Cómo Debemos Comportarnos
Cómo Debemos Comportarnos
Cómo Debemos Comportarnos
Índice.
1. LA MORAL. ..................................................................................................................................................................... 2
1.1. La acción moral. .................................................................................................................................................. 2
1.2. Valores y normas morales. ............................................................................................................................ 3
1.3. La conciencia moral. ......................................................................................................................................... 4
2. LA ÉTICA. ........................................................................................................................................................................ 5
2.1. Universalismo y relativismo moral. .......................................................................................................... 5
2.2. Éticas materiales y éticas formales. .......................................................................................................... 6
2.3. Ética de mínimos y ética de máximos. ..................................................................................................... 6
3. PRINCIPALES TEORÍAS ÉTICAS. ......................................................................................................................... 7
3.1. Eudemonismo. ..................................................................................................................................................... 7
3.2. Hedonismo. ........................................................................................................................................................... 8
3.3. Utilitarismo. .......................................................................................................................................................... 9
3.4. Emotivismo moral. ......................................................................................................................................... 10
3.5. Ética formal kantiana. ................................................................................................................................... 11
3.6. Ética de la justicia. .......................................................................................................................................... 13
3.7. Ética del discurso. ........................................................................................................................................... 14
1. LA MORAL.
Pero esta inteligencia y esta libertad de decisión nos llevan a preguntarnos ante cada
situación qué opciones hemos de elegir y por qué, lo cual deriva en el concepto de
responsabilidad. Por ejemplo, hay una gran diferencia entre una serpiente mortal que ataca a
una persona y una persona que envenena a otra. A la serpiente no le podemos reprochar nada
porque ha actuado instintivamente, pero ¿y a la persona? Evidentemente sí: el ser humano es
el único responsable de su acción, porque entre las diversas posibilidades que tiene ante una
situación determinada, elige libremente una de ellas. Cuando elegimos una posibilidad,
renunciamos a las demás y, por eso, la elección ha de ser justificada.
Los animales nacen con unas pautas fijas de conducta que constituyen sus normas y que
guían su comportamiento; sin embargo, los seres humanos carecemos de estas normas
naturales, por tanto, ¿cómo justificamos nuestras elecciones? ¿Qué es lo que guía nuestro
comportamiento en relación con el resto de seres humanos? Lo que orienta y justifica mis
decisiones es la MORAL: el conjunto de normas que regulan nuestras acciones y que permiten
clasificarlas como correctas (morales) o incorrectas (inmorales).
Nuestras acciones en el ámbito del comportamiento son siempre acciones morales. La
conducta del ser humano no puede ser nunca amoral, es decir, nunca puede ser ajena a la
moral, porque siempre actuamos de acuerdo o en contra de unas normas morales: nuestras
conductas siempre son morales o inmorales.
Cuando un animal ataca mortalmente a otro al sentirse en peligro, su respuesta es
instintiva y amoral. En cambio, cuando un ser humano ataca a otro mortalmente, ha decidido
tomar esa decisión de manera libre y responsable, eligiendo entre varias otras, por lo que su
acción siempre será considerada moral (buena) o inmoral (mala).
Actividad 1. Reflexiona:
a) ¿Condenamos del mismo modo la muerte de un niño causada por una persona que
causada por el ataque de un perro? ¿Por qué?
b) ¿Es moralmente importante la forma en que actúa la gente famosa?
3ª Evaluación: Acción y creación. 5. Moral y ética. 3
Valores morales: los valores son cualidades de las cosas o las personas que las hacen
valiosas y que solo los seres humanos somos capaces de apreciar (la belleza, la salud, el
rigor…). De manera específica, los valores morales son las cualidades en las que se
fundamentan las acciones que nos hacen aprobarlas como buenas o malas para el ser
humano.
o Son valores que consideramos tan importantes que tendemos a pensar que
deberían ser universales: la libertad, la justicia, la solidaridad, el respeto…
o Son valores que consideramos que no son opcionales o que dependan de los
gustos particulares, sino que deberían ser propios de todas las personas. (Parece
aceptable que alguien no aprecie el valor de la belleza, pero no que no acepte el
valor de la justicia).
Normas morales: son las reglas que ordenan nuestra conducta, indicándonos qué
debemos hacer o qué no. Lo que diferencia a la norma moral del resto de normas es que
quien dicta, cumple y juzga su cumplimiento es el propio sujeto moral. El poder de la
norma moral es que su aceptación es interna al propio sujeto. Esto es así porque las
normas morales son el conjunto de normas que hemos asumido o aprendido como
correctas.
