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Leccin 03 UN REAL SACERDOCIO

A 1 de Pedro 2:1-3. La vida cristiana.
DESECHEMOS: Todo lo que sea malo o tenga intencin de
engaar; toda simulacin o insinceridad; toda envidia; toda
murmuracin.
ANHELEMOS: El alimento espiritual de la Palabra de Dios, como
un beb recin nacido anhela la lecha materna; crecer en la
salvacin; disfrutar de la bondad de Dios.
Con la ayuda de Dios, debemos eliminar toda mala actitud y
llenar su hueco con el estudio de la Palabra de Dios (2 de Tim
3:16).
B 1 de Pedro 2:4-8. Piedras vivas.
Jesucristo, como piedra principal, es la base y sostn del
edificio de la Iglesia.
Este edificio est formado por piedras vivas (nosotros), que
ofrecemos sacrificios espirituales aceptables a Dios:
Vidas consagradas (Rom 12:1).
Alabanzas (Heb 13:15).
Actos de bondad y ayuda mutua (Heb 13:16).
Dones materiales, cuando reflejan el amor y la consagracin
del dador
(Fil 4:18).
C 1 de Pedro 2:9-12. El pueblo de Dios.
El pueblo del pacto.
Dios hizo un pacto con Israel en Sina. Este pacto era la
renovacin del pacto realizado con Abraham, Isaac y Jacob
(Gen 15:18; 17:21; xo 2:24).
ste era un pacto condicional. Si obedecan, recibiran las
bendiciones del pacto. Si desobedecan, las perderan (Deut
11).
Ahora, Pedro presenta a la iglesia cristiana (que en otro
tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de
Dios) como heredera del pacto.
El pueblo santo.
Linaje escogido: Dios ha concedido los privilegios y las
responsabilidades de la nacin juda a la comunidad
cristiana.
Real sacerdocio: Los cristianos, como sacerdotes que son,
deben ofrecer a Dios los sacrificios espirituales
mencionados en 1 de Pedro 2:5.
Nacin santa: La iglesia es el pueblo que representa el
carcter santo de Dios en la tierra.
Pueblo adquirido por Dios: Cristo compr con su sangre a la
iglesia y considera que es, en un sentido especial, su
posesin adquirida.
El pueblo que ilumina.
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Al igual que Israel fue puesto por luz de las naciones

(Isaas 42:6), somos llamados a compartir el conocimiento
de Dios y lo que l ha hecho por el mundo a travs de
Jesucristo:
(a) Por nuestra predicacin: para que anunciis las
virtudes de aquel que os llam (v. 10).
(b) Por nuestros actos: para que [] glorifiquen a Dios
[] al considerar vuestras buenas obras (v. 12).

UN REAL SACERDOCIO
PARA MEMORIZAR:
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nacin santa,
pueblo adquirido por Dios, para que anunciis las virtudes de aquel
que os llam de las tinieblas a su luz admirable (1 Ped. 2:9).
ESPRITU DE PROFECA
La Iglesia es el medio sealado por Dios para la salvacin de los
hombres. Fu organizada para servir, y su misin es la de anunciar
el Evangelio al mundo. Desde el principio fu el plan de Dios que su
iglesia reflejase al mundo su plenitud y suficiencia. Los miembros
de la iglesia, los que han sido llamados de las tinieblas a su luz
admirable, han de revelar su gloria.

La iglesia es la depositaria de las riquezas de la gracia de Cristo; y

mediante la iglesia se manifestar con el tiempo, aun a los
principados y potestades en los cielos (Efesios 3:10), el despliegue
final y pleno del amor de Dios (HAp, p. 9).

Cristo no reconoce ninguna casta, ni color, ni grado como

necesarios para llegar a ser sbditos de su reino. La admisin en su
reino no depende ni de la riqueza ni de una herencia superior. En
cambio, los que han nacido del Espritu son los sbditos de su reino.
El carcter espiritual es lo que ser reconocido por Cristo. Su reino
no es de este mundo. Sus sbditos son los participantes de la
naturaleza divina, que habrn escapado de la corrupcin que est
en el mundo y que se manifiesta por la concupiscencia.

