Sidra Etapa I y II
Sidra Etapa I y II
Sidra Etapa I y II
AUTORES.
Battocchio Augusto.
Rios Luca.
Rollero Santiago.
SUPERVISORES.
Bartel Harry.
Bartel Cristian.
Paletta Marcelo.
Marvulli Nahuel.
1.4- Demanda.
1. Mercado de competidor. 9
2.1- Estudio de competencia.
3. Mercado proveedor. 16
4.1- Proveedores del proyecto.
4.2- Insumos.
4. Tamaño. 19
5.1- Mercado.
5.2- Tecnología.
5. Localización. 20
6.1- Macro localización.
6.2- Micro localización.
Para entender más en profundidad a nuestro cliente objetivo, se realizó una encuesta a 212
personas, una investigación de tipo cuantitativo que permite, a través de una muestra
representativa, proyectar los resultados y suponer que el comportamiento de todo el
universo es parecido al observado en la muestra. Este se llevó a cabo mediante la
herramienta Google Forms, y se dirigió, en su mayoría, a personas que cumplan con las
características demográficas de nuestro segmento objetivo. De esta manera, se encuestó a
108 mujeres y 104 hombres, de los cuales el 91,5% aseguraron tener entre 20 y 36 años, y
vivir en Rosario. Se comenzó la encuesta indagando sobre la adopción del e-commerce
como canal de compras. Del total de los encuestados, el 72,6% aseguraron comprar bebidas
alcohólicas de manera online, y el 60% de estos lo harían al menos una vez al mes. Además,
a aquellos que afirmaron hacer compras online, se les consultó que priorizaban más a la
hora de elegir una tienda: costo de envíos (37,7%), tiempos de entrega (33,8%) o la entrega
a domicilio (28,6%).
Luego, se procedió a identificar cuántos de los encuestados solían consumir bebidas
alcohólicas. Los resultados arrojaron que el 92,5% afirmaron consumir bebidas alcohólicas y,
de todos estos, el 98% lo hacía en encuentros sociales, 71,4% en restaurantes y el 67,3%
también consumía en su domicilio. Para el 7,5% que negó consumir alcohol, la encuesta
finalizó y se les agradeció su participación. Una vez que se filtró aquella gente que consumía
bebidas alcohólicas, se les consultó cuál era su favorita. La cerveza fue la más escogida, con
el 40,2%, seguido del vino (16,5%), el gin (12,4%) y el fernet (8,2%), entre los más
relevantes. Finalmente, la última parte de la encuesta se focalizó en entender aún más el
mercado de las bebidas artesanales de baja graduación alcohólica. Comenzando con la
cerveza, el 75,5% afirmó gustarle la bebida, y el 68,9% de estos la consumiría
semanalmente. Luego se les dio a elegir si preferían beber una cerveza artesanal, industrial,
o si no tenían preferencia. La versión artesanal se llevó el podio con un 46,6%, el 27,4%
manifestó no tener preferencias, y el 26% restante prefirió la versión industrial. Se prosiguió
indagando acerca de la sidra. En un primer lugar, se consultó si sabían que era la sidra, y el
91,8% afirmó conocerla. Se les preguntó si la habían probado, y el 89,9% lo había hecho. Y,
de estos últimos, el 55% expresó que le habría gustado la bebida. Por otro lado, a aquellos
que no estaban al tanto de lo que era la sidra se les presentó una imagen y una breve
descripción, y todos aseguraron que
la probarían.
Matriz de Segmentación
Para poder determinar una matriz de segmentación, es importante definir los grupos de
consumidores. Posteriormente, es necesario crear una macro segmentación, la cual permita
crear un panorama general de la segmentación de mercado. Para esto, es importante
considerar las preguntas ¿Cuál es el ámbito de actividad?, ¿Cuál es el mercado y qué
necesidades se satisfacen con el producto?, ¿Cuáles son los diferentes grupos de
compradores potencialmente interesados en el producto?
Al referirse al ámbito de la actividad en que se instala el producto standard que se pretende
lanzar, el mismo se ubica en el consumo de productos gastronómico y de tiendas,
precisamente, en el consumo de bebidas alcohólicas. El mercado en que se instala la sidra
standard es el mercado gastronómico, almacenes, tiendas y grandes cadenas de
supermercados, el cual ha ido creciendo en los últimos años. Las necesidades que pretende
satisfacer este producto es brindar un placer culinario con un producto que tuvo su auge
años atrás y no ha sabido aggiornarse a las nuevas generaciones.
