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Trabajo practico Derechos

Humanos

Nombre:Francisco Cinquemani
Año:5To
Materia:Politica
Profesora:Analia Nora Ugazio
Tema: Derechos humanos

¿Por qué deberían tener los mismos derechos todos los seres humanos?
Aun cuando acordemos que algunos derechos deben ser semejantes para cualquier
persona, no es fácil acordar los fundamentos de esa convicción. A lo largo de la
historia, la idea de los derechos humanos fue elaborada y defendida desde
diferentes corrientes de pensamiento, que plantearon sus propios criterios

Orden natural versus consenso público

La filosofía del derecho conocida como "iusnaturalismo" plantea leyes elaboradas


por la sociedad sólo son legítimas si coinciden con el orden natural.
La posición contraria es el positivismo jurídico o "iuspositivismo", representado por
una variedad de posiciones que coinciden en que la validez de las leyes no radica
en su coincidencia con una moral de carácter absoluto. Generalmente, atribuyen
legitimidad a las leyes sancionadas como fruto de consensos públicos El
iusnaturalismo fue el primero en hablar de derechos esenciales del hombre, pero
basa esa idea en una visión particular del Universo, frecuentemente sustentada en
creencias religiosas o metafísicas Entiende que los hombres tienen ciertos derechos
porque está en su naturaleza o porque Dios lo ha querido así
Las posiciones positivistas objetaron este argumento, que remite el fundamento de
las leyes a una autoridad externa, y plantearon que ese derecho natural es
manipulado por quienes lo defienden, según lo que cada uno considera "natural".

En síntesis, algunos postulan la existencia de derechos humanos previos a toda ley,


mientras que otros consideran que solo puede hablarse de derechos humanos si
estos son sancionados por una autoridad competente. Si los primeros remiten a un
orden superior de la naturaleza, los segundos conciben los derechos como producto
de luchas socio históricas y consensos políticos

Ambas escuelas contribuyeron a la definición de lo que actualmente entendemos


por derechos humanos, unos defendiendo la existencia de derechos superiores a
las leyes de cada Estado, y otros exigiendo que esos derechos fueran debatidos en
las instituciones habilitadas para ello.

entonces de los derechos humanos está en la historia de las sucesivas luchas a los
consensos relativos a través de los en aquellos derechos que algunos consideran
naturales se fueron adoptando progresivamente en la legislación de cada país y en
en el orden internacional.

Tradiciones humanitarias del derecho

A lo largo de la historia hubo diferentes y, en muchos casos, disímiles aportes que


fueron sus Intando e incrementando la concepción de derechos tal como los
conocemos en la actualidad el antiguo "derecho de gentes" de los romanos reunía
los derechos reconocidos a quienes no eran ciudadanos del imperio pero habitaban
las colonias y los países sometidos al dominio romano. Otro soporte significativo
reciente es de las convenciones de prisiones de guerra, los Estados se
comprometían a garantizar ciertos derechos a los enemigos que caían prisioneros o
resultaban heridos. en ambos casos el derecho cobra carácter humanitario de
respeto por las personas independientemente de su nacionalidad, pero reducía a
algunos sectores o situaciones particulares

Hitos que transformaron las concepciones de derechos

En los siglos XII y XIII, diversos reyes europeos acosados por reclamos de sus
súbditos contra las arbitrariedades monárquicas, las presiones impositivas y los
privilegios otorgados a unas pocas personas. En respuesta a esos reclamos,
tuvieron que realizar concesiones La Carta Magna la más famosa de ellas,firmada
por el rey Juan I de Inglaterra Esta carta expresa una limitación del poder rea

En américa anglosajona

Declaración de Derechos del Buen Pueblo de Virginia primera declaración moderna


y fue adoptada el 12 de junio de 1776, en plena revolución norteamericana.
Compuesta por dieciséis artículos que incluían: el derecho a la vida, a la libertad, a
poseer propiedades, al debido proceso en caso de acusación, a la libertad de
prensa y religión, entre otros derechos. También establecia la igualdad ante la ley,
sin embargo, toleraba la esclavitud y la desigualdad entre hombres y mujeres.
En Francia

El 26 de agosto de 1789, durante la Revolución Francesa, la Asamblea Nacional


Constituyente aprobó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano.
En ella, los representantes del pueblo francés reconocían derechos a los
ciudadanos de su país, pero extendían también esos derechos a todos los hombres
del mundo.

