Epistemología de La Profesión Enfermera
Epistemología de La Profesión Enfermera
Epistemología de La Profesión Enfermera
ABSTRACT
Key words: knowledge; nursing; philosophy nursing; models nursing; nursing theory
INTRODUCCIÓN
DESARROLLO
La ciencia de enfermería
La ciencia del cuidado es concebida como un cuerpo creciente de ideas que puede
caracterizarse por un conocimiento racional, sistemático, exacto, fiable y verificable 7,
avalado por la investigación científica y el análisis lógico, cuyo objetivo radica en la
creación de modelos y teorías que proporcionan marcos de referencia para
perfeccionar la práctica diaria, a través de la descripción, predicción y el control de los
fenómenos de interés disciplinarios 8.
Cada disciplina tiene un enfoque único y organizado para el desarrollo del conocimiento
que dirige la investigación y la distingue de otros campos de estudio, comprender
dicha organización o estructura disciplinaria, es un componente crucial para ampliar el
aprendizaje y seguir el desarrollo cognitivo de las perspectivas teóricas de la
profesión 6. En este sentido, el conocimiento teórico y sus funciones intelectuales se
integran por los principios y elementos que impulsan el pensamiento y la comprensión
de enfermería 9)(10, de modo que diversas autoras han creado propuestas estructurales
que integran los componentes disciplinares indispensables para el estudio y progreso
de la profesión 11, mismos que resumen y reúnen el marco epistemológico de
enfermería, al lograr derivar elementos abstractos hasta lograr llegar a elementos
concretos y precisos que validan las afirmaciones del conocimiento disciplinario (12)(13.
Es entonces, que las escuelas del pensamiento han permitido vislumbrar los avances
de la disciplina a través del tiempo y en medida de cómo ofrece sus servicios a la
sociedad, a fin de clarificar y delimitar las áreas de responsabilidad práctica y como
guías de entrelazamiento entre los elementos meta y paradigmáticos del quehacer
disciplinario.
Teorías. Fawcett define este segmento como el conjunto de uno o más conceptos
relativamente concretos y específicos, derivados de un modelo conceptual, clasificados
por su nivel de abstracción en grandes teorías y teorías de mediano rango 14. A su vez
concordante con lo propuesto por Smith y Liehr, quienes además adicionan como
elemento de mayor abstracción las teorías prácticas y tipifican estos tres apartados por
su nivel de profundidad en categorías acordes a los tres paradigmas de enfermería
(particular-determinista, interactivo-integrativo y unitario-transformativo), con
intención de que estas posturas filosóficas permitan dar significado y sentido a la
amplia gama de propuestas teóricas disponibles 6. De manera que este apartado
describe, explica y/o predice los problemas del quehacer disciplinario en función de
empatar los fenómenos teóricos con la cotidianidad práctica mediante perspectivas
específicas y en situaciones demandantes de intervención, en términos de cuidado
enfermero.
No obstante, Smith y Liehr mencionan que diversos autores se mantienen como figuras
de contrapeso ante la diferenciación de saberes y al establecimiento de los límites
disciplinarios de enfermería, apostando al enriquecimiento científico del trabajo
interdisciplinario 6, sin embargo, previo a la colaboración del gremio en equipos
multidisciplinarios, es fundamental que se parta de visualizar y clarificar el cuerpo de
conocimientos que avala su ejercicio, con la finalidad de orientar y asignar un lugar
específico ante los retos de su desempeño, el de cuidar la salud de la humanidad y el
mundo.
Así pues, como resultado del anterior contraste de estructuras teóricas, se presenta un
diagrama en escalera en favor de armonizar y facilitar la integración de los elementos
anteriormente descritos, que parte del escalón de mayor abstracción en un movimiento
descendente hasta lograr llegar al escalón de mayor concreción (figura 1).
fuente: elaboración propia
El arte de enfermería
Desde 1978 se han creado diversas propuestas que representan las formas de conocer
de la disciplina, mismas que han permitido cristalizar y clasificar el conocimiento
existente 4, no para aumentarlo, sino para centrar su interés en el significado de
conocer y sobre qué tipos de conocimiento proporcionan mayor ayuda para la práctica,
esencia profesional de las disciplinas 18. Adscribiéndose a lo anterior, Kim reconoció
cinco dimensiones representativas de la práctica de enfermería: la dimensión científica,
dimensión técnica, dimensión ética, dimensión estética y la dimensión existencial 19.
