25vehículos Bomberos
25vehículos Bomberos
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I. INTRODUCCION
Como podemos ir apreciando, los servicios de prevención, extinción de incendios y salvamento
(S.P.E.I.S.) de cualquier lugar de nuestra geografía, debido a los diversos cometidos y funciones
que tienen asignados, así como las distintas áreas que potencialmente pueden desarrollar, deben en
todo momento estar formados en un amplio campo de disciplinas. En consecuencia, dicha
formación debe estar principalmente orientada a las actividades que generalmente desarrollan
durante la realización de los diferentes servicios y siniestros (incendios, salvamentos, auxiliares,
especiales, etc.). Por tanto, como podemos suponer dentro del entrenamiento especializado que
continuamente debe ejercer todo profesional de los cuerpos de bomberos, necesariamente debe
contener el progresivo adiestramiento de todo el conjunto de vehículos que forman el parque móvil
del servicio (autobombas, autoescaleras, brazos articulados, furgones de salvamento, remolques,
etc.), donde se incluyen el conocimiento, la habilidad, el manejo, el mantenimiento y las distintas
operaciones que pueden ejercerse con estos tipos de vehículos, las bombas y sus correspondientes
dotaciones.
Por todo ello, cuando una persona que opera y maneja un vehículo que está incluido en el
conjunto de medios de transporte y operatividad que conforman el parque móvil de los servicios de
bomberos o de la lucha contra-incendios, a parte de cumplir con las diferentes normativas de
circulación y seguridad vial vigentes, en todo momento también es responsable del transporte
seguro del personal que traslada al servicio, del conjunto de operaciones eficientes que pueda
desarrollar, y de las diferentes dotaciones de equipos o bienes que dicho vehículo pueda contener.
Por otro lado, como se puede intuir, las emergencias no tienen una continuidad que permita añadir
una experiencia sobre el manejo y uso de los vehículos, lo cual unido a la gran diversificación de
los tipos de vehículos que poseen las dotaciones de bomberos para el cumplimiento de sus
funciones, y que el personal normalmente está asignado y se desmultiplica durante su jornada
laboral entre las diferentes dotaciones de emergencia que pueden constituir los diversos trenes de
salidas a los siniestros, supone un inconveniente añadido para el conocimiento exhaustivo de los
vehículos. Si bien esto, en principio es un problema de difícil solución, el remedio al mismo debe
encontrarse en la continua participación y practica del manejo, uso, mantenimiento, operatividad, y
estudio de los diferentes vehículos que existen en los parques de bomberos.
Junto a ello es conveniente manifestar que en los diferentes parques que poseen los servicios de
extinción de incendios y salvamento existentes, normalmente se denomina como “Tren de Salida”
al conjunto de vehículos o unidades móviles que transportan los medios o recursos dotacionales
(humanos y materiales) que, en primera instancia, se consideran usualmente necesarios y servirán
para solucionar el servicio o siniestro que se ha presentado. Por tanto, como es de suponer, pueden
existir multitud de diferentes “Trenes de Salida”, pues las disponibilidades de las dotaciones
existentes y el tipo de servicio presentado generalmente marcará el tipo de tren que auxiliará a dicho
siniestro. Es decir, aunque normalmente según el prototipo de parque de bomberos existente y el
tipo de siniestro que se ha planteado, cada servicio organizará o podrá protocolizar la mayoría de
los trenes de salida necesarios para resolver los diferentes servicios que se puedan dar. Sin embargo,
también hay que comentar que muchas veces dichos protocolos son modificados en un sentido u
otro, pues difícilmente pueden existir en estos casos unas reglas fijas, ya que su composición real
dependerá fundamentalmente del personal disponible, del tipo de vehículo que esté libre o
medios que no son terrestres (aéreo y acuático) u otros medios terrestres como son los
ferrocarriles, metro, aeropuertos, etc.
II. NOMENCLATURA Y CLASIFICACION
En nuestro país han cohabitado hasta hace poco tiempo, un gran número de clasificaciones
diferentes sobre los vehículos contra-incendios, las cuales en general muchas veces coincidían
en sus planteamientos básicos y en las diversas subclasificaciones que se ejercían. Sin embargo,
existían diversos grupos de vehículos, entre ellos los de altura, los de salvamento y algunos
especiales; los cuales eran reiteradamente clasificados en base a criterios dispares. Por todo ello,
tras la nomenclatura aplicada y la clasificación que se redacto en abril de 1983 en el Congreso
de Bomberos de Zaragoza; entonces la Dirección General de Protección Civil aprobó de forma
oficial una clasificación valida para todo el territorio nacional. Esta clasificación se incluyó en
el “Manual de Instrucciones y Códigos; Grupo de Códigos VIII : Tipos de Vehículos” que
debe utilizarse para la realización de los Partes Unificados de Actuación de los Servicios contra
Incendios y de Salvamento; lo cual fue refrendado por y el Real Decreto 1053/1985
(especialmente en su artículo 3º), de 25 de Mayo, sobre ordenación de la estadística de las
actuaciones de los Servicios contra Incendios y de Salvamento, y la posterior Orden Ministerial
de 31 de Octubre de 1985.
Por todo ello, todos los materiales móviles, tanto vehículos como remolques, pueden
identificarse por la nomenclatura o sistema de siglas que se establece en la clasificación de los
Tipos de Vehículos que a continuación vamos a detallar. Sin embargo, hay que hacer hincapié
que en la misma, también hemos incluido algunos nuevos tipos de vehículos que actualmente se
utilizan de forma asidua; junto a ello, comentar que existen otros vehículos especiales que no
aparecen reflejados y que posiblemente algunos otros vehículos no estén representados
(ferrocarril, metro, aeropuertos, etc.), ya que esta clasificación no ha sufrido cambio alguno en
los últimos años, por ello sería conveniente que ésta fuera revisada continuamente y
periódicamente fuera actualizada :
2.1. AUTOBOMBAS
2.3. SALVAMENTOS
2.4. ESPECIALES
2.5. AUXILIARES
2.7. AERONAVES
A) INTRODUCCION.
Los vehículos de extinción son clasificados según las funciones para las cuales fueron
diseñados; de todas formas podemos decir que su característica principal de diseño es la de poseer
agentes extintores adecuados para la lucha contra el fuego; por ello, normalmente todos estos
vehículos suelen poseer o llevar incorporados entre sus elementos una bomba que realiza funciones
de impulsión y aspiración de dichos agentes extintores. Como podemos suponer, generalmente el
agua es el agente extintor por excelencia y, por tanto, el más utilizado, debido a sus peculiares
propiedades extintoras y características polivalentes, la gran disponibilidad que existe en nuestro
planeta y sobre todo el escaso coste que supone su utilización.
Es decir de acuerdo a ello, los vehículos de extinción están especialmente diseñados para realizar
el ataque y la extinción de los incendios, así pues tienen como principal misión la proveer y
proyectar los agentes extintores apropiados (agua, espuma, polvo, etc.) a la presión adecuada para
cada uno de los tipos de fuego que nos podamos encontrar. Para ello, dichos vehículos deberán
contar con bombas o sistemas de impulsión y depósitos de agentes extintores adecuados para cada
campo de aplicación, de forma que las conexiones de alimentación y las salidas de impulsión
deberán poseer unos diámetros y una serie de características previamente normalizadas; además de
ello, poseerán controles de bomba, motor, niveles de la cisterna, dispositivos de apertura y cierre,
etc. En consecuencia, los vehículos de extinción deberán incorporar o estar provistos de tanques o
cisternas, bombas para aspiración e impulsión de agentes extintores y una serie de compartimentos
o cofres que puedan almacenar, albergar y transportar las conducciones, mangueras y todo el
material complementario que sea necesario para realizar las funciones de extinción.
Por otro lado, hay que comentar que inicialmente todos los automóviles que pertenecen a este
importante grupo de vehículos, intentaron ser incluidos o definidos en un compendio de normas y
que más concretamente se dispuso en la denominada norma UNE 23-900, a la cual haremos
referencia y que realmente es un PNE (Proyecto de Norma); de forma que con dicho proyecto de
norma se intentó marcar o definir las características mínimas y que se consideraban básicas para
cada uno de los tipos de vehículos que se podían definir, diseñar y construir. Por tanto, dichos
vehículos fueron clasificados en función del ámbito, campo de aplicación y funcionalidad que
pudieran desarrollar, pudiendo en principio clasificarlos como :
- Autobomba Urbano : Pesado, Ligero.
- Autobomba Rural : Pesado, Ligero.
- Autobomba Cisterna : Para Agua, Para Espuma.
Sin embargo, como podemos apreciar, esta norma UNE o proyecto de norma y la correspondiente
clasificación que fue presentada no fue finalmente completada en su totalidad, aunque si podemos
decir que dejo marcados los parámetros básicos, los componentes y las condiciones mínimas que se
les debía exigir a los vehículos que se quisieran incluir como vehículos de extinción normalizados.
Por todo ello, a continuación vamos a contemplar las características generales y normalizadas que
dicho proyecto de norma exigió a este tipo de vehículos, para luego ver cuales son las características
específicas y peculiares que definen concretamente a cada uno de ellos, todo ello de acuerdo a la
clasificación que se expone según la nomenclatura oficial de Protección Civil :
- Vehículos Autobombas
- Vehículos Agentes Especiales
B) ESPECIFICACIONES COMUNES NORMALIZADAS.
Los “vehículos contra incendios” que se usan o utilizan en los Servicios de Extinción de
Incendios y Salvamentos tienen, en su conjunto, un campo de aplicación idóneo para fuegos
urbanos, rurales, forestales e industriales. Por tanto, durante la utilización de cada uno de los tipos
de vehículos contra incendios se deberán permitir las operaciones propias que son adecuadas a sus
características de diseño, sin embargo, todos estos vehículos deberán de permitir todas las
operaciones normales o elementales que se suelen presentar en cualquiera de los siniestros o de
salvamento donde se han producido incendios. Además de ello, cada uno de los tipos de vehículos
que se definen en el proyecto de norma UNE, deberían permitir como mínimo las siguientes
operaciones o maniobras:
1. Autobomba Urbano Pesado (BUP)
- Ataque con 4 lanzas de 45 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas de 25 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas de espuma de 400 l/min. de caudal mínimo.
2. Autobomba Urbano Ligero (BUL)
- Ataque con 2 lanzas 45 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 4 lanzas 45 mm. a 80 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas 25 mm. a 80 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas de espuma de 200 l/min. de caudal mínimo.
