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LOS OVNIS DE DICIEMBRE DE 1954

In the month of December of 1954 several close-range UFO sightings were reported in Spain. Small-sized, translucent, volatile objects were observed by credible citizens. Other cases were more weird. This article (in Spanish) describes the events and a recent follow-up investigation.

LOS OVNIS DE DICIEMBRE DE 1954 Vicente-Juan Ballester Olmos y Juan Carlos Victorio Uranga Correspondencia: [email protected] Introducción Recientemente, “Misterios del aire”, el blog de uno de los autores (JCVU) dedicó una entrada sobre un supuesto aterrizaje ovni ocurrido en la población zaragozana de Lécera el 5 de diciembre de 1954. Esa actualización generó una fructífera discusión en el foro “Amigos de CdU” en la que intervinieron, además de los autores, los investigadores Manuel Borraz y Luis R. González, aportando recortes de prensa vintage de aquel año. Varios de aquellos viejos incidentes ya nos eran conocidos. De hecho, algunos se incluyeron en los catálogos de aterrizajes LANIB (inexplicados) y NELIB (explicados) que el primer autor preparó como base para una extensa investigación que culminó en el libro Enciclopedia de los encuentros cercanos con OVNIS1 Añadiendo a la información ya conocida hace décadas los datos complementarios que hemos extraído últimamente de hemerotecas online, sobre noticias que hablan de objetos volantes desconocidos que tomaron tierra en España en diciembre de 1954, podemos establecer con bastante seguridad el siguiente tapiz de casuística, que esperamos sea de interés a los estudiosos de este fenómeno: I. Provincia de Badajoz 3 de diciembre de 1954 (¿por la mañana?), Granja de Torrehermosa. Victoriano Maeso, su hijo político Luis Brugeda, propietarios de la finca “Las Gastanas”, a cinco km de la localidad, y el guarda Francisco Huertos, oyeron un ruido inusual y observaron que a unos 50 metros de distancia se había posado en las ramas de una encina un objeto extraño. Inmediatamente, corrieron hacia el lugar, pero el aparato comenzó a ascender, desapareciendo rumbo al oeste. Los testigos describieron el objeto de forma piramidal, de 2,50 metros de altura y 60 centímetros de diámetro, que “parecía estar construido de materia plástica fuerte, sobresaliendo de los laterales de su parte inferior cuatro aletas”. Del interior del objeto pendía por varias cuerdas una caja “de cartón” de unos 40 centímetros de largo, 25 de ancho y 20 de alto. (Referencias: Diarios Amanecer, Arriba y ABC del 4/12/1954). 3 de diciembre de 1954 (al atardecer), Azuaga. Doce mineros de la Compañía “Los Guindos”, que se dirigían a esta población, al llegar a dos kilómetros de la finca “El Toconal” vieron posarse en ella un objeto cuadrado, muy reluciente, de unos 10 metros de lado. Apretaron la marcha en las bicicletas en las que iban para acercarse al artefacto, pero este se elevó vertiginosamente y se dirigió velocísimo, en línea recta, hacia el sur. (Referencias: Diarios Arriba, El Ideal Gallego y La Voz de Galicia del 5/12/1954. Jacques Vallée, “Un siglo de aterrizajes de OVNIS (1868-1968)”, en Pasaporte a Magonia, Plaza & Janés, 1972, p. 285. Monografía de Loren Gross, UFOs: A History. 1954: November-December, 1991, p. 44). 1 4 de diciembre de 1954, Azuaga. En la finca “Coto Llera”, a siete kilómetros de Granja de Torrehermosa pero en el término municipal de Azuaga, aterrizó un “globo-sonda”, que fue recogido por el guarda de la finca, Emilio Álamo Cahete, y puesto a disposición de las autoridades. “Se sospecha que se trata del supuesto ‘platillo volante’ que fue visto en el anterior día en la finca “Gastanas”, ya que sus características coinciden con las descritas por los dueños de esta finca cuando lo vieron posado en una encina”. En efecto, muy probablemente fuera el globo, o uno del mismo tipo, que se observó en las dos ocasiones anteriores el día antes. La distancia lineal entre las dos poblaciones es de cerca de 8 km. (Referencias: Diarios ABC e Informaciones del 7/12/1954). II. Provincia de Zaragoza 5 de diciembre de 1954 (08,15), Montes