Por su parte, el grupo etario hacia el cual se dirige este producto es el segmento joven
adulto, segmento que abarca entre los 18 a los 35 años de edad, que tiene como ingresos
económicos promedio unos $40000-$90000 y que invierten, mensualmente, al menos el
10% de su sueldo en productos gourmet y bebidas alcohólicas.
Otros de los factores que se evaluarán es la frecuencia con que este grupo etario asiste a
bares y consume productos espumantes.
Estacionalidad de la demanda
La demanda general de sidra en el país tiene una tendencia muy fuerte en la época de fiestas
(alrededor del 70%), habiéndose convertido en un producto temporal y con fuertes competidores en
el mercado de las bebidas alcohólicas; aunque en la última década ha aumentado su consumo a lo
largo del año (de un 13 a un 30% actual), una tendencia que sigue creciendo.
Si bien la demanda tuvo una caída fuerte en los inicios del nuevo milenio, en los últimos años el
consumo se ha incrementado considerablemente, debido al aumento de consumo a lo largo del año
y también consumo general por año, debido a nuevas tendencias y mejoras de calidad.
La demanda per cápita oscila los 2.1 lt por año, según Alimentos Argentinos, Ministerio de
Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación.
Las grandes empresas apuntaron así a reposicionar el consumo de la bebida con la mira puesta en
repetir el éxito que tuvo el fernet. Una suerte de “reinvención” que apuntaba a desestacionalizar el
producto proponiendo nuevas ocasiones de consumo.
Para determinar la demanda proyectada del producto se utilizará series de tiempo, las mismas se
utilizan cuando el comportamiento del mercado a futuro se determina por lo sucedido en el pasado,
es decir, la medición de los valores de una variable en el tiempo a intervalos espaciados
uniformemente, determinando un patrón básico de comportamiento del pasado.
Para poder calcular la cantidad de sidra que se debe llegar a producir, lo primero que se hace, es
obtener los datos del consumo previo de este producto. Con los datos recolectados sobre
producción nacional y cantidad exportada a través del INDEC y del código alimentario, se puede
obtener una estimación relativamente certera.
Una vez hecho esto, se procede mediante la regresión lineal simple a encontrar la ecuación de la
recta que mejor represente el comportamiento de la variable, dicha ecuación es encontrada
mediante el método de los mínimos cuadrados.
Este grafico muestra una estimación del comportamiento estable para la proyección futura en
cuanto a la demanda de sidra
Estudios realizados revelan que la cantidad demandada de la sidra no varía tanto frente a cambios
en el precio. Esto se debe, entre otros, a que en el mercado hay diferentes propuestas del producto
en cuanto a su target y también porque es un producto estacional y su demanda se concentra
fuertemente en fechas festivas (lo que va en descenso por el crecimiento de consumo a lo largo del
año). Por lo tanto, su consumo, actualmente, está liderado por tradiciones festivas, siendo por lo
general, de mayor consumo las sidras de rango medio de precios. Siendo, que una suba de los
precios también provoca que los consumidores opten por terceras marcas, más económicas, pero
sin dejar de consumir.
Sin embargo, a pesar de las variaciones que puede sufrir en su elaboración y que pueden repercutir
en el precio, la demanda en los últimos diez años ha ido creciendo a nuevos mercados, y con la
modernización general del producto frente a un nuevo público más joven. Incentivando su consumo
a lo largo del año.
En conclusión, la demanda de nuestro producto es elástica, se rige por ese comportamiento, debido
a que es aquella elasticidad donde la demanda varía notablemente de acuerdo al precio del
producto. De esta manera, un cambio en el valor del bien impactará de manera proporcional sobre
la cantidad demandada, si el precio de un producto sube, su demanda baja, y por lo tanto esta se
denomina elástica. Suele ocurrir con aquellos productos que poseen bienes sustitutos.
ANALISÍS FODA
a) Fortalezas.
b) Debilidades.
c) Oportunidades.
d) Amenazas.
MERCADO COMPETIDOR
Estudio de competencia
Con las expectativas de crecimiento del consumo también lograron posicionarse marcas artesanales
gourmet como la sidra Los Amaya, que se elabora con manzanas cultivadas en el valle de Uco,
provincia de Mendoza. Así, se estima que en la industria de la sidra emergerá los productos de gama
alta y se impondrán sobre las principales marcas que actualmente dominan el mercado.