3. Autobomba Rural Pesado (BRP)
- Ataque con 4 lanzas 45mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 1 lanza 25 mm. a 200 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas de espuma de 220 l/min. de caudal mínimo.
4. Autobomba Rural Ligero (BRL)
- Ataque con 2 lanzas 45 mm. a 100 metros de distancia .
- Ataque con 4 lanzas 45 mm. a 80 metros de distancia.
- Ataque con 1 lanza 25 mm. a 200 metros de distancia.
5. Autobomba Cisterna para Agua (BCA)
- Ataque con 1 lanza 70 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 2 lanzas 45 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con 1 lanza 25 mm. a 100 metros de distancia.
6. Autobomba Cisterna para Espuma (BCE)
- Ataque con 1 lanza agua-espuma 70 mm. a 100 metros de distancia.
- Ataque con agua-espuma con el monitor fijo del vehículo.
- Lanzar agua-espuma con el vehículo en movimiento.
Como podemos observar, los diferentes vehículos que se definen en el citado proyecto de norma
UNE son los denominados vehículos Autobombas, que como su propio nombre indica, estan
dotados de una bomba de incendios que le permite aspirar y lanzar agua, la cual puede ser
transportada en el propio vehículo en un compartimento especial denominado cisterna.
C) PRINCIPALES COMPONENTES
Por tanto, los principales componentes de estos tipos de vehículos son el autobastidor, el motor y
los sistemas de control e instrumentación, la carrocería, la instalación hidráulica y la bomba, la
cisterna, y la dotación o equipos que transportan, los cuales en su conjunto poseerán las
características y especificaciones que a continuación se detallan y que se han normalizado :
Autobastidor: Como ya sabemos es el elemento principal que sirve de base para el transporte
de todas las dotaciones de personal y material, y sobre el cual se apoya la superestructura;
poseyendo la energía necesaria para el funcionamiento de la unidad. Por tanto, el autobastidor
normalmente será un vehículo o camión de los que se adquieren en el mercado para otro tipo de
funcionalidad, pero sin la carrocería o superestructura, es decir, en chasis. Sobre este chasis se
montarán cada uno de los elementos que definen la autobomba, de forma que lo habitual es que
sobre el chasis original se le añada una superestructura que es la que soporta toda la dotación
característica del vehículo, aunque normalmente la cisterna se suele unir al chasis mediante
apoyos elásticos. También es habitual que la cabina de dicho vehículo pueda ser sencilla o doble,
lo cual se realiza según se quiera o no albergar una mayor dotación de personal. Por tanto, el
autobastidor de dichos vehículos, podrá ser :
- Autobomba Urbano Pesado y Ligero (BUP y BUL). Puede ser normal o tracción total
con dos ejes motrices.
- Autobomba rural Pesado y Ligero (BRP y BRL). Será del tipo “todo terreno” con los
dos ejes motrices.
- Autobomba Cisterna para Agua y Espuma (BCA y BCE). Este podría ser normal o con
más de un eje motriz.
Motor: Montado en el chasis, todas las Autobombas que hemos mencionado deberán estar
dotadas con los últimos avances técnicos, de forma que tendrán caja cambios sincronizada, la
dirección será servoasistida, la refrigeración podrá ser por aire o por agua, los frenos estarán
formados por dos circuitos independientes, la calefacción de motor para precalentamiento del
motor tendrá una potencia mínima de 1.000 watios, la transmisión para accionamiento de la
bomba será capaz de transmitir en servicio continuo las potencias exigidas para su eficaz
funcionamiento. Por otro lado, aunque pudiéramos suponer que la velocidad máxima que alcanza
el vehículo es muy importante, es mucho más interesante la relación potencia/peso (Kw/Tm ó
CV/Tm, 1 Kw = 1,36 CV) mínima que proporciona el vehículo. Este parámetro es muy
importante, pues nos expresará la capacidad de reacción o respuesta que posee el vehículo ante
un frenado brusco, su aceleración y reprise; por ello, últimamente se están imponiendo los
cambios de tipo automático, que gracias a su comodidad unen una mejor respuesta del motor
ante las aceleraciones. Junto a estos parámetros en los vehículos contra incendios se están
imponiendo cada vez más características como las tracciones totales, bloqueos diferenciales,
sistemas de frenado como el ABS. Además hay que tener en cuenta el tipo de caja de cambios
del vehículo, ya que esto influirá en el sistema de transmisión o toma de fuerza que poseerá la
bomba del mismo.
Carrocería: Es el conjunto del vehículo que está diseñado para transportar a las dotaciones de
personal y material hasta el lugar del siniestro. Por ello, deberá reunir una serie de características
peculiares, de las cuales podemos resaltar :
- Cabina. La cabina en los vehículos contra incendios urbanos y rurales, serán
preferentemente de cabina doble, avanzada y abatible hidraulicamente con doble cilindro
y bomba. Tendrán en general capacidad para conductor y cinco bomberos como mínimo.
En las autobombas cisterna la cabina será sencilla con capacidad para el conductor y dos
bomberos como mínimo.
- Armarios. Serán diseñados para adecuar perfectamente los materiales que tengan
que transportarse. Los suelos de dichos cofres serán de material resistente e
inoxidable.
Protecciones: Los elementos de protección generales y sobre todo los parachoques deberán
estar dispuestos de forma que protejan las partes de la carrocería y el equipo e instalación
hidráulica que normalmente se encuentra en la parte posterior, manteniendo al mismo tiempo los
ángulos voladizos delantero y posterior fijados. Por otro lado, las pinturas y revestimientos se
ajustarán a lo que dispone la norma UNE 48-103., de forma que sobre la base anticorrosiva se
pintarán : Negro, sobre llantas y bastidor. Blanco, sobre parachoques y aletas. Amarillo, sobre
puntos de engrase. Rojo, sobre exterior carrocería.
Instrumentos de control y medida: Estos vehículos contra incendios, irán, como mínimo,
dotados de un tablero completo de instrumentos en cabina, provisto de cuentakilómetros,
totalizador de kilómetros., cuenta horas de bomba, manómetro de freno de aire, amperímetro,
termómetro para agua con refrigeración, indicador de combustible, sistema calefacción e
indicador de luces intermitentes. Además también podrán poseer de otros elementos o
instrumentación que facilite un mayor y mejor control, verificación del buen estado y
funcionamiento de la unidad móvil.
Instalación hidráulica.
Salidas de impulsión: Además de poseer las correspondientes entradas de llenado de
deposito o cisterna (con bocas que generalmente son de 70 mm. de diámetro) y de aspiración
de bomba (donde la boca de aspiración deberá ser de 100 mm. de diámetro), dispondrán las
autobombas como vehículos contra incendios, de las salidas de impulsión siguientes :
Con lo cual, dichas autobombas permitirán lanzar agua, alimentándose de la propia cisterna, de
la red de suministro privada o pública, desde otro vehículo y directamente de la bomba.
Dispondrá también de devanaderas fijas, de forma que se considerará material de entrega
obligatoria con el vehículo, incluida la manguera de 25 mm. de diámetro de tipo semirrígida
(con longitud superior a los 40 metros) y la lanza, las cuales irán dotadas de racores
normalizados. Por otra parte, también existirá un equipo generador de espuma en bomba, ya
que según norma los vehículos contra incendios, excepto los rurales, deberán ir equipados con
un mezclador dosificador de espumógeno de dosificación regulable, entre el 0 y el 6%.
Depósito-cisterna: El Depósito-cisterna evidentemente dependerá del tipo de vehículo que
consideremos, sin embargo, deberá ser resistente a la corrosión interior y no deberá nunca
alterar las propiedades del agua transportada; por tanto se suele construir con materiales
metálicos inoxidables (acero laminado en frío, aceros resistentes a la corrosión, aluminio, etc.)
o de planchas de polietileno con fibra de vidrio reforzada. Normalmente se fijan al chasis
directamente mediante un sistema o conjunto de elementos elásticos que evitan o amortiguan
las torsiones y vibraciones que se pueden producir. Entre sus principales elementos
constituyentes deben encontrarse el rebosadero, la llave de purga o vaciado, la boca de hombre
para realizar su limpieza y mantenimiento, las correspondientes canalizaciones de llenado y
descarga, así como la válvula de aspiración, y para que se eviten remolinos en el agua y los
efectos inerciales que pudieran comprometer la estabilidad del vehículo también deberá poseer
los denominados tabiques rompeolas, los cuales pueden ser fijos o desmontables. Estos
tabiques rompeolas son imprescindibles para la estabilidad del vehículo y la previsión del
comportamiento durante las frenadas y aceleraciones del mismo; así pues dependiendo de su
tamaño serán necesarios más o menos tabiques, que se dispondrán tanto en el sentido
transversal como longitudinal de forma que así evitaremos los desplazamientos de la carga, los
cuales por lo general son muy peligrosos. Por lo general, estos depósitos poseen formas
paralepipedas con techo plano o curvo, para capacidades de hasta 4000 litros, y cilíndricas para
capacidades de carga hasta 10000 litros o incluso superiores. Además, también existen unos
caudales máximos de llenado, los cuales se han fijado en 1.200 l/min. para las cisternas que
poseen una capacidad inferior a los 1.500 litros y de 1.500 l/min. para los restantes vehículos.
Por otro lado, según fija el proyecto de norma UNE 23.900, la capacidad mínima de las
cisternas en litros será de :
Bombas hidráulicas: Las bombas hidráulicas que exige la norma UNE 23.900 deberán de ser
del tipo centrífuga o motobombas portátiles, de forma que podrán ser accionadas por el propio
motor del vehículo o con motor independiente o auxiliar y, en este último caso, será extraíble y
portátil. Estas bombas han de ser de aleación resistente a la corrosión y permitir el uso de agua
salada o extraída del mar. Como ya hemos visto, las bombas centrifugas son rotativas, de forma
que aprovechan la fuerza cinética centrifuga que se proporciona al agua al girar en un rodete o
impulsor (la cual se introduce por su eje) y la lanza hacia el exterior de la bomba (carcasa) a una
gran velocidad, de forma que en la salida de la misma se facilita la conversión de dicha energía
cinética en energía de potencial o de presión, mediante el diseño especial que dicho colector de
salida presenta (voluta). Normalmente, este tipo de bombas pueden concatenarse constituyendo
etapas y aumentarse la presión de salida cuando el agua pasa por cada una de ellas. En
consecuencia dependiendo del tipo de bomba, sus rodetes, y las etapas que posea podremos
conseguir que la misma sea de baja o alta presión, o incluso trabajar en baja y alta presión
simultáneamente. Junto a ello, dependiendo del sistema de toma de fuerza (mecanismo que
permite transmitir la fuerza del motor a la bomba) que posea, entonces se podrá proporcionar o no
agua cuando el vehículo esté en movimiento. Además, dicha norma UNE exige también que estas
clases de bombas sean capaces de realizar al menos, las siguientes maniobras u operaciones :
- Lanzar agua, alimentándose la bomba desde la cisterna del vehículo.