de Zuera, Lécera. En una carta al director del periódico Amanecer, franqueada en la ciudad de Zaragoza y firmada por Miguel Sevil, se cuenta que la mañana del 5 de diciembre, mientras se encontraba cazando cerca de los montes de Zuera, en las estribaciones de la sierra de Alcubierre, tras escuchar un prolongado silbido, observó a 50 metros de distancia “una especia de barco, transparente, luminoso, radiante…con innumerables como pararrayos, en cuyo extremo superior adiviné más bien que vi, llevaban sendas hélices girando vertiginosamente y que eran éstas las que 2 producían el misterioso silbido. Cuando aún no había salido de mi asombro, vi dos hombres…de una estatura que, según mis cálculos, medirían 1,80 o 1,90 metros, inmensamente rubios, como arcángeles, de cuyo lenguaje sólo se podría oír: Hawaljarlal arlaljal.” Los seres entraron por una puerta que se abrió a un costado de la nave y ésta se elevó verticalmente a enorme velocidad y desapareció. El objeto “en las extremidades llevaba dos hélices al estilo de pararrayos horizontal, bastante más grandes que las verticales, y la dimensión, según mis cálculos, sería de unos 20 metros de largura y de tres a cuatro metros de alto, y por lo menos dos metros los pararrayos”. El mismo periódico toma declaración al jefe de la estación de Lécera, José Asensio, quien parece confirmar los hechos, reconoce que hay en el pueblo un Miguel Sevile Gálvez, de quien dice que le acompañaba un empleado municipal cuando, supuestamente, “entre la una y las dos de la tarde vieron posado en el suelo un objeto muy raro, de forma ovalada, y cierto movimiento de extraños seres, a los que intentaron acercarse. Al hacerlo, y cuando se hallaban a una distancia de unos 150 metros, la especie de aeronave giró sobre su eje y comenzó a elevarse, primero a escasa marcha y luego a una gran velocidad”. De acuerdo con esta información, horas después, a la puesta del sol, volvieron a verlo, esta vez acompañados por el guarda jurado de aquellos montes. Luego comprobaremos que el jefe de estación simplemente hablaba de oídas y se hacía eco de los rumores que circulaban en el pueblo, mezcla de una realidad distinta y de la ficción del primer relato del periódico. (Referencias: Diario Amanecer del 9-10/12/1954. La prensa nacional recogió la noticia, aunque de forma resumida, como los diarios Informaciones y El Noticiero Universal del 9/12/1954 o Ya, Arriba, El Diario Vasco, Imperio y Diario de Gerona del 10/12/1954. Como es de esperar, muchas fuentes extranjeras han abordado el caso, dándolo por bueno, por ejemplo: Flying Saucer Review, número especial #4, 1971, p. 47. Un enfoque crítico del caso apareció en un artículo de J. Brucker & G. Barthel en Inforespace, número especial #3, diciembre de 1979, p. 41, quienes sugirieron que se trató de un helicóptero, cosa que sabemos inexacta. Otras, como la monografía de Loren Gross, UFOs: A History. 1954: November-December, 1991, p. 50, lo señalan como una fabulación). 5 de diciembre de 1954 (17,00), Lécera. Enviados especiales del diario entrevistan a varios de los muchos testigos oculares que vieron descender en la zona “Cuatro Pelos”, a 3 km de Lécera, un objeto que volvió a tomar vuelo al cabo de 20 minutos: Mariano Lahoz, Tomás Galve Artigas, Manuel Belenguer Aznar y el joven Urieta . Los reporteros confirman que Miguel Sevile Gálvez no fue testigo de los hechos y que alguien usó su nombre en una broma al periódico, exagerando los datos correspondientes a una observación auténtica. Esta información aclaratoria ‒ ¿le sorprende a alguien?‒ no fue difundida por aquella misma prensa que había publicado antes la noticia del aterrizaje del platillo volante con querubines como pilotos. El objeto fue precariamente descrito como redondo, alto y con reflejos metálicos. “Aquel objeto tuvo un movimiento de oscilación, surgió un resplandor grande y se elevó en vertical”. En cuanto al tamaño: “como el del estandarte de la Virgen del Olivar”, dicen. En el lugar de autos la tierra, virgen de arado, presenta un ligero aplastamiento de 2,5 metros de largo y 1,5 metros de ancho. 