B.2.11.2 Formulacion de Una Hipotesis - Papp PDF

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TEMA 11

B.2.11.2. FORMULACION DE UNA HIPOTESIS


Peggy Papp
El proceso del cambio. Captulo 3

El primer paso, en cualquier enfoque teraputico, consiste en la formulacin de una hiptesis, sin
la cual el terapeuta no podra obtener ni organizar la informacin necesaria.
Una hiptesis, segn el Diccionario Internacional de Webster, es 'un punto de partida para una
investigacin'. Pero el terapeuta debe saber en primer lugar qu es lo que est investigando,
pues de lo contrario podra recoger una gran cantidad de informacin no significativa. El propsito
de esta investigacin es definir la reciprocidad entre el sntoma y el sistema dentro del marco del
tiempo y del cambio. El terapeuta necesita conocer las respuestas a interrogantes tales como:
Por qu presenta la familia este problema particular en este preciso momento? Cules son los
hechos y conductas que han precipitado el problema? Qu ciclo de interaccin actual lo est
manteniendo? Cmo ha ido cambiando este ciclo con el tiempo? Cmo s ha modificado el
mtodo de la familia para hacer frente al problema? Qu le suceder a la familia en el futuro si el
problema subsiste? Y si desaparece?
La hiptesis inicial es necesariamente especulativa y se la utiliza como base para recoger
informacin adicional que habr de confirmarla o bien refutarla. El terapeuta puede modificar la
formulacin muchas veces, a medida que obtiene nueva informacin de la familia. No es
necesario esperar a contar con una hiptesis definitiva para intervenir, ya que con frecuencia slo
las intervenciones permiten descubrir una informacin crucial.
Tampoco es preciso que la hiptesis sea absolutamente acertada; slo debe ser pertinente
a la familia y al cambio. El criterio de pertinencia se evala sobre la base de la realimentacin, es
decir, de las sucesivas respuestas de los miembros de la familia.
Dado que el propsito fundamental de la hiptesis es establecer conexiones, el modo en que se
recoge la informacin tiene suma importancia. Muchas veces el terapeuta recolecta informacin
de tal manera que al final slo cuenta con datos aislados acerca de sucesos aislados, los que
pueden ser conmocionantes en y por s mismos (incesto, violacin, asesinato, suicidio, etc.) pero
que no tendrn ningn sentido a menos que se los conecte convenientemente con el problema
presentado. Los miembros de la familia no pueden efectuar estas conexiones por s solos, ya que
la persistencia de una conducta sintomtica supone que no tienen conciencia de ellas.
Al recoger la informacin, el terapeuta debe adoptar una posicin neutral y no tratar de formarse
juicios morales ni de tomar partido por alguna faccin de la familia. Para mantener la neutralidad,
no se centrar en ninguna persona con exclusin de las dems durante un perodo prolongado, ya
que esto le dara un status especial a dicha persona.
Dado que toda conducta se considera un intento de equilibrar el sistema de algn modo, el
terapeuta respetar la intencin unificadora de la conducta aunque sta, en s misma, pueda no
ser aprobada. Esta posicin neutral suele ser difcil de concebir para los terapeutas formados en
un mtodo ms confrontativo. El objetivo de la terapia no es producir el cambio por medio de
pequeas acciones durante una sesin en que el terapeuta realinea, reestructura o reorganiza
activamente a la familia por obra de su autoridad o de su tcnica, sino que el cambio se producir
a travs de la capacidad del terapeuta de mantenerse fuera del sistema y lograr una visin
holstica: de comprender, respetar y conectar todas las transacciones de la familia y, por ltimo,
dirigir una intervencin a las que sean ms pertinentes al problema presentado.
Si el terapeuta reaccionara ante una conducta dada por va de enjuiciarla, no habra suficiente
fundamento para definir positivamente dicha conducta, planteando que cumple una funcin en el
sistema.
Al recoger informacin, es conveniente tener presentes las siguientes preguntas:

1. Qu funcin cumple el sntoma en cuanto a estabilizar a la familia?


2. Cmo funciona la familia en cuanto a estabilizar el sntoma?
3. Cul es el tema central en tomo al cual se organiza el problema?
4. Cules sern las consecuencias del cambio?
5. Cul es el dilema teraputico?

