Atlas Unla Vol I Cap 2 (9 C)

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

EL MESTIZAJE

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De Cabrera, Miguel (1763). Serie Mestizaje:


1. De español y de india, mestiza.
2. De mestizo y de india, coyote.
3. De negro y de india, cambuja.
4. De español y de negra, mulata.
2 5. De español y de mulata, morisca.

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BREVE HISTORIA DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA HASTA LA CRISIS DEL ORDEN COLONIAL

LA IGLESIA CATÓLICA EN AMÉRICA

En Europa, en el marco del surgimiento de las monarquías absolutas, se


produjo el aumento de las prerrogativas de la Corona sobre el ámbito religioso.
En aquellos reinos que se habían mantenido adeptos al catolicismo, se buscaba
lograr una uniformidad religiosa y acordar con el papado ciertas prerrogativas,
Las Coronas de España y Portugal tomaron la iniciativa de la expansión de
sus dominios más allá de la península y, con ella, también la tarea evangelizadora
de las nuevas tierras. En 1493, la bula papal de Alejandro VI, establecía que a
cambio de la legitimación de los derechos que reclamaban en un continente solo
explorado parcialmente, los Reyes Católicos estaban obligados a promover la
conversión de los habitantes.
La política eclesiástica en Hispanoamérica se convirtió en un aspecto más de
la política colonial, coordinada desde 1524 por el Consejo de Indias. La Corona era
quien nombraba a los candidatos para ocupar los cargos jerárquicos y financia-
ba además, al conjunto del clero. El papado tenía múltiples razones para aceptar
esta situación, entre las que se incluían la expansión del protestantismo desde
1517, la carencia de medios para la propagación de la fe católica en América y
la reticencia del clero español, que confiaba más en una carrera al amparo del
Patronato Real que, en lo que podía ofrecerles el Papa desde Roma. En el Nuevo
Mundo, la Corona se ocupó también de construir las catedrales, monasterios e
iglesias destinando para ello gran parte de los diezmos cobrados de la produc-
ción agrícola y ganadera.
En las Antillas sobrevino el primer conflicto de conciencia luego de la institu-
cionalización de la encomienda, ante la magnitud del desastre desatado por los
encomenderos. El fraile dominico Antonio de Montesinos, en 1511, denunció a los
colonos como tiranos. Como respuesta, la Corona dictó las Leyes de Burgos en 1512
que, entre otras cuestiones, establecieron el carácter de hombres libres de los indíge-
nas pero también la obligación de trabajar para los españoles a cambio de una paga.
En 1514, Fray Bartolomé de Las Casas (dominico) comenzó su prédica en defensa
de los pueblos indígenas, posicionamiento que lo llevó a establecer un fuerte debate
con diferentes teóricos y religiosos, tales como Sepúlveda.
A partir de 1519, la expansión territorial derivó en el contacto de los espa-
ñoles con sociedades complejas, con estructuras religiosas muy arraigadas en
sistemas absolutamente desconocidos para los recién llegados. Fue entonces
cuando comenzó la verdadera labor evangelizadora. Los conquistadores
encontraron una motivación religiosa convencidos de que con el dominio de
poblaciones desconocidas servirían a la cristiandad y al rey como misioneros
y hombres honorables.
La Iglesia funcionaba a través de sus obispados, que eran centros admi-
nistrativos autónomos encargados de ejecutar las leyes de las autoridades
políticas (Consejo de Indias, virrey, Audiencia). La organización local estaba
en manos de la parroquia. En cuanto a las órdenes religiosas, la Corona
prefirió el auxilio de las órdenes mendicantes, ya que predicarían el evangelio
sin intenciones señoriales y con votos de pobreza. Las principales fueron los
Franciscanos, los Dominicos, los Agustinos y los Mercedarios a los que se les
sumarían más tarde los Jesuitas. En la primera mitad del siglo XVII la Iglesia
ya estaba firmemente establecida en América, de hecho luego de 1620 no se