Y esta gracia les es dada por Dios. Cristo no encuentra a sus

sbditos preparados para su reino, sino que los califica por medio
de su divino poder. Los que estaban muertos en delitos y pecados
son revividos a la vida espiritual. Las facultades que Dios da para
propsitos santos son refinadas, purificadas y exaltadas. De este
modo sus seguidores son guiados para formar un carcter a la
semejanza divina

Al contemplar a Jess, al obedecer sus requisitos, aumentan su

conocimiento de Dios y de Jesucristo a quien l ha enviado. De este
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modo se transforman a su imagen de carcter en carcter hasta

que llegan a distinguirse del mundo y se puede escribir acerca de
ellos: Vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nacin santa,
pueblo adquirido por Dios, para que anunciis las virtudes de aquel
que os llam de las tinieblas a su luz admirable; vosotros que en
otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios;
que en otro tiempo no habais alcanzado misericordia, pero ahora
habis alcanzado misericordia (1 Ped 2:9, 10) (Gods Amazing
Grace, p. 52; parcialmente en La maravillosa gracia de Dios,{MGD}, p. 52).

Debis ser el instrumento por medio del cual Dios hable al alma. Se
os recordarn cosas preciosas, y con el corazn rebosante del amor
de Jess, hablaris palabras de vital inters e importancia. Vuestra
sencillez y vuestra sinceridad constituirn vuestra mayor
elocuencia, y en los libros del cielo se registrarn vuestras palabras
como oportunas, semejantes a manzanas de oro con figuras de
plata.

Dios las transformar en una corriente de influencia celestial,

despertar convicciones y deseos, y Jess aadir su intercesin a
sus oraciones, y pedir para el pecador el don del Espritu Santo, y
lo derramar sobre su alma. Y delante de los ngeles de Dios habr
gozo por un pecador que se arrepiente (Hijos e hijas de Dios,{HHD}, p.
276).
VIVIR COMO UN CRISTIANO
1 Pedro 2:1-3
1
Desechando, pues, toda malicia, todo engao, hipocresa, envidias, y todas las
detracciones, 2 desead, como nios recin nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que
por ella crezcis para salvacin, 3 si es que habis gustado la benignidad del Seor.
COMENTARIO DE LA LECCIN
Desechando, pues, toda malicia, todo engao, hipocresa, envidias,
y todas las detracciones, 2 desead, como nios recin nacidos, la
leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcis para
salvacin, 3 si es que habis gustado la benignidad del Seor.
La palabra en griego que se usa para DESECHAR, es la palabra
que se pronuncia apotemenoi. Casi siempre que se usa
sta palabra en griego, se aplica al acto de quitarse la ropa.
Por ejemplo en Efesios 4 encontramos de nuevo la palabra
(apotemenoi) y dice as:
22
En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que est viciado
conforme a los deseos engaosos 24 y vestos del nuevo hombre, creado segn Dios en la
justicia y santidad de la verdad.
En el versculo 24 encontramos el antnimo o lo opuesto de
despojarse y es la palabra vestirse. Por lo tanto el apstol est
dando a entender que la palabra desechar, en ste caso, significa
la eliminacin completa de nuestras vidas, del infame catlogo de
pecados, que l nos est presentando, como es la malicia, el
engao, la hipocresa, la envidia y las detracciones .
 4
Desechando, pues, toda malicia, todo engao, hipocresa, envidias, y todas las
detracciones, 2 desead, como nios recin nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que
por ella crezcis para salvacin, 3 si es que habis gustado la benignidad del Seor.
La palabra PUES que usa el apstol, se refiere al razonamiento y a
la continuacin del primer captulo que ya estudiamos. Tomando en
consideracin todo lo que dice el captulo nmero 1, llegamos a la
conclusin pues, que tenemos que renunciar a toda maldad. La
palabra PUES que usa Pedro, est denotando entonces, que el
captulo 2, es sencillamente la continuacin de todo lo que est
escrito en el cap. 1.