A efectos de responder a estas preguntas, el terapeuta debe partir de ciertos supuestos bsicos
acerca de la relacin recproca entre el sntoma y el sistema. En este enfoque, esos supuestos
son los siguientes:

1. La aparicin de un sntoma por lo general coincide con algn cambio efectivo o previsto
en la familia, que amenaza alterar el equilibrio (como que un miembro de la familia se vaya de la
casa, contraiga matrimonio, cambie de trabajo, empiece la escuela, se divorcie, llegue a la
adolescencia, se aproxime a la madurez, se enferme, o muera).
2. La ansiedad en torno a este cambio activa conflictos que han estado latentes, y estos
conflictos, en lugar de resolverse, se expresan a travs de un sntoma.
3. El sntoma puede ser un medio de evitar este cambio amenazador o de suministrar un
modo de que se produzca.
Por ejemplo: el sntoma presentado, en un caso, fue la conducta transgresora de una hija de
diecisis aos, que de pronto comenz a sacar malas notas en el colegio, a faltar a las clases, a
robar, a mentir y a volver a su casa a las cuatro de la maana. Esto coincidi con la circunstancia
de que la madre haba conseguido un empleo que la mantena fuera del hogar hasta tarde todos
los das. Se descubri que la abuela materna desaprobaba el trabajo de la madre y manifestaba
esta desaprobacin ante la hija. Cada vez que la hija se portaba mal, la abuela llamaba a la madre
por telfono, a su oficina, y sta de inmediato dejaba el trabajo para volver a su casa y reprender a
la hija. La mala conducta de la hija cumpla la funcin de evitar el cambio interfiriendo con el
trabajo de la madre y manteniendo a sta dentro del rol tradicional que la abuela le haba
asignado.
En otro caso, se vio que el sntoma de una hija de veintisis aos constitua un modo de provocar
un cambio en la familia. Un ao y medio despus de la muerte de la madre, la hija regres del
exterior y empez a vivir sola en la casa familiar vaca. Su hermana y su hermano se haban
mudado y el padre se haba vuelto a casar y viva con su nueva esposa. Haba muchos aspectos
cargados de emocin en torno a la muerte de la madre, que nunca haban sido discutidos entre
los miembros de la familia pero que daban lugar a silencios tensos y a un distanciamiento
incmodo. La hija procedi a romper el silencio y la distancia por medio de una conducta
sumamente provocativa: iniciaba peleas, dejaba la casa en total desorden, abusaba de las drogas
y el alcohol y exteriorizaba sus estados depresivos. Por ltimo, el padre reuni a la familia y
acudieron a una terapia. All, la hija ventil todos los puntos relacionados con la muerte de la
madre que hasta entonces se haban acallado y oblig a la familia a enfrentarlos. En este caso, se
consider que el sntoma era un intento de apresurar el cambio llevando a la familia a superar la
etapa del duelo.
Al desarrollar una hiptesis, la informacin se recoge y se integra en tres niveles diferentes:
conductas, emocional e ideacional (lo que las personas hacen, sienten y piensan). Para
comprender los patrones de una familia, es importante ver cmo se conectan y se influyen entre s
estos tres niveles.

EL NIVEL CONDUCTUAL
E
La informacin detallada respecto de la conducta muchas veces revela importantes distorsiones o
contradicciones que son claves para comprender el funcionamiento de dicha conducta. El
terapeuta debera obtener una visin en cmara lenta de los hechos inmediatamente anteriores,
simultneos y posteriores a la aparicin del problema. Los terapeutas suelen tener dificultades
para conseguir informacin sobre conductas especficas, pues los miembros de la familia tienden
a hablar en trminos generales y a brindar descripciones altamente subjetivas. Por ejemplo, una
esposa puede alegar que ella siempre "alienta' sexualmente a su marido. Al explorar con mayor
profundidad qu es lo que en realidad hace para 'alentarlo', el terapeuta podra descubrir que de
hecho lo agrede y que critica su modo de hacer el amor, haciendo as que la rechace. Esta
informacin llevara al terapeuta a conjeturar que el 'aliento' brindado por la esposa cumple la
funcin de protegerla de la posibilidad de descubrir sus propias dificultades sexuales. 0 bien, un
marido puede declarar que se siente totalmente "desvalido' cuando su mujer se enoja. En
realidad, su 'desvalimiento' consiste en recorrer un bar tras otro hasta que la esposa va a buscarlo.
Lo que l describe como 'desvalimiento' es una serie de actividades destinadas a hacer que su
mujer vaya tras l. Es importante tomar en cuenta el efecto que tiene una conducta sobre otras
personas a fin de determinar su funcin.
Para obtener este tipo de informacin, el terapeuta debe ser perseverante en el seguimiento de
una secuencia conductual dada: deber preguntar qu acciones especficas siguen a otras
acciones especficas y cul es la respuesta especfica de otras personas. A veces se hace
necesario seguir este procedimiento hasta el cansancio, a efectos de penetrar a travs de la
vaguedad del lenguaje de la familia. El siguiente dilogo tpico ilustra la perseverancia que
demanda el procedimiento:
d

Terapeuta: Qu hace usted cuando Julito trae malas notas?


