Anatomía de La Agalla en Ficus Benjamina

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Anatomía de la agalla en Ficus benjamina (Moraceae) asociada

a “thrips” (Tubulifera: Phlaeothripidae)


Axel P. Retana-Salazar & Ethel Sánchez-Chacón
1. Centro de Investigación en Estructuras Microscópicas (CIEMic), Ciudad de la Investigación, Universidad de Costa
Rica. 11501-2060, San José, Costa Rica; [email protected]

Recibido 04-X-2007. Corregido 20-ix-2009. Aceptado 21-X-2009.

Abstract: Anatomy of the gall in Ficus benjamina (Moraceae) associated with thrips (Tubulifera:
Phlaeothripidae). The galls are generally recognized as abnormal growths of tissues affected by insects when
lay the eggs or feed on plant tissues. In, Ficus benjamina the insect Gynaikothrips garitacambroneroi, when
feeding on leaf tissues, causes a gall which consists on the bending of the leaves. In this paper we analyzed the
ultrastructure of sections of healthy leaves, and leaves with galls of F. benjamina using scanning electron micros-
copy (SEM). We analyzed the number of stomata per area and found no significant changes, although there is
less cuticular wax on the surface of the affected area by the barb. In the leaf area affected by G. garitacam-
broneroi, bacilli and fungi were observed and eggs of other organisms as possible invaders. Moreover, the inner
tissues of leaves with galls had some problems in the differentiation of palisade and spongy mesophylls, and only
parenchymatous tissue was observed. Rev. Biol. Trop. 57 (Suppl. 1): 179-186. Epub 2009 November 30.

Key words: Gall, Ficus benjamina, Gynaikothrips spp., SEM, ultraestructure, leaf, thrips, Costa Rica.

Ficus benjamina es una de las especies y F. waringiana son sinónimas de esta (Bailey
ornamentales más cultivadas en el mundo. En & Bailey 1976, GRIN 2002). Esta misma difi-
Asia se halla ampliamente distribuida donde cultad se presenta en la diferenciación de las
se exporta y utiliza como ornamental (Mound especies de thrips del género Gynaikothrips
et al. 1995). Su cultivo, para exportación, se asociadas a estos hospederos (Garita-Cambro-
ha distribuido por todo el mundo incluyendo nero & Lizano-Fallas 2006; Retana-Salazar
Costa Rica y otros países del área centroame- 2006). Mound (1994) señala que al parecer las
ricana. Esta especie presenta una distribución evidencias indican que las especies de thrips
natural desde India, el sur de China, el sudeste de este género suelen ser muy específicas con
asiático, Malasia, Filipinas, el norte de Austra- respecto a sus hospederos.
lia y las islas del Pacífico Sur (Riffle 1998). Las agallas en F. benjamina por doblez
Ha sido introducido su cultivo en América del adaxial de la hoja, son consideradas crecimien-
Norte y del Sur como en el istmo centroameri- tos alterados de los tejidos afectados que con-
cano, las Islas Marshall (PIER 2001). trolan la secuencia de diferenciación celular a
Taxonómicamente, F. benjamina es una través de la acción de alimentación del insecto
especie compleja que ha sido varias veces que la produce. Los Thysanoptera, habitual-
cambiada de estatus por su dificultad para iden- mente conocidos como “thrips”, son esencial-
tificarla con respecto a otras especies empa- mente fitófagos, lo cual evidencia una gran
rentadas como F. microcarpa y F. retusa. habilidad para explotar a sus hospederos. En el
Actualmente se acepta que las especies F. nitida caso particular de estos insectos la formación

