Sergio Chejfec escritor de Congresos literarios
Mariana Giordano1
UNR-CONICET
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Resumen: Nuestra hipótesis sostiene que Sergio Chejfec construye una figura
de escritor en relación a su participación como disertante en congresos
especializados. A partir de la importancia de exponer como escritor, Chejfec
reflexiona sobre el sentido de su profesión. Sin embargo, recién varios años
después de publicar una decena de libros, comienza a volcar la atención sobre
su paso por Festivales literarios. Pensamos que este interés “tardío” aparece
junto a la necesidad de incluir elementos ajenos a la ficción, que doten a la
literatura de cierta “documentalidad”. Entonces, escribir y asistir a Congresos
se convierten en acciones solidarias. La reciprocidad entre escribir y exponer
se acrecienta durante los últimos siete años de escritura y comprende una
parte importante de la narrativa de Sergio Chejfec.
Palabras clave: Chejfec – Congresos – Escritor – Ponencias – Documental
Abstract: This presentation analyzes the figure of writer, Sergio Chejfec, as a
speaker in the literature specialist congress. Since the importance to be a
speaker-writer, Chejfec think about his profession. However, the interesting in
the literature Congress started after he publish many books. We propose that
the “later” interest appear with the necessity to include something external to
fiction. The objective is to provide the “documentality” in the literature. So, write
and speak in Congress are solidarism’s activities. This is a very big part of the
Chejfec´s narrative of the last years.
Keywords: Chejfec – Congress – Writer – Speaker Paper – Documental
En el marco del Congreso Cuestiones Críticas de 2009, Sergio Chejfec
participa como invitado al panel “Los escritores en la sociedad del espectáculo”,
realizado en la Facultad de Humanidades y Artes de la Universidad Nacional de
Rosario. En 2010 se publica dicha disertación en el Boletín/15 del Centro de
Estudios de Teoría y Crítica Literaria.
1 Mariana Giordano es Licenciada en Letras (Universidad Nacional del Litoral). Actualmente
se encuentra cursando el Doctorado en Literatura y Estudios Críticos (Universidad Nacional de
Rosario). Es becaria doctoral de CONICET. Su tema de tesis versa sobre el tiempo y el
pensamiento en la narrativa de Sergio Chejfec. Sandra Contreras dirige la investigación.
En la mencionada ponencia, que se titula “El escritor dormido”, Sergio
Chejfec expone una serie de presupuestos en torno a la “performance” a la que
se vio sometido y, por la cual, comenzó a convertirse en escritor. Este texto
funciona como puerta de entrada al tema, luego avanzamos en otras
propuestas presentadas en Congresos.
Para abordar este fenómeno partimos de dos teóricos que nos
permiten contextualizar al incremento de Festivales Literarios como parte del
“giro performativo” de las artes (Fitcher-Litchte) y pensar a la producción de
“dispositivos de fragmentos de mundo” (Laddaga), en tanto tendencia artística
que consiste en construir perspectivas para observar un proceso en curso.
Por un lado, la “Estética de lo performativo”, desarrollada por Erika
Fischer-Lichte, publicada en 2004 en Alemania y su traducción al español en
2011, aporta una dimensión histórica sobre el giro performativo que acontece
en todas las ramas del arte desde los años 50 en adelante. Por otro, la
propuesta de Reinaldo Laddaga en “Espectáculos de realidad”, de 2007, hecha
luz sobre la producción de “dispositivos de exhibición de fragmentos de
mundo”, en tanto tendencia artística.
El recorrido que proponemos demuestra la importancia de la relación
recíproca que se da entre narrar y asistir a un Congreso. Las performances se
sustentan tanto en una construcción particular del estatuto de escritor (de
circunstancias propiciadas por los Congresos) como en exhibir determinados
documentos -pruebas- para que coincida lo que se narra con lo que sucede, o
sea, para que se escuche lo que está pasando o aquello que puede suceder en
ese mismo instante. Trazamos un recorrido por narraciones que exponen el
pensamiento de Chejfec durante la estadía en Festivales de Literatura, como
en “Novelista documental”, “Hacia la ciudad eléctrica” y “Mis dos mundos”. Al
final, leemos el particular caso de la ponencia “Un recienvenido encuentra en el
Azul los emblemas de la nueva ficción”, leída en el III Filba Nacional, en abril de
2014.
