GENERALIDADES

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 15

GENERALIDADES

Osteología
Las funciones del esqueleto es sostener el cuerpo, proporcionar el sistema de palancas utilizadas en la
locomoción y proteger las partes blandas. El hueso tiene un cometido secundario en la
homeostasis mineral, proporcionando una reserva de calcio, fosfato y otros iones.

Clasificación de los huesos


La clasificación topográfica reconoce un esqueleto craneal (la cabeza) y un esqueleto
poscraneal, que consta de dos divisiones: el esqueleto axial (del tronco) y el esqueleto
apendicular (de los miembros torácicos y pélvicos).
Otra segunda clasificación reconoce el esqueleto somático, formado en la pared corporal, y
el
esqueleto visceral, derivado de los arcos faríngeos.
En manera individual, los huesos se clasifican por su forma:
 Los huesos largos son típicos de los miembros, son cilíndricos y se han adaptado
para desempeñarse como palancas de la locomoción. Se desarrollan a partir de tres
centros osificación: uno para el cuerpo (diáfisis) y uno para cada extremo (epífisis).
 Los huesos cortos las dimensiones de largo ancho y espesor se equilibran. Muchos de
estos se agrupan en el carpo y el tarso, donde la multiplicación de articulaciones
permite movimientos complejos y se desarrollan a partir de un centro único de
osificación.
 Los huesos planos están expandidos en dos dimensiones. Esta categoría incluye la
escápula, los huesos de la cintura pélvica, y muchos de la cabeza. Sus amplias
superficies proporcionan fijación a grandes masas musculares y protección a partes
blandas subyacentes
 Los huesos restantes son irregulares.

Organización un hueso largo


La forma del hueso es determinada por una vaina o corteza de hueso sólido compacto que
está compuesta de delgadas laminillas, dispuestas principalmente en series de tubos
concéntricos alrededor de pequeños canales centrales, conocidos como osteona. La corteza
es gruesa en la parte media de la diáfisis, pero se adelgaza hacia cada extremo del hueso. Su
superficie externa es lisa, excepto en donde las irregularidades sirven como sitio de fijación
de músculos y ligamientos. Estas irregularidades pueden ser elevaciones, eminencias o
depresiones, para aumentar la oportunidad de fijación. La mayoría de las salientes o
eminencia se conocen como líneas, crestas, tubérculos, tuberosidades o espinas, y la
mayoría de las depresiones se conocen como fosas o surcos.
La superficie interna de la diáfisis o cuerpo rodea una cavidad medular central.
Los extremos de los huesos largos están ocupados por hueso esponjoso, que forma una red
tridimensional de espículas entrelazadas, placas y tubos de densidad variable, la cavidad
medular y los espacios intersticiales del hueso esponjoso están ocupados por medula ósea.
La medula ósea roja es un tejido gelatinoso muy vascularizado con propiedades
hematopóyeticas. Aunque toda la medula óseas de este tipo en el animal joven, la mayor
parte de ella es después infiltrada por grasa y convertida en medula amarilla, cuyo
potencial hemopoyético está en activo. La medula activa queda confinada a los extremos
proximales del húmero y del fémur, los huesos de las cinturas torácica y pélvica y los del
esqueleto axial.
Las partes óseas que se articulan con huesos vecinos son lisas, están cubiertas de cartílago
articular hialino, el cual está calcificado en su capa más profunda, firmemente sujeta a la
corteza subyacente y se vuelve fibrosa hacia la periferia, en donde se mezcla con el periostio
y la cápsula articular.
Una dura membrana fibrosa, el periostio recubre el resto de la superficie externa de la cual
puede desprenderse con facilidad, excepto en donde está penetrada por tendones y
ligamentos que van a anclarse en la masa compacta.

