Sufijo Mente

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 20

ANALES DE FILOLOGA HlSPNlCA. VOL. 5,1990. PGS.

281-100

Precedentes mediatos e inmediatos de


los adverbios en -mente
POR

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

El adverbio con sufijo en -MENTE no es precisamente el trmino gramatical


que ms haya atrado la curiosidad cientfica de gramticos y de lingistas. Por
ello llegado el momento de abordar el tema de su origen, estructura y evolucin
no puede dejar de sorprendemos la extremada orfandad de que viene siendo
objeto tanto la variedad adverbial que nos ocupa como el adverbio en general.
Carencia que todava resulta ms relevante al considerar la pltora de ensayos y
monografas dedicadas a otras categoras del mismo sector cientfico como pueden ser el sustantivo, el: verbo o el adjetivo. El porqu de este fenmeno subyace,
como tantos otros, en el epgrafe de una de las incgnitas que genera el mundo al
cual est adscrito el complejo vocablo.
De tal modo lo antedicho puede quedar corroborado si sealamos que el
cmputo de estudios realizados sobre los adverbios en -MENTE no alcanza a
media docena de ttulos. Si bien es cierto que todas las gramticas de Lengua
Espaola presentan observaciones ms o menos extensas acerca del tema, tambin lo es que en ninguna de ellas se advierte la pretensin de agotarlo.
Los autores de ensayos sobre los adverbios en -MENTE son casi todos
hispanohablantes con excepcin de un norteamericano: R. D. McWilliams,
E. Gregores, A. Quilis y B. Pottier.

R. D. MCWILLIAMS (1954)
Este estudio es un anlisis descriptivo de la forma y posicin del adverbio en
general en el espaol coloquial. El corpus bsico ]0 tom McWilliams de 20
dramas mejicanos modernos publicados en las dcadas del 20 y del 30. Se vali

282

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

el autor de una informante de Oaxaca, Mjico, para constatar la validez de los


datos y acopiar variantes. La mayor parte de la investigacin se basa en las
variantes que la informante juzg como naturales.
Se intenta dar una definicin de adverbio desde un ngulo negativo: The
adveb is that of the action which is neither the actor, nor the object, nor the
predicative.
Los adverbios en -MENTE aparecen estudiados en la primera parte bajo
Form entre los adverbios sencillos (p. 77). Bajo esta rbrica se dice que el
adverbio terminado en -MENTE se aade al femenino singular del adjetivo
correspondiente y que por lo general, estos adverbios no son muy comunes en el
espaol coloquial, pero que, sin embargo, algunos de ellos s son bastante comunes, a saber: constantemente, inmediatamente, precisamente, rpidamente, realmente. Asercin sta que queda sin explicacin alguna (p. 79).
En cuanto a su posicin, que se estudia en la segunda parte del trabajo bajo
Position, se dice que los adverbios se dividen en dos clases: adverbio 1 si sigue
a la accin y adverbio 11 si precede o sigue a la accin. La clase adverbio II se
subdivide en una clase menor de adverbios que en una construccin declarativa
aparecen en general antepuestos. La segunda parte de este estudio se subdivide
segn los fenmenos lingsticos que operen en la posicin de los adverbios
(fonna, funcin, significado, nmero de elementos y entonacin). Por consiguiente,
se ocupa McWilliams de los adverbios en -MENTE al tratar de la posicin que
depende de la forma ("Position depends on form") y particularmente de la
posicin en relacin con la accin ("Position in relation to the action"). Aqu
quedan insertadas las fonnas en -MENTE por tender a la posposicin. Son, por
lo tanto, adverbios 1 para los que el factor determinante de su posicin es el
morfema final -MENTE para el caso.
En la seccin sobre ]a posicin de los adverbios segn su funcin ("Position
depends on function") se tratan los adverbios en -MENTE una vez ms bajo ]a
designacin del adverbio como elemento independiente ("The adverb as an
independent element"). Afirma McWilliams (p. 113) que adverbios que de ordinario aparecen en posposicin, aparecen con frecuencia, a causa de su forma
en anteposicin perdiendo as su funcin adverbial y acaban por convertirse en
elementos independientes, esto es, elementos cuya funci6n no est ntimamente
relacionada con la accin. Por lo cual se hace difcil determinar con precisin la
funcin de estos adverbios independientes por considerarlos bien como modificadores, bien como elementos coordinadores. Los adverbios en -MENTE vienen
a formar parte de esta categora.
En el sector sobre la posicin de los adverbios segn el sentido ("Position
depends on meaning") se tratan los adverbios con significados temporales y los
adverbios con significados locativos que segn McWilliams (p. 115) se encuen-