La lucha por los derechos sociales

La economía inglesa vivió un acelerado proceso de Revolución Industrial, que


modificó la estructura productiva y causó significativos cambios en las relaciones
sociales. Un reducido sector de propietarios se enriqueció rápidamente, mientras
que grandes sectores populares se veían en la necesidad de trabajar muchas horas
y vivir en la miseria: los llamados "proletarios" no tenían propiedades, sino
numerosos hijos para mantener

Sin embargo, las revoluciones políticas de esa época, que contaron con el apoyo de
muchos sectores empobrecidos, sólo establecieron derechos de carácter individual,
reclamados por la burguesía.
Los derechos sociales no surgieron para limitar los abusos gubernamentales, sino
para exigir a los Estados que frenaran las arbitrariedades de las empresas y los
terratenientes sobre los trabajadores, que garantizaran las condiciones básicas para
el desarrollo de la vida y que disminuyeran las desigualdades generadas por el
mercado. De cierto modo, entonces, se fue configurando un tipo de derechos que
creció en sentido opuesto al de las libertades exigidas en las revoluciones
burguesas

Obligaciones del Estado frente a todas las personas

Deberes del Estado hacia todos los ciudadanos: La responsabilidad del Estado va
más allá de la simple enunciación de los derechos humanos; debe garantizar
activamente su cumplimiento y asegurar que cada rincón de su nación los respete y
los proteja. El Estado transgrede los derechos humanos de manera activa cuando
impone acciones que no están contempladas en la ley. Existen derechos que el
Estado infringe no solo mediante acciones, sino también al no actuar. Asimismo,
comete una violación por omisión al permitir que ciertos grupos de ciudadanos
hostiguen y menoscaben la dignidad de otros, sin alzar la voz ni actuar en defensa
de los perjudicados. De igual manera, existen derechos que los gobiernos otorgan
sin reservas a ciertos grupos de su población, mientras que a otros, por su estatus
social, su identidad sexual o sus creencias, se les niegan o limitan injustamente.

El camino del reconocimiento internacional


La Sociedad de las Naciones (1919-1946) fue creada al finalizar la Primera Guerra
Mundial con el objetivo de promover la paz mediante la negociación diplomática. Sin
embargo, fracasó debido a la falta de autoridad frente a las grandes potencias, que
priorizaron su poder militar. No pudo evitar el inicio de la Segunda Guerra Mundial
(1939-1945), que cambió el equilibrio mundial, dando liderazgo a Estados Unidos y
la Unión Soviética.

Al finalizar la guerra, se comenzaron a sentar las bases para la creación de la


Organización de las Naciones Unidas, destinada a ser un foro permanente de
resolución de conflictos para prevenir futuras guerras.

Tras la Segunda Guerra Mundial, se revelaron los horrores del Holocausto y otros
crímenes cometidos por los nazis. Esto desató debates sobre la responsabilidad de
los gobiernos y la soberanía estatal frente a los derechos de sus ciudadanos. El
juicio a los responsables de estos crímenes mostró que muchos actuaron bajo las
leyes de sus países, que permitían la discriminación y otros abusos. Además, la
indiferencia de la población facilitó estos crímenes.

La indignación mundial llevó a un proceso para definir los derechos humanos de


manera internacional, buscando proteger a los individuos de los abusos de los
gobiernos. Esto dio lugar a la creación de declaraciones, pactos y convenciones que
establecen derechos universales e igualitarios, con mecanismos internacionales
para garantizar su cumplimiento y juzgar violaciones.

La declaración universal de derechos humanos

La Declaración Universal de Derechos Humanos fue elaborada por la Comisión de


Derechos Humanos de la ONU, que desde 1946 trabajó para crear un documento
aceptable por personas de diversas culturas, religiones e ideologías. Para ello,
consultaron a expertos de distintos países, y un comité de redacción, presidido por
Eleanor Roosevelt y René Cassin, fue responsable de su elaboración.

El proceso de creación fue complejo, con dos meses de intensas negociaciones


diplomáticas y más de mil votaciones. Finalmente, el 10 de diciembre de 1948, la
Asamblea General de la ONU proclamó la Declaración, que fue aprobada por 48
países, aunque 8 se abstuvieron, incluidos países del bloque soviético, Sudáfrica y
Arabia Saudita.

