La Cultura de La Crítica - Kevin Macdonald
La Cultura de La Crítica - Kevin Macdonald
La Cultura de La Crítica - Kevin Macdonald
A CULTURA D CRITICA
— i
Los JUDÍdS Y LA CRÍtlCA
RADICAL DE LA CULTURA GENTIL
©mniaVeritas
Kevin B. MacDonald
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Los judíos y la crítica radical
de la cultura gentil
Un análisis evolutivo de la participación judía en
los movimientos políticos e intelectuales del siglo
XX
©mniaVeritas.
Kevin B. MacDonald
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Los judíos y la crítica radical de la
cultura gentil
©mniaVeritas.
www.omnia-veritas.com
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de esta publicación puede ser reproducida por ningún
medio sin la autorización previa del editor. El Código de la Propiedad Intelectual prohíbe las copias
o reproducciones para uso colectivo. Toda representación o reproducción total o parcial por cualquier
medio sin el consentimiento del editor es ilegal y constituye una infracción sancionada por los
artículos del Código de la Propiedad Intelectual.
CAPITULO 1........................................................................................................ 11
ÍN1RODUCCIÓN Y TEORÍA................................................................................................................ 11
Conceptualización de la critica radical judía a la sociedad gentil.................... 26
CAPÍTULO II....................................................................................................... 39
La escuela boasiana de antropología y el declive del darwinismo en las ciencias
SOCIALES........................................................................................................................................... 39
Después de Boas: ejemplos recientes de la influencia judía en la
investigación de las ciencias socialescon fines políticos..................................... 55
Conclusión:........................................................................................................................ 82
CAPÍTULO III......................................................................................................88
LOS JUDÍOS Y LA IZQUIERDA............................................................................................................ 88
Parte 1............................................................................................................................... 88
Radicalismo políticoe identificación judía................................................................. 89
Parte 2............................................................................................................................... 99
El comunismo y la identificación judía en Polonia................................................... 99
Parte 3............................................................................................................................. 110
La izquierda radical y la identificación judía en Inglaterra y Estados Unidos.... 110
Parte 4............................................................................................................................. 126
Procesos de identidad social, intereses colectivos judíos percibidos y la izquierda
radical judía..................................................................................................................126
Parte 5............................................................................................................................. 140
Procesos de identidad social, intereses colectivos judíos percibidos y la izquierda
radical judía (continuación)....................................................................................... 140
Parte 6............................................................................................................................. 147
Conclusión:................................................................................................................. 147
OTROS TÍTULOS...............................................................................................445
Capítulo I
Introducción y teoría
111
ni homogéneo; ha habido muchos puntos de discordia dentro de ia
comunidad judía en cuanto a cómo protegerse como pueblo y cómo
promover sus intereses.
I2|
en los movimientos políticos radicales era subrayar que la gran mayoría
de los judíos no eran radicales. Sin embargo, durante este mismo periodo,
el AJCommittee se comprometió a combatir el radicalismo dentro de la
propia comunidad judía (por ejemplo, Cohén 1972).
13 |
Kevin B. MacDonald
Las personas que, por una u otra razón, se sienten oprimidas por un
determinado sistema sociopolítico tienden a gravitar hacia movimientos
que critican ese sistema, culpan a los demás de sus propios problemas y,
en general, justifican la percepción positiva que tienen de sí mismos y de
su grupo, así como la percepción negativa que tienen de los que no
pertenecen a su grupo.
14 I
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
15 |
profesión, líderes; construyen formas de percibir [las cosas]".
16 |
I
1
capacidad de persuasión”. Los judíos suelen estar muy por encima de la
media en estas características, y estas características han sido de gran
Importancia para el judaismo a lo largo de la historia como parte de una
estrategia de grupo evolutiva.
17 |
sólo por la gran proporción de sus miembros que reivindican una
identidad judía, sino también porque la estrategia evolutiva de estos
grupos ha conservado las principales características del judaismo. Son
estas características las que han permitido a estos grupos ser muy eficaces
en la consecución de sus objetivos.
Otro tema importante de este libro es que los intelectuales judíos han
desarrollado movimientos intelectuales radicalmente críticos con las
instituciones de las sociedades gentiles. Por el contrario, las sociedades
dirigidas por gentiles han sido a menudo la fuente de ideologías que
pretenden justificar racionalmente las instituciones de una sociedad
determinada en un momento dado. Este parece haber sido el caso de las
principales religiones del mundo y, más recientemente, de ideologías
como el comunismo, el fascismo y la democracia liberal. Dado que el
judaismo es una estrategia de grupo minoritario con su propia visión del
mundo, ha tendido a adoptar ideologías que tienen una percepción
negativa de las ideologías e instituciones de la sociedad de acogida.
18 |
típicamente comparados con animales propensos al peor libertinaje,
como se indica en los escritos de Maimónides, donde se sospecha que las
mujeres gentiles se dedican a la prostitución, y se menciona que los
hombres gentiles tienen tendencia a la bestialidad2.
19 |
cuando pedían la erradicación del cristianismo"6.
20 |
escribió "con toda la angustia, todo el pesimismo y todo el nihilismo de
un converso que había perdido la religión de sus antepasados al tiempo
que era incapaz de apropiarse e integrar el cristianismo". Rojas sometió
a la sociedad castellana de su tiempo a "un agudo análisis, destruyendo,
con un espíritu calificado de 'destructivo', todos los valores tradicionales
y las representaciones mentales del nuevo e intolerante sistema".
Empezando por la literatura, siguiendo por la religión y pasando por
todos los "valores" del sistema de castas -el honor, el valor, el amor- todo
se pulveriza de forma perversa"1011.
21 |
Kevin B. MacDonald
22 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
23 |
Blanco) - este grupo ha representado tradicionalmente una gran
proporción de americanos blancos]. En la mente de algunas de las
personas que entrevisté, estos oficiales rubios estaban siempre a un paso
de convertirse en nacionalsocialistas. Se consideraba que pertenecían a
una clase dirigente aria que podía tomar medidas represivas contra
personas de otros orígenes étnicos, o que de hecho las tomaba24.
24 |
por un fuerte sentimiento de identidad judía y que todos tenían una actitud
negativa hacia la cultura gentil.
•"'I
determinados por la ciencia, y todos creen en este origen científico. En
realidad, no es así en absoluto... Es evidente que son sinceros. Su
sinceridad y lealtad a su grupo es, sin embargo, de naturaleza persuasiva
y, por tanto, engañosa.
26 |
naturalmente atraídos por los movimientos que son críticos con las
estructuras de poder gentil, e incluso pueden llegar a abogar por el
derrocamiento completo de estas estructuras.
28 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
29 |
consecuencias?
30 |
""sobre las "patologías de la vida judía", especialmente "su sensación de
que 'todo el planeta está contra nosotros’, el consiguiente miedo,
resentimiento y odio hacia los gentiles, y los sueños secretos de venganza
y victoria". Estos "sueños secretos de venganza y victoria" son uno de los
temas tratados en el capítulo 3 de este libro, que trata de las
personalidades radicales judías, y en el capítulo 4, que trata de Freud y el
psicoanálisis.
Esta mayor intensidad hacia los grupos no judíos y los que perciben
como sus enemigos podría ser sólo una manifestación afectiva de estas
tendencias. De hecho, el capítulo 7 del PTSDA presenta una síntesis de
las pruebas de una fuerte compartimentación de la vida afectiva de los
judíos, caracterizada tanto por interacciones sociales positivas con otros
miembros de su grupo, reales o percibidos, como por una marcada
hostilidad hacia los miembros de otros grupos, reales o percibidos.
31 |
por los antisemitas. Este tema se ha utilizado históricamente como
apología religiosa del judaismo50, pero los autores judíos secularizados
también han retomado el tema. Castro (1954, 558) describe los intentos
de los intelectuales neocristianos de "defender el linaje hebreo" contra los
insultos antisemitas durante la Inquisición. El obispo Converso de Burgos
había dicho: "No creas que puedes insultarme llamando judíos a mis
antepasados. Es obvio que lo son, y estoy orgulloso de ello; porque si la
antigüedad es sinónimo de nobleza, ¿quién más puede remontarse tan
lejos en el tiempo? El judío, descendiente de los macabeos y levitas, es
"noble de nacimiento". Castro 51 señala que uno de los temas que se
encuentran en la literatura neocristiana de este periodo es el de la "estima
por el hombre perteneciente a las clases sociales más bajas y marginadas".
La categoría a la que los judíos sienten que pertenecen se presenta de
forma decididamente positiva.
50 PTSDA, cap. 7.
51 Castro 1954, 559.
52 Faur 1992, 35.
53 Castro 1971, 581; palabras en cursiva en el texto.
32 |
socialmente desaprobadas. Por ejemplo, Philip Roth fue ampliamente
criticado por personas y organizaciones judías por retratar a los judíos de
esa manera, o al menos por hacerlo en Estados Unidos, donde sus escritos
eran accesibles a los antisemitas54. Aunque la razón más obvia para hacer
estas críticas es que tales representaciones pueden alimentar el
antisemitismo, Roth 55también sugiere que "lo que más duele de estas
representaciones negativas... es su efecto directo sobre algunos judíos".
"Has herido los sentimientos de muchas personas al revelar cosas de las
que se avergüenzan". La crítica a Roth implica que el grupo debe ser
retratado positivamente, ya que la literatura judía ha retratado
positivamente a los judíos la mayoría de las veces56. Estas mismas críticas
también reflejan el análisis del autoengaño judío en el capítulo 8 de SAID.
La vergüenza de que muchas personas sean conscientes de las acciones y
el comportamiento de los judíos es sólo a medias, y cualquier ruptura de
esta ceguera va necesariamente acompañada de un grave conflicto
psicológico.
M Roth 1963.
55 Roth 1963, 452.
56 Alter 1965, 72.
intelectualmente sésil ’7.