El escritor como disertante
Magia o milagro, sentí que el hecho de participar me convertía en
escritor. Se trataba de la primera inmersión en las profundidades del
espectáculo. Exponer en público implicó bordear el adormecimiento,
y el dormir disociante fue lo que me calificó para ser escritor.
Vestirme con el traje de palabras y ponerme a hablar. Era lo que me
transformaba, más allá de la naturaleza o hasta la existencia de lo
escrito. Porque ante los demás había nacido una sombra, una nube
de texto disponible y supuestamente adosada a la presencia mía,
globo de escritura, como el de las historietas, que no existía sino
como virtualidad y sin embargo para todos era cierto (Chejfec El
escritor dormido 155).
En la cita, Chejfec está haciendo referencia a un panel al que fue
invitado por los años 80, luego del retorno a la democracia, realizado en el
Centro Cultural San Martín, el cual reunió a nuevos escritores argentinos. Para
esta ocasión, Chejfec no había comenzado a publicar, incluso dudaba de
seguir escribiendo los borradores que tenía inconclusos, por lo tanto no tenía
siquiera su primer libro terminado. A estos datos los extraemos de la
presentación de su reciente libro, “Últimas noticias de la escritura”, durante un
diálogo que mantuvo hace poco más de un mes atrás (agosto, 2015) en Eterna
Cadencia, Buenos Aires. Allí contó que se hizo escritor porque se dieron las
condiciones para hacerse escritor.
A propósito, la propuesta del panel al que fue invitado a participar en
2009 consistía en reflexionar acerca de la importancia que se les da en la
actualidad a la palabra en vivo de los escritores, en tanto disertantes que
acompañan con sus opiniones y su cuerpo el devenir de su obra.
Para Chejfec se trata de interpelar a la subjetividad cuando se ve
afectada por una situación de tipo escénica. De allí el “vestirse con el traje de
palabras” y hablar, no escribir, tampoco referir o ser fiel a lo que se escribe. El
espectáculo de hablar frente a un público que ve en los invitados a escritores,
le permitió pensarse escritor. Creemos que lo que detecta en el devenir de sus
razonamientos es el vínculo con algo que pertenece a lo exterior en tanto
conciencia en común. Por eso la importancia de esa nube de textualidad que
comenzaba a aparecer en la mente de los espectadores.
Esta característica de lo presencial, inherente a toda performance,
moviliza una tesis acerca de lo que significa volverse escritor. Para Chejfec,
hoy en día la ficción a secas es insostenible. Por eso, poco a poco, su obra se
abre a preguntas sobre la construcción de una imagen de escritor y se expande
hacia las exposiciones en público. Aquí aparece algo de lo íntimo que hace que
los textos no se cierren en la escritura sino que se extienda hasta la oralidad de
los Festivales Literarios.
Laddaga (2007) sugiere que los escritores que vendrán serán escritores
sin obras. En el caso de estas presentaciones de Chejfec, se trata de escritos
que circulan en varios formatos y versiones. En algunos casos, también
dependen de las circunstancias de celebración en donde son expuestos.
En la medida en que el escritor no solo escribe su obra sino también
inscribe su vida dentro de ella y ambas, obra y vida, son facetas
solidarias de una misma creación, el performance literario adquiere
ribetes de intervención estética y privada al mismo tiempo (Chejfec
El escritor dormido 156).
Las ideas que expone Chejfec en “El escritor dormido” en torno a los
Festivales Literarios, también están en contacto con lo planteado por FischerLichte. Esta teórica afirma que el giro performativo que opera la literatura se
observa, no sólo en los libros al modo de Rayuela de Cortázar, popularizado
por la saga infantil “Elige tu propia aventura”, sino también en un incremento en
la cantidad de Festivales Literarios. La literatura recobra vida enfatizándose
como realización escénica, a través de las voces de lectores y oyentes que se
prestan a la experiencia con sus sentidos en presente. Por ejemplo, los
integrantes de la compañía Angelus Novus, en el año 1986, leyeron por turnos
y sin interrupciones La Ilíada completa. El énfasis en la experiencia antes que
en la interpretación es crucial para percibir el cambio de perspectiva en torno al
hecho artístico.