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

283

tran en variacin libre. Como si no existieran en espaol, McWilliams no incluye


aqu los adverbios en -MENTE.
La prxima seccin la constituye la posicin de los adverbios segn el nmero
de elementos que entran en la construccin ("Position depends on the number of
elements"). En este caso, el nmero de elementos puede influir en la anteposicin
o en posposicin y puede tambin influir en la relacin posicional de un adverbio
con relacin a otro modificador de la accin. La seccin en cuestin se subdivide
en: la posicin de los adverbios en una construccin binaria (esto es, si una
sentencia o sintagma oracional consta de dos clases funcionales: accin y adverbio); la posicin de los adverbios en una construccin terciaria (esto es, tres
clases funcionales entran a fonnar parte de la sentencia accin, adverbio y un
tercer elemento); la posicin de los adverbios en una construccin cuaternaria
(esto es, cuatro clases, funcionales hacen parte de la construccin).
En el tema de la posicin de los adverbios en construcciones terciarias,
McWilliams trata el caso en que el tercer elemento es un segundo adverbio en
cuyo caso uno de los adverbios puede ser el adverbio 1 y el otro es el adverbio n.
Este tipo de construccin que lo considera como muy comn se caracteriza por ir
el adverbio [ fijo en posposicin inmediata, en tanto que el adverbio 11 puede
vacilar entre la anteposicin y la posposicin. Con lo cual se establece la ecuacin: anteposicin inrnediata equivale a posposicin. Implanta McWilliams aqu
un paralelismo entre las estructuras del sintagma nominal y las estructuras del
sintagma verbal de verbo finito. Adverbio 1 y adverbio II corresponden al adjetivo 1 y al adjetivo II.. As como las dos frases nominales equivalentes fina madera brasilea y madera brasilea fina muestran posposicin inmediata fija de
adjetivo 1 brasilea pero posicin marginal variable del adjetivo 11 fina, as en
las frases equivalentes de verbo finito esta maana fuimos de compras y fuimos
de compras esta maana, el adverbio 1 de compras se encuentra en posicin inmediata fija y el adverbio 11 esta maana se halla en posicin marginal variable.
En las construcciones de tipo cuaternario no parecen darse ejemplos, en el
corpus utilizado por rvtcWilliams, del adverbio en -MENTE.
La seccin penltima del estudio la constituye la posicin de los adverbios
segn la entonacin ("Position depends on intonation"). Aqu se tienen en cuenta
tres tipos entonacionales, a saber, la pregunta, la exclamacin y el mandato (o
ruego). En las preguntas la posicin del adverbio se caracteriza por un pequeo
cambio en comparacin con su posicin en las frases declarativas correspondientes.
El adverbio [ se encuentra siempre en posposicin en una pregunta, as que la
nica diferencia entre la declaracin Se manej correctamente y la pregunta Se
manej correctamente? radica en la entonacin. La posicin de los adverbios en
exclamacin se caracteriza por los cambios considerables que se operan en la
posicin de los adverbios 1.

2R4

KOLDOBIE FERREJRO-COUSO GONZLEZ

En las construcciones de mandato (O ruego), la posicin de los adverbios se


caracteriza por no haber ninguna variacin posicional entre estas y las construcciones declarativas, viniendo a constituir una excepcin en las [oonas declarativas. Los adverbios 1, entre los que encuentran los adverbios en -MENTE,
tienden a no ofrecer ningn cambio en su posicin.
La tarea que se impuso McWilliams queda resumida en las conclusiones (pp.
135-137). La posicin de los adverbios puede ser detenninada por cinco factores
diferentes: forma, funcin, significado, nmero de elenlentos y entonacin.
Muchas veces una posicin dada puede ser el resultado no slo de un factor sino
de dos o ms factores detenninantes. Jerrquicamente hablando, cuando dos
factores determinantes tienden a influir en la posicin de un adverbio en direcciones opuestas, la posicin verdadera en que se encuentra el adverbio manifiesta
la fuerza relativa de los dos factores. La entonacin tiende a forzar el adverbio 1
a la posicin inicial. Un segundo fenmeno es el del nmero de elementos de la
sentencia, el cual, a veces, anula el factor significado hasta el punto de fijar un
adverbio temporal (por lo comn en variacin libre) en posposicin.
La forma puede darse como un factor ms importante que el nmero de
elementos aunque un adverbio 1 tiende a colocarse ms cerca del elemento
accin que el adverbio 11. El significado puede ser un factor ms fuerte que la
forma. La funcin puede ser un factor de mayor fuerza que el significado. en
resumen se puede ver la imposibilidad de establecer una jerarqua apropiada para
los varios factores detenninantes de la posicin sintagmtica, excepto que la
entonacin ocupara un lugar destacado como el factor ms importante.
McWilliams concluye su estudio con algunas observaciones sobre el problema
de la definicin de adverbio y su condicin como una clase funcional. Segn l,
si las categoras funcionales, tradicionalmente separadas, de objeto, predicado,
adverbio y elementos independientes se agruparan en una simple categora funcional sera posible definir esta nica clase funcional por medio de su relacin
con la accin segn quede expresada por la posicin. De este modo dos subcategoras contrastables podran establecerse: modificador 1 y modificador H. El
modificador 1 expresara la cohesin ms estrecha con el elemento nuclear de su
sintagma a travs de la posposicin; as quedaran fusionados los objetos 1, los
predicados y adverbios 1. El modificador 11 expresara la cohesin estrecha con
el elemento nuclear de su sintagma a travs de la variacin posicional libre. As
quedaran fusionados los objetos II, los elementos independientes y los adverbios
11. Todo lo presenta McWilliams (p. 137) como una hiptesis que requerira una
nueva investigacin l.

I Como hiptesis habra que dejarla, creo, por no solucionar nada y s confundir el camino
andado en la delimitacin funcional de las partes del discurso.

