Silla de Rueda

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SILLA DE RUEDAS

Las sillas de ruedas forman parte de las ayudas técnicas, es decir, de los
dispositivos físicos de aplicación que posibilitan o mejoran la realización de
actividades del aparato locomotor limitadas por deficiencias o discapacidades
de tipo parcial o total.

Las sillas de ruedas son vehículos individuales que favorecen el traslado de


personas que han perdido, de forma permanente, total o parcialmente, la
capacidad de desplazarse. Hay que tener en cuenta que la silla de ruedas debe
ser adecuada de acuerdo al grado de deficiencia del usuario.

Por tanto, las sillas de ruedas facilitan la movilidad a pacientes que no pueden
caminar ni desplazarse por sí mismos con otros dispositivos, facilitando así su
autonomía e integración social. 1

Tipos de Silla de Ruedas:


Se considera importante realizar una clasificación de silla de ruedas adecuada
para el estudio, que tome en cuenta el uso y función de estos dispositivos, se
divide en:

Sistemas dependientes: Las sillas de ruedas manuales de manejo


dependiente no están diseñadas para que las controle el ocupante. Un sistema
dependiente solo es apropiado para situaciones en las cuales quien lo usa no
tiene las capacidades cognitivas, perceptivas o físicas para operar cualquier
tipo de sistema de movilidad manual o motorizado

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● Sillas de transporte: Es una silla de ruedas manual controlada por un
acompañante. Dispone de chasis rígido, reposapiés y reposabrazos que
pueden ser abatibles y desmontables. El asiento y el respaldo suelen ser
acolchados y son de material impermeable. Dispone de un sistema de
frenos y generalmente de cuatro ruedas inferiores a 300 mm de diámetro,
aunque a veces las dos traseras pueden ser de mayor tamaño. Las llantas
suelen ser de poliuretano, y algunas veces son neumáticas. Están indicadas
para personas con imposibilidad para caminar y para impulsar una silla de
forma autónoma. Su función es trasladar personas con limitación para
caminar mediante el manejo de la silla por un asistente. (Imagen 1) 1

● Sillas de posicionamiento: Son dispositivos destinados a mantener la


postura adecuada, para pacientes que tienen poca movilidad y no logran
realizar los cambios de posición de forma independiente. Pueden fijarse
diversos accesorios con facilidad, como los destinados a calzar el tronco.
En los mejores modelos se puede reclinar el conjunto asiento-respaldo-
apoyapiés. Con estos sistemas de reclinación se trata de respetar la
fisiología articular. (Imagen2) 2

(Imagen 1) (Imagen2)
Sistemas de autopropulsión: Dispositivos diseñados para que el usuario
pueda manejarlos de forma autónoma, sin necesidad de un acompañante, y
cubra diversas necesidades.

● Sillas plegables tradicionales o estándar (Ortopédicas): Son los sistemas


más convencionales y de uso común para circunstancias temporales. Son

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plegables, ya que incorporan barras de cruceta y un asiento y un respaldo
flexible de material impermeable. Incorporan, además, reposabrazos y
reposapiés, que pueden ser abatibles y desmontables. Esta silla se impulsa
por el propio paciente manualmente, a través de aros de autopropulsión
incorporados en las ruedas traseras motrices, de 600 mm de diámetro. Las
ruedas delanteras, de 130-200 mm de diámetro, son las ruedas directrices.
El peso total de estas sillas suele oscilar entre los 15-30 kg, dependiendo de
los materiales con los que está fabricada y los accesorios que pueda
incorporar. (Imagen 3) 1

● Sillas Activas: A partir de información revisada, se delimita que las sillas


activas son dispositivos de autopropulsión que suelen ser ultraligeros, el
respaldo varía de acuerdo al nivel de equilibrio de tronco, regularmente no
tienen apoyabrazos ni mangos de empuje, las ruedas traseras y el asiento
suelen ser los únicos desmontables, no logran plegarse ya que cuentan con
chasis rígido, aunque actualmente existen modelos nuevos que pueden
compactarse y se facilita su transporte. El manejo es mucho más fácil que
con las sillas estándar, aunque debido a su ligereza son menos estables.
(Imagen 4)