1
Los huesos poseen una irrigación sanguínea abundante que representa del 5 al 10% del gasto
cardíaco. Existen varios conjuntos de vasos: la arteria nutricia en general es la más grande
y la que menos contribuye a la irrigación. Penetra hacia la mitad de la diáfisis y suele dirigirse
hacia un extremo del hueso. Se divide en dos ramas divergentes dentro de la medula ósea, y
tienen recorridos tortuosos.
Las ramas más pequeñas alimentan los sinusoides del tejido medular y también las arteriolas
y capilares que se extienden por un sistema de diminutos canales centrales dentro de las
osteonas del hueso compacto.
Otro suministro de sangre hacia la corteza ósea procede de los sinusoides medulares. La
irrigación del tercio medio del cuerpo del diáfisis del hueso largo depende en mayor medida
de la arteria nutricia, las partes periféricas dependen de arterias metafisarias.
El drenaje principal de la medula ósea es realizado por grandes venas de paredes delgadas
que acompañan a las arterias principales y emergen atrás de los agujeros nutricios,
epifisiarios y metafisiarios.
Los capilares drenan en vénulas dentro del periostio. La circulación cortical es centrífuga.
No existen vasos linfáticos dentro del hueso, y las arterias no penetran en el cartílago de
crecimiento.
Los nervios acompañan a los vasos más grandes y sus ramos se encuentran dentro de los
conductos centrales de las osteonas. Algunas fibras vasomotoras pasan a los vasos, otras
que son sensitivas pasan a los tejidos óseos, especialmente el periostio.

Variedades especializadas de hueso.


Con frecuencia se encuentran huesos dentro de tendones en los lugares donde cambian de
dirección sobre prominencias que los expondrían a presión y fricción excesivas. Estos huesos
son los sesamoideos y forman articulaciones sinoviales regulares con los huesos
principales con los que están en contacto. Previenen el desgaste de los tendones y desplazan
el tendón más allá del eje de la articulación adyacente, incrementando la acción de palanca
ejercida por el músculo.
Los huesos esplácnicos se desarrollan dentro de los órganos blandos, lejos del resto del
esqueleto.

2
Algunos huesos poseen espacios aéreos. En los mamíferos estos huesos neumáticos están
confinados al cráneo y contienen los senos paranasales, que se comunican con las cavidades
nasales. Los senos se desarrollan principalmente después del nacimiento cuando
proyecciones de la mucosa nasal invaden algunos huesos craneales y reemplazan el diploe, el
hueso esponjoso entre las láminas externa interna de la sustancia compacta.

3
Artrología
Articulaciones fibrosas
En estas articulaciones los segmentos están unidos por tejido fibroso, lo que impide los
movimientos, por esta razón, se les conoce como articulaciones fijas o inmóviles. No hay una
cavidad articular y, en su mayoría, son temporales, ya que el tejido fibroso que las une se
transforma en hueso mediante un proceso de osificación, lo que da lugar a una sinostosis.
Las principales clases de articulaciones fibrosas son:
 La sutura: la sutura se refiere a las articulaciones de la cabeza, en las que los huesos
adyacentes están unidos por tejido fibroso, conocido como ligamentos sutúrales.
o Sutura dentada: los bordes de los huesos presentan irregularidades que
encajan entre sí, como ocurre en la sutura interfrontal.
o Sutura escamosa: los bordes están cortados en bisel, lo que permite que un
hueso cubra parcialmente al otro.
o Sutura plana: los bordes son planos o ligeramente rugosos.
o Sutura foliada: una sutura en la que el borde de un hueso se fija dentro de una
fisura o receso del hueso adyacente. Las suturas foliadas se encuentran en
lugares donde se necesita máxima estabilidad. Termino actualmente en desuso.
 La sindesmosis: los huesos están unidos por tejido fibroso, que puede ser blando,
elástico o una combinación de ambos. Ejemplos de sindesmosis incluyen las uniones
entre las diáfisis de los huesos metacarpianos y las uniones entre los cartílagos
costales. En una sinostosis, los huesos opuestos están unidos por tejido fibroso, como
ocurre en las uniones de las diáfisis del radio y el cúbito, y la tibia y el peroné en el
caballo. Con la edad, este tejido fibroso se osifica, un proceso conocido como
sinostosis.
 La gonfosis: se aplica a la implantación de los dientes en los alvéolos.
Articulaciones cartilaginosas
La mayoría se conocen como sincondrosis, incluyendo las articulaciones centrales entre las
epífisis y las diáfisis de los huesos juveniles, así como las articulaciones correspondientes de
la base del cráneo. La mayoría de estas
articulaciones son temporales y desaparecen una
vez que ha finalizado el crecimiento, cuando el
cartílago es reemplazado por hueso. Las pocas
sincondrosis permanentes incluyen la articulación
entre el cráneo y el aparato hioideo.
En la sínfisis, los huesos de las articulaciones
están separados por una sucesión de tejidos,
generalmente cartílago, que cubre los huesos con
fibrocartílago o tejido fibroso en el centro. Esta
categoría incluye las articulaciones entre las dos
ramas de la mandíbula, las de la sínfisis púbica, y
las articulaciones entre los cuerpos de las vértebras sucesivas.

