Un Libro Sin Recetas, para La Maestra y El Maestro Fase 5
Un Libro Sin Recetas, para La Maestra y El Maestro Fase 5
Un Libro Sin Recetas, para La Maestra y El Maestro Fase 5
Fase 5
5º-6º_DOCENTE-FASE5-Portada.indd 1 28/04/23 12:38 p.m.
Un libro sin recetas
para la maestra y el maestro
Coordinación editorial
Irma Iliana Vargas Flores
Supervisión editorial
Jessica Mariana Ortega Rodríguez
Diseño
Imelda Guadalupe Quintana Martínez
Diagramación
Margarita Citlalli Ledesma Campillo
Producción editorial
Martín Aguilar Gallegos
Preprensa
Citlali María del Socorro Rodríguez Merino
Portada
Diseño: Imelda Guadalupe Quintana Martínez
Ilustración: Liliana Edith Hernández Ramales
Campos formativos
Lenguajes
De lo humano y lo comunitario
Ejes articuladores
Inclusión
Pensamiento crítico
Interculturalidad crítica
Igualdad de género
Vida saludable
Gabriela Mistral
Índice
Presentación 8
Introducción 10
México, un país en proceso de emancipación 12
Las antiguas conquistas de nuestra libertad 13
Ya tenemos la independencia, general, ahora díganos qué hacer con ella 17
La enseñanza de la historia desde el presente 23
Espacio histórico desde el presente 24
La transformación democrática de la escuela 25
Ya no somos los mismos y sin embargo… 25
La tensión permanente entre prescripciones normativas,
curriculares y administrativas 28
Replantear las relaciones escolares desde prácticas democráticas 28
Transformar los espacios de decisión, gestión y coordinación 31
La diversidad como fundamento de la transformación democrática
de la escuela 33
México: de la nación mestiza a la construcción de la unidad en la diferencia 36
La construcción de la interculturalidad crítica en la nem 36
La propuesta de la nueva escuela mexicana 36
La interculturalidad crítica 38
La interculturalidad crítica como eje articulador 40
Reflexiones en torno a la creación de didácticas decoloniales 44
La decolonialidad 45
Pedagogía decolonial 50
Hacia una didáctica decolonial 52
Notas para la experimentación de estrategias, técnicas e instrumentos
en evaluación formativa 55
La evaluación formativa, semblanza en la política educativa mexicana 57
Evaluación formativa: actividad heurística 59
Enfoque didáctico: el rol docente en la evaluación formativa 63
Enfoque de aprendizaje: el rol del estudiante en la evaluación formativa 71
Caja de herramientas para la experimentación de estrategias en evaluación
formativa 75
Simbolizar: el vínculo pedagógico como espacio para la retroalimentación
formativa 76
Postergar: La narración como espacio para la metacognición 77
Cooperar: el diálogo como posibilidad para la tutoría 78
Abriendo la caja: estrategias, técnicas e instrumentos para evaluación formativa 82
Fuentes bibliográficas 86
Presentación
Paulo Freire, pedagogo brasileño que toda su vida buscó la manera de brin-
dar herramientas para que los marginados pudieran liberarse y emancipar-
se de las condiciones de dominación que se reproducían en la escuela a través
de la educación bancaria, aportó una teoría que nos permite aprender los
principios pedagógicos y políticos para la lucha por una justicia social. La
educación es un acto político para la transformación de la realidad, por eso
Freire (2012, p. 97) escribió: “No puedo ser profesor si no percibo cada vez
mejor que mi práctica, al no poder ser neutra, exige de mí una definición”.
Esto significa “que como profesor debo tener claras mis opciones políticas,
mis sueños. Porque, al final, ¿qué es lo que me mueve y me alienta como
profesor […]?” (Freire, 2010, p. 50).
Sobre esta interpelación para todxs, el mismo Freire (2016, p. 39) invita,
en El maestro sin recetas, a que las maestras y los maestros se asuman como
sujetos políticos, “que se descubran en el mundo como un ser político y no
como un mero técnico o un sabio, porque también el técnico y el sabio son
sustancialmente políticos”.
En este espíritu, Un libro sin recetas, para la maestra y el maestro no sólo
busca aportar elementos pedagógicos relacionados con el Plan de Estudio de
educación preescolar, primaria y secundaria. También, y, sobre todo, pretende
interpelar su práctica diaria para que, desde su realidad concreta, acuda a
sus saberes y experiencias docentes, a esos recaudos de historia y de vida
desde donde da sentido al acto educativo porque sólo desde el reconocimien-
to de ese momento histórico, de ese estar en el mundo, se puede favorecer
que las y los estudiantes relacionen los conocimientos de los programas de
estudios con su vida personal, familiar y comunitaria. Fortalecer este acto
de autonomía docente a este hecho político, insoslayable de la educación
transformadora, es la gran apuesta de Un libro sin recetas, para la maestra y el
maestro. La recuperación del saber docente atesorado durante años de viven-
cias, junto con el cúmulo de experiencias que han construido durante una
vida de servicio a la niñez y juventud mexicana en las aulas y más allá de és-
tas, representan el elemento más significativo del currículo de la educación
preescolar, primaria y secundaria. Esas experiencias y saberes se expresan de
manera distinta en cada uno de los territorios del país porque están marca-
das por la diversidad étnica, lingüística, social, cultural, sexogenérica, polí-
tica y económica en donde viven maestras y maestros, las y los estudiantes
y sus familias.
