BENITO, Emilio - El Proyecto de La 1º Rep
BENITO, Emilio - El Proyecto de La 1º Rep
BENITO, Emilio - El Proyecto de La 1º Rep
DA FACULDADE DE
DIEITO DA
UNIVESIDADE
DE LISBOA
LISBON
LAW
REVIEW
017/
LVIII
evista da Faculdade de Direito
da Universidade de Lisboa
Periodicidade Semestral
Vol. LVIII-2017/2
COMISSÃO CIENTÍFICA
Christian Baldus (Universidade de Heidelberg)
Dinah Shelton (Universidade de Georgetown)
José Luis Diez ipolles (Universidade de Málaga)
Juan Fernandez-Armesto (Universidade Pontifícia de Comillas)
Ken Pennington (Universidade Católica da América)
Marco Antônio Marques da Silva (Pontifícia Universidade Católica de São Paulo)
Miodrag Jovanovic (Universidade de Belgrado)
Pedro Ortego Gil (Universidade de Santiago de Compostela)
Pierluigi Chiassoni (Universidade de Génova)
obert Alexy (Universidade de Kiel)
DIRETORA
Maria do osário Palma amalho
COMISSÃO DE REDAÇÃO
David Duarte
Pedro Leitão Pais de Vasconcelos
Isabel Graes
Miguel Sousa Ferro
SECRETÁRIA DE REDAÇÃO
osa Guerreiro
PROPRIEDADE E SECRETARIADO
Faculdade de Direito da Universidade de Lisboa
Alameda da Universidade - 1649-014 Lisboa - Portugal
--------- Editorial
5 Nota da Diretora
Resumen: Una frase muy manida pero por ello no menos cierta es: “Quen no conoce
su hstora está condenado a repetr sus errores”. Este ha sido el principio que ha
inspirado este trabajo. La situación política que se produjo en Espana como consecuencia
de la abdicación de Amadeo I de Saboya y la proclamación de la I epública, así
como, y especialmente, el intento frustrado de promulgar una Constitución
republicana federal, son los aspectos objeto de revision en este estúdio, para lo
que me ha basado principalmente en los Diários de Sesiones de las Cortes.
Abstract: The following phrase has been quoted countless times but still holds
true: “Those who cannot remember the past are condemned to repeat it.” This
notion is what has inspired this work. The object of this study, for which I have
drawn mostly on acts of Congress, concerns the political situation that occurred in
Spain as a result of Amadeus 1 of Savoy’s abdication and the proclamation of the
First epublic, and, particularly, the thwarted attempt to promulgate a epublican
federal constitution.
* A convite da evista.
’* Profesor Titular de Historia del Derecho. Departamento de Historia del Derecho. Facultad de
Derecho. Universidad Complutense de Madrid, [email protected]
34
I - Introducción
Serían, por tanto, las Cortes Constituyentes salidas de las elecciones celebradas
en la primera mitad del mes de mayo, en la que los republicanos federales obtu-
vieron una amplia mayoría, las encargadas de dar forma a la nueva epública.
Efectivamente, reunidas las mismas el 1 de junio, se presentó con carácter inme-
diato una proposition de ley debatida el dia 7 y aprobada al dia siguiente con el
voto favorable de 218 diputados contra 2, por la que se proclamaba La epública
democrática federal, como nueva forma de gobiemo de la Nación espanola.
Constituída la nueva forma de gobiemo, las mismas Cortes Constituyentes debe-
rían abordar la organization de la nueva república, elaborando para ello, un nuevo
texto constitutional que fue presentado con fecha 17 de julio.
1 Blanco Valdés , oberto L., El Laberinto Territorial Espanol, Alianza Editorial, Madrid, 2014.
Casanova Aguilar , Isabel ., Las Constituciones no promulgadas de 1856 y 1873, en Colección
Las Constituciones espanolas, dirigida por Miguel Artola , T. VI. Carr , aymond , Espana 1808-
1939, Ed. Ariel, Barcelona, 1970. Catalinas, José Luis y Echenagus Ia , Javier , La Primera epú -
blica. eformismo y evolución Social, Madrid, 1973. Diez del Corral , El liberalismo doctrinario,
Madrid, 1945. Fernández Almagro , Melchor , Historia política de la Espana contemporânea,
Alianza Editorial, 3a Ed. Madrid, 1972. Ferrando Badia , Juan , La Primera epública espanola,
Cuademos para el Dialogo, Madrid, 1973, Ocaso de la epública espanola de 1873: la quiebra fe-
deral, en evista de estudios politicos, N°. 183-184, 1972, pp. 49-66. La epública de 1873, ocasión
revolucionaria: un enfoque parlamentario, en evista de Estudios Politicos, N° 156,1967., pp. 119-
143. Fontana Josep , La época del liberalismo, Vol. 6° de la Historia de Espana, dirigida por Josep
Fontana y amón Villares , Barcelona, 2007, Gonzâlez Casanova , José Antonio , Federalismo
y autonomia. Cataluna y el Estado espanol 1868-1938, Grupo Critica, Barcelona, 1979. Hennessy ,
C.A.M., La epública Federal en Espana, Pi Y Margall y el movimiento republicado federal 1868-
74, (Trad. Luis Escolar Bareno), Aguilar, Madrid, 1966. Jutglar , Antoni , Pi Y Margal y el Fede-
ralismo espanol, I, Madrid, 1975, II, Madrid, 1976. Lacomba , Juan Antonio , La I epública. El
trasfondo de una revolución fallida, Madrid, 1973. López -Cordón , Ma Victoria , La evolución de
1969 y la I epública, Siglo XXI, Madrid, 1976. Mart ! Gilabert , Francisco , La Primera epública
Espanola 1873-1874, ialp, Madrid, 2007. Morayta , Miguel , Las Constituyentes de la epública
Espanola, Paris, 1907. Pérez Ayala , Andoni , La I epública. Marco Politico y Proyecto Constitu-
cional, en evista de Estudios Políticos, (Nueva Época), núm. 105, Julio-Septiembre 1999, pp. 29-
71. Pi Y Margall , Francisco , Las Nacionalidades, Introduction de Jordi Sole Tura , Centro de
Estudios Constitutionals, Madrid, 1986. oura Gómez , Santiago A., Los Procedimientos de e -
forma en las Experiências del Constitucionalismo epublicano Espanol (1873 y 1931), en evista
de Estudios Politicos (Nueva Época), Nú. 101, Julio-Septiembre 1998, pp. 273-301. Sánchez
Agesta , L., Historia del constitucionalismo espanol, Madrid, 1964. Trujillo , Gumersindo , El Fe-
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federalismo espanol, Anales Universidad de La Laguna, Fac. Derecho, T. 1, 1964. Tun On de Lara ,
M., La Espana del Siglo XIX, (1808-1914), Barcelona, 1973. Vilches , Jorge , Progreso y Libertad.
El Partido Progresista en la evolución Liberal Espanola, Alianza Editorial, Madrid, 2001.
36
votos contra 324. Es evidente que la nueva forma de gobiemo, representada por
la epública, no se constituye como obra dei sector republicano5, sino que el
voto favorable dei partido radical resultaria decisivo para la consagración dei
nuevo régimen político6. Como muy bien senala, Ferrando Badía7, la consti-
tución de la epública carecia de bases sólidas, pues al margen dei sector re-
publicano, minoritário, los demás partidos o “eran republicanos de ocasión
- republicanos nuevos, como los radicales - prontos, pues, a abandonar dicha
forma de gobiemo”, o eran enemigos de la misma, como los carlistas y el partido
moderado.
La epública quedaba consagrada como nueva forma de gobiemo, pero con gran-
des insuficiências en su constitución. Por un lado, los radicales, claramente parti-
dários de la Monarquia democrática y que tan sólo optaron por la epública, como
la única solución en aquellos momentos de salvar la democracia y libertad8. Por
otro lado, dentro dei partido republicano, existían distintos sectores con acusadas
diferencias entre los mismos. Diferencias, que irán aumentando con el tiempo,
sobre una cuestión de la trascendencia, como es el tipo de república persiguen:
epública unitaria o federal? y en el segundo caso, federalismo desde arriba o
4 Es importante resenar que en las elecciones celebradas en noviembre de 1870 para aceptar a Amadeo
de Saboya como monarca, la opción republicana tan solo había logrado 63 votos.
5 En una Asamblea Nacional que sobrepasaba los 350 miembros, tan solo 77 eran republicanos.
6 Para Josep Fontana , es muy probable que muchos de los que votaron a favor de la epública pen-
saran que lo que se iba a instalar era un régimen similar a la monarquia de Amadeo, sólo que sin
monarca, en La época de lberalsmo, ct., pp.374 y 375.
7 Ferrando Badía , J., La Prmera Repúblca .... p. 134. Ver también dei mismo autor La epública
de 1873, ocasión revolucionaria: un enfoque parlamentario, en Revsta de Estúdos Polítcos, N°
156, 1967., p. 120.
8 Extremo que queda claro en las siguientes palabras pronunciadas por Cristino Martos en las
Cortes: Nosotros creemos dos cosas: primero, como ha dicho mi amigo el Sr. Marquês de Sar-
doal, que la Monarquia no es una abstracción, que la Monarquia es una realidad que se encarna
en la vida de las sociedades humanas; (,y donde, sehores, pregunto yo a todos los espanoles im-
parciales y amantes de la Patria, donde vamos nosotros los radicales a encarnar ahora el principio
de la Monarquia? i,Le vamos a encarnar en la restauración? Esto, con perdón de todas las opi-
niones, para nosotros, radicales, seria una vergüenza. ^Le vamos a encarnar en el absolutismo,
en el carlismo? Es, perdóneme el sentido común si de esto me ocupo siquiera, un imposible y un
absurdo. £,Vamos a pensar en la quimera de una nueva elección de Monarca, después de todo to
sucedido? Pues pensaríamos en otro imposible. De modo que seguimos creyendo que el principio
monárquico es un buen guardador de la libertad y de la democracia; pero no teniendo encamación
posible de este principio, yo les pregunto, ^es que honradamente podemos hacer otra cosa que
votar la epública? Por eso vamos a votaria..., en Dáro de Sesones, 10 de febrero de 1973,
pp. 42 y 43.
