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SOBRE EL DOCUMENTO FIDUCIA SUPPLICANS

En el ano 2021, cuando, en ese entonces, la Congregacion para la Doctrina de la Fe la
presidía Mons. Ladaria, en un Responsum ad dubium, la Iglesia respondía a la pregunta
“¿La Iglesia dispone del poder para impartir la bendicion a uniones de personas del
mismo sexo?” de forma negativa, agregandole una nota explicativa, la cual no esta mal
leerla, puesto que contiene la doctrina eclesial acerca de este tema 1.
Incluso, mas cerca de nuestros días, el mismo Papa Francisco había respondido a
unas dubias que habían presentado dos cardenales. Dentro de esas dubias, se había
propuesto la de bendecir a las parejas homosexuales. Ante esta dubia, el Papa contesto
que “la Iglesia evita todo tipo de rito o de sacramental que pueda contradecir esta
conviccion y dar a entender que se reconoce como matrimonio algo que no lo es”2. ¿Cual
es la “conviccion” que la Iglesia no pretende contradecir? Es, en palabras del mismo
pontífice, la concepcion clara sobre el matrimonio, esto es, una union exclusiva, estable
e indisoluble entre un varon y una mujer, naturalmente dispuesta a engendrar hijos 3.
Claramente, el Papa Francisco renunciaba a la posibilidad de una bendicion a las parejas
homosexuales; no obstante, en los siguientes puntos (d, e, f y g), abría el mismo una
posible bendicion pastoral y no litúrgica a las parejas susodichas. Esto dijo el Sucesor
de Pedro:
«Por ello la prudencia pastoral debe discernir adecuadamente si hay formas de bendicion,
solicitadas por una o por varias personas, que no transmitan una concepcion equivocada del
matrimonio. Porque cuando se pide una bendicion se esta expresando un pedido de auxilio a
Dios, un ruego para poder vivir mejor, una confianza en un Padre que puede ayudarnos a vivir
mejor»4.

Si bien muchas personas criticaron al Papa por su ambiguedad acostumbrada, no

paso mayor cosa y no se formo ninguna polemica en torno a este tema. Se tuvo claro que
la Iglesia no permitía este tipo de bendiciones, mas se dejo abierta la posibilidad de un
tipo de bendicion que, no menoscabando la dignidad del matrimonio, ni tratando
suplantar su dignidad sacramental, pudieran recibir este tipo de relaciones.

1 Para quien quiere profundizar, Congregacion para la Doctrina de la Fe (2021). Responsum de la

Congregacion para la Doctrina de la Fe a un dubium sobre las bendiciones de las uniones de personas del
mismo sexo. Editorial Vaticana. Responsum de la Congregacion para la Doctrina de la Fe a un dubium
sobre las bendiciones de las uniones de personas del mismo sexo (22 de febrero de 2021) (vatican.va)
2 Francisco (2023). Respuestas del Santo Padre a los Dubia propuestos por dos cardenales. Editorial

Vaticana. Respuesta a la segunda dubia, c. “Dubia” de dos Cardenales (10 de julio de 2023) y “Respuestas”
del Santo Padre “a los Dubia propuestos por dos Cardenales” (11 de julio de 2023) (vatican.va)
3 Cfr. Francisco (2023). Respuestas del Santo Padre a los Dubia propuestos por dos cardenales. Editorial

Vaticana. Respuesta a la segunda dubia, a. “Dubia” de dos Cardenales (10 de julio de 2023) y “Respuestas”
del Santo Padre “a los Dubia propuestos por dos Cardenales” (11 de julio de 2023) (vatican.va)
4 Francisco (2023). Respuestas del Santo Padre a los Dubia propuestos por dos cardenales. Editorial