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

EN DEFENSA DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS

El 21 de diciembre de 1511, Pedro os los dar a cognoscer me he sobido bautizados, oigan misa, guarden las
de Córdoba, Bernardo de Santo aquí [en el púlpito], yo que soy voz de fiestas y domingos? ¿Estos, no son
Domingo y Antonio de Montesino, Cristo en el desierto desta isla, y por hombres? ¿No tienen ánimas racio-
frailes de la comunidad de los domi- tanto, conviene que con atención, nales? ¿No sois obligados a amallos
nicos, escriben un texto, vuelto en no cualquiera, sino con todo vuestro como a vosotros mismos? ¿Esto no
sermón pronunciado en la iglesia corazón y con todos vuestros senti- entendéis? ¿Esto no sentís? ¿Cómo
catedral por Montesino, que marca dos, la oigáis; la cual voz os será la estáis en tanta profundidad de sueño
un cambio radical en el paradigma más nueva que nunca oísteis, la más tan letárgico dormidos? Tened por
filosófico y jurídico y que debe resca- áspera y dura y más espantable y cierto, que en el estado que estáis nos
tarse para esa historia del léxico peligrosa que jamás no pensasteis os podéis más salvar que los moros o
de los derechos y del pensamiento oír. Esta voz encareció por buen turcos que carecen y no quieren la fe
político-americano que acá invoco. rato con palabras muy pugnitivas y de Jesucristo».
terribles —escribe en su testimonio
Al formidable texto (y el de la Las Casas—, que les hacía estremecer Poderoso texto fundacional del
réplica de Montesino el domingo [a los encomenderos] las carnes y pensamiento jurídico-político en las
siguiente) se lo conoce por el testi- que les parecía que ya estaban en el Américas, cuya enorme relevancia
monio directo del joven Bartolomé divino juicio. La voz, pues, en gran se entiende si hacemos la paráfrasis
de las Casas, entonces encomendero manera, en universal encarecida, crítica y la contextualización con los
presente en la iglesia en ese domingo declaróles cuál era o qué contenía en léxicos europeos contemporáneos.
de Adviento; será por él mismo citado sí aquella voz: Esta voz, dijo él, que Las denominaciones «derecho»;
tiempo después, como motivo directo todos estáis en pecado mortal y en él «justicia»; la pregunta retórica, los
de su «conversión» a la causa de los vivís y morís, por la crueldad y tiranía indios: «¿no son hombres?”, adquie-
derechos (humanos) de los pueblos que usáis con estas inocentes gentes. ren en los espacios y en la coyuntura
originarios, ocurrida tres años más Decid, ¿con qué derecho y con qué de las islas del Caribe una dimensión
tarde en 1514. justicia tenéis en tan cruel y horrible nueva e inaudita con respecto a la
servidumbre aquestos indios? ¿Con formulación hecha por la segunda
Hecha su introducción y dicho qué autoridad habéis hecho tan escolástica en Salamanca, porque
algo de lo que tocaba a la materia detestables guerras a estas gentes coloca a los pueblos originarios en vez
[litúrgica] del tiempo del Adviento, que estaban en sus tierras mansas y de objetos de conquista y «horrible
comenzó [Montesino] a encarecer pacíficas, donde tan infinitas dellas, servidumbre», de «crueldad y tiranía»
la esterilidad del desierto de las con muertes y estragos nunca oídos, en sujetos racionales de los derechos
conciencias de los españoles de esta habéis consumido? ¿Cómo los tenéis y la justicia. Nos encontramos frente
isla y la ceguedad en que vivían; tan opresos y fatigados, sin dalles de a uno de los textos paradigmáticos
cuánto peligro andaban de su conde- comer ni curallos en sus enferme- del léxico filosófico y jurídico-político
nación, no advirtiendo los pecados dades, que de los excesivos trabajos pensado en y desde la experiencia
gravísimos en que con tanta insen- que les dais incurren y se os mueren, americana, cuya actualidad vuelve
sibilidad estaban continuamente y por mejor decir, los matáis, por a ser re-significada en los siglos
zambullidos y en ellos morían. Luego sacar y adquirir oro cada día? ¿Y qué siguientes, hasta el actual.
—nos recuerda Las Casas— torna cuidado tenéis de quien los doctrine, (Filippi, 2013,)
sobre su tema, diciendo así: «Para y conozcan a su Dios y criador, sean

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BREVE HISTORIA DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA HASTA LA CRISIS DEL ORDEN COLONIAL

Félix Parra, Frai Bartolomé de las Casas, 1875.

