sábado, septiembre 30, 2006

SI HAN PENSADO EN MUDARSE...



...mejor dejen esta película para otro día. En serio. Difícilmente tuve redaños para irme a la cama después de verla; si hubiera tenido que ir a una casa nueva habría tenido que llamar a mi mamá para que me acompañase. Cosa que, estimados lectores, jamás me había pasado. Ni siquiera con El resplandor. Nada. Pero La habitación del niño me tuvo con pesadillas toda la noche. Convendrán conmigo en que algo así merece la pena.



Pertenece a una serie de seis películas coordinadas por Chicho Ibáñez Serrador, (que siempre es una garantía):
Películas para no dormir. Lamentablamente, se están sacando directamente a DVD. La habitación del niño es la primera y la dirige Álex de la Iglesia. Como protagonistas, Leonor Watling y Javier Gutiérrez.



Argumento: una pareja se muda a su nueva casa. La primera noche, oyen una voz por el intercomunicador del bebé. Hay un intruso...



Y hasta aquí puedo leer. Creo que me gustó tanto, entre otras cosas, por un detalle: una vez que empieza el miedo, no todo es miedo. El tipo va a la oficina, el compañero le cuenta un chiste, el jefe le presiona... hasta que ocurre algo que vuelve a desatar la pesadilla. Véanla. Y luego vienen por aquí y nos cuentan, porque lo que es dormir...

Mi nota: Qué susto, qué susto.


Por cierto, fechas de estreno de la serie:

30 de agosto:

Para entrar a vivir. Jaume Balagueró

27 de septiembre:

La culpa. Narciso Ibáñez Serrador

Regreso a Moira. Mateo Gil.

25 de octubre:

Adivina quién soy. Enrique Urbizu

Cuento de Navidad. Paco Plaza

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viernes, septiembre 29, 2006

¡QUE ME ASPEN!

Jueves veintiocho de septiembre. Doce de la noche. Un cincuenta por ciento del equipo CPA (el que ahora les escribe) está estudiando en casa. Descanso. A ver si hay suerte y ponen una buena serie en la tele, de esas de mucho misterio. Ya que no me permiten tirar el aparato por la ventana, voy a poner de mi parte a ver si nos hacemos amigos. Plic, encendido. Anda, qué plató de entrevistas más chulo. Anda, un señor hablando bien de la piratería. Anda, qué mirada tiene el tipo. La mirada de la gente que tiene algo que decir. ¡Pero si está en la tele...!

El de la mirada, según pude averiguar después, era el escritor Ray Loriga, y estaba entrevistando a (y no siendo entrevistado por, como pensé en un principio) una chica rubia que resultó ser Christina Rosenvinge. El programa, al parecer, se llama Carta Blanca. Es nuevo y funciona así: cada semana, un personaje conocido distinto lleva a los artistas que más le gustan y los entrevista. También puede elegir las actuaciones musicales.



Ray Loriga no es entrevistador, y se le notó. Pasaba de un tema a otro para volver al primero; hablaba, a veces, tanto o más que sus invitados. Pero a quién le importa, cuando todo lo que dice vale la pena. La entrevista con Christina Rosenvinge (lo que pillé) fue una conversación bastante sesuda sobre el estado de la industria discográfica. Al final, lo resumía Loriga con estas palabras de Churchill: "Cada revolución es un cincuenta por ciento de desastre y otro cincuenta de oportunidad".

La siguiente entrevista, al grupo Marlango, derivó en una amistosa charla entre cuatro personas (los tres del grupo y el presentador) que saben de lo que hablan, sobre el proceso creativo, los porqués y los cómos de hacer arte. Las preguntas eran las de cualquier entrevista, pero siempre daban lugar a pequeños y muy fructíferos debates. Una delicia.






Para terminar, el escritor Enrique Vila-Matas, amigo desde hace milenios de Ray Loriga. Y eso fue su entrevista, una conversación entre amigos: sin hablar de nada pero hablando de todo, llena de pequeños guiños, de recuerdos, de inesperadas profundidades.




En cuanto a las actuaciones, pché. Es algo personal: la forma de cantar de Christina Rosenvinge y, sobre todo, Leonor Watling, me saca de quicio. Cantan sin impostar para nada la voz, es decir, sin hacerla resonar en los huesos de la cara. Repito: es algo totalmente personal. Probablemente a ellas les gusta así y yo no soy quién para decir lo contrario. Pero me ataca los nervios.

