la presencia de mocIones, moneda
acunada en Peru que entonces circulaba mucho en Centroamerica.
Otros cambios importantes ocurrieron en el siglo XVII, pero su rela-
cion con la crisis del comercio atlantico no es clara. El mas importante

94' __ < I
86'

18~~
MAPANQ 15 18' _

./. . .\ ..//'l. r--'-'-/ CAPITANIA GENERAL DE GUATEMALA


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I
I

Tegucigalpa

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OCEANO

PAciFICO
MAR

CARJBE
SIMBOLOGIA

tt Ai1il
10'
N Ganaderia y derivados
~ RepaSlo
--*-- Metales preciosos
(IT!\ Texti les
~ Cacao
o 80 160 Km

94' 86'
fue el proceso d e «ru ralizaci6 n », 0 sea, el traslad o d e muchos espa1101es
radicados en las ciudades a vivir en el campo, m o tivados principalmente
por el deseo de producir alimentos y de alejarse d el peligro de las invasio-
nes de los piratas. La «ruralizaci6n» tuvo como conse cuencia que la gente
se preocupara por adquirir tierras 0 por legitimar las que ya explotaban
sin tftulos legales. As!, no solo se formaron algunas haciendas de gran
extensi6n, sino que surgieron pequenas explotaciones agropecuarias, lla-
madas ranchos, chaCl-as 0 bohfos, pertenecie ntes a espanoles pobres 0 a
mestizos. Los mas pobres se vieron convertidos en arrendatarios, aparce-
ros y peones de las haciendas.
El interes por la tierra afect6 de diferente manera a las comunidades
indfgenas. En las zonas donde existfan cultivos de interes comercial hubo
muchos conflictos. La situaci6n mas compleja se present6 en la Alcaldfa
Mayor de San Salvador, donde el cultivo del anil fue como un iman que
atrajo a pobladores de otros lugares. En cambio en zonas alejadas y margi-
nales la explotaci6n de los indfgenas fue menor, e incluso, en algunas, la
poblaci6n comenz6 a aumentar.

GOBIERNO, PODER E IDEOLociA

La Corona se vio obligada a crear institucione s d e gobierno que admi-


nistraran, en su nombre, los territorios coloniales y defendieran los inte-
reses metropolitanos; tam bien a utilizar todo el poder de la Iglesia, para
reforzar su dominaci6n mediante la «conquista espiritual» de los indige-
nas y el control ideol6gico de los espanoles y los mestizos; y, ademas, a
implementar otras formas de control que Ie permitieran mantener a sus
dominios en la situaci6n colonial. De esos aspectos nos ocuparemos en el
presente apartado.

Instituciones de gobierno

La enorme extensi6n del imperio espanol y el pobre desarrollo de


los medios de comunicaci6n y de transporte dificultaron el control de los
territorios coloniales. Por tal motivo la Corona fue creando, poco a poco,
las instituciones que se encargarfan de los asuntos concernientes a las
colonias. En Centroamerica, las principales instituciones fueron: la Au-
diencia, las gobernaciones, las alcaldfas mayores, los corregimientos y los
cabildos.

96
A udiencia de Guatemala

Como se ha senalado paginas atras, en 1542, fue creada la Audiencia


de los Confines. Su amplia jurisdiccion se extendfa desde Tabasco y Yuca-
tan, en el sur de Mexico, hasta el istmo de Panama. En los anos siguientes
esa institucion sufrio algunas modificaciones de importancia: primero, su
traslado de Gracias a Dios ala ciudad de Santiago (1549); enseguida se
disolvio durante un breve perfodo (1563-1 567), durante el cuallos asun-
lOS centroamericanos fueron atendidos por la Audiencia de la Nueva Es-
pana (Mexico); finalmente, en 1567 se reinstalo, yen su nueva demarca-
cion se excluyo a Panama. A partir de 1570 funciono ininterrumpidamen-
te, con el nombre de Audiencia de Guatemala.
Esta Audiencia estaba conformada por un presidente, tres oidores y
un fiscal, los cuales desempenaban funciones de legisladores,jueces y eje-
cutores de las disposiciones emanadas de la misma Audiencia y de otras
instancias. (Conviene recordar que la division de poderes en ejecutivo,
legislativo y judicial fue producto del pensamiento politico de la Ilustra-
cion, en el siglo XVIII).
El presidente de la Audiencia tambien tenia el titulo de gobernador
de la «provincia mayor» de Guatemala. Mas adelante, a principios del
siglo XVII, tambien se Ie dio el de «capitan general», debido ala necesi-
dad de contar con un mando militar centralizado, ante el incremento de
las amenazas externas.
La Audiencia de Guatemala se goberno con gran autonomia, y sus
decisiones solo podian ser apeladas ante el Consejo de Indias, con sede
en Espana, 0 ante el Rey.

Gobernaciones, alcaldias mayores y corregimientos

EI territorio de la Audiencia fue dividido en partes menores, llama-


das gobernaciones, alcaldias mayores y corregimientos. Los funcion a-
rios que estaban a la cabeza de esas jurisdicciones compartian iguales
poderes y responsabilidades; al principio eran designados por el pre-
sidente de la Audiencia, 10 que Ie permitia a este instalar en esos pues-
tos a parientes y amigos, pero mas adelante la Corona intervino en esos
nombramientos.
Los primeros corregimientos fueron creados en la decada de 1540,
para gobernar territorios con abundante poblacion indigena que, de acuer-
do con las Leyes Nuevas, e ran quitados a los encomenderos y entregados
a la Corona. Las gobernaciones y alcaldias mayores se distinguian de los
corregimientos en que su extension territorial era mayor y abarcaban cen-

97
tros de poblaci6n n o indfgen a. Las gobcrn acio n es, por 10 general, eran
mas amplias que las alcaldias m ayores, y tenian importancia econ6 mica 0
e strategica. Por ejemplo , la creaci6n d e la Go be rnaci6n de Honduras
(1552) obedeci6 a la relevancia de la minerfa d e plata, y la de Costa Rica
(1565) a que era tierra aun no sometida.

Cabildos

En el nivel inferior del esquema administrativo colonial espanol se


encontraba el cabildo, instituci6n encargada d el gobierno local de ciuda-
des y villas de espanoles y en los pueblos de indios. (Aqui no nos referire-
mos a estos ultimos, porque ya los mencionamos paginas atras).
Los cabildos estaban compuestos por regidores - encargados d e asun-
tos administrativos- y alcaldes 0 justicias -encargados de resolver las
causas civiles y criminal es- . En los anos iniciales de la conquista, el cabil-
do era una instituci6n muy democratica, porque los funcionarios que 10
formaban eran nombrados por los mismos conquistadores, quienes a su
vez eran los fundadores de un nuevo asentamiento urbano. Sin embargo,
a fines del siglo XVI habia perdido ese caracter, porque la Corona decidi6
poner en venta los cargos de regidores. La instituci6n comenz6 a decli-
nar, y en el siglo XVII los cabildos de algunas ciudades dejaron de funcio-
nar por falta de personas interesadas en adquirir los cargos. Incluso en la
poderosa ciudad de Santiago, el numero de miembros d el cabildo decli-
n6 de veinte a seis entre 1660 y 1694. A pesar de todo, los cabildos fueron
la legitima expresi6n de los intereses locales y la via adecuada para hacer
peticiones directas ante el Rey.
La primera obligaci6n de los cabildos coloniales y de los funcionarios
reales era mantener el orden y la lealtad al Rey. Sin embargo, el aparato
administrativo colonial nunca estuvo 10 suficientemente desarrollado como
para prescindir de la colaboraci6n de las elites espanolas, de algunos indi-
genas importantes, y, sobre todo, del apoyo de la Iglesia Cat61ica.

Iglesia y dominacion

La Iglesia desempen6 un papel de primordial importancia en la con-


solidaci6n del dominio espanol. En los siglos XVI Y XVII, durante la mo-
narquia de los Habsburgos, la relaci6n entre la Iglesia y el Estado espanol
fue particularmente estrecha, gracias al patronato real. Este era un privi-
legio otorgado por los papas a la Corona, que Ie permiti6 a esta intervenir
en asuntos tales como determinar las jurisdicciones territoriales eclesias-

98
ticas, nombrar candidatos a obispos, aprobar la publicacion de edictos
papales y cobrar y administrar el diezmo.
En Centroamerica, ya para la dec ada de 1530 se habian definido las
primeras jurisdicciones eclesiasticas. Habia cuatro obispados: el de Nica-
ragua, con sede en Leon, que incluia la Gobernacion de Costa Rica; el de
Honduras, cuya sede se establecio en la ciudad de Comayagua a partir de
1570; el de Chiapas, cuyo obispo residia en Ciudad Real; y el de Guatema-
la, con sede en Santiago, con jurisdiccion sobre el actual territorio de El
Salvador.
Los primeros obispos designados en Centroamerica tuvieron grandes
dificultades: en su mision de defender a los indigenas se vieron enfrenta-
dos al poder de los encomenderos; disponian de recursos economicos
escasos, por la dificultad de cobrar adecuadamente los diezmos; ademas,
tuvieron el problema de la escasez de sacerdotes para evangelizar a los
nativos. Por todas estas razones, la «conquista espirituah de estos fue en-
comendada al clero regular, es decir, a las ordenes religiosas.
Las ordenes religiosas mas importantes en Centroamerica fueron las
de San Francisco, Santo Domingo y La Merced. AI principio la obra evan-
gelizadora fue muy superficial, pero despues de la fundacion de las re-
ducciones la tarea se facilito. Los territorios fueron organizados en «doc-
trinas» , equivalentes a las parroquias. En el pueblo principal 0 cabecera
de cada una de elIas se construia la iglesia y el convento donde residian
los religiosos; los pueblos de menor importancia eran considerados como
«pueblos de visita». Los religiosos, para poder tener algun grado de exito
en su mision, se vieron obligados a aprender las lenguas indigenas y a
preparar gramaticas y catecismos. No obstante esos esfuerzos, la erradica-
cion de las religiones y de las costumbres IIlurales nativas fue IIlUY dificil,
cuando no imposible. AI final, los religiosos tuvieron que ser bastante
tolerantes, y contentarse con un catolicismo muy superficial y colmado
de sincretismos.
El plan original de la Iglesia era que las doctrinas pasaran a estar bajo
el control del clero secular, una vez pacificados y evangelizados los nativos.
Pero no sucedio asI, porque las ordenes religiosas se opusieron, alegando
que el clero secular era corrupto y mundano, y que los sacerdotes desco-
nocian las lenguas autoctonas. La realidad era que existia un serio obsta-
culo para aplicar el plan de la Iglesia: la falta de sacerdotes para hacerse
cargo de las doctrinas indigenas. Los dos colegios seminarios fundados en
Guatemala (1592) y Nicaragua (1680) no lograron ordenar suficientes sa-
cerdotes. No fue sino hasta en el siglo XVIII cuando un grupo numeroso
de jovenes criollos eligio la carrera eclesiastica, motivado, en buena medi-
da, por las nuevas posibilidades de enriquecimiento producidas gracias a
los cambios economicos y demograficos propios de esa centuria.

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MAPA N!l 16

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ORDENES RELIGIOSAS
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La principal fuen te d e recursos de la Iglesia era e l diezmo. Este im-


puesto eclesiastico consistia, como su n ombre 10 sugiere, en entregar a la
in stitucion la decima parte de las cosechas de los productos importantes
d el comercio: anil, trigo y cana d e azucar. Los indigenas estaban exentos
d el pago de esa carga. La diocesis mas rica fue la d e Guatemala, porque
en su territorio se recogian las mejores cosechas d e productos sujetos al
pago del diezmo.
Teoricame nte una parte de los ingresos generados por el cobro de
diezmos debia regresar a las parroquias, pero en la practica no siempre
ocurria as!. En consecuencia los curas se dedicaron a buscar otras alterna-
tivas para captar recursos, entre elias, el cobro por la administracion de
los sacramentos, por los rituales celebrados para las cofradias y por la
fundacion de capellanias. Estas fuentes de ingresos permitieron al clero
secular gozar de cierta autonomia ante las autoridades eclesiasticas y dis-
frutar de riqueza individual. Los miembros de las ordenes religiosas, en
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ILUSTRACION N!1 15. UN lVE RSIDAD DE SAN CARLOS. GUATEMALA. La U niversidad d e San
Ca rl os d e Guatemala , fund ad a e n 1676, fu e el principal ce nlro d e ed u cacion supe ri or d el
anli g uo Re ino de Gua tem a la . EI acceso a esa casa d e estudios era un o d e los privilegios d e qu e
goza ban lo s varones d e las fa mili as d e la e lite criolla centroa m eri can a.

cambio, hadan voto d e p o breza, 10 cual no impedia que las ordene s y


mo n asterios acumularan riquezas.
La Iglesia gastaba una porcion considerable d e su s ingresos en la cons-
tru ccion de templos y m o n asterios, en la compra d e ornamentos y en
sufragar la vida un tanto ociosa de muchos eclesiasticos y monjas. Sin
e mbargo, tambien asumia obras como la educacion , los se rvicios hospita-
larios y otras actividades d e interes social. El inconve niente fue que esos
se rvicios no se prestaron e n todo el Reino, sino que se concentraron en
las principales ciudades, sobre todo en Santiago de Guatemala.

101
1LUSTRACION NQ 16. CONSTRUCCION DE LA CATEDRAL DE SANTIAGO, GUATEMA-
LA. La Iglesia invertia una buena parte de sus ingresos en la construcci6n de templos y
monasterios, especialmente en la capital del Reino de Guatemala y en otras ciudades
principales. La ilustraci6n mu estra la construcci6n de la Catedral d e Santiago de Gua-
te mala, cuya arquitectura religiosa es sobresaliente.

Iglesia y control social

Los eclesiasticos gozaban de gran poder e influencia, sobre todo en


las areas rurales, don de a menudo eran los unicos representantes del apa-
rata estatal. La Iglesia colaboraba con las tareas cotidianas de gobierno,
ayudaba a reforzar el conformismo del pueblo y castigaba 10 que conside-
raba como «malas costumbres». Para ellogro de este ultimo fin, se creo el
Santo Oficio de la Inquisicion, encargado de vigilar el comportamiento
de los espanoles y mestizos. El Santo Oficio perseguia la herejia, castigaba
la blasfemia, la falta de religion, y velaba por la moralidad publica y la
disciplina del clero. Tambien impedia la divulgacion de ideas que consi-

102
deraba perniciosas, y periodicamente daba a conocer listas de libros PIO-
hibidos. Por eso, en el perfodo colonialla mayor parte de los libros q ue
circulaban eran de caracter religioso, y en los puertos se revisaba cuidado-
samente el ingreso de literatura prohibida.
Los casos denunciados ante el Santo Oficio debian ser conocidos, en
primera instancia, por los representantes locales d e esa insti tucion . Poste-
riormente eran remitidos al tribunal que funcionaba d esde 1571 en la
ciudad de Mexico, el cual se encargo de atender los asuntos cen troameri-
canos. AI contrario de 10 que se pie n sa, el establecimiento d e ese tribunal
fue recibido con beneplacito, porque se consideraba que serviria de fre-
no a los modos de comportamiento indeseables y a las ideas ofensivas a
Dios.

Religion formal y religion popular

La practica re ligiosa oficial tenia mayor importancia en los centros


urbanos, mientras que en las areas rurales predominaba la religiosidad
popular. A diferencia d e la religion oficial , que insistia en el conformis-
mo, la religion popular enfatizaba en la posibilidad de la intercesion divi-
na para m ejorar las condiciones d e la vida co tidiana, en casos de plagas,
pestes, desastres naturales y otros problemas que causan afliccion. Como
resultado de esta religiosidad popular se d e sarrollo el culto de diversas
imagenes, y surgieron centros d e peregrinacion, como e l de la Virgen
de los Angeles, en Cartago, Costa Rica, y el del Cristo d e Esquipulas, en
Guatemala.

GUERRA Y PODER

Una d e las mayores preocupaciones d e los presidentes de la Audien-


cia era mantener la integridad territorial del Reino de Guatemala y prote-
ger la seguridad de sus habitantes, amenazadas por los europeos enemi-
gos de Espana. Durante el siglo XVI la responsabilidad militar recayo en
los encomenderos, pero en el siglo siguiente, ante la decadencia econo-
mica de e se sector, fue necesario organizar milicias voluntarias. Primero
fueron llamados a filas solo los «espanoles», pero hacia mediados d el si-
glo XVII fueron reclutados mestizos, mulatos y n egros libres.
Las milicias enfrentaron serios inconvenientes, como la falta de ofi-
ciales capacitados, la escasez de armas de fuego y d e municiones y la ca-

103
rencia de fortificaciones en las costas, esp ecialmen le en el Caribe, la par-
te mas vulnerable. Ademas las milicias se concentraban hacia el interior
d el territorio, y su desplazamiento hacia los puntos que d ebran defender
resultaba muy dificil. La clara debilidad d e Espana para proteger sus do-
minios fue aprovechada por sus enemigos europeos, por 10 que los m ares
se infestaron de corsarios, piratas y bucaneros, sobre todo en la segunda
mitad del siglo XVII. Como consecuencia, e l comercio de contrabando se
incremento, y algunas ciudades fueron invadidas, saqueadas y quemadas.
Los britanicos incluso lograron formar un «protectorado » en la Mosqui-
tia, en alianza con los zambos mosquitos, quienes rechazaban d e plano la
autoridad espanola.
Espana trato de d efender sus derechos por la vra diplomatica. Por
ejemplo, en 1670 firmo, junto con Inglaterra, el Tratado de Madrid, me-
diante el cual ambas potencias acordaron poneI' freno ala piraterra y al
con trabando. Sin embargo, ese y otros tratados se convertian en «letra
muerta» cuando las hostilidades entre las potencias desembocaban en
nuevas guerras. La Corona tomo tambien otras medidas, como nombrar
en el puesto de capitan general a militares de carrera de reconocido pres-
tigio, y fortificar los puntos mas vulnerables, como el Golfo Dulce, el puerto
d e Omoa, el rro Sanjuan y el Valle de Matina.

Problema de los territor7os Jronterizos

Un problem a adicional dificultaba la d efensa del Caribe centroameri-


cano: la existencia de territorios de frontera, sobre los cuales los espano-
les no tenran ningun con trol, y donde la resistencia indrgena no daba
tregua. Los mas importantes eran el Peten, la Mosquitia y Talamanca, to-
dos poco poblados y sin mayores riquezas, por 10 que no resultaba nada
atractivo para los particulares emprender su conquista. Por su parte, la
Corona careda de recursos para financiar campanas militares. En esa si-
tuacion, el apoyo de las ordenes religiosas fue clave para intentar el domi-
nio espanol sobre los territorios de frontera.
Algunos religiosos, movidos por el afan de extender el catolicismo,
mantuvieron esfuerzos aislados por llevar el evangelio hasta los indrgenas
insumisos, pero casi siempre esos empenos fueron infructuosos. En el
ocaso del siglo XVII la «conquista espirituah> de esos aborfgenes recibio
un notable impulso, dentro del contexto de un movimiento de renova-
cion que experimentaba la Iglesia. El reto fue asumido, principalmente,
por los recoletos, un grupo dentro de la orden franciscana.
Los recoletos eran preparados, para las misiones, en los colegios de-
nominados de «Propaganda Fide », y tenran la intencion de utilizar meto-

104
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10° San Ferna ndo de Malina
u Fo rtificaci6n
',,-
Area no subyugada
o Ase ntamien lO ingles
, Ase ntamiento indigen a no suhyugado

Um ites de la Audi e n cia

90"
dos pacificos para acercar a los indigenas al conocimiento de Dios, y, de
paso, al control espanol. Pese a sus buenas intenciones, no lograron gran-
des progresos ni en la Mosquitia ni en Talamanca. En consecuencia, los
frailes cambiaron d e opinion y solicitaron el auxilio de escoltas armadas,
para proteger sus vidas. Pero la presencia d e soldados solo logro incre-
mentar la desconfian za d e los indigenas. La situacion mas dificil se vivio
en Costa Rica, pues en 1709 estallo, en Talamanca, una gran sublevacion,
encabezada p Ol' el cacique Pablo Presbere. Aunque al finalla rebelion fue
sofocada por tropas espanolas provenientes de Cartago y los lideres reci-
bieron castigos «ejemplarizantes», ese hecho puso fin a los intentos d e
someter Talamanca al dominio espanol.
En el Peten, las misiones estuvieron a cargo de franciscanos, domini-
cos y mercedarios. Debido a los pobres resultados obtenidos, se genero
una discusion acerca de los metodos utilizados para someter la region.
Mientras la Corona continuaba defendiendo la conquista por medios pa-
cificos, los criollos guatemaltecos y los mismos misioneros justificaban el
uso de la fuerza de las armas, con el argumento de que los indigenas
insumisos atacaban esporadicamente las reducciones de indios ya pacifi-
cados. Ademas, se temia que los filibusteros y los ingleses cortadores de
maderas asentados en Belice lograran aliarse con los indigenas no reduci-
dos y amenazaran el territorio guatemalteco. Entonces las autoridades
tomaron la determinacion de emprender la conquista militar de l Peten .
Despues de varias campanas fallidas, organizadas desde Guatemala, en
1697 el Gobernador de Yucatan, Martin de Ursua y Arismendi, logro to-
mar la capital Itza, localizada en el lago Peten. Sin embargo, la toma de
Ahitza fue un exito muy limitado, y no significo el control espanol del
amplio territorio del Peten.

Aspectos politicos del problema militar

Debido a la indiferencia de la Corona, el Reino de Guatemala termi-


no por asumir la responsabilidad de su propia defensa. La necesidad de
obtener fondos para construir castillos y presidios y para mantener las
milicias produjo una alianza entre los grupos locales poderosos y los pre-
sidentes de la Audiencia. Los comerciantes ofrecian su apoyo a cambio de
que las altas autoridades actuaran con cierta flexibilidad a la hora de eje-
cutar disposiciones que pudieran afectar sus intereses. Ademas obtenian
grados militares (simbolo de prestigio social), aunque muchas veces no
tenian ni los conocimientos minimos acerca del arte militar.
Este sistema defensivo, de tan particulares caracteristicas, nunca se
puso a prueba. Sin embargo, sirvio para que los sectores dominantes to-

106
maran conciencia de que era posible llevar una existencia propia, inde-
pendiente de Espana. Esta fue la semilla de la crisis politica e ideologica
que, a principios del siglo XIX, tuvo como resultado la desarticulacion del
imperio espanol.

107
Capitulo III

CENTROAMERICA:
DE LA ILUSTRACION AL LIBERALISMO

El periodo comprendido entre 1750 y 1870 se caracteriza por una


serie de cam bios demograficos, econ6micos, politicos, institucionales y
socioculturales, los cuales favorecieron la incorporaci6n de Centroameri-
ca -area atrasada y periferica del imperio espanol- a la modernidad.
Los factores que desencadenaron esas transformaciones fueron de
origen externo. La Revoluci6n Industrial, que se dio primero en Inglate-
rra y luego en otros paises del occidente de Europa, permiti6 la apertura
de nuevos mercados para los productos coloniales. Mientras tanto, Espa-
na emprendia las Reformas Borb6nicas, en un intento por modernizar la
administraci6n de sus dominios y obtener de estos un mayor provecho
econ6mico. Otros factores que influyeron en el proceso fueron la difu-
si6n del pensamiento ilustrado, el pensamiento econ6mico de la escuela
fisiocratica francesa, la independencia de las colonias inglesas (1776) y la
Revoluci6n Francesa (1789).
Aunque el impacto de los factores d e cambio senalados se sinti6 en
toda America Latina, es po sible notar grandes diferencias a nivel regio-
nal, porque la realidad de los territorios coloniales era ya bastante desi-
gual hacia mediados del siglo XVIII. Por eso iniciaremos este capitulo pre-
sentando un panorama general que nos p ermita vislumbrar la diversidad
dentro del espacio centroamericano. Posteriormente analizaremos el auge
comercial que se dio a mediados del siglo XVIII y el impacto de las Refor-
mas Borb6nicas. Enseguida veremos la Independencia d e Centroamerica
y la busqueda de alternativas de organizaci6n politica y econ6mica que se
produjo en las decadas siguientes ala separaci6n de Espana.

109
POBLACrON Y SOCIEDAD

Hacia mediados del siglo XVIII el espacio cen troamericano pareda un


rico mosaico, debido a la diversidad de actividades econ6micas que se
desarrollaban en las diferentes regiones, y, sobre todo, a los contrastes
sociales y etnicos. Los planes de la Corona espanola habian sido otros. En
el siglo XVI se habia intentado la organizaci6n de la sociedad colonial en
dos «republicas». Por un lado iba a estar la republica de los espanoles,
asentados en villas y ciudades; por otro, la republica de los indios, concen-
trados en sus pueblos, en donde las autoridades espanolas -civiles y ecle-
siasticas- los podrian controlar y «civilizar».
En realidad, en Centroamerica, al igual que en el resto de America
Latina, pronto se inici6 un profundo mestizaje biol6gico y cultural, que
atm no ha sido analizado por la historiografia con la profundidad que
merece. Un asunto si es claro: el sistema de estratificaci6n social imperan-
te en el periodo colonial tuvo un fuerte componente etnico, aunque ma-
tizado con otros elementos de caracter econ6mico y cultural.

Espafioles 0 blancos

Los «espanoles» formaban el estrato mas alto de la sociedad colonial, el


cual se dividia a su vez en dos segmentos: el de los nacidos en la peninsula
yel de los «criollos» 0 nacidos en America. Este estrato detentaba el pode-
rio econ6mico y politico (10 cual no quiere decir que no hubiese tambien
blancos pobres). Los privilegios de los «espanoles» se originaron en el siglo
XVI, cuando los conquistadores y primeros pobladores fueron favorecidos
con concesiones gratuitas de tierras, encomiendas y otras prerrogativas.
Algunos encomenderos tuvieron la habilidad y los recursos nece-
sarios como para diversificar sus actividades y dedicarse al comercio. Ya
hacia fines del siglo XVI era evidente el ascenso econ6mico y social de
quienes ejerdan actividades mercantiles. Un fuerte grupo de comercian-
tes, radicados en la ciudad de Santiago de Guatemala, detentaba e l pode-
rio econ6mico. En las principales ciudades de las diferentes jurisdiccio-
nes residian otros comerciantes, pero sus fortunas no eran tan cuantiosas.
Los hijos de las familias criollas de la elite tambien podian aspirar a
hacer carrera eclesiastica (garantia de seguridad econ6mica y prestigio
social), y a ocupar puestos politicos y militares - aunque los de mas alto
nivel estaban reservados para los peninsulares.
La sociedad colonial era una sociedad de privilegios. Los «espaiioles»,
por el simple hecho de serlo, gozaban de privilegios legales. El principio

110
legal de igualdad ante la ley no existia en el periodo colonial; asi, ante un
mismo deli to, los blancos eran castigados de un modo y los demas de
otro. Los privilegios economicos y legales favorecieron la preservacion
deillamado orgullo por ellinaje, patron cultural de origen espanol. En la
Peninsula Iberica se consideraba que una persona era de «sangre limpia»
cuando no tenia mezcla de sangre mora 0 judia y descendia de viejas
familias cristianas. En America, en cambio, se consideraba que era deni-
grante tener sangre indigena 0 negra.
Como resultado, entre las principales familias pre domino un patron
de matrimonio endogamico, con el fin de proteger, mediante alianzas
matrimoniales convenientes, tanto el linaje como los patrimonios. Los
unicos foraneos bienvenidos como pretendientes de las hijas de las fami-
lias mas conspicuas eran los burocratas recien llegados de Espana y los
comerciantes, en especial si se trataba de hombres adinerados. En el siglo
XVIII se incremento el numero de este tipo de inmigrantes: unos venian a
ocupar puestos en la administracion colonial, gracias a la creacion de
nuevas plazas, y otros para aprovechar las grandes oportunidades de ha-
cer fortuna en el comercio.
El orgullo por ellinaje calo muy hondo en la mentalidad de la epoca.
La Iglesia colaboro a perpetuar el sistema, pues era la institucion encarga-
da de registrar la etnia de cada persona, ala hora de asentar las partidas
de bautismo y de registrar los matrimonios. Siri embargo, los cur as no
actuaban con suficiente rigor, y siempre era posible convencerlos de omi-
tir la etnia de un nino bautizado 0 de uno de los miembros de la pareja de
contrayentes en caso de que resultara inconveniente.
Los «espanoles» se caracterizaban, ademas, por su apego a la religion
catolica y su lealtad a la Corona (aunque esta ultima se quebro en las
postrimerias del periodo colonial). Esto les llevo a fundar capellanias, a
formar parte de cofradias, a participar en ceremonias oficiales y religiosas
en las cuales se renovaban los lazos culturales y la solidaridad que los
identificaba como el estrato mas importante de la sociedad colonial, a
pesar de que numericamente no era el mas significativo.

Indigenas

El estrato de los indigenas era el mas numeroso. En el capitulo ante-


rior comentamos la situacion de explotacion y maltrato de que los indios
fueron objeto como consecuencia de la conquista espanola y explicamos
que estos fueron la principal fuente generadora de recursos y de mana de
obra a 10 largo de todo el periodo colonial.

111
En el transcurso del siglo XVIII la Corona trat6 de que la producci6n
indfgena se integrara en los circuitos comerciales. Con este fin se otorga-
ron thulos de propiedad de las tierras pertenecientes a las comunidades
y, en 1747, se dio la conmutaci6n, es decir, se orden6 que el tributo fuera
cancelado en efectivo. Pero esa medida solo sirvi6 para que los indfgenas
fueran sometidos a nuevas exacciones. La recolecci6n del tributo segufa
un esquema piramidal: los indios tributarios debfan pagar a las autorida-
des indfgenas, quienes a su vez 10 entregaban a las autoridades espanolas
para que 10 remitieran a las arcas reales.
Desde el pun to de vista legal, la Corona consider6 a los indfgenas
«hijos menores de su Majestad», es decir, inferiores e incapaces de velar
por sf mismos. Por ese motivo se cre6 el puesto de defensor de los indios,
el cual recafa en algun espanol, quien se encargaba de velar por los inte-
reses de los indfgenas (al menos en teorfa).
No obstante su condici6n de dominados, los indfgenas no constitufan
un grupo homogeneo. Durante los anos iniciales de la colonizaci6n espa-
nola se respet6 el orden jerarquico de los indfgenas, tactica para lograr
mas facilmente el control polftico. Caciques y «principales» pasaron a for-
mar parte de los cabildos instaurados en los pueblos de indios y gozaron
de ciertas ventajas, como la exenci6n del pago del tributo. Algunos apro-
vecharon su posici6n y administraron fraudulentamente los bienes de la
comunidad indfgena para enriquecerse. Asf, en los pueblos habfa indios
ricos e influyentes, e indios pobres y explotados.
La pretensi6n de la Corona de que los indfgenas concentrados en pue-
blos gradualmente se «espanolizaran», no se consigui6. La mayor parte de
los nativos nunca aprendi6 el idioma de sus dominadores. La Iglesia, como
hemos visto, era la instituci6n que posefa los mecanismos para transmitir
los valores culturales, pero los religiosos no estaban interesados en que la
situaci6n cambiara demasiado y, ademas, los sacerdotes seculares eran
pocos. En esas circunstancias era imposible pretender una transformaci6n
profunda de las costumbres de los naturales. Mas bien los indfgenas opu-
sieron cierta resistencia a las transformaciones culturales, y supieron en-
contrar espacios que les permitieron recrear sus culturas, e incorporar,
con adaptaciones, algunos elementos aportados por los espanoles.
Los indfgenas lograron sobrevivir a los efectos de la conquista y la
colonizaci6n, tanto que en algunas regiones constitufan la mayorfa de la
poblaci6n hacia mediados del siglo XVIII. En Guatemala, cerca del 90%
del total de la poblaci6n era indfgena, y se concentraba en los altiplanos;
en Chiapas y El Salvador, 10 era mas del 50% de la poblaci6n total (Ver
grafico NQ 3). Solo en Nicaragua la poblaci6n mestiza superaba levemen-
te a la indfgena, mientras en Honduras y Costa Rica predominaban los
mulatos, mestizos y blancos.

112
GRAFICO 3
CENTROAMERICA: POBLACION TRIBUTARIA (CERCA DE 1770)

Costa Rica y Nicoya Honduras


332 4.692

San Salvador
y Sonsonate
15.531
Guatemala
61.526

Chiapas y
Fuente: Soconusco
His/oria General de Centroamerica, 17.611
Tomo III, pag. 2l. FLACSO 1993

Negros

El elemento de origen africano estuvo presente en Centroamerica des-


de el siglo XVI, y, aunque su porcentaje no era muy elevado, se debe con-
siderar como nuestra tercera raiz. Los esclavos negros fueron empleados,
primero, en la explotacion de minerales. En los siglos siguientes tambien
se les encontraba en los ingenios y obrajes de las haciendas mas prospe-
ras, y como servidores domesticos en las residencias urban as de las fami-
lias mas poderosas. Algunos esclavos urbanos aprendieron algun oficio
(carpinteria, albaiiileria, herreda, costura), con cuyo ejercicio aportaban
mgresos a sus amos.
La posesion de esclavos negros 0 mulatos no solo acarreaba benefi-
cios economicos a sus propietarios, sino que tambien era un factor de
prestigio social y un simbolo de riqueza. Las principales familias posefan
numerosos esclavos, segun quedo consignado en documentos notariales
firmados a la hora de dotar a las hijas, dictar testamentos y comprar 0
vender esclavos.
La relacion estrecha entre esclavos y amos, asi como tambien con otros
servidores domesticos -indigenas y mestizos- se facilito porque todos
compartfan los espacios destinados a vivienda. Esta situacion propicio el
mestizaje, medio por el cualla poblacion negra de origen colonial se dilu-
yo. Tambien influyo en su virtual desaparicion el que muchos esclavos
lograran comprar su libertad 0 fueran manumitidos. Los libertos solian

113
escoger esposas 0 compancras de otras e tnias, no solo porque las mujeres
negras eran escasas, sino tambien porque preferfan mujeres libres para
que sus descendientes no fueran esclavos. En las areas rurales, los esclavos
tambien terminaron siendo absorbidos. No obstante, hacia mediados del
siglo XVIII su presencia era visible en toda la costa pacifica de Centroame-
rica, desde Soconusco hasta Nicoya.
La poblacion de origen africano era intermediaria de los espanoles
en el con trol de la poblacion autoctona. Desde el siglo XVII, los mulatos
formaron parte de las milicias, y destacaron en e l control de las revueltas
indigenas y en la defensa del territorio centroamericano contra los ata-
ques de piratas y otros enemigos europeos.

Ladinos

Si bien es cierto el mestizaje inicial fue producto d e la mezcla entre


los conquistadores y las mujeres indigenas, muy pronto intervino el ele-
mento africano, y a partir de esos tres elementos basicos se originaron las
castas: de la mezcla de espanol con indigena nacieron los m estizos, d e
espanol y negro los mulatos, y de indigena y n egro los zambos. Con el
paso de los anos la «paleta racial» se volvio cada vez mas variada. El mesti-
zaj e y la fon:lacion de las castas fue un proceso gradual, pero tomo gran
fuerza en el siglo XVIII.
Ademas del mestizaje biologico se dio una mezcla de los patrones cul-
turales propios de los diferentes estratos de la sociedad colonial. En el trans-
curso del siglo XVIII se popularizo, en el Reino de Guatemala, el uso del
termino ladino, para d esignar a la gente de sangre mezclada. Sin embargo,
dada la confusion reinante, tambien cayeron en la denominacion de ladi-
nos los indigenas desarraigados de sus comunidades, los cuales habian apren-
dido espanol y adoptado la vestimenta y las costumbres de los m estizos.
Los miembros de las castas sufrieron todo tipo de marginacion social,
y no contaban con ninguna proteccion legal ni apoyo d e parte d e la Coro-
na, como si sucedia con los indigenas. Mientras a los espanoles y a las
comunidades indigenas se les dotaba de tierras, los asentamientos de la-
dinos carecian de ellas. La falta de tierras los obligaba a buscar la manera
de introducirse en las comunidades indigenas, situacion que dio origen a
innumerables disputas. Tambien se instalaron en los realengos de mane-
ra precaria, para dedi carse a la agricultura y a la ganaderia en pequena
escala. En el siglo XVIII, a los asentamientos de ladinos se les denominaba
«valles». Como a esas personas les resultaba dificil adquirir tierras a titulo
individual, algunos asentamientos de ladinos realizaron composiciones
colectivas. Este hecho fue notable en el Valle Central de Costa Rica, en la

114
segunda mitad del siglo XVIII. Sin embargo, era muy corriente que los
iadinos vagaran por los campos en busca de trabajo estacional en las ha-
ciendas. No obstante el aporte de los ladinos a la economia colonial, para
los espanoles estos eran merecedores de los peores conceptos.
La idea de la limpieza de sangre ca16 tan hondo en la sociedad de la
epoca, que ellos mismos hacian diferencia entre quienes llevaban sangre
indigena en sus venas y los que llevaban sangre negra. En ese sentido,
lIamar a alguien mestizo era una ofensa, pero el agravio era attn mayor si
se Ie llamaba mulato. En los archivos de la epoca se convervan numeros
juicios de limpieza de sangre, entablados ante las autoridades competen-
tes por quienes se sintieron ofen didos al recibir un trato que considera-
ban injusto.
En resumen, en el siglo XVIII la poblaci6n centroamericana creci6
numericamente y vari6 cualitativamente (Ver grafico NQ 4). En la segun-
da mitad de esa centuria los ladinos eran el elemento predominante en
los territorios de Nicaragua, EI Salvador, Honduras y Costa Rica.

GRA.FIC04
EVOLUCION DE LA POBLACION CENTROAMERICANA (1820-1870)
1200

1000

800
If)

'"-l
.....l
600

~ 400

200

o
• Guatemala El Salvador II Nicaragua • Honduras D Costa Rica
Fuente : Historia General de CentTOamerica, Tomo III, pag. 238. FLACSO 1993

ESPECIALIZACION PRODUCTIVA REGIONAL

Hacia mediados del siglo XVIII, el crecimiento de la demanda de pro-


ductos agropecuarios (tabaco, cacao, anil y cueros), en Europa Occiden-
tal, propici6 la integraci6n, en el mercado mundial, de regiones de His-

115
panoamerica que hasta entonces habian sido secundarias. Tal fue cl caso
de Centroamerica, donde el anil se convirti6 en el «producto motor» de
la economia, desde que aument6 su demanda pOl' parte de la industria
textil inglesa y catalana.

EL PROBLEMA DE LOS LADINOS

Entre los aiios 1768 y 1770, el Arzobispo Pedro Cortes y La-


rraz realiz6 una visita eclesiastica a los pueblos de la Di6cesis de
Guatemala. Las observaciones y reflexiones producto de esa vi-
sita las recogi6 en su obra DescrijJCion Geografico-moral de la Dioce-
sis de Guatemala, en much os de cuyos pasajes el Obispo mani-
fiesta su preocupaci6n por el problema de los ladinos. As], por
ejemplo, en SLIS reflexiones sobre la parroquia de Sonsonate
expresa:

«D Ue arriba que en las haciendas y salinas puede haber


muchas familias y personas de quienes no se da memoria,
ni tengo por conveniente preguntar; pOI-que todo seria una
pura mentira y que esto sirva de regIa para todo este escri-
to. EJ fundamento que tengo para ello es: que todos igno-
ran las familias y personas que habitan en semejantes sitios.
En las haciendas, pajuides, trapiches, valles y salinas se re-
cogen matadores, ladrones, amancehados y vagos de todas
partes, sucede (como me ha sucedido algunas veces) pre-
gun tar: (cuanta gente hay aqui? Y responde el mayordomo
de la hacienda: hay 10 6 15 personas. Replicole: (pues y
tantas como se yen? Son escoteros, dicen que hoy estan en
una hacienda y mal1.ana en otra. De modo que hay una
multitud innumerable de personas en semejantes sitios (que
no se sabe si arriharan ala cuarta 0 a la tercera, 0 ala mitad
del arzobispado) y ninguno da, ni puede dar raz6n de ellos:
viven a su arbitrio, sin sl~eci6n a alguna ley, sin oir misa ni
doctrina y sin reconocer parroquia alguna, de que dare
cuenta al Rey para que tome la providencia que estimare
justa». *

* Cortes y Larraz, Pedro. Descripcion Geogrrifico-moral de la Dioce-


sis de Guatemala. Tomo I. Biblioteca «Goathemala» de la So-
ciedad de Geografia e Historia de Guatemala. Volumen XX,
Guatemala, 1958, pag. 78.
Una de las mas importantes consecuencias del allge ai'i.ilero rue la
especializaci6n productiva regional. La principal zona anilera se ubic6 en
la Alcaldia Mayor de San Salvador, donde hubo un auge sin precedentes
en tre los anos 1760 y 1792. La planta tint6rea era producida tanto en las
haciendas pertenecientes a «espanoles» y mestizos, como en pequei1as
propiedades pOl' parte de campesinos ladinos a los cuales se les denomi-
naba «poquiteros». Estos iiltimos produdan e l anil de mejor calidad 0
«flor», gracias al cuidado que ponian en el procesamiento de la planta.

ILUSTRACI0N NQ 17. HACIENDA DE ANIL. En e l perfodo posterior a la !ndepe nden cia, al


ig ual que durante la epoca colonial, la economfa de EI Salvador, se baso en la produc ci6n de
aiiil. En la d ecada de 1840 el cafe co menzo a d esplazar la produccion allil era.

Aunque el cultivo del anil no logr6 desplazar completamente los cul-


tivos de subsistencia -maiz y frijoles- ni la ganaderia, la producci6n de
estos no fue suficiente para satisfacer las necesidades alimentarias de la
regi6n anilera y fue necesario importarlos de otras partes. Nicaragua se
convirti6 en el principal abastecedor de ganado y, como resultado, se pro-
dl~o una notable expansi6n de esa actividad, que propici6 la consolida-
ci6n de haciendas ganaderas en el Valle del Tempisque y en la banda
oriental del Golfo de Nicoya, hoy parte del territorio de Costa Rica.
La actividad ganadera tambien floreci6 en la regi6n central de Guate-
mala. En los Valles de Chimaltenango y Amatitlan habia importantes ha-

117
ILUSTRACION Nl! 18. ESCUDO DEL CONSULADO DE COMER-
CIO. EI Co nsul ado de Comercio era lIn a especie d e gremio
que agrupaba a los comerciantes. AlI nqll e su sede se en con-
traba en la ciudad d e Guatemala, sujurisdiccion abarcaba toda
la Capitan!a General. La ilustrac ion mu es tra el escudo de ese
Consulado.

ciendas dedicadas al repastaje del ganado que era llevado desde Hondu-
ras, Nicaragua y Nicoya, para su posterior venta en Guatemala y El Salva-
dor. La zona costera del Pacifico de Escuintla, Guazacapan, Chiquimula y
Acasaguastlan tambien conocio un importante desarrollo de la ganade-
ria. Las haciendas del occidente de Guatemala se dedicaron a la produc-
cion de maiz, trigo y cana de azucar para abastecer los cen tros urbanos.
La region occidental se caracterizo, ademas, por sus tejidos de lana y
de algodon. En Chiapas, Quezaltenango, Huehuetenango, Totonicapan
y Verapaz, el hilado y la fabricacion de telas con sti tuian procesos separa-
dos, es decir, unas comunidades se encargaban de hilar y otras de tejer.
Los mas favorecidos con esas actividades eran los Alcaldes Mayores y los
religiosos, quienes se encargaban de distribuir el trabajo y se beneficia-
ban con el comercio de los bienes acabados. En la segunda mitad del
siglo XVIII la produccion de «ropas de la tierra» se incremento y se convir-
tio en un n egocio sustancial para los comerciantes radicados en la ciudad
de Guatemala, quienes intercambiaban las ropas por anil salvadoreiio y
por ganado de otras regiones. Este lucrativo negocio comenzo a decaer a
principios del siglo XIX, cuando empezo la importacion de textiles ingle-
ses a traves de Belice, la Mosquitia y Jamaica.

118
En cuanto a Honduras, su principal actividad continuo siendo la mi-
neria d e plata, que se concentraba en los alrededores de Tegucigalpa. La
zona de Choluteca, en el Pacifico, se dedic6 a la ganaderia, primero a la
111ular y luego ala vacuna.
En Costa Rica la especializaci6n productiva no fue tan marcada como
en otras partes de Centroamerica. La mayor parte de la poblacion se con-
centraba en el Valle Central, y se d edicaba ala agricultura y la ganaderia
en pequena escala. Solo en la segunda mitad del siglo XVIII se dio un
despunte en el cultivo del tabaco. En 1766 se estableci6 la Real Renta de
Tabaco y el Estado asumi6 el control de la actividad en todas sus etapas:
financiamiento, producci6n y comercializaci6n.
El establecimiento de la Factoria de Tabacos tuvo diversos resultados:
el aumento de dinero circulante dentro de la provincia; el impulso al
comercio, que favoreci6 en especial a quienes se dedicaban al transporte
de tabaco y de otras mercancias; y el estimulo al crecimiento de SanJose
como centro urbano principal. El regimen imperante de pequenas y m e-
dianas propiedades no se vio afectado por el auge tabacalero.

AUGE Y CRISIS DEL COMERCIO

En la segunda mitad del siglo XVIII Centroamerica experiment6 un


auge comercial sin precedentes. Por primera vez en su historia, los inter-
cambios propiciaron una cierta integraci6n de las regiones entre si, y del
espacio centroamericano en su conjunto con el exterior. Los mas favore-
cidos con la nueva situaci6n fueron los comerciantes guatemaltecos, quie-
nes poseian dinero en efectivo y mercancias que les permitieron finan-
ciar y controlar diversas actividades productivas. Ademas, desde 1793 re-
cibieron autorizacion de la Corona para establecer el Real Consulado de
Guatemala, instituci6n que se encargaria de velar por sus intereses.
El auge comercial fue impulsado por una serie de reform as, promovi-
das por la Corona espanola como parte de las Reformas Borb6nicas, las
cuales flexibilizaron los intercambios. A partir de la decada de 1740 se deci-
dio sustituir la Armada de Galeones por el sistema de «navios sueltos», pe-
queiias y veloces embarcaciones a las cuales se les permitio navegar solas
entre los puertos de la metr6poli y los puertos americanos. Este sistema se
introdujo en Centroamerica a partir de 1744, y facilit61as exportaciones de
anil y de plata a traves de los puertos localizados en el Golfo de Honduras.
Mas adelante, en 1789, se instaur6 el regimen de «libre comercio», que
comprendia el comercio entre los puertos espanoles y coloniales.

119
No obstante los esfuerzos d e la Corona Espanola por favorecer el co-
m ercio legal con sus colonias, las m edidas fueron insuficientes para dete-
n er el comercio interlope. El contrabando florecio en el siglo XVIII, sobre
todo e n Honduras, Nicaragua y Costa Rica, donde hasta las mas altas au-
toridades espanolas se vieron involucradas en ese tipo de actividades. Los
ingleses y holandeses resultaron favorecidos con el intercambio de pro-
ductos locales (plata, anil, cacao, carey, carn e d e tortuga, esc1avos), por
productos de origen europeo (telas, ropa, hi erro, loza ). El contrabando
suplio aquellos productos que eran dificiles de conseguir por otras Vias,
sobre todo despues del cese de las ferias comerciales de Portobelo, en la
d ecada de 1740.
Para fines del siglo XVIII el cicio expansivo de la produccion y el co-
mercio llegaba a su fin. Los precios del anil cayeron debido a la satura-
cion del mercado internacional; el anil centroamericano no pudo sopor-
tar la competencia del producido en otras p artes del mundo, en especial
en la India. En consecuencia, las exportaciones bajaron, al igual que las
importaciones legales de mercancias europeas, y los intercambios regio-
nales se vie ron seriamente disminuidos.
La situacion se agravo cuando las comunicaciones con la metropoli
fueron interrumpidas a causa del bloqueo continental impuesto por In-
glaterra. Mientras Espana cala, de manera inevitable, al rango de poten-
cia d e segunda categorfa, los ingleses y los norteamericanos aprovecha-
ban para invadir con sus mercancias el mercado centroamericano. Los
comerciantes guate maltecos se vieron seriamente afectados, porque los
provincianos prescindieron de su interme diacion y trataron directamen-
te con los ingleses. Otra de las consecuencias de la crisis fue el incremen-
to de las relaciones mercantiles por los puertos del Pacifico, en especial
con Panama, convertida en importante centro de contrabando ingles.
El oscuro panorama d e una metropoli decadente, aSI como la crisis
del comercio legal y el auge del contrabando, contribuyeron a que los
sectores criollos empezaran a preguntarse acerca del sentido de seguir
ligados a Espana.

REFORMAS BORBONlCAS

AI ascender al trono espanolla familia de los Borbones, en la metro-


poli se planteo la necesidad de emprender una serie de reform as de ca-
racter administrativo, fiscal y militar que, inspiradas en el absolutismo
frances y en el despotismo ilustrado, tendrfan como principal objetivo

120
eonsolidar la autoridad del Estado espanol y aumentar los ingresos de las
areas reales. Aunque las reformas se iniciaron desde la primera mitad del
siglo XVIII, los cambios mas importantes se dieron durante los reinados
de Carlos III (1759-1788) y de Carlos IV (1788-1808). En Centroamerica,
la estrategia reformista se propuso seis objetivos fundamentales: 1) Esti-
mular las comunicaciones y el comercio con otras colonias y con Espana.
2) Limitar el poder eclesiastico, atacando la propiedad y los privilegios de
la Iglesia. 3) Apoyar a los productores provincianos en sus quejas contra
los comerciantes gaditanos y guatemaltecos. 4) Crear el sistema de inten-
dencias, para suprimir a los funcionarios corruptos. 5) Reformar la es-
tructura de los impuestos, con el fin de financial' el creciente poder gu-
bernamental. 6) Aumentar los gastos militares, para evitar la presencia
britanica en Centroamerica.

Comunicaciones y comercio

El principal resultado de la politica de incrementar las comunicacio-


nes maritimas entre Espana y Centroamerica fue la autorizacion para
que los puertos de la costa norte hondurena, Omoa y Trujillo, y el puer-
to guatemalteco de Santo Tomas de Castilla comerciaran directamente
con la metropoli, por medio de los navios sueltos. Este objetivo no se
pudo alcanzar plenamente por dos razones fundam entales: por un lado,
las vias de comunicacion terrestre con la costa eran pesimas, y muchos
comerciantes prefirieron continuar exportando por Veracruz. Por otro
lado, el comercio por e l Caribe centroameri cano era frecue ntemente
in terrumpido pOI' los ataques piratas. La principal consecuencia de ese
fracaso fue que la Corona no logro quebrar el poderio de los comercian-
tes guatemaltecos.

Poder y privilegios de la Iglesia

El poderio economico y politico de la Iglesia era un obstaculo que se


oponia al interes de los Borbones de fortalecer la administracion colo-
nial. El poderio de la Iglesia descansaba en el control de gran des cantida-
des de tierra y de actividades productivas, como por ejemplo el abasteci-
mien to de azucar para la capital del Reino. La Iglesia y los eclesiasticos
disfrutaban tambien de numerosas prebendas. Uno de los privilegios que
mas incomodaba a la Corona era el acceso a los bienes y dineros de las
cofradias indigenas, pues perjudicaba el pago de los tributos a la Real
Hacienda.

121
El enfrentamiento entre la Iglesia y el Estado espan ol implic6 tam-
bien un mayor control sobre las 6rde n es religiosas y los sacerdote s sec ula-
res y la vigilancia de sus actividades econ6micas. La expulsi6n d e los jesui-
tas (1767) Yla expropiaci6n de sus bienes e s tal vez el mejor ejemplo de la
ofens iva d e la Corona contra el pode r de la Iglesia. Sin embargo, este no
logr6 ser d estruido comple tam e nte y las instituciones de credito eclesias-
ticas p ermanecie ron durante la primera mitad del siglo XIX. La apropia-
ci6n d e los dineros d e las cofradias y obras pi as (consolidaci6n) por parte
d e la Corona no se inici6 hasta en 1805, y nun ca logr6 ser completada.

Productores del interior jrente a grandes comerciantes

Los poderosos comerciantes radicados en la capital d el Reino tenian


bajo su control el comercio regional centroamericano y los intercambios
de larga dis tan cia. Asi, monopolizaron las exportaciones de anil hacia
Europa y las importaciones provenientes de Cadiz, las islas Filipinas, Mexico
y Peru. El mercado interno de los productos mas importantes -ganado,
ropas, plata, hierro, cacao e hilazas de algod6n- tambien cay6 bajo su
dominio. El mecanismo mediante el cual controlaron el comercio de ga-
nado y de anil fue la habilitaci6n, la cual consistia en el adelanto anual de
mercandas y dinero en efectivo pagaderos en especie.
Las medidas tomadas por la Corona para atacar las prerrogativas de
los comerciantes guatemaltecos fueron variadas. En 1782 el Capitan Ge-
neral Matias de Galvez estableci6 la Sociedad de Cosecheros de Anil, la
cual contaba con unajunta encargada de fijar los precios del tinte, y con
un montepio (especie de banco), para financiar la actividad. No obstan-
te, los fondos eran exiguos, los dineros de los prestamos no eran recobra-
dos con facilidad y los comerciantes guatemaltecos tenian la ventaja de
dominar los medios de transporte hacia el Virreinato de Nueva Espana,
desde don de se exportaba el producto a Europa.
En su afan de fracturar el mono polio que detentaban los comerciantes
guatemaltecos sobre el comercio ganadero, Galvez orden6 trasladar a Chal-
chupa la feria que se realizaba en Cerro Redondo; tambien design6 un
juez para fijar los precios del ganado. Sin embargo, su orden de no vender
animales fuera de las ferias desagrad6 a los productores del interior.
Los comerciantes guatemaltecos tambien tenian control sobre la pro-
ducci6n minera hondurena, mediante el credito que facilitaban a los due-
ii.os de las minas de plata. Las autoridades espanolas se hallaban descon-
tentas con esa situaci6n, porque sabian que una buena parte del metal
nunca llegaba a la Casa de Moneda (establecida en Guatemala en 1731),
porque se utilizaba para el comercio ilegal con extranjeros. En 1780 Gal-

122
vez [undo un Banco d e Rescate en Tegucigalpa, con miras a aumentar la
produccion minera y garantizar mayores utilidades a la Corona. Sin em-
bargo, al faltar el credito de los comerciantes, la produccion minera mas
bien disminuyo. Finalmente, el banco desaparecio en 179l.
En suma, el poder de los comerciantes guatemaltecos -que descan-
saba en sus vinculos con las casas comerciales espanolas, en el control del
credito a los productores y en su h abilidad para e liminar a los competido-
res- no pudo ser quebrantado mediante las medidas adoptadas. Esta si-
tuacion alimento el descontento de los provincianos, como fue evidente
en el momento de la crisis polftica que condujo a la independencia y,
posteriormente, ala balcanizacion del antiguo Reino de Guatemala.

Sistema de intendencias

A nivel polftico-administrativo, la creacion del sistema de intendencias


fue ellogro maximo de las reformas borbonicas. En Centroamerica fue-
ron creadas cinco intendencias entre 1785 y 1787, en Chiapas, Guatemala,
San Salvador, Comayagua y Leon (mapa NQ 19). Con esta medida se pre-
tendia sustituir a los alcaldes mayores y corregidores (quienes tenian fama
de corruptos), por funcionarios leales a la Corona, todo con el fin de ex-
pander el absolutismo. Con la creacion de las intendencias, se procuraba
tambien promover el desarrollo de metropolis regionales, pero tampoco
con esto se logro quebrar el poder centrado en la capital del Reino.

ReJorma fiscal

A mediados del siglo XVIII, los ingresos de la Real Hacienda en la


Audiencia de Guatemala provenian, fundamentalmente, de los tributos
de los indigenas. La Corona se propuso incrementar los ingresos prove-
nientes del comercio, mediante la creacion de las receptodas de alcaba-
las. Ese impuesto al comercio era cobrado por los mismos comerciantes
guatemaltecos; pero, como estos controlaban las aduanas, facilmente po-
dian hacer fraudes. Tambien fueron establecidos varios monopolios, como
los del aguardiente (1765), el tabaco (1766), la polvora y los naipes.
Con el fin de controlar mejor el cobro de los impuestos fueron esta-
blecidas cuatro subadministraciones (en San Salvador, Chiapas, Comaya-
gua y Leon). Asi se extendio al interior el poder de la monarquia espano-
la. El establecimiento de esas subadministraciones fue importante para el
futuro, porque definio jurisdicciones que sedan utilizadas posteriormen-
te para las intendencias, y luego para definir los limites de los estados.

123
Defensa militar

Una vez establecido el nuevo sistema impositivo, fuertes sumas de di-


nero fueron reinvertidas en Centroamerica para pagar los sueldos de los
bur6cratas y para la defensa del territorio. El objetivo fundamental, en
ese campo, era contener el expansionismo ingles en la costa del Caribe.
Inglaterra se comprometi6, en el Tratado de Paris, a derribar las fortifica-
ciones construidas en la Mosquitia y en la Bahia de Honduras. No obstan-
te, los intereses de los colonos ya afincados en esas areas impidieron el
cabal cumplimiento de los acuerdos.
Mas adelante, en 1786, la firma de la Convenci6n Anglo-Espanola
autoriz6 a los ingleses a continuar con la tala de maderas preciosas y de
palo brasil en Belice. Los ingleses, por su parte, se comprometieron a
desalojar los asentamientos de las costas hondurena y nicaragiiense, tan-
to como los de las Islas de la Bahia y de otras pequenas islas del Caribe.
Mas de 3 500 personas dejaron la zona, pero algunos colonos se negaron
a abandonar sus pertenencias y debieron reconocer el dominio espanol.

I I I
~93° 87° 84°
18°
MAPANQ 18

ORGANIZACION 18'
POLiTICO - ADMINISTRATIVA
DE CENTROAMERICA 1785 - 1821

GU ATEM A LA

C iudad de ~uate m a la <. .. DE HON D U RAS


t-':, •
.... "" \
("' ..... " Co m a yagua
-..,\ iii San .t. .................
OCEA NO . Salvador l
~
I N TE N DENCIA
PAciFICO
DE NlqARAGUA
12°

S[MBOLOc iA
12'
MAR
• Ca pita l d e intcnde n c ia 0 provincia

Limit e d e audie n cia


CA RIBE

Limite d e intc nden c ia

Ocupacion brilanica
go

100 0 ]00 200 Km


I"""""""~=-",""""'l

93° 87' 84'


A pesar de todos los esfuerzos realizados, no se logro eliminar la pl'e-
sencia de los ingleses en el Caribe centroamericano, y mas bien, e n el
ocaso d e la epoca colonial, el contrabando se increme nto a traves de Be-
lice, el cual se convirtio e n e l principal asentamiento ingles en la region.

Balance de las Reformas Borb6nicas

Un rapido balance sobre los alcances d el reformismo borbonico e n


Centroamerica muestra los pobres resultados alcanzados. Los intentos de
romper el poderfo de los comerciantes guatemaltecos y d e la Iglesia fue-
ron un fracaso . En cambio, sf fue posible aumentar los ingresos fiscal es,
gracias a los monopolios establecidos y al control administrativo m as efi-
ciente. Pero el resultado obtenido no fue el esperado: las medidas acre-
centaron el descontento general, el eual se manifesto en movimien tos
antiespanolistas y de protesta antifiscal que alteraron la tranquilidad en
varias partes del Reino. En cuanto a la d efensa d el istmo, el logro mas
importante fue la contencion de los ingleses en la Mosquitia; asf se evito
que la costa caribe de Nicaragua se convirtiera en otra colonia inglesa,
como sucedio con Belice.
Pese a los logros limitados de las Reformas Borbonicas en Centroame-
rica, es posible afirmar que, hacia 1790, el poder del Estado espanol era
mayor que nunca antes desde la conquista. Sin embargo, en menos de
veinte anos iba a colapsar. Poco a poco, el terreno se iba preparando para
la emancipacion de Espana.

INDEPENDENCIA DE CENTROAMERICA

La independencia de las colonias americanas de Espana debe ser ana-


lizada como parte de un largo proceso, cuyas rakes mas profundas se
encuentran en la situacion colonial misma. No obstante, no fue sino en
las primeras decadas del siglo XIX cuando las colonias pudieron romper
los vfnculos que las mantenfan atadas ala metropoli.

Movimientos antifiscales y antiespaiiolistas

Entre los anos 1811 y 1814 hubo en Centroamerica una serie de movi-
mientos antifiscales y antiespanolistas que pusieron en entredicho la au-

125
toridad de Espana. Los objetivos de esos movimientos eran limitados: aca-
bar con los monopolios implantados por el Estado espanol sobre el taba-
co y el aguardiente y deponer a algunos funcionarios espanoles, a quienes
se les malqueria por su autoritarismo. De manera que en ningun momen-
to tuvieron por objetivo la separacion definitiva de Espana.
Los principales movimientos tuvieron lugar en San Salvador, Leon y
Granada; en otras poblaciones tan solo hubo amagos de violencia. Las
autoridades espanolas, impulsadas por el temor, reaccionaron reforzan-
do las medidas de seguridad. En Guatemala el Capitan General castigo en
forma ejemplarizante a los acusados de participar en la Conspiracion de
Belen . El descontento urbano no logro encender la chispa de la rebelion
en las areas rurales, como estaba sucediendo en Mexico en ese mismo
periodo. En contraste con la debilidad del movimiento anticolonial inter-
no, el peso de los factores externos fue determinante para desencadenar
el movimiento independendista centroamericano. Esos factores fueron:
el impacto de las ideas de la Ilustracion, la crisis politica de la monarquia
espall01a, la sublevacion, en Espana, del General Rafael Riego y Nunez y
los sucesos de Mexico.

LA ILUSTRACION

La Ilustracion fue una corriente de pensamiento segun la cual


solo mediante la razon se podIa lograr el conocimiento y transfor-
mar la realidad. Los origenes de ese movimiento se remontan al
siglo XVI, pero su mayor desarrollo se dio durante el siglo XVIII,
con el aporte de pensadores ingleses Uohn Locke y Adam Smith)
y franceses (Dionisio Diderot, Carlos de Secondat, el baron de
Montesquieu, Juan Jacobo Rousseau y Francisco Maria Voltaire).
De acuerdo con esa corriente filosofica, la naturaleza debe ser
investigada cientlficamente, y explotada con racionalidad. La so-
ciedad, la economfa y el gobierno tambien estan organizados y
funcionan de acuerdo con leyes naturales que pueden ser conoci-
das mediante la razon. Los ilustrados combatieron las ideas reli-
giosas, y culparon a la Iglesia del atraso y de la ignorancia del pue-
blo, por considerar que sus ensellanzas se basaban en la Fe. Ade-
mas, gracias ala influencia del pensamiento ilustrado, la teoria de
que el poder de los reyes era de origen divino declino completa-
mente. En su lugar, se difundieron las ideas de Rousseau de que la
soberania residia en el pueblo y que los gobernantes eran solo
funcionarios en quienes se hallaba depositado el poder.

126
Impacto de la Ilustraci6n

Las ideas de la Ilustracion socavaron el orden establecido en ESpal1a y


en otras potencias europeas, al poner en entredicho los dos pilares sobre
los cuales ese orden descansaba: la monarquia absoluta y la Iglesia. Como
consecuencia, en Espana se paso de la monarquia absoluta al despotismo
ilustrado y se emprendieron las Reformas Borbonicas. Ademas, la influen-
cia del pensamiento ilustrado tambien dio otros resultados, como el envio
de la primera expedicion cientifica a Centroamerica, por parte del monar-
ca Carlos III. Entre 1787 y 1803 el naturalistaJose Longinos, el boUinico
Jose Mariano Mocino y el dibujante Vicente de la Cerda recorrieron bue-
na parte de Centroamerica para conocer sus recursos naturales.
Los criollos centroamericanos que se formaron en la Universidad de
San Carlos de Guatemala conocieron las ideas ilustradas en esa casa de
estudios. Fray Antonio de Liendo y Goicoechea, la mas relevante figura
de la Ilustracion en el Re ino de Guatemala, impulso grandes cambios en
la Universidad. A el se debio la difusion del cartesianismo y de la fisica
experimental, el impulso ala ensenanza de la cirugia de un modo avanza-
do y moderno y el que las clases se impartieran en espanol, en vez de
latin.
Las ideas de la Ilustracion, que habian servido de inspiracion ala Re-
volucion de Independencia de los Estados Unidos y a la Revolucion Fran-
cesa, tambien contribuyeron a formar la conciencia de las elites criollas
que, por su situacion, eran las llamadas a dirigir los movimientos politicos
y sociales que llevarian ala emancipacion de las colonias espanolas.

Crisis politica en Espana

En el ano 1808 Espana sufrio una de las crisis politicas mas graves de
su historia: la invasion de las tropas francesas de Napoleon Bonaparte. El
monarca Carlos IV se vio obligado a abdicar en favor de su hijo Fernando
VII, y este a su vez declino el trono de Espana y se 10 dio a Napoleon. El
hermano de este,jose Bonaparte, a quien los espanoles bautizaron con el
sobrenombre de «Pepe Botellas», fue instalado como rey de Espana.
La inconformidad ante esos hechos vergonzosos no se hizo esperar.
En la peninsula hubo levantamientos populares, se desconocio la autori-
dad impuesta y se creo un Consejo de Regencia, para gobernar en nom-
bre de Fernando VII. En America surgio un movimiento tendente a fun-
dar juntas que gobernaran las colonias durante el cautiverio del Rey. Ade-
mas el Consejo de Regencia convoco a Cortes, en Espana, por 10 cuallas
provincias de ultramar fueron invitadas a enviar sus representantes.

127
Las Cortes se reunieron en Cadiz. Los rcpresentantes de Guatemala y
de Costa Rica, el Doctor Antonio Larrazabal y el presbitero Florencio del
Castillo, tuvieron una participaci6n destacada, e incluso ocuparon la pre-
sidencia d e las Cortes, donde se discutieron los problemas que aquejaban
a Espana y a sus colonias. El resultado mas importante de las deliberacio-
nes fue la promulgaci6n de la Constituci6n de 1812. Esta carta magna, de
corte liberal , garantiz6 much as de las libertades de que habian carecido
los subditos del rey de Espana, como las libertades de reuni6n y de expre-
si6n, y dispuso que hubiera ayuntamien tos constitucionales en los princi-
pales centros urbanos.
Durante el tiempo en que estuvo vigen te la Constituci6n de Cadiz,
funcionaron cabildos constitucionales e n las principales villas y ciudades
de toda Centroamerica. Ademas, se establecieron Diputaciones Provin-
ciales en Le6n (territorios de Nicaragua y Costa Rica) y Guatemala (con
jurisdicci6n para Guatemala, Chiapas, Honduras y El Salvador), las cualcs
gozaron de muchas atribuciones que antes habian sido propias de otras
autoridades politicas. En el territorio de cada diputaci6n habia un J efe
Politico, quien a su vez era miembro d el cuerpo colegiado. Pero, a pesar
de que el fun cionamiento de las diputaciones provinciales contribuy6 p ara
que los habitantes de las colonias se acostumbraran a tener un gobierno
propio, al regresar Fernando VII a Espana, en 1814, aboli6 la Constitu-
ci6n y se retorno al despotismo.

Rebeli6n de Riego

En enero de 1820 se hallaban listas, en Espana, las tropas que, al man-


do del General Rafael Riego, partirian a sofocar los movimientos emanci-
padores en Hispanoamerica. Las tropas se amotinaron y marcharon so-
bre Madrid, donde el Rey Fernando VII fue obligado a poner en vigencia
la Constituci6n de 1812.
En Centroamerica, uno de los resultados mas importantes d el segun-
do periodo constitucional fue la aparici6n de peri6dicos, gracias a la li-
bertad de imprenta garantizada por la Constitucion. Estos llevaban titu-
los muy sugestivos, que reflejan el momento que se vivia. El Editor Cons-
titucional, editado por don Pedro Molina, mas adelante, en visperas de la
Independencia cambi6 su nombre por el de El Genio de la Libertad. Mien-
tras tanto, don Jose Cecilio del Valle, uno de los mas ilustres centroameri-
canos de la epoca, publicaba El Amigo de la Patria, de tendencia mas
moderada. En ambos peri6dicos se discutieron abiertamente las princi-
pales inquietudes del momento, como los beneficios que podria reportar
a las colonias ellibre comercio, el estado calamitoso de las vias de comu-

128
nicaci6n, la situacion de los indigenas y de las castas y la saluci pllbJica;
pero, sobre todo, se debati6 sobre las ideas independentistas.

Acontecimientos de Mexico

Los acontecimientos que se daban en Mexico tuvieron una influencia


clecisiva en la independencia del Reino de Guatemala. En 1820 las tropas
de Agustin de Iturbide debian combatir a las fuerzas emancipadoras que,
£11 man do de Vicente Guerrero, se hallaban acantonadas en Oaxaca. Pero
Iturbide decidio pac tar con Guerrero, y el 24 de febrero de 1821 firma-
ron el Plan de Iguala. Este tambien era conocido como Plan de las Tres
Garantias, porque los principales puntos que contenia eran el reconoci-
miento de la independencia de Mexico, 1£1 union de todos los habitantes
del pais sin diferencia alguna y la garantia de que la religion oficial seria
la catolica. En el Plan tambien se acordaba que el gobierno de Mexico
seria monarquico; que la Corona Ie seria ofrecida, en primer lugar, a Fer-
nando VII 0 a algun otro principe espal1.01; ademas, que se convocaria a
cortes, pero que, m ien tras tanto , se conform aria una J u nta Gubernativa
para hacer cum p lir el pacto . Finalmente, que los dos ejercitos formarian
uno solo: el ejercito de las tres garantias.
El Virrey de Mexico, Apodaca, no aprobo el Plan de Iguala y la lucha
armada continuo. No obstan te, el 5 d e julio las tropas concentrad as en la
plaza de la ciudad de Mexico se rebelaron contra el Virrey y 10 obligaron
a presentar la renuncia. El n u evo Virrey, don Juan de O'Donoju prefirio
suscribir u n acuerdo con Iturbide, el cual fue desap robad o por Espana.
Esto desato la in surreccion popular y m ilitar, que fu e aprovechada por
Iturbide para proclamarse Emperador de Mexico , en mayo de 1822.

Crisis de la independencia en Centroammca

Los acontecimientos d e Mexico rep ercutieron rapidamente en la p ro-


vincia de Chiapas, 1£1 cu al, por su posicion y por sus vinculos comerciales,
tenia nexos estrechos con la Nueva Espana. En las tres principales ciuda-
d es de la provincia (Comitan, San Cristobal y Tuxtla) se tomo la decision
de declarar la Independencia conforme al Plan de Iguala. Tambien se acor-
do declarar la anexion de Chiapas a Mexico . Este acuerdo Ie fue comuni-
cado a don Gabino Gainza, que era en ese entonces Capitan General de
Guatemala, y al Ayuntamiento capitalino, para invitarlos a hacer 10 mismo.
Las noticias procedentes de Chiapas lIegaron a Guatemala el 13 de
setiembre de 182l. Las reacciones ante elias fueron diversas: algunos ex-

129
perimentaron tal entusiasmo, que se situaron frente al Palacio de Gobier-
no para dar vivas a la libertad; otros, como era natural, sintieron gran
inquietud. Gainza dispuso celebrar una reuni6n, el 15 de setiembre, a la
cual invit6 a miembros del ayuntamiento de la ciudad de Guatemala, a
representantes de las corporaciones y del clero y a funcionarios civiles y
militares. Los partidarios de la independencia se apresuraron a correr la
voz, para que los vecinos de los barrios capitalinos se congregaran tem-
prano frente al Palacio de Gobierno, don de se realizaria la reuni6n.
Los cincuenta y seis personajes invitados a la reuni6n conocieron los
comunicados enviados de Chiapas y discutieron la posibilidad de anexar-
se a Mexico. Pero en ese momenta no se decret6, debido, en buena m edi-
da, a la presi6n del publico que se habia reunido en las calles y en la plaza,
e incluso habia entrado al Palacio de Gobierno. Ese 15 de setiembre de
1821, la ciudad de Guatemala decret6 la Independencia de Espana. El
primer punto del acta firm ada por los representantes del Ayuntamiento y
de la Diputaci6n Provincial senalaba claramente:

«Que siendo la Independencia del gobierno espanol la voluntad


general del pueblo de Guatemala, y sin perjuicio de 10 que deter-
mine sobre ella el Congreso que debe formarse, el senor Jefe Poli-
tico la mande publicar, para prevenir las consecuencias que se-
rian temibles en el caso de que la proclamase de hecho el mismo
pueblo».

Aunque los centroamericanos celebramos esa efemeride, en realidad


el acta del 15 de setiembre de 1821 decret6 solamente la emancipaci6n
de la ciudad de Guatemala. Los firmantes de cse documento asi 10 COIIl-
prendieron. AI comunicar a las provincias los sucesos de Guatemala, soli-
citaron el nombramiento de representantes, para que acudieran a esa
capital, con potestad para definir sobre la independencia del Reino, la
forma d e gobierno y las leyes que se adoptarian. De acuerdo con el Acta,
los diputados debian estar en la ciudad de Guatemala e l primer dia de
marzo de 1822, p ero despues se modific6 esa fecha.

Noticia de la independencia en las provincias

Un correo extraordinario parti6 hacia las provincias con el Acta de


Independencia y un comunicado de Gainza. Este fue recibido el 21 de
setiembre en San Salvador, donde el Ayuntamiento y una representaci6n
del pueblo acordaron la independencia, y en pocos dias lograron organ i-
zar una Junta Gubernativa.

130
Pocos dias mas tarde, el 28 de setiembre, los documentos cstaban en
manos del Intendente de Honduras, don Jose Gregorio Tinoco. Este COI1-
,·oco al Ayuntamiento de Comayagua y a los funcionarios civiles y eclesias-
ticos mas importantes, para que discutieran la situacion. Comayagua acol"-
do la Independencia, pero con sluecion al gobierno que se establecicra en
Mexico. En cambio en Tegucigalpa, se apoyo 10 dispuesto en Guatemala.
En Nicaragua los documentos fueron recibidos por el Jefe Politico
Miguel Gonzalez Saravia, el 27 de setiembre. Ante la trascendencia de los
hechos que Ie comunicaban, Gonzalez Saravia tomo la determinacion de
convocar a los miembros de la Diputacion Provincial. En Leon residia UI1
poderoso grupo de espal'ioles monarquicos, quienes manejaron habilmen-
te la situacion, y supieron aprovechar la desconfianza que in spi raban los
guatemaltecos en los provincianos. De ahi que el primer acuerdo fuera
«la absoluta y total independencia de Guatemala». Al Acta de Leon se Ie
conoce tambien con el nombre de Acta de los Nublados, porque acordo
<<la independencia de Espana hasta tanto se aclaren los nublados del dla».
En el fondo, esa fue una declaracion provisional de independencia, con
la esperanza de que Espana lograra controlar la situacion.
No obstante las tacticas dilatorias, ell 1 de octubre, la Diputacion Pro-
vincial de Leon, presidida por Gonzalez Saravia, celebro una reunion en
la cual se decreto la independencia absoluta de Espana y, al mismo tiem-
po, la anexion a Mexico. En cambio en Granada, las tropas fueron convo-
cadas por su comandante, Crisanto Sacasa, parajurar al dia siguiente la
independencia absoluta, de acuerdo con las instrucciones enviadas desd e
Guatemala.
Cuando el correo llego a Costa Rica, el 13 de octubre de 1821, ya no
traia solo la copia del Acta de Guatemala y del comunicado de Gainza,
sino tambien una copia del Acta de los Nublados. Los documentos fueron
recibidos en Cartago por el Gobernador Juan Manuel de Canas, qui en
convoco al Ayuntamiento y a algunos vecinos principales a una reunion
extraordinaria. Aunque la situacion era muy confusa, en Cartago se dis-
puso apoyar 10 acordado por la Diputacion de Leon .
El14 de octubre, el Ayuntamiento de San Jose y los vecinos principales
de esa villa avalaron 10 dispuesto en Cartago. Lo mismo sucedio al dia
siguiente en Villa Vieja (hoy Heredia). Ya se disponia el Gobernador a
marchar hacia Villa Hermosa (Alajuela), cuando recibio la noticia de que
los cartagineses habfan revocado los acuerdos tomados anteriormente y
habian decidido no apoyar 10 dispuesto en Guatemala ni 10 acordado en
Leon. El Gobernador regreso a la capital provincial a toda prisa y envio
los papeles al ayuntamiento de Alajuela con otra persona. En Alajuela se
tomo el acuerdo de no «hacer novedad», por 10 grave del asunto. Final-
mente, en medio de la incertidumbre, todos los ayuntamientos aceptaron

131
la sllgereneia de SanJose, de crear unaJunta Provisional de GobienlO, la
eual se instalo en Ca1'tago, a fines de octubre, y el 29 de ese mismo mes se
juro la independencia absoluta.

Los conjlicios emergen

Durante el pmceso de independencia de Centroamerica no hubo cruen-


tas guerras civiles como las que desangraron a Olros territorios de Hispano-
america. Sin embargo, sl aHoraron viejos conflictos y emergieron otms
nuevos. El viejo resenlimiento de los provincianos hacia los comerciantes
guatemaltecos se tradlUo en un claro temor de que estos lograran cont1'o-
lar la nueva situacion y que sus p1'ivilegios se mantuvieran incolumes. Asi-
mismo, se avivo el antagonismo de los criollos hacia los peninsulares.
Por sus caracteristicas, es posible afirmar que la de Centroamerica rue
una «independencia desde arriba». Las elites de la ciudad de Guatemala
y de Leon, don de se hablan concentrado funciones politicas y administra-
tivas, como sedes que eran de las autoridades coloniales, de las diputacio-
nes provinciales y de sendos obispados, desempeiiaron un papel protago-
nico. Ademas, fue muy importante la participacion que tuvieron en los
acontecimientos los comerciantes asentados en Guatemala.
Los sectores republicanos mas combativos se hallaban en El Salvador,
una de las provincias mas pobladas y mas ricas y, ademas, una de las mas
resentidas con el control impuesto desde Guatemala. Pero tambien hubo
grupos republican os en Granada, San Jose, Tegucigalpa e incluso en la
ciudad de Guatemala. Los grupos que asumieron actitudes mas conserva-
doras y cautelosas fueron los grandes comerciantes, los terratenientes y
las autoridades coloniales, civiles y eclesiasticas, quienes residian, por 10
general, en las capitales coloniales.
La falta de una lucha armada emancipadora que uniese a las provin-
cias de la Capitanla General d e Guatemala en una empresa comun, con-
tribuyo a reforzar la desunion y el localismo. En consecuencia, los esfuer-
zos por mantener posiciones comunes ante las diversas situaciones que se
presentaban, y que> ademas, requerian de resoluciones rapidas, resulta-
ron infructuosos. Esta situacion se hizo muy evidente con motivo de la
anexion a Mexico.

