Cap 7

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Ejercicio 6: Técnica parada-arranque con

masturbación

Objetivo

- Asumir la pérdida de la erección sin preocupación


- Controlar el momento de eyaculación ante la estimulación
directa con masturbación.
- Diferenciar claramente las diferentes fases de la excitación
sexual

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Este es uno de los ejercicios más importantes para el control de la
eyaculación y para conseguir mantener el pene firme y duro. En la técnica
descrita en este ejercicio se basan los siguientes ejercicios que verás más
adelante. Es por ello por lo que resulta de especial importancia que
cumplas los objetivos de esta fase antes de pasar a la siguiente.

Durante este ejercicio, perderás y recuperarás varias veces la erección.


Este procedimiento tiene como objetivo principal que tu mente se
despreocupe por la pérdida de la vigorosidad de la erección. Recordemos
que en un pasado seguramente estabas muy atento a tu respuesta sexual
y temías perder la erección en algún momento. El propio temor
incrementaba tu ansiedad y fisiológicamente facilitaba que la erección se
perdiese. Habrás alcanzado uno de los objetivos de este ejercicio cuando
no despiertes apenas ninguna preocupación ante las pérdidas de la
erección que experimentarás en él.

El segundo objetivo de este ejercicio es controlar bien la eyaculación ante


la masturbación. La estimulación se realizará mediante movimientos con
la mano.
En definitiva, con este ejercicio buscamos que seas muy consciente de
cuándo estás en un nivel de excitación que en la siguiente gráfica viene
representado por los números 5, 6 y 7.

Esta puede llegar a ser una parte difícil para ti porque es justo cuando se
aprecia la fase Meseta de la excitación sexual.

Recordemos que en problemas como la eyaculación precoz, la fase


Meseta es muy breve o no existe. Así pues, con la realización del ejercicio
descrito aquí la persona que sufra este problema conseguirá identificar el
comienzo de la fase Meseta.

Rodea ahora la parte de la gráfica a la que hace referencia este


ejercicio.

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Procedimiento

- Respiración Diafragmática Lenta (RDL)


- Caricias por todo el cuerpo. Incluye área genital
- Caricias genitales y masturbación
- Técnica parada-arranque
- El hombre se centra exclusivamente en las sensaciones de su
cuerpo, evitando, durante el ejercicio, satisfacer a su pareja

Al igual que en los anteriores dos ejercicios, dedicamos el comienzo de


éste a establecer un nivel de relajación suficientemente profunda como
para que los pensamientos negativos se calmen y la ansiedad se difumine.
Con la práctica del ejercicio de relajación que tendrás en este momento, 85
deberías encontrar un nivel más alto de relajación y llegar a él algo más
rápido que en las semanas anteriores. Si esto no sucediese, dedica un
tiempo en cada uno de tus días a practicar a solas este ejercicio de RDL
fuera del tiempo que dediques al procedimiento que leerás a
continuación.

Una vez te encuentres muy relajado, tu pareja te realizará caricias por


todo el cuerpo, generándote un poco de excitación. Te puede acariciar la
cara, los hombros, los brazos, el pecho, el abdomen y después las
piernas. En este ejercicio las caricias continúan por el área genital,
haciendo que la excitación aumente. Tu pareja te acariciará el pene y los
testículos, lo que seguramente provocará un inicio de erección. Luego
continuará por otras partes de tu cuerpo, lo que provocará que pierdas
algo (o por completo) tu erección. Volverá a estimular tu zona genital
cuando lo desee, para volver a estimular más tarde otras zonas de tu
cuerpo.

No tengáis prisa por que aparezca la erección. Cuando hayáis pasado


unos minutos con el procedimiento que acabas de leer y la erección
aparezca, pasad al siguiente paso: Masturbación con la técnica parada-
arranque.

En este paso, tu pareja te masturbará despacio con la mano mientras tú


te centras exclusivamente en las sensaciones corporales que sientes. A
medida que te masturba, tu pareja puede tocar cualquier otra parte de tu
cuerpo, aparte del pene, con el fin de excitarte. Comprobarás que puede
ser muy placentero que ella te acaricie el escroto y la zona del perineo
(entre los testículos y el ano).

Cuando llegues a un nivel de excitación cercano a 7, hazle una indicación


para que deje de masturbarte. Verás como la excitación va cayendo y tu
erección disminuye. Esta es la primera parada. Al notar que tu excitación
ha bajado hasta un nivel aproximado de 3 (ver gráfica), pídele a tu pareja
que retome de nuevo la masturbación comenzando despacio. Céntrate
ahora en cómo tu erección se recupera mientras tu pareja te sigue
masturbando. Que ella continúe hasta que te acerques a un nivel
nuevamente de 7. Al llegar a este punto le harás una indicación para que
detenga el movimiento y deje de tocarte. Será la segunda parada. La
erección y la excitación bajarán de nuevo. Y por tercera vez, cuando la 86
excitación haya bajado hasta 3, indícaselo a tu pareja para que retome la
masturbación despacio y aumentando la intensidad poco a poco. Luego
variad la intensidad pasando por diferentes ritmos. Cuando te aproximes
a 7, pídele a tu pareja que detenga la estimulación. Será la tercera parada.