● Sillas Deportivas: Varían las características de estos dispositivos de acuerdo


al deporte o a las necesidades del usuario, mas tienen en común aspectos
como: Chasis rígido no plegable, resistente y liviano (escasa inercia);
ruedas sumamente inclinadas que garantizan mejor movilidad giratoria,
aunque aumenta el ancho total de la silla, protección en caso de choque,
que también le da mayor dimensión. Ofrecen numerosas ventajas: solidez,
facilidad para rodar, comodidad (respaldo regulable en altura e inclinación
para una mejor adaptación). Los modelos con una rueda
delantera única facilitan aún más la rotación (por ejemplo, para jugar al

tenis). (Imagen 5) 2

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(Imagen 3) (Imagen 4) (Imagen 5)

Sistemas motorizados: Son dispositivos que permiten un fácil desplazamiento


con el menor gasto energético, usada regularmente sobre terrenos regulares.

● Sillas de ruedas eléctricas: Se conducen con un joystick. Todas las sillas de


ruedas eléctricas se programan con una consola informática (optativa) que
permite regular la velocidad, la aceleración y la desaceleración,
adaptándolas a las necesidades de cada persona. Los motores eléctricos
tienen entre 100 y 450 W de potencia y funcionan con una tensión de 24 V.
Se alimentan con dos baterías de 12 V montadas en serie, que son pesadas
(de 10 a 20 kg cada una) y deben recargarse periódicamente (en caso de
uso intensivo, todas las noches durante no menos de 10 horas). Todas las
sillas de ruedas eléctricas traen un cargador que se conecta a la red.
Existen dos tipos: con chasis plegable (Imagen 6) y con chasis fijo. (Imagen 7) 2

(Imagen 6) (Imagen 7)

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La silla de ruedas ortopédica o estándar, es la más usada, sobre todo para
usuarios temporales, se considera un dispositivo accesible, económico y fácil de
conseguir, por ello es común, aunque no es correcto que cualquier paciente la use
sin importar su patología.

Por ello mencionamos las partes que la componen, pues son importantes para
el uso y manejo de esta:

A. Asiento

B. Respaldo

C. Reposapiés

D. Reposa brazos

E. Reposa piernas

F. Mangos De Empuje

G. Ruedas Delantera Giratorias

H. Ruedas Traseras Propulsoras

I. Aros Propulsores

J. Barras De Cruceta

K. Barras De Inclinación

L. Frenos De Estacionamiento

M. Rayos

N. Chasis. 3

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Elección adecuada

Son muchas las horas que los usuarios pasan en su silla de ruedas, por ello
esta debe ser personalizada para adaptarse a su cuerpo. La silla de ruedas
correctamente ajustada será más cómoda para sentarse, hacer maniobras más
eficientes, y reducir las tensiones esqueléticas y musculares causadas por los
movimientos naturales de la propulsión, por ello se llega a concluir que una silla
de ruedas debe tener como objetivo permitir al usuario la máxima
funcionalidad, comodidad y movilidad. Para cumplir con este objetivo, la silla
debe estar pensada para ajustarse a la persona, no es la persona la que debe
amoldarse a su silla. Si se escoge una silla de ruedas no apropiada, puede
resultar incomoda e incluso la energía del usuario se malgastará de manera
innecesaria debido al esfuerzo continuado por modificar su postura.

Para elegir correctamente una silla de ruedas hay que tener en cuenta una
gama de factores:

● Medidas antropométricas del usuario.

● Diagnóstico primario, pronóstico y discapacidades secundarias.

● Nivel de capacidad funcional.

● Frecuencia de uso prevista y entorno donde se usara la silla.