38
desde abajo?9. Y todo ello alinado con la oposición firme de los conservadores.
Malos augurios para el recién proclamado régimen político10.
Efectivamente, la heterogeneidad de las fúerzas que facilitaron su advenimiento,
va a dejarse sentir desde bien pronto en la joven epública.
13 “Hecha la pregunta por el Sr. Secretario López de si se aprobaban las resoluciones tomadas por el Sr.
Presidente, el acuerdo file afirmativo, haciéndose constar que fuese por unanimidad, a petición de vários
senores epresentantes ”. “Los Diputados que suscriben tienen la honra de proponer a la Asamblea la
siguiente proposition: Articulo único. ínterin se constituye el Gobiemo por designación de la Asamblea,
se inviste al Presidente de ella de la facultad que concieme al Poder ejecutivo”. Idem, p. 252.
i 4Ferrando Badía , J., La prmera Repúblca espanola..., pp.181 y 182. En parecidos términos se
pronuncia Femández Almagro, M., óp. ct., p. 166.
15“y en su virtud, nombro Presidente dei Poder ejecutivo a D. Estanislao Figueras, hasta que se cons-
tituya otro Ministério; Ministro de Hacienda a D. José Echegaray; Ministro de la Gobemación a D.
Francisco Pi y Margall; Ministro de Marina a Don José María de Beranger; Ministro de Gracia y
Justicia a D. Nicolás Salmerón; Ministro de Fomento a D. Manuel Becerra; Ministro de Ultramar a
D. Francisco Salmerón y Alonso; Ministro de la Guerra a D. Domingo Moriones, y Ministro de Es-
tado a D. Emilio Castelar”, en Dáro de Sesones, 24 de febrero de 1873, p. 253.
16 Idem, p. 254. Los dos últimos, si bien, procedían dei partido radical, en ambos prevalecia su calidad
castrense, como destaca Femández Almagro, enóp. ct., p. 166.
17 Art. 4.° Las actuales Cortes seguirán deliberando hasta que sean votados definitivamente el pro-
yecto de abolición de la esclavitud en Puerto-ico, el de abolición de las matriculas de mar y el de
40
organización, equipo y sostén de los 50 batallones de cuerpos francos. Art. 5.° Votados definitiva-
mente estos proyectos, nombrarán las actuates Cortes una comisión de su seno que las represente,
y suspenderán desde luego sus sesiones, en Dáro de Sesones, 4 de marzo de 1873, Apêndice 1° al
n°5.
is “pro YECTO DE LEY. Artículo único. La Asamblea Nacional acordará, por su propia iniciativa
o a instancia del Poder ejecutivo de la epublica, el decreto de convocatoria a Cortes Constituyentes,
tan pronto como a juicio de la misma Asamblea puedan verificarse las elecciones en condiciones
que garanticen la libertad dei sufrágio y los altos intereses de la epublica. Llegado el caso de la
convocatoria, la Asamblea acordará el momento de la suspension de sus sesiones, el nombramiento
de una comisión permanente, el número de sus indivíduos y las facultades de que debe quedar in-
vestida dicha comisión”. Asimismo se presentó un voto particular por el senador Primo de ivera,
fíjando la constitución de las Cortes Constituyentes para el día 1 de junio. Dáro de Sesones, 7 de
marzo de 1873, Apêndice Décimo al n° 18.
19 Dáro de Sesones, 11 de marzo de 1873, Apêndice Tercero al n° 21.
20 El día 19 se había elegido un nuevo Presidente de la Asamblea como consecuencia de la dimisión
de Cristino Martos. El nuevo presidente seria Francisco Salmerón. Dáro de Sesones, 19 de marzo
de 1873, p. 648.
21 De los veinte integrantes de la Comisión, ocho eran radicales, cinco federates, tres conservadores
y tres radicales de conciliación.
41
tivo, así como convocar a la Asamblea, en aquellos casos en que por circunstancias
extraordinárias resultase necesario. La pugna existente entre Asamblea y Gobiemo
no desaparecia, sino que quedaba trasladada a la Comisión-Ejecutivo. Los enfren-
tamientos entre el Gobiemo y ahora la Comisión continuaron, se acentuaron y es-
tallaron al convocar esta última, prescindiendo dei primero, a la Asamblea
Nacional para el 23 de abril. Los radicales pretendían proclamar la epública uni-
tária. El gobiemo que ya estaba prevenido desbarato este nuevo intento radical de
conquistar el poder por la fuerza. Pi y Margall, como presidente interino, disolvió
la Comisión permanente al haberse constituído ésta en un elemento perturbador
dei orden establecido.
La fracasada intentona golpista supuso el comienzo de la llamada política de re-
tramento electoral de todos los partidos, a excepción lógica dei epublicano Fe-
deral; política que convirtió a los federales en la única fuerza que participaria en
las elecciones a Cortes Constituyentes22. ota la cooperación entre radicales y fe-
derales, se inicia un nuevo proceso de marcha hacia la izquierda, produciéndose
ahora las desavenencias entre las distintas facciones dei partido, reclamando unos
la federación inmediata realizada desde abajo, mientras que desde el Gobiemo se
exigia el respeto a la hoja de ruta establecida. Las tensiones en el seno dei partido
iban en aumento. Son reveladoras la palabras de Pi y Margal al decir “Después
dei 23 de abril comprendí que los más graves obstáculos los había de suscitar mi
propio partido”23.
Celebradas las elecciones entre el 10 y 13 de mayo24, resultó elegida con una ba-
jísima participación25 dei censo electoral, aún incluso de haberse rebajado el limite
22 etraimiento que no se puede valorar como mera indiferencia, sino como una actitud real de
abierta hostilidad al nuevo régimen, Ver en este sentido: López Cordón , Ma Victoria , óp. ct., p. 57,
o Ferrando Badia , Juan , La Prmera Repúblca..., p. 188.
23 Pí y Margall , F., La Repúblca de 1873: apuntes para escrbr su hstora. Libro Io, Madrid,
1874, p. 32.
24 Elecciones que tal y como se destaca por distintos autores, el comportamiento dei Gobiemo se
caracterizo por la más absoluta neutralidad, López Cordón , Ma Victoria , óp. ct., p. 57 o Fernández
Almagro , M., óp. ct., p. 169; aunque este último incide en destacar el distinto comportamiento
que se observo en los Comités Federales de las províncias, los cuales “no habrían de mantenerse en
análoga neutralidad y no ahorraron en modo alguno violências ni falsedades: las necesarias para ob-
tener aplastante mayoría”, íbdem.
25 Hay autores que hablan de una participación dei 25%, otros dan una participación cercana al 40%,
De cualquier manera, la apatia frente a las elecciones fúe la tónica dominante, entre otras razones
porque tanto conservadores como radicales consideraron que el retraimiento en las elecciones era
la mejor manera de boicotear a los federales.
4
de edad a los 21 anos, una abrumadora mayoría federal26, en muchos casos sin
experiencia política alguna.
26 Los republicanos föderales obtuvieron 343 escanos de un total de 391, una mayoría aplastante
con respecto de los candidatos individuales de otras fuerzas que, pese al acuerdo de abstenerse de
sus partidos, habían decidido optar por su cuenta a los comícios: con un acta de diputado se hicieron
los republicanos unitários, con veinte los radicales, con siete los conservadores constitucionales, y
finalmente con tres los alfonsinos. Ver en este sentido: Blanco Valdés , ., óp. ct., p.3'1.
27 “Senores Diputados, venimos hoy, cumpliendo noble y lealmente nuestro mandato, a depositar
en vuestras manos el poder que recibimos de otra Asamblea”, Dáro de Sesones, 7 de Junio de
1873, p. 69. Ver también pág. 70.
28 “Los Diputados que suscriben....suplican al Diputado D. Francisco Pi y Margall que proponga a la Câ-
mara los indivíduos que han de formar el Poder Ejecutivo”. La citada proposición iba firmada por los si-
guientes diputados: afael Cervera, Agustin Sardá, José Maria Torres, Salustio V. Alvarado, Eduardo
Palanca, Joaquín Gil Berges y Modesto Martinez Pacheco. Dáro de Sesones, 7 de Junio de 1873, p 72.
29 El nuevo Ejecutivo estaria conformado por: Presidência y Gobemación, D. Francisco Pi y Margall;
Estado, D. afael Cervera; Gracia y Justicia, D. Manuel Pedregal; Guerra, D. Nicolás Estebanez;
Fomento, D. Eduardo Palanca; Hacienda, D. José de Carvajal; Marina, D. Jacobo Oreiro; Ultramar,
D. José Cristóbal Somí., Dáro de Sesones, 8 de Junio de 1873, pp. 107 y 108.
30“ no puedo menos de retirar la proposición que he hecho a la misma para la constitución dei futuro
Gobiemo, ya que de todas maneras las Cortes acaban de darme una prueba de desconfianza, a lo
menos en gran parte.” Idem., p. 118.