Vaticana. Respuesta a la segunda dubia, e. “Dubia” de dos Cardenales (10 de julio de 2023) y “Respuestas”
del Santo Padre “a los Dubia propuestos por dos Cardenales” (11 de julio de 2023) (vatican.va)
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En ese contexto, ademas del Sínodo de los Obispos, fue en el que sale el mas
recientemente documento acerca del tema. En efecto, recientemente, para ser mas
precisos, el día 18 de diciembre del presente ano, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe,
encabezado por Monsenor Víctor Manuel Fernandez, publico un documento, que, segun
palabras del mismo, pretende ser una “declaracion”, en donde se trata la cuestion de las
bendiciones en general, ademas de la recepcion de estas por parte de parejas del mismo
sexo. Claramente, esto hizo que todos los ojos del mundo catolico saltaran a este
documento, con el fin de conocer que decía acerca de las bendiciones a las parejas
homosexuales, puesto que se volvía a tocar el tema.
Pues bien, los catolicos del mundo entero se sorprendieron ante la afirmacion del
documento de que las parejas homosexuales pudieran recibir una bendicion por parte
de los ministros de la Iglesia. Con todo, no solo los catolicos se sorprendieron, sino
tambien la prensa, la cual no desaprovecho la oportunidad para llenar sus redes con
títulos amarillistas, que solo llaman a la confusion y a la desinformacion. “El Vaticano
aprobo las bendiciones a homosexuales”, “El Papa Francisco ha dicho que esta bien
bendecir a los homosexuales” … etc., son, por ejemplo, algunos de los titulares que han
estado invadiendo las redes estos ultimos días.
Ante todo, cabe aclarar que, como lo diremos mas adelante, la Iglesia no ha cambiado
su doctrina acerca de los homosexuales, ni acerca del matrimonio. No obstante, este
documento se presentaba como una clara oposicio n y contradiccion con el responsium
del ano 2021, de la misma entidad.
Por esto mismo —y, en gran parte, gracias a los comentarios de la prensa—, salieron
los catolicos de todo el mundo a opinar, comentar o simplemente informar a los fieles
sobre este documento. Sin embargo, leyendo esos comentarios, pude notar varias cosas
que, si no las cortamos desde raíz, nos pueden jugar en contra.
Como primera cosa que pude comprobar es que se enfrentaron las dos posiciones
eclesiales que, gracias a las polemicas de este pontificado, se han exacerbado en
demasía, asemejando a la Iglesia, mas que un lugar donde el Pueblo de Dios se reuna, a
un ring de boxeo, en donde gana quien mas dano le haga a la Iglesia. En un lado del
cuadrilatero, tenemos a los que se denominan “tradicionalistas”5, quienes, gracias,
reitero, a las controversias del actual pontificado, han tomado mucha fuerza. Por otro
lado, tenemos a los “modernistas”, quienes esperan una renovacion de la Iglesia con
respecto al mundo, en donde ya la Iglesia no sea esa luz del mundo, ni esa sal que pidio
Nuestro Senor.
La posicion que manejo acerca de estos dos “equipos” es clara: los dos son
prejudiciales para la Iglesia. Es decir, tanto un anhelo desmedido al pasado, que

5 No se hace referencia a los de la Fraternidad de San Pío X

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desemboca en un odio al presente y al futuro6, como un ansia de progresar, con

vericuetos en el pasado y una casi idolatría al futuro, son un peligro para la Iglesia.
Volviendo al tema, estos dos equipos se enfrentaron, de tal manera que expusieron
sus comentarios acerca del documento. Considerandolo bien, no quiero dejar esta parte
sin antes citar algunas opiniones, con el fin de evidenciar el peligro que esto representa
para la Iglesia.
Por el lado progresista, tenemos al sacerdote James Martin, quien, en su cuenta de X,
comento lo siguiente:
«La nueva declaracion del Vaticano "Fiducia supplicans" es un gran paso adelante en el
ministerio de la iglesia hacia las personas LGBTQ y reconoce el profundo deseo de muchas
parejas catolicas del mismo sexo por la presencia de Dios en sus relaciones amorosas.
Tambien es un cambio marcado de la conclusion "Dios no bendice ni puede bendecir el
pecado" de hace apenas dos anos. La declaracion abre la puerta a bendiciones no liturgicas
para parejas del mismo sexo, algo que anteriormente estaba prohibido para obispos,
sacerdotes y diaconos. Junto con muchos sacerdotes, ahora estare encantado de bendecir a
mis amigos en uniones entre personas del mismo sexo»7.