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

285

E. GREGORES (1960)2
En este trabajo Gregores se encamina a resolver la cuestin de si los adverbios en -MENTE son: a) una forma casual, b) una forma derivada o c) una forma
compuesta.
En cuanto a lo prilnero, lo del adverbio en -MENTE como caso, parece haber
primado en tal concepcin la afirmacin de Alarcos Llorach (1951), p. 85, de
que HLa 'forma adverbial del adjetivo' en -MENTE debe considerarse como un
'casus adverbialis', pues su morfema es exigido por el 'verbo' regente: en es
celebrado justamentt.', es el 'verbo' el que exige que el plerema just- lleve el
morfema casual -mente", Tal concepcin la considera Gregores como una aplicacin en bloque de las ideas o teoras glosemticas de Hjelmslev. Quiere
Alarcos atribuir al adjetivo espaol una categora de caso cuyo nico miembro
sera el caso adverbial frente a un sincretismo de todos los otros, con lo cual
recae en la censurada tendencia de la gramtica latinizante de postular la categora
de casos en una lengua como el espaol.
Gregores considera inaceptable ver a los adverbios en -MENTE como formas
casuales del adjetivo por carecer del sincretismo de adjetivo + MENTE de
concordancia. Segn ella contrario sera hallarnos en presencia de un sincretismo
irresoluble de los miembros de dos categoras. Y peor an nos encontraramos en
presencia de una acumulacin engorrosa de elementos que entorpeceran y
complicaran el anlisis de una categora ya de por s enmaraada.
En cuanto a lo segundo, lo de) adverbio en -MENTE como sufijo de derivacin no parece tampoco una solucin justificada apoyada en lo que ha sido
discutido por K. Togeby con referencia a la terminacin -ment de los adverbios
franceses. Hay diferencias fundamentales, sin embargo, entre el espaol y el
francs en este respecto: la forma -MENTE se une siempre a la forma femenina
singular de los adjetivos, tanto en el caso de los adjetivos de dos terminaciones
(lentollenta, etc.) con10 en los de una terminacin (breve, fcil, etc.); hecho ste
comprobable mediante sustituciones por las formas superlativas, por ejemplo:
lenta ~ lentsima + mente ~ lentfsimamente, pero tambin breve ~ brevsima + mente ~ brevsimamente.
Se ve por consiguiente que la forma -MENTE se une siempre a una forma
libre, a una palabra independiente flexionada para indicar el gnero y el nmero.
En francs por el contrario no ocurre tal cosa: videmment, ardemment, etc., no
pueden considerarse sino como dos formas dependientes, una base y un sufijo.
Todo lo dicho anteriormente parece sealar el hecho de que se pueda considerar la forma -MENTE en espaol como un sufijo adverbial. A tal posibilidad de
2

La redaccin original de este estudio data de 1953.

KLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

anlisis opone Gregores argumentos claros y precisos que muestran la distincin


entre la terminacin -MENTE y el resto de los sufijos en espaol, a saber:
a) ningn sufijo se une a la forma femenina de los adjetivos; b) la alternancia
ie - e, ue - o de las bases de la sufijacin espaola (exceptuando los diminutivos) se resuelve en favor de la diptongacin; valiente y valenta, pero valientemente; bueno y bondad pero buenamente (comprese sin embargo, bondadosamente), cierto y certeza pero ciertamente; c) los sufijos son inseparables de las
bases a que se unen, en cambio -MENTE puede separarse de una o ms de ellas
y permanecer unido a una sola pero sin perder su solidaridad con las bases de
que est separado: grande y magnficamente es una secuencia gramatical espaola como lo es tambin grandemente y magnficamente, pero la secuencia
bondad y carioso sera inaceptable (la nica posibilidad sera bondadoso y
carioso). Dicho en otros trminos: entre una base y un sufijo no pueden intercalarse otros elementos de la lengua a no ser sufijos; entre una base y-MENTE
pueden intercalarse otros morfemas libres o asociados (adjetivos, adverbios,
conjunciones): camina lenta y torpemente; camina graciosa pero lentamente; se
muestra bondadosa y muy alegremente; camina graciosa aunque lentamente.
Hasta ahora han quedado negadas las posibilidades de flexin y sufijo para la
forma -MENTE3. La tercera alternativa, las formaciones con -MENTE consideradas como formas compuestas, parece encontrarla Gregores ms satisfactoria.
La alternancia de una vocal simple con la diptongacin. presupone en estas
formaciones adverbiales una doble acentuacin: una en la base (por conservarse
el diptongo), el adjetivo en este caso, y otra en la forma -MENTE. Por consiguiente, no puede verse en estas formaciones sino dos palabras, no una sola. Tal
afirmacin se encuentra apoyada por Toms Navarro Toms y Wells4
Pero cabe otra alternativa para las formas con -MENTE: a) palabra compuesta o b) frase. Tras aducir como pruebas las opiniones de Lenz, Salv y Bello
entre otros y acabar por afirmar que estas construcciones se encuentran a mitad
de camino entre un sufijo y un elemento libre de la frase (por ser separable de los
adjetivos con que se combina), tampoco parece satisfacerle esto como solucin
plausible.
La nica solucin a que acaba por inclinarse es la ya alcanzada por otros
gramticos 5: "frases adverbiales sustantivas" es la perfecta caracterizacin de
estas formaciones en -MENTE.

3 Habra que suponer que Alemany BoJufer (1920) no considera a -MENTE como sufijo por
no aparecer estudiado en ninguno de sus trabajos sobre la derivacin y composicin de las palabras
en espaol.
4 Gregores (1960, p. 95).

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

287

A. QUILIS (1963) y (1964)


El estudio de 1963 est basado en la obra potica de Fray Luis de Len y el
de 1964 en la estructura del encabalgamiento en la mtrica espaola en general y
en el cual hace Quilis unas observaciones breves sobre la cuestin de la ntima
ligadura sirremtica que existe entre el adverbio y el verbo, el adjetivo u otro
adverbio. Por consiguiente, toca el tema de los adverbios en -MENTE6.
Me refiero al primero de los dos estudios. Considera Quilis el encabalgamiento
'"como aquel desajuste que sobreviene cuando la pausa verbal incide sobre
cualquiera de los elelnentos enumerados anteriormente"7. Esto da origen a tres
tipos de encabalgamiento: a) encabalgamiento lxico 8 , cuando lo que queda escindido entre el verso encabalgante y el encabalgado es un lexema; b) encabalgamiento sirremtico cuando la ruptura sobreviene en el sirrema 9 , y e) encabalgamiento oracional, que ocurre cuando se separa entre los dos versos una
oracin adjetiva de su principal.
Afirma Quilis que "el encabalgamiento sobreviene cuando existe un desajuste entre el metro y la sintaxis"lo y que "para que este desajuste se perciba es
necesario que las partes sintcticas que se escindan las sintamos tan perfectamente
unidas que su separacin nos pueda resultar extraa"1].
Despues de innumerables experimentaciones con grabaciones en cinta magnetofnica de lecturas hechas por informantes idneos, y de posteriores anlisis
sonogrficos y espectrogrficos llega Quilis a la conclusin de que hay ciertas
partes de la oracin que en la lectura normal, el hablante las mantiene unidas.
Estos ncleos o unidades son: a) la palabra o lexema; b) Los sirremas; c) la
oracin especificativa.
El encabalgamiento, pues, tiende a sentirse en espaol como un fenmeno
expresivo ya que resulta totalmente anmalo introducir una pausa en el lugar
donde los medios sintcticos no lo permiten. Sentadas estas premisas procede
Quilis a analizar la ruptura de un lexema en varios de los versos de la obra de
Fray Luis de Len. El primer ejemplo citado es la penltima estrofa de la
composicin Vida retirada,12:
l

5
6
7

8
9
cadena
10
11
12

Gregores (1960, p. 95).


