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ÍNDICE

Introducción ...……………………………………………………..…....... pág.


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Definición y Clasificación de los


Trastornos Alimenticios ……………………………………….…..…...... pág. 4

Diagnósticos y Características de la
Anorexia y Bulimia ................................................................….…...……. pág.
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 Anorexia Nerviosa
 Bulimia Nerviosa

Factores de Riesgo y Causas de


los Trastornos Alimenticios ……………….…….……..….…………...… pág.
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 Factores Individuales
 Factores Familiares
 Factores Sociales

Impacto de la Familia en
los Trastornos Alimenticios …………………………………………….... pág.
6
 Madre sobreprotectora
 Padre ausente o distante
 Hermanos Competitivos
 Familia sobrevalorando la apariencia física
 Comunicación deficiente

Influencia de las Redes Sociales


en los Trastornos Alimenticios ………………………………….……….. pág.
6

Estrategias de Prevención y Tratamiento ………………………….…… pág.


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Conclusión ………………………………………………………………... pág.
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Bibliografía …………………………………………………………….…. pág.


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INTRODUCCIÓN
Los trastornos alimenticios son una problemática que ha ido en aumento en las últimas
décadas, afectando a una población cada vez más joven. En particular, los adolescentes se han
convertido en un grupo de alto riesgo, debido a una serie de factores que incluyen la presión
social, los ideales de belleza impuestos por los medios de comunicación y el estrés asociado a
esta etapa de la vida.
La adolescencia es un período de cambios físicos y emocionales significativos. Durante esta
etapa, los jóvenes comienzan a formar su identidad y a definir su autoimagen. Sin embargo,
también es un momento en el que pueden surgir inseguridades y preocupaciones sobre la
apariencia física. En este contexto, los trastornos alimenticios pueden aparecer como una
forma de controlar o manejar estas inseguridades.
Los trastornos alimenticios más comunes en los adolescentes incluyen la anorexia nerviosa, la
bulimia nerviosa y el trastorno por atracón. Cada uno de estos trastornos tiene sus propias
características y consecuencias para la salud, pero todos comparten una preocupación
excesiva por el peso y la forma del cuerpo, así como comportamientos alimentarios dañinos.
En esta monografía, exploraremos en profundidad los trastornos alimenticios en los
adolescentes, analizando sus causas, síntomas, consecuencias y posibles tratamientos.
También discutiremos las estrategias de prevención y cómo podemos ayudar a los
adolescentes a desarrollar una relación saludable con la comida y su cuerpo.
Esperamos que esta investigación contribuya a un mayor entendimiento de los trastornos
alimenticios en los adolescentes y a la búsqueda de soluciones efectivas para este problema de
salud pública.

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DEFINICIÓN Y CLASIFICACIÓN DE
LOS TRASTORNOS ALIMENTICIOS
Los trastornos de la conducta alimentaria más comunes son la anorexia y la bulimia. La
anorexia nerviosa se caracteriza por el rechazo a mantener un peso corporal mínimo normal,
un miedo intenso a ganar peso y una alteración significativa en la percepción de la forma o
tamaño del cuerpo. Los individuos con anorexia suelen tener una dieta muy restrictiva o
realizar ejercicio físico excesivo para perder peso. Por otro lado, la bulimia nerviosa se
caracteriza por episodios cíclicos y recurrentes de atracones de comida, seguidos de
comportamientos compensatorios como vómitos autoinducidos, uso de laxantes o ejercicio
excesivo. A diferencia de la anorexia, las personas con bulimia no suelen perder peso
significativamente.
Estos trastornos alimentarios son más frecuentes en mujeres y suelen ser causados por una
combinación de factores individuales, familiares y presiones culturales para mantenerse
delgadas. Ambos trastornos pueden tener graves consecuencias para la salud mental y poner
en peligro la vida de quienes los padecen.

CRITERIOS DIAGNÓSTICOS Y CARACTERÍSTICAS DE LA


ANOREXIA Y LA BULIMIA
Anorexia Nerviosa:
 Rechazo a mantener el peso corporal mínimo normal.
 Miedo intenso a ganar peso.
 Alteración significativa de la percepción de la forma o tamaño del cuerpo.
 Pérdida de peso debido a una dieta restrictiva, ejercicio físico intenso o purgas.
 Deseo irrefrenable de alcanzar la delgadez a toda costa.

Bulimia Nerviosa:
 Ingestión episódica, desenfrenada y rápida de grandes cantidades de comida en un
tiempo corto (atraco).
 Sentimientos de malestar físico y emocional después de los atracones.
 Compensación inapropiada para evitar el aumento de peso, como vómitos
autoinducidos, uso de laxantes o ejercicio excesivo.