● Estilo de vida y expectativas del usuario.

● Forma de tratamiento en temas de postura y presión.

● Necesidades, comodidad y preferencia personal del usuario.

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Tabla 1. Consecuencias de elegir mal una silla de ruedas. 4
PROBLEMAS CONSECUENCIA
Asiento demasiado ● Postura inestable en sedestación.
ancho
● Dificultad para alcanzar ruedas
y autopropulsarse.
● Barreras arquitectónicas.
Asiento demasiado ● Incomodidad al sentarse
estrecho
● Riesgo de hacer ulceras por presión

● Dificultad para realizar transferencias


Asiento demasiado ● Disminuye circulación de Miembros Inferiores
profundo
● Molestia en el hueco poplíteo.
Asiento poco ● Insuficiente apoyo para sentarse.
profundo
● Aumento de la presión de en zona de apoyo.
Asiento demasiado ● Dificultar para transferirse y sentarse en la silla.
alto
● Dificultad con objetos de altura estándar.

● Disminuye la eficacia de la autopropulsión.


Asiento demasiado ● Escaso apoyo al sentarse.
bajo
● Disminuye la eficacia de la autopropulsión.

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Reposabrazos ● Eleva los hombros.
demasiado altos
● Interviene en la libre autopropulsión.
Reposabrazos ● Reduce el apoyo, consecuencia mala postura.
demasiado bajos
● Restringe la respiración.
Apoyapiés muy ● Molestias en cadera y rodillas.
altos
● Disminuye al área de apoyo al sentarse.
Apoyapiés muy ● Puede engancharse en bordillos o coladeras.
bajos
● Se altera la posición de la pelvis.

Tabla 2. Cuidados básicos para mantenimiento de la silla de Ruedas.


Silla de Ruedas Manual
Cuidados Diarios ● Limpiar toda la silla con un trapo húmedo.
Cuidados Semanales ● Mantener presión adecuada de las llantas.
Cuidados Mensuales ● Revisar ajuste de tornillos y tuercas.

● Checar las partes desmontables.

● Controlar alineación de las 4 llantas.

● Limpiar chasis con cera para carros.


Cuidados Anuales ● Lubricar partes abatibles y puntos giratorios.
Silla de ruedas eléctrica
Recubrimientos ● Limpiar recubrimientos.
Partes plásticas ● Tratar con los limpiadores de plásticos.
Sistema Funcional ● Engrasar las partes móviles.

● Checar sistema eléctrico periódicamente.

● Revisar respuesta de palancas de control.

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Ruedas ● Reparación de igual modo que una rueda
de bicicleta o motocicleta.
● Revisar dibujo y presión de neumáticos para
evitar accidentes por falta de adherencia. 5,6

POSICIONAMIENTO DEL USUARIO EN SILLA DE RUEDAS


Postura adecuada para el usuario
Para el cuerpo humano es complicado mantener la posición sedente y
simétrica durante periodos largos y en distintas y tareas, a esta nos referimos
cuando el cuerpo esta posicionado con cadera, rodilla y tobillos con una
angulación articular de 90º, si bien esta es la posición sedente que la
bibliografía ha considerado la correcta, es imposible conseguirla o mantenerla
por mucho tiempo. Es importante considerar que el cuerpo humano
inconscientemente es capaz de adoptar comportamientos o posturas básicas
para conseguir la estabilidad, comodidad o función:

● Desplazar la pelvis en una inclinación posterior y llevar el tronco hacia


atrás en un apoyo posterior.
● Desplazar la pelvis en una posición anterior, inclinando el tronco hacia
adelante y descansando los brazos sobre una superficie.
● Inclinar la pelvis hacia un lado y el tronco lateralmente en la superficie.

(Imagen 8

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Una silla de ruedas únicamente resulta útil para su usuario si le proporciona
comodidad y una base de asiento estable que le permita:

● Sentarse erguido en una posición cómoda y funcional.