Asimismo, Carper identificó cuatro formas de conocer en la praxis disciplinaria,
designadas patrones del conocimiento empírico, estético, personal y ético (20; Benner
sumó el patrón de experiencia 21; Young el de intuición 22; Munhall el de
desconocimiento 23; White adicionó el socio-político 24 y por último, Chinn y Krammer
incluyeron el patrón emancipatorio 25.
De forma que en esta dimensión, se evidencia la articulación del patrón empírico como
punto de aprobación al conocimiento, con el patrón personal, considerado el patrón
más importante para lograr comprender las experiencias de salud y el significado de
bienestar, en donde se atisba la singularidad de la persona al centrarse en la
subjetividad del momento, al implicar conocerse y conocer a los demás para promover
la integridad del encuentro y fundar relaciones que enfrenten al ser humano como un
todo y contribuyan a su salud individual 20.
Dimensión ética. Rige la racionalidad moral a partir de la cual se eligen y efectúan las
acciones de cuidado en la práctica de enfermería, partiendo de la comprensión
holística, la veracidad y la compasión como base normativa que aborde las
obligaciones de la enfermera ante el servicio, la vulnerabilidad de las personas y la
población en el mundo 19.
Es entonces, a través del patrón ético, que se comprende lo que es bueno, lo que se
desea, lo que es correcto y lo que se debe hacer para preservar la vida, mitigar el
sufrimiento y promover la salud 20, fundamentado en los valores personales,
institucionales y humanísticos de la profesión 27. De igual manera, es a través
del patrón socio-político que se faculta la creación de normas y políticas institucionales
donde se funge como agente de cambio político y social con un gran compromiso por
defender la salud 28. Al igual que el patrón emancipatorio, en donde se cristaliza la
capacidad de reflexión en términos sociales, políticos y culturales, para lograr
identificar problemas de injusticia e inequidad dentro de las instituciones y para crear
condiciones justas y equitativas para todos 25.
Los diversos entornos de desempeño práctico y los múltiples retos a los que se
enfrenta la enfermera en el quehacer diario, le han permitido idear y facultar las
soluciones más viables durante el desempeño de sus funciones profesionales,
partiendo de lo a priori a través del refinamiento de lo a posteriori. Es entonces que en
esta última dimensión del cuidado se manifiestan y entretejen los tres patrones del
conocimiento restantes, el patrón de experiencia en el que se transforman las
expectativas teóricas preconcebidas a través de encuentros con situaciones prácticas
reales y no solo como resultado del paso del tiempo 21, puesto que materializa el
“saber cómo” resultado de la exposición repetida a situaciones que conducen al
refinamiento de ideas y pensamientos conducidos por la intuición 30.
CONSIDERACIONES FINALES
Resulta inevitable aceptar que los enfoques actuales del conocimiento enfermero
continuarán cambiando con el tiempo y en la medida que se modifiquen los valores y
recursos de la sociedad 25. Asimismo, se hace evidente la necesidad de promover
conexiones de intersubjetividad centradas en el quehacer práctico-reflexivo, de manera
que la responsabilidad moral y los valores que guían el actuar profesional fomenten el
bienestar de la población por medio de indicadores que midan, contribuyan y aseguren
la calidad y calidez del cuidado humanizado.
En este sentido, algunos autores sugieren pasar de la enfermería de práctica basada
en evidencias (EPBE), a la enfermería de práctica basada en el conocimiento y la
enfermería de práctica basada en valores (EPBC-EPBV) (33, dado que la convergencia
de estas posturas epistemológicas en contraste al antagonismo de la EPBE, permite a
la disciplina alejarse de un tipo de conocimiento, el técnico y centrado en la evidencia,
y pasar a una visión más amplia e integradora acompañada de valores éticos,
sensibilidad, intuición, experiencia y reflexión; características que permitirán
contextualizar el saber de enfermería, con relevancia hacia el valor simbólico del acto
del cuidado, en la ausencia o presencia de palabras, gestos, actitudes y emociones con
un enfoque guiado por los vínculos de intersubjetividad con los individuos.