Farmacologia Odontologica Veterinaria

Descargar como docx, pdf o txt
Descargar como docx, pdf o txt
Está en la página 1de 16

UNIVERSIDAD TÉCNICA DE AMBATO

CARRERA DOMENICA, MEDINA KATHERINE, SÁNCHEZ DANIELA

FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS – MEDICINA VETERINARIA

ACTUALIZACION EN EL USO DE FÁRMACOS EN ODONTOLOGÍA


VETERINARIA

I. Introducción

Gracias a los avances en materiales y técnicas, la odontología veterinaria enfocada en


pequeños animales ha experimentado un notable progreso en las últimas décadas. Este
cambio se debe principalmente a la falta histórica de atención a esta área en el campo
veterinario. Para brindar tratamientos efectivos, desde endodoncias y ortodoncias hasta
odontología reconstructiva, los veterinarios especializados en odontología deben mantenerse
al día en conocimientos y habilidades. Sin embargo, para garantizar el éxito de otros
procedimientos, es fundamental tratar previamente la enfermedad periodontal. La
odontología veterinaria abarca una variedad de campos, incluido el mantenimiento de la salud
dental, el diagnóstico y tratamiento de enfermedades orales, la prevención de trastornos
dentales, la restauración de defectos dentales, la sustitución de dientes perdidos y la
restauración de dientes perdidos, entre otros (Barajas, 2018; Castejón-Gonzalez et al., 2016;
Tello, 2004).

Analizar cómo los avances en equipos y procesos odontológicos en veterinaria afectan la


veracidad y margen de seguridad de los medicamentos empleados, enfocándose en su uso
para deshacer y controlar el dolor, la inflamación y las infecciones relacionadas con los
tratamientos dentales, con el fin de mejorar el cuidado bucodental y promover el bienestar de
los pacientes animales atendidos por veterinarios.

II. Metodología

Para obtener información actualizada sobre el uso de medicamentos en odontología


veterinaria, se llevó a cabo una búsqueda exhaustiva que incluyó literatura científica y
reportes técnicos publicados entre 2017 y 2023. Se seleccionaron fuentes relevantes para los
tratamientos de las enfermedades dentales más comunes, centrándose en investigaciones
recientes que reflejaran los últimos avances en el campo. Además de revisar estudios de casos
clínicos y artículos de revisión, se consultaron bases de datos académicas, congresos
veterinarios y guías clínicas establecidas por instituciones reconocidas. También se
consideraron informes de sociedades veterinarias y revistas especializadas en odontología
veterinaria. Esta variedad de fuentes proporcionó una comprensión completa y actualizada de
las prácticas terapéuticas en este campo de la medicina veterinaria.

III. Revisión bibliográfica

Enfermedad Periodontal

La enfermedad periodontal, una preocupación común en perros y gatos, es a menudo

subestimada y puede desencadenar serias complicaciones. Esta afección oral se divide en dos

etapas: la gingivitis, que es reversible si se trata a tiempo, y la periodontitis, que conlleva la

pérdida irreversible de tejido de soporte dental. Su origen se encuentra en la acumulación de

placa bacteriana, que, si no se controla adecuadamente, puede mineralizarse formando

cálculo. La inflamación resultante, desencadenada por bacterias subgingivales, contribuye al

daño del tejido y del hueso que rodea los dientes, pudiendo provocar la formación de bolsas

periodontales y recesión gingival (Brook A, 2021) .

Los signos clínicos, como encías rojas, inflamadas y mal aliento, indican la necesidad de

intervención profesional para evitar la progresión de la enfermedad. Además, la periodontitis

no solo afecta la salud dental, sino que también puede estar relacionada con problemas

sistémicos como enfermedades renales, cardíacas y hepáticas (Brook A, 2021).

Tratamiento

La técnica implica la remoción física de la placa bacteriana y el cálculo dental de la superficie

de los dientes, con el paciente bajo anestesia, empleando dispositivos de ultrasonido para la

limpieza dental, seguido del raspado y alisado de las raíces dentales, así como el pulido

dental, previo a esto se debe administrar antibióticos (Calderón, 2019).