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

EN DEFENSA DE LOS PUEBLOS INDÍGENAS

CODICILO DE ISABEL LA CATÓLICA y clérigos y otras personas doctas moradores de dichas Indias y tierra
NOVIEMBRE DE 1504 y temerosas de Dios, para instruir a firme, ganadas y por ganar, reciban
los vecinos y moradores de ellas en agravio alguno en sus personas y
[Cuando] nos fueron concedi- la Fe Católica debida […] Por ende bienes. Más manden que sean bien
das [por el papa Alejandro VI] las suplico al Rey mi señor muy afec- y justamente tratados: y si algún
islas y tierra firme del mar Océano tuosamente, y encargo y mando a agravio han recibido, lo remedien y
descubierta y por descubrir, nuestra la dicha Princesa mi hija y al dicho provean por manera.
principal intención fue […] de procu- Príncipe su marido, que así lo hagan Que no se exceda en cosa alguna
rar e inducir trar los pueblos de ellas y cumplan, y que éste sea su principal lo que por dichas letras apostólicas
a convertirlos a nuestra Santa fe fin […] Y que en ello pongan mucha de la concesión nos es infundido y
Católica, y enviar a las dichas islas diligencia, y que no consientan ni mandado.
y tierra firma prelados y religiosos den lugar a que los indios vecinos y

LEGISLACIÓN DE FERNANDO V pascuas y fiestas les den sus ollas de [A las indias] después que parie-
«EL CATÓLICO» carne guisada como está mandado ren, críen a su hijo hasta que sea de
LEYES DE BURGOS en el capítulo que había que los días tres años, sin que todo este tiempo
25 DE ENERO DE 1513 de fiesta que fueran a misa, coman la manden ir a las minas ni hacer
mejor que otros días [...] mandamos montones ni otras cosas que la cria-
[Para los encomenderos que que los nuestros visitadores tengan tura reciba perjuicio.
debían dar…] pan y ajíes y ají abasto, mucho cuidado de mirar cómo se dan
y que a lo menos los domingos, y tiene cada indio la dicha hamaca.

crearon nuevos obispados hasta 1777. En esta primera etapa además de la


labor evangelizadora, la Iglesia ocupó un rol fundamental en la tarea educativa,
tal como se observa en la fundación de universidades en los principales centros
urbanos coloniales.
La evangelización en las Indias se vio influenciada por lo que sucedía en
la Europa de la Contrarreforma. El Concilio de Trento (1545-1563) ratificó los
principios doctrinales y dogmáticos de la Iglesia católica, frente a la creciente
expansión de las diferentes corrientes del protestantismo. En este sentido,
en América, ante las prácticas religiosas indígenas y la preocupación que
generaba la supervivencia del paganismo y un sincretismo creciente, se
lanzaron diversas campañas de extirpación de idolatrías, que persiguieron
a los sospechosos de realizarlas y a los supuestos hechiceros, mediante el

