Pensamiento Unisinu Ensayo
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DERECHO-DIUERNO
PRIMER SEMESTR CORTE #2
2022
CONOCE A TU PROGRAMA PROYECTO EDUCATIVO DEL PROGRAMA.
En este ensayo me nace brindar los conceptos de diferentes términos tales como:
Axiología y Deontología. Comenzaremos definiendo que es la axiología, la axiología es
una disciplina filosófica que estudia los valores de las cosas y la deontología, parte de la
ética que trata de los deberes y principios que afectan a una profesión.
Para ellos tenemos en cuenta que tratamos temas que son parte fundamental de la
historia y la comunidad unisinuana. Dentro de las bases principales de un estudiante y/o
docente de la comunidad, está la moral, la cual se dice que no se encuentra desligada o
que tiene poca relación con el derecho, porque al incurrir en el derecho siempre tratara de
buscar la justicia (que por cierto es una de los valores o virtudes que caracterizan a
nuestra comunidad universitaria, inclusive el cuerpo de docentes y demás empleados)
como su valor máximo, como ese camino por el cual debe conducirse en el derecho.
Aunque no podemos hablar de moral cuando aún no conocemos su concepto, razón por
la cual lo definiremos a continuación y que es para Cortina y Martinez (1996).
La moral se conoce como un conjunto de normas, valores y creencias existentes y
aceptadas en una sociedad que sirven de modelo de conducta y valoración para
establecer lo que está bien o está mal. En pocas palabras conocemos la moral como
término del derecho, IUSNATURALISMO.
¿Cómo definen la moral Cortina y Martinez?
La moral para los autores mencionados anteriormente es el conjunto de principios,
mandatos, patrones de conducta, valores, permisos e ideales que conforman un sistema
colectivo concreto en determinada época histórica. Por otra parte, estos también recalcan
que en diversas situaciones entre hacer triunfar lo justo o satisfacer a su futuro cliente,
podrá surgir a un dilema, ese dilema se presentará según el grado de claridad sobre los
conceptos de justicia, responsabilidad, integridad, identidad, sabiduría y libertad que se
tenga.
Es de vital importancia estar siempre con la mirada puesta en el compromiso que
tenemos o que se tiene como seres humanos lo cual recae directamente en la formación
de ciudadanos y futuros profesionales de nuestra nación.
Hay una frase muy coherente, la cual es, “No es posible encontrar un corrupto
ciudadano que sea, a su vez, un ejemplar profesional; como tampoco es posible
imaginar un correcto abogado que sea un deshonesto ciudadano” citada por
chinchilla.
Esta frase nos da a entender la importancia de lo que es la moral o nuestra filosofía de
vida, pues cada acto recae en nuestra conciencia, tenemos muy en claro que una persona
estudiada se rodea de buenos valores y excelente forma de pensar ante cualquier acto, e
independientemente del grado de estudio, todo varía según tu conveniencia, pero al ser
una persona justa, haces lo correcto, te convenga o no.
Lo que posteriormente nos permite el desarrollo del ETHOS, lo cual sirve para la
construcción de la sociedad. Es aquí donde se abre una nueva incógnita, ¿Qué es el
ethos?
¿QUE ES EL ETHOS?
El ethos es la forma común de vida o de comportamiento que adopta un grupo de
individuos que pertenecen a una misma sociedad. En pocas palabras lo que quiere decir
el termino ethos es la predisposición para hacer el bien, lo que nosotros conocemos como
ética.
En esta medida todo estudiante de derecho ingresa a estudiar con el desarrollo de su
ethos cívico lo cual hace referencia a la libertad de conciencia, de pensamiento, de culto
religioso, entre otros… lo cual está asociado a los principios de solidaridad, tolerancia,
cooperación como eje fundamental que direcciona su relación con la comunidad política,
para posteriormente, alcanzar su ethos profesional, los cual refiere a que es concebido
como un sistema de disposición para resolver los problemas de orden socio moral que
surgen en el campo profesional. Como una suerte de “actitud” o “posición” respecto del
mundo y de sí mismo, y en consecuencia como expresión de un ethos único: EL MODO
DE SER PERSONA.
El ethos cívico y el ethos profesional son expresiones del único modo de ser persona,
debido a que el mismo sujeto es persona, profesional y ciudadano.