34 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Por último, hay buenas razones para suponer que las opiniones de
las minorías pueden tener una fuerte influencia en el comportamiento de
la mayoría62. La investigación sobre la identidad social indica que un
punto de vista minoritario, especialmente cuando es internamente
coherente, puede tener un impacto:
[...] porque plantea la posibilidad de una alternativa a la opinión mayoritaria
de consenso, que se ha dado por sentada y no se ha cuestionado hasta ahora.
La gente puede ver de repente grietas en la fachada del consenso
mayoritario. Surgen nuevos problemas y cuestiones que hay que
abordar. El statu quo ya no se acepta pasivamente como si fuera algo
inmutable, estable y el único y legítimo árbitro de la naturaleza de
las cosas. La gente tiene la oportunidad de cambiar sus creencias, sus
35 |
puntos de vista, sus costumbres, entre otras cosas. ¿Y a qué recurren? Una
posible vía es la minoría activa. Por definición e intrínsecamente, esto
proporciona una solución conceptualmente coherente y elegantemente
sencilla a los problemas que, debido a su actividad, asolan ahora la
conciencia colectiva. En el lenguaje de la "ideología" [...], las minorías
activas pretenden sustituir la ideología dominante por una nueva. 6
36 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
37 |
ciencias sociales.
38 |
Capítulo II
** Liebman 1973, 213; véase también Degler 1991; Hollinger 1996; Horowitz 1993, 75;
Rothman & Lichter 1982
67 Degler 1991,188ss
39 I
Kevin B. MacDonald
40 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
41 |
Kevin B. MacDonald
Boas participa en la
"Luchó durante toda su vida contra la idea de que la raza era una de las
principales fuentes de diferencias entre los distintos grupos humanos en
cuanto a sus capacidades mentales y sociales. Llevó a cabo esta lucha
mediante su implacable e implacable evocación del concepto de cultura.
77 Cuddihy 1974,155
78 Dosse 1997 II, 30
79 Lilla 1998, 37
80 Degler 1991, 61
81 Degler 1991, 71
42 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
43 I
Kevin B. MacDonald
44 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
- Wolf 1990,168)
3 SAID, cap. 5
* Grant 1921,17
Frank 1997, 741
* Grant 1921,16, 91.
r Grant 1921, xxxi-xxxii.
45 |
Kevin B. MacDonald
Eran un grupo muy unido con una clara agenda política e intelectual,
más que una colección de individualistas que buscaban
desinteresadamente la verdad. La derrota de los "darwinistas" no se
produjo sin una fuerte exhortación de todos los hijos de sus madres que
apoyaban a la "derecha". Tampoco se produjo sin una fuerte presión tanto
sobre los amigos leales como sobre los "camaradas más débiles", a
461
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
47 [
Kevin B. MacDonald
48 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
49 |
Kevin B. MacDonald
50 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Aunque Boas (al igual que Freud; véase el capítulo 4) formuló sus
conjeturas de forma muy dogmática, sus "reconstrucciones históricas son
conclusiones, suposiciones y afirmaciones injustificadas, que van desde
lo meramente posible hasta lo patentemente absurdo". Prácticamente
ninguno de ellos es verificable"129.
51 I
Kevin B. MacDonald
52 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
53 |
Kevin B, MacDonald
54 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
55 |
Kevin B. MacDonald
56 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
Ruse señala que el libro de Gould fue escrito con pasión mientras
era "ampliamente criticado" por los historiadores de la psicología, lo que
sugiere que Gould incorporó sus sentimientos sobre el antisemitismo a
sus escritos científicos sobre las influencias genéticas en las diferencias
individuales de inteligencia.
3 Myers 1990.
“ Ruse 1989, 203.
Ruse 1989, 203.
57 |
Kevin B. MacDonald
58 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
60 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
61 |
Kevin B. MacDonald
Kamin188 también concluyó que "el uso del censo de 1890 sólo tenía
un propósito reconocido por los partidarios de la ley. La "nueva
inmigración" había comenzado después de 1890, y la ley fue diseñada
para excluir a los biológicamente inferiores [...] es decir, a las personas
del sudeste de Europa". Esta es una interpretación muy sesgada de los
motivos de quienes apoyaron la restricción de la inmigración.
62 |
LA CULTUR A DE LA CRÍTICA
Del mismo modo, Gould sugiere una relación causal entre la visión
hereditaria del CI y la Ley de Inmigración de 1924, que restringió la
inmigración procedente de Europa del Este y del Sur en favor de los
inmigrantes del Norte y del Oeste. Esta ley se relacionó posteriormente
con el Holocausto:
Las cuotas [...] redujeron en gran medida la inmigración procedente del sur
y el este de Europa. En la década de 1930, los refugiados judíos querían
emigrar, pero no eran admitidos. Las cuotas legales, así como la constante
propaganda eugenésica, les prohibían inmigrar por completo, a veces
durante varios años, cuando no se cubrían las cuotas incrementadas para
los países del norte y del oeste de Europa. Chase (1977) estimó que las
cuotas impidieron la inmigración de hasta 6 millones de personas de
Europa central, meridional y oriental a Estados Unidos entre 1924 y el
comienzo de la Segunda Guerra Mundial (suponiendo que la inmigración
63 |
Kevin B. MacDonald
64 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
65 |
Kevin B. MacDonald
66 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
67 |
Kevin B. MacDonald
68 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
69 |
Kevin B. MacDonald
70 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
71 |
Kevin B. MacDonald
pensamiento bioevolutivo.
72 |
L A CULTURA DE LA CRITICA
73 |
Kevin B. MacDonald
74 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
75 |
Kevin B. MacDonald
76 |
L A CULTURA DE LA CRÍTICA
Not in Our Genes.246 Dudo mucho que ninguno de los autores que se
comentan en esta sección del artículo de Lemer y von Eye pueda ser
calificado realmente de determinista genético247.
La cuestión es que hay muchas razones para creer que la lucha contra
el antisemitismo es una de las principales motivaciones de estos ataques.
77 |
Kevin B. MacDonald
principios de los 50, no podía escapar de Hitler. Él, los nazis, la Gestapo
y Auschwitz estaban por todas partes250.
78 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
79 |
Kevin B. MacDonald
respecta a las mujeres) con las de los teóricos nazis257. [Nota de Blanche:
¿Tal vez porque la verdad es "nazi”?]
80 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
barreras entre los judíos y el resto de la sociedad en la que viven. Por otra
parte, aunque es razonable suponer que los judíos están genéticamente
más inclinados al etnocentrismo que los pueblos occidentales261262, la
erección de barreras culturales entre judíos y gentiles es un aspecto crítico
del judaismo como cultura.
ppsDA, Capítulo 8
SAID, capítulo 1.
pTSDAf PASSIM.
SAID, capítulos 2-5.
SAID, capítulo 6.
81 |
Kevin B, MacDonald
Conclusión:
Una de las principales ideas desarrolladas en este capítulo es que el
escepticismo científico y lo que podría llamarse "oscurantismo
científico" han demostrado ser herramientas muy útiles en la lucha contra
las teorías científicas cuyas conclusiones pueden resultar embarazosas
para algunos.
Así, el hecho de que los boasianos exigieran los más altos niveles de
rigor científico en relación con las generalizaciones sobre la cultura y la
determinación del papel de la variación genética en el desarrollo de las
diferencias individuales coincide con la adopción de una "antiteoría" de
la cultura que se oponía fundamentalmente a los intentos de desarrollar
un sistema de clasificación y generalizaciones. Del mismo modo, la
perspectiva teórica dinámica-contextualista, al tiempo que rechaza la
82 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
83 |
Kevin B. MacDonald
84 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
85 |
Kevin B. MacDonald
86 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
87 |
Kevin B. MacDonald
Capítulo III
Parte 1
a asociación entre los judíos y la izquierda política ha sido
88 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
89 |
Kevin B. MacDonald
90 |
sus hijos no se hubieran visto obligados a volver a aprender sus lecciones
en ruso para aprobar sus exámenes. Los temas literarios de los escritores
judíos soviéticos más reconocidos en la década de 1930 destacan la
importancia de la identidad étnica para ellos:
91. |
Kevin B. MacDonald
92 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
que simpatizaran con los nativos, una táctica que tiene sentido desde un
punto de vista evolutivo.
Por lo tanto, hay pruebas sólidas que sugieren que los bolcheviques
judíos conservaron al menos algún remanente de su identidad judía. En
algunos casos, su identidad judía puede haber sido "reactiva", es decir,
formada en respuesta a las percepciones de los demás. Es posible que
Rosa Luxemburg tuviera una identidad judía reactiva, ya que se la
consideraba judía a pesar de que "en sus momentos más críticos con su
propio pueblo, no dudaba en destrozar sin piedad a otros judíos"
(Shepherd, A Price befare Rubíes: Jewish Women as Rebels and Radicáis,
p. 118).
S3 |
Kevin B. MacDonald
94 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
étnicos.
95 |
Kevin B. MacDonald
96 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
97 |
Kevin B. MacDonald
98 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
American Jewry).
Además, hay pruebas fehacientes de que, tanto bajo los zares como
en el periodo posrevolucionario, los bolcheviques judíos no veían
ninguna contradicción entre sus actividades y los intereses judíos. La
revolución puso fin al antisemitismo oficial del poder zarista, y aunque
el antisemitismo popular persistió en el periodo posrevolucionario, el
poder lo prohibió oficialmente. Los judíos estaban enormemente
sobrerrepresentados en los puestos clave de la economía y la política, así
como en la esfera cultural, al menos hasta la década de 1940. Fue un
poder que buscó agresivamente destruir todo vestigio del cristianismo
como fuerza unificadora en la Unión Soviética, y al mismo tiempo trató
de establecer una subcultura judía secularizada, para que el judaismo no
perdiera su continuidad como grupo, ni sus mecanismos unificadores,
como la lengua yiddish.
Parte 2
99 |
Kevin B. MacDonald
100 |
LA CULTURA DE LA CRÍTIC A
101 |
Kevin B. MacDonald
102 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
103 |
Kevín B. MacDonald
Mientras que los miembros judíos del PCP veían el partido como
ventajoso para los intereses judíos, los gentiles polacos lo consideraban,
incluso antes de la guerra, como "pro-soviético, antipatriótico y 'no
realmente polaco' desde un punto de vista étnico" (Schatz, op. cit. p. 82).