43
tremo que supuso la vuelta al banco azul dei gobiemo de Figueras, quien, dos dias
más tarde, presentó su renuncia que fue admitida, procediéndose una vez más a la
designación dei nuevo Ejecutivo por elección directa de la Câmara; resultando
elegidos para componer el mismo los senores D. Francisco Pi y Margall, para la
Presidência y Gobemación; D. Nicolás Estevanez, para el Ministério de la Guerra;
D. José Cristóbal Somí, Ultramar; D. José Muro López Salgado, Estado; D. Fe-
derico Anrich, Marina; D. José Fernando González, Gracia y Justicia; Don Teo-
doro Ladico y Fon, Hacienda, y D. Eduardo Benot, Fomento.31 Se trataba de un
gabinete no designado por quien lo presidia, sino impuesto por las Cortes, y cuya
vida fue extremadamente corta; duró apenas dos semanas.
Los enfrentamientos entre las distintas facciones republicanas32 era una realidad
que impedia el normal desarrollo de un régimen político nuevo, que como tal,
conllevaba una reforma radical de las estructuras políticas hasta ahora ensayadas,
y que por tanto para su êxito requeria de un total consenso, al menos de aquellos
que ideologicamente habían defendido y logrado su instauración. Consenso que
se encontraba muy lejos de su existência. Las diferencias e incluso contrapuestas
estratégias en el seno dei partido republicano, entre las que venían a denominarse
sus facciones intransigentes y benévolas, seguían en aumento.
En esta situación convulsa y de enfrentamiento entre las distintas sensibilidades
dei partido republicano, Pi, de acuerdo con sus planteamientos de orden, de cons-
tituir la epública de arriba abajo, consideraba como eslabón imprescindible para
la consecución de sus objetivos, la elaboración ínminente de un texto constitucio-
nal que sirviera de base legal para la configuración de la república federal, esta-
bleciendo el marco político de desarrollo de la misma, asegurándola y evitando el
estallido de la pasiones e impaciências del ala intransigente del partido. Para ello
en su programa de gobiemo presentado a las Cortes, urgia a la necesidad de de-
signar con carácter inmediato a la Comisión redactora de la Constitución “Fáltame
ahora solamente deciros que es necesario que aceleréis la obra de esa Constitución;
que es necesario que no perdais momento; que debéis nombrar, si es posible, hoy
mismo la comisión que ha de redactar el proyecto y la que debe demarcar los fu-
turos Estados federales.”33. En efecto, tres dias más tarde el diputado Gil Berges
presentaba a las Cortes una proposición de ley sobre el nombramiento de la Co-
misión encargada de redactar el proyecto de Ley fundamental de la epública fe-
deral espanola34, resultando designada la misma con fecha 20 de ese mismo mes35.
La situación de enfrentamiento no solo no cesaba, sino que incluso la fracción
parlamentaria intransigente manifesto su decidida voluntad de retraimiento de las
Cortes. Es cierto que no todos sus representantes se retiraron de la câmara, así
como que ese primer repliegue no resultaria duradero, pero su comportamiento
obstruccionista desemboco en una nueva crisis de gobiemo. El Presidente dei Eje-
cutivo, Sr. Pi, ante la debilidad que el mismo consideraba caracterizaba a su go-
biemo “se siente tan débil el Gobiemo” presentará a la Câmara una proposición
de Ley solicitando su confianza, así como autorización para por si mismo resolver
las crisis gubernamentales que se pudieran suceder, nombrando nuevos minis-
tros36. Después de una enconada oposición por parte de los intransigentes, la citada
proposición fúe votada, resultando aprobada por 176 votos contra 49. Consecuen-
37 “En uso de las facultades que me han sido conferidas por las Cortes Constituyentes en 21 de Junio
actual, he nombrado Ministro de Estado a D. Eleuterio Maisonnave, Ministro de Gracia y Justicia a D.
Joaquin Gil Berges, Ministro de la Guerra al general D. Eulogio González, Ministro de Marina a D.
Federico Anrich, Ministro de Fomento a D. amón Pérez Costales, Ministro de Ultramar a D. Francisco
Suner y Capdevila, Ministro de Hacienda a D. José Carvajal, quedando yo encargado de la Presidencia
y del Ministério de la Gobemación”, en Daro de Sesones, 28 de junio de 1873, p. 391.
38 dem, p. 393.
39 Daro de Sesones, 30 de junio de 1873, Apêndice 2 al num. 27.
40 Daro de Sesones, 2 de Julio de 1873, Apêndice 3° al núm. 29.
41 Daro de Sesones, 30 de junio de 1873, pp. 422 y 442 y 443. Este mismo dia se presentó por el
Diputado Sr. Pascual y Casas, la proposition de un artículo adicional a la ley “La autorización con-
cedida se entiende al Gobiemo que preside o presida el Sr. Pi, no pudiendo otro Ministério hacer
uso de ella sin acuerdo especial de la Câmara”, proposition que resultó aprobada, pp. 444 y 445.
42 Daro de Sesones, 1 de Julo de 1873, p. 473.
46
El dia siguiente la minoria intransigente presentó como voto particular un nuevo pro-
yecto “Los indivíduos de la Comisión de Constitution que suscriben, sintiendo no haber
podido ponerse de acuerdo con sus ilustrados companeros de la mayoría, tienen la honra
de someter a las Cortes Constituyentes, como voto particular, el siguiente”.52. El en-
frentamiento, de nuevo, entre benévolos e intransigentes en un punto tan esencial como
la configuration de la epública Federal, manifiesta claramente la imposibilidad de
concordia y por tanto el ocaso del nuevo régimen constituído. En efecto ese mismo dia,
el Sr. Pi presentó su renuncia al cargo “renuncio, no solo la autorización para resolver
las crisis, sino también el cargo de Presidente del Gobiemo”53. Aceptada la renuncia, y
tras una acalorada discusión, quedó aprobada la proposition de designar a un nuevo
diputado encargado de formar un nuevo gobiemo. El elegido resulto ser Nicolás Sal-
había en el país, se podrían evitar las perturbaciones y desordenes que después han venido”, en Da-
ro de Sesones, 6 de septiembre de 1873, p. 2096.
49 Dáro de Sesones, 17 de julio de 1873, p. 737. Apêndice 2o al n° 42. El citado proyecto de Cons-
titución fue redactado, según apunta Hennessy , por Castelar en veinticuatro horas, como última de-
ferencia hacia el que muy pronto seria definitivamente ex presidente dei Poder ejecutivo, en The
Federal Republc n Span, Oxford, 1962, p. 218, cito por Ferrando Badía , op.ct., p. 229.
50 Este es el caso, entre otros, dei Diputado Gonzâlez Alegre , quien senalaba “Si el Sr. Presidente
dei Poder ejecutivo no tiene bastantes médios para resolver por si la crisis, que se presente y resigne
sus poderes en la Asamblea; la Câmara los recogerá y sabrá lo que ha de hacer para resolveria”,
Dáro de Sesones, 17 de julio de 1873, p. 740.
51 Idem, p. 750.
52 Dáro de Sesones, 26 de julio de 1873, Apêndice primero al núm. 50.
53 Dáro de Sesones, 18 de julio de 1873, p. 754.
48
54 Salmerón contó con 119 votos a favor frente a 93 que obtuvo Pi i Margall, Idem, pp. 786 y 787.
esultado que hubiera podido haberse inclinado a favor de Pi, si tal y como senala Ferrando Badía ,
se hubieran encontrado en la Câmara, los 40 diputados de la minoria “ocupados en menesteres can-
tonales”, en op. ct., p. 235.
55 Dáro de Sesones, 19 de julio de 1873, pp. 795 y 796.
36 Óp. ct., p. 240.
37 “Deseo saber si está impreso ya el proyecto de Constitución federal; porque hace muchos dias
que vamos a Secretaria algunos Diputados en busca de un ejemplar, y no parece sino que el tal pro-
yecto se haya perdido. Yo rogaria a la Mesa que hiciera lo posible para que se adelantara ese trabajo
y pudiéramos los Diputados consultarle. Así como así, los cantones se están constituyendo: no puede,
por tanto, ser más urgente la necesidad de que se discuta ese proyecto para que sea una realidad el
acuerdo que en punto a la federación ha tomado ya la Câmara. El Sr. VICEPESIDENTE (Cervera):
La Mesa tiene la satisfacción de poder contestar al Sr. Diputado, quo hoy mismo pasa ese proyecto
a la imprenta”, en Dáro de Sesones, 22 de Julio de 1873, p. 836. Pregunta que se vuelve a repetir
por otro diputado al dia siguiente, Dáro de Sesones, 23 de Julio de 1873, p. 891.
38 “Hoy se ha repartido el proyecto de Constitución leído dias pasados en esta Câmara. Desde luego yo
comprendo, y soy uno de los que más lo desean, porque entiendo que es un deber imprescindible, que se
49
aprcsurc su discusión; pero como ha habido una porción de circunstancias que han impedido a la comisión
celebrar algunas sesiones, a las que hubiera podido asistir una parte de esta Câmara, resulta que nosotros
desconocemos en absoluto ese proyecto; y aun cuando es muy breve el que se ha presentado, necesita,
sin embargo, algún tiempo para estudiarle. Por otra parte, existe otro proyecto formulado por esta minoria;
y debiendo ambos servir de base para la discusión, yo desearía que la Mesa se sirviera concedemos un
plazo siquiera de cinco o seis dias para estudiar el proyecto que hoy se ha repartido impreso. De otro
modo, no podriamos entrar en el debate con los conocimientos indispensables para elevar la discusión a
la altura que corresponde a esta Câmara”, en Dáro de Sesones, 26 de Julio de 1873, p. 944.