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BREVE HISTORIA DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA HASTA LA CRISIS DEL ORDEN COLONIAL

funcionamiento de la Inquisición. Los métodos inquisitoriales implicaban


encarcelamiento y la destrucción física de cualquier símbolo considerado
idolátrico. Esta institución que perseguía la disidencia religiosa, se trasladó
a América en 1519, pero no tenía jurisdicción sobre los pueblos indígenas,
sino sobre los judíos, protestantes y sobre las prácticas consideradas actos
de brujería o supersticiosas de los negros; también sobre las conductas
sexuales entendidas como desviadas.
Durante el siglo XVI y XVII se conformaron los grandes patrimonios de las
órdenes religiosas y de las parroquias seculares. Las órdenes llegaron a conver-
tirse en un poder financiero y económico importante, al igual que el clero secular
que contaba con un patrimonio agrario vinculado al cobro del diezmo. Pero en
el siglo XVIII, con el advenimiento de los reyes borbones, se generaron tensiones
con las órdenes existentes. En ese marco, la expulsión ejemplificadora de los
jesuitas significó la derrota una de las pocas instituciones que podía enfrentar al
proyecto regalista de la Corona. La expulsión de esta orden trajo a su vez, graves
perjuicios para los pueblos originarios que vivían en las misiones, perdiendo la
protección y medios de vida que aquellos le sustentaban.

Anónimo, Traslado de las monjas dominicas


a Valladolid (detalle), 1738.

Óleo Anónimo, Arcángel Uriel, Escuela Cuzqueña, siglo XVIII. Trajes religiosos de los conventos
de México.

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

LA COMPAÑÍA DE JESÚS

La Compañía de Jesús, al igual El fuerte desarrollo que alcanza- que buscaban esclavizarlos— los
que otras órdenes religiosas, se ron las misiones jesuíticas se debió jesuitas fueron recurrentemente
convirtió en América en propietaria a la capacidad financiera y comercial acusados de dar asilo a los esclavos
de grandes extensiones de tierra. de la orden, pero también a la abun- negros que por ellos escapaban de
Pero, a diferencia del resto, poseían la dante y organizada mano de obra sus amos.
administración directa de sus tierras. de los indígenas que vivían en las El crecimiento económico de los
Los jesuitas tuvieron un modelo misiones. jesuitas generó resquemor en las
productivo propio, diferente al plan- Además de este proyecto produc- metrópolis europeas, que verificaron
teado desde la metrópolis mediante el tivo particular, hay que considerar en sus territorios una fisura en el
monopolio comercial. En sus comu- su preocupación por la educación y control político y administrativo real.
nidades, diversificaron la producción la catequización de los indígenas, en Su expulsión, tanto del Brasil en 1759,
y constituyeron en sus propiedades el marco de una fuerte fidelidad al como de la América Española en
diversos complejos que dependían papado, les permitió construir un alto 1767, puso en circulación fabulosas
de un colegio urbano. Esos complejos grado de independencia con respecto cantidades de tierra productiva, bienes
se organizaban en dos sectores: uno del Estado. y fuerza de trabajo, pero también
que producía con vistas al mercado En la zona fronteriza entre los destruyó la integración interna del
regional o interprovincial al que esta- territorios españoles y portugueses, sistema jesuítico y desató la ambición
ban ligados, y el otro a la producción trabajaron junto al pueblo guaraní, de burócratas, latifundistas y comer-
de bienes de consumo interno, ya que a quienes protegían de los bandei- ciantes por apoderarse de ellos.
buscaban el autoabastecimiento. rantes —comerciantes portugueses

1. Misiones jesuíticas en Bolivia.


2. Misiones jesuíticas en San Ignacio,
2
Misiones.

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BREVE HISTORIA DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA HASTA LA CRISIS DEL ORDEN COLONIAL