Tu pareja retomará una vez más la estimulación, de igual modo que lo


ha hecho antes. A partir de este momento, puedes dejarte llevar por la
excitación a lo largo de la fase meseta, hasta alcanzar el Punto de No
Retorno (P.N.R.) y eyacular disfrutando de tu orgasmo. Con ello
finalizará el ejercicio.

Con la práctica continuada de este ejercicio, irás identificando cada vez


mejor las sensaciones previas al P.N.R. y con ello vas a ser cada vez más
capaz de modular el ritmo y la intensidad de los movimientos que te
provocan excitación para tener un mayor control del momento de la
eyaculación, marcando un ritmo más lento para la que la excitación
disminuya, o aumentando el ritmo para que la excitación se incremente.
¿Es imprescindible eyacular al final?

Muchos pacientes nos han dicho que a partir de este punto prefieren no
eyacular y dejar el ejercicio en este punto. Comentan que eso les hace
estar más deseosos de volver a practicar la técnica parada-arranque
dentro del mismo día, o al día siguiente.

Desde un punto de vista terapéutico, me parece bien esta decisión


porque cuanto más practiques este ejercicio, más rápido avanzarás la
terapia y más capacidad tendrás para retrasar la eyaculación. Además,
rompe la asociación del placer sexual y la eyaculación, lo que fortalece
en tu mente la idea de que se puede gozar mucho a nivel sexual sin
necesidad de eyacular.

Anotaciones 87

- Si el hombre eyacula en alguna ocasión en esta etapa sin


pretenderlo, no se culpabilizará y en las siguientes parará
algo antes.
- Solo se pasa a la siguiente fase cuando el hombre es capaz
de controlar la cercanía del P.N.R. y detener la
estimulación antes de la eyaculación.
- En hombres sin pareja sexual, esta etapa la pueden hacer
consigo mismo mediante masturbación.

Recuerda que en esta fase las indicaciones son: no eyacular antes del
momento indicado en el apartado anterior. Si al principio no eres capaz
de parar y eyaculas, no te culpabilices por ello. Las primeras veces que se
realiza este ejercicio es algo que puede suceder. Pero si fuese así, la
siguiente vez que realices el ejercicio pídele a tu pareja que deje de
masturbarte cuando notes un nivel de excitación de 6 sobre 10, en lugar
de 7. Conforme más practiques, más fácil te resultará acercarte al Punto
de No Retorno (P.N.R.) sin eyacular y más controlarás tu eyaculación.

Algunos hombres consiguen detectar la cercanía del P.N.R. con


facilidad. Otros lo logran a partir de las 2 semanas de práctica. Tómate
el tiempo que necesites en este ejercicio antes de pasar al siguiente,
porque es una de las fases más importantes del proceso, que debes de
dominar bien.

Entenderemos que este ejercicio está superado con éxito cuando ante la
estimulación de tu pareja recuperes bien la erección, sin preocuparte por
perderla cuando deje de estimularte. Además, debes de ser capaz de
conocer cuánto falta para el P.N.R. y pedirle a tu pareja que detenga la
estimulación antes de llegar a él.
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Si no tienes pareja sexual, realiza este ejercicio tú mismo mediante
masturbación. Cuando te masturbes, hazlo empleando tu imaginación y
tus fantasías más que empleando material erótico externo, como puedan
ser revistas o vídeos. Esto te permitirá concentrarte más en ti y en las
sensaciones que sientes durante el ejercicio. El uso de material
pornográfico externo haría que te centrases en estímulos de fuera de ti,
y lo que necesitas aquí es centrarte en las sensaciones que te proporciona
tu cuerpo. Lee con atención el procedimiento descrito en el apartado
anterior y aplica los mismos pasos contigo mismo.

Si tienes pareja, pero ella está fuera o no podéis tener tantos contactos
como requiere esta fase, puedes alternar el ejercicio en solitario con el
ejercicio realizado con ella. Esto te garantizará la práctica adecuada para
esta fase.

Hacer el ejercicio en solitario tiene la ventaja de que no dependes de que


tu pareja se fatigue. Puedes realizar tantos momentos de parada –
arranque como desees, y tantas veces al día y a la semana como desees.
Cuantos más hagas, más avanzarás en el control del reflejo eyaculatorio.
Cuando hagas la práctica en solitario, trata de alcanzar una duración total
del ejercicio mayor a los 20 minutos. Cuando veas que se acerca el
P.N.R., detén la masturbación hasta que la excitación baje hasta un nivel
de 3. Una vez haya bajado, continúa masturbándote comenzando
despacio mientras observas que la excitación va subiendo de nuevo.

Mantén un control sobre tu respiración. En momentos de excitación


altos, varias respiraciones lentas y profundas, tal y como has visto en el
ejercicio 3, te ayudarán a disminuir la excitación.

Cuando hayas realizado al menos 3 días consecutivos el ejercicio con


éxito total, alcanzando los objetivos descritos, pasarás al ejercicio 7.

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