- Lanzar agua, alimentándose la bomba desde la red urbana a presión, de forma que el agua
sea suministrada directamente a la bomba o a través de la cisterna.
- Aspirar agua a una profundidad de hasta los 7,5 metros y lanzarla a la vez o bien llenar o
alimentar la cisterna del vehículo.
Por otro lado, según el proyecto de la norma UNE, las mínimas características hidráulicas
nominales (presión y caudal) que se le deben exigir a las bombas que se instalan en los
correspondientes vehículos de extinción, serán las siguientes :
Dotación y equipos: En general, cada tipo de vehículo de lucha contra incendios deberá poseer un
conjunto de materiales y equipos característicos que deberán ser apropiados al campo de aplicación en
el cual pueda actuar, de forma que puedan resolver la clase de siniestros para el cual fue diseñado su
intervención. Como podemos suponer, no todos los vehículos de incendios tienen la misma clase,
modelo y número de equipos y materiales, ya que incluso el mismo prototipo de vehículo, por razones
de trabajo y entorno peculiares, es diseñado de distinta forma en los distintos servicios de bomberos.
Por tanto, para cada prototipo de vehículo la norma fija unas clases y números de conjuntos de
equipamientos y materiales mínimos que deben llevar incorporados. En consecuencia, dicho proyecto
de norma UNE establece dos tipos de equipamientos o dotaciones, es decir, el básico y el adicional;
aunque por operatividad se puede añadir otro tipo de equipamiento. El primero de ellos de “Tipo A”,
estará compuesto por una lista normalizada de materiales y equipos que se consideran imprescindibles
para actuar en los tipos de siniestro para el cual está diseñado el vehículo; el segundo de ellos de “Tipo
B”, comprenderá los materiales y equipos que son considerados complementarios o adicionales y que
también resultan indispensables para el buen desarrollo de las funciones que se deben ejecutar en
dichos siniestros. Además de estas dotaciones normalizadas, los vehículos de extinción pueden llevar
otro equipamiento no normalizado como puede ser material complementario al mencionado o tan
diverso como visores, explosímetros, trajes de aproximación, depósitos de combustible, material de
corte y fuerza, material de demolición y apuntalamiento, mascaras de rescate, etc.
Dotación de “Tipo A”.
Este equipamiento que está considerado como básico, está constituido por un conjunto de
materiales y equipos que son apropiados para realizar labores de extinción, de demolición, de
iluminación y señalización, y de salvamento; de forma en su conjunto todo el equipamiento o
dotación se estima que posea un peso total de unos 437 Kg. La lista normalizada que
constituye esta dotación es la siguiente :
dotacional. Este tipo de vehículos tiene una buena aceptación en Servicios que prestan auxilio
en cascos urbanos antiguos con difíciles accesos o escasa reserva de agua lo que hace que
dependa de la red urbana de hidrantes y de las bocas de riego, si bien es suficiente para muchos
siniestros utilizando la manguera de primer socorro. Como ya comentamos, estos vehículos
deben permitir llevar a cabo las siguientes maniobras elementales :
* Todas las operaciones elementales de salvamento en incendios.
* Ataque con dos lanzas de 45 mm a incendio situado a 100 m de distancia.
* Ataque con cuatro lanzas de 45 mm a incendio situado a 80 m de una boca de
incendios o punto de agua.
* Ataque con dos lanzas de 25 mm a incendio situado a 80 m de distancia.
* Ataque a incendio con dos lanzas de espuma de 200 l/min de caudal mínimo.
Por tanto, sus dimensiones son pequeñas, su potencia es limitada, y sus capacidades
dotacionales de agua, material y humanas son reducidas, de forma que se suele utilizar en
siniestros localizados y de relativa poca importancia. Sin embargo, las normas también
específica que estos vehículos deben cumplir lo siguiente :
* Motor de tipo diesel y sistema de tracción normal.
* Carga mínima de 2.000 Kg y capacidad mínima de la cisterna de 800 litros.
* Relación potencia/masa mínima de 11 Kw/Tm = 15 CV/Tm.
* Velocidad máxima de 90 Km/h.
* Dotación reducida en doble cabina : 1 Mando, 1 conductor, y 2 ó 3 bomberos.
* El principal agente extintor que se utiliza es el agua, portando además como
agentes complementarios bidones de espuma, extintores de CO2 y polvo.
* Bomba contra incendios del tipo Bb 16/8 ó Bc 16/8-2/30.
* Con salidas impulsión mínimas : 2 de 70, 1 de 45, y 1 de 25.
* Entre la diferente dotación de material y equipos, poseerá como mínimo de un
carrete de emergencia semirrígido de 25 mm con 40 metros mínimo de largo,
material normal de “tipo A y B” en departamentos, dispositivo de remolque de
750 Kg., un generador espuma capaz de suministrar 400 l/min (incluido en la
propia bomba o en un dispositivo portátil)
Por último comentar que antiguamente en el SPEIS de Valencia, a este tipo de vehículo
se le denominaba PSP (Primer Socorro Pequeño).
2. Autobomba Urbano Pesado (BUP): Es un vehículo que según norma UNE está
clasificado como vehículo contra incendios, cuyo campo de aplicación más indicado es el
de zonas urbanas e industriales gracias a las dimensiones, prestaciones, dotación y potencia
que desarrolla y posee, además de poseer normalmente una fácil maniobrabilidad,
circulación y callejeo en la mayor parte de estos entornos. Es decir, su equipamiento le
permite resolver la mayoría de siniestros urbanos o industriales que se consideran como
normales en su evolución. Su reserva de agua y la potencia hidráulica de la bomba, le
permiten actuar como primera intervención, si bien en incendios prolongados deberá
depender de una red de agua u otro tipo de abastecimiento. Junto a ello, estos tipos de
vehículos deben permitir llevar a cabo las siguientes maniobras elementales :
* Todas las operaciones normales de salvamento en incendios.
* Ataque a incendio con 2 lanzas de 25 mm a 100 m de distancia del vehículo.
* Ataque con 4 lanzas de 45 mm a incendio situado a 100 m de distancia de una
boca de incendios o punto de agua.
* Ataque a incendio con dos lanzas de espuma de 400 l/mm. de caudal mínimo.
Por tanto, sus dimensiones relativamente mayores junto a su mayor potencia, le permite
poseer de capacidades dotacionales de agua, material y humanas más amplias, de forma
puede ser utilizado en una amplia gama de siniestros de muy diversa importancia y
dimensiones. En consecuencia, las normas vigentes especifican que estos vehículos
también deben cumplir lo siguiente :
* Motor de tipo diesel, con un sistema de tracción normal o a un eje.
* Carga mínima de 4.271 Kg y capacidad mínima de agentes extintores en cisterna
de 3.200 litros (siendo de agua entre los 2500 y 3000 litros).
* Relación potencia/masa mínima de 11 Kw/Tm = 15 CV/Tm; de forma que la
potencia normalmente oscila entre los 200 y 280 CV.
* Velocidad máxima de 100 Km/h.
* Dotación completa de intervención en doble cabina, compuesta normalmente por
1 Mando, 1 conductor, y de 3 a 5 bomberos.
* El principal agente extintor que se utiliza es el agua, portando además como
agentes complementarios recipiente-cisterna de espuma, bidones de espuma de
otra clase, extintores de CO2 y polvo.
* Bomba contra incendios del tipo Bb 16/8 ó Bc 16/8-2,5/35 (aunque por lo general
se suele instalar la combinada).
* Con salidas impulsión mínimas : 2 de 70, 2 de 45, y 1 de 25.
* Entre la diferente dotación de material y equipos, poseerá como mínimo de dos
carretes de emergencia semirrígido de 25 mm con 40 metros mínimo de largo,
varias dotaciones de material de tipo “A” que deben ser complementadas con las
de tipo “B” y dispuestas en la cabina y en los diferentes cofres o departamentos
dispone, dispositivo de remolque de 1500 Kg., un generador espuma regulable de
dosificación entre el 0-6% y que es capaz de suministrar entre los 200-800 l/min.
Por último comentar que antiguamente en el SPEIS de Valencia, a este tipo de vehículo
se le denominaba PS (Primer Socorro).
Autobombas Rurales: Las autobombas rurales son vehículos usados por los Servicios de
Extinción de Incendios y Salvamentos para desarrollar tareas eficaces en siniestros de ámbito
rural (normalmente combinación de hábitats como pueblos, núcleos urbanos, tierras de cultivo
y pasto, así como la existencia de masas forestales de distinta consideración). Por tanto, todo
su equipamiento deberá estar diseñado para resolver los siniestros que se produzcan en estos
entornos y, por consiguiente, su bastidor será del tipo “tracción total o todo terreno”. De
acuerdo, a la nomenclatura oficial que estamos considerando existen dos tipos de vehículos
rurales (BRL y BRP), siendo sus principales características las siguientes :
1. Autobomba Rural Ligero (BRL): Es un vehículo cuya aplicación más indicada es en
zonas rurales pues gracias a sus peculiares dimensiones, su maniobrabilidad y su bastidor
del tipo todo terreno le permite el acceso hasta lugares donde los vehículos más pesados no
pueden llegar. Su escasa reserva de agua lo hace depender de la red urbana, de
abastecimiento natural o de alimentación a través de cisternas de agua. Actualmente los
vehículos rurales permiten impulsar agua con el vehículo en movimiento, presentando una
ventaja cuando se combate incendios de amplio frente y una baja progresión del mismo.
Junto a ello, como ya hemos visto, estos vehículos deberán siempre permitir llevar a cabo
las siguientes maniobras elementales :
* Todas las operaciones normales de salvamento en incendios.
* Ataque con 2 lanzas de 45 mm. a un incendio situado a 100 m de distancia .