Que las maestras y maestros de México ejerzan su autonomía para de-
cidir qué es pertinente y necesario considerar en el currículo nacional
de acuerdo con las condiciones concretas de existencia, representa por sí
Introducción
El magisterio mexicano ha tenido una participación notable en los procesos
sociales más importantes de la historia nacional. Protagonista de revolucio-
nes, actualmente, también es partícipe de transformaciones educativas, so-
ciales, culturales y políticas.
En las páginas de la historia destacan maestros como Antonio I. Villa-
rreal, fundador del Partido Liberal Mexicano (plm) y Librado Rivera, opo-
sitor a la dictadura de Porfirio Díaz, también pieza clave del plm. En el sur,
el profesor rural Otilio Montaño se sumó a la revolución maderista junto a
Emiliano Zapata con la consigna “¡Abajo las haciendas y vivan los pueblos!”,
y se convirtió en uno de los autores intelectuales del Plan de Ayala, princi-
pal bandera política e ideológica del zapatismo.
Durante la Revolución Mexicana, destaca el papel de las maestras pobla-
nas María Guadalupe y Rosa Narváez, quienes en su centro educativo realiza-
ron juntas maderistas para conspirar contra Porfirio Díaz. Su estrecha amistad
con Carmen Serdán y las labores de enseñanza les facilitaron el desempeño de
todas las comisiones que les encomendaron. Con ellas, también colaboró la
profesora Paulina Maraver, quien participó estrechamente con los hermanos
Serdán en el Club Antirreeleccionista local y en las juntas revolucionarias de
Puebla y Tlaxcala. Posteriormente, se adhirió al zapatismo y compartió comu-
nicación con Emiliano Zapata.
En las décadas del siglo xx, sobresale la estudiante normalista Elisa Zapa-
ta Vela, quién exigió la autonomía universitaria en 1929. En otro momento
de su vida, advirtió que las mujeres tenían que prepararse, pues ellas ocupa-
rían las curules del poder legislativo en lo sucesivo.
Leonor Villegas de Magnón fue una maestra que, junto con la enseñan-
za, desarrolló su activismo político transformando su casa, cochera y escue-
la en un hospital para ayudar a soldados revolucionarios heridos. Al nombre
de Leonor Villegas se debe añadir el de Dina Querido, de la Cruz Blanca
Nacional, quien auxilió a los heridos del ejército zapatista en Morelos; así
como los de las profesoras y estudiantes normalistas que se transformaron
en enfermeras voluntarias para atender a cerca de 500 heridos que colma-
ron los salones, los patios y las escaleras de la Escuela Normal de Zacatecas.
Muchas de estas maestras estuvieron comprometidas con la lucha femi-
nista y trabajaron por la emancipación de las mujeres y la reivindicación de
sus derechos desde la diversidad territorial, pues eran originarias de diferen-
tes entidades federativas.
Miles de enseñantes se comprometieron con la labor educativa que el
momento histórico les demandaba, ya fuera en campañas de alfabetización
México, un país
en proceso de
emancipación
México es hoy una nación constituida por una historia milenaria. Nuestro
país está formado por diferentes pueblos, etnias y culturas, cada uno con
una rica historia, lengua, costumbres y tradiciones. Actualmente, la socie-
dad mexicana se organiza en una República federal con 32 entidades fede-
rativas libres y soberanas, y tres poderes federales y locales encargados del
poder público. Contamos con una Constitución Política de la que emanan
instituciones y leyes que estructuran y regulan nuestra vida social. Periódi-
camente, elegimos de manera libre y democrática a nuestros representantes,
y disponemos de un marco jurídico y de instituciones que garantizan nues-
tros derechos y libertades.
Que hoy todas las niñas, los niños y adolescentes de nuestro país acu-
dan a la escuela, disfruten de una enseñanza laica, obligatoria y gratuita;
cuenten con el derecho a la atención médica cuando se enferman y tengan
garantizado su derecho inalienable a la vida, a la alimentación, a la segu-
ridad y a la no violencia, puede parecernos algo natural o que siempre ha
existido. Pero esto no fue así: es el resultado de una larga lucha de genera-
ciones para conseguirlo. Que las y los trabajadores mexicanos tengan ahora
derechos laborales que incluyen su facultad para la organización sindical,
el derecho a huelga, a un salario mínimo, a una jornada laboral de ocho ho-
ras, al descanso semanal obligatorio y a diversas prestaciones es algo que no
existía antes de la Revolución Mexicana. Que los hombres y las mujeres del
campo posean sus propias parcelas, y sean dueños de la mayor parte de la
tierra laborable y de los recursos naturales de nuestro país bajo la propiedad
comunal o ejidal, es también una conquista de su lucha durante centenas de
años. De igual modo, el reconocimiento de los derechos de las mujeres, de los
pueblos originarios, de las minorías étnicas y religiosas, de las niñas, los ni-
ños y adolescentes que hoy forman parte de nuestra vida cotidiana, son una
conquista de la lucha de muchísimo tiempo de generaciones de mujeres y
hombres que se arriesgaron y, con valentía, superaron los obstáculos que lo
impedían.