Quilis (1964, pp. 72-73).
Quilis (1963, p. 22).
Este es el tema que interesa aqu en cuanto afecta a los adverbios en -MENTE.
Serie de ncleos o unidades que permanecen ntimamente ligados y relacionados en la
hablada: sustantivo adjetivo. etc.
Quilis (1963, p. 22).
Quilis (1963, p. 22).
Quilis (1963, p. 23).

288

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

y mientras miserablemente se estn los otros abrasando


con sed insaciable
del no durable mando,
tendido yo a la sombra est cantando.

y el segundo, la traduccin de Fray Luis de la Oda XIV del Libro primero de


Horacio l3 :
No tienes vela sana,
no dioses a quien llames en tu amparo
aunque te precies vanamente de tu Jinaje noble, y claro,
y seas noble selva en Eugino.

Estas estrofas revelan el aprovechamiento de la caracterstica ditnica de los


adverbios en -MENTE I4
Los dos casos parecen ser los nicos en que Fray Luis echa mano de la
hipermetra adverbial al quedar tanto el adverbio miserablemente como vanamente divididos en dos versos. Hay que aadir que otros escritores y poetas han
hecho uso de tal licencia potica. Quilis menciona dos casos ms. El primero lo
encuentra en la Gramtica de la lengua castellana de Vicente Salv quien
menciona que Maln de Chaide al traducir el principio del captulo IV del
profeta Ams en la Conversin de la Magdalena sin necesidad de cortar el adverbio por imitar a los latinosl 5 La estrofa en cuestin es l6 :
Odme vacas gordas
Del monte de Samaria
A do paceis las yerbas regaladas,
y las orejas sordas
Volvd ya voluntariaMente, del verde pasto descuidadas.

13 Quilis (1963, p. 23).


14 Parece sealar esta conciencia de Fray Luis de Len la posibilidad de que en su poca se
considerara -MENTE como independiente, con acentuacin propia (como en el latn vulgar).
15 Quilis (1963, p. 31).
16 Quilis (1963. p. 27). Cita Quilis un ejemplo en italiano que Francisco de Quevedo ya
haba mencionado en sus estudios sobre el tema. Se trata de un fragmento del Orlando furioso de
Ludovico Ario~to.

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

289

El segundo caso lo t.oma Quilis de la Ortologa de Robles Dgano. Se trata de


una estrofa de Moratn 17:
Pero si sorda ests cmo afrentosaMente te nombra aun para abominarle?

En los dos de Fray Luis cree ver la influencia de Horacio, sobre todo, en la de
los versos de CarminUlTI Liber primus, XXXI, vs. 17-20 que dicen l8 :
Furi paratis et ualido mihi,
Latoe, dones, at, precor, integra
cum mente., nec turpem senectam
degere nec cithara carentem.

La costumbre de escindir el adverbio que parece ser tambin propia de la


versificacin griega segn comenta Eduardo Benot l9 no convence a Quilis quien
afirma20 :
En los dos versos del profesor salmantino vemos reunidos los dos casos
horacianos: de un lado la separacin de un prefijo que en aquella poca ya se
senta como unido; por otro, el conjunto cum integra mente, valorado de manera
estilstica, junto a miserablemente 21
En el estudio de 1964 vuelve Quilis a tocar el tema de los adverbios en
-MENTE desde el punto de vista de la trabazn de stos con los elementos con
que se une: verbo, adjetivo, adverbio. En este caso utiliz textos modernos
tomados de escritores y poetas (Valle-Incln, Juan Ramn Jimnez) que dio a
leer a varios informantes para constatar con la ayuda de grabaciones hasta qu
punto las pautas ortogrficas influyen en la trabazn sirremtica.
Uno de los textos usados por Quilis es el siguiente de Juan Ramn Jimnez 22 :

17 Quilis (1963, p. 35).


18 Quilis (1963, p. 24).
19 Citado por Quilis (1963. p. 33).
20 Quilis (1963, p. 24).
21 El otro caso de que habla Quilis en esta cita es el del vocablo interlunia en los versos 912 del Carmnum Liber prrnus XXV de Horacio (Quilis 1963, p. 24).
Inuicem moechos anus arrogantis
flebis in solo leuis angiportu
Thracio bacchante magis sub interlunia uento.
22 Quilis (1964, p. 73).

290

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

y de ellos es de donde debieras ir cayendo,

blandamente, como de una suave ladera.

Segn Quilis, Juan Ramn Jimnez mismo no hace pausa en la lectura de este
prrafo entre las perfrasis debieras ir cayendo y el adverbio blandamente; lo cual
indicara la falta de intencin del poeta de realzar el adverbio de modo 23 La mayor
parte de los informantes de Quilis, llevados por la puntuacin, aislaron el adverbio
del resto haciendo pausa tras cayendo y antes de como. Sin embargo, al presentrseles el texto sin las pausas ortogrficas, los lectores asociaron ntimamente la
accin de caer con la modificacin modal blandamente, resultando de este modo
la lectura anloga a la de Juan Ramn limnez que prescindi voluntariamente la
puntuacin quiz por figurar asociados en su pensamiento los dos conceptos.