A nexion a Mexico

La anexion al imperio mexicano se concreto gracias a la presion ejer-


cida desde Mexico y, sobre todo, por causa de la debilidad de las fuerzas

132
d e dcfensa centroamericanas. EI temor de una invasion extranjel'a (pOl'
parte de Espana 0 de Francia), y el mas inmediato peligro de q ue sc de-
satara una guerra civil , sirvieron de acicate para que Centroamel'ica cic-
cretara la anexion £11 Imperio Mexicano de Iturbide.
EI Plan de Iguala era en realidad un plan conservador. Por eso satisfi-
zo a ciertos sectores de la sociedad guatemalteca los cuales temian percleI'
sus privilegios en meclio de la incerticlumbre provocada poria separaci6n
de Espaii.a. El apoyo del clero tambien fue muy importante, porque resul-
taba conveniente a sus intereses. La anexion fue discuticla en los ayunta-
mientos y, aunque no hubo consenso, el 5 cle enero cle 1822 se clecret{) let
union a Mexico. Sin embargo, el peligro cle una guerra civil persistia y
habia mucha intranquiliclacl y confusion. La situacion se clefini6 cuanclo,
en junio de 1822, un ejercito mexicano al mando clel general Vicente
Fillsola l1eg6 ala ciuclacl c1e Guatemala con el fin cle someter a quienes se
resistfan a la anexion.
En EI Salvador se oponlan fuertemente a unirse a Mexico, porque
consideraban que esa uni6n e ra una f6rmula descubierta por los comer-
ciantes guatemaltecos p ara mantener su hegemonla. Ademas, ahi existia
una traclici6n de organizaci6n y cle lucha, clescle los movimientos cle 1811
y 1814. Por ul timo, laJunta d e Gobierno, instalacla en San Salvador en
enero cle 1822, habia tomaclo importantes mecliclas, como la abolici6n de
la esclavitud y la e liminaci6n de impuestos y tribu tos de origen colonial.
Las tropas de Filisola se traslaclaron a El Salvaclor a someter a los re-
belcles, pero como los salvacloreI'ios te nian intereses que clefender, estu-
vieron dispuestos a clar 1£1 pelea. Don Manu e l Arce fue la figura q ue mas
sobresali6 en la lucha arm ada contra las fu erzas an exionistas. El prestigio
ganado e n esa luch a Ie ayucl6, p osteriormente, p ara ocupar la presiclen-
cia de la Federaci6 n.
Mie ntras esto sucedfa e n Centroamerica, 1£1 situac i6n se h abia compli-
cado para Iturbide . Fillso la cletermin6 regresar a 1£1 ciuclad d e Guatemala,
do ncle se e nter6 cle que el emperad or cle Mexico h abia abcli cado e n m ar-
zo de 1823. Antes de partir, dej6 convocado un congreso que habrfa de
reunirse en 1£1 ciudad cle Guatem ala a m ecliados cle ano.

LA REpU BLICA FEDERAL DE CENTROAMERICA (1823-1 840)

En junio de 1823, en la ciuclacl cle Guatemala se reuni6 el Congreso


Constituyente qu e habrfa de cleciclir el rumbo que tomarfa Centroameri-
ca. Ante la cafda clel imperio cle Iturbicle, el Congreso proclam6 la incle-

133
pendencia absoluta, el 1() de julio de 1823, y luego se dedico a discutir
que tipo de republica convenia a los intereses de los centroamericanos.
La posicion que triunfo fue la defendida pOl' los liberales, quienes p e nsa-
ban que 10 ideal era instaurar un a federacion.
En esa decision pesaron varios factores: en primer lugal~ el poderio de
los paises vecinos - Mexico y la Gran Colombia- se miraba como una
amenaza para Centroamerica, ante la posibilidad de reclamaciones territo-
riales. (Es necesario recordar que las demarcaciones limitrofes h eredadas
de la colonia no eran claras ni definitivas). Segundo, era mas sen cillo obte-
ner reconocimiento exterior para un pais grande que para varios peque-
1'10S y debiles. Tercero , en el pensamiento de los liberales centroamerica-
nos influyo el prestigio de los Estados Unidos de Norteamerica, donde el
gobierno federal funcionaba en armonia con los intereses de los estados.
Despues de vados meses de trabajo, la constitucion fue promulgada el
22 de noviembre de 1824. De acuerdo con esa carta magna, cada uno de
los cinco estados miembros de las Provincias Unidas de Centroamerica
tendria un gobierno dividido en tres poderes: ejecutivo, legislativo y judi-
cial, al igual que el gobierno federal. Ala cabeza del poder ejecutivo fede-
ral estaria un presidente, y a la de cada uno de los estados, un jefe de
Estado. El poder legislativo seria bicameral: habria un Congreso Federal
formado por diputados (uno por cada 30 mil habitantes), y un Senado,
integrado por dos representantes de cada Estado. Esta medida se adopto
con el proposito de contrarrestar la preponderancia que Guatemala ten-
dria en el Congreso, pOI' ser el Estado con mayor poblacion.
La Federacion nacio con graves dificultades las cuales quedaron
plasmadas en la misma constitucion federal. Asi, por ejemplo, no se su-
po manejar de manera adecuada el problema del grado de soberania de
los estados y el articulo decimo seiialaba que los estados eran «libres e
independientes» en su administracion interna. El problema de que la
capital federal estuviera en Guatemala hizo surgir de nuevo la descon-
fianza de los demas estados y, por otra parte, e l hecho de que en esa
ciudad se hallaran tanto el gobierno federal como el estatal provoco gra-
ves rivalidades.
Otro articulo de la Constitucion seiialaba que los estados ten ian dere-
cho de oponerse al cobro de impuestos. A esa ambiguedad y a la debili-
dad del poder central ante los poderes estatales se debio el caos fiscal del
gobierno federal, que se manifesto claramente en la lucha por controlar
el monopolio del tabaco. Las rentas producidas par ese rubro bajaron
despues de la independencia, porque la siembra y la venta clandestinas
aumentaron, y, ademas, los estados se negaban a entregar al gobierno
federal los ingresos producidos por el monopolio, porque tenian dificul-
tades para financiarse ellos mismos. Los ingresos por impuestos prove-

134
ILUSTRAC10N NQ 19. ESCUDO DE LA REPUBLI CA
FEDERAL DE CENTROAMERICA. El escudo d e la
Republica Fede ral de Centroamerica muestra cin-
co volcanes, los cuales represenlan los estados que
formaban parte de ella; el gorro frigio es emblema
de libertacl, y e l triangu lo simboliza la uniclad de
Centroamerica que no fue posibl e conseguir.

nientes del comercio exterior tambien bajaron, porque los comerciantes


aumentaron el contrabando.
Aparte de que las rentas federales eran escasas, la republica requerfa
de recursos abundantes para poder hacer frente a los gastos de d efe nsa,
mantener la integridad del territorio y controlar el peligro de guerra civil.
Tambien necesitaba pagar un alto numero de funcionarios, capaces de
hacer cumplir las disposiciones federales en toda la republica. La falta de
fondos fue un obstaculo insalvable para poner en ejecuci6n los puntos
mas ambiciosos del programa que se habfan trazado los liberales: la aper-
tura de escuelas, la construcci6n y el mantenimiento de los caminos y el
fomento de la agricultura y la industria.
Ante tantos factores adversos, la unidad se convirti6 en una meta difi-
cil, practicamente inaIcanzable. Don ManuelJose Arce, elegido presiden-
te de la Federaci6n en 1825, se esforz6 por fortalecer el ejercito federal y
por ordenar las finanzas, pero fracas6 en su intento, y la fragil paz que
habfa reinado desde 1823 se quebr6 en 1826. Tres guerras federales (1826·

135
,
...' - 0
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MAPA N" 19
I" .
REPUBLICA FEDERAL DE
CENTROAMERICA 1823 - 1838
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SOCO l'\ l lSCO \ / l.OS .\ ITOS:
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~~=~

84'

1829, 1831-1833 Y 1837-1839) fueron el mas claro reflejo d e la dificultad


de los centroamericanos para buscar acuerdos. Unicamente el Estado de
Costa Rica se mantuvo al marge n de los conflictos armados.

Morazan: figura tragica

Entre 1829 Y 1838, la Federacion conto con el fuerte liderazgo del


general Francisco Morazan. Sin embargo , mientras e ste hacia sus mejores
esfuerzos p or proteger la Republica Federal, la autoridad y la autonomia
de los estados se desarrollaba cada dia mas. Esto sucedia d e modo particu-
larmente fuerte en Guatemala y en Costa Rica.
En Guatemala, el habil politico Mariano Galvez goberno el Estado
desde 1831 hasta 1838. Galvez supo controlar a las elites locales, las cuales
colaboraban a cambio de la paz y la seguridad que el les brindaba. El
programa liberal d e Galvez incluia el establecimiento d e escuelas segla-

136
res, la reforma del plan de estudios de la Universidad de San Carlos, la
abolicion de practicas tradicionales de la Iglesia-como los entierros d e n-
tro de los templos- y el acceso a terrenos baldios para lograr una mejor
distribucion de la tierra. Para poder llevar adelante esos planes, Galvez
creo nuevos impuestos que no exigian grandes sacrificios, y estable cio un
impuesto per capita, llamado «contribucion directa».
Durante el gobierno de Galvez se permitio el matrimonio civil y el divor-
cio, se dicto una ley laboral que obligaba a firmar contratos entre trabajado-
res y patronos, se adopto el Codigo de Livingston, segun el cual los juicios
debian ser dictados por jurados, y se introdujo el derecho de habeas corpus.
Con Morazan en la presidencia de la Federacion y Galvez como Jefe
de Estado de Guatemala, los centroamericanos realizaron el primer expe-
rimento liberal. Ambos lide res organizaron el gobierno, convocaron a un
congreso federal, en el que predominaban los guatemaltecos y, ademas,
en 1834 trasladaron la capi tal federal a la ciudad de San Salvador, sin
contar con la aprobacion de los gobernantes salvadorenos.

Fin de la Federaci6n

En el ano 1837 la situacion centroamericana era critica. Una epide-


mia de colera afecto a toda la sociedad, y provoco perturbaciones en las
actividades productivas y en el comercio y una agudizacion de la crisis
fiscal. El efecto mas importante de la epidemia fue la sublevacion indige-
na y la anarquia. La revuelta mas importante tuvo lugar en Guatemala,
donde los campesinos d e la pobre y accidentada region oriental se levan-
taron bajo elliderazgo d e Rafael Carrera.
Este movimiento carecio de una base programatica pro pia. Su obje-tivo
inmediato era luchar contra las politicas tributarias del Estado y contra el
fomento de la colonizacion extranjera propiciada por el gobierno de Gal-
vez. Ni el gobierno estatal ni el ejercito federal disponian de recursos para
hacer frente ala rebelion . El triunfo de Carrera se facilito porque los cam-
pesinos actuaban en un terreno escabroso que solo enos conocian, y conta-
ban con simpatizantes tanto en las montanas como en las ciudades. Ade-
mas, los campesinos levantados en armas se contentaban con los frutos del
pillaje, y sus propias labores agricolas les garantizaban la subsistencia.
Entre 1830 y 1840 las tropas federales hicieron 10 qu e pudieron en su
lucha contra ellevantamiento armado. El golpe d e gracia se dio cuando
Carrera tomo la ciudad de Guatemala y Galvez se vio obligado a abdicar.
Se inauguraba asi un periodo conservador en Guatemala que duraria m as
de treinta anos. Por su parte, Morazan huyo hacia El Salvador, y luego
abandono Centroamerica.

137
Mientras esto sucedfa en Guatemala, los estados rompian sus lazos
con la Federacion, aprovechando un d ecreto federal que los autorizaba a
organizarse como mejor les pareciera, siempre y cuando mantuvieran su
adhesion al gobierno federal.
Morazan realizo un ultimo y desesperado esfuerzo por revivir la Repu-
blicaFederal. En 1842 invadio Costa Rica, derroco alJefe de Estado, Braulio
Carrillo Colina, y d esde ese pais intento reorganizar la Federacion, hasta
que fue ejecutado por soldados costarricenses el 15 de setiembre de ese
. -
mlsmo ano.
En sum a, las causas del fracaso de la Federacion fueron muy variadas.
La falta de integracion a nivel regional, los resentimientos hacia Guate-
mala, la desigual distribucion de la poblacion, ellocalismo, los errores de
la Constitucion Federal, las ambiciones de los lfderes y de las elites loca-
les, problemas de caracter ideologico entre liberales y conservadores, y la
falta de una solida base economica, fueron motivos que dieron al traste
con el intento de que el antiguo Reino de Guatemala permaneciera uni-
do en una republica federal. Parte del triste legado de la Federacion fue-
ron la perdida de vidas y la d estruccion de la economia, por causa de las

I I
90 0 87 0 84 0

MEXICO _~_r'-- _.__._-) " ' ....


DlSOLUCION DE LA
MAPAN 2 20
18 0

',- GUATEMALA i REPUBLICA FEDERAL


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I., f Tratado
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/_.- ._._._) ; 1859
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SOCONUSCO 1839
Traspaso
a Mexico
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Guatemala) ,---
......,.:~. Comayag lla. HONDURAS
Re pllbli ca
1864
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1842 \.
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EL SALVADOR • San Salvador (_ ..... J

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> 1838
1839 1856
NICARAG UA
12 0 SIMBOLOGIA
MAR
_._._._.- Limite inte rn ac io n a l
12 0
• Ca pital d e l Estado CARIEE

Traslado d e ca pital

go OCltAN O PA cinco

100 o 100 200 Km

93 0 90 0 87 0 84 0
guerras y de la incstabilidad politica, as! como una mentalidad militarista
que, en muchas ocasiones, ha empujado a los centroamericanos a resol-
ver sus conflictos por la fuerza de las armas.

ECONOMlA YSOCIEDAD 1810-1870

La Independencia constituyo un corte drastico con el pasado. Des-


pues de 1821, la imposicion del sistema de libre comercio favorecio a los
comerciantes de Belice, y el mercado centroamericano fue invadido por
los productos ingleses, en detrimento de las artesanfas locales. La inesta-
bilidad politica desestimulo la inversion, y las guerras destruyeron obras
de infracstructura y restaron brazos a las labores productivas, porque mu-
chos hombres en edad de trabajar fueron reclutados en los ejercitos.
Sin embargo, el grado de inestabilidad de cada uno de los estados era
variable. Guatemala, durante el regimen de Galvez, logro incentivar la
produccion y exportacion de cochinilla. Costa Rica tuvo un exito tempra-
no en el desarrollo de la caficultura, gracias a su aislamiento y a su poca
vinculacion en los conflictos arm ados que afectaron la region. En Hondu-
ras, el impacto de la actividad belica fue atenuado por la dispersion geo-
grafica de la poblacion. En cambio, en El Salvador y Nicaragua los efectos
de la inestabilidad polftica fueron mucho mas marcados.
A pesar de 10 convulso del perfodo federal, fue en este cuando cada
uno de los paises del area sento las bases para su posterior desarrollo
polftico y economico, en estrecha vinculacion con el auge de las exporta-
ciones. Los principales factores que favorecieron la orientacion de la eco-
nomfa hacia las exportaciones fueron: las posibilidades de inversion, los
costos de transporte y la disponibilidad de alternativas.

Clima para la inversion

La turbulencia de las tres primeras decadas de vida independien-


te desestimulo la inversion y retardo el desarrollo de instituciones cre-
diticias. En consecuencia, la habilitacion continuo siendo la principal
forma de financiamiento de los productores centroamericanos. Eso sf,
las tasas de in teres fueron muy elevadas, debido a los altos riesgos de los
prestamos.
La situacion cambio en la segunda mitad del siglo XIX, gracias al me-
joramiento de la situacion politica y al notable estimulo que para la eco-

139
nomia ce ntroamericana significo la apertura of'l ferrocarril interoceani-
co de Panama, e n 1855. El clima para la inversion mejaro, prin cipalm en-
te en la zona del PacIfico. No solo hubo mas comerciantes dispuestos a
dar habilitaciones, sino tambien surgieron nuevas fuentes de financiamien-
to. En El Salvador aumento e l uso de las hipotecas; en Costa Rica, desde la
decada de 1820 se ensayaba las primeras form as d e financiamiento de la
ac tividad cafetalera, y las municipalidades, los hospitales y otras institu-
ciones concedian pequeiios prestamos. En Alta Verapaz (Guatemala), en
cambio, se uso un recurso de corte colonial: los fondos de las comunida-
des indigenas.
Un serio obstaculo para el normal d esenvolvimiento d e la economia,
durante e l p erfodo federal, fue la falta de mon e da circulante. Una buena
parte d e l din ero salio de Ce ntroamerica con e l pago de las importacio-
nes, que crecieron de mane ra desmesurada en los primeros aiios de vida
independiente ante la euforia del libre comercio. Los esfuerzos de los
estados par acuiiar moneda resultaron insuficientes. La de Mexico y las
de Ame rica del Sur circulaban libreme nte, p e ro siempre el dine ro era
escaso. Como consecuencia, en las mayores transaccion es comerciales
predominaba e l true que, y los granos de cacao servfan d e moneda frac-
. .
Clonana.
El d esarrollo de la actividad cafetalera, con sus necesidades de inver-
sion a largo plazo, fue el principal incentivo para la creacion de las prime-
ras instituciones bancarias, a partir d e la decada de 1860.

Transportes

A partir de la Inde pendencia, las viejas rutas comerciales cayeron en


desuso. Los puertos del Caribe, en especial Belice, fueron por algun tiem-
po la principal vfa d e salida de los productos de exportacion hacia Euro-
pa. Pero poco a poco, con e l incremento de la actividad economica en las
tierras del PacIfico, se dio una reorientacion de las rutas comerciales.
Durante el periodo federal fueron habilitados varios puertos en el PacIfi-
co: Iztapa (Guatemala), La Libertad y La Union (El Salvador).
Sin embargo, varias circunstancias se conjugaron para que durante e l
periodo federal los puertos del PacIfico no tuvieran mayor actividad. Por
un lado, existfa el grave problema de que las vias de acceso a los puertos
eran caminos intransitables durante la estacion lluviosa. Por otra parte, la
llegada de las embarcaciones no era muy frecuente, porque todavia el
nivel d e las expartaciones era reducido. Ademas, los barcos corrian p e li-
gro debido al desconocimiento d e la geografia de la costa y a la falta de
expene nCla.

140
lLUSTRACION NQ 20. CAMINO, HACIA 1839 . La falta de caminos adecuados rue un grave
problema que afecto el comercio y fomento el aislami ento y el regionalismo. Durante la esla-
cion lluvi osa la mayor p arte de los caminos eran intran sitables.

Pero en la segunda mitad del siglo XIX, hubo dos factores que influye-
ron en el desarrollo portuario en la costa del Pacifico: la apertura d el
ferrocarril panameno y la fiebre del oro en California. La apertura del
ferrocarril en Panama signific6 una reducci6n importante en los costos
de transporte y en la duraci6n de los viajes, mientras que la fiebre del oro
en California gener6 un auge econ6mico, del cual se benefici6 Centro-
america, sobre todo Nicaragua.
En la d ecada d e 1850 unos cien mil viajeros de la costa este de los
Estados Unidos se trasladaron hacia California, utilizando la ruta del rio
San Juan, el lago de Nicaragua y el istmo de Rivas. El habil empresario
norteamericano Mr. Cornelio Vanderbilt consigui6 con las autoridades
nicaragiienses la exclusividad en esa via para la Accesory Transit Com-
pany (conocida en Centroamerica como la Compania d el Transito). El
paso de tanta gente fue un estimulo considerable para la economia de
Nicaragua, porque los viajeros necesitaban servicios, como alojamiento y
alimentaci6n. No obstante, el auge fue interrumpido por la aven tura fili-
bustera de William Walker.
EI unico pais centroamericano que no reorient6 su comercio hacia el
Pacifico fue Honduras. Los demas se preocuparon por mejorar sus cami-

141
LA GUERRA ANTIFILIBUSTERA
Las luchas intestinas de Nicaragua parecian no tener fin. Los libe-
rales intentaron volcar la balanza de fuerzas a su favor y llamaron en
su auxilio a William Walker, un aventurero que se mostro dispuesto a
reclutar mercenarios. En junio de 1855 ingreso a Nicaragua la tropa
filibustera. Con su apoyo, Walker se impuso Hicilmente, se autoprocla-
mo Presidente de Nicaragua y monto un gobierno que fue reconoci-
do por el Departamento de Estado. Una de las primeras medidas de
los filibusteros fue ocupar la Ruta del Tninsito, por su importancia
estrategica y economica.
Los gobiernos de los demas paises centroamericanos descubrie-
ron que el verdadero interes de Walker era anexar Centroamerica a
los Estados Unidos, con fines esclavistas. Por esta razon, dejando de
lado las rencillas internas, emprendieron la guerra para expulsar de
Nicaragua al invasor. Asi, el lQ de mayo de 1857, Walker huyo de
Nicaragua, y, finalmente, fue fusilado en Honduras e n 1860.
Resulta interesante analizar la forma en que la historiograffa de
cada pais centroamericano trata este episodio. Las tropas costarri-
censes, al mando del presidenteJuan Rafael Mora, tuvieron una par-
ticipacion destacada en esa lucha. Consecuentemente, en Costa Rica
se Ie da una enorme importancia a la «Campana Nacional», y es con-
siderada como la guerra de independencia sustitutiva. Pareciera que
en otros paises el hecho no se enfoca de la misma manera.

nos, con el fin de conectar los centros productivos con los puertos. En
Costa Rica se concluyo un camino carretero h acia Puntarenas, en la deca-
da de 1840; en Guatemala se completola via entre la capital y el puerto de
Iztapa, en 1851; en El Salvador se construyeron dos vias, una de Sonsona-
te a Acajutla, y la otra de San Miguel a La Union. Ademas se construyeron
muelles y almacenes y muchas empresas navieras estuvieron dispuestas a
brindar sus servicios.
Posteriormente, los paises centroamericanos emprendieron la gran
aventura de construir ferrocarriles. AI principio e l objetivo era ambicioso:
unir el Caribe con el Pacifico. Ante la imposibilidad de hacerlo se conten-
taron con unir, mediante vias ferreas, los centros productivos con los puer-
tos de exportacion. Sin embargo , como no contaban con capital ni capa-
cidad tecnica para emprender proyectos de tal envergadura, el desarrollo
de la red ferrocarrilera fue lento y los paises se endeudaron, prime ro, con
Inglaterra, y, luego, con los Estados Unidos. Ademas se vieron obligados a
firmar onerosos contratos, en los cuales cedieron pa rte de su soberania.

142
PRODUCTOS ALTERNATIVOS

El descenso en los costos de transporte activo las exportaciones, pero


cada pals reacciono de m anera diferente ese estlmulo, porque tambien
influian otros factores, como la disponibilidad de alternativas, el estado
de la infraestructura y ellegado colonial.
Costa Rica fue el primero que se especializo en el cultivo del cafe, por
diferentes razones. Primero, porque durante la epoca colonial el pais no
se concentro en la exportacion de ningun producto que fuera realmente
rentable. Segundo, porque existian condiciones muy favorables para el
desarrollo de la caficultura: estabilidad politica -que favorecia la inver-
sion-, experiencia en el comercio por el Pacifico, concentracion de la
poblacion en el Valle Central, suelos y clima particularmente favorables
para el cultivo del cafe, y relativa facilidad para transportar el producto
has ta el puerto de Puntarenas.
EI desarrollo de la caficultura fue un poco mas tardio en Guatemala y
EI Salvador. Guatemala encontro en la grana 0 cochinilla una alternativa
mas atrayente que el cultivo del cafe, mientras que El Salvador continuo
exportando anil. Estas actividades economicas -a diferencia del cafe-
demandaban poca inversion, menos mana de obra y rendian altas utilida-
des. La economia de Honduras y la de Nicaragua fueron mas diversifica-
das, con base en la ganaderla y en la extraccion de minerales, madera y
hule, principalmente.
En conclusion, el monocultivo no fue un resultado inmediato ni auto-
matico de la incorporacion de los paises centroamericanos al mercado
capitalista mundial, sino, mas bien, de las alternativas productivas que se
barajaron en cada uno de los paises cuando el pacto colonial se rompio y
se hizo necesario trabajar en la construccion de un nuevo orden. La varie-
dad de actividades economicas fue un factor que contribuyo a diferenciar
a los palses de la region.

Aiiil

Despues de la independencia, el cultivo del anil conocio su ultimo


auge, antes de que, en 1858, los colorantes naturales comenzaran a ser
sustituidos por las anilinas, tintes producidos gracias al desarrollo de la
industria quimica alemana.
Durante ese perlodo, el anil fue el principal producto de EI Salvador.
Su cultivo se realizaba con las mismas tecnicas que doscientos anos atras y
el procesamiento en los obrajes era bastante simple. La mayor parte de la

143
produccion continuaba en manos de los poquiteros, y la demanda tem-
poral de trabajadores ocasionaba problemas a los grandes propietarios,
quienes recurrfan a los m e todos coercitivos coloniales para provee rse de
mana de obra. El credito funcionaba con base en el sistema de las habili-
taciones, el cual enriqueda a los comerciantes citadinos.
La actividad aiiilera de El Salvador favorecio la continuidad de la he-
rencia colonial por unas decadas mas, hasta que el cafe aparecio como
una nueva al ternativa.

Grana 0 cochinilla

La grana, hermoso tinte rojo que se obtenfa de un insecto criado


en cierta variedad de nopal, fue el principal producto de exportacion
de Guatemala hasta la decada de 1860. La produccion de cochinilla se
concentro en las zonas de Amatitlan, Antigua, Villanueva y Petapa. Su
produccion, compleja y de gran demanda de mana de obra, estuvo con-
centrada en pequeiias unidades productivas familiares de mestizos e indi-
genas. Por sus caracteristicas, esa actividad no propicio cam bios en el re-
gimen de propiedad de la tierra h eredado de la colonia. Las tierras de
propiedad municipal solian ser alquiladas por nueve aiios, periodo de
vida del nopal. Tampoco requeria de mucho capital, por 10 que se conti-
nuo con el sistema de habilitaciones por parte de los comerciantes.
El cultivo de cochinilla se d esarrollo en forma rapida y no causo los
conflictos sociales que luego ocasionaria el desarrollo de la caficultura.

Cafe

Por las caracteristicas de su cultivo, el cafe planteo problemas que


era necesario resolver: en primer lugar, el cafe to tarda cuatro 0 cinco
aiios en dar su primera cosecha, por 10 que requiere de inversiones a
largo plazo; por otro lado, no todas las tierras son aptas para el cultivo, y
de ahi la necesidad de mayor seguridad sobre la propiedad de la tierra;
ademas, por su volumen, el transporte del grano resultaba carD y dificil,
para 10 cual se requeria de mejoras en los sistemas de transporte; y, final-
mente, la actividad demandaba mayores cantidades de mana de obra que
los productos anteriores, razon por la cual generaba mayores tensiones
sociales.
El problema de acceso al credito era vital en la economia cafetalera.
Este problema se obvio en Costa Rica, donde las tierras del Valle Central
aptas para el cultivo eran abundantes, y se hallaban repartidas en manos

144
ILUSTRACION NQ 2l. TRANSPORTE DE CAFE EN CARRETAS. El cafe que se pro-
ducia en la Mese ta Central d e Cos ta Rica era trasladado al pue rto d e Puntarenas,
en el Pacifico, en carretas tiradas por bueyes. La exportaci6 n d e cafe favoreci6 el
mejoramiento de los camin os qu e unian las region es producto ras co n los puer-
tos d e exportaci6n.

d e pequenos propietarios, asentados en las cercanfas de los principales


centros de poblaci6n. Esto p ermiti6 el desarrollo gradual de la caficultu-
ra en unidades de producci6n que combinaban los cultivos de subsisten-
cia con el cafe. La elite que se form6 en torno a la actividad cafetalera
10gr6 controlar unicamente las fases de beneficiado y de exportaci6n
del grano.
El desarrollo de la caficultura en El Salvador yen Guatemala fue total-
mente diferente: predomin6 1a producci6n en grandes propiedades, con

145
mana de obra asalariada y financiami e nto pOl' m edio d e habilitacion es,
hipotecas, e ingresos obtenidos en otras actividades (comerciales, profe-
sionales 0 polfticas). En Guatemala, el principal freno al desarrollo d e la
caficultura fue la falta d e mana de obra en las zonas donde las condicio-
nes ecologicas eran adecuadas para el cultivo. Portal razon en las llltimas
decadas del siglo X[X los liberales dictaron una serie de leyes tendentes a
restablecer el trabajo forzoso. El problema era distinto en El Salvador,
pues las tierras aptas para e\ cafe pertenecfan a las comunidades indfge-
nas y se hallaban d ensamente pobladas. En consecuencia, se dictaron le-
yes para privatizar la propiedad de la tierra.
POI' su importancia, el desarrollo de la caficultura permite observar
las formas que adquieren las relaciones sociales y la organizacion de las
actividades del Estado. Los vfnculos surgidos entre los cafetaleros y este
fueron estrechos. Los cafetaleros mas conspicuos llegaron a tener gran
poder e influencia, y ocuparon los mas importantes puestos de gobierno,
incluido el de presidente de la republica.
Como consecuencia del desarrollo cafetalero, en Centroamerica sur-
gio un nuevo tipo de ambiente economico, caracterizado por la compe-
tencia, la inversion a largo plazo, nuevas y complejas tecnicas de cultivo,
el d esarrollo de habilidades para comerciar con el extranjero y la capaci-
dad de adaptacion a las oscilaciones del mercado internacional.

Ganaderia

La ganaderfa extensiva, a diferencia del cafe, no requeria de mucho


credito ni obligo a invertir en sistemas de transporte . POl' eso prospero en
las zonas donde la tierra era abundante y la mana de obra y el credito
escasos. En Olancho, Choluteca y Nacaome (Honduras) yen Chontales,
Matagalpa y Segovia (Nicaragua), la ganaderia era la principal actividad
economica. Igual que en el p erfodo colonial, e\ ganado era llevado a las
ferias de El Salvador y Guatemala. El unico mercado nuevo para el gana-
do hondureno era Cuba.
La actividad ganadera origino muchas de las principales fortunas de
Honduras y Nicaragua.

Caiia de azucar

La cana de azucar fue , principalmente, un cultivo destinado a la fabri-


cacion de pane\a, rones y aguardientes para el consumo local. La mayor
parte de la produccion se realizaba en pequenas y medianas propiedades.

146
ILUSTRACION N. 22 . TRAPICHE DE AZVCAR. En Centroamerica, 1a mayor parte de la can a de
aZllcar se procesaba en pequeiios trapiches, con el fin de proclucir dulce 0 panela para el
consumo local.

El capital requerido no era mucho, por 10 que la actividad result6 ser


atractiva.

Oro y plata

La mineria fue, al igual que en el periodo colonial, la principal activi-


dad de Honduras, donde alrededor del 40 6 50% de los ingresos prove-
nian de la exportaci6n de metales preciosos. En Nicaragua las exportacio-
nes de oro y plata no fueron un rubro tan significativo, pues constituye-
ron solo alrededor de un 10% de las exportaciones entre los anos 1850 y
1880.
En ambos paises la actividad minera era intensiva en mano de obra y
empleaba una tecnologia muy simple, debido ala falta de capitales.

Rule

Se extraia principalmente en Nicaragua, de arboles silvestres que cre-


cian en terrenos baldios, en especial en la cuenca del rio San Juan. La

147
actividad era financiada por los comerciantes -exportadores, quienes
habilitaban a los huleros.

Madera

A mediados del siglo XIX se dio un auge en la explotacion maderera


en la costa Caribe de Honduras y ele Nicaragua, b(~o la moelaliclael ele
concesiones a extranjeros. La activielael era baslante simple yelepreelato-
ria, y no requcria de inversiones a largo plazo, ni de regulaciones que
hicieran necesarios los titulos de propiedad .

ACTMDADES ECONOMICAS Y PAPEL DEL ESTADO

Al realizar un balance ele la correspondencia que se establecio entre


las actividades economicas y el papel desempei'iado por el Estado, se llega
a la conclusion ele q u e las actividades destinadas a la exportacion fu eron
importantes en todos los paises centroamericanos. Sin embargo, en Hon-
duras y Nicaragua las eco nomias eran mas diversificadas, y se basaban en
productos que requerian reducida inve rsion y poca mana de obra. A esto
se debio que en esos paises se retrasara la organizacion de las actividades
d el Estado. Lo contrario sucedio en Costa Rica, El Salvador y Guatemala,
p aises donde se desarrollo la caficultura.

Comercio exterior

Las bases de 10 que se ha llamado «el modelo de crecimiento h acia


afuera» (crecimiento basado en las actividades economicas para la expor-
tacion a los mercados internacionales) fueron puestas en el p eriodo que
aqui nos ocupa. Por 10 tanto, el incremento en las exportaciones fue ante-
rior a las reformas liberales de la elecada d e 1870.

Importaciones y jerias

As! como crecieron las ventas al exterior, tambien crecieron las im-
portaciones, porque los centroamericanos desarrollaron el gusto por las
modas y los productos europeos. Los bienes importados se distribuian

148
I LllST RACION NU 23. BELI CE. 1877. Duran te las Ires prim e ras d ccadas d e "ida inde pe ndicnle .
Ia mayor part e de las impo n ac iones cenlroa m ericana s de tex til es, artlcul os d e m etal, bien es
para el hoga r ), olros proollctos se reali zaha a Ir,\\,';s d e Belice . EI comercio d e eX ]J0 rtaci,'lI1 d e
I()s prodllctos ce ntroam e ri ca nos lambien pasa ba pOI' ese pue rto .

gracias al vinculo estrecho que existia entre la agricultura d e exporta-


cion , la actividad com ercial y el credito. Asi, mu chas de las h abilitacion es
que se realizaban en las ferias no e ran en metalico , sino en productos que
se daban en consignacion.
Las fe rias eran ellugar adecuado para realizar toda clase de transac-
cion es. H abia ferias anuales, como las de Chalatenango, San Miguel, San
Vice nte y Esquipulas. Tambien habia ferias regio nales, especializadas en
diferentes productos: viveres, en Rabinal; ganado y cacao, en Mazatenan-
go; frutas y viveres, en Solola; articulos de lana, en Chimaltenango; yequi-
nos, enJocotenango . Ademas se celebraban ferias semanales en los pue-
blos, para satisfacer las necesidades mas inmediatas.
Ademas de ser distribuidas en las ferias, las mercancias llegaban a los
lugares mas reconditos por medio de los buhoneros. En algunas zonas la
funcion que estos desempenaban era vital, pOl' 10 dificil que era para
muchos acudir a las ferias por 10 disperso d e los asentamientos.
El co m ercio fue una actividad muy difundida en todos los sectores
sociales centroamericanos hasta bien en trado el siglo XIX. Un mismo in-
dividuo p o dia ser, al mismo tiempo, productor, distribuidor, prestamista,
profesional y hasta poli tico, como consecuencia d e la exigiiidad de la eco-
nomia. Asimismo, al aumentar la division del trabajo, ampliarse el merca-
do interno y mejorar el sistema de transportes, la distribucion d e produc-
tos en las ferias y m ediante buhoneros comenzo a decaer. Ambos sistemas
fueron sustituidos por las casas d e importacion y exportacio n, casi siem-
pre en manos de extranjeros que vinieron a radicar en Cen troamerica.

149
acti\'idad era finan ciada por los c01l1 e rciantes -t-'xponadores, <luit'll es
habilit aban a los huleros.

Madem

A med iados del sig lo XIX s(' clio nn <1up;e e n la explotaci6n macicrera
en la costa Carilw de ]-iondllras y clt' Nicaraglla , b~ljo 1<1 modalidad de
cOllccsiones a (:'x lranjeros. La aniyidad era baslanlc simple y deprcdato-
ri a. y no refpteria de il1HTSio ll t..'s a l<lrgo plazo, Hi de rt'glliac ioll t's quc
hi c icran ll ('ct'sa rios los titulos de propiedacl.

ACTI\1DADES ECOi\:(lMICAS Y P,\I'EL DEL ESTA DO

AI realizar balance de la correspondcncia que se cstableci6 entre


Ull

las actividades econ o mi cas y eI papel dese mpeiiado p Ol' eI F:stado , se lIega
a la concl usion de que las actividades deslin adas a la expo rtac i6 n flleron
importantes en todos los paises ce ntro mne ri ca nos. Sin e mbargo, e n Ho n-
duras y Nicarag ua las eco no mias e ran 1ll::1s di versificadas, y se basaban c n
produclos que reque rian reduc ida in versio n y poca mano de obra. A esto
se debi6 que en esos paise s se retrasara 1<1 organ izad on de las actividades
del ESlado. Lo conlrario stl cedi 6 e n Costa Ri ca, EI Salvado r y Guatc mala,
paises donde se desarrollo Ia cali cul tura.

Comercio eXlerior

Las bases d e 10 q ue se h a lI amado «el m odel o d e c recimi e nto hacia


afLlera ~~ (cre cimiento basado e n las ac tividades ecoJ1(Huicas para la ex por-
tacion a los me rcados internacio nales) fu er on puestas en e l p e riodo que
aqui nos oc upa. Por 10 tanto, el inCrCJ11ento en las exportacion es fu e ante-
rio r a las reform as liberales d e I" decada de 1870.

fmport aciones y ferias

Asi como c reci e ron las ventas al exterior, tambie n crecie ron las inl-
p o rtacion es, porque los centroamericanos d esarrollaron el gusto por las
modas y los productos eu ro peos. Los bienes importados se d istribufan

148
- - "";""' f "°;:" '1 l I··..,....,"·
'I "":"I:~: 1,'1' " '.' . " I :lll,',

ILUST RACl():\J N'! 2:~. BELl CE, 1H77. Durallk' las 1res primcras cit'C,l(las dc \'ida in c\epen dicnl('.
1<1 mayor pa rle d e 1,,<; imporlaciones ("t' ll\l"oanwriC<Ill<ls de textile s, aniculu:-. elt' meL1 !. hicnc s
p,u i.l c l hog-ar y o\ros proclunm se re;1[i/.a ha a lraVt's de Beliee. El (O llll'lTio dc {'x porlaci('!ll de
l(l~ produc lOs C('!1tl"o;utlf'ri(<l I1()s talllbicll pas;l!l;'t por eSC' p ut'rto .

gracias a1 vinculo csu'echo que cxist);.:-1 e ntre la agricuitura de cxporla-


(ibn , la actividad cO lllc rcial y el cred ito. A.;;i, mllchas d e las habilitacion es
CllIC SC realizaban e n las feria s no c ran e n lnetalico, sin o en productos que
sc daba n en consignaci6n .
Las f"erias e ran e l lugar adecllado para realizar toda c1 ase de transac-
ciones . Habia fe ri as anllales, C01110 las d e Chalatcnango, San Miguel, San
Vicente y E!'iqu ip ulas. '1'anlbien habia fe rias regi o nales, espec ializad as en
difer e ntes productos: viveres, en Rabinal; ganado y cacao, e n Mazatcnan-
go; i"rutas y viveres, e n Solo bi; artlcu los d e la na , en Chim a lte nango; y equi-
nos, en Jocolenango . Adenlas se ce le braban ferias se manalcs en los pue-
blos, para satisfaccr las necesidades mas inmediaLas.
Adernas d e se r distribuidas e n las ferias, las mercancias lI egaban a los
lug-ares mas rccb nditos por media d e los buhoneros. En a lgunas zonas la
funcion que estos desempeiiaban era vital, por 10 diffc il que era para
Illuchos acudir a las ferias por 10 dispe rso de los ase ntamicntos.
EI comerc io fue una actividad rnuy difundida e n todos los sectores
sociales centroamericanos hasta bie n entrada el siglo XIX. Un rnisrno in-
dividuo podia ser, al mismo tiempo, prod uctor, distribuidor, prestamista,
profesional y h asta poli tico, como consecuencia de la exigiiidad de la eco-
nomia. Asimismo, al a ume nta r la d ivisi6n del trabajo, arnplia rse el merca-
do interno y mejo ra r e l sistema de tran sportes, la d istribuci6n de produc-
lOS e n las ferias y media n te buhon e ros comenzo a d ecaer. Ambos siste nlas
fu e ron sustituidos por las casas d e imponacion y exportaci6n , casi sie m-
pre en manos d e extranjeros que vin ieron a radicar e n Centroamerica.

149
Remlldarion de lUljmeslos

Aunql1c era de csperar que 1a recaudaci6n de impucstos aumentara


con el conlercio ex terior, 1a vin c ulacion no rue tan evicienlc, porquc los
naci c ntes cstados carecfan de la organizaci<')11 y de los nH~ todos coer citiWlS
necesarios para garanlizar ulla curreela recoleccio n de los inlpucslOS.
Durante e l pe rfodo federal , como 10 hClllos sdialado, se produ je ron
graves proble mas entre cl gobierno federal y los eSLados en relacion ('(m
los tributos que se reeaudaban mediante los monopolios deltabaco )' del
aguardiente. Una vez clisuelta 1<1 Federacibn , (ada lIno de los estados mall-
Ul\,O esos monopoiios , ante la imposibiliclad de cobrar los impucstos di-
rectos. Los estados taIllbicn obluvieron renlas cun la venta de papel sel la-
do , polvora, sacririeio de reses y otras actividades. Olra parte d e los ingre-
sos provenfa de la verlla de terrenos baldio,.
Los dine ros pl,blicos recaudados eran inve rtidos, sobre todo , en fun-
cion de las necesidades de la eCO n01111a de cxportaci6n: en primer lugar,
obras pllbli cas -carninos, fer rocarr i1cs y puertos- y, en segundo, soste-
nimie nto d e los ejercitos. con el fin d e fonalecer la capacidad de accion
del Estaclo.

SOCIEDAD Y POLiTICA 1840-1871

Durante los an os comprendidos entre la cafda del ge neral Moraz;;n y


el regreso de los libe rales a l poder, se sentaron las bases para las transfor-
maciones que se darian en la ctecada de 1870. En realidad, h acia med ia-
dos del sig lo X IX las alternativas y las facciones poifticas no apare cian cla-
ramente diferenciadas, y muchas de las tareas que se habian propueslO
sacar adelante los liberal es, fu ero n implantadas por los conservadores.
En Centroamerica, mas que un con flicto entre liberales y conservado-
res, antes del desarroll o de la caficllitura , 10 que hubo fueron luchas en-
tre las viejas e lites y nuevos sectores soc iales e n asce nso. Solo en e l caso de
Guate mala es posible d etectar, con mayor cJaridad, elementos de un a di-
vision interclasista e n bandos an tagonicos.
No obsta nte, Lam bien hubo conflictos producto de las gran des dife-
rencias que caracte rizaban a la sociedad centroamericana de la epoca. La
mas clara expresion d e las pugnas il1le rclasistas fueroll los alzamien LOs 0
rebe liones de los campesinos y de los indigenas, co mo los que hubo en EI
Salvador, Guatemala y Nicaragua. Las elites - ya fueran conservadoras 0
liberales- reacci o naban en forma ul1;;lnime contra cualquier tnovimie n-

150
ENTRADA DE CARRERA A LA CIUDAD DE GUATEMALA

John L. Ste phens, cminente escritor, viajcro inf" tigablc y


politico , se en contraba en la ciudad de Guatemala cumplien-
do una mision especial y confidencial para el gobicrno de los
Estados U nions , cl1ando las fn e rzas rebeldes <11 mando del
general Carrera ingrcsaron a la capital guatem alt eca. As} des-
cribe Stephens esc momento:

"Mie mras tanto avanzaban las hordas d e Carre ra. EI Co-


rnandal1le de los antigiiei'ios Ie pregunto si tenia dividi-
das sus fuerzas en escliadrones 0 compaJ1fas, a 10 eual
Carrera respondio: "No e ntiendo nada de eso . Todo es
uno ". Entre sus prin cipales acornpai'iantes estaba Mon-
real y otros bien conocidos ban didos y criminales, la-
drones y asesinos. Carrera iba a caballo con una rarna
verd e e n el sombrero , y este con pedazos de trapo sucio
colgando alrededor con pinturas de santos. Un caballe-
ro que vio la emrada de Carrera desde e l techo de su
casa )' que se habia familiarizado con las esce nas de te-
rror que se sucedian en aque lla desgraciada ciudad, di-
jome que jamas en su vida olvidaria la entrada de esa
inmensa masa de barbari e. L1enando las call es todos con
ran1as verdes en los sombreros, parecfan , a cierta dis-
tan cia, un bosque en movimiento ; armados con mos-
quetes oxidados, viejas pistolas, escopetas, algunas con
gato )' otras sin el, palos con fonnas de fusiles atados;
dos 0 tres mil mujeres con sacos para Ilevar los produc-
tos del saqueo prometido. Muchos que no habian sali-
do nunca de sus pueblos, admiraban sa lvajemente ]a
apariencia de las casas e iglesias y la magnificen cia de la
ciudad. Entraban todos a la plaza gritando: "iViva la re-
ligion y muerte a los extranjeros!» EI mismo Carrera,
atonito ante la muchedumbre que habia puesto e n mo-
\~mie nto estaba tan embarazado que no podia guiar su
caballo. Oespues manifesto que estaba temeroso por la
dificultad de controlar a esa inmensa y desordcnada
muilitud.»*

* En Incidmtes de via)e m Centroamtirica, Chiapas y Yucatan.


Tomo T, EDUCA, Centroamerica, 1982. pag. 221.
LO que ame nazara su posic io n pri\'il egiada. EI t'x iLO de Ca rre ra constilU y<:
la excepci6 n que confirm(:l la reg Ia, Ell estc caso , los m ismos co nservado-
res \'i e ro n con ho rror la e ntrada de Carrera y sus hombres a la c illdad de
Guate mala, y, (erne rosos de que los hechos deSe nlbuGlran e n un a g uerra
de caSlas, sc avini e ro n a colaborar con el.
El Illo\'ilnic llt o liberal cenlroalnericano ante rior a 1870 se ca rac teriza
por se l' Slimam e n te contraclictori o . Asi, a pesar de que los libe rales eran
m<ts f'u c n es e n EI Salva do r, Ho nduras y N ica rag ua, e l1ihe ralislno Ill as ra-
dical se dio ell Gua temala ), ell Costa Rica. En los paises ce ntral es la e jeclI-
cion de l progTa11la liberal tro pez6 con graves dificultades, com o las gue-
rras c ivil es, la fa lla de un producto de e xpo nacibn e n auge , y g obi e rnos
e n In ~II1 OS de oliga rquias localistas e n extrem o , En ca mbi o e n Costa Rica ,
el temprano cxilO de la caficnltu ra sirvi6 para aunar crite rios, y sus habi-
LatHeS SC cOlnpo n aban como liberalcs en lorno a aspec tos econ 6 micos, a
la vez que se ide ntifi caban con las fll c rzas con scrvadoras centro am e rica-
nas. En Guatem ala, la fa cc io n libe ral e ra hosl.il a los an tignos mercaderes
y tcrrate nicntes acaudalad os. No obstante, en sus filas mil itahan los 111iem-
bros de la elite te rratenie nte de las areas pe rifc ricas, particulanne nle de
Los Altos haci a e l noroeste .
Una de las mayores contradicciones dellibe ralism o ce ntroame ricano
fue su comportamiento rac ista y e xcluyentc, En abi e rta oposici 6 n a lo s
pri ncipios fund ame ntales d e igu aldad, libe rtad y fraternidad, omitio plan-
tearse la cuesti on indige na. Las reformas qu e propu sieron los liberales
solo contempl aban a los b lancos y a los ladinos. Los indigenas so lo exis-
tian como piezas manipulables por los lideres e n e ljuego d e l poder.
Por o tra p arte , los libe rales no [ue ron capaces de articular un progra-
rna creible, que permitiera construir la nacio n alidad y una ide ntidad na-
cional. lncluso e n el pla no teorico mostraban g randes contradi cciones.
Por ej e mplo, abogaban por la ado pc ion d e institucion es e urope,,,, pero
parecian despreciar a los ingleses. En su p olitica social tarn bie n eran con-
tradietorios, aunque hay que reconocer que toparon eon estru eturas so-
ciales he redadas de la colonia muy resistentes a l cambio.
Una in coherencia sobresalia entre los dirigentes politicos d e la epo-
ca: la tendencia a cambial' de bando . El que militantes del bando liberal
se pasaran al ba ndo conservador, y viceversa, solo es explicable por la
busque da del poder y la defensa d e sus inte reses personales. Ademas, des-
tacados dirigentes conse rvadores se beneficiaron de las propuestas libera-
les, como con la privatizaeion de la tierra y las politicas de promoc ion d e
las exportaciones.
En sfntesis , e lliberalismo centroamericano se caracleriza po r la incon-
gruencia entre los ideales que te6ricamente aceptaba y las aceiones que
ejecutaba. Enseguida n os re ferimo s a algllnas de sus prin cipales politicas.

152
poLitiras de tenencia de La tierra

Las reformas emprendidas por los libe ra les con eI fin cte privatiz"r la
ti erra y lransformar la agricultura !"ue ron muy complejas, debido , princi-
pahne nle, a la variedad de sistemas d e tenenci a de la li erra heredados de
la colonia. Para los Iiberales, la propi edad comunal de la lierra era un
uhslacu lo que habra que salvar para estimular la inversitm e introducir
mejoras en las propiedactes. Sin embargo, las medidas lOmadas fueron
muy ambiguas, chocaron con los intereses colec tivos y la tradici6n y se
prestaro n para e l favoritismo politico.
Antes de 1870, los resultados de la privatizacion fueron diversos. EI
proceso avanzo m,b ripidamente en Costa Rica, donde e l Estado tambien
propici6 la colonizaci6n agricola de nuevas zonas. En Guatemala, en lu-
gares don de las tierras pertenecientes a comun idades indigenas no eran
aptas para e l cultivo del cafe se favorecio la migracion te mporal de traba-
jadores agricolas. En las areas situadas a l suroeste y al este de la ciudad d e
Gua temala, donde con vivian ladinos e indige nas, las comunidades fue-
ron obligadas a ceder, e n censo enfi te utico, las tien'as consideractas ocio-
sas, para promover los productos de exportacion. Este llltimo sistema,
impulsado por los liberales y avalado con mayor e ntusiasmo por los con-
servadores, fue un paso previo a la privatizacion definitiva. En EI Salva-
dor, la privatizacion de las tierras comuna1es convirti6 a mllchos calnpesi-
nos en asalariados, En contraste, Honduras y Nicaragua lIevaron mas len-
tamente e l proceso de privatizaci6n de la tierra.

Ataque aL poder de La Iglesia

Antes d e 1870, la oposici6n al poder de la Iglesia es el rasgo mas carac-


te ristico d e los liberales centroamericanos, Sus med idas lograron socavar
las hasP' ct,,1 rode.- econ6mico de la Iglesia, fundado en la propiedad
inmueble -urbana y rural- y en las actividades cred iticias (prestamos a
censo y cape llanias). La propiedad eclesiastica era considerada una ver-
dadera re mora al progreso, porque no pagaba impuestos, y obstaculizaba
la libre circulacion y e l desarrollo de la riqueza Pllblica (se Ie conocia
como propiedad en manos muertas),
Algunas de las medidas anticlericales fu e ron: e n Costa Rica, la exen-
ci6n de l pago del diezmo por las exponaciones de cafe; la expropiaci6n
de las propiedades de las 6rdenes religiosas, que afecto fuertemente a la
orden domin ica, propietaria de algunas de las mejores haciendas de Gua-
temala; en Costa Rica, la venta de ganados de cofradias y obras pias, y la
abolicion de las capellan ias, en EI Salvador. Estas providencias fneron

153
paSlcriormente avaladas por los conservadores, pe ra, al lllism o tiempo,
con tribuyero n a avivar la ave rsion popul ar contra eI re formislTIo.

Secularizaci6n y contraofensiva clerical

Los liberales lograron minar e l po de rio economico de la Iglesia, pe ro


[ueron menos exitosos en sus intenLos de desafiarla e n el campo ideologi-
co. El mayor inLenLo de secularizacion se dio en 1837, a l traLar de implan-
Lar el Codigo de Livingston , con el divorcio, el maLr imonio civil, los dere-
chos hereditarios de los hUos ilegitimos, la educacion laica y e l apoyo a la
inmigracion de protestantes e uropeos.
Varios facto res se conjugaron para d a r al trasLe con esas transforma-
ciones. En prime r lugar, la oposicion cerrada del frenLe comtm integrado
por los conservadores, la Iglesia y los sectores populares, habilmente ma-
nipulada por los clhigos. En segundo, las epidem ias d e colera d e 1837-
1838 Y 1856-1 857, que tambien contribuye ron al dele rioro del reformis-
mo liberal. La primera epidemia fue explolada politicamente por los con-
servadores, quienes propalaron la noLicia de que las ag uas habian sido
conlaminadas por los liberales para poder entregar Lierras a inmigrantes
extranjeros.

UNA SOCIEDAD POR TRANSFORMAR

EI proyecto de los libe rales distaba mucho de la realidad: parecia


dirigido a una Ce ntroamerica donde la mayor parle de la poblacion
fuera criolla-mesLiza, y no indigena, y la economia fuera exportadora y
no atrasada y d e autosubsistencia. Desde el presente resulta facil dar-
se cuanta de que los liberales conocian mal la sociedad que pretendian
transformar.
Hacia mediados del siglo XIX, Centroamerica se encontraba dividida
etn ica y regionalme nle. EI nOrLe se caracterizaba por e l predominio de la
poblacion in digena, el sur, de mestizos y EI Salvador era una zona d e lran-
sicion. Los liberales deseaban reformar esa situacion, de origen colonial,
pero no consideraron que la poblacion indigena comenzaria a crecer mas
rapidamente que la mestiza , debido al malrimonio temprano de los abo-
rige n es. Tampoco tuvieron en cu enta que la dispersio n de la poblacion se
acentuaria con e l desarrollo de la agricultura de exportacion, al incorpo-
rar vastas zonas hasta entonces sin colonizar.

154
[LUST RA.C I ON NO. 24. PROCI~S [6 N DE VIERI\ES SANTO EN ( :OSTA. RI CA. U na de las
carac te ,-islicas Ill .is so hresa li c ll lcS d e [os [ibeTa les cC li troam(:ricanos e '"a 'HI anl ider i-
ca lislil o. Sin e mba rgo. pa ra d Ins fu c d ilici lili c ha r contra e l poder de I.. I ~lc..:s i a. Las
[radiciont:s rdigiosas, como 1<1s pmct'siolles en la s c;"llles. se en ('olltranan fll<"rtemt'llle
arraigad as t' ll el pueb lo.
Las leyes sobre matrimonio civil, divorcio y derechos de herencia de
los hijos ilegitimos, chocaron contra la realidad de una sociedad don de
los niveles de ilegitimidad y de concllbinato eran altos, y los hogarcs diri-
gidos pOl' mujeres existian en todos los estratos de la sociedad. POI' eso cI
patron de herencia predominan te no fue radical men te alterado con las
Iluevas leyes.

UNA SOCIEIJAJ) POR REDEFINIR: MESTIZAJE E IDENTIDAD ETNICA

Durante el siglo XIX, la c1asificaci6n <'tnica de los individuos depen-


dla 1113.S de su cOlnportatniento social y politico, en relacion can otros
sujetos, que de elementos de caracter biol6gico. Despues de la indepen-
dencia, para clasificar a las personas como indigenas se tOlnaba en cuenta
su idiom a, vestimenta, pertenencia a llna comunidad y pnictica de la agri-
cultura de subsistencia en tierras comunales. Con estos criterios, del 75 al
95% de los habitantes de Guatemala, y del 25 a150% de los de El Salvador
y Nicaragua eran considerados indigenas. En Costa Rica, entre el 75 y el
95 % de los habitantes eran ladinos y criollos, pero no europeos, como se
ha creido.
Excepto en la ciudad de Guatemala, la densidad de la poblaci6n de
origen peninsular era minima. Asi, a falta de poblaci6n blanca, muchas
personas de ascendencia mixta, pero de piel clara, lograron introducirse
en los sectores altos de la sociedad.
Los Iiberales centroamericanos fueron incapaces de entender su posi-
cion m inoritaria y elilista, y no 10graron crear una democracia burguesa,
porque sus proyectos excluian a los indigenas.
A fines de la decada de 1860, la etapa de tantcos, experimentos y bus-
queda que sc inici6 a mediad os del siglo XVIII habia llegado a su fin. Al
hacer un balance, queda la impresi6n de que las estructuras heredadas de
la colonia pesaron mas que los call1bios internos y externos caracteristi-
cos del periodo.

156
Capitulo IV

AUGE YCRISIS EN LAS


,
REPUBLICAS AGROEXPORTADORAS

Los anos compre ndidos e ntre 1870 y 1945 -desd e la Reforma Libe-
ral hasta e l fin d e la Segunda Guerra Mundial - se caracte rizaron por e l
a uge y la crisis deillamado modele agroexportador 0 de desarrollo hacia
afu era. Esto significa que la economia de los paises centroamerican os se
fundament6 e n la exportaci6n de dos produc tos agricolas prin cipales:
cafe y banano. Como resultado de este mode lo de desarrollo esos paises
se volvieron mas dependientes de los vaivenes de la econ om ia mundial ,
por 10 que d e las cri sis econ 6m icas y politicas internacio nal es repe rClItie-
ron fuertem e n te en e llos.
Ademas la sociedad centroamericana su fri6 gran des cam bios. Los gru-
pos que pudie ro n Iigarse a las actividades econ6micas mas relevantes se
enriqu ecieroll, en tanto qu e los seclo res subordin ados crec ieron, y las
condiciones de existencia se tornarOll realmente dificiles para mucha
gente. Algunos grupos tomaron conciencia de su situaci6n y lucharon
fuertemente para organizarse y defe nder sus intereses.
En este pe riodo se produjo tambit' n la construcci6n d e los estados
nacionales, por 10 que las posibilidades de lI evar ade lan te algun proyecto
uni onista se a lejaron alll1 mas. En e l campo de las re lacion es intern acio-
nales 10 mas sobresali e nte fil e e l paso de la h egemonia ing lesa a la supre-
mada de los Estados U nidos.
En la prim era parte del capitulo nos referiremos a l auge de la agricul-
tura de exportacion , e n la segunda, trataremos la crisis que viviero n Jas
repu bli cas ag roexponadoras a partir de fin es de la decada d e 1920.

AUGE DE LA AG Rl GU L:rURA DE EXPORTACION

Durante las tres lIilimas decadas del sig lo X I X los p a ises d e Cen-
troatne-rica lograron insertarse, definitivamente, en e l mercaclo mundial.

157
En consecllenc ia se proclLuo llna clara transfonnaci6n, tanto en let COlll-
posic ion de las exportaciones y de las importacion es, como en el pape l
que dcsempCl'io e l capital cxtranjero y cl desarrollo d e los m ercados
in ternos.

Comercio de exporlacion

Los allos compren did os entre 1870 y 1930 se caracterizaron por el


crccimiento econolnico. No obstante , hubo variaciones en los in gresos
que los paises de l istmo pc rcibian por la venta de sus productos en e l
eXLranjero. Estos dcpendian, fllndamentalmcnte, de l volumen d e las ven-
tas y de los precios que tenian en e l mercado internacionallos prodllctos
exportados.
Ya en la decada de 1870 las exportaciones d e cafe d e Guatemala, EI
Salvador, Costa Rica y Nicaragua se habian incrementado considerable men-
Le. EI unico pais en donde e l cafe tuvo poca importancia en el comercio
exterior rue Honduras, cuya economia se baso en la m in eria y en e l cultivo
de l banano, actividades controladas pOI' capital fonlneo. Sin e mbargo, ya
en 1929 Ce nLroamerica exportaba alrededor de 45 millones de racimos.
Honduras era el prin cipal productor, seguido por CosLa Rica, Guatemala y
Nicaragua. Solo EI Salvador no producfa ba nanos para la exportacion.
La composicion de las exportaciones de cada pais [ue cambiando con
el COlTer de los anos. Ademiis del cafe y d e l banana Lambien se exportaba
plata, oro, cacao y maderas preciosas.
Durante las ultimas d ecadas d e l siglo XIX, los pri ncipales comprado-
res de Centroamerica eran Gran Bretana y Alemania, pero hacia fines de
esa centuria se fortalecieron los lazos comerciales co n los Estados Unidos,
pote ncia que final mente logro desplazar a los paises de Europa occiden -
tal como principal mercaclo de los productos de la region.

Comercio de imj)ortacion

La deman da inte rna de manufacturas extranjeras provoco un auge


sin precedentes de las impo rtaciones durante los alios comprendidos en-
tre 1870 y 1930. La importacion de bienes de consumo - sobre todo tex-
tiles y prendas de vesLir- tuvo cfectos negativos, porque limito la produc-
cion local. Ademas la especializacion cafetalera provoco la perdida de I ~
autosufici e ncia alimentaria por 10 que fu e necesario im portar granos ba-
sicos. Tambicn se importaron bienes de capital, es decir, equipo y maqui-
nari a que no se producian en Centroamerica.

158
ILUSTRACION N!l 25. TIENDAS COMERCIALES EN SAN SALVADOR. EI auge
de las exportaciones provoco el crccimicnto de las importaciones de arl1cu-
los producidos en Europa occidental y en los Estados Unidos. Muchas de las
tiendas pertencdan a inmigrantes extranjeros radicados en las principales
ciudades centroamericanas.

Guatemala fue el pais que reporto mayor volumen en las importacio-


nes. Sin embargo, si se tiene en cuenta el numero de habitantes de cada
pais, los costarricenses resultan los mayo res consumidores de productos
importados. Esto pone de manifiesto que Costa Rica fue el pais mas fuer-
temente ligado al mercado internacional.
A 10 largo del periodo 1870-1930, Guatemala, Costa Rica y EI Salvador
lograron una balanza comercial favorable, es decir, el valor de sus expor-
taciones era superior al costo total de los productos importados. Por 10
contrario, Nicaragua y Honduras tuvieron una balanza comercial desfa-
vorable durante algunos anos.

Inversion extranjera y capital local

Desde mediados del siglo XIX hasta despues de la Primera Guerra


Mundial, el capital ingles domino las inversiones extranjeras en Centro-
america. La colocacion d e capital ingles se con centro en tres campos:
prestamos a los gobiernos de la region, construccion de ferrocarriles y
otros servicios, e inversiones directas en la mineda. Ya en la decada de
1890 el capital estadounidense comenzo a financiar actividades mineras y

159
la co nstruccion de ferrocarril es, peru las mayores invcrsiones se canaliza-
ron h acia la aClividad banan e ra . Oespues d e la Prime ra G ue rra Mundial
e l capi tal norteamericano desplazo paulatinamente a los inversioni stas
ing leses.
Mientras que la actividad bananera cayo en manos extranjeras, la cafi-
cultura sigui6 en manos de nacionales y de algunos eX lranjeros radicados
en e l iSlmo. Entre eslos sobresale n los inve rsionistas alemanes, quien es sc
inslalaron en las lierras alLas d el Pacifico para adminislrar directamente
sus em presas cafetaleras. La presencia alemana fue muy importante en el
norte de Guatemala.
EI capital extranjero si fue muy relevante en el procesamiento del
cafe y en su comercializacion en los mercados internacionales, de bido a
la gran cantidad d e recursos que demanda e l beneficiado y a la n ecesidad
de tener vinculos e n e l exterior para vender el producto e n los mercados
inte rnacionales y acceder al credito externo. Esto significa que las fases
mas rentables de l negocio care talero -el financiami en to y la comerciali-
zac i6 n- quedaron e n man os de l capital fOr<ineo .

PRI NCIPALES PRODUCTOS DE EXPORTACION

Cafe: pulpa dulce, grana arnargo

EI auge de la agricultura d e exportacion modifico e l paisaje rural cen-


troamericano. Ampli as zonas antes dedi cadas a la agricultura tradicional
ya la ganaderia extensiva fueron destinadas a la siembra de cafetos. Nue-
vas region es, antes practicame nte vacias, fueron abiertas a la colonizac i6n
agricola, tanto pa ra cultivar cafe y otros productos de exportacion , como
para sembrar maiz, frijoles y d e mas cultivos d estin ados a satisfacer la de-
manda interna.
La caficultura se difundi 6, de prefere n cia, en zonas montanosas y en
valles intermontanos de altitud intermedia, e n donde los suelos eran a pro-
piados para e l «grano de oro" . La ampliacion de la frontera agricola y el
in cremento de las exportaciones demandaban una mejor y mas amplia
red de transportes para comunicar los antiguos centros de poblacion con
los frentes pioneros de colonizacion.
Los gobiernos pusieron gran e mpeno e n la apertura de caminos y en
la construccion de ferrocarril es, para conectar las zon as productoras de
cafe con los pue rtos.

160
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MAPA N !l 2 1
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93' 00'

Sistemas jJroductivos

El auge de las exp ortaciones provoco una transici6n de un a agricultu-


ra extensiva a otra mas intensiva. La transformaci 6 n se dio, sobre todo) e n
las zonas d e ase ntami e ntos mas antigu os. En las zonas d o nde la agricultu-
fa intensiva comenzo a ganar te rre no, los campos fue ron ce rcados para
evitar la d estrucci6 n causada p or los a nimales que vagaban Iibre me nte.
La gan ade ria exte nsiva que d6, poco a po co , relegada a los distantes
frentes d e colon izaci6 n, ya cie rtas zon as do nde e ra una actividad tradicio-
nal, y donde , p Ol' SLI S caracteristicas ecol6gicas, n o se podia cultivar cafe .

Transjormaciones urbanas

En las zon as de frontera sLlrgie ro n nuevos pue blos, ve rdad eros ce n-


tros d e abastecimie nto y de acopio d e los productos agropecu a rios d e las

16 1
areas Cin.:Ullvecinas. 1vficntras tanto, los anliguos poblados se transf'orma-
ban en ciudades Inas c01npl~jas, con mejores se rvici os y una vida econ6-
mica mas din{unica.
EI auge cafetalero modifico las rclacion es entre el campo y la ciudad
en eI Pacifi co cen troamericano. Esto se man ifesto en la reo rgan izacion
de los espacios regionales, en el acelerado desarrollo de la red vial y e n el
crecimie nto del c0l11ercio interno y ex te rno. Las ci uclades continllaron
siendo ce ntros de poder, pero la actividad economica rural era la mas
beneficiosa.

Modificaciones en La tenencia de La tierra

EI o bjetivo principal d e los gob em antes centroam ericanos, tanto «li-


berales») como «co nservadores», era impulsar eI crecimiento agroexpor-
tador. La lla mada «Reforma Liberal» provoco cam bios e n la legislacio n
que regulaba la tenen cia de la tie rra. Las nuevas Ie yes favorecie ron la ex-
propiacion de las tierras eclesiasticas, la privatizacion de las tierras co mu-
n ales y e l paso de las tierras ba ldias a manos privadas.
La expropiacion de las lierras de la Iglesia no se dio al mismo ritma
en los paises de la region. En Costa Rica se aplico desde lines de la co lonia
hasta mediados del siglo XIX, sin mayo res tropiezos. Los beneficiados fue-
ron unos pocos comerciantes y clerigos acaudalados, que transformaron
muchas de las tie rras destin adas a la ganaderia en prosperos cafetales. Sin
embargo , esas tierras representaban un po rcen t~ e minimo del espacio
agricola costarricense .
En Guatem ala, aun a fin es de la decada d e 1860, la Iglesia posefa vas-
tas propiedades. Durante el go bierno d e Justo Rufin o Barrios, las tierras
eclesiasticas fue ron confiscadas y distribuidas entre los miembros de la
elite. En EI Salvador, las propiedades que pertenecian a la Iglesia eran
me nos importantes que en Gua te mala. Los libera les las confisca ron du-
rante las decadas d e 1870 y 1880, pero no resolviero n con ello la gran
d e manda de tie rras para la agricultura de exportaci6n.
En Nicaragua la exp ropiacio n rue emprendida p or J ose Santos Zelaya
e n 1893. La medida tuvo impo rtancia relaliva, dado 10 tardio y trun cado
del reform ismo liberal en ese pais. En H onduras, la expropiacion r ea li za-
d a p o r el gobi e rno de Marco Aurelio Soto (1876-1883) no tuvo ningun
significado en el d esarrollo agroexportado r.
La privatizacio n de las tie n'as comunales tuvo un impac to mayor que
la d e las tien'as d e la Iglesia. Las comunidades indigenas d e l Valle Central
de Costa Rica fueron expro piadas antes de 1870, en un proceso exento
d e violencia abie rta. Los indigenas despojados tuvi eron que optar p o r el

162
lrab~jo asa lariado 0 por la migraci6n . La priv3ti zClc ion de las ticrr<ls ej ida-
Jes lIevo In as tie lnpo, porque 110 fu e unidireccional y. Illicntras algunos
e jidos localizad os e n e l Valle Cenlral se privalizaban , olros pueblos. situa-
dos e n los nuevos frenles de colonizacion agricola. e ran dotadus con su
(degua » comunal.
En El Salvador, la medida mas importanle de la Reforma Liberal fil e
la privatizacion de las lien'as c0l11unal es indfgenas y de los ejidos Illtlllici-
pales, proceso Iento en su aplicacion . pero en gran escala. que puso al
servicio d e la caJicultura alrededor d e un 25% de la superJicie lotal del
pais, segun algunas estinlaciones. Esa Re form a favoreci6 la concentracion
de la prop iedad fundiaria y provoco un a mayor dife renciacion social.
Adem{ls. genero numerosas revue llas de indige n as y campesinos. y creo
un sector medio rural. complleslo por ladinGs e indigenas. dedicados a la
produccion d e cafe. granos basicos yo u-os prodllctos.
Enlre las medidas mas importanles de la Re fonna Liberal de Guate-
ma la d eslaca la abolicion del censo e nfile utico. e n 1877 . Este hecho per-
mitiii que los arre ndatat'ios de tieri-as pudie ran adqllirirlas en propiedad.
o que fueran re matadas como baldios. Sin e mba rgo. e l principal proble-
ma no era la falta de tien'as, sino de mano de obra , por 10 que se dictaroll
politi cas coercilivas para garantizar la presencia de trabajadores en las
fincas cafeta leras. Esas medidas provocaron gran maleslar y de nuevo hubo
levantam ientos inciigenas.
En c1 caso de Nicaragua, las polfticas de privatizaci6n de la tierra no
est.l1vi e ron siempre asociadas a la expansio n cafc tale ra, ni [ueron implll-
sad as so lo por los liberales. La resistenc ia in clige na a In privatizaci6n de
las tierras cOInllnalcs fuc muy fuerte, como 10 demuestra la Guerra de las
Comunidades (188 1).
Honduras con stituye la excc pcion d e la regia. porquc mas bien el
gobierno de Marco Aurelio So to legilimo los cj idos. En consecuencia ,
CSle tipo de propi edad perdura hasta nueSlros dias e n esc pais. aunque e n
a lgu nas panes las tien'as ejidales ha n (aido e n manos privadas.
La uc rra era un recnrso abundante en todos los paises centroalnerica-
nos. salvo e n EI Salvador. Por 10 tanto. 101 dislribucion de los baldios \lacio-
nales ru e un importante Inecanism o de privat izacion de la tierra. El rcpar-
to d e baldios favorecio principalmente a las e liles soc iopolilicas. La parti-
cipac ion de Olros sectores sociales en esa distribuci6n fue variable: la In{ls
arnpli a se dio en Costa Rica y la mas rcd ucida e n Guate mala.
En tanto que la distribucion de baldios tllVO poca importancia en EI
Salvador, e n Guatemala sinrio de base para e1 desa rrollo de gran des ha-
ciendas cafe taleras. principal men te e n Ia Costa Cuea. En Nicaragua. la
lilulacion d e baldios se inicio como una medida d e l Estado para captar
recursos d espues de Ia Guerra Nacional. Va para fines del siglo pasaclo

163
esos te rre nos eran escasos. En Ho nduras, la concesi6n de tie rras eS luvo
mas bi en ligada a la actividad banan era. £1 Estaclo cost.arriccnse ve ndi6
baldios a preci os reducidos , con 10 e Llal se ben e ficiaron coloni zadores
calnpesinos que te nian rec ursos suficien les para realizar los gastos de ins-
cripcion y poner a producir Ja tierra.

Concentraci6n de La /JfvjJiedad

En tenninos gene rales las prop iedadcs grandes alternaban con otras
mas peque tias. Las propiedades dcd icadas a la ganade rfa ex tcn siva )' 13.'\
que pcrm anccian in cultas cran las de ma),or extcnsion.
La mayo r con ce nt.raci 6 n de li crras cafctal eras en pocas manos sc dio
e n El Salvador. En N icaragua. c n la primera zona de expansion cafetale ra
- las Sicrras de Managua y la Meseta de Carazo- predomi naban las fin-
cas gran des, en tanto que en la region cafctal era norcen lral y en Nue\'3
Segovia dominaban las fin cas pequeiias y medianas. La Meseta Cc ntral
de Costa Rica era un verdade ro Inosaico de Jin cas de dive rso tamalio y.
3unqu e habia co n centracio n rle la propiedad, co ntaba co n una frontera
agricol a cercana y abierta. En]a parte orie ntal de l Valle Central predomi-
naban las fincas de mayor ex tension , e n las cuales se combinaba la cafi-
cultura co n el cultivo d e ca na de aZllcar y la ganade rfa. En Honduras
prevalecia]a p equ e iia prop ierlad cafeta lcra, aunquc h abla algunas lincas
grandes.

Otganizaci6n tecnica y sociaLdel trabajo

Los cafc rales cenlroam c ricanos e ra n de cafe anibigo, especial me nte


de la varie dad Typica. Sembrar un cafeta l nuevo exigla mucho trabajo.
pues era necesario hacer. primero, semilleros d e gran os se leccionados y
cnidar los almac igos. Al principio d e la estacio n IIl1viosa los p equd \os
arbustos de blan ser transpla nlados. EI cafe arabigo requ e rfa d e sombra .
por 10 que, al d esmontar los terrenos, se conse rvaban algunos arboles.
Los cafe tales se sembraban co n arboles de sombra , los cuales sen 'lan como
rompevie nlOs y contribulan a l control d e la erosion. Distinlas variedades
de leguminosas se rvian para restituir nitrogeno a l suelo.
En la mayor pa rte d e las fincas pre dominaba el policultivo. EI malz
e ra cultivado para aprovechar el terre no mie ntras los cafe los eran jove-
nes; d e ntl·o del pro pio cafe tal , 0 en sus o rill as, se sembraban tuberc ulos y
plantas rastreras, para salis/acer las n ecesidades alimenticias de las fami-
lias. En contrasle, e n las fin cas gran d es, e ra comlm la separacion e ntre las

164
ILUSTR,\Cf(')N N!..! 26. ENTRH;A DE CAFE E:\" LA FINCA (~ILlSTINIA:-\1. La rccoleccitlll
de caLC proyocaha una elt'yada demallda eSLacionai de mann de obra. Aunque en las
l"incas cafeLaleras predominaban los trabajaclores masculinos, Lambicn las mujeres y los
nii10s participaban acti\'anH"nLc enb cosceha del grlt)o. La fotogl-afia llluesLra la entrc-
ga de calC en la linea Cillstiniani, Costa Rica.

<:lreas netal11cnlc cafetaleras y las dedicadas a cullivos de subsistencia y


potreros.
Los cafe tales mejor cuidados eran los de EI Salvador, donde se preve-
nia la erosion can barreras de «izote,) 0 itabo. La poda era considerada
exccsiva en Costa Rica, mientras que, en Guatelnala, casi nunca se realiza-
ba esa practica. EI uso de abonos organicos era l11as frccllcn te cn los caIe-
tales viejos de las haciendas que en las fincas pequenas.
La densidad de siembra era variable. En EI Salvador se plantaban alre-
dedor de 1 200 cafetos por manzana y, en Costa Rica, entre 1 000 Y 1 100,
segem se calenla. EI rendimiento era muy alto en El Salvador, e interme-
dio en Guatclnala y Costa Rica. Las variacioncs en el rendimiento obedc-
dan a tres factores: las condiciones geognificas, la antigiiedad de los cafe-
tales y las practicas de cuitivo.

Recolecci6n y procesamiento del cafe

Desde que se introdujo el cafe en Centroamerica, en las principales


regiones cafetaleras la cosecha se ha realizado durante la estacion seca, 10
cual ha facilitado el transporte del grano a los beneficios y a los puertos.

165
En las fin eas mas p e'l neiias la recol ecc i(lI1 se realizaba media nte e ltrabajo
de fatni li as campesinas 0 con la colaboracion de vecinos, y solo excepcio-
nalmente se contrataba a otros trabajado res.
Ta mbi e n desde c nton ces el beneficiad o ha sido de dos tipos: h llmcdo
y scco. EI be nc ficiado de cafe maduro , m ediante cI sistema hiim ed o, pro-
du ce nn grano de calidad superior, cuyo precio en e l mercado es m as alto.
EI be neficiado seeo es mas se ncillo y mcnos earn , pero cJ produclo es de
infe rior calidad. En Costa Rica, a fines d e l siglo XIX existian unos 200
ben e ficios hllmedos, los cuales cosechaban la mayor parte del grano pro-
ducido. £ 1 be nefici ado hlllll edo talllbien predolll in o en Gu atemala y e n
la zona cafetalera nortel1a de Nicaragua. En cambio, en El Salvador la
cscasez d e ag ua favo recio la pervivencia de l benefi ciado seco en alg unas
zonas.
La fase fina l d e l procesamiento era el secado y la limpi eza. La c1asifi-
cacio n del g rano , de acuerdo con su caJidad , era una labor manual reali-
zada por muje res.

Obtencion de trabajadrrres

La difllsion de la cafi cllll.ura increment o la demanda de trabajado res.


Las lorm as de re clu ta rlos e ran variadas, y d e pe ndia n de las circunstancias
loca les y de l contexLO socio-politico . Eltrabajo asalariado era mlly impOlc
tan te en las haciendas salvadorenas y coslarrice nses. ~o obstan te , mi e ll-
tras e n EI Salvador la e levada ufena de manu de obra pro\'oc(> flue los
salarios fu e ran b£~j os , en Costa Rica, la [alta de mana de obra y la existcn-
cia de una f'rontera agricola abierta oblig6 a los duc nos de cafc tales a
ofrece r salarios atractivos. En LOdos los pa ises impero cI p ago a jomal,
tanto para las labores agrlcolas como para las de bcneiiciado.
Oua (onna de conseguir lrab~j adores, 3unque tne nos difundida, fu e
c1 colonato, ~ l Cl1~l sc practi c6 en Gua tema la, Nicaragua y, e n fonna mas
restring-ida , e n la pane ori e ntal d e l Valle Ce ntral de Costa Rica.
EI rec\lI ta mi e lllo forzoso d e trabajadores tm·o d os modalid ades im-
porLantes: los mandamientos y las habilitacio nes. £ 1 mandan1iento no era
otra cosa que el vi~jo repartirnien to colon ial , revivido por los liberal es
gU3lemaltecos, en peljuicio de las co munidades indig'enas, a las cuales e l
Est aclo obJig6 a sumin istrar peri6c1icamcnte cierta cantidac1 de trabajado-
res para que se trasladaran a las fin cas cafetaleras.
Las hahilitaciones consist ian e n prestar din ero a los trabajadores indi-
ge n as y mestizos, por pane de agentes recilltadores, para obligarlos a p a-
gar esas d e Lldas con trabajo e n las hacie ndas. EI Estado IOlll entaba esa
situacion, al dictar leyes contra la «vaganci a)~, y al poner a disposicion de

166
TRABAJO FORZADO EN GUATEMALA

Los habilantes del pueblo de Concepci6n Chiquirichapa se


dirigieron al Presidentc Vicente Cerna, en marzo de 1871, para
manifeslarle cl porque de su oposicion a participar en la apel~
tura del camino a la Costa Cuca:

«Intentandose abrir un camino carretero de Quezaltenan-


go a la Costa Cuca, en que solo r(sultan beneficiados los
propietarios que tienen fincas de cafe en aquel lugar, se
nos ha querido obligar por el Senor Corregidor Occiden-
tal del Departamento, Licenciado Don Jose Flamenco, a
que prestemos sin escepcion nuestro servicio personal en
l3 apertllra del espresado calnino carretero. Mil razones nos
asisten para negarnos a obedecer esta disposicion, siendo
la primera, que por un pacto celebrado entre nuestros as-
cendientes con las autoridades de Quezaltenango, estas se
cOlllprometieron solernnenlcnte a no tequiarnos en nin-
glll1 tiempo, con tal de que se les permitiera, como se les
permitio, sacar el agua que entra a la Fuente publica de
Quezaltenango, dellugar de nuestro domicilio; que noso-
tros aunque semhramos milpa y algodon en la Costa Cuca,
acostumbrados al trabajo duro y a an dar siempre por vere-
das, llevando a cuestas el producto de nuestras asiduas ta-
reas, no necesitalnos de earninos carreteros ni de carretas
para transportar nuestras miserables cosechas. Por estas
sencillas razones nos negarnos a coopcrar con nuestro tra-
bajo en la obra proyectada del camino de can'etas, por 10
cual el susodicho Corregidor puso en la carcel al Alcalde
1Q., Y preso con cadena al Secretario, sacandolos a los tra-
bajos publicos. Por 10 anterior expuesto, solicitamos no ser
forzados ni vejados a un trabajo caminero, que ningun bien
particular nos proporciona, siendo unicamente los capita-
listas de Quezaltenango los que lucran en esta empresa.»*

* Tornado deJulio Castellanos Cambranes. Cap y cmnpesinos en


Guatemala, 1853-1897. Editorial Universitaria de Guatemala,
1985, pags. 565-566.
los hacendaclos el ejercito y la policia, con e l fin d e obligar a los peon es a
cancelar las cleudas contraidas.
EI trabajo forzado no tuvo imponancia e n Costa Rica ni en Honduras,
donde las relaciones de poder imerelnicas no se h allaban tan polarizadas.
En Nicaragua si se utiliz6, solo que bajo la denominaci6n de enganc he.
Olra forma de con seguir lrabajadores eran los intercambios laborales
e ntre produclOres campesinos, ya fueran familiares cercanos 0 vecinos.