Ya tenemos la independencia,
general, ahora díganos qué hacer
con ella
Los intentos por retomar los principios justicieros y de libertad de la pri-
mera insurgencia, y de realizar reformas sociales en favor de los sectores
mayoritarios de campesinos, indígenas y mestizos –como los llevó a cabo
el grupo liberal encabezado por Valentín Gómez Farías–, fueron obstaculi-
zados por los sectores políticos y económicos dominantes. La inestabilidad
política provocada por la lucha entre dos proyectos de nación, uno de ellos
sostenido por quienes primero buscaron restablecer la monarquía y luego
se convirtieron en centralistas y conservadores, y el otro que defendía los
principios republicanos, federalistas y liberales, influyó para que México
perdiera más de la mitad de su territorio en la injusta guerra expansionista
emprendida por Estados Unidos entre los años 1846 y 1848.
El gobierno de Antonio López de Santa Anna se volvió intolerable. Para
ponerle fin se gestó la segunda gran revolución en la historia de México,
conocida como la Reforma, que buscó alcanzar los anhelos de establecer
una sociedad más justa y acabar con los privilegios y el poder del clero,
del ejército y de los terratenientes. Ese proceso inició con la revolución
de Ayutla, en el año 1854, continuó con la Constitución liberal de 1857,
que provocó una guerra civil entre liberales y conservadores entre los años
La enseñanza de la
historia desde el
presente
La transformación de la realidad se realiza desde el presente y su construc-
ción histórica permite que éste tome una posición frente a un hecho con-
creto, ya sea de un acontecimiento pasado o actual (Academia de Historia,
2006).
Dar prioridad al
presente en la
reflexión histórica
Enseñanza
de la historia
Se trata de que las y los estudiantes se acerquen al presente desde una pers-
pectiva crítica mediante diversas fuentes: mercados, calles, personas, mu-
seos, escuelas, casas, ríos, leyendas, libros, archivos (digitales y en papel),
comida, ropa, culturas, oficios y profesiones, cómics, memes, fotografías, en-
tre otros, que los conduzcan a interrogar su realidad y a preguntarse cómo se
llegó a tal o cual situación.
Si se coloca a la comunidad, urbana o rural, como espacio histórico se
favorecen distintos procesos formativos y de vinculación: escuela-comu-
nidad, realidad de los estudiantes-currículo, presente hacia el pasado y de
vuelta.
Eje estructurador
de los saberes y
conocimientos
Comunidad
Desarrollo
Vinculación de proyectos
didáctica y históricos
recuperación de significativos para
saberes docentes la vida de los
estudiantes
Un ejercicio sencillo puede ser pedir a las y los estudiantes que se ubiquen en un
parque, un mercado, una tienda, en la entrada de la escuela, en un centro co-
mercial o en la plaza del pueblo y solicitar que establezcan un tiempo histó-
rico que deben investigar. Por ejemplo, del presente al inicio de la pandemia
del virus SARS-CoV-2, e indaguen en ese espacio geográfico y en ese tiem-
po histórico qué han hecho y cómo se relacionan las personas. Además, qué
significa para ellas dichas acciones.
Las fuentes de información donde pueden recurrir son variadas (Svarzman,
2000a, p. 67): desde las costumbres y hábitos de los adultos (“Mi abuela camina
todas las tardes por el mismo sitio desde…”), el paisaje (el cambio de sentido de
una calle, ¿cuándo se abrió esa vialidad y qué dirección ha tenido?), carteles
que anuncian o solicitan cosas o la actividad económica de las personas (“¿Des-
de cuándo está el cine en tal o cual sitio?”). Preguntarse e intentar responder:
¿Todo esto cambió con la pandemia? ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Quiénes?
Lo fundamental es favorecer que las niñas, niños y adolescentes, de acuerdo
con el momento de desarrollo donde se encuentren, planteen preguntas, pro-
blemas, hipótesis o una cuestión por resolver sobre un hecho histórico desde
su vida cotidiana. La información que arrojen las fuentes que consulten, serán
elementos que les permitirán construir una explicación.
Desde el trabajo docente, se favorecerá la elección de contenidos de un
Campo formativo, la definición de las formas de trabajo, la planeación y el
acompañamiento de las y los estudiantes, así como la recuperación de sabe-
res y experiencias en cada caso (Svarzman, 2000b, pp. 17-18).
La transformación
democrática de la
escuela
Ya no somos los mismos y sin
embargo…
Precisamente, cuando la pandemia por covid-19 llevó al planeta entero a la
antesala de una nueva época con la advertencia de un cambio civilizatorio
por venir, el sistema educativo nacional se contrajo a su mínima expresión:
las escuelas cerraron de un día para otro y la vida de millones de estudiantes,
maestras y maestros, tomó la extraña forma de un distanciamiento vital,
pero con obligaciones enajenantes.