Ademas, comentando la publicacion de este sacerdote, tenemos el usuario L

M.o.I.e.n.d.a, quien publico una imagen, en donde Jesucristo sostenía una cerveza,
ambientado por un arcoíris en el fondo, claramente haciendo referencia al lobby
LGBTQ+8.
Sin embargo, no olvidemos el otro bando. Los “tradicionalistas” salen a defenderse
de los golpes de los “modernistas”. En ese sentido, un sacerdote ingles llamado Federico
Palma, quien presume de ser “un sacerdote catolico romano”, pero quien, en su muro,
tiene una imagen que, traducida al espanol, dice: “Cristo es Dios; el catolicismo es
verdad; Sedevacante”. ¡Ya se podran imaginar lo que ha comentado este sacerdote!:
«Estimado Nicolas, Francisco no es un verdadero papa. Eso esta contemplado por la teología
catolica. Lo que la teología no contempla es tener a papas que como tales ensenan y
promulgan doctrinas erroneas a los fieles. La tesis de Cassiciacum del gran teologo dominico
Guerard des Lauriers quien fue consejero del papa Pio XII explica esta situacion. De lo
contrario el problema es insoluble para el catolico si se considera a Francisco como verdadero
papa, eso puede generar mucha confusion y hasta tristes apostasías. La Iglesia junto al papa
no puede equivocarse, pero la iglesia sin un papa verdadero no es infalible. Eso es lo que esta
pasando ahora y es total y teologicamente factible y de acuerdo a la teología (valga la

6 Y, si no es un odio, al menos, un resentimiento y un espíritu de crítica

7 Martin, J. (@JamesMartinSJ). (18 de diciembre de 2023). La nueva declaración del Vaticano "Fiducia
supplicans" es… [Tweet]. X. James Martin, SJ en X: "The Vatican's new declaration "Fiducia supplicans" is
major step forward in the church's ministry to LGBTQ people and recognizes the deep desire in many
Catholic same-sex couples for God's presence in their loving relationships. It is also a marked shift from..."
/ X (twitter.com)
8 Cfr. L M.o.I.e.n.d.a. (@lukenukem). (18 de diciembre de 2023). Imagen. [Tweet]. X. L. M.o.l.e.n.d.a en X:

"@JamesMartinSJ @J3ures https://t.co/RAurArt4nM" / X (twitter.com)

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redundancia). Cuando en teología se dice “toda la Iglesia” eso incluye al papa. El problema es
que, si no hay papa, no se puede usar ese argumento»9.

Incluso, tenemos al famoso escritor Nicolas Marquez, quien es popular por los
multiples libros que ha escrito, siendo el de mas renombre “El Libro Negro de la Nueva
Izquierda”, comento:
«Queridos amigos: ¿alguien conoce una Religion presentable para sugerirme? Gracias a
quienes aporten datos al respecto. Dios los Bendiga. Me harte. Con este sujeto la Iglesia se ha
convertido en una maloliente madriguera mas parecida a una sede del Partido Comunista que
organiza fiestas orgiasticas que a la Iglesia Verdadera. Ha sido secuestrada»10.

No propondre mas comentarios al respecto de los dos bandos, por el bien de nuestras
almas y de aquellas que leyeren este documento. Con todo, se puede suponer que el
clima esta caldeado y los dos bandos le estan haciendo un terrible dano a la Iglesia de
Cristo.
No obstante, tampoco puedo dejar de citar a aquellos que representan un punto
medio en esta discusion, al que yo me uno.
«Querido hermano que exige la sana doctrina por parte de la Iglesia, lo que menos debes
hacer es apostatar. La Iglesia necesita de los valientes dispuestos a defenderla de sus enemigos
internos y externos. Estamos llamados a ser la luz del mundo, no a rendirnos. Queridos
hermanos: No caigan en titulares amarillistas. Lean lo que verdaderamente dice. La iglesia es
madre y maestra. Desde el amor acoge a todos sus hijos y tambien ensena lo que es verdadero.
Matrimonio sigue siendo entre hombre y mujer para siempre»11.

Citare solamente a Mamela, puesto que encontre en su comentario una posicion

razonada, comprensiva y devota. Sin embargo, existen numerosas cuentas de X o
numerosos sacerdotes, fieles laicos que han decidido tomar la posicion de Mamela.
¡Gloria a Dios por ellos! Al final del documento, hablare un poco sobre esta cuestion y
las consecuencias de tomar posiciones diferentes.
En cuanto a mi consideracion, hube y he de tener en cuenta varias cosas a la hora de
analizar este documento. Primeramente, leerlo, puesto que la mayoría de las personas
que critican al Papa por este escrito no lo han leído. Incluso, comentandolo con algunos

9 Palma, F. (@PadrePalma). (18 de diciembre de 2023). Estimado Nicolás, Francisco no es un verdadero

papa. Eso está… [Tweet]. X. Father Federico Palma en X: "@NickyMarquez1 @MamelaFialloFlo Estimado
Nicolas, Francisco no es un verdadero papa. Eso esta contemplado por la teología catolica. Lo que la
teología no contempla es tener a papas que como tales ensenan y promulgan doctrinas erroneas a los
fieles. La tesis de Cassiciacum del gran teologo dominico Guerard des…" / X (twitter.com)
10 Marquez, N. (@NickyMarquez1). (18 de diciembre de 2023). Queridos amigos:… [Tweet]. X. Nicolas

