Ley de Amparo 16986
Ley de Amparo 16986
Ley de Amparo 16986
Artículo 1º — La acción de amparo será admisible contra todo acto u omisión de autoridad pública que, en forma actual o
inminente, lesione, restrinja, altere o amenace, con arbitrariedad o ilegalidad manifiesta, los derechos o garantías explícita o
implícitamente reconocidas por la Constitución Nacional, con excepción de la libertad individual tutelada por el habeas
corpus.
Artículo 5º — La acción de amparo podrá deducirse por toda persona individual o jurídica, por sí o por apoderados, que se
considere afectada conforme los presupuestos establecidos en el artículo 1º. Podrá también ser deducida, en las mismas
condiciones, por las asociaciones que sin revestir el carácter de personas jurídicas justificaren, mediante la exhibición de sus
estatutos, que no contrarían una finalidad de bien público.
1. Nos presentamos ante el juez. Destacamos la personería, es decir, en carácter de qué deducimos la acción de
amparo. Artículo 5. Podrá tratarse de una acción individual, acción de clase, o mediante una entidad de
consumidores que suele ser lo más frecuente.
2. Legitimación: legitimación activa supone la identidad entre la persona a quien la ley le concede el derecho procesal de
acción y quien asume en el proceso el carácter de actor. Hay legitimación pasiva cuando existe identidad entre la
persona habilitada para contradecir y quien ha sido demandado. En cuanto a la activa, me presento con la boleta de gas
que acredita mi titularidad, o como entidad intermedia tal es el caso de Acuba. Y la pasiva, contra quién, debe constar
nombre, domicilio, y el carácter, es decir, por qué contra ellos.
3. Objeto – pretensión procesal: “Manifestación de voluntad a través de la cual alguien reclama algo ante el órgano
jurisdiccional contra otro, en miras a la satisfacción de un interés concreto”. Es decir, es el para qué interponemos la
demanda, qué se solicita.
4. Admisibilidad y procedencia. La admisibilidad se refiere a la procedencia formal de la acción, a los presupuestos
necesarios para que el mismo sea concedido. El análisis de admisibilidad es previo y extrínseco.
5. Hechos> Constituyen el fundamento fáctico de la norma jurídica. En el proceso, el que aplica la norma, el juez, debe
verificar si se ha producido la hipótesis de facto prevista en la misma e imputarle las consecuencias jurídicas que
determina. Deben ser breves relatos, claros y concisos sobre lo sucedido.
6. Prueba. Se puede definir la prueba como “la actividad de las partes procesales dirigida a ocasionar la evidencia
necesaria para obtener convicción del Juez o Tribunal decisor sobre los hechos por ellas afirmados, intervenida por el
órgano jurisdiccional bajo la vigencia de los principios de contradicción, igualdad y de las garantías constitucionales
tendentes a asegurar su espontaneidad e introducida en el juicio oral a través de medios lícitos de prueba”. Se
entiende por medio de prueba "...los instrumentos y órganos que aportan al órgano jurisdiccional ese conocimiento y
esas fuentes de prueba (...), es decir, los elementos personales y materiales de la prueba" (29); esto es, "...los modos u
operaciones que, referidos a cosas o personas, son susceptibles de proporcionar un dato demostrativo de la existencia
o inexistencia de uno o más hechos"
7. Medida cautelar. ¿Qué es una medida cautelar? Para Natalia Volosin, es una resolución provisoria y preventiva para
asegurar una sentencia judicial que puede llegar dentro de años, cuando termine el juicio. Pueden pedirse en
cualquier tipo de juicio: civil, comercial, administrativo (contra el Estado), laboral e incluso penal. Otros mencionan
que son aquellas que pueden ordenar los jueces con el objetivo de evitar todo riesgo que pudiera impedir el
desarrollo adecuado del proceso.
8. Derecho, del que nos valemos. La pretensión tiene tanto una razón de hecho como una de derecho. En este punto
debemos de tratar de la de derecho, la cual está configurada por las normas jurídicas en las cuales se sustenta el
petitorio. La fundamentación jurídica, pues debe estar dada por la mención del contenido de las normas jurídicas
materiales que respaldan la pretensión... No se cumple con la fundamentación juridíca si solamente se hacen meras y
simples citas legales. Muchos autores arguyen que el requisito en comento carece de actualidad, pues en virtud del
principio IURA NOVIT CURIA, sería el Juez quien teniendo en cuenta los hechos, encontraría el fundamento jurídico del
petitorio.
9. Reserva del caso o cuestión federal. La finalidad de tal reserva es conferir a los jueces de la causa oportunidad para
ponderar la cuestión y juzgar la relación existente en su posible dimensión y el derecho constitucional cuya eventual
valoración se invoca.
10. Petitorio. El petitorio es el resumen preciso y claro de la pretensión que reclama el actor. “Es el núcleo de la pretensión;
el efecto jurídico o la consecuencia jurídica que persigue el actor al proponer su pretensión.”
Al decir que el petitorio es el núcleo de la pretensión se quiere dar a entender que el petitorio es la sintetización de la
cosa demandada, es la concretización de la pretensión, de esa declaración de voluntad por la cual se exige la
subordinación del interés ajeno al nuestro.
Podemos de esta forma enumerar los requisitos genéricos, que deben confluir para que proceda toda medida
cautelar de la siguiente manera: 1.- verosimilitud de derecho, 2. peligro en la demora y 3.- Contracautela suficiente. El
primer requisito no requiere de la existencia de un derecho cierto, sino que -de un análisis somero y provisional surja
prima facie la posibilidad de que al solicitante de la cautelar le asista el derecho que invoca. El segundo requisito
supone la existencia de un riesgo cierto de que -de no adoptarse la medida cautelar- pueda producirse un daño
irreparable por la posibilidad de que la sentencia que se dicte en el futuro acerca de la cuestión de fondo resulte
ilusoria porque no pueda ser ejecutada. Finalmente, la contracautela suficiente tiene como contratara que este tipo de
medidas se adopta inaudita parte y, por tanto, debe garantizarse al que ha de soportarla que pueda ser resarcido de
los perjuicios que la medida le ocasionare si se demostrase que el actor carecía del derecho invocado.