La Declaración consta de 30 artículos que abarcan derechos civiles, políticos,


sociales, culturales y económicos, y establece la dignidad humana como base
fundamental. Los artículos destacan principios como la libertad, igualdad, fraternidad
y no discriminación, y se dividen en secciones sobre derechos personales, derechos
en relación con la comunidad, derechos políticos y derechos económicos, sociales y
culturales. También se incluyen los límites y condiciones para el ejercicio de estos
derechos.

La Declaración es "universal" porque busca trascender fronteras nacionales y


porque fue fruto de un consenso global. Originalmente se refería a los "Derechos del
Hombre", pero en 1952 se adoptó el término "Derechos Humanos".

Pactos y tratados durante la Guerra Fría

Durante la Guerra Fría, los derechos humanos corrían el riesgo de no ser más que
una declaración sin cumplimiento efectivo. Para evitar esto, se crearon pactos y
tratados obligatorios que aclaraban cómo debía interpretarse la Declaración
Universal de Derechos Humanos y establecían mecanismos de control
internacionales.

Desde los años 40, las Naciones Unidas ya habían planeado que la declaración
fuera el primer paso hacia una convención que obligara a los países miembros. Sin
embargo, las tensiones de la Guerra Fría entre los bloques capitalista, encabezado
por EE. UU. y Europa occidental, y el bloque socialista, liderado por la URSS,
dificultaron este avance. Cada bloque priorizaba diferentes aspectos de los
derechos humanos: los países occidentales se enfocaban en los derechos civiles y
políticos, mientras que los socialistas enfatizaban los derechos sociales. Esto
generaba una división, ya que en el bloque soviético existían derechos sociales más
garantizados, pero con restricciones a las libertades políticas.

Finalmente, en 1966, se alcanzó un acuerdo para elaborar dos pactos que


abarcaban las preocupaciones de ambos bloques ideológicos. Estos pactos se
consideran fundamentales, ya que no solo enunciaban principios morales, sino que
establecían una "carta internacional de derechos humanos", similar a una
constitución para los países firmantes. Los pactos requerían la firma de los
gobiernos y la ratificación por parte de sus parlamentos. La Argentina fue uno de los
países firmantes, pero ratificó los pactos recién en 1986, tras la dictadura militar.

Uno de los pactos incluía un protocolo facultativo que establecía las condiciones
bajo las cuales la ONU podría intervenir en los asuntos internos de los Estados para
proteger los derechos humanos reconocidos en el tratado.

La protección internacional de los derechos y el sistema interamericano

A partir de la creación de la legislación internacional, surgió la necesidad de


establecer organismos especializados para supervisar su cumplimiento. Dentro de la
ONU existen seis comités que se encargan de vigilar el cumplimiento de distintos
tratados por parte de los Estados, como el Comité para la Eliminación de la
Discriminación contra la Mujer, el Comité contra la Tortura y el Comité de los
Derechos del Niño. Estos organismos realizan tareas de control, recepción de
denuncias y asesoramiento a los Estados que avanzan en políticas de justicia.

Desde 1993, existe un Comisario para los Derechos Humanos que coordina el
programa de la ONU en esta área. En cuanto a la justicia penal internacional, desde
la década de 1940 se intentó crear un tribunal para juzgar crímenes graves, pero no
fue hasta los genocidios en la ex Yugoslavia y Ruanda en los años 90 que la idea
comenzó a prosperar. En 1998, se estableció la Corte Penal Internacional,
encargada de juzgar los crímenes más graves contra el derecho internacional,
aunque algunos países importantes, como Estados Unidos y Rusia, no se han
adherido a ella.

A nivel regional, existen cortes penales en Europa y América que abordan casos
específicos de violaciones a los derechos humanos. En América, el sistema de
protección de los derechos humanos comenzó en 1948 con la aprobación de la
Declaración de Derechos y Deberes del Hombre por la OEA, y en 1969 se adoptó la
Convención Americana sobre Derechos Humanos, conocida como el Pacto de San
José de Costa Rica. Esta convención estableció órganos como la Comisión y la
Corte Interamericana de Derechos Humanos, que velan por el cumplimiento de los
derechos y reciben denuncias de individuos o grupos que han agotado las
instancias nacionales.