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de una agalla depende del tiempo de alimen- mediante el uso de la microscopia electrónica,
tación y del tamaño de la población dentro de de barrido los posibles cambios ocurridos en los
la agalla (Ananthakrishnan 1981, Raman & tejidos de las hojas de F. benjamina provocados
Anathakrishnan 1986). por G. garitacambroneroi y de esta forma tratar
Los insectos inductores de agallas son de colaborar con el control de esta plaga. En
herbívoros altamente especializados que se el trabajo de Goldazarena et al. (2008), los
alimentan del tejido vegetal (Shorthouse & autores consideran que G. garitacambroneroi
Rohfritsch 1992). Por lo general utilizan un es sinónimo de G. uzeli.
único tipo de tejido al que pueden indu-
cir hiperplasia o hipertrofia (Gätjens-Boniche
2007). Esta capacidad ha surgido varias veces Materiales y Métodos
en los insectos, lo que explica la gran diversi- Las muestras se obtuvieron de árboles de
dad de grupos no emparentados que producen F. benjamina en los alrededores de San Pedro
agallas (Nyman & Julkunen 2000).
de Montes de Oca, San José, Costa Rica. Para
Sin embargo, los mecanismos precisos
ello se tomaron hojas sanas como control y
mediante los cuales los thrips inducen la for-
hojas con agallas bien desarrolladas, las cuales
mación de la agalla no se conocen. Los estudios
se liberaron de thrips y otros organismos. Las
taxonómicos de los grupos de thrips produc-
hojas se limpiaron de thrips mediante la recolec-
tores de agallas indican un avanzado grado
ción con pincel humedecido en alcohol al 80%,
de especificidad (Raman & Anathakrishnan
los especimenes tanto hembras como machos
1986). El aislamiento debido a la especificidad
e inmaduros se guardaron en alcohol al 85%
de hospedero en los thrips galígenos determina
como testigos de la investigación, los mismos
un flujo genético muy limitado entre las pobla-
se hallan depositados en la colección del Centro
ciones (Ananthakrishnan 1979).
Desde el punto de vista de la especiali- de Investigación en Estructuras Microscópicas
zación adaptativa, tanto morfológica como (CIEMic), así como en la del Museo de Insec-
funcional es sobresaliente la subfamilia Phlaeo- tos de la Universidad de Costa Rica. Se mon-
thripinae, en la que se incluyen cerca de 300 taron 25 thrips siguiendo el método propuesto
especies que inducen agallas en 200 especies por Mound & Marullo (1996) y se procedió a
de angiospermas, pertenecientes a 60 órdenes la identificación utilizando las claves para el
de plantas. Además de la habilidad del thrips Neotrópico, de Mound & Marullo (1996) para
para inducir la formación de la agalla, también identificación de géneros y especies. Se con-
existe una acción recíproca de la planta hos- firmó la identificación mediante comparación
pedera, que forma diferentes tipos de agallas con especímenes depositados en la colección
que involucran diferentes grados del fenómeno del CIEMic, y siguiendo la descripción original
de la morfogénesis de la agalla como una res- de G. garitacambroneroi Retana-Salazar. Los
puesta de la planta (Raman & Ananthakrishnan demás organismos se removieron manualmente
1986). en observación al microscopio estereoscópico
Este estudio nació como una necesidad de Leica MZ8, en los laboratorios del CIEMic.
algunos productores nacionales de la especie F. Se evaluó la cobertura de estomas en
benjamina al enfrentarse al problema provoca- hojas control y agallas utilizando un área de
do por este thrips a las plantaciones, esta espe- 150 000µm2 la cual se dividió en 32 sectores
cie en muchos casos obligó a una reconversión de 4 624µm2 (68x68). Se evaluó la cantidad de
agrícola, teniendo que cambiar el sistema de estomas por cuadrícula de muestreo y los resul-
cultivo básico de producción, debido a que el tados se compararon mediante una prueba de
mercado de este ornamental fue cerrado ante la χ2. Las muestras para Microscopia Electrónica
presencia de esta plaga (Held et al. 2005). El de Barrido (MEB) fueron preparadas según
principal objetivo de este trabajo fue describir, protocolo establecido por Sánchez et al. (2006)

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para muestras vegetales. Las preparaciones se En relación a los estomas, F. benjamina
hicieron en el CIEMic. es una especie anfiestomática (posee estomas
en ambas superficies). Las superficies de los
controles parecían presentar un mayor número
Resultados
de estomas que las superficies de las hojas con
Las superficies (adaxial y abaxial) de las agallas (Fig. 1A, B), pero una cuantificación
hojas control de F. benjamina observadas reve- por área no evidenció cambios estadísticamente
laron cantidad de cera cuticular en forma de perceptibles ( χ2=0.1, gl=1, p>> 0. 05).
capas compactas, cubiertas por bastoncillos de En la superficie adaxial de las hojas con
cera epicuticular, esta capa es muy homogénea agalla y los alrededores de la misma mostra-
sobre toda la superficie (Fig. 1A, C). Mientras ron gran cantidad de bacterias baciliformes,
que las superficies de las hojas con agallas hifas (Fig. 2A) y otros organismos, como
mostraron zonas de cera con bastoncillos y un Coccoidea (Fig. 2A), también, algunas
zonas carentes de estos (Fig. 1B, D). áreas muy cercanas a estas zonas dañadas se

Fig. 1. a. Sección de hoja control mostrando la superficie abaxial de F. benjamina, se aprecia los estomas y la superficie
cubierta de cera cuticular. b. Superficie abaxial de hoja con agallas, se observa carente de bastoncillos de cera epicuticular.
Se notan los estomas. c. Sección de hoja control. Note estomas, cera cuticular en forma de placas compactas cubiertas de
bastoncillos de cera epicuticular. d. Sección de una hoja con agallas. Se notan estomas y la cera cuticular muy compacta.
E = estoma, C = cutícula, PC = placas compactas.