Marquez en X: "Queridos amigos: alguien conoce una Religion presentable para sugerirme? Gracias a
quienes aporten datos al respecto. Dios los Bendiga. https://t.co/2ke7PUoZXc" / X (twitter.com)
11 Fiallo, M. (@MamelaFialloFlo). (18 de dic. de 23). Querido hermano que exige… [Tweet]. X. Mamela

Fiallo Flor💙 en X: "Querido hermano que exige la sana doctrina por parte de la Iglesia, lo que menos
debes hacer es apostatar. La Iglesia necesita de los valientes dispuestos a defenderla de sus enemigos
internos y externos. Estamos llamados a ser la luz del mundo, no a rendirnos. https://t.co/ZvvfzGehC4"
/ X (twitter.com)
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amigos, decidí no dar mi opinion hasta el momento en donde me hubiera leído el

documento y, analizandolo, pudiera sacar una conclusion.
Ahora bien, he de dejar en claro que algunos titulares de la prensa que pretenden que
la Iglesia haya cambiado la doctrina acerca del matrimonio o los homosexuales son
totalmente falsos. El mismo documento, no mas empezando, deja en claro que «la
presente Declaracion se mantiene firme en la doctrina tradicional de la Iglesia sobre el
matrimonio»12. Esta tesis se repite continuamente en la Declaracion, por ejemplo:
«Son inadmisibles los ritos y oraciones que puedan crear confusion entre lo que es
constitutivo del matrimonio, como union exclusiva, estable e indisoluble entre un varon y una
mujer, naturalmente abierta a engendrar hijos, y los que lo contradice. Esta conviccion esta
fundada sobre la perenne doctrina catolica del matrimonio. Solo en este contexto las
relaciones sexuales encuentran su sentido natural, adecuado y plenamente humano. La
doctrina de la Iglesia sobre este punto se mantiene firme» 13.

Esta Declaracion lo vuelve a repetir cuando afirma que la Iglesia siempre ha

considerado moralmente lícitas solo las relaciones sexuales que se llevan a cabo dentro
del matrimonio; por esta razon, la Iglesia no tiene potestad de conferir su bendicion
liturgica, puesto que puede resultar en una forma de legitimar moralmente la union
presuntamente matrimonial o una practica sexual extramatrimonial14.
Con lo que queda claro que esta Declaracion no pretende en absoluto cambiar la
doctrina de la Iglesia. Esta ultima es clara en afirmar que la alianza matrimonial se da
entre un hombre y una mujer 15 y que «la Tradicion ha declarado siempre que “los actos
homosexuales son intrínsecamente desordenados”»16.
La Iglesia había ya cerrado la posibilidad de una bendicion liturgica, en virtud de que
«desde un punto de vista estrictamente liturgico, la bendicion requiere que aquello que
se bendice sea conforme a la voluntad de Dios manifestada en las ensenanzas de la
Iglesia»17, cosa que evidentemente incumplen las parejas homosexuales, por lo que la
Iglesia no puede proponer un rito oficial para bendecirlas18.
Existe, empero, claramente en el documento una concepcion de la bendicion
diferente a la que multiples catolicos tienen por entendido. En concreto, el documento
dice que se debe evitar un exagerado rigorismo en cuanto a las bendiciones, porque se

12 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de
las bendiciones. Editorial Vaticana, presentacion.
13 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de

las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 4

14 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral

de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 11

15 Cfr. Iglesia Catolica (1997). Código de Derecho Canónico. Editorial Vaticana, can. 1055, 1
16 Iglesia Catolica (1992). Catecismo de la Iglesia Católica. Editorial Vaticana, n. 2357
17 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de

