No iba a poner nada, pero al final sí. Si pasó por acá y por acá la conocieron varios, justo es también que desde acá nos despidamos de ella y le mandemos un beso enorme a su familia.
Para decir, poco hay, pero para recordar, mucho y muy lindo; en el corazón se queda pues María Amelia, y en la intención del abrazo, por el momento lejano, están Daniel (su nieto) y el resto de la familia.
Lo demás, que no es poco ni aburrido, está en su blog.
Pst... A los de mi familia los vas a reconocer seguro. Y si ves barriletes desde arriba, haceles vientito.