Pensamos que tales celebraciones proponen anteponer la voz a la
escritura y obsequian otros formatos de presentación y de regulación del
tiempo. Recordamos la propuesta de Félix Bruzzone, de ofrecer una
“conferencia performática” (Campo de mayo), desplegada en el marco del
Coloquio Internacional “Ficciones en Transición” en agosto de 2014 en Rosario,
a partir del aprovechamiento de otros recursos ajenos a la escritura y propios
de la escena, como el performer que corre y las proyecciones.
Corriendo o caminando los escritores salen a hablar, se prestan al
diálogo y se encuentran con una situación espontánea, no pautada, que hace
que más allá de lo que se lleve preparado como “guión” lo inesperado irrumpa y
permita que se activen otras sensibilidades que rodean a estas literaturas.
Las performances suponen un riesgo para el performer y ese peligro al
que se ve expuesto es el momento más temido por el público, al mismo tiempo
que el más esperado. En el caso de Chejfec, la intervención pública conlleva
una amenaza de ser descubierto, que entendemos, es la contracara del deseo
de un nuevo comienzo expresado reiteradamente. Al mismo tiempo, la
amenaza es la muestra de un conflicto con el mundo. Así, la contundencia
física del escritor en persona le permite trazar lazos caprichosos, pero no por
eso menos productivos, entre lo escrito y lo no escrito. Las performances de los
Congresos son el marco propicio para que el acontecimiento advenga en el
presente, estableciendo una nueva red entre las categorías de sentir, pensar y
actuar.
El despliegue de una práctica
La importancia que Chejfec les da a las disertaciones en Congresos
aparece tardíamente en su obra, la ponencia “El escritor dormido” es del año
2009. En sus ficciones, recién incorpora la problemática sobre ser escritor en
“Mis dos mundos” (2008). Allí el protagonista-escritor, fácilmente homologable
a Chejfec, se aleja de la Feria del libro para refugiarse en un parque a meditar
sobre la indiferencia que le devolvían los hechos concretos:
Al contrario del pasado, ahora estaba seguro de que si me ponía a
escribir en el Café do Lago nada temblaría ni cambiaría a mi
alrededor. A lo mejor esa era la prueba o la advertencia de que sería
descubierto y desenmascarado, o sea, que la realidad ya no era
solidaria con mi actividad, cualquiera fuera mi compenetración
(Chejfec Mis dos mundos 122).
En este final, semejante a una confesión, declara su modo de ser
escritor, su forma de entender el vínculo con lo que escribe. A partir de Mis dos
mundos comienzan a aparecer los relatos en donde se narra el pasaje por
Festivales Literarios. Como bien explica Alejandra Laera en “Entrar a la Feria:
el valor de la literatura para los escritores argentinos contemporáneos”, esta
escena contece como la culminación de un proceso que empieza en la
escritura privada y termina en la Feria del libro, porque cuenta aquello que la
publicación previa de todas las novelas ha ocultado.
De allí en más los relatos sobre Congresos se suceden. En “Hacia la
ciudad eléctrica”, Chejfec se refiere la ausencia de público en un festival en
Scranton, EEUU. En “Novelista documental” habla de un Congreso de
novelistas y críticos especializados en novelas en Venezuela.
Estos relatos tienen en común que remiten a periplos de escritores en
Congresos Literarios. Además, ambos están relacionados con la importancia
del registro fotográfico. Como si hablar sobre qué significa ser escritor y
documentar (o testimoniar) el material de la narración fueran para Chejfec parte
de un gesto.
Estos recorridos narrativos muestran el engranaje que ya está
anunciado en “El escritor dormido”, el cual consiste en hablar de la escritura y
luego escribir sobre la experiencia en Congresos. El círculo vicioso parece
encerrar, no sólo la continuidad de una práctica, sino también un diseño que se
repite y que incorpora a otros escritores, como el caso de Vila-Matas en
“Novelista documental” y Bragi Ólafsson en “Hacia la ciudad eléctrica”.
“Novelista documental” está subido al blog de Vila-Matas junto a una foto
que muestra a Chejfec con Horacio Elizondo. En el caso de “Hacia la ciudad
eléctrica”, Chejfec exhibe una foto de la silla vacía, en la cual debería haberse
sentado a firmar autógrafos de haber tenido público.