3 (Referencias: Diario Amanecer del 11/12/1954. Juan Carlos Victorio Uranga, http://misteriosdelaire.blogspot.com.es/2015/04/un-platillo-volante-capturado-en-un.html) 4 Probablemente el 6 de diciembre de 1954 (¿por la mañana?), Montón. Los labradores Santiago y Pedro Langa y el peón que les ayudaba, Ángel Remacha, se vieron sorprendidos por la presencia de un extraño artefacto que volaba a pocos metros de altura y a escasa velocidad. Al aproximarse los labradores el aparato cambió de dirección y ascendió. Tenía forma piramidal y era como de materia plástica. Dentro se veían unas aletas en movimiento, y en el centro una abertura como de 30 centímetros. “Remacha –sigue la nota de la agencia Mencheta‒ le lanzó una gruesa piedra, causándole una abolladura” antes de desaparecer de su vista. (Referencias: Diario Arriba del 8/12/1954). 6 de diciembre de 1954 (17,00), Aguilón. El vecino de Aguilón Antonio Martínez cuenta: “Estábamos en las eras nuevas, el día 6, sobre las cinco de la tarde, Dionís Ezquerra y el albañil del Villar, José. Vimos venir, a mucha altura, por dirección norte, sobre Portichuelas, un objeto que brillaba intensamente. Ya a nuestra altura, se paró, tomando tierra en mi misma era. De inmediato nos abalanzamos sobre el objeto, de tamaño enorme, que se movía con suavidad en el suelo. Rebotaba contra él. Quisimos llevarlo cargado en el carro y no cabía”. El aparato despedía olor a gas y pudieron “dominar la presión” que hiciera y que a punto estuvo de volver a elevarse. Era un globo de plástico de 12 metros cuadrados, con boca de entrada de gas de unos 30 centímetros de circunferencia. Mostraba un pequeño corte en su superficie blanca. Preguntado el director del Observatorio Meteorológico dijo que estos globos proceden de Francia o Inglaterra y que son arrastrados cuando sopla viento norte. Presumiblemente se trata del mismo globo que fue visto, o uno de su clase, que fue observado en Lécera y Montón 24 y 48 horas antes. Las tres localidades citadas están cercanas entre sí, de este a oeste, entre Montón y Aguilón hay 40 km y entre Aguilón y Lécera hay 30 km. El periódico Amanecer expuso el globo en un bazar de Zaragoza para contemplación del público. (Referencias: Diario Amanecer del 15-16-17/12/1954). Foto: Sancho (Diario Amanecer, Zaragoza). 5 III. Provincia de Teruel 14 de diciembre de 1954 (mañana), Cañada de Benatanduz. Sobre el valle de Palomita numerosos vecinos observaron en el firmamento la presencia de varios objetos que relucían intensamente al sol y que llegaban velozmente. Poco a poco fueron perdiendo velocidad y altura y unos niños pretendieron coger uno de ellos, ya que los demás continuaron volando, pero se les escapó materialmente de las manos al adquirir mayor velocidad. Fue a parar a dos kilómetros del pueblo de Cañada de Benatanduz, recogiéndolo el vecino Jaime Gargallo, quien lo presentó al Ayuntamiento. Se trataba de un globo de nylon de 2,50 metros de ancho por 3 de largo, “en cuadrilátero”. Como referencia geográfica, ésta localidad turolense se encuentra a 71 km al sur de la zaragozana Lécera. (Referencias: Diarios Ya y ABC del 15/12/1954. Ver también el siguiente enlace: http://www.marianoelmalo.com/maquina/M%C3%A1quina%2038%20%2819-12-04%29.pdf) Abajo: Algunas de las poblaciones de Zaragoza y Teruel citadas. 6 IV. Provincia de Guipúzcoa 6 de diciembre de 1954 (~07,15), Alto de Gainchurizqueta, Fuenterrabía (Hondarribia). Según la primera información publicada por el diario La Voz de España el día 7 de diciembre, de su corresponsal en Irún Juan Antonio Lecuona, aunque difundida por la agencia Efe con fecha del mismo día 6, el obrero de Rentería Juan Martínez Portolés, de 26 años, se dirigía a su trabajo en bicicleta por la cuesta de Gainchurizqueta, cerca del caserío Loidi-Berri, cuando vio como un objeto redondo resplandeciente que llegaba desde el mar (dirección norte-sur) a gran velocidad y que casi se le echó encima. Primeramente llevaba una potente luz que, poco a poco, fue perdiendo intensidad quedando a oscuras cuando aterrizó a pocos metros. A pesar del