Las autoridades educativas continuaron tomando las decisiones peda-
gógicas, curriculares y administrativas desde una perspectiva eficientista,
mientras que la operación de estas medidas correspondió a las maestras, los
maestros, directivos, supervisores y también a las familias. Los procesos de
enseñanza y aprendizaje se volvieron una carga administrativa que sólo re-
flejaba la histórica carga burocrática que ignora el saber y la experiencia
docente, así como el aprendizaje significativo de las y los estudiantes. Como
expresó un docente (Rafael et al, 2021, pp. 28-29):
Las autoridades ya no saben qué más pedirnos, por ejemplo, se les ocurrió
que debemos enviar cada viernes un informe en donde coloquemos quién
está entregando trabajos y quién no, pero por alumno, yo tengo más de 200
alumnos, ¿a qué hora quieren que haga eso? Hicieron un formatito, antes
era un informe general, pero ahora es por alumno […]. Son muchos formatos:
tomar las sesiones de capacitación en línea, son diario y nos solicitan míni-
mo dos por semana. Evidencia de trabajo realizado por los jóvenes, evidencia
de que atendemos dudas en tiempo, evidencias de seguimiento a todos los
jóvenes, seguimiento y estrategias con los jóvenes que no tienen conectivi-
dad, estrategias para los jóvenes que no hacen nada, evidencias de que reali-
zamos videoconferencias, planificación quincenal de las actividades repor-
tadas al servicio de orientación, planificación de las actividades por semana
a la subdirectora de la escuela […]. Cuestionarios y formularios de los avances
de la currícula y en los aprendizajes esperados.
Maestra, maestro:
✤ ¿Puede imaginar esta misma situación con una familia encabezada sólo
por una mamá o un papá, u otra en donde las abuelas y los abuelos eran
quienes atendían a las niñas, niños y jóvenes?
✤ ¿Qué ocurría en zonas rurales sin internet ni tecnología suficiente?
✤ ¿Cómo vivieron esta situación el colectivo docente y los estudiantes
de escuelas multigrado, o aquellos que trabajan con niñas y niños
migrantes?
✤ ¿Qué lugar tenía la violencia, especialmente hacia las niñas, maestras,
directoras o supervisoras en estos contextos durante la pandemia?
Experimentar
incertidumbre
Tiempo de trabajo
Oportunidades para
administrativo en
concentrarse en el
detrimento de la
aprendizaje significativo
atención académica de
de las y los estudiantes.
las y los estudiantes.
¿Qué significa para usted la expresión: “Lo que tiene el hombre de hu-
mano es lo que tiene de democrático porque está debatiendo todo lo que
existe”? (Zavaleta, 2021, p. 334).
Proponemos dos caracterizaciones de Estado y su expresión democrática:
Estado hegemónico
Estado ampliado
✤ El Estado es una confluencia del poder político con los poderes social y popular.
✤ La democracia es entendida como la autodeterminación de la sociedad.
✤ Favorece la movilización de ciudadanas y ciudadanos desde su capacidad de
intervenir, actuar y transformar el orden económico, social y cultural.
✤ Promueve una forma de gobierno donde hombres y mujeres se reconocen como
sujetos políticos.
✤ La deliberación y construcción conjunta de las políticas y prácticas pedagógicas
rigen el sistema educativo.
Sólo las escuelas que conocen de cerca la comunidad y sus proyectos pueden
dar respuestas concretas a problemas concretos de cada una de ellas; pueden
respetar las peculiaridades étnicas, sociales y culturales de cada región […]
sólo la propia comunidad puede evaluar de cerca los resultados.
Lógica burocrática
✤ Garantiza la racionalidad mediante el apego a normas y procedimientos
de tipo jurídico.
✤ El conocimiento técnico queda subordinado a la autoridad jerárquica.
Lógica tecnocrática
✤ Busca la racionalidad por medio de la eficiencia del sistema.
✤ La lógica burocrática se subordina a la racionalidad científica
y tecnológica.
Monoparentales
Tradicionales Adoptivas
Homoparentales Extensas
Temporales y
reconstruidas
Más de 7.3
millones de
personas
364
68 lenguas
variantes
indígenas
lingüísticas
Pueblos
indígenas y
afromexicanos
Lesbianas Transgénero
Visibiliza los
intereses, necesidades
y prioridades de las niñas
considerando
condiciones de:
Clase social Cultura
Territorio Salud
Etnia
A partir de los últimos tres esquemas, podría formular una breve reflexión so-
bre cómo considera que pueden transformarse los espacios y las formas de deci-
sión colegiadas para hacer de su escuela un espacio de construcción de co-
nocimientos y saberes que contribuya a la formación de una ciudadanía, ver-
daderamente, democrática.
México: de la
nación mestiza a la
construcción de la
unidad en la diferencia
La construcción de la
interculturalidad crítica en la nem
El reconocimiento de la pluralidad sociocultural que caracteriza al país tie-
ne como corolario un problema no atendido aún con suficiente amplitud y
profundidad: la necesidad de incluir a los pueblos indígenas como ciudada-
nos plenos, creando espacios de legitimación de sus procesos vivenciales y
reconociendo la diferencia cultural como un hecho y un derecho. Esta pers-
pectiva implica reconocerlos como usuarios y productores de conocimiento
y, por tanto, de legitimar también los modos como se produce, usa y valida
el conocimiento socialmente necesario para la estructuración de sus formas
de pensamiento y de vida. Además, en el sistema educativo, es necesario di-
señar procesos de enseñanza y aprendizaje que consideren su identidad y
cultura, así como las necesidades que enfrentan para reproducir y transfor-
mar sus culturas.