las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 9

18 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral

de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 10

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podría llegar a que las bendiciones tengan las mismas condiciones morales que se piden
para la recepcion de los sacramentos19, cosa que claramente no es así. En efecto, los
sacramentos requieren una preparacion, puesto que revisten dignidad sacramental,
ademas de ser signos invisibles de una realidad trascendente, con el fin de comunicar
la gracia santificante al fiel; no ocurre lo mismo con los sacramentales, los cuales no
comunican la gracia santificante, sino que la disponen. Es por esta misma razon por la
que los sacramentales no requieren una preparacion para recibirlos; una persona puede
recibirlos en pecado mortal —que no es lo debido, claro esta—, como lo puede recibir
en estado de gracia. Esto, a mi juicio, es entendible y un punto claro que ofrece el
documento, a fin de que se acabe la confusion entre un sacramento y un sacramental.
Siguiendo esta misma logica, la Declaracion senala que el sentido profundo de la
bendicion es una actitud de auxilio a Dios, para poder vivir mejor o para que nos
ayude20. Por esto mismo, «cuando las personas invocan una bendicion no se debería
someter a un analisis moral exhaustivo como condicion previa para poderla conferir. No
se les debe pedir una perfeccion moral previa»21. Por tanto, a nadie se le debe impedir,
continua diciendo el documento, recibir esta bendicion.
«Si “no es conveniente que una Diocesis, una Conferencia Episcopal o cualquier otra
estructura eclesial habiliten constantemente y de modo oficial procedimientos o ritos para
todo tipo de asuntos”, la prudencia y la sabiduría pastoral pueden sugerir que, evitando
formas graves de escandalo o confusion entre los fieles, el ministro ordenado se una a la
oracion de aquellas personas que, aunque esten en una union que en modo alguno puede
parangonarse al matrimonio, desean encomendarse al Senor y a su misericordia, invocar su
ayuda, dejarse guiar hacia una mayor comprension de su designio de amor y de vida»22.

Ahora bien, el documento ha expuesto que a) la Iglesia no ha cambiado su doctrina, b) la

Iglesia no puede formular una bendición litúrgica a aquello que no está en la voluntad de
Dios, c) la bendición es un sacramental, por lo que contiene diferentes condiciones a la hora
de recibirlo, d) nadie puede ser rechazado a recibirlo. Empero ¿y con las parejas del mismo
sexo? ¿Qué se haría? He aquí la parte más controversial de toda la Declaración, puesto que
el prefecto dice:
«En el horizonte aquí delineado se coloca la posibilidad de bendiciones de parejas en situaciones
irregulares y de parejas del mismo sexo, cuya forma no debe encontrar ninguna fijación ritual por
parte de las autoridades eclesiásticas, para no producir confusión con la bendición propia del
sacramento del matrimonio. En estos casos, se imparte una bendición que no sólo tiene un valor
ascendente, sino que es también la invocación de una bendición descendente del mismo Dios sobre

19 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral
de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 12
20 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral

de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 21

21 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de

las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 25

22 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de

las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 30

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aquellos que, reconociéndose desamparados y necesitados de su ayuda, no pretenden la

legitimidad de su propio status, sino que ruegan que todo lo que hay de verdadero, bueno y
humanamente válido en sus vidas y relaciones, sea investido, santificado y elevado por la presencia
del Espíritu Santo. Estas formas de bendición expresan una súplica a Dios para que conceda
aquellas ayudas que provienen de los impulsos de su Espíritu – que la teología clásica llama
“gracias actuales” – para que las relaciones humanas puedan madurar y crecer en la fidelidad al
mensaje del Evangelio, liberarse de sus imperfecciones y fragilidades y expresarse en la dimensión
siempre más grande del amor divino»23.

Considero de suma importancia tener en cuenta a la hora de analizar este párrafo, lo que
señalé en negrilla. Es decir, la Iglesia, con la bendición, no pretende bendecir el pecado —
puesto que no puede—, ni aceptar la conducta de los homosexuales. Es más, la Declaración
continúa recalcando que no se debe promover un ritual para las bendiciones de parejas en
situación irregular, mas tampoco se puede impedir o prohibir la cercanía de la Iglesia que
pide un fiel a través de una simple bendición24. Además, la Iglesia prohíbe dar este tipo de
bendiciones, al mismo tiempo que los ritos civiles de unión, no siquiera con las vestimentas,
gestos o palabras propias de un matrimonio 25.
Toda esta exposición acerca de las bendiciones a parejas homosexuales termina con esto:
«cuando la relación con Dios está enturbiada por el pecado, siempre se puede pedir una
bendición, acudiendo a Él, como hizo Pedro en la tormenta cuando clamó a Jesús: “Señor,
sálvame”»26.
Considero que se ha hecho una exposición clara sobre el documento —no obstante,
recomiendo leerlo para claridad en la información—. Ahora bien, la posición que asumo
acerca de este documento es la de un fiel que no quiere generar polémica, ni criticar al Papa,
sino simplemente esperar en el Señor.
A mi juicio, esta Declaración se publicó en el momento menos oportuno, por lo que faltó
discernimiento a la hora de publicarlo. En este momento, estamos próximos a celebrar la
Natividad de Nuestro Señor Jesucristo, por lo que estamos en los últimos días del tiempo de
Adviento y desafortunadamente, gracias a esta polémica surgida alrededor de esta
Declaración, muchos católicos van a quitar sus ojos de la próxima solemnidad y los van a
situar en las bendiciones a las parejas homosexuales y a los “gays”. Por lo que, por esa parte,
no tengo mucho a favor de la Declaración.
Sin embargo, como no estoy de acuerdo con la fecha de publicación de la Declaración,
tampoco puedo estar de acuerdo con la ingeniería mediática que ha tenido este documento y
por la que muchos católicos hoy se están enfrentando. Como lo dije en un principio, la prensa