Trabajo fam iliar

En Centroamerica, e l trabajo familiar en las diversas faenas agrico las


e ra, yes aiin , muy irnportanle. Adernas d e los ingresos recibidos por la
vema de sus produ clOs - cafe, granos basicos y gan ado-, las familias carn-
pesinas percibian o tros recursos por su trabajo en otras fincas , venta de
artesan ias, servicio dorn estico de las muj eres, comercio al por 1uenor,
a rriendo 0 co ntra tos d e aparceria de las tien'as no utilizadas y transporte
de Ille rcandas.

Cnidito, comercio y capita.l

La producci6n y procesarniento del cafe produjo una cornpleja red


de relac iones sociales. Pequenos y medianos productores establecieron
relaciones con los duenos de los beneficios hurnedos, y, poco a poco, se
vieron sornetidos a l imperio d e l capital agroindustriaL Cad a be n e liciador
controlaba a cierto nume ro de clienle s, en zonas mas 0 menos delimita-
das po r las fac ilidades de transporte. En algunas ocasion es los beneficia-
dores cornpetian e ntre si, pero , por 10 general, se ponian de acuerdo para
fijar los precios de cornpra del grano. Las dispUlas entre productores y
beneliciadores se exacerbaban cuando los precios inle rnacionales del
grano e ran bajos.

BANANO: FRUTA AJENA

EI cultivo del banano se d esarrollo en e\ Caribe centroamericano, en


zon as agricolas alejadas d e los centros de decision politica. EslO contribu-
yo a que las plantaciones banane ras func ion aran como e nclaves. En con-
secuencia, las prin cipales decisiones que af'e ctaban las ernpresas banane-

168
ras eran tomadas en el pais de origen del capital, aunquc sf hubo vincula-
ciones socioeconomicas y politicas can sectares de la respectiva sociedad
centroan1ericana clan de ten ran sus actividades.

Inicios de la producci6n bananera

La siembra de banano se inicio en Honduras hacia la decada de 1860,


por parte de pequenos productores de la isla Roatan. La fruta era vendida
a comerciantes estadounidenses quienes Ia comercializaban en los puer-
tos de Nueva Orleans y Mobile. EI exito de esos productores motivo que
otros propietarios del litoral se arriesgaran a cultivar banano en escala
comercial. Antes de 1899, ano en el cual arranco la produccion bananera
en man os de companias norteamericanas , la totalidad del banana expor-
lado de Honduras era producido por pequenos y medianos propietarios.
Tambien en Costa Rica los productores locales tuvieron un destacado
papel en los inicios del negocio bananero; en 1890 poseian mas de sete-
cien tas fincas. EI origen de la plantacion ban an era propiamente dicha
esta relacionado con los ncgocios del elnpresario norteamericano Minor
Keith. Este, comisionado por su tio Henry Meiggs, se encargo de la cons-
truccion del ferrocarril que uniria e l Valle Central con puerto Limon .
Para sacar mayor provecho del costoso proyecto, se propuso plantar ba-
nanos en los terrenos aledanos a la via ferrea. EI 21 de abril de 1884, Keith
y el gobierno firmaron un con trato, el cual sirvio de modele para otros
que, mas adelante, se suscribieron con los gobiernos de la region . La
United Fruit Company (Ia UFCO), la mas poderosa de las empresas bana-
neras, fue fundada en marzo de 1899, mediante la filsion de la Boston
Fruit Company con las empresas bananeras que Keith habia fundado en
Costa Rica, Panama y Colombia.
En el caso de Guatemala fueron tambii'n los propietarios locales quie-
nes iniciaron 1a activiclacl han an era. Sin embargo, un convenio firmado
en 1901 entre el presidente, Manuel Estrada Cabrera, y la United Fruit
Company, subordin o a los productores guatemaltecos al gran capital trans-
nacional. Las clausulas del contrato obligaban a la compania a adquirir
regularmente el banano de productores locales, y a movilizar en sus bar-
cos mercanclas, pasajeros y correspondencia entre Puerto Barrios, otros
puertos del istmo y los Estados Un idos.
En Nicaragua, el cultivo del banano se inicio en la decada de 1880, en
los alrededores de Bluefields. Veinte anos mas tarde existian unas 500
plantaciones pertenecientes a empresas extranjeras y a pequenos y me-
dianos productores locales. La principal empresa que operaba en Nicara-
gua era la Bluefields Steamship Company, la cual fue absorbida, en 1899,

169
ILUSTRACION Nfl 27. FERROCARRlL DE U\ IRCA . En c l ,1110 19 12la Guatemala Rail-
road Company se convirti6 en la Intern atio nal Railways oj" Cen Lral America (lRCA).
ESI<I emprt:sa era dirig ida por Minor Ke ith, cl magn a{c de los hananos y los ferrocarri-
les e n Celllroame ric.a.

porIa UFCO. La Cuyamel Fruit Company y la Atlantic Frui t Company tam-


bi e n ten ian intereses en Nicaragua; sin embargo , Ia UFCO Ilego a domi-
nar mas d e la mitad de las exportaciones ban an eras nicaragiienses. Mas
tarde, en la decada de 1930, la UFCO abandono Nicaragua, alegando ba-
jos re ndimie ntos del suelo.

Rieles y exportaciones

En Centroamerica, la con strUCClOn de ferrocarriles se inicio, pre-


cisamente, para poder atender las demandas de los mercados intern a-
cionales.
Los grupos dirige ntes e ran muy optimistas acerca de las posibilidades
de modernizacion inherentes a la construccion d e ferrocarriles. Los pro-
yeclos se iniciaron como un gran esfuerzo de caracter nacional, pero al
fracasar esLOS por falta d e recursos, los gobie rn os se vieron obligados a
recurrir al endeudamien to extern o . Este fue e l «caballo de Troya •• que
perm iti6 que capitalistas extranjeros obtuvieran , entre otras prerrogati-
vas, gran d es con cesiones de tierras para e l cultivo del banano.
A pesar de los con lratos firmados con los gobie rnos nacionales para la
construccion de ferrocarriles , las com panias a me nudo no cumplieron
con sus compromisos, y tendieron las lin eas ferreas hasta dond e convenia

170
a sus intercscs. En otras ocasiones hicieron rarnaics clanclcstinos y llsurpa-
ron los fcrrocarrik s estatales.

El cajJital en el negocio del banana

Una de las caracterfsticas mas sobresalientcs del negocio del banana


flle la gran concentraci6n de capital que se produjo, 10 cllal se refleja en
las reorganizaciones sllfridas por las companias rruteras. En 1911 la J-Ju-
bbard-ZelTlllrray Company, que operaba principalrnente en Honduras, se
reo rganiz6 para dar lugar a la Cuyamel Fruit Compan y. En 1923 la Vacca-
ro Brothers and Company se transform6 en la Standard Frui t and Steam-
ship Company, con el lin de amphar sus operaciones en Honduras y ex-
tcnderlas en Mexico, Nicaragua y Panarna.
Las reorganizaciones de las empresas bananeras significaban, en el
fondo, nuevas inyecciones de capital y la ampliaci6n de su~, operaciones a
nuevas zonas. La empresa mas exitosa file la United Fruit Company, que
logr6 adquirir otras empresas mas pequenas, y controlar casi en forma
monop6lica el negocio bananero en Centroamerica.
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lH"

AREAS DE PLANTACION BANANERA


EN EL CARIBE 1870 - 1945
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La plantaci6n bananera y sus servicios

La actividad ban an era se caracteriz6, tambi en, por brindar algunos


servicios que prodlueron gran des ganancias para las empresas. Entre esos
servicios sobresali6 e l transporte por fe rroearril y e l control de los mlle-
lies. EI d omin io sobre e llra nspone ferrocarrilero les permiti6 a las com-
panias COl1lrolar a los produclores directos, obtener lransporte seguro y
barato para sus propias imporlaciones y exportaciones, y o bstaclllizar la
po sible compelencia por parte de OU'as empresas.
Las compal;ias se encargaron de montar tiendas en los pueblos ban a-
neros, lIamadas comisariatos, e n las cuales vendian produclOs impo rta-
dos de los ESlados Unidos. Los lrabajadorcs, sin olra a lte rnativa, debian
adquirir ahi los produclOs d e consumo, con 10 que las compal;ias reco-
gian una parte sustancial d e los salarios pagados.
Los buques mercanles lam b ien pertenecfan a las em presas fruleras .
Estos parlia n con bananos, de los puertos del Caribe de Centroameri ca, y
relOrnaban cargados con produclOs de importacion, para que fueran dis-
tribuidos en los com isarialos. Tambien prestaban e l servieio de lranspor-
te de pasaje ros. La UFCO posefa los mejores buques, que formaban la Gran
FIola Blan ca.
Con el objelivo de cOOl'din ar mejor los embarques de frula , las em-
presas bananeras poseian sus propios sistemas de comun icaci6n in alam-
briea. La mas importante e ra la Tropical Radi o Telegraph Company
(TRTC), subsidiaria centroamericana de la UFCO.
Ademi" las companias bananeras crcaron otras empresas para la dis-
tribuci6n internacional de la fruta, y se avenluraron en otras actividades,
como el abaslecimiento de e ne rgia electrica e n las comunidades donde
operaban .
EI cultivo del cacao fue imponanle, en Costa Rica y Panama, e n tie-
[faS que la compania consideraba «enfermas». Pero don de las empresas
bananeras diversificaron sus aClividades en mayo r g rad o fue en Honc\u-
ras. La Cuyamel poseia uu in gen io azucarero y fabricas de hielo y bebidas
gaseosas. La Vaccaro Brolh ers invinio en el c ultivo y procesamiento de la
caiia de aZLlcar, e n la fabr icacio n de cerveza, hielo, bebidas gaseosas, j a-
bon , manteca, aceite vege tal y zapa los, para satisi'a cer las necesidades de
sus asalariados. Tambien incursiono en la actividad ganadera y en e l cam-
po linan ciero, mediante la creacion d el Banco Atlantida. La mayor parte
de las inve rsi o nes se realizaron e n e l norte banan e ro, 10 eua] creo gran des
conlrastes co n la region cenlral de l pais, donde la mineria era Ia actividac\
mas imporlan te o

172
La aetividad bananera y su genie

Las plantacion es bananeras se d esarrollaron e n zon as re lativam e ntc


aisladas, por 10 que las compa Jl fas se vieron obligadas a construir pueblos
en sus cercanias. En eSlos, los altos fun cio narios y los obreros vivian en
>Ireas claramente separadas. Los capataces y los controladores del tie mpo
vivian en comodas residencias de made ra, lcnlan acceso a un club social y
disponian de su propio cOlnisa ri ato. En CO J1rraSle , los ourerus vivian e n
barracones de made ra, en los cua les se a l()jaban hasta d oce rami lias. Esta
area d e l pueblo disponfa, casi sie mpre , d e un dis pensario medico, com i-
sariato, escu ela, campo de fu tbol y un centro d e esparcimi ento.
Para su administracion , las plantaciones se agrupaban e n distritos, a
ca rgo de los superin tendentes. Eljefe d e estos era e l superintendente de
agricultura, quien a su vez estaba bajo las o rdenes del gerente gen eral de
la d ivisio n. La UFCO tenia una d ivisio n e n Guate mala , d os e n Honduras y
una e n Costa Rica. Los funcionarios d e mas alto rango vivfan e n zonas
excl usivas del centro urbano donde la com paiifa te nia sus oficinas centra-
les (generalme n te un puerto), separados del resto de los trabajadores.
Dado que la pobl ac io n asentada en la costa caribeiia de Ce ntroame ri·
ca e ra escasa, la migracion in terna e in ternac iona l de trabajadores adqui·
ri6 una enonne impo rtancia. Jamaica se cOllvirli6 e n 1a prin cipal Fu ente
de mano d e o bra. La lI egada de trabaj adores j amaicanos a Costa Rica sc
ini ci6 dura nte la construcc i6 n de l ferrocarril al Caribe. Miles de trabaja·
dores migraron de las tierras a ltas del Paeffico b acia la costa del Caribe.
Much os salvadoreI'lOs se traslada ron a la costa n one de H ond uras, y cie ll '
109 de nicaragLlenses se desplazaron a las plantaciones bananeras d e Cos-
ta Rica, atrafdos p or los sal arios re lativamente altos que ofreef an las com·
paiHas ban ane ras.
Los e mpresari os justificaban la impo rtaci6 n de negros con el a rgu·
mento de su fortaleza fisica y su resistencia a las enfermedades tropicales,
como tambie n por su experie n cia en la actividad banan era. Sin emba rgo,
Ia presen c ia de estos trabajado res ceca tensiones sociales )' raciales, pUJ~
que babl aba n ingles y, a me nudo, ocu paban pucstos d e categorfa inte r·
rned ia en tre los trab~ adores ce n lroan1cricanos y los funcionarios de mas
a lto rango de las empresas.
EI mayor contingente de trabaj adores de las pl a ntaciones estaba con s·
tiluido por los obreros agrlco las . Estos realizaban func iones diferentes,
sumamente especializadas. Uno, trabajaban en la construccio n y cuidado
de las zanjas de dre naj e, otros se enca rgaban d e chapear )' deshija r las
plantas, d e a punta lar las con varas y d e a plicarles soluc ion es para eI CO il·
tro l de las pl agas y e nfermedades. Los «corteros" se e ncargaban d e corta r
los racimos de ]a planta. mientras a los <~junteros» les correspondi3 reci-

173
ILUSTRACI6~ N. 2R. TRAB.AJADORES BANANEROS DE LA PARIS1UNA BANANA COMPANY
Trabajadores de la cornpaflfa Parismina Banana cargando racirnos de banana en el ferrocarril
de la Northern Railway Company, en e lli toral caribe de Costa Rica. La fru ta era embarcada ell
puerto Lim6n con destino a los Estados Unidos.

birlos sobre sus espaldas y llevarlos hasta las mulas, que eran conducidas
por los «muleros~~ hasta los vagones del ferrocarril. Ahf los racirrlos eran
acomodados por los estibadores.
Los trabajadores bananeros eran organizados en grupos denolnina-
dos cuadrillas, dentro de los cuales se desarrollo una mayor comunica-
cion y solidaridad. Como todos dependian exclusivamente de sus salarios
para vivir y las condiciones de trabajo dejaban mucho que desear, los tra-
bajadores dieron grandes luchas por conseguir reivindicaciones, como
verClnos ITlaS adelante.

Las campanias bananeras y los prvductores locales

El control sobre las exportaciones bananeras ejercido por las compa-


fiias fruteras estadounidenses actu6 como un monopolio en Guatetnala y
Costa Rica, y como LIn oligopolio en Honduras. Los racimos que adqui-
rian de los productores locales y los que producian sus propias plantacio-
nes eran vendidos, en su totalidad, en el mercado norteamericano.

174
LA VIDA EN LA PLANTACION BANANERA
EN LA LlTERATURA

Las cond icio nes de vida de los trabajadorcs de las plantac iones
bananeras han servido de inspiracion para obras con un fllerte con-
te n ido de protesta social. Entre elias destacan la lIamada «trilogia
del banano », dellanreado escritor f(uatemaiLcco Miguel Angel Astu-
rias, las nove las Vie nto Fuerte ( 1949), EI Papa Verde (1950) Y Los
ojos d e los enterrados ( 1960) . La nm·ela Mami ta Yunai, de l costarri-
eense Carlos Lu is Fallas, cscrita e n 1940, es una obra de caraetn
testimo nial. Prision Verde, del hondureiio Ra mo n Ama)'a Amador,
fue ed itada e ll 1950. De esta (liLima proceden los sigu ie n tes parrafos:

«EI tiempo tra nscurda y la vida de los campesinos empeo-


rab a. Crudo, como pocos aiios, lIego el invierno . Sob re el valle ,
continua e impertinente caia la lIuvia. EI cielo, antes diafano
con su expectacion triunfal de luz, ahora estaba gris yembota-
do po r un cortinaje d e nubes. EI «viento abaj o » azota ba los
banan ales y al rozar la pie l d e los hombres produda escozor.
Las agu as del Aguan se to rnaron barrosas, cole ricas, y se despa-
rrama ron po r las anehas playas amenaza ndo inundar las plan-
tacion es de «EI Bajo». Los carre te ros y los eamin os se convirtic-
ron e n fangales y atascad eros, como para im pedir eI paso d e
tracto res, bestias y hombres. Muchas labores fueron paraliza-
das d ej a n do a centenares d e trabajadores con los brazos cruza-
dos. So lame nle prosiguie ro n los chapeadores; los «venene ros»,
en los ra LOS que paraba la lIuvia; los corteros para abastecer d e
«oro verd e» a los trenes que iban al puerto d o nde atracaban
los b arcos de la Compaiiia; los «cusucos», rep arando las vias
ferreas; y los puertos, muy ave riados por la estacion lIuviosa.
En los campos, todos los d esempleados qued a ban sin reci-
bir salario, vie ndo pasar las horas )' los dias con ojos de pesa-
dumbre , maldicie ndo e l chubasco , soportando las nach es te-
diosas y terribles, sin abrigo, a te ridos par «las h e lad as», en aque-
lias cua rtos sin mas calefacc io n que la producida p or sus cuel~
pos. Aun mas te rribles eran las n oches en los cusules sombrios,
con la humedad de la tie rra y el viento entrando libre por las
pared es de pape!. Y no pocos campenos qued aban e n los co-
rredores d ando la amarga se mej a nza de canes vaga bundos. »*

* Ramon Amaya Amador. Prisi6n Verde. Universidad Nacional AutO-


noma de Honduras, Editorial Universitaria, 1990, pag. 143.
En Ho n d uras, la mayo ria d e los p roduclores particulares e ran n acio-
nales, aunqu e tam bien habia a lgun os norte am e ri can os , ingleses y Ii-an cc-
ses. En Guale lnala la situacio n e ra silnilar, en tan to que e n Costa Rica, la
mayor pa rte d e los peque n os prod ucto res e ranj am a icanos, los pro ducto-
res media n os, costarricen ses, y h abia algunos mas gran d es, d e origen n o .~
teaJneri can o )' e uropeo.
Las re lacio nes e nlre las co mpaii.ias bananeras y los producto res loca-
les eran reguladas por comratos de compra y vem a, cuya duracio n solfa
ser de dos y hasta tres arios. Aunque el formato d e los contralOS e ra se me-
jante p ara las dive rsas compa.iias, h abia notables di/erencias en su ej ecu-
cion. La UFCO se caracte ri zaba po r su intra n sige ncia, mie nlras la Cuya-
mel y la Vaccaro actuaban d e modo mas pate rna lista.
En los conlratos, las compariias bananeras se comprometian a adqui-
rir lOda la pro duccion d e fruta d e primera calidad, d e la variedad «Gros
Micheh>. EI productor, por su p arte, debia esme rarse e n el cuido d e sus
propias planlaciones, y permilir que fueran inspeccio nadas periodicame n-
te por fun cio na rios de la compa i'iia_ Los pre cios de compra d e la fruta
eran frjado s por la UFCO , y se r via n de modelo a las o tras empresas. Antes
de 1920, un racimo de prime ra clase -los que le n ian nueve man os 0
mas- va lia Lln os lre ima centavos de dolar, y, d espues d e esa fech a Ilego a
cincuenta ce ntavos.
Las re lac io n es emre las companias y los pro dLlctores parti cul ares
[ueron mLly conflictivas, pues los inspectores de las companias actLlaban
de man e ra muy arbitraria a la ho ra de aplicar los crite rios de calidad. A
menudo la fruta e ra rechazada, co n e l argum e n to d e que no e ra de p ri-
mera. Pero , e n rea lidad, la compra a los productores estaba dete rmin ad a
por la prodLlccion e n las plantaciones de las compa nias y por el co mpor-
tamiento d e la d emanda en e l me rcado norteame ri cano. Solo se adquiria
banano d e los productores inde pe ndiemes para solventar faltantes. EI
rechazo constante de la fnlta era tam bien una tac tica para obligar a los
finque ros indepe nrlientes a ve nd e r sus plantacio nes a las cOlnpanias trans-
nacionales.

Comercializaci6n

Origin alme nte el banana era transportado e n racimos (hoy dia se


exporta e n caj as) _Una vez que los vagones de ferrocarrililegaban al pue r-
to de emba rque, los muelle ros se e ncargaban de descargarlos y colocarlos
en una maquina, que los trasladaba a las bodegas d e l buque, donde los
estibadores tra laban de aprovechar e l espacio d e la mejor man e ra_ La
fruta era acomodada de acuerdo con su calidad.

176
Hasta 1916, Costa Rica fue el principal exportador de bananos del
area. En 1913 sus exportaciones alcanzaron la cifra record de mas de II
millones de racimos. A partir de esa [echa Honduras comcnzo a despla-
zarIa y, en 1929 (su mejor ano), logro vender mas de 29 millones de raci-
mos. La actividad bananera costarricense empezo a decaer a partir de
1914, debido al agotamiento de las tierras dellitoral caribc, ocasionado
tanto por la explotadon intensiva como por la difusi6n del «mal de Pana-
ma», enfermedad fungosa que ataco las plantaciones.
La actividad decayo en los restantes paises de la region como resulta-
do de la depresion mundial. Solo en Honduras el banana continuo como
principal rubro de las exportaciones. En cambio, en Nicaragua y Guate-
mala se mantuvo en un segundo nivel, detnis de las exportaciones cafeta-
!eras. En Costa Rica, durante algunos anos de la dec ada de 1910, los in-
gresos obtenidos por las ventas de banana sllperaron a los de las exporta-
ciones cafetaleras.

Significado de la actividad bananera

La actividad bananera tllVO un efecto limitado sobre la economia de


los paises del istmo, debido al aislamiento geognifico de las plantaciones.
Ademas, los gobiernos y las elites politicas cedieron a las companias [rute-
ra, gran des extensiones de tierra, en su afan por activar ellitoral del Cari-
be e incorporarlo a sus respectivos territorios.
EI impacto economico, social y politico del cultivo del banana fue
mas notorio a nivellocal y regional que a nivel nacional , porque los ferro-
carriles y los bananales transformaron el paisaje rural del litoral Caribe
centroamericano y 10 volvieron rnas uniforme, a la vez que originaron
nuevos patrones de poblamiento y urbanizacion. Ademas, los trabajado-
res asalariados de las transnacionales del banana se constituyeron en uno
de los sectores mas beligerantes y activos de la clase obrera.

OTROS PRODUCTOS

Durante este periodo (1870-1945), la agricultura centroamericana no


se reducia al cultivo de cafe y bananos para la exportacion, sino que tam-
bien comprendia otros productos como el tabaco, la cana de azucar, el
algodon y los granos basicos. Estos ultimos tuvieron particular importan-
cia, pues formaban parte de la dieta basica de los habitantes de la region.

177
No obstante, los granos escascaban en algullas rcgion es y periodos, tanto
por Ia baja d e la prodllccion , como por la perdida de cosechas, ocasiona-
da por inun daciones, sequias, plagas de langostas y OLros facto res natura-
les. Peri6dicamcnle se presentaban crisis de subsi slcncia, 10 cual, para
muchos cam pesinos sign ificaba, ni mas ni men os, que eI hambre.

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ILUST RACI ON NU 29. DEPOSITO DE AzveA R DEL INCENI O SAN ANTON I O. 1898. (Fotogra-
Ha co .·lesla del Insti tt.u o de Investi gac iones Hisluricas de Nicaragua). OUl·ante las lll timas rle-
cadas del siglo X IX, las em presas agrfco las se be neficiaron con la modern izaci o n de 105 me-
d ios de transpo rLc. La fo togra na ITIucsl.ra e l de pOSito de aZllca r de l ing-e nio San Anton io, e n
Cllichigal pa, Nicarag ua.

EXPLOTACI ON FORESTAL

La expl otaci6n de los bosques n atura les para oblener made ras pre-
ciosas [ue otra importante activiclad en el pe riodo. Sin embargo , tenIa un
caracterverdad e ramente d e predatorio, pues, dadas las caracleristicas del
bosque tropical, p a ra obte n er una troza d e caoba, po r ej e mplo, se arrui-
n aban much os arho les de o tras especies que entonces no tenia n valor
comercial. Aunque se di ctaron las prime ras leyes para evitar la d estruc-
ci6 n de los bosques, los empresarios macle reros hicie ro n caso o miso de

178
e lIas. La expo rtaci())) de maderas de la costa caribc de N icaragua rue un
rubro import anlc de las exportacio nes de ese pals.

A CTlVlDAD MINERJ.\

La actividad mine ra fue muy sig nificativa para Honduras, y tuvo un a


importancia me no r para la economia de Nicaragua y la d e Costa Rica.

La eX/llotacion minera en Honduras

En las d ecad as d e 1870 y 1880, lI egaron a Honduras mineros prove-


ni e ntes de los Estad o s Un idos y d e vario s paises de Euro pa, con el fin d e
e xplotar yacimi e ntos mineros. En pocos anos apareci c ro n ullas cien ( 0 111-
paiiias, llluchas de las cuales tuvie ro n una vida efim era, de bido , entre
otras razon es, a las oscilaciones inte rnacionales de los prccios de los me-
lales preciosos, a espe culacion es finan cieras. y a los riesgos excesivos a SlI-
midos por a]gun as enlpresas al abrir nuevas minas y apli car tecnologias
no vedosas.
EI Preside nte de la Repllblica, Marco Aurelio Soto , visualiz" la activi-
dad mincra como la base sobre la e Llal se Illontarfa cl desarrollo futuro
de l pa is, po r 10 que e lmismo sc a p res ur() a aelguirir la mi n a d e SanJua n-
ci to , cerca de Tegucigalpa. Com o Olros libe rales de la e poca, SOLO crd a
e n las ventajas d e abrir eI pais al capilal cXlranje ro. En 1880 se fund o la
etllprcsa Inin era mas fuerte de Honduras, la New York and Honduras
Rosario Minin g Company, con oc ida corno «Ia Rosari o" , de la cllal el Pre-
sirle nte SOlO y su Ministro de Gue rra, e l seilor Glltierrez, poscian la Illitad
de las acciones.
EI gobie rn o h ond ureilo se ca rac le ri zo por la gran libe ralidad d e sus
('onccsione s, e n be ne fi cia de e mpresas eX lranjcras ca paces de in vert ir
ca pitales y de Lra b~jar can tccni eas rnode rnas. Aunquc los principal es in-
g-resos del Estado hon dureilo prove nian de los irnpuestos a las illlporta-
[ iones y export.ac io ncs, las cOlnpaii ias mineras fu eron exoneradas de l pago
de dercchos. SOlU , ademas, cxinlio a los mincros del se rvi cio militar.
La compania mine ra Rosari o recibi6 Ulla co ncesio n de 1:16 kill:! de
lie n'as en la regio n central del pais. Durante sete nta y cnatro atlaS CXpl OlO
las minas de San Juancito, rico yacimie nlO de oro y plata. de donde o btll-
vo alrededor d e seis millones y medio d e toneladas d e l min e ral , la ma),or
parte del cual e ra exportado a los ESlados U nidos, p or el puerto de Am a-

179
ILl 'STRAU Ol' N!..! :10. Pl lFBLO [>'.fI NERO DE SAN JUAK <:ITO . El pueblo de Sa nJuan cilo rue d
centro de ,Kli "ida(\('s de I ~ Rosario Minin g Company, la c mpresa lIl ~i s podt' msa de Ins qU('
(:'xplolanm Ins rcc ursos minerales de J-Ion<iunl s.

pala, en el Golfo d e Fonseca. De esas exporlacioncs c l pais obtuyo magros


beneficios, pues no fue sino a panir de 1940 cuando ~da Rosario :-:- comen-
z6 a pagar lin impllesto de 7% de sus ganancias netas.
A principios de 1930 "Ia Rosario » daba empleo a unos I 300 lrabaja-
dores asalariados, cantidad que disminuia cuanda las actividades de la
empresa sc veian a!te radas por los dislurbios politi cos . La mayor parte d e
los trabajadores no especiali zad os e ran hondurdi os, aunque habia algu-
nos salvadoreiios y nicaragt.. enses . En calnbio, la mana de obra especiali-
zada estaba cOlnpuesta por trabajadores ellfope os y norteall1ericanos. Los
salarios de los ex tranjeros eran mucho mas altos que los de los lrabajado-
res locales. Pe ro aun asi, estos (dtifnos eran altos, comparados con los que
se pagaban e n e l resto del pais. Ademas, «la Rosario ) d io algunos incenli-
vos a los trabajadores, como ali me ntos, habitaci6n, hospital y escuela. No
obstante , 10 inve rtido en este rubro no era lTIucho , si se compara con los
altos ingresos obten idos por ]a compania.
La activiclad m inera requiri 6 d el mejoramiento d e los caminos y con-
tribuy6 a crear un seclor d e tran sportes; estimul6 la ganaderia y olras
aClividades conexas, como la eXlracci6n de maderas y d e sal; favoreci6 ]a
fabricaci6n de candelas; en fin , in centivo e l come rcio local, especial me n-
le de me rcandas importadas. Entre 1890 y 1910, la venta de plata y oro

180
ocup 6 el primer lugar de las exportaciones de Honduras, y luego, hasta la
Seguuda Gu e rra Mundial, rue el segundo rubro de las exp0rLaciones,
despues del banano.

Actividad rninera en Nicaragua

En Nicaragua, la lnineria del oro fuemas importante flue la de la


plata. En la dec ada de 1860, la principal empresa minera era la Foreign
Land and Chontales Company, de capi tal brit{lI1ico. En las dos ldtimas
di,,"rdas del siglo XIX, cl capital britanico rue poco a poco dcsplazado por
las invcrsiones norteamericanas. Estas alcanzaron los mas altos niveles en
1£1 clccada de 19;:)0, cuanclo <::'1 n~gilnen de Anastasio Somoza estimu]{) y
g-arantiz6 la inversi6n extranjera. En consecnencia, comenzarOl1 a explo-
tarse minas en el Atl:ultico y. en las que ya existian en e1 nOfte, empezaron
a utilizarse tecnicas In;cl.S rnodcrnas: metodo de cianuracibn para rccupc-
rar elora de la broza, maqu in as trituradoras de mayor capacidacl y uso de
Ia cnergia electrica, que prodl~jeron rendinlientos mas altos.
La baja clensidad de la poblaci6n del pais, la lejania de los centros
mineros, las dificu ltades de las cotnunicaciones y los conflictos rnilitares
afectaron scriamcntc la mincria ni caragiiense. La fa.lta de mana de obra
se solvent6 durante la d ecad a d e 1930 , porque las compal'iias ofrecicron a
los trabajadores altos salarios y otras ventajas, C0 1110 viviencia, escuela, agua
potable , cOlnisariato y luz electrica. Asilnisillo se IlH:joraroll los medios de
comunicaci6n .
Como resultado de las mejoras introducidas en el decenio anterior,
en la d ecada de 1940 e l oro se convirti6 en el principal producto d e
exportaci6n de Nicaragua. Sin embargo, el impacto de la min e ria en la
economia nicaragiiense fue reducido, porque las principales empresas
estaban controladas por cl capitaJ norteamericano y funcionaban como
e nclaves.

La explotaci6n rninera en Costa Rica

EI interes por la mineria habia decaido en Costa Rica como resultado


no solo del temprano auge cafetalero , sino tam bien de las dificultades
propias de la actividad minera, por ejemplo , necesidad de fuertes inver-
siones de capital y dificultades tecnol6gicas. Sin embargo, en el decenio
de 1880 la actividad repunt6. Las minas mas importantes se explotaron
en la «Sierra Minera» , en tres zonas bien delimitadas: Abangares-Tilaran ,
Montes de Oro y los Montes del Aguacate. El capital nacional inici6 Jas

181
inversion es, pe ro se di o un proceso de co nce ntracio n en man os de e m-
presas extranje ras. inte resadas en desarro llar sus activiclades e n las dos
prime ras zonas arriba rn e ncio nadas.
Los e mpresarios nacionales que daron en desve nl~a para compe tir
con las co mpaliias no rteameri ca nas, entre las cuales destacaba la Abanga-
r es Gold Fields, control ada por e l m agnate de los ban anos y los fe rrocarri-
les, Minor Ke ith. La Aba ngares di sfr11l6 de gra ndes prerrogalivas, como
p o r ejemplo la con cesi6n d e '10 000 hectareas d e tie n·as, y el uso, a p e rpe-
tuidad , de las agu as d e los rios Veracruz y Guacim al. En este tlllimo Ia
co mpaiiia co n struy6 un a planta electrica. EI uso d e la e1ec lri cidad y de
nuevas tccnicas, sumado a la importaci6n de rn aquinas modern as. red un-
d 6 e n un aumento de la capac idad de procesamie nto d e min e ral. Los
empresarios n acion ales no plldieron introducir esas mejo ras por 10 que
quedaron en fran ca desve ntaja.
Hacia la d ecada de ISSO las principales zo nas min e ras se ha!laban
praclicamente despo bladas. Pe ro p oco a poco la poblaci 6 n aum e nt6 , con
la !legada de migrantes -costarrice nses, hondure!'lOs y ni caragiienses-
atra idos por la posibilidad d e con seguir lrabajo en las minas, 0 de d esa-
rro llar ac tividades agrico las e n las cercanias de los distrilos min e ros. Los

II.1ISTRACIO N N!..' ~11. TEt\'II'LO DE MI N ER".-\.. (;l':\TEMAL.l,. . I.as di les ct'mroa meriC;l llas
tenfan gu stos clal'am c nte eurupeizalHes, lc ndcllcia <lilt" Sl' llIostrb e ll c1 esti lo arquite ctlmi-
(0 ne la Cpot'a . La iluslrac ib n m UC Slr<l cI Te mplo de t\1illcn ·a. CII la Ciud ad de G ua tc ma la.

182
salarios pagados a Ius obreros de las minas pracli came ntc duplicaban
a los que pcrcibian los jornaleros de las zonas cafelaieras. Sin crnbargo ,
ese trabajo tambi e n ten ia sus desvent,~jas. Por un lado , los precios de los
productos aliln enticios cran Inllcho mas elevados en las zonas mineras; y
por otro, las jornadas de trabajo e ran largas y agotadoras y la mortalidad
e levada, debido a accidentes de Lrabajo y a enfermedades propias de la
act.ividad.
EI oro de las min as era exportado, en barras, con destino a los Estados
Unidos, desde puerto Limon. La produccion min era tuvo sus Inejores
anos en las dos primeras decadas del siglo XX, cuando ocupo el tercer
lugar en las cxportacioncs d e l pais, despues del cafe y del banano. En el
dccenio de 1930 sufri o las consecuencias de la depresion economi ca, y
paso a ocupar e l cuarto lugar, supe rada por el cacao. Los cfectos de la
depresion [ueron tan profundos, que la compania Abangares dej6 de fun-
cionar en el aiia 1934, can el argumenta de que los yacim ientos estaban
agotados y sus operaciones ya no eran rentables. No obstante, la actividad
se mantuvo hasta fines de la Segunda Guerra Mundial, e n manos de coli-
galle ros y de pequelios concesionarios.

SOCIEDAD

EI auge de la agricultura de exportacion provoco un cambio de las


estructuras sociales centroalnericanas. En los paises cafetale ros, las clases
dominantes emergentes estaban integradas pOl' los grandes linqueros, los
beneficiadores y los exportadores del grano. Tambien socios nacionales
de companias extranjeras y prominentes abogados ligados a los intereses
de las transnacion ales bananeras 0 de los transportes , formaban parte de
los sectores mas alLOs de la sociedad.
En las ciudades, la bonanza de las exportaciones provoco una mayor
especializacion y division del trabajo . Asi, e mergieron nuevos grupos me-
dios, integrados por empleados d e l comercio y burocratas. Sin embargo,
su nllmero era aun muy reducido. En e l agro, tambie n eme rgieron gru-
pos medios, de campesinos acomodados.
Los sectores subord inados eran los mas numerosos. Estaban compues-
tos por personas de recursos limitados, minorias etnicas y pequenos pro-
ductores directos. Estos grupos desempenaron un papel importante en el
proceso de mode rnizacion liberal, pues a las restricciones y exigen cias d e
quienes ocupaban posiciones privilegiadas, respondi e ro n mediante diver-
sos mecanismos de resistencia y de adaptacion.

183
O&rervs, artesanas y proletarias de enclave

Los ar tesanos y obreros urban os -alball iles, carp interos, sastres, tipo-
grafos, zapateros- los proletarios de los enclaves bananeros -obreros
de p la ntaciones, ferroca rri les y mue lles- y los mineros, con stitufan un
min imo porcentaje de la poblaci6n econ6m icamente aCliva de Centro-
america, pero eran las minorias mas combativas.
Los obreros y artesanos urbanos su rgieron en un lento p roceso. Las
fabricas eran pocas -de cemento , bebidas, textiles, calzado y tabaco-
pO l' 10 q ue p redominar o n los pequ e n os tallercs, las man u facturas y e l tra-
bajo a d o micil io. Incluso, lIegar a se r obrero 0 artesano e ra percibido
como un a for ma de ascenso social, e n re lacion con cI agobi an te lrabaj o
en e l campo.
La vida era mucho mas d ura p ara los trabajadores de los enclaves ba-
n ane ros y mine ros, a quienes afecta ba e l desplazamien to hac ia zonas cali-
das e insa lubres, y e l desgaste fisico y mental provocado por las con d icio-
n es de tra baj o y los accide ntes la borales. Los a ltos sala rios que pe rcib fan
no eran mas q ue u n a van a ilusi6n. Los p ro lelarios d e los e nclaves banan e-
ros tuvieron difi cultades p ara constituirse e n grupo , n o so lo por su cam-
bi o co nstante d e do micilio, sino ta mbien por SLIS dife re ncias e tnicas y c lll-
turaies, las cuales ca usaro n desavene ncias e ntre e llos.

Lenguaje de clase, identidades y culturas

Una form a cl ara y simple d e conocer si los secto res subordinad os te-
ntan concien cia de la situ acion e n que vivian, es anali zar los vocablos que
em pleaban pa ra referirse a sf mismos. Hasta fines de l siglo XIX n o se d is-
ting ufa c1ara me n te e ntre el asalariado y el pa tro n. Luego, bajo la influe n-
cia de ideologfas e uro peas - en especia l del a n arquismo y e l com unis--
m o- se come nzaro n a lIsar, de man e ra mas precisa, los te rminos o brero
y c1ase obrera, p ara designar a los traba,jad ores desprovistos de m edi os de
produccion. Yya p ara la d ecada de 1920 existia una conc ie ncia mas clara
acerca d e la situ aci6n de los ob reros.
Entre los tra bajado res urba n os existia n j e rarquias po r e dad y po r sexo.
Por tanto, los aprendices y los joven es estaban subo rdin ad os a los mayo-
r es, y los traba,j os d esempe ll ados por mlu e res (lavande ras, costure ras,
e mple adas domesticas, vivande ras, pure ras) se conside raban infe riores y
e ran peo r re mune rados que los de los varo n es. Tam b ie n los o fi cios se
ha ll aban j e ra rquizados, pues po r ejemplo la tipografia, la e baniste rfa y la
sastreria e ran tenidos en mayor consideracio n que otros.

184
Las ciudades de Cc ntroamerica albergaban un serLor de gente pobrc
dedicada al trabajo ocasional y a oficios men ores, como ca rrctoneros, car-
boneros, hojalatcros, vendedores de me rcados y zapa teros remcndoncs,
entre o tros. La mendicidad, la prostitucio n , la drogadiccion y la dC\in-
cue ncia fonn aban pan e de la realidadurbana.
En los enclaves tambien existian las j e rarquias. Los trabajad o res ferro-
\'iarios se e n con traban e n un nivel supe rior al de los obreros portuarios, y
eSLOS, a su vez, se hallaban sabre los prole tarios agricolas . La e tnia actu()
como un elemento diferenciador y co nflictivo entre los trabajadores d e
los en claves. Las co mpanias extranje ras supieron sacar provecho de los
prejl1icios raciaJes, de viejo arraigo entre los centroarn ericanos. Los traba-
jadores negros d e origen antillano a me nudo desempenaban puestos d e
mando, como vigil antes y supervisores d e los obreros locales. Esto acre-
ce nto las denunc ias por maltrato y los co nllictos <'tnicos. En o tros casos
rec ibian salarios mas bajos y, presio n ados por las compaiiias, actuaban
como rompe hue lgas 0 esq uiroles .
Las politicas estatales tambien ac rece ntaron los sentimi e ntos racistas.
En Honduras se restringio el ingreso de trabajadores n egros, y, en Costa
Rica, a los negros de o rigenjama iquin o se les nego la ciudadania, hasta e l
ano 1948.
La conllictividad <' tnica en los e nclaves bananeros abarco tambi e n a
los indigenas, cuyas tierras fueron usurpadas, y a los ch inos. Estos, por 10
ge n e ral inmigrantes ilegales, fueron some tidos a condiciones de trabaj o
infrahumanas.
En el mundo urbano, paulatin amente se [ue conformando una c ultu-
ra «plebeya», la cllal al miSlno tiempo que expresaba conciencia de Sll
posicion subalterna, compania los prejuicios bacia los indigen as, propios
de la cnltura oficial. Asimismo, ma nifestaba cierto sentimiento de orgullo
por los trabajos de los obreros y artesanos, pero asumia com portamientos
que no eran aprobados por otros grupos, como vivir e n union libre, pro-
cre ar hijos fu era de matrimonio, inge rir Ii cor y practica r jnegos de azar.
Los obre ros y los artesanos, influe n ciados por la ideologfa liberal , con-
fi aron en que la educacion era un a via para la superacio n individual y para
la e mancipacion social. En consecue ncia, procuraron abrir escuelas de al~
tes y oficios, d rculos de estudio , esc uelas nocturnas y universidades popu-
lares . En los ta\le res era [recnente la lectura de periodicos, e n voz alta, para
mantener inform ados a los obreros d e cuanto aconted a e n el mundo.
La cultura popular tambien d esarrollo sus propias form as de ocio y
e ntretenimiento: flltbo l y boxeo entre los obreros urban os, beisbol entre
los proletarios d e e nclave. EI teau'O y, posteriormente , e l cine, fueron dis-
frutados por los obre ros. Los trabajadores aprendieron a discriminar en-
tre tiempo d e tra bajo y tiempo d e ocio. Sus ratos de esparcimiento eran

185
propicios para com partir inquietudes. Entre los lrab(:~jadores de (, llcla\"(-,
existfa la idea de que Sll situaei6n e ra tran siloria Y flu e, pOl' tanto. alglill
dia re tornarfan a sus lugares de origen. Para divertirse, y compl e mentar
su alio1e ntacion , se dedica ban a la caza y a la pesea, pe ro los vieios (e l
alcohol, eljuego y la proslilucion ) lI e naban sus ratos de ocio.

Organizaciones y movilizaciones

La idenlidad social y cultural que llegaron a forjar los sectores subal-


tern os fue el punto de partida para emprende r nuevas experiencias orga-
nizativas y aeeion es de grupo. Los sectores de obreros, artesanos Y lrabaja-
dores de los enclaves crearon insliluciones como las mUluales y los sindi-
calOS, y ado ptaron formas de accion colectiva -paros y huelgas- propias
del movimienlo obrero inte rnacional.
Las sociedades de socorros mutuos se basaban en el principio de co-
operacion entre todos sus miembros. Las prime ras mutuales centroame-
ricanas aparecieron en la decada de 1870, e n las capitales de Costa Rica,
Guatemala y EI Salvador. En Honduras y Nicaragua aparecieron en el
decenio sigu iente. Estas prime ras form as de organizaci6n fueron patroci-
nadas por artesanos duenos de talle res, pero contaron con e l aval y la
vigilancia de los gobiernos Iiberales centroamericanos, interesados en in-
cluir a los artesanos en el proyecto liberal de nacion.
El movimien to mutualista se propuso brindar proteccion social, para
10 cual disponia de fondos de socorro mutuo, creados mediante contribu-
cion es obligalOrias de sus miembros. Asi mi smo e n sayaron la organizacion
de cooperativas de con sumo, talleres para brindar empleo y cajas de aho-
rro voluntario. Tambien abrieron escuelas nocturnas, formaron bibliote-
cas, y fundaron periodicos y elubes de recreacion. La moralizacion, el
refinamiento de las costumbres y el aumento de la disciplina laboral fue-
ron m e tas propias de las mutuales. Aunque e n teoria no debian involu-
crarse en la politica, en la pr;ictica las asociaciones mutualistas fueron
arrastradas por e ljuego de la politi ca liberal.
EI periodo de mayor desarrollo de las organizaciones mutualistas abar-
ca los anos comprendidos entre 1900 y 1930. La decada de 1920, en espe-
cial , vio nacer nul11erosas l11utuales y sindicatos, debido a la confluencia
de varios facto res, unos de caracter externo -la Revolucion Mexicana, la
Revolucion Bolchevique, y una mayor influencia del movimiento o brero
internacional- otros de orde n interno, como la relativa ap ertura de los
regime nes politicos centroamericanos. Costa Rica fue e l pais pionero en
el desarrollo del movimi ento, pero en Guatemala fue donde alcanzo ma-
yo r expansion.

186
ILUSTRACION NQ 32. ESTATUTOS DE LA SOCIEDAD DE ARTESANOS
DE GUATEMALA. Las sociedades de arlesanos eran sometidas a!a apro-
bac ion olicial. Tal y como se puede leer en !a portada de sus estatutos,
!a Sociedad de Artesanos de Guatemala cont6 can ,da inrnediata y dec i-
dida protecci6n» de! genera!Justo Rufino Ba nios.

En noviembre de 1911 se celebr6 en EI Salvador el Primer Congreso


Obrero Centroamericano, convocado y organizado pOl' los obreros y arte-
sanos de ese pais.
Aunque la primera organizaci6n laboral con el nombre de sindicalo
apareci6 en Costa Rica en 1914, se puede afinnar que, en terminos gene-
rales, la experiencia sindical se desarroll6 en Guatemala y El Salvador en

187
la dccada de 1920, ell Costa Rica y Honduras en la de 1930, y qu e en
N icaragua, apenas empezaba a surgir a fines de esa decada, bajo la som-
bra del regimen somocista. Hacia la dec ada de 1920 eI movimiento sindi-
cal mas fuerte era el salvadoreno . En Honduras el sindical ismo fue eflme-
ro, debido a la violenta represion desatada contra ese movimicnto por el
dictador Carlas, con el apoyo de las companias fruteras. En Costa Rica,
por 10 contrario, se consolido durante las decadas de 1930 y 1940, con el
apoyo del Partido Comunista, fundado en 1931. En los de mas paises de
Centroamerica el movimiento sindical solo se pudo volver a fortalecer en
las decadas de 1940 y 1950.
Los origenes del mutualismo y del sindicalismo en la region son dife-
rentes. El mutualismo fue introducido como consecuencia de Sli exita en
otras latitudes, y desde el principio recibio el aval de los liberales. EI sindi-
calismo, en cambia, broto como una forma de cuestionamiento del pro-
yecto liberal, apoyado en las distintas corrientes ideologicas del mmimiento
obrero internaciona!' Ambos tipos de organizacion no son excluyentes y,
de hecho, coexistieron durante alglm tiempo. Ademas, algunas mutuales
cumplieron funciones de caracter sindica!. Asi, por ejemplo, las exitosas
huelgas tendentes a conseguir la jornada de ocho hora, que hubo en
Costa Rica en la dec ada de 1920, fueron ellcabezadas por la Sociedad de
Ebanistas y Carp in teros.
Las organizaciones obrero-artesanales centroanlericanas se caracteri-
zaron por su inestabilidad y su debil fuerza de arrastre (los trabajadores
inscritos eran pocos). Aunque 10 mas corriente era que los obreros se
agruparan seglm su oficio, en los centros urbano, pequenos hubo organ i-
zaciones que reunian a trabajadores de oficios diversos. Tambien hubo
algunas instituciones de intelectuales y obreros, las cuales cumplieron con
una importante [uncion cultural.
A partir de 1918, la influencia del movimiento sindical norteamerica-
no sc manifesto en federaciones de organizaciones obreras. Estas trabaja-
ron m<'jor en Guatemala, EI Salvador y Honduras. En Costa Rica el feno-
meno se presento antes, con la creacion de la Confederacion General de
Trabajadores (CCT), pero esla no logro aglutinar a toelas las organizacio-
nes obreras.
El maximo nivel organizativo y combativo fue alcanzado en la decada
de 1920. En 1921 se fundo la COCA (Confederacion Obrera de Centro-
america), con el objelivo de coordinar el movimiento obrero regional.
Hasta su desaparicion, en 1928, la COCA tuvo mas exito en el norte de la
region , porque las organizaciones obreras de Nicaragua y Costa Rica se
mantuvieron muy al margen de ella. En ese mismo decenio, ciertos sec to-
res del rnovimiento obrero se radicalizaron y fundaron organizaciones
in spiradas en la ideologia comunista.

188
Los obre ros de los en claves tuvieron menos oport llnidacles de crear
organizacio nes . Esto se explica no solo por las caracteristicas sociales y
culturales de esos trabajadores. sino tam bien por la represi6 n de las (0 111-
p'1I1ias y d e los gohiernos. En las plalltaciones hanan e ras los trabajadores
ferrocarrileros [ue ron la excepcion, pues, en la dec ada de 1920 lograron
crear ffiutu ales, algunas con caracter nelamente si ndical. Asimismo, algu-
nos mineros e n Honduras y Costa Rica tuvieron SllS asociaciones rnlltua-
Iistas. En tcrminos genera les, los Iibe ra les no aceptaron la organizacioll
labo ral en e l mundo rural.
A pesar de que los trabaja do res d e los e nclaves tenlallll1ayores dificul-
lades para organi zarse , fllero n los prim e ros e n reclirrir a la huelga y al
paro, y emplearon esos instrumenlos de lucha mas frecue ntelncnte que
los trabajadores urban os. Los trabajadorcs ban an e ros reciamaron mejo-
ras salarial es, mejor tralO pOl' parte de los capataces, elim in acion del siste-
ma de pago mediante cupon es y de las dilerencias salariales e ntre ll'abaja-
dores nacio nales y extranjeros. Los lllin e ros, por su parle, demandaron
seguridad laboral y mejorami e nto de las cond iciones sanitarias.
Los panaderos, los r.ipografos y los zapateros fueron los o breros urba-
nos mas com bativos. Sus prin cipales luchas fueron por obtener mejores
salarios y jornadas laborales m,1S redu cidas, por reglam e ntar el trab ,~o
noc turno y e l cierre dominical.
La acci6n colectiva de los trabajadores urhan os contribuyo al paulati-
no proceso de sccularizacion del pensami e nto. La Iglesia tllVO una parti-
cipacion minima en eilnovimienlo obrero centroamerican o. En cambio
las ideas teos6ficas, masonicas y espiriti stas caIaron hondo e nll-e los traba-
jadores. Desde principios d e siglo, las reiaciones e ntre los intelectuales y
e l movimie nto obrero e ran estrechas y co rdiales e n los diferentes p aises
centroame ricanos, con la (mi ca excepci6n de Guatemala.
No obstante ellimitado d esarrollo organizativo de los trabajadores, su
presencia y actividad fueron suficie ntes para desafiar al siste ma oligarqui-
co. Como resultado, a principi os de la d ecada d e 1930 se desato un a fil e r-
te persecuci6n gube rnan;ental.

Poiitica, ideologias y partidos

Los politicos liberales se acercaron a los obre ros y anesanos con e l


objetivo de am pliar su base social. Esta re lacion degenero , algun as veces,
e n un lrato palernalista y, en otras. en una actitud merame nle demagogi-
ca. A cambio de cie nos favores recihidos, los sectores artesanales y obre-
ros quedaban comprometidos a respetar e l orden imperante, aceptar los
valores promovidos por los liberales y contribuir a dar una apari e ncia

189
democr,hiea y popular a los proeesos e leetorales. No obstante, serfa erro-
neo pensar que eran manipulados completamente. Mas bien, los sectores
obreros y artesanos e ntraron en un juego de rclaciones poifticas. de las
cuaies lambie n saearon a lgun provecho.
Aunque las primeras organizacioncs o breras surgieron e n un con tex-
to dominado por las ideas liberales, hacia fines d e la Primera Gu e rra
Mundi al habia grupos de lrabajadores CJ u e se abstenian de parti c ipar en
politica, dece pcionados por la demagogia y la eorrupe ion. En la decada
de 1920, las o rganizacion es obreras comenzaron a ser influenci adas p or
nuevas co rrientes ideologicas, COlno el anarquismo y e l com uni sl1lo. La
introduccion de estas ideologias perm ilio a los dirige ntes de las organiza-
cio nes obreras evolucionar de la subordinacion al Estado a un a mayo r
aulo ll o mia.
Sin e mbargo , las nuevas corrie ntes solo influyeron en una mino rfa de
los sectores obreros. Los comunistas eran pocos y, con excepeio n de los
salvadorCI'ios, tuvieron p roblem as para establ ecer re lacion es con los sec-
tores rurales. En terminos gen erales, la ideo logia libe ral con tinuo impe-
ra ndo en tre los obreros.
Durante las prim e ras decadas del siglo XX, las agrupacio nes o bre ras
centroameri canas recibie ro n un a fuene influ e ncia del sindicali slTIo in ter-
nacional - esladounidense y mexiean o- y de las organi zacion es comu-
nistas. ESla [ue mas notable en Guatemala, Honduras y EI Salvador, que
en Nicaragua y Costa Rica.
EI Estado y las e lites reaccionaron timidamente an te las demandas de
los trabajadores. Se p lantearon la lIamada «cuestion social» y responeli e-
ron con algun as medidas eoneretas, en Ire eli as, la regulacion de la jorna-
da de u'abajo, la legislacion en ma leria d e accidentes d e lra bajo, la re gul a-
cion de las relaciones entre los duenos del cap ital y los trabajadores, y la
creaeio n ele in stitucio nes destinadas a alender los asuntos la bora les. Pe ro
hubo muy p oca apertura politica haeia las ideas radi cales, y los anarqlli s-
las y com llnistas [ueron perseguidos y reprimidos.

SECTORES "O LVIDADOS"

Mujeres

In depe ndie nte me n te d e su e tnia y clase social , durante la epoca li be-


ra l las mujeres ocupa ban un lugar subordin aelo con respecto a los hom-
bres. La acti tud d e estos h acia e lias se caraeterizaba por su ambivalen cia:

190
pOl' un lado se trataha a 1£1 lnl~jer de manera palcrnalista y prott'ctora (por
Slllllisi6n de llladrc, csposa y dueila de casa, cllcargada de lranSlnitir a sus
hijos los valores socialmente aprobados) , y por otm, la vcian con oj os
\'igilantes y recelosos, por Sll supuesta inclinaci6n al pecado.
A pesar del papd de sumisi6n que la sociedadlcs habia asignado, las
1J1ujeres se movilizaron y tllvieron sus prirneras experiencias organizali-
"as. En Costa Rica, el voto femenino flle incorporado en 1£1 Constituci6n
de 1949, despues de varias decadas de luchas de las «sufragist£1s)). En 19~::~
se [undo la Liga Femcnina Coslarricense, cuyas metas principales Cfan 1a
conquista del voto femenino, la prornoci6n de aClividades educativas y de
bicnestar social y la ejecuci6n de canlpal1as antialcoholicas. Aunqllc en
esa organizacion predolninaban las maestras y nll~jeres de los scctores
medios, 1a movilizacion femenina en Costa Rica tarn bien abarc6 a las obre-
ras y artesanas, quienes dieron algunas luchas sociales conCl'etas.
En Guatemala, en 1921, fueron fundados el Centro Femenil y el Sin-
dicalO Cat6lico de Serwras y SdlOritas Em pl eadas del Comercio y Talle-
res, y mas tarde , en 1926, apareci6 la Idealista Fem enil de Jutiapa. Las
experiencias de organizaci6n fenrenina en El Salvador y Nicaragua son
mal conocidas hasta el presente . En Honduras, en 1926, se fund6 la So-
ciedad de Cultura Femenina, con el fin de promocionar la edu caci6n de
la mujer. Ese grupo tuvo una importante participaci6n en la fundaci6n de
la Universidad Popular y en la apertura de centros de alfabetizaci6n, pero
desapareci6 hacia 1933, durante el gobi erno de Carias Andino.
La participacion femenina en Centroamerica recurri6 a fonnas de
accian colectiva directa, como las huelgas y los motines. Las llruj eres cola-
boraron en los movimientos populares: organizaron comedores y sirvie-
ron como enfermeras en acciones de lucha. Talnbien defendieron sus
derechos sociales y politicos, pero no Ilegaron a plantear reivindicaciones
especificas sobre el problema de la discriminaci6n de la mnjer.

Poblacion negra

La costa caribe de Centroamerica se encuentra poblada de negros,


unos de origen colonial, otros descendientes de los trabajadores de las
Antillas Britanicas, especialmente de Jamaica, quienes fueron traidos du-
rante la etapa de construcci6n de los ferrocarriles y de expansi6n de las
plantaciones bananeras. Durante el periodo liberal, ambos grupos com-
partieron la discriminaci6n racial y la marginaci6n regional.
Uno de los prejuicios imperantes acerca de los negros era la supuesta
sumisi6n de estos a los intereses de los patronos extranjeros. Sin embar-
go, en Costa Rica hubo movimientos huelguisticos de los negros, desde la

191
e poca e n que se estaba construye ndo eI ferrocarri l a l Caribe. Estc tipo de
lucha dism inuyo durante la decada dc 1920, debido princ ipalm e nte ados
razo n es: primero , a l pacifismo y la moderaci o n predicados por e l Iide r
negro Marc us Garvey)' su organizac i6 n (Un iversal Negro Improvement
Associa tio n ); segundo, a las nuevas politicas de la UFCO , que pro movie-
ron e l ascenso social de los negTos, e n detrim e nto de los hispanos, califi-
cados de insurni sos.

Indios y camjJesinos

En terminos general es, puede afirmarse que la actitud de los conser-


vadores hacia los indios)' los campesinos ladin os fue diferente d e la de los
liberales. Mientras los prime ros los tralaban co n cieno paternalismo y
respelaron sus ti e n"as y culturas, los libe ral es los sacrificaron en no mbre
del progreso.
Entre 1870 ), 1900 hubo un num ero limitado de rebeliones indigenas
e n Guatemala, EI Salvador y Nicaragua. En eI pe riodo 1900-1930, indige-
nas )' campesinos rec urri eron poco a la accion directa, pe ro desarrollaron
diferentes meca n ismos para adaptarse a los cam bios provocados por el
auge d e las exponaciones y e l contro l estatal.
No o bstante, la situacion de las comunidades se d eterioraba cada dia
mas, porque la presion d emografi ca iba en aume nto, )' se agudizaron los
procesos de empobrecimie nto, la mercantili zacion de la economia )' la
«Iadin izacion " . Cuando sobrevino la d e presion capitalista mundia l de la
decada d e 1930, los proble mas sociales se agravaron con 10 que se genero
una fu e rte agitaci6n social. En unos casos, esta fue con trolada con repre-
sion , )' e n otros, me diante la aplicacio n de refonnas.
En Costa Ri ca Ia base comunal e ra debil )', por 10 ge ne ral , los conflic-
tos agra rios se resolvian por los cauces legales. El prin cipaltipo de con-
flicto hi e el que enfrentaba a los peq uenos ), medianos productores cafe-
taleros co n los beneficiadores), expo nadores. En cambio, e l agro salvado-
reno sufri6 gran d es tensiones sociales a 10 largo del pe riodo libe ra l, las
cuales culminaron con la in surreccion de 1932. Esta fue protago nizada
por los indigenas de la zona cafetal era de occid e nte , prin cipales vfc timas
de l reformismo agrario libe ral. Este movimie nto induyo un e lemento no-
vedoso: la influ en cia d e las ideas comunistas. Bajo esa excusa e l movi-
mien to fue viole ntamente re primido por el dictador Maximiliano Her-
nandez Martin ez. Se calcu la que perdieron la vida d e 10 000 a 30 000
person as, e ntre los cuales se hallaban Farabundo Marti )' olros Hde res d e l
Partido Comunista.

192
La rcsistcncia de los Gl111pesinos e indigenas guatemaltecos lom() cali-
ces legales e ilegalcs. La pcrsislcncia de las comunidades fue muy diGtz
contra eI asedio de los ladinos, el Estado y los empresarios agroexporta-
dores. A menudo sus protestas tralaban de aprovechar eI marcojuridico y
politico que Ies brindaba cI ESlado liberal. Otras formas de resislencia no
violenta fueron el incumplitniento de los contratos laborales, la mentira,
eI engano, cI abandono del trabajo, la huida al monte y la migracion.
Pero tanlbien hubo acciones violentas, como la agresion y el asesinato de
propietarios y administradores de las fincas, cl huno y la violacion a la
propiedad privada.

LIBERALISMO YPODER POLITICO

EI periodo 1870-1930 se caracterizo por eI predominio de los libera-


les. Sin embargo, la dimlmica del poder fue muy compleja durante esos
anos. Factores de orden interno e internacional se conjugaron, de mane-
ra diferente en cada pais de la region y, en consecuencia, el desarrollo
politico de cada uno de e llos presenta sus particularidades.

El ideario liberal: orden y progreso

A partir de 1870, durante tres decadas, los liberales centroamericanos


sc propusicron ordenar los recursos existentes con el objetivo de favore-
cer la incorporacion de estos paises en el mercado mundia!. En su idea-
rio, el progreso se ale an zaria, en buena medida, mediante el fomento de
las ventas al exterior, cI ingreso del capital foraneo y la construccion de
vias de comunicacion modernas. Como resultado, legislaron en torl"O a la
propiedad de la tierra, eI suministro de mano de obra y la centralizacion
del poder, esto ultimo en detrimento de las fuerzas locales, regionales y
de la Iglesia.
EI orden y el progreso, tal y como eran entendidos por los liberales,
tuvieron un alto costo social y politico, porque la mayor parte de la pobla-
cion centroamericana fue excluida de SllS beneficios, y mas bien tllVO que
realizar gran des sacrificios. Tal fue, principalmente, el caso de los indige-
nas y del campesinado ladino, quienes debieron aceptar la abolicion de
las tierras comunales y fueron compelidos a dar prestaciones [orzosas de
trabajo.

193
Orden sin demoaacia

Los liberales intentaron se n tar las bases de un m odelo politico repu-


blicano y co nstilucional, pe ro este no logro a rraigar. EI poder politi co
esluvo e n lTIallOS de pcqueiios grupos conformados por em presarios, Ca-
fetaleros, come rc iantes y bllr6cratas. EI Poder Legisla livo era debil y e l
Ejeclltivo con centraba muchas funcio nes. EI d erech o al sufragio e ra mu)'
linlitado. Votaban solo los varones que tuvieran cierta nivel de in gresos 0
que supieran lee r y escribir.
La brec h a e ntre 10 que Se pred icaba 0 se dccia y la realidad -10 que
se hada- era e norme. La vida polltica estuvo marcada por la vio lac ion
de las garantfas individ uales, las e lecciones fra udule ntas, los go lpes de
Estado , e l continuismo y la dictadura. Para poder controlar eI desconte n-
to social, los gobe rnantes se valie ron d e la fu e rza del cj crcito y procura-
ron su profesionalizaci6n. La policia tambien colaboraba en el mantcn i-
mien to d e l ord en interno, de modo que la violencia estaba a la orden del
dfa.
OU'os mecan ismos para co nseguir la legitim ac ion de las autoridades
en las d e moc racias eran muy restringidos. Asf sucedio, por ejemplo, con
la e ducaci6 n , pues la mayor parte d e la poblacion e ra analfabeta, y tam-
bien con la pre nsa , ya que los diarios eran fu e rte mc nte censurados. Los
partidos politicos fueron coartados por e l person alismo imperante e n la
poli tica, y pOl' e l irrespeto al siste ma eleccionario y a la alternabilidad en
el poder. Esto les impidio asumir e l papel relevante que desempenaban
en otras la titudes.

Reforma juridica

Con e l objetivo de d ar u n ma rcojurfdi co al nuevo orden que se estaba


construye ndo, los libe rales promu lgaron nuevas constituciones y codigos
y d ictaron diversas leyes.
En Costa Rica, en 1870, e l ge ne ral Tomas Guardia ascend io al pode r
mediante u n golpe de Estado. Un ano mas tarde se pro mulgo una nueva
constitucion , la cual daba amplias fac llitad es al Pode r Ejecu tivo , e n d e tri-
men to del Legislativo . En tre 1882 y 1889, los Sllcesores de Gu ard ia inte n-
taron e rradicar e l autoritari smo castre nse, y, con tal fi n , fortal ecieron la
e ducacio n. La refo rma liberal costarricen se dio p rioridad a la secula riza-
cio n del Estado y a la con solidacion de sus institucio nes, 10 q ue provoco
un fuerte con Oicto con la Iglesia. En G ua tema la, la con stitucio n liberal de
1879 convalido e l proceso de secularizacio n del ESl.ado, iniciad o e n 1872.
La carta magna introd ujo la libertad de CUI IO, la sec lliarizacion de la edu-

194
cacibn y de los cementerios, el registro civil, el rnatrirnonio civil y la df's-
amortizaci6n de los bienes eclesiasticos. La constitucion guatemaltcca fue
cl modelo que siguicron las promulgadas cn los anos siguientes en los
demLls parses cen troamericanos.
En EI Salvador, la constituei6n promulgada en 1872 sent6 las bases
legales que propiciaron un cambio paulatino en las relaciones entre la
19lesia y e l Estado. La cdueaeion y los eementerios fueron secularizados, y
sc deeret6 ]a Iibertad de cullo. Adcmas, al igual que sucedi6 cn Costa Rica
y Guatemala, el Coneordaro con la Santa Sede h,e suspendido y losjesui-
ras expulsados del pais en 1872. No obstante, gracias a las estrechas rela-
ciones familiares y amistosas que existian entre los polfticos, los militares
y el clero, la Religi6n Cat61ica sigui6 siendo la oficial, y las propiedades
cclesiasticas no fueron expropiadas. La separaci6n entre la Iglesia y el
Estado se profundiz6 en 1883, debido a una nueva constituci6n que in-
trodujo cl matrimonio civil.
Honduras consigui6 una estabilidad politica relativa durante el go-
bierno del doctor Marco Aurelio Soto (1876-1883). En 1880 entr6 en vi-
gencia una nueva constituei6n, la eual estableeio la separaci6n definitiva
entre la Iglesia y el Estado, e introdujo las garantias individuales, el sufra-
gio direcro y obligarorio y un periodo presideneial de cuarro anos, con
posibilidad de reelecci6n. Durante el gobierno de Soto se suprimieron
alg·unos privilegios de la Iglesia, se secularizaron los cementerios, se apro-
b" el matrimonio civil y la educaci6n pas6 a (star controlada por el Esta-
do.
La reform a del marco legal nicaragiiense fue tardia, dada la cstabili-
dad del regimen conservador que desde 1856 controlaba el pais, gracias
al pacto firmado por los poderosos grupos de Le6n y Granada, despues
de la Guerra Nacional. Fue necesario esperar la lIegada al poder de Jose
Santos Zelaya, apoyado por los liberales de Managua, para que se promul-
gara la Constituci6n de 1893, denominada «la liberrirna». Sin embargo,
los eonservadores ya habian realizarlo algunas rf'formas en Cllanto a 1:.-1
propiedad de la tierra y la explotaci6n de la mana de obra.

Construccion de los Estados nacionales

Los liberales fallaron en su intento de forjar naciones homogeneas.


Dos facto res fundamentales explican el pOI-que de ese fracaso: por un
lado, el modelo agroexportador propici6 e l crccimiento economico de
los paises, pero solo algunos ciudadanos privilegiados se beneficiaron con
el. Por otro lado, las elites centroamericanas eran francamente europe i-
zantes y despreciaban a los indigenas y negros.

195
La formacion del Estado-nacion, en Centroam e rica, rue un proceso
inconcluso . Solame nte en Costa Rica y EI Salvador fLle rc1ativamente ex i-
toso , pues en ambos casas lagro a1canzar las caracterfsticas de proyecto de
cOITIunidad nac ional.

Conflictos interregionales

La paz y la estabilidad politica de los paises centroamericanos se veian


amenazadas por la intromisi6n de los gobiernos e n los aSllntos inte rn os
de los paises vec inos. Los gobernantes establecieron a lia nzas para defen-
derse. Asimismo, e ra frecu e nte que los encmigos politicos se instalaran
en a lglIn pais vecino, con el fin d e organizar un golpe de Estado e n SLI
pais de origen.
Dura nte las decadas d e 1870 y IRRO, Guatemala fue el pais que mas
intervino e n los asuntos inte rn os de sus vecinos. EI poderio guatemalteco
se hizo sentir, sobre todo, en el n orte d e l istmo, hasta la muerte del gene-
ral Justo Rufino Barrios, en 1885 . En 1873, Guatcmala firmo uu tratado
d e fensivo con EI Salvador y Nicaragua, con eI objetivo d e a islar a Costa
Rica y de san cio na r al general G uardia po r habe r a poyado allide r conser-
vador guateInalteco, Enrique Palac ios. Guardia, pOl' su parte, rompi6 re-
laciones con G uate mala y H ondu ras.
La introm isi6 n de Guate mal a en los asuntos inte rnos de los dem{ls
paises de l istmo obedecia a la politica de controlar ]a oposici6n conse rva-
dora guatelualteca que se organizaba e n el exterior, y tambien a los de-
seos de Barri os de llevar adelante una po1itica union ista. Barrios invadi 6
el territorio d e EI Salvador y obligo a l presid e nte Andres Valle a firm ar un
aC llerdo de paz, pOI' medio de l cual cstc se comprometio a dejar e l ca rgo
y a deposita r e l poder ell el d octor Rafael Zaldiva r (1876-1885), ullliberal
moderado.
Zaldivar rue derwcado en 1885. por un levantam ie nto en el cllal par-
ticiparon n o so lo divcrsos grupos populares, sino tam bien la clase eme l~
gente de propietarios ricos, quienes consideraban que el gobernante no
habia respondido adecuadame n te a sus intereses. EI general Franc isco
Menendez, lid er d e la insurreccion, goberno el pa is hasta 1890 , a l1 0 en
que fue d errocad o por la fu erza d e las arm as.
En Honduras, los guatemaltecos intervini eron para que Marco Aure-
lio Soto acccdiera al poder y, e n 1883, impusie ron e n la presiden cia a l
genera l Luis Bogran. AI salir este de l poder, en 1891 , se inicioun pe riodo
de inestabi lidad politica, que se agravo con e l inte rve ncionismo del man-
datario nicaragiie nse Jose Santos Zelaya.

196
H o nduras y EI Salvador [ue ron lo s pa rses m,,, pCljudicad os CO il las
inle rve ncio ncs de sus vecinos Inas poderosos. Costa Ri ca , e n cambio, se
\'io favo recida po r su posicion geografi ca y rn anluvo tin a po litica aislac io-
ni sta en los conflictos del istlllO.

Nuevas intentos unionistas

Los libe rales no abandonaron SlI ideal unio nista, pero para fines del
siglo XIX y las primeras decadas d e l XX , e l conte xto e n que se realizaron
lo s n uevos esfuc rzos era muy difere nte d e l d e 1824.
EI mas se rio intento se dio en fe bre ro d e 1885, c uando el general
Ba rrios se d e clar6 Comandante Militar Supre mo de Ce ntroamerica, dis-
puesto a lograr la union , aunque fu e ra poria fue rza de las armas. Barrios
d ecidi o invadir EI Salvador, pero e ncontro la llIue rte e n el pueblo de
Chalchua pa.
A la mue rte d e Barrios, e l preside nte Ze laya, d e Nicaragua, gozaba de
cie rto lide razgo e n la region. En ese mome nto su pars se enco ntraba en e l
centro de las di sputas entre Estados Unidos e fn glate rra , por la posibili-
d ad de construir una ruta canalera. Zelaya inte nto con seguir fa solidari-
dad d e los d e mas paises centroame rican o s pa ra crear lIna republica ma-
yor. En agosto de 1898 se reunio lin Co ngreso que aprob6 la Constitucion
de los Estad os Unidos de Centro Ame ri ca, co n la participaci6n de Nicara-
gua, Ho nduras y EI Salvador.
E! nue vo proyecto llnionisla fracaso, en tre Ol.ras razones , por un gol-
pe d e Estad o que se produjo en EI Salvad o r. Ade m,\s, Guatemala Ie nego
tod o a poyo , pues su presidente Manue l Estrad a Cabrc ra veia con descon-
lianza la crec ie nte influcncia de Zelaya e n los asunlos regionales.
Dura nte las primeras decadas del sig lo XX se pe rcibi o e l poderfo crc-
cie nte d e los Estados Unidos. La prin cipal prcoc upacion del gobierno
no rtealne ri cano e ra consegu ir que los paises ce nlroanlcricanos vivieran
e n paz, como un medio de protege r las inversio nes norteam e ricanas y de
consegllir la estabi lidad politica en la regio n , po r su importancia ge o es-
trategi ca . E n ese contexto f'ueron firm ados vari os aC Llcrcios de coopera-
cio n , como los Tratados de Washington d e 1907 y 1923 .
Un nu evo y diferente intento se realizo e n 1920, impulsado por e l
Partido Unionista Cen troamerican o. En ese allo se firIno e l Pacto de San
Jose, me d iante el cllal se crco la Fede racion d e Ce ntroamerica, qlle tam-
bie n se frustro.
EI fracaso e n la construccion de la unidad centroa mericana y, al mis-
mo tie mpo, la paulatina consolidacion de los Estados nacionales, son dos
de lo s aspectos mas sobresalientes d e la historia d e l pe riodo.

197
DE LA HE GE MONiA INGLESA A LA NORTEAMERICANA

La dec ada de 1890 marca la transici"n de la hegemonia inglesa a la


norleanlericana. Los Estados Uniclos se hicieron fuertes e n Centfoameri-
ca por medio de gran des inversiones de capital y dc1 regirne n con cesiona-
ri o . Los intereses econ6micos de las (olnp~lI;ias afincadas en Ia region y la
importan cia geoestrategica del istmo di e ron pie pa ra que los gobiernos
de la palencia del norte trataran de m antener la estabilidad poli tica y
militar de los paises de la region a toda costa, ya fu e ra par la fuerza de las
arm as 0 poria via c1iplomatica.

Inversion norteamericana y regimen concesionario

La veniginosa inversion de capital norteam e ricano en Cenlroameri-


ca, principalmente e n la construcci6n de ferrocarriles, plantaciones ba-
n ancras y explotaci6n min era, dejo a los gobiernos de la region sin mayor
capacidad de mani obra h'c nte a las presiones de las poderosas compan ias
extranjeras. Los gobicrnos centroameri canos ruc ron compeJidos a brin-
dar concesiones que terminaron por limilar su inde pende ncia eco nomi-
ca y politica.
Los ekctos del regimen conce sionario flleron fatales para todos los
parses centroameri canos, muy e specialmente para Honduras y Nicaragua,

GRAFIco 5
INVERSION DIRECTA NORTEAMERICANA EN CENTROAMERICA
90 .1897
80 0 [908
'A-
70
Cf)

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-l 40
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10
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Custa Rica El Salvador Guatem ala Honduras Nicaragua
PA is
Fuenle: Hisfo1"ia Gf'neral df CenllYJmnhiw, Tomo IV, pag. 138. F1-<\C..C;O 1993

198
EL CONTRATO SOTO-KElTH

EI Contrato Soto-Keith, firmarlo en ]883 entre e l Gobierno


de Costa Ri ca, rcpresentado por d Oll Bernardo SOlO y Mr. Mi-
nor Keith, rlle eI primero de Sll tipo y sirvio de Illodelo para
acorciar r.onc.esio nes en olros paises. A caillbio del arreglo clcI
pago de Ia deliria y del compromiso rle construir un tramo de
linea (errea, la Compa!lia del Ferrocarril de Costa Rica recibi{,
tierras e n abundanciay e l d e recho de explotar e l ferrocarril
duranle noventa y nueve <11105, y ademas hIe eximida del pago
de dcrechos de aduana. Un a de las c1ausulas mas Iesivas a la
soberanfa del pais es la XXII, que dice :

"EI Gobierno de Costa Rica concede a la empresa ocho-


cientos mil acres de terrenos baldios, l'a sea a las orillas del
ferrocarril (, en cualquicr otra parte del terrilorio, a e1ec-
cion de esta, con todas las riquezas naturales que con ten-
gan, y ademas la faja d e te rreno para la construccion del
ferrocarril y los edificios n ecesarios, y toda c1asc de mate-
riales que para la 111isma obra se necesiten y se e ncuentren
en terrenos baldios en toda la extension de la linea ferrea,
l' dos lotes de los medidos hoy en el puerto de Limon, de
propiedad nacional , para construir mue lles, bodegas l' es-
taciones, todo sin indemn izaci6n alguna.).*

" Archivo Nacional de Costa Rica, Serie Congreso #8 996, fo-


lios 19-20.

don de los problemas de ingobe rnabilidad l' la falta de un poder central


fuerte condujeron a cruentas guerras civiles y a la intervenci6n norteam e-
rieana.