Madre: No s qu hacer
Terapeuta: Y qu hace, entonces?
Madre: Qu puedo hacer?
Terapeuta: No estoy seguro de lo que pueda hacer, pero qu es lo que hace?
Madre: Lo he intentado todo.
Terapeuta: Qu cosas ha intentado?
Madre: Todo es intil.
Terapeuta: Cundo fue la ltima vez que todo fue intil?
Madre: Ayer.
Terapeuta: De qu manera fue intil?
Madre: Me di por vencida, sencillamente.
Terapeuta: Y cmo se dio por vencida?
Madre: Corr a mi habitacin, me tir sobre la cama y me puse a llorar.
Terapeuta: Qu hicieron los otros miembros de la familia entonces?
Madre: Julito no se preocup en absoluto; sali a jugar
Terapeuta: Qu hizo su marido?
Madre: Vino y trat de tranquilizarme.
Terapeuta: Cmo trat de tranquilizarla?
Madre: Me asegur que todo iba a arreglarse y me prometi que iba a pasar ms tiempo
con Julito para tratar de encaminarlo

A partir de la descripcin de la conducta efectiva de la madre y de la respuesta del marido, el


terapeuta podra conjeturar que la actitud de darse por vencida de la mujer tena la funcin de
movilizar al padre y aumentar su compromiso con la familia.
El equipo de Miln ha desarrollado una tcnica especialmente til para recoger informacin,
llamada cuestionamiento circular, por la cual se le pregunta a cada miembro de la familia cmo ve
la relacin entre otros dos miembros de la familia. Este es un modo eficaz de conseguir
informacin acerca de diferencias y cambios en la familia. Por ejemplo, se le podra preguntar a un
hijo: 'Te parece que tus padres se llevan mejor o que se llevan peor desde que muri tu abuela?'
(Selvini Palazzoli, Boscolo, Cecchin y Prata, 1980). Independientemente de cul sea la tcnica
utilizada para obtener informacin, es importante que esa informacin se conecte para formar una
hiptesis sistmica.

EL NIVEL EMOCIONAL
Al observar el nivel emocional de la familia, el terapeuta debe centrarse en la funcin de los
sentimientos y en la forma en que ellos se expresan. La expresin de los sentimientos es una
herramienta poderosa para ejercer influencia sobre otros miembros de la familia.
Este es un concepto difcil de ensear debido a que se opone a la difundida nocin de que los
sentimientos son sagrados, que constituyen un autntico ndice de 'quines somos
verdaderamente' y 'dnde estamos realmente ubicados' y 'es bueno saberlo y hacer que otros lo
sepan'. Este as llamado culto de la comunicacin pasa por alto la poltica de los sentimientos
dentro de un contexto social. Los sentimientos no emanan de la psique individual en comunin
consigo misma, sino que son estimulados y condicionados por un auditorio formado por otros, aun
cuando este auditorio slo sea previsto o recordado. Al igual que la conducta, la expresin de los
sentimientos programa a otros, y es programada por ellos.
Por ejemplo, una esposa puede ser programada por su marido para que sienta y exprese ira hacia
la madre de l, de manera que l mismo pueda evitar sentir y expresar ira hacia su madre; una
madre puede programar a un hijo para que ste se sienta y se manifieste desvalido, y as ella
podr sentirse y mostrarse protectora; una esposa puede programar al marido para que sienta y
demuestre celos, de modo de tener motivo para acusarlo de estarla controlando. Este es el patrn
de sentimiento - el sistema de emociones - que debe advertir el terapeuta al formular una
hipotesis. En qu circunstancia se despiertan y expresan determinados sentimientos? Qu
sentimientos y reacciones suscitan estas expresiones emocionales en los dems? Si durante una
sesin una madre llora por la muerte de su padre, sus sentimientos pueden ser muy autnticos,
pero ella no dejar de advertir el efecto de su llanto sobre el resto de la familia: quiz tranquilice a
su hijo hiperactivo, o haga que su marido se acerque ms a ella, o que la hija cese de mortificarla.
Por s solo, el conocimiento de que la madre se siente triste no resulta particularmente til, pero
saber qu momento preciso elige ella para expresar su tristeza, cmo la expresa y cmo
reaccionan los dems, permite conocer la funcin que cumple.