59 Dáro de Sesones, 13 de agosto de 1873, p. 944.
60 Son muy expresivas en este sentido las palabras pronunciadas por Castelar, quien haciendo refe-
rencia al acuerdo adoptado en Cortes de dedicar la sesión de la tarde para discutir el proyecto cons-
titucional, anteriormente citado, senalaba: “Pero las leyes de conducta son cambiantes, porque
dependen de las circunstancias. El día en que se tomó el acuerdo, ^habían sido las circunstancias
tan terribles como lo son al presente? Todavia no había tenido lugar el ataque de Igualada; todavia
no se había llevado a cabo el incêndio de Berga; todavia no habían venido ciertas comisiones de
Cataluna a décimos el horrible estado dei país; todavia no había entrado el Pretendiente en Espana;
todavia no se había hecho tan terrible como hoy se ha hecho la guerra dei Norte; circunstancias
todas que determinan como la primera, como la más urgente de las necesidades, el acudir a la guerra.
Así es que la Câmara, que no ha cambiado nada en princípios, ha cambiado en conducta, y ha dedi-
cado preferentemente su atención a los proyectos que tenían por objeto facilitar recursos con que
hacer frente a la guerra”, en Dáro de Sesones, 20 de agosto de 1873, p. 1663.
6'ídem, p. 1664.
50
convocarias si lo considerase necesario. Las Cortes discutirán y votaran hasta el dia de la suspensión
los proyectos que consideren urgentes para las necesidades de la guerra”, en ídem, p.1892.
66 “Los Diputados que suscriben proponen la siguiente adición al proyecto de suspensión de sesiones:
«Después de las últimas palabras se anadirá: “Y también discutirán y votaran precisamente una ley
de amnistia para todos los complicados en el movimiento de los Cantones federales”, en Dáro de
Sesones, 30 de agosto de 1873, p. 1925.
67 El resultado de la votación fue de 118 votos a favor contra 42 en contra, en Idem, p. 1938.
68 “ni cuál era el propósito dei Gobiemo, bajo cuyos auspicios la proposición ha sido presentada”,
Lo extrano, después de todo, senores, es que el Gobiemo haga de esto cuestión de Gabinete; no lo
ha dicho, no lo ha declarado; pero es público y notorio que el Gobiemo hace de la suspensión cues-
tión de Gabinete”, en ídem, pp. 1939, 1942.
69 “Que esta Câmara es una rémora para el Gobiemo; que las circunstancias dei país son gravísimas;
que el Gobiemo en estas circunstancias gravísimas debe estar solo “jQue ofensa para la Câmara!”,
“jAh, senores! Yo creo que el Sr. Presidente dei Poder ejecutivo no está de acuerdo conmigo; y lo
creo, porque el Gobiemo esta tarde ha pronunciado algunas frases que me han herido profundamente
y que vienen a redundar en último término en desprestigio dei senor Salmerón y de todos nosotros.
Su senoría ha dicho, contestando a una pregunta de un Sr. Diputado, que con autorización o sin au-
torización obraria como creyera conveniente a los intereses dei país. He copiado esta frase, y si por
ventura se pusiera en duda, yo apelaria al testimonio de los senores taquígrafos, yo apelaria a las cuar-
tillas, para que demostraran que esto es lo que ha dicho el Sr. Presidente dei Poder ejecutivo. Es decir,
Sres. Diputados, que según esta manifestación explicita y terminante, que yo aplaudo, porque seria
una hipocresía censurable que se pensara y no se dijera, lo que nos espera durante el interregno par-
lamentario, durante estos dos meses de suspensión de sesiones, es una dictadura: el dictador será S.S.,
y sus companeros de dictadura los actuales Ministros” en ídem, p. 1941, 1944 y 1945.
70 “Las palabras pronunciadas por el Sr. Presidente dei Poder ejecutivo, que constituyen todo un
programa de gobiemo, todo un sistema de conducta, abren un profundísimo abismo entre las diversas
fracciones de la Câmara, y será muy difícil que después de esas palabras, que después de ese nuevo
programa haya términos de conciliación entre todos nosotros”, en ídem, p. 1939.
5
como por los conservadores, aunque con planteamientos muy diferentes71. En con-
secuencia, observamos que la Asamblea hasta el momento de la suspension de se-
siones (20 de septiembre), dedicará su actividad esencialmente a aprobar aquellos
médios y proyectos de ley que le permitieran alcanzar sus objetivos de orden y dis-
ciplina dei Ejército. La proposición de ley presentada con fecha 14 de agosto por el
diputado republicano benevolente Martinez Pacheco, urgiendo la necesidad de res-
tablecer las ordenanzas generales del Ejército, que consiguió el dictamen favorable
de la Comisión correspondiente72, y la presión ejercida por los jefes y ofíciales dei
Ejército, apoyada por la mayor parte de los miembros dei Gobiemo, provoco la di-
misión de Salmerón73, quien siempre se había declarado partidário de la abolición
de la pena de muerte74. En la misma sesión se procedió a la votación y designation
de Don Emilio Castelar como nuevo presidente dei Poder Ejecutivo75, presentando
en la sesión dei dia 8 a los miembros de su gobiemo y pronunciando su primer dis-
curso como Jefe dei nuevo Ejecutivo, en el que declara su intención de mantener
las políticas de orden y autoridad desarrolladas por su antecesor76.
71 Tal y como destaca Ferrando Badía , J., “Si consultamos el Diário de Sesiones de los meses agosto-
septiembre nos percatamos de lo siguiente: de que los intransigentes eran los que, en verdad, se oponían
a la propuesta de suspension de la sesiones de las Cortes, y de que tanto los conservadores, como los
radicales y minoria intransigente no querían discutir el proyecto constitucional”, en óp. ct., p. 299.
72 Ibdem, p. 305.
73 Dáro de Sesones, 6 de septiembre de 1873, p. 2077.
74 PuiG Campillo , A., El Canton Murcano, Murcia, 1986, p. 254.
75 El Sr. Pi y Margall, que se habia retirado a partir de su caída presidencial, volvió para disputarle
la presidência al Sr. Castelar, respaldado el primero por los intransigentes, quienes en el mismo
veían la única fórmula, sino ya para realizar la federación, si para lograr una política de conciliación.
De la votación resulto derrotado Pi y Margall por 67 votos frente a los 133 obtenidos por Castelar,
en Dáro de Sesones, 6 de septiembre de 1873, p. 2134. Ver también al respecto, Ferrando Badía ,
J., óp. ct., pp. 305 y 306.
76 Dáro de Sesones, 8 de septiembre de 1873, pp.2139 y 2150. En la sesión dei dia siguiente, 9 de
septiembre, será designado como nuevo Presidente de las Cortes, Don Nicolás Salmerón, p. 2180.
77 Dáro de Sesones, 13 de septiembre de 1873, Apêndice cuarto al n° 92.
78 Dáro de Sesones, 16 de septiembre de 1873, Apêndice séptimo al n° 94.
53
6879. Suspension de las sesiones que se verifico dos dias más tarde, autorizando a
la Mesa para reunirias antes, si se consideraba conveniente80. Se inicia una nueva
etapa en el gobiemo republicano81, en el que los poderes extraordinários otorgados
a su Presidente le permitieron una libertad de movimientos que terminaria en el
momento de la reanudación de las sesiones de Cortes el 2 de Enero, tal y como se
había acordado. En esta primera sesión, Castelar, procediô a dar cuenta de la ac-
tion realizada por el gobiemo durante el interregno parlamentario82. Concluida la
intervention dei Presidente del Ejecutivo, el Sr. Martin de Olias présenté una pro-
position de confianza al Gobiemo83, a la que inmediatamente se anadié otra en-
cabezada por el diputado Sr. Bartolomé y Santamaria, en la que se solicitaba
acordar no haber lugar “a deliberar sobre la proposition de confianza al Go-
biemo”84. La respuesta de Castelar no tardé y tomando la palabra advirtié, de que
en el caso de que la actuation del Gobiemo se pusiese en tela de juicio, se deberia
proceder inmediatamente a la sustitucién del Ejecutivo85, no respondiendo del
orden público desde ese mismo momento. Palabras de Castelar que indignaron al
diputado Bartolomé y Santamaria, quien manifiesta que no se había realizado en
la Câmara una declaration tan grave86. La tension que se vivia en las Cortes hizo
que el propio Presidente de las mismas, Sr. Salmerén, interviniera en apoyo del
Gobiemo, senalando la mala interpretation que se había hecho de las palabras del
Presidente del Ejecutivo, quien, asimismo, pidié la palabra para aclarar las mis-
mas. esuelto el incidente, el diputado Bartolomé y Santamaria retiré su propo-
sition87. No cabe duda, tal y como destaca Femández Almagro “que flotaba en la
atmosfera de la câmara la sospecha de una inminente intervention militar”88.
Una vez retirada la proposition de Bartolomé y Santamaria, se pasé a la discusién
de la del Sr. Martin de Olias, en la que participaron diputados tanto a favor como
en contra de la misma89, siendo estos últimos, como refiere Puig Campillo, “im-
placables al censurar la conducta del Gobiemo”90. Puesta a votación la citada pro-
posición resultó desechada por 120 votos contra 10091. Castelar, ante dichos
resultados, presentó su dimisión como Presidente del Ejecutivo, junto con la de
su gobiemo, solicitando de la Câmara, la designation inmediata de un nuevo Ga-
binete92. Ante la ausência de Gobiemo, el diputado Bartolome y Santamaria, pre-
sentó una proposition a la mesa, requiriendo la necesidad de designar un diputado
capaz de formar uno nuevo que pusiera fin a la crisis provocada por la dimisión
del anterior equipo93. Proposition que fúe aceptada y votada favorablemente94.