23 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de
las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 31. Las negrillas son nuestras.
24 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral

de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 38

25 Cfr. Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral

de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 39

26 Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral de

las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 43

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no ayudó en nada a la debida información de su audiencia; antes bien, promovió su contrario.

Así las cosas, también hay que tener en cuenta que la prensa le generó mucha controversia al
documento.
Ahora bien, a la hora de leer el documento, pude notar —como en todos los escritos de
este pontificado— una clara ambigüedad que puede promover la confusión. Y esto me parece
gravísimo no solamente por los fieles, sino que mayormente por los sacerdotes que van a
tener que enfrentar estas situaciones, puesto que no hay claridad de cómo proceder y se lo
deja en bonitas palabras que, en la praxis, pueden no ser tan bonitas. Me parece gravísimo, a
su vez, puesto que la Iglesia debería relucir por su claridad a la hora de enseñar algo, sobre
todo en la actual sociedad, donde el relativismo ha permeado casi todos los ámbitos de la
existencia humana. Lamentablemente, no es así: la Iglesia está participando de esa
ambigüedad actual, utilizando términos y conceptos no claros, que pueden llevar a la
confusión. Esta gravedad se aumenta más considerando que el documento viene de parte del
Papa, quien se supone tiene que ser una fuente clara a la hora de analizar estos temas.
Siguiendo el hilo conductor, también he de afirmar que, si bien la acción pastoral que
quiere llevar a cabo la Iglesia es piadosa y, de ninguna manera, reprochable, en la actualidad
puede resultar perjudicial para las buenas costumbres de los fieles, sobre todo teniendo en
cuenta que la Declaración no reduce estas bendiciones al ámbito privado, sino que permite
(¿o no? He ahí la ambigüedad) hacerlas públicas, con tal que se cumplan las condiciones que
se nombran27. También es curioso notar que, en toda la Declaración, no se hace mención a la
expresa condena que la Iglesia expresa sobre la homosexualidad, ni siquiera da a entender
eso. Esto último me hace recordar las palabras del, en ese entonces, cardenal Joseph
Ratzinger:
«Queremos dejar claro que apartarse de las enseñanzas de la Iglesia, o guardar silencio sobre
ellas, en un esfuerzo por brindar atención pastoral no es ni atención ni pastoral. Sólo lo que es
verdadero puede ser, en última instancia, pastoral».

El caso es que, no limitando este tipo de bendiciones al ámbito privado, los fieles caerán
prontamente en una confusión, la cual consistirá en una “aceptación” de la homosexualidad
por parte de la Iglesia, cosa que configuraría un error doctrinal que, si bien no se expresaría
en teoría, en la praxis se dejaría ver. Sin embargo, reitero, esta Declaración no cambió nada
de la doctrina de la Iglesia acerca de la homosexualidad; solamente quiero decir que estas
bendiciones, no reduciéndose al ámbito privado por lo menos, terminarán trayendo una
confusión en los fieles. Poco a poco, se estaría normalizando estas bendiciones expresas a
parejas homosexuales. Claramente, no podemos llegar al fanatismo, afirmando que
“prontamente, la Iglesia empezará a celebrar matrimonios homosexuales”, como se lo
escuché a un predicador católico; esta posición, además de ser fanática, expresa una clara
desconfianza en la enseñanza de la Iglesia y en Dios, añadiéndole una desconfianza al
Magisterio y a las Palabras de Nuestro Señor (Cfr. Mateo 16, 18).