* Ataque con 4 lanzas de 45 mm. a un incendio situado a 80 m de distancia.
Autobombas Forestales: Las autobombas forestales son vehículos que son utilizados por
los Servicios de bomberos para desarrollar tareas eficaces en siniestros o incendios de tipo
forestal, es decir, allí donde la masa vegetal posee cierta consideración. Por tanto, todo su
equipamiento deberá estar diseñado para resolver los siniestros que se produzcan en este
tipo de entornos y, por consiguiente, como ocurría con las autobombas rurales su chasis o
bastidor deberá ser del tipo “Tracción Total”. Normalmente cuando se contempla por
primera vez un vehículo contra incendios, lo primero que miramos suele ser el chasis
(autobastidor) y la carrocería; por tanto en estas clases o tipos de vehículos, para un profano
en la materia, no existen diferencias apreciables pues las diferencias significativas se
detectan en la misión o funcionalidad particular para la cual van a ser dedicados. Aunque el
proyecto de norma UNE no los contempla de forma explícita, debemos considerar que estos
vehículos están contemplados implícitamente en las normas que dicta para los vehículos de
extinción rurales, aunque generalmente estará diseñado con un gran ángulo de aproximación
y salida para poder actuar en los difíciles terrenos donde debe frecuentar, muchas veces muy
escarpados. Sin embargo, podemos decir que muchas veces es difícil encontrarnos con
autobombas forestales en los servicios de extinción de incendios que atienden a poblaciones
o núcleos urbanos, ya que generalmente todos prefieren un vehículo más versátil como son
las autobombas rurales, las cuales estan dotadas de equipamientos que no solamente están
diseñados para trabajar en incendios donde la masa vegetal es el parámetro característico.
Por otra parte antiguamente a este vehículo se le denominaba como ATF (Autotanque
Forestal). De todos modos, de acuerdo a la nomenclatura oficial de Protección Civil existen
dos tipos de vehículos forestales (BFL y BFP) siendo sus principales características, las
siguientes :
abastecimiento puede establecerse con los medios auxiliares que lleva el vehículo o bien a
través de cisternas de agua, permitiéndose también las mismas maniobras elementales que
a aquel se le exigía; en consecuencia, este vehículo aplicado al ámbito forestal es muy
similar al BRP. En la Comunidad Valenciana hay un buen número de BFP, sin embargo,
estos tipos de vehículos suelen ir algo cortos de potencia y velocidad en relación a lo que
las normas UNE les exigen.
Autobombas Nodrizas (Cisternas). Las autobombas cisterna son vehículos usados por los
servicios de Extinción de Incendios y Salvamentos para desarrollar tareas de lucha enérgica y
directa sobre el incendio o bien en tareas de alimentación a otro vehículo. También se les
denomina vehículos “Nodriza”, pues en fuegos como los de tipo industrial su principal misión
es abastecer de medios y recursos (generalmente agua) a los vehículos de ataque o primera
intervención para que realicen o continúen la extinción. De acuerdo, a lo que expone la
nomenclatura oficial de Protección Civil solo existen dos tipos de vehículos autobombas
nodrizas (BNL y BNP), los cuales no se ajustan exactamente a lo dictamina el proyecto de
norma UNE para definir los vehículos autobombas cisterna; por tanto, es conveniente conocer
las disposiciones y la clasificación que dichas normas ejerce en dichos vehículos :
2. Autobomba Cisterna para espuma (BCE): Es un vehículo cuya aplicación más indicada
es en la lucha directa contra los incendios industriales. Por tanto, es un vehículo básico en
la industria petroquímica, como protección en fuegos de líquidos inflamables, además se
prevé el uso como nodriza.
3. Autobomba Nodriza Ligera (BNL): Es un vehículo que por sus dimensiones más
reducidas puede maniobrar en lugares y situaciones con vías de acceso relativamente
difíciles y por su reserva de agua, potencia de la bomba hidráulica y material para
instalaciones de mangaje puede efectuar una acción moderada en incendios cuando no se
precisan otros elementos, tanto alimentado a otro vehículo como actuando directamente.
En la dotación se incluyen elementos para su propio abastecimiento de agua aún cuando las
condiciones son difíciles. Gracias a su campo de aplicación, estos vehículos pueden
desarrollar las maniobras elementales que se les exigía a las BCA, o incluso a las BCE. Su
similitud con lo dictado con el proyecto de norma, no exige que este vehículo posea doble
cabina, con lo que da a entender que este vehículo no está preparado como vehículo de
primera salida, si no como vehículo de apoyo o abastecimiento. Aunque no lo obliga,
también permite que se incorporen conexiones y mangotes de aspiración de 125 mm. En
referencia al equipamiento no se solicita tanto como pueda llevar un BUL y mucho menos
que el BUP, ya que se define al vehículo como auxiliar de incendios al no incorporar ni
Como su propio nombre los define, estos tipos de vehículos son unidades móviles que son
capaces de transportar, impulsar y proyectar otros tipos de agentes extintores que son distintos al
agua, el cual está considerado como agente extintor universal. Generalmente en los diversos
servicios de extinción que existen, podemos encontrar vehículos que fueron diseñados para actuar
de forma primordial con agentes extintores específicos, o incluso en muy diversas combinaciones
de estos tipos de agentes (incluido el universal) para conseguir finalmente unidades de extinción
que poseen un gran número de aplicaciones, tamaños y formas. Sin embargo, debido a la
proliferación que existió de esta clase de vehículos, en principio podemos decir que no existe una
norma UNE específica que los encuadre y defina, aunque como veremos algunos de ellos pueden
reglarse por las disposiciones que expusimos para alguna de las autobombas que hemos descrito.
Existe en el mercado una amplia gama de vehículos que cumplen con estas características, sin
embargo, muchas veces los servicios de bomberos realizan adaptaciones en otros tipos de vehículos
para cumplir finalmente con las necesidades reales que de estos tipos de vehículos disponen. De
todos modos, aunque en el proyecto de norma UNE no existen disposiciones específicas que los
defina de forma explícita, podemos decir que la nomenclatura oficial que dictó la Dirección General
de Protección Civil si que contempla dos tipos o clases de vehículos de agentes específicos, siendo
estos :
Vehículos con agente único (VAU): Podemos decir que, inicialmente esta clase de vehículos
de extinción fueron proyectados y construidos para poder resolver un conjunto de servicios de
incendios y siniestros de diversa índole, donde generalmente el agente extintor universal, el
agua, era prácticamente inoperante o peligroso su uso. Por tanto, para poder albergar estos
agentes extintores específicos, estos vehículos se ajustarán a un conjunto de parámetros y
especificaciones que deben de estar en consonancia con el producto que transportan y con el
campo de aplicación para el cual fueron diseñados. Aunque en los diferentes parques de
bomberos, existen muy diversos vehículos que se ajusten a estas características podemos
destacar como prototipos principales de ellos, a los siguientes :
1. Vehículo de Espuma: Este tipo de vehículos son muy similares a las ya conocidas
autobombas cisternas y, por tanto, su le permite desarrollar las maniobras elementales que el
proyecto de norma UNE le exigía a las BCE. Sin embargo, estos vehículos pueden estar
diseñados para actuar de forma individual en siniestros o incendios donde la espuma, como
agente extintor, es adecuada; y, en consecuencia, aunque pueden existir unidades utilizadas
como vehículos de apoyo de cabina simple (conductor y dos bomberos), se aconseja que
posean cabina doble para transportar un mayor número de efectivos humanos (un mando, un
conductor y cuatro bomberos) y materiales. Por ello, deben incorporar material de primera
intervención (similar al del BUL ó BUP), disponiendo así de trajes de aproximación, mangaje
Vehículos múltiples agentes (VMA): Como podemos suponer, estos tipos de vehículos son
unidades de extinción que han sido diseñadas para combinar, transportar y proyectar una
mezcla adecuada de diversos agentes extintores. En la práctica, los vehículos de este tipo que
existen en los diferentes servicios de bomberos suelen combinar agentes extintores tan
distintos como el agua, la espuma y el polvo, utilizando generalmente nitrógeno como gas
impulsor. Por tanto, podemos decir que el campo de aplicación que posee es múltiple y muy
amplio, pues la suficiente capacidad y la diversidad de agentes extintores que transporta le
hace apto para un sin fin de siniestros; de forma que por su múltiple funcionalidad y
operatividad finalmente también se les conoce como vehículos de extinción universal. Por
tanto, este vehículo de diseño especial posee generalmente aplicaciones en la lucha contra los
incendios de tipo industrial en general, y más concretamente en aquellos siniestros donde
existan hidrocarburos ó presencia de riesgos eléctricos; de forma que puede desarrollar sus
funciones y cometidos de forma individual o bien como vehículo nodriza. En consecuencia,
pueden tener cabina simple o doble con capacidades que oscilan entre los 3 y 6 bomberos,
autobastidores de tracción normal o total, dotaciones de equipos y materiales básicas como
los equipos de respiración autónoma, trajes de aproximación y penetración al fuego, equipos
detectores de atmósferas enrarecidas, visores de infrarrojos, equipos de comunicaciones,
etc.; junto a los equipos de extinción tradicionales para estos agentes extintores como son las
devanaderas para polvo, devanaderas para espuma-agua, los monitores (fijo-móvil), las
bombas de impulsión, las mangueras e instalaciones en baja y alta presión, etc. Es decir, sus
dimensiones, equipamiento, su reserva de agua-espumógeno y polvo, además de su potencia
hidráulica le confieren una polivalencia de uso para siniestros en industrias químicas, plantas
y almacenamientos petroquímicos, subestaciones y transformadores eléctricos, aeropuertos,
puertos marítimos, etc. Ultimamente en los aeropuertos están proliferando diversos modelos
de estos tipos de vehículos (varios agentes específicos), encontrándose unidades que están a
caballo entre las autobombas tradicionales y los carros de combate de incendios, de forma
que poseen mecanismos de manejo de bomba y del monitor desde la propia cabina, además
suelen poseer cuatro o más ejes y están concebidos como vehículos todo terreno.