LA CONQUISTA
ESPIRITUAL

Desde luego, sabemos que la expe-


riencia americana hizo retroceder los
límites del mundo conocido al abrir
sobre un nuevo continente el horizon-
te occidental; sabemos también que
aportó una riqueza material cuya pues-
ta en circulación estimuló el desarrollo
de los capitalismos europeos. También
se ha querido atribuirle los balbuceos
de un humanismo comprometido en
la defensa de los derechos del hombre
o los orígenes de la etnografía. Pero
esto equivale de nuevo, y siempre, a
hacer de la experiencia americana un
complemento, un suplemento, una
marginalidad indignante (la matanza
de indios) o edificante (Las Casas
contra el genocidio) que oscurece la
silueta negra —como su leyenda— de Juan Manuel Yllanes, Santo Tomás predicando en Tlaxcala, 1789.
una España a la que se imagina
hundida en una continua decadencia.
Porque las guerras que opusieron a sobre suelo americano, adaptándolas vastas empresas intelectuales. Una de
España con las grandes potencias y haciendo ajustes a veces conside- ellas se tradujo en la proyección sobre
europeas y el papel que desempeñaron rables, las instituciones, leyes, las estos mundos nuevos de un conjunto
estas (Francia e Inglaterra en espe- creencias y las prácticas de la Europa de categorías religiosas tomadas de
cial) sumieron en el olvido el interés medieval y moderna. Se ignora la herencia del paganismo antiguo
crucial de los escritos sobre las Indias generalmente que la «conquista espi- y de la escolástica medieval y que
Occidentales […]. Es cierto que los ritual» de los indios del Nuevo Mundo polarizaron en torno al concepto de
europeos sabían de la existencia de se apoyó en estrategias altamente idolatría […]. Por todo ello, no podemos
otros pueblos, de otras culturas, antes complejas, basadas en la conquista de disociar experiencia americana y occi-
del descubrimiento de América. Pero los cuerpos y la difusión de la imagen dentalización. Más exactamente, la
el hecho es que tocó a los españoles, grabada, pintada o escenificada, y occidentalización —concebida como el
para bien o para mal, dar cuenta de que intentó la creación de un hombre efecto a largo plazo de la sociedad y las
la existencia de una alteridad que no nuevo al que imaginaba exento de culturas occidentales sobre América y
podía suprimirse ni expulsarse y con los pecados del Viejo y del Nuevo el mundo— tiene sus raíces en dicha
la cual había que transigir (pues los Mundo. Pero no basta recordar, que experiencia. La occidentalización se
indios eran legalmente sujetos libres y este laboratorio de la modernidad, la mueve en registros múltiples: políticos,
no esclavos). América hispánica, nos tiende el espe- sociales, económicos, culturales. En
Menos conocido quizá que esa jo de nuestra historia, un espejo más este sentido, el fenómeno está indiso-
experiencia americana fue el origen esclarecedor cuanto más deformante. ciablemente ligado a la evolución del
de una gigantesca operación de dupli- América sirvió paralelamente como pensamiento occidental.
cación que consistió en reproducir objeto, como banco de pruebas para (Bernand & Gruzinsky, 1992)