La percepción de esta falta de patriotismo fue la principal fuente de
hostilidad popular hacia el PCP.
104 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
105 |
Kevin B. MacDonald
106 |
LA CULTURA DE LA. CRÍTICA
Los esfuerzos por hacer que el gobierno dominado por los judíos
pareciera polaco no tuvieron éxito, ya que había muy pocos polacos de
confianza capaces de ocupar puestos en el partido, la administración
superior, el ejército y los servicios. Por lo tanto, se favoreció a los judíos
que habían cortado sus lazos oficiales con la comunidad, a los que habían
cambiado sus nombres o a los que podían pasar por polacos por su
aspecto físico o la falta de acento judío. Independientemente de las
definiciones personales que estos individuos se dieran a sí mismos,
quienes los reclutaron para ocupar puestos de poder tomaron su
extracción étnica percibida como la clave de su fiabilidad. La situación
107 |
Kevin B. MacDonald
108 |
incluso en las celdas de la prisión, (ibidem p. 260)
109 |
Kevin B. MacDonald
Parte 3
110 I
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Las páginas de la revista Madre Tierra, que Emma Goldman publicó entre
1906 y 1917, están llenas de historias en yiddish, cuentos del Talmud y
traducciones de los poemas de Morris Rosenfeld. Además, su compromiso
con el anarquismo no le impidió hablar y escribir sobre el tema de la carga
particular que tenían que soportar los judíos en un mundo donde el
antisemitismo era un enemigo perenne. Aparentemente, la fe anarquista de
Emma Goldman, con su insistencia en el universalismo, no iba acompañada
de un abandono de su identidad judía, (ibidem p. 8)
1111
Kevin B. MacDonald
112 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
En los años 30, el Forward era el más leído de todos los periódicos
judíos del mundo y tenía estrechos vínculos con el Partido Socialista.
Wemer Cohn definió en 1958 a la comunidad de inmigrantes judíos de
los años 1886 a 1920 como "una gran asamblea de polemistas de
113 |
Kevin B. MacDonald
izquierda".
114 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
finales de los años 20, los judíos desempeñaron un papel muy importante
en el PCUS. La simple mención de los porcentajes de dirigentes judíos
no indica adecuadamente el alcance de la influencia judía, porque no
tiene en cuenta las características personales de los activistas judíos como
grupo talentoso, educado y ambicioso y también porque el partido había
reclutado conscientemente a gentiles para enmascarar el alcance del
dominio judío.
Klehr calcula que, entre 1921 y 1961, los judíos constituían el 33,5%
de los miembros del Comité Central del partido y su representación
superaba a menudo el 40%. Entre los diversos grupos étnicos de personas
nacidas en suelo estadounidense, los judíos eran la única reserva de la
que el partido podía reclutar. Glazer afirmó en 1969 que al menos la mitad
de los miembros de la PCUSA, que contaba con unos 50.000 en la década
de 1950, eran judíos. Como la rotación de personal era muy alta, el
número de personas que participaban en la fiesta podía ser diez veces
mayor. Añadió que "la afiliación socialista de todas las tendencias era
igual o mayor".
115 |
Kevin B. MacDonald
afiliación: no eran más que unos pocos miles, de una masa de seguidores
cien veces mayor" ('Jews and American Communists: the Cultural
Question' en Radical History Review, p. 89)
ROSENBERGS DIE
Pair Executed for Atom Spying
Supreme Court and
Eisenhower Reject
Couplet Last Píeas
'y,--,', - - has
m jijáis
i fj'Ss. - l fv Si •?,«
-d i? Ha-hita <1,
di.üíúín1-
í Js4 íi i'i "t ' ,'s~í¡ ÍK ,
ÍÍX ' PUL--- X\ IUF,
Vv": ?v‘i « 3-x
W” wttá mí* s-Aty fes
'íjS-í ra;>sjig úirír tci¿ lítóstós
iisai i5') s‘s > u-s» ¡M í t< ií¿-v tsa
ÍXSPgíKg <?.<•: id ftf. íiUMrWM
í'íso J,4Sfí-V ’if' «as tss-a- sis*
(íixf-frf r -, ..■fc f; f..tí
116 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
117 |
Kevin B. MacDonald
118 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
restantes miembros judíos del PCUS no siguieron la línea del partido pro
soviético en 1967 y 1973 y apoyaron a Israel. Finalmente, el PCUSA se
separó de casi todos sus judíos.
Tenemos todos los motivos para suponer que, al igual que sus
homólogos polacos, los judíos comunistas estadounidenses consideraban
que la URSS servía a los intereses judíos de forma generalmente positiva,
hasta bastante tarde en el periodo posterior a la Segunda Guerra Mundial.
Nacido en la década de 1920, el PCUSA fue financiado por la Unión
Soviética, se adhirió estrechamente a su línea, participó en actividades de
espionaje en su nombre, incluso robando secretos nucleares. En la década
de 1930, los judíos "constituían una mayoría sustancial de los agentes
soviéticos identificados por la contrainteligencia" y casi la mitad de los
procesados en virtud de la Ley Smith de 1947 (Rothman & Lichter, op.
cit. p. 100).
119 |
Kevin B. MacDonald
120 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
121 |
Kevin B. MacDonald
Los judíos eran los más propensos a estar entre los líderes de las
protestas en los campus. Abbie Hoffman, Jerry Rubín y Rennie Davis
adquirieron notoriedad nacional como miembros de los "Siete de
Chicago", condenados por romper los controles policiales e incitar a los
disturbios en la Convención Nacional Demócrata de 1968.
122 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
123 |
Kevin B. MacDonald
124 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
125 |
Kevin B. MacDonald
Parte 4
126 |
LA CULTUR A DE LA CRÍTICA
127 i
Kevin B. MacDonald
128 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
129 |
Kevin B. MacDonald
130 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
1311
Kevin B, MacDonald
Por lo tanto, lo que vincula a los judíos con las actitudes políticas de
izquierdas no es el contexto demográfico, en el que se suele hacer
hincapié. Para demostrar que el comportamiento político judío tiene más
que ver con la distancia cultural y étnica que con los intereses económicos,
Silberman habla del tropismo judío por
Un distinguido economista, que se oponía totalmente a las medidas
defendidas por [el candidato Walter] Móndale, votó por él de todos modos.
Vi su convención en la televisión", explicó, "y los republicanos no se
parecen a la gente como yo" Este tipo de reacción llevó a muchos judíos a
votar por Cárter en 1980 a pesar de su falta de afecto por él. Preferiría vivir
en un país gobernado por las caras que vi en la convención demócrata que
por las que vi en la convención republicana", me dijo un conocido escritor.
132 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
133 |
Kevin B. MacDonald
Una vez más, hay razones de peso para indicar que la crítica social
y los sentimientos de extrañeza cultural entre los judíos tienen profundas
raíces psicológicas, que van mucho más allá de cualquier interés
134 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
135 |
Kevin B. MacDonald
136 |
LA CULTUR A DE LA CRÍTICA
137 |
Kevin B. MacDonald
138 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
identidad social.
139 |
Kevin B. MacDonald
Parte 5
140 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
141 |
Kevin B. MacDonald
142 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
143 |
Kevin B. MacDonald
144 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
145 |
Kevin B. MacDonald
146 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
Parte 6
Conclusión:
147 |
Kevin B. MacDonald
solución soviética, p. 30). El propio Lenin tenía una abuela judía. Se dice
que dijo que "un ruso inteligente es casi siempre un judío o alguien con
sangre judía en sus venas" (en Pipes, The Russian Revolution, p. 352).
Había proporcionalmente menos judíos en los bolcheviques que en los
otros partidos revolucionarios.
148 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
149 |
Kevin B. MacDonald
150 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
151 |
Kevin B. MacDonald
152 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
153 |
Kevin B. MacDonald
op. cit., p. 89), y los húngaros lo sabían bien. "En Budapest, el chiste era
que sólo había un gentil en la dirección del partido porque alguien tenía
que encender las luces el sábado" (ibidem, p. 89). El Partido Comunista
de Hungría, apoyado por el Ejército Rojo, torturó, encarceló y ejecutó a
los líderes de la oposición y a otros disidentes, al tiempo que vinculaba
firmemente la economía húngara al tanque soviético. Fue similar a lo que
ocurrió en Polonia: los judíos fueron instalados por sus amos soviéticos
como los intermediarios ideales entre una élite extranjera explotadora y
una población indígena subyugada. Se consideraba que los judíos eran
los que habían ideado la revolución comunista y los que más se habían
beneficiado de ella. Los judíos constituían casi toda la élite del partido y
estaban en la cima de la jerarquía de la seguridad y los negocios.
154 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
155 |
Kevin B, MacDonald
156 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Capítulo IV
Parte 1
a tesis de este capítulo es que es imposible entender el
158 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
159 |
Kevin B. MacDonald
160 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
161 I
Kevin B. MacDonald
162 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
"A los ojos de todos [los miembros del comité], Jones era un gentil...
Los demás no perdían la oportunidad de señalar que no lo era. Su idea de
penetrar en el círculo íntimo mediante la creación del comité era una
ilusión, porque siempre seguiría siendo el hombrecillo sin interés que
estrellaba su cara implorante en la ventana" (Grosskurth, The Secret Wing:
Freud's Inner Circle and the Politics of Psychoanalysis, p. 137)
163 |
Kevin B. MacDonald
cit. p. 201). Una vez que Jung fue nombrado jefe de la Asociación
Psicoanalítica Internacional, un colega de Freud expresó su preocupación
porque "tomados como una raza", Jung y sus colegas eran
"completamente diferentes de nosotros los vieneses" (ibid. p. 219). En
1908, Freud escribió una carta al psicoanalista Karl Abraham,
describiéndolo como genial, mientras que Jung se caracteriza por su
"élan", una caracterización que, según Yerushalmi, muestra una tendencia
a categorizar a las personas según su afiliación de grupo (el judío
intelectualmente brillante y el ario energético). Por lo tanto, Jung era
inherentemente sospechoso debido a su extracción genética, Abraham no.
