Diapositiva Analisis Del Museo

Descargar como pptx, pdf o txt
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 40

El Museo Tumbas Reales del Seor de Sipn, en Lambayeque, al norte del Per, obra del

arquitecto Celso Prado Pastor, muestra en detalle los contenidos de este hallazgo y es uno de los
ms emocionantes museos histricos en el Per, tanto por la extraordinaria calidad de la muestra
que all se expone, como por la museografa, que recrea la aventura de los arquelogos que
descubrieron el ms importante tesoro funerario de las Amricas.

El descubrimiento de la
tumba del Seor de
Sipn, gobernante de la
cultura Mochica en Per,
es, junto con los
Guerreros de Terracota
en Xian, China, uno de
los ms importantes
hallazgos arqueolgicos
delas ltimas dcadas.
La portada del New York
Times, entre las muchas
publicaciones
internacionales que le
dedicaron artculos,
resaltaba la frase Hazte
a un lado, Tut en
referencia a la famosa
tumba egipcia de
Tutankamn.

El prestigioso arquelogo Dr. Walter Alva, entonces director del Museo Brning en Chiclayo, fue informado
de la recuperacin de diversas joyas y artefactos de manos de saqueadores. Entre ellos se encontraban
impresionantes piezas de oro de la cultura Moche que haban sido encontradas en la zona de Huaca
Rajada, cerca de Sipn, al norte del Per. Era 1987, y el Per atravesaba por una dura crisis econmica,
adems del azote del terrorismo.

La limitada dotacin
policial no se daba
abasto para
controlar el saqueo
constante de las
tumbas. Entonces,
con un poco de
apoyo privado y
mucho entusiasmo,
Alva y un grupo de
arquelogos
iniciaron
excavaciones
arqueolgicas en la
zona antes
mencionada.

El Seor Moche, el equivalente al Inca de esta cultura, ya que tena poderes administrativos y religiosos. El
monarca haba sido enterrado con un impresionante atavo de joyas de oro y plata, pero adems con sus
esposas, un nio, dos llamas, un perro, un soldado (al que se le haba amputado una pierna) y un viga,
dispuestos en sucesivas cmaras hechas de madera de algarrobo.

No solamente se encontr una tumba sino, posteriormente, un total de 18 esqueletos ataviados, que
permitieron dar un nuevo enfoque al conocimiento que se tena de la cultura Moche.
Luego de 1500 aos los vestigios del monarca estaban bastante deteriorados, por lo que para su
recuperacin y restauracin se cont con la cooperacin alemana.

Mientras tanto, haba que buscar un terreno para construir un museo apropiado que albergara semejante
descubrimiento (no faltaron funcionarios que quisieron acondicionar edificios existentes, pero Alva insisti
en que se llevara a cabo un museo ).

La cooperacin suiza don


una quinta parte del
presupuesto, pero al ser
requeridos ms fondos el
restaurado Seor de Sipn
inici un recorrido por
Norteamrica, Asia y Europa,
convirtindose en una
exposicin bastante
concurrida durante su periplo.
Finalmente el gobierno
peruano complet la partida
presupuestal y don un
terreno de 7 has. en
Lambayeque, pequea
ciudad que sin embargo
cumpla las condiciones
requeridas para acoger este
equipamiento, y que sera
beneficiaria del gran impacto
que el museo supondra.

EMPLAZAMIENTO

El museo se ubica en la
pequea ciudad de
Lambayeque, a 10 km
de Chiclayo. Dada la
generosidad del rea del
terreno el edificio se
retira de la va, lo cual
favorece su
contemplacin.

Precisamente, el
arquitecto se vale de los
estacionamientos y de
un amplio jardn de
csped para establecer
un mbito espacial
intermedio entre el
museo y la va principal.

Es obvia la inspiracin del proyectista en temas mochicas: las rampas, los taludes, la forma
piramidal y masiva del edificio, el color, el uso de una plaza hundida previa, etc. son reminiscentes
de la arquitectura monumental moche.

No pareci, que en general el arquitecto haya cado en el facilismo de copiar elementos icnicos y
adosarlos como pastiches en un edificio anodino. Por el contrario, me parece una obra de arquitectura
contempornea, con expresin y sintaxis propias, y cuyo homenaje al legado histrico ha pasado por un
estudiado proceso de abstraccin.

La fachada del lado Este es de color rojizo, masiva y corpulenta, rtmicamente dividida por unas
bruas amarillas, que acompaan la pendiente y al mismo tiempo evidencian la pensada
modulacin del edificio. Los colores del conjunto recuerdan tambin a los utilizados en la Huaca de
la Luna.

La fachada resalta la forma de los prismas que se engarzan a 45 grados, dejando leer la geometra
cuadrada de su generatriz. En ellos se ubican cinco esculturas de bronce que replican los estandartes
hallados en la tumba.

