Sandinismo

Descargar como pptx, pdf o txt
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 18

REVOLUCIÓN

SANDINISTA
Proceso protagonizado por
los sandinistas que dio
comienzo en 1978, por medio
del cual se puso fin a la
dictadura ejercida en
Nicaragua por la familia
Somoza, a la cual se
reemplazó por un gobierno
de izquierdas.
Surgió dentro de la
corriente del
movimiento de
liberación nacional y se
proclamó inspirada en
el legado nacionalista y
antiimperialista de
Augusto C. Sandino, del
que tomó el nombre de
«Sandinista»
ORÍGENES DEL SANDINISMO
El (FSLN), fue fundado en 1962 por un grupo de estudiantes
universitarios encabezados por Carlos Fonseca, Silvio Mayorga y
Tomás Borge. Éstos recibieron el apoyo del dirigente revolucionario
cubano Fidel Castro Ruz, ofrecido en parte por el papel que había
desempeñado Luis Somoza Debayle en el desembarco de Bahía de
Cochinos de 1961. A pesar de la influencia de la ideología marxista y
leninista, el FSLN no tenía un vínculo directo con el Partido
Comunista de Nicaragua.
Los sandinistas se oponían a la
familia Somoza y a la presión de
Estados Unidos sobre Nicaragua,
y reclamaban una reforma
política y económica radical que
condujera a la redistribución de
la riqueza y el poder. Su proyecto
era respaldado por estudiantes y
campesinos, pero fueron
derrotados por la Guardia
Nacional en las primeras
acciones de la guerra de
guerrillas, que costaron la vida a
Fonseca y Mayorga.
Década 1970
A mediados de la década de 1970, destacados miembros del mundo
empresarial y de la Iglesia católica comenzaron a compartir el
descontento ante el régimen de Anastasio Somoza Debayle. La mayor
parte de la oposición política se unió en un solo frente encabezado
por Pedro Joaquín Chamorro, asesinado en Managua
Este acontecimiento provocó desórdenes y manifestaciones contra el
gobierno durante semanas, además de una huelga nacional e intentos
aislados de levantamientos armados. A pesar de que Somoza
mantenía el control, su régimen se tambaleaba y la oposición
internacional aumentaba progresivamente.
En el mes de agosto, un grupo de comandos sandinistas asaltó el
Palacio Nacional de Managua y tomó como rehenes a varios
miembros del Congreso nicaragüense. Los sandinistas
negociaron la liberación de varios prisioneros del FSLN, la
publicación de su llamada a la rebelión y un salvoconducto para
que los integrantes del comando abandonaran el país. El éxito
de la incursión sandinista alentó a las fuerzas contrarias a
Somoza y estallaron levantamientos en todo el país. Las fuerzas
somocistas aplastaron estas rebeliones con gran brutalidad,
bombardeando incluso objetivos civiles. Estas operaciones
fueron la causa de que cientos de nicaragüenses se unieran al
FSLN y de que aumentara la presión internacional para
encontrar una solución negociada al conflicto.
La lucha se reanudó en mayo de 1979: los sandinistas anunciaron una
ofensiva final e hicieron una llamada a la rebelión nacional. En esta
ocasión, la Guardia Nacional no consiguió controlar la situación y los
rebeldes se apoderaron de numerosas zonas del país. Se produjeron
batallas en las principales ciudades, donde los aviones de la Guardia
Nacional bombardearon los barrios en los que la población apoyaba a
los sandinistas.
Cuando la capital del país, Managua, se encontraba rodeada por las
tropas revolucionarias, Somoza abandonó el país y la Guardia Nacional,
quedó desarticulada.