Anestésico
Vetocaína A2

· Gatos: 1 mL

· Perros: 1 – 2 mL

Antibiótico

Amoxigentin

· Perros y gatos: 1ml/10kg

Maloclusiones Dentales

La maloclusión, que se desvía de la oclusión estándar para una raza, puede tener

repercusiones graves como fracturas o muerte dental. Se divide en clases según la

discrepancia en la longitud mandibular, con algunas formas consideradas genéticas. Las

maloclusiones clase I, con dientes desalineados, pero longitudes mandibulares normales,

pueden originarse por diversos factores como problemas sistémicos. Las clases II y III

implican desequilibrios mandibulares, con la mandíbula más corta o larga que el maxilar

respectivamente, requiriendo a menudo intervención para prevenir traumatismos. La clase IV

señala asimetría mandibular, que puede causar lesiones en el paladar o encías. Estas

condiciones pueden estar relacionadas con factores genéticos, reproductivos o traumáticos

(Brook A, 2021).

Tratamiento

Los dientes desalineados pueden ser tratados mediante procedimientos ortodónticos en lugar

de ser cortados o extraídos inicialmente. Estos tratamientos implican el uso de técnicas que

aplican fuerza gradual para reposicionar los dientes de manera menos traumática. Se emplean

bandas elásticas sujetas a los caninos y, a veces, a los molares mediante brackets metálicos.

En algunos casos, las bandas elásticas pueden ser fijadas entre los caninos superiores o

inferiores (Peña, 2021).


Fracturas Dentales

Las fracturas dentales son lesiones comunes en veterinaria, causadas por traumas directos o

indirectos. La secuencia de eventos implica la ruptura de la estructura dental, desde el esmalte

hasta la pulpa. Esto puede exponer la pulpa al medio oral, desencadenando inflamación e

infección. La pérdida de integridad estructural aumenta el riesgo de complicaciones, como

abscesos periapicales. Los animales más susceptibles son aquellos que participan en

actividades de alto impacto o mastican objetos duros, especialmente perros y gatos jóvenes y

activos. Razas con maloclusiones dentales también tienen mayor predisposición. Identificar

factores de riesgo y tomar medidas preventivas son cruciales para reducir la incidencia de

estas lesiones (Castillo, 2022).

Tratamiento

Para las fracturas dentales, el tratamiento varía según la gravedad de la lesión:

1. Fracturas menores: Cuando la fractura no expone la pulpa dental, se puede optar por

suavizar la superficie áspera del diente y aplicar un sellador dental.

2. Fracturas con exposición de la pulpa: Si la fractura expone la pulpa dental, se requiere un

tratamiento endodóntico, que implica la eliminación del tejido pulpar infectado y el sellado

del conducto radicular a través de la terapia de conducto radicular.

3. Fracturas extensas: En casos de fracturas que afectan significativamente la raíz del diente,

la extracción dental puede ser la única alternativa viable de tratamiento.

Lesiones En La Mucosa Oral


Las lesiones en la mucosa oral, como úlceras, erosiones y vesículas, son manifestaciones

clínicas de diversas condiciones subyacentes en animales. Su patogenia es multifactorial,

involucrando agentes infecciosos (virus, bacterias, hongos, parásitos), irritantes químicos,

traumatismos mecánicos y condiciones sistémicas inmunocomprometedoras. Los perros y

gatos son susceptibles a infecciones virales como la panleucopenia felina y el herpesvirus

felino, mientras que, en caballos, las úlceras bucales pueden originarse por traumatismos en

la mucosa debido al uso de bocados u otras lesiones traumáticas (Brook A, 2021).

Tratamiento

La ozonoterapia emplea el ozono como catalizador en tratamientos alternativos, demostrando

eficacia como desinfectante microbicida. Su acción biológica beneficia al organismo al

transportarse por la sangre a todas las células, generando oxidantes secundarios que combaten

infecciones y reducen la inflamación. La dosificación varía según la patología y la vía de

administración, clasificándose en dosis bajas, medias y altas. Se excluye la inhalación debido

a posibles efectos irritantes, pero su aplicación por otras vías ofrece beneficios terapéuticos

sin riesgos (Castillo, 2022).

