Tarea 3 Cisternas y Senos Venosos
Tarea 3 Cisternas y Senos Venosos
Tarea 3 Cisternas y Senos Venosos
Sistema Nervioso
10 de abril de 2024
Senos venosos de la duramadre
Los senos venosos de la cavidad craneal se sitúan entre las capas de la dura madre. Su función
principal es recibir sangre dese el cerebro a través de las venas cerebrales, y del LCR desde el
espacio subaracnoideo, a través de las vellosidades aracnoideas 1. La sangre de los senos durales
drena finalmente en las venas yugulares internes en el cuello. Los senos durales están tapizados
por endotelio, y sus paredes son gruesas, pero carecen de tejido muscular. No tienen válvulas.
Las venas emisarias, que también carecen de válvulas, conectan los senos venosos durales con
las venas diploicas del cráneo y con las venas del cuero cabelludo.
El seno sagital superior ocupa el borde fijo de la hoz del cerebro. Empieza anteriormente en el
agujero ciego, donde ocasionalmente recibe una vena procedente de la cavidad nasal. Tiene un
trayecto en dirección posterior, realizando una impronta sobre la calvaria. En la protuberancia
occipital interna se desvía hacia un lado o hacia el otro (usualmente, hacia el derecho) y se
continúa con el correspondiente seno transverso. El seno se comunica mediante pequeñas
aperturas con dos o tres lagunas venosas de forma irregular, en cada lado. Numerosas
vellosidades y granulaciones aracnoideas se proyectan en el interior de las lagunas, que también
reciben las venas diploicas y meníngeas. El seno sagital superior recibe en su curso a las venas
cerebrales superiores. Éste se dilata a nivel de la protuberancia occipital interna para formar la
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Estructura especializada en la superficie interna de la aracnoides que ayuda a regular el volumen y la composición
del líquido cefalorraquídeo en el cerebro y la médula espinal. (Clínica Universidad de Navarra, s.f.)
confluencia de los senos. En este punto, el seno sagital superior suele continuarse con el seno
transverso derecho. Se conecta con el seno transverso opuesto y recibe al seno occipital.
El seno sagital inferior ocupa el margen libre inferior de la hoz del cerebro. Tiene un trayecto
hacia atrás, y se une a la vena cerebral magna a nivel del margen libre del tentorio del cerebelo
para formar el seno recto. Recibe unas pocas venas cerebrales procedentes de la superficie
medial de los hemisferios cerebrales.
El seno recto
El seno recto ocupa la línea de unión de la hoz del cerebro con el tentorio del cerebelo. Está
formado por la unión del seno sagital inferior con la vena cerebral magna. Finaliza girando hacia
la izquierda (ocasionalmente, hacia la derecha) para formar el seno transverso.
Los senos transversos son estructuras pares que empiezan en la protuberancia occipital interna.
El seno derecho suele continuarse con el seno sagital superior, mientras que el izquierdo se
continúa con el seno recto. Cada seno ocupa el margen fijo del tentorio del cerebelo, haciendo
impronta sobre el hueso occipital y el ángulo posteroinferior del hueso parietal. Los senos
transversos reciben los senos petrosos superiores, las venas cerebrales inferiores, las venas
cerebelosas y las venas diploicas. Finalizan desviándose hacia abajo como senos sigmoideos.
Los senos sigmoideos son una continuación directa de los senos transversos. Cada seno gira
hacia abajo y medialmente, realizando impronta en la parte mastoidea del hueso temporal. En
este lugar, el seno se sitúa posteriormente al antro mastoideo. El seno gira entonces hacia delante
e inferiormente a través de la parte posterior del agujero yugular para continuar con el bulbo
superior de la vena yugular interna.
El seno occipital
El seno occipital es un pequeño seno que ocupa el margen fijo de la hoz cerebral. Empieza cerca
del agujero magno, donde se continúa con las venas vertebrales, y drena en la confluencia de los
senos.
Los senos cavernosos
Los senos cavernosos están situados en la fosa craneal media en cada lado del cuerpo del hueso
esfenoides. Su interior está atravesado por numerosas trabéculas, lo cual le confiere una
apariencia esponjosa, de lo que deriva su nombre. Cada seno se extiende desde la hendidura
orbitaria superior, enfrente del ápice de la parte petrosa del hueso temporal, que se sitúa por
debajo.
Los senos petrosos superior e inferior son pequeños senos situados en los márgenes superior e
inferior de la parte petrosa del hueso temporal, a cada lado del cráneo. Cada uno de los senos
superiores drena el seno cavernoso en el seno transverso, y cada uno de los senos inferiores
drenan el seno cavernoso en la vena yugular interna.
