Hola, buenas y calurosísimas tardes, incluso aquí, a orillas del Cantábrico. Esto amenaza tormenta de las buenas.
Y para amenizar la espera de si llueve o no, os quiero enseñar un álbum que he hecho para mi marido, que acaba de cumplir 50 años. Hacer algo para un hombre es complicado, ya que no puedes abusar de adornos con flores, lazos, etc. El público masculino es bastante austero en ese sentido. Así que tocó ponerle imaginación, y el resultado es el siguiente:
La base del álbum es muy sencilla: Partimos de una cartulina de 30x30, que dividimos en cuatro partes iguales, y quitamos el cuadrado superior derecho. Nos quedan así tres partes que forman una gran L, con todo su espacio a nuestra disposición para decorar. Esta primera foto aque os enseño es la portada con el álbum cerrado.
Esta es la portada y la contraportada, con el álbum abierto. En la contraportada, hice un bolsillo a partir de un sobre cortado por la mitad, para meter dentro una tarjeta con fotos.
Estas son las tres partes interiores del álbum. Como véis, hay bastante espacio para fotos y adornos.
Esta es la parte de detrás del cuadrado inferior derecho.
Y ésta es la parte trasera, que ya habéis visto antes, con la tarjeta que va en el interior del bolsillo.
Pues éste es el trabajo que me ha tenido entretenida durante un tiempo, y que os imagináis que tuve que hacer a escondidas, para que el homenajeado no descubriera nada. Y además, cuando lo tenía a medias, me dijo mi marido: "Oye, ¿a mí no me harás nada de scrapbooking, verdad?. No hace falta decir que pensé "¡Upss, tierra trágame...!
Pero al final le gustó, tanto que se lo llevó a la oficina para enseñarlo. Si es que en el fondo son tiernos, jaja.
Gracias por atenderme y visitarme en mi blog. Espero que os guste y lo pongáis en práctica, que ya veis que es muy facilito, y resultón.
Un beso enorme.