Concentraciones tan bajas como 5–10 μg/ml, e incluso inferiores, producen efectos

terapéuticos con un margen de seguridad considerable. En este sentido, se consideran

aceptables concentraciones terapéuticas que oscilan entre 5 y 60 μg/ml (Castillo, 2022).

Gingivitis

La gingivitis en animales es una inflamación de las encías causada por la acumulación de

placa bacteriana. Este proceso desencadena una respuesta inflamatoria local que resulta en

enrojecimiento, hinchazón y sangrado de las encías. Factores como la higiene oral deficiente

y la predisposición genética pueden aumentar el riesgo de desarrollar gingivitis. Las bacterias

periodontopatógenas, como Porphyromonas gingivalis, desempeñan un papel crucial en la


patogenia de la enfermedad al liberar toxinas y enzimas que dañan el tejido gingival. La

inflamación crónica puede llevar a la destrucción del tejido conectivo y óseo, provocando

periodontitis si no se trata. Algunas razas de perros, como Yorkshire Terrier y Poodle, y gatos

persas son más susceptibles a desarrollar gingivitis debido a factores genéticos (Castillo,

2022).

Tratamiento

DOSIS DE OZONOTERAPIA

25-30 μg/ml

Para prevención se recomienda cepillar los dientes con una pasta dental a base de

Clorhexidina Digluconato y Aloe Vera.

Malformaciones dentales congénitas

En casos de paladar hendido es la unión anormal entre la cavidad bucal y nasal, en cachorros,
provoca que el animal no logre tomar leche materna en los primeros días de vida y mueren,
sin embargo, es tratable cuando crecen (Brook et al., 2018; María Fernández Sánchez, n.d.).

 Tratamiento

El tratamiento se basa más en cirugía, por ende, se requiere ocupar anestésicos locales como:

Vetocaina A2, principio activo lidocaína clorhidrato, adrenalina bitartrato, con una dosis en:

- Caballos y vacas: 5 – 19 mL
- Gatos: 1 mL
- Perros: 1 – 2 mL
- Ovinos, caprinos, camélidos: 2 – 3 mL

Se realizará colgajos libres de tensión con una correcta vascularización, para no dañar la
arteria palatina mayor, ya que permite que el colgajo se realice.

Para post-operatorio, se recomienda administrar antiinflamatorios como:

Carprodyl R 25, con principio activo; carprofeno. Presentación en tabletas. Dosis:


- Perro: 1 tableta/11 kg de p.v. 2 veces al día. El periodo de duración del tratamiento va
de la mano con la mejoría del paciente.

(Brook et al., 2018; María Fernández Sánchez, n.d.)

Hipoplasia del esmalte oral

Se produce cuando la creación de la matriz del esmalte llega a desaparecer produciendo una
dentición permanente.

 Tratamiento

Cepillado: se aplica la pasta dental sobre los dientes y encías de la mascota, masajear
suavemente en un minuto, repitiendo el procedimiento durante 3 semanas.

Restauración: uso de composite, se quita la dentina dañada con una fresa dental de diamante,
posteriormente, se hace un grabado ácido durante 10-15 segundos con ácido ortofosfórico al
37%; adicionar un agente adhesivo de unión durante 15-30 segundos con bonding, y por
último colocar las distintas capas de restauración con composite (Brook et al., 2018; María
Fernández Sánchez, n.d.).

Osteomielitis mandibular

La osteomielitis mandibular representa una inflamación que puede comprometer todos los
componentes del hueso mandibular, típicamente asociada con infecciones bacterianas
sistémicas o bien originada por la falla de implantes óseos metálicos susceptibles a la
colonización bacteriana y la formación de biofilms. Sin embargo, se debe destacar que
también puede presentar una etiología de origen fúngico o viral. Las lesiones de dimensiones
reducidas progresan de manera gradual si no son tratadas adecuadamente, adquiriendo una
morfología deformante y potencialmente provocando fenómenos de necrosis, resorción y
formación de tejido óseo anómalo (Belotta et al., 2018).