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Fig. 2. a. Sección contigua a la lesión provocada por G. garitacambroneroi. Se observa cantidad de bacterias en forma de
bacilos (B) y algunas hifas (H). b. Zona cercana a la lesión provocada por G. garitacambroneroi. Se observa cubierta de
micelio (M). c. Corte transversal de una sección de hoja control. Se observa la epidermis adaxial (EAd), el mesofilo de
empalizada (ME), un cistolito (C) sin litocisto, las células del mesofilo esponjoso (MS) y las células de la epidermis abaxial
(EAb). d. Corte transversal de una sección de hoja con agalla. No se nota diferenciación de los tejidos, sólo se observa
células parénquimáticas (P). E = estomas, cc = cera cuticular.

observaron cubiertas de micelio (Fig. 2B). La y las venas centrales y menores conservaron su
superficie abaxial no presentó estas caracterís- estructura normal (Fig. 3B, D). Al parecer, fue
ticas (Fig. 1B). más evidente la presencia de látex en las sec-
Los cortes transversales de hojas de F. ciones controles que las secciones con agallas,
benjamina no afectadas, evidenciaron una dis- ya que cerca de las venas y otras zonas de las
tribución y diferenciación normal de los tejidos hojas control era difícil detallar las diferentes
epidérmicos (adaxial y abaxial), mesofilo de estructuras debido al látex expuesto al reali-
empalizada, haces vasculares y mesofilo espon- zar el corte, pero aún así, se pudo diferenciar
joso (Fig. 2C), por el contrario las secciones de los diferentes tejidos que componen una hoja
hojas con agalla mostraron una desdiferencia- normal, como son: la epidermis adaxial, meso-
ción de los mesofilos de empalizada y espon- filo en empalizada, haces vasculares, mesofilo
joso (Fig. 2D), aunque los tejidos epidérmicos esponjoso y epidermis abaxial (Fig. 3A, C)

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Fig. 3. a. Corte transversal de la vena central (VC) de la hoja de F. benjamina sin agalla. En el centro se notan los tejidos
vasculares (Xilema y Floema) a ambos lados se observa el mesofilo esponjoso (MS) y de empalizada (ME), así como la capa
de células de la epidermis adaxial (EAd). b. Corte transversal de sección de hoja con agalla. Se observa la vena central (VC)
con los haces vasculares (HV). En la lámina foliar también se nota algunos haces vasculares (HV) y tejido parénquimático
no diferenciado (P). c. Mayor detalle de la sección transversal de una hoja control. Se nota parte de la vena central (VC),
epidermis abaxial (EAb), mesofilo esponjoso (MS), mesofilo de empalizada (ME) y la epidermis adaxial (EAd) d. Mayor
detalles del corte de la vena de la hoja con agalla. Se notan los haces vasculares (HV), no hay una diferenciación del mesofilo
de empalizada ni del esponjoso.

Discusión artrópodos que pueden ser inquilinos o depre-


dadores de los inductores de la agalla (Crespi
Las agallas producidas por los thrips son et al. 2003, Heds et al. 2005). La presencia de
generalmente abiertas, excepto en el caso múltiples especies convierte a las agallas en
del género Johansenthrips Retana-Salazar comunidades con relaciones complejas. Los
y Soto-Rodríguez hallado en el Neotrópico thrips generadores de agallas son más abun-
(Retana-Salazar & Soto-Rodríguez 2007). Las dantes en las zonas tropicales del Viejo Mundo
agallas abiertas contienen poblaciones de la y Australia. Sin embargo, estos grupos perte-
especie inductora, donde se registran todos necen a linajes muy diversos mientras que los
los estadios de desarrollo. También se hallan inductores de agallas en el Neotrópico parecen
con frecuencia otras especies de insectos y pertenecer todos ellos al linaje de los Liothrips,