Intervencianisrna de las Estadas Unidas

Despues d e l lin de la Guerra Hispano-norteamericana, que culmino


con eI triunfo de los Estados Unidos (1898), se intensificola presencia de
este pais en el area del Caribe. En Honduras se dio una exu'a!la mezda d e
los inte reses de las com pa!1fas bananeras y d e l gobie rno de los Estados
Unidos, la cllal facilito la intromisio n de ambas fu erzas en los asuntos

199
politicos de esc pais. Pero e1 caso III as grave de illtcrven cionislllo fu e el de
Nicaragua.
EI prcsidente Jose Santos Zelaya dio un paso fillld amental e n la de-
[e nsa de la soberania nicaragliense, al incorporar el territorio de la Mos-
qllitia (1894) Yn egarse a conceder eI dcrecho de extraterritorialidad a los
Estados Unidos, en caso de que se constrnyera cl canal e n Ia ruta de Nica-
ra!?;lIa. Pero en 1903 el gobiemo de los Estados Un idos opto por conSlrlli,'
la ruta ca nalera en Panama.
Ala caida de Zelaya (1909), los conservadores volvieron al pode r con
el apoyo de los Estados Unidos, que desembarco tropas e n la costa atlan-
tica . EI preside11le Adolfo Diaz cumplio al pie d e la letra los Pac lOS Daw-
son, de 1910, por medio de los cuales se creo una Com ision Mixta de
Reclamos, para resarcir a los extranjeros y a los terratenie ntes por los da-
nos causados a sus intereses duranle el regimen de Zelaya. Las rentas adua-
ncras de N icaragua fueron e11lregadas a supervision de los Estados Uni-
dos que , a cambio, se comprometieron a ernitir un prestamo para la revi-
sio n de la deuda pllblica, e l pago de reclamos y la explotacion de los re-
cursos n aturales. El levantamiento de los liberales de Leon , en 1912, de-
semboeo en la intervencion norteam ericana, la eual se prolongo pOl' algo
mas de dos decadas. Durante el decen io de 1920, Nicaragua rue practica-
me11le un protectorado de los Estados Unidos.
La intervencion armada en Nicaragua era un serio problema que cau-
saba tensiones, no solo entre los politicos niearagiienses, sino tambien
entre los paises de la region. En 1925, Iiberales y conservadores lograron
un acuerdo para compartir el gobierno del pais, y Estados Un idos aprove-
ch6 la circunstancia para ordenar el retiro de los marin es. Sin embargo,
e l pacto pronto se rompio , y nuevam e nte, d esembarcaron tropas estado-
unidenses en el puerto de COI·into. En ese contexto surgio la figura de
Augusto C. Sandino, quien salio en defensa de la soberania de su pais.
La lucha librada por los sandini stas fue la mas val iente y abierta repul-
sion a la politica intervencionista de los Estados Unidos e.n Ia re.giOn. San-
dino plante6, por primera vez, el problema de la sobe rania y la dignidad
de Nicaragua, y lIamo a participar a los seClores populares. POI' eso su
gesta d esperto simpatias a nivel internacional.

Politica exterior de los EStados Unidos

A partir de 1823, la Doc!J'ina Monroe (<<America para los america-


nos"), dejo cJaramente sentado el principio de que los Estados Unidos no
admitirian la introm ision de las potencias europeas en este continente. A
principios del siglo xx, cuando la h egemonia norteamericana se h allaba

200
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I LUSTRACION N Q 33 . FOTOGRAFiA DEAUG li STO C. SAN-
DI NO. (Folografia cortcsfa del In slituto de Investi gacio-
nes Hi Slo ricas de Nicaragua ) . Auguslo C. Sandi no, «eI ge-
lI e ra l de hombres li bres », ru e eI !icie r de Ull movim ic nlo
popul <lI- que pla n teD, por primcra vez. e l prob le ma d e la
sobc mlllt\ de N icaragua , mCll oscabada pOl' cl inlerve ncio-
nismo d e los ESlados U n ielos.

bien eSlablecida, diversas acciones polfticas y e l interve n cionismo armado


de los Estad os Unidos fueron juslifi cados con arg umentacio nes de car"c-
ler ideol6gico, las cuales mostraban la vigencia de la Doctrina Monroe.
EI presidente Theodore Rooseve lt (1901-1909) inaugur6 la politica
d e l Gran Garrote (<<Big Stick») , es decir, inte rvin o can mano dura en los
paises de la Cu e nca del Caribe. Pero justific6 tales aeeiones con el argu-
mento de que su pals estaba llamado a cumplir una ~( misi6n civilizadora })
e n e l hem isferio occidental y, por tanto, tenia derecho d e intervenir cuando
se presentaran problemas que no pudi eran ser resuellos por los paises
afectados. Este argumento se con ace com o el Corol ario Roosevelt de la
Doctrina Mo nroe.

20 1
ILUST RAC IO NES N!..! 34. SAN DI NO, EL DiA D E SU SODA CON BLANCA ARAuz. (Folografia
co n esia dcll nsti nll o de Ilwesligac ioncs I-li slo ricas de NiGIl-agua ). Mueslra al gene ra l Sallciino
ya BlanGI Aram:, eI dla de su matrim on io ( 18 de mayo de 1927), rodeados de ca mpesinos.

Cuando en 1907 estallo un nuevo conflicto militar, en el cual se invo-


lucraron Nicaragua, Honduras y El Salvador, d e inmediato el gobierno de
los Estados Un idos asumio e l pa pe l d e mediador y los presidentes centro-
americanos fu eron convocados a reun irse en Washington, por parte de
los preside ntcs d e los Estados Unidos y de Mexico. Las con versacio nes
culminaron con la firma del Tratado de Paz y Am istad. De acuerdo con
este tratado, no se reconoccria ningiin gobierno que lI egara al poder por
medio d e un golpe de Estado 0 d e una revolucio n. Tambien se establecia
que ningiin pais podia entrom e terse en los asun tos d e otro. Ade mas se
creola Corte d e Justicia Centroame ricana, para dirimir los conflictos que
pudieran surgir e ntre ellos.
No obstante, la Corte tuvo un a vida efime ra, po rque ni siqui e ra los
Estados Un id os, que avalaron su creacio n , la respetaron. En 1916, Nica-
ragua ced io a los Estados U nidos, a perpetuidad, e l derecho sobre la ruta
canalera, mediante la firma d e l Tratado Bryan-Ch a rnorro. Costa Ri ca,
EI Salvad o r, H onduras y Colombia consideraron que ese tratado e ra lesi-
vo a sus d erech os territoria les y a su soberania, y plantearon un recla-
rno ante la Corte. Esta fall o a favor de los p aises reclamantes, pe ro los
Estados Unidos se n egaron a recon ocer el veredic to. La Corte desapare-
cio en 1918.

202
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La administracion Taft (1909-1913) inaugurola «diplomacia del do-
iar », la cual cvidenc:iaha la fusi6n de los intereses econ6micos, politicos y
estrat<'gicos que orienlaban la politica exterior de los Estados Unidos. EI
objelivo del gobierno de los ESlados Unidos era conseguir la estabilidad
politica en los paises de la regi6n, para garantizar lanLo la inversion de
capitales eOlno la seguriclad de la ruta canalera en Panama. Asirnisrno
buscaba can trarrestar la crecien te influcncia aiemana, que resultaba alnc-
nazadora a sus in tereses.
Los Pactos de Washington (1923) reiteraban los pun tos esenciales del
Tratado de Paz y Amistad de 1907, pero su trascendencia rue muy limita-
da. En realidad, la disminucion de los conllictos interregionales en la de-
cada de 1920 se debio a la presencia militar de los Estados Unidos en
Nicaragua, a una mayor consolidacion de los Estados nacionales y a la
existencia de gobiernos francamente pro-norteamericanos. La relativa es-
tabilidad permitio cierta apertura politica, que posibilito la fundaci6n de
nuevos partidos politicos.
Mas adelante, cuando los dictadores controlaban [uertemente los pai-
ses de la region, Franklin Delano Roosevelt (1933-1945) propici6 un cam-
bio mediante la politica del Buen Yecino, gracias a la cnal ces6 el interven-
cionismo abierto de los Estados U nidos. Sin embargo , las condiciones inter-
nacionales cambiaron desplH~s de la Segunda Guerra Mundial y, en conse-
cuencia, se produjo un nuevo viraje en la polftica exterior norteamericana.

CRISIS EN LAS REpUBLICAS AGROEXPORTADORAS

La econol11ia centroamericana se 10rn6 muy vulnerable a las f1uclua-


ciones de los precios de sus principales productos de exportaci6n en el
mercado mnndial. Hacia lines de la decada de 1920 eran evidentes las
debilidades del modelo de desarrollo hacia afnera. Los precios del cafe
en el mercado internacional cayeron debido al aumento en la oferta, pro-
vocado pOl' las abundantes cosechas de cafe en Brasil y Ja expansi6n de la
caficultura en otros paises de America Latina. EI precio del banano al
detalle disminuy6 paulalinamente y las companias pagaron menos a los
productores locales. Asi, cnando colaps6 la Bolsa de Valores de Nueva
York, en 1929, ya el volumen de las exportaciones centroaInericanas se
habia reducido considerableme11le.
Durante la decada de 1930, los efectos de la depresi6n econ6mica
que afect6 el sistema capitalista mundial fueron enorITleS en CentrOal11e-
rica. Los ingresos por la venla de los productos centroamericanos en el

204
eXlranjero se rcdl~ierol1. Las importaciones lam bien bajaroll y. con e lias.
t;tmbien desce ndi 6 el monto de los tributos percibidos, principal rucntl'
de los ingresos estatales. Los gobiernos de la region hi cie ron ingclltes
esfuerzos por oblcner em prestitos internacion ales. para paliar las dilicul-
tades financieras, pero tllvierotl poco exito. Los escasos (Teditos cons('-
gu idos no alcanzaban ni para cI pago de viejas dcudas.
Ante el agotami ento de las d ivisas y los problemas con el tipo d e cam-
bio, se abandono e l pau'o n oro, que se habia adoptado a principios d e la
decada de 1920 . Costa Rica, Nicaragua y EI Salvador se vieron obligadas a
devaluar sus rnoncdas; no as! Guatema la y Honduras, que sostuvieron la
paridad con c l dalal', establecida an tes de la crisis. Los gobiernos tuvie ro n
quc tornar atras fncdidas, como el co nlrol de cam bios, la importaci6n
selectiva de bien es y e l incremento de los aranccies.
Sin embargo, no rue posible eliminar los d e licit presupuestari os. En
Costa Rica, Guatemala y EI Sa lvador se recurrio a la deuda intern a, pero
como el delicit p ers istia rue inevitable la declaratoria de in cumplimi ento
parcial de la deuda pLlbli ca. EI costo eco nomi co de los planes de estabili-
zacio n fue l1luy elevado y provoco la caida del producto interno bruto
real y per callila.

Crisis social y politica

La depresion econo mica provoco una crisis social y un a reaccion poli-


lica que p usieron e n jaqu e ci modelo o ligarquico liberal que se habia
construido e n los paises centroarnericanos.
Sin duda, el sector mas afectado por la cri sis [ue el caletalero. Aparte
de los bajos preeios del grano, hubo severas reslri cciones del credito, 1'01'-
que los productores e ra n in capaces d e hacer fre nte a S IIS obligacion es. En
co nsecLlcnc ia, mLichos perdi eron SllS propieclades. Para proteger sus inte-
reses, surgie ron pode rosas asoc iacion es de cafe taleros las cuales exigi an
la suspe nsion temporal d e l pago d e las deud as bancarias, la depreciacion
de la maneda y exenc iones tributarias a la actividad. Tambi en intentaron
trasladar los efectos de la crisis a los trabajadores, median le una reduc-
cio n salaria l, pero esto provoco gran descontento social y genera violen-
tas protestas e n diversas panes de la region .
En la actividad bananera, Ia politi ca de recorte de los sala rios tam bien
afect6 a los trabajadores y sirvio de acieate a los movimientos hue lguisli-
COs. Ademas, las compaiiias pagaron me nores pre cios por la fruta co m-
prada a los productores locales.
Los efectos d e 1a depresion pronto se exten d ie ron a otras ram as d e la
ecanomia: la caida de las importacion es peljudi c6 a los trabajadores d.-J

205
comercio, la construcci6n se paraJiz6, los arlesanos vieron disminuir la
demanda de sus producLOs, y los funcionarios pllblicos sufrieron por la
reduction del n,"nero de empleos y la retencion de SllS sa larios.
Los secLOres peljudicados atribuian la mala situacion que estaban vi-
viendo al desacicrlO de sus gobernantes. Por esta razon presionaron a los
gobiernos, y estos optaron por volver a la cocrci6n y a la violencia. Excep-
to en Costa Rica, la dictadura sustitu yo a los gobiernos de aparie ncia dc-
mocnitica. (Sin embargo, alll1 en ese pais hubo cierto autoritarismo). EI
viraje se dio prim ero en Guatemala, don de el generalJorge Ubi co (1931-
1944) se e ncarg6 de acallar todo signo de malestar y oposicion.
En 193 1 lleg6 a la preside ncia salvadoreila, pOl' med io de e lecciones,
e l!ide r populista Arturo Araujo. Este care cia de la aceptacion de las elites
y fue dcrrocado. EI poder fue asumido, entonces, por e l general Maxim i-
liano Hernandez Martinez. quien reprimio violen tamente la insurrecci6n
rural d esatada e n el occidente salvadoreilo, e n 1932. Este dictador termi-
n6 de ganarse el favor d e los cafetaleros tomando med idas que los bene-
ficiaban e n tan critica coyuntura, como la devaluacion de la mon eda y la
mora LOria en el pago de las deudas bancarias.
EI ascenso de la dictadura en Honduras no es una consecuenc ia tan
directa de la de presion como en los paises arriba s6ialados. Cuando la
crisis golpeaba duramente a los paises cafetaleros vecinos, en Honduras
se vivia la ilusi6n d e la estabilidad economica, pOI-que las empresas bana-
neras continuaron expandiendo sus operaciones. Pero las plantac iones
empezaron a enfermar y los precios del banano bajaron. Co mo resu ltado
del conflicto social, en 1932 estallaron las huelgas de los trabajadores ba-
naneros. Al aiio siguiente, tras varios intentos fallidos , llego al poder el
general Tiburcio Carias Andino, apadrinado por la UFCO. Aunque en su
e leccion se rcspetaron los procedimie ntos constitucionales, luego Carias
rompio el orden y goberno hasta 1949.
Los efectos sociales de la depresion lambie n se sintieron en Costa
Rica. La huelga bananera de 1934, conflicto en el cual desempeilo un
papel importante el Partido Comunista, expreso claram e nte e l descon-
tento de los trabajadores bananeros. En cont.rasle, el sector cafetalero
sufrio me nos que en otros paises la carda de los precios, porque una gran
parte d e la produccion provenia de pequenas fincas , trabajadas con mano
de obra familiar. Sin embargo, tam bi e n aume nto el d ese mpl eo, y hubo
recortes salariales y despidos en el secto r publico. En vista de que e l pais
habia desarrollado una estructura institucional mas salida, el resentimien-
to social se expreso por la via e lectoral, votando por e l candidato de la
oposicio n , el abogado Ricardo Jime nez. Este, e1egido por tercera vez (aun-
que no de form a consecutiva), trato de mantener una posicion equidis-
tan te entre las exigencias de los sectores eco nomicos tradicio nales y

206
LA HUELGA BANANERA DE 1934 EN COSTA RICA

La huclga ballarlC'ra de 1934 rue eI mas importame movi-


Inicnto social de esc ano en Costa Rica. Los trabajaclorcs bana-
neros de la United Fruit Company paralizaron sus labores du-
rante 111aS de un Ines. EI Partido COIllunista , fundaclo tres allos
antes, les brindo su apoyo:

~<Los huelguistas 10 que pirlen es que su condici6n sea me-


jorada. Piden un salario IniniIno de seis colones £11 elia, que
es apenas 1a cantidad con que puedc vivirse en esa region
de vida cara. Piden 1a abolicion del trab,~o a dest'~o (por
tarca); que haya medicos y medicinas en cada finea con
mas de diez lrabajadores; que las herramientas de trab,~o
sean a expensas de los patrones (porque en la actualidad
hachas, palas y machetes tiene n que scr comprados por cI
trabajador); que se les pague pnntnalmen te en dinero en
efectivo, sin dejar dias a fondo ; que los precios d e los comi-
sariatos no sean mayores de los corrientes en plaza. AI mis-
mo tiempo los huelguistas rechazan los contratos Cortes-
Chittenden, y piden que la fruta sea pagada al pequeno
productor a cincuenta centavos Oro Americana por raci-
mo, y que se impida las «botazones» d e [rutas que arbitra-
riamente hace la United en perjuicio del pequeno produc-
tor. Estas son en sintesis, las reivindicaciones por las cuale s
luchan heroicamente, en la zona Atlantica, millares d e tra-
bajadores que realizan el mas importante com bale que re-
gistra la historia del 1110vimiento obrero costarricensc». :::

'" Manifiesto del Partido Comunista, publicado en el periodico La


Tribuna, 14 de agosto de 1934. Tomado de Victor Hugo Acuna
Ortega, La Huelga Bananera d e 1934, San]ose, CENAP-CEPAS,
1984, pag.34.

las reivindicaciones socioeconomicas planteadas por los lideres de los


trabajadores.
En Nicaragua, el impacto de la de presion mundial lIego en un mo-
mento de gran inestabilidad politica, debido a la ocupacion norteameri-

207
cana y a ]a resistencia sandinista. EI ascenso al podcr de Juan Sacasa, en
1932, y el retiro de los marines, permitio un acue rdo con Sandino, que
puso fin a la guerrilla. Pero el director de la Guardia Nacional, Anastasio
Somoza, plan eo el asesinato de Sandino, en 1934, c inicio una de las die-
taduras fallliliares mas largas de America Latina.

Salida de la depresi6n

Alinque el sistema capitalista mundial habta sllfrido otras cnSIS, la


depresion de la decada de 1930 rue mucho mas fu e rte y profunda. Los
gobiernos centroamericanos debieron adoptar politic as audaces para su-
perar las dificultades. Una de ellas fue el incumplimiento del pago del
servicio de la deuda externa, aplicada con exito en Costa Rica, EI Salva-
dor y Guatemala. Ast se liberal'On divisas para realizar irnportaciones y
para invertir en la construcci6n de caminos, con 10 cual se dio trabajo a
numerosos desempleados, a un bajo costa.
La devaluacion de las monedas rue un mecanismo utilizado con mu-
cho cuidado en EI Salvador y Costa Rica, para evitar la inflacion y favore-
cer al sector cafetalero. En Guatemala, Ubico se opuso a devaluar la mo-
neda, pero redujo los impuestos a las exportaciones de cafe. Por otra par-
te, los bancos se salvaron del colapso, al operar con gran cautela.
En su conjunto, las medidas tomadas para proteger al sector exporta-
dor favorecieron sobre todo a los caficultores. Mienlras tanto, el sector
bananero escapaba de control, pOl' p e rtenecer a empresas transnaciona-

GMFICO 6
VALOR REAL DE !AS EXPORTACIONES 1928·1945 (PRECIOS DE 1970)
140

120

'"
en
100

'"Z 80
0
...l 60
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...l

::l 40
20

• Costa Rica , El Salvador • Guatemala • Honduras o Nicaragua


Fuente: Historia General de Cenlroammra, Torno IV, p<"ig. ] 37. FlACSO 1993

208
Ics. An te e l agolamient.o de las tierras y la expan sion de c nfermeclades
fungosas, la UFCO aban dono las planlacio ncs d e l li LOral caribe d e Guate-
ma la y Costa Rica y, e n ambos paises, (raslado sus actividades " I Pacifico.
En Honduras)' N icaragua, las plantaciones banan e ras cOJ1linuaroll asel1-
ladas en el Caribe y las exporlaciones d ecl inaron.
Las ventas de aZllcar)' madera tanlbie n se reduje ron , pero no sllcedi6
10 J11ismo con la Inin e ri a del oro. Las divisas o btenidas por la ex portacic,n
d e o tros prod uctos n o tradicionales, com o eI cacao, el aZLlcar y e l a lgo-
don, eran minimas.
La industrializaci6 n por sliSlilucio n de im porlaciones alcanzo 111agros
resultados e n e1 area ce ntroalne ricana , a dife ren cia de 10 que oC lIrria en
otros paises grandes d e America Latina. En realidad, no ex istio una poli-
tica estatal clara que favoreci era la industrializac ion. Sin embargo, paula-
tinamente aparecieron a lgun as fabricas - hilados, cerveza, h arina, zapa-
10S- para satisfacer las necesidades d e un reducido me rcado nacional.
Las reslricciones al comercio inte rregion al y la falta de en ergia e lec trica y
de credito bancario fue ron o tros o bst:iculos que a fec taro n eI desarro llo
industrial.
En cuanLO a la producci6n agricola para el consumo in terno, si hubo
un cambi o conside rab le . Este se debio a l e ncarecimie nto d e las impo rta-
cio nes, a la abundan cia de tie rras y d e ma n o d e obra barata y a la mayor
integracion de los m ercados n acionales, gracias a los progra m as de cons-
truccion d e carre te ras . Asi, la produccion de alim e ntos contribllYo a la
recuperacion econ omica posterior a la d e presion.

Consolidacion del autoritarismo

Los sistemas politicos d e los paises centroame ricanos -con la (mi ca


excepcion d e Costa Rica- evolucionaron haci a fuertes di ctaduras. Esto
se debio a la e liminaci6n de los obstac ulos que antc riorme nte habfan
impe dido la consolidacio n de regimen es totalita ri os . En esos a ll0s, e l as-
censo de la dictadura en Alem ania y el militarismo japones e ran situacio-
n es muy preocupantes para e l gobierno d e los Estados Unidos. Por eso,
mie nlras los Hderes politicos centroame ricanos no consliluyeran una
alnenaza a sus intereses econ o mi cos y eSlralegicos, no le presta ban de ma-
siada importancia a la forma como llegaban al poder.
A nivel interno, las dictaduras debiero n supe rar varios esco llos para
consolidarse, como por ejemplo , la d ebilidad d e l Estado gene rada po r la
crisis fiscal, e l desconte nto social y las d e mandas del sector exportador
para superar la recesion. Tanto la dictadura de Ubico como la de Hern an-
d ez Martin ez se apoyaro n en la profesionalizacion d e las fu e rzas armadas,

209
el usa d e infonnantes, el control d e la p rensa, la il1lolerancia y la re pre-
si6n. Pe ro mientras U bico tuvo dificult ades para sonl e ler a la elite (espe-
cialmente a los ca fetalcros), Hernandez si lagro ganar su apaya.
En Honduras, Carlas Andino aca b6 ca n la oposicio n del Partido Libe-
ral y «deptll'o » cl Partido Nacio n al, que 10 habfa lIevado al poder. Para
conseg uir e l apoyo del ej e rcilO e n say6 alg un as m edidas para profesionali-
zarlo. Ademas , cont6 con el apoyo d e las companias bananeras y e l d ebi l
movimi cnlo laboral ofrcci6 poca resiste ncia.
EI cami no de Anastasio Somola bacia cl pode r fue bastanle dificil ,
debida a la o posic i6n de las el ites con servadora y libe ral a lOlerar e l a rri-
bismo de tan osc uro personaje. Por o tro lado, los ESlados Unidas d emos-
u"aban cie na rcsiste ncia a lolerar gobie rnos inconstilucionales e n ese pais,
donde babfa n inte rvenido tan abie rtamente. En 1936 Somola aleanzo su
o bjetivo: tras obligar al presidel1le Sacasa a dimi tir, renuncio a la direc-
ci6n d e la Gua rdia Nacional y particip6 en un proceso e lectoral con apa-
riencia dem ocnttica . Asi logro co nseguir la bendici6 n nortealnericana.
En Costa Rica, e l gobiern o d e Ricardo Jime n ez tomo algunas m e didas
de bien soc ial, C0 1110 la aprobac i6 n de la ley de salario minimo para los
lrabajado res d e l campo. Tambie n reconocio el sindicato de los lrabajado-
res banan e ros. Pe ro despues lI ego al pod e r Leon Cortes Castro ( 1936-
1940) cuyo gobie rno fue de un estilo mas autoritari o .

Efectos de la Segunda Guerra Mundial

La economfa centroamericana apenas empezaba a re ponerse d e la


depresi6n , cuando estallo la Segunda Guerra Mundial (1939-1945). Du-
rante este largo conflicto, la posicio n estrategica d e Centroamerica y de l
Canal de Panama se traduj o en ayuda economica y militar por parte del
gobierno n orteamericano y en e l fo rtalecimiento del siste ma de colabora-
cion interamericano.
Denlro d e l programa de coo pe racion , se construyo la Carretera Inte-
ramericana, entre Mexico y Pa nama. Aunque el objetivo fundam e ntal
perseguido e ra fortalecer la d e fe nsa del Canal , tam bie n dio un impulso a
la economia d e los paises d e la region.
El estallido de la guerra afecto las exportaciones cenlraamerican as.
En el caso del cafe, el mercado e uropeo se cerro. Entonces el presidente
de los Estados Unidos, Franklin Delano Roosevelt, promovio la suscrip-
ci6n del Acue rdo Interamericano d e l Cafe , por medio del cual se o torga-
ron cuotas e n e l mercado estadounidense a cada pais productor d e l gra-
n a. La sue rte corrida por las empresas bananeras fu e difere nte. Sus bar-
cos fueron requisados por la m arina de los Estados Un idos, con fin es be-

210
lieos. No fll e sin o hasta e l final de la g ue rra, c uando se e mpezo a no rm <1-
lila r e l proble ma d e ltran sporte .
La coyunwra de la g ue rra abrio posihiliclacles para clive rsili , ar las ex-
portacio nes centroamerieanas, porque se CO rlO cl suministro de prodllc-
LOS tro picalcs proclucirlos en Asia para e l me rcarlo norteame ricano. En-
r.onees se cullivo eabuya, caueho y cin cho na, con el apoyo de empresas
transnacio nales y del g obierno de los Estados U nidos, Adcmas, la conce n-
tracio n de tro pas e n la Zona del Canal provoco un 3UJn ento de Ia deman-
da d e frutas y ve rdaras, 10 cual [avoreeio a los productores centroamerica-
nos. Nica rag ua exporto oro y ajonjoli, y EI Sa lva do r co loco algodon yaZli-
car. No o bstante, la econornla de CentroC:1 me rica sig uio dependiendo ,
basicamente , d e l cafe y del banano.
Las inlpo rtaciones decayeron durante la g ue rra, motivo por el ellal
aume nto la reserva de divisas y clisminuyo la co mpe le ncia de los produe-
LOS e xt.ranje ros so bre la produccion loca l. Pe m la industrializacion conti-
nuo sie ndo rnuy modesta, por e l reducido pod e r adquisitivo de la mayor
pa rte d e los habitantes de Ia regi6n , agravado, e n aque llos anos, pOI' Ia
in fl aci 6 n y cI a umento en e l costo d e la vida.

Desafio a la dictadura

~Cual fu e la suerte canida par las di claduras ce ntroan1cricanas du-


ra nte los al1 0s d e la Segunda Guerra' Par a compre nde r 10 sucedido es
necesario anali zar dos [actores: par un lado, las lu chas internas emprcn-
didas pa ra acabar con los regimenes dic ta torialcs; y por otro, la posici6n
as umida por los Estados Unidos, pote ncia qu e vigi laba con celo la sitlla-
ci6 n politica de los paises de la region.
Los caf"e taleros mas poderosos parecian dispuestos a lolerar la diCla-
dura, e n tanto no afectara sus intereses e con o micos. Los sectores campe-
sinos e ra n poHticamenle pasivos, J11ientras que los u'abzUadores banalle-
ros, muy afectados por Ia guerra, si pugnaban po r un cambio politico.
Pe m e n las ciudades habia madurado la concie n cia d e los ciudadan os, y
dif"erentes grupos exigian poner coto a la vio lac i6 n de los derechos huma-
nos y a los [ra udes electoralcs. EI desconte nto surgi6 hasta en los oficiales
rn asjove nes d e los ejercitos, con la sola excep ci6 n de la Guardia Nacional
de Ni caragua, cuyo apoyn a la dictaclura e ra in condi c ional.
La gue rra contrib uy6 a crear conde nda so bre la necesidad de acabar
con las dic taduras, porque los paises ali ados in sistian e n que estaban lu-
chando co ntra la dictadura rascista, en pro d e la d e moc racia. Estsa incon-
gruenc ia d e uno de los aliados, los Estados Un id os, se resolvio cuando
Roosevelt d ecidi6 no apoyar a los dictadores cen tmamericanos, si estos

211
era n alacacios por fuerzas de su propio pais. Ei hecho que convirti6 e i
malestar gen eral e n un verdadero d esafio a las dicladuras [ue la severa
situ acion econ o mica que eSlaha sufrie ndo la mayor parle de la p o blacio n
urbana.
EI fin de la Segunda Guerra Mundia l y e l adve nimicnlo de n uevas
condi ciones inle rnacionaies, marcaron eI fin de un periodo de la historia
centroatnerican a, cuyo legado fue la conslfuccion del Estado-nacion , la
profundizaci o n d e las difcrenc ias entre los paises d e la region y la presen-
cia de los Estados U nidos como polen cia hegemoni ca .
Cajlitula V

DE LA POSGUERRA A LA CRISIS

Los afios comprendidos entre 1945 y 1979 fueron de esperanza y de


h'llstraci6n para los centroamericanos. De esperanza, porque al finalizar
la Segunda Guerra Mundial se vislumbraban posibilidades de aleanzar el
anhelado desarrollo econ6nlico, de realizar reformas sodales que procu-
raran hienestar a los habitantes de la region y de avanzar en el Gunino de
la democratizacion politica. De frustracion, porque los esfuerzos por al-
callzaf tales rnelas no [ueron suflcientes y toparon con escollos que, a la
poslre, se tornaron insuperables.
La creaci6n del Mercado Comun Centroamericano fue el proyecto
mas importante que se desarrollo, con el proposito de transformar la eco-
HOlnla. Adenlas, se intent6 lTIodernizar la infraestrucLura, diversificar las
cxportaciones y crear un sector empresarial mas dinamico y emprcnde-
dor. Pera, no obstante los avances en esos calnpos, la industria creo poco
empleo y la mayor pane de los ingresos que se generaban en la region
proven ian del sector rural.
Durante los afios comprendidos e ntre 1945 y 1979 la sociedad centro-
americana sufri6 carnbios cualitativos, producto de las transformaciones
en el sistema productivo, el crecimiento econ6mico y un marco diferen te
dc relaciones con el exterior. Sin clnbargo, los rasgos propios de las socie-
dades subdcsarrolladas se mantuvieron.
La democratizacion politica se vio limitada, tanto porIa pesada he-
rencia del liberalismo oligarquico (golpes militares, elecciones fraudu-
lentas, partid(lS politicos personalistas, cscaso desarrollo de la socicdad
civil, cultura politica atrasada), como por los problemas internacionales.
EI sistema bipolar de la posguerra, la guerra fria y el triunfo de la Revolu-
cion Cubana (1959) influyeron para que se estableciera lIna alianza reac-
cionaria entre los militares, los empresarios y una amplia mayoria de los
sectores medios.
Esa alianza, que conto con el beneplacito de los Estados Unidos, veia
e1 fantasma del comunismo en cualquier intento de reforma que favore-

213
cicra a los scc tores populares Y Illarg in ados de ]a socie d ad. Como resulta-
do, la represi6n y la violencia aum cn taron, para sofoear los movil11ientos
que adversaban e l orden es tablccido.

ECONOMiA

A principios de la d ecada de 1940, los recursos econom icos centro-


americanos estaban casi in explotados (el 52 % del terrilOrio se hallaba
cubieno de bosques y solo una vigesima parte del potencial bidroeIectri-
co era aprovech ado) . La mayoria de los scis millones y medio d e habitan-
les se concentraba en las tie rras ahas y en las zonas de mayor desa rrollo,
alrededor de las capitaies. La agricultura seguia siendo la actividad eco-
nomica mas importante, pero los nive les d e productividad se man ten ian
muy b~os, induso en la cali cultura. EI mercado intern o estaba desarticll-
lado. La falta d e carre teras, el reducido nume ro de habitantes y e l bajo
niveJ de ingresos favorecian la produccion arLesanal y limitaban la indus-
tria moderna.
La situaci6n va ri6 entre 1945 y 1970, cuando la economia de los pai-
ses centroalnericanos expe ritnent6 un crecimiento acelcrado. Durante
esos an os la agricultura continuo sie nda la actividad mas importante de la
cconomia y Ia exportacion de produclOs agropecuarios la que mostr6
mayor dinanlismo. Pero talllbien en esc perlodo se ini cio el proceso de
industrializaci6n , se cxpandieron los sistemas de intermediaci 6n finan-
ciera, se modernizaron los servicios y se puso e n marcha el proceso de
integrac io n econon1ica.

Los !\NOS DE LA EXPANSION ACELERADA

Las decadas de 1950 y 1960 fu eron de expa nsi6n acelerada d e la eco-


nomia. Las exportaciones de a lgod6n , azucar y carne , principalm e nte, se
sumaron a las ventas de cafe y ban ano. Esa diversificaci6n fu e positiva,
porque can ella aumentaron los in gresos proven ientes del come rcio ex-
terno, 10 que ayudo a paliar los efectos nocivos de las Ollctuaciones de los
precios e n eJ mercado inte rnacion a l. Ademas, por primera vez los pro-
ductos manufacturaclos se incorporaron a las e xportaciones.

214
Prnducci6n agropecuaria

La tie rra h a sido la principal Fue nte d e riqueza d e los paises ce nl ro-
american os. Los recurso s generados e n la producc i6 n agropecuaria fuc-
ron invcnidos e n otros sectores de la eco nomia, pe ro tambien , a menu-
do , sc d estinaron a e lla los excedentes producidos e n la industria y e n los
sen·icios. EI producto bruto agropecuari o paso de 872 millon es de dola-
res, e n 1950 , a I 827 millones veinte an os mas tarde.
La producci6n de artfculos para 1£1 exportaci6 n crecio 111ucho o1as
rapidame nte (5 ,4% al ano) que la d estin ada a l con su mo interno (3,6 %
annal). EI alto crec imiento de las exportacio nes se explica, e n parte , por
la dive rsifi caci6 n de los rubros exportabl es. En cambio los productos para
el consumo inte rno no alcanzaban para suplir las n ecesidades de los h abi-
tallles d e la region , porque no se habian corregido algunos problemas,
como po r ej e mplo la falta de facilidad es para e l a lm acenamiento , la con-
scrvacio n y e l man ejo de los prodnc tos. Estas dificultad es se prcse ntaban
d e bido a que los pe quenos y medianos propie ta rios n o ten ian suficiente
capacidad de aho rro e inversi6n , ni acceso al cre dito ban cario y, por tan-
LO, no disponian de recursos para introducir mej oras e n sus £incas.
Los pro ductores mas modestos no ten ian acceso al credito , pOl'que
los bancos conside raban muy riesgoso otorgaries financiamiento. La ma-
yor parte d e los propietarios poseian me nos d e cu atro h ectareas de tierra,
cantidad insuficiente para que una famili a rural pudi e ra subsistir; ademas
exist.!a L1na gran cantidad de trabajadores ruralcs que no tenian tierras.
OlfO eleme nto venIa a agravar la situ3c i6 n: la in adecuada utilizaci6n
d e los sue los. Las fincas gran des, destin adas a los cu ltivos de exportaci6n,
acaparab a n las mcjores tien'as y utilizaban tecno logias mas avanzadas,
mi e ntras que las fincas pequeiias ten ian suc los de bajo pote ncial agricola.
Esa situaci6n se agravo con e\ desarrollo d e la gan ad e ria bovina, durante
la d ecada d e 1960.

CULTrYOS DE EXPORTACION TRADICTONALES

En los anos posteriores a la Segunda G ue rra Mundial , el cafe y el ba-


nano co nstituian e ntre el 80 y el 90 por cie nto d e las ve ntas al exterior.

Cafe

Los precios del cafe aumentaron ve rtiginosam e nte despues de 1945, y


alcanzaron su nivel mas alto en 1954, at'lo e n e l cual se eliminaron las

2 15
cuotas. Los altos prccios favo recieron la ampli aci6n de las areas cu ltivadas
y de las cantidades producidas, espec ial me n te en Nicaragua y Hon duras.
La cafic ultura se transfo rm6, de bido a la in lroducc i6n d e in novacio_
n es tecno l6gicas, como e l mayor uso d e [ertihzan tes y la in troducci6n de la
variedad catllrra. ESla pern1itib Illayor densidad de siembra, favorecio el
aumento de las canti dades eoseehadas, y, ademas, facili to la recoleeci6n
d e l grano. Dado q ue esta variedad no req ui ere so mbra, much os producto-
res abandonaron la p ractica de dejar arboles y musaceas en los cafe tales.
No todos los Jin que ros ad optaron e l «paquete tecn o l6gico» com ple-
to, por 10 q ue las co nsccue neias econ6m ieas y sociales de su apli caci6n
fu e ro n vari adas. Pe ro , en gene ra l, la e li m inaci6 n de la sombra de los cafe-
tales m erm6 las fu e ntes de alim e n to para la poblac i6n ru ral, y tam bien las
posibilidad es d e q ue las fa milias campesinas a!legaran rec ursos para la
salisfacci6 n de sus necesidades, mediante la venta d e olros productos como
le Il a, hojas de phhano y fr utas. Ad e mas, a l disminuir la cubi e rta vege tal,
los sue los requiri e ro n d e mayo r cantidad d e ferti lizanles, 10 cu al n o esta-
ba a l a1ca nce d e los finqu eros mas p eque n os .

Banana

Las ex po rlacion es d e banano a ume ntaron ra pidame nte d espues d e l


conflicto mundial. Luego la pro ducci6n decay6, debido a que a lgun as
plantaciones fue ro n afectadas po r «el mal de Panama». La llnica form a
e ntonees conocida de cOlnbatir tal e nfe rmedad e ra mediante la inunda-
ci6 n de los terre n os infestados, pe ro este e ra un procedimiento muy cos-
toso, mO livo por el cual algunas plantac io nes de l litoral caribe d e Costa
Ri ca y de Hondu ras fu e ro n abando nadas.
En 1957, la Sta ndard Fruit Compan y introd ujo la variedad «Cave n-
dish», que pronto se ge ne raliz6 por ser resiste nte al «mal de Panam a» y
p o r permitir un mayor nllm e ro d e plan tas por h ectarea (unas I 600). En
consecue n cia, el rendimie nto d e las plantaciones aume nt6 .
Dura nte la d ecada d e 1950 las re lacio n es entre las companias frute ras
y los gobi e rnos fu e ron tira ntes. En Guate mala, el punto d e mayor lensi6 n
se alcan z6 e n 1953, cuando Arbe nz, e n e l marco de la Ley d e Reforma
Agraria, expropi6 algun as de las lie rras d e la compania . No obstante, la
U FCO acept6 m odificar sus contratos e n Costa Rica y en Honduras. En
1954 empez6 a pagar, e n esos dos paises, un impucsto del 30% de SLI S
utilidades, y, una vez derrocado Arbenz, lambi e n decidi 6 pagar e l mismo
mo nto d e impuestos en G uatemala. Sin e mbargo, hay m o tivos suficientes
para creer que los gobie rnos cenlroame ricanos nunca supieron a eien cia
cierta a cLlanto ascendian las utilidades d e la UFCO .

2 16
Otro calnbio importante se prodt.Yo en la miSlll£l d(~ca da cuando co-
men zo a generalizarse cl sistema de (( prOdUClores nacionales asociados H:
las tran sn ac ionales redt.~jeron la produccion, pero no la cOlnerciaJizacion
del banano. Asi salicron gananciosas, porqll c adquirian banano de los
productores privados, a precios bajos, fijos y cstables, y se ahorraban los
probl emas callsados por desastres naturales y, sobre todo , los conflictos
con los trabajadores bananeros.

NUEvas PRODUCTOS DE EXPORTACION

Algodon

La produccion a lgodon era se localizo en las fertiles Hanuras occiden-


tales de N icaragu a, EI Salvador y Guatema la y, e n menor m edida, en las
de Honduras y Costa Rica (Mapa NQ 24). En 1950, el algodon era ya e l

, ,
!lU· H7 ~ I'll"
,
i ---- __ · _-4~JJ
MAPA N° 24
~IE X I CO - ,_' 1Belin'
" tI AREA DE CULTIVO DEL ALGODON
, /BF,l.I C ·
DECADA DE LOS ANOS 60
I
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/ Gl IATE~IALs\

HONDUIl-\.S
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/' iHAll

cAlurw
12"
OCf:A l\.'O PA c iFICO

SIM l\O I.O(: !A


.. COSTA RICA
I:""::~ AreCl dt' nlltin) d("l ClI.i.iudull
San j osi-
Y' CClpi la l d<' 1;( Rl'pilb lic\

y"

FIU,'nll": w,' S( & A"f:('lIi. Middlt A ",.,rir;.: its l,m,1 100 o 100
and pt'npk ,~. I'ranlic('-U~1I In c N"wj<:I's('y. 1966
n
90' 84' 81 '
IL USTRACION Nt! ~5 . PI ANTACI ON DE ALGOD() N EN CH Il\ANDEGA, NICARACUA .. ( Foto-
grafia conesia nel ln slitu LO de In vesligac iolles Hi st6 ricas de Nicarag ua) . Durante e l pCrlodo
de posgUC IT<l, ('I algod on era uno de los pmduClos de ex porlacio ll m:"is impo n amcs de N icara-
gua , EI Sah'ado r y Guate mala . La rotografia mucS l.ra un campo de algodon en Chin andcga,
Nit"tlragua.

principal cultivo y e l prod llcto agricola d e exportacion mas l1TIportante


de Nicaragua, pais que concentrab a e l 53% del area sembrada e n la re-
gio n yel 71 % d e la producc io n centroame ricana.
Varios facto res favore cie ron la compe titividad del a lgodon centroame-
ricano e n e l me rcado internaciona1. En primer lugar, las condicion es cli-
maticas apropiadas d e l lito ra l del Pacifico , do n de la estacion seca y la
lluviosa estan bien definidas y la cantidad de lluvia es adecuada. En segun-
do lugar, los suelos fertiles y pianos permitieron el uso de maquinaria en
las faenas agrico las, con 10 cual se incremen taron los re ndimientos. Yade-
mas, e l uso de plaguicidas perm itio superar uno de los probl emas mas
graves del cultivo: las plagas de in seclOS. No obstante en poco tiempo
estos se volvi e ron resistentes a los insecticidas, y los gastos en que incu-
rria n los productores para adq uirir los productos quimicos iban e n au-
m ento.
Cuando los precios inte rnacionales d e la libra e ran a ltos, e l a rea de
cllltivo se ampliaba, aunque [uera en sue los menos fertiles y pIan os, 0 en
zonas donde e l regimen d e lluvias era m en os propi cio . En gene ra l, las

2 18
lIl ~jores fin cas algodoneras pe rtenecial1 a g randes propietar io s, Ill ic n tras
que las sil.uafias e n lie rras lllarginaJes e ran de peqlleilos pro ductores, que
solo se sosle nfan en la activiclacl c Liancio lo s precios e ran altos. Los b~~j() s
S<ll arios pe rcib idos por los trabajadores a lgodoncros p e nn iti eron a los
pro pi etarios d e las fin cas obtener be n efi cios, aun cuando los precios d e la
fibra [u eran malos. EI empJeo de metodos manual es d e recoleccion los
fa.\'or~c:io, porC} I I f' f'n Furopa yJap6n se prem iaba la lilTIpieza del algod6n
cosec hado a mano .
La actividad algodonera se desarrollo b,!jo e l pa lrocinio de los gobier-
nos, los cuales se e ncargaron de constru ir carre te ras y de o torgar cn§ditos
subsid iados a los productores. La p articipacion de pequenos y mcdian os
cultivadores d e a lgodon variaba de un pais a o tro, pe ro e n todos ellos los
ben e fi cios se co ncentraron en lll10S pocos gra ndes propie tarios. A menll-
do los mismos productores estaban solidame nte esta blecidos e n varias
ramas d e la actividad, con 10 cual o bte nianjugosos be ne fi cios. En Nicara-
gua, por ejemplo, los algodoneros cre aron Sll propio banco -el Banco
de Nicaragua (BANIC) - , el clla l pose ia un a compa iiia d e produc tos qui-
mi co s para la agricultura, lres casas exportadoras, un complejo de se lv i-
cios a lgodoneros, una corporacion textil , lIna planta d e alim enlOS deriva-
dos de la se milla d el algodon y una fabri ca d e aceite de semilla.

Ca-fia de azucar·

En e l decenio de 1950, el area dedi cad a al cultivo d c cana se ampli" y


los volume nes producidos se incrementaron, como resultado de la intro-
d uccion de nuevas tecnologias, la ampliacion d e las a reas de riego y el
in cre me nto d e la capacidad de molienda d e los inge nios. Sin embargo ,
durante la d ecada d e 1960 e l cultivo d e cana d e azucar conocio un auge
sin preced e ntes, debido a que los Estados Unidos d ejaron de comprar
azuc ar cubano y asig naron cuotas nlayol-es a los paises de Cenlroamerica.
Hacia mediados de la d ecada de 1960, los pre cios mundiales del a lgo-
don bajaron y simuitaneamentc subie ron los del aztlcar. En consecue n-
cia, much as tierras antes dedicadas al cultivo de algod o n, pero situadas en
las cereanlas d e a lglm ingcnio, flleron reorientadas hacia la produccion
ca llera. La p osibilidad de dedicar tierras algodon e ras a la cana, y vicevel~
sa, d e ac ue rdo con las fluctuacion es de los prec ios d e a mbos productos en
el me rcad o inte rnacional, favorecio a los med ianos productores. EI des-
plazamie nto d e un cllitivo a otro no sign ifico un cambio radical en el
sistema d e producc ion ni en ]a contratacio n d e traba jado res, pues ambas
actividad es demandan un importante continge nte d e mano de obra du-
rante la e poca d e cosec ha.

2 19
Ganado

A fines de la dec ada de 1950, la actividad pecuaria empezo a oricntar-


se hacia el rnercado externo. En 1957 se instaI6, en Managua, la primera
planta empacadora de carne; ya para 1973 operaban en la region veinti-
dos plantas. La expansion ganaelera fue rapiela, gracias al apoyo elel go-
bierno de los Estados Unidos, por meelio del Program a Alianza par" el
Progreso, y (OlnO resultado de poliLicas estatales tendentes a favorecer 1£1
actividad -construccion de (arreteras, facilidades de cn§dito y asistencia
lecnica para mejorar los pastizales y los hatos.
La demanda estadonll idcnse de carne de vacuna rue un poderoso
estitnulo ala ganaderia centroamericana. Las cuatas asignadas a cada pafs
aumentaron, y las plantas procesadoras se ajustaron a las norm as sanita-
rias nortearnericanas, 10 cualllevo al mejoramiento de los halos. El «bOOlll»
exportador facilit6 una organizacion mas moderna de las haciendas, rlla-
yores con troles veterinarios, mejoralniento de las tecnicas reproductivas y
de los pastizales e introduccion de1uso de fertilizantes y ycrbicielas.
La ganaelcria extensiva fue la preelominante, gracias a la abundaneia
ele pastos naturales. En 1950, el area dedieada a pastizales era de alrcde-
dor de 4 millones y medio de hectareas, mientras que en 1970 ya alcanza-
ba los 8 millones ele heetareas. No obstante, e1 auge ele la ganaelerta trajo
consecuencias negativas a la region, pues provoco graves da60s ecol6gi-
cos y la riqueza se reparti6 entre varias empresas transnacionales y unas
pocas familias centroamericanas.

Consecuencias sociales

El impaeto social de las nuevas actividades agropecuarias fue profun-


do. Por un laelo, las condiciones de vida de miles de campesinos y trabaja-
dores del campo variaron radicahnen te, al ser despojados de las tierras que
cultivaban. Por otro, los efectos ecol6gicos fueron desastrosos. Como se
puede observar en el mapa NQ 25, las areas cubiertas ele bosques se reduje-
ron considerab1emente, porque se permitio a los campesinos cxplotar par-
celas de tierra virgen por algun tiempo. Cuando el terreno estaba limpio y
listo para la introducci6n de actividades cornerciales, los carnpesinos se velan
obl igados a abanelonarlas por la presion que ejercian finqueros poderosos.
Otras tierras, que tradieionalmente habtan sido cultivaelas por colo-
nos, talnbien fueron incorporadas a las nuevas actividades agropecuarias,
ya los colonos se les nego el derecho de cultivar. Los arrenelatarios, que
pagaban el alquiler en produetos, lam bien sufrieron las consecuencias
del creeimiento de las exportaciones, pOl'que muchas fineas fueron alqui-

220
MAPA N° 25
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REDUCCION DEL AREA BOSCOSA
1940

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1987 · 1992

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A not"' ie!' . ,\ spl'li" I "' :'p ~u PI'\"""''' I to I t"C"l'ch and (' ~p ' (lr.lti()ll .
ladas a prodUClores capaces de pagar la renta en d in e ro . Esc cam bio pro-
dl~j O mayores be ne fici os para los le rra te ni e nlcs.
En los prim c ros an os de la expansion algodon era, e l colonato y cI arren-
damiento constituyeron form as de atrae r lrabajadores a las fin cas que ca-
redan de man o de obra, pe ro pronto se co menzo a prescindir d e ellos.
Alg llnas fases del cultivo se mecanizaron y, e n consecllencia, se in cre me n-
to e l nllnlero de can1pesinos que no len ia n tielTas y que solo co nseguian
trabajo e n cierlas epocas del alio. EI resultado de la ex pansion ganadera
rue a(1Il mas grave, pot'que la actividad ereaba mlly poeos empleos.
En suma, cl campo se poblo de miseria. La ampliaci6n de la frontera
agricola no significo Lln a solu cio n permane nte para los Gunpesin os des-
poseidos. La ge nte expu lsada de las fin cas se asento precariam e nte e n
areas inapropi adas para la agric liltura mecanizada. A 10 largo de los cami-
nos nacional es y e n torno a las ci udades y pueblos brota ron barriadas de
trabajadores sin tien-as.
La gravedad del probl e ma agrario to rn 6 impostergable la decisi o n de
tomar medidas que mejoraran las condiciones d e vida de la poblacion
rural centroamericana. H o nduras y Guatelllaia en sayaro n sendos progra-
mas de rel()rm a agraria, mie ntras que los demas paises impulsaron pro-
yec tos de coloni zac ion agricol a, en el marco de la Ali a nza para e l Progre-
so, los cuales rue ron tan solo un paliativo para me rma r la conflictividad
social que se estaba generando.

Desarrollo industrial

EI proceso d e industri ali zaci6n topo co n graves obstaculos: pe que nez


del mercado -de bida al b~ o nivel de ingreso per capita de una poblacion
baslanle reduc ida-, falta de matcrias primas, escasa infraestructura, re-
d es d e com unicacion deficie ntes, y falta de e nergia electrica y de pe rsonal
calificado.
A pesar d e tales dificultades , los gobi e rnos j()me nta ron decididamen-
te e l d esarroll o industrial ; la suslituci6n d e prodllctos importados pOl' los
pro ducidos e n la region imprimio un gran dinamismo a la economia du-
rante la decada d e 1960 , lie mpo en que el n(une ro d e e mpresas man u-
Jacturcras se multiplic6 y, po r consiguiente, las fu e nt es de empleo au-
me ntaron.
Al inicio de l proceso de desarro llo industrial , las in versiones se can ali-
zaron hacia las industrias tradicionales -alimentos, tex tiles, calzada y
o (ros bienes de conSlLIno-, en las cuales se vislunlbraban lnayores posibi-
lidades de eXilO, puesto que estaban prolegidas por disposicion es arance-
larias. No obstante, aunqu e csta proteccio n fue necesaria en un pnnCl-

222
pio, al prolongarse , favo reci6 la incficie ncia y oeseslimuI6 las illvcrsion es
e ll inciuslri as mas comp lf:~jas.
EI establecilniento del Mercado Comttn Cen troamcricano }' la crea-
ci"n d e un arancel regional [ueron vitales para el proceso de industriali-
zacion. La politica arancelaria brindo especial proteccion a las industrias
de bicnes de con sumo, y una protecc ion l110dcrada a las malerias primas.
Artemas, faci lit6 la importaci6n de maquinaria y equipo. y otorgc) impor-
!antes incentivos fiscales, como la exencion del pago del impues!o sobre
la renla.
En escasos q uin ce anos, la industria de cad a pais habia adquirido ras-
gos propios. Guatemala aSLlmio e l liderazgo en articu los farmaceuticos,
lI antas, jabones, deterge ntes, productos de vidrio, frutas y legumbres en
conserv", y papel, entre o tros productos. Seguia en importancia EI Salva-
dor, co n abonos, suministros e lectricos, textil es, calzada de cuero y cajas
de carton. Costa Rica era e l tercer exportador regio na l, pero no muy es-
pecial izado. N icaragua producia aceites vegetales, resin as sinteticas e in-
secticidas. Honduras [ue el pais que mas tardo e n integrarse al Mercado
COmltn , 10 cLlal se explica, e n parte, por la tard ia formacion de su c1ase
empresarial y por el menor grado de d esarrollo de una economia de ex-
portacion propia.

Mercado Comun Centroamericano

La creac ion del Mercado Comun Centroamericano fue resultado de


un proceso g rad ual, el cual se inicio e n 195 1 mediante la Resolucion NQ 9
de la CEPAL (Com ision Economica para America Latina). AI ana siguien-
te se fundo e l Comite d e Cooperacion Economica del Istmo Ce ntroame-
ricano, con e l fin de echar a a ndar e l proyeclo.
Mie ntras tanto, los paises centroamericanos suscribieron acuerdos de
libre comen:io e integracion p.con oI111(':.:t , fJuP. e!\frlbleda n libertad cotner-
cial para una can tidad d e terminada de productos, compromiso d e equi-
paracion aran celaria , coordinacia n de politicas com erciales con tercero,
paises, exclusividad en las concesiones y garantia para la Iibre conversion
de las monedas. La duracion d e los convenios era corta -de 1 a 4 aiios-
porque su objetivo era la creacinn de un c1 ima d e con fi anza mutua, que
favo reciera la integracion.
EI Tratado Multilateral de Libre Comercio, firmado e n junio de 1958,
incorporo los as pec tos mas relevantes de los acuerdos bilaterales. Ese ano
tam bien se firm o el Convenio sobre eI Regime n de Industrias Centroame-
ricanas de Integracion , cuyo objetivo era estimular las industrias de inte-
res regional. Sin embargo, esle llltimo lllvo poca re levancia, dado que los

223
paises de la rcgi6n soslen ian posic ioncs dif'erenles, func1adas en t'l tcnlor
de favorecer inc1ustrias monop6licas.
EI Comite de Cooperac i6n Econ6mi ca , fundado en 1952 con eI fin de
realizar labores preparatorias a la integraci6n, logr6 estableeer, en 1953,
la Nomenclatura Arancela ri a U nilieada Centroam ericana (NAUCA), a la
eual se adhiri eron los distin tos paises gradualmente. En 1959, ya fue posi-
ble firmar eI Conve nio CCl1lroamerican o sobre Eq uiparaci6 n de Grav~­
menes a la Imponaci6n. En 1969, el 98 % de los derechos aduaneros se
halla ban equipa rados en todos los paises, salvo en Honduras, que n o sus-
cribi6 varios protocolos.
En rebrero de 1960 se suscrihi6 e l Tratado de Asociac i6n Economica
e ntre EI Salvador, Honduras y G uatemal a, que establecia la libre rnovili za-
cio n y tratarni el1lo nacional de mercan cias, person as y capitales prove-
nie ntes de los estados mie mbros. Nicaragua denun cio eI tratado como
un a agresi6n eco no mica, e n tanto que Costa Rica asurni6 una posicion
un tanto evasiva. que refl ~ jaba su escaso interes en la inlegraci6n. Ese
tra tado paso a un segundo plano en diciembre de ese mismo al'io , cuando
fue firmado eI Tratado Gen e ral de Integracion Economica, por los repre-
sentantes de Guate mala, EI Salvador, Honduras y Ni caragua. Costa Rica
se ad hiri6 en julio de 1962.
De ac uerdo con eI Tratado General d e Integracion Economica Cen-
troamericana, en un plazo de cinco anus se iba a crear una zona de libre
cOlnercio y se iba a estabIeccr un aran ce l externo comun. Los paises fir-
mantes del tratado cumplie ron con esos compromisos, 10 cual fue un 10-
gro (mico en America Latina. La direccion y la ejecucion d el Tratado
General quedo a cargo d e l Consejo Economico Centroamericano, inte-
grado por los ministros d e economia de los paises m ie mbros, y por un
Consejo Ejecutivo, formad o por los viceministros d e l m ismo ram o. La
Secretaria Pe rma nente d e l Tratado fung io como organo central.
EI mayor crec imiento de l comercio inte rregional se produjo entre 1960
y 1968. Los intercambios p asaro n de 33 mi llones de d olares a 2'iR millon es
d e dolares. En J 961 los bancos ce ntrales suscribieron e l Acuerdo d e la Ci-
mara de Compe n sacion Centroamerican a, ente encargado de satisfacer los
saldos comercia les interregionales, mediante la utilizacion de monedas
centroamericanas. La Camara trabajo eficientemente, gracias a la estabili-
dad monetaria, producto de la disponibilidad de reservas internaci o nales.
En 1969 se finn6 eI Acuerdo del Fondo Centroameri cano de Estabiliza-
ci6n Monetaria, que tenia por objeto brindar asistencia financiera a los pai-
ses que tuvieran que corregir desajustes te mporales e n su balanza de pagos.
La primera etapa del proceso integracionista culmin o e n 1969, cuan-
do e l Mercado Comun sufri o se rios trastornos debido al conflicto armado
entre EI Salvador y Honduras.

224
Desarrollo de ia inlerrnrdiacion jinanriem

En la dec ada de 1950 se sen laron las bases para la moelcrnizaci(lll de


los sistemas de intermediaci6n fin anciera, que descrnpeflaron un papel
\'ital en el crccin1iento econ(nnico durante las dos clccadas siguientes. Los
sistemas financieros se clivcrsificaron, con el establecitniento de nuevas
instituciones que ampli aron la gama de servicios. Hasla lnediados (Ic-I
c1ecenio e1e 1970 se disfillt6 de una gran estabilidad e1e prccios y ellipo de
cambio se manluvo bastante establc.

Bancos eentraies

En 1946 se abri6 el Banco e1e Guatemala, como resultado e1e una re-
farrna monctaria y bancaria. En los aiios siguientes, los clem as paises de la
region tambien crearon sus bancos centrales: Costa Rica, en 1950; Hon-
duras, en 1951 ; Nicaragua, en 1960 y EI Salvaelor, en 1961. Los bancos
centrales tenian como objetivo crear condiciones 111onetarias, cambiarias
y creeliticias, favorables al e1esarrollo economico. Ademas, debian encar-
garse de 13 emision lTIonetaria, la estabilizacion monetaria, las operacio-
nes con valores y actuar como banqueros del Estado.
EI e1esarrollo economico y las coneliciones creadas poc 1a banca cen-
tral han ayudado a la expansion y diversificacion del sistema de interme-
diacion financiera.

Baneos eomereiaies

En general, la banca comercial peneneda al sector privaelo, excepto


en Costa Rica, e10nele en 1948 se nacionalizo. La participacion del capital
extranjero era Iimitaela, excepto en Honeluras. La banca de fomento 0 e1e
desarrollo c1esempeiiaba un papel secunelario, en relacion con la banca
comercial, salvo en Honeluras, e10nde tuvo una expansion importante.

Otros interrnedianos jinaneieros

En la e1ecada de 1960 surgieron numerosas socieelaeles financieras de


capital privaelo. Entre ell as e1estacaron las dedicadas al linanciamiento de
vivienela, los almacenes generales e1e deposito, las compaiiias aseguraclo-
ras y las afianzaeloras, cuyos activos fueron en aumento durante el perio-
e10 estucliaelo.

225
Cnidito bancan:o

Tradici o nalm e nte el cn' di LO bancari o habra servido para financiar


actividades agricol as y come rciales, pero e n la decada de 1950 la situacion
comenzo a cambi ar. La de nlanda de creditos para 1£1 industria fo menlola
creaci6n de nuevas instilu ciones. No obstante, el eredito agricola sigui6
siendo muy irnporLante.

LOS ANOS DEL CRECIMI ENTO PERTURBADO

Signos contradictorios

La decada de 1970 se caracterizo por serias alteracion es economicas,


las cuales se habtan originado en los allos de crecimiento acelerado: las
importaci o nes aume ntaron, y crecieron los dese mbolsos que habta que
realizar pa ra pagar utilidad es e inte reses a inversionistas y acreeclores in-
ternacionales; hubo un incremento notable d e l gasto publico, pero la
deficiencia de los sistemas de recaudacion tributaria contribuyo a engro-
sar e l deficit fiscal.

La injlaci6n y sus efeetos

Los efectos del proceso inflacionario mundial se sintieron al despun-


tar el decenio de 1970. La crisis pelrolera de 1973-1974 contribuyo a ace-
lerar la inflacion. Como resultado, la industria, que depe ndia de materias
primas importadas, se vio muy afeclada; el aumenlo e n los precios golpeo
fu ertemente a los seClores sociales de baj os recursos; los empresarios se
organizaron para presionar a los gobiern os y lograron ajustes que les per-
mitieron e nfrentar los traslornos cle la econom ia mundial; las tensiones
sociales aumentaron, y en varios paises exploto la guerra civil; en fin, las
inve rsiones bajaron y se prodl~o una fuga de capitales.

Repunte de las exportaeiones

La eliminacion del sistema mundial de cuotas a las exportaciones d e


cafe y azucar hizo que su produccion aumentara a principios d e la decada
de 1970. La expansion cafetalera fue n otable en Nicaragua y Honduras.

226
La superfici c se mbrada de cana de aZllcar pas6 de 145 mil a 218 mil
hectareas y la produccion creci6 de 8 millones y m eci io a 14 Illillon cs y
media de ton e laclas, aproximaclame nte. El cultivo de algodo n tambi c n
prospero , al recupe rarse los prec ios, pero esa ac ti vid ad se d esplom6 a
partir de 1977.
En cuanto a la economia ba n a ne ra , 10 mas sig nifica ti vo del d ece-
nio rue el esfuerzo de los gobiernos centroalneri ca nos -con Si tS s inlii a-
res de Colombia, Ecuador y Panam a- pOl' actual' co njuntamente para
contrarrestar el poderio de las e mpresas transnaciona les. En mayo d e
1974 se suscribi o el Acuerdo de Pan ama, en el que se compromctiero n
a fundar un o rganislno region al de exportaclores bananeros y a crear
un impuesto d e un dolar pOI' cada c<tia de 18 Kg. que se ex portara. En
diciembre d e 1974 naci6 la Union de Paises Exporta dores de Bana-
no (UPEB).
La nueva o rganizacion mostro de bilidades desde su nacimiento , POlc
que Nicaragua y Ecuador no se adhirie ron a ella. Ademas, las empresas
transnacionales decretaron la «guerra del banano )), y se negaron a pagar
el monto del impuesto y a negociar co n los trabajadores ba naneros y, de
ese modo, lograron imponer sus co ndic iones.

Delerioro del Mercado Comun

Despues d e l co nflicto arm ado entre Honduras y EI Salvador, los go-


bicrnos de los paises restantcs re alizaron ingentes esfucrzos por salvaI' e l
Mercomun. Pe ro, a fines de 1970, los problemas m as bie n se agudizaron ,
porque Honduras d ecidi6 retirarse d e l Iibre come rc io , e impuso grava-
me nes a la importacion de productos centroamerican os. A mediados de
1971 se fundo la Com isi6n Normali zadora del Mercado Comlm, Ia cual
debi6 enfrcntar nuevas dificultades d e l co mercio inte rrcgional, como las
producidas por <:1 t<:rrf'moto d e Ma n agua (1972). Honduras decidio sus-
cribir convenios bilaterales para administrar sus interca mbios.
En suma, durante la decada d e 1970, el comercio interregional co-
menzo a erosionarse, la inversion se detuvo y. nuevame nte, aumentaron
las importaciones de productos indu striales de fu c ra del ,irea.

Deuda externa

Entre 1950 Y 1973 hubo estabilidad financiera, pero a partir de 1974,


los paises centroalnericanos enlraron e n una fase de estancamiento y de-
terioro paulatinos.

227
EI inc remento del precio de los hidrocarbllros puso e n apuros a los
gobi ernos, porque era necesario gaston much os millon es de d61 ares mas
para importarlos. Aungue los precios de las exportaciones agropecuarias
se elevaron un poco, no proporcionaron ingresos suficien les (01110 para
sufragar los enormes gastos. Para empeorar la situacion, los otros produc-
tos importados tam bien aume ntaron de precio, porgue la inllacion go 1-
peaba la economia de los paises in dustrial izados.
Hacia fines del decenio de 1970 e l panorama era rea lmente desale n-
tador: e l Mercomun se h all aba muy debilitado despues de varios aIl0S de
no fun cionar nonnalmcnte, y los estados no contaban con capaciclad fi-
nanciera para eSlimular la produccio n. En consecuencia, se opto por el
endeudamiento externo, aprovechando las faci lidades de con trae r pres-
talnos inlc rnacionalcs con intereses b£Uos. La deuda eXLerna de los paises
del area crecio e n forma galopante, y paso de I 932 millones de dobres,
e n 1973, a 6 874 miltones e n 1979.

SOCIEDAD

Poblacion

Durante los allos comprendidos entre 1950 y 1980, la poblac ion cen-
troaInericana creci6 de rnan era rapida y continua y paso de alrecledor de
8 millo n es a casi 21 millon es de h abitantes. (Ver grafico NU 7) . En conse-
( uen cia, la den sidad de poblacion crecio en todos los paises. En 19S(), EI
Salvado r, con 228 habita nl es por kilo1l1etro cuadrado, e ra e l pais mas po-
blado d e Centroa1l1crica y u no de los mas densamente poblados de Ame-
r ica. La segllnda posicion correspondia a Guatemala, co n 67 h abitantes
por kil ometro cuadrado; la tercera la oCllpaba Costa Rica, co n 45, la cuar-
La Ho nduras, con 33, y la {ailima Nicaragua, con tan solo 22 habitantes
por kilomctro cuadrado.
EI au mento ex perime ntado por ia poblacio n centroamericana obe-
decio , principalme nte , a lI na disminllcion de la mortalidad. La esperanza
de vida a llmento y las tasas de 1l10na lidad infantil se redujeron considera-
blemente . Estas u ltimas alcanzaron los mas b'!ios nive les e n Costa Rica,
que se ace reo a las tasas de mortalidad de los paises desarrollados. La
disminucio n d e la mortalidad flle conseclle n cia del m ejoramiento de las
condi ciones sanitarias y d e programas cle vacunacion m as amplios.
La poblacion centroamericana e n general e ra predominante1l1ente
joven ; solo en Costa Rica la proporcion de personas viejas aumento lige-

228
GMFICO 7
CRECIMIENTO DE LA POBLACION. ANOS ESPECiFICOS
8
7
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uJ ;;
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0 'I
..J
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1950 1960 1965 1970 197:) 1980

• Cua te mala EI Sah'ador • Honduras III Nicarag:ua o Costa Rica


F UC ll tt': /Jolrlin 1ll'IIwgrtifim N<:.' ~2, (TL \ llE 1983.

rame nte. Ade mas, casi la Initad de la pobl aci6n nac i6 0 sc traslad6 a vivir
a las ciu dades, con 10 que se altcrola relaci6 n ex iste nte e ntre la poblaci6n
rural y la urbana. El proceso de urbani zaci6 n se inte nsifieD desde media-
dos de la d ecada de 1960, debido tanto a los faclO rcs de expulsi6n de las
zo nas fllrales -dollcle la cstructura agraria dete rmin aba un usa irracio-
nal de los rccursos, marcadas di fcrc ncias e n los n ivel es de ingrcsos y un
de terioro e n los niveles de vida d e Ia p o blac io n rura l- , como a la atrac-
cion ej e rc ida po r las ciudades.
Ocsd e la d ecada de 1960, miles d e pe rson as se ha n trasladado a vivir a
los ce ntros urba nos, especialme nte a las capita les y princ ipalcs ciudades
regio nal es, con la esperanza de en co nlrar un trabajo que les pe nllita
mej o rar sus condiciones de vida. Sin e mbargo , e l c mpleo urbano no ha
aum e ntado como se desearfa , y los migran les de o rigcn campesino , ca-
re ntes d e preparacion adecuada para lI en a r los e mpl eos urban o s, han
visto fru stradas sus aspiraciones y han te nid o que aIin carse en barriadas
margin ales, en condiciones infrahum anas.

Diferenciaci6n social

EI pe rfo do en estudio se caracterizo po r la profundizac ion de las de-


sigualdades sociales. Las nuevas oportunidades de inve rsion, en el con-
lexto d e l a uge de la agricultura de exportac io n y d e l crecimiento indus-

229
trial , facilitaron el surgillli el1l0 de nuevos sectores de la burguesfa. La
transformacion fue muy no toria en Honduras, donde San Pedro de Sula
se co nvinio en la capi tal economica del pais, gracias al empuje dado al
desarrollo industrial por empresarios inmigranles del Medio Ori ente.
Sin embargo, la caraclerislica mas sobresaliente del periodo fue el
fortalecimiento de los seclores medios urbanos, gracias a la creacion de
nuevas institucion es pllblicas, a la morit'rni7acion del apal-ato eSlatal , }' al
desarrollo de la industrializac i6n, el cOlnercio y los servicios. Los sectores
med ios se han caracterizado por sus form as de exislencia material (traba-
jo e ingreso estab les, vivienda digna y mejores niveles ed ucativos), y sus
eSlilos de consumo cultural. Estos factores han convertido a esos grllpos
en una fuerza social decisiva en la vida centroamericana.
Lastimosameme, los ben e ficios de esa relativa modern izacion de la
economia n o favorec iero n a todos los seclores social es. En las cilldades,
los salarios de los obreros in dustriales apenas les akanzaban para subsis-
tir, y la falta de e mpleo prodl0o un aum e n to del num e ro de trabajadores
que se ganaban la vida reali za ndo lrabaj os ocasionales.

Movimientos sociales

En el periodo 1945-1979 hubo cambios profundos e n los movimi e n-


tos populares, porque aparecieron en escena nuevos acto res sociales, cu-
yos objetivos podian ser personales como conseguir una vivienda digna 0
un pedazo d e tierra, 0 de caracter mas general , como log rar la caida de
una dictadura 0 akanzar la transformacio n general de la sociedad. Estos
movimientos se ampliaron 0 profundi zaron (on base en posiciones ideo-
16gicas mlly variadas: unos se inspiraron en diferentes corrie ntes del mar-
xismo, y otros e n p lanteamientos religiosos aportados por el «aggiorna-
men to " 0 «puesta a l dia" de la Iglesia Catoli ca.
La Iglesia Ca tolica, que desde la conqu ista ha tenido gran poderio e n
Cenlroamerica, sufrio grand es lransformaciones a partir del Concilio Va-
ticano 1I (1962-1965) Yde la Conferencia del Episcopado Latinoamerica-
no, celebrada en Medellin , Colombia, en 1968. Estos acontecimientos sen-
taron las bases de la Teolog.a d e la Libe rac ion, que comribuyo a la toma
de concienci a acerca de la marginalidad social y la injusticia. En Centro-
america, la Iglesia comribuyo a la creacibn de nuevas fonnas de orga niza-
cion, las cuales ampliaron y profundizaron los movimi enlos sociales. Ese
apone de la Iglesia tuvo un impacto variado en los dife re ntes paises d e la
region , y no estuvo exento de con fli ctos que enfrentaron a los catoli cos
mas progresistas con las autoridades y los seClores mas co nservadores den-
tro de la mism a Iglesia.

230
Esa g ran dive rsidad de actores sociales, de o bj e livos}' de Illo li"acio nes
idcologicas dificuha el analisis de los movimi e ntos so ciales durante (' I pe-
d od o e n eSludio .
La dccacla de 1940 se caracterizG p O l' un a g ran ac ti vidad de las organ i-
zac ioncs po pulares. Las luchas se orienlaro n al de rrocamiento de las dic-
lad uras (le ma que profulldizaremos mas ad e la nte ). EI objelivo cra eon s-
ll'uir socierlad es mas democraticas, que garanti zaran una mayor partie i-
paci6 n po litica y una mejor distribuei6 n de la riqueza.
Dura nte las Meadas de 1950 y 1960, la situaci6n de los movirni e ntos
popul are s ru e muy variable. En Guate n1ala hubo una gran Illovilizacion
popul a r durante eI periodo revolucionari o ( 1944-1954) , pero, despues
de l de rrocarn ie nto de Arbenz, las organizaciones populares tuvieron que
retrocede r como consecuen cia de la represi6n. EI movimiento popular
salvado re ii.o fu e severamente reprimido, tras la masacre de 1932. En Hon-
duras, e ] movimiento obre ro alcanzo un nive l o rga nizativo lllUY impor-
tante e n 1954, c\lando se p rod ujo la huclga e n las plantacio nes bananeras
d e la Te la Railroad Com pany, pe ro en los a.1 0s posteriores, esc movimien-
to e ntr6 e n recesi6n. En Costa Rica , d espues d e la Revo luci6n de 1948,
con la prosc ripci6n del Partido Comunista y de los sindicatos de esa afilia-
cion , se prodtuo un retroeeso del rnovimi e nto sindica l. En Nicaragua, la
situ aci6 n e ra muy desventajosa para los sectores populares, par el control
estricto ej e rcido por la dictadura somocista.
La situac i6n se torn6 diferente a fin es de la d ecada de 1960 y princi-
pios de la sigu ie n te, cuando se prod,uo un aumento de las luchas popula-
res e n toda la region. En la rnayoria d e los parses se re in ici6 la luch a de los
seClores que tradicionalmente h abran sido mas beligerantes -campesi-
no s y obreros- y, al m ismo tiempo, aparecieron en escena nuevos acto-
res sociales que desempeiiaron un papel protag6nico. En tre eslos sobre-
salie ron los estudiantes llniversitario s y de e nse l1anza secun daria, las
organizacion es de los seClores medios -educadores y e mpleados pl.bli-
cos- , los pobladores de los ba rrios marginales y las o rganizacion es de
difere ntes grupos e tnicos.
EI movimiento estudiantil se radicaliz6 , influido , e n parte, por los
movimientos estudiantiles de mayo de 1968, e n Francia, de gran eco e n
olros parses de Ame rica Latina, especialmente en Mexico. Las organiza-
eion es estudiantiles y las de los sectores medios tuvieron gran influencia
e n e l acontecer social y politico de los parses cen troarnericanos, porque
pasaro n a p la ntear problemas de irnportan cia nacional y no solo reivindi-
cacio n es de inte res grernial.
Los pobl ado res de los barrios m argin ales se convirlieron en grupos
activos, que d e mandaban soluci6n a sus problemas de falta de vivienda y
de servicios basicos indispensables: agua, e lectricidad y transporte , princi-

23 1
11 .USTRACION N<J 36. ESTC DIA NTES COSTARRJCENSES PROTESTA]\;-
DO C:O:\"T R. .A. ALCOA Los estlldi an tes c:elltmamcricanos hall panic i-
pado ;:l.clivame nte en las luchas de la sociedad civil. En 1970, los {'stu-
dianlCs coslarl"ice nse s sc lan z<l ron a las calles para prot csta r contra la
ley 'lue oto rgaba las riquezas mine rales del Valle de E1 General a AL-
COA (Aluminium Compan y of Ame r ica ).

pal mente. Resulta de gran re levan cia el papel d esempel1ado por las muje-
res, quien es tomaron conciencia de su capacidad organizativa y de luch a.

Problematica etnica

En el caso centroamericano resulta muy dific il (si no imposible) estu-


diar los movimientos de origen campcsino , religioso popular y etnico se-
paradamente, porque en el fondo son dimensiones de un mismo proble-
ma. En este apartado enfocare mos la problematica etn ica, para tratar de
comprender por que en Guatemala y Nicaragua los niveles de confli ctivi-
dad fueron mas a ltos que en Honduras, EI Salvador y Costa Rica.
El enfoque del problema e tnico permite constata r que Ia conflictivi-
dad social que se presenta en las sociedades centroamericanas no ha teni-
do su origen solam e nte en la estructura de c1ases. Aunque los paises de la
region se h an caracterizado por ser multietnicos y pluriculturales, no siem-
pre se ha r econocido asl. De h echo, la idea de nacion se forjo con base e n
los grupos y culturas mestizas y las politicas estatales h ac ia los otros secto-
res elnicos han sido, por 10 general, abiertamente e xclusionistas.
La situacion de los indigenas y de las minorias negras en los cinco
paises centroamericanos ha sido variable , de acuerdo con e l numero de
miembros d e esas poblaciones y eI grado de preservacion de sus culturas

232
y de su identidad. La toma de concicncia de su marginalidad y las luehas
errlprendidas por algunos de esos grupos, poco a poco han sensibilizado a
las autoridades y a miembros de otros sectores saciales, accrca de la necc-
sidad de brindarles la atenci6n que merecen.

El Salvador: la invisibilidad inrligenrz

La explotaci6n extrema de los trabajadores del campo, en EI Salva-


dor, pernlitio que estos se convirtieran en terreno fertil para la germina-
cion de las ideas cOlTIunistas. La situacion se lorn6 111<1S dificil can la crisis
de 1929, pOI'que los hacendados hicieron surrir los efectos de la caida de
los prccios del cafe a los trabajadores. EI clima de tensi6n fue capitalizado
por los lideres comunistas, y Farabundo Mani, uno de ellos, se eonvini6
en una figura prestigiosa en los seclores rurales.
Resulta dificil precisar el grado de participaci6n de las comunidades
indigenas en la revuelta de 1932 y hasta que pun to los indigenas conodan
la ideologia comunista. Lo que si es claro es que la intervenci6n del ejerci-
to para sofocarla no solo dej6 tras de si una estela de muerte y destrucci6n,
sino que tuvo consecuencias In;15 duraderas. Despucs de la rnasacre, los
indigenas no intentaron mas la recuperacion de sus tierras, ocultaron 0
perdieron Sll identidad y pasaron a formar parte de los sectores ladinos.
A pesar de que los indigenas se tornaron «invisibles;.>, a partir de la
decada de 1970 ha habido en el pais mayor preocupaci6n por el estudio y
el rescate de las rakes culturales propias, y han surgido nuevas institucio-
nes, como la COlnisi6n sabre la Herencia Nacional, crcada can patrocinio
gubernamental, y la Asociaci6n Nacional de Indigenas Salvadorenos
(ANIS), fundada en 1980.