EL NIVEL IDEACIONAL
Adems de conocer lo que cada miembro de la familia hace y siente respecto del problema, el
terapeuta debe saber cmo perciben ellos el problema, cmo perciben su causa y su cura, y cmo
reaccionan ante la percepcin de cada uno de los dems. El nivel ideacional es el ms difcil de
comprender, pues a menudo se extiende ms all de la toma de conciencia y se relaciona con
sistemas de creencias.
En muy probable que la clave para conocer este nivel se revele a travs del contenido, as como
el del proceso, por lo que el lenguaje que emplea la familia adquiere suma importancia. El
terapeuta prestar atencin a las metforas y a las afirmaciones que revelen actitudes, tales como
"los hombres aman a las mujeres, pero las mujeres aman a sus hijos', que indica la creencia de
que el vnculo primordial de una mujer es con sus hijos y no con su marido, o como 'nadie te
querr tanto como tu familia que seala la creencia de que nunca se puede confiar en una
persona ajena a la familia. Estas afirmaciones muchas veces contienen reglas familiares secretas
que mantienen el sntoma.
Para llegar a una cabal comprensin de este nivel es conveniente que el terapeuta recolecte
informacin acerca de la familia de origen de cada uno de los progenitores.
Dado que es all donde se originaron las actitudes, percepciones y creencias, una perspectiva
histrica de la familia extensa suele arrojar luz sobre las transacciones actuales. Si bien no es
necesario que la familia entienda las conexiones entre el pasado y el presente, el contexto de las
tres generaciones le brinda al terapeuta una Gestalt ms amplia a partir de la cual podr formular
una hiptesis y efectuar intervenciones. Algunas veces se descubre informacin relativa a
fantasmas, secretos o mitos familiares que ejercen una poderosa influencia sobre el proceder de
la familia.
Para recoger informacin histrica, el terapeuta rastrea los temas familiares, y si parece que cierto
tema tiene una relacin directa con el problema presentado, se lo incorpora a las intervenciones.
El siguiente es un ejemplo de cmo se realiz esto en una entrevista de consulta. Un terapeuta
me solicit una consulta con una familia rural de escasos recursos, presentada como
"multiproblemtica' y 'proclive a las crisis', cuyo hijo mayor haba sido llevado ante la justicia, por
haber amenazado con un cuchillo al hombre con quien viva su madre. Perla, la madre, era una
joven voluptuosa, desarreglada y lloriqueante, que a los 32 aos ya haba pasado por tres
matrimonios y tena cinco hijos de tres maridos diferentes. En ese momento estaba viviendo con
un nuevo compaero.
En la comunidad, tena reputacin de cambiar de marido y de descuidar a los hijos, y se la
catalogaba de pobretona ignorante.
La sesin de consulta reuni a Perla, su compaero Carlos y tres de los hijos de ella: Miguel, el
identificado como paciente, de 15 aos; Jorge, de 14; y Mara Jos, de 12. La hija mayor, Matilde,
de 17 aos, estaba viviendo lejos del hogar, con un hombre, y la hija de 11 aos, Cecilia, haba
sido enviada a vivir con una ta cuando se descubri que tena una discapacidad para aprender a
leer, que su madre se sinti incapaz de afrontar.
Los padres de Perla estaban viviendo con la abuela materna, a la que se describi como una
mujer alcohlica, que no haca ms que beber todo el da y mirar televisin. Haba mucha friccin
entre la abuela materna y los padres, por lo que stos acostumbraban salir muy temprano de su
casa y pasar el da con Perla y su familia. El padre usaba el patio trasero de Perla para reparar
autos viejos que compraba y luego venda. Esto molestaba mucho a Carlos, que lo senta como
una invasin de su intimidad. Carlos se quejaba de que l y Perla nunca tenan tiempo para estar
juntos, porque ella viva pendiente de sus padres y ceda ante todos sus caprichos. Esto era
motivo de muchas discusiones entre ambos. Cuando estas discusiones se volvan muy
acaloradas, se interpona Miguel para proteger a su madre de Carlos, y ste se liaba a golpes con
Miguel. Intervena entonces Perla, para proteger a Miguel. Carlos estaba a punto de abandonar el
hogar porque tena miedo de llegar a herir a alguien. Esto responda al patrn seguido por los tres
maridos anteriores, cuya decisin de abandonar el hogar haba sido motivada por el intenso
vnculo de Perla con sus padres y por su afn de proteger a Miguel.
El terapeuta se haba centrado en tratar de detener la violencia y de introducir cierto orden en la
familia. Haba asignado una infinidad de tareas concretas a efectos de fijar lmites, establecer
jerarquas y prioridades, e imponer disciplina; no se logr ningn resultado. Perla sigui
