Resúmenes clases COMERCIAL Nro. 6
Resúmenes clases COMERCIAL Nro. 6
Resúmenes clases COMERCIAL Nro. 6
CLASE 6 – CONTRATO
¿Qué es un contrato?
1
de la formación del consentimiento, cuestión que no debe ser
confundida con los efectos generados a partir de la formación del
contrato, que, como tal, podrá ser unilateral, bilateral o plurilateral.
2
particulares la facultad de dar vida a situaciones aptas para en-
gendrar vínculos entre ellos. Por tanto, esta autonomía posee
caracteres particulares que la distinguen, de cualquier otra. Es
fuente de normas jurídicas que forman parte del ordenamiento
jurídico mismo. Las partes se convierten en “legisladores” par-
ticulares de sus negocios y como tales son soberanos, de tal
forma que la "norma particular" se convierte en ley para las
partes (Ghersi, p. 36).
3
No obstante, el CCCN también habla de normas indisponibles.
Estas reciben por lo general el nombre de “normas de orden
público”: se tratan de un límite a la autonomía negocial o
contractual pues no pueden ser dejadas sin efecto o dejadas de
lado por decisión de las partes. El art. 12 del CCCN dice que
“Las convenciones particulares no pueden dejar sin efecto las
leyes en cuya observancia está interesado el orden público”.
Por ejemplo, la ley de alquileres 27.551 derogada por el DNU
Nro. 70/2023 preveía que el plazo mínimo del contrato de
locación de inmueble era de tres (3) años según el art. 1198
CCCN, por lo que las partes no podían convenir uno menor. Se
trataba de un piso imperforable. En cuanto a los derechos
reales (dominio, condominio, prenda, hipoteca, etc.), también
se aplica este instituto: es nula la configuración de un derecho
real no previsto en la ley, o la modificación de su estructura (v.
art. 1884 CCCN). Otro ejemplo es lo que ocurre en el Derecho
Laboral: no pueden fijarse salarios por debajo del salario
mínimo vital y móvil, o de los que se establecen en una
convención colectiva de trabajo.
4
las partes contratantes; no lo tiene con respecto a terceros,
excepto en los casos previstos por la ley (art. 1021 CCCN). Así
lo dice el art. 1021: “Regla general. El contrato sólo tiene
efecto entre las partes contratantes; no lo tiene con respecto a
terceros, excepto en los casos previstos por la ley”. La regla es
la inoponibilidad de los efectos directos frente a los terceros, a
los que la ley autoriza a comportarse como si el acto jurídico no
existiese. Los terceros son todos los que no son parte en el acto
jurídico, los extraños al acto. Se definen por exclusión.
5
previamente le hace firmar un contrato por el cual si Matías
atropella a una persona, será el único responsable.
Efectivamente, Matías, muy alcoholizado, embiste a Lupe con
el auto. El seguro no le cubre. Entonces: ¿Lupe solo podrá
demandar a Matías pero no a Soledad por el contrato que
existe entre ellos? No: Lupe podrá hacerle juicio a Matías, a
Soledad o a ambos. El contrato le es inoponible. ¿Quiere decir
que el contrato no sirve para nada? Pues, el contrato es válido
entre Soledad y Matías: esto quiere decir que si Soledad le
paga la indemnización a Lupe, después podrá reclamarle a
Matías lo que pagó.
6
contrato de seguro es oponible al tercero damnificado y, que la
sentencia no podrá ser ejecutada contra la aseguradora sino en
los límites de la contratación” (“Díaz, Graciela L. c.
Evangelista, Jorge D. Pascual y otros s/ daños y perjuicios (acc.
trán. c/ les. o muerte) 12/06/2018; “Nieto”, “Villarreal” y
“Cuello” (Fallos 329:3054 y 3488; 331:379 y 330:3483) y en las
causas CSJ, 166/2007 (43-O)/CS1 “Obarrio, María P. c.
Microómnibus Norte SA y otros” y CSJ, 327/2007 (43-G)/CS1
“Gauna, Agustín y su acumulado c. La Economía Comercial SA
de Seguros Generales y otro”, sentencias del 4 de marzo de
2008).
7
genera obligaciones para todos o para solo una parte.
Clasificación estructural
8
(Ghersi, p. 59). Como explica Ghersi, este tipo de contrato es
propio del siglo XIX, del Código de Vélez, pues suponía una
"comunicación recíproca" que iba generando y conformando
los términos definitivos de la oferta, y por este camino se
arribaba al consenso o conclusión contractual. El caso típico es
cuando, ante una deuda, los abogados del deudor y del
acreedor se comunican, y van redactando las cláusulas, o uno
las redacta, y el otro le hace agregados o correcciones.
9
términos faltaría en tales hipótesis, la formación de un
verdadero y propio acuerdo en sentido técnico'. Quiere decir
entonces que en la formación del contrato, hay una
consolidación del poder de las empresas, mediante la
eliminación de la fase del contrato (tratos precontractuales),
dentro de la cual era posible la expresión de voluntad del
usuario o consumidor (llevada a cabo mediante el
procedimiento de la adhesión)". CC0001 LZ 63.453 RSD-441-7,
S 13/12/2007, Juez Tabernero (SD), "La Cruz, Sandra c.