I-Ionduras: «mosaico» sociocultural

La poblaci6n hondurena actual esta form ada, en parte, por descen-


dientes de miskitos, lencas, payas, sumos, chortis y toles 0 xicaques. A
fines de la decada de 1970 se caleulaba que un os 130 mil indigenas se
hallaban diseminados por todD el terri to rio, excepto el sur.
EI mosaico etnico hondureno se torn6 mas variado con la presencia
de negros «criolIos», descendientes de esclavos introclucidos durante el
periodo colonial, y de los garifllnas, mezcla de indios arawak y de esclavos
negros que proven ian de la isla de San Vicen te. Estos se asentaron en
Roatan, a fines de l siglo XVIIl, y, posteriormente, se diseminaron en tierra
firme. Se caleula que unos 50 mil garifunas poblaban la costa caribe hon-

233
dureiia a fines d e l decenio de 1970. OU'os pobladores de las llanuras d e l
Caribe hondurelio son los negros descendienles de los inmigranles anli-
llanos que ll ega ron al pais gracias a las politiGIS migralorias propiciad as
por las empresas bananeras. A fines de la decada de 1970 el total de ne-
gros ascendfa a unos 320 IniI.
Algunos de los grupos mencionados conservan su cui lura aUloclona y
rellnen las caracterfsticas de una etnia. Tal es el caso de los miskitos, que
han gozado de un elevado grado de autonolnia, derivado de su relativo
aislamienlo del resto del pais. Pero olros grupos han sido afectados, e n
diverS()S grados, por procesos de aculturacion y mestiz'!je, y poco a poco
se han ido ladinizando.
La presencia de las empresas capitalistas torn a atm mas intrincado e l
problema em ico hondureiio, porque ninguna etn ia escapa a su esfera de
influencia, ya sea en forma directa, por la via de la proletarizacion, 0 indi-
reCla, al fortalecer las relaciones mercantiles.
Las zonas urbanas constituye n un foco de atraccion para los n egros
de habla inglesa y los garifunas, quienes logran ubicarse en el sector de
servicios. Muchos de ellos han conseguido acceso a las instituciones edu-
cativas, 10 cua l les ha permitido aprender espaliol , pero, de paso, han
perdido su idenlidad.
Durante la decada de 1970 comenzo a brotar un movimiento etn ico
reivindicativo, que se concret6 en e l surgimiento de varias organizacio-
nes defensoras de los recursos naturales, el patrimoni o material y re ligi o-
so y el m ejoramiento de las condiciones de vida de diferentes grupos. Sin
embargo, esas organizaciones no han asum ido una lucha politica a nivel
nacional.

Costa Rica: conjlictividad etnica localizada

En el territorio costarric~nse , 1a mayor conflictividad etn ica se ha coo-


centrado en e l suresle del pais, que com prende parle de la provin cia de
Limon, e n el Caribe, y de la de Puntarenas, en el Pacifico. En el territorio
que da a l Caribe se han asentado n egros de origen antill ano, indige nas
bribris, cabecares y leribes, y pobladores mestizos 0 «hi spanos" . Dellado
del Pacifico, pequenos grupos indigenas de las etnias bribri, teribe, brunka,
cabecar y guaimi han convivido con los hispanos.
La presencia negra en el Caribe se remonta al siglo XVII, cuando se
empezo co n e l cultivo de cacao en las llanuras del litoral, pero la pobla-
cion negra de origen colonial era muy reducida. La construccion d e l fe-
rrocarril yel inicio de la actividad bananera promovieron la inmigracion
de importantes contingentes de negros antillanos.

234
La expansion de la actividad bananera fue nefasta para los grupos
indfgenas, porque el ESlado adjudico a las cmpresas ban an eras tnllchas
de las tierras que ell os ocupaban. La UFCO se apropio dcllerrilorio de los
bribris, en Talamanca y Sixaola, cuando la sigatoka caus6 cSlragos en las
plantaciones de Bocas del Toro, y los aborigenes se vieron forzados a prac-
ticar la agricultura de subsistencia.
Durante la decada de 1950 se inten sifie6 1a llligraei6n de Ineslizos,
procedentes de diferentes partes del pais, e incluso, de otros paises de
Centroamerica, quicnes llegaban atraidos por la posibilidad de encontrar
trabajo en las plantaciones bananeras. Con estas migraciones se acentuo
la complejidad etnico-cultural de la region.
La usurpacion de las tierras reservadas a los indigenas, por parte de
los campesinos ladinos, ha sido una de las mas importantes fuentes de
conflictos. Las diferentes actitudes con respecto a la utilizacion de la tie-
rra provocan un claro chogue en tre individuos de esos dos grupos.
Hasta la Revolucion de 1948, los descendientes de negros antillanos
no tenian la nacionalidad costarricense. Su identidad antillana se [ortale-
cia al mantener sulengua -el ingles-, practicar la religi6n protestante y
recibir instruccion en las escuelas dominicales. La presencia de las institu-
ciones del Estado costarricense en clliloral del Caribe era muy reducida .
A partir de ]a decada de 1950 esa situacion comenzo a cambiaL En
primer lugar, se les concedi6 la ciudadania a los negros criollos y se dero-
go la prohibicion que les impedia desplazarse hacia el oeste. Esto permi-
ti6 que los ciudadanos negros comenzaran a enrolarse en la naciente bu-
rocracia estatal. En segundo lugar, el ESlado se prcocupo por ampliar la
educaci6n publica; solo en la primera administracion de Figueres (1953-
1958) se fundaron 47 escuelas en]a provincia de Limon. Adem;;s, se con-
cluyo la carrelera que conecta puerto Lim6n con el centro del pais, can
10 cnal se incremento eI conlaclo interetnico y la inmigracion mestiza
hacia las llanuras dellitoral Caribe. A fines de la decada de 1960, las re-
percusiones de la tnigraei6n cran cvidentes: el idioma espallol ganaba
terreno frente al inglcs y los negros crioHos experimentaban una lTIovili-
dad social ascendente.

C'TUaternala: una problernatica etnica cornpleja

La era de Ubico

Cuando sobrevino la depresion de 1929, alrededor del 50% de la po-


blacion gualemalteca estaba constituida par indigenas. Eslos se encontra-
ban m~jor integrados y eran econonlicamente mas autosuficientes que

235
[LllSTRAC[{)N NU 37. ML~JFRFS [Nnft~ENAs DE CI-IIMALTE)JANGO. Los indfgenas gllatemal-
teeos han sido eapaces de 111ante11er su propia idclllidad: lengua aulactona, vestuarios colori-
dos y festividades religiosas, entre otras 111anifeslaciones de SII cultura.

los indigenas salvadorenos, porque no habian perdido sus tierras. EI ejem-


plo salvadorei1o mostr6 a Ubico que los excesos poc-lian desatar reaccio-
nes peligrosas. En consecuencia, estableci6 una relaci6n populista y c1ien-
telista con los lideres de las comunidades y emprendi6 viajes para visitar
los Inas diversos rincones de su pais. De esa n1anera impidi6 el desarrollo
de la organizaci6n politica de las corIlunidades.
Ubico toma nledidas para alninorar la explotaci6n de los indfgenas,
hacer mas eficiente el trab~jo e incrementar la producci6n. Con el fin de
frenar los abusos de lideres locales, linqueros y ladinos, insisti6 en la ne-
cesidad de que los maestros de las escuelas indigenas fueran de esa misma
ctnia y sustituy6 a los alcaldes elcgidos localmente por intendentes desig-
nados por el gobierno central. Tambien estableci6 el impuesto de viali-
dad y emprendi6 un prograrna de construcci6n de carre teras, para com-
batir eI aislacionismo regional.
Una de las mas importantes medidas tomadas por Ubico fue la aboli-
ci6n del sistema de habilitaciones. Sin embargo, emi ti6 una Ley de Vigi-
Ian cia Revisada, de acuerdo con la cual una persona podia ser requirida
para laborar en las fincas de exportaci6n en caso de que no pudiera de-

236
nwstrar que trabajaba e n 10 propio. En la concepci()n lIbiqllista d e la divi-
sion del trabajo, a los mayas se les asignaban las fa e nas agrfco las.
La politi ca seglli da por Ubico con respecto it la poblaci6n maya era
propia d e Ia corriente indigenista de la c poea . Se pe n saba que e ra necesa-
rio «civi li zar» a los in digenas y procurar su asimil aci6n por la socicclad
ladina. ln cl uso el servicio miiilar Ileg() a ser considerado co mo un a vfa
civiliz:.:tdora.

La era revolw:ionar·ia

EI gen e ral Federico Pon ce Vaides, presidente provisionaltras la cai-


da de Ubi ca, buseD ali arse con los rn ayas e n su inte nto de retene r eI
poder. Las movilizaciones de los indige nas causa ron gran Lemar e ntre
los la din os. Dos dias d espues de las e leccion es de octubre de 1944,
se produj o la masacre de Patzicia, en la ellal se calcula que Illurieron
e ntre 150 y 900 indigena.s, atacados por ladinos. No obstante, el gobier-
no g ua te lnalleco se negaba a reconocer la existe ncia de la «cuesri6n
indige na»).
Cuando Areval o asnmi6 la presidencia mostr6 preocupaci6n por los
indigenas. La creaci6 n de llnsti tu to Indige nista Nacional (li N), en 1945,
signifi c() un reco n ocimienlO d e la probl e matica e tnica de l pais. EI reiCH'
mismo d e Arevalo te ndia ann a d istribuci6n mas amplia del poder, y e n
ningun lnom ento asumi6 un cariz e tni co . Los lnayas, (01110 todos los de-
m as ciudadanos, fu eron alentados a participar e n e l gobie rno Joca l, los
sindicatos y las organi zaciones campesinas. La promulgaci6n del C6digo
de Trabaj o, e n 1947, liber6 a los indigenas de las obligaciones de trabajo,
pOl'que protegi6 ba jo las mism as reglas a todos los habita n tes del pais. EI
go bierno se eslorz6 po r expandir la e ducacion rural , e n ge ne ral , y por
implement.a r la educaci6n bilin gue en las escuel as indigenas.
La Ley de Refonna Agrar ia favoreci6 a los indigenas, a l dcclarar qne
las tierras en disputa e ntre cOlnunidades indigenas), municipios -ge ne-
ralmentc controlados por ladin os- automatican1ente pasarfan a eslar bajo
control d e la comunidad .

Las comunidades se transjorman

Entre 1954 (caida d e Arbenz) y 1970, los indigenas compre ndie ron e l
p o rque d e l fracaso de la revoluci6n y apre ndieron a servirsc de los limita-
d os canales d emocrinicos que e l gobie rn o ponia a su disposicion: parti-
d os politicos, propaganda, e leccio nes y soborno a burocratas corruptos.

237
EI triunfo de Fidel CaSll'o en Cuba y e l yiraje hacia la izqui erda de la
Revoluci6n Cuba na ilnprimieron nuevos derroteros ala politica exterior
de los Estados Unidos. EI gobierno noneamcricano inicio acc iones politi-
cas en tres campos: primero, brind6 ayuda milita r a los gobiernos; segun-
do, reconoci6 que la vulnerabilidad de los paises de Centroamerica fre n-
te al comunismo radicaba en ]a pobreza de sus habitantes; te rcero, los
progratnas de aYllfla cxterna -que hasta en lonces habfan sido c1iseilados
e n terminos de necesidades econom icas y sociaJes- pasaron a scr un asull-
to de seguridad nacional para los Estados Unidos.
El gobicrno norteam e ricano clnprendi6 un program a de capacilacion
d e lideres comun ales, campesinos y sindicales, para alejarlos de la tellla-
ci6n comunista. Una nu eva gen e raci6n de mayas aprovech6 ese progra-
ma para canal izar sus inqui etudes y d e mandas. Sin embargo, desde el
tiempo de l gobierno de Arbenz, los sectores m as conservadores de la so-
ciedad guatemalteca habian conve rtido e n sin6nimos las palabras <dider"
y ((.omllnisla», pOl' 10 que la persecusi6n no se hizo espe rar. Esta fue mas
violellla en el campo que e n la ciudad.
EI incremento de las inversiones extranjeras promovido por la A1ian-
za para e l Progreso reperc uti6 positivamente en el mundo in digena. EI
dinamismo economico d e rivado del auge de las ex portaciones agricolas e
industriales contribuy6 a l crecimie nto de la aClividad text.il y a nesanal ,
orient.:'1da al mercado extrarregional. En consecuencia, el sistelna de trans-
pones y la comercializacion de los producLOs fu eron mas comple jos y d e-
mandaron nuevas inversiones de capilal. En las lierras altas cJn ergi6 un
numero cada vez mayor de inversionistas.
En el marco d e esa expansi6n economica, los pequenos finqueros d e
productos de subsistencia se volvi e ron cada vez mas dependientes del con-
sumo de agroquimicos, 10 que a su vez los hizo mas vulnerables a las flu c-
tuaciones de los prec ios. La identidad d e los agriculLOres indigenas, cons-
truida en buena parte a lre dedor del maiz, comenz6 a d e bilitarse.
La Igl esia Calolica tambien tuvo un a participaci6n dcstacada en los
cambios que se generaron en el periodo. En la dec ada d e 1940 introdLUo
el programa denominado Acci6n Cat61ica, con e l fin de atraer a los mayas
masj6venes y pon e rlos b~jo el control d el ciero, al t.iempo que los alejaba
de las estructuras politicas tradi cionales. Esto plante" un nuevo tipo de
conflicto d e ntro d e la. com unidades indigenas: e l enfrentamiento entre
las cofradias y la aec i6n individual.
Mas ade1ante, muchos de los sacerdotes que participaban e n Acci6n
Catolica se involucraron e n movimientos populares. Eso desperto el rece-
to de los seclores de extrema de recha, que comenzaron a visualizarlos
como un a amenaza subversiva. La Ig lesia patrocino la formacion de coo-
perativas. Pero e l cooperativismo [UVO que detener su marcha, porque e l

238
gobi e rno 10 in terprClo COll10 una inlfOlnisi 6 n de la Iglesia en Sll ('sfera elf.:'
influc ncia, mienlras que los come rcianles ladinos 10 pe rc ibie ron C0l110
una afre nla a sus intereses.
Durante la decada de 1960, dos fuerzas de cam bio translormarOIl las
comunidades mayas: por un lado, e l avance del protestantismo, qu e de-
mostr" que el pluralismo religioso era viabl e en el interior de la comuni-
dad ; y, por otro lado , el crecimiento de la produccion agricola y d e l co-
mercia , que facililo una 111ej or si luacion economica, y posibiliti'lla adqui-
sici6n de radios, lractores, bicic1etas y otros bic nes. Las lransformaci ones
asociadas con el uso de nuevas tecnologias n o provo caron la perdida de la
ide ntidad maya.
EI crecimiento econ"mico no beneficio a todos por igua!. Si bie n es
cierto ha surgido un a burguesia maya, asociad a a la Acci6n Catolica y al
protestantismo, la mayor parte de los indige nas quedaron a l margen de la
expansion economica. En terminos generales, e l problem a d e la ten e n cia
de la tie rra ha empeorado para los indige n as. EI numero creciente de
minifundios demuestra que la division de la tie rra ha sido mayor en las
zonas indigenas que en las ladin as.

Un camino de colisi6n

A fines de la decada de 1960, los militares se hab!an fortale cido con la


ayuda que les brindaba el gobi ern o de los Estad os Unidos para los progra-
mas de contrainsurgencia. La re bel ion ladina en el oriente fu e aplastada, y
Carlos Arana Osorio , el general vic torioso, gan6 facilm e nte las e lecciones
de 1970. EI control d e los militares sobre el aparato estatal fue reafirmado .
Los lideres de la guerrilla que habian logrado sobrevivir se retiraron a
la Frontera con Mexi co. Al evaluar su estrategia descubrieron que era n ece-
sario involucrar en sus luchas ala poblacion maya, y empezaron una in ten-
sa campana prose litista. EI fraud e electora l con tra d general Efra!n Rios
Montl, candidato favorito de los mayas, termin6 por radi cali zar a un sector
de esa poblacion. Ademas, las dificultades econ6micas de esos anos, d ebi-
das a la crisis p e trol era, el aumento de los prccios de los fertilizantes y el
deterioro del Mercomun , fneron n efastas para los agricultores ind!ge nas.
No obstante , las dificultades no frenaron la capacidad de los mayas
para la accion independiente: hubo campanas de alfabetizacion organi-
zadas por los grupos catolicos, se fund61aAsociacion Indigena Pro Maya-
Quiche y surgio la primera gen e racion d e mayas form ados en las aulas
unive rsilarias.
La burguesia maya se mow'aba activa a nivellocal y departamental y
buscaba proyecci6n politica nacio na!. En las e lecciones d e 1974, dos ma-

239
)'as, cand ida los por los pa rlidos po li ticos encabezados po r los mililares,
ga naro n se ndos e scanos e n eI Cong reso Nacional. Dos anos mas tarde,
Telza huic Toho n fundo e l Fre nle d e Inlegracio n Nacional, pero este tuvo
paca in cide ncia e n las zon as rurales. por la desidi a de la misma burg uesia.
En cam b io la g ue rrilla comenzo a gan ar seguido res de ntTo d e los lider es
m ayas. EI e je rcito respondio co n un a escalad a d e o p eraciones en Nebaj ,
para com batir a los guerrill cros y sus colaborad o res.
EI te rre m o to de febrero d e 1976 tuvo ne f'astas con secuencias para los
pue blos m ayas, dcbido a 10 ende bl e d e su s con strucciones. EI I<:stado no
llIvO la capacidad suficiente p ar a e mpre nde r la la re a de rcconslruccion ,
por 10 que e ntraron en e scena dive rsas o rganizaciones y los lide res mayas.
EsLO fac ilito la integracion del Comi te d e U nidad Campesina (CUC ) , que
logro con ciliar a mayas y ladino s e integra rlos e n un a so la luch a. Ante las
de m andas d e los ca mpesin os, cI gobie rno respo ndio con la fuerza d e las
arm as.
A pesar d e su s diferencias, los campesin os ladin os, los m ayas y los gue-
rrille ros se integraron a fin es d e l d ecenio d e 19 70, con el fin de enfre ntar
a l e n e migo comtm: el Estado milita r.

N icaragua: pais de contrastes

Nicaragua es un pais de contrastes po r 10 que presenta un cuadro


co m plej o . En el Pacifico el proceso d e mestiza je ha sido muy amplio, p ero ,
a unque las comunidades indige n as h an estado expuestas a la influe n cia
d e la cultura hispana durante mas d e cin co sig los, el legado indigena h a
logrado p ersistir, mediante la recreac i6n constante de la identidad indi-
ge na, te jida alrededor de la propied ad comun al de la tierra, estruc luras
de pare nte sco , practicas rituales y costllmbrcs vinclliadas al ejercicio d e l
po de r local.
En contraste. lo s grupo s e tnic.o s ase. nmdo s e n el litor;:al t.arihe de l p(lfs
se h an m antenido bastante aislados d e la o rbita d e influencia hisp an a,
situacio n que se profundizo con los dos siglos d e presencia y dominio d e
los ingleses. Se trata de grupos indige nas que hablan lenguas de la famili a
rn acro-chibcha y de poblacion es n egras y rnlliatas d escendientes d e escla-
vos, que hablan el ingles criollo. De n orte a sur se encuentran miskitos,
sum os, ramas, garifunas y negros crio ll os.
A partir de principios del siglo xx las con cesiones de tierras en e l
Iitoral caribe a las empresas banan e ras y mad e re ras irrespetaron los d e re-
ch os d e las comunidades indige nas y m odificaro n los patrones de vida
n o mada d e a lgunos grupos, los cuales p asaro n a combinar la agricultura
d e alltoconsumo con el trabajo asalariado.

240
IL USTRACI6N NU 3M. V IVIEN DA DE SUMOS, EN LA SE LVA DE I . CA KIHE DE NI CARAGUA,
(Folog rafia reproducida del libro Pers istcncia in digena en Nka ragua, con <lulorizacion de
los aUlorcs) , La alianza con los ingleses fue \'e nt''\.iosa para los misk ilos, plies, pOl' t:ielllplo,
les pe nnitio desplazar de los territorios que oc npaban, a grupos sumos, los clIa1es.'ie vieron
o bli gados a relirarse hacia las montail<ls del interior.

Mi entras los Somoza ocuparon e l poder, no mostraron una genuin a


preocupacion por los grupos etnicos minorita ri os de su pais. En 1943,
Somoza Garda fundo ellnstituto Nacional Indigenista, para cumplir con
e l mandato del Primer Congreso Indige nista Inte ramericano, celebrado
e n Mexico tres arios atras,
Ve inte a nos mas tarde el regime n so mocista in tento destruir las co-
munidades. La «refo rma agraria " de 1963, p re te ndio cOllvertir e n coope-
rativas las comunidades sobrevivie ntes. No obstan te, los efecLOs de esa ley
!ue ro n minimos. Mas afe cto a las com unidades eI auge de la agricultura
d e exportacio n , pOl'que muchos indigenas se prole ta rizaron.
A princ ipios de la d ecada d e 1960, e n e l ma rco de la Aiianza para e l
Progreso, el gobierno somocista e mpezo a preocuparse por los negros
crio llos. Tal preocupacion se materializo exte ndie ndo los servicios d e sa-
Iud y e ducacion a esas comunidades, construyendo diversas obras d e in-
fraestructura y organizando pequenas y med ia nas e mpresas productivas.
Los pobladores n egros del litora l caribe luch aron por obtener un a
distribucio n mas equitativa de los be n e fi cios d e l desarrollo nacional y re-
p resentacion politica regional. En cam bio los mi skitos enfrentaron de
dife re nte man era el desarrolli smo somocista : un a Jl1 in oria privilegiada se
acerco a la cultura mesti za, e n tanto que la mayoria se organizo en torno

24 1
ala Illovilizacion etnopoJftica contra cl regimen. Las dem andas econ6m i-
cas, la revitalizaci6n cultural y e l alcancc de! pode r politico eran e l cen tro
de sus preoctlpaciones.
En coneIu, i6 n, como 10 muestra cI mapa N'-' 26, la existencia de nu-
ITICrOSUS grupos etnicos han hccho de Ccntroamerica una region multi-
cultural y plurilingue. EslC e le me nto . introduce una dilllensi6n dife re nte
en los conflictos social es que no se debe olvidar.

ESTADO Y REdMENES POLiTICOS

Entre 1944 Y1979 se produje ron eambios muy imp0rlantes en la natu-


raleza d el Estado y en los regimenes politicos eentroamerieanos. Estos cam-
bios fueron mas profundos en unos paises que en OU-os, de aeuerdo con
factores in ternos -nive! alcanzado por la eonflictividad social, alianzas
establecidas por los sectores sociales en pugn a, espacios de participaci6n
politica posibles- y factores d e o rden externo, como Ia guerra fda, el
viraje idco l6gico d e la Revolucio n Cubana, la influe ncia de la Teologia de
la Liberacion y la injereneia d e Estados Unidos en los asuntos region ales.

I ntentos reformistas

La Segunda Guerra Mundial se hallaba en su apogeo cuando comen-


zaron a soplar aires de renovaeion politica en Centroamerica. En Costa
Rica, eI proceso de reformas se inici6 en fecha mas temprana que en los
demas paises, durante la administraci6n del doctor Rafael Angel Calderon
Guardia (J940-1944) . La caida de las dictaduras de Ubico, en Guatemala,
y de Hernandez Martinez, en EI Salvador, fue eI primer paso que permitio
realizar refo rmas modernizadoras e n esos paises_ Ho nduras tambi';n tuvo
un proceso reformista, pero este, en su mayor parte file realizado por mi-
Iitares avalados por las Fuerzas Armadas. EI unico dictador que se mantu-
vo en e l poder durante los anos de la posguerra fu e Anastasio Somoza.
Las reformas emprendidas abarcaban cambios en el marco legal
-principalmente laemision de constituciones lTlodernas, leyes de fomento
industrial y codigos de trabajo-, la creaci6n de nuevas instituciones que
respondi eran tanlo a las demandas de diferentes sectores sociales como a
la necesidad d e modernizar el Estado, apertura politica (aunque dentro
de ciertos Iimites) y reformas agrarias las cuales procuraban una mejor
distribucion d e la riqueza en e l agro.

242
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El reformis11lo en Costa Rica

En Costa Rica, los sectores sociales que clam aban porjusticia social y
rdonn as eco no micas y politicas tuvieron mayo res oportun idades d e de-
salim' e l orde n establecido. En 1940 aSllmio la Presidencia de la Re pllbli-
ca e l doc to r Ra fae l Angel Calde ro n G uardia , jove n politico que habra es-
tudiado en Be lg ica, donde conocio los planteami e nlOs de la Iglesia Cato-
lica acerca de 1a «cuesti6n soc ial».
EI gobi e rno de Calder6n Guardia estableci 6 un a aEanza con un sec-
tor d e la Igl esia Cato lica, encahezado por cl Arzobispo de SanJosc, mon-
senor Vrctor Manuel Sanabria, y con el Partido Co munista, liderado pOI'
Manuel Mora Valverde. Esa " liam.a him posible que, en 1942-1943, sc
promulgara e l Codigo de Trabajo, se inclu)'era en la Constitucion un ca-
prtulo de Garantras SociaJcs y e l principio de la fun cio n social de la 1'1'0-
piedad, se crearan la Caja Costarricense del Seguro Social y el Consejo
Nacional d e la Produccion y se abriera la Unive rsidad de Costa Ri ca.
Despue s de la aprobacion d e l C;bdigo de Trabajo, el movimi e nto po-
pular romo un notable impulso . EI nllluero de sindi caros y de fed erac io-
nes de trabajadores aumen to ; ademas se fllnd aron dos confederac iones:
la Confede racio n de Trabajadores de Costa Rica (CTCR) y la Confedera-
ci6n Coslarri cense de Trabajadores Renlln NOVarUI11, inspirada en la doc-
trina social d e la Iglesia Catol ica .
No obstant.e, el gobierno pe rdio apoyo popular n'ipidamente , co mo
consecue n cia de l alza en e l COSLO de la vida y d e reiteraclas denlln cias de
corrupci6n. Algunos cakta1eros poderosos se alcjaron de las tiendas de l
gobierno, clIando este declaro la guerra a Alem ania ), cxpropi6 los bie ncs
de ciudadanos ale mancs rcside nles e n el pais. Inl e lecluales y mie mbros
de la pe que lia burguesia 0PU CS l OS al regimen sc agilitinaron en eI Ce ntro
para el Estudio de los Probl e rnas Nacionales, ')ue , e n 1945, se convirt.io e n
el Partido Social Democrala, origen de Liberacion Nacional.
En los co micios convocaclos para 1944 trillnfo e l Bloque de la Victo-
ria, con cI apoyo del gobierno y SllS seguidores. AI asumi r la presidenc ia,
Teodoro Picado cumplio su cornpromiso de respe tar Ia reform a social y
"oleo sus esfu e rms hacia la modernizacion del Estado. A partir de 1946 la
situacion del gobierno se torno mlly dificil , al estall ar la guerra fda. Los
Estados Uniclos veian con gran d e sconfianza e l apoyo de los comunistas al
gobierno de Picado , pero este n o podia desembarazarse facilm eme de
ellos porque eso implicaba la perdida de gran parte de su base social.
Para las c1ecciones de 1948, la oposicion se agrupo alrededor de l pe-
riodista Oti lio Ulate Blanco. Las e1ccciones se realizaron en un c1ima po-
litico muy alterado, debido a la persecucion de los e n e migos d e l regime n
)' la presun cion de fraude e lectoral. Calderon Guardia, qui en se habra

244
presen tado corno candidato en busca de un segundo periodo presidcn-
cial, resulto perdedor frente a Ulate. La anulacion de las eleccioncs por
parte del Congreso provoco queJose Figlleres Ferrer sc levan tara en ar-
mas contra el gobierno de Picado. La guerra civil se prolongo por un Illes
)' culn1ino con la victoria de los insurrectos.
LaJunta de Gobierno, encabezada por Figlleres, se mantuvo en el
poder durante 18 meses. EI Partido Comunista y el sindicalismo de iz-
quierda [ueron ilegalizados, pero no hubo marcha atnls en el proceso
refonnista, y las instituciones creadas durante la primera adlllinistracion
del doctor Calder6n Guardia fueron respetadas y fortalecidas. Adcmas, la
Junta nacionalizola banca, abolio el ~jercito como instituci6n perrnanen-
te y flllld6 inslituciones vitales para el desarrollo cconomico y social del
pais, como el Instituto Costarricense dc Elcctricidad. Finalmentc, la Cons-
tiwei6n de 1949 incorporo las reform as de la decada.
LaJunta entreg6 el poder aVIate y la situaci6n politica se estabiliz()
poco a poco. En I 953,Jose Figueres Ferrer, candidato del Partido Libcra-
cion Nacional, asumiola presidencia, y, desde entonces, el PLN ha desem-
penado un papel preponderante en la vida politica del pais. Ademas, Ita
fortalecido la institucionalidad delllocf<:ttica, con base en 1a alnpliaci6n
de oportuuidades educativas y la creaci6n del Tribunal Supremo dc E\ec-
dones, institucion que garantiza la pureza del sufragio.
Durante los decenios dc 1950 y 1960, Costa Rica march" por el cami-
no de la estabilidad social, favorecida por la conjuncion de varios facto-
res, entre los cnales destacan la prosperidad de la caficultura, cl desarro-
llo induslrial y los beneficios derivados del crecimiento del comcrcio in-
terregional, en cl 111arco del Mercomlln. La n1odernizacion del aparato
estatal y la creacion de gran nLllllero de instituciones pllbJicas permitie-
ron un ensanchamiento de la clase media urbana y la elevaci6n del nivel
de vida de los costarricenses.
EI respclo al orden constituciona! posibilit6 la alternabilidad en cl
poder entre el PLN y los grupos perdedores del conflicto armaclo de 1948.
La izquierda no pudo participar en los procesos electorales, porque el
partido comunista permanecio proscrito hasta 1975. EI sindicalismo co-
munista, prohibido clespues de la Revoluci6n de 1948, rcapareci6 en la
decada siguiente, sobre todo en la zona han an era del sur. Por Sll parte, el
sindicalistTIo socialdemocrata solo tuvo una expansion lirnitada , debido al
poco interes que e1 PLN puso en ese tipo de organizacion, y tambien al
anticomunis1110 que caracterizaba a la sociedad costarricense en el con-
texto de la guerra fria.
En los anos comprendidos entre 1970 y 1978, el PLN llevo hasta
sus liltilllas consecuencias el intervencionismo estatal, mediante la crea-
cion de nuevas instituciones pllblicas. No obstante, la fundaci6n de la

245
Corporacion Costarrice n se de Desa r ro ll o (CODESA), y las n u mero-
sas e m presas creadas por esa corpo racion, n o imp id ieron q ue los pro-
du ctos agropecuarios con tinua ran sien do Ia prin cipal ll le nte de d ivisas.
Ademas, durante esos anus, e l e nde udam ie nto externo alcanz6 niveles
insospechados.
A fi nes de la d ecad a de 1970, el mode lo d e desarro llo econ omico qu e
se ha bia imp le m e ntad o en Costa Ri ca com e ll zo a d ar m uestras de agota-
mie n to . Dos da ros sintomas de esa situaci6 n fueron la agudizaci6n de los
co nni ClOS, que se manifesto e n el increme nto de los movimi e ntos huel-
guisticos y la aparicio ll de nuevos acto res soc ia les, e n esp ecial en e l secto r
urbano , don d e grupos d e familias d esprovistas de vivie nda invadian te rre-
n os d e propie dad privad a. La lueha d e los campesinos po r acceso a 13
tie rra tatnbie n se incretne nt6.
Las e leccio nes d e 1978 fu eron ganadas por la o posicio l1, e n cabezada
po r ellicen ciado Ro drigo Carazo Odio. Durante SIl gobie rno , e l pais tuvo
que sulCir las con sec uen cias de los p ro ble m as ce ntroamericanos, e n parti-
c ular los de N icaragua. Adem ~ls, la crisis econ o mi ca mundial, provocada
po r el incre mento e n e l precio de l pe tro leo , vino a agravar la situacio n y
e l p ais se hundio e n un a profunda crisis.

Guatemala: la revolucion en marcha

Entre 1944 Y 19.54, G uate m ala vivio (liez a nos de efervescen cia social y
d e esperanzas refo rmistas. Tras la caida d e Ubico, el poder quedo e n m a nos
d e unaJunta G ube rnativa, la cual preparo los comi cios d e dicie mbre d e
1944. En esa ocasio n r esulto e legido preside n te Ju an J ose Areval o, por
Ul1 a am p lia m ayoria.
AI mismo tiem p o que Arevalo as umi o el mando , se promulgo una
n ueva constitucion , que d erogo la ley contra la vagancia, res tituyo la liber-
tad de expresion y d e pre n sa , ampli o el d erech o al VOLO (queda ro n exc1ui-
das las mujeres an alfabetas) , recon oci6 la auto nomLa llniversilaria, con-
te mplo la libre sindicalizacion y el d e rech o d e huelga , se nto las bases del
fu turo regime n d e segur id ad socia l, esta blecio la inde pende nc ia d e l ejer-
cito fre nte al po d e r civil y reco nocio el principi o de la fun cion social d e la
p ro pied ad.
Dura nte eI gobie rn o de Ar evalo se in crem e nto la inve rsion publica y
un a mayor cantidad d e recursos se destino al biencstar social (conslruc-
cio n d e escue las, h o spita les y vivie ndas, campanas d e alfabetizacion y re-
o rganizacion del sistema educativo ). Ta mbie n se establecio e l Instituto
Gua temalteco de Seguridad Social, se fundo e l [nstitUlo Nacional Indige-
nista y, e n 1947, se promulgo e l Codigo de Tra bajo.

246
II.USTRACI O N N. ~9. J UAN .l OSE AREVALO . PRE·
SI DE NTE DE GUATEMALA. £1 educador }' liI oso-
ro Jua n Jose Areva lo lo mo poscsion de la prcsi-
denc ia de Guatemala cI 15 de m a nn de 1945.
Durante Sll gobierno afront6 veintitrcs imcl1los
de go lpe de Estado.

La emision del Cod igo d e Trabajo rue fu ertemente critieada por


los terratenie ntes y los empresarios urbanos, qui e n es proeuraban la
desestabilizaeion politiea del regime n. Arevalo tuvo que e nfre ntar nume·
rosas intentonas golpistas y un a campana internacional de desprestigio,
orquestada por e l gobierno d e los Estados Un idos, que 10 tildaba d e
"procomunista" . La realidad rue que la aplicacion del Codigo de Trabajo
tocaba los intereses de empresas norteamericanas - en especial de la
UFCO y la IRCA- y esto genero la oposicio n norteamerican a al gobierno
de Arevalo.
En mano d e 1951 asumio e l mando J acobo Arbenz, ganador del proce-
so electoral reali zado e n 1950. Con el apoyo de los partidos politicos que
defendian el proceso refo rmista, los comunistas y e l movimiento obrero ,
Arbenz asumio tres gran des compro misos: lograr la inde p endencia eeo·
nomica del pa is, promover la industrializacion y la refo rma agraria y ele·
var el nivel d e vida de las gran d es mayorias.
De las medidas propuestas y ejecutadas por Arbenz , la que m ayor
reaccion provoco fu e la Ley d e Reforma Agraria Uunio d e 1952). Con
esta ley el gobierno se proponia e ntregar tierras a los campesinos, exten·

24 7
de l' c l cn~d il o agricola, brindar asistenci a tf>cnica, sUln inistrar fcrtil izan-
tes, se millas y ganado de labranza r devo h'er a las comunidades las li c rras
que estuvie ran e n litigio . De aC liercto con la Ie),. podian ser obje to d e la
refarma agraria las tien"as q lie no estll\'i c ran cultivadas, las arrennadas,
las fineas n ac ionales 0 del Estado )' las mllnicipales. EI propio Arbenz se
encarg6 de dirigir 1a reforma , «Ia [rula mas preciosa de 1a revo!uc i6n »,
SCgLIIl SllS palabras. Para e llo conto con e l auxilio de numerosos comi les
agrarios locales, intcgrados por canlpcsinos y trab~adores agrico las.
La reforma agraria provaco cl malestar de los propie tarios afec Lados,
qllienes canalizaron sus acc io nes a traves de la Asoc iac i6n Gen e ral de
Agricllilores (A(;A) . Pese a la oposicion . e l gobie rno continuo con la re-
forma. Para junio de 1954 habia emitido mas d e mil d ec.-elOs d e expro-
piacio n , qu e co rrespondian a easi 604 mil hectareas d e tien-as p rivadas,
mas 2S0 mil h ectareas d e fin cas naci on a les. El reparto benefici" a unas
100 mil famili as. Ademas, se brindo credito a los campesinos.
La reform a agraria pro fundizo la escisio n politica de la socied ad gua-
temalteea. Las fu e rzas que a poyaban a l gobie rno y defendian las conquis-
tas de la revolucion careda n d e la fortal eza y la coh esi6n necesarias para
e nfrentar ta oposicion al regimen. La Ig lesia Catolica, por su parte, reali-
zo una inten sa campana a nticomunista , que cal6 hondo en todos los es-
tratos sociales. Ye1 ejercito , a l principio defensor d e la causa revo luciona-
ria, comenzo a re plegarse a las fi la'i conservadoras. En esas cond iciones ,
la experiencia refo rmista guatemalteca tenia los dias contados.

La transici6n oligtirquica en El Salvador

Tras la caida de Maximiliano Hern andez Martin ez, EI Salvador gozo


d e cierta apertura politica, la cual pe rmilio la organizacion de partidos y
un a ac tiva participacion de diversas organizaciones de lrabajadores, estu-
diantes y profesionales. EI doctor Arturo Romero, lider populista, se per-
filaba como eventual ganador de los comicios convocados para e n ero de
1945. Los te rratenienles miraban esa e leccion con desconfianza, y los
militares tralaron de impedir que Rome ro Ilegara al poder.
En octubre de 1944, un golpe de Estado al presidente provisional,
Andres Ign acio Menendez, aborto eI proceso d emocnitico. EI p oder rue
asumido temporalmente por el corone l Osmin Aguirre, quien habia so-
bresalido en los hechos sangrientos de 1932. Con e l se impuso un regi-
men de terror, se desarticulo la oposicion politica y muchos salvadore nos
d e bieron marc har al exilio. En 1945, lras un oscuro proceso e lectoral ,
asum io el pode r el general Castaneda Castro . Este gobie rno empez6 con
el proceso de modern izacion del Estado salvadoreno, pero, acusado de

248
(orrupcion, Castaneda no Il eg" al final d e su mandato , porquc fil e dc-
pU CS IO por un grupo d e oficiales j ovenes, e n Cebrero de 1948.
EI go lpe de Estado que derroco a Castaneda es conocido e n la hiSloria
salvacloreii.a como «e l golpe de los mayores», de bido a que fue encabcza-
do p o r oficiales j ove n es, de rango medio, qu e estaban dispueslOs a apre-
surar los cam bios revolucionarios que apoya ban. Se insta lo un Conse jo d e
Gobierno Revolucio nario, integrado por civiles y miliLares, eI Cllal procla-
Ina su intenci6n de democralizar el sistelna de go bicrno y elevar cl nivel
de vida de los salvadorenos. No obstantc , las intenciones del Consejo se
vieron Iimitadas, porque los militares y la o ligarquia vigilaban que las po-
Iflicas pllblicas no amenazaran sus intereses.
Durante el alio 1949 se prodltio un cnce ndido debate ace rca d e algu-
nos puntos que contendria la nueva constituci6 n. Esta se promulg6 a prin-
eipios d e setiembre de 1950, d e tal man era que cuando as umi" la Presi-
den cia de la RePllblica eI coronel Oscar O so rio , candidato del Partid o
Revolucio na rio d e Unificacion De mocratica (PRUD) , pudo con Lar con un
marco legal adec uado para realizar las tran sCormaciones que impulsaba
su partido. Durante e l gobierno d e Osorio se modernizaron Ia economia
y la administracion pllblica, se emitiola Ley de Fomento d e Industrias d e
Transformacion , se estableciero n regulacion es labora les, se fundaron
nuevas instituc io nes (Instituto d e Seguro Social, InstituLO de Vivienda
Urbana, Instituto d e Colonizaci o n Rural e Instituto Salvadoreno de Fo-
menlO d e la Produccion) . Tambie n se establec i6 el impllesto sobre la ren-
ta y se realizaron importantes obras de in[raesLructura. Ade mas, se in crc-
mentaron las relacio nes con los pafses de la region y se se ntaron las bases
para la panicipacion del pafs en e l Mercomun.
Pero los logros en el can1po econom ico y administrativo no estuvie-
ron acom panados por un proceso de dem ocratizaci6n polftica. Por 10
contrario, se emitie ron leyes que servian para controlar las organizacio-
nes populares. Ade mas, el Co nsejo Electoral fue vigilado por el partido
en e l gobierno , con 10 cual se ce rro la posibilidad de una limpia compe-
tencia e ntre partidos politicos. De hecho , se impuso un regimen d e parti-
do unico, y los militares poco a poco sustituyeron a los civiles en los cargos
principales de la admin istracion pllblica.
En eI proceso e1eccionario d e 1956 triunfo eI candidato oficial del
PRUD, coronel Jose Marfa Lemus, quien realizo esfuerzos por ampliar eI
apoyo social a su gobierno . No obstante, entro en pugna con sectores del
ejercito que se oponfan a la apertura polfti ca, y, al ver que la situacion se
Ie escapaba de control , empre ndi o una viole nta represion. En octubre d e
1960 un golpe militar puso fin a su gobierno.
Tras la cafda de Lemus e l poder fue ejercido por una Junta de civiles y
militares, la eual dio cierta Iibertad en e1 campo politico. En enero de

249
1961 el poder fl le asumido por un Directorio Civico Mil itar, que prosi-
guio con un moderado reformisl110 . Los logros principales d e l Directorio
[ ueron la reestruc turacion de la Compaiiia Salvado rdia del Cafe, la reor-
gani zacio n del Banco Ce ntral de Reserva y de l Banco I-l ipo tecari o, la re-
g ulacio n de los salarios y de las co nd iciones d e trabaj o, tanto e n e l campo
como e n la ciudad. Estas med idas causa ron una fue n e reaccion d e la o li-
garquia.
A med iados de 1962 asum io la presiden cia J ulio Adal berto Rivera,
quien h abia participado e n las e lecciones com o can d idato unico. Duran-
te su gobie rn o hubo cie rta estabili d ad social , favo rec ida POf la ex pa nsio n
econ o mica. EI re formism o con tinuo: en 1963 se pro mulgaron el Cod igo
de Trabaj o )' una nueva ley elec to ra l que garantizo y estimulo la parti cipa-
cion d e los g rupos de oposicio n. EI incremento d e ll1l'ime ro d e trabaj ad o-
res urbanos y la ampliacion d e la capa de burocratas y profesion a les Iiga-
dos a las in stituciones publi cas, tornaron mas compleja la organi zacion
popular. Las d e mandas d e mejores condicion es d e vida y mayor apertura
politica se incre mentaron. La division social iba e n aumento, y los g rupos
paramilitares empezaron a aparecer en escena.
Las eJecc io nes de 1967 fu e ro n ganadas por e l ge ne ral Fidel San chez
Hernandez, a quien Ie correspo ndio enfre ntar e l conllicto bel ico e ntre
Honduras y EI Salvador, con ocido como «1a guerra d e l futbo!» , a medi a-
dos dejuli o d e 1967. Fuertes sentimientos nacion alistas, surgidos al calor
del conllicto arm ado, fueron aprovechados por el gobierno y eJ ej ercito
para conquistar apoyo popul a r. Sin e mbargo , este rue un resultado pasa-
jero ante e l d e te rioro de la situacio n economi ca y la negativa d e am p lia r
los espacios de participacion po litica.
Para las e lecciones d e 1972 se formo una coalicion de partidos d e
oposici on -Ia Union Nacional Opositora (UNO) - cuyo candidato ,J ose
Napol eon Dua rte, obtuvo e l mayo r numero d e votos, p ero no la mayoria
constituciona l. La Asam bl ea Legislativa fa110 a favo r d e l candidato ofi cia l,
coronel Arturo Armando Mo lina. Asf quedo pate nte, de nuevo, la fa lta d e
disposicio n para realizar procesos e lectorales amplios y legitimos.

Honduras: reformismo «liberal» y reformismo militar

Carfas Andino habia logrado un control tan efectivo de la vida politi-


ca hondure iia, que pudo abandonar el poder cuando 10 creyo oportuno.
En octubre d e 1948 se realizaron e lecciones, e n las cuales resulto triunfa-
dorJuan Manue l Galvez, ex Min istro de Guerra, Marina y Aviacion d e la
dictadura d e Cartas. Galve z asumio la preside n cia e n enero de 1949, e
inauguro un proceso de modernizacion econo mica y politica.

250
LA GUERRA DEL FUTBOL

A mediados dejulio de 1969 los gobiernos de El Salvador y de


Honduras se enfrentaron militarmente. EI 15 de julio de 1969 los
peri6dicos publicaron uu comunicado que expresaba:

"La Asamblea Legislativa de la Repllblica de El Salvador pur el


voto unanime de sus miembros, acuerda:
Primero. Censurar cncrgicamente los alropellos de que
estan siendo victimas los saivadoreJios residentes en la vecina
Republica de Honduras, a los cuales les han sido conculcaelos
sus mas elemelllales derechos humanos; se han perpctrado
toda clase de abusos, con lujo de barbaro sadismo; se ha de-
sarraigado a nuestros compatriotas de los lugares que habian
adoptado como su pro pia resielencia, donde habian [onnado
su familia y donelc habian servido con el amor que se tiene a
la propia patria, todo ella respetando los principios mas ele-
mentales elel derecho, de la justicia y de la equielael.
Segundo. Es lamentable que se haya tornado como moti-
va aparente para el inicio de estos acontecilnientos el resulta-
elo de los llltimosjuegos internacionales de balompie; mOlivo
pur demas [util, cuando en realidad la verdael es que todo no
es mas que el triste resultado de una injusta campana de odio
y descredito, realizada en contra de los salvadorenos, en el
vecino pais, durante alrededor de veinte anos; esta campana,
tan infundada como injusta, culmina hoy en una rep ugnantc
lllasacre.»*

Ese comunicado demuestra el grado alcanzado pur las pasio-


nes. En realielael, el verdadero origen del conflicto debe buscarse
en el desarrollo diferente que ambos paises habian alcanzado en
el Mercomlll1. El Salvador habia logrado un importante desarro-
llo industrial y era autosuficiente en granos basicos, por 10 que las
fronteras del pais paulatinamente se cerraron para los productos
agrfcolas hondurenos. Honduras, por su parte, era uno de los prin-
cipales compradores de bienes industriales producidos en EI Sal-
vador y refi'gio de inmigrantes desposeidos de tierras. La guerra
esta1l6 (uando tropas hondurenas expulsaron a cientos de campe-
sinos salvadurellos y los obligaron a volver a su pais de origen.

L'"
i
La Nacion, Costa Rica, 15 de julio de 1969, pag. 6.
~-- --.- ..-- - _._----------_ ..
Durante e l gobicrno galvista se diversifico la produccion agricola, c l
credito bancario se ampli6 para financiar nuevas actividades econonli cas,
el desarro ll o de la industria lige ra se vio [ivorecido por la expansion de la
agricultura come rcial , se crcaron e l Banco Central y cI Banco Nacio nal de
F'omento y se establccio el Ministe rio de Agricultllra.
La adluinistraci6n de Galvez lanlbien permilio cie rta apertura politi-
ca , 10 que favoreci6 el retorno de los cxiliados y e l sw -girn ien to de part i-
dos politi cos. En abril de 1954 se hll1do el Parti do COll1 unista Hondllre-
no, eI cual tuvo lIna importantc participacion e n la hllclga banan e ra d e
1954, favorec io la organizacion si ndical YIlloslro a los grupos domin antes
que no e ra posible segllir gobernando con excl usio n de otros seClores
social es.

ILUSTRACION N!l 40. MUJERES SOUDARIAS CON LA IIUELGA BANANER>\. 19!1tl. A prin ci-
pios de mayo de 1954. los trabaj ac\ o res de la Te la Railroad Company iniciamn una huc lga qu e
parali z61a ac th'id ad ban anera cit'" Hondu ras. DC'!\PlU:'S cit" rim llwses de luella consig ui ero ll Clue
In compaiHa aceptara la orgallizaciull de sindicatos en las pbnlaciones.

En 1954 se celebraron com icios libres. Ninglln cand idato obtuvo ma-
yor!a absolula, aunque eI candidato del Partido Liberal, Ramon Villeda
Morales, alcanzo el mayor nllm e ro de sufragios. EI Congreso, encargado
de design ar al can didato ganador, rue paralizado por los sectores conser-
vadores. Galvez renuncio, y Julio Lozano Diaz tomo e1 poder como ,~ e re
Supremo del Estado». No rue sino hasta en 1957 cuando Villeda Morales
pudo asumir e l mando, tras un go lpe militar comandado por una gene ra-
cibn d e ofic iales de recien te graduacion, que puso fin a las intenciones d e
Lozano de confirmarse como presidente constitucional mediante fraude
electoral.

252
En 1957 se promulgo un a nueva Carta Magna, la clIal concedfa gran
auLonoll1ia a las Fuerzas Annadas, y, en noviembre, Ramon Vi lleda Mora-
les rue elegid o preside nte de H onduras, con el acu erdo de dive rsos seClo-
res sociales. EI gobie rno empre ndi 6 la modernizac i6 n d el pais, medi ante
la creacion de insliluciones autonomas de servicios, la promulgacion de
la Ley de Fome nto Industrial, la e mi sio n del Codigo d e Trabajo y e l in cre-
men to del prcS llpl.leSIO para la e ducacio n publica. Adcmas, los estudi an-
tes conqui staro n e l derecho a la paridad de la rep resentacia n estudian til
e n cJ gobierno universitario, y e l regimen apoya e l sindi calismo democni-
tieo y h.md6 e l InsLituto Agrario Nac ionai.
EI gobierno d e Vi ll eda cont6 con cl apoyo d e los seClores medi os y
popu lares, p e ro e l re lormismo fu e d esap robado por las e mpresas extran-
jeras, los industriales, los come rcia ntes, la o ligarquia terrateniente y las
Fuerzas Armadas. En visperas d e los co micios de 1963, Ville da fue vic tima
de un golpe d e Estado. El gobi erno [ue encabezado por cJ jere de las
Fuerzas Arm adas, gen e ral Oswaldo Lopez Arellano , qu ic n luego asumi6
<degitilnam e nle ) e l poder, tras un proceso e lectoral viciado. Su regimen
se caracteriz6 poria represi6n contra los lideres politi cos y gremiales opo-
silores.
Ho nduras, al igual que los Olros paises de la regio n , prese ntaba un a
g ran concenLrac io n de la propiedad agraria. Sin e mbargo, se distinguia
por la can tidad de explotacion es e n p recario y p or la vast.a extensi6n de
las lien-as nacionales y ejidales. Aunq ue desde la deeada de 1950 se h a-
bian realizado esfucrzos por canaiizar cJ descontento ci:unpesino -pro-
gramas de colon izac ion agrfcola, crcacio n del Inslitli lo Nacional Agrario
(INA) y e misi6 n d e la Ley de Re form a Agra ria (1962 )-, d ura nte elma n-
dato de L6pez Are llano los confli ctos agrarios se in crementaron , por 10
que, en 1969 , eil NA dcc idi6 adq uirir tierras y organizar coo pcrativas cam-
pesinas.
A pesar d e esas medidas, la fa lta de garantias in c1 ividuales y la rcpre-
sion del movinli e nto pop ular gc nera ron gran dcscontento con tra c l n~'g i ­
mcn de L6pez Arellano. No obstant.e , el conflicto belico con EI Salvador
provoc6 fu ertes sCl1limi e nlos rle unidad naciona l, 10 que fa cil it6 la S U$-
cri pei6n d e un pacto e ntre los Partidos Liberal y Nacionai. En los com i-
cios de 197 I triun[" Ram6n Ernesto Cruz, candidato del Partido Nacio-
nal, pero L6pez Arellano aS11mi6 la J efa tura de las Fue rzas Armadas.
Durante e l gobie rno de Cruz, e n eI campo se cxacerbaron las tensi o-'
n es, y en todo e l pais re in6 un dim a d e gran inestabili dad. A principios d e
di ciembre d e 1972, L6pez Arell ano retom6 el pode r m e d iante un nu evo
golpe d e Estado y e mprendi6 nuevas medidas refonn istas, como la e li m i-
n aci6n d e la contribuci6n [orw sa d e los e mplead os pllbJicos al partido e n
eI poder, e l establec imiento de un impueslo banane ro, la creac i6n d e Ia

253
Ley de Salario Minimo y la Ley de Ref()rma Agraria, de cnero de 1975,
Tambien otorgo a los campcsinos el dcrecho de cxplolar las lien'as del
INA pOl' dos a1105 y obligo a arrendar las tierras ociosas.
Las medidas tomadas por el regimen militar para resolver la angus-
liante situacion del campesinado no redujeron el gran lalifundio, pero al
men os permitieron que casi 24 mil familias, organizadas en mas de 600
asentarnientos calnpesinos, tuvieran acceso a la tierra. La £()rmacion de la
clnpresa asociativa lsletas, en tierras expropiadas a la Stanclar Fruit Com-
pany, fue una de las acciones mas ilTIportantes de la reform a agraria hon-
durena.
Las presioncs de los sectores rn£1s conscryadores de la sociedad y
de las compaiiias bananeras d ebilitaron los alcances del conjunto de re-
fannas. A1 misnlo tielnpo, un proceso de canlbios en el ejercito culmina
con la separacion de los cargos de Jefe de Estado y Jefe de las Fuerzas
Armadas. Este segundo pueslo fue asumido por eI coronelJuan Alberto
Melgar Castro. En abril de 1975, Melgar sustiluyo a Lopez Arellano como
Jefe de Estado, por decision del Consejo Superior de las Fuerzas Arma-
das. Inicialmente cl reformismo no sc detuvo, pero luego e l gobierno
asumi6 posiciones Inas conservadoras y modera la aplicacion de la polfti-
ea agraria.
Los resultados del reformismo agrario en Honduras fueron limitados.
No se logr6 increnlentar la producci6n alilnentaria, y, si bien es cierto se
formaron nlUl1erOSas cmprcsas asociaLivas, cspccializadas en productos
de exportaci6n, la comercializaci6n rue asumida por e1 gran capital na-
cional y transnacional. En cambio, Lnvo importantes consecuencias socia-
les y politicas, porque logro redllcir el rlescontento de los campesiuos.
En agoslo de 1978 Melgar se vin obligado a dimilir, porqlle sus preten-
siones de convcrtirsc en presidente constiLtlcional eran mal vistas pOl' al-
gunos sectores dentro de las fuerzas armadas. Durante dos anos el poder
fue ejercido por unaJunta IVIilitar, la cual sent6 las bases para una tllllida
apertura democratica, <11 tielnpo que brind6 todo su apoyo a la adlninis-
traci6n Reagan para atacar al rcgilncn sandinista.

La dinastia samacista

La Cnyll11tura de la Segunda Guerra Mundial permiti6 que cI diclador


de Nicaragua Anastasio Somoza Garda consolidara su podcrio economi-
co, mediante la expropiaci6n de los bienes de ciudadanos alemanes, las
importaciones ilegales, y las concesiones a cOlnpaii.ias extranjcras para
que explotaran recursos naturales de su pais. AsilnislTIO, el apoyo de los
Estados Unidos y de la Guardia N acional cimentaron su poder politico.

254
La caida de los dictadores de El Salvador y de Guatemala increment(,
el descontento en Nicaragua, ante las prelensiones de Somoza de penna-
necer en el poder. En consecuencia, para las elecciones de 1947 designo
como candidato del Partido Liberal a Leonardo Argiiello, quien resulto
elegido Presidente. Arguello Ie resulto deslcal, pues destituyo a Anastasio
Somoza Debayle, su hijo, de ]a comandancia de la guardia presidencial,
notnbr6 a reconocidos antis01nocistas en S11 gabinete y proclanlo Ia elilni-
naci6n de la corrupci6n y de la influencia rnilitar en el gobicrno.
Argiiello duro solo 25 dias en el ejercicio de Sll cargo, porque fue de-
rracado por SC)lllOZa Garda. Dos gobiernos provisionales, el de Benjarnin
Lacayo Sacasa y el de Victor Roman y Reyes -tio de Somoza- no fueron
reconocidos por los Estados Unidos y sufrieron del aislamiento interna-
cional. Somoza Garcia logro controlar la adversa y compleja situacion po-
litica, por medio de la represion y de la firma de un pacto con el Partido
Conservador, en el que prometia convacar a «elecciones libres» en 1951.
Estos comicios, como era de esperar, [ueron ganados por Somoza Garcia.
A fines de setiembre de 1957, Somoza murio en un atentado, cuando
se disponia a ser reelegido. Pero su muerte no significo el fin de la dinas-
tia, porque sus hijos se afianzaron en el poder: Luis asumiola presidencia
y Anastasio tomo bajo su controlla Guardia Nacional.

Reacci6n a los procesos reformistas

La profunda crisis politica que afecto a Centroamerica en la decada


de 1980 tiene sus raices en los treinta anos que Ie precedieron, porque los
procesos reformistas que respond ian a las aspiraciones legitimas de am-
plios sectores sociales fueron abortados 0 no tuvieron la profundidad que
era de desear.
La reaccion a los procesos reformistas provino, a nivel in lerna, de los
sectores sociales que se sintieron perjudicados can las reformas y, a nive}
externo, del gobierno de los Estados U nidos. EI contexto in ternacional,
caracterizado por la guerra fria y el sistema bipolar de la posguerra, pro-
voco que los gobiernos norteamericanos actuaran con gran celo para pro-
teger la cuenca del Caribe, zona bajo su influencia y de gran importancia
geoestrategica.
Las tensiones se exacerbaron a partir de 1959, tras el triunfo de la
Revolucion Cubana, porque bajo su influencia las nuevas generaciones
de intelectuales y dirigentes de organizaciones populares se radicaliza-
ron: dejaron de lado la luch a por conseguir aperturas democraticas, y,
mas bien, buscaron la transformacion global de la sociedad. Fue entonces
cuando brotaron los primeros movimieutos guerrilleros.

255
La reaccion de los Estados Unidos n o se hi zo esperar: el Presidentc
John F. Kennedy anuncio c l Program a de Alia n za para EI Progreso, que
promovio un reformismo mode rad o para hacer fre n Ie a las propuestas
revolucio nari as. Sin embargo, los seClores conservadores centroalnerica-
nos se opusie ron hasta a la reforma grad ual y e ndurccieron sus posicio-
nes. Como resultado , los ejercitos fu e ron reforzados en todos los paises
de la regio n , co n la tmica excepcion de Costa Ri ca.

La contmrrevolucion en Guatemala

La reacc ion mas severa con Ira los procesos d e modernizacion y de


cambio se dio en Guatemala, don d e e l gobie rn o de Arbenz rue derrocado
d e acuerdo con la e strategia pre parada por la Central de 1nte ligencia de
los Estados Unidos. El argumento fu e la influe n cia de los comunistas e n
el gobie rno y e l peligro d e la pe n e tracio n d e la U nion Sovietica e n Cen-
troamerica. EI plan con sistia e n in vad ir Gu a te mala desd e territorio hon-
durel10, y, al mismo tiempo , realizar una fu e n e campana propagandiSli-
ca, co n el fin de minar el apoyo inte rn o a l gobierno. EI 17 de junio d e
1954, tropas invasoras, al mando del co ro n el Carlos Castillo Armas, ingre-
saron e n te rritorio guatemalteco. EI e jercito se n ego a com batir y a distri-
buir armas e nlre los comites clvicos de a poyo a la revoluci6n.
Dias m,,, tarde, Arbenz renuncio a la preside ncia y entrego el poder a
un a JunIa Mililar. Finalmenle, e l 7 d e julio d e 1954, Caslillo Armas hie
inveslido como Jefe de Gobierno. Durante su administraci6n se echo
marcha atras can las refornlas realizadas durante la decada revoluciona-
ria: los lerrate nientes rccuperaron las ti en 'as afectadas por la reforma agra-
ria; las organizaciones calnpesinas y obreras, tachadas de cOlllunistas, fne-
ron d esarticuladas; e l Codigo de Trabajo fue modificado; el d erecho al
sufragio de nuevo fue limitado a quie n es sup ie ran leer y escribir, y la per-
secusion politica volvio a atemorizar a los habilanlcs de Guatemala.
EI gobierno de Castillo Armas conto con el apoyo de los ESlados U ni-
dos para favorecer el crecimienlo econom ico, pe ro la corrupcion y la inep-
tilud e n e l manejo de la administracion ptlblica impidieron aleanzar las
m e tas espe radas. En el plano politico, e l gobierno no pudo controlar las
proleslas populares sin hacer uso de la fuerza, y, como resultado, el des-
co nte nto se extendi6, incluso, a las filas del ej e rcito.
La gravedad de los problemas politicos guatemaltecos se reflejo en e l
asesinato de Castillo Armas (julio de 1957) ye n los dos complejos proce-
sos e lectorales que Ie siguieron. Tras las eleccion es de 195811ego al poder
el general Miguel Ydigoras Fuentes, candidalo del Partido Reconciliacion
Democratica Naciona!. Durante su mandalo la crisis politica se profundi-

256
z6. Gnatetnala rornpi6 relaciones con Cuba y apoyo 1a invasion de Bahia
Cochinos, en la ellal ESlados Un idos inlent6 derrocar al regimen de Fidel
Castro. A cambio, Ydfgoras logr6 que se condonara la deuda contraida
por Castillo Armas para denocar a Arbenz y que se aumentara la ellota
aZllcarera de Guaternala.
EI ano 1962 fue crucial para Guatemala. En marzo y abril hubo nmltitu-
dinarias manifestaciones de estudiantes y trabajadorcs. Adern;;is se funda-
ron las organizaciones que iniciaron la lucha guerrillera: primcro, el Movi-
miento Revolueiouario 13 de Noviembre (MR-I:l), formado por un grupo
de militares, y luego, las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR) , lruto de
un eonvenio entre el MR-13, el Movimicnto 12 de Abril (estudiantes de se-
cundaria y universitarios) y miembros del Movimiento 20 de Octubre, fnn-
dado pOl' oficiales arbencistas. EI gobierno respondi6 a esos 111ovilnientos
cstableciendo el estado de sitio y creando un gabincLe de guerra.
La posibilidad de que el expresidcntc Arevalo pudiera lIegar de nue-
vo al poder en las cleeciones programadas para 1963 provoc6 un nuevo
golpe de Estado. EI ejercito aSllrni6 directamente la adn1inistraci6n esta-
tal, hasta que, en 1966, se realizaron c!ccciones y eljuristaJulio Cesar
Mendez Montenegro, quien obtuvo el mayor nlunero de sufragios, fue
dcsignado Presidente de la Republica.
Antes de asumir su cargo, Mendez se compromeli6 a respetar la auto-
nom!a interna del ejercilo y a delegar en este la eonducci6n de la lucha
contrainsurgente. Tambien [ue presionado a dar importanLes concesioncs
a la Iglesia y a la AGA. En consecuencia, no pudo desarrollar el program a
de reform as moderadas que hab!a ofreeido durante la campana politica.
EI gobierno de Mendez hizo esfuerzos por mejorar la salud, realizar
obras de infraestructura, brindar asistencia tecnica a los campesinos y pre-
parar a los dirigentcs cOlllunales. Todas esas acciones ten Ian como objeti-
vo principal minar la base social de la guerrilla. Por otra parte, en csos
afios creci6 el movimiento sindical, no obstante la represi6n del Estado.
A partir del ascenso, a la presidencia, del coronel Carlos Arana Oso-
rio, en 1970, la inf1uencia de los militares se volvi6 determinante. La divi-
si6n social se profundiz6, y los militares de mas altajerarquia se integra-
ron a la burgues!a guatemalteca medianle su participaci6n en proyectos
industriales, agroindustriales y de desarrollo. Las posibilidades de acci6n
para los partidos politicos y de las organizaciones de trabajadores se ce-
naron, y el pais vivi6 una escalada de violencia. En noviembre de 1971 se
impuso el estado de sitio , y la represi6n violenta y el asesinato de dirigen-
tes se convirtieron en hechos cotidianos.
En las elecciones de 1974, el gobierno manipul6 el resultado elec-
toral en favor del general Kjell Eugenio Laugerud, quien asumi6 el Eje-
cutivo enjulio de ese mismo ano. Este tuvo que hacerle [rente al ascenso

257
de las luehas populares, al inicio de las operaciones del Ejercito Guerri-
lIero d e los Pobres (EGP), funclaclo en 1972, y ala continuacion de
las accion es por parte del FAR. Cuando eI general Romeo Lucas Garcia
relevo a Laugerud en e l pode r, e l Estaclo militar estaba pasando por una
g rave cnSIS.

El Salvador: hacia la guerra civil

A inicios cle l dece nio de 1970, la lucha popular lomo nuevos derrote-
ros en EI Salvaclor, pues surgieron frentes populares de lucha y organiza-
eiones armaclas, como las Fuerzas Populares de Libe racion Farabundo
Marti (FPL). Asi mismo, sectores progresistas d e la Iglesia Calolica crearon
conciencia de la marginacion e n que \~vian los campesinos y los grupos
pobres urban os. El regimen intento conten er la efervescen cia social me-
diante la creacion del InstitulO Salvacloreiio d e Transformacion Agraria
(ISTA) , e n 1975, y e l anuncio cle un proyecto de reforma agraria, e l cua l
no tuvo exiLO clebido a la oposicion de la oligarquia. En consecue n cia, la
guerra civil se volvio inmin e nle y e l gobierno recurrio cada vez mas a la
violencia.
Los comicios cle 1977 fueron "ganados» por el cancl iclato oficial , gene-
ral Carlos Humberto Romero. La UNO, consicleranclo que el triunfo Ie ha-
bia sido arrebatado a su candiclato, el coronel retiraclo Ernesto Claram ount,
organizo protestas que amenazaron la estabilidacl del regimen. EI ejerci to
entro en acc ion, se impuso el estaclo de sitio y la UNO fue desarticulacla.
Aunque Romero intento da r un barniz de legalidad al regimen , la viola-
cion de los de rechos humanos continu6, y. al mismo tiempo, aparecieron
grupos paramilitares de de recha, que oprimieron aun mas al pueblo . La
e mision de la Ley de Defensa y Garantia del Orden Publico, en noviembre
de 1977, in cremento la viole n cia estatal a niveles insospechados.
En enero cle 1979 Romero fu e depuesto por un golpe militar, y una
Junta d e Gobierno, compuesta por civiles y militares, asumio el manclo.
L,junta intento, infruetuosamente, una apertura democf<ltica, antes de
que renun ciaran , en enero de 1980, los miembros civiles que la compo-
nian y casi todo el gabinete.

El derrumbe de la dinastia somocista

A fin es cle la d ecada de 1950 y principios d e la sigui ente , se mulLiplica-


ron los inte ntos de acabar con la dietadura somocista. En 1958 ocurrie-
ron dos aconlecimientos importantes: prime ro, las luchas estudiantiles

258
(jue cond t~j eron a la conquista de la autononl1a universitaria, y. segundo,
la integracion de la Uni6n Nacional Opositora (UNO). EI Frentc de Libc-
racion Nacional rue fundado por Carlos Fonseca Amador y Tomas Borge,
en 1961. Dos anos mas tarde paso a lIamarse Frente Sandinista de Libera-
cion Nacional (FSLN) y emprendio la lucha guerrille ra. Como consecuen-
cia de varios fracasos, el Frente concentro sus esfuerzos en las areas urba-
nas, con la creacion de Comites Civicos Populares, e l fortalecimiento del
Frente Estudiantil Revolucionario y la alianza con los partidos Socialista y
Movilizacion Republicana.
Rene Schick triunfo en el mon t'\ie electoral d e 1963. Las [uertes pre-
siones ejercidas por los conservadores 10 abligaron a aprobar algunas re-
fornlas electorales: e l yo lo secreto, la participaci6n rninorilaria de la opo-
sicion en el Co ngreso y la prohibicion de reelecci6n. No obstante, la re-
presion politica continuaba contra quienes ponian en peligro el control
que los Somoza e je rcian en la politica nicaraguense .
No obstante la ferrea oposicio n de la UNO, en las elecciones de 1967
triunfo Anastasio Somoza Debayle, y de nuevo e l poder se concentro en
lIna sola person a, como habia sucedido durante el regimen de su padre.
La oposici6n inlerna al somozato crecia, y el FSLN manlenia su actividad
militar, aunque con altibajos.
EI principio del fin de la dinastia somocista fue la sllscripcion de un
pac to que, con eI visto bueno de los Estados Unidos, firmaron, en marzo
de 1971, el presidente Somoza y Fernando Agllero, rep rese ntante de la
oposicion conservadora.
EI tragico terremoto de dicie mbre de 1972 y la critica situacion inter-
na que este provoco fueron la excusa de que se valio Somoza para desco-
nocer el paclO, promover la expulsion de Agiiero del Partido Consen'a-
dor y reasumir e l control total del gobierno, en marzo de 1973. EI alto
nivel de corrupcion del regimen quedo en evidencia cuando buena parte
de la ayuda in ternacional recibida con motivo del terremoto fue usurpa-
cIa por Somoza y sus all egados.
La oposicion contra el regimen de Somoza era creciente. La creacion
de Ia Un ion Democratica de Libe racion (UDEL), dirigida por Pedro Joa-
quin C h aITIOrrO, cletnOSLro c1aramente eI desconLenlo re inante hacia fi-
nes de 1974. EI movimiento obrero mostraba gran e fervescencia, y se crea-
rOil numerosas organizaciones sindicales. Por otro lado , las acciones del
Fre nte Sandinista de Liberacion Nacio nal iban en aumento.
Sin embargo, como era de esperar, en el montaje e lectoral de setiem-
bre de 1974 Somo7.a flle el ganador. A fines de dici embre de 1974, e l
Frente SancIinista dio un golpc espectacular: la captura de un importante
grupo de po liticos somocistas y de diplomaticos acreditados en Managua.
EI gobierno se vio obligado a pagarle al Frente un millon de dol ares y a

259
liberal' a varios presos politicos, pero luego impuso e l eSlado d e sitio , la
ley m arcial y la censura d e prensa.
EI panorama se complico para la dictadura e n 1977: e n el mes dejulio
se forma el «Grupo de los Doce », inl.egrado por diversos sectores sociales
-industriales, cornercianles, sacerdotes e intelectual es-, qu e e l FSl.N
considcro vital para la eve ntual organizacion de un gobierno provisorio.
Ademas, cl gobi e rno noneamerica no , presidido porlimmy Carter, deci-
clio suspe nder Ja ayuda militar a N ica rag ua, d e bido a la flagrallle viola-
cion de los dcrcc hos hum anos en ese pais. SO ITIOZa, e n un esfue rzo por
mt: jorar SlI im agen internac ional , le vant6 eI eSlado de sitio y la Icy marcial
y con voco a elecc ioncs ITlunicipales. De csta manera consigui o que el go-
bierno nortcam ericano Ie restableciera 1a ayuda mililar.

l
OPERACION MUERTE AL SOMOCISMO

EI coman do sandinista «Rigobeno Lopez Perez» [ue eI e n-


cargado d e la toma del Palacio Nacional de Managua, opera-
cion que se lIml10 (( Mucrte al somocismo. Carlos Fonseca Ama-
dOf». AS1 infonnaron las agencias de prensa de esa siluacioll:

«U na veintcna de gue rrilleros sandinistas nicaragiic n-


ses tOl110 ayer la scde del Congreso, (apturo aproxim ada-
mente 500 reh e nes, )' exigio a cambio 10 millo nes d c d6la-
res, la Iibertad de los presos politicos), su traslaclo hlera del
pais .
... Ia Loma del Palacio Nacional dur6 tan solo cinco mi-
nutos y durante un tiroleo que se prodlljo muri eron (nalro
miembros de la Guardia Nacional y siete p ersonas mas re-
sultaron heridas. e ntre elias un gllerri llero .
... e l aLaq ue se prod\~o a las 12 mediodia , c llando los
cmpleados del Palacio se cncontraban ate ndiendo sus la-
bores, y el Congreso estaba en sesion.
Despues que Lomaron control del edificio los guerrille-
ros aLaron con c\lerdas a todos los diputados , tanto los del
Partido Liberal (en el poder) como los conservadores (opo-
sicion au torizada»), *

,', La Naci6n, San Jose, 23 de agosto de 1978.

260
La situaci 6n era cada dfa mas crftica: las vias del di {dogo y la n egoc ia-
( i6n eSlaban cerraclas y las acc io nes armadas pOl' parte del FSLN iban e n
allm e nlO. Dos acon lecimie nlos so bresalie nles oCllrric ron e n 197R En
primc r lugar, el ascsinato dell ide r oposiLOr Pedro Joaqu in Chamorro ( 10
de e n e ro ), hcc ho 'lue dcscn cad e no una serie de protes las que cllimina-
ron con una huelga para exigir la dimisi6n dc SOlTIOZ£l. En segundo lugar,
la lo ma del Palac io Nacional po r un grllpo de sandinislas, com anclado
por Eden PaSlora (22 de agoslo) , la clla l hi m tam balear a l regimen. Com o
rcsultado de esta acci6n, el Fre nte se afi anz6 e n la direccion de III lu eha
contra 1£1 dictadura.
Fin a lmcn le, e l 19 de julio de 1979 cayo la dicladura somocista. La
llegada d e los sandinistas al pode r marco un viraj e e n la hisloria de Nica-
ragua y co ntribuyo a profundiza r 1a crisis po lfli ca que iba a afectar a lodos
los paises cenLroam e ricanos e n la siguiel1lC decada.

26 1
Capitulo VI

EL PASADO RECIENTE

A mediados de 1979, los pa rses ce ntroamericanos entra ro n e n una nue-


va e tap a de su his lo ria, caracterizada por un a aguda crisis eco nomica y so-
cial y un a extensa convulsion po][tica que empujaron a sus pueblos h acia la
vio len cia y la gue rra civil. Esta situacion gene ro gran inquie tud, n o solo
e ntre los habitantes d e la regio n, sino tam bie n e nlre los gobiernos de pai-
ses amigos y en instituciones in ternacionales, publicas y privadas, las cuales
p ro piciaron la b llsq ueda de la paz a traves del dialogo y ]a negociacio n
polilica, y contribuyeron a revertir la angustiosa situacion socioecon omica.
La crisis polrtica tie ne su aside ro e n e l a u toritarismo, q ue ha limi tado
el ej e rcicio democrali co del pod e r. En gen e ral, los gru pos gobernantes
han sid o muy intra nsigentes, po r 10 que, e n Nicaragua, Guatemala y EI
Salvador la guerra se impuso com o la unica via para alcanzar un a mayor
apert u ra de mocratica. No obstante, las estrategias d e cambio revolucio-
n ario h an fracasado, al igual que las solucio nes militaristas y violentas. A
partir d e 1983 hubo numerosos intentos de poner coto a los confl ictos
armad os, y, gradual me nte, se ha restituido e l acceso al poder por me dio
d e procesos electora les. Este re to rno a la vida politica h a sido posib le de-
bido a diversos facto res, entre los cuales d estaca el favoreci miento d e los
procesos democratizadores a nivel in te rn acio ll ;:) 1.
La crisis economica de la decada de 1980, producida po r la co njun-
cio n de factores e ndogenos y exogenos, h a sido la mas grave sufrida por
los pa rses latinoam eri canos d espues de la d cpresion de 1929. En los p ai-
ses ce ntroame ri canos, esa crisis ha sido aun mas profun da, d e bido a q ue
los pro ble mas po liticos han increme ntado el d esequilibr io econo mi co.
Los gobiernos, e n su urgencia po r encontrar solucion es a la crisis, han
ado ptad o medidas e rroneas. Los programas de estabilidad y ajuste estruc-
tural se han realizado de ac ue rdo con directrices eman adas de los mas
impo rtantes o rganismo s fin an cieros inte rn acionales: el Fo ndo Mone tario
Inte rnacional y e l Banco Mundial. Las me didas mas impo rtantes procu-
ran reducir el tamal1 0 del Estad o y estabilizar las econ o mias, pero al apli-

263
I LLSTRA,CI6~ Nt.! 4 1. SANDlNISTAS ENTRANDO El\' MANAGL'A. 20 DEJULIO DE \ 979. Tras la
('afd<l del somozato, eJplleblo rccibi6 a los sandin i.mls com o heroe s.

carlas alllnentan los probl e mas sociales. Entre eSlOS, los mas acuciant.es
son la profundizacion d e las diferencias sociales, la pobreza, e l d esem-
pleo, la caida de los salarios reales y el incrememo del numero d e pe rso-
nas que realizan trabajos info rmales y qu e, por tanto, careeen d e ingresos
IIjos y estables.
Pero, no obstante los avances logrados hasta el presente, la construc-
cio n de una trad icion dem ocratica y la consolidacion de una cultura poli-
tica son aun de b iles, porque estos procesos req ui ere n largo tiempo para
afi a nzarsc. Ade mas, es prec iso que exista un profundo respeto a los d e re-
ch os de los ciudadanos y que se permita la participacion politi ca d e la
oposicion. Lame ntablem e m c, estas condiciones perma necen endebles en
la mayo ria d e los paises cen troamericanos.

C RISIS POLiTICA

EI asesinato del lide r opositor nicarag i:'e nse Pe dro Joaquin C hamo-
n o, el lOde e n e ro de 1978, marco el ini cio del fin d e la dictadura somo-
cisla. Durante dieciocho lneses, Nicaragua vivio una situac ion revoluc io-

264
naria, e n la e ual partici paroll aelivalllentc los scetores poplI lares, c an S<l-
du g de cliatro d ecadas de dicladura. EI triunfo de los sandinis!as, " njulio
de 1979. no solo tuvo consccuen cias inLernas para Nica rag ua, sino tam-
bi e n para los otros paises d e Ce nl.roamerica.

NatumLeza de la crisis

La crisis politica de la d e cada de 1980 sc presento como un a CrtSlS


regional qlle puso d e manifiesto e l d esgaste d e l mode lo agroexportador y
del Estado auto ritario. En co nsecuc ncia, las gue rras civiles que se dcsata-
ron en N ica ragua, EI Salvador y G uatem ala tam bien tuvieron hondas re-
percusioncs en Costa Rica y e n Honduras, paises en los que no se d esen-
cadc naron acciones armadas. EI gobierno de los Estad os Unidos p e rcibio
e l caracte r regional d e la cri sis e implem e nto una accion politica comim ,
la ellal , parad6jicamente, con!ribuyo a profundizar la crisis politica, al
co nvertir a los gobiernos d e Honcluras y Costa Rica a co labo rar para des-
estabilizar el regimen sand ini sta (Ver mapa Nll 27).

9il'

,r - - --- MAPA NQ 27

,
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ZONAS DE CONFLICTO
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No obstante Sll cankter regional, la c ris is no se presento co mo un
proceso homogeneo ni (lI1ico . En Nicaragua, Guate mala y EI Salvador rue
e m inente mente politica, y sc origino e n eI agotamienLO del pod er oligar-
ql.l ico. Este se mostro inca paz de conten e r e l desconte nto popular, 10 cual
desat6 las gu erras civiles. Sin eln bargo , la guerra no funcio no C0l110 via
para ill1pon e r eI do mini o d e n inguno de los grupos involucrados e n e lla.
Como resultado, e n todos los paises de la regio n se trato de construir eI
consenso medi ante la realizacion de procesos e1ectorales. Salvo e n Costa
Rica, donde e xisle una cul tu ra politica democratica mas arraigada, la rea-
Iizacio n d e e leccio nes legitimas no h a co ndu cido auto maticam e nle a la
democracia, pero al m e n os se ha n d ado pasos h acia adela nte en la bllS-
qued a de formas modern as d e participacion politi ca .
EI crecien te y profundo desequilibri o economico, derivado d e los tras-
lornos finan cie ros intern acion ales y d e las d ebilidad es estructurales de la
econ omia d e los paises de la region , ha hecho que se ad opte n me didas
inspiradas e n e l ne oliberalismo, las c uales h an tenido h ondas repercusio-
n es sociales y po liticas.
En sintesis, la fusion d e la crisis p olitica con la econo mica p rod uj o un
c1ima de n egociacion y d e esfuerzos por conseguir la paz.