susto que se llevó pudo comprobar que el ingenio tenía unos 2,50 metros de diámetro por uno de altura. Un amplio faro en uno de sus bordes laterales y grandes aletas superpuestas desde la base hacia arriba. El testigo siguió su camino hasta la obra donde trabajaba y en la que su padre, Juan Martínez Cabezas, era encargado; volvieron al lugar de los hechos y el objeto ya no estaba allí, pero hallaron que la hierba estaba aplastada y “se veía algo que parecían pisadas, como de 16 centímetros de longitud” y unos objetos: “un muelle de acero de 20 centímetros de largo por 6 milímetros de grueso y un pedazo de duraluminio de 5 centímetros de longitud y 6 milímetros de grosor”. Según el diario, esta descripción fue corroborada por el padre del testigo. Al día siguiente, la agencia Cifra publicó una crónica del caso, citando “unas declaraciones hechas a la Prensa”, pero aportando datos y detalles nuevos. Cifra añade que el objeto iba “perdiendo velocidad y altura” hasta que llegó a aterrizar a “unos 6 metros de distancia” [10 metros en un cuestionario rellenado 18 años después]. Describe el objeto así: “tenía tres metros de longitud por uno de altura, un amplio faro en el centro, de donde partían grandes aletas superpuestas en sus laterales y en número de cuatro. Da también detalles del lugar de su trabajo, un canal que se construye contra inundaciones, así como la edad de su padre (53 años). Para el tamaño de las huellas habla de 15 centímetros y acerca de los objetos hallados también difiere algo: “color de aluminio, grasientos y ahumados, de cinco centímetros de longitud y seis milímetros de espesor, y dos muelles de acero, de 20 centímetros de largo por 60 milímetros de espesor uno, y de 20 centímetros de largo y cinco milímetros de diámetro el otro”. Dichos restos, según la agencia de prensa, “se encuentran en poder del citado obrero”. . Esas diferencias nos hacen pensar si Cifra entrevistó al testigo (no parece probable) o si sencillamente se basó en el periodista anterior para redactar su propia nota de agencia, distribuida a toda la prensa nacional. Descripción y dimensiones del objeto son datos cruciales a los efectos de identificar un objeto volante. Antes de proseguir, debemos constatar que las descripciones publicadas en prensa son pareja de las de los globos de Badajoz y Teruel, con excepción de la aparición del foco de luz. Porque esos importantes detalles no se ajustan para nada con lo que relató de primera mano el testigo a uno de los autores (JCVU), quien le entrevistó varias 7 veces entre 1969 y 1972. En esas entrevistas, informó asimismo otro dato valioso: la visión fue de escasamente 20 segundos. Quince años después de los hechos, el testigo relató que el objeto aterrizado tenía forma de paralelepípedo rectangular “de unos 3 metros de alto, 4 o 5 metros de ancho y unos 6 metros de largo, con un foco de 80 centímetros de diámetro en la cara que miraba a la carretera” (ver dibujo adjunto). Parece que la información periodística fue más que mediocre y probablemente estuvo influida por los relatos que la prensa había publicado con anterioridad sobre los avistamientos extremeños y maños. Para nosotros, que mantenemos una bien conocida postura escéptica sobre los ovnis, no fue una broma ni una historia falsa, de hecho, quince años después, el señor Martínez seguía impresionado por lo que vio”. Un detalle que llamó mucho la atención del testigo es que el objeto atravesó un tendido eléctrico que había cerca de la carretera sin chocar con los cables. En 1976, este suceso fue también investigado en primera persona por un equipo liderado por Félix Ares de Blas, ingeniero superior de telecomunicaciones y experimentado estudioso hipercrítico de la cuestión ovni. Su encuesta, publicada primero en la revista especializada Stendek y luego en uno de mis libros, describe el objeto así, 22 años después de los hechos: su aspecto era el de un paralelepípedo rectangular de 4 metros de base, 3 de altura y 6 de profundidad. En la cara que apuntaba hacia la carretera, y ocupando gran parte de la misma, se veía un foco. La