 Tratamiento

Se debe realizar un procedimiento quirúrgico, como primer paso se realiza la elevación de un


colgajo mucoperióstico para acceder a la región afectada, seguido de la extracción de los
dientes implicados y cualquier tejido infectado adyacente. Se toman muestras óseas para
cultivo bacteriano y sensibilidad, lo que permite identificar los agentes patógenos
responsables y orientar la elección de antimicrobianos adecuados (Griffin et al., 2022).
Una vez concluida la cirugía, se procede al cierre del sitio quirúrgico mediante suturas. A
continuación, se inicia el tratamiento con antibióticos para combatir la infección,
seleccionados en base a los resultados del cultivo y la sensibilidad (Adkesson et al., 2018).

En casos donde los cultivos resultan negativos, se opta por antibióticos de amplio espectro,
con las siguientes dosis:

Clindamicina

- Perros y gatos: 5-10 mg/kg


- Caballos: 3.3-5.5 mg/kg
- Bovinos: 6.6-11 mg/kg

Metronidazol

- Perros y gatos: 7.5-15 mg/kg


- Caballos: 15-30 mg/kg
- Bovinos: 10-20 mg/kg

Además de la terapia antimicrobiana, se considera la administración de analgésicos para


aliviar el dolor y facilitar la recuperación del paciente. Asimismo, se pueden implementar
medidas de apoyo como la alimentación por sonda en situaciones donde la ingesta oral se ve
comprometida debido al dolor o la inflamación.

Fistulas oro-nasales

La fístula oro-nasal representa una comunicación anómala entre las cavidades oral y nasal.
Entre los factores predisponentes se encuentran diversos procesos patológicos, como la
enfermedad periodontal, infecciones fúngicas y osteomielitis, así como traumatismos como
fracturas maxilares o lesiones causadas por accidentes vehiculares. Además, procedimientos
quirúrgicos como la escisión de masas o rinotomía ventral, así como anomalías congénitas
como defectos palatinos, también pueden desencadenar su aparición (Wilson, 2022).

 Tratamiento

El tratamiento de la fístula oronasal en situaciones donde la enfermedad periodontal alcanza


un estado avanzado consiste en la administración de una terapia antibiótica, generalmente
durante un período de 10 a 12 días tras la extracción dental (Dixon, 2020). Este enfoque
puede incluir fármacos como: 
Amoxicilina

- Perros y gatos: 12.5-25 mg/kg


- Caballos: 10-20 mg/kg
- Bovinos: 10-20 mg/kg

Para abordar el dolor asociado con el procedimiento se emplean agentes preanestésicos,


como:

Morfina

- Perros: 0.5-1 mg/kg


- Gatos: 0.1-0.5 mg/kg
- Caballos: 0.1-0.2 mg/kg
- Bovinos: 0.1-0.3 mg/kg

Fentanilo

- Perros: 2-20 mcg/kg


- Gatos: 2-5 mcg/kg
- Caballos: 5-10 mcg/kg
- Bovinos: 2-5 mcg/kg

En cuanto al control del dolor, se recurre a bloqueos nerviosos, como el bloqueo nervioso
maxilar, que implica la administración de una combinación de bupivacaina y lidocaína a
través del foramen infraorbitario (Bell et al., 2020).

El proceso de reparación de la fístula oronasal puede realizarse mediante diferentes técnicas,


como el uso de un solo colgajo o la aplicación de un doble colgajo, dependiendo de la
extensión y la localización del defecto, así como de la disponibilidad de tejido para la
reparación. La elección entre estas técnicas se determina en base a una evaluación exhaustiva
de cada caso individual. Se recomienda un curso de antibióticos durante 14 días después del
procedimiento para prevenir infecciones y facilitar una cicatrización óptima (Rice, 2017).

