Roles

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ANLISIS DE LOS MITOS Y ROLES DE GNERO EN

LOS CUENTOS DE HADAS

1. JUSTIFICACIN
2. LA TRADICIN DE LOS CUENTOS DE HADAS
3. FUNCIN DE LOS CUENTOS DE HADAS DESDE LA
PSICOLOGA INFANTIL
4. ANLISIS DE LOS MITOS DE LOS CUENTOS CLSICOS
5. CONCLUSIONES
6. DERECHOS DE LOS NIOS/AS A ESCUCHAR CUENTOS
7. REFERENCIAS BIBLIOGRFICAS

1. JUSTIFICACIN
Esta monografa tratar de analizar los mitos y los roles de gnero que
existen en nuestros cuentos de hadas ms clsicos, que nos han acompaado
a lo largo de nuestra infancia, y por lo tanto, han tenido mucho que ver en
nuestra educacin en general y en nuestra educacin sexual y afectiva en
particular.
Sin pretender ser exhaustiva, he escogido aquellos cuentos que he
considerado ms habituales en las estanteras de nuestras casas y que deduzco
que la mayora hemos escuchado y contado en ms de una ocasin.
Algunos de ellos han traspasado ya las barreras de la literatura escrita y
se han convertido en pelculas de dibujos animados o de actores y actrices de
carne y hueso, por lo que su influencia se ha pluralizado. Y pronto, sern los
libros electrnicos los que se convertirn en transmisores de los valores que
antes de desprendan de hojas satinadas con grandes dibujos... Supongo que
todo progreso es positivo y que ser un nuevo medio de hacer llegar la
tradicin a los/as ms pequeos/as, pero... espero que ello no termine con la
imagen de una madre/padre leyendo un cuento al borde de la cama de su
nia/o antes de dormir.

2. LA TRADICIN DE LOS CUENTOS DE HADAS


La mayora de nuestros actos, de nuestras motivaciones, de nuestras
pasiones, estn apoyados en una larga historia. Historia que nuestros/as
antepasados/as expresaron en imgenes mticas, en leyendas, en cuestos de
hadas, en folklore y en sueos compartidos por poblaciones enteras.
En las tribus primitivas (y en algunas todava existentes) es frecuente
observar cmo un jefe brujo transmite a su pueblo sus experiencias
msticas, sus sueos, y cmo stos marcan el devenir de la comunidad.
Historias de escasa credibilidad, que cumplen una funcin indispensable en la
colectividad y que la guan para la consecucin de sus fines.
En nuestros das y nuestras sociedades civilizadas, no estamos tan lejos
de esas tribus, al menos en lo que a finalidades se refiere. Los cuentos de
hadas y el folklore, retratan modos de comportamiento de poblaciones. En
cada pueblo, en cada familia, se cuentan historias y ancdotas que
constituyen el hilo conductor de la tradicin. stas dan sentido de
pertenencia, de identidad, nos guan en un determinado proceso de
desarrollo, nos dicen cules son los valores de nuestra sociedad, los roles
adscritos a cada gnero, cul es nuestro origen y cul debiera ser nuestra
meta... En una palabra, nos construyen.
Mucho antes de que existiera una literatura escrita exclusivamente
para nios/as, los cuentos populares, de hadas, se transmitan a travs de la
tradicin oral y de generacin en generacin. Durante siglos, los cuentos eran
contados entre personas adultas y para adultos/as, slo que, de repetirse una
y otra vez, llegaron tambin a la infancia. Ello se debi no slo a la
posibilidad que les brindaban de desarrollar su fantasa, sino tambin porque

en su mayora trataban de realidades que de un modo u otro, les tocaban


de cerca. As, los cuentos se transformaron en un gran tesoro para la infancia,
incluso cuando an no exista una literatura infantil propiamente dicha, y en
pocas en las que la pedagoga, filosofa o psicologa todava desconocan su
vital influencia.
Desde mucho antes de que se inventaran la tinta y el papel, la infancia
se apoder de los cuentos sencillos de la tradicin oral no slo porque les
fascinaba su forma y contenido, sino tambin como una forma de defenderse
de los/as adultos/as que los/as ignoraban como personas, con derecho a
contar con una literatura accesible a su nivel lingstico e intelectual.
No es casual que a partir del siglo XVII, cuando Charles Perrault y los
hermanos Jacob y Wihelm Grimm compilaron los cuentos de la tradicin oral,
empez a perfilarse la literatura propiamente infantil. Antes de este
acontecimiento, todos los libros destinados a la infancia tenan un carcter
didctico y de moralizacin, mediante los cuales transmitan ideas elaboradas
a imagen y semejanza de las personas adultas y las clases dominantes. Sin
embargo, despus del siglo XVIII, esta literatura didctica y moralizadora
perdi su influencia a favor de que las ideas sobre la infancia avanzaron
paralelamente al desarrollo de las relaciones sociales.
El salto del feudalismo al capitalismo fue un proceso fundamental a
favor de la literatura infantil, puesto que a medida que se transformaban las
estructuras socioeconmicas, se transformaban tambin los cnones de la vida
cultural y, por lo tanto, de la literatura en general. Los escritores del
romanticismo

no

tardaron

en

sustituir

la

literatura

que

imparta

conocimientos acadmicos y normas tico-morales, por una literatura


fantstica y llena de cdigos fascinantes, que estimulaban el desarrollo de la
imaginacin y la sensibilidad infantil.
Muchos de los cuentos de la tradicin oral fueron modificados y
adaptados para la infancia; unas veces se adapt el contenido; otras veces se
adapt la forma, pero siempre tomando como base el desarrollo cognitivo de
estas edades. Esto mismo ocurri con las obras de los clsicos de la literatura

universal, que no habiendo sido escritas exclusivamente para la infancia,


fueron ledas por sta una vez adaptadas en su forma y contenido
En el Siglo XX, se comprendi que la literatura forma parte de la vida
de los nios y nias desde temprana edad y es uno de los alimentos ms
preciosos para su psique, por lo que fueron muchos/as los/as autores/as que
escribieron obras para ellos/as; es ms, cada da con ms frecuencia es fcil
encontrar en las bibliotecas la literatura infantil no slo clasificada segn el
gnero, sino tambin segn la edad de los/as futuros/as lectores/as.
Siendo sta una gran noticia, no podemos pasar por alto que muchos de
estos cuentos tradicionales ingenuos, esconden un mensaje claramente
diferenciador y primitivo, acorde en ocasiones con el momento histrico en
que fueron escritos, pero que hoy por hoy todava siguen teniendo vigencia y
continan trasmitiendo valores y roles muy discutibles. Modelos de hombres y
mujeres que repiten esos mismos modelos de hombres y mujeres en los
cuentos, y si los modelos sociales que le proponemos a nuestra descendencia
no evolucionan, la sociedad seguir ralentizando su avance hacia una
humanidad ms igualitaria.
La formacin de las mujeres y hombres del futuro est en manos de
todos/as, sern muchas las influencias, pero gran parte de las diferencias de
gnero se inculcarn sobre los seis o siete primeros aos de vida, poca en la
cual la influencia de los cuentos es crucial.
Desde muy pequeos/as, los nios/as buscan su lugar, buscan formar
parte del grupo y qu mejor forma que repitiendo los modelos sociales de
referencia e identificndose rpidamente como nios o nias. A partir de este
condicionamiento social, le proponemos a los/as ms pequeos/as modelos de
comportamiento que deben ir asumiendo y a la vez poniendo en prctica,
para que se les reconozca como hombres y mujeres. Un ejemplo tpico de las
expectativas puestas en cada gnero es la tpica escena en la que una nia de
unos ocho o nueve aos ayuda en las tareas de la casa y se la refuerza
diciendo ya eres toda una mujercita, hacindose lo propio cuando un nio
de la misma edad se va al ftbol con su padre.

Hay mucho trabajo por delante en el camino a la igualdad, y espero


que esta reflexin a modo de monografa nos ayude a estar un poquito ms
cerca de ese preciado objetivo.

