Ensayo de Pneumatologiìa

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Seminario Bíblico Nacional “Hermano Pablo”

LICENCIATURA

MÓDULO PNEUMATOLOGIA

ENSAYO

La importancia y vigencia de los dones


espirituales v/s la cesación de ellos.

(15 de octubre 2024)

Profesor:

Alberto Carrasco Peñaloza

Alumno

René Aguirre Maldonado


Introducción.

En algunos círculos teológicos no pocos, se plantea la cesación de los dones

espirituales al término de la época apostólica, eso implicaría que desde esa época

ya no habría más milagros a través de los dones del Espíritu Santo. Los argumentos

entregados en cuanto a la cesación de los dones parecen ser bastante convincente,

no obstante, me entra la duda, cuando observo a la Iglesia emergente,

inmediatamente después del primer siglo, muchos creyentes eran llevados al circo

romano para ser echado a los leones, otros eran usados como antorchas humanas

en las calles de Roma, ¿Cuál era el poder que estaba en ellos? no les importaba

dar su vida por su fidelidad a Cristo. Los testimonios de los padres de la fe quienes

según la historia y la tradición se les adjudicaban milagros. Esto no termina ahí

parece haber una clara evidencia de que cuando se lee la palabra de Dios su

Espíritu es derramado. En los tiempos de la pre-reforma parece pasar lo mismo al

leer la palabra de Dios muchas vidas fueron cambiadas el papa ni el clero pudieron

acallar sus voces, es más no les importo ir a la hoguera por su fidelidad a Cristo, y

los milagros no estaban ajenos a ellos. Cuando estudiamos el pentecostalismo nos

damos cuenta de que todo ocurre porque se dedicaron a leer la palabra de Dios

entre medio de esos estudios fueron bautizados por el Espíritu Santo.

Podemos ver un denominador común al revisar la historia, cada vez que las

personas se reúnen a estudiar la Biblia es derramado el Espíritu Santo y suceden

cosas maravillosas.

Hasta el día de hoy se observan sanidades y milagros. Este ensayo plantea que los

dones no han cesados. Los argumentos de que cesaron no son bíblicamente claros.
Era una fría mañana de invierno y caminábamos hacia la iglesia para la oración con

un bebe en brazo y otro en el vientre, la distancia a recorrer no era menor pero eso

no importaba, no queríamos llegar tarde la oración, iniciaba a eso de las cinco de la

mañana, para lo que faltaban solo unos pocos minutos, apresuramos el paso, al

llegar a la iglesia esta estaba llena, aun no eran las cinco pero ya estaban orando,

Podíamos sentir la presencia del espíritu Santo y su calor llenaba el lugar, se oraba

por sanidad, liberación, trabajo y cualquier necesidad que las personas tuvieran,

una vez terminada la oración pasaban muchos hermanos adelante dando testimonio

de como el Señor les había sanado, liberado, dado trabajo sacado de un gran

problema etc., la lista era larga y variada. En nuestro corazón había un gozo

inmenso hace poco me había convertido, y me decía a mi mismo porque no había

recibido a Cristo antes en mi corazón, cuanto tiempo había desperdiciado. El poder

conocer a un Cristo vivo a través de las escrituras y a un Espíritu Santo tan real que

me parecía incluso poder tocarlo. Sus milagros no dejaban de asombrarme, solo

quería compartirlo con mis familiares, en el trabajo, en fin, con quien se me cruzara

en el camino.

El día anterior un compañero de trabajo y hermano en Cristo me mostraba un video

que estaba en ingles no entendíamos en realidad que era lo que decía el predicador

este tocaba a las personas y estas caían, pero junto a mi amigo al observar el video

nuestros ojos se llenaban de lágrimas y solo queríamos orar y leer la biblia fue algo

bastante raro no podíamos explicarlos esa noche al llegar al trabajo mi amigo tenia

un libro que se llamaba “Buenos Días Espíritu Santo” y lo que el ministro describía

en el parecía que lo estábamos experimentado, estaban ocurriendo muchas cosas


que no podíamos comprender como por ejemplo fue lo rápido que leímos ese libro

y en la hora de colación ya no queríamos ni siquiera comer, solo queríamos leer la

biblia cosa que hacíamos antes de leer ese libro. Mi amigo me preguntaba si en mi

iglesia La Asamblea de Dios, la gente se caía cuando era ungida y yo le respondí

que sí, mi amigo era de la iglesia Cuadrangular y me dijo que a pesar de que el

pastor de su congregación no ungía a nadie las personas se caían igual, era muy

emocionante lo que estaba ocurriendo y empezamos a preguntarnos desde cuando

se daba esto, mi amigo que tenia más tiempo en el evangelio me indico que esto no

lo había presenciado antes, en esos mismos días descubrimos que el autor del libro

era el mismo del video que habíamos observado.