No sé qué derroteros tomará el programa, pero teniendo en cuenta que tienen previsto llevar a personajes como Alejandro Jodorowsky, inventor de la psicomagia, a Juan Tamariz, y a unos cuantos más de los de siempre, me van a perdonar si este es el penúltimo que veo. Por una vez ha sonado la flauta y la televisión no ha sido el trasto estupidizante que suele. Pero no nos acostumbremos...


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miércoles, septiembre 27, 2006

AL ALBA

A todo lo largo de los tiempos han existido los amores prohibidos: amores que la sociedad de cada época no ha sabido, querido o podido aceptar. En la España de la Edad Media eran las aventuras pre o extramatrimoniales, las relaciones entre personas de distinta clase social, las que por una u otra razón no eran aprobadas por los progenitores... casi todas. Pero como de todos es sabido que lo malo no es meter la pata sino que te pillen, la gente siempre se las ingeniaba de una u otra forma para ver a la causa de sus suspiros a escondidas. Lo más sensato era encontrarse de noche: el chico iba a la habitación de la chica y se iba antes de que amaneciera (tengan en cuenta que en aquella época no había pisitos de soltero: se vivía con los padres, los siete hermanos, la abuela, los sobrinos y la tía viuda de Aranjuez. Lo que significaba que una vez que saliera el sol estabas atrapado). Problema: quién no se ha quedado dormido alguna vez cuando se tenía que levantar a las cinco de la mañana. Imagínense la papeleta, además, sin despertador: linchamiento seguro. La única solución era contratar a alguien (un amigo, un familiar) que pasaba la noche en vela y, al amanecer, despertaba a los amantes. Este buen samaritano era llamado portero de noche.

Y dado que tampoco había tele, los chismorreos, noticias e historias se divulgaban mediante canciones y poemas. En concreto, los que hablaban de estas visitas clandestinas se denominaban albadas.



Ya en el siglo veinte, precisamente en el año en que medio mundo se vino abajo (1.929) nacía en Barcelona Jaime Gil de Biedma (tío, por cierto, de Esperanza Aguirre y Ouka Lele). Sentía un odio febril contra la alta burguesía en la que nació y demasiadas veces contra sí mismo. Escribía poemas tremendos y maravillosos. Por ser homosexual (en la España de los cuarenta, háganse a la idea), sufría también de amores prohibidos. Un día, queriendo escribir sobre estas historias a escondidas, decidió que qué mejor forma de hacerlo que con la vieja albada medieval. Y así, respetando todos los elementos originales (los amantes, el portero de noche, la huída furtiva al alba) pero ahora con tranvías y oficinas, escribió este "Albada". Por favor, léanlo despacio, merece la pena:



ALBADA

Despiértate. La cama está más fría
y las sábanas sucias en el suelo.
Por los montantes de la galería

llega el amanecer,
con su color de abrigo de entretiempo
y liga de mujer.

Despiértate pensando vagamente
que el portero de noche os ha llamado.
Y escucha en el silencio: sucediéndose
hacia lo lejos, se oyen enronquecer
los tranvías que llevan al trabajo.
Es el amanecer.


Irán amontonándose las flores
cortadas, en los puestos de las Ramblas,
y silbarán los pájaros -cabrones-
desde los plátanos, mientras que ven volver
la negra humanidad que va a la cama
después de amanecer.

Acuérdate del cuarto en que has dormido.

Entierra la cabeza en las almohadas,
sintiendo aún la irritación y el frío
que da el amanecer
junto al cuerpo que tanto nos gustaba
en la noche de ayer,


y piensa en que debieses levantarte.
Piensa en la casa todavía oscura
donde entrarás para cambiar de traje,
y en la oficina, con sueño que vencer,
y en muchas otras cosas que se anuncian
desde el amanecer.

Aunque a tu lado escuches el susurro
de otra respiración. Aunque tú busques
el poco de calor entre sus muslos
medio dormido, que empieza a estremecer.
Aunque el amor no deje de ser dulce
hecho al amanecer.