Nos preguntamos si aquellos “espectáculos de realidad” que propone
Laddaga como parte del imaginario de Aira, Noll y Bellatín , donde figuras de
artistas montan escenas, no son equiparables a estos juegos que propone
Chejfec, al exponer un costado más íntimo y quizás por eso mismo, más
público de su paso por celebraciones literarias, ¿o acaso no son “escenas en
las cuales se exhiben, en condiciones estilizadas, objetos y procesos de los
cuales es difícil decir si son naturales o artificiales, simulados o reales”?
(Laddaga 14).
Para concluir este apartado queremos hacer hincapié en el vínculo entre
las exposiciones en público y la “documentalidad”, para pensar a la literatura
del presente. Entre los Congresos y los relatos están las fotos. En este punto
creemos que las disertaciones de Chejfec invitan a imaginar el diseño de
experiencias que se suceden gracias a la circularidad de escribir y asistir a un
Congreso, prácticas que se van enroscando y van generando la sensación de
transitar, una y otra vez, los mismos lugares. La literatura busca escenarios en
donde no se actúa sino que se exhibe una relación con aquello que se narra.
Un recienvenido en el Filba en Azul
Según la teórica de la estética de lo performativo, producción, obra y
recepción no existen por separado. Para Fischer-Lichte, el otro ítems a cumplir
para una estética de lo performativo, aparte de no actuar, es abolir la
separación entre el espectáculo y los espectadores. El caso de la ponencia que
Chejfec lee en Azul en 2014, es, por lo menos, particular.
Lo que propone Chejfec, en “Un recienvenido encuentra en el Azul los
emblemas de la nueva ficción”, es recrear la situación de recienllegado a Azul y
realiza el periplo por la ciudad cervantina, con el propósito de repensar ciertos
presupuestos de la tradición literaria argentina.
Chejfec sube una versión ampliada de la ponencia que ofició de discurso
inaugural del FIlba en Azul, a su blog “Parábola anterior”. Transcurren quince
días desde la apertura del Filba y la versión reformulada, por lo tanto Chejfec
coloca su paso por Azul en el medio de ambos textos. Lo que agrega son dos
fotos, una de las luminarias de la plaza y otra de un cuadro de un gaucho a
caballo que viste la pared del bar Embil. Chejfec encuentra pruebas de carácter
documental, luego de caminar y fotografiar Azul. Al describir la plaza y la vista
general de la ciudad prefigura el escenario de la narración porque esa caminata
puede ser el embrión de un relato.
Chejfec propone como narración-ponencia una situación hipotética, en la
cual un escritor llega a Azul y coteja ciertas lecturas previas sobre la ciudad y la
experiencia vivencial que está aconteciendo. O sea, la información que había
sido extraída del testimonio del viajero inglés y del cautivo Avendaño se
“verifica”, por decirlo de alguna manera, en la caminata trazada por el escritor
hipotético, el visitante o recienvenido, en su recorrido por Azul. Entre saber y
conocer se ubica la “documentalidad” que se extrae siempre de lo vivencial.
Esta es la forma en la que Chejfec “pone a prueba” la literatura para que siga
siendo un discurso privilegiado en este mundo espectacular.
Bibliografía
Chejfec, Sergio. Mis dos mundos. Buenos Aires: Alfaguara, 2008.
---------------------- “El escritor dormido”. Boletin/15 (2010): 151-160.
---------------------- “Novelista documental” y “Hacia la ciudad eléctrica”. Modo
linterna. Buenos Aires: Entropía, 2013.
---------------------- “Un recienvenido encuentra en el Azul los emblemas de la
nueva ficción”. Parábola anterior. 25/04/2014. Web. 3 de noviembre de 2015.
Fischer-Litche, Erika. “Fundamentos para una estética de lo performativo”.
Estética de lo performativo. Madrid: Abada, 2011.
Laddaga, Reinaldo. Espectáculos de realidad. Rosario: Beatriz Viterbo, 2007.
Laera, Alejandra. “Entrar a la feria: el valor de la literatura para los escritores
argentinos contemporáneos”. Cuadernos del CILHA - a. 15 n. 21 (2014): 21-37.