Este capítulo forma parte de una compilación: Luis A. Lázaro et al (2014): MICROBIÓTICA, Madrid (España), Ediciones i. Más información: psicobiotica.es / microbiotica.es La Microbiótica es un nuevo término que alude al estudio y...
moreEste capítulo forma parte de una compilación: Luis A. Lázaro et al (2014): MICROBIÓTICA, Madrid (España), Ediciones i.
Más información: psicobiotica.es / microbiotica.es
La Microbiótica es un nuevo término que alude al estudio y aplicación de las relaciones simbióticas entre los microorganismos de un sistema determinado: una comida, un cuerpo, una planta, el suelo, el agua…
Aplicando la visión Microbiótica a la Psicología debiéramos asumir que la Naturaleza tiende a la autorregulación (la sintropía es la ley básica de lo vivo) y que las relaciones cooperativas o mutualistas/simbióticas predominan frente a la competencia como motor de la evolución. Asimismo, incorporaría la visión del ser humano como un holosimbionte, la suma de células con ADN humano y las diversas especies de microorganismos en simbiosis con ellas, y estudiar la interacción de la microbiota intestinal, la dieta y su relación con el cerebro, el pensamiento y las emociones.
De cara a la terapia de las habituales dolencias psicológicas y psicosomáticas la Psicología Simbiótica proporciona un marco más completo y eficaz: se entiende al ser humano como un todo cuerpo/microbiota-mente-emociones-consciencia en el que la patología aparece al existir un desequilibrio o estancamiento en la dinámica natural de los procesos vitales. Y contamos con que la naturaleza tiende a la salud, al bienestar, no hacia la enfermedad/entropía. Comprendiendo los mecanismos del conflicto/desequilibrio subyacente y emprendiendo las acciones necesarias para recuperar ese equilibrio en los diferentes planos: desde lo físico y microbiótico a lo psicológico, el bienestar aparece como estado natural.