3. FUNCIN DE LOS CUENTOS DE HADAS DESDE LA PSICOLOGA


INFANTIL
Mientras nos cuentan y contamos cuentos, en ellos hallamos modelos y
contramodelos, identidades y diferencias, ilusiones e ideales, alucinaciones y
pesadillas. La imagen que tenemos de nosotros/as mismos/as, es en parte una
representacin imaginaria, un efecto de los cuentos que nos cuentan y
contamos y en imprecisa medida, una creacin fantstica.

El psiclogo suizo Jean Piaget estaba convencido de que la infancia


estructura su capacidad y sus conocimientos a partir de su entorno y de s
mismos/as, por medio de estructurar sus experiencias e impresiones, y
organizar sus instrumentos de expresin. As, cuando los/as nios/as escuchan
un cuento fantstico o de hadas que trata sobre algo nuevo, pueden aprender
y asimilar con la ayuda de sus conceptos y experiencias anteriores, para as
alcanzar una comprensin ms profunda y desarrollar su nuevo concepto,
acomodando sus conocimientos nuevos a sus conocimientos viejos.
Segn confirman muchos antecedentes psicolgicos, la fantasa de la
infancia es una de las condiciones ms importantes para la asimilacin de la
experiencia social y los conocimientos. Estos datos no slo se corroboran
desde la psicologa, incluso Einstein tuvo algo que decir al respecto. Un da,
una madre angustiada se dirige al padre de la Teora de la Relatividad para
pedirle un consejo: Qu debo de leerle a mi hijo para que mejore sus
facultades matemticas y sea un hombre de ciencia? Cuentos, contest
Einstein. Muy bien, dijo la madre. Pero, Qu ms? Ms cuentos, replic
Einstein. Y despus de eso?, insisti la madre. An ms cuentos, acot
Einstein.

Para que la literatura infantil guste y funcione como tal, es necesario


que est anclada en el lenguaje infantil, y que el/la escritor/a que quiera
acercarse a la infancia por el camino del arte, debe sumergirse en el
desarrollo idiomtico de sta, con el fin de no incurrir en el error de hacer
una mala literatura bajo el nombre de literatura infantil.
Si se parte del criterio de que el pensamiento y lenguaje de la infancia
son diferentes a los de la adultez, entonces es lgico que el/la escritor/a
tenga que esforzarse por entender a sta, informndose de cmo interpreta y
experimenta su mundo cognoscitivo. Adems, requiere tener una profunda
sensibilidad, una predisposicin para aprender de la infancia y una capacidad
para comprender que, lo que es cierto para la adultez no lo es
necesariamente para los/as ms pequeos/as.
Para que una historia mantenga de verdad la atencin de la infancia, ha
de ser divertida y estimular su curiosidad. Pero, para enriquecer su vida, ha
de avivar su imaginacin, ayudarle a desarrollar su intelecto y a clarificar sus
emociones; ha de estar de acuerdo con sus ansiedades y aspiraciones; ha de
hacerle reconocer plenamente sus dificultades, al mismo tiempo que le
sugiere soluciones a los problemas que les inquietan. Es decir, debe de estar
relacionado con todos los aspectos de su personalidad, y esto, dando pleno
crdito a la seriedad de los conflictos del nio/a, sin disminuirlos en absoluto
y estimulando simultneamente la confianza en s mismo/a y en su futuro.
El secreto de un buen cuento infantil estriba en que el estilo y el
argumento no falseen la realidad del nio/a, sino en que la interpreten a
partir de sus pensamientos y sentimientos.

4. ANLISIS DE LOS MITOS DE LOS CUENTOS CLSICOS


A continuacin analizar los mitos y los roles de gnero de siete cuentos
clsicos desde un punto de vista algo irnico, aunque no por ello de menor
calidad.
A pesar de que en ellos hay temtica recurrente, creo que es
interesante su anlisis de forma independiente, para de esta manera destacar
cmo ciertos roles y mitos son una constante, a pesar de que los cuentos sean
tan dispares.
Me ha parecido oportuno exponer antes del anlisis, una breve versin de
cada cuento (por si alguno se ha perdido por los rincones de nuestra
memoria...). As, analizar los siguientes relatos: Blancanieves, La Cenicienta,
La Bella Durmiente, La Bella y la Bestia, Rapunzel, Caperucita Roja, y El
Patito Feo.
Espero que este repaso nos sirva adems de como una reflexin, como un
viaje a nuestra ms tierna infancia, para acercarnos a la/el nia/o que
llevamos dentro.
Sin ms, pasemos al anlisis.

BLANCANIEVES
En un lugar muy lejano viva un poderoso seor, dueo de riquezas y
numerosas tierras y tena una hija muy hermosa que se llamaba Blancanieves, por su
tez blanquecina. Pero el poderoso seor viva triste y desconsolado desde el mismo da
en que naci la nia, pues su mujer haba muerto al dar a luz.
Tena Blancanieves quince aos cuando su padre se cas de nuevo. Su
madrastra llegaba de tierras lejanas y era una mujer muy mala y vanidosa, que lo nico
que quera era ser la mujer ms hermosa del reino. Todos los das preguntaba a su espejo
mgico quin era la ms bella del reino, al que el espejo contestaba:
- T eres la ms hermosa de todas las mujeres, reina ma.
El tiempo fue pasando hasta que un da el espejo mgico contest que la ms
bella del reino era Blancanieves.
La reina, llena de furia y de rabia, orden a un cazador que llevase a
Blancanieves al bosque y que la matara. Y como prueba traera su corazn en un cofre.
El cazador llev a Blancanieves al bosque pero cuando all llegaron y ante su llanto l
sinti lstima de la joven y le aconsej que se marchara para muy lejos del castillo,
llevando en el cofre el corazn de un jabal.
Blancanieves, al verse sola, sinti mucho miedo porque tuvo que pasar la noche
andando por la oscuridad del bosque. Al amanecer, descubri una preciosa casita.
Entr sin pensarlo dos veces. Los muebles y objetos de la casita eran pequesimos.
Haba siete platitos en la mesa, siete vasitos, y siete camitas en la alcoba, dnde

Blancanieves, despus de juntarlas, se acost quedando profundamente dormida


durante todo el da.
Al atardecer, llegaron los dueos de la casa. Eran siete enanitos que trabajaban
en unas minas. Se quedaron admirados al descubrir a Blancanieves. Ella les cont toda
su triste historia y los enanitos la abrazaron y suplicaron a la nia que se quedase con
ellos:
- Ella nos har la comida, nos limpiar la casa y a cambio, le regalaremos
brillantes de nuestras minas.
Blancanieves acept y se qued a vivir con ellos. Eran felices. Mientras tanto,
en el castillo, la reina se puso otra vez muy furiosa al descubrir, a travs de su espejo
mgico, que Blancanieves todava viva y que an era la ms bella del reino. Furiosa y
vengativa, la cruel bruja se disfraz de una inocente viejecita y parti hacia la casita
del bosque. All, cuando Blancanieves estaba sola, la malvada se acerc y hacindose
pasar por buena ofreci a la nia una manzana envenenada.
Cuando Blancanieves dio el primer bocado, cay desmayada, para felicidad de
la reina mala. Por la tarde, cuando los enanitos volvieron del trabajo, encontraron a
Blancanieves tendida en el suelo, plida y quieta, y creyeron que estaba muerta.
Tristes, los enanitos construyeron una urna de cristal para que todos los animalitos del
bosque pudiesen despedirse de Blancanieves.
Unos das despus, apareci por all un prncipe a lomos de un caballo. Y nada
ms contemplar a Blancanieves, qued prendado de ella. Al despedirse y besndola en
la mejilla, Blancanieves volvi a la vida, pues el beso de amor que le haba dado el
prncipe rompi el hechizo de la malvada reina.
Blancanieves se cas con el prncipe y expulsaron a la cruel reina del palacio, y
desde entonces todos pudieron vivir felices.