Después de investigar discretamente si Abraham era realmente judío,
Freud escribió que era más fácil para Abraham entender el psicoanálisis,
porque tenía un parentesco racial [rassenverwandschaft] con Freud.
(Yerushalmi, op. cit. p. 42)
Sean cuales sean las razones, históricas o sociológicas, los lazos del
grupo les daban un cálido refugio del mundo exterior. En su trato con
otros judíos, el lado informal y familiar les proporcionaba una seguridad
de grupo, una sensación de 'nosotros', que se manifiesta en las antologías
de historias divertidas que se contaban dentro del grupo" (Grollman,
Judaism in Sigmund Freud's World, p. 41).
164 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
165 |
Kevin B. MacDonald
Parte 2
La teoría de la identidad social destaca la importancia de las
atribuciones positivas hacia el grupo interno y las atribuciones negativas
hacia el grupo externo. En el caso de Freud, el fuerte apego a la identidad
judía iba acompañado de un sentimiento de superioridad intelectual sobre
los gentiles. En una de sus primeras cartas a su futura esposa escribió:
En el futuro y durante el resto de mis prácticas en el hospital, creo que
trataré de comportarme como los gentiles: modestamente, haciendo y
aprendiendo las cosas ordinarias. No intentaré hacer descubrimientos ni
indagar demasiado (en Yerushalmi, op. cit. p. 39).
Esta morgue judía hacia los gentiles no concierne sólo a Freud, sino
a todo su movimiento. Emest Jones se refirió a "la creencia judía, que a
menudo imponen a los demás, en la superioridad de su poder intelectual"
(Free Associations: Memories ofa Psycho-Analyst, p. 211). Al igual que
en los círculos intelectuales de la izquierda radical dominados por los
judíos, "el sentimiento de superioridad judía alejó a muchos no judíos del
movimiento y dio peso a las opiniones de aquellos que no pertenecían al
movimiento y que cuestionaban las reivindicaciones humanitarias del
psicoanálisis por considerarlas hipócritas" (Klein, Jewish Origins of the
Psychoanalytic Movement, p. 143), una observación que pone de relieve
la importancia de la perspectiva judía en el movimiento psicoanalítico.
143), una observación que pone de manifiesto la falsa conciencia de los
psicoanalistas sobre sus motivos.
166 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
167 |
Kevin B. MacDonald
Para Otto Rank, por ejemplo, que entabló una relación casi de
hermandad con Freud, los judíos estaban especialmente capacitados para
curar las neurosis y ser los sanadores de la humanidad. Siguiendo una
perspectiva cercana a la de Freud en Tótem y Tabú y Malestar en la
Civilización, Rank argumentó que, a diferencia de otras culturas humanas
que habían reprimido su sexualidad primitiva al llegar la civilización, "los
judíos poseían poderes creativos especiales, ya que habían sido capaces
de mantener una relación directa con la 'naturaleza', con la sexualidad
primitiva" (ibid. p. 129). Según esta interpretación, el antisemitismo tiene
su origen en la negación de la sexualidad y la misión judía del
psicoanálisis es abolir el antisemitismo liberando a la humanidad de su
represión sexual. Los Tres ensayos de teoría sexual de Freud, que
explican la agresión por la frustración de las pulsiones, serían la base
teórica.
Klein muestra que esta noción del psicoanálisis como "luz de las
naciones" redentora era compartida por otros colaboradores cercanos del
Dr. Freud. Por ejemplo, Fritz Wittels defendió la idea de la libertad
absoluta de expresión sexual:
Algunos piensan que el psicoanálisis va a cambiar la faz del mundo (...) y
168 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
[traerá] una edad de oro en la que no habrá lugar para las neurosis.
Teníamos la impresión de ser grandes hombres (...) Algunos hombres
tienen una misión en la vida. (ibid. p. 142)
169 |
Kevin B. MacDonald
170 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
171 i
Kevin B. MacDonald
172 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
173 |
Kevin B. MacDonald
Me atrevo a decir que aún no se han extinguido los celos provocados por
un pueblo que pretendía ser el primogénito y favorito de Dios Padre, como
si los propios pueblos dieran crédito a tal pretensión (III, 4).
174 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
Parte 3
175 |
Kevin B. MacDonald
176 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
177 |
Kevin B. MacDonald
178 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
179 |
Kevin B. MacDonald
180 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
181 |
Kevin B. MacDonald
182 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
Parte 4
183 |
Kevin B. MacDonald
184 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
185 |
Kevin B. MacDonald
186 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
187 |
Kevin B. MacDonald
188 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
189 |
Kevin B. MacDonald
190 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
191 |
Kevin B. MacDonald
Parte 5
El psicoanálisis como movimiento político (continuación)
1.92 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
193 |
Kevin B, MacDonald
194 |
LA CULTORA DE LA CRITICA
En una carta a Karl Abraham, Freud muestra que creía que los
gentiles tenían que superar sus "resistencias internas" para aceptar el
psicoanálisis. Comparando a su receptor con Jung, Freud escribió:
Tú estás más cerca de mi estructura intelectual por razones de parentesco
racial [rassenverwandschaft], mientras que él, como cristiano e hijo de
pastor, sólo puede abrirse camino hacia mí encontrando una gran
resistencia íntima (en Yerushalmi, El Moisés de Freud: el judaismo
terminable e imposible de terminar, p. 42).
195 |
Kevin B. MacDonald
Hay buenas razones para suponer que la monogamia era una parte
necesaria del particular perfil demográfico de "baja presión" de los
196 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
197 |
Kevin B. MacDonald
198 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
199 |
Kevin B. MacDonald
200 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 6
2011
Kevin B. MacDonald
judío incluso en los elementos más aculturados ("Jewishness and the New
York intellectuals", p. 292).
202 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
203 |
Kevin B. MacDonald
204 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Goodman, que formó parte del grupo New York Intellectuals con
Rosenfeld y Bellow, escribió en Growing UpAbsurd: Problems ofYouth
in the Organized Society una poderosa acusación contra la sociedad que
frustra las necesidades instintivas, con su énfasis en la conformidad y la
represión. El camino hacia una sociedad utópica debía ser allanado por
una vanguardia de estudiantes revolucionarios y, de hecho, un estudio
realizado en 1965 sobre los líderes del grupo de extrema izquierda
Estudiantes por una Sociedad Democrática descubrió que más de la
205 |
Kevin B. MacDonald
206 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
207 |
Kevin B. MacDonald
208 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 7
Conclusión:
209 |
Kevin B. MacDonald
210 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
211 |
Kevin B. MacDonald
212 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Los datos que hemos sintetizado en este capítulo muestran que Freud
consideraba que la superioridad ética, espiritual e intelectual judía estaba
determinada genéticamente y que los gentiles estaban genéticamente
predispuestos a caer bajo el dominio de los sentidos y a la brutalidad.
Según Freud, el carácter nacional judío estaba determinado
genéticamente por medio de una herencia lamarckiana que operaba a lo
largo de generaciones y que procedía de una experiencia judía única. Las
pruebas que revisé en Un pueblo que habitará solo indican que hay
buenas razones para suponer una base genética para las diferencias en el
coeficiente intelectual y la inversión parental entre judíos y gentiles,
causadas en última instancia por las prácticas religiosas judías durante
213 |
Kevin B. MacDonald
Estos datos indican que los judíos han estado relativamente aislados
214 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
215 |
Kevin B. MacDonald
compartido entre ambos sexos. Estos datos indican que la erosión de los
controles tradicionales sobre la sexualidad tuvo un efecto mucho mayor
en aquellos que están genéticamente predispuestos a la sexualidad
temprana y, por tanto, también indican, al cruzar estos resultados con los
datos presentados anteriormente, que los gentiles se vieron mucho más
afectados que los judíos.
216 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Aunque hay pocas razones para suponer que la batalla por la libertad
sexual, tan central para el psicoanálisis, se libró con la intención de dar a
los judíos una ventaja sobre los gentiles en la competencia por los
recursos, el hecho es que la guerra intelectual librada por el psicoanálisis
contra el gentilismo ciertamente trajo esta ventaja competitiva, mucho
más allá de embotar la agudeza y el significado de la diferencia entre
judío y gentil teóricamente y mucho más allá de producir razones
"científicas" para la patologización del antisemitismo. Esta guerra
también amplió la brecha social entre una "élite cognitiva" con una
presencia judía desproporcionada, por un lado, y una masa de individuos
intelectualmente incompetentes, irresponsables como padres, dispuestos
a solicitar la seguridad social, a mostrar un comportamiento delictivo, a
ser enfermos mentales y a abusar de sustancias estupefacientes, por otro.
217 |
Kevin B. MacDonald
Capítulo V
Parte 1
226 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
227 |
Kevin B. MacDonald
han hecho a un lenguaje que pueda ser escuchado, aunque sus voces
mortales hayan sido silenciadas por la tiranía. (El eclipse de la razón, p.
161)
Tar señala que esta última observación significaba que "ningún tipo
de sociología era posible sin la reflexión sobre Auschwitz y sin la
preocupación por hacer imposibles nuevos Auschwitz". En otras palabras,
"la experiencia de Auschwitz se convirtió en una categoría histórica y
sociológica absoluta" (op. cit., p. 165). Está claro que la conciencia judía
y el apego al judaismo eran particularmente fuertes entre los líderes de
esta serie de estudios.
228 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
229 |
Kevin B. MacDonald
230 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
2311
Kevin B. MacDonald
232 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
233 |
Kevin B. MacDonald
falso orden social" (p. 168). La ideología que atribuye una variedad de
rasgos negativos a los judíos es, según esta tesis, sólo una proyección que
da lugar a un autorretrato del antisemita. Los antisemitas acusan a los
judíos de querer el poder, cuando en realidad los antisemitas "anhelan la
posesión total del poder sin restricciones a cualquier precio". La culpa de
esto la transfieren a los judíos" (Dialéctica de la Ilustración, p. 169).