• El 19 de julio, los sandinistas entraron en Managua y se hicieron con


el control en Nicaragua.
GOBIERNO REVOLUCIONARIO
Desde que los sandinistas tomaron el poder, tuvieron que
hacer frente a una oposición armada. En un principio se
trataba únicamente de pequeños grupos de antiguos
miembros de la Guardia Nacional, estas fuerzas recibieron
formación militar a cargo de oficiales argentinos. Cuando
aumentó la oposición a la política del FSLN, se unieron otras
formaciones al movimiento armado rebelde. Entre ellos, se
incluían líderes empresariales, hacendados. A este
heterogéneo grupo se le denominó contra
(contrarrevolucionarios)
Estas medidas debilitaron la frágil economía nicaragüense,
a la vez que los ataques de la contra ocasionaban pérdidas
en la Agricultura, el Comercio y dañaban la infraestructura
del país. Cuando el conflicto se agravó y los
enfrentamientos se generalizaron, decenas de miles de
nicaragüenses se exiliaron y muchos más fueron obligados
a abandonar sus hogares y trasladarse a otras zonas del
país a causa de la violencia.
Los sandinistas respondieron a las amenazas organizando
un ejército; recibían armas de la Unión Soviética y Cuba,
instituyeron el servicio militar obligatorio, el gobierno
sandinista comenzó a desviar fondos destinados a
programas sociales y económicos al presupuesto de
defensa, se suspendieron algunas libertades civiles y en
ocasiones se encarceló a los opositores políticos y se
restringió la libertad de prensa.
Negociaciones de paz
A pesar de su preocupación por la política sandinista, la mayoría
de los países latinoamericanos se oponían a los intentos de
Estados Unidos por derrocar al gobierno de Nicaragua. En 1987,
el presidente costarricense, Óscar Arias Sánchez, promovió un
encuentro de presidentes centroamericanos para buscar
soluciones a los conflictos de Nicaragua y El Salvador que
culminó en el llamado Acuerdo de Esquípulas de agosto de ese
año. El resultado de este plan de paz fueron las negociaciones
celebradas entre el FSLN y la contra
Las presiones para que se pusiera
fin a la guerra eran cada vez
mayores. La economía de Nicaragua
estaba hundida y el país se había
convertido en la nación más pobre
de Centroamérica. El costo humano
de la lucha fue atroz. La URSS tenía
que hacer frente a la agitación
política y económica que recorría el
país, por lo que recortó su ayuda a
los sandinistas, Los sandinistas
acordaron celebrar elecciones bajo
supervisión internacional como una
condición de las negociaciones de
paz. Confiaban en obtener la
victoria y en que Daniel Ortega
fuera elegido presidente.
• Los catorce partidos de la oposición se unieron para formar
la Unión Nacional Opositora (UNO). La oposición
generalizada al servicio obligatorio y la esperanza de
conquistar la paz llevaron a la victoria a la UNO
• Después de varias negociaciones, el FSLN aceptó su
inesperada derrota. Los sandinistas se convirtieron en el
principal partido de la oposición y aún controlaban gran
parte de las Fuerzas Armadas. El FSLN conservó una
considerable influencia política, pero su candidato, Daniel
Ortega, fue nuevamente derrotado en las elecciones de
1996
Vuelta al poder
En las elecciones presidenciales llevadas a cabo el 5 de noviembre de 2006 el
candidato sandinista, Daniel Ortega, vence con un 38% de los votos.
Con esta victoria se pone fin a 16 años de gobiernos neoliberales y
conservadores
Las primeras acciones de gobierno del FSLN fueron el restablecer la gratuidad
de los servicios de Educación y Salud. En educación, se prohibió el cobro en las
escuelas públicas, de matrículas, mensualidades, material escolar y otros
insumos. En Salud, se eliminaron las consultas privadas en los centros públicos
y se restableció la gratuidad de los medicamentos, las operaciones quirúrgicas
y las pruebas clínicas que se realizaban en los centros sanitarios dependientes
del Estado
Legado de la Revolución
La Revolución provocó cambios profundos y duraderos en
Nicaragua. La dinastía somocista, que había gobernado el país
como una hacienda privada durante 40 años, fue derrocada, y la
poderosa Guardia Nacional desarticulada. El nivel de analfabetismo
se redujo significativamente y los grupos marginados, como las
mujeres, los jóvenes y la población rural participaron más
activamente en la vida del país. Las regiones de la costa atlántica,
pobladas por misquitos, alcanzaron un cierto grado de
autogobierno, hasta el punto de que en 1989 se crearon dos
regiones autónomas: Atlántico Norte y Atlántico Sur.
Después de décadas de dictadura y de guerra civil, emergió un gobierno
democrático que logró realizar el primer proceso pacífico de transición
política de la historia de Nicaragua. Sin embargo, el intento de
reestructurar la economía estableciendo un sistema mixto de empresa
privada y de control estatal al estilo socialista resultó desastroso.
Nicaragua se vio transformada radicalmente por la experiencia de
la Revolución, que la convirtió en una nación más libre, pero también
más pobre y más dividida. Más de seis años después de que los
sandinistas abandonaran el poder, la nación aún trataba de recuperarse
del caos económico y de alcanzar la reconciliación nacional tras la
agitación política de la década de 1980.

También podría gustarte