Actividad 2.
a) Imagina esta situación: “eres un soldado que se encuentra en guerra y tu capitán te
ordena disparar junto con otros soldados a un grupo de civiles, amenazándote de
muerte si no lo haces”. ¿Qué harías? Una vez que tengas tu respuesta, ¿en qué nivel de
los propuestos por Kohlberg te encontrarías? Justifica la respuesta.
b) Plantea la misma situación anterior a otras dos personas y haz lo mismo: indica a quién
se lo has preguntado, cuál ha sido su respuesta y en qué nivel de desarrollo de
conciencia moral lo ubicarías.
2. LA ÉTICA.
Hemos visto que la moral es el referente personal que nos indica cómo debemos actuar.
Ahora, la ÉTICA es la reflexión filosófica que trata de aclarar en qué consiste esa moral, cuáles
son sus fundamentos y cómo se aplica en distintos casos. Cuando una persona indica qué es,
para ella, un comportamiento bueno o malo, lo hace desde su moral individual. Pero cuando
tratamos de encontrar el fundamento de nuestros juicios y valoraciones morales, estamos ya
dentro del ámbito de la ética.
Aunque en los apartados siguientes veremos detalladamente algunas de las teorías
éticas fundamentales, podemos hacer una aproximación a la ética desde varias perspectivas.
¿Hay valores morales universales? O por el contrario, ¿el bien y el mal son
subjetivos?
¿Un código ético me debe decir qué hacer? ¿O simplemente indicarme cómo actuar?
¿La ética debe orientar la vida para conseguir el bien individual? ¿O debe buscar la
justicia?
Aquino, Max Scheler…, para quienes lo bueno y lo malo no puede ser fruto de una
perspectiva subjetiva.
El relativismo moral, por el contrario, afirma que los valores morales varían de unas
sociedades y de unas épocas a otras. Nada es bueno o malo de manera absoluta. El
relativismo no niega que pueda haber valores comunes para varias culturas, pero sí que
exista un código ético de carácter absoluto, válido para todas las épocas, situaciones y
culturas. Algunos filósofos relativistas han sido los Sofistas, Spinoza, Nietzsche…
actualmente, los derechos humanos son el mínimo exigible a toda persona y todo
gobierno para que la sociedad tenga un mínimo de justicia.
Actividad 3. Completa las siguientes afirmaciones con las palabras que falten:
c) La __________ supone una reflexión filosófica sobre la moral, puesto que mientras esta
hace referencia al comportamiento humano, la primera estudia sus _____________________.
d) Dentro de las teorías éticas, aquellas que se centran en el bien individual son
denominadas ________________________ y aquellas que buscan establecer las condiciones
básicas de la justicia, __________________.
e) Por otro lado, las éticas ____________________ no se ocupan de determinar el contenido de
las normas morales, sino la __________________ de nuestros actos morales, ya que las
acciones no son buenas o malas en función de sus ____________________ sino en sí mismas.
Frente a este tipo de éticas, las éticas __________________ se centran en el contenido de las
acciones morales, estableciendo qué debemos hacer para alcanzar un fin, de modo que
son ____________________.
3.1. Eudemonismo.
“He aquí precisamente el carácter que parece tener la felicidad: la buscamos siempre por ella y
sólo por ella, y nunca por otra cosa. Por lo contrario, cuando buscamos los honores, el placer, la
inteligencia, etc. bajo cualquier forma que sea, deseamos sin duda todas estas ventajas por sí
mismas; puesto que desearíamos realmente cada una de ellas; sin embargo, nosotros las
deseamos también con la mira de la felicidad, porque creemos que todas estas diversas
ventajas nos la pueden asegurar, pensamos que gracias a ellos seremos felices. [...] Por
consiguiente, la felicidad es ciertamente un fin perfecto, una cosa definitiva que se basta a sí
misma, puesto que es el fin de todos los actos posibles del hombre.”
ARISTÓTELES. Ética a Nicómaco. (Adaptación).
3.2. Hedonismo.
El término griego hedoné significa ‘placer’, por lo que la ética hedonista es aquella
que establece como bien supremo el placer. Uno de los principales defensores de
ella en el mundo griego fue Epicuro (341-270 a.C.).
