Macario
Por desgracia, soy un desconocedor de la obra de Roberto Gavaldón, uno de los directores de la Época de Oro del Cine Mexicano, un periodo de tiempo comprendido entre mediados de los años treinta y finales de los cincuenta, durante los que la producción de la industria cinematográfica mexicana, era la más potente de todos los países de habla hispana.
Después de leer un par de biografías sobre su vida y obra, he encontrado varios puntos confusos o incluso contradictorios, pero parece claro que tuvo que viajar continuamente durante su juventud y que con apenas 17 años, viajo a la ciudad de Los Ángeles, para comenzar sus estudios como mecánico dental. Durante ese periodo, parece que se inició su interés por el cine, que fue el que probablemente le hizo viajar a Hollywood, donde se inició en el séptimo arte. Sin quedarme muy claro, a que se dedicó exactamente en la meca del cine (posiblemente ayudante de dirección), regresa a su país natal en el año 1932, empezando a trabajar junto a varios directores mexicanos como asistente y también como actor, siendo su debut en la dirección y empezando a dirigir películas en comandita con otros directores como “Cielito Lindo” (1936) junto a Robert Quigley, “El Conde de Montecristo” (1942) junto a Chano Urueta o “Nana” (1944) al lado de Celestino Gorostiza. Su primer trabajo como director en solitario fue “La Barraca” (entre 1944 y 1945 según distintas fuentes) adaptación de la novela de Vicente Blasco Ibáñez, film que fue muy alabado y con el que ganó diversos premios, iniciando una abultada carrera como director, de la que por desgracia, poco puedo comentar, ya que puedo contar con los dedos de una mano, las películas que he podido ver.
Por lo que he podido leer, se trata de un director con fama de perfeccionista y que parece tener una cierta tendencia por los films de temática oscura, aunque fue acusado por la crítica, de preocuparse más por la estética que por el contenido. En cualquier caso, yo poco puedo juzgar al respecto en ese sentido, pero dejo enlace a una de las páginas más completas y en castellano que he encontrado al respecto, donde sin duda, el que esté interesado en la vida y obra de este director, podrá informarse en condiciones:
http://cinemexicano.mty.itesm.mx/directores/gavaldon.html
ROBERTO GAVALDÓN
La música, obra del compositor Raúl Lavista, no es que sea demasiado memorable, limitándose a acompañar de un modo discreto y correcto la acción, pero siendo uno de los aspectos que más desapercibido me ha pasado durante los visionados del film y siendo actualmente, prácticamente incapaz de recordarla con exactitud, a unas horas escasas de su último visionado, por lo que como puede deducirse, no es precisamente el punto fuerte de la película. Ignoro si también es obra del señor Raúl, pero quizás el momento musical más destacable, es una especie de balada donde nos hablan de Macario, que resulta un momento de lo más logrado para mi gusto y eso que no soy nada aficionado a los musicales, pero en apenas un par de minutos, resume a la perfección, como prospera el humilde campesino.
En cuanto a sus intérpretes encontramos desde a algunas estrellas del cine mexicano de aquella época, empezando por su protagonista el señor Ignacio López Tarso o Enrique Lucero, que interpreta a la muerte. Pero junto a ellos, no deja de resultarme sorprendente, encontrar a otros que prácticamente debutaban en ese film como es la protagonista femenina interpretada por Pina Pellicer que logra (en mi opinión) una de las mejores interpretaciones del film.