Articulaciones sinoviales
Los huesos participantes están separados por un espacio lleno de líquido conocido como
cavidad articular. Los límites de este espacio están formados por una membrana sinovial,
un delicado tejido conectivo que se inserta en la periferia de las superficies articulares,
revestidas con capas delgadas de cartílago. En la mayoría de las articulaciones sinoviales, la
membrana sinovial está reforzada externamente por una cápsula fibrosa y ligamentos
adicionales que se colocan estratégicamente para unir los huesos y restringir el movimiento.
La superficie articular está recubierta de cartílago articular, generalmente de tipo hialino,
aunque en algunas ubicaciones puede ser reemplazado por fibrocartílago o incluso tejido
fibroso denso. El cartílago acentúa la curvatura del hueso subyacente, alcanzando su mayor

4
grosor en el centro de superficies convexas y en la periferia de las cóncavas. Su superficie es
lisa al tacto.
El cartílago tiene una estructura compleja en la
que fibras finas dentro de su matriz pasan desde el
hueso subyacente hasta la superficie, donde se
curvan para mantenerse estrechamente
empacadas. El cartílago articular es insensible y
avascular; sus requerimientos de oxígeno y
nutrientes se satisfacen por difusión desde tres
fuentes: la sinovia dentro de la cavidad articular,
los vasos en los tejidos de la periferia del cartílago
y los vasos en los espacios medulares subyacentes.
La difusión es facilitada por la porosidad de la
matriz cartilaginosa, que absorbe y libera el líquido
sinovial a medida que el cartílago se comprime y
relaja.
Algunos cartílagos articulares grandes presentan
áreas deprimidas, conocidas como fosas
sinoviales, que pueden muescar la periferia o
aparecer como depresiones. Estas áreas desnudas
están revestidas de un tejido conectivo delgado.
La membrana sinovial completa el revestimiento de la articulación; es una lámina de tejido
conectivo de color rosado brillante, que puede descansar directamente sobre una cápsula
fibrosa externa dura o estar separada de esta por la interposición de almohadillas de grasa, o
es posible que estas tres disposiciones coexistan en diferentes regiones de la misma
articulación. La membrana sinovial puede formar una bolsa donde no tiene soporte, y estos
divertículos pueden extenderse considerablemente. La superficie interna de la membrana
tiene numerosas proyecciones que incrementan su
área de superficie. No posee una cubierta continua de
células; las porciones más celulares son responsables
de la producción del componente lubricante del
líquido sinovial, mientras que los demás componentes
derivan del plasma sanguíneo. La membrana sinovial
está vascularizada y es sensible.
El líquido sinovial, contenido en la cavidad articular,
tiene funciones tanto lubricantes como nutritivas, y
ayuda a amortiguar las superficies articulares.
Una lámina fibrosa externa completa la cápsula,
rodeando sin interrupciones los bordes de las
superficies articulares y presentando engrosamientos
locales conocidos como ligamentos. Estos
ligamentos se llaman a veces intracapsulares para
distinguirlos de la mayoría, que se encuentran en
posiciones periféricas y son claramente
extracapsulares; sin embargo, están realmente
excluidos de la cavidad articular por una cubierta de
membrana sinovial. La lámina fibrosa y los
ligamentos están inervados por terminaciones
nerviosas propioceptivas, que registran la posición y
la velocidad de cambio de la posición articular, así como receptores del dolor.
Unas pocas articulaciones poseen discos o meniscos que son verdaderamente
intracapsulares.
Un disco se fusiona con la membrana sinovial en su periferia, dividiendo la cavidad en
compartimientos superior e inferior. En la articulación de la rodilla se encuentran meniscos