La palabra malicia es en griego la palabra , que se pronuncia

KAKIAN. Esta palabra es particularmente aplicada a todas las clases
de maldades que puedan existir en el mundo. La palabra malicia
son todos esos actos malos que nacen de un corazn cruel. Malicia
es tambin el acto de hacerle dao a otra persona sin ninguna
causa, solamente por la gratificacin personal. La otra forma de
malicia es cuando se le hace dao a una persona, por venganza.

Un ejemplo claro del empleo de la palabra , lo encontramos

en el libro de Romanos el captulo 1, que dice: 29 estando atestados de toda
injusticia, fornicacin, perversidad, avaricia, maldad; llenos de envidia, homicidios, contiendas,
engaos y malignidades; 30 murmuradores, detractores, aborrecedores de Dios, injuriosos,
soberbios, altivos, inventores de males, desobedientes a los padres, 31 necios, desleales, sin
afecto natural, implacables, sin misericordia;

Por lo tanto, llegamos a la conclusin que la palabra malicia en la

Biblia, es el acto de hacerle dao a una persona sin razn, o por
venganza, es todo acto de maldad que nace del corazn, y es
tambin todo acto pecaminoso que est en contra de la voluntad de
Dios.
Hay un rbol en la India llamado Machineel, ste rbol es uno de los
arboles mas venenosos que pueden existir en la tierra. El Machineel
produce una sustancia lechosa, que si le cae en la piel a una
persona, le produce una quemada, exactamente como si la persona
se hubiera quemado con un objeto metlico calentado al rojo vivo.
Se advierte a todas las personas a ni siquiera dormir debajo del
rbol, ya que toda persona que duerme debajo del Machineel,
nunca vuelve a despertar.

El Machineel, fcilmente puede representar a la malicia, como a

toda persona que est cargada de malicia. Hay personas tan
cargadas de malicia, que al no mas entrar en contacto con ellos,
nos causan cualquier tipo de dolor, y si les confiamos nuestra
felicidad, seguramente dormiremos el sueo de la muerte. El
apstol Pedro, nos aconseja despojarnos totalmente tanto de la
malicia, como del practicante de la malicia, los dos nos hacen un
terrible dao.
 5

La envidia, es el odio que se le tiene a otra persona por las

virtudes que sta posee, o por alguna propiedad material que ella
tiene.
La envidia fue el pecado que promovi el primer asesinato aqu en
la tierra.
La envidia es la hija mayor del orgullo, su hermana menor se
llama codicia, y tiene una prima hermana que se llama violencia. La
envidia es uno de los frutos ms sucios de la carne.
La envidia deforma la naturaleza del hombre, hace al hombre
sospechoso, malicioso, pleitista, provoca la crtica y la
murmuracin, la envidia practica la maldad en contra del prjimo.
La envidia ha inmortalizado grandes historias en la vida de ste
mundo, por culpa de la envidia fue Jos vendido por sus hermanos
y por culpa de la envidia fue muerto el Hijo de Dios.
Desechando, pues, toda malicia, todo engao, hipocresa, envidias, y todas las
detracciones, 2 desead, como nios recin nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que
por ella crezcis para salvacin, 3 si es que habis gustado la benignidad del Seor.
La palabra detraccin, religiosamente hablando, es sencillamente
murmuracin, crtica o calumnia. La detraccin dicha en palabras
simples, es el acto de hablar en mal de otros, a espaldas de ellos.
El engao o la mentira, tiene que ver en la relacin del hombre con
el hombre. El engao puede estar presente en todos los negocios
del hombre, como por ejemplo en la compra, en la venta,
arrendamientos, empleadores y pagos a empleados, prstamos,
trabajos, asociaciones, etc.

El engao o la mentira, es uno de los pecados ms comunes que

pueden existir en el ser humano, y adems es tambin uno de los
pecados que ms afectan a los miembros de nuestra iglesia. El
quebrantamiento del da sbado, la mentira y el adulterio, son los
tres pecados que dejaran a muchos fuera de la lista divina de la
salvacin.