Cisternas
Las cisternas del encéfalo constituyen un gran reservorio de líquido cefalorraquídeo, cuyo
volumen es mayor al contenido en las cavidades ventriculares; estos espacios contienen vasos
sanguíneos y algunas estructuras nerviosas. Las cisternas se continúan unas con otras y se
comunican con el sistema ventricular a través de los agujeros mediano y laterales en su relación
con el 4° ventrículo.
I. Fosa posterior
a. Cisterna bulbar o medular
b. Cisterna pontina
c. Cisterna pontocerebelosa
d. Cisterna magna o cerebelomedular
e. Cisterna cerebelosa o vermiana superior
II. Perimesencefálicas
a. Cisterna interpeduncular
b. Cisternas crurales
c. Cisternas ambiens
d. Cisterna cuadrigeminal
Situada entre la cara anterior del bulbo raquídeo y la cara posterior de la apófisis basilar del
occipital. Se continúa hacia abajo con el espacio subaracnoideo (ESA) de la médula cervical y
hacia arriba con la cisterna pontina. Contiene las arterias vertebrales y cerebelosas
posteroinferiores, así como los pares craneanos IX, X, XI y XII.
b. Cisterna pontina
Continuación hacia arriba de la cisterna bulbar, situada entre la cara anterior de la protuberancia
y la cara posterior del clivus 2 y el dorso selar. Se comunica a los lados con las cisternas
pontocerebelosas y arriba con la interpeduncular. Es recorrida de abajo arriba por la arteria
basilar, cuando se ubica en la línea media. Contiene también parte del trayecto de los pares
craneales V y VI.
c. Cisterna pontocerebelosa
Bilateral y simétrica, de tamaño variable y forma más o menos triangular. El lado interno y
posterior formado por el ángulo pontocerebeloso, el lado posterior corresponde al extremo
anterolateral del hemisferio cerebeloso. El lado anterolateral lo forma la pared posterosuperior
del peñasco. El límite superior corresponde a la tienda del cerebelo y el inferior a la base del
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Hueso en la base del cráneo cerca de la columna vertebral (Instituto Nacional del Cáncer, s.f.)
cráneo. Se comunica hacia arriba por la incisura tentorial, con la cisterna ambiens y a través del
agujero lateral con el IV ventrículo. Puede cubrir toda la cara del peñasco, o bien sólo llegar a
forrar las paredes del conducto auditivo interno. Las estructuras que la atraviesan en sus
diferentes porciones son: Superior: pares craneanos V y VI; media: Nervios que se dirigen hacia
el conducto auditivo interno, VIII par, VII par y el intermediario de Wrisberg; inferior: pares IX,
X y XI, que se dirigen al agujero rasgado posterior.
Se sitúa entre la cara posterior del sector alto de la médula cervical y la parte posterior del
cerebelo. Por detrás limita con la escama del occipital. Por delante de abajo arriba, con la porción
superior de la médula cervical y la parte inferior del bulbo y el cerebelo. Se comunica hacia
adelante con la cisterna bulbar y el IV ventrículo, a través del agujero mediano. Contiene las
amígdalas cerebelosas y las arterias cerebelosas posteroinferiores.
Situada sobre el vermis superior, desde allí se extiende hacia los lados, sobre la cara superior y
medial de los hemisferios cerebelosos. Su techo está constituido por la tienda del cerebelo. Se
comunica adelante con la cisterna cuadrigeminal y hacia los lados llega hasta las cisternas
pontocerebelosas.
Cisternas Perimesencefálicas
Rodean en forma de manguito el mesencéfalo o porción alta y supratentorial del tallo cerebral.
a. Cisterna interpeduncular
Su límite posterior y lateral corresponde a los pedúnculos cerebrales; delante y abajo se relaciona
con la porción alta del dorso selar y los tubérculos mamilares. Se extiende hacia adelante hasta
llegar a la cara posterior del tuber cinereum 3 y del infundíbulo4. Su límite con la cisterna
quiasmática es un plano frontal que prolonga hacia arriba el dorso de la silla turca. Su límite
superior está dado por el espacio perforado posterior. Hacia abajo se continúa con la cisterna
3
También conocido como tubérculo cinéreo, es una pequeña área ubicada en la región anterior del hipotálamo en
el cerebro humano, y representa un hito anatómico esencial en la neurología y la endocrinología. (CUN, s.f.)