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esto nos da la ventaja en el estudio de la traza especies de la misma familia con formaciones
filogenética del proceso de inducción de aga- de agallas similares.
llas (Mound & Morris 2005). Según Ananthakrishnan & Raman (1989),
El proceso de morfogénesis de las agallas la hoja con agallas no presenta zonas de cre-
es complejo ya que involucra la recanalización cimiento anómalo, como se ha observado con
del desarrollo de la planta por parte del insecto algunas especies de Liothrips y Gynaikothrips.
inductor (Ananthakrishnan 1998). Los estudios Sin embargo, los resultados obtenidos en este
de la morfogénes de las agallas se han cen- estudio, indican que en efecto, hay un cambio
trado en aquellas que se consideran de mayor en la estructura de las células que constitu-
complejidad, es decir las agallas cerradas pro- yen la lámina foliar al ser comparadas con la
ducidas por Cecidomyiidae o Tephritidae. En ultraestructura de hojas sanas donde sí hay
estos casos se ha demostrado que los insectos una división clara de los diferentes tejidos que
inductores de las agallas activan regiones espe- componen la hoja.
cíficas de la planta hospedera, provocando un Lo anterior nos lleva a replantear las consi-
gradiente bioquímico y citológico a partir de deraciones tradicionales acerca de la polaridad
las células más cercanas al sitio donde se halla de las agallas como caracteres evolutivos de los
el insecto (Shorthouse & Rohfritsch 1992). grupos de insectos. Se considera que las agallas
Tradicionalmente se ha considerado que que inducen deformación de los tejidos foliares
las agallas generadas por la acción de thrips y son las más derivadas (Gätjens-Boniche 2007).
chinches son pequeños crecimientos anorma- Sin embargo, las evidencias ultraestructurales
les conformados por tejido parenquimatoso, presentadas en este trabajo indican que es posi-
lo que confirma los cambios observados en ble que las agallas más derivadas sean aquellas
este estudio. Además, algunas especies pro- en las que se da una regulación total del tejido
ducen enrollamiento de las hojas acompañado de la lámina foliar y no una modificación par-
de hipertrofia celular (Gätjens-Boniche 2007). cial de este tejido.
Esta aparente simpleza estructural ha generado El que una especie de insecto pueda pro-
que estas agallas sean menos estudiadas aunque mover que todo un órgano vegetal mantenga
los daños producidos en especies ornamentales una determinada estructura celular, indica la
de exportación son cuantiosos. presencia de un sistema de regulación mucho
Ananthakrishnan y Raman (1989) en sus más complejo que el estudiado en las aga-
trabajos con agallas que producen enrollamien- llas que evidencian crecimientos particulares,
to dedican los estudios estructurales a aquellas donde la estratificación o diferenciación de
agallas que generan modificaciones del creci- los tejidos se da por el gradiente de difusión
miento del tejido. Esto ha hecho que grupos a través de las capas celulares de sustancias
que generan agallas por doblez y enrollamiento que a menor concentración determinan mayor
de la lámina foliar sean menos estudiados, madurez del tejido (Gätjens-Boniche 2007). Un
debido a que las deformaciones producidas son insecto que presenta la habilidad de mantener
menos evidentes. un tipo de tejido en determinadas condiciones
Gynaikothrips garitacombroneroi, descrita particulares de madurez, y que además este
recientemente dentro del complejo uzeli-fico- tejido no pierda la funcionalidad para la planta,
rum, es una especie agresiva que ha reducido y que sea al mismo tiempo nutritivo para el
la producción nacional de Ficus ornamentales. insecto, parece involucrar regulaciones más
Esto ha motivado el estudio pormenorizado de complejas y puede tener un valor evolutivo y
la morfogénesis de las agallas inducidas por adaptativo mayor.
esta especie de thrips donde los resultados de La especie de thrips que induce estas
la ultraestructura demuestran que este proceso agallas es compleja en su determinación y se
es bastante más complejo que el informado segrega por diferencias a nivel de genitalia del
por Ananthakrishnan & Raman (1989) para macho (Retana-Salazar 2006). Goldarazena et