5
pares, llamados semilunares, que están insertados solo en sus bordes convexos y, por lo
tanto, dividen la cavidad de manera incompleta.
Estas dos estructuras se componen de cartílago hialino, fibrocartílago y tejido fibroso. Los
meniscos y los discos proporcionan congruencia a superficies articulares incompatibles y
son un medio para facilitar movimientos complicados.

Un labio articular es un borde de fibrocartílago


dispuesto en la circunferencia de algunas superficies
articulares cóncavas, como el acetábulo, y sirve para
extender y profundizar la superficie articular,
incrementando el área que soporta la carga y
ayudando a extender el líquido sinovial. Un labio de
forma maleable permite que la superficie se adapte
a las desigualdades en la curvatura del hueso con el
que entra en contacto.
Las almohadillas sinoviales o cojinetes se
forman donde las masas de grasa están incluidas
entre las capas sinovial y fibrosa de la cápsula
articular. Se interpretan como estructuras que
extienden el líquido sinovial sobre la superficie, pero su propósito principal es permitir que la
membrana sinovial se adapte a la forma del hueso con el que está momentáneamente en
contacto.

Movimientos de las articulaciones


El tipo más simple de movimiento es la traslación, que es el desplazamiento de una
superficie plana sobre otra mientras los cuerpos a los que pertenecen las superficies
mantienen su orientación original.
Todos los demás movimientos implican un cambio angular.
En algunos casos, el hueso que se mueve gira alrededor de un eje perpendicular a su
superficie articular, lo que se describe como rotación, la cual puede revertirse, por lo que es
necesario especificar su sentido. Una rotación interna de un miembro desplaza
medialmente la superficie craneal, y una rotación externa la desplaza lateralmente.
Otros movimientos implican el giro del hueso que se mueve alrededor de un eje paralelo a su
superficie articular en un movimiento pendular, conocido como oscilación.
Los movimientos pendulares en planos sagitales predominan en las articulaciones de los
miembros. La flexión reduce el ángulo entre los dos segmentos de un miembro, mientras
que la extensión aumenta el ángulo entre estos segmentos, alineándolos más. Sin embargo,
el movimiento en algunas articulaciones fluctúa desde una posición flexionada a una
extensión completa, hasta una segunda posición flexionada en el otro extremo, lo que se
conoce como hiperextensión.
La abducción y la aducción son movimientos pendulares en planos transversales. La
aducción lleva la parte que se mueve hacia el plano medio, y la abducción la aleja del plano
medio. La combinación de flexión, extensión, abducción y aducción permite al extremo del
miembro realizar un movimiento circular o elíptico, conocido como circunducción. Se
requiere un cierto grado de incongruencia para mantener una cuña de líquido sinovial
lubricante entre las superficies. La tensión de los ligamentos extracapsulares puede detener
el movimiento.

6
Clasificación según sistema geométrico
 Articulación plana:

Procesos articulares de las vértebras cervicales.