Eran las cinco y cuarenta minutos del dia 3 de enero cuando se suspendió la sesión
por veinte minutos para que los diputados alcanzasen un acuerdo. eanudada la
sesión a las siete menos cinco comenzó la votación para la designation del nuevo
Presidente del Ejecutivo. Comenzado el escrutínio, el Sr. Presidente de la Câmara,
ocupando su sitiai, interrumpió el acto para comunicar haber recibido un recado
u orden del capitán general de Madrid para que se desalojara el local en un término
perentório, o que de lo contrario lo ocupará a viva fúerza95. El citado comunicado
motivo un gran revuelo entre los senores diputados, quienes se oponian a aceptar
las ordenes procedentes de fúera de la Asamblea, al considerarlo un grave ataque
a la representation de la soberania nacional. Ante la situation imprevista y ante
la consideration de lo inapropiado que resultaba continuar con el escrutínio, y res-
pondiendo a la solicitud de un Diputado que pedia se diera un voto de confianza
el Presidente del Gabinete saliente; éste último rechaza la misma, al estimar que
podia interpretarse que se trataba de un Gobiemo que “había sido impuesto por el
temor de las armas a una Asamblea soberana”96. Accediendo al edifício la Guardia
civil, de acuerdo con las ordenes dei capital general, éstos exigieron el desalojo
inmediato dei mismo. El Diputado Benitez de Lugo volvió a requerir un voto de
confianza para Castelar, quien, una vez más, se resiste a aceptar “Ya no tendría
97 Ibdem.
98 Aunque se mantuvo La epública, como forma de gobiemo, bien es verdad que no quedaba de
ésta más que el nombre.
99 “La pública opinión, sirviéndose dei brazo providencial dei Ejército, ha disuelto las últimas Cortes
Constituyentes. El país ha prestado a este acto su más unânime asentimiento; el Poder Ejecutivo de
la epública acepta toda su responsabilidad, y en su consecuencia decreta lo siguiente: Artículo l.°
Se declaran disueltas las Cortes Constituyentes de 1873. Art. 2.° El Gobiemo de la epública con-
vocará Cortes ordinárias tan luego como, satisfechas las necesidades dei orden, pueda funcionar li-
bremente el sufrágio universal”, Gaceta de Madrd, 9 de enero de 1874, pp. 69 y 70.
100 Tal y como destaca Ferrando Badía , “La que quebro el 3 de enero no fue sólo la política repu-
blicano-federal. Quebro también la unidad interna dei partido. Pues la masa federal no era teórica,
política, ideologicamente federal. Verá en la federación la solución a sus problemas, decía la inge-
nuidad doctrinaria de Pi. Pero veia la solución no por la federación misma, sino por la oportunidad
política que la federación representaba. Cuando el federalismo perdió en virtualidad política, la masa
le abandono, en Ocaso de la epública espanola de 1873: la quiebra federal, en Revsta de estúdos
polítcos, N°. 183-184, 1972, p. 54.
56
Una vez examinado el devenir político seguido por la I epública espanola desde
su proclamación hasta la desaparición de la misma, aspecto que nos ayudará a una
mejor comprensión de las razones que llevaron a la frustración dei proyecto cons-
titucional de 1873, será esta última cuestión la que analizaremos de forma parti-
cular a continuación.
un período casi similar (17 julio-11 agosto) al dedicado a su redacción, para que
comenzaran las discusiones sobre el mismo, y todo ello, pese a distintos requeri-
mientos por parte de diversos diputados, primero para que se procediera a su im-
presión y segundo, solicitando el inicio de su discusión107.
En el preâmbulo dei texto dei proyecto, en el que ya se alude a las propias disen-
siones existentes sobre su contenido entre los propios miembros de la Comisión
“No todos los indivíduos de la comisión sienten y piensan de la misma suerte
sobre los artículos y títulos dei proyecto que presentan”, se destaca el pacto federal
como sustento de la epública espanola y se indican seguidamente las premisas
perseguidas en la redacción dei mismo, como son: a), conservar la libertad y la
democracia conquistadas en la revolución gloriosa; b). establecer la división te-
rritorial, sin perjuicio dei derecho de las províncias, derivada de “nuestros recuer-
dos históricos y de nuestras diferencias”, asegurando la unidad nacional y
organizando los poderes públicos de forma que no pudiesen “nunca confundirse
ni menos concertarse para mermar un derecho o para establecer una dictadura”;
c). organizar los poderes públicos sobre la base de “las ideas más pura y genuina-
mente federales”108. Asimismo, se resaltan las dificultades afrontadas a la hora de
proceder a la división territorial, optando por la fórmula de ordenar la federación,
constituyendo los nuevos Estados sobre la base de los antiguos reinos de la Mo-
intervenciones en las Cortes en los dias precedentes, insistiendo en la misma, Dáro de Sesones,
28 de junio y 4 de julio de 1873, p. 397 y 529, respectivamente.
107 Dáro de Sesones, 22, 23, 26 y 30 de julio y 8 de agosto, todos ellosde 1873, pp. 836, 891,944,
1025 y 1246, respectivamente.
108 TITULO III. De los Poderes públicos. Art. 39. La forma de gobiemo de la Nación espanola es la
epublica federal. Art. 40. En la organización política de la Nación espanola todo lo individual es
de la pura competência dei indivíduo; todo to municipal es dei Município; todo lo regional es dei
Estado, y todo lo nacional de la Federación. Art. 41. Todos los Poderes son electivos, amovibles y
responsables. Art. 42. La soberania reside en todos los ciudadanos, y se ejerce en representación
suya por los organismos políticos de la epública constituída por medio dei sufrágio universal. Art.
43. Estos organismos son; El Município. El Estado regional. El Estado federal o Nación. La sobe-
rania de cada organismo reconoce por limites los derechos de la personalidad humana. Además, el
Municipio reconoce los derechos dei Estado, y el Estado los derechos de la Federación. Art. 44. En
África y en Asia posee la epública espanola territórios en que no se han desarrollado todavia sufi-
cientemente los organismos políticos, y que por tanto se regirán por leyes especiales destinadas a
implantar allí los derechos naturales dei hombre y a procurar una educación humana y progresiva.
TITULO IV. Art. 45. El Poder de la Federación se divide en Poder legislativo, Poder ejecutivo,
Poder judicial y Poder de relación entre estos Poderes. Art. 46. El Poder legislativo será ejercido
exclusivamente por las Cortes. Art. 47. El Poder ejecutivo será ejercido por los Ministros. Art. 48.
El Poder judicial será ejercido por jurados yjueces, cuyo nombramiento no dependerá, jamás de los
otros Poderes públicos. Art. 49. El Poder de relación será ejercido por el Presidente de la epública.
58
io9 titu LO I. De la Nación espanola. Artículo 1.° Componen la Nación espanola los Estados de
Andalucía Alta, Andalucía Baja, Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla la Nueva, Castilla
la Vieja, Cataluna, Cuba, Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra, Puerto-ico, Valencia, egiones
Vascongadas. Los Estados podrán conservar las actuates provincias o modificarias, según sus nece-
sidades territoriales. Art. 2° Las islas Filipinas, de Fernando Póo, Annobon, Corisco, y los estable-
cimientos de África, componen territórios que, a medida de sus progresos, se elevarán a Estados
por los poderes públicos.
'10 Dáro de Sesones, 12 de agosto de 1873, p. 1399. Ver también Apêndice Primero al Número 50.
111 Dáro de Sesones, 9 de agosto de 1873, p.1330. “deseando alejar de la izquierda la especie de
sospecha de que por su parte haya interés en detener la discusión de la Constitución, retiro mi firma
dei voto particular, quedando, por tanto, retirado éste, puesto que era ya mi firma la única que lo au-
torizaba, después que el Sr. Cala retiró la suya”.
112 Blanco Valdés , ., óp. ct., p. 53.
113 “La Nación espanola, y en su nombre las Cortes Constituyentes de 1873, con el objeto de asegurar
en absoluto los derechos naturales e imprescriptibles de la personalidad humana, garantizándolos
contra los abusos de la fúerza”, Dáro de Sesones, 26 de julio de 1873, Apêndice Primero al Número
50.
114 “Art. 60. La soberania reside en el pueblo, y se ejerce, en representación suya, por los organismos
políticos de la epublica, constituídos por medio del sufrágio. Estos organismos son en Europa y
América: El Município. El Cantón. El Estado. La soberania de cada organismo reconoce por limite
los derechos de la personalidad humana. Además, el Município reconoce los derechos delegados al
59
cantón y al Estado, y el cantón reconoce a su vez los reservados al Estado. Art. 61. La posesión his-
tórica y la contigüidad topográfica determinan los limites de los terrenos dei Município. El pacto de
las actuales províncias constituirá el cantón, teniendo en cuenta la proximidad geográfica y las re-
laciones naturales y económicas. El pacto de los cantones constituye la Federation”.
115 Blanco Valdés , .L., óp. ct., p. 54. “Art. 67. Las actuates províncias de la Península se reúnen
en cantones en uso de su autonomia. Las antillanas forman desde luego dos cantones, Cuba y Puerto
ico. Los pactos de las províncias forman parte de esta Constitución. Los cantones reconocen recí-
procamente su autonomia. Se declaran iguales en entidad política, y conservan toda la plenitud de
su soberania no delegada expresamente en la Constitución nacional. Se federan en igualdad de de-
rechos imprescriptibles. Admiten toda una misma ley de criminalidad y de penalidad, y se declaran
sujetos a cumplir esta Constitución y las leyes que de ella se derivan. Se confederan para resistir
todo ataque exterior y todo desorden interior, asegurando la independencia de la Patria y protegiendo
la libertad y los derechos de los confederados. Nunca se aliaran ni se agregarán a otras Naciones, ni
se separarán de la espanola, ni menoscabaran la unidad de la Patria, ni amenguarán la integridad dei
território...”. Como se puede observar dei texto transcrito, y como ya senate Blanco Valdés , se
“disenaba un Estado que respondia, desde la perspectiva de su organización territorial, a una confusa
mezcla de princípios federates y confederates, termino éste que aparecia, de hecho, en el articulado
dei documento en diferentes formas léxicas”, en óp. ct. p. 53.