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ANLISIS DE ESTE RELATO


Creo que este cuento es uno de los ms cargados de mitos y de los ms
consolidados en nuestra sociedad. Ya al comienzo de ste se destaca un mito
de gnero tpico: el hombre es el poderoso, el dueo y seor de tierras y
riquezas y su hija la hermosa y blanca, casi que frgil y necesitada de la
proteccin masculina, lo que se ve reforzado cuando es el cazador quien se
apiada de Blancanieves y no la mata. En ningn caso es ella quien intenta
escapar de su asesino... sino que es el llanto la forma de que las mujeres
consigan lo que quieren (como elementos pasivos que son).
En este relato, es curioso cmo se otorga una relevancia mayscula al
ideal de belleza femenino, siendo el causante de la mayor parte del
argumento y personificado en el espejo mgico. La pugna por la belleza, la
competitividad por ser la ms guapa y eso, como fin ltimo por el que una
mujer debe luchar.
Que puedo decir del siguiente mito... otro clsico: ella nos har la

comida, nos limpiar la casa y a cambio, le regalaremos brillantes de


nuestras minas. Incluso los dulces enanitos no se pudieron resistir a las
manos de una mujer llevando las tareas del hogar... y eso que eran siete y
bien repartidas seguramente no seran una carga... Al menos la recompensa
era brillante... Nuevo mito: los intereses femeninos se limitan a la casa y
las joyas. Por qu no se les ocurri que Blancanieves les llevara la
contabilidad, o montase una empresa para la exportacin de brillantes?
Otra de las caractersticas TPICAS Y TPICAS y de las ms repetidas a
lo largo de los cuentos de hadas, es la llegada del prncipe salvador. Primero,
tiene que ser prncipe (o sea, con dinero). Cundo ha ido un sirviente salvar
de un malvado hechizo a una joven hermosa, con su beso de enamorado? O

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cundo lo ha hecho un pen de albail? NUNCA. Pero eso no es todo. Adems,


ste se queda prendado de su belleza (nunca de su inteligencia) y la salva
del hechizo (sin l, la pobre no hubiera llegado a nada). Como si esto ya fuera
poco, en ese mismo instante le pide que se case con l y accede (primera y
nica relacin de pareja de ella... habra que ver el curriculum sentimental
del prncipe... vamos) y no slo eso, sino que adems vivieron felices para
siempre. Y la convivencia? Y los conflictos derivados de ella?. Est claro el
matrimonio es garanta de felicidad eterna. Absurdas de nosotras intentando
formarnos como terapeutas de pareja... si los problemas de pareja no
existen!!

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LA CENICIENTA
Haba una vez una bella joven que, tras quedarse hurfana de madre por la
peste, tuvo que vivir con la nica compaa de su padre, el cual era un rico comerciante
de la zona.
Cuando la muchacha tena quince aos, su padre conoci a una viuda que crey
virtuosa y se cas con ella, con la seguridad de estar dndole una segunda madre para
su pobre hijita. Pero, para desgracia de la joven, su amado padre muri poco tiempo
despus y ella tuvo que vivir con su madrastra y las dos hijas que tena sta.
Las tres mujeres eran tan malas y tan egostas que se quedaban cada da mas
feas. La bella joven era explotada por ellas. Era ella quien hacia todo el trabajo mas
duro de la casa. Adems de cocinar y fregar ella tambin tena que cortar lea y
encender la chimenea. As sus vestidos estaban siempre manchados de ceniza, por lo
que todos la llamaban Cenicienta.
Un da se oa por todas partes de la ciudad que el prncipe de aquel pas haba
regresado. El rey, muy contento, iba a dar una gran fiesta a la que iba a invitar a todas
las jvenes del reino, con la esperanza de que el prncipe encontrara en una de ellas, la
esposa que deseaba.
En la casa de Cenicienta, sus hermanastras empezaban a prepararse para la
gran fiesta. Y decan a Cenicienta:

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- T, no irs. Te quedars limpiando la casa y preparando la cena para cuando


volvamos.
El da del baile haba llegado. Cenicienta vio partir a sus hermanastras al
Palacio Real y se puso a llorar porque se senta muy triste y sola. Pero, de pronto, se le
apareci un Hada que le dijo:
- Querida nia, scate tus lgrimas porque t tambin irs al baile.
Y le dijo Cenicienta:
- Pero cmo si no tengo vestido ni zapatos, ni carruaje para llevarme?
Y el hada, con su varita mgica, transform una calabaza en carruaje, unos
ratoncillos en preciosos caballos, y a Cenicienta en una maravillosa joven que mas se
pareca a una princesa. Y le avis:
- Tu irs al baile, pero con una condicin: cuando el reloj del Palacio d las doce
campanadas, tendrs que volver enseguida porque el hechizo se acabar.
Hermosa y feliz, Cenicienta lleg al Palacio. Y cuando entr al saln de baile,
todos pararon para mirarla. El prncipe se qued enamorado de su belleza y bail con
ella toda la noche.
Pero, al cabo de algunas horas, el reloj del Palacio empez a sonar y Cenicienta
se despidi del prncipe, cruz el saln, baj la escalinata y entr en el carruaje en
direccin a su casa. Con las prisas, ella perdi uno de sus zapatos de cristal que el
prncipe recogi sin nada entender.
Al da siguiente, el prncipe orden a los guardias que encontrara la seorita
que pudiera calzar el zapato. Los guardias recorrieron todo el reino. Todas las
doncellas probaron el zapato pero a nadie le sirvi. Al fin llegaron a la casa de
Cenicienta. Y cuando sta se lo puso todos vieron que le estaba perfecto. Y fue as que
Cenicienta volvi a encontrarse con el prncipe, se casaron, y vivieron muy felices.

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ANLISIS DE ESTE RELATO


Este cuento comienza con un mito pero no exclusivo de gnero, aunque
s mas llamativo en el rol femenino; el de la equiparacin de la bondad con la
belleza y por consiguiente de la maldad con la fealdad (Cenicienta, bella y
buena y su madrastras y hermanastras feas y malas). Adems, incide de nuevo
en el tpico de que el sufrimiento y las tareas del hogar corresponden a la
mujer.
Por no salirse de la lnea clsica, el prncipe (y no por ejemplo un
leador) es el que sacar a la protagonista de sus miserias, enamorndose
adems no de su calidad humana o de su inteligencia, sino simplemente, de su
belleza. La salvacin, pasa adems por la vicara, lo que vuelve a poner de
relieve el matrimonio como fin de todos los males y felicidad eterna.

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LA BELLA DURMIENTE
Hace muchos aos, en un reino lejano, una reina dio a luz una hermosa nia.
Para la fiesta del bautizo, los reyes invitaron a todas las hadas del reino pero,
desgraciadamente, se olvidaron de invitar a la ms malvada. Aunque no haya sido
invitada, la hada maligna se present al castillo y, al pasar delante de la cuna de la
pequea, le puso un maleficio diciendo: " Al cumplir los diecisis aos te pinchars con
un huso y morirs". Al or eso, un hada buena que estaba cerca, pronunci un
encantamiento a fin de mitigar la terrible condena: "Al pincharse en vez de morir, la
muchacha permanecer dormida durante cien aos y slo el beso de un buen prncipe la
despertar."
Pasaron los aos y la princesita se convirti en una muchacha muy hermosa. El
rey haba ordenado que fuesen destruidos todos los husos del castillo con el fin de
evitar que la princesa pudiera pincharse. Pero eso de nada sirvi. Al cumplir los
diecisis aos, la princesa acudi a un lugar desconocido del castillo y all se encontr
con una vieja sorda que estaba hilando. La princesa le pidi que le dejara probar. Y
ocurri lo que el hada mala haba previsto: la princesa se pinch con el huso y cay
fulminada al suelo.
Despus de varias tentativas nadie consigui vencer el maleficio y la princesa
fue tendida en una cama llena de flores.
Pero el hada buena no se daba por vencida. Tuvo una brillante idea. Si la
princesa iba a dormir durante cien aos, todos del reino dormiran con ella. As, cuando
la princesa despertarse tendra a todos a su alrededor. Y as lo hizo. La varita dorada