zona aplastada por el objeto abarcaba 4x6 metros, alrededor de la cual había de 10 a 12 huellas de pisadas, perfectamente marcadas por el fango (estaba lloviendo), unas eran de un pie grande “como del número 44” y otras eran muy pequeñitas “de 15 centímetros”. Las piezas encontradas fueron las siguientes: un muelle de 20 centímetros de largo y 5 centímetros de diámetro sin estirar (se llegaba a estirar fácilmente hasta los 2 metros) y unas piezas algo curvas de 5 centímetros de longitud y 6 milímetros de espesor. La parte interior, cóncava, estaba ennegrecida. La forma de las piezas recordaba a una olla a presión explotada. Estas piezas fueron llevadas por el periodista Juan Antonio Lecuona. A partir de ahí se perdió su rastro. La luz del foco ‒”que me cegaba la vista”‒ era amarilla, fue perdiendo intensidad y al llegar al suelo se apagó totalmente. Evidentemente, los materiales encontrados en el lugar de aterrizaje no parecen nada del otro mundo y podrían no tener ninguna relación con el “aterrizaje”. En cuanto a las huellas humanas ‒incluso la hierba aplastada‒, éstas también podrían haberse imprimido en ocasión anterior. Este caso ha permanecido en la nómina de 8 los “inexplicados” desde entonces, ya que el testimonio del testigo parece sincero y nunca ha sido refutado. Martínez Portolés y los restos encontrados. Foto: Kruz (Diario La Voz de España, San Sebastián). Hace unos años supimos que la prensa local había publicado en octubre de 1954 informaciones de supuestos aterrizajes ovni en el país vasco-francés. Luego están los dos casos del día 3 de diciembre en Badajoz, aireados por la prensa el día 5. ¿Pudo ser esto suficiente influencia para una invención? El hecho es que los conocía, ya que él mismo afirmó que sintió miedo debido precisamente a “las noticias de platillos volantes que circulaban aquellos días”. Pero involucrar a su padre y arriesgarse a las bromas ‒que luego tuvo que soportar‒ de sus amigos, creo que minimiza esa posibilidad. Además, no era nada proclive a la publicidad. ¿Una alucinación? Era lunes, tuvo que madrugar y probablemente estaría adormilado, cansado y el tiempo era desapacible, pero carecemos de elementos objetivos para decantarnos por esta opción. ¿Pudo confundirse? ¿Podría ser un globo que, procedente de un país situado al norte de España, se posara momentáneamente para enseguida ascender y seguir impulsado por los vientos? ¿Podría la cuasi nocturnidad, la sorpresa y la fugaz observación haber equivocado drásticamente al testigo hasta el punto de creer ver una luz y asignar unas mayores dimensiones a un objeto que tuvo tan cerca? En la actualidad, Martínez Portolés está ilocalizable, desconocemos si puede haber fallecido. De momento, el incidente sigue inexplicado. 9 (Referencias: Diario La Voz de España del 7/12/1954, http://tinyurl.com/mylqra3 Noticia difundida por la agencia Cifra en múltiples periódicos nacionales, por ejemplo: Arriba y Diario de Gerona del 8/12/1954. Fotografía también distribuida por Cifra: Diario ABC del 10 de diciembre de 1954. J.C. Victorio Uranga, 1969-1972. Mª del Carmen Garmendia, Mª del Castillo Sacristán, Ángel Salaverría y Félix Ares de Blas, Stendek, año VIII, número 28, junio de 1977, pp. 8-9. V.J. Ballester Olmos, OVNIS: El fenómeno aterrizaje, Colección Realismo Fantástico, edición en rústica, Plaza & Janés, 1984, pp. 46-48, http://tinyurl.com/namldrt Iker Jiménez, Enigmas sin resolver, EDAF, 1999, pp. 225226; y Encuentros, EDAF, 2003, pp. 40-41.Fuera de España, sin embargo, el caso fue poco divulgado: Monografía de Loren Gross, UFOs: A History. 