La lengua es uno de los miembros de nuestro cuerpo que muchas

veces descuidamos totalmente. Nuestras iglesias estn llenas de
problemas por causa del chisme, murmuracin y habladuras de
parte de miembros de iglesia, incluyendo an, de los mismos
dirigentes de iglesia.
Muchas veces sin dudarlo, borramos de los libros de la iglesia a un
miembro de la iglesia por fornicacin, adulterio y homicidio, pero
nunca borramos a una persona por ser chismoso(a).
La mentira, la murmuracin, las calumnias y el chisme; Dios lo
compara con la misma gravedad del asesinato, adulterio y
fornicacin. En el tiempo antiguo de Israel; Dios destruy ms
gentes por murmuracin que por otro pecado.
Dios castiga, sentencia y condena de igual manera a una persona si
su pecado es fornicacin, adulterio, asesinato, murmuracin,
mentira insulto.
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Pues me temo que cuando llegue, no os halle tales como quiero, y yo sea hallado de vosotros
cual no queris; que haya entre vosotros contiendas, envidias, iras, divisiones, maledicencias,
murmuraciones, soberbias, desrdenes; 21 que cuando vuelva, me humille Dios entre vosotros,
y quiz tenga que llorar por muchos de los que antes han pecado, y no se han arrepentido de
la inmundicia y fornicacin y lascivia que han cometido. 2 Corintios 12
10
para los fornicarios, para los sodomitas, para los secuestradores, para los mentirosos y
perjuros, y para cuanto se oponga a la sana doctrina, 1 Timoteo 1
6
Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua est puesta entre nuestros
miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creacin, y ella misma es
inflamada por el infierno. Santiago 3
8
Pero los cobardes e incrdulos, los abominables y homicidas, los fornicarios y hechiceros, los
idlatras y todos los mentirosos tendrn su parte en el lago que arde con fuego y azufre, que
es la muerte segunda. Apocalipsis 21

Que estricto ser el juicio celestial sobre el manejo de nuestras

palabras. Hay un dicho muy interesante que se usa en los juicios
que se celebran en las cortes de la tierra, y ste dicho realmente es
un versculo de la Biblia, que pronunci Jess y dice: Por las
palabras habladas; la persona ser justificada condenada
Cualquier palabra mal dicha pronunciada descuidadamente,
testificar en contra del humano en el da del juicio. Dios no slo
escucha lo que hablamos en la iglesia el da Sbado:
3
He aqu nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan, y
dirigimos as todo su cuerpo. 4 Mirad tambin las naves; aunque tan grandes, y llevadas de
impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeo timn por donde el que las gobierna
quiere. 5 As tambin la lengua es un miembro pequeo, pero se jacta de grandes cosas. He
aqu, cun grande bosque enciende un pequeo fuego! Santiago 3
El apstol Santiago presenta dos instrumentos en su pensamiento;
un freno de caballo y un timn de un barco. Interesante mente los
dos instrumentos tiene que ver con conduccin y direccin.
Los dos instrumentos enfatizan el tamao exagerado de lo que
logran controlar; una pequea pieza de metal logra controlar al
animal ms salvaje que posiblemente el hombre haya logrado
domesticar; y un pequeo timn logra conducir a un gran barco. Los
dos ejemplos representan menos del uno por ciento en tamao, de
lo que logran controlar.
En una autopsia que se realiz a 121 cadveres, que inclua
hombre, mujeres y nios, se lleg a la conclusin que la lengua
representan una dcima parte de un 1% del tamao del cuerpo
humano. An siendo tan pequeo este miembro del cuerpo, nos
puede meter en los ms grandes problemas de nuestras vidas e
inclusive podemos llegar a perder la vida, tanto la vida terrenal
como la vida eterna, si no lo logramos controlar.
El hombre puede hacer de la lengua un gran instrumento tanto para
el bien como para mal. Muchos han encontrado la muerte por tener
una lengua que habla falsedades, y muchos han mandado a otros a
la muerte, tambin por una lengua que habla falsedades. De la
misma manera muchos se han salvado por tener una lengua gentil,
controlada y verdadera; adems muchos han sido salvados por
otros gracias al testimonio dado por una lengua justa y verdadera.
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La lengua es una gran bendicin, el don del habla es de uno de los

