Arte Contemoporaneo
Arte Contemoporaneo
Arte Contemoporaneo
Te explicamos qué es el arte contemporáneo, sus características y cómo son sus estilos.
Además, su relación con el arte moderno.
Esta dificultad para definir el arte contemporáneo tiene que ver con la misma palabra
«contemporáneo», que hace alusión a un presente muy difícil de fijar en la línea de tiempo
de la historia, y también se debe al hecho de que en el campo de las artes se utiliza una
periodización propia, que no siempre coincide con la empleada por los historiadores.
Así, para algunos lo moderno es propio del siglo XIX y primera mitad del XX, dejando lo
contemporáneo para finales del XX e inicios del XXI. Pero no existe consenso al respecto,
pues en el fondo se trata de delimitaciones estéticas y no cronológicas.
El arte contemporáneo, entonces, tendría que definirse a partir de ciertos rasgos estéticos y
ciertas preocupaciones filosóficas, muchas de las cuales, sin embargo, ya estaban
presentes en el arte moderno, o al menos en el período de mediados y finales del siglo XIX.
Por eso algunos prefieren incluso utilizar el término “postmoderno” para referirse a lo
estrictamente contemporáneo.
En todo caso, el arte contemporáneo es una categoría amplia y complicada que engloba las
manifestaciones artísticas y los estilos artísticos más recientes de la humanidad, y es propio
de la sociedad industrial y postindustrial (o digital).
Tanto la sociedad a la cual refleja como este arte han presentado grandes cambios respecto
de las etapas históricas anteriores, que apuntan a una continua y sostenida exploración de
ciertas preguntas fundamentales, como ¿qué cosa es el arte?
Según algunas clasificaciones, abarca las tendencias artísticas desde inicios del siglo XX
hasta hoy. Otras, en cambio, consideran como contemporáneas sólo las posteriores a 1960.
La experimentación y lo nuevo son un valor en sí mismo, sobre todo en lo que a nuevas
técnicas y nuevos materiales se refiere, lo cual incluye hacia finales del siglo XX la aparición
del arte digital y el aprovechamiento de las nuevas tecnologías.
Se resignifican muchos de los elementos centrales de la tradición artística, a menudo de
manera irónica.
Se abandona lo figurativo y se abraza la abstracción, la figura geométrica, la línea y el caos
como métodos expresivos posibles.
La reflexión sobre la naturaleza del arte y del artista es constante, y eso abarca también los
espacios de legitimación como museos, instituciones, etc.
Se cruzan las fronteras entre géneros, apuntando a un arte híbrido, mestizo, indeterminado.
Fauvismo o Fovismo. Fue un movimiento pictórico originado en Francia entre 1904 y 1908,
cuyo nombre responde a la voz francesa fauve, “fiero”. Ello hacía alusión a la paleta de
colores tan provocativa de sus pintores, que rompía con lo acostumbrado y se atrevía a
incursionar en tonos poco fieles a lo real. Se considera a Henri Matisse (1869-1954), André
Derain (1880-1954) y Maurice de Vlaminck (1876-1958) como sus fundadores y autores
más importantes.
Cubismo. El cubismo surgió en Europa entre 1907 y 1924, y se considera una tendencia
fundacional, de vital importancia para el surgimiento de las vanguardias del siglo XX.
Consistió en una verdadera ruptura con la pintura tradicional, que se atrevió a romper con la
perspectiva realista, inaugurando en cambio una perspectiva propia, subjetiva, de las cosas.
Los padres del cubismo fueron Pablo Picasso (1881-1973) y Georges Braque (1882-1963),
pero a ellos se sumaron otros grandes pintores europeos de la época, así como el poeta y
crítico de arte francés Guillaume Apollinaire (1880-1918).
Surrealismo. Uno de los grandes movimientos culturales de la Europa del siglo XX, cuyo
precepto fundamental era alejarse de la razón y de la objetividad para abordar el mundo del
inconsciente freudiano: los sueños, las alucinaciones y las fantasías. El movimiento
surrealista comenzó formalmente cuando el poeta francés André Bretón (1896-1966)
publicó en 1924 el Manifiesto surrealista en París, ciudad que fue el eje del movimiento en
su expansión por el mundo entero, incursionando en pintura, escultura, literatura e incluso el
cine. El movimiento contó con numerosísimos seguidores de distintas nacionalidades, entre
los que destacaron el propio Bretón, Salvador Dalí (1904-1989), René Magritte (1898-1967),
Marcel Duchamp (1887-1968), Jean Arp (1887-1966), Luis Buñuel (1900-1983), entre
muchos otros.