234 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 2
Horkheimer y Adomo trataron de destacar el papel del conformismo
en la génesis del fascismo. Sostienen que las estrategias del grupo no
judío para su propia cohesión se basan en una distorsión de la naturaleza
humana, el leitmotiv de la Personalidad Autoritaria. Suponen la
existencia de un yo natural, inconformista y reflexivo frente a una
sociedad corrompida por el capitalismo o el fascismo. El desarrollo
masivo de los intereses industriales y de la industria cultural del
capitalismo tardío destruyó en la mayoría de las personas las facultades
de autoconciencia reflexiva, que podrían producir una "culpa reflexiva"
235 |
Kevin B. MacDonald
Hay que concluir que si los dominantes aceptaran que sus súbditos
fueran como los judíos, se produciría un punto de ruptura histórica:
Superando esta enfermedad de la mente que prolifera en el terreno de la
autoafirmación que ninguna reflexión puede socavar, la humanidad pasaría
de ser un conjunto de razas opuestas a la especie que, como naturaleza, es
todo lo mismo más que la mera naturaleza. Emanciparse individual y
socialmente de la dominación es oponerse a la falsa proyección, y ningún
judío se asemejaría ya a la desgracia ciega que le acontece como a todos
los demás perseguidos, sean animales u hombres" (ibíd. p. 200)
236 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
237 |
Kevin B. MacDonald
238 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
239 |
Kevin B. MacDonald
240 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
2411
Kevin B. MacDonald
242 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
243 |
Kevin B. MacDonald
Parte 3
Revisión de la personalidad autoritaria
244 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
aunque en los últimos años han aumentado las críticas, sobre todo a las
tesis sobre los vínculos entre el carácter personal y los prejuicios y la
hostilidad intergrupal. Nathan Glazer ha señalado que "ningún trabajo de
psicología social posterior a la Segunda Guerra Mundial ha influido tanto
en la dirección de la investigación empírica contemporánea en las
universidades". A pesar de su influencia, desde el principio se detectaron
problemas técnicos en la construcción de la escala y en la realización e
interpretación de las entrevistas, hasta el punto de que la Personalidad
Autoritaria se convirtió en una especie de maestro negativo por el
ejemplo, mostrando cómo no se debe llevar a cabo una investigación en
ciencias sociales.
245 |
Kévin B. MacDonald
246 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
247 |
Kevin B. MacDonald
248 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
249 |
Kevin B, MacDonald
250 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
251 |
Kevin B. MacDonald
252 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 4
253 |
Kevin B. MacDonald
254 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Yo iría más lejos que este autor al decir que los padres y las familias
de los individuos en cuestión eran ciertamente "mejores" que los padres
y las familiar de los sujetos inferiores.
255 |
Kevin B. MacDonald
256 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Mientras que los sentimientos negativos hacia los padres de los que
se encuentran en la parte superior de la escala de prejuicios suelen tener
su origen en la disciplina o el trabajo pesado que se les ha impuesto en
casa, estos mismos sentimientos en los que se encuentran en la parte
inferior de la escala de prejuicios tienen su origen en los sentimientos de
abandono y pérdida de afecto (p. 349). Pero con respecto a esto último,
Frenkel-Brunswik insiste en que el abandono y la pérdida emocional han
sido francamente aceptados, una aceptación que, según ella, hace
imposible la enfermedad mental. Ya he mencionado a F63, que fue
abandonada por su padre; escuchemos a M55, también en la parte baja de
la escala: "Por ejemplo, cogía caramelos como si fueran dulces, fingía
que nos los iba a dar y luego se los comía todos, estallando en carcajadas
(...) Parecía un monstruo, aunque en realidad no lo era" (p. 350). No es
de extrañar que estos claros ejemplos de insensibilidad por parte de los
padres quedaran en la memoria del sujeto. Sin embargo, en el mundo al
257 |
Kevin B. MacDonald
258 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
este tipo de familias mantienen una estrecha relación con sus padres y
aceptan los valores parentales y las identificaciones de grupo. Por lo tanto,
si los padres aceptan las identificaciones religiosas, es más probable que
los niños criados en esas familias las acepten a su vez. Y si estos padres
tienen en alta estima la educación, es más probable que sus hijos acepten
la idea de que los logros académicos son algo importante. Estos padres
autoritarios modelan el comportamiento de sus hijos y se aseguran de que
lo sigan. La calidez de la relación entre padres e hijos motiva a los niños
para que se ajusten a estos modelos y para que no se salgan de la línea y
violen estas normas de comportamiento del endogrupo (familia).
259 |
Kevin B. MacDonald
260 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
2611
Kevin B. MacDonald
262 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 5
263 |
Kevin B. MacDonald
264 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
fracaso sexual y, por tanto, como signo de salud psicológica. Por lo tanto,
la característica común de los mejores sujetos, denominada "orientación
al éxito social", es patológica. Se presupone que el ajuste a las normas
sociales y la autoestima son rasgos patológicos, y que los sentimientos de
inadecuación y las "confesiones de inadecuación" (p. 389) son
indicadores de buena salud mental.
265 |
Kevin B. MacDonald
266 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
267 |
Kevin B. MacDonald
268 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Sin embargo, los gentiles que están socialmente aislados, que tienen
actitudes negativas y rebeldes hacia sus familias, que son ambivalentes y
están ansiosos por sus identidades sexuales, que tienen una baja
autoestima y que están llenos de ansiedades y problemas incapacitantes
(ansiedades que también se relacionan con el afecto de los padres), que
se rebajan y que tienen actitudes negativas hacia el estatus social y la
adquisición de riqueza material, son vistos como dechados de salud
psicológica.
269 |
Kevin B. MacDonald
Parte 6
270 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Debate
Sin embargo, debería ser obvio a partir de la reseña anterior que este
"abuso" y la hostilidad subyacente es sólo el razonamiento de los autores.
Son construcciones teóricas que no se apoyan en ninguna prueba. No hay
ninguna razón en el mundo para suponer que el castigo a los niños dé
lugar a una hostilidad reprimida cuando se produce en el contexto de unas
relaciones positivas en general.
2711
Kevin B. MacDonald
272 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
273 |
Kevin B. MacDonald
274 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
275 |
Kevin B. MacDonald
276 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
277 |
Kevin B. MacDonald
278 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
279 |
Kevin B. MacDonaid
280 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 7
281 |
Kevin B. MacDonald
282 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
283 |
Kevin B. MacDonald
284 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
incapacidad casi total para encontrar otros modos de relacionarse con los
demás que no sean la dominación y la sumisión completas" (Hofstadter,
The Paranoid Style in American Politics and Other Essays, p. 58). Como
ha señalado Nugent, este punto de vista ignora en gran medida "las
realidades económicas y políticas concretas que determinan el populismo,
que de este modo sólo se capta en términos de psicopatología e
irracionalidad". (The Tolerant Populists: Kansas Populism and Nativism,
p. 26) Este es exactamente el método de la Personalidad Autoritaria-, los
conflictos reales de intereses entre grupos étnicos son vistos como si no
representaran más que proyecciones irracionales hechas por
personalidades inadecuadas del grupo mayoritario.
285 |
Kevin B. MacDonald
Puede que haya, algo de verdad en esta observación, pero dudo que
las interpretaciones propuestas por estos historiadores judíos fueran
simplemente restos irracionales del antisemitismo de Europa del Este.
Había verdaderos conflictos de intereses. Por un lado, había intelectuales
judíos que servían a sus intereses como intelectuales urbanos que
buscaban el fin del dominio demográfico y cultural de los anglosajones
protestantes. (La lucha entre estos grupos es el tema de la discusión de la
participación judía en la formación de la política migratoria
estadounidense en el capítulo siete, y también se abordará en la discusión
de los intelectuales de Nueva York en el capítulo seis. Varios de los
intelectuales que mencionamos aquí se consideran miembros del
movimiento de los intelectuales de Nueva York [Bell, Glazer, Lipset,
Riesman y Shils], mientras que otros [Hofstadter y Handlin] son más bien
compañeros de viaje).
286 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Aunque la Teoría Crítica había dejado de ser una guía para los
movimientos de protesta de principios de los años 70, su influencia seguía
siendo muy fuerte en el mundo intelectual en general. En los años 70, los
intelectuales de la Escuela de Francfort siguieron disparando contra los
conservadores alemanes. Estos últimos los veían como los "padres
adoptivos de los terroristas" y como los fomentadores de "la revolución
cultural que está trabajando para destruir el Occidente cristiano"
(Wiggershaus, op. cit.: 657). "La inseparabilidad de los conceptos de
Escuela de Frankfurt, Teoría Crítica y Neomarxismo indica que a partir
de los años 30, el pensamiento de izquierda teóricamente productivo en
los países de habla alemana se centró en Horkheimer, Adorno y el
Instituto de Investigación Social" (ibid. p. 658)
287 |
Kevin B. MacDonald
288 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 8
Este parece ser el caso de Jacques Derrida, el principal filósofo de
la deconstrucción, cuya filosofía manifiesta profundas afinidades con los
objetivos intelectuales del posmodemismo y la Escuela de Frankfurt.
Derrida tiene una identidad judía compleja y ambigua, aunque es "un
intelectual laico, ateo, de la izquierda parisina" (Caputo, The Prayers and
Tears of Jacques Derrida: Religión without Religión, p. xxiii).