ms hermosos dones que Dios ha dado a la humanidad. El mundo
animal no tiene ste don. Con ste don el humano puede
pronunciar las ms hermosas alabanzas a un Dios Creador, tambin
se puede expresar la alegra de la naturaleza, se puede transmitir el
hermoso mundo de la poesa, se puede expresar el sentido comn
entre los humanos y transmitir los conocimientos de generacin a
generacin.
La lengua nunca habla por hablar, la lengua habla de la abundancia
del corazn, a travs de la lengua se le hace propaganda aun
corazn saludable y bueno a un corazn enfermizo y malo.
Las palabras ociosas hablan de un corazn que nunca fue cultivado,
las palabras severas denuncia un corazn salvaje y malicioso, las
palabras encolerizadas denuncian un corazn lleno de fuego
infernal, las palabras jactanciosas denuncian un corazn arrogante,
las palabras susurradas denuncian un corazn traicionero y las
palabras falsas denuncian a un corazn mentiroso.
La lengua puede ser sanada solamente contemplando a Jesucristo
quien es el Autor y el Consumador de nuestra fe, solamente
estudiando su excelencia y obteniendo su Santo Espritu, es la nica
manera que nuestro lengua puede llegar a ser fuente de consejera,
fuente de bendiciones y fuente de salvacin.
2
desead, como nios recin nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella
crezcis para salvacin, 3 si es que habis gustado la benignidad del Seor.
La Palabra de Dios es comparada a la leche, posiblemente por la dulzura de lo que representa
la leche a un recin nacido, lo mismo es de dulce la Palabra de Dios a un recin convertido.
La leche es un alimento para ricos y para pobres, lo mismo es la
Palabra de Dios, es un alimento espiritual para todo el mundo
LA PIEDRA VIVA
1 Pedro 2:4-8
4
Acercndoos a l, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios
escogida y preciosa, 5 vosotros tambin, como piedras vivas, sed edificados como casa
espiritual y sacerdocio santo, para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio
de Jesucristo. 6 Por lo cual tambin contiene la Escritura: He aqu, pongo en Sion la principal
piedra del ngulo, escogida, preciosa; Y el que creyere en l, no ser avergonzado. 7 Para
vosotros, pues, los que creis, l es precioso; pero para los que no creen, La piedra que los
edificadores desecharon, Ha venido a ser la cabeza del ngulo; 8 y: Piedra de tropiezo, y roca
que hace caer, porque tropiezan en la palabra, siendo desobedientes; a lo cual fueron tambin
destinados.
Isaas 28:16
16
por tanto, Jehov el Seor dice as: He aqu que yo he puesto en Sion por fundamento una
piedra, piedra probada, angular, preciosa, de cimiento estable; el que creyere, no se apresure.
Salmos 118:22
22
La piedra que desecharon los edificadores Ha venido a ser cabeza del ngulo.
Isaas 8:14-15
14
Entonces l ser por santuario; pero a las dos casas de Israel, por piedra para tropezar, y por
tropezadero para caer, y por lazo y por red al morador de Jerusaln. 15 Y muchos tropezarn
entre ellos, y caern, y sern quebrantados; y se enredarn y sern apresados.