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del hada se alz y traz en el aire una espiral mgica. Al instante todos los habitantes
del castillo se durmieron.
En el castillo todo haba enmudecido. Nada se mova, ni el fuego ni el aire.
Todos dormidos. Alrededor del castillo, empez a crecer un extrao y frondoso bosque
que fue ocultando totalmente el castillo en el transcurso del tiempo. Pero al trmino del
siglo, un prncipe, que estaba de caza por all, lleg hasta sus alrededores. El animal
herido, para salvarse de su perseguidor, no hall mejor escondite que la espesura de los
zarzales que rodeaban el castillo.
El prncipe descendi de su caballo y, con su espada, intent abrirse camino.
Avanzaba lentamente porque la maraa era muy densa. Descorazonado, estaba a
punto de retroceder cuando, al apartar una rama, vio algo que llam su atencin.
Sigui avanzando hasta llegar al castillo. El puente levadizo estaba bajado. Llevando
al caballo sujeto por las riendas, entr, y cuando vio a todos los habitantes tendidos en
las escaleras, en los pasillos, en el patio, pens con horror que estaban muertos, Luego
se tranquiliz al comprobar que solo estaban dormidos. "Despertad! Despertad!",
chill una y otra vez, pero fue en vano. Cada vez ms extraado, se adentr en el
castillo hasta llegar a la habitacin donde dorma la princesa. Durante mucho rato
contempl aquel rostro sereno, lleno de paz y belleza; sinti nacer en su corazn el
amor que siempre haba esperado en vano. Emocionado, se acerc a ella, tom la mano
de la muchacha y delicadamente la bes...
Con aquel beso, de pronto la muchacha se desperez y abri los ojos,
despertando del largusimo sueo. Al ver frente a s al prncipe, murmur: Por fin
habis llegado! En mis sueos acariciaba este momento tanto tiempo esperado."
El encantamiento se haba roto. La princesa se levant y tendi su mano al
prncipe. En aquel momento todo el castillo despert. Todos se levantaron, mirndose

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sorprendidos y dicindose qu era lo que haba sucedido. Al darse cuenta, corrieron


locos de alegra junto a la princesa, ms hermosa y feliz que nunca.
Al cabo de unos das, el castillo, hasta entonces inmerso en el silencio, se llen
de msica y de alegres risas con motivo de la boda, tras la cual fueron felices para
siempre.
ANLISIS DE ESTE RELATO
Este es otro de los clsicos de la literatura infantil cargado de mitos, y
en concreto de mitos de gnero muy semejantes a los anteriormente
descritos.
De entrada los protagonistas son prncipes y princesas (riquezas y
poder) y no hay cabida para la gente normal. Si bien esto no tiene porque
tener mayor repercusin, s es cierto que en los procesos de identificacin
que influyen en nuestra forma de vincularnos, pueden establecer unas bases
poco realistas, lo que nos podr llevar de una frustracin a otra. Pero bueno,
dejemos un poco al margen la psicologa sanzciana 1 y volvamos a los mitos
de gnero.
De nuevo, la nica posibilidad para salvar a la protagonista es a travs
del beso de un prncipe, el cual, cmo no, se enamora de su belleza e
implcitamente, de su pasividad. Se produce el flechazo entre ambos: l no
puede reprimir el deseo de besarla y ella inmvil y sin poder evitarlo, se deja
besar y al abrir sus ojos descubre al hombre de sus sueos (reflejo fidedigno
de la misma vida). A quin no le ha ocurrido esto alguna vez?
Me llama la atencin, cmo los 15 16 aos es una edad casi mgica,
que aparece en varios de estos relatos y que marca un antes y un despus.
Supongo que ser un paralelismo con la pubertad, con el dejar de ser nia y
convertirse en mujer, as como estar en disposicin de ser desposada
1

Relativo a FINA SANZ

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(finalidad ltima de una mujer segn los tres relatos anteriores). Adems se
incide de nuevo en la felicidad suprema de ella ante la boda, tras la cual
fueron felices para siempre.

LA BELLA Y LA BESTIA

rase una vez... un mercader que, antes de partir para un largo viaje de
negocios, llam a sus tres hijas para preguntarles qu queran que les trajera a cada una
como regalo. La primera pidi un vestido de brocado, la segunda un collar de perlas y
la tercera, que se llamaba Bella y era la ms gentil, le dijo a su padre: "Me bastar una
rosa cortada con tus manos."
El mercader parti y, una vez ultimados
sus asuntos, se dispuso a volver cuando una
tormenta le pill desprevenido. El viento
soplaba glido y su caballo avanzaba
fatigosamente. Muerto de cansancio y de fro,
el mercader de improviso vio brillar una luz en
medio del bosque.
A medida que se acercaba a ella, se dio cuenta que estaba llegando a un castillo
iluminado. "Confo en que puedan ofrecerme hospitalidad", dijo para s esperanzado.
Pero al llegar junto a la entrada, se dio cuenta de que la puerta estaba entreabierta y,
por ms que llam, nadie acudi a recibirlo. Entr decidido y sigui llamando. En el
saln principal haba una mesa iluminada con dos candelabros y llena de ricos manjares
dispuestos para la cena. El mercader, tras meditarlo durante un rato, decidi sentarse a
la mesa; con el hambre que tena consumi en breve tiempo una suculenta cena.
Despus, todava intrigado, subi al piso superior. A uno y otro lado de un
pasillo largusimo, asomaban salones y habitaciones maravillosos. En la primera de
estas habitaciones chisporroteaba alegremente una lumbre y haba una cama mullida

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que invitaba al descanso. Era tarde y el mercader se dej tentar; se ech sobre la cama y
qued dormido profundamente. Al despertar por la maana, una mano desconocida
haba depositado a su lado una bandeja de plata con una cafetera humeante y fruta.
El mercader desayun y, despus de asearse un poco, baj para darle las gracias a quien
generosamente lo haba hospedado. Pero al igual que la noche anterior, no encontr a
nadie y, agitando la cabeza ante tan extraa situacin, se dirigi al jardn en busca de
su caballo que haba dejado atado a un rbol, cuando un hermoso rosal atrajo su
atencin. Se acord entonces de la promesa hecha a Bella, e inclinndose cort una
rosa. Inesperadamente, de entre la espesura del rosal, apareci una bestia horrenda que
iba vestida con un bellsimo atuendo; con voz profunda y terrible le amenaz:
" Desagradecido! Te he dado hospitalidad, has comido en mi mesa y dormido en
mi cama y, en seal de agradecimiento, vas y robas mis rosas preferidas? Te matar
por tu falta de consideracin!"
El mercader, aterrorizado, se arrodill temblando ante la fiera:
Perdname!Perdname la vida! Har lo que me pidas! La rosa era para mi hija
Bella, a la que promet llevrsela de mi viaje!" La bestia retir su garra del
desventurado. " Te dejar marchar con la condicin de que me traigas a tu hija."
El mercader, asustado, prometi obedecerle y cumplir su orden. Cuando el
mercader lleg a casa llorando, fue recibido por sus tres hijas, pero despus de haberles
contado su terrorfica aventura, Bella lo tranquiliz diciendo: " Padre mo, har
cualquier cosa por ti. No debes preocuparte, podrs mantener tu promesa y salvar as la
vida! Acompame hasta el castillo y me quedar en tu lugar!" El padre abraz a su
hija: "Nunca he dudado de tu amor por m. De momento te doy las gracias por haberme
salvado la vida. Esperemos que despus..."
De esta manera, Bella lleg al castillo y la Bestia la acogi de forma
inesperada: fue extraamente gentil con ella. Bella, que al principio haba sentido
miedo y horror al ver a la Bestia, poco a poco se dio cuenta de que, a medida que el
tiempo transcurra, senta menos repulsin.
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Le fue asignada la habitacin ms bonita del castillo y la muchacha pasaba