116 Dáro de Sesones, 2 de agosto de 1873, Apêndice Sexto al n°. 56. Ver también Dáro de Seso-
nes, 26 agosto 1873, Apêndice Quinto al n° 76.
117 Dos de estas enmiendas fueron presentadas, entre otros, por el diputado Francisco de Paula Ca-
nalejas. La primera de ellas, concemiente al Título I dei proyecto, si bien consagra la estructura pro-
vincial “Artículo Io. Componen la Nación espanola los Estados correspondientes a las actuates
províncias”, permite que se organice libremente pero bajo el paraguas de las demarcaciones territo-
riales plasmadas en el proyecto “Art. 2o. Los Estados actuates podrán, reuniéndose con los limítrofes,
organizar nuevos y más extensos Estados, hasta tocar el limite de la division territorial de Espana,
en los de Andalucía Alta, Andalucía Baja, Aragón, Asturias, Baleares, Canarias, Castilla la Nueva,
60
Castilla la Vieja, Cataluna, Cuba, Extremadura, Galicia, Murcia, Navarra, Puerto ico, Valencia y
egiones Vascongadas”. La segunda, referida al Título II, “Del Gobiemo de la Nation”, entrana una
cierta confusion desde el momento en que reconoce como organismos de la Nation espanola al muni-
cípio y al Estado regional “Art. 39. La Nación espanola reconoce como organismos suyos, nunca su-
periores ni separados de la unidad nacional, al município y al Estado regional...”, para posteriormente
hablar de nuevo del Estado provincial “Art. 42. El gobiemo de los municípios y de los Estados pro-
vinciales...” o Art. 43. Todos los poderes públicos de la Nación, del Estado provincial o del municí-
pio...”, Dáro de Sesones, 4 y 11 de agosto de 1873, Apêndices Segundo al n°. 57 y Cuarto al n°. 63,
respectivamente. Una tercera presentada por el diputado Sr. Cacho, en la que partiendo de la difícultad
que entrana la designation de los Estados que han de formar la Federación espanola, reconociendo los
câmbios profundos que han afectado sustancialmente las condiciones y forma de los antiguos einos,
los inconvenientes que se pueden derivar al proceder de forma precipitada y por tanto la necesidad de
llevar a cabo con carácter prévio “ un estúdio práctico, pacífico y racional de las necesidades e intereses
propios de cada region”, insiste de nuevo en la estructura provincial “Art. Io. Constituyen la Nación
espanola, con el nombre de Estados, las 47 províncias en que se halla dividida la Península y las islas
Baleares, Canarias, Cuba y Puerto ico... ”o “Art. 43. Los organismos de la epública espanola son:
El Município. El Estado provincial. LaNación....”, Dáro de Sesones, 7 de agosto de 1873, Apêndice
Primero al n° 59, y por último, una cuarta presentada por el diputado Sr. Fuillerat “Art. Io. Componen
la Nación espanola los Estados correspondientes de las provindas de la Península y los de las islas
Baleares, Canarias, Puerto-ico y Cuba”, Dáro de Sesones 11 agosto 1873, Apêndice Cuarto al n°.
63. Ver también Dáro de Sesones, 15 de agosto de 1873, Apêndice Quinto al n° 67.
118 Durante el cual tampoco se cumplieron las buenas intenciones de la Câmara de ampliar el debate
constitucional, habilitando de la sesión vespertina al menos dos horas para la discusión dei Proyecto,
“Se ha votado lo siguiente, que he hecho notar a la Câmara: Que desde el lunes próximo haya dos
sesiones diarias, que empezarán: la primera a las ocho de la mahana, y la segunda a las tres de la
tarde, consagrándose esta última a la discusión dei proyecto de Constitution”. Ver Casanova Aguilar ,
Isabel , en VI. Las Constituciones no promulgadas de 1856 y 1873, en Colección Las Constituciones
Espaholas, dirigida por Miguel Artola , “según dias más tarde el diputado López Santiso, resulto
incumplido”, p. 275. Asimismo resalta la misma autora que cuando el día 16 de agosto un grupo de
diputados presentó una proposición para que sin excusa ni pretexto, se destinara la sesión de la tarde
para el debate constituyente, la intervención de Castelar ponderando las circunstancias que justifi-
caban la atención prioritária de la Câmara a otras cuestiones distintitas de la constitucional, determino
la retirada de la citada propuesta, en Ibdem.
119 Quien lo hacía, según su manifestation en su propio nombre y no representando al partido dei que
formaba parte “Yo estoy aqui por mi propia cuenta,... pertenezco a un partido que ha prestado grandes
servicios, que ha salvado muchas veces el orden...”, en Dáro de Sesones, 11 de agosto de 1873, p. 1360.
61
120 “Me levanto a combatir en su faz más culminante, por lo que tiene de federal, ese proyecto de Consti-
tución que se hapresentado, para que por él se rija la Nación espanola. jLa Nación espanola! Si ese proyecto
llega a ser ley fundamental no hay para que hablar de la Nación espanola; y no hay para que hablar de la
Nación espanola, porque habrá desaparecido, y habrá desaparecido dividida y deshonrada”, en Ibídem.
121 “y cuando esta comisión se constituyó, cuando nombró su presidente y secretario, cuando designo
ponentes, cuando éstos ya presentaron en el seno de la comisión el proyecto para su discusión, un
suceso político hizo que se retirasen los indivíduos de la izquierda de esta Câmara, no solamente de
aqui, sino también dei seno de la comisión”, en Dáro deSesones, 12 de agosto de 1873, p.1398.
122 “Nosotros no queremos la federación de abajo arriba; la queremos de arriba abajo, tal como está
marcada en la Constitución. Y la queremos así, porque encontramos a Espana completamente unida,
porque encontramos a Espana formada ya”, en Idem, p.1400.
123 “Yo comprendería la federación de abajo arriba cuando al hacerse la revolución las Juntas se hu-
bieran declarado independientes, hubieran enviado a las províncias sus representantes, hubieran pac-
tado entre si, y luego entre los representantes de todas las provincias hubiesen establecido aqui el
poder central. Pero hoy que existe una Câmara producto casi exclusivamente de las ideas federales
y dei sufrágio universal, a la que venimos todos con ânimo sereno, con buen juicio, con recta con-
ciencia, a fin de establecer la federación para Espana, a que venir a alteraria y perturbaria con insu-
rrecciones criminales y con levantamientos escandalosos?”, en ídem, p.1401.
124 “De tal manera entiendo yo esto, que ahora mismo declaro aqui, y no sé si se agraviarán los se-
nores de enfrente, que lo mismo se hubieran insurreccionado los que se han insurreccionado, formada
la Constitución y formada la epublica federal, que no formada la Constitución ni la epublica fe-
deral. En mi concepto les importa poco quo sean o no cantones las actuales provincias, o que haya
o no grandes Estados, o uno solo”, en Ibdem.
125 “Si mi opinión hubiera sido aceptada, tendríamos hoy la epublica una e indivisible como es la
6
Patria, como es la Espana, porque solo a vosotros se os ha ocurrido por primera vez en la historia
que para hacer la epublica era preciso empezar por romper, a fin de tener el placer de volver a unir
después”, en Dáro de Sesones, 13 de agosto de 1873, p. 1440.
126 “Pues bien; cuando todo esto hay, cuando en el salón de conferencias cada uno según su manera
de expresarse dice que no es posible la federation, que la epública federal está muerta y que se
contentaria con salvar siquiera la epublica, ^Por qué venís aqui con una Constitución federal?”,
en Idem, p. 1443.
127 “federation es pacto, es alianza, y pacto y alianza significa libertad entre los contrayentes, y lo
primero es que digan los cantones si quieren o no. Así, más lógica la minoria que vosotros, propone
a las provindas, y esto me parece más hacedero, que empiecen por separarse para confederarse
luego”, en Idem, p. 1444.
128 “Y si volvemos por un momento a la division que propone la mayoría, ^quiere decirme el Sr.
Castelar porque hay Castilla la Nueva y la Vieja, porque Galicia, Andalucía Alta y Baja? ^No es lo
mismo esa combinación que otra cualquiera?”, en Ibdem.
129 “A este propósito recuerdo haber visto un mapa en que estaban representadas todas las províncias,
pero sin obedecer a regia ninguna, y decía yo: lo mismo puede representar otra cosa cualquiera; y aunque
yo no tengo tiempo para entrar en detalles, diré al senor Castelar que ese trabajo lo ha hecho muy deprisa,
y aun podría anadir un cuento en que se refiere que presentándole un artista una obra suya que dejaba
mucho que desear, a un amigo un si es no es socarrón, le decia aquel: esto lo hice en muy poco tiempo:
y el interpelado contestaba: a juzgar por la obra, creí que la habíais hecho de improviso”, en Ibdem.
130 “i,Con qué autoridad vais a hacer la federal? /,Con la autoridad de los partidos que aceptaron la
revolution de Setiembre? No. ^.Sera con el partido conservador o radical? ^No acabáis de oir mis
declaraciones? ^La haréis siquiera con la autoridad, con la voluntad de todo el partido federal? No;
la izquierda, según mis noticias, no vota vuestra Constitución; y si la vota, será, imponiéndoos con-
diciones, porque al fin y al cabo tiene razón”, en Ibdem.
