BENEMÉRITA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA

DE PUEBLA

Facultad de Psicología

PSICOTERAPIA DE PAREJA

Maestro: José Luis Rodríguez Sánchez

Alumnos:

García Mena Johana Monserrat 202037349

Galicia Vega Eduardo 202036592
Suárez De Jesús Diana Estela 202161781
Serret Zárate Donají 202161045
Zempoaltecatl Zenteno María José 202166795

“ CELOS E INFIDELIDAD”
1.Concepto de celos
Según la RAE (2023), celo se define como la envidia del bien ajeno, o recelo de que el propio
o pretendido llegue a ser alcanzado por otra persona. Así pues, los celos se pueden entender
como una emoción intensa experimentada a partir del deseo de la exclusividad de algo, ya sea
ajeno o propio.
Los celos se relacionan con el apego y el vínculo existente entre los integrantes de una pareja
sentimental; son producto del miedo a perder dicho vínculo o a la persona en cuestión,
incluso se pueden considerar como un tipo de desconfianza directamente relacionada con las
inseguridades. Se trata de una respuesta emocional intensa y compleja que se ve acompañada
por una sensación de exclusión y/o abandono.
Si bien no existe un parámetro cuantitativo que determine la intensidad de los celos, se
considera popularmente que los extremos que los delimitan son por un lado los celos
adaptativos, y por el otro los celos excesivos o incluso los que son considerados como celos
patológicos, siendo estos últimos los que se pueden observar en personas con problemas de
confianza.
Las formas en las que pueden presentarse los celos son celos manifiestos, celos ocultos y
celos patológicos, además de los que se consideran como adaptativos (Instituto Mexicano de
la Juventud, 2018).

2. ¿De qué forma son disfuncionales?

Los celos excesivos se caracterizan por una preocupación intensa respecto a una posible
infidelidad sin la existencia de pruebas que sustenten las sospechas, y que usualmente
provocan miedo, ansiedad y enojo.
Los celos manifiestos se dan cuando la persona desconfía de su pareja y la interroga sobre las
personas con quienes convive y los lugares en los que se encuentra. Los celos ocultos, por
otro lado, se observan como acciones que denotan molestia sin hacerse explícitamente con
motivo de la interacción con alguna otra persona.
En la mayoría de los casos, los celos patológicos se presentan cuando la convicción y
convencimiento de la infidelidad de la pareja es irrefutable y la seguridad de que la realidad
tal como se percibe es absoluta, por lo que la vivencia celotípica puede ser completamente
delirante. La idea delirante se considera como una creencia personal falsa que se basa en
inferencias incorrectas sobre la realidad externa que terminan por influir en el
comportamiento y los sentimientos de las personas.
Es preciso destacar la celotipia como otra forma de disfuncionalidad en los celos. Como tal la
celotipia y los celos patológicos suelen ser considerados como lo mismo, sin embargo, el
concepto de celotipia también puede abordarse desde una perspectiva inclinada hacia lo
patologizante, definiéndolo como un trastorno delirante multifactorial que hace pensar a la
persona que su pareja le es infiel sin necesidad de pruebas o indicios, basándose únicamente
en el miedo y la desconfianza.
3. ¿En qué medida son normales?
Los celos son una emoción humana común y, en cierta medida, son normales y naturales. A
menudo surgen cuando una persona percibe una amenaza a una relación valiosa, como la de
pareja, amistad o incluso familiar. Pueden ser una reacción normal a la percepción de perder a
alguien importante o sentir que no se tiene la misma atención o prioridad que antes.

Sin embargo, la “normalidad” de los celos se mide en función de su intensidad, frecuencia y

el control que se tiene sobre ellos. En un grado leve, los celos pueden ser manejables y hasta
fortalecen relaciones cuando se comunican adecuadamente. Pero cuando los celos son
frecuentes, intensos o provocan conductas controladoras, intrusivas o inseguridades
constantes, pueden convertirse en un problema y ser considerados patológicos.

Según el Instituto Méxicano de Juventud, se consideran celos patológicos cuando una

persona invierte más del 30% de su actividad diaria en "encontrar pruebas" que justifiquen su
comportamiento.

4. ¿Hasta dónde deben limitarse?

Los celos son una emoción humana natural que puede surgir en diversas relaciones, ya sea de
pareja, amistad o familiares. Sin embargo, es fundamental establecer límites claros para que
los celos no se conviertan en un obstáculo para el bienestar personal y la armonía de las
relaciones interpersonales.