289 |
Kevin B. MacDonald
290 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
2911
Kevin B. MacDonald
292 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
293 |
Kevin B. MacDonald
294 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
295 |
Kevin B. MacDonald
296 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Capítulo VI
Parte 1
os materiales examinados en los cuatro capítulos anteriores
297 |
Kevin B. MacDonald
298 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
299 |
Kevin B. MacDonald
300 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
En las ciencias, los patrones de asociación entre judíos son aún más
pronunciados que en los movimientos intelectuales cercanos que hemos
examinado. Greenwald y Schuh demostraron en 1994 la existencia de un
patrón repetitivo de discriminación étnica mediante el escaneo de
artículos de revistas en busca de referencias bibliográficas. Descubrieron
que los autores judíos tenían un 40% más de probabilidades que los no
judíos de referirse a autores judíos, y que los autores principales de
artículos científicos tenían unas tres veces más probabilidades de tener
un coautor judío que los autores principales no judíos. Aunque los
métodos utilizados en este estudio no permiten determinar el origen de
esta discriminación, los datos recogidos en su artículo (An ethnic bias in
scientific citations, en European journal of Social Psychology - 1994)
sugieren que una gran parte de esta discriminación procede de científicos
judíos. También contribuye a ello la altísima sobrerrepresentación de
coautores judíos, probablemente como resultado de los patrones
repetitivos de asociación entre colegas y mentores, que son específicos
del endogrupo judío. Además, en los casos en los que existen diferencias
significativas en el tamaño del grupo, los individuos pertenecientes a
grupos minoritarios son más propensos a los prejuicios endogrupales que
los miembros del grupo mayoritario, lo que sugiere que los judíos son
más propensos a la discriminación étnica que los gentiles.
3011
Kevin B. MacDonald
302 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
está obsesionado con los críticos de Israel, con los antiguos críticos de
Israel y con la gente que nunca ha oído hablar de Israel pero que algún
día podría conocer a alguien que algún día podría convertirse en un
crítico" (ibid p. 195).
303 |
Kevin B. MacDonald
304 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
los conciertos a los que asistíamos y los discos que comprábamos. Nos dio
acceso a la vida cultural moderna -su gravedad, su complejidad, su
combatividad- a un nivel que pocos de nuestros profesores podían igualar
(...) Daba a todos los temas que cubría -arte, literatura, política, historia y
actualidad- una urgencia intelectual tal que los lectores nos sentíamos
implicados y llamados a responder a ellos. ('Reflections on the history of
Partisan Review' en The New Criterion Sept. 1996 p. 43)
Parte 2
Greenberg había crecido en la subcultura neoyorquina de extrema
izquierda y de habla yiddish ("Todos en su familia eran socialistas. De
niño, creía que socialista significaba judío" [Rubenfeld, Clement
Greenberg: A Life, p. 60]). Al igual que otros intelectuales neoyorquinos,
Greenberg estaba muy apegado a su identidad judía, lo que acabó
influyendo en su obra. "Creo que hay un tinte de judaismo en cada palabra
que escribo, como lo hay en cualquier otro escritor judío estadounidense
contemporáneo" (en Rubenfeld, op. cit. p. 89). Como editor del
Contemporary Jewish Record, Greenberg publicó un artículo en el que se
refería abiertamente al antisemitismo de Henry Adams [un gran
historiador de la segunda mitad del siglo XIX y representante del elitismo
WASP], algo que era tabú en aquella época. También fue uno de los
grandes purificadores de la obra de Franz Kafka, cuyas palabras
representaban para él la quintaesencia de la palabra judía en la literatura:
El efecto hipnótico y revolucionario de las obras de Franz Kafka (...) sobre
la vanguardia literaria no tiene parangón en la historia (...) Hay muchas
razones para creer que Kafka, por sí solo, dio lugar a una nueva era literaria,
que apuntaba más allá de las definiciones cardinales en las que se había
basado la literatura occidental hasta entonces. Además, es posible que los
escritos de Kafka hayan expresado por primera vez una noción singular y
esencialmente judía de la realidad, que hasta entonces sólo se había
expresado en formas religiosas, pero que bajo su pluma encontró una
expresión secularizada (ibidem, pp. 92-93).
♦
305 |
Kevin B. MacDonald
306 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Sin embargo, Hook consideraba que seguir siendo judío era una
obligación moral:
[Para la mayoría de los judíos] escapar [de su judaismo] era prácticamente
imposible, porque en los casos en que era posible, el coste psicológico era
demasiado grande y porque desde un punto de vista moral era
intrínsecamente degradante capitular ante prejuicios irracionales y negar el
parentesco con sus padres y madres que, a menudo contra todo pronóstico,
habían preservado valientemente su integridad y su fe, fuera cual fuera, (p.
479)
307 |
Kevin B. MacDonald
308 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
309 |
Kevin B. MacDonald
o elegidas. Pero todos estos tipos de elitismo tenían algo en común: eran
formas de mantener el poder de un único grupo, lo que conducía a una
condescendencia paternalista hacia los estratos inferiores de la sociedad.
(Jumonville, op.cit. p. 169)
310 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
3111
Kevin B. MacDonald
312 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
frase, y supe dónde había crecido, cómo había crecido, de dónde sacaba su
energía y su sentido del humor. Es de Nueva York. Es judío. Se parece a mi
tío Luis, habla como mi tío Sam. Siento que he estado cerca de él muchas
veces en bodas, bar mitzvahs y funerales. Conozco su estructura genética.
Estoy seguro de que si nos remontamos cinco siglos atrás, o tal vez menos,
tenemos un ancestro común (Locked in the Cabinet, p. 79).
Parte 3
La teoría de las diferencias individuales en el individualismo y el
colectivismo, tal y como se expone en La separación y sus descontentos
(capítulo 1), predice que los judíos, debido a su impulso genético y
ambiental relativamente fuerte en la dirección colectivista, se sienten
especialmente atraídos por dichos grupos. Sulloway, en Freud: Biologist
of the Mind, describió el aura religiosa y "cuasi-sectaria" de la que estaba
impregnado el psicoanálisis, un aspecto que encaja bien con la idea de
que el judaismo no puede entenderse sin comprender los mecanismos
r 3131
Kevin B. MacDonald
314 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
(...) puede haber tenido tanto que ver con un cambio en el carácter étnico
e ideológico de quienes dominaban el mundo de las ciencias sociales
como con un auténtico avance en el conocimiento" (Roots of Radicalism:
Jew, Christians, and the New Left, p. 104). Sachar señaló que el Caucus
fot a New Politics de la American Political Science Association era
"predominantemente judío" (A History ofJews in America, p. 804) y que
la Union of Radical Political Economists se caracterizó en sus inicios por
una representación excesiva de judíos. Además, como nos dice Higham,
el increíble éxito de la Personalidad Autoritaria facilitó el
"extraordinario aumento" de judíos preocupados por el antisemitismo en
los departamentos de humanidades en el periodo posterior a la Segunda
Guerra Mundial (Send These to Me: Immigrants in Urban America, p.
154).
Una vez que una organización está dominada por una perspectiva
intelectual, surge una enorme inercia intelectual, provocada por el hecho
de que las redes informales que dominan las universidades de élite actúan
como guardianes que seleccionan la siguiente generación de profesores.
Los aspirantes a estudiantes, ya sean judíos o gentiles, son sometidos a
un adoctrinamiento de alta intensidad en los niveles de grado y postgrado,
y están sometidos a una considerable presión psicológica para que se
adhieran a los principios intelectuales fundamentales que están en el
corazón del sistema de poder de la disciplina en cuestión- Como vimos
en el capítulo 1, cuando un movimiento intelectual dominado por los
judíos alcanza el punto de dominación, no es sorprendente que los
gentiles se sientan atraídos por los intelectuales judíos, tanto como
miembros de un grupo prestigioso y socialmente dominante, como por
dispensadores de recursos preciados.
315 |
Kevin B. MacDonald
316 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
317 |
Kevin B. MacDonald
Tras haber dado sus primeros pasos a principios de los años 50, otro
grupo centrado en Irving Howe y que incluía a Stanley Plastrik, Emanuel
Geltman y Luis Coser, creó la revista Dissent erf un momento en el que
la camarilla del PR se alejaba rápidamente del socialismo revolucionario.
Además de sus artículos de crítica social de izquierdas, Howe escribió
muchos otros sobre literatura yiddish e historia judía. Su libro El mundo
de nuestros padres muestra una nostalgia por la subcultura yiddish y
socialista de su juventud. La disidencia estuvo fuertemente influenciada
por la Escuela de Francfort en todo lo referente a la crítica cultural,
especialmente las obras de Horkheimer y Adorno y los escritos de Erich
Fromm y Herbert Marcuse, basados en una síntesis de Freud y Marx. Del
mismo modo, en la época de la Nueva Izquierda, el grupo radical
Foundation for Policy Studies estaba centrado en un grupo de
intelectuales judíos.
318 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
319 |
Kevin B. MacDonald
320 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Los miembros del grupo final suelen idolatrar a los miembros del
grupo final como iconos culturales. Norman Podhoretz se refirió a esta
"adoración fascinada y con ojos de estrella" (Making It, p. 147) de la
gente de relaciones públicas en sus inicios. Los miembros del grupo final
prestaban una "atención apasionada" a los demás miembros del grupo
(Cooney, op. cit., p. 249). Al igual que en el psicoanálisis, de estas
revistas surgieron vástagos disidentes, iniciados por personas con puntos
3211
Kevin B. MacDonald
322 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 4
También es importante apreciar que tanto el psicoanálisis como la
serie de estudios de los que forma parte la Personalidad Autoritaria
tendían al adoctrinamiento: desarrollaron teorías que identificaban el
comportamiento que no se ajustaba a las normas políticamente aceptables
como manifestaciones de enfermedad mental. Esto es evidente en la
tendencia del psicoanálisis a atribuir el rechazo de este último a diversas
formas de psicopatología, en su visión general de que la cultura gentil
patológicamente predispuesta era la fuente oculta de todos los
diagnósticos psiquiátricos, y en la tesis de que el antisemitismo era un
signo de perturbación de la personalidad. La serie a la que pertenecía la
Personalidad Autoritaria procedía de la misma tradición, en el sentido
de que proponía el "descubrimiento" de que la incapacidad o la falta de
voluntad para desarrollar una "personalidad liberal" y adoptar opiniones
políticas profunda y sinceramente izquierdistas eran signos de
323 |
Kevin B. MacDonald
enfermedad mental.