 La articulación troclear, también llamada bisagra o gínglimo angular, tiene una
superficie articular en forma de segmento cilíndrico que encaja en una cavidad que lo
recibe. El movimiento pendular es posible solo en un plano, y la restricción de otros
movimientos puede ser reforzada por fuertes ligamentos colaterales y posiblemente
por el desarrollo de rebordes y surcos. Un ejemplo es la articulación del codo entre el
húmero y los huesos del antebrazo.

Articulación del menudillo del caballo


(metacarposesamoidofalángica).
 La articulación trocoide o gínglimo lateral consiste en un vástago dentro de un
anillo, y el movimiento ocurre alrededor del eje largo del vástago. En algunas
articulaciones, como la radiocubital proximal, el vástago rota dentro de un anillo fijo; en
otras, como la atlantoaxial entre las dos primeras vértebras del cuello, el anillo rota
alrededor del vástago fijo.

7
Articulación atlantoaxial del bovino (vista
craneal).
 La articulación condilar está constituida por dos cóndilos en forma de nudillo que
encajan en superficies cóncavas correspondientes. Los dos complejos pueden estar
muy cerca entre sí, como en la articulación femorotibial, o estar alejados y tener
cápsulas articulares independientes, como en la articulación temporomandibular. El
movimiento es principalmente uniaxial alrededor del eje transversal común a los
dos cóndilos, aunque también es posible algo de rotación y deslizamiento.

Articulación femorotibial del perro (babilla)

 La articulación elipsoide presenta una superficie convexa ovoide que encaja en una
concavidad correspondiente, permitiendo movimientos en dos planos perpendiculares
entre sí: flexión-extensión y aducción-abducción, aunque es posible algo de
rotación. Un ejemplo es la articulación radiocarpiana del perro.

Carpo del perro.


 La articulación en silla de montar combina dos superficies, cada una convexa en
una dirección y cóncava en una dirección perpendicular a la primera. Estas
articulaciones son biaxiales y permiten flexión-extensión y aducción-abducción,
con algo de rotación. Un ejemplo es la articulación interfalángica distal del perro.

8
Articulación interfalángica distal del perro.
 La enartrosis o articulación esferoidea consiste en una porción esférica encajada
dentro de una cavidad complementaria. Esta articulación multiaxial posee la mayor
versatilidad de movimiento, siendo la articulación de la cadera un ejemplo típico.

Articulación coxofemoral ("de la cadera") del perro (vista caudodorsal).

Miología
Existen tres variantes de tejido muscular: el músculo especializado cardíaco, el músculo
liso visceral, que se encuentra en los vasos sanguíneos y las vísceras, y el músculo
esquelético, que se organiza en unidades que se insertan en los huesos y se utilizan para
efectuar sus movimientos. El músculo esquelético también se conoce como músculo
estriado, somático o voluntario.

Organización de los músculos esqueléticos


Cada músculo individual está compuesto por muchas células mantenidas juntas por tejido
conectivo, denominadas miofibrillas. El músculo completo está cubierto por una vaina de
tejido conectivo denso llamada epimisio, y debajo de esta se encuentra una capa más laxa,
el perimisio, que recubre los pequeños fascículos en los que se agrupan las fibras.
Finalmente, cada fibra muscular posee su propia cubierta delicada, el endomisio. Estos
componentes del tejido conectivo se fusionan en cada extremo del vientre del músculo y
continúan como tendones, a través de los cuales el músculo se inserta.

Variaciones en la arquitectura muscular


La fuerza que un músculo puede desarrollar es una función de la suma de su área de corte
transversal. El desplazamiento máximo es producido por el llamado músculo "asentado", en el

9
cual las fibras corren paralelas al eje longitudinal a lo largo de todo el músculo, terminando en
tendones de inserción muy cortos.
Los músculos en los que las fibras se unen a los tendones en ángulo tienden a ser potentes en
relación con su masa.