B. POTTIER (1968)
Este estudio que trata de problemas relacionados con los adverbios en
-MENTE forma parte de una coleccin de artculos dedicados a problemas
generales de lingstica. El estudio fue publicado en francs en 1960. La tenninologa y concepcin sistemtica del estudio se debe a las teoras de las incidencias 24 desarrollada por Gustave Guillaume. A travs de la teora de las incidencias intenta Pottier dar una definicin de adverbio no sin dejar de advertir que
es uno de los conceptos peor definidos de la gramtica (1968, p. 217). Para
Pottier el adverbio no es ms que un adjetivo del verbo.
Observa que en una frase como La golondrina cruzaba rpida por el cielo,
rpida es formalmente un adjetivo por la concordancia de gnero y nmero que
se suscita por incidencia con el sustantivo sujeto golondrina pero por su posicin
en el sintagma oracional incide en el verbo tambin. Sin embargo, hay otro tipo
de adverbios que Pottier llama "adverbios cortos" que parecen ser descendientes
de un tipo latino vulgar al cual se haba extendido la terminacin -e. Se trata de
los adjetivos de forma neutra (o masculina) del tipo fuerte, duro. alto, etc.:
hablar fuerte. trabajar duro. La falta de concordancia con el sustantivo sujeto
revela que se trata de una incidencia puramente verbal. Hace notar Pottier que
este tipo de funcin adverbial se da en casi todas las lenguas (por ejemplo, en
portugus, en francs, en aragons antiguo, etc.).
Las construcciones del tipo psicolgicamente dbiles las juzga Pottier como

23 Quilis (1964, p. 73).


24 Pottier (1966, p. 7) define el concepto de incidencia como "la relation directe qu est tablie entre un tenne subordonn (ou secondaire) et un tenne subordonnant (ou primaire)".

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

291

posibles sobre todo en literatura, admitiendo con H. Meier (1948, p. 107) que no
existe problema cuando se trata de un participio pasado, por formar ste parte de
la categora verbal por naturaleza como en el caso de tiernamente enamorado,
agradablemente sorprendido 25 Tras admitir que la incidencia de un adjetivo
sobre un sustantivo es de naturaleza verbal -el libro rojo no es ms que la supresin de la cpula ser (el libro es rojo) o por nominalizacin con que (el libro
que es rojo)-, afinna que por eso encontramos adverbios en -MENTE que
califican al adjetivo o nrls propiamente, encontramos adverbios que califican Hla
incidencia del adjetivo sobre el sustantivo" (1968, p. 222). Entendida as la
funcin de los adverbios en -MENTE stos no son otra cosa que adverbios
cualitativos por incidir sobre una representante verbal, sea este un verbo o una
modificacin de naturaleza verbal.
Pero existe otra posibilidad: que el adverbio en -MENTE incida sobre otro
adverbio. Con lo cual el adverbio se convierte en cuantitativo, es decir, pierde el
carcter de cualitativo. Los ejemplos que da Pottier estn tomados del francs
coloquiaF6, pero ninguno del espaol, indudablemente por no darse en espaol la
construccin de tipo francs (-MENTE seguido de -MENTE).
En conclusin Pottier resume las caractersticas formales de los adverbios en
-MENTE (1968, p. 223) de la siguiente manera:
a) Adverbios que califican a verbos (caso general):
"Pedro duerme tranquilamente".
b) Adverbios que califican una calificacin (caso no productivo):
"'Su tez(es) rubiamente bella".
c) Palabras de relacin que cuantifican un adjetivo o un adverbio (lenguaje
familiar):
"Es un problema chuscamente difcil".
Lo que resta del estudio lo dedica Pottier a la consideracin del problema
histrico de la sucesin de adverbios en -MENTE en las diversas lenguas romances
(cataln antiguo, provenzal antiguo, francs antiguo, aragons antiguo, portugus
antiguo, italiano antiguo, etc.). En otras palabras, hace un estudio de la presencia
o ausencia del morfema sufijal en cuestin y su orden de colocacin cuando se
une a varios adjetivos-base en cadena, por ejemplo, frente al tipo hereditario 27
del espaol y del portugus (liberal y francamente) se encuentra el caso del ca25
trata en
26
27

Ms adelante (p. 223) afinna que en lugar de tratarse de una verdadera calificacin, se
realidad de cuantitativos que desempean el papel de intensjicativos.
J[ mange vachement rapidement. Tu travailles drlement lentement.
En latn se da la construccin que se asemeja a la del espaolo portugus modernos: bona
el grata mente.

292

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

taln (liberalmente i franca) o del francs (libralement el franchement) para no


citar sino unas pocas lenguas. Por apartarse este tema diacrnico de la serie de
adverbios del propsito central de este estudio, me he I,imitado tan slo a hacer
mencin breve del mismo.
En tnninos parecidos a los expuestos aqu se expresa Pottier en su Introduction
a l' tude de la morphosyntaxe espagnole (1966, p. 78). Para evitar la repeticin
de los conceptos renunci a hacer la exposicin contenida en la obra mencionada.