● Conseguir máxima capacidad funcional con el mínimo gasto de energía.

● Reducir la presión que soporta en las nalgas y muslos.

Tamaño del asiento: La profundidad del asiento es esencial para proporcionar


la cantidad correcta de apoyo debajo de los muslos. La longitud óptima del
asiento debe ser aquella que estando el usuario bien sentado (erguido) deje
una distancia aproximada de dos dedos de espacio entre el final del asiento y
el hueco poplíteo. El ancho del asiento debe considerar 2.5 cm entre los
muslos y el lateral de la silla, para evitar puntos de presión y oblicuidad pélvica.
(Imagen 9) 7

(Imagen 9

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Forma y ángulo del asiento-respaldo: El asiento debe ser firme y estar nivelado.
Cuando se mantiene una buena postura, el ángulo de la cadera (entre los muslos
y el tronco) es fundamental ya que determina la estabilidad de la pelvis. El
respaldo debe de estar ligeramente reclinado para que la fuerza de gravedad
recaiga sobre el pecho del usuario ayudándole a mantenerse estable en la silla. A
menudo los usuarios requieren de la gravedad para ayudar a equilibrar sus
troncos, que no pueden mantener una postura erguida, o que necesitan descansar
con el fin de aliviar la presión de sus nalgas. “Inclinación respaldo- asiento deberá
estar entre 90º-120º”; pues se puede adaptar mejor a diferentes circunstancias.
(Imagen 10) 8

(Imagen 10)

Postura en sedestación: Una postura adecuada en posición de sentado


estimula el uso total de los campos visuales, así mismo la tolerancia de
mantenerse sentado. Una buena posición sedente:

● Condición física:

✔ Evita contracturas.

✔ Estimula sistema sanguíneo y nervioso.

✔ Favorece la capacidad de respiración y digestión.

✔ Previene úlceras.

✔ Evita dolores de espalda.

✔ Evita cansancio corporal.

✔ Normaliza tono muscular.

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● Factores psicosociales:

✔ Facilita mantener el contacto visual y recibir estímulos.

✔ Optimiza funcionalidad e independencia.

✔ Mejora la realización de actividades básicas de la vida diaria.

Factores que afectan en la posición sedente:

● Tono.

● Espasticidad.

● Reflejos primitivos.

● Conciencia cognitiva-perceptiva. 3,9

Cojín: Tiene como principal objetivo la protección de tejidos blandos, mantener


el control postural, alineación, estabilidad y comodidad. La eficacia de un cojín
se puede valorar explorando la integridad de la piel cuando el usuario ha
pasado tiempo sentado. La elección de un cojín se basa en sus propiedades:

● Densidad: cociente entre cantidad de material y el área cúbica.

● Rigidez: fuerza de resistencia a compresión.

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● Características térmicas: conducir o aislar calor y humedad.

● Fricción: capacidad para mantener una posición y cambiarla si es


necesario.

Factores a considerar para elección de cojín:

● Tipo de silla de ruedas y su configuración.

● Movilidad del paciente.

● Integridad y nutrición cutánea.

● Peso corporal.

Puntos de apoyo que se tienen que Problemas al adoptar una

cuidar postura

● Tuberosidades isquiáticas. prolongada


● Ulceras.
● Cóccix.
● Luxación de cadera. 3,4
● Articulación de la cadera
coxo-femoral.

Cojín de gel: Contiene una sustancia que cambia de sitio para adaptarse al
contorno del cuerpo y distribuir la presión de manera uniforme, proporcionan
estabilización pelviana necesaria para sostener la función del tronco y las
extremidades superiores. Requieren de una base de espuma que mantenga la
estabilidad para mejor funcionalidad. (Imagen 11)

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Ventajas: Desventajas:

● Mayor protección de la piel. ● Pesados.

● Larga vida útil, siempre que ● Aumento de la

mantenga la forma original. humedad de la piel.

● Disipan mejor el calor. ● Reducción de la estabilidad.