Expresionismo. Otro de los grandes movimientos artísticos del siglo XX, nacido a inicios de
siglo en Alemania, al mismo tiempo que el fauvismo francés. Su campo inicial fue la pintura,
pero luego se extendió por otras artes como la literatura, la escultura, la música, la danza, el
teatro y el cine, siempre bajo la premisa de oponerse al impresionismo y a su concepción
racional, objetiva, del arte. El expresionismo valoraba la interioridad del artista ante todo, y
deformaba la realidad en la obra para adaptarla a la expresión de esa subjetividad, a
menudo a través de escenarios oníricos, desolados y de cierta amargura, propios del
período de la Alemania prebélica. No se trató, sin embargo, de un movimiento homogéneo,
así que sus rasgos estilísticos mutaron mucho a lo largo del tiempo, aunque se conservó su
premisa filosófica. Algunos de sus típicos exponentes fueron los pintores Evard Munch
(1863-1944), Vasili Kandinski (1866-1944), Paul Klee (1879-1940), Egon Schiele
(1890-1918), Amedeo Modigliani (1884-1920) y Marc Chagall (1887-1985), junto a
escritores como Franz Kafka (1883-1924) y Bertoldt Brecht (1898-1956), o músicos como
Arnold Schönberg (1874-1951), por citar sólo algunos.
Expresionismo abstracto. Movimiento pictórico nacido en los Estados Unidos en los años de
1940, fruto de la migración de muchos artistas surrealistas europeos al nuevo continente.
Abandonando el figurativismo a favor de la abstracción, este movimiento empleó colores
primarios y un enfoque minimalista, a la vez que trazos violentos. Sus inicios estuvieron muy
marcados por su herencia europea, de la mano de su pionero el armenio Arshile Gorky
(1904-1948), exiliado en Nueva York, pero pronto se convirtió en el primer movimiento
propiamente estadounidense dentro de la pintura abstracta, cuyos máximos exponentes son
los célebres Jackson Pollock (1912-1956) o Mark Rothko (1903-1970).
Pop art. El “arte pop” nació como una reacción al expresionismo abstracto y una
continuación no irónica y menos destructiva del movimiento dadá. Sus inicios tuvieron lugar
en 1950 en el Reino Unido y a comienzos de 1960 en los Estados Unidos, y su postulado
esencial era la reunificación de arte y vida, a través del enfriamiento de las emociones. Para
ello, acudió a la superficialidad aparente de la cultura de masas, y a los diseños repetidos,
de línea bien definida, así como a la representación y utilización de objetos de consumo
cotidiano, como las famosas latas de sopa Campbell de Andy Warhol (1928-1987), quizá su
exponente más conocido. Fue un movimiento cercano a la publicidad y hasta cierto punto
eufórico, que se considera hoy propio del auge del capitalismo en Occidente durante la
Guerra Fría. Otros nombres importantes fueron los de Robert Rauschenberg (1925-2008) y
Roy Lichtenstein (1923-1997).
Arte cinético. Como su nombre lo indica, el arte cinético intenta incorporar el movimiento a
la obra de arte, como en pinturas y sobre todo esculturas. Este movimiento puede ser real
(mecánico, eléctrico, magnético, por viento, etc.) o figurado, y puede o no contar con la
participación del espectador, a través del accionar de un interruptor o de penetrar en la obra
misma. La mayoría de sus obras, de hecho, eran tridimensionales, y se produjeron entre las
décadas de 1960 y 1970, teniendo como epicentro París y los Estados Unidos. Hubo
importantes representantes latinoamericanos en esta vertiente artística, como el argentino
Julio Leparc (1928-) o los venezolanos Jesús Soto (1923-2005) y Carlos Cruz Diez
(1923-2019).
Arte conceptual. El arte conceptual se debe entender como una propuesta artística en la
que la idea o el concepto es mucho más importante que la obra misma, al menos en tanto
objeto físico o material. Así, el arte se reduce a la expresión de lo mental indiferente a la
técnica, sin necesidad de un soporte físico duradero, más allá del texto y la fotografía.
Surgió en los años de 1960 en Estados Unidos y el Reino Unido, pero tuvo importantes
representantes europeos, como el grupo alemán FLUXUS, o la japonesa Yoko Ono (1933-).
En este movimiento tienen cabida desde performances y formas del arte efímero, hasta
instalaciones, esculturas y grabaciones audiovisuales.
Arte moderno
Como hemos dicho antes, la distinción entre el arte moderno y el arte contemporáneo es
siempre problemática, a punto de que para algunos autores ni siquiera existe.
Los dos términos suelen usarse de manera indistinta, o a veces estableciendo divisiones
más o menos arbitrarias a partir de la mitad del siglo XX, dejando lo moderno como aquello
que abarca desde finales del siglo XV hasta finales del XVIII, o también desde finales del
siglo XVIII hasta mediados del XX. No existe un criterio único en la materia.
En todo caso, el arte moderno se considera una ruptura importante respecto de la tradición
heredada del Medioevo occidental, alejándose de la imitación de la naturaleza y del
figurativismo para emprender caminos más abstractos y retadores, reinventando la
perspectiva y el punto de vista, además de incorporar nuevas técnicas y nuevos materiales
que trajo consigo la Revolución Industrial.
El teórico del arte Jacob Burckhardt, entendía el arte y las demás producciones humanas
como un eslabón de la historia de la cultura. Sosteniendo que el arte de cada periodo es la
más completa expresión del espíritu en el que se produce, no ajeno a la religión, el estado o
los intereses del capital. Todo influye en sus manifestaciones siendo así co-responsable del
desarrollo de la propia historia.