Junto al cuerpo que anoche me gustaba
tanto desnudo, déjame que encienda
la luz para besarte cara a cara,
en el amanecer.
Porque conozco el día que me espera

y no por el placer.


Conocí este poema con quince años y desde entonces (han pasado unos cuantos...) es uno de mis favoritos. Por alguna razón, me acompaña en cada uno de esos amaneceres borrosos de cansancio que de vez en cuando a todos nos toca remontar. Gil de Biedma (cuyo nombre completo, curiosamente, es Jaime Gil de Biedma y Alba) murió en 1.990. Fue una de las primeras víctimas del SIDA en España.


Más poemas de Gil de Biedma. Especialmente recomendados "Vals de aniversario" y "Contra Jaime Gil de Biedma".

Aquí le pueden escuchar recitando sus poemas.

Biografía en Wikipedia


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viernes, septiembre 15, 2006

SI NO HAY ORQUESTA... ¡NOS LA INVENTAMOS!




Para empezar con esta entrada necesito dos instrumentos voluntarios. A ver... un violín... me vale. Otro más... tú, el estirado, el clarinete, te nombro voluntario. Hale, ya podemos comenzar.

Doy por sentado que todo el mundo sabe que un violín es esa "guitarra" pequeñita que la gente se pega a la oreja para tocar (imagínense, con lo que se sufre a veces estando ya a diez metros), pero de todas formas, aquí pueden escucharlo. Y, si les gusta y no tienen nada que hacer el domingo, en esta página les enseñan incluso a fabricarse uno. Por otra parte, como la maldad humana no tiene límites y en cada pueblo hay una banda de música, supongo que también sabemos qué es un clarinete, que por cierto también pueden escuchar aquí.

Ahora vamos a hacer un experimento: vamos a tratar de hacerlos sonar igual. Veamos:

Si somos muy tiquismiquis, podemos pensar que, si dos sonidos tienen que ser iguales, tienen que estar el mismo tiempo sonando. Bueno, eso no es demasiado difícil. Practicamos un poco y enseguida conseguimos que nuestro violín y nuestro clarinete emitan sonidos de la misma duración. Pero aún suenan demasiado diferentes. Este es aproximadamente el resultado:


Nos damos cuenta de que, mientras el violín chirría como una guillotina mal engrasada, el clarinete apenas se oye. Aplicamos un poco más de pulmón al clarinete y conseguimos que ambos suenen al mismo volumen. Probablemente ahora el conjunto se parezca aún más a una cacharrería (dependerá de hasta qué punto sean disonantes las notas que estemos dando), pero vamos por buen camino. Para los curiosos, ahora lo que hemos hecho es igualar las amplitudes de las ondas sonoras que emitimos.

Como la cosa sigue sin convencernos, y ahora con la pista de la onda sonora, nos vamos al libro de Física a averiguar qué nos falta. ¡Claro! ¡Nos falta la frecuencia! Pero, ¿cómo hacemos para emitir dos sonidos de la misma frecuencia? Pensemos... la frecuencia en una onda sonora hace que resulte más aguda o más grave. Así que tenemos que conseguir que los dos sonidos tengan la misma altura o, dicho de otra forma, tenemos que emitir la misma nota en los dos instrumentos. Aquí ya entra la inventiva de cada uno: podemos ir probando, y probando, y probando; podemos ir a ver al músico del piso de arriba y pedirle prestado su afinador; o podemos llamar al músico del piso de arriba y decirle "Te invito a un café si me afinas el violín y el clarinete". El caso es que, al final, ya tendremos nuestras dos ondas sonoras iguales: igual duración, igual intensidad, igual altura.

¡Entonces, ¿por qué nos siguen sonando distintos?! Hombre, es que uno es un clarinete y otro un violín, argumentará alguien. De acuerdo, pero si las ondas sonoras son idénticas, ¿dónde está la diferencia?

La diferencia, como ya nos aclaró un tipo llamado Fourier, está en los armónicos de cada onda. Las ondas sonoras, y especialmente las complejas (como las que emite un instrumento musical) siempre van acompañadas de otras ondas secundarias, cuya frecuencia es múltiplo de la de la onda principal. Dependiendo del número de armónicos de un instrumento, y de la intensidad de cada uno de ellos, poseerá uno u otro timbre característico.