La propuesta de la nem
La interculturalidad crítica1
El punto de partida para la interculturalidad crítica es la comprensión de las
culturas como
Esta perspectiva implica que las culturas son el resultado de las formas de
vida de las personas y de los grupos que las han construido, y están profun-
damente enraizadas en las condiciones en donde son producidas. Ninguna
cultura es superior a otra, todas son producto de la acción de quienes las
constituyen. A su vez, esas culturas generan mecanismos para la formación
de nuevas generaciones mediante complejos procesos de educación fami-
liar, comunitaria y escolar cuyo resultado son los individuos así educados
que se constituyan como personas con formas propias de expresar su forma
de ser, de acuerdo con los patrones de su cultura. Es decir, son portadores de
esa cultura.
Las niñas, niños y adolescentes formados en el marco de una cultura la
llevan a las aulas, puesto que forma parte de su pensamiento, su personali-
dad, sus valores y formas de vida. El docente, más que “enseñarles”, debe ser
formado para establecer un diálogo con el estudiante donde el intercambio
de conocimientos sea la materia prima del aprendizaje, ya que tanto el do-
cente como cada uno de los estudiantes ha acumulado saberes a lo largo de
su proceso de socialización, los cuales son la base de sus desempeños y
de sus formas de pensar y hacer; esto es, de construir sus conocimientos
y saberes desde una perspectiva epistémica propia.
Macas (2005, p. 41) señala: “[…] se trata de enriquecer el conocimiento
humano, incorporando la diversidad, nuevas formas de comprender el mun-
do que también son legítimas porque son históricas”. La interculturalidad
crítica postula la necesidad de reconocer estas formas de producir y usar
socialmente el conocimiento. Para ello, es necesario distanciarse de las no-
ciones de interculturalidad anteriormente presentes en el currículo y los
Planes y Programas, tales como la interculturalidad funcional que se diseñó
1
Este apartado tiene como referencia fundamental el Marco Curricular y el Plan de Estudio de
Educación Preescolar, Primaria y Secundaria 2022, pp. 101-108.
2
Las cursivas se incluyeron en el original.
Reflexiones en torno
a la creación de
didácticas decoloniales
El presente apartado tiene como objetivo principal proponer a los docentes
de educación básica mexicana algunos elementos que puedan servirles de
referentes para desarrollar procesos didácticos enmarcados en la pedagogía de-
colonial. Estos procesos deben coadyuvar a que las niñas y los niños desplie-
guen procesos de reflexión, autonomía y crítica en el marco de la diversidad
sociocultural de nuestro país. A la vez, visibilicen y den voz a otras formas
de concebir, entender y decir el mundo. Para alcanzar dicho objetivo, es ne-
cesario recordar aspectos generales del giro decolonial, enmarcado en las
llamadas epistemologías otras o, más brevemente para algunos, en la episte-
mología del Sur. Posteriormente, se hará referencia a notas de la pedagogía
decolonial y, por último, se presentarán algunas palabras sobre la didáctica
decolonial.
En el contexto de las epistemologías otras, cabe señalar que lo que sigue a
continuación no pretende ser una exposición doctrinal, teórica o definitiva.
Sólo se intentan trazar líneas de reflexión, recordar lugares, traer a nuestro
presente las palabras de otrxs que han reflexionado sobre los procesos deco-
lonizadores de la educación. En ese sentido, las líneas que siguen no tienen
otra pretensión que invitar a los docentes a pensar, repensar y construir sus
propias didácticas en el marco de la reivindicación del sur global para trans-
gredir el paradigma de imposición epistémica occidental de la sociedad glo-
balizada actual.
En otras palabras, crear procesos didácticos que ayuden a aprender que
existe el Sur, que nos posibiliten a migrar hacia el Sur, pero que, además,
nos ayuden a aprender a partir del Sur y con el Sur. Recordemos que la ex-
presión “el sur global” es una metáfora del sufrimiento humano causado
por las grandes formas de opresión (capitalismo, colonialismo, patriarcado,
feminicidio, entre otras) que posibilita repensar el mundo a partir de sabe-
res y prácticas otras que desafían los intentos de epistemicidio, linguicidio
y etnocidio.
La temática de la pedagogía decolonial en América Latina se encuentra en-
vuelta en las propuestas del grupo de investigación modernidad/colonialidad,
Como se mencionó al inicio, lo que sigue son notas breves, afirmaciones co-
munes sobre la llamada “decolonialidad”, la “pedagogía decolonial” y la
posibilidad de crear procesos, métodos e instrumentos didácticos desde el
pensamiento decolonial para coadyuvar a la justicia global. Sin afán de ser
novedosos, se referirán algunas premisas que ayuden a pensar la decolo-
nialidad. Es necesario profundizar en ellas acudiendo a los textos de quie-
nes han dedicado muchas horas de reflexión para construir la propuesta
1
Entre los exponentes del grupo de investigación modernidad/colonialidad podemos mencionar
a los sociólogos Aníbal Quijano, Edgardo Lander y Ramón Grosfoguel; a los semiólogos Walter
Mignolo, Zulma Palermo y Catherine Walsh; a los antropólogos Arturo Escobar, Fernando Coronil; al
crítico literario Javier Sanjines y a los filósofos Enrique Dussel, Nelson Maldonado, Oscar Guardiola
Rivera. Aquí, también es necesario referirnos a la recepción que ha tenido en América Latina el
pensamiento del sociólogo lusitano Boaventura de Sousa-Santos, en especial sus reflexiones en
torno a la Epistemología del Sur, término acuñado por él, y a las contribuciones de Paulo Freire, en
especial en el campo de la educación. Muchos textos de estas autoras y autores están disponibles
en línea de manera gratuita.