1954: November-December, 1991, p. 46). No nos resistimos a mencionar de pasada otro incidente ocurrido a unos 1.400 metros de ese mismo lugar, escasamente un mes después. Alrededor de las cuatro de la tarde del 3 de enero de 1955, Félix Galarraga, de 23 años, y su amigo Gerardo Irazusta, de la misma edad, estaban cazando cuando vieron “una cosa redonda” que descendía del cielo. Llegaron a tirarse al suelo, seguidamente se acercaron al caserío Uralde, vivienda del primero, dejaron las escopetas y salieron corriendo hacia donde estaba el objeto pero cuando estaban a unos 50 metros de distancia, éste se elevó. La primera noticia que se publicó al día siguiente (diario Unidad, editado en San Sebastián) hablaba de un “globo rojo de 2 o 3 metro de diámetro”. Desde la carretera, dos peones camineros, los hermanos Miguel y Martín Arraspio, aproximadamente de 23 años, también lo vieron. Todo duró 3 o 4 minutos.2 V. Provincia de Huelva 18 de diciembre de 1954 (¿por la mañana?), Cartaya. Manuel Morales Bernal, comerciante de Cartaya, visitó la redacción del diario Odiel donde informó que iba dando un paseo por el campo cuando vio en el suelo, en el claro de un higueral, en el sitio conocido por “La Tavirona”, una especie de kiosco metálico de color gris claro rodeado de un círculo brillante. Quedó paralizado por el asombro, pues se encontraba a 50 metros del objeto. En cosa de segundos, el “platillo volante” adquirió un color anaranjado cegador y se elevó con asombrosa rapidez, verticalmente, para perderse luego en el cielo, por el lado de Portugal. Forma y tamaño eran parecidos a los de los kioscos de la plaza Nueva, de Sevilla. “Lo que si puede usted asegurar es que lo que yo le digo es cierto. Yo no soy hombre de bromas”, afirmó a los redactores. La prensa de Sevilla agregaba también el nombre de un segundo testigo, José Riquelme Camacho y añadió también que, al ascender, el aparato produjo un gran ruido. El redactor del Odiel publicó una segunda información, dos días después: “Dicen ahora que lo del platillo volante de Cartaya fue una broma, que el kiosco de color rojizo (sic), sólo existió en la imaginación del autor”. Aunque al articulista le cuesta trabajo aceptar que “un señor serio, responsable” acuda a un periódico a contar una chirigota, todo apunta a que debieron circular razones de cierto peso para que el diario se viera obligado a escribir una nota bajo el título “La broma de los platillos”. (Referencias: Diarios Odiel y ABC Edición de Andalucía del 19/12/1954, http://www.diphuelva.es/portalweb/hemeroteca/odiel/1954/DIC/19/01.pdf y Odiel del 21/12/1954, http://www.diphuelva.es/portalweb/hemeroteca/odiel/1954/DIC/21/12.pdf V.J. Ballester Olmos y J.A. Fernández Peris, Enciclopedia de los encuentros cercanos con OVNIS, Plaza & Janés, S.A., 1987, 10 p. 272, http://tinyurl.com/namldrt Monografía de Loren Gross, UFOs: A History. 1954: NovemberDecember, 1991, p. 65). VI. Operaciones de guerra fría: ¿origen de los globos? Tenemos dos historias fraudulentas, la de los Montes de Zuera y Cartaya. Y una posible notable excepción, la del cajón volante visto brevísimamente en Fuenterrabía, que está, digamos, sub judice. Pero el resto de los acontecimientos, todos ellos ocurridos en la primera quincena de diciembre, se debieron a la aparición y rescate de globos. Pero tal proliferación de globos-sonda o meteorológicos de origen nacional en 1954 parece harto improbable. Las menudas dimensiones de los objetos descritos, su aspecto de plástico o nylon, su movimiento de flotación más que impulsado por rotores, cohetes o motores, su forma cuadrada o piramidal, la peculiar manera de caer y ascender, etc., apoyan la sospecha de que, en efecto, todos aquellos incidentes fueron protagonizados por globos que sostenían diversas clase de carga. Pero, ¿cuál era su procedencia? ¿Hubo alguna fuente masiva de globos en Europa que pudieran alcanzar nuestro país? De encontrarla, daríamos con la clave que explicara esa notable afluencia de pequeños globos aerostáticos en la primera quincena de diciembre de 1954. Un trabajo del investigador griego Thanassis Vembos nos puso sobre aviso. Versa precisamente sobre la incidencia de globos en la oleada helénica de 1954: “Cold War Balloons and the Greek UFO Wave of 1954”3, que, a su vez, se sustentaba en dos eruditos ensayos publicados en ámbitos militares norteamericanos. Uno, de Herbert A. Friedman, “Free Europe Press Cold War Leaflets”4, y el otro “Balloons Over East Europe: The Cold War Leaflet Campaign of Radio Free Europe”5, de Richard H. Cummings. Aquellos artículos revelaron algo insospechado: desde agosto de 1951 a noviembre de 1956 cerca de 600.000 globos inundaron los cielos de centro Europa, portando octavillas de propaganda para romper el impenetrable telón de acero de los países de influencia soviética. Los globos, hinchados con gas helio o hidrógeno, se lanzaban desde bases situadas en Alemania occidental, con la finalidad de que inundaran materialmente los campos de Polonia, Checoslovaquia y Hungría. Eran de varios tipos y tenían diversas formas y tamaños: unos eran globos esféricos de goma; otros más pequeños y de plástico, en forma de almohada, de los que colgaba una caja de cartón. Las siguientes fotografías muestran los campos de lanzamiento y los globos utilizados (cortesía de Herb Friedman, excepto cuando se indica). De las varias operaciones que se llevaron a cabo, perfectamente documentadas en los trabajos anteriormente citados de Friedman y Cummings, la que afecta a los globos que presumiblemente alcanzaron España es la denominada operación FOCUS, que tuvo lugar de octubre de 1954 a febrero de 1955 y se focalizó en Hungría, para coincidir con las elecciones locales en noviembre. Se calcula que se lanzaron cada hora 500 globos con su carga de hojas de propaganda, totalizando unos 16 millones de octavillas esparcidas. La estación de lanzamiento se encontraba cerca de Berchtesgaden (Bavaria), al sur de Alemania, junto a la frontera austriaca. 11 No resulta extraño, dado el inmenso número de globos lanzados, que algunos de ellos, llevados por fuertes vientos predominantes, alcanzaran otros países, incluyendo el nuestro. Y otros. Por ejemplo, coincidiendo con la suelta de globos de la operación FOCUS, Grecia también tuvo una “oleada” de platillos volantes, algunos de los cuales fueron recogidos en la campiña. De seguro los inventarios de casos ovni de nuestros colegas de muchos países europeos están llenos de incidencias atribuibles a esos globos de la guerra fría. El estudioso italiano Giuseppe Stilo nos ha confirmado que a principios de diciembre de 1954 se avistaron muchos de estos globos en Italia y especialmente en la costa del mar Adriático, con mayor intensidad entre el 2 y 5 de diciembre6. Sabemos por Herb Friedman que en Turquía también cayeron globos de este origen7. Foto de la derecha: http://arstechnica.com/tech-policy/2011/06/08/operation-prospero-the-cold-wars-battle-of-balloons/ 12 13 Cualitativamente, una lógica relación entre la oleada de globos en las dos primeras semanas en España y el sobreabundante lanzamiento de balones propagandísticos desde Alemania parece sobradamente aplastante. Consultados los mapas meteorológicos, el viento que reinaba en Europa los días 2 y 3 de diciembre de 1954 a nivel de los 300 milibares (equivalente a 9.000 metros) se dirigía de Alemania a España y hacen posible que algunos de los globos soltados en Centroeuropa pudieran llegar a nuestro país, precisamente a las zonas de observaciones de globo-ovnis. Esto parece legitimar la procedencia de esta magna operación propagandística anticomunista de los varios episodios de observación o captura de globos en Badajoz y Zaragoza la primera semana de diciembre de 1954. En cuanto a la masiva arribada a Cañada de Benatanduz (Teruel) de pequeños globos transparentes, como los que hemos visto en las fotografías precedentes, los datos de vientos de los días 9 y 10 de diciembre, a 850 milibares (unos 1500 metros de altura) hay un movimiento circular del viento (Inglaterra, Alemania España) que pudo traer a nuestro país globos más pequeños como los que fueron vistos en esa población turolense el día 14 de diciembre: 14 Durante los años que duró esta operación de propaganda se utilizaron globos de varios tipos, calibres y características, de uno a diez metros, e incluso de veinte metros, algunos de los cuales llegaban a los 15.000 metros de altura8. Por cierto que en el avistamiento del 3 de enero en Gainchurizqueta, el objeto, que tenía el tamaño y se comportaba con un globo, hemos comprobado que también se movía en la dirección del viento dominante ese día y hora. Muy probablemente se trató de otro