131 Ibdem.
132 Dáro de Sesones, 14, 15 y 16 de agosto de 1873, entre otros.
63
el sello de una fracción que opina que la federación consiste en que haya organismos autónomos
con todos sus inconvenientes, mientras otros creen lo contrario”, Ibdem.
136 “Yo no comprendo tanta impaciência; porque hay leyes las cuales son para el momento, nacidas
de exigências dei momento, y que tienen sobre las demás leyes el carácter de urgência”, en ídem.,
p. 1661. Corroborando los planteamientos anteriores, se expresó también el Sr. Sarda, quien lo hizo
en los siguientes términos: “Si, Sres. Diputados; yo he sido partidário de que se discutiera pronto la
Constitución; pero han llegado momentos tales, como elocuentemente ha expresado el senor Castelar,
que yo no deseo otra cosa sino que se discutan los médios de proporcionar al Gobiemo los hombres,
el dinero y las armas necesarios para concluir con esa guerra que nos deshonra y nos envilece. Lo
que yo siento, Sres. Diputados, es que se traigan proyectos de otro género, y sobre todo que se en-
torpezcan los dei Gobiemo con enmiendas y más enmiendas, sin tener en cuenta que cada minuto
que perdemos brota un arroyo de sangre y un arroyo de riqueza de las abiertas venas de la Patria”,
en ídem, p. 1663.
137 “pero lo cierto es que no había discusión posible entre la izquierda y la derecha sobre el Código
fundamental”, en Ibdem.
138 “y hay otras leyes que son para el porvenir, para mucho tiempo, que se escriben quizá para siglos,
como debe ser una Constitución, aunque en Espana cada tres o cuatro anos escribimos una, y estas
leyes necesitan una gran madurez de juicio, y una gran amplitud en el debate” en Ibdem.
139 ídem, p. 1664.
140 “Articulo 1.° La Câmara se declara en sesión permanente hasta que queden aprobados todos cuan-
tos proyectos de ley tenga el Gobiemo presentados y sean urgentes a juicio suyo, completando la
Mesa. Art 2.° Verificado cuanto se indica en el artículo anterior, se suspenden las sesiones de Cortes
por espacio de dos meses. Art. 3.° Queda desde luego aplazada la discusión dei proyecto de Cons-
titución hasta la nueva reunión de las Cortes”, en Dáro de Sesones, 25 de agosto de 1873, p.1800.
141 “cuando una insurrección federal acaba de sofocarse ensangrentando las calles de muchas de
nuestras hermosas ciudades; cuando esta insurrección ha sido combatida al nombre de orden y de
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gobiemo, ^es posible que las sesiones de esta Câmara continúen, y que el proyecto de Constitución
se discuta, se sancione y pase a ser ley fundamental dei Estado”, en Idem, p. 1801.
142 “Como quiera que observo con sentimiento el estado de la Câmara, y por lo visto me encuentro
solo en esta proposición, como yo no quiero que los Sres. Diputados que hoy voten esta proposición
tengan tnanana que contradecirse en su voto, la retiro”. etirada la propuesta fue hecha propia por
el Sr. Casalduero, quien en la defensa de la misma, explica su actitud, no por acuerdo con la misma,
sino por la necesidad sentida por el mismo de que sea votada la citada proposición. Efectuada la vo-
tación, resultó desechada por 65 votos contra 8, en Idem, pp. 1802 y 1803.
143 “Las Cortes Constituyentes suspenderán sus sesiones el día 5 de Setiembre y las reanudaran el
dia 5 de Noviembre próximo, quedando durante el período de la suspensión encargada la Mesa de
convocarias si lo considerase necesario” en Dáro de Sesones, 29 de agosto de 1873, p. 1892
144 Ibdem.
145 El citado diputado no sólo alude a los distintos posicionamientos esgrimidos en el seno de las Cortes
“Pues contra ese título primero, contra esa clasificación de estados tenida como buena por la mayoría
de la comisión, muchos Sres. Diputados presentaron enmiendas en el sentido de que se acomode la
futura división federal a la actual división por provincias: una hay en que se pide la declaración de
estados a favor de las actuales demarcaciones provinciales, y otras muchas hay en que cada Diputado o
cada grupo de Diputados pide la declaración de estado federal para su província respectiva”, sino que
incluso senala la situación de confrontación existente entre las propias provincias disputándose la capi-
talidad de los nuevos Estados “Otra oposición más honda, otra perturbación más terrible quo esta empezó
a manifestarse en contra de la declaración de estados federales: Las distintas provincias comprendidas
en cada región piden para su capital la capitalidad dei estado y protestan contra la designación de capi-
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talidad si no son ellas las favorecidas”, en Idem, p. 1893. Ver también su réplica al Sr . Muro , así como
el discurso dei Sr . ebullida en Dáro de Sesones, 1 de Septiembre de 1873, pp. 1953 y 1970, res-
pectivamente. Aludiendo a las dificultades esgrimidas por el autor de la proposición para consensuar el
texto constitucional, como consecuencia dei retraimiento de parte de determinadas fuerzas políticas de
la Câmara, se van a pronunciar a lo largo dei debate, tanto de nuevo el Sr. Muro, como el Sr. Corchado
“se dice que no se puede discutir el proyecto constitucional porque las minorias no tomarían parte en su
discusión; se dice que el Sr. íos osas y sus companeros no discutirían el proyecto constitucional; se
dice que el Sr. Becerra y sus companeros tampoco discutirán el proyecto constitucional: se dice, y esto
es algo problemático, que la extrema izquierda no quiere discutir el proyecto constitucional. Yo pregunto
ahora con el Sr. Muro: /.Creéis que después de este interregno parlamentario esas minorias querrán dis-
cutir el proyecto de Constitución? Pues yo digo que no”, en Idem, pp. 1960 y 1963, respectivamente.
146 “No se venga diciendo, Sres. Diputados, que en otras épocas ha habido mayor perturbación que
en la presente, y que sin embargo se discutieron las Constituciones. Así han salido ellas, así se han
redactado y así se han practicado. Además de esto, senores, que en cuanto a la Constitución que
hemos presentado no cabe término de comparación con las otras, pues aqui se perturba y se altera
la organización de Espana”, en Dáro de Sesones, 29 de agosto de 1873, p. 1893. Términos sobre
los que incidiría, asimismo, otro de los autores de dicha proposición, como fue el Sr. Aura Boronat,
quien destacaba la necesidad de calma y reflexión en el debate, ante un texto tan radicalmente trans-
formador como el que se presentaba, en Dáro de Sesones, 1 de septiembre de 1873, p. 1958.
147 “Vayamos cada cual a nuestras respectivas provincias: ahora se han verificado las elecciones de
Ayuntamientos, manana se han de verificar las de diputados provinciales; el país sabe que la Asamblea
en primer término ha de discutir la Constitución; el país sabe que la base de esa Constitución son los
estados regionales. Pues elija el país los hombres que tengan un perfecto conocimiento de la división
territorial, que los envie a las asambleas provinciales; que nosotros, Diputados constituyentes, iremos
a esas corporaciones populares a inspiramos en el más alto sentido, para ver lo que más conviene a
la Patria, a la libertad y a la epública ”, en Dáro de Sesones, 29 de agosto de 1873, p. 1893.
148 Proposición que no fue tomada en consideración, ídem., pp. 1894 y 1906.
149 “pero lo que no podia creer ni sospechar nunca, es que los razonamientos que se expusiesen para
impulsar la Câmara a la suspensión fueran un ataque tan terrible al sistema parlamentario como el que el
Sr. Olías le ha dirigido; ataque el más terrible al sistema parlamentario, y conculcación la más completa
de todos sus princípios, que no otro hombre tiene el asentarse que unas Cortes Constituyentes, reunidas
consiguientemente para formar una Constitución, no se bastan a si propias, y que después, no ya de
elegidos, sino de reunidos aqui los Diputados, es preciso que vuelvan a sus distritos para consultar al país
respecto de su mandato constitucional, y consultar, no ya solo a los miembros dei partido quo los eligió,
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sino que consulten a los indivíduos de los demás partidos, de los partidos enemigos de las teorias y de las
doctrinas políticas que los Diputados constituyentes tienen el deber de sostener aqui, porque a eso han
venido...el Sr. Olías se apresuraba a décimos que la comisión de eforma constitucional era muy federal,
y que cualquiera que lo pusiese en duda no tenía derecho para hacerlo, A mi se me ocurre preguntar al
llegar a ese punto, cuando tantas explicaciones se dan sin que nadie haya preguntado, ^que habrá en el
fondo dei pensamiento de esa comisión de eforma constitucional, que, según confesión hecha por su
presidente desde esos bancos (Senalando a los de la comisión), ha redactado el proyecto de Constitución
federal en cinco dias? Si tan divididos estaban, ^.cómo tan pronto pusieronse de acuerdo? Y si tan pronto
de acuerdo pusieronse, prueba esto indudablemente que el Sr. Olías está en un gravísimo error, y
que todos los indivíduos de la comisión Constitucional ansiaban, comprendían, pensaban y aspiraban a
la federación de igual manera. Después de sentada, Sres. Diputados, semejante declaración, semejante
argúcia, que de argumento no merece el nombre, tan débil es y tan pequena, apelaba el Sr. Olías a otro
argumento más importante y decía: ^hay alguno en esta Câmara qua se atreva a decir, puede sostenerse
qua todos los municípios estarán conformes con la división territorial que nosotros hagamos? jAh,
senores! Si no hemos de hacer Constitución ninguna hasta que todos los municípios estén de acuerdo,
jque pocas Constituciones haremos, que pocas Constituciones hubieranse hecho en el pasado... no bastaba
sublevar, como a mi juicio lo hacen las palabras dei Sr. Olías, no bastaba sublevar al país en contra de los
representantes que ha elegido: era necesario decir algo más; era necesario lanzar aqui una acusación que
no ha sido lanzada jamás contra Câmara alguna por ninguno de sus miembros: la de que estamos aqui
perturbando el país. ^Con que? /,Cómo? ^La discusión perturba el país?..., en Ibídem. pp. 1895 y 1896.