La decolonialidad
Para entender la propuesta decolonial, es importante distinguirla de los lla-
mados estudios poscoloniales surgidos durante el periodo posterior a las
luchas anticolonialistas y que generaron una producción del saber no hege-
mónico desarrollado fundamentalmente por pensadores indios en universi-
dades angloparlantes. La diferencia entre ambos es que parten de momentos
y contextos históricos distintos, sin perder de vista que la reflexión decolo-
nial, como en la poscolonial, tienen como objeto de crítica el dominio colo-
nial establecido por los imperios y el discurso que lo justifica.
El concepto decolonialidad da cuenta del pensamiento que analiza crí-
ticamente la matriz del poder colonial que, en el capitalismo global, per-
siste bajo formas de conocimiento totalizantes que reafirman el binomio
dominador-dominado. Analiza y critica el fenómeno de la herencia colonial
como un elemento indisociable de la formación del moderno sistema ca-
pitalista, lo que Aníbal Quijano (2000, p. 342) llamó “el patrón mundial de
poder capitalista”. En sus propias palabras: “Se funda en la imposición de
una clasificación racial/étnica de la población del mundo como piedra an-
gular de dicho patrón de poder y opera en cada uno de los planos, ámbitos
y dimensiones, materiales y subjetivas, de la existencia social cotidiana y a
escala societal”.
1. Monocultura del saber y del rigor científico: “La idea de que el único saber
riguroso es el saber científico, y por lo tanto, otros conocimientos no tie-
nen la validez ni el rigor del conocimiento científico”.
2. Monocultura del tiempo lineal: “La idea de que la historia tiene un senti-
do, una dirección, y de que los países desarrollados van adelante”. Se ha
Estas cinco formas de ausencia crean cinco sujetos ausentes. A saber: igno-
rante, residual, inferior, local/particular y el improductivo, dejando fuera
mucha experiencia social. Las cinco monoculturas se enfrentan con cinco
ecologías para hacer al ausente presente (Grosfoguel, 2011):
Pedagogía decolonial
En las perspectivas decoloniales la pedagogía parte del oprimido, como afir-
ma Freire. Centra la crítica en la concepción colonial de la educación. Paulo
Freire anotó que se necesita una pedagogía del oprimido, que hay que apre-
hender con él; a esto apunta la pedagogía decolonial. El significado estándar
de que la pedagogía se ocupa de la enseñanza, la educación y la trasmisión de
conocimiento no funciona para las perspectivas decoloniales. Por eso hay
que partir del oprimido que busca la liberación. Con este horizonte, se deben
entretejer alternativas decoloniales, una pedagogía o pedagógica latinoame-
ricana con el propio actor, el sujeto, el ser humano, con las colectividades
en su accionar liberador. No basta con trasmitir conocimiento, sino cues-
tionarlo desde su propia génesis. Está muy bien la crítica de las perspecti-
vas decoloniales y la producción del conocimiento en esa dirección, pero
también es necesario compartir ese conocimiento y continuar aprendiendo
de la praxis de las personas, de las colectividades. En este sentido, en lo peda-
gógico no puede existir un divorcio entre ambas cosas. La pedagogía deco-
lonial trata de “subvertir la colonialidad”, diría Catherine Walsh. Pedagogía
crítica, como práctica democrática, que se inscribe en un proceso reflexivo
[…] una pedagogía en clave decolonial asume como horizonte de trabajo las
categorías propuestas y desarrolladas a partir del denominado “giro deco-
lonial”, sus significados y propósitos, pero en un acercamiento en el que se
vincula lo pedagógico como eje, horizonte y dispositivo para su concreción.
en otras palabras, la pedagogía en clave decolonial es un esfuerzo sostenido
por viabilizar la apuesta del programa modernidad/colonialidad en la pers-
pectiva de una reflexión crítica en torno a lo educativo y a sus conceptos
asociados.
Notas para la
experimentación de
estrategias, técnicas
e instrumentos en
evaluación formativa
“La educación no es una fórmula de escuela,
sino una obra de vida”.
Célestin Freinet
las maestras y los maestros sabemos que la didáctica es una disciplina pro-
fundamente humanista, transformadora y desde su vertiente crítica no
busca dejar de lado o fragmentar su rostro operativo, sino reflexionarlo y
repensarlo (Pansza et al, 2000).