permitiendo que sus hijos hicieran lo que queran y dejndolos solos todas las noches para ir a
jugar al bingo con su madre.
Durante la entrevista de consulta, se revel que Perla haba huido de su casa cuando tena 15
aos debido a las constantes peleas entre sus padres. La madre se haba pasado corriendo tras
ella durante aos, hasta que sufri una parlisis que le inmoviliz las piernas y la confin a una
silla de ruedas. Culpaba a Perla de haberla dejado lisiada de por vida. (De hecho, la causa de su
parlisis era un tumor en la mdula espinal.) Perla asuma la culpa de haber dejado paraltica a la
madre y resultaba claro, a partir de su conducta y de ciertos planteos que efectu, que haba
dedicado su vida a tratar de compensarla. Su obsesin por pagar esta deuda enorme tena
prioridad sobre cualquier otra relacin. La madre la haca objeto de incesantes demandas y
aunque Perla se senta resentida por eso, siempre capitulaba: la llevaba al bao, preparada sus
comidas, la sacaba a pasear en auto, jugaba al bingo con ella, y as sucesivamente.
A medida que se explor con mayor profundidad el tema de la deuda y la reparacin, se descubri
que poco despus de haber nacido Perla, la madre haba dado en adopcin a los dos hermanos
mayores de Perla. Los padres haban sentido que no podran cuidarlos por causa de su mala
salud y su pobreza. El padre tambin haba querido dar a Perla, pero la madre insisti en tenerla
consigo, con lo cual acrecent la deuda que Perla crea tener con ella. Estos dos hermanos vivan
ahora en el mismo barrio de Perla, y constantemente le recordaban, de distintos modos, el
resentimiento que sentan por haber sido ella la hija elegida mientras que a ellos los haban
alejado del hogar. (Otra deuda ms que pagar) Perla tambin se senta en deuda con su hijo
Miguel, por haber sido ste vctima de la violencia y el maltrato ocurridos durante sus primeros
matrimonios, y en consecuencia no era capaz de mostrarse firme con l.
Pareca claro que hasta que Perla no zanjara el problema de su legado de deudas, le sera difcil
establecer lmites tanto respecto de sus padres como de sus hijos. Este legado haca que le
resultara imposible permitirse ser feliz con un hombre (cmo podra ser ella ms feliz que
aquellos a quienes haba hecho sufrir?), y la conducta de Miguel cumpla la funcin de impedirle
apegarse demasiado a alguien.
Mi recomendacin al terapeuta fue que basara sus intervenciones futuras en este poderoso tema
de la deuda y la reparacin que gobernaba a la familia. Le suger que comenzara por convocar a
toda la familia extensa (incluyendo a la abuela materna, a los padres y a los dos hermanos) a una
reunin, en la que continuara explorando el tema de las deudas impagadas en la familia: qu otro
miembro las tena, hacia quin, cmo las estaba pagando, a qu inters, y si exista un estatuto de
limitaciones. Se consider de fundamental importancia averiguar qu otros miembros de la familia
colaboraban con Perla para mantener a la familia bajo la sombra de las deudas impagas. (Se
conjetur que 9
las cuentas pendientes entre la madre de Perla y la abuela tampoco haban sido dilucidadas.)
Sobre la base de la informacin recogida, adems, se alent al terapeuta a que construyera un
ritual familiar en torno a la expiacin de las deudas, posibilitando que la familia las saldara en
forma abierta y oficial. Dado que sta era una de esas familias que son sumamente susceptibles a
los eptetos tales como "pobretones ignorantes', 'flojos de carcter' y 'herencia maldita', tambin se
recomend enmarcar el ritual dentro de un contexto en que se considerara que la familia era
sumamente responsable y honorable respecto de su determinacin de cumplir sus obligaciones
recprocas.
Los datos histricos a menudo han ayudado al terapeuta a poner en descubierto un tema central
que enlaza los niveles conductual, emocional e ideacional de la familia, hacindolos funcionar en
forma conjunta. Estos antecedentes histricos son ms importantes en algunos casos que en
otros, segn el grado en que el legado del pasado se ha convertido en reglas rgidas que
gobiernan el presente. Durante los primeros aos del Proyecto de Terapia Breve, tendamos a
pasar por alto el contexto histrico de los sntomas y nos centrbamos primordialmente en los
ciclos conductuales presentes. En algunos casos, sin embargo, las intervenciones dirigidas
nicamente a estos ciclos no producan resultados porque no cambiaban la ideologa temtica que
respaldaba a los ciclos. En la actualidad, recogemos informacin histrica como rutina durante la
primera sesin y ms tarde decidiremos si la utilizamos o no teraputicamente.

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