EVOLUCIN DEL SUFIJO -MENTE EN LA LITERATURA ESPAOLA MEDIEVAL


El sufijo -MENT(E) lo heredaron las lenguas romnicas, excepto las de la
Romania oriental, del caso ablativo singular femenino del sustantivo latino mens,
mentis que se vena asociando a adjetivos de naturaleza 1ambin femenina para
generar frases adverbiales que en principio significaron nicamente estados
mentales (firma mente, forti mente, obstinada mente, etc.). Despus fueron
adoptando un sentido ms general (bonamente, ipsa mente, etc.). Y, por ltimo
es decir, una vez pasado el perodo de apogeo del latn vulgar la capacidad
anexiva del segmento llega a adquirir un ndice de flexibilidad tan lato que
cualquier adjetivo capaz de dar origen a un adverbio de nlodo poda convertirse
en eje de un calificativo invariable (longamente, solamente. etc.). Introducindose as, o sea, a travs de un doble proceso (semntico-moJjolgico) en los
distintos idiomas romances modernos, salvo en el RUMANO, COlno ya se deja
sealado 2R
No obstante, la incorporacin del segmento de origen nominal -MENT (E),
(-MIENTRE, -MIENT, -MIENTE) al correspondiente adjetivo coadyuvante se
fue verificando a travs de un dilatado proceso de oscilacin durante la etapa
medieval. En el cual ambos trminos (adjetivo-sustantivo) bien eran estructurados en yuxtaposicin (fuerte mientre, egual mente, etc.), bien en sntesis
(soheiamente, sennaladamientre, etc.), segn constatan las diversas obras literarias generadas en la Alta y Baja Edad Media 29
Esta oscilacin formal, practicada en los diversos gneros literarios medievales,
inicia su singladura artstica en el siglo XII, subsiste a lo largo del XIII y del XIV
y desaparece en el XV, al ser consolidada la frmula sinttica. a principios del
Renacimiento.
28 Nilsson-Ehle. Hans, (1941), Les adverbs en -ment com- plements d' im 1'erb en j;'ml~'ais
moderne: Etude de classement syntaxque et smantique, Lund, Suede, C. W. K. Gleerup. p. 16.
29 Nilsson-Ehle, Hans, p. 73.

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

293

Una vez hechas estas consideraciones previas, pasamos a revelar la diversidad formal que nuestro adverbio presenta en la primera cronologa de la Literatura Espaola.
En el siglo XII y con respecto a la nica muestra artstica que avala a la
Escuela del Mester de Juglara, el Cantar de Mo Cid, consignamos que, entre
los tres mil setecientos treinta y cinco versos que configuran la obra, trece
adverbios sufijados se identifican yuxtapuestos. Sirva de ejemplo la cita textual
que transcribimos a continuacin:
"Delos sos oios fuerte mientre lorando"
(M. Pdal, CDMC, 909-1)

Durante el siglo XIII, a travs de Gonzalo de Berceo y del autor del Libro de
Alexandre, se introduce la forma simple del adverbio en -MENTE en la Literatura Espaola:
"Solamientre en ella cabe~a non tomamos"
(Berceo, VOSOOS. 100-20S)
"Ser del rey del ~ielo a/lament
(1. C. Murillo. LOA, 291-2631)

re~ebido"

No obstante, ambas estructuras aparecen conjugadas en el Libro de Apolonio,


en el Poenla de Fernn Gonzlez, en el texto de origen franco-provenzal, Vida
de Santa Maria Egipciaca y en la prosa de Alfonso X el Sabio:
"Torno ala mesnada fiera myente conturbado"
(M. Alvar, LOA, 178-480)
"Que fue rnuy leal miente de sus omnes seruido"
(A. Zamora Vicente, POFG, 138-462)

"Piadosa mente con grant amor"


(M. Alvar, VDSME, 537-223)
HE comenc;aron a foyr tan derramada mientre, que todos hy murieron que
no escapara ninguno",
(Alfonso X, PCGDE. 47-1)

En el siglo XIV registramos en las obras del Infante Don Juan Manuel
seiscientas cincuenta formas adverbiales sufijadas en -MENTE. Todas ellas
configuradas en forma analtica:

294

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

"E andar lo mas apostada mente que pudieren


en sus guisamientos et en sus vestiduras"
(1. Don Juan Manuel, LDLE, 212-13)

El Libro de Calila e Dymna en los cien adverbios que contiene en -MENTE


figura la forma simple:
"Can non podrie ser que yo non sirva lealmente mi seor"
(BAE, CED, 770-11)

En el texto Castigos e Documentos del rey Don Sancho hay que sealar el
empleo constante de la forma en sntesis para los cuatrocientos cincuenta tnninos que en -MENTE incluyen sus pginas:
"Por do naturalmente obrando, por ellos seremos puestos con los santos en
la gloria celestial"
(BAE, CEDDRDS, 87-14)

El Libro de los Enxemplos ofrece un total de trescientos cincuenta y cuatro


fonnas adverbiales en -MENTE, doce de las cuales se encuentran disgregadas:
"Cuenta Valerio en el libro sexto, Captulo ITI, que un juez juzg falsa
mente"
(BAE, LDLE, 452-8)
"E all facie sus oraciones continuamenf"
(BAE, LDLE, 842-20)

Veinte adverbios con sufijo en -MENTE encierra el Libro de las consolaciones de la Vida humana, siete de los cuales, disgregados:
"As como Job ordenada mente concluye de algunos mundanales de su
pros peridat"
(BAE, LDLCDL VH, 564-23)
"Cuando mas fueren impunidos de la fuerza de la tentacin mas homildosamente reconoscen su flaqueza"
(BAE, LDLCDL VH, 571-7)

La gran conquista de Ultramar presenta trescientos cuarenta y tres adverbios


sufijados en -MENTE separados de su apndice y ochocientos cuatro asociados:

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

295

HeOn este acuerdo salieron de Escalona Encubiertamientre por la ribera de


la mar"
(BAE, LGCDU, 535-17)
"E nuestro Seor pso1es luego en los corazones
que fuesen muy alegre mente"
(BAE, LGCDU, 345-8)

El Libro de Buen Amor solamente ofrece una forma en yuxtaposicin de los


doce adverbios sufijados que contiene la obra:
"Quantas liebres vey prendi de buena miente"
(A. de Hita, LDBA, 515-1357)

"La contumbre es otra natura ciertamente"


(A. de Hita, LDBA, 129-166)