En la actualidad las necesidades tienden a exceder los recursos, se multiplican las voces
opositoras respecto a lo que contribuye el bien común (hace referencia a todo aquello que
beneficia una sociedad), el ritmo de vida impide la toma de decisiones bien ponderadas
(que actua de manera sutil, sin exageraciones ni apasionamiento) sobre los asuntos que
afectan a los demás; estas suelen ser arrojadas y producir daños sociales. (Lo anterior es
básicamente el pensamiento y/o concepto de Aguilar.
Como cierta configuración de este modo ser, es la relación o junción de un ethos
profesional con un ethos cívico; es la manera en que un futuro abogado encuentra en su
profesión un modo de limitarse su vocación de ser cada vez más humana, integrando a su
vez lo que hace en el contexto social en lo que realiza.
Ya que estamos hablando de ethos cívicos y profesionales, es necesario tratar el tema,
“elaboración de autores”.
El estudiante de derecho dentro de su formación profesional reafirmara sus valores bajo
los preceptos axiológicos fundamentando los cuatro pilares éticos de la educación dado
por Delors, J. El cual expresamente señala:
Una nueva procreación más amplia de la educación debería llevar a cada estudiante de
derecho a descubrir, despertar e incrementar sus habilidades creativas, descubriendo así
el tesoro escondido en cada uno de nosotros. Lo cual nos lleva a obtener una visión
puramente instrumental de la educación, conocida como el camino para obtener
determinados resultados como; la experiencia práctica, adquisición de capacidades
diversas, fines de carácter económico), para considerar nuestra función en toda su
plenitud, a la realización del abogado, que todos aprender a ser.
Como estudiantes de derechos tenemos que conocer los cuatros saberes de la educación
Delors. Elaboración de autores.
1. Aprender a ser.
2. Aprender a vivir juntos.
3. Aprender a hacer.
4. Aprender a conocer.
La integridad: Es uno de los valores que caracteriza a los abogados, ya que para ejercer
su profesión deben inspirar confianza.
La integridad se conoce o se traduce como honradez, honestidad, respeto por los demás,
corrección, responsabilidad y entre otros valores. La integridad es la condición de una
persona u objeto de mantener todas sus partes. Esto no incluye solo lo físico, sino los
valores y convicciones.
También se reconoce como una cualidad humana que le da a quien posee la autoridad
para decidir y resolver por sí misma cuestiones vinculadas a su propio accionar. La
integridad moral está también aceptada como un concepto de orden jurídico y todas las
constituciones democráticas vigentes lo consagran como un derecho fundamental. Fue el
aporte de porto & Merino, 2012.
en conclusión, se puede decir que una persona íntegra es aquella en quien se puede
confiar.
La sabiduría: La sabiduría debe caracterizar a un buen abogado, pues a la hora de tomar
decisiones y el estudio de sus casos debe tener un buen entendimiento para un excelente
desarrollo de su trabajo.
La sabiduría se entiende como el carácter que se desarrolla con la aplicación de la
inteligencia en la experiencia propia, obteniendo conclusiones que nos dan un mayor
entendimiento, que a su vez nos capacitan para reflexionar, sacando conclusiones que
nos dan discernimiento de la verdad, lo bueno y lo malo.
La sabiduría también es referida a los principios y a aquellos que es demostrado a partir
de ellos, acerca de lo cual trata la ciencia. Participa del intelecto en tanto que se refiere a
los principios y participa de la ciencia en tanto que se refiere a cosas susceptibles de
demostración a partir de principios. De modo que es patente que la sabiduría está
formada de intelecto y de ciencia, de modo que se referirá a las mismas cosas a las que
se refieren el intelecto y la ciencia. Fue lo dicho por el famoso filosofo Aristóteles,
trad. en 2011
La sabiduría se relaciona con el ámbito de las técnicas; es la habilidad técnica de un arte
en particular; el hombre que mejor domina un arte es considerado sabio; por tanto, la
sophia se considera como la excelencia (arete) de un arte, el nivel más alto que se puede
alcanzar en el dominio de una técnica (Lo anterior fue dicho por; Zamora 2001).
Aristóteles nos dice que algunos hombres son considerados sabios en general y no en un
campo particular o en alguna calificada.
Tal como lo propugna el Proyecto Educativo Institucional la sabiduría se fundamenta en el
respeto de las leyes naturales, el cultivo del entendimiento y de la imaginación, el
desarrollo de la ciencia, el consejo, la prudencia (regla recta de la acción) y la fortaleza
(firmeza y constancia en el actuar), para actuar en consecuencia.