de los globos llegados a España de la Operación FOCUS. VII. Secuela: El día de los Santos Inocentes Es evidente que el mes de diciembre de 1954 fue pródigo en informaciones de prensa sobre presuntos aterrizajes de platillos volantes en nuestro país. No parece raro, entonces, que durante la festividad de los Santos Inocentes, algunas de las bromas del día se circunscribieran al mismo tema. 28 de diciembre de 1954 (día), Madrid. La fotografía que se reproduce más abajo llevaba este pie: “En plena calle de Narváez ha aparecido un platillo volante que con motivo de la fiesta de Inocentes contemplaron los madrileños con sus marcianos y todo”. (Referencias: Diario Imperio del 30/12/1954). 15 Foto: Contreras. (Diario Imperio, Zamora). 28 de diciembre de 1954 (madrugada), Almadén (Ciudad Real). El despacho de la agencia Logos no tiene desperdicio. Un grupo de mineros vieron una ráfaga luminosa con una llama con los colores del arco iris, y al llegar a los castilletos de las minas quedó dando vueltas concéntricas a la vez que producía un agradable sonido musical, como un débil silbido. Al borde del “platillo” (sic) se vieron unos pequeños seres humanos que evolucionaban a modo de danza. Unos breves minutos después el platillo descendió vertiginosamente produciendo una lluvia luminosa, que esparcía un agradable olor a flores. “El hecho está siendo muy comentado en todo el pueblo ‒termina la noticia‒, dada la circunstancia de haberse producido en esta fecha del año, día de los Inocentes, y a los que por lo visto festejaba el platillo”. (Referencias: Diario Ya del 29/12/1954). VIII. Resumen de los avistamientos El Catálogo Unificado de Casuística Ovni (CUCO), gestionado por el estudioso valenciano J.P. González, revela 18 noticias ovni en España peninsular en diciembre de 1954. De esos, 12 son informes de presuntos “aterrizajes de platillos volantes”. La siguiente tabla sintetiza estos últimos casos, de los que nos hemos ocupado en este artículo. Estamos convencidos de que una intensa búsqueda en hemeroteca de prensa local de la época todavía podría conducir a hallazgos interesantes. 16 FECHA 3 DICIEMBRE 1954 3 DICIEMBRE 1954 4 DICIEMBRE 1954 5 DICIEMBRE 1954 5 DICIEMBRE 1954 6 DICIEMBRE 1954 6 DICIEMBRE 1954 6 DICIEMBRE 1954 14 DICIEMBRE 1954 18 DICIEMBRE 1954 28 DICIEMBRE 1954 28 DICIEMBRE 1954 MUNICIPIO GRANJA DE TORREHERMOSA AZUAGA AZUAGA MONTES DE ZUERA, LÉCERA LÉCERA FUENTERRABÍA MONTÓN AGUILÓN CAÑADA DE BENATANDUZ CARTAYA MADRID ALMADÉN NATURALEZA GLOBO GLOBO GLOBO RECUPERADO INVENCIÓN GLOBO NO IDENTIFICADO GLOBO GLOBO RECUPERADO GLOBO RECUPERADO ¿INVENCIÓN? BROMA BROMA IX. Agradecimientos Al sargento mayor (retirado) de la US Army, Herbert A. Friedman, por permitirme usar varias de las fotografías que ilustran su artículo y por su correspondencia relativa a las operaciones europeas de propaganda anti-comunista en los años cincuenta. A Richard H. Cummings, que fue director de seguridad de Radio Free Europe/Radio Liberty en Munich de 1980 a 1995, por las informaciones facilitadas a los a los autores. Notas 1. V.J. Ballester Olmos y J.A. Fernández Peris, Enciclopedia de los encuentros cercanos con OVNIS, Plaza & Janés, 1987, http://tinyurl.com/namldrt 2. En una encuesta llevada a cabo 22 años más tarde por Félix Ares de Blas, Mª Carmen Garmendia, Mª del Castillo Sacristán y Ángel Salaverría, el testigo Galarraga, sin embargo, le asignaba un tamaño equivalente a “una cisterna de camión de unos diez mil litros”. Error propio de los que suele alertar la experta en memoria y testimonio Elizabeth Loftus. 3. http://www.vembos.gr/UFOs_Cold_War_Balloons.htm 4. http://www.psywarrior.com/RadioFreeEurope.html 5. http://www.psywarsoc.org/FallingLeaf/balloons.php 6. Comunicación personal de Giuseppe Stilo a V.J. Ballester Olmos, 28 de abril de 2015. 7. Comunicación personal de Herb Friedman a V.J. Ballester Olmos, 29 de abril de 2015. 8. David L. Hollyer, “Winds Aloft: When Radio Free Europe Flew Balloons”, QST, abril de 2001, páginas 49-52. Comunicación personal de Richard Cummings a V.J. Ballester Olmos, 21 de agosto de 2015. 17