Y hasta aquí podemos llegar en nuestro empeño de tener dos sonidos iguales.

¿O no? El timbre depende del material con que esté hecho, la forma del instrumento, incluso la manera de tocarlo. Pero es fácilmente modificable. Podemos probar, por ejemplo, a introducir finas láminas de distintos materiales bajo las cuerdas del violín. Con paciencia y pericia, tal vez podamos obtener un timbre parecido al clarinete.

En este momento es cuando traigo a colación la anécdota que realmente venía a contarles. La llevo contando muchos años, pero me sigue encantando (sospecho que a mis interlocutores ya no). Es acerca de un personaje, a la sazón compositor, llamado John Cage. Un pequeño pueblo (¿o fue un pequeño teatro? No lo recuerdo.) encargó a John Cage una obra instrumental, al parecer sin dar muchas explicaciones. Cage, como nadie le dijo lo contrario, compuso una obra para orquesta, que era lo que le apetecía. Terminada la obra, fue a la localidad para comenzar los ensayos con la orquesta. Cuál no sería su sorpresa cuando se encontró con un escenario diminuto y un piano encima.

- Pero vamos a ver, ¿dónde piensan meter a la orquesta? ¿En los baños?

- Bueno, señor Cage, eso realmente sería un problema... si tuviéramos orquesta.

- Entonces, ¿qué tenemos?

- El piano.

- ¿Y ya está?

- No. Hemos tenido suerte y también hay un pianista.

John Cage podría haber vuelto al hotel, pedido una cafetera llena y adaptado la obra para piano. Pero, en lugar de eso, decidió hacer algo más divertido: adaptar el piano a la obra. Cabezota y genial como era, se empeñó en hacer que el piano sonase a orquesta. Agarró todos los cachivaches que encontró en el teatro -ceniceros, gomas de borrar, periódicos- y los introdujo bajo las cuerdas del piano, probando, probando. Y días más tarde se estrenaba su obra para orquesta, por supuesto.


Más tarde escribiría numerosas obras para piano preparado, que es como dio en llamarse al invento. Y muchas otras cosas, siempre a costa de la paciencia de los intérpretes y gracias a una tremenda imaginación. De alguna de sus obras se puede decir que ni siquiera es música, estrictamente hablando. Pero de lo que no cabe duda es de que este tipo se divertía de lo lindo con lo que hacía. Si no me creen, mírenle la cara...




Para saber más:

Sobre acústica

Una muestra de Cage

Lista de las obras de Cage

Cage y el espíritu de vanguardia


Descargas recomendadas:


John Cage-Works for prepared piano


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miércoles, septiembre 13, 2006

TODO LO QUE USTED SIEMPRE QUISO SABER (O NO) SOBRE LA PIRATERÍA

Nota 1: La información aquí contenida ha sido obtenida, principalmente,
de los trabajos de mi idolatrado David Bravo Bueno (aunque también de
Jorge Cortell, y de las demás fuentes que abajo se reseñan). Si algún
mérito, pues, tuviera este escrito, a ellos se debe.

Nota 2: A menos que se indique lo contrario, todo lo referido aquí se
circunscribe exclusivamente a la legislación española.


¿Le cuesta dormir por las noches? ¿Tiene horribles pesadillas en las que es llevado a la cárcel y, lo que es peor, despojado para siempre de aquel disco de Pimpinela que le copió su primo? ¿Ha quemado sigilosamente todas las cintas del Grand Prix que tenía grabadas, con lo mucho que le costó aprender a programar el vídeo, después de ver los anuncios antipiratería del Ministerio de Cultura? En ese caso, usted necesita echar un vistazo a esta entrada. Pregunte, pregunte...

¿Es ilegal si instalo en mi ordenador una copia del Windows de mi cuñada? ¿Y si lo bajo del emule?

Sí, es ilegal en ambos casos. Para el software no existe el derecho a la copia privada, sino únicamente a la copia de seguridad. Lo que implica que solo puede ser copiado por el usuario legítimo de la obra, es decir, el dueño, como protección contra una posible pérdida del original. Esto es lo que dice la ley pero, además, cada vez que usted instala un producto de software se le pide que acepte un contrato de licencia. Una vez que usted declara estar de acuerdo con este contrato (aunque no lo haya leído) son sus términos los que se aplican; es
decir, que las condiciones pueden ser aún más restrictivas. Por ejemplo,hay programas que no pueden ser legalmente instalados en más de un ordenador, aunque sea usted el dueño de todos.