La perspectiva del aprendizaje en el Plan de Estudios de la nem, refiere a la
forma de mirar a la niña, al niño y al adolescente en actividades de interac-
ción social con otras personas en diferentes espacios comunitarios a los que
les da un significado personal. El aprendizaje se construye cuando los estu-
diantes se apropian de la información de su mundo cotidiano en función
de su proyecto de formación, y la interacción con elementos curriculares y
habituales que van desde lo abstracto, lo simbólico, lo material y lo afectivo
(sep, 2022, p. 87). En este sentido, el aprendizaje de los estudiantes se confi-
gura desde su participación como agentes activos en las diferentes prácticas
sociales-educativas que se presentan en sus distintos escenarios comunita-
rios: el hogar, la escuela, la propia comunidad.
Destaca la idea de que no es la primera vez que se habla de evaluación
formativa en una reforma educativa, pero sí es la primera ocasión cuando se
busca diferenciar claramente de las actividades que llevan a la calificación
y a la acreditación. En esta transformación curricular, se pretende separar y
diferenciar la evaluación formativa de la calificación, considerando que la
primera se refiere a manifestar el desarrollo del proceso de aprendizajes en
situaciones y escenarios de aprendizaje (aula, escuela y comunidad) que per-
mitan apreciar la apropiación de los contenidos curriculares por parte de las
niñas y los niños, así como el análisis, la reflexión, la toma de conciencia y
la asunción de decisiones sobre su proceso. En tanto, la calificación se rela-
ciona con un conjunto de entregables que son múltiples, que cada docente
establece en su planeación didáctica para su trabajo escolar y que los tomará
en cuenta en cada periodo de “evaluación formal” para la obtención de la
calificación y acreditación.
La calificación y la acreditación responden a una lógica de la adminis-
tración escolar y no propiamente a la evaluación del aprendizaje. La in-
corporación de la calificación alude a la institucionalización del proceso
educativo y a la organización del sistema escolar en donde, mediante la
designación de una calificación, se acredita la aprehensión o no de deter-
minados conocimientos para fines de promoción de un ciclo escolar al
subsecuente.
La calificación requiere criterios claros y conocidos por parte de docen-
tes y estudiantes. Además, es necesario considerar diversas evidencias del
trabajo y logro de las y los estudiantes e instrumentos para valorarlos. La ca-
lificación y la acreditación son, entonces, complementarias de la evaluación
formativa, enriqueciendo así el proceso educativo.
proceso didáctico a fin de que mejore. Para que sea verdaderamente forma-
tiva, la evaluación debe ser congruente con una enseñanza situada. Es decir,
deben proponerse estrategias e instrumentos que evalúen aprendizajes en el
contexto del aprendiz y se centren en el desempeño.
Evaluar el desempeño implica que el estudiante demuestre conocimien-
tos, habilidades o actitudes en la realización de actividades en el contexto
real o realista de aplicación de lo aprendido. Es así que deben crearse los
escenarios que reproduzcan en el aula lo que acontece en la realidad, con-
siderando a la familia, a la escuela y a la comunidad. Es decir, la evaluación
formativa es necesariamente situada, donde la construcción del programa y
su evaluación deben ser experienciales y basados en actividades que apro-
ximen de forma crítica al estudiante a la realidad en donde pueda mostrar
conocimientos, habilidades y actitudes en acción.
La evaluación formativa debe reunir las siguientes características:
• Elaboración de instrumentos.
• Aplicación de instrumentos con los sujetos evaluados.
• Análisis de datos obtenidos.
• Elaboración de conclusiones sobre los datos sistematizados y analizados.
• Comunicación de resultados.
✤ Formativa
✤ Informativa
✤ Motivadora
✤ Comprensiva
✤ Metacognitiva
✤ Interesante
[…] los maestros piensan con base en razonamientos prácticos y actúan como
clínicos, orientando sus actividades evaluadoras a sus tareas cotidianas,
como decidir qué enseñar, y cómo hacerlo con alumnos de diversos nive-
les de desempeño, monitorear el progreso de los alumnos, para saber cómo
ajustar la enseñanza en consecuencia; y asignar calificaciones con base en su
desempeño (Shepard, 2006, en Martínez, 2012, p. 857).
Establecer Retroalimentación
Motivar
y
y Explorar
socializar
orientar
criterios
Monitoreo
Promover
Control
coevaluación Ciclo de evaluación
formativa
Promover
Resaltar logros
autoevaluación
a) Seguir haciendo
b) Empezar a hacer
c) Reformular
Fortalecer
el vínculo
pedagógico:
motivación-
confianza-empatía
Retomar el error
como posibilidad
de aprendizaje
Lo individual y lo colectivo
Lo biológico y lo social
Lo racional y lo emocional
Lo natural y lo humano
Lo terrenal y lo cósmico
La unidad y la diversidad
Lo objetivo y lo subjetivo
Lo sobrio y lo lúdico
El grado de conciencia que tiene una persona acerca de sus formas de pensar
(aprender) y de la estructura de sus conocimientos […] significa tomar con-
ciencia a partir del análisis evaluativo de:
Exigencia Características
✤ Simbolizar
✤ Postergar
✤ Cooperar
esta razón, vivimos tiempos cada vez más acelerados sin dejar espacio para
pensar y reflexionar sobre lo que ha ocurrido o hemos aprendido. En este
sentido, se considera que la evaluación formativa puede ser un espacio que
permita la desaceleración.