Empezamos una investigación y para sorpresa de ambos las Asambleas de Dios

como la Iglesia Cuadrangular habían nacido de un movimiento similar que se

denominaba avivamientos, seguimos escudriñando y nos pareció que el mismo

Espíritu nos llevo al libro de los Hechos directo al capitulo dos entonces tuvimos

claridad de lo que ocurría.

Este mover fue de menos a más los Pastores de la ciudad se unieron y levantaron

una radio. Eran increíbles los cultos unidos que se celebraban en el grupo escolar,

la prensa llego al lugar quedando atónitos antes lo que presenciaban. Mientras otras

personas no paraban de llorar. Y llego el momento en que el obrar del Espíritu

cambio ya no caen al suelo las personas como antes, pero muchos llegaban a los

pies de Cristo cambiando de dirección en sus vidas. Podíamos entender, que ahora

el mover seguía, pero en forma interna, el Espíritu trataba con las personas en una

forma más personal. Pensé en la ocasión que Pablo y Silas caen a la cárcel el
Espíritu toco el corazón del carcelero quizás no se observó ningún milagro sobre

natural, pero ese corazón transformado fue el inicio de una nueva congregación.

Este relato aun lo tengo presente, como si fuera ayer, vimos los dones espirituales

en acción.

Me llama la atención al leer acerca de quienes hablan de la cesación de los dones

nunca me había detenido a pensar en ello, lo que me causa asombro es que son

personas conocidas por sus estudios teológicos, predicas, etc.,

Los dones no han cesado, sino que hay personas que no los han experimentados,

el mismo Espíritu los ha guiado en sus estudios y ha iluminado sus caminos, a veces

no podemos ver el bosque a causa de los árboles. El Espíritu Santo es tan real y

llena de poder al creyente para que este pueda extender el Reino de Dios, es Él

quien motiva a los creyentes para poder seguir extendiendo el Reino de Dios

Me imagino aquellos tiempos del primer siglo cuando la iglesia era perseguida,

donde muchos creyentes nunca dudaron de dar sus vidas por su fidelidad a Cristo,

la historia es testigo de cómo los mártires sumaban cada vez más. Los tiempos de

la pre-reforma son otro ejemplo donde los tártaros fueron prácticamente eliminados

y aun así no pudieron apagar el fuego del Espíritu. Me lleno de gozo cuando leo

acerca de la calle Azusa, me imagino estar ahí estudiando la palabra cuando como

viento recio es derramado el Espíritu Santo, no obstante, estuve en Calama cuando

algo similar ocurrió siempre cuando las personas buscan a Dios leyendo su palabra

su Espíritu se presenta, tal cual fue en el pentecostés del primer siglo donde ciento

veinte orando en el Aposento Alto, esperando la promesa dada por Jesús el mismo
dijo que lo esperasen que recibirían poder no solo para ser testigos en Jerusalén

sino hasta los confines de la tierra, en el primer siglo el evangelio no llego a los

confines de la tierra esos es posible en estos tiempos donde los confines de la tierra

están poblados y su evangelio puede ser predicado.

Es difícil asimilar que más importante que la sanidad del cáncer es el perdón de

pecados por parte de Dios, no obstante, si es la voluntad de Dios el sanar el cáncer

lo va hacer, siempre en esas sanidades hay un propósito mayor, pero sin duda lo

mas valioso es ser redimidos por Dios, de que sirve ser sanado del cáncer si va a

pasar la eternidad en el infierno.

La palabra sin lugar a duda nos deja claro el porque y el para que son los dones

espirituales. En la primera carta a los corintios Pablo nos indica que son para

edificación de la Iglesia, lo que es un ciclo constante de generación tras generación

de creyentes hasta que Cristo vuelva a buscar su Iglesia, porque cesarían entonces.

