La Profecia de Los 2300 Dias 2
La Profecia de Los 2300 Dias 2
La Profecia de Los 2300 Dias 2
y Mañanas
Profecía
Parte 2
de los
2300
días
Puesto que los 2.300
años se proyectan
hasta bien avanzada
la era cristiana, el
santuario no puede
referirse al templo de
Este era el
Jerusalén que fue “santuario del
destruido en el año primer pacto”
(C.S. 465, p 2).
70 d. C.
¿Sobre que modelo se basaba el Santuario del
primer pacto?
“Mira”, dijo el Señor, “hazlo
conforme al modelo que se
te mostró en el monte”
( Éxodo 25:40).
Según (Heb.8:1),
Cristo es el sumo
sacerdote del
Santuario celestial.
El eje central de Daniel 8:14 es que: “el
santuario será purificado”.
Hebreo 8:10.
Por lo cual, este es el pacto que haré con la casa de
Israel después de aquellos días--dice el Señor--:
Pondré mis leyes en la mente de ellos, y sobre su
corazón las escribiré; y seré a ellos por Dios y ellos me
serán a mí por pueblo
“Acordarte has del día del reposo, para santificarlo: Seis días
trabajarás, y harás toda tu obra; Mas el séptimo día será
reposo para Jehová tu Dios: no hagas en él obra alguna, tú,
ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni
tu extranjero que está dentro de tus puertas: Porque en seis
días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas
que en ellos hay, y reposó en el séptimo día: por tanto
Jehová bendijo el día del reposo y lo santificó”.
Vieron que el sábado era un monumento
conmemorativo de la creación, porque los dos
textos decían lo mismo, por tanto,
descubrieron la importancia que tenía
obedecer los Mandamientos de Dios, esto
incluía lógicamente, la santificación del
sábado como el verdadero día de reposo,
según lo registraron los apóstoles en sus
escritos (Lea 1 Juan 2:3-4).
Atrio en derredor
del Santuario
El Templo de Jerusalén estaba dividido en cuatro atrios
concéntricos, que convergían, por así decirlo, en el Lugar
Santísimo.
Para él el Templo es la
Iglesia Cristiana, el Pueblo
de Dios. (1 Corintios 3:16)
dice: ¿No sabéis que sois
templo de Dios y que el
Espíritu de Dios habita en
vosotros?
Encontramos esta figura repetidamente en el Nuevo
Testamento.