Cojín de hule espuma: absorben presión, de grosor y densidad que no permiten


que se compriman por completo bajo el peso del paciente. Se pueden combinar
varias densidades de espuma, la más firme en las bordes laterales de los muslos
y la compresible en las tuberosidades isquiáticas. (Imagen 12)

Ventajas: Desventajas:

● Livianos y económicos ● No pueden ser lavados.

● Fáciles de modificar. ● Causan aumento


de la
● Pueden absorber humedad
temperatura de la piel.
● Poca vida útil.

Cojín de aire: tienen conductos y un compresor para introducir o extraer


alternativamente aire, a fin de disminuir y redistribuir la presión. La eficacia se
comprueba cuando existe espacio para introducir dos dedos entre las
tuberosidades isquiáticas y el cojín. (Imagen 13) 10

Ventajas: Desventajas:

● Buena distribución del peso. ● Mala estabilidad postural.

● Máxima protección de la piel. ● Muy costosos.

● Livianos ● Dificultad en transferencias.

● Cómodos ● Hay que controlar con


frecuencia la presión de
aire.

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(Imagen 11) (Imagen 12) (Imagen 13)

Soporte para los pies: Desde el punto de vista ergonómico los reposapiés deberían de ser de 90º;
sin embargo en adultos, normalmente no se da, porque de esta forma las plataformas del
reposapiés impiden el libre giro de las ruedas delanteras. La altura a la que estén colocadas las
plataformas también es importante, por ello en ambos casos, simplemente debe buscarse la
alineación articular. El asiento completo debe ser suficientemente alto para que el reposapiés pueda
evitar los obstáculos y lo suficientemente bajo como para que las rodillas quepan debajo de las
mesas. (Imagen 14)

(Imagen 14)

Altura del respaldo: Esta dependerá del nivel de control de tronco que presente
el usuario, para cubrir sus necesidades en cuanto a estabilidad. (Imagen 15)

Soporte de los brazos: Los reposabrazos procuran descanso a los brazos y


liberan tensión de los músculos del cuello. La presencia de este accesorio se
condiciona a las preferencias personales y al nivel de función y equilibrio. Los
apoyabrazos proporcionan apoyo adicional si se tiene equilibrio de tronco
limitado y actúan como anclajes de estabilidad lateralmente. La altura de este
no debe interferir con el aro propulsor y los codos deben estar ligeramente por

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delante de los hombros Regularmente los antebrazos del usuario apoyados
deben quedar a 90º del codo. (Imagen 16)

(Imagen 15) (Imagen 16)

Movilidad: El grado de movilidad que tenga el usuario en la columna, hombro,


codo, muñeca y dedos delimitará la posibilidad de realizar todo el recorrido de
propulsión óptimo, el recorrido más eficaz es iniciando por detrás del tronco hasta
terminar a la altura de los muslos. (Imagen 17)

Postura: Para poder propulsarse correctamente y aprovechar toda la energía


de esta propulsión, el usuario debe estar correctamente sentado (erguido) en
una posición simétrica, y así llegar adecuadamente a los aros de empuje y
realizar el movimiento completo del brazo, para iniciar la propulsión de la rueda
desde atrás, aplicando fuerza en todo el recorrido. (Imagen 18) 7

(Imagen 17) (Imagen 18)

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TÉCNICAS DE MANEJO DE SILLA DE RUEDAS
Manejo Dependiente
● Abrir una silla de ruedas

​ No empezar por las empuñaduras sino por los brazos de la silla,


y apoyar las palmas en los dos lados del asiento.
​ No levantar nunca una silla, por los brazos o los reposapiernas. Se
caerá de las manos. (Imagen 19)

● Plegar una silla de ruedas

​ Quitar el cojín del asiento

​ Levantar el reposapiés y reposa piernas, o retirarlo.