324 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
325 |
Kevin B. MacDonald
326 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
327 |
Kevin B. MacDonald
328 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
329 |
Kevin B. MacDonald
330 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 5
Impulsado por el esfuerzo honesto de eliminar estas influencias, el
consenso científico llega a coagularse cada vez más en tomo a
afirmaciones que pueden desglosarse en subafirmaciones científicas cuyo
contenido de verdad desempeña un papel importante a la hora de
establecerlas como creencias firmes entre los científicos. D. C. Stove, en
Popper and After: Four Modern Irrationalists, señala que, a pesar de las
protestas en contra de gran parte del mundo intelectual, el conocimiento
ha crecido enormemente en los últimos cuatro siglos. Sin embargo, este
mismo progreso del conocimiento consensuado no se ha producido en las
humanidades, y dudo que lo haga mientras la investigación siga
3311
Kevin B. MacDonald
332 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
333 |
Kevin B. MacDonald
334 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
335 |
Kevin B. MacDonald
336 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
337 |
Kevin B. MacDonald
338 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
También hay que señalar que todos los movimientos que hemos
examinado se desarrollaron en una atmósfera de encriptación o
semiencriptación, en el sentido de que el proyecto político judío no estaba
en el programa teórico propuesto y las propias teorías no tenían un
contenido judío explícito. Por ello, los intelectuales no judíos que se
acercaron a ellos se resistieron a verlos como expresiones de la
competencia cultural entre judíos y gentiles, o de un proyecto político
específicamente judío. En cambio, estaban mucho más dispuestos a ver a
los defensores de estas doctrinas como "gente como tú y yo", como
individualistas que buscan científicamente las verdades sobre los seres
humanos y su sociedad. La psicología social sabe desde hace tiempo que
la similitud conduce poderosamente a la amistad, un fenómeno que es
susceptible de análisis evolutivo (realizado por Rushton en 'Genetic
Similarity, human altruism and group selectiori en Behavioral and Brain
Science # 12 - 1989). En otras palabras, si estas doctrinas hubieran sido
sostenidas por los judíos ortodoxos tradicionales, con sus diferentes
formas de vestir y hablar, nunca habrían tenido el impacto cultural que
tuvieron. Desde este punto de vista, la codificación y la semicodificación
judías son cruciales para el éxito del judaismo en las sociedades
posteriores a la Ilustración, un tema que abordamos en el noveno capítulo
deSAID.
339 |
Kevin B. MacDonald
340 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Capítulo VII
[Para entender este capítulo, es necesario saber que en Estados Unidos, las
leyes de inmigración de 1924 exigían que los inmigrantes reflejaran el país; las
proporciones de inmigrantes de diferentes etnias debían corresponder a las
proporciones de esas etnias en el cuerpo nacional. Los europeos, especialmente
los del noroeste de nuestro continente, fueron así "favorecidos”, algo que la
judería no pudo soportar y contra lo que luchó hasta 1965, abriendo el acceso
a la inmigración legal a ellos mismos primero, y luego al Tercer Mundo].
341 |
Kevin B. MacDonald
Parte 1
a política de inmigración es el ejemplo paradigmático de los
342 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
343 |
Kevin B. MacDonald
las adoptadas en las sociedades occidentales del siglo XX, a formas más
manifiestas es considerada como esencial para la perpetuación del
judaismo por muchos autores judíos como E. Abrams en Faith or Fear:
How Jews Can Suvive in Christian America y A. Dershowitz en The
Vanishing American Jew: In Search of a Jewish Identity for the Next
Century (véase. Dershowitz en The Vanishing American Jew: In Search
of a Jewish Identity for the Next Century (véase SAID, capítulo 8). El
judaismo reformista, la forma menos abierta de judaismo, está dando
grandes pasos hacia el judaismo tradicional, insistiendo incluso en la
importancia de los rituales religiosos y la prevención de los matrimonios
mixtos. A este respecto, una reunión de rabinos reformistas ha recordado
recientemente que el auge del tradicionalismo es en parte resultado de la
mayor legitimidad de la conciencia étnica en general (Los Angeles Times.
20 de junio de 1998).
344 |
I
LA CULTURA DE LA CfiÍTICA
345 |
Kevin B. MacDonald
346 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
347 |
Kevin B. MacDonald
el espectro político judío. Hemos visto que Sidney Hook, que puede
considerarse un precursor del neoconservadurismo junto a otros
intelectuales neoyorquinos, veía la democracia como la igualdad de las
diferencias con la máxima diversidad cultural. Los neoconservadores
eran firmes partidarios de las políticas migratorias liberalizadas, lo que
provocó un conflicto entre los neoconservadores, principalmente judíos,
y los paleoconservadores, principalmente no judíos, sobre la cuestión de
la inmigración del tercer mundo a Estados Unidos. Los neoconservadores
Norman Podhoretz y Richard John Neuhaus habían reaccionado muy
negativamente a un artículo escrito por un paleoconservador que
expresaba su preocupación por que esa inmigración condujera a la
dominación de Estados Unidos por sus descendientes (véase Judis, "The
conservative crack-up", en el número de otoño de 1990 de The American
Prospect, p. 33).
348 |
.A CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 2
El esfuerzo judío por transformar Estados Unidos en una sociedad
pluralista se llevó a cabo en varios frentes. Además de las actividades
legislativas y de presión relacionadas con la política de inmigración,
mencionaremos también el esfuerzo judío en la esfera intelectual y
académica, en la relación Iglesia-Estado y, finalmente, su esfuerzo por
organizar a los afroamericanos como fuerza política y cultural.
3491
Kevin B. MacDonald
350 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
3511
Kevin B. MacDonald
352 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
353 |
Kevin B. MacDonald
354 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
355 |
Kevin B. MacDonald
356 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
357 |
Kevin B. MacDonald
358 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
mejor que otro por el color de su piel." (Actas del Congreso, III, 1965, p.
24469). La revolución intelectual y su traducción política eran completas.
Parte 3
359 |
Kevin B. MacDonald
campo del derecho y durante tanto tiempo. Como autor, como profesor,
como ciudadano y, sobre todo, como abogado que combinó sus muchos y
formidables talentos en una sola fuerza capaz de satisfacer todas las
necesidades de una institución que pretendía impulsar un movimiento de
reforma constitucional...El hecho de que Pfeffer, gracias a una envidiable
combinación de talento, determinación y perseverancia, fuera capaz en tan
poco tiempo de convertir la reforma de la Iglesia-Estado en una causa
importante, a cuyo destino las organizaciones rivales vincularon el
AJCongress, muestra cómo los abogados individuales de capacidad
excepcional pueden determinar el curso y el carácter de las organizaciones
para las que trabajan (...)
360 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
3611
Kevin B. MacDonald
362 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Al igual que en la Alemania del siglo XIX, donde los judíos trataban
de definir sus intereses en términos de ideales germánicos, la retórica del
363 |
Kevin B. MacDonald
364 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
365 |
Kevin B. MacDonald
Parte 4
366 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
367 |
Kevin B. MacDonald
368 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
369 |
Kevin B. MacDonald
De ahí el esfuerzo liderado por los judíos para tomar el control de la política
de inmigración de Estados Unidos. Aunque los suyos son sólo una séptima
parte del total de inmigrantes, fueron ellos quienes lideraron la lucha contra
el proyecto de ley de la comisión de inmigración. Un millón de judíos
neoyorquinos se movilizaron detrás de sus representantes en el Congreso
para oponerse enérgicamente a la prueba de idioma para los solicitantes de
inmigración. La campaña sistemática en periódicos y revistas para derribar
todos los argumentos restrictivos y calmar los temores nacionalistas está
dirigida por y para una raza. El dinero hebreo alimenta la Liga Nacional
Liberal de Inmigración y sus numerosas publicaciones. Ya sea el artículo
comunicado a una institución comercial o a una asociación científica, o el
grueso tratado elaborado bajo los auspicios de la fundación del barón de
Hirsch, la literatura que demuestra los beneficios de la inmigración para
todas las clases de América emana de sutiles cerebros hebreos, (loe. cit)
370 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
3711
Kevin B. MacDonald
372 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
373 |
Kevin B. MacDonald
374 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 5
375 |
Kevin B. MacDonald
376 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
377 |
Kevin B. MacDonald
porque hay una cosa que he intentado hacer durante los últimos 11 años.
Wise, que representaba al AJCongress: "No me gusta que me pongan
como portador de prejuicios raciales, porque hay una cosa que he
intentado hacer durante los últimos once años, y es liberarme de esos
prejuicios, si es que los tenía." Varios restriccionistas habían denunciado
explícitamente la teoría de la superioridad del Norte, entre ellos los
senadores Bruce (p. 5955) y Jones (p. 6614), y los representantes Bacon
(p. 5902), Byrnes (p. 5653), Johnson (p. 5648), McLoed (pp. 5675-5676),
McReynolds (p. 5855), Michener (p. 5909), Miller (p. 5883), Newton (p.
6240), Rosenbloom (p. 5851), Vaile (p. 5922), Vincent (p. 6240), White
(p. 5898) y Wilson (p. 5671) (todas las referencias son del Rec. del
Congreso de abril de 1924)
378 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
379 |
Kevin B. MacDonald
Para ser sincero, no me asustan las ideas radicales que traen algunos. Al fin
y al cabo, las ideas no pueden detenerse en la frontera. Lo que sí me molesta
es que la dirección de nuestra vida intelectual, en muchas de sus vertientes,
haya pasado a manos de estos inteligentes recién llegados que no sienten
ninguna simpatía por nuestros viejos ideales americanos, ni por los del
norte de Europa. Detectan nuestras debilidades, las fomentan de forma vil
y se enriquecen con el mal servicio que nos hacen.