horas y horas bordando cerca del fuego. La Bestia, sentada cerca de ella, la miraba en
silencio durante largas veladas y, al cabo de cierto tiempo empez a decirles palabras
amables, hasta que Bella se apercibi sorprendida de que cada vez le gustaba ms su
conversacin.
Los das pasaban y sus confidencias iban en aumento, hasta que un da la
Bestia os pedirle a Bella que fuera su esposa. Bella, de momento sorprendida, no supo
qu responder. Pero no dese ofender a quien haba sido tan gentil y, sobre todo, no
poda olvidar que fue ella precisamente quien salv con su sacrificio la vida de su
padre. "No puedo aceptar!" empez a decirle la muchacha con voz temblorosa,"Si tanto
lo deseas..." "Entiendo, entiendo. No te guardar rencor por tu negativa."
La vida sigui como de costumbre y este incidente no tuvo mayores
consecuencias. Hasta que un da la Bestia le regal a Bella un bonito espejo de mgico
poder. Mirndolo, Bella poda ver a lo lejos a sus seres ms queridos. Al regalrselo, el
monstruo le dijo: "De esta manera tu soledad no ser tan penosa". Bella se pasaba
horas mirando a sus familiares.
Al cabo de un tiempo se sinti inquieta, y un da la Bestia la encontr
derramando lgrimas cerca de su espejo mgico. "Qu sucede?" quiso saber el monstruo.
" Mi padre est muy enfermo, quiz murindose! Oh! Deseara tanto poderlo ver por
ltima vez!" "Imposible! Nunca dejars este castillo!" grit fuera de s la Bestia, y se
fue.
Al poco rato volvi y con voz grave le dijo a Bella: "Si me prometes que a los
siete das estars de vuelta, te dejar marchar para que puedas ver a tu padre." Qu
bueno eres conmigo! Has devuelto la felicidad a una hija devota." le agradeci Bella
feliz.
El padre, que estaba enfermo ms que nada por el desasosiego de tener a su hija
prisionera de la Bestia en su lugar, cuando la pudo abrazar, de golpe se sinti mejor, y

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poco a poco se fue recuperando. Los das transcurran deprisa y el padre finalmente se
levant de la cama curado. Bella era feliz y se olvid por completo de que los siete das
haban pasado desde su promesa. Una noche se despert sobresaltada por un sueo
terrible. Haba visto a la Bestia murindose, respirando con estertores en su agona, y
llamndola: "Vuelve! Vuelve conmigo!" Fuese por mantener la promesa que haba
hecho, fuese por un extrao e inexplicable afecto que senta por el monstruo, el caso es
que decidi marchar inmediatamente. "Corre, corre caballito!" deca mientras fustigaba
al corcel por miedo de no llegar a tiempo...
Al llegar al castillo subi la escalera y llam. Nadie respondi; todas las
habitaciones estaban vacas. Baj al jardn con el corazn encogido por un extrao
presentimiento. La Bestia estaba all, reclinada en un rbol, con los ojos cerrados, como
muerta. Bella se abalanz sobre el monstruo abrazndolo: "No te mueras! No te
mueras! Me casar contigo!"
Tras esas palabras, aconteci un prodigio: el horrible hocico de la Bestia se
convirti en la figura de un hermoso joven. "Cunto he esperado este momento! Una
bruja malfica me transform en un monstruo y slo el amor de una joven que aceptara
casarse conmigo, tal cual era, poda devolverme mi apariencia normal. Se celebr la
boda, y el joven prncipe quiso que, para conmemorar aquel da, se cultivasen en su
honor slo rosas en el jardn. He aqu porqu todava hoy aquel castillo se llama "El
Castillo de la Rosa".

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ANLISIS DE ESTE RELATO


El propio ttulo de este cuento ya pone de manifiesto la importancia de
la belleza como un valor mximamente femenino. Pero, quizs lo ms
destacable sea la idea de la equiparacin del amor al sacrificio: por un lado,
Bella est dispuesta a sacrificar el resto de su vida por amor a su padre, y por
otro la Bestia est dispuesta a morir por la ausencia de su amada.
Me result curioso como este es uno de los pocos relatos (por no decir
el nico) en que antes del matrimonio hay una convivencia, aunque tambin
es cierto que ms que pareja, eran compaeros de castillo. En cualquier
caso, se pone de manifiesto por primera vez, el hecho de que la convivencia
servir para conocer mejor a la otra persona y no dejarse llevar por una
primera impresin de prncipe azul rescatador.
De nuevo se cae en la imagen tradicional de la mujer: sumisa a las
rdenes de un hombre. Primero un padre y luego una pareja. Despus de
haber renunciado a sus libertades personales y estar presa en un castillo y
ante la enfermedad de su padre, todava tiene que estarle agradecida a la
Bestia por haberla dejado marchar a visitarlo... Ella ensalza la bondad de l,
cuando eso es lo mnimo que debera haber hecho...
Pero la cosa no queda ah... cuando ella por fin puede disfrutar de su
tiempo y su espacio personal como algo que ella ha elegido, resulta que salta
el rol de madre y cuidadora y a salvar a la pobre Bestia que se muere por
su ausencia. Ya desde pequeos/as se nos ensea la utilidad de los chantajes
emocionales. Ante la enfermedad de la Bestia, no nos queda otra, como
mujeres, que ceder a los deseos masculinos... y en este caso, acceder al
matrimonio. Afortunadamente en el cuento se transforma en un hermoso
joven (otra vez la mano mgica del matrimonio, la salvacin a todos los
males), y como es menester viven felices para siempre, sin una sola crisis o
problema de pareja. Y si los hubiera, sera seguro por la aparicin de una
bruja malvada (que adems sera mujer seguro), que embaucara con sus
malas artes al pobre prncipe indefenso... os resulta familiar?
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RAPUNZEL

Haba una vez una pareja que haca mucho tiempo deseaba tener un beb. Un
da, la mujer sinti que su deseo por fin! se iba a realizar. Su casa tena una pequea
ventana en la parte de atrs, desde donde se poda ver un jardn lleno de flores
hermosas y de toda clase de plantas. Estaba rodeado por una muralla alta y nadie se
atreva a entrar porque all viva una bruja.
Un da, mirando hacia el jardn, la mujer se fij en un rbol cargadito de
esplndidas manzanas que se vean tan frescas que ansiaba comerlas. Su deseo creca
da a da y como pensaba que nunca podra comerlas, comenz a debilitarse, a perder
peso y se puso enferma.
Su marido, preocupado, decidi realizar los deseos de la mujer. En la oscuridad
de la noche el hombre cruz la muralla y entr en el jardn de la bruja. Rpidamente
cogi algunas de aquellas manzanas tan rojas y corri a entregrselas a su esposa.
Inmediatamente la mujer empez a comerlas y a ponerse buena. Pero, su deseo
aument, y para mantenerla satisfecha, su marido decidi volver al huerto para recoger
mas manzanas. Pero cuando salt la pared, se encontr cara a cara con la bruja.
"Eres t el ladrn de mis manzanas?" dijo la bruja furiosa. Temblando de
miedo, el hombre explic a la bruja que tuvo que hacerlo para salvar la vida a su
esposa.

24

Entonces la bruja dijo, "Si es verdad lo que me has dicho, permitir que recojas
cuantas manzanas quieras, pero a cambio me tienes que dar el hijo que tu esposa va a
tener. Yo ser su madre".
El hombre estaba tan aterrorizado que acept. Cuando su esposa dio a luz una
pequea nia, la bruja vino a su casa y se la llev. Era hermosa y se llamaba Rapunzel.
Cuando cumpli trece aos, la bruja la encerr en una torre en medio de un
cerrado bosque. La torre no tena escaleras ni puertas, slo una pequea ventana en lo
alto. Cada vez que la bruja quera subir a lo alto de la torre, se paraba bajo la ventana
y gritaba: "Rapunzel, Rapunzel, lanza tu trenza! Rapunzel tena un abundante
cabello largo, dorado como el sol. Siempre que escuchaba el llamado de la bruja se
soltaba el cabello, lo ataba en trenzas y lo dejaba caer al piso. Entonces la bruja
trepaba por la trenza y se suba hasta la ventana.
Un da un prncipe, que cabalgaba por el bosque, pas por la torre y escuch
una cancin tan gloriosa que se acerc para escuchar. Quien cantaba era Rapunzel.
Atrado por tan melodiosa voz, el prncipe busc entrar en la torre pero todo fue en
vano. Sin embargo, la cancin le haba llegado tan profundo al corazn, que lo hizo
regresar al bosque todos los das para escucharla.
Uno de esos das, vio a la bruja acercarse a los pies de la torre. El prncipe se
escondi detrs de un rbol para observar y la escuch decir:"!Rapunzel! Rapunzel!,
lanza tu trenza!" Rapunzel dej caer su larga trenza y la bruja trep hasta la
ventana. As, el prncipe supo como podra subir a la torre.
Al da siguiente al oscurecer, fue a la torre y llam: "Rapunzel!, Rapunzel!,
"lanza tu trenza!" El cabello de Rapunzel cay de inmediato y el prncipe subi.