​ Tomar el asiento por la mitad o por sus extremos laterales. (Imagen 20)

(Imagen 19) (Imagen 20)

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● Colocar una silla de ruedas en un coche

​ Plegar silla.

​ Agarrar la silla. Los brazos harán el oficio de elevador.

​ Doblar las rodillas y las caderas manteniendo recta la espalda.

​ Levantar la silla, introduciendo primero las ruedas grandes. (Imagen 21) 11

(Imagen 21)

● Bajar el escalón de una banqueta

​ Inclinar la silla hacia atrás, hasta encontrar el equilibrio, empujando con


el pie la barra de inclinación (colocar en 2 puntos).
​ Empujar suavemente la silla hasta el borde del escalón.

​ Bajar sobre las dos ruedas grandes, ubicándote de forma perpendicular.

​ Se puede bajar de espaldas al escalón, realizando igualmente los pasos


anteriores. (Imagen 22)

● Subir el escalón de una banqueta

​ Colocar la silla perpendicularmente a la acera.

​ Apoyar el pie sobre una de las barras de apoyo para bascular la silla
hacia atrás y levantar así las ruedas pequeñas.
​ Colocar las ruedas pequeñas sobre la acera.

​ Hacer subir la silla levantando las ruedas grandes traseras.

​ Empujar la silla sobre la acera. (Imagen 23)

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(Imagen 22) (Imagen 23)

● Para bajar escaleras

​ Inclinar la silla hacía atrás.

​ Avanzar las ruedas grandes sobre el borde del escalón.

​ Hacer bajar la silla suavemente sobre cada uno de los escalones. Es


necesario llevar rápidamente hacia atrás la silla, a modo de freno.
​ Emplear el cuerpo como contrapeso al de la silla y su ocupante.

​ No arriesgarse a bajar ningún escalón, si no se está seguro de tener la


fuerza suficiente para controlar la maniobra, sobre todo si las escaleras
son altas y estrechas. (Imagen 24)

● Para subir escaleras

​ Colocarse de espaldas a las escaleras.

​ Inclinar la silla hacía atrás.

​ Colocar las dos ruedas grandes traseras contra el borde del escalón.

​ Agarrar firmemente mangos de empuje.

​ Colocar un pie en el primer escalón y otro en el segundo.

​ Jalar la silla sobre el primer escalón.

​ Subir el segundo pie en el segundo escalón. (Imagen 25)

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(Imagen 24) (Imagen 25)

● Es necesario tomar en cuenta:

​ Asegurarse que las manos del usuario no estén en las ruedas.

​ Si la persona que va sentada en la silla tiene un peso considerable,


requerirá más de una ayuda.
​ La segunda y la tercera ayuda, se colocan lateralmente para ayudar a
subir la silla. Agarrar la silla con una mano por el prolongamiento
superior de las ruedas pequeñas delanteras, manteniendo inclinada la

silla sin levantarla. Agarrar siempre la silla por las partes estables de la

misma. (Imagen 26) 12,13

(Imagen 26)

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Manejo Independiente
● Entrenamiento previo

​ Fortalecimiento de la musculatura remanente

​ Lograr el mayor equilibrio en sedestación

​ Lograr la mejor capacidad y mecánica respiratoria posible

​ Aceptación del paciente del uso de la silla de ruedas.

● Movimientos básicos sobre la silla

​ Poner y Sacar los frenos

​ Poner y Quitar los apoyabrazos

​ Tomar objetos del suelo

​ Quitar y Poner los pies sobre los apoyapiés.

​ Moverse dentro de la Silla (deslizarse, etc.).

● Maniobras dinámicas iniciales

​ Propulsión hacia delante (movimiento de brazos y de tronco)

​ Propulsión hacia atrás (tener cuidado con el tronco)

​ Giros (Amplio – Pequeño)

​ Subir y Bajar Rampas (Uso de zigzag)

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● Maniobras avanzadas

​ Balanceo sobre las ruedas traseras (Posición en 2 puntos)

​ Mantener el equilibrio sobre estas

​ Moverse haciendo equilibrio en dos ruedas

​ Subir y bajar un escalón

​ Subir y bajar rampas y escaleras.