Los músculos con fibras en ángulo pueden organizarse en varias categorías de creciente
complejidad de construcción:
 Peniforme
 Bipeniforme
 Semipeniforme
 Multipeniforme
Muchos músculos de los miembros locomotores son peniformes, con forma de pluma, y a
diferencia de los músculos asentados, están provistos de largos tendones en forma de cordón
que permiten que los voluminosos vientres musculares se sitúen cerca del tronco.
Algunos músculos de la pared corporal forman delgadas capas planas que se continúan con
anchas láminas de tendones, conocidas como aponeurosis.
Otros músculos se originan de dos, tres o cuatro cabezas separadas que se unen en un
tendón común, denominándose bíceps (dos cabezas), tríceps o cuádriceps. En otra
variante menos común, dos o más unidades carnosas están separadas por un tendón
intermedio, formando músculos digástricos (dos vientres) o poligástricos. Otros
músculos más están dispuestos en anillos que rodean orificios naturales, actuando como
esfínteres. Los músculos pares que se encuentran junto a la línea media o que se originan
en ella están separados por una cinta de tejido conectivo conocida como rafe.
Los músculos también varían en aspecto por el color, que refleja la cantidad de mioglobina. La
adaptación del músculo pálido es para la contracción rápida durante un corto período de
tiempo, mientras que la adaptación del músculo más oscuro es para una actividad más
lenta pero sostenida.

Tendones
Los músculos siempre se insertan por medio de tendones de tejido conectivo. Cuando estos
son tan cortos que casi no se advierten, se dice que los músculos tienen inserciones directas.
Los tendones están compuestos casi por completo de fibras de colágeno y poseen gran
fuerza. De hecho, es más probable que una tensión excesiva rompa el vientre del músculo o
desprenda un fragmento de hueso en la inserción
antes de que se rompa el tendón.
Los tendones son más elásticos de lo que suele
suponerse y son capaces de absorber y
almacenar energía cuando se estiran. Sin
embargo, pueden lesionarse por presión o fricción
excesivas, en particular cuando cambian de
dirección sobre prominencias óseas o se mueven
sobre tejidos duros.

10
Como forma de protección, desarrollan calcificaciones locales o almohadillas llenas de líquido.
Si solo una parte de la circunferencia del tendón está en riesgo, se puede interponer una
bolsa sinovial (bursa sinovialis). Si una mayor parte de la circunferencia es vulnerable,
una vaina tendinosa (vagina synovialis) puede envolver el tendón, encerrándolo dentro.
Las paredes de estas bolsas y vainas, junto con el líquido sinovial que contienen, recuerdan a
los componentes de las articulaciones sinoviales. Cuando el tendón se moviliza, son las capas
sinoviales lubricadas las que friccionan entre ellas.

Suministro de sangre e inervación de los músculos


Los músculos reciben un suministro sanguíneo relativamente abundante de las arterias
vecinas. A veces, una sola arteria penetra en el vientre del músculo, y con frecuencia, dos o
más arterias penetran en forma separada. Las arterias intramusculares se ramifican dentro
del perimisio para abrirse en capilares que siguen las vainas endomisiales de las fibras
individuales. Las venas son satélites de las arterias. Los tendones, debido a sus bajas
necesidades metabólicas, están pobremente vascularizados y no sangran. Los vasos linfáticos
se encuentran dentro de las porciones más grandes de tejido conectivo del vientre del
músculo.
La mayoría de los músculos son inervados por un nervio único, pero los del tronco, que están
formados por varias somitas, conservan una inervación múltiple. El nervio que penetra en
un músculo generalmente lo hace en compañía de los vasos principales. Este se ramifica
dentro de los tabiques de tejido conectivo, y consta de fibras de varios tipos.
Las fibras motoras grandes (alfa) inervan las fibras musculares de la masa principal,
mientras que las fibras motoras más pequeñas (gamma) inervan células musculares
modificadas dentro de los husos musculares, ubicados profundamente en la masa muscular.
Las fibras vasomotoras no mielinizadas inervan los vasos sanguíneos, y las fibras
sensoriales inervan los husos, los órganos tendinosos y otros receptores.

