Contextualización y Nociones de Inmanuel Kant
Contextualización y Nociones de Inmanuel Kant
Contextualización y Nociones de Inmanuel Kant
Kant, I., Crítica de la razón pura, prólogo segunda edición, de B XIV, línea 8, B XVIII, línea 11 (trad. P.
Ribas, Madrid, Alfaguara, 1989, pp. 19-21).
Para entender el texto que hemos comentado, es necesario enmarcarlo en dos contextos: uno,
ceñido al propio autor y sus obras; el otro, más amplio, atiende a su época y a la historia de la filosofía.
La vida de Kant, desde el punto de vista externo, es una vida “aburrida”. Apenas salió de
Königsberg, donde nació y murió. Rechazó puestos académicos, políticos y honores, que le hubieran
dado fama y dinero, pero distraído de su investigación. No obstante, no descuidó las polémicas teoréticas
y prácticas de su época y siempre tuvo máximo interés por todos los acontecimiento históricos en que
vivió. Kant recibió una educación clásica y severa , y en filosofía fue discípulo de Albert Schulz, una gran
figura del racionalismo. Tras varios años de docencia precaria, ganó la cátedra de Lógica y Metafísica
gracias a su Disertación sobre la forma y principios del mundo sensible y del inteligible . Esto le dio, por fin, el tiempo
que necesitaba para trabajar en sus grandes obras.
b) Periodo crítico. En 1770 Kant deja de publicar y dedica 11 años a la redacción de su obra fundamental.
En 1781 publica la primera edición de la Crítica de la razón pura. Esta es indudablemente su obra cumbre
y con ella comienza su periodo crítico. Como esta primera edición pasó inadvertida, en 1783 publicó un
resumen: Prolegómenos a toda metafísica futura, que sí tuvo éxito, y ya en 1787 publicó la segunda edición de
la Crítica de la razón pura. Otras obras son Fundamentación de la metafísica de las costumbres (1785), Crítica de la
razón práctica (1788), Crítica del juicio (1790), La religión dentro de los límites de la razón (1793) y Opus postumum
(publicado en 1820). Entre sus obras de filosofía política, destaca A la paz perpetua.
Por último, mencionemos la influencia de Kant en la historia. El influjo de este pensador
ha sido enorme, no solo en filosofía, sino también en muchos ámbitos del pensamiento. Para muchos,
Immanuel Kant es el pensador más influyente de la modernidad. Las principales corrientes filosóficas de
los siglos XIX y XX serán deudoras del pensamiento kantiano. En concreto, el idealismo alemán del siglo
XIX y el movimiento neokantiano con sus dos escuelas, Marburgo y Baden. También en filosofía de la
ciencia el pensamiento de kant tuvo una gran relevancia con el concepto de fenómeno. Respecto a la ética
y política tenemos que destacar que la importancia de Kant en el siglo XX ha sido enorme ya que han
asumido la centralidad de la dignidad de la persona. La doctrina de los derechos humanos tiene una clara
raíz Kantiana.
Por último, es importante señalar que en sociología ha influido en autores de gran relieve como Max
Weber.
A) Metafísica y ciencia
La relación entre metafísica y ciencia es el tema central de la Crítica de la razón pura: la metafísica
aún no es ciencia y la gran tarea es conseguir constituirla en ciencia.
Kant advierte la incompatibilidad entre la metafísica racionalista y la física empírica de Newton. Además,
la lectura de Hume le hacen abandonar las posiciones racionalistas.
Esto hace que Kant se plantee uno de los problemas centrales de su filosofía: qué podemos saber, que, junto
a qué debemos hacer y qué podemos esperar, resume toda la temática de su filosofía. De este modo, nace la
cuestión de los límites del conocimiento humano. Kant comienza afirmando que hay un conocimiento
riguroso: la ciencia. Por el contrario, la metafísica no ha conseguido constituirse en ciencia ya que no se
observa en ella progresos ni obtiene consensos. Esto plantea el problema capital de la metafísica.
Este problema no es una mera cuestión técnica, sino que afecta a todo el conocimiento humano
y a los intereses más profundos de la razón. Kant define a la metafísica como el “conocimiento especulativo
de la razón, completamente aislado, que se levanta enteramente por encima de lo que enseña la experiencia, con meros
conceptos”.
Las dos soluciones de su época, el racionalismo y el empirismo no habían sido suficientes. El
racionalismo no hacía una crítica de la razón, sino que admitía ideas innatas y se dedicaba a analizarlas;
pero se trataba de análisis y deducciones en vacío, que no alcanzaban la realidad. Por otro lado, el
empirismo de Hume era insuficiente, pues al negar la causalidad impedía la construcción de toda la ciencia
empírica. Por el contrario, Kant pensaba que la física de Newton ya estaba constituida en ciencia.
Rechazados el racionalismo y el empirismo, Kant busca un nuevo método para constituir la metafísica en
ciencia: la crítica. El método crítico consiste en investigar las condiciones del conocimiento y de la ciencia.
De este modo, si conocemos sus condiciones, podremos saber si la metafísica puede cumplirlas y, si es
así, constituir a la metafísica en ciencia. Cuando ha realizado esta tarea crítica, Kant se da cuenta de que
ha conseguido un saber propedéutico a toda ciencia. Es decir, Kant que se da cuenta que no toda la
metafísica, sino solo la general, puede convertirse –y se ha convertido– en ciencia gracias a su obra.
Ahora bien, respecto al estudio de los tres objetos de la metafísica propiamente dicha, es decir, al estudio
de Dios, alma y mundo, resulta que la crítica kantiana demuestra que tal estudio es imposible: no hay
intuición sensible de Dios, del alma o del mundo.
En resumen, forma y materia, a priori y a posteriori, son los dos elementos constitutivos de los objetos
de conocimientos y juicios científicos.
Preguntas semi-abiertas:
2. ¿Seguiría existiendo la metafísica aunque hubiera un abismo de una barbarie que lo aniquilara
todo?
Sí.
4. ¿Qué ha provocado que la matemática y la ciencia natural sean elevadas al concepto de ciencias?
Una revolución repentinamente producida.
7. ¿El entendimiento posee unas reglas que yo debo suponer en mí? ¿Cómo son estas reglas?
Las reglas del entendimiento se expresan en conceptos a priori a los que se conforman
necesariamente todos los objetos de la experiencia.