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 Preocupación excesiva por el peso y la forma corporal.
FACTORES DE RIESGO Y CAUSAS DE LOS
TRASTORNOS ALIMENTICIOS
Los factores individuales, familiares y sociales que pueden contribuir al desarrollo de los
trastornos alimenticios en adolescentes son los siguientes:
Factores individuales
 Baja autoestima y falta de confianza en sí mismo.
 Perfeccionismo y búsqueda de la perfección física.
 Presión social y cultural para cumplir con los estándares de belleza.
 Dificultades emocionales como la ansiedad, la depresión o el estrés.
 Baja autoimagen corporal y distorsión de la percepción del propio cuerpo.

Factores familiares
 Dinámicas familiares disfuncionales, como la falta de comunicación, la
sobreprotección o el conflicto constante.
 Historia de trastornos alimenticios en la familia.
 Presión familiar para mantener un determinado peso o apariencia física.
 Excesivo énfasis en la imagen y la apariencia física.
 Falta de apoyo emocional y afectivo por parte de la familia.

Factores sociales
 Influencia de los medios de comunicación y la publicidad, que promueven estándares
de belleza inalcanzables.
 Presión de los compañeros y el grupo de pares para cumplir con ciertos ideales de
belleza.
 Exposición a contenido relacionado con la imagen corporal y la dieta en las redes
sociales.
 Comparación constante con los demás a través de las redes sociales.
 Cultura que valora la delgadez extrema como símbolo de éxito y belleza.
Es importante tener en cuenta que estos factores no actúan de forma aislada, sino que
interactúan entre sí y pueden variar en cada caso. Además, no todos los adolescentes que
experimentan estos factores desarrollarán trastornos alimenticios, pero sí aumentan el riesgo
de su aparición.

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IMPACTO DE LA FAMILIA EN LOS
TRASTORNOS ALIMENTICIOS
Los posibles roles de los miembros de la familia que pueden influir en el desarrollo y
mantenimiento de los trastornos alimentarios son los siguientes:
Madre sobreprotectora: Una madre que sobreprotege a su hijo/a puede dificultar su proceso
de autonomía y desarrollo de una identidad propia, lo que puede contribuir a la aparición de
trastornos alimentarios.
Padre ausente o distante: La falta de una figura paterna presente y comprometida
emocionalmente puede generar inseguridad y baja autoestima en el adolescente, lo que
aumenta el riesgo de desarrollar trastornos alimentarios.
Hermanos competitivos: La presencia de hermanos que constantemente compiten entre sí
puede generar un ambiente de presión y comparación, lo que puede contribuir al desarrollo de
trastornos alimentarios.
Familia sobrevalorando la apariencia física: Una familia que enfatiza excesivamente la
importancia de la apariencia física puede generar una presión adicional sobre el adolescente
para mantener un cuerpo delgado, lo que aumenta el riesgo de desarrollar trastornos
alimentarios.
Comunicación deficiente: Una comunicación poco abierta y honesta dentro de la familia
puede dificultar la expresión de emociones y dificultades, lo que puede contribuir al
desarrollo de trastornos alimentarios.

INFLUENCIA DE LAS REDES SOCIALES EN LOS


TRASTORNOS ALIMENTICIOS
En las redes sociales, se suelen mostrar imágenes y mensajes que promueven un ideal de
belleza inalcanzable y poco realista. Los adolescentes pueden compararse con estas imágenes
y sentirse insatisfechos con su propio cuerpo.
La presión social, en las redes sociales, los adolescentes pueden sentir la presión de encajar en
ciertos estándares de belleza y popularidad. Esto puede llevarlos a adoptar comportamientos
dañinos para su salud, como seguir dietas extremas o someterse a cirugías estéticas.

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Las redes sociales fomentan la comparación constante entre los usuarios. Los adolescentes
pueden comparar su apariencia física con la de otros, lo que puede generar sentimientos de
inferioridad y baja autoestima.
En las redes sociales, también se pueden encontrar contenidos que promueven trastornos
alimenticios o que ridiculizan ciertos tipos de cuerpos. Esto puede influir negativamente en la
percepción del cuerpo y la imagen corporal de los adolescentes.
En resumen, las redes sociales pueden afectar la percepción del cuerpo y la imagen corporal
de los adolescentes al promover estándares de belleza inalcanzables, generar presión social,
fomentar la comparación constante y exponer a contenido negativo relacionado con la
apariencia física.

ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO


Los enfoques de prevención y detección temprana de los trastornos alimenticios en
adolescentes incluyen:
Educación y concientización: Es fundamental brindar información sobre los trastornos
alimenticios, sus causas, consecuencias y cómo identificar los signos de alerta. Esto puede
realizarse a través de charlas en escuelas, talleres para padres y adolescentes, y campañas de
sensibilización en los medios de comunicación.