Se describen dos técnicas importantes para lograr la correcta funcionalidad de


una persona con su silla de ruedas.

2 puntos: Colocar la silla en las 2 ruedas traseras

Acción del Paciente: Debe colocar la silla en dos puntos, la maniobra consiste
en realizar un impulso hacia atrás con las manos, extender cabeza, tronco y
hacer presión hacia las ruedas como si quisiera tirar el cuerpo hacia atrás.
Rápidamente se debe realizar una propulsión hacia delante.

El equilibrio se encuentra moviendo las ruedas hacia delante y atrás o


manteniéndolas quietas. Cuando se pierde el equilibrio hacia adelante hay que
propulsar la silla hacia delante hasta volver a lograr el equilibrio. Cuando se
pierde el equilibrio hacia atrás hay que propulsarla hacia atrás. Una vez
lograda la posición de 2 puntos, en el lugar debemos enseñarle al paciente a
desplazarse en dos ruedas hacia delante y atrás, así como realizar giros

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Subir y Bajar un escalón

​ Colocar la silla en 2 puntos.

​ Adelantarse hasta el escalón.

​ Colocar las ruedas delanteras sobre el escalón.

​ Empujar las ruedas traseras con fuerza para subir, o lenta y


simétricamente para bajar. (En caso de que el obstáculo sea muy
alto, para subir se puede realizar con un impulso previo
aprovechando la energía lineal). (Imagen 27)

Subir y Bajar Rampas

​ Propulsión hacia adelante en la rampa.

​ Inclinarse hacia delante para contrarrestar la tendencia de la silla a


volcar hacia atrás.
​ Extender los brazos hacia atrás lo más posible, para colocar las
manos en los aros y obtener el poder suficiente para subir la rampa.
​ Reúna la mayor velocidad posible antes de llegar a la base de la
rampa para que su impulso pueda ayudar a subir la rampa.
​ Para bajar la maniobra puede realizarse en 4 ruedas o en 2 puntos si
la pendiente es muy pronunciada.

​ Gire la silla quedando perpendicular a la pendiente de la rampa para

descansar. (Imagen 28) 13

(Imagen 27) (Imagen 28)

pág. 23
Una silla de ruedas debe adaptarse a la persona que la va a usar, es importante
no comprarla a la ligera. Aunque muchas veces no se haga, la elección de la silla
de ruedas debería estar aconsejada por un médico rehabilitador, un terapeuta
ocupacional y/o un fisioterapeuta.

Elección de Silla de Ruedas:

- Se debe adecuar al usuario: debe adaptarse a las dimensiones del


sujeto, a su peso y a sus necesidades clínicas.

- Se debe adecuar al uso: debe estar preparada para las actividades que
quiera realizar el usuario, adaptarse al estilo de vida de la persona.

- Se debe adecuar al entorno: tener en cuenta las dimensiones de los


espacios en los que se va a mover la persona afectada con la silla (ej. Puertas,
ascensor,).

- Otros criterios como: Estética, regulabilidad, seguridad, confort, precio,


durabilidad, facilidad de conducción, facilidad de plegado y transporte.

Silla de Ruedas Adecuada:

De forma general debe:

- Proporcionar estabilidad a la pelvis.

- Mantener una buena alineación de la columna vertebral.

- Mantener un buen equilibrio en postura sentada.

- Prevenir úlceras por presión.

- Mantener la función respiratoria.

- Facilitar la propulsión.

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- Proporcionar un medio para moverse con independencia.

- Facilitar el trabajo de las personas cuidadoras.