El señor Ignacio López Tarso, nacido el 15 de enero del año 1925, es uno de los actores mejor considerados del cine mexicano. Mostrando desde muy temprana edad, interés en el mundo de la interpretación, aunque por los aprietos económicos de sus padres, tuvo que ingresar en un seminario, en el que tuvo sus primeras experiencias teatrales, por medio de un grupo teatral, organizado por un seminarista procedente de los USA, aunque su falta de vocación religiosa, hizo que lo abandonara antes de iniciar el servicio militar, en el que alcanzó el empleo de sargento 1º. Aunque por lo que tengo entendido, tampoco le fue mal durante su experiencia castrense, decidió que tampoco era esa su vocación y así siguió ganándose la vida con diversos trabajos, que le proporcionaron más requiebros que pecunio, hasta que a finales de los años cuarenta, ingresa por fin en la Academia de Arte dramático del Instituto Nacional de Bellas Artes, iniciando una prolífica trayectoria como actor tanto en teatro, como en cine y televisión. Como hablar de su dilatada trayectoria profesional, puede ser una tarea bastante ardua, dejo unos enlaces, para el que quiera informarse en mayor profundidad, sobre su vida y obra:
http://cinemexicano.mty.itesm.mx/estrellas/lopez_tarso.html
http://es.wikipedia.org/wiki/Ignacio_L%C3%B3pez_Tarso
En cuanto al personaje que interpreta, el sufrido Macario, se trata del típico personaje, que bien podría protagonizar cualquier cuento, un pobre campesino, con una familia numerosa, que a duras penas es capaz de alimentar, que a raíz de obtener cierto poder, empieza a hacer un uso inapropiado del mismo para enriquecerse. Con todo, a pesar de que Macario es mostrado a veces como un personaje avaricioso, nunca llega al extremo de ser despiadado, como cuando le vemos devolver el dinero a una viuda, cuyo marido fue incapaz de curar, arrebatándolo de las manos del rico Don Ramiro.
A PESAR DE SUS ERRORES, MACARIO NO ES MOSTRADO EN NINGÚN MOMENTO COMO UN SER DESPIADADO
Aparte, sus actos quedan justificados en gran medida, por su durísima vida, impresión que queda reforzada cuando de espaldas a esa aparición divina, le explica que el significado del pavo que piensa comerse en solitario: “todo el hambre de mi vida, todo lo que he dado, todo lo que no he recibido”, de modo que a pesar de todo, termina siendo un personaje, con el que aunque no seamos capaces de identificarnos, si nos despertará cierta comprensión y simpatía.
IGNACIO LOPEZ TARSO COMO MACARIO
La actriz Pina Pellicer (Josefina Yolanda Pellicer de Llergo), nació el 3 de abril de 1934 y por desgracia, a pesar de tener una carrera relativamente exitosa, incluyendo un papel en el film “El Rostro Impenetrable” (1961) de Marlon Brando al año siguiente de su debut en un rol protagonista en el film “Macario” (1960) de Roberto Gavaldón, no llegó a trabajar ni en una docena de películas y no fue por falta de talento, sino porque se suicidó con apenas treinta años de edad. Sin duda una lástima, ya que se trataba de una actriz francamente prometedora. Para saber más sobre su vida y obra, dejo dos enlace a la wikipedia:
http://es.wikipedia.org/wiki/Pina_Pellicer
Su personaje, es el de la sufrida esposa del protagonista, que lejos de ser un mero florero, nos es presentado con el de una mujer fuerte y decidida, que es el “pepito grillo” de Macario, (llega a pedirle que abandone la nueva vida de lujo para volver a su humilde cabaña) y siendo en muchos aspectos, la verdadera “heroína” del film, ya que en momento alguno y a diferencia de su marido, la vemos lamentarse por nada y ni siquiera llegaremos a conocer su nombre en momento alguno.
PINA PELLICER
ENRIQUE LUCERO COMO LA MUERTE
El film nos muestra a Macario, un pobre leñador, que a pesar de trabajar de sol a sol, a duras penas se las apaña para conseguir alimentar a su familia.
MACARIO ES UN POBRE LEÑADOR
QUE A PESAR DE TRABAJAR DE SOL A SOL, A DURAS PENAS CONSIGUE ALIEMENTAR A SU FAMLIA
Quiere la casualidad, que durante la fiesta de los difuntos, (una celebración, durante la que las familias hacen ofrendas de velas y comida a sus familiares muertos) al hombre más rico del pueblo, se le estropee el horno y envíe a cocinar media docena de guajolotes (pavos) al horno donde el hambriento Macario, va a vender su leña.
DURANTE UNA CELEBRACION, AL RICACHON DEL PUEBLO SE LE ROMPE EL HORNO Y ENVIA A COCER UNOS GUAJOLOTES (PAVOS)
AL HORNO DONDE MACARIO VENDE SU LEÑA
La combinación entre su deseo por los guajolotes y su miedo a la muerte, le producen una extraña pesadilla, al despertar de la cual, toma la firme determinación, de no volver a probar bocado, hasta poder comerse un guajolote él solo, sin compartirlo con nadie.