EL PUEBLO DEL PACTO DE DIOS

Qu es el pacto?
Lee Gnesis 17:1 al 4; y xodo 2:24, y 24:3 al 8. Qu nos ensean estos textos
acerca del pacto que Dios hizo con Israel?
Gnesis 17:1-4
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1
Era Abram de edad de noventa y nueve aos, cuando le apareci Jehov y le dijo: Yo soy el
Dios Todopoderoso; anda delante de m y s perfecto. 2 Y pondr mi pacto entre m y ti, y te
multiplicar en gran manera. 3 Entonces Abram se postr sobre su rostro, y Dios habl con l,
diciendo: 4 He aqu mi pacto es contigo, y sers padre de muchedumbre de gentes.
xodo 2:24
24
Y oy Dios el gemido de ellos, y se acord de su pacto con Abraham, Isaac y Jacob.
xodo 24:3-8
3
Y Moiss vino y cont al pueblo todas las palabras de Jehov, y todas las leyes; y todo el
pueblo respondi a una voz, y dijo: Haremos todas las palabras que Jehov ha dicho. 4 Y Moiss
escribi todas las palabras de Jehov, y levantndose de maana edific un altar al pie del
monte, y doce columnas, segn las doce tribus de Israel. 5 Y envi jvenes de los hijos de Israel,
los cuales ofrecieron holocaustos y becerros como sacrificios de paz a Jehov. 6 Y Moiss tom
la mitad de la sangre, y la puso en tazones, y esparci la otra mitad de la sangre sobre el
altar. 7 Y tom el libro del pacto y lo ley a odos del pueblo, el cual dijo: Haremos todas las
cosas que Jehov ha dicho, y obedeceremos. 8 Entonces Moiss tom la sangre y roci sobre el
pueblo, y dijo: He aqu la sangre del pacto que Jehov ha hecho con vosotros sobre todas estas
cosas.
El primer libro de la Biblia, Gnesis, nos cuenta del pacto que Dios hizo con
Abraham (Gn. 15:9-21; 17:1-26). Dios se acord de este pacto cuando rescat a su
pueblo de la opresin en Egipto (xo. 2:24). Dios renov el Pacto en el tiempo de Moiss, cuando dio los
Diez Mandamientos y otras leyes al pueblo de Israel (xo. 19:1-24:8; especialmente xo. 24:3-8).
Pero las promesas del Pacto no eran incondicionales. El Seor pact que, si eran fieles en la
observancia de sus requerimientos, l bendecira todas sus ganancias y toda la obra de sus
manos (TI 2:507). De hecho, los profetas advirtieron repetidamente a Israel
sobre los peligros de la desobediencia a la Ley de Dios, a menudo utilizando
una terminologa asociada al Pacto.

Se ha argumentado que, con la posible excepcin de las profecas de Daniel

y de Apocalipsis, muchas profecas en la Biblia son condicionales. As de
central es la idea de la obediencia en relacin con las promesas del Pacto.
Las profecas de bendicin del Pacto eran condicionales a la obediencia del
pueblo a la Ley de Dios, y las profecas de fracaso solamente se aplicaban a
los desobedientes.
Qu significa para ti estar en una relacin de pacto con Dios? Qu
obligaciones conlleva para ti esta relacin de pacto?
UN REAL SACERDOCIO
En el captulo 19 del libro de xodo, el Seor dijo a Moiss: As dirs a la
casa de Jacob, y anunciars a los hijos de Israel: Vosotros visteis lo
que hice a los egipcios, y cmo os tom sobre alas de guilas, y os
he trado a m. Ahora, pues, si diereis odo a mi voz, y guardareis mi
pacto, vosotros seris mi especial tesoro sobre todos los pueblos;
porque ma es toda la tierra. Y vosotros me seris un reino de
sacerdotes, y gente santa (vers. 3-6).
1 Pedro 2:5, 9-10
5
vosotros tambin, como piedras vivas, sed edificados como casa espiritual y sacerdocio santo,
para ofrecer sacrificios espirituales aceptables a Dios por medio de Jesucristo.
9
Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nacin santa, pueblo adquirido por Dios,
para que anunciis las virtudes de aquel que os llam de las tinieblas a su luz
admirable; 10 vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios;
que en otro tiempo no habais alcanzado misericordia, pero ahora habis alcanzado
misericordia.
xodo 19:6
6
Y vosotros me seris un reino de sacerdotes, y gente santa. Estas son las palabras que dirs a
los hijos de Israel.
Casa espiritual, linaje escogido, real sacerdocio, pueblo
adquirido por Dios son todos trminos de honor que, en la Biblia,
 9

describen la relacin especial que Dios tuvo con los descendientes de

Abraham. Ahora, en el Nuevo Testamento, en el contexto de Jess y de la
Cruz, Pedro est usando el mismo lenguaje del Pacto y lo aplica a los
miembros de la iglesia.