Establecer límites claros implica reconocer cuándo los celos son una señal para mejorar la
comunicación y fortalecer la conexión, y cuándo se convierten en un impedimento para el
bienestar individual y colectivo. Al mantener un equilibrio adecuado, los celos pueden ser
gestionados de forma constructiva, promoviendo relaciones más saludables y satisfactorias.

Es esencial que los celos no deriven en comportamientos controladores o posesivos. Acciones

como revisar constantemente el teléfono de la pareja, monitorear sus actividades sociales o
imponer restricciones injustificadas sobre sus interacciones son indicadores de que los celos
han sobrepasado un límite saludable. Estos comportamientos no solo invaden la privacidad y
autonomía de la otra persona, sino que también generan un ambiente de desconfianza y
resentimiento que puede dañar irreversiblemente la relación.

5. Concepto de infidelidad
La infidelidad se refiere a la ruptura de un compromiso de exclusividad en una relación,
generalmente en el ámbito emocional o sexual. Este compromiso puede ser explícito, como
en el caso de acuerdos de monogamia, o implícito, en relaciones donde ambos miembros
esperan una exclusividad mutua. La infidelidad implica establecer un vínculo íntimo con una
tercera persona fuera de la relación y puede abarcar tanto encuentros físicos como conexiones
emocionales. En la era digital, también se observa la infidelidad virtual, que incluye
interacciones románticas o sexuales a través de mensajes, redes sociales o plataformas en
línea.
Desde el punto de vista psicológico, la infidelidad no es solo un acto de traición, sino una
ruptura de la confianza fundamental que sostiene la relación. Algunos estudios en psicología
y sociología sostienen que esta conducta puede estar motivada por factores como la
insatisfacción en la relación, una baja autoestima, la búsqueda de novedad y excitación, o
dificultades en la comunicación. A menudo, quienes la cometen buscan satisfacer
necesidades emocionales o sexuales que no encuentran dentro de su relación principal.