La crisis: raices comunes y contenidos distintos

La crisis se p rese nto como resultado d e una conjugacion de filcto res


locales y regio na les. Entre los primeros d estacan los aspectos socioecono-
mi cos y politicos propios d e cada uno d e los paises. En Guate ma la y EI
Salvador, la ten e n cia de la tierra se h a caracterizado p oria pola rizacion
e ntre las grandes propiedad es y los minifundios; en Honduras y e n Nica-
rag ua, la situac io n agrar ia no h a mostrad o tanta gravedad , de bido a que
la d e nsidad de mogni.fica es men o r y la fro nte ra agricola ti.lI1cion a to davia
como una valvula d e escap e. Sin embargo, en los ( ua tro paises, la sllho rrli-
n acion politi ca y economica y el abando n o cultural d e los campesinos es
ala rmante .
La existe nc ia d e dictaduras militares es o tro rasgo comiln e n los cua-
tro paises d e l no rte de Centroamerica. La movilizac io n popula r armada
con tra las di ctaduras de G uate mala , EI Sa lvador y Nicaragua se venia ges-
tando desde e l pe riodo p oste rior a la Segunda Gue rra Mundial , pe ro al-
can zo su climax e n el ocaso de l decenio de 1970. EI d escontento se cana-
lizo a traves d e formas viole ntas y armad as, como respuestas viables a nte
la accion profundamente re presiva d e l Estado. Sin emba rgo , la crisis poli-
ti ca tuvo tambie n (onte nidos distintos. En Nicaragu a, la lucha adquirio
un caracter antidictatori al y multiclasista, en EI Salvad or tomo la fo rma

266
de un Illovimicnto antiolig;u-quico campesino, y c n Guatemala adquiri(')
un profunda sentida Ct nico.
El caso de Costa Ri ca continua siendo exccpcional e n 1a region , por-
que Clunqlle la crisis ha ahondado las dife re nc ias sociales. la estabilidad
democratica se ha mantenido inc6lume.

7r"ansiciones estatales

Si bie n el estalliclo revolucio nario cs determinantc en la vida po litica


ce ntroalnericana, los verdaderos cam bios politicos se han producido con
la transici6n dc los regilnen es Inilitares a los go bi e rnos civil es, suste nta-
dos en la pureza d e los procesos e lectorales. En EI Salvador, la tran sici6n
estatal qu e ha penniLido el paso de la viole ncia inslitucionalizada al juego
politico moderno se inicib e n octubre d e 1979, co n el d e rrocamienr.o del
ge neral Ca rlos Humbe rto Rom ero y la p"esta en marcha d e algun as polio
tiG)s reformistas. En Hon duras, la transici6 n al gobierno civil se prod lUo
e n marzo de 1980, cuando la admini stracibn Carte r d emand6 la pureza
de l proceso e lectoral para e legir la Asamblea Constituyente de ese pais.
Las razo nes por las cuales se produjo ese viraje tan impo rtallle fn e roll
dive rsas. A nivel interno , cicrloS seeLor es te mian que la ex pericn cia nica-
ragllcn se se extendiera y qne los eambi o s fucran realizados por los in sur-
gentes. Ademas, a fines de la decada d e 1970, los gobiern os militares de la
rcgion sufrian una g rave crisis de legimilidad. profundizada pOl' las pug-
nas denlro de los ej e rcitos y de las cl'pulas polili cas. En ese C011leXlO se
prod ujo e l relevo d e los militares, por parte de politicos civiles, en los tres
paises d e l norte de la regibn.
A nive l externo. las tran siciones estatales fue ron influe nciadas por los
cambios de la polilica exte rior norteamerieana, durante las admin istra-
c io nes de Carter y de Reagan, que impulsaron la purcza de los procesos
e lc Clol-ales, e n Sll ai'{m de aislar a N icantgua con gobiernos dCIll OCI-ci Li cos,
Ade m;!s, a fines de la decada de 1980 se hizo evidenle que los regim e nes
311toritarios te niall poea viabilidad. Asi qlledb d cmostracl o co n ]a inl e n sa
crisis de las dictaduras milila res en los paises d e l C!mo sur de Am e rica y
con el impacto de la perestro ika en e l orden inte rnaciona l. El lill d e la
g ue rra fria, la caida de los gob iernos socialistas de Europa del Este y el
renacer, con nuevos brios, d e l liberalism o econ 6 mico y d e la democracia
po litica, tam bi en influycron e n Centroall1crica.
Aunquc las elecc iones han servido para haecr re ajusles e n las rc lac io-
nes de poder e in SLaurar regimenes constitucionales, en Guatemala, El
Salvador y Honduras el ejerciLo ha sido cI moLor de los cam bios politico,
y continua siendo la coltunna vertebral del Estado. No obstante los avan-

267
ces rlemocrat.izadores, eI terror y la reprcsion estatal no han desaparec ido
como pnlclica po litica.

Transiciones politicas bajo hegemonia militar

El caso salvadoreiio

EI proccso de transicion poliliea se ini cio mas lempranam c nte e n EI


Salvado r, e n donde la crisis se desarrollo por la incapacidad d e n egoeia-
cion del gobie rn o frente a las aeeiones de dcseontento popular. [n eo nse-
cue ncia , eI Estado recurri6 a la viole ncia como uni co recurso a su alcance
para lograr la contencion social, y los antagonismos en la vida p olitica se
agudizaron allO I11{tS.
En octubre d e 1979, un h e terogen eo grupo de fuerzas politicas, aliado
a un sector del e jercilo, propi cio el derrocamienlo de l gene ral Carlos Hum-
berto Romero. Entre los panicipantes estaban el ge ne ralJaime Abdul Guti e-
rrez, Jose Napo leon Duarte, e llider de la Dcmocracia Cristian a, y Cu illel~
rno Manne l Ungo, del Movimiento Nacionalista Revo lucionario (MNR).
La alian za e ntre secto res tan diverge ntes result 6 ser tnllYendeble, 50-
bre todo pOl'que e l ejercito re tuvo el comrol del pode r. La sali da d e las
fuerzas reformistas del gobierno, en en ero de 1980, e l asesinato de mon-
se l10r Oscar Amulfo Rom ero y la muene de civil es durante su sepe lio, en
mall os del ejerc iLO , cerraron la posibilidad de una salida conccrtada ric la
crisis politica. EI respald o al gobicrno de transici6n era insuficientc; solo
el gobierno de los Estados Unidos Ie brincl6 su apoyo, a l tiempo que pre-
sionaba para que se realizaran algunas refonnas t{lct icas, entre elias la
refonna agrari a (decreLada en Inarzo de 1980) y ]a nacio nalizaci6n de Ia
banea y del comercio de exportacion.
[n enero de 1980 se creo una amplia coalici6n de fuerzas, la Coord i-
nadara Reyolucionaria de Masas (CRM). a la que tIl tls tarde se Ie. llnifTon
los partidos reformistas y sindicatos, y formaron e l Fren te Democratico
Revo luci onario. En octubre de ese mi smo arlO se fund6 cl Frente Fara-
bun do Marti para la Liberac io n Nacio na l (FMLN), con base en c uatro
organizaciones popu lares Clue ya con laban con algllna cstrllctura mililar.
adem as de que te nian fllene arraigo entre sectores urbanos y carnpesi-
nos. La gue rrilla se convirti 6 e n una verdadcra alternat.iva de poder, C0 l110
10 reco nocia la influyente dec1aracion franco- mex icana de agosto de 198 1.
H acia mediad,lS d e 1982, la guerrill a ya control"ba a mpli as zonas e n el
no rte y en e l n o roeste d e l pais.
Los seClores conservado res, por su parte, se aglutinaron en torno a
d os agrupaciones, con ideas diferentes sobre 10 que d e bia ser la reforma

268
polftica. POI' un lado, la Del110Cracia Cristian a, y, por otro, el partido Ali<lllZa
Republ icana Nac ionalis ta (ARENA), fundado por e l mayor Roberto
d'Aubuisson. En este partido se agruparon mi litares relirados, empresa-
rios y politicos conservado rcs.
Las elecciones para elegir la AS3mbiea Constituyc nte, e n 1982, fllCroll
ganadas por la Democracia Cristiana. Si n e mbargo, ARENA demostr6 que
s~ habra convcnido en la segullda fuerza p o litica d e l pais, y ("onsigui 6 esta-
hlecer una alianza can otros g rupos de filiacion derec hi sta, can el prop6si-
lO d e controlar laAsamblea Constituyen te , for mular lIlla cOll sl itu ci61l ("on-
scrvadora y fre nar e l program a de rc fonna agraria. EI Pacto de Apaneca,
ftrmado en agos to de 1982, con eI auspicio del gobic rn o eSlado unidense,
trataba de reso lver el e nfren tam iento e ntre las dos grandes fue rzas contra-
rrc"oiucionarias y constituir un gobi e rno de unidad nacional.
La puglla en tre ARENA y la Dcmocracia Cristiana se dio m as abierta-
mente en las e lecciones presidcllciales de 1984. Aunque estas [uero ll ga-
nadas por e llide r de Ia Democracia Cristiana,.Jose Na poleon Duane, tam-
bien permitieron que ARENA se cOllsolidara como un partido politico que
expresaba los interese, d e la burguesia salvadordia. Y, no obstante e l ("uer-
te apoyo econom ico), milita r brindado por los Estados Ull idos a l gobier-
no de Duarte, este no rue capaz dc alcanzar el consenso del e mpresariario
Ili de derrotar a las fuerzas rebcldes.

ILUSTRAC I()N N!..l 42 . MILJTARES PATRU LLANDO EN UN BAR RI O DE SAN SALVADO R. D u-


ranle e l gobierno de Alfredo Crisliani, la guerrilla rcaliz6 dos ofensivas urban as en Sa n Sal\":' 1
do r. Esos he chos cO IHribuycron a nesacred itar al ejerciLo.

269
La Democrae ia Cri sti ana se fue desgastando en e l eje rcicio de l poder,
y los comicios d e 1989 fu e ro n ganados ho lgadamen te po r cI candida lO de
AR E:-.IA , Alfred o Cristiani. Este proceso e lecto ral profundizo las ll suras del
siste ma polhieo, y Cristiani, durante los primeros mese s de su mandato,
d e bio enfrentar una gran ole nsiva urban a por parte d e l FMNL. El ejercito
sa lvador6 io se iba desacreditando , debido a su inept.itud para ve neer a la
g ue rrilla, a los bOlnbardeos que afec wban a la pobl acio n civil y a los abu-
50S de los 11lilitares, como la masacre de los sacerdo tes jesnitas de 1£1 U ni-
vc rsidad Ccntroamcricana.
A pesar d e que la luch a armada co ntinuaba, e l res lablecimi e nlO del
j uego politico-electoral , asf C0 l110 e l virtual c mpate de fuerzas e ntre el
e je rcilO y las fu e rzas in surgentes y, por ta nto , la inmin ente prol o ngacioll
de l cOllflicto, allanaroll e1 camino para que el gobi e rno de Crist.i a ni y el
FMLN lIegaran a la firma de los Acuerdos de Nueva Yo rk, ell setic mbre de
1991.

El casa guatemalteca

Desde fin es d e la d e cada de 1970, e l ESlado gua te malteco ha bla de-


satado Ull ve rdade ro telTorismo d e ESlado, con eI Jill de desarti cular eI
movimiento p o pular que se habla fOlj ad o ell eI trall scurso de ese d ece-
nio. Entre 1979 y 1982, las ac(iones d e los insllfge ntes aumentaron en
gran medida, d ebido a la in corporaei o n d e sectores urbanos e indlgenas
e n la Illeha annada. A pesa r d e la ampli ac io n de su base social , la glle rrilla
guatclnalteca no logro te ne r alcance nacional, aunQl1c 51 cOllsigui o cleses-
tabi li zar el Estado.
La insurge n cia fue desarticulada pOl' Ia campana e mprendida duran-
te la admini stracion del gen e ral Efraln Rlos Mont! , quien lIego al po der
mediante un golpe de Estado, e n mal~LO de 1982. SlI gobi e rno inallguro el
proceso de «in stitucionali zacio n dcm ocnitica ». Para cOlltrolar las accio-
n es gllerrilleras, Rlos Monlllogr6 elevar d e 15 mil a 500 mil los hombres
o rganizados e n las lIamadas Palrllllas d e AutodeJensa Civil. Elle rro ris\llo
de Estado allme nto , y los pueblos ind,ge nas sospechosos de co laborar
con la guerrilla fueron duramenle casligacios. Asimismo. aUlTICnto e l l1(l-
me ro de muertos y de desaparecidos, y alrededor d e 90 lI1il person as bus-
caron refugio en los paises vrcinos. Adem:is, el gobi e rno procllro la esla-
bilizaci6n estatal, llleciianle la creacion de coordin adoras instilucionales
(organ os de adm inistracion y ejecu cion d e proyeclos de desarrollo de la
comunidad) , y de "polos d e desarrollo » (aldeas fundadas en Illgares cs-
Lr<uegicos), el fomento del sindicalismo vineulado al gobiern o y e l esti-
l11ulo ala fundacioll de parlidos politi cos.

270
ILUSTRACI ON NO 43. PRI SIONERO CAPTURADO POR LAS PATR ULLAS
CIVILES. GUATEfI.'lALA. En Guate m ala , eI ler rorislllo d e [ stado se in-
cremcnlo durante el gobie rno d e fa cto del gen eral ECrai' n Rios Mo nU.
Medin mille n d e hombres, organ i7.ados en las Patru ll as de Defensa Ci-
vil, sc encargaro n de p ersegu ir y ejecutar a los campesin os que c rall
sospechosos d e preSlar colaborac i6n a las fu e rzas insurgentes.

En agosto d e 1983 cayo el gobierno d e facto, como resultado d e los


plan es de reforma tributaria y de la amenaza d e aplicacion de un p royec-
to d e refo rma agraria, los cuales causaron descontento e n los sectores
empresariales. En los altos mandos del ejerci to tambie n existfa malestar
por e l p apel preponderante que Rios Montt h abia otorgado a la oficiali-
dad me dia.
La llegada al poder del ge n e ral Humberto Mejia Victores no impIico
el re torno de la di ctadura militar traditional , sino que, mas bien, fu e el
inicio de un perio do de transicio n que p e rmitio el ascenso a la preside n-
cia de Vinicio Cel'ezo Ari'valo , candidato d e la Democracia Cristiana. Este
asumio el mando en e nero de 1986 . Su gobierno inici o un a nueva rase de
cam bios, caracterizada por el re parto de CUOlas de pode r en tre civiles y
militares y la apertura de espacios a los partidos politicos, esperanzados
en que se realizaran e lecciones limpias, Este gobierno corrio una suerte
similar al de Duarte, e n El Sa lvador. Cerezo h abra llegado a l poder con el
voto d e una amplia mayoria de los votantes, pe ro, conform e transcurrie-
ron los anos de su mandato, fu e sufriendo un [uerte d esgaste, consecu e n-
cia d e l movimie nto revolucio n a rio, de las acciones contra insurgentes y
del e nfre ntamie nto con la burguesia gu atemalteca, la cua l se oponia a l
proyecto de reforma tributaria impulsado por el gobierno y a cu alquie r
reforma que afectara sus intereses.

27 1
Descle el punto de visla de los sectores mas con scrvadores, Cerezo
se habia excedido al tratar cJ tema de la «d e uda social» y al suscribir
un pac to con la U nidad d e Acci6n Sindica l y Popular, e n marzo de 1988,
e n el eual ambas partes Ilegaron a ac ue rdos e n cuanto a la politica econ6-
mica, problemas agrarios y salarial es, politi ca energetica y d e rechos
human os. Estos aC llerdos no se concre taron, debido a un intento gol-
piSLa. fruslrado e n mayo d e cse rnismo ann. El gobierno de Cerezo trato
de dcsem peitar sus fun ciones en media de las presiones de los enl-
presarios, las protestas d e los seClore s populares, las conspiraciones del
ala derechista d e l ejercilO y los ata ques annados de las fuerzas insur-
gentes.
La aetividad de los grupos gue rrilleros te nia un objetivo dife rente al
que h abian tenido antes de 1982. La guerra popular revolucionaria para
alcanzar el pode r habia ternlinado; su interes, e n este momento era pre-
sionar al gobierno para obligarlo a negoeiar, y que la Uni dad Revolucio-
naria Nacional G uatemalteca (URNG ) saliera bien librada en las ncgocia-
ciones. Sin embargo, el gobierno d e Cerezo d e bi6 obedecer la voluntad
del ejercito, e l eual rech azo e l di alogo e impidio la salida negociada d e l
confli cto.
EI deterioro sufrido por la Democracia Cristian a se hizo evidente
en las e lecciones presidenciales d e noviembre de 1990, euando esc par-
tido ocupo el te rcer lugar e n la primera ronda, con tan solo e l 17,49 %
de los VOloS emitidos. En e nero de 1991 se realiza la segunda ronda, en
la cual se eligi6 a Jorge Se rrano Elias, candiclalO del Movimien to de Ac-
cion Solidaria (MAS). Este proceso e leclOral se caracterizo por e l escepti-
cisrno de los vOlantes, evide nciado en el altfsimo abste ncion isrno e lecto-
ral (44%) .
Durante su gobierno, Serrano inte nto profundizar la mode rnizacion
del Estado, para 10 eual redujo el pode r del ej e reito. Aunque la coyuntura
Ie era propicia, gracias al fin de la guerra fria y al inle res de los Estados
Unidos dp. CJu e se redl~j era e l tamano de los eje rc itos de los paises c entro-
alnericanos, lograr ese objelivo era sumam e nte dificil , debido al poderio
de las fuerzas armadas, las cuales encontraban unajustificacion de su la-
bor en la existencia del 111ovimiento insurge nte.
AI d espuntar la dccada de 1990, los resultados d e la transicion estatal
en Guatemala eran claramente p er ceptibles: e l Estado habia salido de la
situacion de emergenci a en que 10 habia mantenido la guerrilla, habia
logrado pasar d e la dictadura militar al gobierno civil (aunque los milita-
res todavia continllan ejerciendo gran poder) , y, en re laci6n con 10 ante-
rior, se habia creado una division de funciones y de cuotas de poder entre
los civi les y los militares, habia surgido un sistema de partidos, y estos se
hallaban comprometidos con la modernizacio n politi ca. Ademas, los par-

272
tidos ultrade rechistas habian SUffido lIll rClrOCesO, se reali zaban ek(cio-
ncS limpi as, habia espacios para Ja actuaei6n del movirni ento popular v
sindieal, sc habia consolidado una novcdosa polftica externa y sc h abi~lI~
establecido nuevas instancias estatales, eO OlO la Corte de Co nstituc ionali-
dad, la Procuraduria de los Derechos I-Iumanos y e l Tribunal Supremo
Electoral.

El casa honduTeiio

Talnhien en Honduras las fuerzas armadas han desempeliado un pa-


pel protagon ico, pem a diferenc ia de las experi encias guatemallcca y sal-
\'adoreiia, la represion estalal no ha sido tan brutal y cI bipartidismo poli-
lieD, a pesar de Lodos sus defectos, ha impcrado por una centuria. En eSle
sen lido, eI pais se ascme ja mas a Cosla Rica quc a los Olros paises de la
region.
Honduras, al igu al que Costa Rica, no se libro de los ekctos de la
crisis regional. Duran le la decada d e 1980, e\ pais se convirtio e n una
plataforma politica y mililar, al servicio de los intereses de los Estados
Unidos en Centroam erica. La cstabili dad de su sistema politico y la au-
senc ia de movinlie nLos revolueionarios ravorecieron el paso hacia el go-
bierno civil, y, al mismo ticlnpo, esas condic iones convirtieron al pais e n
e l lugar idea l desde don d e la potencia norteamericana en frenlo al go-
bierno sandinista.
Con 13 e leccion de Roberto Suazo Cordoba, candidalo del Panido
Liberal, en noviembre de 1981, se abrio un cicio de gobiernos civiles que
los militares han respe tado. A cambio de la puesta en march a de los me-
canismos propios d e la d emocracia representativa, e l gobierno hondure-
110 recibio cuantiosa ayuda militar por parte de los Estados Unidos, qllc
in cl uia cquipo, asesoria tecnica y la pr{lctica de ej ercicios rni litares co n-
juntos. Hasta 1984, pi gobiern o habra recibido casi 170 millones d c dola-
res, de los cuales mas de 128 consistieron en ayuda militar. La presen cia
de tropas norteamericanas en Honduras y e\ fortal ec imiento de l ejercito
nacional, con miras a una posible contienda con N icaragua, debililaron
aun mas eI precario poder civil h ondurel10.
En las e leccion es de noviembre de 1985 resullO e legido Jose Al,cona
Hoyos, candidato del Partido Liberal. Su gobierno debio hacer frente a
los efectos de la crisis economica y politica, como la migracion d e miles
d e nicarague n ses y de salvadoreiios que huian de las guerras que asola-
ban a sus paises y la presencia de tropas eXlranjeras en su lerritorio. En
esta coyun tura, la presencia norteamerieana se afianz6, y, can el apoyo
del J efe d e las Fuerzas Armadas d e Honduras, general Gustavo Alvarez

273
Martin ez , fu e creado e l Centro Regional de Entrenami ento, para adies-
trar soldados -sobre todo salvad o re ii os-, y se escogio Palme rola como
base fija de las tro pas nortea meri canas acantonadas en Honduras. POl'
otra parte , desde 1981 se h abian establecido e n la zona fronte riza bases
c1andestinas de las fue rzas contrarrevolucion arias nicaragiienses, desde
donde hostigaban fuertemente al gobie rno sandinista. De manera que,
e n tcrritorio hondureiio, habia tres e jercitos difere ntes, 10 cual producia
in estabi lidad interna e impedia que eI pais tuviese una politica externa
independiente.
A pesar del contexto desfavorable creado poria ocupacion de tropas
estadou nidenses y la militarizacion del pais, e l movimiento popular desa-
rrollo una importante ac tividad, la cualle permitio tener presencia politi-
ca, a traves d e la Confederacio n d e Trabajadores de Honduras (CTH), la
Central Gene ral de Trabajadores (CCT ) y la Federacion Unitaria d e Tra-
bajadores Hondurenos (FUTH).
No obstante la inj erenc ia d e las Fue rzas Armadas en la politica
hondurena, la in stitucion castrense carecfa de homoge n eidad, como
se evide ncio cuando e l ge ne ral Alvarez Martinez (lIe sustituido pOI' el
corone l Walter Lopez Reyes. Este inte nt6 frenar las acciones de los
co ntrarrevo luc ionari os nicaragiienses, pero sus esfu erzos resultaron
infructuosos.
Los beneficios economicos que el pais obtuvo al prestar parte de su
te rritorio a la contra ni caragtiense no impidi eron que el descontento se
apod erara d e los a ltos oficiales hondure nos. Las actividades de los contra-
rrevolucionarios motivaron que Nicaragua planteara un a den unci a con-
tra Honduras y Costa Rica, e n la Corte lnternacional de Justici a, con sede
e n La Haya, Holanda, e n 1984. Esta m edida del gobierno sandinista lOr-
n6 aun Inas tirantes las relaciones centroamericanas.
Los gobi e rnos liberales de Suazo Cordoba y de Azcona Hoyos adopta-
ron algunas medidas de caracter fiscal y lograron algunos avan ces en
materia agraria y laboral, con el fin de mitigar los e fectos de la crisis eco-
nomica (a pesar de que esta golpeo m e nos fuertemente a Honduras que
a los otros paises de la region). Sin embargo , en las elecciones de 1989, e l
ingeniero Rafael Leonardo Callejas, candidato del Partido Nacional , fu e
el claro ganador del proceso, frente al can didato d e l Partido Liberal, Car-
los Flores Facusse. EI Partido Liberal se hallaba debilitado, no solo por
pugnas intestinas, sino tambien pOI' e l desgaste despues de d os periodos
presidenciaies consecutivos.
EI gobierno d e Callejas se dio a la tare a de implementar un program a
neoliberal, en el contexto d e la normalizacion de las relaciones con Nica-
ragua, la disminucion d e la ayuda norteameri cana y el extremo empobre-
cimiento de la poblacio n hondureiia.

274
Vila excepci6n: Costa Rica

En Costa Rica la crisis ha sido lnas bien de naluraleza economi ca, pOl'
10 que se ha hecho necesario realizar a lgun os ajustes en el papel del Esta-
do y en las politicas sociales que este ha venido aplicando desde la dec ada
de 1950. Aunque en a lgunos momentos los problemas economicos han
provocado e fe n fescencia social , la estabilidad polflic.a se ha manlenido.
Ademas, la crisis politica en otros paises de Cent.roamerica ha tenido efec-
LOS sobre e l pais, prin cipalm e nte porque 10 ha obligado a revisar la deci-
si6n de mantenerse al margen de los problemas politicos regionales. De
ahi que e l gobierno costarricense as umi6 un papel protag6nico en la blls-
queda d e una salida n egociada del conOicto.
El agotamiento del modelo de d esarrollo instaurado despues de la
Segunda Guerra Mundial empezo a ser cuestionado, y, al mismo tiempo,
Ia crisis capitalista mundial tuvo nefastas repercusiones sobre la econo-
mia costarricense. Sin e mbargo, el peso de todas las criticas recay6 en el
gobierno del Lie. Rodrigo Carazo Odio (1978-1982). Durante la adminis-
traci6n Carazo los problemas sociales se agudi zamn, pero la protesta so-
cial se canaliz6 por medio del movimiento sindical. Ademas, el movimiento
sol idarista -una forma de colaboracion entre patron os y trabajadorcs-
poco a poco come nzo a consolidarse y se convirti 6 en un a seria compe-
tencia para el movimiento sindi ca!. En consec uencia, el sistema politico
se mantuvo inc6lum e.
En las e lecciones de 1982 triunf6 el Partido Liberaci6n Nacional, con
Luis Alberto Monge como cand idato a la presidencia. Durante la admi-
nistraei6n Monge se aplie6 un a serie de medidas tendentes a contrarres-
tar los dectos soeiales de la crisis. Asimi smo, se em pezaron a aplicar las
medidas de corte neoliberal recomendadas por los organismos interna-
cionaks: redueci6n del aparato estatal y supresion del Estado benefactor.
La politica exteri or del gobierno de Monge fue ambigua e n relacion
con N icaragua. En 1983 se emitio 1a Proclama de Neutralidad Perpe tua,
Activa y No Armada de Costa Rica, pem, al mismo tiempo, e l territorio
del pais fue usado por fuerzas contrarrevo lucionarias que, con el res pal-
do de la Agencia Central d e lnteligen cia (CIA) de los Estados Unidos,
hostigaban a l gobierno sandini sta.
La emision de la Proclama de Neutralidad marc6 el inicio de la pro-
yecci6n d e Costa Rica hacia Centroamerica, la cual a lcanzo su pun to cul-
minante durante el gobierno d e Oscar Arias Sanchez, ganador de los co-
micios de 1986. La administracion Arias Sanchez continuo co n las pOlfli-
cas de m ode rnizacion y ajuste iniciadas por su predecesor, pero lam bien
tomo medidas para mitigar los efectos sociales de Ia crisis economica, como
pOl' ejemplo la construcci6n d e 80 mil vivie ndas de interes social.

275
IL.U STRACl C) N N!..:! 44. RHiNI ON Dr PRESIDE :-\TES. GUAT EMALA. 19H7. A partir d e la reuni()[l
c umhre cclt· hrad::l en Esqu ipl1 las. Gua te ma la , en 19Rfi. los prcsid e nl cs ct'n tro;lnlcrican o:o. St·
n~ (Ulcn pe ribdicam e m e p;1I"a anal iz,u- ]os problema s n:gion ales. En 1<1 /'o wgrafLa ::lparec('n. dt'
izquicrda a dcrecha: Da niel O n ega (Nir::lragua), .Jose Azc:o ll::l (Hondllras), Villic:io Cl'l't'lo
(Gu a temal a) . Oscar Ar ias (Costa Rica ) yJose I'\a polc<'m DU:\I'lC (El Salvador).

La politica exterior de la admini straci6n Arias se caracterizo por la


ce nsura a l gohi e rno sandinista, calificado de tOlalilario, Sin e mbargo , se
opuso a la utilizaci6 n d e la fue rza para desalojar a los sandini slas d e l po-
de r y defendi6 la salida negociada d e l conllieto. En un principio, las ges-
dones pacificadoras de Arias exci ulan la participaci6n de los sa ndinislas,
co mo quedo d emostrado cllanclo no los invito a la re unio n d e presidcn-
lCS celebrada en 19H7. Poste ri ormenle los tom o e n cuc nta, grac ias a las
gestiones d el Presidente de Gllatemala, Vinicio Cerezo.
La politiea exte ri or d e COSla Rica reslIh6 ex itosa, a pesar d e las presio-
n es reeibidas desde Was hingto n. Los esfllerzos del presidente Arias d ie-
ron continuidad a los reali zad os por e\ Grupo de Con tado ra - conform a-
do por los gobie rnos d e Mexico, Ven ezuela, Colo mbi a y Panama-, gru-
po que, desde 1983, h abia impulsado eI dial ogo, la recon ciliaei6n y la
de nl0cracia e n los paises centroalnericanos. En 1986, por ini ciativa d e
Cerezo, tuva luga r la re union de Esquipulas I, y, aI aiio siguienle, se firlno
e l Procedimien to para Establecer \a Paz Firm e y Durade ra en Cen troame-
rica, conocido como Acta de Esquipulas, con base en el Plan de Paz pro-
puesto por el presideme Arias.
La firma d e l Acta d e Esquipulas tuvo vari as consecuencias: por un
lado sign ifie6 un giro importante en la historia centroa meri cana, pues eI

276
ACUERDO DE PAZ

EI 7 de agosto de 1987, los Presidentes centroamericano,


sll scribieron e l «Procedimi e nto para ESlahJecer la Paz Finne y
Duradera en Centroam eri c(l)). EI Pream bulo de esc hi storico
donUllcnto sC ll ala:

"Los Presidentes de las RepLlblicas cl e Guatemala, EI Salva-


dor, Honduras, Nicaragua y Costa Ri ca, re unidos en la ciuclad
d e G uatemala e l 6 y d 7 de agosto de 1987, a"'utados por la
visionaria l' permanent e voluutad de COllladora )' e l Gmpo d e
Apoyo en favo r de la paz ; robustecidos por el apol'o co nstaute
de toelos los gobernantcs y pueblos de l lllundo, de sus principa-
les organizacion es inte rnaci o nalcs y e n especial de Ia Comuni-
dad Europea y de Su SantidadJuan Pablo Segundo; illspirados
e n Esquipulas I, y juntos e n Guatemal a para dialogar e n torn o
a l plan de paz presentado por el Gobic rno de Costa Rica, h e-
mos acorelaclo:
• Asumir plenam ellle eJ re to d e fnljar lin d estino de paz
para Cenu·oamerica.
• Comprometernos a luehar por la paz y erradicar la gue-
rra.
• Dedi car a lasju\'clltudes de Am e rica Central , cuyas legi-
timas aspiracion es de paz y justi cia social , d e libc rtad y
reconciliac i6n , h a n sido frustrad as dura nte llIuchas ge-
neraciones, estos esfuerzos de paz.
• Coloca r al Parlamc nto Centroame ricano como simbolo
de libe rtad e inde p e ndencia d e la recon ciliaci6n a que
aspiralnos en Ce nlroalnerica.
Pedirnos respeto y ayuda a la comunidad internac io naI para
nuestros esfuerzos. Tene mos caminos ce ntroalnericanos para
la paz y el d esarrollo, pero necesitamos ayuda para haeerlos rca-
lidad. Pedimos un trato internacional que garantice e l desarro-
llo para que la paz que buscamos sea cluradera. Reite ramos con
firmeza que Paz y Desarrollo son insepa rables.
Agradecemos al Preside n te Vinicio Cerezo Arevalo y al no-
bl e pueblo de Guatemala h aber sido la casa de esta reuni6n. La
generosidad del mandatario y e l pueblo guatemalteco resulta-
ron decisivos para e l clima e n que se adoptaron los acuerdos de
paz». ,

J
dialogo y la negociaci6n triunfaron sobre el recurso de la fuerza y de I"
viole ncia. Por otro lado, el protagonismo del presidcnte Arias 10 hizo acree-
dor d el Pre mio Nobe l d e la Paz , e n 1988. Este galard 6n permitio lIna
mayor aUlo l101n fa del gobierno costarricensc [rente a las presi o nes del
gobierno norteame rica n o y e l fortalecimi e nto d e la tradici6 n p acifi sta y
democratica de Costa Rica.
No obstante e l prestigio internacion al alcan zad o por eI gobie rno d e
Ari as San ch ez, e n las elecciones d e E) ~) O, el candidato de l Partido Libera-
cion Nacio nal fue derrotado por e l Lie. Rafae l Angel Caldero n Fournier,
del Partido Unidad Social Cristiana. EI desgaste del Partido Liberac i6n
Nacional -que habia estado ocho allos e n e l poder- y e l delerioro so-
cioecon6mico producido por las medidas n eolibe rales aplicadas por e l,
se refl ejaron en la derrota e lectoral. EI gobierno d e Calde r6n Fourni er se
dese nvolvio en un conlexlo internacional muy difere nte, porque la gue-
rra fria eSlaba lIegando a su fin, los gobiernos socialistas del mundo co-
me nzaban a cae r uno lras otro y e l sislema bipolar de la posguerra h abia
desaparecido.
En Am e rica Central, dos acontecilnientos marcaro n los nuevas tiem-
pos: en 1989 , Estados Unidos inva di6 Pan am ", y, e n 1990, los sandinistas
fueron derrotados e n las e lecciones.

Nicaragua : paradojas de La transici6n

EI triunfo de los sa ndinistas, en julio de 1979, no rue sorpresivo, pero


si 10 fu e e l abandono d el programa moderado que habia perm ili do unir a
dife rentes sectores sociales contra la dictadura somocista. Ademas, e l d es-
me mbramie nto d e la Guardia Nacional-bastion d e la dictadura- , qu e
no estaba previ sto e n eI programa revolucion ario , pe rmitio que los sandi-
nislas obtuvieran e1 contro l d e l pode r.
EI ascenso del sandin ismo introdujo cam bios importantisimos e n Cen-
lroamerica . En primer lugar, la confrontac i6n del gobierno nicaragiie nse
con los ESlados Unidos alcanzo inusitados niveles de tirantez, y compro-
me tio a los gob iernos de Costa Rica y de Honduras e n e l acoso al nuevo
regime n. En segundo lugar, como ya se ha senalado , el ejemplo nicara-
giiense eSlimulo los procesos subve rsivos que ten ian lugar en EI Salvador
yen Guate mal a, con la consecuente revitalizacion de la guerra cOl1trarre-
volucionaria, apoyada por el gobie rno n o rteamericano.
En Nicaragua, la naturaleza del poder politico asumio un caracter
esencia lme nte popular y revolucionario. Los objetivos medulares de l nuevo
gobierno eran la construcci6n de una d e mocrac ia pluralisla, manlener
un siste ma economico mixto y una politica internacional de no alinea-

278
mi e nLO a ninguna d e las poten cias e ntonces imperantes: los Estados Uni-
dos y la Union d e Re pl,blicas Socialistas Sovie l.icas. De hecho , esos objc ti-
vos nUI1 ca fueron alcanzados.
En un principio, la amplitud de ltriunfo pe rmitiola incorporacion d e
elementos no sandinistas en la Junta d e Gobierno de Reconstruccion
Nacional y en e l gabi n e te ministerial, pero la d iversidad d e intereses hizo
i mposih l ~ qll~ la alianza se lnan tuvie ra, Yslirgie ron las d isputas, tanlo con
la extrema izquierda -por el control del movim iento popular-, com o
con los sectores d e derecha. Los sandinistas pronto construye ron todo un
andamiaje politico-militar para sustentar y legitimar la nueva organi za-
cion estatal: Ejercito Popu lar Sand inista, Po li da Sandinista y organizacio-
nes d e masas (Central Sandinista d e Trabajadores, Asociacion de Trabaja-
do res de l Campo,Juventud Sandinista 19 d e julio, Asociacion de Mujeres
Nicaraguenses Luisa Amanda Espinoza, Union Nacional de Agricultores
y Ganade ros y Comites de Defe nsa Sandinista).
La salida del ingeniero Alfonso Robelo de la Junta de Gobi e rn o, e n
1980, significo la ruptura con los empresarios y con la op osicion conse r-
vadora, e ne migos ace-rrirnos de la economia mixta. Esta pugna dio como
resultado la descapita lizacion del pais.
Ala oposici o n inte rna pronto se Ie sumo la extern a. EI gobiern o nor-
lealnericano lanzo una ofens iva econonlica, militar y diplo matica con tra
el regimen sandinista. EI apoyo que Ie brindo a la Contra, permitio que
esta aglutinara cerca de 15 mil h om bres hacia 1983 , de los cuales cerca d e
la mi tad eran antiguos miembros de la Guardia Nacional y funcion arios
del somocismo. La guerra con tra esas fuerzas militares rue e l factor que
mas d e bilito a l gobierno de los sandinistas. En 1983, los re be ldes contro-
laban la zona noro rie ntal del pa is y se habian granjeado e l apoyo de cam-
pesinos mestizos y d e indigenas de los grupos mi skitos, sumos y ram as. La
oposicion Uerarquia eclesiastica, d iario La Pre nsa, partid os politicos, sin-
dicatos, e tc.) perma neda discre tamente alejada d e la Contra.
Los comicios de 1984 fll<'ron ganados holgadamente por e l FSLN, con
Danie l Ortega a la cabeza. A pesar de la li mpieza del proceso electoral ,
reconocida intern acio nalmente, los Estados Unidos respo ndieron con e l
embargo economico total. De ese modo la revolucion nicaragiiense se
encontro e n un a situac io n contradictoria: por un lado, fu e exitosa al C011-
solida r las bases politicas y milita res d e su poder, pero , por otro, fracaso
en su objetivo d e reactivar la economia agroexportadora y las industrias
del p ais. La situacio n economi ca se lOrno caotica, aumento e l nl,mero d e
trabajadores dedicados al trabajo informal , y se incrementaron el d esa-
bastecimie nto y la intlacion.
La contlictiva situacion interna que atravesaba el regimen, aunada a
las gran d es presiones diplomati cas derivadas de los acue rdos de Esquipu-

279
las ll, obligo a los sandinistas a negociar con la Contra. Sin embargo , el
cese delinitivo de las hostilidades no se logro sino hasta la derrota e lecto-
ral del sandinismo, e n las elccciones de 1990, comicios en los cuales resul-
to triunb.dora Violeta Barrios viuda de Ch amorro.
No obstante las dilicuitacles, cl regimen sanclinista introdujo algunas
reformas sustancialcs, entre las cnales deslaca la reforma agraria, que per-
miti6 repartir 4 millones de rnanzanas de tie rra enU"C 120 11lii fanlilias. En
una clccada, los cong-lom e rados estatalcs agroinduslriales, las cooperati-
vas y los pequ cllos productores beneficiados con la refanna accedi ero n al
';0% de la tie rra, a l59 % d e la maqllinaria agricola y al 66 % del credito. En
cI ca mpo educativQ sc logro llna rerlu cci6 n slIstan cial del analrabclismo;
e n e l area de la sai ud, hubo lIll notorio in creillento de las consultas medi-
cas, se trab ,~j 6 e n la erradi cac i6n de cnfermedades e pidemicas y se logro
disminuir la mortalidad infanti1. Las familias urban as de escasos recursos
resultaroll favorecidas COil la reducci6n del monto de los alqui le res y con
la construcci on de viviendas de inlere!'5 social.
Los logros de la revolucion implicaron un incre lne nlo del gasto esta-
tal a niveles mas elevados d e los que el pais podia sostener, en el contex to
d e guerra y de bloqueo en que se hallaba . Todos esos faclores aunados
contribuyeron a la derrota de los sandinistas en las eleeeiones d e 1990, en
las cuales el pue blo yoto contra el servicio militar obligatorio, y dijo si a la
n o rmalizaci on de las relacion es con los Estados Unidos y a la posibilidad
de vivir en paz.
EI grupo trillnfador, la Union Nacional Opositora (UNO), aglutinaba
a catoree partidos, cuyas ideas iban desde e l comunismo hasta la ultrade-
recha. La victoria de la UNO inauguro un hecho curioso e n America Lati-
na: la coexistencia de un Estado revolu cionario con un gobierno conser-
vador. Pronto la coalicion qu e \levo al poder a la se"ora Barrios se dividio
en dos bandos principales: uno pronorteamericano , encabezado por el
vicepresidente Virgilio Godoy, y otro , m as pragmatico, jefeado por Anto-
nio Lacayo, Minisu'o de la Presidencia y ye rno de la Presi denta. Esta ulti-
ma posicion fue la que logro imperar.
En medio d e grandes contraclicciones, el gobi e rno de la UNO ha in-
tentado desmantelar el Estado revolucionario, revertir el proceso de re-
forma agraria )' destruir el ejercito sandinista, pero ba topado con gran-
des obstaculos. La transicion ha mostrado ser un can1ino largo yempina-
do, en el cllal, para poder avanzar, a m e nudo hay que retroceder.
En sintesis, e1 aporte del Fren te Sandinista de Liberaeion Nacional no
rue la construccion del socialismo en N icaragua, sino la destruccion de la
dic tadura somocista y los inicios de la construccion de una republica de-
mocratica, cuyo desarrollo y fortalecimiento es el gran re to que tien en los
nicaragiienses al terminar e l siglo xx.

280
HI triunfo de La necesirlarl

En Centroamerica, la decada de 1980 comenz6 con e l estallido re\'o-


iu cionario )' la bllsqueda de un calnino hacia el soc iaiislTIO, )' concl ll)'o
con la dcrrota del Frente Sandinista en las urn as c1ectorales, por 10 q ue
pllcde aftrrn arse que la realidad y la necesidad triunfaron sobre la uto pia.
La consolidaci6n de la estabilidad estatal, lograda tras un arduo p ro-
(eso de negoc iacio nes, dependc del refinamienlo de los Inecani smos para
la bllsqueda de con se nso, de la a mpliacio n de los espacios politicos y de la
varie dad de alternativas para que los h abitantes d e la region plied an te-
ncr una vida digna. En consec uencia, ull a vez negociada la soluci6n de la
crisis politi ca nicaragLLc nse, y delegada e n la Organizaci6n d e las Nacio-
nes Unidas la resolucion d e la guatemaltcca y d e la salvadore na, h a sido
nccesario buscar sali das para resolver ]a crisis economica y social. En Ia
cum bre celebrada e n abril d e 1990 en Montelim ar, Costa Rica, los presi-
de ntes iniciaron un intercambio de ideas para o rie ntar a sus parses hacia
la estabilidad e con 6m ica, en e l marco del nuevo o rden mundial.
EI deseq uilibrio po litico y cco n6mico ha sido a provcchado por e l nar-
cO lrafico p ara infilLrarse en e l Es tado, en las fuerzas annadas, e n los parti-
dos politi cos y en la sociedad ce ntroamericana. EI traftco de estupefacien-
tes se ha sumado a los mltltiples problemas que aquejan a la region , y es
una nueva Fuen te de violencia y de corrupcion que alenla contra los cs-
fuerzos de democratizacion.
Las circunstancias que dominan la situacion politica centroaJn erica-
na a me diados del decenio d e 1990 h acen tem er que Ia c1e mocracia sea
re ducida a la esfera d e 10 politico-electoral. De momento , e n a lgunos pal-
ses no ha sido posible superar la violencia, el terror y el irrespeto de los
de rechos humanos fundam e nlales, y los problemas economi cos y socia les
so n agobia ntes en t.oda la regio n. En sintesis, la estabilidad y la justi c ia
sig lle n siendo una uto pia.

ECONOMiA: (NUEVOS RUMBOS 0 CALLE:JO N SIN SALIDA?

Orecimiento conflicti vo

EI crecimie nto econ6 mico experime ntado por la regio n durante los
anos compre ndidos e ntre 1950 y 1980 profundizo las difere ncias entre los
cinco palses centroamc ricanos y atizo los conflictos economi cos, socia lcs y
politicos en la region. EI mayor crecimi ento se experimento en Costa Ri ca,

281
donde el promcdio anllal de l prodllcto interno bmlO rue d el 6,!', %; eI de £1
Salvado r creci o un 3,8 % anualt mientras el de los demas paises alcanz() lIll
promedio ce rcano a l 3,2% . Ade mas, la participaci6n de la agricullu ra en cI
producto inl.erno brulo decreci6, en favor del sector manufacturero), de
las actividades de gobi erno. La diversificaci6n de las cxportaciones, con la
consecuen te Iiberaci6n de la dependencia exclusiva de los ntbros tradic io_
nales, lUvo un mayor im pacto en Guatemala, El Salvador y Costa Rica.
T,~ politica de sustitucio n de Ja.s imponacione s tuvo como obje tivo
alcanzar una nueva inscrci6n de la econom fa de los paises centroamerica-
n os e n el me rcado internacional , destin ada a supe rar los desequi librios
financieros y sociales del modelo de desarrollo agroexportador.
En Costa Rica , la reducida capacidad productiva de su cstruc tura eco-
n omica, propia de un pais peque n o y subdesarro ll ado , no h a podido so-
po rtar el costo c recien te del desarrollo social , y, en consecuencia, h a he-
cho que se profundice el desequilibrio financi e ro . En cambio, los regime-
n es a utoritarios y represivos d o minantes en los de mas paises h a n gozado
de mayor estabilidad finan ciera, aunque a expensas del peligroso ensan-
chamiento de las difere n cias sociales.
La desigualdad social entre los costarrice nses y sus vecinos a principios
d el decenio de 1980, se refl ejaba en el ingreso promedio por habitante: en
Honduras y EI Salvador era de alrededor de 200 d6lares anuales, en Guate-
mala y Nicaragua de unos 400, mientras que en Costa Rica ascendia a 900
d6lares anuales. Otros indicado res tam bien muestran mayor desarrollo so-
cial en el caso costarricense. Hacia 1980 cerca de l 75% de los guatemalte-
cos, salvadoreiios y hondureiios, y e l 60% de los nicaragiienses, vivian en
condiciones d e pobreza; en Costa Rica esa situaci6n solo golpeaba a cerca
de l 25% de la poblaci6n. La esperanza de vida superaba los 71 anos en Cos-
ta Rica, en EI Salvador alcanzaba los 60 anos, y en los demits paises oscilaba
entre los 54 y los 57 anos. Asim ismo, los indices de mortalidad infantilmues-
tran que en Costa Rica ascendia a 36 decesos por cada mil nacimientos, e n
tanto que en el resto de la region oscilaba entre 80 y 90 casos.
En sintesis, e l crecimie nto ecuno mico y la diversificacion de las ex-
po rtaciones no significaron un mejoramiento d e las condicio nes de vida
de la mayoria de los h abitantes de Centroamerica. Solo en Costa Rica la
riqueza estaba m ejor distribuida, a unque a costa del constante agrava-
miento d el desequilibrio financi e ro del Estado.

La crisis, sus detonantes y sus consecuencias

Durante las decadas de 1960 y 1970, las condiciones d el contexto in-


ternacional e ran favorables, y permitieron miligar los efectos del dese qui-

282
CRAFICO 8
BALANCE COMERCIAL (1979-1983)
Guatt' lllal a El Salyad or H ondura s Ni carag ll<l Costa Rica
~()()

100

o
-1011

<1110 1979

--100
. 198 1
-!)()()
0 1983
-600 -.lC=~~========================:7
Fnelllt': H istOlia Gel/I'rot ti(' Cl'nlm(lmh"i m, T () lllo \-1, p . 97. Fl..i\CSO 1991

Iibrio financiero, social y polfti co. Hasta el ana ]977, los montos que reci-
bian lo s paises d e la region porI a venta de sus pro ducloS d e exp o rtacio n
les pe rmiLian adquirir los bie ne s que necesita ban y m ant:jar adecuacla-
mente cI deseq uili brio financi e ro existenle. Pe ro Ja situaciun cambi 6 a
partir de 1978, cllanc10 se d esat6 la crisis econ 6 mica (ve r gr:Hico NQ 8) .
Los offgcnes d e la crisis dc ben buscarse e n las conlrad iccioncs pro-
p ias d e los pa lses que oc upan una situacio n pe rife r ica e n el sistema capi-
talista munciial, es clcci r, en Ia exp lo lac i6 n ex tensiva de los rccursos pro-
d uctivos - tierr a y lrabajo-, sin una mode l'ni zac i6n tecno l6gica que ga-
ran lice mayor prodtlc tividad. Sin e mbargo , la crisis h a le nido difere nt e
ilnpacto e n los paises de la region, de acuerdo con las parLiClllaridades
del d esa rro llo hist6 rico de cada un o de e llos. En Costa Rica, la crisis rue y
sigue sie ndo de naturaleza c scncialmentc flll ande ra. En F.I Salvador, Gua-
teIna ia y Nicaragu a, los proble nlas sociales a lcanzaron dilll e nsion es ta n
profundas que provocaroIl insurrecciones a rmada s, mi en tras qu e . e n
Honduras, e l impacto de Ia cri sis no a lcan zo n iveles Lan severos.
E1 escaso g rado d e a pertura d e la economfa de los paises centroam c ri-
caTlOS h aee que sea 1ll11)' sensible a las oscil ac iones del me rcado cxtern o,
por 10 qu e la rccesi" n mundial 1m afectado su po tencial ex po rtador y su
capacida d d e creci rnic nto. El detc rioro e n los le rmin os d e inte rcambi o
ha rcduc ido sustan cia lmentc los ingresos producidos por las exp o rtacio-
n es, 10 e llal ha provoeado una disminuci6 n de los ing rcsos fi scal es. EI
proble m a del d efici t fiscal se ha aglld izado, porque al Estado no Ie alcan-
zan los ing re sos para cubrir SliS gastos (ver grafleo N'-' 9 ) .

283
GRAFICO 9
DEFICIT DE GOBIERNOS CENTRALES (% DEL PIB)
~o

18 l Y7H
16
14 o 19X2
12
10
R
6
4
2
o---t'-""'---
Guatemala El Salvador Ho nduras Nicaragua Costa Ri ca

Fu(;'nte: /-/iMolia. (;rll-l'Ia{ II" CI'II/roflllll;,.im. Tomo V I, P-' A". 10 1. FL-\CSO 199 ~

En me dio d e la recesi6 n , para los gobie rn os es muy difie il a ume ntar


sus ingresos mediante el incre me nto d e los tri butos, d ado e1 d e terioro de
la actividad econ6 nlica y e l aum e nto de la pobreza. Asim ismo , h ay e no r-
m es difi cultades para implantar politi cas de auste ridad en el gasto pllbli-
co . Ante tal siwaci6n, los gobi c rnos se han visto obligados a adoptar me-
didas ten dentes a Initigar e l impacto de la crisis. las (ua les difieren de lIll
pais a otro, p o rqlle los diversos sectores sociales y los gru p os d e presion
intervi e n e n en derensa de sus intereses, 10 qu e deja poe a capacidad de
maniobra a los go bern a nLes.
En N icaragua, alll egar al poder los san dini stas , a m ediados de 1979 ,
dn ive l d e pobreza era rnuy alto, la deu da externa era ago biante y la g ue-
rra contra la cl ictadura sOlllocista h abra provocado g ra ndes trastorn os y
clcstruc.rj inl. No o bstante, se e nsay6 un a poHti ca de estabilizacio n econt)-
m ica con justicia soc ial. Sc pagaban salarios altos para f~lvore ce r e l consu-
mo p opular, pero ('sto "fect" .. I equilibrio financiero , ya qu e " I Estado
carecia de recursos 5uficien Les .
En EI Salvado r, laJunta que as umi 6 eI pode r e n 1979, tras e l derroca-
miento de l gen e ral Carlos HUiTIbe rto ROlne ro, se cornpro,ne li6 a la rcali-
zaci6n d e reform as sociales), eco nomi cas -como la nacion alizacion del
co merc io), de la ban ca-. y a c mprende r un progr'<lIna de re forma agra-
ria, pl anes que fue ron o b stacu lizados por los seclores mas conservadores
d e la sociedad. La Junta se propuso aleanzar la estabilidad fin anciera, pe ro
sin desc uidar la expan sio n econolnica, para evitar el d esconte nlo social.
Con ese fin m an tuvo una p olitica de salarios crecientes (solo en 1980 los

284
salarios reale!'; crec ie ro n eI1 4%) . LaJu nta tam bi en proc llro control ar los
prccios y hubo una c<\pida e xpansion d e l cn'dito al secto r pllbli co . Sin
embargo, e l d e fi cit fi scal si empre era elcvado , p o rque eI Estado in cur";a
en allos gastos militares.
Guate m ala, durante eI regimen d e Lucas Garcia, tam bie n incre me n-
to eI gasto publico , a unque a costa del equilibrio fi scal. A pesar de la ag u-
cia presion social , e l le rro rism o de Estad o se impnso , }' no se tOlllaro n
me didas que paliara n los efecLOs de la cri sis entre los se cto res mas n ecesi-
Lados de la poblacion.
Honduras, en cambio , logro evolucio na r d e un tipo rle Estado re pre-
si\'o a otro d e corte m as reformi sta. La re lativa d e bilidad de los g rupos
do minantes y e l impacto d e los acontecimientos bel icos e n EI Salvador
favo reci e ro n e sa transici6n; graduahn e nte, los conflictos sociales se e ln-
pczaron a resolver po r los cauces institucio nal es. EI gasto publico d e l Es-
tado hondure iio ta mbi e n aum e nto , p ero fue compensado co n la in tro-
ducci6n de nnevos tributos y e l allmento de los ya existente s.
Co sta Ri ca es c l pais ce ntroamericano en d o nd e eI gasto publi co ha
tc nido mayor crec imie nto y eI d esequilibrio finan cie ro d e l Estado h a sido
mas grave. La administracion de l Lie. Rodrigo Carazo (1 978-1982) p roCl l-
r6 reali zar una reforma tribularia d estin ada a superar cI cl esequili brio
liscal, pe ro fracaso e n su intc nto.
Los gobi ern os de los parses centroamericanos, en general, trataron
de resolve r 0 aliviar los probl e nl. as fiscal es recurric ndo al encle udami e nto
exle rll O. La bllsf)u ecia de rec ursos reslil taba l~ic il , pOI-que e l Clllll1Cll tO de
los precios del pe tr6 1eo habia alJ egado SUlllas fab ulosas a las areas de la
banc a inte rnacion al. EI ende udamicnto exlern o permiti o hacer f1-e nlc a
las nccesidades ln as aprclniantes }' co nte ner las presion es soc iales, pc ro
no se previe ro ll las dificultades que se preselltarfan a rne diano y a largo
plazo . La c1euda exte rn a centroamerican a paso de I 349 miil o n cs d e d6la-
res ell 1970, a 10 335 rnillon cs en 198 1. Esta ll1t.im a cifra re presen ta rn as
del .c,O% de l proclllclo interno bruto regio nal.
Ante la magnilud de la de uda exlerna, y e n presencia de una grave
situaci6n cco norni ca caracterizacla por el increme nt o del defi cit fi scal, el
de terioro rle los m o ntos percibidos po r concep to de expo rtacion es y cl
allo valor de las impo rlacio nes, los gobie rnos de la regio n recurrie ro n al
e ndeudanli e nto inte rn o . Este provoco un a expansio n del credilo interno
y, luego, la devaluaci6 n de las monedas y el aum e nto de la infl acion , 10 que
a Sll vez prodlljo la fuga de capiLalcs. En cono tie mpo , d evaluaci6n , infla-
cion y fuga d e capitalcs provocaro n un a reduccio n del crcdit o inte rno .
El d e sequilibri o fmanci e ro y los pro blemas po liticos re pcrcntic ro n
n egativame l1le e n e l Mercom lrn, cuyo d escalabro acelero la crisis. Para
1983 las exponacion es intrarregio n ales se habian reducido conside rable-

285
I LUSTRACI ON N U 45. BARRIO PO BRE. ZONA 3, CIUOAD DE GUATEMALA. Como consecuen-
c ia de la crisis econ6mica, a partir de la deca da de ] 980 se ha in cremen tado e l numcro de
personas q ue vive n en condicion es de pobreza. La mayor parte de los nuevas pobres habita e n
las zo nas lll·banas.

mente. En relaci6 n con las ven tas realizadas e n 1980, las exportaciones
nicaraguenses disminuye ron e l 56 %, las salvadoreiias e l 43%, las costarri-
censes e l 30,8 % y las guatemaltecas e l 23,6%.
No obstante, desd e e l punto d e vista econ6mico, e l principal indica-
dor d e la recesi6n fue la caida d e la producci6n regio nal. En 1982, la
prodllcci6n se co ntrajo e l 22% en Nicaragua y EI Salvador, e l 9,4% e n
Costa Rica, el 6 % e n Guate mala y e l 2,2% e n Honduras. EI descen so de la
producc i6n fu e acompaiiado por la caida e n los nivel es de inversi6n.
La crisis prodl~o algun a livio e n el desequilibrio d e l come rcio extel~
no, po rquc sc dio una dism inu cio n de las ilitporLadunes, derivada de la
caida del con sumo intern o. Latnentable me nte, esa disminuci 6n no provi-
no d e sustituir los productos importados pOl' o tros prod ucidos e n nues-
tros paises, sino que, mas bien, [lI e consecuencia de l e mpobrecilll iento
general provocado por la crisis.
Uno de los e fe ctos sociales mas graves de la angustiosa situac ion eco-
nomi ca rue el au mento de l desempleo . Costa Rica y Guatemala , que ha-
bian te nido tasas de dese lllpleo abi e rto inreriores al 5% de la poblaci6n
econ61llicamente activa, llegaron a duplicar esas tasas. EI proble ma era
a(in mas preocupante en Honduras, Nicaragua y El Salvador. En estos dos
ultimos paises las tasas d e deselllpleo abierto alcanzaban e l 20 y e l 30 %,
respectivalnente. Esa.." cifras se tornan mas dramaticas si se con sidera la

286
rapida expansion del sector informal urbano , ]n cual reneja ]a inca pari-
dad de crear nuevas e mpleos e n los seClores economi cos tradicionales.
Las politicas dc saneamienlo linanciero han repercutido negalivam('n-
te sobre la poblacion y, en consecuencia, los procesos de cmpobrecimi en-
(0 se han acelerado. Al mismo tiempo, la infl aci6 n ha reducido e l poder

adquisitivo de los habitantes de la region. A principios de la decada de


1980, eI r1<ererioro rle los salarios reales fue menor en Gualemala, e in ler-
medio en Honduras y Cosla Ri ca. EI mas alto se d io e n £1 Salvador y, sobrc
lodo, en N icaragua, don de la guerra civil hada mas crfti ca 1a situaci6n.

Los programas de estabilizacion

Hacia 1982 la situacion econ o mica centroamericana e ra tan preocu-


pante, que los gobe rnantes -con excepcion de los sandinistas- se vie-
ron obligados a recurrir a Ia n egociacion d e program as de ajuste estructu-
ra l con el Fondo Monetario Internac ional. Otras institucion es finan cieras
inlernacionales, com o e l Banco Interamericano de Reco nstrucci6n y Fo-
mento (BJRF) y la Age ncia Inte rnacional para e l Desarro llo (AID) tam-
bi en han aprovechado la impl ementaci6n d e los programas de ajuste es-
tructural para imponer sus condiciones.
EI o bje tivo de los acuerdos es ajustar eI desequilibrio financiero, para 10
cual se proponen medidas tales como reducir la demanda interna -me-
diante la devaluacion monetaria-, politicas monetarias y crediticias restric-
livas y politicas salariales austeras. EI Eslado, a Sll vez, se ve obligado a redll-
cir eI gasto p6blico, con 10 cual efecta los gas(Os sociales y las inversiones.

El ordenamiento de las jinanzas publicas

Tanto los organ ismos fin ::lnr.iPfos internacionales como los sectores
empresariales locales han coin cidido en la necesidad d e con trolar el defi-
cit fi scal mediante la austeridad en el gasto publico. No obstante, el equi-
librio fi scal tambie n se puede a!canzar mediante e l incre m e nto de la re-
caudacion tributaria, ya sea m ej o rando los sistemas de cobro de tribulOs,
para evitar la evasion fiscal, 0 apl icando nuevos impuestos. En general, la
aprobacion de nuevos paquetes tributarios h a creado fu erte oposicion de
difere ntes sectores sociales, por 10 que, en ultima in stancia, 10 qu e ha
habido es un increm e nto d e los impuestos indireclOs.
Los limitados a!cances de la re forma tribUlaria se re flejan en los in-
gresos p ercibidos por el Estado . Ante este tropiezo , la re duccion del gaslO
se ha impuesto como la principal medida estabilizadora.

287
Honduras fue cl primer pais centroamericano que logro establ ecc r
un convenio con el Fondo Monetario Internac ional , en 1979. En 19H2 cl
gobierno de Suazo Cordova entro a negociar con e l presidente de los
Estados Unidos, Ronald Reagan , un plan finan ciero, e l cual giraba alre-
dedor de la apertura de la economia, la promocion d e las exportaciones
no tradicionales y la reduccion dnistica del gasto ptlblico. Una de las me-
las que se proponfa alcanzar con esle plan ef;;! 1;;1 P1iminaci6n del inter-
vencion ismo eSlatal. AI ratificar el cOllvenio, Honduras rccibi6 crediLoS
pOl' cien millones de d61ares del Banco Mundia!. Sin embargo, no logro
c umplir con las metas ni con los objetivos de los organ ismos financieros
internacionales, y no rue sino hasta en 1986 cuando empezo con la verlla
de las empresas estatales.
EI cumplimiento de los planes de ajuste en Honduras se ha realizado
despacio, y, dada la importancia estrategica del pais para los Estados Uni-
dos, las presiones no han sido tan fuertes. En cambio , en el caso de Costa
Rica, la presion de los organismos internacionales ha sido mucho mas
fuene y sistematica. En Costa Ri ca se aprob6 e l primer program a de ajus-
te estructural en 1983; la Ley para el Equilibrio Financiero del Sector
Pttblico paso en 1984, y las empresas d e la Corporacion Costarricense de
Desarroll o (COOESA) estan ala venta desde 1985.
Las politicas de reduccion del gasto ptlblico han resultado fructiferas
en Costa Rica, EI Salvador y Guatemala, y avanzan lentamente en Hondu-
ras. En Nicaragua se ha producido un a notable caida del gasto p6bli co,
pero se ha debido al grave deterioro de la produccion nacional que ha
provocado la reduccion de los ingresos estatales. Esta reduccion ha afec-
tado, principalme nte, la inversion plibli ca y, por tanto, los presupuestos
d estinados a educacion , salud , vivie nda y seguridad social, 10 clIal ha agra-
vado los probl emas sociales.

Restriccion de la demanda interna

Despues del control del deficit fiscal , la segunda medida en importan-


cia para consegllir la estabilizacion economica ha sido la restriccion de la
demanda intern a. Sin embargo, debido a que en el resto de Centroameri-
ca los niveIes de consumo son bajos, e l ap remio de los organismos fin an-
cieros internacionales ha sido mayor sobre Costa Rica, don de los niveles
de con sumo privado son altos. Co n e l objeto de lograr la reduccion del
con sulTIO se h a promovido la politica de devaluacion monetaria, se ha
mantenido un a politica salarial austera y se h a contraido el credito.
En Costa Rica, la gravedad del deficit comercial obligo a l gobierno
de llicenciado Rodrigo Carazo a decretar la fl otacion del colon, en 1980.

288
Esa politie(1 (Ll\"O graves COllscellCll c;as: la de\'alu<lci() 11 super() cl .sOO(; _ I ~t
inllaci()11 sc e lev{) COlllO I1llI1ea anl es 10 habia hl'ch u, let fuga de capitalcs
Sl' incremento y let pobrcz<l y el desem plco rec rudec ieroll.
Durante la adrninisrraci()11 de Luis Alberto J\rl onge (I m·t2- 10H6) sc l'S-
t..lblcc i6 cl sistema de Ininidc\'ai uac io nes, con 10 ella ! c l co lun rt:' e llp('I"(~).
parcialmente. su \·a lor. Ademas, no sc sig ui6 con tidelidad 1£1 polflica de
("o l1u'ol de la dClllancla interna, pOI" 10 que' los salarios rcaJcs sc rcclIpcra-
roll lentalTICnte, las tasas de dl'scrnpl eo se redL~ cron, cI co nSlllllO Y la ill -
HTsi6n se rec:ob rarol1 y e l gas to soc ial del sec tor pllbli co crecio . En COllSC-
(\le neia, durante la admin istracion l\tonge, se logT6 red uc ir cI eosto so-
cial de l progTama de ajuste )' frenal' e l proceso de crec imi e nto de la po-
brcza . 1"1 p o rcemaje de familias a fectadas por la pobreza d escc ndio d el
-1-0 % aproxilnadan1cnlc, alcanzado e n los a l1 05 d e crisis mas intensa, al
2!l %, que ha sido 10 usual en el pais.
Los dem ,,, paises del area ha n combatido cl deseqlli librio cxte rno
por Inedio d e un efectivo control de la dc manda inte rna y restriccioncs a
las inlportacion es, lTIt;lS que pOl' la vfa de la devaluac i6 n , como ha sllcedi-
do en Costa Ri ca .
Hondu ras accedio a devaluar e1lempira en 19R9. ESl"), Olras medidas
para lograr la eSlabilizaciim prodlljeron algunos resultados positivos, como
e l crecimienlo de la produccion )' la dism inucion de los e levados indices
de dcsempleo. Sin enl bargo, el dete rioro de los salarios reale s se ha man-
tenido, con cI co ns iglliente im pacLO negativo sobrc cI co nSllmo, )' se h a
profundizado e l problema de la pobreza.
En 1985, e l FMI por fin logr6 'lu e el gobierno guatemalteco aceptara
d evaluar e l quetzal. U na nueva devaluaci6 n , en 1989, provoc6 un fuene
impacto infl acionario. H asta en lon ces, e l pais habia apli cado un adecua-
do control d e precios. Los efectos de las politicas eSlabi lizadoras h an sido
la caida de los salarios reales, el esta n camie nto de la producci6n )' eI au-
mento del d esempleo . En consecue ncia, al desp"nlar e l decenio de 1990,
la pobreza go lpeaba al 80% de la poblac i6 n guatemalteca.
La situaci6 n econ6mica de EI Salvador)' Guatemala se vio agravada
por los con fli ctos polilicos y militares. En EI Salvador se p rocedi6 a d eva-
luar e l col6 n e n 1982. La me dida desalo un proceso inflacionario galo-
patHe, d esastroso para un p ais en eSlado de guerra. EI co nllicto politico-
militar obstaculizaba seriamen te la rec uperaci6n econ6mica del pais e
impact6 n egativamente sobre la preslacio n de servicios soc iales y econ 6-
m icos por parte de las instituci ones publicas. Adem;;s, la recesi6n econ6-
mica y la situaci6 n de g uerra provocaban efectos cataslroficos sobre los
salarios reales y las o po rtunidades de lrabajo.
En N icarag ua , a pesar d e que e l gobie rno sandinista no hizo esfue r-
zos explicilos por con traer la demanda interna, ni se utiliz6 la po If-

289
tiea ca mbiaria como un insLrUlllento para restringir eI acceso a bi enes
importados, los resultados fu eron muy simiiares a los obtcnidos e n los
demas parses de la region. Durante los primeros anos de la revolucion
sandin ista , e l financiami e nto externo era abundanle, y la politi ca cambia-
ria produjo L1na sobrevaloracion del cordoba, 10 cual penn itio am pliar las
importaciones y e levar e l consunlO. La situacion comenz6 a variar con la
disminLici on del flLljo de recursos exte rn,)S. EI gobierno reclIrrio, enton-
ees, a reali zar [L1e nes devaluacio nes y a fomenta r las exportaciones no
tradicionales.
La situacion d e Nicaragua se complicaba en el contexto de la guerra
civil , la cllal adquiriola apariencia d e Lin enfrentam ie nto este-oeste. En el
campo militar, los Estados Unidos apoyaban a los grupos contrarrevo lLl-
cionarios, y su poHtica exterior se ori e ntaba a conseguir el derrocamie nto
del regimen sandinista, mediante e l desgaste economico y e l deterioro
del apoyo popular. Se calcula que, e ntre 1980 y 1989, e l embargo esta-
dounidense provoco p e rdidas a Nicaragua por un monto supe rior a los
mil millones de do lares, mientras qll e los danos provocados por la gue rra
ascendieron a unos 1 400 millones d e dol ares.
En el segundo lustro de la decada de 1980, el desequilibrio fin an-
ciero alcanzo los mas a ltos nive les y aparecio la «estanflacion » (estanca-
mien to economi co acompanado d e procesos inflacionarios). EI des-
censo de la produccion , la libe racion de los precios, el contro l de los sa-
lari os, la austeridad fi scal y e l desempleo tornaron caotica la situa-
cion economica y social del pais. Como eonsecuencia, e n 1988 Nicaragua
tuvo e l triste «honor" d e alcanzar los mas altos indices inflacio narios del
continente, con Lin aumento de los precios al consumidor d e mas del
33000%.
En sintesis, no solo no se lograron los objetivos que los sandinistas se
habra n propuesto alcanzar, sino que , por 10 contrario, las condiciones de
vida de los nicaragiienses desm e joraron, al disminuir los niveles de ingre-
sos y reducirse el consumo popular e n una medida sin prec~clenles . La
pobreza crecio , no obstante que las politicas redistributivas del gobierno
y el gasto social tuvieron algun efecto paliativo.

HACIA LA APERTURA DE LAS ECONOMIAS

Uno de los efectos mas importantes de la crisis y de los programas de


aj uste estructural ha sido la ape rtura de las economias centroamericanas,

290
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e n proeura de un a inserc ion mas ventajosa e n la eeonomia mundial.

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Del tnuteccionismo industrial a la ajJertura

EI Mercomllll habia sido creado con cI objetivo de prom over la indu s-


tria en los paises centroa1nericanos )' aminorar Ia vuln e rabilidad d e sus
economias, originada e n eI peso abrumador de la produccio n agrocxpor-
ladora. En e I m a rco d e l MerCOlTILIO , se avanzo en eI proceso de industria-
lizaci6 n por sLlstituci6n de importaciones, dentro de esq ucmas proteccio-
nistas. EI gratico NQ 10 mueslra los mOlllos alcanzados pOl' e l come rcio
interregion al e n 1992, los cuales no son nada halagadores.
La crisis h a obligado a replalllear la idea de un a inse rcion mas audaz
e imaginativa e n el1ne rcado internacion al. EJ primer paso en esa direc-
cion ha sido la e liminacion de las medidas que promovian la produccio n
para el mercad o interno y que fre n aba n la produccio n para la expona-
cio n. En consecuencia, se ha rec urrido a la Iiberalizacion cambiaria y co-
mercial, tratando d e e limin ar la sobrevaluacion d e las monedas y redu-
cie ndo el protecc ionismo industrial.
La ruptura d e l viejo esquema proteccionista no h a estado exenta d e
cOlllradiccion es, por 10 que su e liminacion ha side parcial. En cambio, la
promoci6n d e las exportacion es no tradicionales a lc rceros mercados ha
sido mucho mas exitosa, y h a cOlllado con e l aval d e los Estados Unidos.
La Iniciativa para la Cuenca del Caribe (1982), pro movida por la admi-
nistracion Reagan , se concreto e n la Ley para la Recuperacion Economi-
ca de la Cue n ca d e l Caribe (1984) . Esta ley propi cia la apertura comc r-
cial de los paises caribeiios, al mismo tiempo qu e fona lece la presencia
economica y mili ta r de los Estados Un idos en la zona. La Agencia Inter-

GRAFICO \0
TOTAL DEL COMERCIO DENTRO DEL MCCA. 1992 (MILLONES DE OOlARES )
Cost.a Rica
1:15,4

Nicaragua 33,2 GWllemala


337,6
Honduras 32, 1

Fue n te:
Cenlrowlleri("{t en fiJms
£1 Salvador 1980-1992, p;i~. 7:\.
2 10,5 n .A.CSO 199[)
l1<1cional para e l Desarro ll o (Am) ha dado g ran apoyo a la creac io n de
instilll cio nes pri\'adas y mi x las dedicadas a la prOlnocion de l (orncrcio
ex terior.
Los paises ce nLroamcricanos han impul sado las expOrLacioncs no lra-
d icionalcs mediante varios mecani smos. En primer lugar, promulgando
leres de forll clllo que , en csen cia, procuran atraer capitales mediante la
excnci6n de cargas tribularias a los inversionisttls y dando un tfaro pre fe-
rencial a las emprcsas flu e sc instalan en los parqucs industriales y e n las
zonas francas. En segundo lugar, olorgando «bonos Oscalcs», inccntiyos
que pret.endcn con trarrestar el lI amado ({sesgo an liex ponadoP) de las
eco n o m fas ce n troa m erica nas.
EI pars que ha c1ado mayo res in cen tivos es Cosla Rica. Aunque las ex-
portaciones aumentaron a una lasa promedi o del 9% e ntre 1985 Y 1989,
eI coslO fiscal que ha sign ificado para el pars e l otorgamiento de los Ceni-
ficados d e Abono Tributario (CAT) ha sido causa de gran pre oc upac io n.
Se caleula que, en 1989 los CAT absorbran mas d el 7% de los in gresos
fiscales. Aden1as, Inuc has em presas han apro\'ec hado los in ce ntivQs para
pnHllover cxportac iones con un elevado COlllponenlc importado . ISle es
el caso de las empresas maq uil adoras.
Durante los uhimos afios , Costa Rica ha vista crece !' sus exportac iones
no lradicionales. En 1989, estas represenlaron mas d e l 40% del total de
las exportaciones. En los at.ras raises cen troalneri canos, las exportacio-
nes no tradi cionales han crec id o a un rilm a m enor. D urante eI decenio
de 1980, la$ exponacioncs de EI Salvador y Nicaragua mas bien c1escell-
d ieron, como con secllen cia de los U'aslornos politicos y de la guerra.
La libera lizacio n comerc ial ha in cidido negativam e nle sobre la pe-
quCl'i a y mediana induslria. AI mislTlo tiem po, la nueva pollti ca de promo-
cio n de las expo rtacio nes ha repercutido hondamc nte en el ag ro centro-
atnericano. Los pro ductores tradicion ales de aliIl1entos para e1 me rcado
inte rno han sido presionados a aventurarse en actividades destinadas a
suplir olro lipo d e d e man das p rocedenLes de los Est"dos Uniclos y d e
Europa, como flores y [rutas tropicales.

Centroanu!rica y la lniciativa para las Americas

En e l conlex to de un nu evo ord en mundial, caracterizaclo por e l fi n


de la gue rra rrra y e l acele ra mie nLo de l proceso de in tegracion europe o,
enjunio de 1990, e l e nto nces preside nle d e los ESlados Un idos, George
Bush , a nun cio la l n icia tiva pa ra las Americas. Este program a h a sido u n
ince n tivQ mas para la inse rcio n de los pafses latin oameri canos e n la eco-
n omra m un d ia l. La lnicia tiva prese nta d os ofertas p rin cipales: p rim e ro, la

292
readecuaci6n y condonacion de Ia deuda externa, £lsi C01110 cl acceso a
nuevas inversioncs cxternas y a fondos rnancjados pOl' cl Banco Intcraml'-
ricano de Desarrollo (HID), con el objctivo de incrementar la disponibili-
dad de recursos para la inversi6n. Segunrio, libre acceso alrncrcado csta-
dounidense, IncdianLe Ia reduccion aranceIaria y Ia eventual clinlinaci{m
de cuoLas y de oLras barreras.
La Iniciativ(l para las Arnericas podrla ser una oporLunidad de desa-
rrollo para los paises centroanlericanos, siernpre y cuando no sc COlllelan
los en'ores del pasado, y no se olvide que debe existir armonia entre el
crecimienlo econ6rnico y el desarrollo social.

Entre eL pesimismo y La esjJeranza

Ninguno de los paises centroamericanos ha escapado a los embates


de Ia estabi li zacion, el ~juste, Ia refortna y la redefinicion de 1£1 Dlanera
como tienen que insertarse en la econolnfa mundial. A"irnisrno, todos
han sido victim as de la marejada de pobreza y desemplco provocada por
la crisis y profundizada pOl' las politicas de ajuste y cstabilizaci6n.
Durante los ltlLilllOS quince atlOS, las polfticas que se han irnplernenta-
do con el fin de protnover el desarrollo econ()nlico y social han rcsultaclo
err6ncas. La atracci6n de inversionistas, anlparados en un regimen de
privilegios excesivos, sc ha fundando en e l uso cxtensivo de los recursos
hl11nanos y lnaterialcs, en vel. de fomen tar un proceso de desarrollo cien-
t!fico y tecnol6gico. Este nuevo regimen concesionario nl<ls bien ha C011-
tribuido a desangrar a los paises receptores.
La superaci6n e con61nica y social de Cen troamerica debe ria fundarse
en la promocion de un proceso si multan eo y conlpl e men tario de trans-
formacion social y productiva. Este proceso exige el rncjoramicnto de la
cali dad de vida, medianLe el fOrLalecimiento del salario real y del gas to
sociaL Y, ademas, reqlliere d e l apoyo gllbernament;-1l a las Fmprf'Sas C]llf'
luch an por aleanzar niveles de competitividad que se traduzcan en la va-
lorizacion d e los recursos productivos de la region,
ActllalmenLe, en la discusion sobre la politica econom ica que deben
seguir los paises centroarnericanos sobresalen dos posiciones: la prilnera
apoya una apertura nipida y la liberalizacion d e las economias, sin irnpor-
tar su costa social; la segunda recomiencla la ap licacion de un ajuste gra-
dual, que permita el acornodamiento de las empresas a las nuevas circuns-
tancias, y que, ala vez, procure detener cl empobrecimiento d e la pobla-
cion. Pareciera que la primera opdon tiene muchos seguidores. Sin em-
bargo, resulta conveniente que estos tengan presente el problema de la
pobreza que afecta a rnillones de centroamericanos.

293
SOCIEDAD

La co njugacion de la crisis eco no mi ca y politica regional ha ten ido


hondas repercusiones sociales. En este apanado nos referiremos a las mas
importantes.