Las promesas del Pacto hechas a Israel son ahora ampliadas para incluir no
solamente a los judos que creen en Jess, sino tambin a los creyentes
gentiles. S; por medio de Jess, los gentiles tambin pueden reclamar ser
hijos de Abraham. Y si vosotros sois de Cristo, ciertamente linaje de Abraham sois, y
herederos segn la promesa (Gl. 3:29). Gracias a Cristo, cualquier persona,
independientemente de su origen, puede formar parte de este real
sacerdocio.
Una nacin santa? Un real sacerdocio? Frases como estas,
aplicadas a nosotros mismos, qu deberan decirnos con respecto
a la clase de vida que vivimos, como individuos y como comunidad?
De qu manera podemos vivir ms a la altura de este elevado
llamado?
PROCLAMAR LAS VIRTUDES
Deuteronomio 4:6
6
Guardadlos, pues, y ponedlos por obra; porque esta es vuestra sabidura y vuestra inteligencia
ante los ojos de los pueblos, los cuales oirn todos estos estatutos, y dirn: Ciertamente pueblo
sabio y entendido, nacin grande es esta.
Deuteronomio 26:18-19
18
Y Jehov ha declarado hoy que t eres pueblo suyo, de su exclusiva posesin, como te lo ha
prometido, para que guardes todos sus mandamientos; 19 a fin de exaltarte sobre todas las
naciones que hizo, para loor y fama y gloria, y para que seas un pueblo santo a Jehov tu Dios,
como l ha dicho.
Isaas 60:1-3
1
Levntate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la gloria de Jehov ha nacido sobre
ti. 2 Porque he aqu que tinieblas cubrirn la tierra, y oscuridad las naciones; mas sobre ti
amanecer Jehov, y sobre ti ser vista su gloria. 3 Y andarn las naciones a tu luz, y los reyes
al resplandor de tu nacimiento.
Zacaras 8:23
23
As ha dicho Jehov de los ejrcitos: En aquellos das acontecer que diez hombres de las
naciones de toda lengua tomarn del manto a un judo, diciendo: Iremos con vosotros, porque
hemos odo que Dios est con vosotros.
El antiguo Israel, como pueblo del Pacto, tena la misin de alcanzar al
mundo con el evangelio, la salvacin ofrecida por el Seor. Los cristianos
tienen la misma misin divina. Son llamados a compartir con otros su
experiencia y su conocimiento de Dios, y de lo que l ha hecho por el mundo
a travs de Cristo.
Lee 1 Pedro 2:10. Por qu este texto es tan importante
para toda la misin y el propsito de los cristianos?
1 Pedro 2:10
10
vosotros que en otro tiempo no erais pueblo, pero que ahora sois pueblo de Dios; que en otro
tiempo no habais alcanzado misericordia, pero ahora habis alcanzado misericordia.
El mundo est inmerso en pecado, en muerte, en la ruina inminente. Pero
Jess dio su vida para salvar a todos de esta destruccin. Al igual que con el
antiguo Israel, los trminos de honor tambin son trminos de
responsabilidad. Los cristianos tienen un estatus extraordinariamente alto: el
de ser el pueblo de Dios. Y esto conlleva la responsabilidad de invitar a
otros a ser partcipes de ese estatus.
 10

Como lo afirma 1 Pedro 2:10, los cristianos ahora conforman un pueblo

propio. Antes no lo eran, pero ahora han recibido la gracia de convertirse en
un pueblo santo (ver Ose. 1, 2). En la Biblia, santo generalmente tiene el
significado de apartar algo con un propsito de adoracin.

Por lo tanto, como una nacin santa, los cristianos han de mantenerse
separados del mundo, una distincin que se ver en el tipo de vida que
llevan. Tambin han de ser como un fuego en una noche fra, que atraer a
otros a su calor. Los cristianos han recibido la responsabilidad de compartir
con los dems la gloriosa salvacin de la que han sido hechos partcipes.