A) VEHICULOS DE ALTURA: Aunque en primera instancia pudiéramos entender que esta clase de
vehículos estan solamente destinados a ejercer labores o tareas de acceso, salvamento y rescate de
personas, animales y bienes en espacios aéreos o en altura, estos tipos de unidades poseen una serie de
características especiales y de carácter versátil que finalmente les proporciona una funcionalidad y campo
de aplicación que muchas veces se considera insospechado. Es decir, además de las tareas de rescate
mencionadas, los vehículos de altura pueden participar en operaciones tan diversas y complejas como en
la protección, ataque y extinción de incendios en lugares elevados (edificación, industria, plantas
petrolíferas, etc.), inspección y saneado de construcciones, apertura de puertas y acceso a inmuebles,
colaboración con servicios sanitarios para el transporte de víctimas que deben ser extraídas de los
edificios, acceso y auxilio a personas suicidas y dementes, inspección y valoración de siniestros que por
sus características difícilmente pueden determinarse desde el nivel rasante, etc.
Por consiguiente, podemos decir que gracias a su peculiar configuración estos tipos de vehículos
(autoescaleras y autobrazos) son quizás las unidades más sofisticadas, complejas y necesarias que existen
en los parques de bomberos, y en consecuencia es de suponer que el presupuesto de adquisición y
mantenimiento de estas unidades es elevado; conviene por tanto conocer exhaustivamente cada una de las
características que posee, sus campos y ángulos de trabajo y operatividad, así como sus especiales
condiciones de mantenimiento y seguridad. Es decir, son vehículos insustituibles para realizar
proyecciones de agentes extintores desde altura y salvamentos rápidos en edificios, sin embargo, su mal
uso y/o funcionamiento puede que genere problemas o accidentes muy graves e irreversibles.
Antes de entrar de lleno en las clases de vehículos de altura que normalmente existen en el mercado
(autoescaleras y autobrazos), es conveniente comentar que cada una de ellas posee una serie de
características y campo de aplicación específico y que en muchas ocasiones se solapan; sin embargo,
cuando se pretende adquirir una unidad de estas características siempre existen los defensores y
detractores de cada una de ellas. Por tanto, nosotros entendemos que estos dos tipos de vehículos, aunque
con características y aplicaciones que parecen ser similares, son dos plataformas muy distintas y en
definitiva deben complementarse; por ello, una vez vistas las características principales de cada una de
ellas, comparemos sus campos de aplicación y trabajo para concretar mejor su correcto uso y operatividad.
Autoescaleras. Históricamente, los primeros vehículos de altura que utilizaron los servicios de
bomberos fueron precisamente las escaleras (las cuales eran carruajes remolcados o móviles con
estructura de madera reforzada y con mecanismos y artilugios complejos para su despliegue y
operatividad), pues entonces ya se consideraba que eran unidades básicas para realizar rescates y
salvamentos en incendios y otros tipos de siniestros. Gracias al estudio de las diferentes
accionados por cables (situados en los laterales para facilitar el acceso por el centro o
interior) que realizan la extensión y recogida de la misma. El número de tramos varía en
función de la dimensión de la escalera, teniendo cada uno de ellos una longitud media de
unos 9,50 metros y suelen quedar solapados cuando son desplegados totalmente unos 2,50
metros. Actualmente se fabrican autoescaleras con unos alcances muy diversos, como los 18,
24, 25, 30, 37, 44 o 50 metros (antiguamente fueron fabricadas algunas unidades de hasta 75
metros, las cuales estan en desuso por sus graves problemas de torsión, estabilidad y
seguridad). También hay que decir que, el tramo inferior suele tener un anclaje donde situar
un polipasto o polea para efectuar el levantamiento de cargas; y el tramo superior cuenta con
anclajes para las cestas o barquillas de salvamento e instalación de lanzas monitoras.
- Barquillas: Las diferentes cestas o barquillas de salvamento que pueden ser fijas o
instaladas en punta de la escalera se construyen generalmente con perfiles de acero ligero,
contando con dispositivos para conseguir la horizontalidad y el bloqueo, que suelen
funcionar por gravedad o hidraulicamente. Además, disponen de un sistema de
intercomunicación, controlado desde el puesto de mando, que enlaza mediante un
microaltavoz con la punta de escala, y permite la transmisión de órdenes e instrucciones.
En general, según modelos y fabricantes, podemos encontrar los siguientes tipos o modelos
de cestas o barquillas :
* Colgada. Situada para el transporte en el propio cuerpo de la escalera, pesa unos 65
Kg, lo que permite su manejo y montaje en punta por dos hombres. Se sitúa en su
posición mediante anclajes rápidos, y se nivelan por gravedad, manteniéndose en
posición vertical mediante un cilindro hidráulico.
* Incorporada. Encastrada en el último tramo de escala, generalmente por su base.
Disponen de un mecanismo de rotación que la pliega sobre los tramos de la escalera
para el transporte. Normalmente van equipadas con un pupitre de mando,
complementario al del puesto de mando principal, para controlar y dirigir los
movimientos directamente.
* Deslizante. En los vehículos de mayor altura (44-50 metros), la cesta suele ir
apoyada y guiada sobre las barandillas de los tramos de escala y cuenta con un
mecanismo de tracción que le permite la elevación y el descenso, a semejanza de un
ascensor o montacargas.
- Lanzas monitoras : Estas unidades pueden disponer de lanzas de tipo monitor (manuales o
automáticas), alimentadas mediante una canalización de 45 mm que discurre a lo largo
del último tramo de la escalera, y a la cual se le puede conectar una manguera flexible
mediante el racor normalizado correspondiente. Este tipo de lanzas que pueden instalarse
en la escalera o la propia cesta pueden ser :
* Desmontables. Se colocan fijamente en un lateral de la cesta de salvamento y se
consigue los desplazamientos horizontales y verticales con la elevación y el giro del
cuerpo de la escalera. Proporcionando caudales máximos de 740 l/min para boquillas
de 18 mm a presiones de 12 bar.
* Enchufable. Se acoplan en un soporte especial de la cesta, permitiéndose giros de + -
30 grados. Es capaz de proyectar caudales de 2000 l/min con boquillas de 34 mm y
7 bar de presión.
* Incorporable. Se añaden a la punta de escala, y es accionable desde el suelo mediante
un cable o cuerda. los desplazamientos horizontales y verticales se consiguen girando
y elevando el cuerpo de la escalera. Permiten caudales máximos de 2400 l/min con
boquillas de 36 mm a presión de 8 bar.
Por otra parte, la dotación de personal depende del modelo de cabina por el cual se ha optado,
de forma que esta puede estar compuesta por un conductor y de dos a cinco bomberos. En todos
estos modelos le corresponde al conductor el transporte, emplazamiento y manejo de la unidad,
aunque también puede realizarse las labores de manejo y aproximación por el resto de personal
que se coloca en la cesta. Sin embargo, el conductor debe siempre colocarse en el puesto de
mando principal o prioritario (situado normalmente en la plataforma), de forma que ante
cualquier anomalía, fallo, o accidente pueda tomar el control y recuperar la unidad.
Aunque la dotación de material que pueda transportar pudiera ser muy diversa, normalmente
estos tipos de vehículos suelen incorporar equipamientos para salvamento y rescate (camillas,
hondillas, descensores, mangueras de evacuación, cuerdas, etc.), material para instalaciones de
extinción (mangueras, lanzas, bifurcaciones, reducciones, etc.), material para saneamiento de
construcciones (picolas, bicheros, cinceles, hachas-picos, etc.), equipo de balizamiento y
señalización (cintas, conos, banderolas, megáfonos, etc.), equipos de iluminación (algunos
modelos llevan incorporado un grupo electrógeno auxiliar con sus correspondientes focos.
Además, normalmente están dotadas de focos fijos orientables, unos situados en el primer tramo y
otros en punta de la escalera o cesta), equipo comunicaciones (intercomunicadores de puesto de
mando con cesta, emisoras, etc.), y en ocasiones también llevan incorporados equipos de
protección respiratoria, etc. Por tanto, entre las principales aplicaciones que las escaleras poseen es
que con esta serie de medios y recursos pueden realizar funciones tan diversas como facilitar el
acceso de los bomberos a edificios siniestrados en el nivel o altura deseados; efectuar el rescate de
personas atrapadas a determinadas alturas, pudiendo bajar estas personas (peldañeando por su
cuerpo, descendiendo en la barquilla, deslizándose por los descensores o las mangas de evacuación
que se incorporan; efectuar el ataque a fuego en altura y a distancia; permitir el izado y descenso de
cargas dentro de ciertos límites. Entre las ventajas que normalmente presentan podemos citar su
gran maniobrabilidad, ya que generalmente es un vehículo poco pesado (aproximadamente unas 13
toneladas para los modelos de 30 metros) y posee un aceptable radio de giro; la manejabilidad y
gran facilidad de su emplazamiento, y con ello su puesta en funcionamiento se realiza en breve
tiempo; la multitud de operaciones y gran versatilidad o variedad de funciones que puede
desempeñar. Sin embargo, entre sus principales inconvenientes nos encontramos con su actuación
unidireccional, la falta de libertad de movimientos y en ocasiones no poder desempeñar funciones
apropiadas cuando deseamos realizar movimientos bajo rasante. En consecuencia, cuando se desee
realizar maniobras operativas con esta clase de vehículos, antes de utilizarse en cualquier siniestro
de urgencia nos debemos de asegurar cuales son sus instrucciones de uso y mantenimiento, sus
campos y ángulos de trabajo, sus limitaciones y sistemas de seguridad, para posteriormente
ejercitar con las prácticas y entrenamientos suficientes, de forma que nos permita adquirir una
habilidad y adiestramiento adecuado para operar con seguridad y confianza en dichos servicios.
Además de estas premisas, durante su emplazamiento y trabajo deberemos tener en cuenta los
siguientes factores o parámetros :
- Ángulo de trabajo. La mayoría de las autoescalas modernas tienen la posibilidad de actuar
dentro del rango de – 15º a + 75º, lo que les permite una gran variedad de emplazamientos y
trabajos.
- Carga máxima. Generalmente están diseñadas para admitir una carga máxima en punta,
estando desplegadas totalmente y con su ángulo de elevación máximo, de 250 Kg, lo que
puede equivaler a tres hombres o dos hombres y la barquilla. Esta capacidad de carga va
disminuyendo a medida que lo hace el ángulo de elevación. Sin embargo, apoyada, como
puente, es capaz de admitir cargas de hasta 720 Kg, o el peso equivalente a 8 hombres.