Osmecon Salud y otros s/daños y perjuicios". Antonio Polo
expresa que “son hijos de la contratación en masa, por lo que
son elaborados en serie, según la ley de los grandes números,
sometidos a una standarización rigurosa, que por un proceso
de tipificación contractual reduce al mínimo el esfuerzo de las
partes y la perdida de tiempo”. La rutina, agrega, (o la
rutinización, mejor dicho), sustituye a la reflexión. Para los
anticontractualistas el contrato de adhesión se trata de un acto
unilateral obligatorio que dicta sus condiciones a una
comunidad indeterminada y se obliga previa y unilateralmente,
a reserva de la adhesión de aquellos que quieran aceptar la ley
del contrato (Saleilles).
10
Defensa del Consumidor.
C) Por su certeza:
1. Conmutativos: En el art. 968, el CCCN se inclina por
11
considerar al distingo entre contratos conmutativos y
aleatorios como una subespecie de los contratos onerosos y lo
hace en los siguientes términos: «Los contratos a título
oneroso son conmutativos cuando las ventajas para todos los
contratantes son ciertas. Son aleatorios, cuando las ventajas o
las pérdidas, para uno de ellos o para todos, dependen de un
acontecimiento incierto». Por ende, solo los contratos onerosos
podrían ser clasificados como conmutativos o aleatorios. Esto,
sin embargo, no es tan así, como veremos.
12
cumplirse un plazo determinado o condición” (Leiva
Fernández). Tratándose de un contrato aleatorio, las partes
asumen deliberadamente el riesgo del resultado que puedan
obtener. En los contratos aleatorios, la relación que puede
existir entre las prestaciones que debe cumplir una y otra
parte es ignorada en el momento de su celebración, porque
éstas dependen de un acontecimiento incierto. Aquí libremente
las partes han asignado a un determinado evento o factor, que
escapa a su control, entidad para producir una específica
consecuencia con relación al cumplimiento de las obligaciones
respectivas. Una de las prestaciones puede o no realizarse, o
rendir más o menos de lo esperado. Por lo tanto, sin perjuicio
de estar limitada en valores máximos y mínimos, al momento
del perfeccionamiento del contrato es imposible para las partes
advertir acabadamente la medida de sus ventajas o pérdidas;
sin dudas conocerán los topes y sin dudas que la posibilidad de
cumplimiento o incumplimiento es una condición suspensiva,
pero lo importante no es ello, sino la entidad de dicho
incumplimiento. En otras palabras, el cumplimiento o
incumplimiento del contrato es un hecho futuro e incierto.
Permanece como aleatorio habida cuenta de la imposibilidad
de conocer certeramente al momento de la celebración, la
magnitud o medida de ese incumplimiento eventual, quedando
las ventajas y pérdidas del contrato en un ámbito de
indeterminación propio de la aleatoriedad. Ejemplos típicos son
el billete de lotería y el contrato de seguro automotor: puede o
no ocurrir que me roben el auto, o que yo tenga un accidente,
pero cuando ese hecho ocurre, nace la obligación de la
Aseguradora de resarcir el daño o reponerme el auto destruido
o robado. Este es un contrato oneroso pues pago una prima
para ser asegurado. ¿Dónde está lo aleatorio? Pues, primero en
que la condición (el robo o la destrucción del automóvil, o el
accidente) pueden o no ocurrir. Y segundo, en que la
13
Aseguradora no sabrá exactamente, hasta que ocurra, el
alcance de su obligación: no sabrá si tiene que reponer un auto
o si deberá indemnizar por muerte a los familiares de la
persona que fue atropellada por el vehículo, y por cuánto
dinero. Seguramente lo que tenga que pagar la Aseguradora no
sea poco, si se lo compara con la prima que cobra del
asegurado; por ello hay un desequilibrio patrimonial notorio
que las partes aceptan libremente. Más aún porque hace al
negocio de la Compañía de Seguros.
14
propio de la aleatoriedad excluyendo la pretendida
conmutatividad del mismo.
15
por otro medio de forma inequívoca la expresión de voluntad.
Ej.: la donación de inmuebles, las de cosas muebles
registrables. En los no solemnes, aunque el acto no logra
alcanzar sus efectos inmediatos, no pierden todo efecto
jurídico, quedando las partes obligadas a elevar el acto a la
forma exigida. Un ejemplo es la compraventa de inmuebles que
no se realice por escritura: el contrato vale como boleto de
compraventa y promesa de escriturar.
2. No formales: son aquellos contratos en los que ni la ley ni las
partes imponen una forma determinada. Aunque en todo
contrato habrá una forma para exteriorizar la voluntad, dice
Alterini, en los informales no existe una forma determinada. Las
partes, no obstante, pueden elegir una forma. Un ejemplo de
estos contratos es la compraventa de cosas muebles no
registrables: comprar una gaseosa en un kiosco, una silla en
una mueblería o el periódico.
16