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

33 UNIVERSIDADES EN HISPANOAMÉRICA

En toda la América Hispana, entre era la excesiva facilidad en la multi- la de San Miguel en Santiago de Chile
1538 y 1824, año este el postrero de la plicación de doctores, con detrimento (1625), la de San Borja, en Guatemala
dominación española, se fundaron de los agricultores e industriales. (1625), la de San Idelfonso en Puebla de
treinta y tres universidades. Si a los Ángeles (1625), la de Nuestra Señora
ellas se agregan algunos colegios LAS UNIVERSIDADES del Rosario en Bogotá (1651), la de San
máximos o institutos de mayor HISPANOAMERICANAS Carlos en Guatemala (1676), la de San
envergadura, esa cifra se elevaría Cristóbal de Guamanga (1681), la de
fácilmente a medio centenar de En el siglo XVI, cuando la pobla- Santo Domingo, en Quito (1688), la de
centros de máximo saber […]. Treinta ción americana no llegaba aún al San Pedro y San Pablo, en México (1678),
y tres universidades para una pobla- medio millon de españoles y criollos, la jesuítica de Guadalajara (1696) y la de
ción que no pasaba de los quince surgió la Universidad de Santo San Antón en el Cuzco (1696).
millones de habitantes, da una Domingo (1538) «ad instar Universitatis A fines del siglo XVII, cuando toda
proporción que supera todo cálculo, de Alcalá», con todos los privilegios y la población hispanoamericana no
ya que, aun en los tiempos llamados prerrogativas de la de Alcalá; en 1551 llegaba a los diez millones de almas,
de la libertad y de igualdad que se funda la de San Pablo de México, ya se habían fundado veintiuna
vivimos, solo Estados Unidos y el cuyo establecimiento había ya agen- universidades, y aunque alguna, como
Japón ofrecen cifras que parecerían ciado en 1533 con Carlos V el gran la fundada en Santo Domingo en 1538,
poderse poner a la par con las que obispo Zumárraga; en 1553 se estrenó se había apagado, y otra llevara una
ofrecen las provincias ultramarinas la de San Marcos en la ciudad de vida enclenque, como la mencionada
españolas. España, justicieramente Lima, aunque no tomó forma vigorosa de San Fulgencio, todas las restantes
tan medida y considerada en hasta los tiempos del virrey Toledo; se abrían paso, no obstante las difi-
otorgar el título y los privilegios de en 1558 surgió la Universidad de cultades económicas, que afectaban
universidad a grandes y prestigiosos Santiago de la Paz, en Santo Domingo; a algunas de ellas, como a las de
centros de cultura existentes en la en 1580 la de Santa Fe de Bogotá, Córdoba y Santiago de Chile.
Península, fue generosa, hasta con financiada espléndidamente por el En 1704, en Quito, se fundó la
exceso, en autorizar la fundación de rico comerciante Gaspar de Núñez, y Universidad de San Gregorio; en 1721,
universidades en América. ocho años más tarde, esto es, en 1588, en Caracas, la de Santa Rosa; en 1726, en
La América Hispana que, en el siglo nació en Quito la Universidad de San Celaya de México, la de San Francisco
XVI fue la de los soldados, en los siglos Fulgencio, que fue, sin duda, el menos de Asís; en 1728, en La Habana, la de
XVII y XVIII fue la de los doctores. Las vigoroso y prestigioso de entre los San Jerónimo; en 1730, en Concepción
seis universidades establecidas en grandes centros de estudios superio- de Chile, la de Concepción; en 1738,
el decurso del siglo XVI hicieron esa res que hubo en la América Hispana en Santiago de Chile, la de San Felipe;
transformación, y las catorce que del siglo XVI. en 1745, en Popayán, Colombia, la de
surgieron, en el correr del siglo XVII, En el curso de la siguiente San José; en 1747, en Santo Domingo,
grandemente incrementaron y robus- centuria abren sus anchas puertas la llamada Universidad de Gorjon, en
tecieron esa nota doctoral, y las once la Universidad de Santa Catalina, en 1749, en Panamá, la de San Javier; en
universidades creadas, en el siglo Mérida de Yucatán (1622), la de San 1806, en Mérida, la de San Bartolomé;
XVIII y principios del XIX, llegaron a Javier o Javeriana en Bogotá (1622), la en 1812, en Nicaragua, la de San Carlos,
alarmar a algunos estadistas y peda- de San Ignacio Loyola en Córdoba de y en 1827, en Arequipa, la Universidad
gogos, como al obispo San Alberto, ya Tucumán (1622), la de San Javier en de San Agustín, cuya inauguración
que se vio lo contraproducente que Charcas o Chuquisaca, hoy Sucre (1624), retardó la situación militar del Perú.

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BREVE HISTORIA DEL POBLAMIENTO DE AMÉRICA HASTA LA CRISIS DEL ORDEN COLONIAL