Bajo ésta óptica, el arte contemporáneo y sus distintas expresiones son fiel reflejo de lo que
vive la sociedad actual. El panorama muestra una gran diversidad y comprende un conjunto
muy heterogéneo de prácticas artísticas, así como diferentes abordajes a la hora de acotar
el período que comprende. Entender el arte contemporáneo es entender conflictos,
realidades y sociedades. Conocer el arte nos lleva indefectiblemente a entender al hombre.
Ismos que a principios del siglo XX transformaron la idea de arte, de belleza y de estética.
Fueron revolucionarios en el modo de pintar, exponer y describir la realidad.
Algunos ejemplos
Avelina Lesper es una crítica de arte mexicana conocida por sus opiniones polémicas y
controversiales sobre el arte contemporáneo. Según Lesper, el arte contemporáneo se
caracteriza por un exceso de superficialidad, falta de técnica y originalidad, así como una
obsesión por lo insustancial y lo efímero.
Lesper critica lo que considera una falta de sustancia y significado en muchas obras
contemporáneas, señalando que se enfocan más en conceptos abstractos y provocativos
que en habilidades técnicas y belleza estética. Además, ha expresado su descontento con
la comercialización del arte contemporáneo y la influencia de las tendencias de mercado en
la creación artística.
En resumen, Alain Badiou plantea una visión del arte contemporáneo como una fuerza que
tiene el potencial de revelar verdades profundas sobre la condición humana y desafiar las
normas establecidas, proporcionando así nuevas formas de comprender el mundo que nos
rodea.
Vermeulen afirma que el "metamodernismo no es tanto una filosofía —que implica una
ontología cerrada— sino que es un intento en una lengua vernacular, o … una clase de
documento de código abierto, aquello que podría contextualizar y explicar qué está yendo
alrededor, en una economía política tanto como en las artes." El regreso de una sensibilidad
romántica ha sido postulado como característica clave de metamodernismo, observado por
Vermeulen y Van den Akker en la arquitectura de Herzog & de Meuron, y el trabajo de
artistas como Bas Jan Ader, Peter Doig, Olafur Eliasson, Kaye Donachie, Charles Avery, y
Ragnar Kjartansson.
El prefijo meta, deriva de metaxy-. Platón lo usa para describir una oscilación y
simultaneidad entre dos polos opuestos. El metamodernismo es un concepto que combina
características del modernismo y el postmodernismo, como la deconstruccion, la ironía, el
relativismo, el nihilismo y el rechazo a las grandes narrativas (para caricaturizarlas).
La estructura meta moderna, del sentimiento evoca una oscilación, entre un deseo moderno
y una postmodernista sobre el sentido de todo, entre una sinceridad moderna y una ironía
postmoderna, entre la esperanza y la melancolía, la empatía y la apatía, la unidad y la
pluralidad, pureza y corrupción, ingenuidad y conocimiento; entre el control de los bienes
comunes. la artesanía y el conceptualismo, el pragmatismo y la utopía. Uno debe tener
cuidado de no pensar en esta oscilación como un equilibrio, sin embargo; más bien es un
péndulo oscilando entre numerosos e incontables polos. Cada vez que el entusiasmo
metamoderno oscila hacia el fanatismo, la gravedad lo tira hacia la ironía, en el momento en
que su ironía se balancea hacia la apatía, la gravedad lo tira hacia atrás hacia el
entusiasmo.
El Manifesto Metamodernista
En 2011, Luke Turner publicó un Metamodernist Manifesto.19El manifestó reconoció
"oscilación para ser el orden natural del mundial" y pidió un fin a "la inercia que resulta de un
siglo de ingenuidad ideológica modernista y la falsedad cínica de su antónimo hijo
bastardo."20En cambio, propone el metamodernismo como "la condición mercurial entre y
más allá de la ironía y sinceridad, ingenuidad y conocimiento, relativismo y verdad,
optimismo y duda, en persecución de una pluralidad de disparate y horizontes esquivos."21
El texto citó el trabajo de Vermeulen y van den Akker, y concluyó “tenemos que ir adelante y
oscilar!”22Turner más tarde reconoció en su manifestó al actor Shia LaBeouf como una
colaboración artística significativa en el manifiesto.23El manifiesto está compuesto de ocho
postulados:24
5. Todas las cosas quedan atrapadas dentro de la diapositiva irrevocable hacia un estado de
máxima disociación entrópica. La creación artística está supeditada al origen o revelación
de la diferencia en ella. El afecto en su cenit es la experiencia inmediata de la diferencia en
sí misma. El papel del arte debe ser explorar la promesa de su propia ambición paradójica
al incitar al exceso a la presencia.
7. Así como la ciencia se esfuerza por lograr una elegancia poética, los artistas pueden
asumir una búsqueda de la verdad. Toda la información es motivo de conocimiento, ya sea
empírico o aforístico, sin importar su valor de verdad. Debemos abrazar la síntesis
científico-poética y la ingenuidad informada de un realismo mágico. El error engendra
sentido.