Hay pruebas de que los judíos, al igual que los asiáticos orientales,
tienen un coeficiente intelectual más alto que los caucásicos (cf. Lynn,
"The intelligence of the Mongoloids: A psychometric, evolutionary and
neurological theory" en Personality and Indiviual Differences - 1987;
Rushton, Race, Evolution and Behavior: A Life-History Perspective;
PTSDA, capítulo 7). Terman descubrió que los chinos tenían un
coeficiente intelectual igual al de los caucásicos, lo que indicaba que "sus
puntuaciones de coeficiente intelectual no se utilizaban como excusa para
su discriminación" que habría sido la legislación de 1924 (Cari Degler,
380 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
381 |
Kevin B. MacDonald
Lo que sostenemos es que fueron los europeos del norte, los anglosajones
en particular, quienes hicieron este país. Claro, los otros ayudaron. Pero no
podemos decir más que eso. Llegaron a este país porque ya estaba hecho,
era un lugar común anglosajón. Le añadieron, a menudo lo enriquecieron,
pero no lo hicieron y no lo cambiaron mucho. Estamos decididos a que eso
no ocurra. Es un buen país. Nos conviene. Lo que decimos es que no
tenemos intención de cederla a nadie ni de permitir que otras personas, sean
cuales sean sus méritos, hagan algo diferente con ella. Si hay que hacer
algún cambio, lo haremos nosotros mismos. (Rec. del Congreso de 8 de
abril de 1924, p. 5922)
382 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
383 |
Kevin B. MacDonald
384 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
"esfuerzos casi desesperados (...) para presentar al judío como cien por
cien americano". Por ejemplo, organizaron actuaciones patrióticas en días
festivos e intentaron que los inmigrantes aprendieran inglés.
Parte 6
385 |
Kevin B. MacDonald
386 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
387 |
Kevin B. MacDonald
388 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
389 |
Kevín B. MacDonald
390 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
3911
Kevin B. MacDonald
392 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
a los legítimos intereses étnicos de los pueblos del norte y del oeste de
Europa, señal de que el asalto boasiano a esta idea probablemente haya
tenido éxito.
Sin dar crédito a ninguna teoría de la superioridad nórdica, el subcomité
cree que la adopción de la fórmula de los orígenes nacionales es el método
racional y lógico de restringir numéricamente la inmigración para preservar
mejor el equilibrio sociológico y cultural de la población de Estados Unidos.
Sin duda, esta fórmula ha favorecido a las personas del norte y del oeste de
Europa en detrimento de las personas del sur y del este; Sin embargo, la
subcomisión sostiene que quienes han contribuido en mayor medida al
desarrollo de este país estaban absolutamente en su derecho cuando
decidieron que el país ya no era un campo abierto para la colonización y
que, en consecuencia, la inmigración debía no sólo restringirse, sino
reservarse a quienes serían más fácilmente asimilables en virtud de la
similitud de antecedentes culturales entre ellos y los principales
componentes de nuestra población. (Sen. Rep. # 1515, 81° Cong, 2o Sess.
1950, p. 455)
393 |
Kevin B. MacDonald
Parte 7
394 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
395 |
Kevin B. MacDonald
396 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
397 |
Kevin B. MacDonald
398 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
399 |
Kevin B. MacDonald
400 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
malo, ya que la Comisión consideraba que una raza era tan adecuada
como otra para la ciudadanía estadounidense como para cualquier otro
empleo" (American Immigration Policies: A History, p. 185).
4011
Kevin B. MacDonald
402 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
403 |
Kevin B. MacDonald
Parte 8
404 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
405 |
Kevin B. MacDonald
406 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
407 |
Kevin B. MacDonald
408 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
409 |
Kevin B. MacDonald
410 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
411 |
Kevin B. MacDonald
412 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
413 |
Kevin B. MacDonald
414 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Parte 9
Apéndice: El esfuerzo inmigratorio judío en otros países occiden
tales
415 |
Kevin B. MacDonald
416 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
417 |
Kevin B. MacDonald
418 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
menos duras que las actuales y pudiéramos abrir las puertas, abolir las
restricciones y hacer de Canadá la Meca de todos los pueblos oprimidos
del mundo" (en M. Brown, ¿Judío o judío? Jews, French Canadians, and
Anglo-Canadians, 1759-1914, p. 256).
419 |
Kevin B. MacDonald
420 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
4211
Kevin B. MacDonald
422 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Capítulo VIII
Parte 1
n conclusión de este libro, podemos decir que el papel de los
423 |
Kevin B. MacDonald
424 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
más amplia" (J. J. Goldberg, op.cit. p. 275). Así, se puede calcular que
los judíos están sobrerrepresentados en las contribuciones a las campañas
con un coeficiente de 13 en función de su proporción en la población, y
de 6,5 si se ajusta a su elevada renta media. En cuanto a las donaciones
de dinero a países extranjeros, los judíos están claramente a la cabeza. En
la década de 1920, mucho antes de la explosión de la ayuda judía a Israel
después de la Segunda Guerra Mundial, los judíos estadounidenses
parecen haber donado 24 veces más per cápita a los judíos en el extranjero
de lo que los estadounidenses irlandeses hicieron para ayudar a la lucha
de Irlanda por la independencia de Gran Bretaña, un período que
corresponde al pico de la filantropía étnica irlandesa. Esta disparidad se
ha acentuado aún más desde la Segunda Guerra Mundial. Salter ofrece
una estimación baja de que la movilización étnica judía es cuatro veces
mayor que la de los blancos no judíos, basándose en una comparación de
las donaciones de dinero per cápita a causas étnicas no confesionales.
425 |
Kevin B. MacDonald
426 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
la política migratoria.
427 |
Kevin B. MacDonald
428 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
429 |
Kevin B. MacDonald
430 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
El Sr. Arnold White dice a los rusos que si dieran rienda suelta a la
inteligencia judía, los judíos obtendrían en poco tiempo todos los empleos
elevados y todos los puestos de poder, con exclusión de los nativos que
431 |
Kevin B. MacDonalcl
ahora los ocupan. Algunos exigen que los rusos cumplan y se alegren, pero
estos filósofos no sabrían saborear la bebida si se la llevaran a sus propios
labios. La ley de la evolución, dicen, es la supervivencia del más apto. Alo
que el patán ruso podría responder que si su fuerza puede superar el
exquisito intelecto del judío, sobrevivirá el más apto y se cumplirá la ley
de la evolución. Fue la fuerza, y no el intelecto exquisito, lo que decidió en
el campo de batalla de Zama que los latinos, y no los semitas, dominarían
a los pueblos antiguos y darían forma al mundo moderno. (Ensayos sobre
las cuestiones del día, p. 261)
432 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Segunda parte
Podría decirse que la Escuela de Francfort y el psicoanálisis han
intentado, con cierto éxito, crear lo que Paul Gottfried y Christopher
Lasch han llamado un "estado terapéutico", diseñado para patologizar el
etnocentrismo de los descendientes de europeos y su deseo de mantener
su dominio cultural y demográfico. Sin embargo, la aparición del
etnocentrismo en la población mayoritaria de Estados Unidos, de
extracción europea, parece un resultado probable, ya que el paisaje social
y político de Estados Unidos se estructura cada vez más en torno a grupos.
Esto parece ser así porque los mecanismos evolutivos de los seres
humanos funcionan de tal manera que la cuestión de la pertenencia a
endogrupos y exogrupos se hace más acuciante en situaciones en las que
la competencia por los recursos está basada en el grupo (véase SAID,
capítulo 1).
433 |
Kevin B. MacDonald
434 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
435 |
Kevin B. MacDonald
servir a los intereses judíos y atraer a ciertos sectores del gentilismo. Pero
también hay una tendencia que se traduce en la escisión de estos
movimientos, que se deriva del antisemitismo emergente en los sectores
del gentilismo a los que las ideologías en cuestión pretendían apelar, de
modo que los judíos abandonan estos movimientos y buscan su ventaja
por otras vías.
436 J
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
437 |
Kevin B. MacDonald
438 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
439 |
Kevin B. MacDonald
440 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
441 |
Kevin B. MacDonald
442 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
del edificio social, los altos niveles de explotación y el conflicto entre las
clases sociales. Por poner otro ejemplo, la esclavitud de los africanos fue,
a corto plazo, buena para las élites aristocráticas individualistas del Sur
de Estados Unidos, pero fue una calamidad para el conjunto de la
sociedad. También hemos observado que las élites occidentales a menudo
echaron una mano a los intereses económicos judíos a costa de otros
sectores de la población autóctona, y que en varias ocasiones los judíos
se convirtieron en vehículos de la orientación individualista de las élites
no judías, promoviéndola a su vez.
443 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
Otros títulos
(0mni a Veritas, Omnia Veritas Ltd presenta:
iiW ¡.yk’kA
assifciai OíWfwni®
Este sistema político ha sido construido por fuerzas que actúan entre bastidores
LA TRILOGÍA
WALLTREET
‘“El profesor Sutton será
recordado por su trilogía; Wall St, y nrANTONY sutton
la revolución bolchevique, Wall St
y FDR. y Wall St y el ascenso de
Hitíer.”
Esta trilogía describe la influencia del poder financiero en tres acontecimientos clave de la historia reciente
HERVÉ RVSSEN
EL FANATISMO JUDÍO
La resultante disolución de la identidad nacional los protege de un
posible sobresalto nacionalista contra el poder que consiguieron,
especialmente en las finanzas, en la política y en el sistema
mediático.
445 |
Kevin B. MacDonald
446 |
LA CULTURA DE LA CRITICA
IMS MIA
447 |
Kevin B. MacDonald
JUUUS EVOLñ
REVUELTA (ONTRfl EL
--.Per Mas parles, en eí mu^dc de b T-adií-cn,
eite «'■'’OMÚe-Ka ha estada s e^o-e arese-'íe
cq-'o en e?e ínqcíbramab'e en rosne- ?J cual tede
MUNDO MODERNO
lo de nas estaba jefárquicanente organizada. >*
EL MITO DE
LOS 6 MILLONES
El Fraude de los judíos
asesinados por Hitler
"El mayor fraude histórico,
político y financiero
por Joaquín Bochaca
de todos los tiempos."
448 |
LA CULTURA DE LA CRÍTICA
LA FINANZA, EL PODER
Y
EL ENIGMA CAPITALISTA
‘La gran paradoja de la
actual crisis económica es que por
los hombres no pueden
adquirir los bienes que Joaquín Bochaca
efectivamente han
producido...”
449 |
Kevin B. MacDonald
Albert Slosman
La trilogía de los orígenes
El Gran Cataclismo
la historia de los antepasados de los primores faraones...
mniaV e
www.omnia-veritas.com
450 |