Aunque la mayoría de estas univer- determinados prófugos de la justicia, no hubo en el Río de la Plata, y otro
sidades solo tenían una concurrencia también es cierto que, por cada uno tanto habría de ocurrir en México,
que frisaba en los quinientos estudian- de esos indeseables, llegaron cientos en Nueva Granada, en Chile, en Perú,
tes, estos eran verdaderamente tales, de hombres de grandes virtudes y de generación como la de 1810, y ella toda
y el entusiasmo académico era tan eximio saber, quienes trajeron a la entera, con todas sus grandezas y con
grande, por lo general, que contagiaba virgen América, no ya un fragmento sus innegables fallas, insignificantes
aun a personas ajenas a la universidad. o una parcela del saber español y estas en parangón con aquellas, fue el
En Córdoba acudían las gentes de las europeo, sino su integridad. fruto de la escuela, del colegio y de las
poblaciones vecinas a los actos acadé- Por eso conceptuamos un error universidades coloniales, y si el árbol
micos, como hoy se acude a los partidos remontar la tradición universitaria hay que juzgarlo por sus frutos, ante
de fútbol, y las tres universidades que americana a 1810, y grave error frutos tan opimos, no superados aún,
hubo en Quito, lejos de competir entre también hacerlo a 1710 o 1610, ya como los de 1810, hemos de reconocer
sí con desmedro las unas de las otras, que de facto se remonta al siglo XIII la extraordinaria bondad de aquella
todas tres, a causa de la frecuencia de su tradición, triunfos y fracasos, de educación primaria, secundaria y
actos públicos, siempre concurridos, ensayos fallidos y de ilusiones rotas, universitaria, y aunque con matices
llegaron a perturbar la vida civil y sobre de doctrinas que habrían de perdurar diversos al caso rioplatense, fue de
todo la económica, y fue menester y de ideas que habrían de morir, o igual prestancia el chileno, el perua-
apagar los fervores de profesores y habían ya muerto. Las universidades no, el neogranadino y el mexicano.
estudiantes a fin de que la vida normal americanas no nacieron en tierras Todos aquellos hombres eran de la
no sufriera detrimento. americanas sino que vinieron en misma envergadura espiritual, moral,
plena madurez, retoños cubiertos de intelectual y práctica, porque todos
ERA EL ESPÍRITU ramas y hojas, y con luengas raíces, aquellos hombres fueron plasmados
UNIVERSITARIO ESPAÑOL vinieron desde Salamanca, Alcalá, en la universidad hispano-americana.
Valladolid, Barcelona, Cervera, con
Era el espíritu universitario español todo el historial del pensamiento en «CUERPO, ESPÍRITU Y
que se bilocaba maravillosamente con el que, durante centurias, se había CONDUCTA»
presencia simultánea en España y en nutrido lo más representativo de las
América, o era el gigantesco saber de élites intelectuales y los hombres más Sospechamos que más de uno de
aquella que, con un pie en la Península sobresalientes de la vida civilizada nuestros lectores considerará más que
y con el otro en América, dominaba en de España y de la Europa toda. Hubo extremoso cuanto llevamos dicho, y
ambos mundos, desde los primeros abolengo, no por lo antiguo del concep- allá, en la recóndita alcoba de su pensar,
momentos de la Conquista. to vulgar sino como fuerza moral, como decía Shakespeare, tendrá hasta
Quienes hablan de los hombres como estímulo a un ideal de perfec- lástima de esas universidades de
de esta como de espíritu depravado, ción que se comenzó allá en el siglo otrora, comparadas con las opulentas
grandes solo para el mal, como cantó XIII, el mas grande de los siglos, ya que y frondosísimas de hoy día, sin perca-
Quintana antes de pronunciar, a raíz en él la humanidad llegó a su clímax, tarse sin embargo de que aquellas eran
de la invasión napoleónica, su triple que nunca termina como historia genuinas universidades, mientras que
mea culpa, olvidan que, si bien es de la cultura, ya que sin ella no hay no pocas de las de hoy son débiles
cierto que con Colón y con algunos pueblo con personalidad, y el pueblo réplicas. ¿Qué es una universidad? Se
de los primeros conquistadores, hispano-americano lo tuvo tan propia, pregunta tan buen conocedor del paño,
pasaron ciertos hombres desalmados, y tan vigorosa que reconocemos que como Juan P. Ramos, y responde: una