Enfermedad del ligamento periodontal

La periodontitis, también denominada enfermedad del ligamento periodontal, se define como


una inflamación que afecta a las estructuras de soporte más profundas del diente, incluyendo
el ligamento periodontal y el hueso alveolar. Esta afección es desencadenada por la acción de
bacterias y sus subproductos. La progresiva deterioración de los tejidos periodontales resulta
en la pérdida de la inserción dentaria (Bourguignon et al., 2022).

 Tratamiento

El tratamiento consiste en el empleo de clorhexidina (CHX), disponible en forma de


soluciones, geles y pastas dentales. Su concentración oscila entre el 0.1 y el 0.12% de
clorhexidina gluconato o acetato. Se emplean las siguientes dosis:

Perros y gatos

 Enjuague bucal: La solución de clorhexidina al 0.12% se administra en una


proporción de 0.1 a 0.4 ml/ kg dos veces al día.
 Aplicación tópica: Para el gel al 2% de clorhexidina, se aplica una cantidad suficiente
para cubrir el área afectada dos veces al día.
Caballos

 Lavado de heridas: La solución al 2% de clorhexidina se diluye en agua y se


administra en una proporción de 0.1 a 0.2 ml/kg dos veces al día.
 Lavado corporal: Se utiliza champú al 2% de clorhexidina, aplicando una cantidad
suficiente sobre el área afectada.
Bovinos

 Lavado de ubres: La solución al 4% de clorhexidina se diluye en agua en una


proporción de 1 parte por 2 o 3 partes de agua, para usarse en el lavado de ubres antes
de la ordeña.
La CHX interviene en la composición y el metabolismo del biofilm al alterar la estructura de
la pared celular bacteriana y coagular el citoplasma bacteriano. No obstante, su uso
prolongado o en concentraciones elevadas puede generar efectos adversos, como alteraciones
del gusto, pigmentación dental y lesiones en la mucosa oral (Cunha et al., 2022).

Además, se pueden emplear productos que contiene zinc, como suplementos para el agua. El
zinc exhibe actividad antimicrobiana contra los patógenos orales y puede inhibir la formación
de cálculos y reducir el mal aliento (Perry & Tutt, 2018).

Luxación mandibular

Las lesiones en la articulación temporomandibular suelen resultar en luxación y se


acompañan con frecuencia de otras lesiones maxilofaciales. La luxación, caracterizada por la
completa dislocación de las superficies articulares, conlleva la separación anormal de
elementos como el cóndilo mandibular y la cavidad glenoidea del hueso temporal, dando
lugar a dolor agudo y disfunción en la masticación y cierre bucal. Los pacientes con luxación
TMJ suelen experimentar dificultades para cerrar la boca debido al desplazamiento
mandibular, resultando en una alineación deficiente de los arcos dentales (Parks et al., 2017).

 Tratamiento

Una vez confirmada la luxación mandibular con imágenes diagnósticas, se procede a una
reducción cerrada. Se coloca al paciente bajo anestesia como Propofol con las siguientes
dosis:

- Perros: 2-6 mg/kg


- Gatos: 4-6 mg/kg
- Caballos: 2-4 mg/kg
- Bovinos: 2-4 mg/kg

Enseguida, se ejerce una presión manual para cerrar las mandíbulas, y se rota el objeto para
inducir la reducción del cóndilo mandibular. Una vez completada la reducción, se realiza una
evaluación minuciosa del movimiento mandibular para detectar posibles complicaciones
(Cabral et al., 2023).

En la mayoría de los casos este es un procedimiento sencillo que no requiere restricciones


posteriores en el movimiento mandibular. No obstante, en casos donde persisten
complicaciones, como desplazamiento mandibular recurrente, puede ser necesario aplicar
restricciones al movimiento oral mediante el uso de un bozal de cinta ajustado o una fijación
maxilomandibular con unión compuesta interarcada (Thatcher, 2017).