El gnero narrativo del siglo XV testimonia por medio de las novelas sentimentales siguientes: El siervo libre de amor, la Crcel de amor y el Tratado de
amores el empleo de la fonna nica en la representacin del adverbio con sufijo
-MENTE:
Hy no solamente mis lgrimas a acrecentar mis dolores me han bastado"
(D. de San Pedro, TDADA YL, 137-43)

Los tratados de historia: Generaciones y semblanzas, Mar de historia5; y las


Cartas de Femn de Guzmn, ostentan la forma simple en todos los adverbios
sufijados que les pertenecen:
"Mas aun penetro e alcan~o los secretos de la filosofa marauillosamente"
(F. P. de Guzmn, GYS, 99-11)

La composicin rnitolgica Los doce trabajos de Hrcules emplea para el


trmino que investigamos la estructura asociada:
"El octavo trabajo de ercules fue quando se combato con el gigante
atheleo e Jo ven~io esforradamente"
(E. de Villena, LDTDH, 73-27)

En El Cohacho se mantiene la misma lnea de sntesis respecto al adverbio


sufijado:

296

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

"Mira e vee quntos daos de locamente amar provienen"


(A. de Talavera, EC, 141-9)

En la poesa del siglo XV se hace uso nicamente de la fnnula sintetizada:


" ... Providen~ia, tu, dime
mejor aquesta mi dubda que non
entiendo estos atanto discretos seyendo, porque se quisieron amar
(Juan de Mena, ELDF, 61-109)

~'iegamente"

"Si juzgamos sabiamente


daremos lo non venido
por passado"
(J. Manrique, CP, 144-16)

Lucas Femndez en el ttulo Comedia Pastoril inserta una forma adverbial


desglosada y otra de la misma naturaleza conjunta:
"Que me praz de la traer
de huena miente por ti"
(L. Femndez, FYE, 87-175)
"Y damme penas tamaas
que mortalmente me aquexen"
(L. Fernndez, FYE, 105-63)

LA FORMA ADVERBIAL GUISA EN LA LITERATURA DE LA ALTA Y


BAJA EDAD MEDIA3
El hecho de que sin solucin de continuidad y en paralcJo al proceso evolutivo de nuestro adverbio, otra fnnula de procedencia gernlnica, GUISA, se
haya infiltrado tanto en las tiradas juglarescas como en los tetrstrofos de Clereca o en la prosa de Alfonso X nos llev a extraer los textos que atestiguan su
exigua existencia en el campo artstico:
"ARuisa de membrados andan das y noches"

(M. Pidal, COMe, 1015-3700)

30

Menndez Pidal, Ramn, Cantar de Mo Cid: texto, gramtica y \'ol'ahulario, pp. 106-107.

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

297

"Fueron de fiera guisa las bestias embravidas"


(1. C. Murillo, LDA, 340-2172)
"Eque duna guisa o dotra quedes perderie"
(Alfonso X, PCGDE, 73-43)
"Encantla de guisa que la envele"
(A. de Hilta, LDBA, 547-1457)

TOTAL DE FRECUENCIAS DE CADA UNA DE LAS ESTRUCTURAS DEL


ADVERBIO EN -MENT (E) CONSIGNADAS EN LOS TEXTOS MEDIEVALES PRACTICADOS:
ESTRUCTURA ANALTICA

SIGLO
SIGLO
SIGLO
SIGLO

13
51
56
3

Advbs.
Advds.
Advds.
Advbs.

1.085 Avbs.
2.399 Avbs.
618 Avbs.

123 Advbs.

4.102 Avbs.

XII ...............
XIII ..............
XlV ..............
XV ...............

TOTAL .....................

ESTRUCTURA SINTTICA

CUADRO GENERAL DE FRECUENCIAS SUFIJALES UTILIZADAS EN


LOS TEXTOS MEDIEVALES PRACTICADOS:
SIGLOS

-MIENTRE

-MIENT

-MIENTE

-MENT

-MENTE

GUISA

745

20

42

45

32

12

XIV

295

18

3.291

XV

XII

12

XIII

TOTAL

1.052

20

44

63

565
3.888

21

29R

KOLDOBJE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

ABREVIATURAS BIBLIOGRFICAS DE LAS OBRAS EMPLEADAS


PARA REALIZAR EL "CORPUS LINGSTICO"
ALFONSO, X: Primera crnica general de Espaa, Madrid, Gredas, Tomos 1 y
11, 1977 (PCGDE).
ALV AR, M.: Libro de Apolonio, Valencia, E. Castalia, 1976 (LDA).
- Vida de Santa Mara Egipciaca, Madrid, C. S. 1. C., 1969 (VDSME).
BAE: La gran conquista de Ultramar, Atlas, T. XLIV, 1951, (LGCOU).
- Calila e Dymna, Madrid, Atlas, T. LI, 1952 (CEO).
- Castigos e Documentos del Rey Don Sancho, Madrid, Atlas, T. LI, 1952
(CEDDRDS).
- Libro de los Enxemplos, Madrid, Atlas, T. LI, 1952, (LDLE).
- Libro de los gatos, Madrid, Atlas, T. LJ, ]952, (LDLG).
- Libro de las consolaciones de la vida humana, Madrid, Atlas, T. LI, 1952
(LDLCDLVH).
BERCEO, G.: Milagros de Nuestra Seora, Madrid, Espasa-Calpe, S. A., 1922
(MDNS).
- Signos que aparecern antes del juicio final, Madrid, Clsicos Castalia, 1980,
(SQAADJF).
- Duelo de la Virgen, Madrid, Castalia, 1980 (OOLV).
- Martirio de San Lorenzo, Madrid, Castalia, 1980 (MDNS).
C. MURILLO, J.: Libro de Alexandre, Madrid, E. Nacional, 1978, (LDA).
F. LUCAS: Farsas y glogas, Madrid, Castalia, 1976 (FYE).
J. M. INFANTE (DON): Libro del Caballero el del Escudero, Madrid, Gredas,
O. Comp., 1 1982 (LDCEDE).
- Libro de las Armas, Madrid, Gredos, O. Comp., 1, 1982, (LDLA).
- Libro Enfenido, Madrid, Gredas, O. Comp., 1, 1982 (LE).
- Tractado de la Asuncin de la Virgen, Madrid, Gredas, O. C. l., 1982
(TDLADLV).
- Libro de la caza, Madrid, Gredas, O. C. l., 1982 (LDLC).
MANRIQUE, J.: Poesa, Madrid, Ctedra, 1982-8. ed. (pe)E).
MARTNEZ DE TOLEDO: El Corbacho, Madrid, Ctedra, 1979 (EC).
MENA, JUAN: El Laberinto de Fortuna, Madrid, Espasa-CaJpe, 1973, (ELDF).
M. PIDAL, R.: Cantar de Mio Cid, Madrid, Espasa-Calpe, 1969, 6. ed. (CDMC).
PULGAR, F.: Claros Varones de Castilla, Madrid, Espasa-Calpe, 1969, 4. ed.
(CVDC).
R. PADRN, J.: Siervo libre de amor, Madrid, Castalia, 1976, (SLDA).
RUIZ, J.: Libro de Buen Amor, Madrid, Gredos, 1967, (LDBA).
SAN PEDRO, D.: Tractado de Anu)res de Arnalte y Lucenda, Madrid, Ctedra.
(TDADAYL).