LA COMBINACIÓN ENTRE SU DESEO POR EL MANJAR Y SU MIEDO A LA MUERTE, LE PROVOCAN UNA EXTRAÑA PESADILLA
Y AL DESPERTAR DE LA MISMA, TOMARÁ LA FIRME DETERMINACIÓN DE NO VOLVER A PROBAR BOCADO, HASTA PODER COMERSE UN GUAJOLOTE EL SOLO
Su sufrida esposa, conseguirá agenciarse y cocinar un guajolote y con él, marcha Macario al monte dispuesto a disfrutar del banquete en solitario, pero tres personajes, se le aparecerán: en primer lugar el diablo ataviado como un rico hacendado, poco después dios encarnado en un humilde anciano y por último la muerte, en la forma de un campesino no muy distinto del propio Macario.
SU SUFRIDA ESPOSA, CONSEGUIRÁ NO SIN POCAS FATIGAS EL ANIMAL
MACARIO MARCHA AL BOSQUE PARA COMERSE TRANQUILAMENTE SU FESTÍN, PERO TRES PERSONAJES SE LE APARECERAN INTENTANDO COMPARTIRLO
EL DIABLO
DIOS
Y LA MUERTE
Macario, decide compartir el festín con la muerte, que en agradecimiento, le hace entrega de un agua con la propiedad de devolver la salud a cualquier moribundo independientemente de su estado, siempre que la muerte, no tenga motivos para reclamar su vida, apareciendo en ese caso, a la cabecera de la cama del moribundo.
MACARIO DECIDE COMPARTIR SU FESTIN CON LA MUERTE
QUE EN AGRADECIMIENTO, LE ENTREGA UN AGUA
QUE HARÁ RECUPERAR LA SALUD A CUALQUIER MORIBUNDO, SIEMPRE QUE ELLA NO TENGA MOTIVOS PARA OPONERSE EN CUYO CASO, SE LE APARECERÁ A LA CABECERA DE LA CAMA DEL YACIENTE
El campesino, no tarda en poner en práctica los poderes del regalo de la muerte, lo que hace que corra la voz sobre su habilidad sobrenatural, con lo que la familia pronto prosperará… lo que no tardará en desatar las envidias del médico del pueblo, que pondrá el caso en conocimiento de la Santa Inquisición.
EL CAMPESINO NO TARDARÁ EN UTILIZAR EL AGUA HACIENDO QUE EL RUMOR SOBRE SUS PODERES CORRA DE BOCA EN BOCA
CON LO QUE SU FAMILIA, NO TARDARÁ EN PROSPERAR
AUNQUE A CAMBIO DE DESPERTAR LAS ENVIDIAS DEL CARPINTERO Y SOBRETODO DEL MÉDICO DEL PUEBLO, QUE LE DELATARÁ ANTE LA INQUISICIÓN
La inquisición, no tarda en apresar a Macario y someterle a un proceso, en el que terminará quemado por brujo en el peor de los casos o con la lengua cortada por embaucador en el mejor. ¿Conseguirá el campesino salir con bien de semejante trance ?.
EL SANTO OFICIO, NO TARDA EN APRESAR A MACARIO
¿CONSEGUIRÁ SALIR CON BIEN DEL MISMO?
Queda claro, en cuanto empieza a verse esta película, que el verdadero protagonista de la misma, va a ser la muerte y no sólo por los numerosos esqueletos y calaveras de la celebración del día de los muertos, que son mostrados ya durante los créditos iniciales, sino en varios frases que podemos escuchar a lo largo del film como : “la muerte nos da mucho trabajo”, “pasamos la vida muriendo de hambre” o “nacemos para morirnos”.
LA MUERTE
CASI PARECE LA AUTÉNTICA PROTAGONISTA DEL FILM
Pero ni por asomo, ese es el único tema que se trata de forma más o menos directa en el film. La película, en el fondo, no deja de ser una fábula (tengo entendido que incluso se basa en una novela de Bruno Traven, que adapta un cuento de los Hermanos Grimm ) y como tal, trata sobre temas moralizantes, como la avaricia, que nos es mostrada con toda claridad corrompiendo a Macario desde el momento en el que le dice a un acaudalado personaje “en cuanto valora usted la vida de su mujer” o la envidia, en el personaje del médico, que espoleado por esta, azuza al santo oficio contra el hombre que le está dejando sin clientela y que alcanza su cenit, en el momento en el que detenido Macario, corrige el cartel de su negocio cambiando el “aquí despacha” por “aquí despachaba” o del cine social, pues no creo que sean casuales, varios momentos en los que se muestra a los pobres (encarnados por Macario o su familia) separados por barrotes de manjares que no pueden alcanzar, o que el personaje del demonio, nos sea presentado como un rico hacendado.