Lesiones por mordeduras

Las lesiones derivadas de mordeduras, una problemática común tanto en ambientes urbanos
como rurales, constituyen una seria preocupación para la salud de las mascotas,
especialmente para los perros y los gatos. Además de las lesiones externas evidentes, como
heridas y laceraciones, las mordeduras pueden acarrear complicaciones severas, tales como
infecciones bacterianas, lesiones tisulares profundas y fracturas óseas (Parkinson, 2019).

 Tratamiento
Se debe a administrar analgesia para controlar el dolor asociado con las mordeduras. Se
recomienda el uso de un agonista opioide puro, como la morfina o fentanilo, para brindar un
alivio efectivo del dolor. Además del tratamiento analgésico, se pueden emplear
antiinflamatorios no esteroides para reducir la inflamación y el malestar en la zona afectada
(Graham et al., 2018) . Se pueden utilizar fármacos como el meloxicam, con las siguientes
dosis:

- Perros: 0.1-0.2 mg/kg


- Gatos: 0.05 mg/kg
- Caballos: 0.6-0.8 mg/kg
- Bovinos: 0.5 mg/kg

En ciertos casos, especialmente cuando hay indicios de infección, puede ser necesario el
tratamiento con antibióticos como la cefalexina, tomando en cuenta las siguientes dosis:

- Perros: 10-30 mg/kg


- Gatos: 22-30 mg/kg
- Caballos: 22-30 mg/kg
- Bovinos: 10-mg/kg

Abscesos dentales

Los abscesos que se forman en la mandíbula representan una preocupación común en


diversas especies animales, tanto domésticas como salvajes, como los perros, gatos, conejos y
roedores. Estos abscesos suelen surgir como consecuencia de patologías dentales
subyacentes, como la caries, enfermedad periodontal o traumas, los cuales permiten la
entrada de bacterias al tejido circundante. La formación de un absceso implica la
acumulación de pus, provocando inflamación, dolor y posiblemente una reducción en la
función mandibular (Flynn et al., 2021).

 Tratamiento

Se realiza una preparación aséptica del sitio quirúrgico mediante la implementación de


protocolos de asepsia y antisepsia estándar, asegurando así un entorno libre de contaminantes
para la intervención. Para la inducción de la anestesia, se selecciona una combinación de
fármacos anestésicos, específicamente xilazina y ketamina con las siguientes dosis:

- Perros: 0.5-2.2 mg/kg de xilazina y 5-25 mg/kg de ketamina


- Gatos: 1-2 mg/kg de xilazina y 5-20 mg/kg de ketamina
- Caballos: 0.5-1.1 mg/kg de xilazina y 2.2-6.6 mg/kg de ketamina
- Bovinos: 0.05-0.3 mg/kg de xilazina y 2-5 mg/kg de ketamina

Se realiza una incisión puntiforme en el sitio del absceso para permitir un adecuado drenaje
del material purulento acumulado en la cavidad oral (Agnihotri et al., 2023).

Durante la intervención, se emplea peróxido diluido para realizar una limpieza del área
afectada y eliminar cualquier material purulento desecado presente. Una vez finalizada la
cirugía, se aplica un ungüento antiséptico en el sitio de la incisión para prevenir infecciones
secundarias y promover una adecuada cicatrización (Girard, 2023).

Para el control del dolor postoperatorio, se administra meloxicam a una dosis de 0.6 mg/kg
durante un período de 2 semanas. Además, se prescribe amoxicilina por vía parenteral
durante 7 a 14 días para erradicar cualquier infección residual y prevenir posibles
complicaciones (Bailey et al., 2022).