La Constitución nacional y los tratados internacionales

La Constitución de la Nación Argentina, en su artículo 75, inciso 22, incorpora varios


tratados y declaraciones internacionales como parte de su sistema normativo, lo que
fue una de las principales novedades de la reforma constitucional de 1994. Esto
amplía la protección de los derechos humanos en el país. Entre los tratados
incorporados están la Declaración Universal de Derechos Humanos, la Convención
Americana sobre Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y
Políticos, y otros relacionados con la eliminación de la discriminación y la protección
contra la tortura, el genocidio y la discriminación racial y de género.

El mismo artículo otorga al Congreso la facultad de celebrar tratados


internacionales, los cuales tienen una jerarquía superior a las leyes y pueden
alcanzar el mismo nivel que la Constitución si son aprobados por dos tercios de
ambas Cámaras. Entre los tratados aprobados están la Convención Interamericana
sobre Desaparición Forzada de Personas y la Convención Interamericana contra la
Corrupción. Al incorporar estos tratados, Argentina reafirma su adhesión a los
principios internacionales, promoviendo la democracia y el ejercicio responsable de
la ciudadanía.

Conflictos y dilemas en la realización efectiva de los derechos humanos


La historia de los derechos humanos está marcada por valiosas luchas, pero
también por contradicciones importantes. A menudo, es difícil hacer valer estos
derechos dentro de los Estados, especialmente cuando existen sectores que
obstruyen o distorsiona los mecanismos de justicia. A nivel internacional, lograr
justicia se complica aún más cuando países que denuncian violaciones de derechos
humanos en otros, toleran prácticas similares en su propio territorio o en países
aliados. En ocasiones, las guerras y masacres se han justificado como defensas de
los derechos humanos, y algunos países poderosos han manipulado la ONU para
perseguir a líderes de naciones subdesarrolladas, sin juzgar a gobernantes de
países centrales que cometen actos igualmente cuestionables. Estas
contradicciones son parte de la historia de los derechos humanos, pero no
desmerecen la lucha por una sociedad más justa, sino que la fortalecen.

Las dictaduras de América del Sur

Durante las décadas de 1960 y 1970, muchos países de América Latina vivieron
dictaduras militares que en algunos casos perduraron hasta la década de 1990.
Estas dictaduras compartían la idea de que los intereses del Estado justificaban la
violación de los derechos de los ciudadanos, considerándose como garantes de
esos intereses y luchando contra lo que percibían como enemigos internos,
relacionados con ideologías extranjeras o contrarias a las tradiciones nacionales.

Bajo la ideología de la seguridad nacional, las dictaduras llevaron a cabo


sistemáticamente secuestros, torturas, asesinatos y encarcelamientos sin juicio
previo. Para imponer su orden, implementaron censura, quema de libros,
persecución de opositores y disolución de partidos políticos. Estas violaciones de
derechos humanos estuvieron acompañadas de políticas económicas que
aumentaron las desigualdades sociales. En Argentina, la visita de la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en 1979 fue clave para dar a conocer
la gravedad de la situación en el país.

Las violaciones a los derechos humanos en la Argentina reciente y actual

La Argentina vivió una de las dictaduras militares más brutalmente represivas,


instaurando el terrorismo de Estado durante ocho años. Esta dictadura implementó
la desaparición forzada de personas y un plan de apropiación de niños, cambiando
sus identidades legales. En 1985, los miembros de las Juntas Militares fueron
enjuiciados, pero poco después fueron indultados, interrumpiendo los juicios. No fue
hasta 2005 que la Corte Suprema permitió retomar los juicios contra los
responsables del terrorismo de Estado.
Los gobiernos democráticos han logrado desmantelar el aparato represivo de las
fuerzas armadas, aunque persisten prácticas ilegales en algunas instituciones de
seguridad, como la represión policial. Culturalmente, los derechos humanos son
parte del discurso social, como un contraste frente a la dictadura, pero aún existen
actitudes hostiles hacia los migrantes, desigualdad de género y una tendencia a
apoyar soluciones violentas para problemas de inseguridad. Los derechos humanos
siguen siendo un desafío pendiente para la democracia argentina.

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