Como tal sabiduría es el conocimiento que tiene una persona respecto a un tema, o
diferentes temas.
La honestidad: Todo abogado debe ser honesto, pues como se mencionó anteriormente,
hay que ser justos, para un buen desempeño siempre hay que ser honestos,
independientemente la situación o beneficencia.
La honestidad se caracteriza como el valor que nos permite vivir una vida congruente, es
decir, que lo que pensamos, sentimos y hacemos está en sincronía. Una persona honesta
sabe diferenciar entre lo que está bien y mal y actúa con base en valores inclinados al
bien común.
La honestidad también se conoce como honor, dignidad, consideración de que uno goza;
es la virtud que caracteriza a las personas por el respeto a las buenas costumbres, a los
principios morales y a los bienes ajenos, dado como la acción constante de evitar
apropiarse de lo que no nos pertenece.
Zarate (2003), define el valor de la Honestidad como lo propio de la naturaleza humana,
que hace referencia a la verdad, sinceridad, etc. y que va más allá de no cometer actos de
hurto, pues la honestidad se asocia también a la preservación de los recursos sean
materiales o inmateriales, al decoro, a lo justo como a lo recto. Entonces “una persona
íntegra, que en su vida no da cabida a la dualidad, la falsedad, o el engaño.
De esta forma, la honestidad busca es armonizar las palabras con los hechos, es tener
identidad y coherencia para estar orgulloso de sí mismo. Este valor es de suma
importancia para mantener una buena convivencia dentro de la sociedad, ya que permite
dirigir todas las estrategias y acciones de las personas.
La formación moral de una persona se mide con este valor e implica una adecuada
comprensión de sí misma y de sus propias cualidades en la búsqueda de alcanzar la
transparencia en sus actos.
La honestidad en conclusión nos invita a ser transparentes ante cualquier situación,
llevando con madurez el caso y prepararnos para próximas consecuencias, ya sean
buenas o malas.
La Libertad: Como todo buen estudiante o abogado tenemos claros que somos libres
hasta cierto límite, y es que podemos gozar de nuestra libertad sin fastidiar o irrumpir la
tranquilidad de las demás personas.
La libertad es conocida como la posibilidad que tenemos las personas para tomar
nuestras propias decisiones y expresar nuestras ideas y sentimientos. En la vida cotidiana
se manifiesta de distintas maneras, por ejemplo: Elegir la vestimenta que nos pondremos.
Andar por los lugares públicos y realizar distintos recorridos (eso es libertad).
La libertad también es formación, la cual está fundamentada en la libre escuela y el
pluralismo filosófico, para respaldar un contexto donde la libertad de enseñanza,
aprendizaje, investigación y cátedra este dada de tal forma que se pueda. Expresamente
en el Proyecto Educativo Institucional, acorde a la filosofía que propugna la libertad del
hombre, es entendida como la capacidad de autodeterminación, permita el hombre el
ejercicio pleno de su libertad y responsabilidad con los demás y consigo mismo. En la
universidad se propugnan por el fortalecimiento de la autonomía personal y el ejercicio de
la autonomía consagrada en la constitución y la ley.
Dentro de la libertad el profesional del Derecho debe encontrarse en una posición de
Independencia total frente al dinero que recibe por la solución de un caso, del sueldo, de
la política, etc. Debe tener plena libertad y no estar sujeto a ningún tipo de circunstancia
que lo lleve a tomar el camino no tan acertado, desligarse completamente de lo demás
aplicando la confianza en sí mismo y agregándole el trabajo propio: la inteligencia, el
carácter y la conciencia que son insustituibles.
Cuando se buscan los conocimientos del letrado para que apoye su defensa, deposita un
grado de confianza en que será solo él quien realice mejor la labor que se le ha
encomendado. La formación del juicio, la palabra, el sistema de razones y el prestigio,
constituyen un conjunto de trabajos a los ojos de los demás y de la persona misma que
son indelegables.
En conclusión, de todo, los que nos deja como enseñanza, son los principios y valores
axiológicos del estudiante de derecho en el desarrollo de su ethos profesional, esto con el
fin de brindarnos una buena preparación y llegar a ser excelentes abogado, íntegros y
responsable a nuestra labor.
Porque a pesar de que en la sociedad se reconozcan solo como valores, para un abogado
en formación y uno profesional, se puede decir que son pilares esenciales para un buen
rendimiento de nuestro trabajo.