IV. Conclusiones
 El uso de fármacos en odontología ha evolucionado con el tiempo, permitiendo
aplicar medidas más precisas y controladas de los fármacos. El tratamiento en
alteraciones dentarias, bucales, encías, etc. Es la combinación entre medicamentos y
procesos quirúrgicos, pues, el uso de clorhidrato de clorpromacina permite
tranquilizar al animal para permitir su manejo en la limpieza dental. Otro ejemplo es
la Doxiciclina para la malformación de dientes. Por último, la vitamina A, que ayuda
al mantenimiento de los dientes.
 El tratamiento de la osteomielitis mandibular, fístulas oro-nasales, enfermedad del
ligamento periodontal, luxaciones mandibulares y abscesos dentales implica el uso de
una variedad de medicamentos y procedimientos terapéuticos específicos. Cada
afección requiere un enfoque individualizado para su manejo eficaz. La osteomielitis
mandibular se trata con antibióticos como clindamicina y metronidazol, además de
analgésicos para el alivio del dolor. Para las fístulas oro-nasales, se emplean
antibióticos como amoxicilina, junto con agentes preanestésicos como morfina y
fentanilo para controlar el dolor durante el procedimiento quirúrgico. En la
enfermedad del ligamento periodontal, se utiliza clorhexidina en diversas
formulaciones para combatir la inflamación y la infección bacteriana. Las luxaciones
mandibulares se abordan con anestésicos como Propofol, seguidos de técnicas de
reducción cerrada bajo anestesia. En casos más complejos, pueden ser necesarios
dispositivos de restricción mandibular. Por último, los abscesos dentales se tratan con
una preparación aséptica del sitio quirúrgico, seguida de la incisión y drenaje del
absceso, junto con la administración de antibióticos y analgésicos para controlar la
infección y el dolor postoperatorio.
V. Bibliografía

Adkesson, M., Chinnadurai, S., Dress, R., Langan, J., & Nevitt, B. (2018). Successful
Treatment of Mandibular Osteomyelitis in Two Red-Necked Wallabies (Macropus
rufogriseus) Using Long-Term Pharmaceutical Therapy and Serial Monitoring by
Computed Tomography Imaging. VIN.Com.
https://www.vin.com/apputil/content/defaultadv1.aspx?
pId=12132&catId=155753&id=9948810&ind=88&objTypeID=17

Agnihotri, I., Arya, M., Maiti, S., Mamachan, M., & Mishra, M. (2023). Surgical
Management of Dental Abscess in two New Zealand White Rabbits-A Case Report Case
Report. Acta Scientific Veterinary Sciences, 5, 2582–3183.
https://doi.org/10.31080/ASVS.2022.05.0598

Bailey, T. A., Cooke, S. W., Jepson, L., & Morphew, T. (2022). Cefovecin treatment of a
dental abscess and associated Enterobacter cloacae infection in a red panda (Ailurus
fulgens) utilising therapeutic drug monitoring. Veterinary Record Case Reports, 10(4),
e475. https://doi.org/10.1002/VRC2.475

Bell, C., Robat, C., & Thatcher, G. (2020). Diagnosis and Management of an Oronasal
Fistula Secondary to Nasal Transmissible Venereal Tumor in a Dog. Journal of
Veterinary Dentistry, 37(4), 220–226. https://doi.org/10.1177/0898756420987011

Belotta, A. F., Caffaro, K. A., França, D. Q., Franco, M. M. J., Hussni, C. A., Lara, G. H. B.,
Listoni, F. J. P., Machado, V. M. de V., Morais, A. B. C., Paes, A. C., Ribeiro, M. G., &
Risseti, R. M. (2018). Deforming mandibular osteomyelitis in a cow caused by
Trueperella pyogenes. Ciência Rural, 44(11), 2035–2038.
https://doi.org/10.1590/0103-8478CR20140370

Bourguignon, E., Daibert, A., Moreira, M., & Pieri, F. (2022). Periodontal Disease in Dogs.
A Bird’s-Eye View of Veterinary Medicine. https://doi.org/10.5772/29846

Barajas, I. (2018). escrito diplomado cavidad oral.