Epicuro afirma que el bien supremo que debemos alcanzar en nuestra vida es el
placer: la felicidad consiste en organizar de tal modo nuestra vida que logremos
el máximo placer y el mínimo dolor. Ahora bien, ¿cómo entiende el placer Epicuro? Reflexionó
sobre los distintos tipos de placeres y diferenció entre:
- Placeres naturales necesarios: relacionados con nuestra propia supervivencia (el placer
de comer cuando se tiene hambre, por ejemplo).
- Placeres naturales innecesarios: son variaciones superfluas de los anteriores (comer por
gula o comer manjares).
3ª Evaluación: Acción y creación. 5. Moral y ética. 9
- Placeres ni naturales ni necesarios: sacian la vanidad del ser humano (el placer de la
riqueza o la fama).
Y entendió que el verdadero placer es aquel en el que el ser humano goza de calma y
tranquilidad. Por ello, para ser felices debemos centrarnos en satisfacer sobre todo nuestros
deseos naturales y necesarios, disfrutando con medida de los placeres naturales pero
innecesarios y evitando aquellos que no son ni naturales ni necesarios.
El ideal de la felicidad para Epicuro, como todos sabemos ya, es la ataraxia, que
significa ‘imperturbabilidad’: para ser felices debemos llevar una vida tranquila en la que
evitemos aquello que nos “perturbe”. La felicidad consiste en buscar aquellos placeres que no
provoquen perturbación al alma ni excitación al cuerpo. Epicuro, de hecho, ofrece un
tetrafármaco para liberar al ser humano de los cuatro grandes temores que le afligen:
- No hay que temer a los dioses: es absurdo, ya que los dioses no se preocupan por los
asuntos humanos y no se mueven por los sentimientos que comúnmente se les
atribuyen.
- No hay que tener miedo a la muerte: también es absurdo e irracional, porque “no es
nada para nosotros”. Cuando estamos vivos, la muerte no está, y cuando la muerte
está, nosotros ya no estamos. Entonces ¿para qué preocuparnos por ella? La actitud
del sabio es la de vivir razonablemente en lugar de desperdiciar el tiempo que
tenemos anhelando un tiempo de vida infinito que nunca lograremos alcanzar.
- No hay que tener miedo al fracaso (a no alcanzar el bien y el placer): es absurdo temer
el fracaso, ya que los placeres son siempre asequibles. El error está en pensar que la
felicidad depende de factores externos y de cosas que quedan fuera de nuestro
control personal, como la opinión de los demás, las recompensas externas, etc. Al
contrario, gozando de la autonomía propia del sabio, es posible para cada uno lograr
un estado de ánimo equilibrado y gozoso con muy pocos medios.
- No hay que temer el dolor: se trata de un miedo infundado ya que todo dolor es en
realidad fácilmente soportable. Si se trata de un dolor intenso su duración será
breve, mientras que si el dolor es prolongado, su intensidad será leve y podrá ser
fácilmente sobrellevado.
3.3. Utilitarismo.
La ética utilitarista comparte los objetivos de la felicidad y el placer con Aristóteles y
Epicuro; pero va más allá de la felicidad o el placer del individuo y se centra en la sociedad:
propone como meta moral lograr la mayor felicidad (el mayor placer) para el mayor
número de personas.
El placer es entendido como el bienestar de la mayoría, por lo que una acción será
moralmente útil cuando haga feliz a un gran número de personas. Los principales exponentes
del utilitarismo fueron los ingleses Jeremy Bentham y John Stuart Mill: ambos consideran
que en el comportamiento moral es necesario aprender a calcular las consecuencias de
nuestras decisiones, para que el placer sea del mayor número de personas posible, pero
difieren en qué considerar para hacer este cálculo.
3ª Evaluación: Acción y creación. 5. Moral y ética. 10
Una consecuencia de este utilitarismo del siglo XIX en las sociedades actuales es la idea
de que los gobernantes deben actuar pensando en las consecuencias de sus acciones y tratando
de beneficiar al mayor número de personas posibles. Sin embargo, el utilitarismo actual ya no
identifica necesariamente lo útil con lo placentero, sino más bien con la posibilidad de que el
mayor número de personas puedan satisfacer sus preferencias personales, las consideremos o
no placenteras.
Este tipo de ética es una ética formal porque no contiene órdenes ni prohibiciones
concretas, sino que se ocupa únicamente de cómo debemos actuar, de la estructura que han de
tener nuestras acciones morales, con independencia del contenido que éstas posean; es decir,
independientemente de en qué consistan concretamente nuestras acciones.