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Al principio Rapunzel se asust, pero el prncipe le dijo gentilmente que la


haba escuchado cantar y que su dulce meloda le haba robado el corazn. Entonces
Rapunzel olvid su temor. El prncipe le pregunt si le gustara ser su esposa a lo cual
accedi de inmediato y sin pensarlo mucho porque estaba enamorada del prncipe y
porque estaba deseosa de salir del dominio de esa mala bruja que la tena presa en aquel
tenebroso castillo.
El prncipe la vena a visitar todas las noches y la bruja, que vena slo durante
el da, no saba nada. Hasta que un da, cuando la bruja bajaba por la trenza oy a
Rapunzel decir que ella pesaba mas que el prncipe. La bruja reaccion gritando: "As
que has estado engandome?" Furiosa, la bruja decidi cortar todo el cabello de
Rapunzel, abandonndola en un lugar lejano para que viviera en soledad.
Al volver a la torre, la bruja se escondi detrs de un rbol hasta que vio llegar
al prncipe y llamar a Rapunzel. Entonces enfurecida, la bruja sali del escondite y le
dijo: "Has perdido a Rapunzel para siempre. Jams volvers a verla". Por lo que el
prncipe se qued desolado. Adems, la bruja le aplic un hechizo dejando ciego al
prncipe.
Incapacitado de volver a su castillo, el prncipe acab viviendo durante muchos
aos en el bosque hasta que un da por casualidad lleg al solitario lugar donde viva
Rapunzel. Al escuchar la melodiosa voz, se dirigi hacia ella. Cuando estaba cerca,
Rapunzel lo reconoci y se volvi loca de alegra, pero se puso triste cuando se dio
cuenta de su ceguera. Lo abraz tiernamente y llor. Sus lgrimas cayeron sobre los
ojos del prncipe ciego y de inmediato los ojos de l se llenaron de luz y pudo volver a
ver como antes. Entonces, felices por estar reunidos con su amor, los dos se casaron y
vivieron muy felices.

26

ANLISIS DE ESTE RELATO


Quizs no tan conocido como los anteriores cuentos, pero clsico
igualmente, este relato vuelve a estar repleto de mitos de gnero. Para
empezar, los antojos. Segn el relato, parece que son irrefrenables: esa
madre embarazada que arriesga la vida de su pareja para satisfacer su
necesidad incontrolable de manzanas (recordemos el paralelismo Adn y
Eva)... Y no slo eso, sino que sus antojos le van a costar el perder a esa hija
tan deseada... A ver que madre puede cargar con esa culpabilidad!
Por otro lado, vuelve a aparecer una edad en el cuento, trece aos. De
nuevo se menciona la pubertad, la adolescencia, como un momento de
cambio. Y en este caso negativo, pues a Rapunzel la lleva a dar con sus huesos
a una torre aislada e incomunicada, como dejando entrever que desde la
pubertad las mujeres son peligrosas y hay que controlarlas.
Es destacable, por otro lado, la ingenuidad y la poca picarda
manifiesta de la protagonista: primero, no reconociendo la voz del prncipe
como diferente a la de la bruja; despus accediendo al matrimonio a la
primera de cambio, slo por su aspecto (primer hombre que ve en su vida y
del cual se enamora al instante real como la vida misma-) y por ltimo,
dicindole a la bruja que pesaba ms que el prncipe... Lo cierto es que no es
de extraar si tenemos en cuenta que la pobre nia nunca haba salido de esa
torre y sus habilidades sociales seguro que dejaban mucho que desear.
Volviendo al tema del matrimonio, de nuevo aparece como alternativa,
como solucin a problemas, y en este caso tambin como una va de escape.
Todava son hoy muchas las mujeres que lo utilizan para huir de sus familias
de origen, aunque no siempre se acaban cumpliendo sus expectativas...
Adems, se insiste en el papel curativo de amor... En este caso al
prncipe le cur una ceguera... si puede con eso, con que no podr...

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CAPERUCITA ROJA
En un bosque muy lejos de aqu, viva una alegre y bonita nia a la que todos
queran mucho. Para su cumpleaos, su mam le prepar una gran fiesta. Con sus
amigos, la nia jug, bail, sopl las velitas, comi tarta y caramelos. Y como era
buena, recibi un montn de regalos. Pero su abuela tena una sorpresa: le regal una
capa roja de la que la nia jams se separ. Todos los das sala vestida con la
caperuza. Y desde entonces, todos la llamaban de Caperucita Roja.
Un da su mam le llam y le dijo:
- Caperucita, maana quiero que vayas a visitar a la abuela porque est enferma.
Llvale esta cesta con frutas, pasteles, y una botella de vino dulce.
A la maana siguiente, Caperucita se levant muy temprano, se puso su capa y
se despidi de su mam que le dijo:
- Hija, ten mucho cuidado. No cruces el bosque ni hables con desconocidos.
Pero Caperucita no hizo caso a su mam. Y como crea que no haba peligros,
decidi cruzar el bosque para llegar mas temprano. Sigui feliz por el camino.
Cantando y saludando a todos los animalitos que cruzaban su camino. Pero lo que ella
no saba es que escondido detrs de los rboles, se encontraba el lobo que la segua y
observaba. De repente, el lobo la alcanz y le dijo:
- Hola Caperucita!
-

Hola seor lobo!

- A dnde vas as tan guapa y con tanta prisa?


-

Voy a visitar a mi abuela, que est enferma, y a la que llevo frutas, pasteles, y
una botella de vino dulce.

28

Y dnde vive tu abuelita?

Vive del otro lado del bosque. Y ahora tengo que irme sino no llegar hoy.
Adis seor lobo.
El lobo sali disparado. Corri todo lo que pudo hasta llegar a la casa de la

abuela. Llam a la puerta.


-

Quin es? Pregunt la abuelita.


Y el lobo, imitando la voz de la nia le dijo:

Soy yo, Caperucita.


La abuela abri la puerta y no tuvo tiempo de reaccionar. El lobo entr y se la

trag de un solo bocado. Se puso el gorrito de dormir de la abuela y se meti en la


su cama para esperar a Caperucita.
Caperucita, despus de recoger algunas flores del campo para la abuela,
finalmente lleg a la casa. Llam a la puerta y una voz le dijo que entrara.
Cuando Caperucita entr y se acerc a la cama not que la abuela estaba muy
cambiada. Y pregunt:
- Abuelita, abuelita, qu ojos tan grandes tienes!
Y el lobo, imitando la voz de la abuela, contest:
- Son para verte mejor.
- Abuelita, qu orejas ms grandes tienes!
- Son para orte mejor.
- Abuelita, qu nariz ms grande tienes!
- Es para olerte mejor.
Y ya asustada, sigui preguntando:
- Pero abuelita, qu dientes tan grandes tienes!
- Son para comerte mejor!
Y el lobo saltando sobre caperucita, se la comi tambin de un bocado.

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El lobo, con la tripa totalmente llena acab durmindose en la cama de abuela.


Caperucita y su abuelita empezaron a dar gritos de auxilio desde dentro de la
barriga del lobo. Los gritos fueron odos por un leador que pasaba por all y se
acerc para ver lo que pasaba. Cuando entr en la casa y percibi todo lo que haba
sucedido, abri la barriga del lobo, salvando la vida de Caperucita y de la abuela.
Despus, llen piedras a la barriga del lobo y la cosi. Cuando el lobo se despert
senta mucha sed. Y se fue a un pozo a beber agua. Pero al agacharse la tripa le
pes y el lobo acab cayendo dentro del pozo del que jams consigui salirse. Y as,
todos pudieron vivir libres de preocupaciones en el bosque. Y Caperucita prometi a
su mam que jams volvera a desobedecerla.