- Alcance. En sentido vertical, está limitado por la longitud de los tramos, sin embargo,
existen otros factores que pueden influir en esta dimensión (carga, ángulo de trabajo,
dispositivos de seguridad, emplazamiento, etc). En consecuencia, podemos decir que a
medida que nos alejamos horizontalmente del punto a alcanzar, no sólo la distancia es
Autobrazos. Tras la evolución sucesiva que sufrieron las escaleras, y ante la carencia de
ciertos tipos de movimientos que se detectaron en ellas, así como su actuación totalmente
unidireccional; intentando asemejar el funcionamiento de los sistemas robotizados de las grandes
industrias o del brazo humano fueron aparecieron diversos vehículos que cumplían funciones
complementarias a dichas escaleras. Por tanto, estos vehículos, además de alcanzar diferentes
alturas, tienen la propiedad de penetrar horizontalmente mediante el juego o articulación de sus
brazos. Gracias a ello, estos sistemas son capaces de desarrollar un importante conjunto de
posibilidades y de actuaciones para muy diversas situaciones. Con lo cual, y de forma prioritaria,
en función del juego y extensión de sus tramos o brazos, los vehículos autobrazos podemos
clasificarlos en :
- Autobrazos Articulados (ABA).
- Autobrazos Extensibles (ABE).
Normalmente, los vehículos autobrazos son unidades móviles que poseen un autobastidor de
tipo convencional, que lleva incorporado una cabina de tipo sencilla y una superestructura o
plataforma especial que está compuesta por un bastidor de acero soldado en el que se incorpora
una bomba principal, el depósito de líquido hidráulico y los filtros, así como un motor de reserva
(para utilizar en caso de fallo del primario), junto a los cuales nos encontramos con los siguientes
conjuntos de sistemas y elementos :
- Sistema motriz : Constituido por una base giratoria construida en acero que reparte el peso
uniformemente sobre la corona de giro, que se encuentra montada sobre un cojinete de
doble fila de bolas, lleno de grasa, que discurren dentro de unas guías. La elevación del
primer brazo se consigue mediante cilindros hidráulicos, dotados de mecanismos
automáticos de bloqueo en caso de fallo de la presión. Según la longitud total del
autobrazo, éstos pueden ser : uno para alturas de hasta 26 m y dos cuando la sobrepasan. El
giro se realiza por medio de un motor hidráulico a través de un reductor de engranaje sinfín
sumergido en aceite. También, existen incorporados en el montante del centro cinco anillos
rozantes que permiten llevar la energía eléctrica desde la instalación general del vehículo
hasta la jaula para realizar funciones de alumbrado, intercomunicación, etc. Además,
dispone de una plataforma que gira con la base, para facilitar la visibilidad constante de la
jaula, en la que se ubican los mandos para todas las operaciones. Para impedir que exceda
los límites de trabajo, cuenta con topes automáticos de fin de carrera, que actúan sobre las
válvulas de la base, anulándolas, incluso cuando se solicita manualmente su
funcionamiento. En caso de avería, la base puede hacerse girar con una manivela mediante
un eje de prolongación que ataca al engranaje sinfín.
Por otra parte, al disponer generalmente de una cabina de tipo sencilla, la dotación de
personal suele ser de un conductor y dos bomberos. El conductor es el encargado de su
emplazamiento y manejo, aunque también puede manejarse desde la barquilla o cesta en
forma similar a la vista para las escaleras. En cuanto a las dotaciones de material y
equipamiento que normalmente transportan estas unidades son muy similares a las descritas
para las escaleras, haciendo la salvedad de que la mayor disponibilidad de espacio en las
cestas o barquillas de estos vehículos, les permite colocar mejor las camillas y mangas de
evacuación.
Por tanto, entre las principales aplicaciones que los autobrazos poseen con este conjunto de
medios y recursos, es que pueden realizar funciones tan diversas como facilitar el acceso de los
bomberos a edificios siniestrados en el nivel o altura deseados, posibilitándoles, en caso
necesario, la penetración al mismo; efectuar el rescate de personas atrapadas a determinadas
alturas, pudiendo bajar estas personas (descendiendo en la barquilla, deslizándose por los
descensores o las mangas de evacuación que se pueden incorporar); efectuar el ataque a fuego en
altura, a distancia e internamente; permitir el izado y descenso de cargas dentro de ciertos
límites; etc. Es decir, muy similares a las que nos ofrecen las autoescaleras.
Entre las principales ventajas que normalmente presentan estos vehículos es que pueden
actuar en ángulos y accesos horizontales que difícilmente otra clase de vehículo puedan hacerlo
(podemos decir que ninguno), además también posee una capacidad portante bastante elevada, y
por lo general una vez emplazado, su funcionamiento es bastante rápido.
Sin embargo, entre sus principales inconvenientes nos encontramos con su peso demasiado
elevado, la necesidad de una amplia zona para su emplazamiento debido al elevado radio de giro
que presentan los brazos, además del efecto de codo o de sus articulaciones (las cuales pueden
salirse del campo de emplazamiento que ha necesitado). Justamente, estos dos últimos
inconvenientes se reducen en los vehículos con más de dos articulaciones o con izado
telescópico, de ahí que últimamente se estén imponiendo esta clase de vehículos.
En cuanto a las instrucciones de uso, sus premisas, y el adiestramiento hay que resaltar lo que
ya comentamos para los vehículos escaleras. Sin embargo, en esta clase de vehículos cuando
realizamos su emplazamiento y queremos colocar en operatividad la unidad siempre debemos de
tener en cuenta los siguientes factores :
- Analizar la pendiente en el lugar de instalación; el sistema de nivelación únicamente
funciona en el sentido longitudinal del vehículo, y preferentemente nivela “hacia atrás”.
Por tanto, se debe colocar el vehículo cuesta abajo.
- Asegurarse de que la superficie de la pavimentación donde se va a emplazar es capaz de
soportar la carga que se va a transmitir sin daños. Por ello, debemos ampliar la superficie
de contacto de los estabilizadores añadiéndoles soportes o planchas, palastros, etc., en caso
necesario.
- Para desplegar los brazos en calles estrechas o cascos antiguos de ciudades, elevar en los ABA
los brazos plegados, desplegar en el sentido de la calle, comenzar a descender hacia la zona
deseada, vigilando siempre los daños o efectos que pudiera producir el codo o articulación.
y, por tanto, opinamos que en muchas ocasiones ambas unidades son totalmente distintas o
complementarias.
Una de las grandes virtudes que poseen las Autoescaleras es su funcionalidad y simpleza, ya
que alcanza sus objetivos con solamente tres movimientos (girar, elevar y extender); de forma se
puede calcular fácilmente el trayecto y esquiva mucho mejor los obstáculos (cables, adornos,
señales viales, etc.). Además, generalmente es un vehículo menos pesado y tiene un aceptable
radio de giro, lo que le permite un fácil acceso en zonas urbanas estrechas, sencillo
emplazamiento, y por lo general una mayor manejabilidad y maniobrabilidad. Otras ventajas
estriban en que puede trabajar en viga-puente, de forma que apoyada en fachadas puede servir
para lograr un buen acceso o el transito de personas a lugar seguro, o que plegada puede ser
utilizada como grúa para izado de cargas; además, en algunos modelos (barquillas deslizantes) se
pueden hacer relevos de personal o salvamentos sin replegarla o descender peldañeando. Por
contra, posee una falta de libertad en sus movimientos (gran dependencia de su movimiento
rectilíneo o de extensión) y, por tanto, en muchas ocasiones no puede alcanzar objetivos que se
encuentran tras obstáculos, tampoco permite inclinaciones importantes cuando está extendida o
con grandes cargas, la capacidad de carga en cesta es menor, y no suele tener instalaciones
hidráulicas, hay que instalarlas, no debiendo utilizar presiones mayores a 8 bar.
Por otra parte, los Autobrazos poseen un conjunto de movimientos muy complejos y a veces
complicados, los cuales dependen del número de articulaciones y los cilindros telescópicos que
posean. Esta complejidad estructural le proporciona grandes grados de libertad y movimientos,
de forma que es capaz de actuar en ángulos, accesos horizontales y tras objetos o naves que no
son accesibles para otros vehículos. Además, debido a su diseño también posee una capacidad en
cesta más elevada, puede incorporar diferentes instalaciones hidráulicas que pueden trabajar a
elevadas presiones, de ahí que su gran campo de aplicación se encuentre en incendios los
industriales (tanques, naves, instalaciones petrolíferas, etc.). Sin embargo, por lo general su peso
y dimensiones son mayores, lo cual le limita para el callejeo en zonas urbanas estrechas y en las
operaciones de emplazamiento. También posee limitaciones cuando maniobra, pues debido al
elevado radio de giro de sus brazos, puede que parte de su superestructura quede fuera del campo
de emplazamiento en planta, y además algunos de sus codos o articulaciones golpee contra la
fachada, balcones, salientes, adornos u obstáculos viales, etc. También hay que decir que,
durante las operaciones de recate o acceso, en cada operación completa necesariamente hay que
replegar y desplegar sus brazos; junto a ello, hay que tener en cuenta que no es un vehículo
preparado para actuar como grúa o izar cargas.
Por último, comentar que la aparición de los Autobrazos Extensibles fue debida a intentar
reducir los inconvenientes que poseían estos vehículos articulados, de forma que por medio del
despliegue telescópico de uno de sus brazos se consiguieran algunas de las grandes ventajas que
poseían las autoescaleras; de ahí que existan unidades de este tipo que pueden acceder y
maniobrar con relativa facilidad en los cascos urbanos y también desplegar todas sus virtudes en
lugares o avenidas amplias y en los incendios industriales (características mixtas). Por tanto,
gracias a la investigación y a la cooperación de bomberos y fabricantes, cada vez se incorporan
al mercado más unidades y modelos sofisticados de este tipo.
B) VEHICULOS DE EVACUACIÓN.