¿Alternativas? El sofware libre. Puede comprar windows, si le resulta más cómodo, y luego completarlo con programas gratuítos (antivirus, reproductores de música y vídeo, paquetes de oficina...), o bien tirarse a la piscina e instalar Linux como sistema operativo. Y si cuando lo tenga instalado descubre cómo reproducir un DVD, por favor, escríbame...

He oído que solo puedo copiar mis cedés de música para escucharlos en el coche...

Cuento chino. Para los cedés (y las películas, y los libros...) sí que existe el derecho a la copia privada, que es un concepto totalmente distinto al de la copia de seguridad. El derecho a la copia privada es la aplicación de un derecho constitucional (y que, por tanto, va a misa): el derecho al acceso a la cultura. Y uno no tiene más acceso a la cultura por tener dos cedés iguales.

Y por cierto, puede copiarlo aunque el autor no le autorice expresamente, igual que puede citar o parodiar a alguien aunque al otro no le guste en virtud de sus libertades constitucionales de información y expresión, respectivamente.

¿Puedo copiar los cedés que quiera? ¿Para lo que quiera?


Hombre, no. Veamos las condiciones que impone la Ley de Propiedad
Intelectual:

a) Que la obra esté divulgada. No vale copiarse una película antes de que se estrene, por ejemplo.

b) Que la copia sea para uso privado del copista. Esto implica que solo puede ser usada en el ámbito familiar y cuasifamiliar, y NO implica que el original tenga que provenir de ese ámbito.

c) Que la obra no sea objeto de utilización colectiva. Tampoco vale
copiar un concierto de Mecano para ponerlo en la plaza del pueblo.

d) Que no sea objeto de utilización lucrativa. Es decir, que no se obtenga un beneficio económico con la copia.

Pero dice la SGAE que, como la obra que he copiado me gusta y me reporta un beneficio o utilidad, eso es lucro.

Cualquier obra que uno copia le reporta algún beneficio o utilidad (o, al menos, esa es la idea...). Si lo que dice la SGAE fuera cierto, la copia privada no existiría. Entonces, ¿cómo es que nos cobran un canon por los soportes que supuestamente usamos para hacer copias privadas, si es imposible que las hagamos?

¿Puede aplicarse todo esto a las redes P2P?

Sí.


Entonces, si pongo a funcionar el Emule, ¿no estaría incurriendo en un delito de distribución ilegal? ¿O de comunicación pública?

Cito al abogado David Bravo: "El acto de distribución no puede darse
nunca en Internet porque se refiere, exclusivamente, a ejemplares físicos de las obras.

Una "comunicación bilateral exclusiva entre dos personas" no puede ser
nunca un "uso colectivo" ni una "comunicación pública".

El artículo 20 de la Ley de la Propiedad Intelectual define también la
Comunicación Pública como "todo acto por el cual una pluralidad de personas pueda tener acceso a la obra sin previa distribución de ejemplares a cada una de ellas".

Este concepto, por la fecha en la que se introdujo, no puede más que referirse a la puesta a disposición de una obra "mediante su representación, ejecución o emisión".

En las redes P2P no hay un acceso "sensorial" a la obra como pudiera haberlo en la ejecución de la música en vivo, así que difícilmente puede calificarse como comunicación pública esa llamada "puesta a disposición" que no consiste en una ejecución de la obra."(1)

Resumiendo: no.

Dice la SGAE, además, que si no hubiera bajado la obra la habría comprado, con lo que estoy obteniendo como beneficio económico el ahorro que consigo...

Usted sabe perfectamente que, salvo en casos aislados, no habría comprado nada de lo que descarga. Contando, además, con que pudiera hacerlo, ya que la mayoría de las obras editadas por las grandes compañías están descatalogadas o no pueden hallarse en las tiendas.

Según un estudio de las universidades de Harvard y Carolina del Norte (2),
la cantidad de obras descargadas que se habrían comprado oscila entre... una y casi ninguna.

¿Y qué pasa con los derechos de autor?