A la fachada este se contrapone la cara


sur, ms escultrica y transparente, que
enfrenta a la plaza hundida. Aqu se
hace clara la colisin de los prismas que
generan entre s el espacio para una
mampara trabajada con una trama
metlica azul girada, que conforma la
salida del museo. Sera sta acaso
una referencia a los paos que se
encuentran en los murales de la Huaca
de la Luna?

En todo caso, hay quienes critican esta puerta por tener un lenguaje postmodernista o tambin por
evidenciar que el edificio es hueco, y no macizo como una autntica pirmide moche.

Personalmente creo que el tema del estilo


de la puerta es secundario. Lo que s, si
alguna crtica tuviera que hacerle al edificio
es que la espectacular parafernalia
volumtrica del exterior no se evidencia
claramente desde el interior, y como se
podr evidenciar en el estudio de las
plantas, la organizacin espacial es
bastante simple, aunque por otro lado
devela un gesto de humildad del arquitecto,
al declinar cualquier protagonismo del
continente a favor del precioso contenido.

La plaza hundida, adems de ser una expansin a la salida del museo, es otra referencia a la arquitectura
moche. Sin embargo, un elemento contemporneo es la modulacin, que se hace evidente en la trama
amarilla de los pisos y que corresponde con las bruas del conjunto.

Otro elemento interesante en el volumen es la rampa, que ha sido separada del volumen principal por un
puente para no quitarle pureza a la volumetra del museo.

La organizacin museogrfica del edificio no es simplemente un conjunto de joyas expuestas, sino que
conduce al visitante a travs de un recorrido que intenta replicar la experiencia del descubrimiento de la
tumba por los arquelogos. Para ello el arquitecto se sirve de un recurso fenomenolgico: conduce al
visitante al tercer nivel a travs de la rampa a la manera de los antiguos centros religiosos como la Huaca
de la Luna, para luego ir descendiendo al interior del museo hasta terminar el recorrido en la plaza
hundida.

sur.

La rampa culmina en una marquesina que evoca el mismo lenguaje de la puerta de salida

Posteriormente, se
ingresa a una cmara
oscura, que evoca a
alguna galera
subterrnea. La
atmsfera general del
museo es oscura, por
momentos un tanto
frica, en contraposicin
a otros museos
generosamente
iluminados por luz
natural.

Pero es esta semi


penumbra la que
permite admirar, por
contraste, los
artefactos de
metales y piedras
preciosas, puntuales
y dramticamente
iluminadas para tal
fin. No se trata
solamente de un
aspecto esttico,
sino funcional, ya
que la luz solar
daa los objetos
mostrados.

La muestra est organizada en 10 temas. Al ingresar


por la tercera planta se ubican temas sobre la Cultura
Mochica y la circulacin va conduciendo al visitante en
una muestra ubicada en S y que lo pone en contacto
con aspectos generales de esta cultura, como
arquitectura, pesca, orfebrera, etc. as como su
particular cosmogona. Hay tambin equipamientos de
apoyo, como una sala de vdeo que se halla adosada
lateralmente.

Tras descender por unas escaleras laterales hallamos la segunda planta, que se desarrolla en torno a la
Tumba del Seor de Sipn, que ocupa el centro del espacio y conforma el eje de la muestra.

En este nivel
tambin
desarrollan
temas como el
Santuario de
Sipn y las
Tumbas
Reales, la
Investigacin
Arqueolgica,
la Tumba del
Sacerdote.

Es en este nivel donde se pueden ver algunas de


las joyas ms impresionantes de toda la coleccin,
trabajadas en oro y plata o tambin la increble
restauracin de los collares de pequesimas
cuentas que adornaban el pecho del Seor.

En el nivel inferior
se puede ver
tambin la Tumba
del Seor de Sipn
abierta en un lado.
La acompaan
otras tumbas, La
Tumba del Viejo
Seor de Sipn,
temas de
conservacin y
restauracin y la
tumba saqueada.

Hay tambin aqu una detallada recreacin del


mundo mochica hecha con maniques animados y
juegos de luces. Estos maniques hiperrealistas,
realizados por Edilberto Mrida y Eva Centeno, se
hicieron usando modelos reales buscados en las
zonas rurales de la regin, teniendo en cuenta
caractersticas antropomrficas de los huaco
retratos moche.

A unos 50 m del museo los investigadores han realizado una reconstruccin de un barrio
mochica, utilizando la evidencia provista de la cermica y el arte de esta cultura.
Utilizando barro y madera de algarrobo y colores presentes en otras ruinas, se hallan
habitaciones sencillas, de techos ligeros, paredes lisas y aberturas que facilitan la
ventilacin. Un interesante complemento al muso para tener una experiencia ms real del
modo de vida y la vivencia del espacio de esta antigua cultura americana.

También podría gustarte