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al. (2008) sinonimizan G. garitacambroneroi Palabras clave: Agalla, Ficus benjamina, Gynaikothrips
con G. uzeli de Asia, con base en la revisión spp., microscopia de barrido, ultraestructura, hoja, thrips,
Costa Rica.
de un paratipo de hembra de G. garitacam-
broneroi (depositado en el Museo de Historia
Natural de Londres), y en haber encontrado en Referencias
algunos especímenes de G. uzeli del sur-este
Ananthakrishnan, T.N. 1979. Biosystematics of Thysanop-
de Asia e Islas Maldivas variación morfológica
tera. Ann. Rev. Entomol. 24: 159-183.
que se traslapa con la informada por Retana-
Salazar (2006) para G. garitacambroneroi. Ananthakrishnan, T.N. 1981. Thrips-plant gall association
Aunque estos no son criterios suficientes para with special reference to patterns of gall diversity in
relation to varying thrips populations. Proc. Indian
establecer la sinonimia, los resultados acerca
Nat. Sci. Acad. 47: 41-46.
del desarrollo de la agalla inducida por esta
especie contrastan grandemente con lo infor- Ananthakrishnan, T.N. 1998. Insect gall systems: Patterns,
mado en la literatura acerca de la formación processes and adaptative diversity. Current Sci. 75:
de agallas del mismo tipo por otras especies 672-676.
del género Gynaikothrips (Ananthakrishnan & Ananthakrishnan, T.N. & A. Raman. 1989. Thrips and gall
Raman 1989). Esto motiva aún más el propo- dynamics. Oxford & IBH Publishing Co. PVT. Ltd.,
ner criterios complementarios que permitan la Nueva Delhi, India.
identificación rápida y segura de estos insectos,
Bailey, L.H. & E.Z. Bailey. 1976. Hortus. Macmillan
en particular aquellos asociados a agallas.
General Reference, Nueva York, EEUU.

Crespi, B.J., D.C. Morris & L.A. Mound. 2003. Evolution


Agradecimientos of Ecological and Behavioural Diversity: Australian
Acacia Thrips as Model Organisms. Australian Bio-
Los investigadores agradecen a la Vice- logical Resources Study & Australian National Insect
rrectoría de Investigación de la Universidad de Collection, CSIRO, Canberra, Australia.
Costa Rica, ya que mediante los proyectos 810-
A6-228 y 810-A6-239 de esta Vicerrectoría fue Garita-Cambronero. J. & J. Lizano-Fallas. 2006. Deter-
minación de dimorfismo sexual de Gynaikothrips
posible la realización de este trabajo.
garitacambroneroi (Thysanoptera: Phlaeothripidae)
inductos de agallas en Ficus benjamina. Métodos
RESUMEN Ecología Sistemática 1: 9-13.

Las agallas son reconocidas generalmente como cre- Gätjens-Boniche, O. 2007. Agallas de plantas inducidas
cimientos anormales de los tejidos afectados por insectos por insectos: un sistema natural de transformación
cuando estos realizan la deposición de los huevecillos o se genética en células eucarióticas. Tesis de Maestría
alimentan de los tejidos de la planta. En Ficus benjamina en Biología, Universidad de Costa Rica, San José,
la acción del thrips Gynaikothrips garitacambroneroi al Costa Rica.
alimentarse de los tejidos de la hoja, provoca una agalla
que consiste en el doblamiento de la hoja. En este trabajo Goldarazena, A., L.A. Mound & R. zur Strassen. 2008.
se analizó la ultraestructura de secciones de hojas sanas y Nomenclatural problems among Thysanoptera (Insec-
hojas con agallas de F. benjamina mediante el uso de la ta) of Costa Rica. Rev. Biol. Trop. 56: 961-968.
microscopia electrónica de barrido. Se analizó la cantidad
de estomas por área y no se determinó alteración significa- Held, D.W, D. Boyd, T. Lockley & G.B.E. Dwards. 2005.
tiva, aunque se observa menor cantidad de cera cuticular en Gynaikothrips uzeli (Thysanoptera: Phlaeothripidae)
la superficie del área afectada por la agalla. En la zona de la in the Southeastern United States: distribution and
hoja afectada por G. garitacambroneroi se observó bacilos review of biology. Florida Entomol. 88: 538-540.
y hongos y huevecillos de otros organismos, aparentemente
invasores. Además, en los tejidos internos de las hojas con Mound, L.A., C.L. Wang & S.Okajima. 1995. Observations
agallas se pudo determinar problemas de diferenciación de in Taiwan on the identity of the Cuban laurel thrips
los mesófilos de empalizada y esponjoso, observándose (Thysanoptera, Phlaeothripidae). J. New York Ento-
sólo tejido parenquimático. mol. Soc. 103: 185-190.

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