Quienes afirman que los dones cesaron en el primer siglo argumentan de que hoy

quienes dicen poseerlos generalmente son engañadores, que solo buscan el dinero

de los ingenuos y/o gozar de fama. Pedro en sus cartas nos advierte de los falsos

maestros indicando cuales son sus motivaciones, el dinero, la fama etc., las mismas

motivaciones de los falsos maestros de hoy, porque nos extrañamos entonces de

ellos, si ya fuimos advertido por Pedro, esta profetizado además acerca de la

apostasía y del engaño que sufrirán incluso los escogidos a causa de prodigios y

milagros. La Iglesia entonces necesita el don de discernimiento, el de ciencia, etc.,

para poder desenmascarar a los engañadores a tiempo y así evitar un daño mayor

Dios nos ama y no ha provisto de poder.


Cuando alguien en la congregación esta enfermo las escrituras nos alientan a orar

por ellos e imponer manos para que sanen y esto es a través de los dones y del

poder del Espíritu Santo, quien usa al creyente como un instrumento en sus manos

para sanar al enfermo. Jesús les dijo a sus discípulos que harían mayores cosas de

las que hizo Él, usted y yo somos discípulos de Jesús, por lo tanto, esta promesa

también válida para sus discípulos hoy porque no habría de ser así.

Quienes afirman que los dones cesaron no toman un argumento bíblico que así lo

señale en forma directa o indique que al morir el último apóstol los dones dejarían

de ser, sus argumentos se basan en inferir o interpretar las escrituras desde su

perspectiva.

Quienes afirman que los dones de lengua, profecía y sanidad cesaron no mencionan

los otros dones entonces debemos suponer que también cesaron, luego en qué

momento fue, no lo tienen claro, argumentan que en algún momento después del

primer siglo. Si los dones son para la edificación de la Iglesia, convicción de los

incrédulos y propagación del evangelio hoy también son necesario ¿porque

entonces tendrían que cesar?

El tiempo que vivimos es similar a estar en un tren bala de alta velocidad tenemos

tanto que hacer que el día no nos alcanza nos levantamos y andamos corriendo

hasta que ya no tenemos fuerzas y al caer la noche ya estamos rendidos, El tiempo

de nuestro devocional es pequeño y no siempre podemos orar en forma

concentrada, pocas veces podemos sentarnos a estudiar la palabra de Dios como

corresponde, cuando pienso en esto me doy cuenta que los dones espirituales no

se pueden desarrollar en este ambiente, y no es que hayan cesado.


Conclusión.

De acuerdo con lo investigado, hay muchas personas destacadas en el Evangelio

que plantean la cesación de los dones espirituales a fines del siglo primero, se

basan en las escrituras, aludiendo que los dones fueron dados a los apóstoles y no

se continuaron, pero Pablo en la carta a los Corintios indica que sus integrantes

también los tenían, es decir, deberíamos agregar que tampoco los continuaron.

La Biblia evidencia que los dones espirituales existen y las experiencias personales

lo ratifican no es ninguna ocurrencia sin fundamentos.

Los falsos maestros son como la cizaña que crece junto al trigo, son una realidad,

solo quieren sacar provecho de las personas ingenuas, no les importa dañar a la

Iglesia, por lo que tenemos que estar atentos, estos falsos maestros no solo

estuvieron en la primera Iglesia aún continúan haciendo de las suyas no han

cesado, entonces porque el don de discernimiento debería cesar, nuestras

congregaciones hoy más que nunca son atacadas con falsas doctrinas disfrazadas

de piedad, las congregaciones del siglo XXI necesitan más que nunca de los dones

espirituales.

El mundo esta en llama, necesita de los cristianos y de sus dones espirituales

necesitan urgente del Espíritu Santo.


Bibliografía.

1. Buenos día Espíritu Santo, Benny Hinn. 1990

2. Azusa Street, Frank Bartleman, 2006

3. Mi compañero El Espíritu Santo, David Yonggi Cho, 1970 (1992 español)

4. Yo creo en los milagros, Kathryn Kuhlman, 1962 (1977 español)

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