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ATLAS HISTÓRICO DE AMÉRICA LATINA Y EL CARIBE

universidad es un cuerpo, es un espíri- aprobaba su fundación, y aun enton- Francisco Marroquín, fundador de
tu, es una conducta. Etimológicamente ces ad tempus. Había prudencia, la Universidad de Guatemala, y dice
la palabra universidad no deriva excesiva tal vez en algunos casos, que los crecidos legados que dejó a
de universalidad de materias o pero jamás hubo ni asomos de ese fin, crecieron hasta el año de su
asignaturas, sino de universalidad monopolio, equivalente a dictadura erección «al maravilloso cálculo de
de estudiantes o reunión general de intelectual, como lo ha habido y aún 173 000 pesos», cantidad exorbitante,
los tales, y, más que la enciclopedia lo hay en algunos países de origen incomparablemente superior a la que
científica, interesaba la ciencia, y el hispanoamericano. Se procuraba tuvo universidad alguna, no ya en
entusiasmo de maestros y alumnos, evitar los abusos de la improvisación, América, sino en país alguno del orbe,
y nada importaba el que unos y otros de la vanidad y de la presunción, con anterioridad al siglo lux. Muy
fueran nobles o plebeyos, con tal que la mucho más aún los afanes de cultura otra era la situación entre nosotros,
posesión del saber acompañara a los superior que pudiera basarse en ya que si la de Charcas contaba con
maestros y el afán de saber impulsara razones menos nobles, como el lucro, la generosidad de los potosinos, la
a los alumnos. Ni en España, ni en los pero una vez asegurado este punto, Universidad de Córdoba no tuvo otros
demás países europeos se consideraba dejaba a todos la más omnímoda recursos que los que obtenía de la
como esencial a una universidad el libertad para enseñar y para aprender. venta de las mulas a los dichos poto-
que contara con un alto número de Dos elementos contribuyeron muy sinos. Sin embargo, así en Charcas
facultades, ya que no eran pocas en eficazmente a dar un mayor impulso como en Córdoba, toda la enseñanza
Europa como en América, las que solo a las universidades americanas: universitaria era totalmente gratuita.
tenían dos o tres, como acaece hoy la mayor población y los mayores
en los Estados Unidos con muchas recursos temporales: un alumnado UN BRILLANTE PASADO CULTURAL
universidades, pero lo que sí se consi- adecuado que fuera acicate para el
deró como esencial es que una de ellas profesor y una retribución también Estos y otros aspectos de la acti-
fuera la de teología, porque era esta la adecuada, que permitiera al profesor vidad universitaria el Nuevo Mundo
que había de aglutinar y dar unidad a consagrarse plenamente a su cátedra, quedaron a partir de la Independencia,
todas las demás, y por eso fueron otro- fue siempre un ideal y, por lo general, si no olvidados, cuando menos
ra teológicas todas las universidades fue una realización. Algunas univer- oscurecidos, y, en algunos casos,
europeas, y siguen siendo tales las sidades como las de Lima, México, menospreciados. Modernamente, y
mejores de Inglaterra, de Alemania, de Guamanga, Chuquisaca, Puebla de con ocasión, es preciso reconocerlo,
Bélgica, de Estados Unidos. los Ángeles, gozaron de rentas cuan- de muchas conmemoraciones cente-
tiosas, mientras otras, como las de narias, se ha volcado nuevamente la
CONDUCTA DE ESPAÑA EN LA Santo Domingo, Córdoba, Concepción, atención al brillante pasado cultural,
FUNDACIÓN DE UNIVERSIDADES Panamá, solo tuvieron con que soste- sin cuya existencia, muchos fenó-
ner la cabeza sobre el agua, y alguna menos sociales y políticos, incluso el
España fue manirrota en la como la de San Fulgencio de Quito, de la Independencia nacional, serían
fundación de escuelas, colegios y llegó a ahogarse. San Marcos de Lima inexplicables.
universidades, pero para establecer contó con un fondo principal de 14 906
estas postrera reconozcamos que fue pesos, como expresaba un cronista (Furlong, 1969)
muy precavida y solo al ‘comprobar del siglo XVIII, y el capitán de Fuentes
que una entidad daba todas las garan- y Guzmán, en su Recordación Florida,
tías de seriedad y de perpetuidad, pondera los méritos del obispo

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