6. Tipos de infidelidad
1. Directa
● Es deliberada y planificada, y se expresa a través de comportamientos observables y
objetivos. La persona involucrada tiene en mente engañar a su pareja.
2. Indirecta
● No existe la intención inicial de ser infiel, el deseo y acto surgen de manera repentina.
Existe arrepentimiento.
3. Virtual
● Los medios digitales como forma de evadir la realidad y separarla del mundo físico.
Puede ser bajo el anonimato.
4. Física
● Es una de las más frecuentes, se lleva a cabo el acto.
5. Sexual
● Hay acto sexual, no necesariamente existe un apego emocional profundo.
6. Obligada
● No necesariamente refleja el deseo genuino de la persona de traicionar a su pareja,
sino una situación de presión externa o interna.
7. Adicción sexual
● Busca satisfacer su necesidad erótica obsesiva. Se manifiesta debido a un patrón de
descontrol en la conducta sexual.
8. De aprobación
● No existe la fortaleza para dejar la relación definitivamente. Los usuarios de este tipo
de crisis afectiva suelen prometerles un vínculo estable a su compañero o compañera
de infidelidad, pero en realidad es una manera de evitar la posibilidad de una
separación a solas.
7. Consecuencias
1. Consecuencias emocionales
❖ Dolor emocional y traición: La persona engañada suele experimentar un dolor
profundo al descubrir la infidelidad, una sensación de traición que puede minar su
confianza en la pareja y en futuras relaciones.
❖ Ansiedad y depresión
❖ Culpa y vergüenza: La persona que ha sido infiel puede experimentar sentimientos de
culpa y vergüenza, lo que también afecta su salud emocional.
❖ Autoestima baja: Tanto la persona engañada como la que engañó pueden sufrir una
disminución en su autoestima.
❖ Desconfianza en futuras relaciones: La experiencia de una infidelidad puede llevar a
una desconfianza persistente en futuras relaciones.
2. Consecuencias en la relación de pareja
❖ Pérdida de la intimidad y conexión emocional: La infidelidad suele romper la
conexión emocional entre las personas involucradas, afectando tanto la comunicación
como la intimidad física.
❖ Problemas de comunicación: La pareja puede experimentar problemas graves en su
comunicación, ya que la infidelidad afecta la honestidad y vulnerabilidad en el
diálogo.
❖ Conflictos frecuentes: La infidelidad es una fuente de conflictos y discusiones en la
relación.
❖ Posibilidad de ruptura o divorcio: Muchas relaciones no sobreviven a la infidelidad,
ya que esta es una de las causas principales de ruptura en parejas.
❖ Dificultades para reconstruir la confianza: La restauración de la confianza es uno de
los desafíos más difíciles en una relación después de una infidelidad.
3. Consecuencias familiares y sociales
❖ Impacto en los hijos: Cuando hay hijos en común, la infidelidad puede tener un
impacto directo en ellos, especialmente si la relación se torna conflictiva o termina en
divorcio. Los hijos pueden experimentar estrés, confusión y sentimientos de
inseguridad.
❖ Interferencia en la vida social: La infidelidad puede afectar las relaciones sociales, ya
que amigos y familiares suelen involucrarse, directa o indirectamente, en el proceso
de separación o reconciliación.
❖ Estigmatización: Las personas que han sido infieles pueden ser juzgadas o etiquetadas
negativamente en su entorno social.
4. Consecuencias psicológicas y de salud mental
❖ Estrés postraumático: En algunos casos, la infidelidad puede provocar síntomas
similares al estrés postraumático, como flashbacks, hipervigilancia y pensamientos
intrusivos sobre el engaño.
 ❖ Aislamiento social: El miedo a ser juzgadas o a exponer su vulnerabilidad puede
llevarlas a alejarse de su círculo social y a evitar nuevas relaciones.
❖ Dependencia emocional o codependencia: Este tipo de codependencia puede impedir
el crecimiento personal y la sanación emocional.
❖ Conductas de riesgo: abuso de sustancias (alcohol, drogas) o conductas sexuales
impulsivas, en un intento de manejar el dolor emocional.
5. Consecuencias financieras
❖ Impacto económico en caso de separación: división de bienes, pensiones alimenticias
o pérdida de estabilidad financiera.
❖ Costos de terapia o asesoramiento: Si la pareja decide no continuar junta, puede ser
necesario que ambas partes busquen ayuda profesional para manejar las
consecuencias emocionales, lo cual también tiene un costo.
6. Consecuencias en la identidad y autoestima de las personas
❖ Revisión de la identidad personal: La infidelidad puede llevar a una crisis de identidad
en ambas partes, especialmente en la persona engañada, quien puede preguntarse
cómo permitió que ocurriera o si fue suficiente para la relación.
❖ Impacto en los valores personales: La infidelidad puede desafiar los valores y
principios de las personas.

8. Alternativas de intervención
Siendo las infidelidades uno de los motivos de consulta más frecuentes en la terapia de
pareja, las estrategias con las que se abordan son tan diversas como los enfoques de la propia
terapia.
El terapeuta debe brindar una serie de pautas de conducta, ideas clave y contextos de
comunicación fundados en la honestidad que puedan ayudar a la pareja a solventar cualquier
tipo de conflicto o bloqueo psicológico que la infidelidad haya propiciado. Dado que no todas
las infidelidades son iguales ni comparten las mismas características entre ellas, una de las
primeras tareas que deben llevarse a cabo es la de ayudar a identificar el tipo y los matices de
la infidelidad. Esto es necesario para que ambos miembros de la pareja sean conscientes de lo
sucedido, de hasta dónde ha llegado la infidelidad y qué comportamientos son considerados
como una traición por una u otra parte de la pareja. De esta manera es posible esclarecer lo
sucedido, ambos miembros serán conocedores de los comportamientos y las intenciones de la
otra persona y se puede intervenir desde una base compartida ya con conocimiento de la
situación desde ambas perspectivas.
Es necesario dejar que la persona que ha sido infiel se exprese libremente para entender su
manera de ver lo ocurrido y el tipo de necesidades que intentaba cubrir, no necesariamente de
índole sexual. El hecho de que la persona que ha sido infiel sienta que sus sentimientos e
intenciones también son tenidas en cuenta contribuirá positivamente al esclarecimiento de las
causas de la infidelidad.
Puesto que no todas las personas experimentan el daño de una infidelidad de la misma
manera, es necesario que cada miembro de la pareja comparta todo aquello que siente tras la
infidelidad, cuál es su grado de afectación y sus motivos para sentirse así.
También es importante el establecimiento de metas para transformar cualitativamente la
rutina de convivencia de pareja y dar inicio a un nuevo ciclo de esperanza para ambas partes
en el que se puedan arreglar de manera saludable cualquier nuevo problema que pueda surgir.