ANLISIS DE ESTE RELATO


Este es quizs uno de los relatos ms doctrinantes de los clsicos. En l
hay una clara alusin a la importancia de la obediencia a los/as
progenitores/as

las

consecuencias

nefastas

que

puede

tener

la

desobediencia, eso s, siempre con un final feliz.


Caperucita se deja engaar por los embustes del lobo, haciendo as
hincapi en un estereotipo clsico de gnero: la mujer ingenua, sin picarda,
atontada, obnubilada por la belleza y sin prestar atencin a otros aspectos
ms importantes de su entorno... Paralelamente, aparece otro estereotipo,
en este caso masculino: el lobo, fuerte, amenazador, malvado, inteligente,
despiadado... Consecuencia de la generalizacin: las mujeres indefensas por
su escasa inteligencia deben desconfiar de los hombres, porque se
aprovecharn de ellas de alguna manera. Y de ah la mito de los hombres te
buscarn slo para el sexo hay slo un paso (y todos los mitos y creencias
errneas que de ste se desprenden).

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Este argumento bastante novedoso respecto a los relatos analizados con


anterioridad, da paso a un nuevo clsico: el hombre como salvador. En este
cuento, es un leador es que al or los gritos de Caperucita y su abuela corre a
salvarlas... En mi versin alternativa yo le dara a la abuela unas agujas de
calcetar (por continuar con el rol abuelita clsica), con las que agujereara la
tripa del lobo y se salvara y salvara a su nieta... o quizs la abuela
precavida, llevase una navaja en su bolsillo con la que podra hacer lo propio.
En cualquier caso, de nuevo se insiste en nuestro papel pasivo y en que
nuestra expectativa ha de ser la de ser salvada, lo que conlleva
necesariamente, el papel activo masculino, obligado a ser el rescatador.
Vaya peso que llenamos sobre nuestras espaldas!
Para terminar, simplemente llamar la atencin sobre otro rol clsico
femenino que aparece en el relato; el de cuidadora. Son la madre y la hija las
que se encargan del cuidado de los/as enfermos/as, como ocurre en la
actualidad en casi todas las grupos familiares que tienen a algn pariente a su
cargo. Es la mujer la que asume esta responsabilidad, incluso cuando no son
familiares directos/as (suegros/as por ejemplo). Y cmo no hacerlo, si es
algo que llevamos impreso en nuestro carn de mujer?

31

EL PATITO FEO
En una hermosa maana de verano, los huevos que haban empollado la mam
Pata, empezaban a romperse, uno a uno. Los patitos fueron saliendo poquito a poco,
llenando de felicidad a los paps y a sus amigos. Estaban tan contentos que casi no se
dieron cuenta de que un huevo, el mas grande de todos, an permaneca intacto. Todos,
incluso los patitos recin nacidos, concentraron su atencin en el huevo, a ver cuando
se rompera. Al cabo de algunos minutos, el huevo empez a moverse, y luego se pudo
ver el pico, luego el cuerpo, y las patas del sonriente pato. Era el mas grande, y para
sorpresa de todos, muy distinto de los dems.. Y cmo era diferente, todos empezaron a
llamarle de Patito Feo.
La mam Pata, avergonzada por haber tenido un patito tan feo, le apart con
el ala mientras daba atencin a los otros patitos. El patito feo empez a darse cuenta
de que all no le queran. Y a medida que creca, se quedaba an mas feo, y tena que
soportar las burlas de todos.
Entonces, en la maana siguiente, muy temprano, el patito decidi irse de la
granja. Triste y solo, el patito sigui un camino por el bosque hasta llegar a otra granja.
All, una vieja granjera le recogi, le dio de comer y beber, y el patito crey que haba
encontrado a alguien que le quera. Pero, al cabo de algunos das, l se dio cuenta de
que la vieja era mala y slo quera engordarle para transformarlo en un segundo plato.
El patito sali corriendo como pudo de all.
El invierno haba llegado. Y con l, el fro, el hambre, y la persecucin de los
cazadores para el patito feo. Lo pas muy mal. Pero sobrevivi hasta la llegada de la
primavera. Los das pasaron a ser ms calurosos y llenos de colores. Y el patito empez
a animarse otra vez.

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Un da, al pasar por un estanque, vio las aves ms hermosas que jams haba
visto. Eran elegantes, delicadas, y se movan como verdaderas bailarinas, por el agua.
El patito, an acomplejado por la figura y la torpeza que tena, se acerc a una de ellas
y le pregunt si poda baarse tambin en el estanque.
Y uno de los cisnes le contest:
- Pues, claro que s! Eres uno de los nuestros. Y le dijo el patito:
- Cmo que soy uno de los vuestros? Yo soy feo y torpe, todo lo contrario de
vosotros.
Y ellos le dijeron:
- Entonces, mira tu reflejo en el agua del estanque y vers cmo no te
engaamos.
El patito se mir y lo que vio le dej sin habla. Haba crecido y se
transformado en un precioso cisne! Y en este momento, l supo que jams haba sido
feo. l no era un pato sino un cisne. Y as, el nuevo cisne se uni a los dems y vivi
feliz para siempre.

ANLISIS DE ESTE RELATO


En este relato aunque los estereotipos no son aparentemente de
gnero, s gira en torno a la idea de la importancia de la belleza, y aunque
cada da este ideal es ms paritario, sigue siendo una exigencia
eminentemente femenina. As, a nuestro protagonista, todo lo malo que le
ocurre es como consecuencia de su aparente fealdad, de su rareza, de ser
diferente, lo que le lleva a ser despreciado repetidamente hasta por su
familia (algo estupendo para la consolidacin de su autoestima...)
Quizs este relato est enfocado a transmitir una cierta tranquilidad de
cara a la pubertad, como una poca de cambios rpidos a los que a los/as
adolescentes les cuesta acostumbrarse, como un intento de hacerles ver que

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es una etapa temporal, tras la cual la aceptacin ser ms sencilla. Pero... y


si no te conviertes en cisne?
En el cuento todo se soluciona y vive feliz para siempre cuando se
transforma en un cisne... hermoso, majestuoso, elegante... Y qu pasara si
se hubiera quedado como antes? Sera su nico fin la cazuela? O vivira
marginado es un gueto del bosque? Quien sabe, lo cierto es que en el cuento
no se valoran otras cualidades adems de la belleza, pero estoy segura de que
nuestro patito tena un gran corazn.

34

5. CONCLUSIONES
Tras analizar estos cuentos tradicionales, podemos afirmar que esconden
mensajes sexistas. Esto es normal, ya que han sido una creacin de la
humanidad y por lo tanto han de responder a una realidad social y cultural.
Nuestra sociedad ha sido y sigue siendo, una sociedad machista, que ha
reflejado a travs de la cultura sus estereotipos discriminatorios. Los cuentos
son un elemento ms de la cultura y un claro vehculo de enseanzas ticas y
morales, que ponen de manifiesto el lugar que ha de ocupar el hombre y la
mujer, respondiendo a una sociedad.
Soy consciente de que son slo cuentos (o tanto), pero lo cierto es que
todava hay muchos elementos sexistas en nuestra cultura, que transmitimos
la mayora de la veces sin ser conscientes, pero que son sumamente
importantes para la construccin y el desarrollo de las nuevas generaciones.
Repasemos algunos de los tpicos tpicos dentro de los clsicos:
-

Los cuentos son, en nuestros primeros aos de vida especialmente, una


fuente de roles sociales muy importante. As, no es extrao que una
nia de unos cuatro o cinco aos se sienta identificada con Cenicienta y
un nio con el Prncipe, con toda la carga de valores y actitudes que
ello implica.