Según Kant, el ser humano actúa moralmente cuando actúa por deber, es decir,
cuando el motivo que le lleva a realizar una determinada acción no es la consecuencia que
espera de ella, sino el deber en sí mismo. Para entender esto, expone tres tipos de acciones en
relación con el deber:
Acciones contrarias al deber.
Acciones conformes al deber: son acciones con efectos positivos, pero cuya
motivación no es el respeto mismo al deber.
Acciones por deber: acciones cuya única motivación es el respeto al deber.
3ª Evaluación: Acción y creación. 5. Moral y ética. 12
Solo las últimas, las acciones realizadas por puro respeto al deber, son propiamente
acciones morales. Para determinar el valor de una acción, no importa qué se haga, sino cómo se
haga. Lo importante es la voluntad: sólo la voluntad que nos empuja a actuar por deber es la
buena voluntad.
"Obra sólo según una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que se torne en
ley universal".
A la hora de tomar una decisión y llevar a cabo una acción hemos de preguntarnos si el
motivo que nos lleva a ella es un motivo que nos gustaría que todos tomaran en cuenta. Si
lo que me lleva a actuar se generalizase, ¿seguiría estando bien?
Actividad 5. Elige tres acciones cotidianas que tengan que ver con el
instituto, con tus amistades y con tu familia y explica en qué casos pueden
ser contrarias al deber, conformes al deber o por deber.
a) Estudiaré para aprobar todas las asignaturas porque si lo hago mis padres me
comprarán el móvil que quiero.
John Rawls (1921-2002) consideró que para que las normas sean justas
no pueden estar pensadas para beneficiar a un grupo concreto de personas
perjudicando al resto de la población. Para poder decir que una sociedad
es justa, las normas no deben establecer diferencias injustas basadas en
características personales como el color de la piel, el sexo, la inteligencia o
la riqueza.
Para establecer normas válidas, debemos llegar a un acuerdo que sea aceptable para
todos, independientemente de las circunstancias personales o de la posición social. Para ello,
Rawls nos lleva a imaginar qué pasaría si todas las personas que formamos parte de la
sociedad pudiéramos reunirnos para establecer las normas de convivencia. Esto es lo que
denomina posición originaria: una situación ideal de partida en la que todas las personas que
se van a ver afectadas por las normas participen en su elaboración. Ahora bien, para que las
normas resultantes sean justas, plantea la idea del velo de la ignorancia: si ninguna de las
personas reunidas supiera cuál va a ser su papel en la sociedad o cuáles van a ser sus
características personales (su edad, su sexo o su cociente intelectual, por ejemplo), ¿qué
principios de justicia decidirían para su sociedad? Solo en una condición en la que los
participantes de la sociedad se encontrasen en las mismas condiciones, las normas elaboradas
serías justas. Esto da como resultado los dos principios de una sociedad justa que, según
Rawls, son los más razonables:
1. Principio de igualdad: todos somos libres e iguales, con los mismos derechos y
libertades. Lo único que puede limitar mis derechos es el respeto a los derechos de los
demás.
2. Principio de diferencia: para que una sociedad sea justa no es necesario que todos sus
miembros tengan los mismos bienes, pero sí que tengan las mismas oportunidades.
Cada individuo debe ser responsable de sus propias decisiones, pero se debe asegurar la
igualdad de oportunidades: el único sistema justo posible es aquel en el que la sociedad
compense las desigualdades que puedan existir entre las personas de las que ellas no
son responsables.
los principios. Dado que todos están situados de manera semejante y que ninguno es capaz de
delinear principios que favorezcan su condición particular, los principios de la justicia serán el
resultado de un acuerdo o de un convenio justo, pues dadas las circunstancias de la posición
original y la simetría de las relaciones entre las partes, la situación inicial es equitativa entre las
personas en tanto que seres morales, esto es, en tanto que seres racionales con sus propios
fines, a quienes supondré capaces de un sentido de la justicia."
Jonh RAWLS, Teoría de la justicia.
a) Pon un título razonado al texto.
b) ¿Qué garantiza el denominada “velo de la ignorancia?
c) Ahora lee esto:
a) ¿Por qué se dice que su supervivencia fue tan injusta como la muerte de sus
hermanos?
b) Explica la frase que aparece subrayada; para ello, tendrás que recordar qué
significa que algo sea arbitrario y qué es la contingencia. Después, relaciona esta
idea con alguna situación actual.
Apel Habermas
3ª Evaluación: Acción y creación. 5. Moral y ética. 15