27 Cfr.
Dicasterio para la Doctrina de la Fe (2023). Declaracion Fiducia Supplicans sobre el sentido pastoral
de las bendiciones. Editorial Vaticana, n. 39
 9

Aún así, no podemos permitirnos llegar al punto de, por esta Declaración, insultar al Papa
o incluso tentarnos con salirnos de la Iglesia. Esto es lo que está produciendo los movimientos
“tradicionalistas” dentro de la Iglesia: una tentación cada vez más fuerte de apostasía. Lo
podemos comprobar con solamente entrar en un canal que sigue este contenido
“tradicionalista” y notar que los comentarios dicen cosas tales como: “el Papa necesita de
conversión”, “¡ojalá el Papa se arrepiente, para que no arda en el infierno!”, “¡ya quiero que
el Papa se muera para que se acabe este pontificado!”, “esta Iglesia no puede ser la verdadera”
o “Francisco no es el verdadero Papa, porque cometió herejía. Bergoglio es un hereje”.
Lamentable situación es esta que producen este tipo de movimientos eclesiales, los cuales
solamente promueven una visión extremista de la situación de la Iglesia.
Hay que tener algo claro: si una persona se sale de la Iglesia solo porque el Papa dijo algo
que no le gustó, en el fondo, no seguía a Cristo, sino al Papa. La Iglesia no es del Papa, la
Iglesia es de Cristo; y si nos tentamos en cometer apostasía solamente porque el Papa cometió
un error, entonces nuestra estadía en la Iglesia solamente le estaba haciendo daño a esta
última. Los católicos seguimos a Cristo y, aún con todo lo que pueda pasar, sabemos que la
Iglesia es la que va a permanecer, puesto que “las puertas del infierno no prevalecerán contra
ella” (Mateo 16, 18). Esta promesa del Señor, que últimamente se nos ha olvidado, resuena
hoy más que nunca. La Iglesia siempre será la de Cristo, a pesar de. La Iglesia siempre será
la única santa, a pesar de las equivocaciones de su mayor representante.
Claro está, porque tampoco quiero sostener la posición de que el Papa hace todo bien y no
se equivoca en nada. Esa papolatría que también le hace daño a la Iglesia no permite la
perfecta comunión entre los miembros del Cuerpo Místico de Cristo. El Papa se equivoca, sí;
en temas de fe y de moral —hablando expresamente—, no.
Con todo, tampoco podemos adoptar la posición que sostiene el continuo progreso de la
Iglesia. Los que la adoptan argumentan que la Iglesia debería tener una mayor “apertura” al
mundo, para no quedarse atrás, teniendo en cuenta los avances de la sociedad. Por esto
mismo, debería dejar de anunciar lo políticamente incorrecto, esto es, el carácter homicida
del aborto, la condición pecaminosa de la homosexualidad, entre otras cosas. Esta posición
claramente olvida lo que Nuestro Señor le encomendó a la Iglesia de evangelizarlo a Él.
«Evangelizar es la misión fundamental de la Iglesia, pues el mismo Cristo quiso que así
fuera»28. Así las cosas, también es de recordar que Nuestro Señor quiso que no fuéramos del
mundo, por esto nos prometió persecuciones y burlas, en tanto nosotros remábamos en contra
de la corriente del mundo. Pues bien, a la hora de enfrentarse al mundo entendido como
ambiente de pecado, la Iglesia no puede más que rechazarlo y hacer lo contrario a él. Sin
embargo, no olvidando que se odia al pecado, pero se ama al pecador.
Los que argumentan que esta Declaración aprueba la homosexualidad o no han leído el
documento o su comprensión lectora está por el suelo, puesto que la Iglesia en ningún
momento ha aprobado la conducta homosexual en esta Declaración (sin embargo, tampoco
la ha rechazado: he ahí otra ambigüedad). Antes bien, en virtud de lo expuesto en la

28 Bedoya, S. (2024). La Madre de las Almas, p. 33

 10

introducción del mismo, la Iglesia sigue insistiendo en el carácter pecaminoso de la