Acciones musculares
Cuando se activa un músculo, sus fibras intentan acortarse. Dependiendo de las
circunstancias, cuando ocurre el acortamiento, la tensión en el músculo puede incrementarse,
permanecer igual o disminuir. Cuando fuerzas externas impiden el acortamiento del músculo,
la tensión dentro de él aumenta, y esta actividad se denomina isométrica.
El sistema musculoesquelético opera como un sistema de palancas, en el cual las
articulaciones actúan como fulcros. Aunque un músculo que se inserta cerca del fulcro es
menos potente que uno comparable insertado a una distancia mayor, produce su efecto más
rápidamente.
Los músculos biarticulares o multiarticulares pueden ser incapaces de acortarse lo suficiente
para producir el arco de movimiento completo en todas las articulaciones, lo que se conoce
como insuficiencia activa. Un músculo que produce un efecto particular se llama músculo
agonista principal. Un músculo capaz de oponerse activamente a ese movimiento se
denomina músculo antagonista (estos términos solo tienen validez en relación con un
movimiento específico). Otros músculos no pueden ni facilitar ni oponerse directamente a un
movimiento, pero pueden modificar la acción del agonista, tal vez eliminando un efecto
colateral no deseado, músculos sinérgicos. Cuando los músculos se utilizan para estabilizar
articulaciones más que para facilitar sus movimientos, se les llama fijadores o
estabilizadores.

Los términos "origen" e "inserción" tienen un significado puramente convencional.


El "origen" denota la fijación más próxima al centro del cuerpo, y la "inserción" la
más distal o periférica.

Sistema nervioso central


La neurona es una célula alargada que tiene cuerpo celular, conocido como pericarion o
soma, que contiene el núcleo y varias ramificaciones. Una de estas ramificaciones es la

11
dendrita. Las dendritas son múltiples ramificaciones que transmiten impulsos hacia el
pericarion. Es decir, reciben los impulsos y los llevan al cuerpo o núcleo de la neurona. La
otra proyección, que siempre es única, es el axón, que conduce los impulsos desde el cuerpo
de la neurona hacia el exterior.
Las neuronas están sustentadas por otras células especializadas que forman un tejido de
soporte en el cerebro y la médula espinal, conocido como neuroglia. Estas células son de
varios tipos y cumplen funciones importantes, como ayudar en la nutrición y la
neurotransmisión, así como proporcionar revestimiento y aislamiento para evitar que los
impulsos eléctricos se mezclen entre neuronas vecinas. El material aislante que utilizan es la
mielina.

Un grupo de pericariones o cuerpos celulares


tiende a ser más oscuro, y se destaca sobre el
fondo blanco de los fascículos formados por los
axones y las dendritas. Los cuerpos celulares
forman la sustancia gris del cerebro, que se
encuentra en su parte interna. La sustancia
blanca del encéfalo y la médula espinal está
formada por los axones y dendritas.

Aparato de estímulo y respuesta


La respuesta a un estímulo se lleva a cabo en cinco elementos en serie:
1. Región receptora: Responde a un estímulo recibido.
2. Neurona aferente: Transporta el impulso hacia el cerebro o la médula espinal.
3. Sinapsis: Ocurre entre las neuronas, permitiendo el paso del impulso.
4. Neurona eferente: Transporta el impulso desde el sistema nervioso central hacia el
cuerpo.
5. Efector: Responde al estímulo.

12
Reflejo monosináptico:
Este tipo de reflejo se ejemplifica cuando un médico golpea ligeramente la rodilla para probar
los reflejos. El golpe estimula receptores en el músculo y el tendón, generando un impulso
que viaja por las fibras aferentes. Este impulso llega a la médula espinal, donde pasa
directamente a las neuronas eferentes, sin la intervención de interneuronas. En la
mayoría de los reflejos comunes, hay una o más interneuronas interpuestas entre las fibras
aferentes y eferentes.