Promoción de una imagen corporal positiva: Se debe fomentar una actitud saludable hacia
el cuerpo y promover la aceptación de la diversidad de tamaños y formas corporales. Esto
implica evitar comentarios negativos sobre el peso o la apariencia física, y enfocarse en la
importancia de una alimentación equilibrada y la práctica de ejercicio físico como parte de un
estilo de vida saludable.

Fortalecimiento de habilidades emocionales y de afrontamiento: Es importante enseñar a


los adolescentes a manejar el estrés, las emociones negativas y las presiones sociales de
manera saludable. Esto puede incluir el desarrollo de habilidades de comunicación, resolución
de conflictos y autoestima.

Monitoreo de la exposición a los medios de comunicación y las redes sociales: Los padres
y educadores deben supervisar el acceso de los adolescentes a contenidos relacionados con la

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imagen corporal y los trastornos alimenticios en internet y las redes sociales. Es importante
promover un uso responsable y crítico de estos medios, y fomentar la discusión abierta sobre
los mensajes que reciben.
Detección temprana y atención profesional: Los profesionales de la salud, como médicos,
psicólogos y nutricionistas, deben estar capacitados para identificar los signos y síntomas de
los trastornos alimenticios en etapas tempranas. Esto permitirá brindar una intervención
oportuna y adecuada, involucrando a la familia y ofreciendo un tratamiento integral.
Las intervenciones terapéuticas y los recursos disponibles para el tratamiento de los trastornos
alimentarios incluyen:

Intervenciones Terapéuticas Y Los Recursos Para El Tratamiento De Estos Trastornos


Terapia cognitivo-conductual (TCC): Es una forma de terapia que se enfoca en identificar y
cambiar los pensamientos y comportamientos negativos asociados con los trastornos
alimentarios. Ayuda a los pacientes a desarrollar habilidades para manejar la ansiedad,
mejorar la imagen corporal y establecer patrones de alimentación saludables.
Terapia familiar: La participación de la familia es crucial en el tratamiento de los trastornos
alimentarios, ya que pueden desempeñar un papel importante en el apoyo emocional y en la
promoción de un ambiente de recuperación. La terapia familiar se centra en mejorar la
comunicación, resolver conflictos y promover la comprensión y el apoyo mutuo.
Terapia nutricional: Los trastornos alimentarios requieren una atención especializada en la
nutrición. Los nutricionistas o dietistas trabajan con los pacientes para desarrollar planes de
alimentación equilibrados y saludables, educar sobre la importancia de una nutrición
adecuada y ayudar a establecer una relación saludable con la comida.
Apoyo psicosocial: Los grupos de apoyo y las comunidades terapéuticas pueden ser recursos
valiosos para los pacientes con trastornos alimentarios. Estos entornos ofrecen un espacio
seguro para compartir experiencias, recibir apoyo emocional y aprender de otros que están
pasando por situaciones similares.
Medicación: En algunos casos, los medicamentos pueden ser utilizados como parte del
tratamiento de los trastornos alimentarios. Los antidepresivos y los estabilizadores del estado
de ánimo pueden ser recetados para tratar los síntomas de depresión y ansiedad asociados con
los trastornos alimentarios.
Es importante destacar que el tratamiento de los trastornos alimentarios debe ser
individualizado y adaptado a las necesidades específicas de cada paciente. La colaboración

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entre profesionales de la salud mental, nutricionistas y médicos es fundamental para brindar
una atención integral y efectiva.

CONCLUSIÓN
Como conclusión sobre los trastornos alimenticios en los adolescentes es que estos trastornos
representan un grave problema de salud pública, especialmente en las mujeres jóvenes. Existe
una presión social por estar delgado que contribuye a que los adolescentes acepten o rechacen
su imagen corporal y comiencen dietas sin control y supervisión adecuada. La familia y las
dinámicas familiares juegan un papel importante en el desarrollo y resultado de los trastornos
alimenticios. Es fundamental que los padres estén conscientes de los riesgos de internet y
regulen el acceso de sus hijos a sitios peligrosos. Fomentar una actitud crítica sobre el peso
adecuado y una dieta equilibrada es una forma de prevenir estos trastornos.

BIBLIOGRAFÍA
BUENDÍA, J. (1996). Psicopatología en niños y adolescentes. Desarrollos actuales. Madrid:
Pirámide.
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LUGLI Z., VIVAS E., (2001), “Trastornos de alimentación y control personal de la conducta”, Salud
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RAUSCH C., BAY L., (1997), Anorexia nerviosa y bulimia, Buenos Aires, Paidós.
RODRÍGUEZ AM, MARTÍNEZ JM, NOVALBOS JP, RUIZ MA, JIMÉNEZ D. Ejercicio físico y hábitos
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