homosexualidad.
Para aquellos que estamos preocupados por el futuro de la Iglesia, tengo un mensaje. No
podemos llegar a atacar al Papa y a criticarlo, e incluso a insultarlo por lo que ha provocado
esta Declaración. Recordemos que el Papa «es el principio y fundamento perpetuo y visible
de unidad, tanto de los obispos, como de la muchedumbre de los fieles» 29; además, que al
magisterio auténtico del Romano Pontífice le debemos una sumisión voluntaria, aunque no
se hable en ex cathedra30. Esa corriente que se ha generado —y que ha venido tomando
fuerza desde hace mucho dentro de la Iglesia— no es sana; parece que los que se dedican a
ese tipo de contenido se mantienen expectantes de alguna equivocación que pueda cometer
el Santo Padre para salir, grabar y generar polémica a través de eso, no importando la unidad
que la Iglesia debe mantener, sobre todo en los momentos oscuros. Esa unidad que fue tan
querida por Nuestro Señor (Cfr. Juan 17, 21) hoy se ve afectada por la constante batalla entre
estos dos polos opuestos en la Iglesia. Gracias a esta polarización, se puede apreciar por qué
la publicación de, por ejemplo, Traditiones Custodes. La unidad que hoy estamos perdiendo
es requisito indispensable de la Iglesia de Cristo, tanto que si todos no fuéramos uno como
el Hijo y el Padre son Uno, entonces el mundo no creería que Cristo fue el enviado. Y eso es
lo que, precisamente, ha pasado: el mundo se cansó de presenciar las peleas internas de la
Iglesia, se cansó de presenciar su falta de unidad, teniendo en cuenta que esta lo presume.
La invitación es, pues, a que volvamos a la unidad tan anhelada en estos momentos. No
nos dividamos por la decisión de un Pontífice acerca de un tema “x”. Claramente, con esto
no quiero decir que no podemos opinar acerca del pontificado; claro que podemos formar un
criterio acerca de lo que acontece en la Iglesia, claro que podemos denunciar cuando se
cometa algún error, mas siempre teniendo en cuenta el principio que, como católicos, nos
exige unidad con el Sumo Pontífice, respetando su persona y su cargo.
Por tanto, dejemos de decir que el Papa Francisco no es el verdadero Papa. Esta posición,
además de ser teológicamente imposible, puesto que se cumplieron los requisitos para la
validez de la elección, es una clara apostasía de la Iglesia y una falta de respeto hacia Su
Santidad. No estar de acuerdo con el pontificado del Papa Francisco, no significa que este
sea un embuchador; y, si las malas acciones del pontífice determinan su validez en el
pontificado, entonces la Iglesia habría desaparecido hace tiempo. Hay que tener en cuenta
que Nuestro Señor no instituyó el papado con el fin de que sirviera como modelo de santidad
—¡ojalá fuera así! —, sino que lo hizo con el fin de salvaguardar la fe.
«Por esto mismo, el Papa no actúa como un revelador de una nueva doctrina, sino solamente
como preservador y transmisor de la doctrina que nos dejó Cristo, de tal manera que esta quede
incólume e inmaculada»31.

29 Concilio Vaticano II(1964). Constitucion Dogmatica Lumen Gentium sobre la Iglesia. Editorial Vaticana,
n. 23
30 Cfr. Concilio Vaticano II (1964). Constitucion Dogmatica Lumen Gentium sobre la Iglesia. Editorial

Vaticana, n. 25
31 Bedoya, S. (2024). La Madre de las Almas, p. 126
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La reciente Declaración, si bien la considera desafortunado por todos los motivos que
expuse en su momento, no puede ser motivo de división, ni mucho menos de apostasía. Lo
que tenemos que hacer acá es tomar la posición del verdadero católico: orar, orar y orar. Esto
es lo que debemos hacer. Oremos por el Papa Francisco, para que el Señor lo auxilie en estos
momentos tan oscuros para la Iglesia; oremos por todos los obispos, para que su misión de
acompañar al pueblo de Dios sea efectuada de la mejor manera; oremos por todos los
sacerdotes, para que puedan ejercer su ministerio sin ningún tipo de problema.
Finalmente, quiero reiterar que la Declaración, aunque tuvo una intención muy buena —
como fue la de abrir las puertas de la Iglesia, maestra y madre, a los homosexuales—, puede
prestarse para confusiones. Puesto que, en efecto, se pueden tomar dos interpretaciones
erradas de esta Declaración: aquella que pretende que la Iglesia cambió su visión sobre la
homosexualidad y aquella que pretende que el Papa ha cometido herejía al publicar esa
Declaración. Ni la Iglesia ha cambiado su posición, ni el Papa ha cometido herejía —
primeramente, puesto que ni siquiera atentó contra un dogma de fe—. Y, si bien queremos
menos ambigüedad en los documentos, hemos de esperar, porque más no podemos hacer. Por
tanto, dejémonos de todas esas polémicas y miremos a Cristo. Solamente en Él encontrará la
fuerza la Iglesia de seguir adelante, a pesar de todos sus problemas. Solamente mirándolo a
Él comprenderá que «la salvación de las almas debe ser siempre la ley suprema de la
Iglesia»32.

Samuel Bedoya Arboleda

32 Iglesia Catolica (1997). Codigo de Derecho Canonico. Editorial Vaticana, can. 1752