Lrt poblaci6n y sus movimientos

Las soc iedades cen troamericanas sc caracterizan por su e levado crec i-


miento demografico. Entre 1950 y 1985, la poblacion paso de 9 a 25 mi-
llones d e habitantes a prox imadame nte; los mayores in cr em entos se con-
centraron e n Honduras, Costa Rica y Nicaragua. La den sidad de pob la-
cio n es variable, pe ro la mayor se registra en EI Salvador, donde ronda los
227 habitantes pOl' kilometro cuadrado.
Du ra nte eI deceni o de 1980 , la natalidad descen dio del 44% aI 28 %,
pero aun es muy e levada. Ademas, las mejoras sanitarias logradas han pro-
ducido un desce nso significativo de la morta li dad. Am bas tenden cias son
muy marcadas en e l caso de Costa Rica. A principios de la decada de 1980,
en este pais empezo a reve rtirse la lrad icional tend encia hacia el rej uve-
n ecimiento de la poblac ion, y se entro en un lento proceso d e envejeci-
mi enro , consecltencia de l descenso en eJ rilm o re productivo. Actualmen-
te la poblacio n centroamerican a en edad activa supera los cliez millones
d e pe rsonas.
La esp e ra nza de vida al nacer es difere nte en cada pais, y su in creme n-
to obedece a l control mas efectivo de las enfermedades infectocontagio-
sas y d e l aparato respira torio. La esp e ranza d e vida mas elevada es la de
Costa Ri ca (supe rior a los 70 a.10s) y la mas baja la de EI Sa lvador (5 7
a.10s) .
La mortalidad in(;1Otil es m uy e levad a en todos los paises d e la region,
no obstante los ingen tes esfuerlOs para reducirla. La uni ca excepcio n es
Costa Rica, donde los program as de vacunacion generalizada han sido
muy positivos. Las diane as y o tras e nfermedades in fecciosas son las prin-
cipales causas de mortalidad infa ntil, y afectan mas a la poblacio n de esca-
sos reclirsos economi cos.
A 10 largo d e la segunda mitad del siglo XX, los procesos migratarios
han sido constantes e n Cen troamerica, pero se acen tuaro n e n el contex-
to de la crisis. Aunqu e los calculos son imprecisos, se conjetura que e ntre
1960 y 1985, alre d ed or d e un millon y m edio d e een troamericanos partie-
ron hacia e l exte rior en busca de mejores oportunidades d e vida . EI pro-
ble ma de los refu giados - tanto legales como ilegales- agobiaba a los

294
gobiernos de los paises huespedes. Segiin calc ulos conservadores, hacia
1985 h abia 239 mil salvadoreJ'i os, 63 mil g uatemaltecos y a lgo Imis de 44
mil ni caragiienses e n calidad d e refugiados e n los paises vec inos.
La violencia annada ha sido un factor importantisimo de \a movili-
dad interna de la poblacion e n EI Salvador, Nicaragua y Guatemala. Se
calcula que, lucia 1983, mas de un millon de personas se habian despla-
zado d e sus lugares de residencia. Estas, al igual que los refugiados, se
vie ron obligadas a migrar para proteger su vida, aunque e n la huida per-
dian todos sus bienes y pasaban a vivir en condiciones de existencia muy
precarias. Costa Rica, Honduras y Mexico , los principal es receptores de
migrantes externos, han recibido aynda tecnica y fin anc iera de organis-
mos internacionales, para enfrentar los gasLOs que demanda la atencion
de los refugiados.
En los procesos de distribu cion de la poblacion, la frontera agricola
todavia desempetia un papel importante en Guatemala, Honduras y Ni-
caragua. La migracion interna talnbien ha in cidido en e l crecim iento ur-
bano, au nque las ciudades carecen de infraestructura adecuada para aco-

90'
.
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87'

MAPA N!l28
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.----_.- -. -'-"!/",,/
.• ., MIGRACION Y REFUGIADOS (,'
o;,-! Ikil)\Or.all
. '. I , EN CENTROAMERICA
AI'",;! de Chia pa~ "'\ ;RF.I.!C F.
DICIEMBRE 1983
(gH'''H.':'~ j :
/~ G~~~E1<IALA L.
EI Tesoro '

OO:ANO PAciFICO
Colo11l01lcagu;} NICARA..GUA
I\!" (salvadorenns )
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SI MnOLoel/\ CARIRE

• C a m pos d e I't:fu gi ado s / nacio n:l lidad

!.inH)tl
il Ciudad C;lpilal
(nicaragllen Sts)

...... Prin cipales nujos migra toriOS Tilad n



San Jose
q' (nifa raguellses)
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10;0;""',,;;200 Km PAN AMA
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90' 87' 84'
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(LlJSTRAC I ()~ N!J46. CAMPA1vIE NTO DE R[FUGIADOS SA.LVA DORENOS E1': HONDU RAS. Los
ca mpamentos de refugiados han brindado abrigo temporal a mil es de cetllroameriOIllOS q Ll e
sc han \'isro fOI-lacios a !lui."de las zo nas de CQlltliCto .

ger a los m il es de pobladores qu c se han traslad ado a elias. Consec uen te-
mente , en las ciudades han crecido los ci nturon cs de miseria y el nume ro
d e personas d edicadas al trabajo informal l1 a ido en a ume nto.
Un aspecto poco estlldiado, pe ro muy importantc durante la decada
de 1980, es la migraci6 n d e centroamericanos a los Estados Unidos. EI
envfo de renlesas a los fa1niliares que permanecen en el pais de orige n
tie ne profun das rep ercllsio n es econ6mi cas . Se caleula q ue , e n 1989, 1a
afl uencia de d ivisas produ cto d e tales re mesas fu e d e mas de mil miHo nes
d e d 6 lares, d e los cuales la mayor p arte fueron re cibi dos e n El Salvado r y
e n Guaten1ala. Esos envios demucstran , por otra parte. e l tnantenimie nto
de los vinculos familiares y la solidaridad d e los migrantes.
Alll1 falta aclarar muchas interrogantes sobre el fe n 6 men o d e los mi-
g rantes. No se sabe cuantos emigran definitivamentc Yclianlos de mane-
ra temporal, (uales son sus calidades pro fesional es, ni en que se empl can
las di visas recibidas. Se presum e que los mas pobres invierten los rec ursos
rec ibidos en la satisfacci6n de sus necesidades basicas -alimentaci6n ,
vestid o y vivi en da-, y que solo un reducido grupo los em plea en e l aho-
rro )' la inversion.
En sintesis, a pesar del crecimie nto poblacional que se h a registrado ,
Centroame ri ca tam bien h a experim entado perdidas de poblaci6n impor-

296
tanles. En la decada de 1980 murie ron a lredcdor de 270 mi l pcrsunas,
por e fectos de la guerra y de la violencia politica; 1')0 mil perccieron como
resultado de desastres naturales; y mas de un mill6n de centroamericanos
migraron, linGS forzadarncnte, para pon er a salvo su vida, y o tros vo lunta-
riame nte , para Jn ejorar su situaci6n econo mica.

OculJacion, pobreza y trabajo informal

Los procesos d e cambio y mode rnizaci6n exp e rimentados en Centro-


anlerica han sido parciales y, en consecuencia, n o han resuelto los viejos
problemas de pobreza y marginalidad.

El empleo

En la d ecada d e 1980, e l proble ma del desempl eo se agud iz6, debido


a la co mbinaci6n de dos factores principal es: por una parte el estanca-
mie n to d e l desarro llo ind ustrial , y, por otra, los programas de ajuste es-
truct.ural y de estabilizaci6n econ6m ica, que constanteme nte presionan
por la reducci6n del aparato estatal. La reducci6n del nllm e ro de emplea-
dos publicos represe nta un duro golpe para los sectores me dios, especial-
m ente en Costa Rica y Nicaragua. Las tasas de desempleo correspondien-
tes a 1989 son elocuentes acerca d e la situaci6 n rein ante: EI Salvador 25,3%,
Nicaragua 23,8%, Honduras 22%, Cost.a Rica 4,9% YGuatemala 10,7%.
EI probl e ma de l desempl eo abi e rto se ve agravado por el subempleo,
que adq uiri 6 tasas alarmantes a p artir d e 1980. Este con stituye la princi-
p al fo rma de subll ti li zaci6n de la fue rza de trabaj o y, aunque disimula e l
d esempleo abieno, los individuos que 10 ej e rcen no logran allegar ingre-
sos suficientes pa ra satisfacer las n ecesidades basicas. Las cifras ace rca d el
subcm pleo para el ailo 1980 so n verdaderalnente inquietantes: Honduras
64 %, EI Salvador 55%, Nicaragua 49%, Costa Rica 43% YGuatemala 26%.
Posle riormente los niveles descendieron un poco, pero siempre se n1an-
tien e n en cifras supe riores al 25% . Las politicas d e estabilizacion h an inci-
dido fuertemente e n la subuti lizaci6n de la fuerza de trabajo.
La expansion del trabajo asalariado en los me dios urban o y rural h a
sido lllUY significativa. En G ua temala y EI Salvador, la «sala ri zacion » de las
relacio nes d e trabajo es resultado, tanto de la escasez de tien-as, como de
la crisis d e la agricll ltura moderna y de la violencia politica. En estc con-
texto, la gente realiza esfu erzos d esesperados para sobrevivir. En e l mundo
urbano, e l auge d e las relacio nes sala riales se re laciona con el de la mi-
eroem presa, la eual, en much os casos, es una nueva Fuente de subempleo.

297
La jJobreza

Durante la decada de 1980, e n Centroamerica se experime nto lIna agll-


dizacion del proble ma de la pobreza, verdadero desafio para cllalqllier in-
tento d e desarrollo. La pobreza es lIn a condici6n social e n la cllal la repro-
dllccion individual , grupal y social es obstaclllizada por infim os niveles de
vida y bienestar, derivados de ingresos insufici e ntes, y cuya caracteri zac i6 n
esta cond icionada hi storica y clIlturalmente. Sus principales indicadorcs
son la imposibilidad d e satisfacer las n ecesidades fami liares basicas, la in ca-
pacidad de empre nder Illchas re ivindicativas, de bido a la ausencia de pa-
der -consecuencia, a 511 vez, de la naluraleza de las relacio nes sociales
gene radas par la misma pobreza- y el ensanchamie nto de la brecha qlle
separa a los sectores pobres de las minorias que viven en la opulen cia.
Las variaciones en e l salario real inciden -positiva 0 n egativamen-
te- en los indices de pobreza. Durante los dos primeros al10s de la deca-
da de 1980, los salarios reales cayeron estre pitosame nte e n tad as los pai-
ses de la regi6n. Su rec uperacion ha sido muy dificil, salvo en Costa Rica,
donde las polfticas sociales han permitido un mejoramie nto de los sala-
rios real es. Las estadistieas d e la pobreza e n el decenio qlle nos oeupa son
alarmantes: e l 70 % de los ce ntroamericanos -alrededor de 18 millones
de personas- no logran satisfacer sus necesidades minimas, es decir, cali-
fican como pobres, y d e elias 12 millones viven e n la pobreza ex trema. La
pobreza es mayor e n las zonas rurales que e n las urban as, y los grupos mas
grandes de pobres se conce ntran en Guatemala.
En general, las familias pobres se caracterizan pa r su mayor tamano y
por el predominio de personas dependientes, espeeialmente infantes.
Ademas, muchos hogares pobres son encabezados por mujeres, no solo
por razones culturales, sino tam bien porque en los paises afectados por la
gue rra muchas quedaron viudas.
La situacion se torna aun mas eomplicada porque ha aumentado la
inseguridad alime ntari a y, e n consecue ncia, se depende mas de las ilnpor-
taciones de a limentos, principalmente de trigo y maiz, vi tales en la die ta
popular basi ca. Esta in seguridad en e l abastecimiento afecta casi al 80%
de la poblaci6 n centroamericana. Ante los problemas fin a neieros, los pro-
gramas internaci onales de ayuda alimentaria son fundamentales para el
abasteeimiento d e los eentroamerieanos.

Trabajo informal urbano

La re eiente expansi6n del subempleo refleja la incapaeidad d e la eco-


nomia para generar empleo estable, sufieiente y bien remunerado, 10 eual

298
lanza a amplios seclores de la poblacion £II lrabajo casual y mal pag-ado.
Este tiro de trab<:~o es Hamado «informal)), pOI-que in cluye actividades no
(ubienas por 13 legi slacion vigenle , en las cuaks no existen las obligacio-
nes y los derechos qllc se dan ent.re patro n os y e mplcados.
En Celllroa merica, el trabajo inf()rmal es prod ucto de los procesos de
ca mbio y de urba nizaci6n q ue se vienen dando desde Ia posguerra y que
rec rudecieron en la decada de 1980. Sn incremento actll a tanto C0l110 un
mccanismo de ajuste de la crisis en los mercados laboralcs, como un amor-
tigllador del impacto de los refllgiados y desplazad os.
EI sector urbano 'lue se dedica allrabajo in formal esta compuesto por
trabajadores lOlalm enl.e desprovisloS d e prolccei6n socia l y labora!. Mu-
chos de ellos laboran e n mi croempresas que utilizan tecnologias arcaie"s
y brindan trabajo y entrenam ienlo a un reducido grupo de lrab'\iadores.
Esta nueva modalidad de p roducci6n ha recibido am plio apoyo de los
organismos fin ancieros inte rnacionales y de los gobiernos locales y se con-
centra en la prestaci6n de servicios, la mic roenlpresa y el co rnercio.
EI trabaj o informal acttia como lin mecani smo regulador delmcrcado
en e pocas de crisis. Co nstiluye, al mismo rjempo, un recurso para alcanzar
ingresos inmed ia los Ypode r subsistir, y una eSlrategia de acum ulacion d en-
lro de los limi t.es impueslos por e l mercado caut.i vo de la pobreza. Las
principales carac lerfsticas de l sector informal urbano son: predominio de
mano de obra femenina, dispersion, di versidacl de niveles educativos e
ingresos redu cidos en relaci6n con las extenuan tes jornadas laborales.
Dadas sus caracleristicas, eI trab~o informal no constituye ninguna
soiuci on a la crisis econolnica, sino que, por 10 con trario, lorna al1 n 111<15
diffcil la situaci6n de un numeroso grupo , ya de por si pobre, pues n o
recibe ningun lipo de prolecci6n social ni labo ra!.

Eclosion de la problem.atica etnica

Centroamerica, e n general , se ha ca raclerizado por su heterogen ei-


dad <'lnica, pe ro las caracterislicas y los niveles del problema hni co h an
sido diferenles en los cin co paises d e la region . Dura nte la d ecada de
198(), e n medio de la crisis economica y polili ca, la confli ctividad e lnica
brot6 en Guale lnaia y en Nicaragua.

Guatem.ala

Los indige nas guatemaltecos han sufrido m as de cinco siglos de opre-


si6 n. Sin emba rgo, existen 21 grupos que han logrado mal1le n er una se-

299
ric de caracLcristi cas etn ico-eulLurales, CO Ino Icngua, costu mbres cO Lidi a~
nas, fornl":ls de re lac iones htJ11ili arcs y socia les y visio n de lln un do. La m a~
yOI' parte de los indfgenas guaLemaltecos son caln pcsin os, c uya rucrza dc
trabajo h a sido ex plotada tanto por los «blancos» como por los ladi nos,
quie nes, adelnas, los han oprinlido culturalme nte. tratando de denlostrar
Sli sllpuesla superioridad racial y cultural sobre e ll os.
La «cuesti6n e tnic(l)) cohro lll lt'vO se ntido e n e l l'narco de la cri-
sis polftica, cuando los indigen as se in co rpo raro n a la lu eha armada.
Organizac io nes g uerrill eras como la O RPA (Organizaci6n d e l Pueblo
en Armas) , la EGP (Ejercito Guerrillero d e los Pobres) y las FAR (Fuerzas
Arma d as Re bcld es), in co rporaron e l probl e ma d e la etn ic idad en
sus progra mas, y lograt'on g ran apoyo d e los ind fge nas e n las zonas rura-
les e n que actuaban. EI Estado reaccion6 vio le ntamc nte masacrando a
los indige nas.
Adenl<ls, en l'e brero de 1978 se constituy6 e l Comite de Unidad Cam-
pesina (CUe), orga nizac i6 n form acla pOl' campesinos indfgenas), ladin os
pobres. En e nero de 198 1, esta o rgani zac i6 n m arc6 un verclaclero hito e n
la histori a de los rnovinlien Los sociales e n Guate nlala , pucs no o bstanlC
las restricc io nes legales imperantes, logr6 o rganizar la primera hue lga de
trabajadores indfgenas migranles, en epoea de la coscc ha d e calla de
azllcar.
Entre 1980 y 1982, e l e jercito puso e n pracl.ica un a serie de opera-
ciot1cs contrain surgen tes, las c uales provocaron un vcrd ade ro genoci-
dio indfge na , superado so lo pOl' e l que produjo la conqu ista. Se cakula
qu e , conlO resul tado de e sas operacion es, pcreci e ron UIlOS 20 mil indige-
n as; [ueron destruidos 440 pob laclos y mas d e un mil1 6n d e person as
se vic roll forzactas a em ig rar del altiplano g uatclnalteco hacia Olras par-
tes del pais y hacia la zona fronte riza con l\1ex ico . Ademas, lI nos 54 mil
indigenas desaparec ieron com o conscc li e ncia de los bornhardcos, alrc-
d edo! de 100 mil muje res quedaron viudas y unos 200 mil ninos sin
padre. Todas estas Irag~rl i as provocaron la destrllccion de la vida C01TIU -
nal )' la arne naza de d esintegraci6n cul tural. POI' otra parte , pe rmilic-
ro n que el ejercito tomara concie ncia de l problclna etn ico y de la necesi-
dad de implementar p oiflicas p a ra in corporar a los in dfge nas e n la vid a
nacional.
Ya e ll la Con slituci6n de 1985 se admite que Guate mala es un Estado
mll!tietni co, con variedacl lingiilstica. Sin ernhargo, en e ! pais no exi ste
c1aridad ace rca' de calno manejar la prob!e nlatica e tnica e n e l futuro. I,a
exclusi6n de los indigenas ha obst.aculizado e l desarro llo de un a naci6n
guate nlalteca; In q ue exi slc es un Estado multin ac ional, e ncabezado pOl'
Iadinos.

300
I
I RlGOBERTA MENCHU, PREMIO NOBEL DE LA PAZ
I
i Las 1l1ujeres indigenas guatelnaltecas han cOl1lribuido posi-
tivatnen te e n la config llracio n d e un nuevo o rde n socia l mas
I jllsto y dCtll0Cl'(ltico. EI dia e n que Rigoberla 1\1enchll recibio c1
I Premio Nobel de la Paz 1992, e xprcs6 ell su disClu'so:
I
I «Teu c nl 0S en lluestra m e nte las dClnandas In as scnti-
d as d e la Humanidad entera, cuando propugnamos por
I la cOl1yivcn c ia pacifica y la prescn!aci6n del media a1TI-
I bi enle.
i La lucha que libramos acrisola y model a el porve nir.
NUCSlra historia es una hi sloria viva, que ha palpitado ,
I rcsislido y sobrevivido siglos d e sacrilicio. Ahora res urge
con vigor. Las se millas. durante tanto tiempo ado nn cd-
I
das, brotan hoy con ccrlidllmbre, n o obstante que gcrm i-
I
I nan e n un lllundo quc sc carac tcriza actua hllc ntc pOl' el
I d es(oncie rto y la imprecisio n.
I Sin duda que sen\ un proceso compl e jo y prolongaclo ,
I pe ro no es tina utopia Y llosotros los indige nas te nenlOS
I ahara cono an za e n Stl rcaliz(lcion . Sabre lodo, 51 quicn es
I ailora nlos la paz y nos esfOrZal110S porqllc s(:' respclcn los
I d e rechos human os e n loclas partes del mundo dondc se
I violan , Y !lOS o ponemos al racismo, e ncalnin,un os lluestro
I c mpeiio e n la pn'ictica co n e nlrega y vehenlc ncia .
I El Pli e bio d e Guatemala sc 1110yiliza vesta (o ll sciente
I de su s fu erzas para construir un futuro dig-no. Se prcpara
I para selnbrar el futuro , para liberarse de sus alavisl110S, pa ra
I redesclIbrirse a sf 111i 51110. Para co nslruir un pais can tllla
I auten tica idc ntidad nacion al.
I C0l11bin a ndo todos los malices ladin os, ga rifunas e
I
indigenas d e l m osaico etnico d e Guate mala d e benlos c n-
I
I trelazar cantidac1 d e colo res, sin entrar e n co ntradi ccion ,
I sin que sean grotescos y antagonicos, dan doles brillo y
I una cali dad supe rio r, eOlno saben tt"j e r llu cstros artesa-
I nos. Un g iiipil gcni a im e l1le int egr ad o, una ofrend a ala
I Hllmanidach.

L____________________ J
II.USTR.:-\C ION N!2 47. t\ IISK ITAS NAVEGA:-.:OO SOBRE EI , R.iO GRA N D E DE ~1ATAGALPA. ( Fo·
log raria repl'od ucida de lli b.,o Pprsisll'llria imiliIpw I'll Niram~lIa, con ;mlorizaci6n de los auto·
res). Los miskilOs -al igual que Olros grllpos aborfgcnes dc la costa del Caribe de Nical'k
gua- plld iero n cscap;lr del control de la soc iedad "hispana », Eslo les ha pe n ni'ido cons("" 'af
sus pani cu laridades cttl!uralcs), lill g\~lfsticas,

Nica'ragua

El tradicion al abandon o de la zona caribe por par:te del gobierno h a


desarro llado e n los miskitos, sum os y ramas un sentimi e nto de ind e pen-
dencia con resp ec to al Estado. EI probl ema e tnico surgi6 en e l contexto
de la revoluci6n sandinista, pOl'que un o d e los obje tivos d e su proyecto
era la integraci6n f1si ca, pol itica y cultural d e todos los secto res d e la po-
blaci6n . Pe ro la politica integradora de los sandinistas no se a poyi) e n eI
conocimif'nto de l problema etni co cultural , potencial mente explosivo.
En consecuencia, avivo eI e nfrentanlien to entre e l progra ma sandinista
de liberaci 6n nacion al y la lucha que los mi skitos siemprc habian matHe-
nido contra la opresi6n. Rapidamente, las filas d e la Contra crecieron
co n la presencia de j 6venes indige nas.
H acia mediados de 1981 , Misurasata se habia convcrtido e n un a po-
derosa o rgan izaci6n d e los indige nas del Atlantico, y S1.I lide r, Steadman
Fagoth , comen z6 a vin clllarse co n la em bajada d e los ESl.ad os Uni dos. EI
animo de los sandini stas pa ra atender las de man das de los in digenas se
enfri6, pOl'que no podian discernir con c1aridacl cll{lIldo se trataba d e
verdade ras re ivin d icacio nes e lni co-culturales Y cliando de accion es (011 -
trarrevolucio narias.

302
I,a polftica de traslado de las comunidades indige nas, ini ciada ell 1982,
acele ro la e x pansion del movilllienlo subversivo a Lo da cI area miskila. EI
uobie rn o salldinista realizo grandes esfuerzos para acabar con el co nfl ic-
~

10, a cambio de l reconocilnie nLo de la auton o mia de la zon a atlan ti ca. La


Ley d e Au ton o mia, ap robada e nj un io de 1987, fue la respuesta de l Esta-
do ni carague nse a la p ro blem atica e tn ico-cu ltural. La soluci6 n propuesta
fue la co nsLi LlI ci{)n de 1111 rocler local aut6n omo en el marco del Estado
nacion al.

Balance del periodo

Du rante la d ecad a d e 1980, la crisis ge ne ralizad a afect6 la vida de


m illon e s d e ce ntroamerican os, por 10 que e n e l d e cenio d e 1990 se han
realizado esfuerzos e n busca d e nuevas alte rn ativas. En el campo eco n6-
mico, los paises centroameri canos han buscado un a nueva inserci6 n en
lo s me rcados internacio nales, pero h a n top ado con m uchas desve n tajas a
la h ora d e fo rta lecer su cap acidad d e exportaci6n. En el campo politico sf
se h a n e xperim entad o avan ces positivos, aun q ue que d an much os p ro ble-
mas p o r resolve r.
Desafortun adam e nte, h a habido un incre mento e n la concen traci6n
d e la propiedad y de la riqueza, favorecida p or la im ple me ntaci6n d e las
politicas neo liberales . EI fru to mas evidente de la nueva situaci6n es la
desco mposici6 n socia l: aume nto d e la pobreza, in cre mento del tra baj o
informal, e m pobrecim ie n to de los sectores medios, y actividad es ilic ilas,
como e l narcotrMico y ellavado de d6 lares. Todos esto s probl emas h acen
pe ligra r los esfuerzos d e mocra tizado res.

303
10j1ilogo

UN LUGAR PARA LA ESPERANZA

A rnccliados de la decacla de 1990 , los cell troame ri canos so n (estigos


de las grandes lransfonnaciones que sc eSlan cIando e n e J mundo, en
general, y e n hl regibn, en partic ular. JIay quicnes vislurnbran el futuro
(on pesimislllo , y pic nsan que los procesos de canlbi o ell clirsa 10 un ico
que h aran serfl profulldizar las desiguaJclades sociales.
La hisloria lllueSLra que, pesc a tantas limitaci ones, los centroarnerlca-
IIOS son c<.tpaces de trabajar y luehar en la co nseclIcio n de sus ideales. Y
fue precisamenlc esta luella la que irnpuls6 los procesos rcvolucionarios
de]a decada de 1980. Y, si bien es cierto que estos no lograron pl e n ame n-
te los obje tivos que se proponfan aleanzar, los esfuerzos no h, eron d el
Lodo e n vano . Uno de los logros mas significativos de los ullin10s atios ha
sido e l compromiso adquirido por los gobiernos para procllrar y lnante-
ncr la paz y profundizar la democracia polltica. Adernas, en los t'i1t ilnos
a llos los cambios de gobierno se han dado por medio de procesos eleeto-
rales limpios.
Pero, para los eentroam el'ieanos eso no es su1ieiente, y anhelan 1£1 eon s-
trucci6n d e sociedades m as justas. Ade mas, los eiudadanos han tomado
conscien cia aeerea de su capacidad de organizarse y de convertirse e n
agenles de c:lrnbio. Las rnujeres, los pobres de las ciudades, los campcsi-
nos y los indige nas, co n sus organizaciones y sus n10vimientos han adve r-
lido a las elites que los debe n tomar en cuenta.
Los centroanlericanos debeni n aprende r a respet.ar las difere ncias, e
incorporar plenamentc, al desarrollo social , a los sectores que durante
largo liempo han sido marginados y explotados. £1 aporte de los difere n-
tes grupos e tnicos no puede ser menospreciado, sino que, por 10 co ntra-
rio, debe se r valo rado por el rico aeervo cultural que ofrece n.
Otra nota de espe ranza la co nstituye la tom a de coneiencia de am-
plios sectores ace rea de la problematica de la eeologfa. £ 1 d esarrollo futu-
ro de Ce11lroamerica, al igual que el de todo el pl ane ta, ha de ir en armo-
nia con la natura1eza.

305
Por Olro lado, Cell troamerica eSla desarrollando va riadas formas de
cooperacion regional, en las cuales se esta lomando en cuenta a Belice ya
Panama, paises q ue e nfrentan problemas muy similares a los del resto d e
la regio n.
Para lograr las me tas deseables d e democracia politica, de justicia so-
cial , de incorpo racio n ple na d e los difcrentcs grupos <'micos a las socie-
dades centroamerica nas, de desarrollo soslenibl e y d e coope racio n regio-
nal , los paises de Cen lroamerica req uiere n de ]a colaboracion y el rcsp e lo
de la comunidad inte rnacional , prin cipalmente d e lo s paises d esarrolla-
dos. La colaboraci6n intern acional se necesila con urge nc ia, pero se es-
pera que no sea tan condicion ada que ate nle contra la soberanfa de los
paises de la region.
Los mas optimistas creen que todavia hay un lugar para la esperanza,
los suenos y las utopias ...

306
GLOSARIO

AGRlCULTUfu\ INTENSIVA: Tipo de agricultura cuya explotacion se hace re-


curriendo al uso intensivo de factores como tierra, capital y trabajo.
En ella el suelo se aprovecha al maximo.

ALC\BAL\: Tributo que pagaba al fisco el vendedor en el contrato de com-


pra-venta. Por 10 general era del 5% del valor de los bienes comercia-
lizados.

Al.CAl.DE ORDINARIO: Tntegrante de los cabildos espanoles, quien tenfaju-


risdicci6n civil y criminal de primera instancia.

ALIANZA PARA EL PROGRESO: Programa de ayuda economica dirigido a Ame-


rica Latina que buscaba atraer inversionistas norteamericanos hacia
la region y estimular el desarrollo economico. Nacio oficialmente en
la reunion especial del Consejo Economico y Social Tnteramericano ,
celebrada en Punta del Este, Uruguay, en agosto de 1961.

A!.MACTGOS: Semillcros en los cuales se plantan los granos de cafe seleccio-


nados.

ALMOJARlFAZGO: Derecho que se pagaba durante la epoca colonial por los


generos 0 mercaderias que se exportaban 0 importaban .

AMERICA CENTRAL: Territorio que une la America del Norte con la Ameri-
ca del Sur. Se extieude desde el istmo de Tehuantepec, en Mexico,
hasta el Valle del Rio Atrato, en Colombia.

ANARQUTSMO: Filosofia social 0 forma de organizacion social que implica


la ausencia de toda forma de Estado y de Gobierno.

307
Ai'\'IMI ST:\: Tiro de pe nsam ie nto relig ioso e n cl e llal sc Ie atribuyc alma a
los seres naturales, a los sobrenaturales), a los o ~j e tos inanim ados.

A RTEFACTOS: O bj e lOs h ec hos, tllodifi cad os 0 llsados pOl' los se res hum a nos
cn sus actiyidades cOliciian as 0 reli giosas, sin inlponar su grado de
cOl11plcjidad lccnologica.

ASFNT\r..IIENTO: I.ugar u sad o pOl' los se res htlnl~1I10S para habitar y reali 7.ar
sus activiclades dOln esticas, c uhuraJes, sociales, economicas e id e o-
16gicas.

AL'D1ENClA: Tribunal de jusli cia colegiado de la epoca colonial. Tambic n


llivo funcion es politicas y achninistrativas, olo rgadas por Ia Corona.

la e col101nfa de u n p ais 0 re-


AtTTO SUFICI E1\CI A AU\lE:'-JTAR IA: Capacidaci d e
gio n de prorlu cir los bi e nes alimcnticios d e prim e ra neccsidad , sin
depen de r de Ine rcados cxtranacion ales 0 extra rrcgionales.

BAL,.\t-:z,\ C:O\1ERCIAL: Filljo 0 lran saccion cs de bi en es imporLad os y e xpo r-


Ladas d e la econo1l1ia de lin pais. Es favorable cuando eI valo r de los
producl oS exporlados supera al de los im po rtados y desfavora blc cua n-
do ocurrc 10 cOll lrario.

Proccso a trave s del c ual los dife renlcs te rrito rios que (0111-
BALCAl'J r7.,\CI ON:
ponfan e1 Re ino de Guale m ala se d esint.egraron en llnidades po lfLicas
independientcs que dieron o rige n a la Ccnt.roam e rica actual.

B IFACIAL: De dos rOSlros , caras 0 parles. Formas ceramicas bifac iales.

RUHOt-:EROS: l'equei'l os y m edianos com e rcianlcs que sc d espl azaban ha-


c ia los difcrentes m e rcados regio nales para la co locacio n de sus pro-
duclOs.

CABAI.LERi A: POI-cion de tierra que se repartfa entre los caballeros quc ha-
bian contribuido a la conquista 0 a la col o nizaci6n de un territorio.
Mecl ida agraria e quivalente a unas 45 hectareas.

CABll.DO: Ayunla mie nlo , co rporacio n que reg fa una villa 0 ciudad y su
jurisdiccion . AUlOridarl de gobie rno local de los pue blos d e los indios.
Sala donde se cclebraba n las re uniones del ayuntamiento.

308
c.\(:lC.\Z(;O: Forma de organiz<lci6n soc ial en dondc ('I cacique detent,l la
aUloridad basado en relaciones de parclllcscO.

CACIQUE: Principal figu ra poli lico-rel igiosa Ude indigcna) de las >ociecia-
des cacicales.

eN' 01·: cOMUNII).IIl:roncio economico del qlle disponian los pueblos de


indios cuyos ingresos provenian de la corncrcializaci6n de los procluc-
los de las semen teras cO lllunales. Su o~j eljvo era cub rir los gastos oca-
sionados por e me rgencias a desastres.

CAPELI.ANiA: Fundaci()n eclesiaslica instaurada mediante ciansula teSlalllen-


laria en la cual cienos bienes pasan a integrar el capital 0 «princi-
pab) de la fundaci6n. I,os biencs sc colocaban en arrendamiento, al
5% anual, que c l cape lLin recibia por rezar misas en memoria del
funclador.

CAST.>\S: En America Latin a, grupos de poblacion que tienen un ongen


racial producto de la mezcla d e negros, blan cos e indige nas.

CENTROAM I~ RICA: Espacio hist6ri co-geografico correspondicnte a los cinco


p aises 'luc formaron parte del Reino de Cuatemala durante e l perio-
do colon ial y luego fonnaron parle de las Provincias l!nidas del Cen-
tro de America: Gua Lemala, Honduras, EI Salvador, Nicaragua y Costa
Rica .

Conjunlo de ideas, te cnicas, coslumbres )' practicas cu ltu ra-


C IVILI ZACI()N:
les complejas )' de organizaci6n economica, poHtica y soc ial que ca-
racteri zan a un pueblo 0 conjunto de pue blos.

CLAN: Unidad organizativa integr;-trla por miembros de linajes determina-


d os. Se caracteriza por tene r un lugar comllll de residencia.

CLASE OBRF.RA: Conjunto d e lrabajadores 'lue se ganan eI su stenlo por me-


dio del lrab'!jo asalariado.

COFRADiA: Congregacion 0 h e rman clad que fo rm an algunos devolos con


autorizacion de la Igl esia Ca lolica para e je rcilarse e n obras d e piedad.
En la practi ca Cue usada para a£ianza r la posicion economi ca y social
d e algun as personas y grupos.

309
COUGALLEROS: Peq uenos explotadores y buscadores de o ro que Irabajan
con lecnicas y herram ie n Las muy rllsticas.

COLONATO : Tipo de recl utamie nto laboral practicad o en varias zonas de


America Latina. En c l colonato p a rte d e la renumeracion salarial Con-
siste e n el derecho de explotacion d e una parcela d e tierra dentro de
la unidad contratista.

COLONIA: Te rritorio so metido a l control p o liti co, militar, economico, so-


cial )' cultural por p a rte d e una potencia extra nje ra. Epoca d e la do-
minaciiin e spanola e n Am erica Latina que abarca de l sig lo XVI al XIX.

COMPOSICION DE TIERRAS: Me dida 0 re m edida d e tie rras llevada a cabo por


unjuez competente para legalizar la posesion de un a propiedad 0 d e
sus demasias, ilegalmente rete nidas, m ediante pago al fisco.

COMUNISMO: Filosofia 0 sistema d e organizaci6n soc ia l basada e n el prin-


cipi o d e la pro pi cdad publica de los me dios d e produccion y de servi-
cio economico. Propugna por la creaciii n de una sociedad sin clases)'
la ausencia d e la pro pi e dad privada.

CONMUTACION: Ab uso com e tido por los espall0les que consistia en obligar
a los indios a permutar e l pago d e tributos por servicios p e rsonal es.

CRECIMI ENTO ECONOMICO: Tendencia continua a l alza d e las principales


variables macroeconornicas: produccion . inve rsion, CO ll sumo .

CULTURA: Sistema relativamente cohere nte d e ideas, va lores, actimdes ,


modos de vida y expresion es artisticas que se desarrollan en un grupo
socia l y que presenta cierta estabilidad.

COMISARIATOS: Tie ndas de abarrotes creadas por las compaiiias banan e ras
dentro de las pla ntaci o nes. Sirvieron para que aquellas recogie ran
parle sustancial de los salarios pagados a los trabajadores.

DEFICIT COMERCIAL: Balance negativo entre las exponacion e s y las impor-


taciones. Se produce cuando el monto d e las exportaciones d e un
pais es inferior al de las importaciones.

DEFICIT FISCAL: Brecha negativa entre el total de gastos e ingresos de l go-


bierno central d e un p ais. Se p roduce cuando los gastos son mayores
que los in gresos.

310
DE.MAsiAs: Tie rras posefda s cte Jnas, de ac uerdo a la cantidarl sc iialada en
los tllttloS. Tambi en se les de n otnino «excesos ».

DERECilOS HU MANOS: Conjunto de derechos que se con side ran inalicna-


bles a l ser humano: libe rtad de pen sam ie nto, Iibe rtad de movimi cnto ,
el dereeho a la vida, etc.

DESARROI.LO ECONOMlCO: Proecso historico a traves del cual ciertas nacio-


nes logran estandares elevados en la productividad del trabajo por
me dio de tres vias simul taneas: en primer lugar, la acumulacion de
una parle del produclo econ6mico total para fin es de inversioncs pro-
ductivas, en segundo lugar, el progreso tecnico y, en lercer lugar, el
perfeccionamiento de la organizacion de la actividad economica.

DESPOTlSMO ILUSTRADO: Movimiento reformista q ue aJeanz6 su culmina-


cion en Europa en e l siglo XVIII y cuyas principales caraeterlsticas fue-
ron e l desarrollo de un abso lutismo cenlralizad or, la influencia de los
filosofos de la llustracion, y e l fortalec imiento del poder civil Crente al
religioso.

DEUDA lNTERNA: Conjun to de obligaciones financieras contraldas por el


Estado con acreedores inte rnos.

DEUDA PlJBLTCA : Conjunto de las obligaciones financieras conlraldas con


a creedores inte rn os 0 externos por parte del gobierno central y por
los entes descentralizados.

DIEZMo: Contribucion cobrada p ara e l sustenlo de la Iglesia Catolica;


represen taba la decima parte de la produccion agricola de cad a pa-
rroquia.

DIFUSION CULTURAL: Proceso a traves del cual diferentes manifestaciones


culturales (formas de construcci6n, uso de materiales, formas cerami-
cas y sus tematieas, len gua, e tc.) traseienden determinado ambito es-
pacio-cultural en un proceso de expansion.

DlPLOMAClA DEL DOlAR: Acciones por parte del gobie rno norteamerieano
an te paises extranjeros para abrirlos a los eapitales estad ouniden ses 0
para faeili tar la ampliacion de estos.

DOCTRINA:]urisdiccion eciesiastica en territorios ind,genas equivalen te a


la parroquia.

311
E:IIDOS: Ti e rras comunal cs situacias tant o ("" 11 las aFucras de las cillciadl's
t'spaiioias C0l110 en los pueblos de indios,

EI.I r E: Crupo social min o ritario ClI )'O po de r ecoll omico , religioso, politi-
co y cultural Jc pe nllile ~j c rc er contro l sobre un grupo so cial 111,is
amplio . EJ poder de las elites pllede proyectarse a ni\'el region al, Ila-
cional y aun int c rnacional.

ENCL-\\T,: Cranclcs clnprt'sas ag rfco las 0 rnineras que se carac {cri zaron por
Sll reslrin g ido illlpaci o sobre eI conjlltlto de la e conomfa de los paises
e ll dOllde estaban asc nlada s.

EN CO:\IIE ~' D.-\:InstiLlIci61l pa r medin de la (ual se asignaba a una persona


un grllpo de indios. para que se apro\'c chara d(;~ sus se r\'icios y tribu-
tos, con la ob li ~aci6n , por parle del e nconlendero de procu rar y cos-
tear la in struccion crisliana de aquellos.

Ei\'CO:\IEl\'DFRO: El que pOI' cOllcesion de auto ridad cOlnpeten te tenia in-


dios encome ndados.

ENDOCAt...IiA: Patron de casamienlO que cxigia la uni6n co n mi embros de


un mislllo lil1<:ye 0 clan.

ENDOCENO: Lo que liene origen en causas in lernas.

E SPERAi-\ ZA DE VIDAAI, NAC[R: Es eJ promedio de a n os que se espera que


una persona viva e n relacio n con el conjunto de la poblacion. Es un
in dice so cial que se lisa {i'ec ue nleme nte para medir los nive les de de-
san"ollo d e un p a is.

ESQU IROLES: Sujetos que realizan e llraba jo abandon ado por los huC"lguis-
tas 0 que no se inlegran al rn ovimiento de huelga.

ESTA OOS: Fo rmas de organizacio n p olilica 0 territorial que se caracle rizan


por le ner e l po de r y la capacidad d e reclutar individuos p ara la guerra
y las obras publi cas, cobrar impuestos y hacer cumplir las leyes.

E UROCENTRJSMO: AClitud consiste nte e n considerar Ia cultura europea como


superior a cua lqui c r olra; 10 cual ha provocado un desprec io pOl' las
form as cultural es autocto nas d e otros pueblos y sociedades.

312
EXCAVACION: Tecnica propia de la arqLlcoiogia quc consiSlC e n desentc-
rrar, en fo nna cien tffi ca, los restos arqucologicos, para recllpe rar y
estudiar cI pasado de los grupos human os.

EXTRATERRITO Rl ALT OAD: Renu nc ia de los de rec h os le gales y jurisdicc io-


n ales sobr e ci e rtos bi en es, po r parte del Estado huesped e n favo r de
un Estado con rcp rcscn Laci6 n e n e1. EI caso mas claro cs e l de las
e mbaj adas.

FUERZAS POLiTICAS: Conjunto de orga nismos soc io-politicos q ue actllan so-


bre la vida social de un pais: ]a Iglesia, los sindicatos, e l e je ncito y los
partidos politicos, e ntre otros.

GARir uNAS: Pe rsonas pro ducto de la m ezda e tnica e ntre indige nas a rawak
y esclavos negros.

GEOSTRATECICO: Co n d icio n de una zona geog ra fi ea cuyos a tributos fisi-


cos, u bicaci6n y recursos (e ntre c llos poblaeio n ) Ie d a n ventaj as ex-
cepci onales con respecto a SU territori o circun dante.

GLOBAUZACI0N: Procesos econo micos a traves de los clIales e l compor-


tamiento econ o mi co en los grandes centros capitalistas tie ne e fec-
tos directos 0 easi directos sobre e l resto d e la econ o mia mundi al.
Tam b ie n haee refe re n cia a la cele ridad 0 prontitud con que un [cno-
m en o en eualquie r parte del mun do p ued e ser d ifundido al resto del
plane ta.

GRUPOS DE PRESION: G rupos cap ace s d e o rganizarse y e je rcer presio n so-


cial sobre la vida pL,blica 0 p artes de e lla, co n e l fin de impon e r sus
propios intereses.

GUERRA FRill: Pe riodo histo rico de e nfren tamie nto e ntre la a n tig ua Un io n
de Republicas Socia listas Sovi e ticas y los Estad os U nidos. EI desar roll o
irracio n al de tal e nfrenta mie nto 11 evo a un a escalada militar en ambas
n acion es c uyo punto mas pcl igroso se dio con eI d esar rollo d e las ar-
mas nuc1 eares.

H ABILlTACION: Adelanto anual d e m ercancia, y din e ro e n efectivo (credi-


to ) que los come rciantes d aban a los p roducLOres d e gan ado y aii il y
que e sLOS deb!an pagar e n especie.

313
H ACIENDA: G ran p ropiedad. pOl' 10 general dedicada a la ganaderia. aun-
que t.am bien las hubo ded icadas a los cultivos come rciales, como la
ca lia de azticar. e l trigo. el anil y e l cafe .

INDIO TRIBUTARI O : Todo indi o e india que d e bia pagar lributo a los
espanol es.

INDUSTRIALIZACIC)N POR SUSTITUCION DE IMPO RTACIONES: Po liti ca econ o mica


que promovia e l proceso de induslriali zacio n estimu lan do la produc-
cion interna de bie nes anleriormenle inlportados.

I NFLAC IO N:Desequilibrio de tipo econo mico que se caracte riza pOI' un


a ume n to e n e l precio de los bienes.

I NFRAESTR UCTU RA:Conjunto de e le mentos y servicios considerados esen-


ciales en la creacion de una econo mia moderna (transporles. ener-
gia. educacio n. servicios. etc.).

Ingreso pro me dio que recibe cada persona en un pais.


INGRESO PER CAPITA:
Se usa como indi cador para medir e l nivel de d esarrollo.

INTERCAMBIO ECONOMICO: Practica eco nomica a traves de la cual indivi-


duos. grupos. pueblos y Estados comercian entre si. Puede estar me-
diado pOI' dinero 0 por bi e nes.

I NTE NDENCIAS:Divisiones territorial-adm inistrativas adoptadas por la Casa


de los Borbones. e n el siglo XVIII. con fin es d e reordenamiento ad-
ministralivo en e l imperio espano!.

ISTMo: Le ngua d e tierra que une dos continentes 0 una peninsula con un
continente.

jEROGLiFICO: Tipo d e escritura representada por figuras 0 simbolos. de


usa fTecuente en sociedades antiguas.

JORNAL: Estipendio que gana e l trabaj ador por cad a dia de lrabajo .

Pe rsona nombrada por la administracion colonial e n los


J UEZ DE MILPAS:
pueblos de indios. con el objeto de supervisar e l trabajo indigen a en
sus semente ras. para q ue estos increm entaran la produccion.

314
LADI NO: lni cialmente se daba este Hombre a l indio que h ablaba esp,"101.
i\ fin es del sig lo XVlI yen e l sig lo XVIII eltcrmino se us6 pat'a designar
a los in diviclnos de origen in dio, flue habian perdido lodo nexo ('on
sus comunidades, y que por tanto, cultu ra lrnenlc habl ando no ('ra n
indigenas.

U :-.JAJE: Crupo d e parentesco c lI ya ascendc nc ia 0 d cscc ndc nc ia puedc s<.: r


segu ida a traves de un a !fn ea genca16gica de fili aci6n patrili neal 0
rnalrilinea1.

LI ~c:Ob n c~:
C ie n cia que se ocupa d e la d esc ripci6n )' ex pli cac i611 d e los
aspectos dellenguaje en SlI S niveles foni co, lexico y sintac tico.

LirICA: Industria d e to do tipo d e artefactos fabr icados co n p iedra.

MA'J DIIMIEKTO: forma d e rcciUla mi e nto forzoso de trabajado res.

MAYORDOMO: Perso na a cuyo cargo estaba la admin istracion de los bie n es


d e una cofradia .

MEDIOS DE PROD UCCION: Compre nde n tanto e l conjllnlo de me dios de tra-


bajo co n los cua les se elaboran los bienes materiales (herramienlas,
tierra, infraestructura en ge n eral) , como e l objeto sometido al proce-
so de transformacion.

MERGANTILISMO: Un a de las prim e ras docuin as eco nomi cas b ie n estruclu-


radas que surge e n el contex to de los descubrimientos maritimos y
que estuvo vigente en los siglos X\11 YXVIII. Propugn aba que las n a-
cion es podian enriquece rse por medio d e la acumulaci6n de m e ta les
preciosos (oro y plata). Tuvo su m axima expresion e n Francia bajo e l
impulso de Colbert (M illisllO d e Estado baj o eI reinado de Luis XIV).

MERCA~TILIZACION: Proceso d e d esarrollo d el comcrcio , principal m ente


del de exportacion.

MERCF.D DE TIERRAS: Donacion d e tierras conced ida poria Corona a los


pobl adores e n reco mpen sa po r los servicios preslados. Suponia un a
seri e de obligaciones 0 comprom isos por parte del beneftciario.

MESOAMI' RICA: Area c ultural pre hi spiinica que comprendia la parte ce n-


lral y sur de Mex ico y la parte norte de Centroanlerica .

315
MESTIZAjE: Proceso de mezda racial.

MESTI ZO: En America Latina, desccncliente de cspal101 e indigena.

METR(WOU: Dcnominacion con que se dcsigna a los estados colon iali stas
europcos, como entes que rigen el desarrollo politico. cconoJnico,
social y cultural de las colon ias.

Pequena propiedad agraria caracteriSlica de ciertas region es


MINIFLlI\: DlO:
latinoamericanas, cuya ~'rea se consiclcra insuficiente para procurar d
sustenLO de la familia cam pesina.

MONARQuiAABSOl.LnA: Sistema politico de tipo monarqnico y h e rcditario


en cI que el rey Icnia todos los atributos de la soherania pOl' derecho
divino. Fuc el sistema de gobierno cOllllin de las rnonarquias curo~
peas de los siglos XVI YXVII.

MONOCl:JJ'IVO: CUllivo [mico 0 predominante de una especie de vegetal


en detcrnlinada region.

MOi',T()POL!O: Practica economica Ilevada a cabo por la Corona espaliola


para impedir la injerencia de atras potencias econ6micas europeas y
el dis!'rute de las riquezas coloniales. En general, ejercicio exclllsi\'o
de una actividad, con el dominio 0 inlluencia consiguiente .

MORTALIDAD Ii':FANTTL: Cantidad de nil10s menores de lin ano ialle cic\os e ll


un lugar y un ti empo dete rminados.

Muri N: Movimiento d e protesTa y resistencia indigena, prodllcto de rcac-


dOlles colericas ante la explotaci6n y el abuso, par parte de las autori-
dades coloniales.

M l1 uno: Persona dcscendi e nte de espaiiol y negro.

MUTUALES: Organizaciones de tipo (orporaLivo can fines de ayuda mutua.

NAI\ORlOS (0 LAllORIOS): Indigenas que trabajaban para los espaiioics en


lareas fundamentalmcnte dOlllcsticas. Solian vivir en barrios localiza-
dos en las afueras de las principai es ciudades y pagaban un tribula
111enOr que los dell1aS indfgenas.

316
NACION: Comunidad de personas que ha logrado lIegar a una fase de uni-
ficacion representada por una estructura politica propia y por su asen-
tamiento en un terrilorio.

NAVios SUELTOS: Pequeiias y veloces embarcaciones que fueron autoriza-


das a navegar por el Atlantico sin proteccion naval-militar a partir de
1740.

NEOLlBERALlSMO: Respuesta ideologica a la crisis capitalista mundial de


mediados de la decada de 1970. Parte de la creencia de que las crisis
de los modelos actuales de desarrollo son culpa del intervencionismo
estatal, por 10 que busca la eliminacion de este y apoya la liberaliza-
cion economica.

OBRERO: Trabajador que carece de medios de produccion y recibe una


paga por su trabajo.

OIDOR:Juez que en la epoca colonial formaba parte de una Audiencia.

OUGOPOLlO: Forma de organizacion del mercado caracterizada por la exis-


tencia de un reducido numero de oferentes de productos.

PACTO COl.ONIAl.: Sistema exclusivista que rigio las relaciones entre la me-
tropoli y sus colonias, en favor de la primera.

PALEOINDlOS: Grupos humanos que habitaron America en la epoca del


Pleistoceno (edad de hielo).

PANMA;;\.: Relativo a los caracteres compartidos por los distintos grupos


mayas de Centroamerica y que permiten hablar de cultura maya, a
pesar de cierlas caraClerlSlicas diferenles entre el1os.

PATRON ORO: Sistema monetario basado en la equivalencia establecida por


ley, entre una moneda y una cantidad d e oro determinada.

PODA: Eliminaci6n 0 recone de ramas consideradas superfluas con eJ fin


d e darle mas fuerza a la planta.

POLICULTIVO:Practica agricola consistente en la siembra de varios cultivos


en una misma area de produccion.

317
POLiTIC;\ DEL BUEN VECINO: Politica aplicada pOl' e l presidente Franklin
Delano Roosevelt a partir de 1933. en sus relaciones con America La-
tina con e l fin de mejorar la imagen de los Estados Unidos. Con esa
politica se procuro evitar las intervenciones militares y se propicio un
clima mas favorable para la inversion de capital y e l intercambio
comercial.

POLiTICA DEL GRAN GARROTE: Politica del presidente Theodore Roosevelt


que autorizaba la intervencion de los Estados Unidos e n America La-
tina para evitar la penetracion de potencias extranj eras. Con e lla la
Doctrina Monroe (1823) se transformo en un derecho de interven-
cion excl usivo para los Estados Unidos.

POQUITEROS: Campesinos ladinos que producian anil para comercializar-


10 y que destacaron por la calidad del producto.

PRODUCTO INTERNO BRUTO: Suma del conjunto de los bienes producidos


por un pais.

PROSPECCION: Metodo propio de la arqueologia para realizar e l reconoci-


miento general de un terreno.

PROTECTORADO: Parte de soberania que un Estado ejerce sobre un territo-


rio que no ha sido incorporado plenamen te a el y en el cual existen
autoridad es de los pueblos autoctonos.

PUEBLO DE INDIOS: Asentamiento indigena creado e impuesto por los con-


quistadores espanoles.

RAGlaN: Obligacion que tenian los indigenas de entregar semanalmente


eierta cantirlad de a limentos y de trabajadores para atender las necesi-
dades d e los re ligiosos y curas.

Rfu'lGO (SOCIEDADES DE): Sociedades estratificadas en grupos 0 clases so-


ciales. euya base no n ecesariame nte deseansa e n e l poder economico
y politico.

REALENGOS: Tierras pertenecientes al Rey e n virtud del dereeho d e con-


quista.

318
R.ECLUTAMIENTO FORZOSO: Diferenles form as d e reclulamiento coercitivo
de mano de obra. En la e poca colonial y en la cconomia cafetalera
d estacaron el repartimiento, los mandamientos y las habilitaciones.

R.EDISTRIBUCION: Accion d e volver a distribuir.

REPARTIMIENTO: Acci on d e repartir tierras e indios. Sistema de explota-


cion de la mano d e obra indige na, que tuvo diferentes modalidades:
1. Enganche por la fuerza de trabajadores indige nas, para que realiza-
ran trabajos en las haciendas y minas a plazo fljo y por una paga, gene-
ralm e nte muy baja. 2. Distribucion forzad a de ma teria prima , «algo-
don 0 hilo", que debian ser hilados 0 tejidos en un plazo pere ntorio.

R.ESTOS ARQUEOLOGICOS: Toda evidencia de restos mate riales dejados por


grupos humanos pasados y cuyo estudio compete a la arqueologia, la
cual ha d esarrollado sus propios me todos de reco nocimi ento , excava-
cion e inte rpretacion .

SEDENTARlO: Grupo humane con asentamienlO perma nente que presenta


una organ izacion social mas desarrollada y que puede te n er en la agri-
cultura su principal sustento, 10 que no im pide que practique la reco-
leccio n, la caza y la pesca.

SEMICULTURA: Agricultura de sistemas vegelales importan tes por sus semi-


lias. Ejemplos: ma iz y frijoles.

SENORiO: Unidad socia-politica formada por varias sociedades cacicales


que dependian de un cacique mayor.

SERVICIO DE LA DEUDA EXTERNA: Pago de las obligacion es fln ancieras inte l~


nacionales de un ESlado.

SINCRETISMOS: Conciliacion de filosofias 0 diferentes practicas re ligiosas.


En America Latina se mezclaron ritos y priicticas propias de la religio-
sid ad indigena y del cristianismo.

SINDICATOS: Asociaciones que, en general, buscan el mejoramiento y d e-


fen sa de los dercchos e intereses de los trabajadores, con atencion
particular a los salarios, horas y condiciones de lrabajo.

319
SISTEMA BIPOLAR: Creaci6n de dns grandes bloques de pode r hege monico"
a nivel mundial, nacidos despues de la Segunda Gu e rra Mundial: los
Estados Unidos, con su defensa de l sistema capitalista y la d emocracia
representativa, por un lado , y, por el o tro, Ia a ntigua Unio n de ReplI-
blicas Socialistas Sovieticas (URSS), con su economia socialista.

SITIO: Localidad con restos arqueol6gicos.

SOClWAD CIVIL: Concepto de amplio uso en cien cias sociales. H a cambia-


do a traves del tiempo. Comlmmente se utili za para designar el ambi-
to de las re lac iones sociales que Iogra permanecer al margen de Ia
inj erencia estatal.

SOL~ R: Pro pi edad urbana; por 10 general media 50 varas en cu adro.

TEOCAATICO: Siste ma de gobi erno que se caracteriza porque el pode r es


eje rcido pOI' una persona que represe nta, 0 se considera en carn acion
de una divinidad, yen e l eual e l cuIto y el sacerdocio legitiman los
sistemas politi cos al con ectar al gobernante y su lin a je con deidades
especificas.

TEOI.OCTA DE LA LlBERACIO N: Movimiento teologieo nacido en e l seno de la


Igl esia Catoli ca que busca respuestas a los problemas economicos y
soeiales de los paises latinoamericanos. Asume un compromiso con
los pobres, el cuallo ha llevado a ace rcarse a l pe nsam iento marxista,
d e l cual ti ene gran influencia.

Tt.RMI NOS DE INTERCAM BIO: Re lacio n, e n te nninos monetarios, del conjun-


to de los bienes exportados y de los impo rtados por una nacion con
respecto a otra.

TlERRAS BALDiAS: Tierras estatales 0 baldios nacionales.

TIERRAS COMUNALES: T ierras que se entregaban a los pueblos de indios y a


las ciudades espanolas para su uso colectivo.

TIERRAS DE PROPIOS: Tierras adquiridas por los cabildos con e l objeto de


generar recursos para hacer f1'ente a sus gastos d e funcionamiento.

Two DE CAMBlO: Precio existente de una mOlleda nacion al con resp ecto a
un a extranjera.

320
TRAIlAJO ASAL\RJADO: Tipo d e lrabajo en eJ cualla person a vc nde SlI fll erza
laboral a cambio de un salario.

COMERCIO TRANSisTMICO: Comercio que se re alizaba a traves del istmo cc n-


troamericano en la tpoca colonial.

TRIB U: Fortna de inlegl-acion socio-polilica basada en re Jaciones de pa-


re ntesco, y que, en terminos generales, se carac teriza porque la auto-
riclad no esta concentrada en una sola pe rsona.

TRJBUTA RIOS: lndfgenas encom e ndados y obligados a pagar tributo. Las


categodas de tribularios variaron a 10 largo del tiempo: a l principio se
trataba de indfgenas varones y casados, y, a partir d e 1638, inc1uyo
hombres y muj eres mayo res de 25 anos , clIalquiera que fuese su esta-
do civil.

TRlBUTO: Carga u obligacion de tributar que ten ran los indfgenas, ya fllcse
en dinero 0 e n productos.

VALLE: Nombre con el que se conocio en e l sig lo XVIII a los asentamientos


espontaneos de los ladino" situados en lierras reale ngas.

VECINO: Persona que, en la e poca coloni al, habra ganado los derechos
propios de la vecindad en una villa 0 ciudad, par haber colaborado en
su fundacion a habitado en e lla par e1 tiempo estipu lado par la ley.

VEGECULTURA: AgricuJtura de raices y tuberculos.

ZAMBO: Individuo produclO de la mezcla em ica de indio y n egro .

Crupo etnico producto del mestizaje de escJavos africa-


ZAt>.'IBO MOSQUITO:
nos can grupos emicos de la region del Caribe d e Centroameri ca, y
que sirvieron a los intereses ingleses.

321
BIBLIOGRAFlA COMENTADA

Los tomos de la H istaria General de Centroambica de la Facultad Lati-


noamericana d e Cie ncias Sociales (FLAeSO), [ue ro n la base sobre la ella l
se sustenta la presente obra:

ACUNA ORTEGA, ViCTOR Hl'CO, (coo rdinador), Historia General de Centro-


america. Las repliblicas agroexjJortarioras (1870-1945). Espana, FLACSO,
Edicion es Siruela S.A, 1993.

CARMACK, ROBERT. (coordinador). Historia GenITal de Cen troambica. Histo-


ria antigua. Espana , FLAeSO, Ediciones Siruela SA , 1993.

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De la ilustraci6n allibemlismo (1750-1870). Espana, Fl~\CSO, Ediciones
SirueJa SA , 1993.

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PINTO SOR1A, jUI.I O. (coordinador). Historia General de Centroa mhica. £'1 re-
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Otras obras de canicter general sobre la historia centroct lll ericana son ;

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Ri ca, 1983.

323
Estudia la regIOn rlesde el peri odD colonial hasta la crisis de la
dccada de 1930 de manera comparativa, poniendo enfasis en los ci-
clos economicos regionales y contextlializandoJos en el 111£1r(0 de la
economia europea.

PEREZ BRl(;NOLl, HECTOR. Rn'Ve hisloria de Centromnbiw. Madrid , Alianza


Editorial, 1985.
Sfntes is subre la historia cenlroamericana flu e conjuga los elemen-
tos de la historia economica y social con la geografia hum ana, en un
amllisis que parle del sigl o XV I hasta la primera mitad de la decada del
ochenla.

TORRES-RIVAS, EDEI.BERTO. i nteriJretacion del desarrollo social centroameriwno.


San Jose, EDUCA, 1981.
Obra de sintesis que abarca desde el momento de la Independen-
cia hasta e l proyecto de integraci6n econolnica. EI autor estudia la
Republica Liberal del sigl o XIX, los inicios de las economias agroex-
pOrLadoras, la crisis de 1930 y la crisis de la Segunda Guerra Mund ia!'

WOODWARD, RALPH L.JR. Central America. A Nalion Dillided. New York, Oxford
University Press, 1976.
Silllesis de la historia centroam erican a desde el siglo XIX hasla la
decada d e 1950. EI analisis se centra e n la historia polilica.

En la sigui ente bibliografia se incluyen las principales obras de la hislO-


ria cenlroamerican a que penniten ampliar los telllaS tratados en este
libro. La bibliografia esta organizada de acuerdo con el orden de
cap itulos del Iibro . Obviamente, algunas obras son utiles para varios
capllulos.

INTRODUCCI6N

GRANADOS, CA Rl.OS. «H aria una dejinicion de Cenimamerica ». En: Anuario d e


ESludios Cen troame ricanos. Vo!' 11 , Fascfculo J, San .lose, Costa Rica
1985. pags. 59-78.
Argllme n ta que es la importancia geoeslrategica de Centroameri-
ca 10 que la d efin e como reg i6 n susceptible d e ser eSludi ada e n su
conjunto.

HALL, CAROLYN. "Ambica C'entral como Tegi6n geogrdjica" . En: An llario d e


Estlldios Centroam ericanos. Vol. 11 , Fascfc ulo 2, San J ose, Costa Rica
1985, pags. 5-24.

324
Discute las condiciones geognlJicas e historicas que penni ten abor-
dar e l estudi o de America Ce nlral como region geogn'llca.

WI-:ST,ROBERT YAUGELLI ,jOHN P. Middle A merica. Its Lands and Peo/JiRs. Pre n-
tice-Hail , In c. Englewood Cliffs, New J e rsey, 1966.
ESludio geograllco de la parte de America que los autores d e no-
rninan «Middle America), que comprende .Mexico, las Antillas y Ame-
rica Cen tfal lSlm ica.

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Co1ecci6n de profecias y re latos de Yucatan , que e nsenan el pe n-
samiento esolerico de los mayas de esa region .

CARMACK, R. yMONDLOCII, J. Ellitu.lo de Yax y olIVS documenlos quid,,!s de


Tolonicaj}{in, Gualemala. Mexi co, 1989.
Colecci6n de cronicas indfge nas quiches-mayas escritas en cl si-
glo XVl .

CHAPMAN, A. Los rencas de Hondu'/'Gs en el siglo XYl. Teguc igalpa (Hondu-


ras), lnslitlllo Hondureno de Antropologia e Hisloria, 1978.
La autora eSludia la hi sloria y cuitura de los le n cas de la parle
central de Honduras, en la epoca anlerior a la lIegad a de los espanoles.

- r.os Nicamo y los Cl101'Oiegas segrin las fuenles histOricas. San Jose, Un i-
versidac1 de Cosla Rica, 1960.
Reconslruccion hist6rica d e los patrones c ulturales de los inc1i-
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Ofrece un a visio n historica d e los Mayas-Quiches, en relacion con
su e ntorno natural, desde la epoca de sus primeras incursiones al a lti-
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329
Estlldia eI proceso de re estructuracion de la oferta d e alimentos a
la cilldad de Guatemala con el fin de evaluar eI impacto del auge ani-
lero en la reestrucluracion del «hinterland» de la cilload de Guatema-
la y mostrar la diferenciacion social del campesinado indfgena a fines
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guatemaltecos en el comercio colonial, las razones de tal situacion y
el enfrentamiento y sentimiento de oposic ion que se genero en su
contra por parte de los provincianos.

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En esta obra se analiza la gen esis de las estructuras agrarias colo-
niales, desde la upica hacienda ganadera hasta las peque11as explota-
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Estudia las rakes coloniales de la historia agraria de Costa Rica
hasta la decada de 1880. EI problema principal que plantea es el de la
conlinuidad y e l cambio en la socied ad costarricense y cuales elemen-
tos heredados de la colo nia soportaron e l cambio introducido por la
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1808 y 1818 por un presbitero interesado en la historia.

LOVELL, GEORGE. Canquista y carnbio cultural. La Sierra de los Cuchumatanes


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Conliene discusiones concretas sobre «medio ambiente y utiliza-
cion de recursos; asentamiento y tenencia de la tierra; de mandas eco-
n om icas y relaciones e micas; y desplazamientos d e mograficos a traves
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1520-1720. Guatemala, Editorial Piedra Santa, 1980.
Analiza los principales ciclos economicos del pe rlo do, con c nfasis
en los aspectos demograficos y e n el comercio.

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Version inte rpretativa de la Guatemala colonial, con enfasis en la
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Estudia los e xponentes del movimiento ilustrado e n Centroameri-
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Editorial Guaymuras, Honduras, 1992.
Estudio de 1a historia colonial de Honduras, abordada desde la
perspectiva de la demografia histOrica. Analiza el impacto humano,
ecologico, economico y cultural que soportaron las sociedades indf-
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Aborda la histori a d e los gremi os de anesanos de la Ciudad de Gua-
temala duran te todo e l perfod o colonial. Analiza tambie n las cofradias y
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Aborda e l problema de la esclavilud a la que fuero n somelidos los
indige nas e n Centroalne rica, as! COlll0 las tacticas recolTI c ndadas por
la Corona esp all0la al Lic. Alon so L6pez de Cerra to para hacer cUm-
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- "De la Sociedad Prehispanica al Higimen Colonial en CmlH){m"irica. (Si-


glas XVI-XV{[)". En: Avances de Investigaci6n. Centro de Investigacio-
n es Hist6ricas, Universidad de Costa Rica, NQ 17, 1986.

333
Analiza a lgunas de las caracteristicas cultural es de los grup os indi-
ge nas de Centroamerica, al momelllO d e la lIegada de los espanoles,
para luego estudiar el proceso de conquista e n la regi6n y las princi-
p ales formas d e explotaci6n de la mano de obra indigen a.

VAN 0 55, ADRIAN. Catholic Colonialism. 1524-1821 . New York, Cambridge


University,1987.
Se cen tra en el estudio de la Di6cesis de Guatemala. Es un a obra
clave para comprender el p apel desempenado po r la Iglesia Cat6lica,
como mecanismo de poder del Estado espano!.

WEBRE, STEPHEN. «El trabajo f onoso de los indigenas en la politica colonial


guatemalteca (siglo XVIII) ". En: Anuario de Estudios Centroamericanos,
Vo!' 13, Fasclculo 2, San jose, Costa Rica, 1987. p ags. 49-62.
ESludia el papel de la mano de obra indigena delllro del sistema
colonial espanol en Guatemala, asi como los debates que se d esarro-
llaron e n torn o a su explotaci6n en el siglo XVIII.

- (editor). La Sociedad colonial en Guatemala: Estudios Regionales y Loca-


les. Gua temala, CIRMA, Serie Monografica NQ 5, 1989.
Sie te articulos de diferentes autores, de los cuales dos tratan sobre
la conquista y su impacto, tres sobre la pro blematica del d esarrollo de
la sociedad rural , y los dos ultimos examinan aspectos de la sociedad
urbana.

WORTMAN, MILES L. Gobierno y Sociedad en Centroamenca 1680-1840. San


jose, EDUCA, 1991.
Analiza la forma d e gobierno impuesta en Centroamerica por los
Habsburgo y la reforma introducida con la lIegada de los Borbon es,
as) como los primeros an os de la epoca inde pendentista y el d esarro-
llo de la fragmentaci6n d e l Antiguo Reino de Guatemala en cinco
paises inrlepenclientes.

CAPiTULO III

ACUNA ORTEGA, H UGO y MaUNA jiMENEZ, IvAN. Histmia Econ6rnica y Social


de Costa Rica (1750-1950) . San jose, Ed. Porvenir, 1991.
Contiene varios articulos y un balance critico sobre e llegado colo-
nial y el d esarro llo del capitalismo en Costa Rica.

BRADFORD E., BURNS. Patriarch and Folk. The emergence of Nicaragua. 1798-
1858. Cambridge, Harvard University Press, 1991.

334
Analiza las contradicciones inherentes a la formaci6n del Estado-
Naci6n en Nicaragua.

CASAUS ARzO, MARTA. Guatemala: Lina}e y Racismo. San Jose, FLACSO, 1992.
Analiza la formaci6n hist6rica de los grupos dominantes en Gua-
temala, a partir de sus redes de parentesco, su poder econ6mico y sus
vinculos politicos durante el periodo colonial y post-colonial.

FACIO, RODRICO. «La Federacian de Centmarnenca, sus antecedentes, SIt vida y


su disolucion ". En: Obras de Rodrigo Facio. San Jose, Editorial Costa
Rica, 1982.
Estudio de gran profundidad hist6rica sobre la Repllblica Federal
y las causas de su disolucion.

HALL, CAROLYN. EI cafe y el desarrollo historico-geografico de Costa Rica. San


Jose, Editorial Costa Rica, 1991.
Estudio sobre la economia cafetalera en Costa Rica, que va desde
sus inicios, en e l siglo XIX, hasta la decada del setenta del siglo XX.

KARN ES, THOMAS L. Lus fracasos de la Union. San Jose , lCAP, 1982.
Analiza la historia de los proyectas unionistas en Centroameric3.
Comienza con un estudio sabre la Independencia centroamericana y
cierra con los proyectos de union de la di'cada de 1950.

LUIAN MUNoz, JORGE. La Independencia y la Anexion de Cenlroammca a Mexi-


co. Guatemala, Serviprensa, 1982.
Presenta tres trabajos intimamente relacionados sobre la Indepen-
dencia y la Anexion de Centroamerica a Mexico. Ademas contiene
una importante secci6n documental.

ORTF.Z {;OI.TNDRES, ENRIQUE. [ntegracian politica de Centmamenca. San Jose ,


EDUCA,1975.
Estudia la historia de la Fede racion Centroamericana y los inten-
tos posteriores de integracion regional, hasta los tratados que crearon
la ODECA e n la decada de 1950.

PINTO SORIA, JULIO CESAR. Centmammca, de la colonia al Estado Nacional


(1800-1840). Ed. Un iversitaria de Guatemala, 1989.
Estudia desde las luc has independentistas, hasta los intentos per
preservar la unidad regional por medio del proyecto de la Repllblica
Federal.

335
SOLORZANO F. , VALENTIN. !ivolucion !iconomica de Gu alemala. Guate mala,
Ministerio de Educacion, 1963.
Sintesis de la historia economi ca guatemalteca desde la e poca pre-
colombina hasta la epoca liberal.

SOLORZANO FONSECA, JUAN CARl.OS. "Centroarnbica en eI siglo XVI!1: un inten-


10 de explicacion econornica), social" . En: Estudi os Sociales Centroameri-
canas, NQ 32, Mayo-Agosto, San Jose, Costa Rica, 1982. pags. 11-22.
Analiza los mecanismos de generacion de excedentes economi-
cos, asi como su apropiacion por diferentes agenles econ6m ico-socia-
les en la Ce ntroamerica del siglo XVIII.

TARACENA ARRIOLA, ARTURO. "Cochinilla y clases sociales en la Guatemala del


siglo XIX" . En: Estudios. Revista de Antropologia, Arqueologia e His-
toria,junio, Universidad de San Carlos, Guatemala, 1990. pags. 43-59.
Estudia el impacto socioeconomico y politico de la produccion de
cochinilla e n la sociedad guatemalteca entre 1830 y 1860.

WOODWARD, RALPH LEE. JR. Rafael Carrera and the Emt:lgence 0/ the Republic 0/
Guatemala 1821-1871.
Trata aspectos de la historia social de Guatemala y los cambios que
los primeros 50 anos de vida independi ente traje ron sabre las masas
rurales. Explica como un cam pesina de extraccio n popular fue capaz
de p e rmanecer e n e l poder cerca de 30 an os.

CAPiTULO IV

ACUNA ORTEGA, ViCTOR HUGO. "La ldeologfa de los Pequenos y M edianos Pro-
ductares Ca/elaleros Coslanicenses. (1900-1961) " . En: Revista d e Historia,
NQ 16. Julio-Di ciembre, San J ose, Costa Rica, 1987. pags. 137-159.
Anali7.a la conce pci o n ide ologica de los pcque iios y Inedian os
productores cafetaleros ca n respecto a los beneficiadores.

- Los ongenes de la Clase Obrera en Cosla Rica: Las hue/gas de 1920 por las
jornadas de ocho homs. San Jose, CENAP-CEPAS, 1986.
Analisis historico sabre la formacion de los sectores obreros y arte-
sanales costarri censes. Valioso aporte sobre la hislOria del movimien-
to obre ro e n Costa Rica.

- "Patrones del Confliclo Social en. la Economia Ca/elalera Coslan'icense


(J 900-1948)" . En: Revista de Ciendas Sociales, NQ 31, Marzo , San Jose,
Costa Rica, 1986. p ags. 113-122.

336
Descubr .. y analiza las reJacioncs e lllre los pequeJ'ios cafetalc ros),
e l gran cap ital que co ntrola el beneficiado y la exporLacion cafeta lera.

ANOERSON, THOMAS. F:l Salvad01: 1932. San jose, EDUCA, 1982.


Analiza los antecedentes politicos, sociales y econ6micos que dic-
ron origen a l levantamiento de 1932.

ARAVA POCII E.T, CARl.OS. «EI enclave minero en Centmalllbica: 1880-1945, un


estudio de los casos de Honduras, Nicaragua y Costa Rica». En: Revista de
Ciencias Sociales, Nl2 17, 18, Marzo-Octubre, San]ose, Costa Rica, 1979.
pags. 13-59.
Analisis co mparado de los ciclos mineros en Honduras, Nicara-
gua y Costa Rica entre 1880 y 1945.

ARLAS GOMEZ, J ORGE. Fambu.ndo MaTti. 1'.'sbozo biografico. San Jose, EDUCA,
1972.
Relato contextualizado sobre los prin cipales acontecim ientos que
rodearon la vida d e Farabundo Marti. Resultan d e suma imporLancia
los aspectos que tllvieron que vel' con los sangrien tos acontccimien tos
de 1932.

BARAHONA, MARVIN. La hegemonia de los Estados Unidos en H onduras (1907-


1932). Tegucigalpa, Centro de Documentaci6n d e Honduras, 1989.
Analiza e l periodo formativo y d e consolidacion de la hegemonia
de Estados Un idos e n Honduras.

BOURGOIS, PHILIPPE. Banana, etnia y lucha social en Centroamerica. San jose,


DEI, 1994.
La prese ncia de las transnacionales ban a neras e n e l litoral caribe
de Centroamerica provo co oleadas migratorias que han hech o de la
ban anera una de las zon as de m ayor diversidad cultural. Analisis deta-
llado de las luchas sociales.

CASEY GASPAR, J EFFREY. Limon: 1880-1940. Un estudio de La Industria Banane-


ra en Costa Rica. San ]ose, Edi torial Costa Ri ca, 1979.
Analiza los inicios de la plan taci6 n banane ra, las re lacion es e ntre
la United Fruit Company, los productores privados, y los trabajado-
res ba na n e ros, asi como e l impacto de la in dustria a escala regio nal y
nacional.

CASTELLANOS CAMBRANES, j ULIO. Caftiy camfJesinos en Guatemala, 1853-1897.


Guatemala, Editorial Universitaria d e Guate mala, 1985.

337
O bra de gran e nve rgadura, e nfocada sobre todo hacia la dim en-
si6n social de la producci6 n cafe talera.

DALTON, ROQUE. M1GUI::L ALilUvIOI.. Los Sllcesos de 1932 en El Salvador. San


Jose, EOUCA, 1982.
Recoge eI testimonio del dirigente comunista Miguel Marmol so-
bre los hechos violentos de 1932 en El Salvador que costaron la vida a
miles d e salvadorenos en manos del ejercito.

ELLIS, FRANK. Las 1l"ansnacionales del Ranana en Centroamhica. San Jose,


EOUCA,1983 .
Analiza la actividad bananera en la region en eI periodo 1870-1976,
y aborda temas como la mano d e obra, los aspectos tecni cos de la pro-
duccion , el mercado internacional del banana y la productividad d e la
actividad bananera.

FISCHEL VOLlO, AsTRID. Consenso y Represion. Una interpretacion socia-politica


de la educacion costarricense. San Jose , Editorial Costa Rica, 1990.
Analiza el sistema educativo costarricense e ntre la independencia
y 1885, con el fin d e caracte rizar la situaci6n educativa antes de la
reforma iniciada ese ano. A partir de esa caracterizacion se aboca al
analisis de la reforma educativa.

GUDMUNDSON, LmvELL. Costa Rica antes del cafe. Sociedad y economia en vispe-
ras del boom exportador. San Jose, Editorial Costa Rica, 1990.
Focaliza su atencion en e l Valle Central de Costa Rica, hacia la
decada de 1840, cuando e l impacto del cafe y la agricultura de expor-
tacion come nzaban a revolucionar la sociedad costarricense.

HALL, CAROLYN. FOl'lnacion d.e una Hacienda Cafetalera 1889-1911. San Jose,
Editorial U niversidad de Costa Rica, 1988.
Estudio pionero en el contexto costarricense , cuyo obj etivo es la
reconstruccion hi storica del funcionamiento de la Hacienda Cafetale-
ra Concovas, en Cartago.

KEPNER, CHARLES DAVID YSOOTHILL,JAY HENRY. El Imperio del Banana. Las


Campanias Bananeras contra la Saberania de las Naciones del Caribe. Edicio-
nes del Caribe, Mexico, 1949.
Estudio sobre la politica de las companias bananeras en Centroame-
rica y el Caribe , con enfasis en los casos de Costa Rica y Honduras.

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Mesoamerica, Cuaderno 3,Junio, e lRMA, Guatemala, 1982. pags. 1-25.

338
Analiza e l proceso de expansion cle la cafkllitllra salvadort'iia y la
politica cle "poyo a l n uevo cultivo por los gobiernos liberales, asi como
el creciente poder eco nomico )' politico d e la n ae ien te burguesia ('a-
fe tale ra e n tre 1863 y 1885,

LAGUARDtA GARCiA, J ORGE, EI pensmniento liberal de Guatemala (A ntologia).


San Jose, EDUCA, 1977.
Estlldia la Reforma Liberal en Gua tem a la e ll e l siglo XIX, y p re-
senla un conjunto de docnmentos hi st6ricos sobre el m ovimicn to li-
beral g llatemalteco.

LANUZA, ALBERTO; VAZQUEZ, ]. L.; BARAHONA, A. y CHAMORRO, AMALIA. Eco-


nomia y Sociedad en la Constmecion del Estado en Nicaragua. San .lose,
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Ana liza e l desarrollo econ o mico nicarague nse e ntre 182 1 y 1873,
10 mism o que el Estado o ligarquico e n la decad a del cin cuenta del
sig lo XIX, la intervencio n extranjera e n N icaragua y la in stauraci6n y
n aturaleza cle la di etadura somocista.

LI NDO, HECTOR. Weal< Foundations. The Economy oj El Salvador in the Nine-


teenth Century. Berke ley, Un iversity of California Press, 1990.
Anali za como la eco no mia salvadoreiia, funda me ntada e n la ex-
pOrlaci6n d e l aiiil y la agricultura de subsiste n ci a, p as6 a se r, a 10 largo
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LOPEZ, J OSE RO BERTO. La Economin del Banano en Centroam"iea. San .lo se,
Editori al DEI, 1986.
Estudia la industria bananera en Cenlroa merica, du ra nte las de-
cadas del sele nta )' medi ados d e los och e nlas del siglo XIX, e poca e n Ia
eual se crea e l conve nio que d a o rigen a la Union de Paises Exporta-
dores e1e Banano (UPEB).

MENJivAR LARiN, RAFAEl.. Acu.m,ulacion Originaria)' Desarrollo del Capitalismo


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An aliza los procesos d e desarrollo del capilalismo y d e la acumula-
cio n origin aria como un intento de ex plicarse los determinantes his-
lori cos de la lucha de c1ases en El Salvador y su especilicidad e n el
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MOLI NA C I'IOCANO, G UILLERMO. Estado liberal y desarrollo rat)ilalisla en


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339
Analiza el movimiento liberal h ondureiio y e l conjllnto de refor-
mas ec.ono m icas, sociales y politicas llevadas a caho por el gobierno
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MOI.l NA JI MENEZ. IvA1\. Costa Rica. ] 800- /850. Ellegado colonial y ia ginesis dPl
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Permilc comprender el peso de la po liti ca no rtearnericana hacia
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nales, basado en fuenles docUinentales de archivos nortcamcricanos.