En la educación, una de las herramientas para efectuar este ejercicio de
postergamiento y recuperación reflexiva de la experiencia en favor de la
evaluación formativa sería la narración, pues por su conducto (Bruner, 2013,
p.130) “construimos, reconstruimos, en cierto sentido hasta reinventamos
nuestro ayer y nuestro mañana”. La narración es un ejercicio que permite
reconocer los aprendizajes cotidianos, así como la creación narrativa del yo
infantil, de las marcas identitarias, de las historias de vida y, por supuesto, de
la formación escolar. Mediante la actividad narrativa, permitimos a los estu-
diantes significar su realidad desde sus propias perspectivas, lo que favorece
la construcción de sentidos de realidad al interpretar sus vivencias desde la
intimidad o familiaridad individual.
Con la narración, las niñas y los niños recrean las experiencias de for-
mación que pueden ir más allá de lo escolar y vincularse con sus otros espa-
cios de socialización. Los formatos pueden ser flexibles, desde lo gráfico, a lo
escrito, lo visual o lo audiovisual. En ese sentido, se vuelve un recurso que
facilita la obtención de información metacognitiva acerca de los siguientes
aspectos:
Medios: ¿Qué
Conflicto-
objetos, aprendizajes
Protagonistas Acciones Escenarios desbalance- Desenlace
recursos se
desequilibrio
o cosas construyeron?
No hay docencia sin discencia significa que las dos se explican y sus sujetos
no se reducen a la condición de objeto uno de otro. Quien enseña aprende al
enseñar y quien aprende enseña al aprender. Reflejar la idea de que enseñar
no existe sin aprender y viceversa.
La maestra o el maestro
presenta temas del
Programa de estudios que
interesan a los estudiantes.
Cada estudiante
El estudiante tiene
determina de forma
la posibilidade de
individual qué tema
convertirse en tutor.
investigará.
En la investigación existe
Para seguir un acompañamiento
profundizando, se puede dialógico entre docente y
volver a investigar. estudiantes para encontrar
respuestas y profundizar.
Fuente: Elaboración propia con base en Fuerte (2018) y Mapeal (s. f.).
Los medios de evaluación son todas y cada una de las producciones del alum-
nado que el profesorado puede recoger, ver y/o escuchar, y que sirven para
demostrar lo que los discentes han aprendido a lo largo de un proceso de-
terminado […] las técnicas de evaluación son las estrategias que el profesorado
utiliza para recoger información acerca de las producciones y evidencias
creadas por el alumnado (de los medios) […] y los instrumentos de evaluación
son las herramientas que tanto el profesorado como el alumnado utilizan
para plasmar de manera organizada la información recogida mediante una
determinada técnica de evaluación.
Evaluaciones
Dimensiones/ Pruebas de
Prueba objetivas Preguntas orales centradas en el
Tipos ensayo
desempeño
Propósito Obtener una Evaluar el conoci- Evaluar las Evaluar la habili-
muestra del cono- miento durante la habilidades de dad de trasladar
cimiento logrado instrucción misma. pensamiento el conocimiento
con un máximo de y/o el dominio y la comprensión
eficiencia y confia- alcanzado en a la acción.
bilidad. la organización,
estructuración
o composición
de un cuerpo
determinado de
conocimiento.
Respuesta del Leer, recordar, Responder Organizar, com- Planear, construir
estudiante seleccionar. oralmente. poner. y proporcionar
una respuesta
original.
Evaluaciones
Dimensiones/ Pruebas de
Prueba objetivas Preguntas orales centradas en el
Tipos ensayo
desempeño
Ventaja Eficiencia: se pue- Vincula la evalua- Puede medir Proporciona
principal den administrar ción a la instruc- resultados evidencia
muchos reactivos ción de manera cognitivos abundante de la
por unidad de sincrónica. complejos. posesión de las
tiempo de prueba. habilidades de
desempeño en
cuestión.
Influencia en el Énfasis en el re- Estimulan la parti- Fomentan las Destacan el em-
aprendizaje cuerdo, fomentan cipación durante habilidades de pleo del conoci-
la memorización, la instrucción; pensamiento miento y habilida-
aunque también proporcionan al y el desarrollo des disponibles
pueden fomentar docente retroali- de habilidades en contextos
ciertas habilidades mentación inme- de composición de solución de
del pensamiento diata acerca de escrita. problemas impor-
si se construyen la efectividad tantes.
apropiadamente. de la enseñanza.
Recicla para Leer es un programa de la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos con el que se permuta papel y cartón de desecho por papel nuevo.
En el ciclo escolar 2022-2023, se produjeron 16,398,000 ejemplares con papel del programa Recicla para Leer, correspondientes a 38 títulos de los seis grados de
primaria: seis de la asignatura Formación Cívica y Ética y 32 de La entidad donde vivo. En total se utilizaron 5,010 toneladas de papel nuevo reciclado.
Para el ciclo escolar 2023-2024, se produjeron 4,939,000 ejemplares de los títulos Proyectos de aula para cuarto y quinto grados de primaria, a partir del papel nuevo
obtenido del programa Recicla para Leer. En total, se utilizaron 3,624 toneladas.
Un libro sin recetas
para la maestra y el maestro
Fase 5
5º-6º_DOCENTE-FASE5-Portada.indd 1 28/04/23 12:38 p.m.