4
es la porción proximal hueca, en forma de embudo de la Neurohipófisis, que une el hipotálamo con la
adenohipófisis a través del tallo hipofisario (Castro, Inés. 2015)
pontina y hacia delante y afuera, en cada lado, con la cisterna crural. Contiene las arterias
basilares, cerebrales posteriores y cerebelosas superiores, además del III par craneal.
b. Cisternas crurales
c. Cisternas ambiens
Bilaterales y simétricas, estrechas y situadas a cada lado de la línea media. Por detrás se
comunican con la cisterna cuadrigeminal. La tienda del cerebelo las divide en una porción
supratentorial y otra infratentorial, la primera es la mayor y está situada entre la cara externa del
pedúnculo cerebral y la cara interna del lóbulo temporal. Se comunican hacia adelante con las
cisternas crurales, atrás con la cuadrigeminal, arriba con la cisterna ala de ambiens o
retropulvinar y hacia abajo se continúan con su porción infratentorial. La porción inferior,
situada entre la cara externa de la protuberancia y la interna del hemisferio cerebeloso se
prolonga hacia adelante y abajo con la cisterna pontina y más abajo con la pontocerebelosa.
d. Cisterna cuadrigeminal
Constituye un amplio sector del espacio subaracnoideo. Su límite anterior de abajo arriba son los
tubérculos cuadrigeminales, la comisura blanca posterior, el cuerpo pineal y el receso supra
pineal. La pared posterior tiene una porción infratentorial relacionada con el vermis y la cisterna
vermiana superior, más arriba se relaciona con el tentorio y el puente adenoideo que cubre la
cisura transversa, a uno y otro lado se encuentra la cara interna del hemisferio cerebral y en
seguida el atrio ventricular. Se comunica hacia delante y también a los lados con las cisternas
ambiens, hacia arriba y delante con las cisternas del velo interpuesto y del cuerpo calloso. En la
tomografía, siempre se observa. Junto con las cisternas retropulvinares forma una curva
hipodensa de concavidad superior. La forma de su pared anterior está dada por la prominencia de
los tubérculos cuadrigéminos. La glándula pineal, habitualmente calcificada, se proyecta en la
parte anterior y superior de la cisterna cuadrigeminal.
Cisternas del grupo tres: Retrotalámicas, del velo interpuesto y del cuerpo calloso
Otros nombres dados a esta cisterna son: cisterna sobre III ventrículo y cisterna subtrigonal. Se
extiende desde la parte superior de la cisterna retropulvinar hacia delante, hasta llegar al agujero
de Monro; contiene la vena cerebral interna y la vena de Galeno. Se acompaña en su trayecto de
la tela coroidea superior. Situada por encima del III ventrículo, debajo del fórnix. La extensión
hacia atrás de esta cisterna constituye la “Cisterna de Galeno”, cuyos límites son: hacia atrás, una
porción de la vena de Galeno y glándula pineal; hacia delante se continúa con la cisterna del velo
interpuesto; hacia abajo con las venas basales de Rosenthal; arriba, limita con el esplenio del
cuerpo calloso, y a los lados con los pilares del fórnix.
Se sitúa entre el borde inferior de la hoz del cerebro, la cara superior del cuerpo calloso y las
caras internas de los hemisferios cerebrales. Se divide en tres partes: la anterior sobre la rodilla
del cuerpo calloso, se comunica hacia adelante con la cisterna de la lámina terminal. La parte
media se sitúa en el tronco calloso y la posterior en el esplenio y se comunica con la cisterna
cuadrigeminal.
El espacio supraselar está limitado hacia atrás, por los pedúnculos cerebrales; adelante, por la
cara posterior de los lóbulos frontales y lateralmente, por la cara interna de los lóbulos
temporales. En su formación participan también las cisternas interpedunculares y las crurales. El
espacio supraselar de estas cisternas adopta la forma de una estrella de cinco picos, su centro
corresponde adelante a la cisterna quiasmática y atrás a la interpeduncular. Las tres puntas
anteriores pertenecen al inicio de las cisternas silvianas y lámina terminal, y las dos posteriores al
inicio de las cisternas crurales. Si se visualiza la parte alta de la cisterna interpeduncular, a la
estrella se le agrega un sexto pico de ubicación posterior. El espacio supraselar contiene al
quiasma óptico con sus cintillas y nervios, al tuber cinereum con el infundíbulo y el tallo
hipofisario, las arterias del polígono de Willis y venas correspondientes
a. Cisterna quiasmática
c. Cisternas silvianas
Constituyen un espacio extenso, de forma laminar, bilateral y simétrica. Situadas en las cisuras
de Silvio, que se comunican por dentro con la parte anterolateral de la cisterna quiasmática.
Contienen la arteria cerebral media o silviana
Referencias
Roldan, E. Osorio, S. Facha, M. Martínez, M. Taboada, J. (2005). Anatomía radiológica del espacio
subaracnoideo: Las cisternas. Mediagraphic. Recuperado el 10 de abril de 2024, disponible en
https://www.medigraphic.com/pdfs/anaradmex/arm-2005/arm051f.pdf