PRECEDENTES MEDIATOS E INMEDIATOS DE LOS ADVERBIOS EN -MENTE

299

VILLENA, E.: Los doze trabajos de Hrcules, Madrid, R.A.E., 1958.


ZAMORA, V.: Poerna de Fernn Gonzlez, Madrid, Espasa-Calpe, 1946, 5. ed.
(PDFG).

BIBLIOGRAFA CONSULTADA
ALARCOS LLORACH, EMILIO; 1951: Gramtica estructural, Madrid, EdiL
Gredos.
ALONSO, AMADC) y HENRQUEZ UREA, PEDRO; 1964: Gramtica
castellana, 2. curso, Buenos Aires, Edit. Losada, S. A.
BALL Y, CHARLES; 1932: Linguistique f?nrale el Iinguistique fran~'aise,
Paris, E. Leroux.
CANTINELLI, ANTONIO; 1969: Esquema formal de las partes de la oracin,
en Espaol Actual. Madrid, OFINES, Nm. 13, pp. 1-2.
FERNNDEZ, SAL VADOR; 1951: Gramtica espaola: los sonidos, el nonlbre y el pronombre, Madrid, Revista de Occidente.
GILI y GAYA, SA1\1UEL: 1947-57): Tesoro lexicogrfico (1492-1726), Madrid, Consejo Superior de Investigaciones Cientficas, t.l: A-E.
- 1953: VOX: Diccionario general ilustrado de la lengua espaola, Barcelona,
Publicaciones y Ediciones Spes, S. A., 2. ed. corregida y ampliada.
GREGORES, EMMA; 1960: Las formaciones adverbiales en -MENTE, en Filologa, Buenos Aires, t. 6, pp. 77-102.
HADLICH, ROGER L.; 1971: A transformational grammar of Spanisch. Englewood Clifs, New Jersey, Prentice-Hall, Inc.
- 1973: Gramtica transformativa del espaol (traduccin del ingls de Julio
Bombn), Madrid., Editorial Gredos.
LENZ, ROBERT B.:; 1944: La oracin y sus partes, Santiago, Chile, Editorial
Nascimiento.
LORENZO, EMILIC); 1971: El espaol de hoy, lengua en ebullicin. Madrid,
Editorial Gredos, S. A. 2. ed.
MARTN DE RIQUER-JOS M. VALVERDE; 1968: Historia de la Literatura
Universal, Barcelona, Editorial Planeta, S. A., 2. ed.
MCWILLIAMS, RALPH DALE; 1954: The adverh in colloquial Spanisch, en
Henry R. Kahane y AngeJina Pietrangeli, eds., (1954), Descriptive Studies in
Spanish Grammar, Urbana, I1linois, The Univesity of IlIinois, pp. 73-137.
MENNDEZ PIDAL, RAMN; 1911: Cantar de Mio Cid: texto, gramtica y
vocahulario, Madrid, Imprenta de Bailly-Bailliere e hijos (1908-1911), 3
vals.
- 1952: Manual de gramtica histrica espaola, Madrid, Espasa-Calpe, S. A.

300

KOLDOBIE FERREIRO-COUSO GONZLEZ

1968: Orgenes del espaol: Estado lingstico de la Pennsula Ibrica hasta


el siglo Xl, Madrid, Espasa-Calpe, S. A.
MOLINER, MARA; 1966-67: Diccionario de uso del espaol, Madrid, Editorial Gredas, S. A.
NILSSON-EHLE, HANS; 1972: Les adverhs en -ment complements d' un verh
en fran(ais modernes: Etude de classement syntaxique et semantique, Lund,
Suede, C. W. K. Gleerup.
POTTIER, BERNARD; 1966: Introduction a l' tude de la morphosyntaxe espagnole, Pars, Ediciones Hispanoamericanas.
QUILIS, ANTONIO; 1963: Los encabalgamientos lxicos en -MENTE de Fray
Luis de Len y sus comentaristas, en Hispanic Review, Phladelphia, t. 31, pp.
22-39.
- 1964: Estructura del encabalgamiento en la mtrica espaola, Madrid,
Consejo Superior de Investigaciones Cientficas.
RO, NGEL DEL; 1963: Historia de la literatura espaola, New York, Holt,
Rinehart and Winston, edicin revisada, vols. 1 y 11.
-

También podría gustarte