El origen de la Coca-Cola. Que levante la mano quien no se ha tomado alguna vez una Coca-Cola… Nadie, ¿verdad? Coca-Cola es más que un refresco con gas (agua carbonatada). Vamos a conocer su historia. Todo comenzó un ocho de mayo de mil...
moreEl origen de la Coca-Cola. Que levante la mano quien no se ha tomado alguna vez una Coca-Cola… Nadie, ¿verdad? Coca-Cola es más que un refresco con gas (agua carbonatada). Vamos a conocer su historia. Todo comenzó un ocho de mayo de mil ochocientos ochenta y seis (1886), en Atlanta, Georgia. El farmacéutico John Stith Pemberton, quería crear un jarabe para los problemas de digestión, que además aportase energía. Y acabó dando con la fórmula secreta más famosa del mundo. La farmacia Jacobs, fue la primera en comercializarla a un precio de cinco céntimos (5 cent.) el vaso, vendiendo unos nueve cada día. Pemberton no tardó en darse cuenta de que la bebida que había creado podría ser un éxito. Su contable Frank Robinson fue el que inició la marca y diseñó el logotipo. Había nacido Coca-Cola. En mil ochocientos noventa y uno (1891), otro farmacéutico; Asa Griggs Candler, compró y registró la marca y fundó The Coca-Cola Company, formada también por su hermano John Candler y Frank Robinson. La bebida empezó a ganar popularidad y en mil ochocientos noventa y siete (1897), Coca-Cola salía por primera vez de los EE.UU. Dos años después, se firmó el primer acuerdo para embotellar Coca-Cola en todo el territorio estadounidense. Benjamin Franklin Thomas y Joseph Brown Whitehead, dos abogados de Tennessee, convencieron a Candler para que les concediera los derechos. El sistema de embotelladoras que se estableció, es el que continúa actualmente. Y consiste en autorizar a empresas locales para que fabriquen, distribuyan y vendan el producto, cuyo preparado básico es suministrado por Coca-Cola Company y así siguen manteniendo en secreto la fórmula. En los primeros años del siglo XX, ya había más de cuatrocientas plantas que embotellaban Coca-Cola en Estados Unidos, Panamá, Canadá y Cuba. El refresco llegaba a la gente a través de diferentes embotelladoras y empezaron a surgir cada vez más imitaciones. Las diferentes botellas creaban confusión entre el público. Por ello, en mil novecientos quince (1915), se celebró un concurso para decantarse por un único modelo de botella. La botella ganadora fue la propuesta por Alexander Samuelson y que sigue siendo junto al logo de Coca-Cola, uno de los iconos más reconocibles de la compañía. manuelverdugo.com