Los derechos de autor fueron creados en el "Estatuto de Ana" de 1710
para "animar a los hombres iluminados a componer y a escribir libros útiles". Es decir, como un incentivo a la creación. La propiedad intelectual, por tanto, es un medio para beneficiar a la sociedad, como
se recoge en el artículo 33.2 de nuestra Constitución, y no para mantener a las compañías discográficas. Es por eso que, a diferencia de los demás tipos de propiedad, tiene un límite temporal (alargado una y otra vez por Disney). El derecho de autor está supeditado a la función social para la que se creó. En palabras del Tribunal Constitucional:

"La Constitución reconoce un derecho a la propiedad que se configura y protege ciertamente como un haz de facultades individuales sobre las cosas, pero también y al mismo tiempo como un conjunto de deberes y obligaciones establecidos, de acuerdo con las Leyes, en atención a valores e intereses de la comunidad, es decir, a la finalidad o
utilidad social que cada categoría de bienes objeto de dominio está llamada a cumplir. Por todo ello la fijación del contenido esencial de la propiedad privada (aquel sin cuyo respeto se desvirtúa y vacía de contenido el derecho) no puede hacerse desde la exclusiva consideración subjetiva del derecho o de los intereses individuales que a este
subyacen, sino que debe incluir igualmente la necesaria referencia a la función social, entendida no como mero límite externo a su definición o a su ejercicio, sino como parte integrante del derecho mismo. Utilidad individual y función social definen, por tanto, inescindiblemente, el contenido del derecho de propiedad."(3)

Ayer alquilé una película y salió un vídeo con el sello del Ministerio de Cultura que me anunciaba que puedo ir a la cárcel por copiarla.

Para enviarle a la cárcel necesitarían aplicarle el Código Penal. Veamos qué dice en su artículo 270.1:

"Será castigado con la pena de prisión de seis meses a dos años y multa de 12 a 24 meses quien, con ánimo de lucro y en perjuicio de tercero, reproduzca, plagie, distribuya o comunique públicamente, en todo o en parte, una obra literaria, artística o científica, o su transformación, interpretación o ejecución artística fijada en cualquier tipo de soporte o comunicada a través de cualquier medio, sin la autorización de los titulares de los correspondientes derechos de propiedad intelectual o de sus cesionarios".

El concepto de ánimo de lucro está (y está ahí para algo) desde 1995 incluso para el tipo básico de este delito, por lo que la copia sin ánimo de lucro ni siquiera está incluída en el Código Penal.

Alguien podría argumentar que tal vez lo que se descarga se habría comprado, por lo que hay ánimo de lucro. Pero entonces estaríamos tomando un hecho imaginario como elemento esencial para probar la existencia de delito, lo que es a todas luces inviable.

Además, si asumimos, como la SGAE y las discográficas pretenden, que el intercambio en las redes P2P entra en la definición de arriba, se darían múltiples paradojas: por ejemplo, que por bajar una canción de internet iríamos a la cárcel, y por robar una discografía entera (de
menos de cuatrocientos euros) ni siquiera estaríamos cometiendo un delito. Esto sería como admitir que nuestro Código Penal está como una cabra, lo que no es cierto.

Por otra parte, recordemos dos de los principios fundamentales del Derecho Penal: el principio de intervención mínima y el de proporcionalidad.

Según el principio de intervención mínima, el Código Penal solo debe aplicarse en casos graves. Esto es así porque las penas que prevé son las más duras que se pueden imponer en un Estado de Derecho. Se han dado casos de jueces que han absuelto a manteros, recomendando la vía civil, cuando las ventas son de poca cuantía.

Según el principio de proporcionalidad, la pena debe guardar relación con la acción a la que se aplica. Así que cuando oiga por la tele que descargar una canción es como robar un banco, ya sabe que le están intentando tomar el pelo.

He oído a Pedro Farré, abogado de la SGAE, decir que las descargas de internet son "casi delictivas".

Para poder aplicar el Código Penal es necesario que la acción sea claramente un delito. Si algo es "casi delictivo", no es delictivo.

También he oído a muchos músicos que se manifiestan en contra de la
piratería.