Ambulancia (AMB): Primeramente hay que comentar que antiguamente, los servicios de
bomberos que disponían de estas unidades, no se utilizaban para el auxilio y transporte de
heridos en general, pues normalmente era más bien un vehículo de uso interno; es decir,
habitualmente se utilizaba para el auxilio, asistencia y traslado urgente de aquellos bomberos que
se lesionaban en los siniestros e incendios. Sin embargo, su utilización se ha ido extendido hacia
otros tipos de servicios y siniestros donde se precisa el auxilio a personas que están involucradas
en siniestros y en otros servicios considerados de tipo humanitario. Con lo cual, estos vehículos
B) VEHICULOS DE SALVAMENTO.
elevadores, equipo de oxi-corte, radiales y motosierras, cizallas, material ligero, etc.), equipos de
apoyo a grúas (hondillas, cables, eslabones, tablones y maderas, gatos mecánicos e hidráulicos, y otro
material ligero), equipos de elevación (trócolas y diferenciales, cabestrante manual, y materiales
ligeros), equipos de extracción y suministro de aire (equipos autónomos, electroventilador, extractores
de humo, manguetones, etc.), equipos de iluminación (generadores portátiles, focos y trípodes,
conexiones, carretes o prolongadores, etc.), además de materiales para otras funciones muy diversas.
En muchas ocasiones, los vehículos denominados como “polisocorro” están diseñados como
auténticos camiones compartimentados o articulados que transportan multitud de materiales de útiles
y de salvamento, pudiendo incluir una mezcla de los vehículos FUV, FSV, FAV, VIL, VGE, BSA,
etc. Así, por ejemplo, en países como Alemania existen unidades o camiones que transportan toda
esta clase de materiales en sus diversos contenedores o compartimentos, denominándose según su
nomenclatura RW-1, RW-2, y los furgones.
2. Vehículos de Apeos y Apuntalamientos (FAV): Es un vehículo que transporta todo tipo de
equipos y materiales para realizar entibaciones, pasarelas, recercados, cimbras, apeos, y
apuntalamientos de emergencia en muy distintas situaciones y servicios. Debido a que
generalmente se considera a la madera como el mejor material para la realización de apeos, en
algunas ocasiones este tipo de vehículos son auténticos talleres de carpintería rodantes.
Normalmente está construido sobre un chasis convencional de cabina sencilla (dotación de un
conductor y dos bomberos especialistas) y una superestructura compartimentada que además de
contener sistemas de fijación de material, puede ser deslizante para facilitar el acceso y la
extracción de material. Entre la dotación de material y herramientas nos podemos encontrar con
tablones, fustes, tornapuntas, riostras, puentes, ejiones, cuñas, bridas, clavos, etc.; puntales
telescópicos y articulados; diversas herramientas mecánicas, motosierras, herramientas de
carpintería y de mano; etc.
y una superestructura que está dotada con dos cisternas estancas para recogidas de los
líquidos, bombas portátiles para recogida y aspiración de sustancias químicas, alguna bomba
de trasvase de este tipo de líquidos, un generador eléctrico accionado por toma de fuerza del
vehículo, y compartimentos para albergar diverso material. Como puede suponerse todo el
material y equipamiento utilizado (incluido el eléctrico) es del tipo antideflagrante, de forma
que se construye o se protege con materiales a base de sustancias termoplásticas o bronce.
Además lleva incorporados contenedores portátiles de diversas capacidades y formas, para
recogida provisional de los productos derramados, así como material adaptable para obturar
las bocas de alcantarillado, fugas en cisternas y conducciones, mangajes especiales, llaves y
conexiones mixtas para los diferentes tipos de enlace que normalmente existen en el
transporte e instalaciones de mercancías peligrosas, etc.
3. Furgón de Reserva de Aire (FRA): Es un vehículo que es muy utilizado en los servicios de
bomberos para transportar y suministrar el aire necesario que se precisa en siniestros como
incendios en sótanos, barcos, metro, hangares, industrias, locales bajo rasante, etc.
Normalmente montado sobre autobastidor de cabina sencilla (capacidad para un conductor y
un bombero) y una superestructura especialmente compartimentada para albergar equipos y
botellas de aire comprimido, equipos de circuito cerrado, máscaras faciales de diversa índole,
cartuchos regenerativos de aire, comprobadores de presión, etc. Estos equipos de aire pueden
ser almacenados o cargados in situ, mediante botellas de alta capacidad y compresores de aire
(250 a 300 Atm.) que funcionan mediante generador eléctrico incorporado al vehículo y que
se pueden transportar en el propio vehículo sobre un chasis transportable o en remolque. Estas
unidades poseen prolongadores de tubo de escape a fin de evitar la aspiración de los gases
emitidos por el motor, cuando se realizan las operaciones de carga, debiéndose situar siempre
a favor del viento.
4. Vehículo de Transporte de Bombas (VTB): Estos tipos de vehículos también se les conoce
como vehículo de equipos de desagües (VED) y existen en algunos de los parques móviles de
bomberos para poder realizar toda clase de operaciones de aspiración o captación de aguas
(pozos, estanques, ríos, lagos, mares, canales, acequias, etc.) o extraer aguas no controladas y
que están depositadas en el subsuelo de edificaciones, vías de circulación, etc. En general,
estos tipos de vehículos se fabrican en un chasis convencional de cabina doble, con capacidad
para un mando, un conductor y de dos a cuatro bomberos; y según la fuente de energía que
produce la captación o absorción de aguas, tenemos de dos tipos :
4.1. Neumáticos. Posee una superestructura con plataforma, donde se le ancla un
compresor de aire comprimido de funcionamiento autónomo. En la cabina lleva
herramientas de bomberos, trajes y botas altas de goma, barras, palanquetas, diversas llaves
de sector, de gas, de T, grifa y un martillo percutor, etc. Además de ello, sobre dicha
plataforma también lleva acoplados los siguientes elementos :
-Cajón de material : Dotado con manguitos de salida de aire, pequeñas bombas de
achique neumáticas con salidas de 45 y 70 mm., y pequeños mangajes del mismo
diámetro para su acoplamiento, etc.
-Motobombas : Situada en uno de los lados de la parte trasera de la plataforma, va
montada sobre un chasis de hierro con cuatro brazos para su transporte a mano; debido a
su peso, para facilitar su colocación y extracción lleva un cabestrante en el otro lado de
la parte trasera del vehículo.
-Absorbentes : Situados en la plataforma con acoplamientos que los fijan, estan dotados de
llaves para realizar el ajuste entre dichos absorbentes y con sus respectivas alcachofas.
4.2. Eléctricos. Poseen una superestructura en forma de cajón, donde lleva instalado un
generador eléctrico accionado por el motor del vehículo mediante una toma de fuerza.
Además de ello, lleva diversos compartimentos para albergar equipos y materiales que
faciliten la realización de estos servicios, como son pequeñas bombas eléctricas
sumergibles, bombas flotantes accionadas a motor, diverso mangaje de 45 y 70 mm.,
herramienta de bombero, trajes y botas altas de goma, barras, palanquetas, diversas llaves
de sector, mixtas de agua y gas, de T, grifa, etc.
5. Vehículo de Taller de Reparaciones (VTR): Vehículo que se monta sobre autobastidor que
normalmente posee cabina sencilla (capacidad para un conductor y un bombero) y una
superestructura o habitáculo de altura suficiente para permitir en su interior la realización de
trabajos en posición erguida; de forma que su zona de trabajo cuenta con diversos bancos y
herramientas, así como compartimentos para almacenar repuestos básicos de vehículos,
bombas, y equipamientos principales : correas, manguitos, bujías, juntas, lamparas,
conexiones, llaves, etc. Es decir, su principal misión consiste en disponer de un pequeño taller
ambulante, capaz de reparar o resolver las averías simples que puedan originarse en los
diversos vehículos de bomberos.
Vehiculos autogruas y pesados.
Son vehículos o unidades que son precisas en aquellos siniestros o servicios de accidentes
diversos (tráfico, hundimientos de estructuras, demoliciones de inmuebles, caída de arboles o
elementos de señalización vial, etc), que necesitan el apoyo de equipos capaces de ejercer cargas
pesadas o voluminosas. Hoy en día, algunos parques de bomberos poseen de estas unidades entre
su parque móvil, o tienen coordinados sus servicios con otras empresas que detentan estas clases
de vehículos especiales. Por tanto, entre los vehículos que nos podemos encontrar, tenemos :
1. Auto-grúa pesada (AGP): Se conocen por este nombre a aquellos vehículos destinados
específicamente al arrastre o izado de grandes cargas. Aunque dentro de este concepto se
deben distinguir, por las características de los chasis y el sistema motriz que posee la
superestructura, dos tipos bien diferenciados de autogruas :
1.1. Ligeras. Capaces de soportar hasta 20 toneladas de carga, de forma que el mismo motor
del vehículo acciona los mecanismos de la grúa. Suele montarse sobre un chasis de tres ejes
y cabina sencilla; de forma que la pluma principal está apoyada articularmente sobre un
disco giratorio y es elevada por medio de dos cilindros hidráulicos. Consigue mayor
extensión mediante una pluma de prolongación que es guiada con rodillos por el interior de
la pluma principal. Cuentan con una caja de polea con gancho, montada en la punta de la
pluma, que dispone de gargantas para cuatro ramales, multiplicando así la tracción del cable.
Con el fin de ensanchar la base de trabajo durante la actuación de la grúa van dispuestos, a
derecha e izquierda de la superestructura, cuatro cilindros de apoyo accionados manual o
hidraulicamente. Algunos modelos disponen de unos apoyos traseros, extensibles
hidraulicamente, terminados sobre rodillos de goma, con el fin de permitir el movimiento del
conjunto camión-grúa lentamente sobre suelo firme y plano, transportando carga suspendida.
1.2. Pesada. Montada sobre chasis de 8 x 4 ó 10 x 6, utiliza un motor independiente para el
funcionamiento de la superestructura, quedando el motor del chasis exclusivamente para el
transporte; el cual con tracción total, posee los ejes anteriores direccionales, y potencias
superiores a los 200 CV y cabina sencilla. La superestructura es de acero soldado de alta
resistencia, en ella se monta un motor diesel de unos 150 CV aproximadamente, que
acciona el sistema hidráulico para realizar los distintos movimientos de la pluma y a la que
se le incluyen los estabilizadores. El sistema hidráulico permite realizar al menos dos
movimientos de la grúa simultáneamente y los mandos proporcionan el movimiento de
forma regulable sin escalonamiento, disponiendo de ralentización automática de final de
movimiento hasta la parada completa. Las plumas suelen estar construidas con planchas de
acero conformadas en cajón; la primera pluma alberga en su interior una serie de tramos
telescópicos que se deslizan entre sí, hidraulicamente, hasta estar completamente
desplegados. En el extremo superior del tramo central se encuentra la caja de polea con
gancho que puede disponer de hasta ocho gargantas para los ramales del cable,
multiplicando así la tracción de éste. Los movimientos de elevación y descenso los realizan
como el tipo anterior, mediante cilindros hidráulicos. Existen modelos que poseen hasta
cuatro tramos según los distintos fabricantes.