Sistema nervioso
El sistema nervioso se divide en dos partes principales:
1. Sistema nervioso central (SNC): Incluye el encéfalo y la médula espinal.
2. Sistema nervioso periférico (SNP): Incluye los nervios craneales, raquídeos y todos
los nervios periféricos.

Dentro del SNP, se distinguen:

13
 Nervios aferentes (sensitivos): Conducen impulsos desde la periferia hacia la
médula espinal o el encéfalo.
 Nervios eferentes (motores): Conducen impulsos desde el encéfalo o la médula
espinal hacia los nervios periféricos.

Diferenciación funcional:
El sistema nervioso también se divide en somático y visceral:
 Sistema nervioso somático: Relacionado con la interacción del organismo con el
mundo exterior, como la locomoción y la respuesta a estímulos externos.
o Las vías aferentes somáticas están en la piel y otros tejidos profundos de la
pared corporal y los miembros. Estas vías responden a estímulos externos al
organismo.
o Las vías aferentes propioceptivas o cinestésicas están asociadas con
receptores dentro de los tejidos más profundos y están relacionadas con
sensaciones internas, como la propiocepción y la tensión en los músculos.
 Sistema nervioso visceral: Relacionado con las funciones internas del cuerpo.
o Las vías aferentes viscerales se originan en vasos, glándulas y vísceras, y
responden principalmente a estiramiento y estímulos químicos. Las vías
aferentes viscerales especiales están involucradas en los sentidos del olfato y el
gusto.
o Las vías eferentes somáticas están dirigidas hacia los músculos estriados de
origen somático y branquioméricos.
o Las vías eferentes viscerales están dirigidas hacia el músculo liso de las
vísceras y vasos, el músculo cardíaco y las glándulas, e incluyen la inervación
simpática y parasimpática.
 Las fibras eferentes viscerales simpáticas abandonan el sistema
nervioso a través de los nervios espinales toracolumbares,
 Las fibras parasimpáticas viajan por algunos nervios craneales y por la
parte sacra de los nervios espinales.

Médula Espinal
La médula espinal es una estructura alargada y cilíndrica con cierto aplanamiento
dorsoventral, que presenta algunas variaciones regionales en forma de engrosamientos o
intumescencias. Estas intumescencias dan origen a los nervios que inervan los miembros
torácicos y pélvicos.
Un corte transversal de la médula espinal muestra que en el centro se encuentra el canal
central, rodeado por sustancia gris. Este canal central, llamado epéndimo central, es un
residuo embrionario y no tiene mucha importancia funcional en la médula espinal adulta.

La sustancia gris tiene una forma característica de "H" o de mariposa y se divide en varias
regiones:
1. Asta Dorsal (Arriba) contiene neuronas aferentes somáticas, localizadas
dorsomedialmente (en la parte superior central). Estas neuronas reciben los impulsos o

14
estímulos desde la periferia y los transmiten al cerebro. También pueden establecer
sinapsis dentro de la médula espinal.
o Asta Dorsolateral: aquí se encuentran las neuronas aferentes viscerales,
que reciben los impulsos provenientes de las vísceras.
o Asta Ventral (Abajo): compuesta casi exclusivamente por neuronas
eferentes somáticas, que envían impulsos hacia los órganos, produciendo
movimientos.
o En las regiones toracolumbar y sacra de la médula espinal, también se
encuentran neuronas eferentes viscerales. Estas se encargan de transmitir
información desde el sistema nervioso central hacia los órganos, controlando
funciones viscerales.
Fuera de la "H" de la sustancia gris, se encuentra la sustancia blanca, que recubre la
sustancia gris. La sustancia blanca se divide en tres funículos (o columnas de fibras
nerviosas):
1. Funículo Dorsal (Arriba):
2. Funículo Lateral (Medial):
3. Funículo Ventral (Abajo):
Cada uno de estos funículos contiene tractos ascendentes y descendentes, que son vías de
comunicación entre el cerebro y el resto del cuerpo.

15

También podría gustarte