Claro. Chenoa. King África. Alejandro Sanz. Precisamente los que no
necesitan promoción alguna y ganan dinero con sus discos. Pero para los demás músicos, que son muchos, los ingresos por venta de discos son realmente penosos. ¿Cómo viven, entonces? Con los conciertos. Jaime García Soriano, cantante de Sexy Sadie, sitúa en una relación del
70%-30% el balance entre ingresos por actuaciones y por venta de discos. Miguelito Superstar, de la Fundación Tony Manero, dice que la relación es del 80%-20%. El grupo "Los Delinqüentes", cuando habla de su caso resume bien el de otros muchos: "nuestro negocio no es vender discos, ese es el de la compañía. Nosotros ganamos dinero de dar conciertos".(4)

Según Ignacio Escolar, periodista especializado en temas tecnológicos y ex-miembro del grupo Meteosat, en el caso de la música, los artistas sólo reciben en concepto de royalties entre el 8 y el 12% (aproximadamente) del total de los ingresos que se obtienen por la venta de sus discos. Porcentaje que, con frecuencia, se reduce aún más, pues firman con sus discográficas unos contratos abusivos en los que, entre otras cosas, se comprometen a ceder parte de sus ingresos para gastos de promoción o a grabar un determinado número de discos antes de
poder cambiar sus condiciones laborales.(5)

¿Qué ocurre entonces con los conciertos gracias a las redes P2P? Que se multiplican. La difusión de la música crea amantes de la música. Y claro, cómo le puede convenir esto a King África.

Pero la SGAE está compuesta por autores, ¿cómo iban a actuar en contra de sus intereses?

La SGAE tiene voto censitario. Solo votan los miembros por encima de un nivel de ingresos determinado, lo que en la práctica es menos de un diez por ciento.

¿Por qué entonces siguen los autores afiliándose a la SGAE?

Porque hay determinados derechos que, por ley, no pueden ejercer si no es a través de una entidad de gestión. Si no se afilian, la SGAE cobrará los derechos que les pertenecen de todos modos, y se los quedará. De hecho, como cuenta el profesor Jorge Cortell, el 20% de la
recaudación de la SGAE procede de ingresos sin titular específico, es decir, que no se sabe a qué grupo o autor pertenece.

¿Cómo se está enfocando la "campaña de sensibilización" contra la piratería?

Tratando de asustar como sea al ciudadano (perdón, al consumidor), amenazando con demandar "mañana" a media España y reinventando la ley, y el castellano, para que se ajusten a sus sueños más salvajes. Pero aún hay más.

El Plan Antipiratería de nuestro gobierno prevé cursos de formación para jueces, impartidos, entre otras asociaciones, por la Federación Antipiratería. ¿Tiene curiosidad por saber quiénes la componen? Entre otros, Buena Vista Home Entertainment, Paramount Home Entertainment (Spain), Columbia Tristar Home Entertainment, Lauren Films, Universal
Pictures, 20th Century Fox Home Entertainment España y Warner Home Video Española. A primera vista, los más indicados.

También AFYVE (hoy Promusicae) celebró, sólo durante el año 2002, doce seminarios destinados a la Guardia Civil, uno para Comisarios e Inspectores jefes de Madrid, cinco para funcionarios de la Agencia Tributaria y dos para los Mossos d'Esquadra.

Si lo que hacemos algunos internautas es ilegal, bastaría con demandarnos. ¿Para qué, entonces, tanto esfuerzo por convencernos?

Cito de nuevo a David Bravo:

"Se llama "etapa pre-legislativa" a aquella que procura constatar la aparición de una disfunción social que merece una intervención penal. No se requiere que esa disfunción sea real, sino que basta con que lo parezca. A pesar de que el intercambio de obras intelectuales es algo que preocupa a un sector muy reducido, su presencia en los medios de
comunicación es tan elevada que parece que es un problema nacional y no la inquietud de un interés privado. Esta presión mediática busca que los ciudadanos acepten como problema de todos algo que les resulta indiferente a la mayoría. Cambiar la conciencia de los ciudadanos para que reclamen leyes penales que les persigan es la paradoja que se
quiere lograr."(6)

¿Qué alternativas se proponen para garantizar los ingresos de los artistas?

Algunas ideas son:

1.- Un canon que grave los soportes usados para la copia privada. Cedés, grabadoras, líneas ADSL... No resulta muy justo, porque se cobra tanto si se usa para copia privada como para grabar las fotos de la abuela.