Con gran dureza con el Sr. Olías, se iba a manifestar, asimismo, el Sr. Muro “Y jcosa extrana, senores!
el Sr. Olías, indivíduo de la comisión Constitucional; el Sr. Olías que ha firmado el proyecto de
Constitución; el Sr. Olías, que no ha hecho voto particular sobre la división dei território; el Sr. Olías, que
ha consumido el primer turno en pro dei mismo proyecto; jcosa rara! viene ahora a sublevarse contra su
propia obra, a decir que se ha equivocado y que es indispensable que los Diputados acudan a sus distritos,
consulten a los Ayuntamientos y Diputaciones, y vengan luego aqui a traer las inspiraciones que hayan
recibido!, en Dáro de Sesones, 30 de agosto de 1873,p. 1939. Ver también, pp. 1940y 1941.
150 “indicáis en ella que hasta que la Câmara suspenda sus sesiones el día 5 de Setiembre, se limite
solo a aprobar en este sitio las medidas extraordinárias que sean necesarias en contra de los carlistas.
<,Y sabéis por qué es esto? Os Io diré francamente: porque está sobre la mesa hace mes y medio el
proyecto de secularización de cementerios, porque está dado un dictamen favorable al proyecto de
separación de la Iglesia y dei Estado, únicas medidas revolucionarias quo aqui se han traído por el
Gabinete actual, proyectos que continuaran sobre la mesa ad kalendas graecas, porque yo opino, y
conmigo muchos, que la suspensión de hoy y la disolución son sinónimas, en Dáro de Sesones.,
29 de agosto de 1873, p. 1896. También desconfiaba de las intenciones mostradas por el Sr. Olías,
el Diputado Sr. Muro “Hoy, sin embargo, he leido los considerandos que preceden a la parte dispo-
sitiva de la proposición, y si antes de esta lectura mi convencimiento era grande, si el discurso de S.
S. me había convencido de su falta de franqueza, ahora tengo la evidencia de que se oculta detrás
de esta proposición algo que S. S. no ha querido revelar, porque solo así acierto a explicarme como,
dado el talento de S. S., ha hecho una exposición de motivos que son perfectamente extranos e in-
conducentes al acuerdo que propone en la parte dispositiva”, en Dáro de Sesones., 30 de agosto
de 1873, p. 1939. Ver también Dáro de Sesone., 1 de septiembre de 1873, p. 1959.
151 “Os pido, pues, Sres. Diputados, que teniendo en cuenta todas estas consideraciones, que pesán-
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Sr. Martin de Olías, fue presentada por el Diputado Sr. Orense, en la que solicitaba
se incluyera al final de la anterior “Después de las últimas palabras se anadirá: «Y
también discutirán y votarán precisamente una ley de amnistia para todos los com-
plicados en el movimiento de los cantones federales”152, que después de una agria
discusión resultó desechada153. Fue el dia 2 de septiembre el último que se discutió
sobre la proposición dei Sr. Martin de Olías, la cual no llegó a ser, ni tan siquiera,
objeto de votación, entre otras razones por la propia proximidad de la fecha inicial
contemplada en la misma para la suspensión de sesiones154.
El fracaso de la anterior, no fue óbice para que de nuevo se presentara una nueva
proposición incidiendo sobre el mismo objeto. En esta, firmada, entre otros, por
el Diputado Sr. Morayta, se solicitaba la suspensión de sesiones desde el siguiente
dia en que se aceptara la misma y hasta el dia 2 de enero de 1874155. Abierta la
discusión sobre la nueva proposición presentada, intervendría en primer lugar en
defensa de la misma, el citado Sr. Morayta. De nuevo, uno de los argumentos de-
terminantes sobre el que se sustenta la petición, es la necesidad imperiosa de apro-
dolas en vuestra mente cuanto merezcan, que merecen mucho más de cuanto yo pudiera decir, no
presteis vuestra aprobación a una proposición que, aun llamándola incidental, es el proyecto de ley
que sentencia a muerte a la epública federal de la Nación espanola”, en Dáro de Sesones., 29 de
agosto de 1873, p. 1898. En parecidos términos se va a pronunciar el Diputado Moreno Barcia ,
quien destaca “yo creo que la proposición de clausura es el sudário en que habría de envolverse esta
Câmara en su muerte”, en Dáro de Sesones, 1 de septiembre de 1873, p. 1954.
152 Dáro de Sesones., 30 de agosto de 1973, p. 1925.
153 dem, p.1938.
154 “/Porque no se ha terminado la discusión anterior sobre la proposición dei Sr. Olías de la sus-
pensión de sesiones? /.Porque no ha recaído votación sobre ella? Pues pura y sencillamente porque
aquella proposición estaba mal concebida; porque aquella proposición expresaba un dia fíjo, que
era el 5 de este mes, y la discusión de la misma se quiso que tuviera toda la amplitud necesaria; la
cuestión era tan importante, que se dilato más que lo que su autor el Sr. Olías podia esperar; no pudo
estar concluída para el día 5, y ya pasado este, aquella proposición no respondia fielmente al objeto.
He aqui porque la proposición dei Sr. Olías no continuo discutiéndose”, en Dáro de Sesones, 18
de septiembre de 1873, pp.2378 y 2379.
155 “Las Cortes Constituyentes suspenderán sus sesiones el día siguiente al en que se apruebe este
acuerdo, y las reanudarán el 2 de Enero dei ano próximo de 1874, quedando en tanto autorizada la
Mesa para reunirias antes si lo considerase conveniente”, en dem, p. 2360. Proposición que fue
aceptada por 91 votos contra 53, acordándose que se procediera a su discusión en el acto. En esta
misma sesión de las Cortes, se presentó una nueva proposición, entre otros por el Diputado, Sr.
Blanco Villarta, en la que se solicitaba “no haber lugar a deliberar” sobre la que acababa de apoyarse.
En defensa de la misma, tomó la palabra el citado Sr. Blanco, quien incidió en argumentos ya reite-
radamente esgrimidos, tales como: que la ahora suspensión solicitada terminará convirtiéndose en
disolución, o la intención deliberada de que no se discutiera la Constitución. Dicha última proposi-
ción fue desechada por 100 votos contra 51, en Idem, pp.2362 y 2366.
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V - Conclusiones
ninguno de ellos, a ceder en parte de sus postulados en aras de los supremos intereses
de la Nation. Si un texto constitucional se presume que tiene que tener una vocación
duradera en el tiempo y tiene que dar cabida en su seno a las aspiraciones de la mayoría
de la comunidad sobre la que se proyecta regir, no puede ser más que el resultado dei
consenso de las distintas sensibilidades de la sociedad. De lo contrario, su permanência
o no, dependerá tan sólo de los intereses o afinidades de la fuerza gobemante. La
mirada puesta en la meta final, no les permitió observar las difícultades a superar
durante el camino, y éstas acabaron por absorber las energias de estos caminantes,
que ya con las fuerzas mermadas no fueron capaces de llegar al objetivo final.
Enfrentamientos, divisiones y ninguna homogeneidad entre los miembros de la
Câmara, que obstaculizaron cualquier aproximación en los distintos âmbitos de la
política dei país y que se manifestaron claramente en la inviabilidad de consensuar una
Ley fundamental, que desde sus inicios careció de la más mínima voluntad de las
partes. Ya desde el primer momento, con la constitución de la Comisión redactora
dei proyecto, el proceso estaba viciado.
En tercer lugar, la elaboración de un texto constitucional tan radicalmente distinto a
los modelos constitucionales existentes hasta el momento, no solo en nuestro país sino
incluso en nuestro entorno europeo, con un escaso convencimiento en los ideales
republicanos y aún menos federalistas, con un gobiemo débil, un parlamento dividido
y el retraimiento de distintos grupos; así como con unos diputados, en muchos
casos neófitos en la actividad parlamentaria, dificilmente podia conseguirse con
un plazo de elaboración tan breve como se pretendia.
Como destacaba anteriormente, desde el mismo momento de la propia constitución
de la comisión redactora, ésta nació coja. Tal y como se senala en las páginas
anteriores la idea primera versaba en la conformación de dos comisiones, una
de ellas encargada de analizar y configurar los entes o Estados territoriales que
conformarían la posterior estructura republicana, y una segunda que teniendo en
cuenta las conclusiones de la primera confeccionara el texto constitucional. Pues
bien, como se ha podido observar la primera comisión encargada de presentar la
configuración territorial dei país no llegó a constituirse, cuando ésta era una de
las cuestiones vertebrales dei nuevo régimen político, al tratarse dei tema que más
enmiendas suscito, así como más enconadas discusiones en el breve período de
tiempo que las Cortes lo permitieron, como también hemos podido comprobar
Una división territorial con la que muy pocos estaban de acuerdo. Los partidos
monárquicos y republicanos unitários no la compartían, y entre los republicanos
federales, tan sólo el grupo de los benevolentes participaban en mayor o menor
medida dei modelo proyectado, ya que los intransigentes se inclinaban hacia un
esquema de constitución de los nuevos Estados federales radicalmente opuesta a
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Todas estas cuestiones nos deben hacer reflexionar sobre cuáles fúeron los errores
cometidos en aquella experiencia, y al menos que nos sirvan para no reproducir,
si no los mismos ya que las circunstancias que se dieron en aquel momento no
son extrapolables a realidades diferentes, si considerarlos para evitar situaciones
de confrontación en el futuro.