Brook, N., Jerzy Gawor, Ana Nemec, David Clarke, Cedric Tutt, Marco Gioso, Paulo Stegall,
Marge Chandler, Gottfried Morgenegg, Rod Jouppi, & Kymberley Stewart. (2018).
Guías Dentales de la Asociación Mundial de Veterinarios de Pequeños Animales.
www.wsava.org

Cabral, J. P. M. S., Filho, U. C. G., Florence, C. O., Franco, F. A., Oliveira, C. J., Orozco, C.
A. G., Silva, F. W. S., Souza, A. P. A., & Torres, R. V. S. (2023). Reduction of
temporomandibular joint (TMJ) luxation in a horse - case report. Arquivo Brasileiro de
Medicina Veterinária e Zootecnia, 75(5), 947–951. https://doi.org/10.1590/1678-4162-
12985

Castejón-Gonzalez, A., de la Morena-Cabanillas, M., San Román-Llorens, F., Fernández-


Sánchez, J., Trobo-Muñiz, I., & San Román-Ascaso, F. (2016). Odontopediatría canina
y felina.

Cunha, E., Tavares, L., & Oliveira, M. (2022). Revisiting Periodontal Disease in Dogs: How
to Manage This New Old Problem? Antibiotics, 11(12).
https://doi.org/10.3390/ANTIBIOTICS11121729

Dixon, P. M. (2020). Treatment of equine oro-nasal and oro-maxillary fistulae. Equine


Veterinary Education, 32(9), 471–478. https://doi.org/10.1111/EVE.13127

Flynn, E., Pentsou, K., & Schwitzer, N. (2021). Dental abscess in a chimpanzee: a a case
study. https://www.veterinaryirelandjournal.com/images/2021/august2021/pdfs/
focus2_aug_2021.pdf

Girard, N. (2023). Surgical Treatment of Facial Abscesses and Jaw Osteomyelitis of Dental
Origin Using Extraoral Tooth Extraction in the Domestic Rabbit: A Case Series.
Https://Doi.Org/10.1177/08987564231168985, 41(2), 93–105.
https://doi.org/10.1177/08987564231168985

Graham, A., Greenberg, D., & Mannion, C. (2018). Dog Bite Injuries.
https://www.researchgate.net/publication/305882725_Dog_Bite_Injuries

Griffin, C., Hecht, S., Jones, P., Mulherin, B. L., & Smith, J. (2022). Severe mandibular
osteomyelitis and exfoliation of a mandibular canine tooth in a Vietnamese potbellied
pig. Veterinary Record Case Reports, 10(2), e348. https://doi.org/10.1002/VRC2.348
María Fernández Sánchez, J. (n.d.). INTRODUCCIÓN A LA ODONTOLOGÍA
VETERINARIA. ENFERMEDAD PERIODONTAL. www.seove.com

Parkinson, K. (2019). Bite Wounds. http://vetpracticetoday.com/vpt-en/catalogs/vpt7-


5_bitewounds/pdf/complete.pdf

Parks, J., Partlow, J. L., & Prange, T. (2017). Surgical repair of a mandibular degloving
injury in a 5-month-old colt. Equine Veterinary Education, 28(12), 668–671.
https://doi.org/10.1111/EVE.12442

Perry, R., & Tutt, C. (2018). Periodontal disease in cats: Back to basics – with an eye on the
future. Journal of Feline Medicine and Surgery, 17(1), 45–65.
https://doi.org/10.1177/1098612X14560099

Rice, C. A. (2017). Treatment Options for Oronasal Fistulae. https://vdsvets.com/wp-


content/uploads/2020/10/Treatment-Options-for-Oronasal-Fistulae.pdf

Tello, L. (2004). ESTUDIO DESCRIPTIVO DE PATOLOGÍAS Y LESIONES ORALES


EN PACIENTES CANINOS DOMÉSTICOS.

Thatcher, G. (2017). Temporomandibular joint luxation in the cat: Diagnosis and


management.
https://www.researchgate.net/publication/321002400_Temporomandibular_joint_luxatio
n_in_the_cat_Diagnosis_and_management

Wilson, B. (2022). Oronasal Fistula: An Insidious Threat. https://vetfolio-


vetstreet.s3.amazonaws.com/c1/466d60e21e11e19ddf005056ad4734/file/
VT0912_Wilson_CE-DC.pdf

También podría gustarte