2.- Renta Básica. Lejos de ser una utopía, se trata de un sistema económico ampliamente estudiado. El Estado aseguraría a todos y cada uno de los ciudadanos unos ingresos mínimos para subsistir, siendo el trabajo un medio para mejorar la calidad de vida.

3.- Modos de remuneración indirectos. Publicidad en páginas de descarga, posibilidad de acceder a más contenido con una suscripción...

4.- Nuevos modelos de sello discográfico, como Magnatune.


Citas:

"Pero el derecho al acceso a la cultura no es el derecho al ocio, ni el derecho a disfrutar del tiempo libre. Es mucho más. El crecimiento de cada persona es muy distinto dependiendo de la cultura que come y digiere. Tus aficiones, inquietudes, deseos e ideologías están directamente relacionadas con los libros que lees, las películas que ves y las canciones que escuchas. Lo que está en juego es el derecho al desarrollo de la personalidad. Lo que está en juego es el derecho a ser." David Bravo, Copia este libro.

"Hoy en día, ya la gente no respeta nada. Antes, poníamos en un pedestal la virtud, el honor, la verdad y la ley... La corrupción campea en la vida americana de nuestros días. Donde no se obedece otra ley, la corrupción es la única ley. La corrupción está minando este país. La virtud, el honor y la ley se han esfumado de nuestras vidas." (Declaraciones de Al Capone al periodista Cornelius Vanderbilt Jr. Entrevista publicada en la revista Liberty el 17 de octubre de 1931, unos días antes de que Al Capone marchara preso.)

FUENTES:

Archivos (descarga recomendada):

David Bravo Bueno, Copia este libro. IMPRESCINDIBLE.
Cortell-Albert, Jorge, Usos Y Abusos De La Ley De La Propiedad Intelectual.
Canal 9 - Escaner - Debate Sobre La Piratería.
David Bravo - Noche Sin Tregua 17.1.2006
David Bravo - Hackmeeting Sevilla 2004.
Cortell-Albert, Jorge, ¿Proteger O Expoliar?

Enlaces:

Lista actualizada de obras libres y/o gratis, en la página de Jorge Cortell. Muy interesante

Blog de David Bravo

Blog de Jorge Cortell

Manifiesto de Kiko Veneno

Courtney Love hace algunas cuentas

Información sobre copyleft

Página de la Universidad Internacional de Andalucía, con información sobre las jornadas sobre copyleft.

Página sobre Derecho e internet

(1) Bravo Bueno, David,
Copia este libro. Ed DMEM, 2005.
(2) Citado por
Bravo Bueno, David en Copia este libro. Ed DMEM, 2005.
(3) Ídem.
(4)
Bravo Bueno, David, Copia este libro. Ed DMEM, 2005.
(5) Cortell, Jorge, ¿Proteger o expoliar?
(6)
Bravo Bueno, David, Copia este libro. Ed DMEM, 2005.

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lunes, septiembre 04, 2006

PALABRAS PARA UN DÍA CUALQUIERA

"... Es hora de no volver a mirar la hora y decir:
'No quiero tu escaparate,
no quiero ningún complemento,
las náuseas del negocio,
la prisa por hacerse mayor rápido y luego volver a ser joven,
lo previsible del noventa por ciento de las miradas,
el límite que separa la genialidad de lo casposo.
¿Adivinas que algunos no queremos la medalla de campeones?
Sabemos disfrutar de nuestras preciosas depresiones y volar libres
en diez, veinte, treinta, cuarenta, cincuenta, sesenta, setenta, ochenta metros cuadrados.
Si las ratas pueden, otros pueden
colgar hojas de palmera,
banderas en los balcones.
¿Quieres salir? Yo te llevo,
pero estáte alerta,
porque te pegan con la misma llave que te abre las puertas.'"

Tote King, Un tipo cualquiera

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viernes, septiembre 01, 2006

MÁS PI

¿Pensaban, después de la entrada anterior, que no se puede ser más friqui? Pues se puede, se puede:

http://www.microsiervos.com/archivo/ciencia/pi-cancion-hexadecimal.html

¡Mil gracias de nuevo a nuestro corresponsal Dani!

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