Además de las características específicas que hemos mencionado para cada uno de los tipos
de autogruas, para que su funcionamiento, funcionalidad y seguridad sea apropiada para las
clases de servicios que deben de desarrollar, estas unidades también deben poseer de los
siguientes dispositivos o elementos complementarios :
- Bloqueo de ballestas. Con el fin de descargar las ballestas durante el servicio de la grúa y hacer
actuar el peso de los ejes traseros como contrapeso, estas unidades están dotadas de un
mecanismo hidráulico de bloqueo de ballestas ligado al funcionamiento de los apoyos traseros.
- Cabrestante de arrastre. Posee unos 50 metros de cable y puede ser operado tanto hacia atrás del
vehículo como hacia delante. En este último caso corre una grúa a lo largo del bastidor, para
conducir mediante ella el ojal del cable hasta su salida por una abertura situada en el parachoques
delantero. Las capacidades de tracción hacia atrás varían, según los modelos, entre las 15 y 18
toneladas, de forma que si se realiza en sentido opuesto se reducen un 50% aproximadamente.
- Mecanismos de seguridad. Cuenta como mínimo con los siguientes mecanismos y controles :
finales de carrera al llegar a tope del campo de trabajo; dispositivo que impide la caída brusca de
la carga; freno automático del mecanismo de elevación; válvulas de seguridad para casos de
pérdida de aceite en circuitos hidráulicos de accionamiento; indicador óptico de carga admisible,
señalizadores que indiquen en metros la longitud desplegada de pluma y la altura sobre el suelo,
inspección en inmuebles, locales e industrias para poder despachar y tramitar los expedientes
de prevención que se han solicitado a los servicios de Bomberos. Por tanto, además de este
personal técnico, la dotación de personal consiste únicamente de un conductor.
4. Unidad de Intendencia y Suministro (UIS): Es un vehículo tipo furgón que está destinado al
transporte de alimentos, bebida, ropa de abrigo y otros enseres, para bomberos, equipos
cooperantes o personas que pudieran estar afectadas en los servicios siniestros, etc. Para ello,
cuenta con estanterías y despensas para el almacenamiento de diversos víveres y útiles; y
además, suele disponer de una cocina portátil y depósitos de agua potable. Su principal misión
es proporcionar alimentación y descanso al personal que trabaja en siniestros de larga
duración o en condiciones ambientales extremas.
5. Unidad Transporte Pesado (UTP): Son vehículos que están destinados al transporte de
materiales o equipamientos de grandes dimensiones o de peso elevado; entre los tipos de
unidades que nos podemos encontrar tenemos :
5.1. Dúmper : Se trata de un camión volquete de tipo normal o convencional y que ha sido
adaptado para este servicio, disponiendo por ello de sistema de señalización de prioridad y
equipo de comunicaciones. Normalmente, se utiliza para recoger los materiales removidos
por las excavadoras, transportar apeos o elementos de grandes longitudes (más de 5
metros), retirar cargas voluminosas o pesadas que han sido recuperadas por las grúas, y
para otras tareas u operaciones similares.
5.2. Camión-contenedor : Consiste en un tractor con chasis de cabina sencilla, dotado con
un dispositivo neumático de carga y anclaje, y que transporta una unidad autónoma de
trabajo alojada en un contenedor; de forma que, éstas unidades autónomas están diseñadas
para el trabajo en siniestros de larga duración y de características muy definidas.
Normalmente, el tractor descarga la unidad en el lugar del siniestro y vuelve a recogerla
cuando ésta ha terminado.
6. Unidad Mixta Personal y Carga (UPC): Vehículos utilizados para relevo de personal y
suministro de material complementario, como mangajes, combustible, agentes extintores,
equipos de extinción, botellas de aire para equipos de protección respiratoria, etc. En los
diferentes parques de bomberos podemos encontrarnos, de dos clases :
6.1. Camioneta : Vehículo de chasis convencional, con cabina sencilla o doble y dotado
con una caja de carga cubierta con un toldo; de forma que la propia caja dispone de bancos
o asientos plegables.
6.2. Furgón cerrado : Furgón normal con habitáculo de transporte acristalado o sin
acristalar, y que está dotado con asientos abatibles o desmontables, lo que permite variar el
espacio destinado a los pasajeros y a la carga.
7. Unidad Transporte Personal (BUS): Son vehículos o unidades móviles que estan destinadas
a transportar personal y, en ocasiones, pequeñas dotaciones de material adicionales.
Dependiendo del tipo de autobastidor y carrocería podemos tener :
7.1. Microbús : Vehículo de tipo con chasis normal o convencional que se utiliza para el
transporte de viajeros, y que se adapta a este servicio; de forma que está dotado de
señalización de prioridad y equipo de comunicaciones. Normalmente posee capacidad para
el conductor y aproximadamente otras 30 plazas de personal.
7.2. Todoterreno : Llamado vulgarmente por su marca, de tipo "Land Rover”, es un
vehículo de tracción total y convencional que se adapta a este servicio; de forma que se le
2. Remolque Moto-Bomba (RMB): Son unidades móviles arrastradas que suelen incorporar
una bomba centrifuga de gran caudal de agua; de forma que también se le acopla toda clase de
materiales que permitan realizar la aspiración e impulsión o captación de aguas subterráneas o
residuales (mangotes, mangajes, avisperos, racores, llaves, lanzas, etc.).
3. Remolque Generador Espuma Ligera (REL): Consiste en una unidad remolcada capaz de
generar espuma para la lucha directa en incendios industriales o inundación de locales . Por
ello, posee de sistema premezclador o dosificador, depósitos de espumógeno y conexiones
diversas para conectar instalaciones de agua (pudiendo incluir depósitos de agua), lanzas o
generadores de alta expansión, y material diverso adecuado para este tipo de extinción.
6. Remolque Usos Varios (RUV): Se trata de una unidad móvil que, está debidamente
compartimentada, y puede ser arrastrada por un vehículo convencional mediante un sistema
de enganche, de forma que puede transportar un conjunto mixto de materiales y equipos que
pueden ser utilizados en muy diferentes servicios y siniestros.
7. Remolque Carga Aire (RCA): Arrastrado por el FRA, es muy utilizado en los servicios de
bomberos para suministrar aire. Incorpora compresor autoregulable capaz de suministrar aire
de forma simultanea a varias devanaderas, pudiendo conectar latiguillos de diversos ERAs,
cargar botellas de forma independiente (200 a 300 Atm.), o aprovisionar a otros grandes
botellones utilizados como reserva de aire. Normalmente funciona mediante la energía que le
suministra un generador eléctrico o un motor de combustión incorporado, de forma que
poseen prolongadores de tubo de escape a fin de evitar la aspiración de los gases emitidos.
Embarcaciones.
Esta clase de unidades se utilizan en medios acuáticos o marítimos para realizar operaciones
de salvamento y rescate en lagos, ríos, mares, etc., o inspecciones, reconocimientos, control, y
labores de protección y extinción a distancia en buques, barcos, instalaciones marítimas,
industrias portuarias, etc. Entre los principales vehículos o embarcaciones acuáticas que nos
podemos encontrar, tenemos :
1. Barca de Salvamento (BSA): Suelen ser de fibra o de gomacaucho, con motores del tipo
fuera borda, cuya misión principal es el rescate en inundaciones y el salvamentos en medios
acuáticos. Normalmente van asociadas a los vehículos FEA, a remolques RBS, y al personal
de submarinismo que posea el cuerpo de bomberos.
2. Barca de Extinción (BEA): Son Barcos de tipo remolcador que estan dotados de distintos
medios y recursos de extinción, y de bombas fijas de gran caudal y potencia para aspirar el
agua de mar o de ríos y lagos, y poderla lanzar en incendios que puedan darse en puertos e
instalaciones marítimas o fluviales u otros barcos.
Vehículos de Aeropuertos.
El nivel de protección que ha de proporcionarse en un aeropuerto debe basarse en las
dimensiones de los aviones que lo utilicen, con los ajustes que exija la frecuencia de despegues y
aterrizajes; es decir, dependerá del trafico aéreo existente o de la categoría del aeropuerto. Como
ya comentamos, en los diversos aeropuertos podemos encontrarnos unidades que del tipo
tradicional (autobombas), vehículos de múltiples agentes o incluso auténticos carros de combate
contra incendios, de forma que poseen mecanismos de manejo de bomba y del monitor desde la
propia cabina, poseen tres, cuatro o más ejes y son del tipo todo terreno. Generalmente, los tipos
de vehículos de extinción de incendios que deben existir en un aeropuerto son los vehículos de
intervención rápida y los vehículos pesados. En principio, la función básica de un vehículo de
intervención rápida es llegar rápidamente al lugar del accidente aéreo, dar comienzo a las
operaciones de extinción y seguidamente, apoyado por vehículos pesados, proceder a la
extinción total del incendio. Por tanto, las características generales de cada uno de ellos, son las
siguientes :
orientable por el conductor o acompañante desde cabina; capacidad de polvo químico seco de
250 Kg; boquilla debajo del vehículo (protección al avance contra el fuego) y boquilla
orientable; aceleración de 80 Km/h en menos de 25 segundos; velocidad máxima de 105
Km/h; tracción en todas las ruedas; transmisión automática o semiautomática; equipo de
comunicación con la torre de control; equipo de comunicación entre vehículos y bomberos,
material diverso de salvamento y extinción; etc.
2. Vehículos Pesados : Son vehículos que normalmente se utilizan para apoyar a los de
intervención rápida o para utilizarlos en protecciones a distancia, por ello, como mínimo se
recomienda que posean las siguientes características : capacidad de agente emulsor de 1200
litros; capacidad de agua de 10000 litros; caudal o régimen de descarga de 4500 l/min.;
alcance de dicha descarga de 60 metros; dos bocas de agua para las mangueras; boquillas
debajo del vehículo y delanteras orientables; aceleración a 80 Km/h en menos de 40
segundos; velocidad máxima de 100 Km/h; torreta accionada por el conductor o
acompañante; transmisión automática o semiautomática; ángulo mínimo de inclinación
estático de 28º; tracción en todas las ruedas; equipo de comunicación con la torre de control;
equipo de comunicación entre vehículos y bomberos; material de salvamento y extinción; etc.