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Guatemala pn esle siglo. Guatemala, Editorial U nive rsilaria, 1978.
Re lata aUlobiognlfico en el e lla} se rinde test.imo nio de una serie
de hechos reialivos al movi lniento obrero guatetnalteco.

OI.TVA MWII'A, MARIO. Artesano,), obrelvscostanicenses. 1880-] 9] 4. San Jose,


Editorial Cosla Ri ca, 1985.
Analiza el desarrollo del movimienlo anesanal y obrero entre 1880
y 191 4, lrascendie nd o hacia una construccion cultural de aqueJ.

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Estudi o sobre un a de las mas imponantes empresas beneli ciado-
ras y productoras cafe lale ras de Cosla Ri ca.

POSAS, MARlO. Luelzas del movimiento obrem /wnduwio. San j ose, EDUCA, 1981 .
Analiza las hue lgas de los u'abaj adores de las companias bananeras,
sus Ill chas por oblener la libertad d e asociac io n sindi cal, y las condicio-
nes en que se real izo el recon ocimienlo legal de sus organizac iones .

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Analiza el surg imi e n to y la fonn acion d e la clase o bre ra hondllre-
na. Estudia tam b ien los problemas e tnicos asociados con la llegada
d e trabajadores n egros procedentes del Caribe .

340
POSAS MARIO, Y DEL Cin, RAFAEL. La COllslmccion del Seclor f'liblim v ti,'/
Eslado Nacionai en Honduras. 1876-1979. San Jose, EDUCA, 198'1 . .
Analiza el proceso de formacion estatal en Honduras y las caraCle-
rislicas de c1ase que aStllnc el Estado honduretio. en Ull proceso com-
plejo de eo nsolidaeion y extensioh de SllS areas de inl1uenc ia.

SA l AZARMORA, ORI A:>JDO. EI Aflngn! rie la Re/nlblica Liberal en Cosla Rica.


1870-1914. San jose, Editorial de Ia Universidad de Costa Rica, 1990.
Analiza la historia politi ca costarricensc dllrante e l periodo 1870-
1914, para 10 ellal estudia el marco jurfdico-adrninistrativo del perfodo.

SAI.JSBURY, RICHARD. Cosla Rica y ells/mo 1900-1934. San jose, Ed itoria l Cos-
ta Rica , 1984.
Muestra eI pape l de Costa Riea e n torno a cuatro asuntos centro-
americanos: la Union Ccntroan1ericana, la controversia so bre e l Ca-
nal de Nicaragua, los conflictos revolucionarios en el istmo y 1a inte r-
vendan e xtranjera.

SAMPFR K., MARIO. Generations ofSelllers. Ruml Households and Marhels on


Ihe Cos/a Rica FrO/Hie/; 1850-1935. Westview Press, Dellplain American
Studies, NQ 26, 1990.
Se oCllpa del estudio d e las unidades de producci6n fam iliar situa-
das en la region noroeste del Valle Central de Costa Rica.

TA IV\CE]\A, ARTURO V PIEL, JEAN (compiladores). !denlidades naciunales y t:sla-


dos lV/adem as en Centromnerica. San J ose, Co lecci6n [stmo , Editorial Un i-
versidad de Costa Rica, 1995.
Pone nc ias presentadas en el Seminario «Balance hist6rico del Es-
tado Nacion en Ce ntroame ri ca», celebrado en EI Salvador del 22 al
24 de noviembre de 1993. Los anal isis que incluye abarcan desde 1821
hasta 1970, pero son particulannente utiles para los te mas tratarlos
e n el capitulo IV.

TORRES-RrVAS, EDELBERTO VPINTO SORlA,.JULIO CESAR. Probi£mas en laforma-


ci6n del t,:,tado Nadonal en Centroa.1Il6ica. San jose, ICAp, 1983.
Analiza el papel del Estado en Cen troamerica y su proceso de
construcci6n.

WU NDERICH, VOLKER. "Dios hablani /101· el indio de las Segovias». Las bases
sociales de la lu cila de Sandino la liberaci6n nacional en Nicaragua. 1927-
1934». En: Revista de Hi storia. NQ 17. En ero:lunio, San jose, Costa
Rica, 1988. pags. 13-32.

341
Estudia y analiza las relaciones entre los sectores campesinos e
indige nas d e la region de Nueva Segovia, en Nicaragua, y e l movi-
miento de Augusto C. Sandino e n e l periodo 1927-1 934.

CAPiTULO V

ACU ILER,\ PERALrA, GABRIEL Y ROMERO l MERY, .I 0RGE. Diallieliea del Terror en
Guatemala. San J ose, EDUCA, 1981.
Estudi a las caracte risticas y la natura leza vio lenta de la lucha de
clases e n Guate mala, a partir del d errocamie nto de Arbenz, y la ins-
tauracion de un poder estatal violento y represivo .

BAIRES, YO LAN DA. "La situaeion demogr(':!ica de Centraamerica, 1950-1980". En:


Anuario de Estudios So ci ales Centroame ri canos, Un iversidad d e Cos-
ta Rica. Vol. 10, San J ose, Costa Rica, 1984. pags. 143-1 49.
Reline informacion sobre las principales variables d e mograficas.

B ARAHONA PORTOCARRERO, AMARU. Estudio sobre la Histmia de Nica:ragua. Del


auge a':!elalem altriur':!;, de la Revoluei6n. Managua, I NI F.S, 1989.
Estudia el periodo comprendido entre 1909 y 1976, 0 sea, desde la
intervencion norteamericana de 1909 , hasta poco antes de la caida elel
regimen somocista.

BARRE, MARTL-O -IANTAL. ,La presencia indigena en los pmcesos sociopoliticos fOn -
Ifmporaneos de Centroallltilica". En: Estudi os. Rcvi sta de Anlropologia,
Arqueologia e HisLOria, junio J990, Escuela de Historia, Universidad
d e San Carlos, Guatemala . pags. 21 -42.
Anali za la participaci6n de los indfge nas ccntroanlericanos e n los
procesos politicos co ntempora n eos d e cada uno de los paises del area,
inc111idos Belice y Panama.

BOZZOLl .l DE W Il.L1 E, MA~iA


EUGeNlA. "La flontera agricola de Cosla Rica Y Sit
ndarion ron el problema agmrio en zonas indigenas». En: Anuario de Estu-
dios Centroamericanos. N£i 3, San.1ose, Costa Rica , 1977. pags. 225-234.
Breve exposicion sobre e l impacto d e la colonizacion agricola en
zonas indigenas costarriccnses.

- Localidades Indfgenas coslarricenses. San J ose, EDUCA, 1969.


Bri nda detalladas im" ge n es sobre las diferentes comunielades in-
el ige nas, y sus costumbres entre 1960 y 1973.

342
BUL,IER THOMAS, ViCTOR. La Econornia Politiw de Cenlroameriw desde 192U.
San J ose, Banco Centroamericano de Integraci6n Econ6mica, 1989 .
An a liza la naturaleza del desarrollo econ6mico de Centroamerica
y se propone aclarar la confusi6 n ace rca d el papel dese mpeJ'iado por
los facto res econo micos en la crisis actual.

CACERES P., J ORGE; GUIDOS BEJAR, RAFAEL YMENJivAR L"'JUN, RAFAEL El Sal-
vadar: Una H isloria sin Lecdone... San Jose, FLACSO, 1988.
Consta de tres articulos: el primero parte de l estudio de la llam ada
Revoluci6n de 1948, por ser el primer intento de reforma sociaJ e n EI
Salvador. EI segundo eswdia e l pape! del Estado salvado re iio en los
procesos de induslri alizaci6n, y el terce ro analiza la crisis del mode lo de
desarrollo econ6mico y polftico aplicado en EI Salvador a partir de 1948.

CAMACHO, DANIEL Y MENJivAR, RAFAEL. Movimientos Popnla11!s en Centroame-


rica. San Jose, EOUCA, 1985.
Compilaci6n de varios estudios ace rca d e movimientos populares
y sobre movimie ntos religiosos, fem e ninos y estudiantiles e n Centro-
a merica durante la cIecada d e 1970 y parte d e la dec ada de 1980.

CARiAS, MARc o VIRGILIO (et. al). LaguelTa inutil. San Jose, EOUCA, 1971.
Presenta varios articulos que ana lizan las causas d e l conflicto ar-
mado que enfre nt6 a los gobie rnos de Honduras y EI Salvador, e n
julio d e 1969.

CEOAL. Ambiw CentraL. indigenisrno y A n tropologia SociaL. San J ose, CEDAL,


1974.
Colecci6n d e artfcu los presentados en e l Se minario «Antropo lo-
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por CEDAL, el CONAl Y la Fundaci6n Friedrich Ebert d e la Republica
Federal de Alemania.

CIDCA-UCA. Persistenaa indigena en Nicaragua. Bogota, Editorial Presen cia,


1992.
Serie de articulos que tratan la problematica de los indfgenas nica-
raguen ses.

DADA HlREZI, HECTOR. La Economia de El Salvador y la inlegracion Cenlroame-


ricana 1954-1960. San Jose, EOUCA, 1983.
Escudriiia las caracterfsticas de la economfa agroexportadora a 10
largo de los siglos XIX YXX. Analiza el proceso del desarrollo industrial
salvadoreiio entre 1945 y 1960, asf como el proceso de in tegraci6n d e la
economfa salvadorei;a al proyecto de integraci6n centroamerican a.

343
OU:-JK~KL~Y, JAI1ES. Power in the Isthmus. A politiral history of modern Cmtral
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Estudia la conslruccion del poder en Cenlroamerica, remonl<'in_
dose al Siglo XIX para escudrillar sus bases. EI confliclo en Nicaragua
y la revolucion sandinista son los puntos 111edulares en esta obra.

GONzALEZ CAS.~'JOVA, PABLO. (et.al. ). H istoria politica de los camj)esinos cen tro-
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Colecci6n de ensayos que analiza el papel desempeiiado por los
grupos campesinos e n los procesos revolucionarios de EI Salvador,
Guatemala y Nicaragua.

GONzALEZ CASANOVA, PABLO. H istm';a politica de los campesinos i£ltinoamerira-


nos. Vol. 2. Mexico , Siglo XXI Editores.
Integra un a serie de e nsayos que cubren la hiSlaria del movimien-
to campesin o en Centroamerica dura nte el siglo XX.

GONzALEZ, NANCIE L. "Sojournes of the Caribbean: Ethnogenesis and Etlmohis-


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Comentario bibliografico que describe la historia de los garffunas
y sus prin cipales tradicion es, tales como sus habitos alimentarios y prac-
ticas religiosas.

GUERRA BORGES, ALFREDO. Evoluci6n de 10. intermediaci6n financiera. en Cen-


troamirica. San Jose, ICADIS, 1986.
Estudia los origenes y evoluci6n de la intermediaci6n financiera ,
ente ndida como el conjunto de inst.ituciones e instrUll1entos financie-
ros que operan en Centroamerica d esde el siglo XIX.

- La Integracion Centmmnericana: reestructuraci6n y nuevas esquemas. San


Jose, Fundaci6n Friedrich Ebert, 1993 .
Sintesis d el proceso de integraci6n econ6mica en Centroamerica.
Analiza los esfuerzos por inyectarle un nuevo dinamismo y una pro-
puesta que procure reestructurar, fortalecer y reactivar la integraci6n
economica regional.

HERRERA, TOMAs. Guatemala: Revoluci6n de Detubre. SanJose, EDUCA, 1986.


Estudia el periodo 1944-1954 e n Guatemala, desentraiiando e l
papel desempe iiado por la pequeiia burguesia guatemalteca durante
la Ham ada «decada revolucionaria)).

344
H~RR£RO, FERNANDO Y GARNIER, LEONAROO. Fl desarrollo de la Industria PII
Costa Rica. H e redia, EUNA, 1982.
Estudia historicamente el proceso evolutivo del sector industrial
costarricen se desd e la epoca colonial hasta los all0s setentas.

JO NAS BODENHEIM~R, SUSANNE. Guatemala: plan piloto fJam el continente. San


.Jose, EDUCA, 1981.
Estudi a la historia reciente de Guatemala desde la caida d e Jaco-
bo Arbenz hasta la decada de 1970, tomando com o punto de refe ren-
cia la politica exterio r estadoun idense.

KNUT, WALTER. The Regime of Anastasio Somoza 1936-1 956. The University
of North Carolina Press, Chapel Hill a nd London, USA, 1993.
Estudia la evolucion del p roblema p o litico de Nicaragua, vincu-
hindolo co n la formaci o n del Estado, baj o la linea somocista cread a
en el p eriodo de 1936 a 1956.

MENJivAR LARiN, RAFAEL. C,isis del Desarrollismo. Caso de El Sa lvador. SanJosi',


EDUCA, 1977.
Estudia e l mode lo d e desarrollo impul sado e n EI Salvador a partir
d e la d ecada de 1960 y sellala sus de ficien cias.

MENJivAR LARiN, RAFAEL (et.al). La inversion extmnjera en Centroal/uirica. San


Jose, EDUCA, 1975.
Seleccion de ensayos que aborda n alg unos proble mas re lativos de
la inversi6 n extranj era en CentroaJne rica, especfficamente ace rca de
la inversio n no rteatne ricana.

MENJIVAR LARiN, RAFAEL. Formaeion y lueha del proletariado industrial salvado-


reno. San Salvador, UCA Editores, 1979.
Ensayo in terpretativo sobre el movimiento obrero salvado r6io,
d esde sus orige nes hasta la decada d " 1970.

MUNOZ, MERCEDES. EIEstado y laAbolici6ndelEjercito. 191 4-1 949. SanJose,


Editorial Porve nir, 1990.
Explica las peculiaridades del ESlado costarricen se que Ie han per-
mitido prescindir d e la in stitucion castre n se h asta nuestros dias.

MOLINA CHOCANO, GUILLERMO. Inlegracion Cenlroamericana y DOlllinaci6n


Inlemacional. San J ose, EDUCA, 1977.
Analiza la naturaleza del proceso de integracion centroamerican a
que se da a partir de la dec ada de 1960, asi co mo las re laciones d e
poder d e ntro de los estados.

345
MONTEFORTE TOLEDO, MARlO. Centroal1uirica. Subdesarrollo y dependenria.
Mexico, lnstituto d e Investigaciones Sociales, UNAM, 1972.
Obra general sobre diferentes topicos de la realidad centroameri_
cana que abarca las decadas de 1950 y 1960. Se estudia el medio fisico
y geografico, la estructura demografica y social, los procesos de inte-
gracion centroamericana, el sector laboral, e l pape! del militarismo y
la violencia en Centroamerica.

POITEVlN, RENE. El proceso de industrializacion en Guatemala. San Jose, EDU-


CA,1977.
Analiza e l proceso de industrializacion en Guatemala, dentro del
contexto centroamericano, e incorpora el analisis del Mercado Co-
lUlin en Centroamerica.

PROGRAMA CENTROAM ERICANO DE CIENClAS SOCIALES. Estl'UctUTa Agraria, Di-


niimica de Poblacion, Desarrollo Capitalista en Centroamerica. San Jose,
EDUCA, 1978.
Recoge una serie de trabajos preparados por e l Program a Centro-
americano de Ciencias Sociales de la Confederacion Universitaria Cen-
troamericana (CSUCA) sobre la te matica de la estructura demografi-
ca, agraria y e l desarrollo capitalista en Centroamerica.

ROSEMBERG, MARK (et al). Honduras: pieza clave de la politica de Estados Uni-
dos en Centroarluirica. Tegucigalpa, Centro de Documentacion de Hon-
duras, 1986.
Contiene diversos artlculos que analizan la importancia de Hon-
duras para la polftica norteamericana en la region.

SCHORI, PIERRE. El desafio europeo en Centroamerica. San Jose, EDUCA, 1982.


Analiza la situacion polftica de Centroamerica de la decada de 1970,
a la luz de los intereses de las potencias colonialistas europeas y de la
poll tica norte americana.

SMITH, CAROl.. "Ou ltuTa y Comunidad: El Lenguaje de clase en Guatemala ».


En: Revista de Historia, NQ 20. Julio-Dicie mbre , San Jose, Costa Rica,
1989. pags. 33-64.
Estudia los ele mentos ideologicos, etn icos y de c1ase en las relacio-
nes entre los indfgenas guatemaltecos y las comunidades ladinas.

SMITH, CAROL (et.al). Guatemala Indians and the State: 1540-1988. Texas,
University of Texas Press, 1992.

346
Serie de ensayos que estudian el pape! de los indigenas gu atemal-
LeeDS y las continuas relaciones de interacci6n entre las comunidades
indigenas y el Estado.

TORRES-RIvAS, EDELBERTo.(et. al.). Centroamerica.Hoy. Mexico, Siglo XXI


Editores, 1976.
Serie d e ensayos que abarcan telnas politicos, econonlicos y cultu-
rales.

TORRES-RIVAS, EDELBERTO. Crisis del Poder en Centroarnmca. San j ose , EDU-


CA,1983.
Conjunto de ensayos que analizan la revolucion sandinista, el te-
rror y la violencia por parte del Estado guatemalteco, la crisis del po-
der en Centroami'rica y la crisis de la dominacion en America Latina.

TORRES-RIVAS, EDELBEKfO Y DEUTSCHER, ECKHARD (et.al). Industrializaci6n


en Ammca Latina. Crisis y pe1'Spectivas. San jose, FLACSO-CEDAL, 1986.
Coleccion de trabajos sobre los procesos de industrializacion en
Ami'rica Latina.

WIM, PELUPPESSY (editor). La economia agroexportadora en Centroammca: ae-


cimiento y adversidad. SanTose, FLACSO, 1989.
Analiza la economia agroexportadora en Centro america durante
la decada de 1980.

CAPiTULO VI

AGUILERA, GABRIEL; MORALES, ABELARDO Y SOJo, CARI"OS. Centroamerica: de


Reagan a Bush. San jose, FLACSO, 1991.
Analiza el cambia en la politica nortealIlericana que se gesta en
la decada de 1980, a partir de la toma del poder en Nicaragua por parte
de los sandinistas y eI proceso revolucionario en Guatemala y EI Salva-
dor.

CAMACHO, DANIELYROJAS B., MANUEL (et.al). La crisis centroamericana. San


jose, EDUCA-FLACSO, 1984.
Seleccion de trabajos sobre la crisis politica, social y economica de
los anos setentas y ochentas en Centroami'rica.

CARMACK, ROBERT M. (et.al. ). Guatemala: cosecha de violencias. San jose, FLA-


CSO,1991.

347
Se rie de trab'!ios sobre los diferentes nivelcs de violencia estatal
en un conjunto d e comunidades indigenas guatemaltecas, en el Con-
texto de la crisis de la dec ada de 1980.

FUENTES K., JUAN ALBERTO. Desafios de la Integracion Centroame>icana. San


jose, FLACSO-ICAP, 1989 .
Evalua el papel de las exporlariones no tradicionales y e l posible
aprovechami ento de concesiones arancelarias y no arancelarias que
diferentes paises Ie otorgan a Centroame ri ca, asi como el problema
de la deuda externa y e l ajuste estructural.

lAJ.-EBER, WALTER.Inevitable revolutions. The United States in Centrol Ame>ica.


W.w. Norton and Compan y, New York, 1993.
Pone su aten cion en las relaciones entre Estados Unidos y Centro-
america en su perspectiva historica, y perfila las diversas form as como
se han d ado esas relaciones.

LUNGO UCLl~S, MAmo. El Salvador en los ochentas: Controinsurgencia y Revolu-


cion. San jose, EDUCA-FLACSO, 1990.
Analiza la decada de 1980 e n EI Salvador a partir d e dos procesos
f"und amentales: la recomposicion politica de las c1ases dominantes y
e l desarrollo del proyecto politico del Frente Farabundo Marti para la
Liberacion Nacional.

MAlRA, LUIS (et.al). La IJolitica de Reagan y la crisis en Centromneli ca. San


Jose, EDUCA, 1982.
Parte de un amilisis politico-ideologico de la administracion Reagan,
para luego ade ntrarse e n eI estudio de la politica de esta hacia la region
durante la crisis de la decada de 1980.

MENENDEZ RODRiGUEZ, MARlO. El Salvador: una autentiea gu erra civil. San


Jose, EDUCA, 1981.
Reune una serie de entrevistas publicadas en eI Excelsior, de Mexi-
co, sobre la guerra civil salvadorelia.

MENJivAR, RAFAEL. El Salvador: El eslaban nuis pequello. San .Jose, EDUCA, 1980.
Coleccion de e nsayos que, si bi e n analizan de man era coyunturaJ
eI periodo 1977-1980, brindan elementos de anal isis para en tender la
realidad social salvadoretia en toda su complejidad, e n especialla cri-
sis de fin es d e la decada de los setentas e inicios d e los och e ntas, asi
co mo la politica norteame ricana e n la region.

348
- Crisis y p e rspectivas d e los an os noventa. TV Confe rencia Centro-
a me ri can a por Ia Paz y la De mocratizacion. Man agua, Nicarag ua. 4-7
de noviembre, 1991.
Analiza los o rige n es de la crisis po litica, y caracteriza la crisis de la
decad a de 1980 en sus dive rsas manifestac iones. Tambien trala sobre
la paz, el d esarro llo y la cooperacio n regional e n los anos 1990.

RE UBEN SOTO, SERG IO (e t.al). Estado y Ajuste Estru ctural en Cen tmamti>ica. y el
Caribe. San J ose, CSUCA, 1990.
Compilacio n de trabajos acerca d e la crisis e con om ica de la deca-
da de 1980 y los programas de ajuste estr uctural e n Centroam e rica y
e l Caribe.

RIVERAURRUTIA, EUGENIO; SOJO, ANA VLOPEZ, J OSE ROBERTO. Centroamerica.


Politica. Econ6mica y Crisis. San Jose, ICADIS-DEI, 1986.
Conrie n e d os trabajos: el primero versa sobre la po litica econ o mi-
ca seguida por los gobiern os d e Gua te mala, Honduras, Costa Rica, EI
Salvador y Nicaragua en la d ecada d e 1980, y, el segundo sobre los
origen es e con omicos de la crisis experimentada e n Centroame ri ca
d uran te esa m isma d ecad a.

ROJAS ARAVENA, FRANCISCO VSOLis RiVERA, LUIS G. &S,ibditos 0 aliados ? La


j)olitica exterior de Estados Unidos y Cen tmamerica. San J ose , Edi torial
Porvenir-FLACSO, 1988.
Trata sobre la polilica exterio r d e los Estad os Un idos h acia Cen-
troame rica y e n particula r e l d esarrollo de la politica de los gobie rnos
de Carter, Reagan y Bush.

SALAZAR MORA, J ORGE MARl O. C,isis centmamericana y politica de las sujJerpo-


teneias. San J ose, Edito rial Alma Ma te r, UCR. 1987.
Estudio de la crisis cen troameri ca na d " la decada de 1970 y 1980.
Dedica algun as paginas al estudio d e la po litica exte ri o r norteameri-
cana y sovi eti ca en Centroame rica.

TI MOSSI, GERARDO. Centmamerica. Deuda externa)' ajuste estructural: las trans-


fomwciones economicas de la crisis. San J ose, CRIES-DEI, 1989.
Analiza e l pa pe! dese mpe n ado pOI' los procesos d e e ndeudami e n-
to externo, y los cambios qu e se vien e n da n d o en e l mo de lo eco n om i-
co tradicional e n Centroame rica.

VERGARA MENeSES, RA uL (et. al). Centroamti>i ca. La guerra de baja in tensidad.


Sa n Jose, CRl ES-DEI, 1989.

349
Serie de analisis sobre la puesta en practica, por parte del gobier-
no norteamericano, de la politica Hamada «Guerra de Baja Intensi-
dad (GBI)" en e l contexto de la crisis politica de Centroamerica en la
decada de 1980. EI libro tiene como objetivos la descripci6n y los
efectos que el proceso de militarizaci6n tiene en las sociedades cen-
troamericanas.

VILAS, CARLOS M. Mercado, estados y revoluciones. Centroammca 1950-1990.


Mexico, UNAM, Centro de Investigaciones Hist6ricas en Humanida-
des, 1994.
En el prime r capitulo realiza a lgunas proposiciones coyunturales
acerca de los factores econ6micos, politicos y culturales que intervie-
nen en la gestaci6n de situaciones revolucionarias. A partir del se-
gundo capitulo analiza el impacto de la modernizaci6n capitalista, los
principales aspectos politicos de la transformaci6n del Estado, asi como
la revoluci6n y contrarrevoluci6n en la decada de 1980. Finalmente,
se refiere a las perspectivas que se abren para Centroamerica.

WHITE, RICHARD A. The Morass. United States Intervention in Central America.


New York, Harper & Row, 1984.
Estudia los factores que influyen en las formas de intervenci6n
aplicadas por los Estados Unidos en Centroamerica.

350
APENDICE

ALGUNOS ORGANISMOS
CREADOS EN EL MARCO
DEL PROGRAMA DE
INTEGRACION REGIONAL

ANODE
ORGANISMO CREACION OBJETIVO

Consejo Superior 1948 Ente regional de educaci6n supe-


Universitario rior coordinador de los procesos de
Centroamericano integraci6n. cooperaci6n y reforma
(CSUCA) academica necesarios para transfor-
mar las sociedades y lograr la union
centroamericana.

Comi te de Coopera- 1951 Llevar a cabo la integraci6n econo-


cion Econ6mica del mica centroamericana acordada en
Istmo Centroamerica- la Resoluci6n NQ 9 (IV) de la CE-
no (CCE) PAL (16-6-1945).

Organizaci6n de 1951 Fomentar y coordinar el proceso de


Estados Cen troameri- integraci6n.
canas (ODECA)

Escuela Superior de 1953 Coadyuvar al mejoramiento de la


Administraci6n Puhli- administracion publica en la region
ca de America Central con el fin de operacionalizar el pro-
(ESAPAC)* grama de integraci6n enfatizando
en las areas de investigaci6n, capa-
citaci6n, asesoria tecnica directa y
extension.

* En 1967 se transforma en el Instituto Centroamericano de Administraci6n Publica (ICAP) .

351
InstitlllO Centroame- 1955 Ayudar al desarrollo industrial y al
rlcano de Investiga- crecimie nto econ6mico del area a
cion y Tecnologfa traves de Ia investigaci6n apli cada
Industrial (ICAfTI ) y la asesoria tecnol6gica a instilll-
cio nes privadas y piiblicas.
e-------
Banco Centroameri- 1960 Fomentar la integraci6 n yel desa-
cano de Inlegraci6n rrolIo economico eqllilibrados de
Econ6mica (BCIE) los paises de la region a traves de
la in ve rsion en proyec lOs de infra-
estructura, industrializacion , espe-
cializacion agropecllaria, y otras de
interes para el MCCA.

Secretaria de 1960 Caordinar y dirigir la ejecuci6n de


Integracion los tratados, convenios y d isposicio-
Economica (SIECA) 0 nes relativos a la iniciativa de inte-
Secretarfa Permane n- graci6n.
te de l Tratado
- - - - - - - - -f - - - - - - - --
Camara de 1961 Promover la utilizacion de mone-
Compensacion das centro americana..;; en los inter-
Cen troamericana cam bios comerciales y financieros
e ntre los paises miembros.
-- ~~----
f------------------
Cons~jo Economico 1962 Pl anificar, dirigir y ~ iec utar el pro-
Centroamericano grama e1e integ racio n economica.
f---
Mercado Comlm 1964 Consolidar los cinc o mercados
Centroamericano regionales a traves de la supresi6n
(MCCA)** de las barreras al come rcio interre-
g ional.
1--- - - - - - - - - - -

Consejo Monetario 1964 Establecer y coordinar la union mo-


Cen troamericano netaria regional.

Com isi6n Tecnica 1967 Facilitar la ejecucion yadrninistra-


Regional d e cion del tratado e1e telecomunicacio-
Telecomunicacione s nes suscrito entre 1966 y 1967 por
(COMTELCA) los paises de la region y ejecutar la
conslrucci6n de la Arteria Centro-
americana de Telecomunicaciones.

** Nace como organismo regional en 1964 cuando se ad hiere Costa Rica.

352

-
FLORA Y FAUNA
MENCIONADAS EN LA OBRA
- - - - -- -- -
I NOMBRE NOMBRE NOMBRE NOMBRE
COMUN CIENTiFICO COMUN CIENTiFICO
--
FLORA Hu le 0 caueho C<lsli ll a elastica
Aguacalc Persea americana !tabu Yucca e lephantipe

Ajonjoli Sesamum orientale Maiz Zea may~


sesam um indiculll
[\'l a mcy Mammea ame ri cana
Algodon GoSSypi ulll spp.
Marafu'm Anacardium occidenta le
Alii i, xiq uilitc
Nance Byrsonima crassifolia
o indigo Indigofera tinctoria
Nopal Opullti a ficus-indica
Banano Mlisa sa pien tum
Mu sa cavendishii Palma Rusclis aculcatus
Musa paradisiaca
Pino Pinus spp.
Cabuya Agave ame ricano
Tabaeo Nicot.iana labacu lll
Cacao Thcobroma spp.
Trigo Triticum sp.
Cafe Correa arabica
Zapote POllte ria mammosa
Cnffe a liberica
CofTea robltsta

Cllabaza 0 ayol.c Cucu rbi la sp. FAUNA


Colocyillhis sp.
Armadillo Dasypus noYcmci nctlis
Lagenaria sp.
Nuphar Ime um Guatuza Agou ti paca

Can a de a:r.ucar Sacc harum officinarum Manati Thrichechus manatus

Caoba Sw i ~te nia macrophylla Pavo Mc lcagris gallopavo

Ci nchon a Nccta nd ra S<'l.licifoli s Perro Cani s familiaris


Sinc hona oflicinalis
Saino Tayasstl t,~jactl
Ci rue lo Pru nus domestica layassu pecari

Coca Erylhroxylum cocca Tepczcuintle CUIlLlculLl S paca

Cochinilla Phyto lacca americana Tortuga Chelon ia mydas


Quercus coccifera (marina
comestible)
Coyol Ac rocomia mexican a
(va riedad vin ifera) Vcnado Odocoi leus virgi nian us
(d e cola bla nca)
Frij o l Ph<lseolus vulga ris

353
APENDICE ESTADiSTICO

CUADRO 1
SUPERFICIE TOTAL DE LOS PAiSES CENTROAMERlCANOS
YSUS PRINCIPALES CARACTERisTlCAS. 199~

Pais Superficie total Poblaci6n Densidad % Tierras


(miles Km' ) (millones) (hab. / Km') Agricolas

Guatemala 108889 10.0 92,1 30,3


EI Salvador 20935 5.5 263,5 69,8
Honduras 112088 5.3 47,6 40,1
Nicaragua 139000 4.1 29,6 48,9
Costa Rica 50900 3.3 64,2 58,5

FUENTE: Centroomenca en cifras 1980-1992. FLACSO \ 995, pags. 16 y 17.

CUADR02
COMPORTAMIENTO DE LOS PRlNCIPALES INDlCADORES VITALES
1990-\995

Pais Esperanza de Tasa bruta de Tasa de mortalidad


Vida al nacer mortalidad infantil (por mil
(ambos sexos) (por mil hab.) nacidos vivos)

Guatemala 64,8 7,6 48,5


EI Salvador 66,6 7,1 45,6
Honduras 67,7 6,1 43
Nicaragua 66,6 6,9 52,2
Costa Rica 76,3 3,7 3 1,7

FUENTE: Centroamen," en cifras \980-\992. FLACSO 1995, pags. \27 y \28.

354
CUADRO 3
POBlAcrON ECONOMICAMENTE ACTIVA
PROYECCIONES 1990 (MILES DE PERSONAS )

Pais Tota l U rban a Rural

Guatemala 3233 1 187 1 562


El Salvador 2688 1 2 12 I 042
Honduras I 877 734 827
Nicaragua 1 401 721 439
Costa Rica 1206 594 466

FUENTE: Cenlroambica en cifras ] 980-1992. FlACSO 1995, pags. 109 , I] 0 Y 111 .

CUADR04
PRODUCTO INTERNO BRUTO 1992
(DOLARES DE 1980)

Pais (millones $) P/ Habitant e ($)

Guatemala 9206 945


E I Salvador 3741 693
Honduras 3 404 657
Nicaragua 1 777 449
Costa Rica 4839 1 516

FUENTE: CenlTOmnmc(}' en cifras 1980-1992. FlACSO 1995, pags. 35 y 36.

CUADRO 5
PARfi CIPAcrON DE DIVERSOS SECTORES EN EL PIB
1992 (PORCENTi\jE)

Pais Agricola Industrial Servicios Oll"OS


basicos Servicios

Guatemala 27.7 19,4 7.3 45.6


EI Salvador 26.0 19,4 6.6 47.9
Honduras 22,4 26.0 10,4 4 1.2
Nicaragua 24.3 25.2 8,4 42, I
Cos ta Rica 19.4 22,6 8.6 49,4

FUENTE: Cenlroamhim en cifm." 1980- 1992. FLAeSO 1995. pags. 42. 49 Y 54 .

355
CUADRO Ii
PROD UCCI(lN AG RICOLA 1992 (MILES DE TONELA DAS)

Pai s Cana Cafe Banano


de aZll ca r Algodo n Frijo l Maiz A r ro z Verde y platano

Guatema la 9788 55 100 1 250 50 207 !")21


EI Salvador 4736 10 62 706 72 147 80
Hond uras 3004 6 46 582 41 135 1 268
Ni caragua 2563 67 79 231 158 45 199
Cos ta Rica 2 840 n.d. 3(j 40 209 168 I 719

FUENTE: Centmamhica en rijins (980-1992. FLACSO 1995, p:lgS. 42, 4:1,44 ,45 Y 46.

CUADRO 7
EXPORTACIONES D E BI ENES 1992
PARTICIPAC ION PORCENTUAL EN LAS EXPORTACIONES TO'IAl.ES

Pais Va lo r*' Cafe Algodon Banano Carne Az(icar

Guate m ala 1 5 12 19,7 8,6 1,0 10,6


EI Salvador 854 25,3 0 ,3 n.d. n .d. 7,5
Hon du ras 963 18,3 n.d. 32,0 4,6
Nicaragua 263 n .d . n. d. n.d. n .d. n.d.
Costa Rica 2254 I 1,1 n.d. 26,5 2,4 1,5

::' Mill o nes de d61ares de 1980


FUENTE: Gml.roanu'rim en ciji"as 1980- 1992. FLACSQ 1995 , pags. 55, 61 , 62 Y 63 .

CUAD R08
I M PORTACIONES DE BI EN ES 1992
PA RTICIPACION PORCENTUAL EN LAS IMPORTAC I O N ES TOTALES

Combustib les Bi enes de Bienes Bienes


Pals Va lor* y lu br ic antes consum0 interm e dios de capita l

Guate m ala 2328 8,9 n.d. n.d. n.d.


EI Salvado r 1 549 6,8 n. d . n.d . n .d.
Hondu ras 990 15,7 20 ,9 63,f) 17, I
Ni caragua 736 13,7 n.d. n.d. n.d.
Costa Ri ca 22 12 9 ,4 n .d. n.d. n .d .

~~ Mill ones de d6 1ares de 1980


FUENTE: CI?I71roamfdm en cirm~· 1980~ 1 992. r LACSO 1995, pags. 64, 71 Y 72.

356
CUAllRO 9
D EFICIT FISCAL
(M ILLON ES DE DO LARES DE 1980)

Pals 1980 1985 1990 199 1

Guate mala 366.6 132.5 ](i9.8 0


EI Salvador 195.8 85.4 106.4 142.9
Honduras 199.8 228.8 252.5 128.9
Nicaragua 136.6 467.8 373.0 14 1. 9
Costa Rica 340.3 7 1. 6 177.4 135.9

FUE~TE: Ct>11/roamPr;U{ eI1 fifms 1980-1992. FLACSO 1995 , pag 99.

CUADRO 10
DEU DA EXTERNA 1992

Pais Total desembolsado Por habitallte Servicio


(millones $*) ($') (millones $*)

Guatema la 2582 265 346


El Salvador 2338 433 414
Honduras 3538 683 97
Nicaragua 10 80(i 273 1 549
Costa Rica 4 022 1 260 n,d.

"" Do la res d e 1980.


FUE.:"lTE: Cell lromne-rica en f?fms 1980- 1992. FI .ACSO 1995 . p.lgs. 8 4 , 85 Y 87.

CUADRO I I
PODER ADQU ISITIVO DE LAS MONEDAS CENTROAM ERI CANAS
1980 · 1992 (i NDICES)

Pals 1980 1985 J990 199 1 1992

Gua te ma la 100 0,70 0,00 0,20 0, 18


EI Salvador 100 0,50 0,18 0,15 0,14
Ho nduras JOO 0,72 0,47 0,35 0,32
Nicaragua 100 0, II 0,00 0,00 0,00
Costa Ri ca 100 0,22 0, 10 0,08 0,07

FUENTE: Celllroame,im en cifras 1980- 1992. FL\CSO 1995 , pag. 93.

357
CUADROl2
EVO LlJCION DE LA POBREZA
1980 - 1985 (MILES DE PERSONAS)

Pobreza Rural Pobreza Urbana


Pais 1980 1985 1980 1985

Guatema la 3998 4529 I 168 2 197


EI Salva d o r 2046 2521 I 22 1 1648
Honduras 1 975 2368 540 1054
N icaragua 1010 I 196 67 1 101 6
Costa Ri ca 4 11 506 138 240

FUENTE: Centmamhica en ciJra.~ 1980- 1992. FL ACSO 1995, pags. 105 y 107.

CUADRO 13
INFORM ALIDAD URBANA SECUN CATEGO RIA OCUPACIONAL
ALREDEDOR DE 1989 (PORCENTAjES)

Micro- Asalariados de Por (uenta Familiares no


Pais e mpresarios Mi c roe mpresas pro pia remunerados

Gua temala .1 5,9 28,7 5 1, I 4 ,3


EI Sa lvado r 5,7 33,4 50,8 10,1
Honduras 4 ,5 21 ,5 62 ,7 11,3
N icaragua 12,4 13,5 57, 1 17,0
Costa Rica 8,4 21 ,1 67,3 32,0

FUENTE: Centroamhicaen cifras 1980-1992. FLACSO 1995 , p:.ig. 126.

CUADRO 14
INFORMALIDAD URBANA SECUN SECTORES PROD UCTfVOS
ALRED EDO R DE 1989 (PORCENTAjES)

Pais [ndustria m anufac ture ra Com ercio Servicios

Guatemala 28,2 39,6 17,6


EI Salvado r 22,9 48,9 17,9
Honduras 23,3 46,3 16,9
N icaragl l3 18,4 44,4 22,5
Costa Rica 29,8 35,9 16,7

FUENTE: Clmtmambim en cifms J980-1992. FLACSO 1995 , pag. 125.

358
CUADRO 15
PRINCIPALES INDICADORES DE SALUD YNUTRICION . 1988-1990

Disponibilidad Disponibi lidad


Pais de proteinas de calorias

Guatemala 54,9 2254


EI Salvador n.d. n.d.
Honduras 54,0 2210
Nicaragua n.d. n.d.
Costa Rica 63,9 2711

FUENTE: Cenlroamenca en cifras 1 980~1992 . FLACSO 1995, pag. 135.

CUADR016
ESTADiSTICAS DE LA SITUACION DE VIVIENDA EN CENTROAMERICA. 1960-1990

Promedio del tamana de las viviendas


Niimero de Numero de Porcentaje de
ocupantes habitaciones viviendas sin
Pais 1960-1986 1970-1982 electricidad

Guatemala 5,2 2,4 72


EI Salvador 5,0 1,5 66
Honduras 5,7 2,4 75
Nicaragua n.d. 2,2 59
Costa Rica 4,7 4,0 31

FUENTE: Centroammca en eifms 1980-1992. FLACSO 1995, pag. 147.

CUADRO 17
PERFIL DE LA COMUNICAC10N EN CENTROAMERICA
(POR ('ADA MIL HABITANTES)

Pais Telefonos Autom6viles Televisores Radios


1986-1988 1985-1989 1990 1990

Guatemala 16 n.d. 52 65
EI Salvador 27 28 90 404
Honduras 14 9 72 385
Nicaragua n.d. 14 62 249
Costa Rica 143 53 149 259

FUENTE: Centroammea en eifras 1980-1992. FLACSO 1995, pag. 147.

359
INDICE CUADROS

CUADRO 1
Superficie total de los paises centroameriutnos
principales camcteristicas 1993 ................. "...... .
)1StlS ... .... .......... ........ 354

CUADRO 2
Crnnj)Orlamiento de los principales indicadores vitales / 990- 7995 .. ... . .......... 354

CUADRO 3
Poblaci6n economicamen te activa. Proyecciones j 990 ................. .. ... .... ... ... .. 355

CUAD RO 4
Prod-uclo intemo bruto 1992 ............. ... .. .. ................ ...... ..... .... . _.. ............. 355

CUADRO 5
Participacion de diversos sectoms en el PIB 1992 .......................... ... ..... ...... 355

CUADRO 6
Produccion agricola 1992 ........................ .................. ............... .... ... .. .... . 356

CUADRO 7
Expoltaciones de bienes 1992 ..................... ...... .............. ..... .............. .... .. 356

CUADRO 8
[",porlaciones de bienes 1992 ........................ ...... ............ ....... ......... ......... 356

CUADRO 9
Deflcitflscal .. ......... ....... .. ........ ... ............ ...... .. ....... ........ ........ ................ 357

CUADRO 10
Deuda extema 1992 .......................................... ................ ... .. ................ 357

361
CUADRO II
Poder adquisilivo de las monedas cenlroamericanas 1980-1 992 .. ......... ......... 357

CUADRO 12
Evolucion de la polmaa 1980-1985 ....... ....... ............... .......... ..... .............. 358

CUADRO 13
Informalidad urbana segUn
calegoria ocupacional alrededoT de 1989 ..................... .............................. 358

CUADRO 14
Informalidad uTbana segUn
seclores produclivos alTededoT de 1989 ..... .............. ........ .......... ................... 358

CUADRO 15
Principales indicadores de salud y nulricion 1988-1990 .............. ................ 359

CUADRO 16
Estadisticas de la situaci6n
de vivienda en Cenlroamirica 1960-1990 ..............••.................. .• .. .. .......... 359

CUADRO 17
Perfil de la comunicaci6n en Centroammca ............ ... .. .. .. .... ... .... ..... ........... 359

362
INDICE DE GRAFICOS

GWICO 1
Ctilculos poblaci6n indigena. Momento del primer contacto ....... ..... ................ 79

GRAFICO 2
Labores de trigo 1670. Corregimiento del Valle de Guatemala .... ..... ................. 87

GWICO 3
Gentroambica. Poblaci6n tributaria cerca 1770 ...... .... .. ................ .. .... .... .. . 113

GWICO 4
Evolu ci6n poblaci6n centroamelicana 1820-1870 ........ ... ........ ............ .... .... 115

GWICO 5
Inversion direcla norteamencana en Cenlroamerica ........................... ... ....... 198

GWICO 6
Valor real de las exportaciones. Centroamhica .................. _.. .. .. ............ ........ 208

GWICO 7
Crecimiento de la poblaci6n. A nos especificos ....... ................... ... ....... ......... 229

GWICO 8
Balance comercial. 1979-1983 ......... ... ............... ... ............... .............. ...... 283

GWICO 9
Deficit gobienws centrales .... ................ ........ ......... ......................... .. ......... 284

GWICO 10
Total del comercio dentm del MeGA. 1992 .................. .... ............ ... ..... ....... 291

363
INDICE DE ILUSTRACIONES

i LUSTRACION 1
Sitio arqueo16gico Severo l.edezmCl, Costa Rica ..... .. .. ......... ..... ........... ... ........ 23

i LUSTRACION 2
Templo r. Tikal . .... .. .. ....... ..... ..... ... .. .. ..... ... .. ..... ............ .. .. ... ....... .. ............ 30

ILUSTRACION 3
Jeragliflcos mayas ........ ..... .... ........ .. ......... .... ....... ..... ........... ... ............ ........ 31

ILU STRACI ON 4
Estela 31 de Tikal ............................. ....... .. ........ ................ .. .................... 33

IL USTRACI ON 5
t:t juego de pelota. Capo." .. .. ........ ...... ......... ..... ....... .. ... ....... ....... ........ ..... ... 34

i LUSTRAC ION 6
Templo de los Guerreros. Chichen f tui .... ............... _.. ....... .. ..... _.. .. .. ... ........... 36

I LUSTRACION 7
Petraglifo de la Zona Cent ral ................ ... ...... .... .... ..... .... .......... ... .......... .. ... 41

lLUSTRACION 8
Pantas de proyectil .................. .......... ...................... ......... .. ........ .............. 52

ILUST RACION 9
F,scalinaia en el Silio Guayabo, Costa Riw ........ ......... ... ................ ....... .. ..... 57

ILUSTRACION 10
7cl1nbor de 1Jlrulera . ... .... _.... .• .... .............. ..•................. ... ..... _... ...... ... ......... 58

l LUSTRACION 11
Batalla de liscuinlla ... ... ......... .. ..... ....... ... ." .. ........ .. ........... .. ....... . _.......... . 68

364
ILU ST RACION 12
Principales flsentamienlos. RPino de Guatemala ....................... ... ................. 82

ILU ST RACION 13
Feria de Por/obew ......... ................... .. .... . ..· ........ · .. ·· .... · .... ·.. ................. 89

IL USTRAC ION 14
Cacaotales de Mati na ......... ,.. ....... ................ _..... ................. . ............ ..... 92

ILUSTRACION 15
Universidad de San Carlos, Guatemala .............. .... .. _................................ 101

ILUSTRAC ION 16
Construaion de fa Catedral de Santiago, Guatema la ............... .... .............. 102

II.USTRAC ION 17
Hacienda de anil ............................. ..... ................ ................................. 117

I LUSTRACION 18
Escudo del Cansulado de Comereio ............................. .... .................. .. ...... 118

ILUSTRACION 19
Escudo de la Repu,blica FederaL de Catiroambica ........ ...... ................... ...... 135

ILU STRAC ION 20


Camino, hacia 1839 ................................................................... .. ......... 141

ILUST RACIO N 21
Carretas lransportando cafe .................... ..... ................ ... .. ............... _.... ... 145

ILUSTRAC ION 22
7rapiche de azucar ...................... ............. _... ......... .......... .... .......... .. . _...... 147

[L USTRACIO N 23
Belice, 1877 ....... ..... ......... ......... .. .............. ..... ...... ... ............. ....... .... ...... 14 9

ILUSTRACION 24
Pmcesion de viernes san to en Costa Rica ..... ...... ... ... ........ .......... ..... .. ......... 155

[L USTRACION 25
Tiendas cnrnerciales en San Salvador ....... .... .......... .. .... ..... . ..... . 0 ................ 159

IL USTRACION 26
Enln"J2.."a de cafe en lafinca Giusliniani .... ....... ...... .. ............. ........ ... ... ........ 165

365
ILUSTRACIO N 27
Ferrocarril de la IRCA ...... ..... ..... .. ............................................... . ... ... . 170

lLUSTRACION 28
Trabajadores bananeros en ia Parismina Banana Company...................... .. 174

ILUSTRACION 29
Deposito de azu car dellngenio San Antonio .......... .. .............. _.................... 178

ILUSTRACION 30
Pueblo minera de San Juanata .... ........ .. ....... ........ ... ............... .. ................. 180

lLUSTRACIO N 31
Templa de Minerva, Guatemala .......... ...... ................ .......................... ..... 182

lLUSTRACION 32
Estatutas de la Saciedad de Artesanas de Guatemala ................................. . . 187

ILUSTRACION 33
Augusto C. Sandina...................................... .. .......... ............................. 201

ILUSTRACION 34
Sandina el dia de su boda can Blanca Arauz .............................................. 202

ILUSTRACION 35
Plantacion de a/godon en Chinandega, Nicaragua ........ .... .... ....... .. .. .......... 218

ILUSTRACION 36
Estudianles costarricenses protestando contra ALCOA ...... ... ... . ............. 232

I LUSTRACION 37
Mujeres indigenas de Chimaltenanga .............................. ........ .... .. ............ 236

ILUSTRACION 38
Vivienda de sumos, en La selva del Caribe de Nicaragua ,_ ................... ... ....... 241

ILUSTRACION 39
Juan J asi Arevalo. Presidente de Guatemala ........................................... .... 247

ILUSTRACION 40
Mujeres salidarias con la huelga bananera. 1954 .............. .......... ............... 252

ILUSTRACION 41
Sandinistas ent1'ando en Managua ... ............. ...... ............ .... .. .................. 264

366
ILUSTRACION 42
Militares patrullando en un barrio de San Salvador .... ........ ...... .. ..... .......... . 269

ILUSTRACION 43
Prisionero capturado por las patrullas civiles, Guatemala .............. .............. 271

lLUSTRACION 44
Reunion de Presidentes. Guatemala, 1987 ...... ......... ........... ...... ..... ............ 276

ILUSTRACION 45
Barrio pobre. Zona 3, Ciudad de Guatemala ................ ............. ...... ......... .. 286

ILUSTRACION 46
Campamento de refugiados salvadoreiws en Honduras ...................•... .. ....... 296

lLUSTRACION 47
Miskitas navegando sabre el rio Grande de Matagalpa ................................ 302

367
INDICE DE MAPAS

MAPA 1
Ubicaci6n del iirea en estudio .................................................................... J3

MAPA 2
&lieve de Ami/1ca Central (simplificado) .................................... .. ............... 16

MAPA 3
Forma ciones vegetates de America Central ................. .. .... ................ .............. 18

MAPA 4
L as leml)mnas comunidades agticolas 'YlW)l(Lj ........... ••• •...... . ... . .. ••• •••............ 26

MAPA 5
Ubi cacion de centros mayas cltisicos ...... .... ................. ................ .. .............. 28

M APA 6
Estados mayas lardios ....... .. ................ .... .. .................................. .... ... ... .... 37

MAPA 7
Princil)ales -regiones y silios arqueoLOgicos en [(I, Zona Central .... ,.. ... .•. ........... .. 39

MAPA 8
Distribuci6n de las jJrincipales lenguas
indigenas en ta Zona Central y su vecindad ................. ... ....... ...... .... ........ .. .. 45

MAPA 9
Prinl..'ipales lendencias migralorins
del Norte de Mesoamerica a La Zona Central .............. ....... ............. ........ 46

MAPA 10
Provincias indigen as y sus prin cijudes centros politicos .. ..... ... ........ .... ........... 48

MAPA 11
Print:ijJaLes sitios arqueoLogicos de La Zona Central .. .......... .. ..... ........... ...... ... 54

MA PA 1 2
Zona Su)": ocupacion en vispera de La conquisla es/Janota .............. .. ............... 60

368
MAPA 13
Entradas eSjHdiolas temjJmnas. .............................................. . .... 66

MAPA 14
Reina de Guatemala: jnincipales rulas de rornercio ..................... . . ...... 91

MAPA 1.')
Capitan/a General de Guatemala. PrincijJaI(~s anlras jnnductiDoS .................. 95

MAPA 16
Onlenes rel£gios{fs y misiones ... ...... .. ............... , .. ................... ... ................. 100

MAPA 17
Situaci6n estrategica de Cenlroamhiw .... .... ..... .... .................. .. ....... ..... .. ... 105

MAPA 18
Organizacion politico-administrativa de Centroamerica 1785-1821 ............... 124

MAPA 19
Republica Federal de Centroammca. 1823-1838 .................. .. ....... .............. 136

MAPA 20
Disoluci6n de la Republica Federal ....... ........... ..... ....... .. .. .. .. ..... ... . ..... ...... . 138

MAPA 21
Zonas cafetateras, Jerrocarriles Y !JUl.>rtus hada J 900 ...... ............... ........ .. .... 161

MAPA 22
Areas de plantari6n bananera en el Caribe. 1870-1945 .................. ......... .. . 171

MAPA 23
PTesencia norteamericana en Centroamerica .......... ... .. ... .................. .. ........ 203

MAPA 24
ATea de cultivo del algodan. Decada de los anos 1960 .... ...... ........ ............. .. 127

MAPA 25
Rerlucci6n del area boscosa ....... .. ............. ... ... ... .... .... ... ... ..... .... .. .... .... ..... .. 221

MAPA 26
Plleblos aborigenes ...... ..... .. ...... ............... .................... .. ........ ...... ..... ... ... . 243

MAPA 27
Centroamirica. Zonas de conJlicto 1984 .. ......... ... .......................... .. ........... 265

MAPA 28
M igraci6n y refugiados en Centroame-rica. Diciembre 1983 ... .... ..... ............... 295
INDICE DE RECUADROS

HISTORIA Y ARQUEO LOGiA .................. .. ......................................................... ... 23

LA ARQUEOLO c i A MAil< ... ... ....... ............... .... ....... ..... ............... .. ..... ...... .... .. ....... 24

INVESTI CACION ARQUEOLOC ICA EN LA ZONA CENTRAL ................................... 40

APORTE DE LA LlNCu i sTICA .. ... .......................... ... ............................................. 44

INVESTIGACI ON ARQUEOLOCICA EN LA ZONA SUR ...........•.........•.. ..•................. 5 1

EL AI'ORTE DE LA ETNOHISTORlA .......... .. ........................ .............. .... ............ .. ... 6 1

ESTRACOS DE LAS EPIOEM lAS ............................................................................. 78

E L PROBLEMA DE LOS IADINOS .... ........• .. ............. .. .. .......•................................ 116

LA ILUSTRACJON ................... .........................•...............•.................................. 126

LA CUERRAANTIFlLlBUSTERA ..... ........ ........ .... .. .. ..... ....... ....... ........ ... ... ......... .. .. 142

ENTRADA DE CARRERA A LA CIUDAD DE GUATEMALA .. .... .. ............ ... ............... 15 1

TRABAJO FORZADO EN GUATEMALA ..... ... ......... ..... ......... ..... .. .............. ............. 168

LA VIDA EN LA PLANTACION BANANERA EN LA L1TERATURA .......... ............... ... 175

E L CONTRATO SOTO-KEITH ..................................................................... ........ 199

LA H UELCA BAN AN ERA DE 1934 EN COSTA RICA .......................... ... ............ .... 207

LA CUERRA DEL FUTBOL ......... ......•. .......... .... ............. .. ... •.............. ....• .... •........ 25 1

OPERACI ON MUERTE AL SOMOCISMO .. ...... .......... ......•............................... ...... . 260

ACUERDO DE PA Z .............•..... .. ......................................................................... 277

RICOBERTA MENCH U . PREMIO NOBEL DE LA PAZ .. ...... ........ ... .. .... •....•..... ...... . 301

370
INDICE GENERAL

PREsENTAcrON ........................................... .. ....................................................... 7

AGRADECrMIENTOS ............. ...... .......... .. .... ..... ...... .............................................. 9

INTRODuccrON .................... ............ .. ....................... .. ...................................... 11

EL ESPACIO CENTROAMERICANO ................................ .. ...................................... 11

AMi:R ICA CENTRAL: PUENTE E ISTMO ................................................................ 14

U N lDAD Y DIVERSlDAD ........................................................................................ 15

CAPITULO r
HISTORIA ANTIGUA DE AMERICA CENTRAL .............................................. 21

HrSTORlA ANTICUA DEI. MUNDO MA'tA ............................................................. 22


Sociedades cazadoras, recolectoras
y agricultoras incipientes (pobLamiento -JOOO a.c.) ...................................... 22
Aldem de agriwltmes (1000 a.G. - 300 a. G.) .............................................. 24
Surgimiento de la civilization maya (300 a.e. - 600 d.C) .. .... .. ... .. ... ......... ... 25
Organizaci6n social ............. .... ...... ... " ................................... ...... ... ........... 27
Produccion y comercio ................................................................................ 29
Religion ..... ........... ... .... .......................... .. ......................... ... .. ... .. ... .. .. ... .. . 30
FLorecimiento de La civiLizacion maya (600 d.G. -1200 d.C) ........................... 32
Org;anizacion politica ................................................................................ 32
Coiapsa maya ... ... ...... .. ................ ... .... .......... .. ......................... ..... ..... ....... 35
Los estados mayas lardios y la invasion eurojJea (1200 - 1542) ....... ... .. ........... 35

LA ZONA CENTRAL: RECIONALISMO E INTERACCION ........ ........ ...... ................... 38


Hisloria temprana de la Zona Central .... .............. ... ... ................... ............. 40

371
Dl'sanv//'o rt,' la co mj)iejiliad social ..... . ....... 40
1-. t;n el Ii/oral Par{fitO yen la lY'giull de las (ierras alias oa:identales .... ..... 40
2-. En las liPrrrls allas centrales )I pI '/Ioroeste. ............. .. .. .. ................ 42
3-. En La costn noreste )' Las tierras allas orientales ..................................... 43
4-. En La costa padfica de ,,\!imragua .... ...... ........ ..... .. ..... . ......... .. 44
Geopolitica dr' la Zona Central en el mio J 500 d. C. ...................................... 46
Patrones inst£ lll(iol1ale.~ .. ................... .... ........ . ...... 47
Pmducciun lowl J red region al de inl.prrmnbio...... ................. ... . ..... 47
Instiluclones jJoliliras y soriah's inrligf 17as .......... .. ....... ........................ 49
PrclctiC([S religiosas Y ('(Jsmovision ..... .. ............ ........... 50

EL SUR DE AMERICA CENTRAL .......................... ............................. ............ ........ 50


La soriedad cOllHtn itaria apmpiadora....... ........ ................... ... ... ........ ... 5 J
La sociedad tribal j))vduclOra (1000 fl. C. - 1500 d. C.) ........... ... ..... .. .. 53
BaLance de La hislmia antigua ......... .. ............................... .............. .. 59

CAPiTULO II
EL REGIMEN COLONIAL .................................................................................. 63

LA CONQUISTA ESPA:'iOl~\ ................................................................................. 6~


t.x jJeriiciones ...... ...................... ....................................... ............... . ...... 64
Conquisla de los len-ilorios de Guatemala y El Salvador....... ... 67
Conqu isla del territorio honrlurerio ... .... ...................... ..... . . . . ....... 69
Conquisla lardia deLterrilorio de Costa Rica .............. .. . ............... ... .............. 72

CO:--JSECUENC IAS DE LA. r:ONQCISTA ................................................................... 75


fmtJosicion de La encomiencia ................ .................................................... 75
Esclavitud indigena ......................... .. . ... ......... ...... .... ..... .. ... ... ............ 76
Decrecimiento de fa jwbfacion ............ .... .. .................. ................... ... ............ 77

70
(';ONSO I .lDACION DE LA C:O NQLT ISTA ..................................................................
Ji'·u.ndaci6n de la Audienria de Los Confines ................................................ 79
Reducri6n de los indigenas pn jl0blados .... .. .................... .................. .......... 80
Imj)(lcto de las Leyes Nuevas y fa Reforma de Cerralo ............................ ......... 80

TIERRA: RECVRSO VITAL ..................................................................................... 8 1


Patron de poblmniento iberico .......................... ....... ........... ...... .... ........... .... 83
Propierlarl individual de La Lierm ........ . ................... .......................... .. .. 83
Comunidad indigena. .......................... ............. ...... ........... ...... ............ ... 84
Propiedad erlesiastica ................. .. ... .. ............. ........ . ............................ 85
Cofradias ............. ... .................... ....... ............. .. .......... ........ ............ ...... .. 85
Capellanias .......... ...... ... .... ....... ... ... ..... .................................................. 85

372
EXPLOTACI()N DE 1./\ MANO DE OKRA I:-..IDICENA ................... . .... ...................... 8()

PRODuccrON Y C01\lERCIO ............ ..................................................................... 88


Cultiva )1 tomercio del meao ................... .. ... .................................. ........ .. .. 90
Cullivo y romenia del ani!.. ............... .............. .. . ... ............. 92
Dims artividades agmpecuarias ...... ... .. .............. ...................... ............ 93
ivlinerfa de plaIa .. .. ......... .. . .... 93
Crisis del tomercio alliintito } sus rejJerrusiones en e en/roamer/ca .. .. . 94

GOBIERNO, PODER E IDEOI.OCIA .................. . .......................................... .......... 96


Instilllciones dp. gobierno ....... .......... .............. ............ . .. .... 96
A udiencia de Oualnnala .................................... .................. ....... .............. 97
Gubernadunes, alealdias ma)10reS): (orregimienlos ....... .. ............................... 97
Gabildos................................... ... .. .. .. .. ................ ................ .. ............ 98
Iglesia )1 dorninaci6n...................... .... ... ................. . .... .. .. .. ... .... .. 98
Iglesia y control social................... .............. .. . .. ... 102
Religion formal y religion pO/lUlar ........... ... .. .. .. ......... .................. .............. 103

GUERRA Y PODER ...............................................•.............................................. 103


Problp.ma rie los ten'itorias frontnizos ... ... .... ................ .. ................. .. .......... 104
Aspectos politicos riel problema mililar......... .. .. .. .... .... .. ...... .. .... ... ........... 106

CAPiTULO III
CENTROAMERICA: DE LA ILUSTRACION AL LlBERALlSMO .................. 109

POBl.AClON Y SOCIEDAD ................ •....•....•... .•.... •... .•... ................. . ... .•.... .... .•.. ... 110
Esjmiioles a Mantos ............ ... ...... .'........................... ... ............... .... ... 11 ()
Indigenas .... .. ... .. ... .. ............... .......... .. .............. ..... ... ..... .. ...................... 111
Negros .............. .... .. ... .. .. .. ... ... .............. .. .. .............. ....... ..... .... .......... ... 113
l~adinos ............................. .... .. .. .. .. .......................... ............. . .. ... 114

ESPECIALlZA.CION PRODUCTIVA REGIONAL ....................................................... 115

AliGE Y CRISIS DEL COMERCIO ........... .. .. ......... .•.............. .. ... .• ... .•............... I 19

RUORMAS BORBONICAS .............. .• ................ ........... .... ....•.... . ......................... 120


COJllunimciones )1 comercio .................. .... ..................... ...... ..... .. .. .. ... .. ... .. 121
Poder y jJrivilegios de la Iglesia ......................... ............................. .. .......... 121
Productores del interiorjirmle a grandes comerciantes .... .. ....... .... .... .. .... ..... .. 122
Sistema de intendencias ................................... ......................... ............... 123
Reforma fiscal .................................................... ...... .. ............... .... ........ 123

373
DeJensa ndlitar ................ ........... ............... .. ....... .. ................................ 124
Balance de las ReJormas Borbonicas .. ..... ................. .. ............... ... .............. 125

INDEPENDENCIA DE CENTROAMERICA .............................................................. 125


Movimientos antijiscales y anliespaiioListas ........ ......... ..... .................... 125
Impacto de la llustraci6n ................................. ................... ........ ............ 127
Crisis politica en Espana .................. ..... ........ ......... ................................ 127
Rebelion de R iego .................................................. ... .... ......... .... ..... ..... .... 128
Aconlecimientos de Mexico .......... .... ........ ... .... .... .... ..... .... ... ... ....... ........... . 129
Crisis de La -independencia en Cenlroamerica .............. ................. .... ........... 129
Nolicia, de La IndejJertdencia en Las provinciaJ ........... ... .. .............. ........ ....... 730
Los conjlicios emelgen ......... ...... ........... .......... ......... ....... ... .. . ... ... .......... .. . 132
Anexi6n a Mexico ....... .. ......... ...... ..... .... .. .......... .. .... ... ....... ...... ......... ....... 132

LA REPUBLI CA FEDERAL DE CENTROAMERI(".A (l823-1840) ............ .... ........... 133


Morazan: figu,ra trtigica ..................................... ............... .... ...... ... ......... J36
Fin de La Federacion ............................... .. ............. .............. .. ..... ..... ...... 137

ECONOMIA YSOCIEDAD 18 l 0- 1870 ........ ............ ........... ................................... 139


Clima para La inversion ..... ..... ... ........... .. .............. ... .... .............. .......... .... 139
Trans/1m'les ... .. ....................................... ... ............. .... ............................ 140

PROD UCTOS ALTERNATIVOS ........... ............ ........ .............. ............ ........... ........ . 143
Ani! ..................................... ..................................... ................. .......... 143
Grana 0 cochinilla ....... ....................................... .... ............. ................... 144
Cap .................... ... .......... .... .... .. ............ .. ................ .. ...... ........ .. .......... 144
Ganaderia ............ .. ............. .. .... ... .... .. ............. ....... ..... ........... ..... .... ..... . 146
C;aiia de aZ'ltcar .............. .... ...... ...... ............. ............ ... ... ................. .. .. .... 146
Oro y plata .......................... ... .... .... ............ ................................... ........ 147
H 1tle ................................... ....... .. . ............ ... ............ ... .... .. ... ........ ........ . 147
Madera ....... ..... .. ... .... ..... .......... ........... ... .......... ........ ...... ......... ........ ....... 148

ACTIVIDADES ECONOMIC'A S Y PAPEL DEL ESTADO ....... ...... ............... .... ............. 148
C01nercio exterior ............. ....... .................................... ... ............. ............ . 148
i 1njJarlaciones y /erias ............ ... .... ... ................ .. ......... ... ............. ..... ........ J48
Recaudaci6n de impuestos .... .......... .. .......... ... ... ....... ........ ... .. ... ......... .. .. .... 150

SOCIEDAD Y POLlTICA 1840-18 71 ... ........ .......................................................... 150


Polilicas de lenencia de La tierra ................... .... .............................. .. .... ..... 153
Ataq1te al poder de la Iglesia ........................... .......... .... ...... ..... .... ............. 153
Seculal'izaci6n y contrao/f!nsiva clerical ..... .. ..... .. .... ........ .... .... ... ... .............. 154

374
UNA SOCIEDAD POR TRANSFORMAR ................................................................. 154

UNA SOC IEDAD POR REDEFINIR: MESTIZAJE E IDENTIDAD ETN ICA .. .. ................ 156

CAPiTULO IV
AUGE Y CRISIS EN LAS REPUBLICAS AGROEXPORTADORAS ................. 1 57

AUGE DE LA AGRICULTURA DE EXPORTACION ........... . ...................................... 157


Comercio de exportaci6n .... .. ..... .. ... ... ... ............. .. ........... ..... .... .. .. .. .. .. ...... . 158
Comercio de importaci6n ...... ........ ................... ................... ... ............ .... 158
Inversion extranjera y capital local .... ..... .... ............. ........ ... ... ... ............ ..... 159

PRINCIPALES PRODUGTOS DE EXPORTACION ........... ... ...................................... 160


Cap: pulpa dulce, grano amargo .......... ..... ..... ....... ................ ......... ......... . 160
Sistemas productivos ........... ................. ..... ...... .. .............. ....... ...... .. .......... 161
Transformaaones urbanas .............................. ................. ...... ...... .... .. .. .. .. 161
Modificaciones en la tenencia de la tierra ....... .. ... ............ ..... ................... ... 162
Concentracion de la propiedad ......................... .. .... .................. ................. 164
Organizacion lecnica y social del trabaja .......... .... ........... ...... ... .................. 164
Recoleccion y procesamiento del cafe ............ ... ... .................... ..... ... .. ........... 165
Obtencion de trabajadores ................................ .. ................................... ... 166
Trabajo familiar ....................... .... .................. .... ... .. ... ..... ... .................... 167
Cridito, comercio y capital ............. .... ............. .... .......... ..... .... ................... 167

BANANO: FRUTA AJENA ......................... ..... ......... ....... .......................... ..... .. ...... 167
Inicios de la produccion bananera ........ .............. ................. .... .................. 169
Rieles y exportaciones ............................................................. .................. 170
El capital en el negocio del banana ................ ... .................. .......... ............. 171
La plantacion bananera y sus seroicios ................................. ..................... 172
La actividad bananera y su gente ......... ............ ... ............... ... ...... ............. 1 73
Las compaiiias bananeras y los productores locales .. ......... ...... ..................... 174
Comercializacion ................ ........... ..... .. ............................ ... .... ................ 176
Significado de fa actividad bananera ........................................................ 177

OTROS PRODUCTOS ...................................... ....... .. . ... . ....... . ........... .. ................. 177

EXPLOTACION FORESTAL ... . ....... . ... . ................ .. .......... .. .. ... ...... .... ..................... 178

ACTMDAD MINERA ...................... .. ....... .. ............................... . ...... .. ... .. ............. 179


La explotacion minera en Ha nduras ..................................... ..................... 179
Actividad minera en Nicaragua ..................... . .... ...................................... 181
La explotacion minera en Costa Rica .. ................ .. ................ ...... ............... 181

375
SOCIEIlAll ....................................... .. ... ,"'''''" .. ""'," '"''"",,,.,,,,''''' ."., ,,.,',, .. ,,. 183
Obrpros, artesanos y proletarios dp enclave .. ........ ........ .. .............. .... ......... 184
J.enguaje de clase, identidades)' cullums ..................... ............................ 184
Organizaciones y movilizaciones ............................................... .............. 186
Politiea, ideologiasy !Jartidos "."""" ".",,",,' """""""" """""".""", """ 189

SECTOI{ES «OLV10ADOS,) ......................... ........................ ... ............. ....... .......... 190


Mujeres ................... ............................ _.. ................... ...... .. ......... ....... . 190
[Jobla cion negTa ................. ... .. .................................. ............................ 191
indios y camjJesinos ................ ..... ............ .................................... ... ... ..... 192

LIBERALISMO Y POOER POLiTI CO ", ". "" "'" "., " .. " .. "'" " ... " .. "". " ... " .. " .. , " .. """ 193
El ideario liberal: orden y progreso ................ ........ .......... ............ ..... .. ........ 193
Orden sin de·mocracia ................................................... ........................... 194
Re/o1'lna jUTidica ... .............................. ..... .. ...................... .. ......... ....... . J 94
Construction de los estados naaonales . ....... .......... ... ........ .................... ..... 195
Conjlictos inlerregionales . ............ ......... ..... ... .......... ....... .... ... .......... ...... 196
Nuevas intenlas unionislas .... .................... ................... ................ ... ...... 197

D E LA HEGEMONiA I NG L ESA A LA NORTEAMERICANA .... " ....... " ............ " .. " .. .... 198
inVl!TSion norleamericana ')' -regimen concesionmio ....... ... ... .... .... .... .......... .... 198
lnleroencionisma de los Estados Unidos .......................... .. ........ ......... ........ 1 99
Polilica exterior de los Eslados Unidos ................................ ........ .... ....... ..... 200

CRISIS EN LAS REI' U BLICAS AC ROEXPORTADORAS ... " .. " ............ " ... " .......... . " ... 204
Crisis social y politica ...................................................... .. .................... 205
Salida de la depresi6n "" ....... " .. ""." ..... " .. " .. " .... " .. " .. " .... " ......... " ......... 208
Consolidacion del autoritarismo ...... ... ..... ..... ....... ....... .. ............... ...... ... ..... 209
EJectos de la Segunda Guena Mundial."" ...... ... " .... " .. ......."" .. " " " .... ,, .. ,,' 210
Desafio ala dietadum '" """"" ...... "".""."" ••. ". " .. " .. " .... " ." ... "." ".,, .... 211

CAPiTULO V
DE LA POSGUERRA A LA CRlSIS"" .. " .. "". "" """" ." .. " .. ""." .. "" .. " .. ,, ........ 213

ECONOM iA ................ ,....... ,... ,... ,....... ,... ,... ,..................... " .. ,..... ." .......... ,.. " """ 214

Los AN OS DE LA EX PANSI ON ACELERADA .............. "" """, . " .. . """"""." .. " .. ,, .. , 21 4


Prodllccion agro/Jecuaria ...... ......... .......... ....... ....... ... ............... .. ............... 215

CULTIVOS DE EXI'O RTACI ON TRADl CI ONALES .. " .. " ...... " .... " .. "" .. ""'''" .. ",, .. ,,' 21 5
Caje " ... .,.. ,' ,........ ,... ,', ...... .. ,... ," ,............. ,,... ,,.... .....", ... ,' ", .. ,. " .. " .. ,",.,' 215
Btmano .............. " ....... " .. " " .. ", .... " .. ", ... " ............... " .............. " .... ,,"" 216

376
NUEVOS PROOCCTOS DE EXPORTACI(} '; .. .................... ............ ....................... 2 17
Algodon ................. ................................ .. ................................. .... ..... 217
Caiia de azti.car . ..........................•........ .. .. ... .. .. ... ...... .. ........ .. ........ 219
Ganado ............................... .............. .. ..................... ........ ............ 220
Consecuencias sociales ....... .... .. ......... ............. ............ ..... ... .............. ....... 220
Desarrollo industrial .............. ... .. ... .............. ................ ... ....... .... ...... ..... 222
Nlercado COlllun Centroamericano ................ , .. ................. .. ... .. ........ ...... .. 223
Desa'rmllo de ia inLermediaci6n financiem ............. .. .. ............ .... ... .... ........ 225
Bancos centrales .............................................. .... .. .. ... .................... .. ..... 225
Bancos conler(.iales ......................... ... ............... ... ..... .. .. .. .... .... ................ 225
Olms intermediariosfinancieros ............. . .. .. ................... . .................. 225
C'fi?dito bancalio ........................... .. " .. .. ............ ..... .... .. .......... ... .............. 226

Los ANOS DEL CRECI M IENTO PERTURBADO ..................................................... 226


Signos conlradictorios ..... ... ..... .............. ............. .. .................. ... ........ .. .... 226
La inflacion y sus eJectos . .......... .... ... ... .............. .... .. .. ... ......... ..... .. .. .. 226
Repunle de las ex/Jorlaciones .............. .. .. ................. ................ ... ... .......... .. 226
DelerioTO del Mercado Conntn .... ........... ... .............. .. ..................... ... ........ . 227
Deuda extern a ........ ..... ................. ..... ............. .... ..... .......... ............... ...... 227

SOCIEDAO ............... ........................................ ........................ .......................... 228


Poblaci6n ........................... .... ........ ..... ... .... .. . ........................... .. ........... 228
Diferenciaci6n social ... ......................................... ... .... . .. ............ .... ......... 229
Movil1z-ien los sociales .............. ............... ,............... ..................... .... ......... 230
Problematica etnica ................................ ... .... .. ... .. .... .... .... .... .. ..... .......... 232
El Salvador: ift invisibilidad indigena ...................... ..... .............. ........ ...... 233
Honduras: "mosaico » sociocultural .... .. ......................... .. .. ........ .. ..... ... .. ... 233
Costa Rica: conjlictividad elnial wcaliwda ......... . .. ................... 234
Guatemala: una problemdtica etnica compleja .................. ............... .... ... .. .. 235
La era de Ubico.............. ...... ... .. ....................... .... ...... .. ....... .... ...... 235
I ,ft era TP.1Joi1.u:io11.ruia ............ .................. ..... ............. ... ... ................. ...... 237
I,as comunidades se trans/onnan ............... .. .. .. .............. .. ............. ..... .. .... 237
Un camino de colisi6n ........ .......... .... ........ ... ... ..... ....... .... .. ..... ........ ... .... ... 239
Nicamgua: pais de contrastes ................... .. .... ............... ... .. ............. _... ..... 240

ESTADO Y RECiMENES POliTICOS ............. .. ...................................................... 242


Inlenlos rejonnistas .............................................. .. ............. ...... ... .......... 242
EITeformismo en Costa R ica ...................... ....... .. ................ ... . .................. 244
Guatemala: la revoluci6n en marcha .......................................... .... ...... ..... 246
La transicion oligiirquica en El Salvador ........... ............................ ...... ..... 248
.H onduras: Teformismo "liberah) y re!ormismo mililar ................. ......... ........ 250
La dinaslia S01JlOcisla ............... . .. .................................. ................ 254

377
Reacdon a los procesos reformistas ....... ...... ........ ..... ....... ........ .. ...... .. .... ... ... 255
La contrarrevoluci.on en Gua temala ... .... ..... .. ...... ... ...... .. ....... ... ................. 256
El Salvador: hacia la guerra civil ..... ........... ..... .... ................ ........ ........ .. ... 258
El dcrrumbe de la dinastia somocista ......................................................... 258

CAPITULO VI
EL Pi\SADO RECIENTE ..................................................................................... 263

CRISIS POLiTICA ................................................................................................ 264


Naturaleza de La crisis ............................................................................. 265
La crisis: raices comunes y conlenidos distintos ..................... .. ....... ............. 266
Transiciones estatales .... ..... ... .... ..... ... ..... .... ............ ........... .... .................. 267
Transiciones politicas bajo hegemonia militar ....................... ... ........... ... ..... 268
El caso salvadoreno .............................................. ... ........... ..................... 268
El caso guatemalteco ................... ..... .. ......................... ..... ... ........ ... .... ...... 270
EI caso hondurnio ................................................................ .. ................. 273
Una excepcim: Costa Rica .................................. .. ................................... 275
Nicaragua: paradojas de la transici6n ....................................................... 278
EI triunJo de La necesidad .................................................... .. ................... 281

ECONOMiA: ,NUEVOS RUMBOS 0 CALLEJON SIN SALIDA? ................................ 281


Crecimiento conjlictivo ............................................... ...... .. .... .... .............. 281
La crisis, sus detonantes y sus consecuencias ...... ..... ......... .......... ................ 282
Los programas de estabilizaci6n ........................... ... .................................. 287
EI ordenamiento de las Jinanzas publicas .............. ....... ........... .... ............... 287
&stricci6n de la demanda externa ............................................ ........ ......... 288

HACIA LA APERTURA DE LAS ECONOMIAs ............................. .. .......................... 290


Del pmteccionismo industrial a La apertura ................................................ 291
Centroamerica y La iniciativa para las Americas .......................................... 292
Entre el pesimismo y la esperanza ........................... ............. .... .... .. .. .. 293

SOCIEDAD ...... ........ .... ... .. ....... ............................................. .... ..... ..................... 294
La pobLacifm y sus movimientos ............ .. ............. ........................ ..... ..... .. . 294
Ocupaci6n, pobreza e inJormalidad ....... ................. .... ............................... 297
El empleo ............................................................................................... 297
La pobreza ........................................... ................ ..... .... ......................... 298
Trabajo inJormal urbano .................... ........................................... ........... 298
Eclosi6n de la problematica etnica ............ .. ............ .. ... .. .. .. .......... ..... ......... 299
Guatemala ........................................ ....................................... ....... ....... 299
Nicaragua .......... ............. .. .................. ............................... .................... 302
Balance del periodo ..................... ~~~ ...................... riF.rl'!"~ ... 303
.-
,~ BI Rl.I OTECA
.. -.. ~ -Z
, - - -- -- -
,
\ . c• . ". /
EPiLOGO
UN LUGAR PARA LA ESPERANZA ............... .......... ... .......... ........ ........ ...... ...... 305

GLOSARlO ..................................................................... .................. ......... ........ .. 307

BIBLIOGRAFiA .................... .. ............ ..... ......... ................ .. .... ................ ............. 323

APENDICES ........................... ...... .............................. .......................................... 351

INDICE DE CUADROS ...................................................................................... 361

IN DICE DE GmICOS ........................ .. ............................................................ 363

INDICE DE ILUSTRACIONES .. .. ...................................................................... 364

INDICE DE MAPAS ........... ................... ........................... ... ................................. 368

INDICE DE RECUADROS .. .. .. .......................................................................... . 370

INDICE GENERAL ............................................................................................. 371

379

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