El perfil femenino en los cuentos de hadas se suele caracterizar por su


pasividad (siempre es la salvada), la temerosa, la presa de su destino,
la sumisa, y si por casualidad despierta su curiosidad o se escapa de lo
previsto, es castigada y reprendida de una u otra forma. Por su parte,
el perfil masculino es el del personaje fuerte, valiente, que lucha por
su destino, el activo, el salvador, el poderoso, el rico, el sabio, el
protagonista de la trama, el caballero, el prncipe azul todopoderoso...

La belleza fsica y la juventud son valores en alza mximamente


femeninos, en la mayora de los relatos y estn asociados a la bondad,

35

mientras que la fealdad o la vejez son sinnimos de maldad. Buenos


valores de cara al futuro: mujer, has de mantenerte siempre joven y
guapa; lo viejo, es malo. Paralelamente es una constante la
irremediable fascinacin que los personajes masculinos sienten hacia
esta belleza fsica, que los lleva a enamorarse sin remedio en la
primera ojeada a la fmina. As, mujer, slo enamorars, a travs de
tu belleza fsica.

Mayoritariamente los personajes malvados en los cuentos son mujeres.


Hay brujas y no brujos; hay madrastras y no padrastros... y para un
personaje malvado masculino, resulta que lo deshumanizan en forma
de lobo casual?

Los personajes femeninos no suelen ocupar puestos de prestigio (ms


all de el de sus parejas), no tienen experiencia laboral alguna (ms
all de sus labores) y su funcionalidad se basa, bien en su papel de
madres o bien en el de espectadoras a la espera de su salvador.
Pensemos por ejemplo en la Bella Durmiente, que es protagonista, pero
que se pasa todo el relato inconsciente...

Se generan unas tremendas expectativas respecto al AMOR. Es la


solucin a todos los males: hechizos, maleficios, problemas hogareos,
malas condiciones familiares... Con un beso enamorado todo mal
desaparece. Pero este mito, tiene una segunda parte: se casaron y
vivieron felices para siempre... y dnde estn los problemas
cotidianos, las tiranteces del da a da, las dificultades de la
convivencia...? En los cuentos, todo es comer perdices, lo que genera
unas expectativas ilusorias sobre el hecho de que con el matrimonio se
resuelven muchos problemas, olvidando la consideracin de este
acontecimiento como un suceso vital estresante y ms si cabe, sin una
convivencia previa.

Por todo ello y mucho ms que se me habr quedado por el camino creo
que sera muy interesante proponer una literatura infantil alternativa, que sin
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dejar de lado a los clsicos, tenga ms en cuenta la posibilidad de una


educacin no segregacionista en temtica de gnero, donde las mujeres no
sean siempre las salvadas, las pasivas, y los hombres nuestros prncipes azules
que tengan que luchar contra viento y marea para encontrar a su amada... En
esta lnea,

Pedro Bravo-Elizondo, propone la siguiente reflexin sobre el

verdadero final de los cuentos de hadas:


Blancanieves se neg a ser sirvienta de los enanos, y no le
permitieron entrar a la casita. La Cenicienta demand por maltrato a su
madrastra. Sin escopeta, no entro al bosque, dijo Caperucita, despus que
el Lobo la sigui por primera vez. (Su abuela, nunca abra la puerta sin
asomarse antes). Cuando La Bella conoci a La Bestia, lo quiso tal cual era,
sin esperar milagros de ninguna clase. Y La Bella Durmiente se acost
aburrida, porque nunca le permitieron hacer lo que quera. Estos son los
cuentos, hija ma. La vida se encargar de contrtelos.
Por otro lado, cada vez son ms los/as escritores/as que publican
cuentos no sexistas. Algunos de estos cuentos son La princesa Bolsa de
Papel o La princesa y el dragn, que lo que intentan es partir de una
base tradicional (como es el hecho de ser princesa), para ir desmontando poco
a poco todos e ir construyendo nuevos modelos como el denominado de las
princesas guerreras, correspondiente a un modelo donde a la mujer le gusta
salir del recinto domstico, mostrarse activa y enrgica en los movimientos y
ser autosuficientes en sus decisiones.
Este divertido cuento narra las aventuras de la princesita Elizabeth
quien, con astucia e inteligencia logra engaar al dragn que tena
secuestrado a su prometido el prncipe Ronaldo. En un arrebato inesperado, el
dragn destruye el vestido de la princesa, su castillo y secuestra el prncipe
Ronaldo. La princesa se viste con una bolsa de papel y va al rescate de su
prometido. Pero al llegar finalmente a su destino, se da cuenta que todos sus
esfuerzos de rescate no valieron la pena ya que Ronaldo tampoco vala la
pena, ni siquiera para casarse con la princesa.

37

Quiz sea este el momento de que nosotros/as como transmisores/as


de cultura y futuras/os madres y padres nos planteemos nuestras propias
versiones de los cuentos, clsicos en las que ellas vayan a la oficina, o tengan
reuniones con sus subordinados/as, se vayan a vivir con sus parejas y
aprendan a resolver conflictos, porque no todo ser de color de rosa, y lleven
la iniciativa y las riendas de su vida en todos los terrenos; laboral, social,
personal, y por supuesto, sexual.

38

6. DERECHOS DE LOS NIOS/AS A ESCUCHAR CUENTOS


Desde la Asociacin Primera Infancia y Calidad de Vida (APICAVI), se
proponen los siguientes Derechos infantiles:
1.

Todo/a nio/a, sin distincin de raza, idioma o religin, tiene


derecho a escuchar los cuentos ms hermosos de la tradicin oral de
los pueblos, especialmente, aquellos que estimulen su imaginacin y
su capacidad crtica.

2.

Todo/a nio/a tiene pleno derecho a pedir a sus padres/madres que


le

cuenten

cuentos

cualquier

hora

del

da.

Aquellos/as

progenitores/as que sean sorprendidos negndose a contar un cuento


a un nio/a, no slo incurren en un grave delito de omisin culposa,
sino que se estn autocondenando a que sus hijos/as jams les
vuelvan a pedir otro.
3.

Todo/a nio/a que por una u otra razn no tengan a nadie que le
cuente cuentos, tiene absoluto derecho a pedir al adulto/a de su
preferencia que se los cuente, siempre y cuendo ste/a demuestre
que lo hace con amor y ternura, que es como se cuentan los
cuentos.

39

4.

Todo/a nio/a tiene derecho a escuchar cuentos sentado/a en las


rodillas de sus abuelos/as. Aqullos/as que tengan sus cuatro
abuelos/as podrn cedrselos/as a otros/as nios/as que no tengan
abuelos/as que se los cuenten. Del mismo modo, aquellos/as abuelos
que carezcan de nietos/as, estn en libertad de acudir a escuelas,
parques, y otros lugares de concentracin infantil, donde, con
eterna libertad, podrn contar cuantos cuentos quieran.

5.

Todo/a nio/a tiene derecho a saber quien es el autor/a de los


cuentos ms famosos. Las personas adultas estn en la obligacin de
poner al alcance de los nios/as todo tipo de libros e historias.

6.

Todo/a nio/a goza a plenitud del derecho de conocer las fbulas,


los mitos y leyendas de la tradicin oral de su pas.

7.

Todo/a nio/a tiene derecho tambin a inventar y contar sus propios


cuentos, as como a modificar los existentes, creando su propia
versin.

8.

Los/as nios/as tienen derecho a exigir cuentos nuevos. Las personas


adultas estn est5n en la obligacin de nutrirse permanentemente
de nuevos e imaginativos relatos, propios o no, largos o cortos... lo
nico obligatorio es que stos sean hermosos e interesantes.

9.

los nios/a siempre tienen derecho a pedir otro cuento y a pedir que
les cuenten un milln de veces el mismo cuento.

10.

Todo/a nio/a, por ltimo, tiene derecho a crecer acompaado de


las aventuras de los grandes personajes de la historia de los
cuentos... y sobre todo del inmortal Haba una vez... palabras
mgicas que abren las puertas de la imaginacin en la ruta de los
sueos ms hermosos de la niez.

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7. REFERENCIAS BIBLIOGRFICAS

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2002.

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