POSTURA CORRECTA/ REGULACION

- Asiento: Hay que medir la anchura de la cadera y la largura del muslo


para saber la medida de asiento más conveniente. El asiento debe ser 2-4 cm
más ancho que las caderas (A) y por delante debe quedar a tres dedos de la
flexura de la rodilla (B). Si el asiento tiene una inclinación de 1-4º ayudara a
evitar deslizamiento hacia delante (E). En ocasiones será necesario un cojín
especial para conseguir una postura correcta.

- Reposapiés: deben estar bien regulados, las caderas y rodillas a 90º.


Los muslos deben estar apoyados, pero sin demasiada presión. Si están
demasiado altos, no se apoyarán y tendrá demasiada presión sobre los
glúteos. Si están demasiado bajos, se escurrirá hacia delante.

- Apoyabrazos: Lo ideal es que sean regulables. Se recomienda que el


reposabrazos quede unos 2cm más alto que el codo, al pender el brazo
libremente (G).

- Respaldo: Hay diferentes alturas, su elección dependerá del control de


tronco de la persona usuaria y siempre será mejor un respaldo rígido que uno
flexible. Si el control de tronco es bueno, el respaldo debe quedar por debajo
del omóplato, unos 2,5cm (F). Con poco control de tronco, el respaldo deberá
llegar a la altura del hombro y es conveniente que la silla esté ligeramente

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basculada hacia atrás, para ayudar a mantener el equilibrio. En algunos casos
puede ser necesario el uso de apoyacabezas, soportes laterales, petos,
cinturones, etc.

-
MOVILIZACIONES Y TRANSFERENCIAS

Es importante saber cómo podemos ayudar correctamente a una


persona a moverse cuando ésta no puede hacerlo de manera independiente.

En un principio cuesta aprender a cambiar la forma de utilizar nuestra


fuerza, pero con tiempo y práctica se consiguen buenos resultados,
manteniendo intacta nuestra integridad física y la del usuario.

DEFINICION

MOVILIZACIONES: Son movimientos que se realizan sobre una misma


superficie, implicando cambios de posición o de situación (ej. Cambiar de
posición en la cama, corregir la postura sentado,)

*Objetivo principal: Aliviar las zonas de presión del enfermo desde una
posición anterior.

TRANSFERENCIAS: Son movimientos que implican pasar de una superficie a


otra (ej. Pasar de la cama a la silla de ruedas o de la silla al coche).

Dependiendo del grado de ayuda que necesite la persona serán:


+ACTIVAS: el paciente colabora en mayor o menor medida,
dependiendo de sus capacidades.
*PASIVAS: el paciente no colabora.

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PRINCIPIOS BAICOS EN LA MOVILIZACION DE PACIENTES

Para que cualquier movilización o transferencia resulte más fácil y se


eviten lesiones hay que tener en cuenta lo siguiente:

- Antes de mover a un enfermo es necesario conocer la enfermedad o lesión


que padece el enfermo y valorar el espacio y los útiles disponibles.
- Utilizar una vestimenta adecuada, no llevar objetos punzantes en los
bolsillos ni adornos.
- Explicar al enfermo los movimientos que vamos a realizar y pedir su
colaboración.
Dar una orden única, clara y precisa para el movimiento.
- Existen productos de apoyo para hacer que las transferencias sean mas
cómodas: tablas, disco giratorio, diferentes tipos de grúa… En muchos
casos, el uso de productos de apoyo disminuye considerablemente el
esfuerzo del cuidador, mejorando así la transferencia.
- Nunca tirar del cuello, el afectado no debe utilizar nuestro cuello como
punto para sujetarse y tirar de él.

- A la hora de realizar transferencias en las que movamos el tronco del


afectado, tendremos en cuenta que el afectado siempre mire hacia el
pecho, con el fin de flexionar el cuello y no provocar ninguna lesión.
- En los agarres debemos buscar el mayor contacto de la palma de la mano,
evitando hacer demasiada presión con nuestros dedos (no deben estar en
garra) y hacerle daño.

- Cuando cuesta levantarse es importante que los asientos, cama, etc. sean
firmes y no muy bajos

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