LA PELÍCULA TOCA TEMAS COMO LA AVARICIA
LA ENVIDIA
O INCLUSO LA CRÍTICA SOCIAL
A pesar de ser una película de corte fantástico (como suelen ser las fábulas), los FX son bastante limitados y primitivos, limitándose a un par de transparencias cuando entra en escena el personaje de la muerte o durante el macabro sueño de su protagonista o alguna desaparición, lo que no significa que estos sean malos, sino que la historia no precisa de grandes alardes en ese sentido.
A PESAR DE SER UN FILM DE TEMÁTICA FANTÁSTICA LOS FX
SON MAS BIEN DISCRETITOS, AUNQUE LA HISTORIA TAMPOCO PRECISA DE GRANDES ALARDES EN ESE SENTIDO
La fotografía, es bastante peculiar, con una gran cantidad de primeros planos para los personajes protagonistas (Macario, su esposa y la muerte), especialmente en los momentos de mayor dramatismo, pues prácticamente, son los dos únicos personajes en mostrar emociones positivas, ya que cuando la cámara se centra en el resto (la muerte, Don Ramiro, dios, el diablo, ) suele ser para mostrar personajes o actitudes negativas (como el diablo intentando tentar a Macario o a Don Ramiro regateando con la salud de su esposa), o a dios tratando de poner a prueba al protagonista, para que no pueda comerse tranquilamente su guajolote. Quizás el personaje más misterioso, sea la muerte, que parece observarlo todo ente expectante y divertida, mostrándose por momentos juguetona (como cuando no parece tener prisa en posicionarse ante el lecho de la esposa de Don Ramiro) y por otros seria y aleccionadora.
LOS PRIMEROS PLANOS CASI PARECEN RESERVADOS PARA MACARIO
Y SU ESPOSA EN UNA PELÍCULA DONDE ESTOS NO ABUNDAN
SALVO PARA ALGUNOS PERSONAJES DURANTE MOMENTOS PUNTUALES, EN LOS QUE PARECE QUE SE QUISIERA SUBRAYAR ESA IMAGEN
Aunque por su argumento, uno pueda pensar, que se trata de la típica película que bien podría parecer una obra de teatro con claro predominio de escenarios interiores, no faltaran algunos exteriores que hacen gala de una preciosista fotografía.
NO FALTARAN ESCENARIOS EXTERIORES
QUE HACEN GALA DE UNA PRECIOSISTA FOTOGRAFÍA
El film está lleno de momentos de gran fuerza visual, con imágenes entre simbólicas y premonitorias, como esa tormenta que hace que toda la familia se agrupe asustada en la cama del matrimonio protagonista, antes de que Macario sea apresado por el Santo Oficio, o al campesino aferrando ansiosamente el recipiente con el agua que le dio la muerte, por no hablar (para no desvelar el final) de la última y en parte enigmática imagen que nos es mostrada al final de la película.
EL FILM ESTA LLENO DE MOMENTOS LLENOS DE SIMBOLISMO
Y PREMONITORIOS
Resumiendo, se trata de una película a caballo entre el drama rural y la fábula fantástica, que se sustenta mayormente en la interpretación de sus personajes, por lo que a pesar de ser un film de los años sesenta, dudo seriamente, que pudiera mejorar si alguien rodara un remake moderno con mayor despliegue de medios técnicos. Como suele ocurrir en estos casos, el que quiera verla, encontrará una crítica a la iglesia o una simple historia moralizante sobre las consecuencias de comerciar con la vida y la muerte o sobre la responsabilidad que implica el utilizar un gran poder para el enriquecimiento personal, todo eso y más, puede encontrarse en esta película, que personalmente no dudo en recomendar, aunque difícilmente satisfará, al que busque mero entretenimiento por medio de la espectacularidad técnica.
Etiquetas: cine fatastico, cine mexicano