En referencia a las compras argentinas de sidra, el mayor proveedor siempre fue España, seguida en
menor medida por Bélgica y Francia, pero las adquisiciones disminuyeron en forma acentuada a
partir del año 2000. En 2012 no hubo importaciones relevantes, y desde entonces hasta la fecha no
se registró ninguna importación.
Competencia Directa
Hoy por hoy, este mercado tiene una baja competencia, ya que existen aproximadamente 18 marcas
que compiten por ganar mercado y por captar a los nuevos y jóvenes consumidores que incursionan
en el consumo de sidras. Sin embargo, no todas poseen los mismos recursos para incurrir en esta
feroz competencia, habiendo desde grandes grupos hasta pequeñas instalaciones, cada quien,
luchando con estrategias acordes a su realidad, pero igualmente con excelentes exponentes.
Competencia Indirecta
Los principales competidores indirectos y productos sustitutos de la Sidra son la cerveza, el vino y las
bebidas sin alcohol como las gaseosas, las aguas y los jugos. Es fundamental analizar el
comportamiento de estos productos y su evolución en los últimos diez o incluso veinte años, ya que
gran parte de la caída en el consumo total de sidra se debe a la migración de sus consumidores hacia
estas bebidas alternativas.
La Cerveza:
Este producto es tal vez el principal producto sustituto de la sidra, al tratarse de una bebida
alcohólica de consumo masivo con importante penetración en todos los estratos de la sociedad, y así
lo refleja el importante incremento de porcentaje de mercado que ha logrado en las últimas dos
décadas.
A continuación, se verán los factores específicos que llevaron a la cerveza a lograr un consumo per
cápita mayor que la Sidra y a ubicarse dentro de las bebidas más consumidas en el país. Dichos
factores, según el Lic. Diego Grillo Trubba de la Dirección Nacional de Alimentos / Dirección de
Industria Alimentaria son:
● Aumento en la calidad del producto de venta: Esto permitió reducir la diferencia de calidad con la
sidra, y de esta forma evitar el sentimiento de migración a un producto de menor nivel por parte del
consumidor.
● Identificación de las nuevas generaciones con el producto: Algo notable es que los jóvenes
acostumbran a juntarse y tomar cerveza, algo similar a lo que ocurría con las viejas generaciones.
Hoy en día el consumo per cápita de cerveza en el país se encuentra ya estabilizado alrededor de los
36 litros al año y ocupa el 11% del total de las ventas del mercado de bebidas detrás de las sodas, las
gaseosas y los jugos. Las grandes empresas cerveceras han comenzado a hacer foco en la variedad
de producto a ofrecer a los consumidores, lanzando una cartera de productos diversificada (cerveza
rubia, negra, roja, light, sin alcohol, etc.) y apuntando así a captar nuevos consumidores o a
incrementar el consumo de los ya existentes.
Algo importante a tener en cuenta sobre este producto competidor, es la elevadísima inversión que
realizan las empresas en publicidad, y por sobre todo lo influyentes que resultan ser en el consumo.
Un ejemplo de esto son las épocas de mundial, en que dichas publicidades cerveceras florecen y
aprovechan el estado anímico festivo de las personas para imponer sus productos, logrando
resultados notables.
Oportunidades:
• Debilidades:
-Se trata de uno de los productos (junto con el cigarrillo y el automóvil) más dependientes de la
inversión en publicidad y afines, lo que no sólo genera una amenaza casi constante de empresas
competidoras sino un mayor grado de inversión al respecto.
Al encontrarse muy segmentada la producción internacional, se trata de una bebida que resulta
dificultosa de exportar, como bien ha mostrado la experiencia nacional hasta el momento.
• Amenazas:
Aparición de nuevas bebidas (energizantes) que apuntan específicamente a grupos etéreos juveniles
que, de todos modos, aún se encuentran en un punto muy incipiente del proceso de inserción.
Las gaseosas son las bebidas de mayor consumo dentro de las “sin alcohol” lideradas por empresas
como Coca-Cola y Pepsi, que además de los productos de “cola” poseen gaseosas de gustos frutales
e incluso aguas tónicas. Se caracterizan por su inmensa capacidad de producción y de distribución, lo
que les permite imponer sus productos en todos los mercados del país y del mundo, logrando estar
siempre ante los ojos del consumidor. A su vez, en los últimos cinco años, con el auge de las bebidas
dietéticas y de las aguas saborizadas, las empresas de bebidas gaseosas han tenido que contraatacar
lanzando bebidas sin azúcar como la línea Zero de Coca-Cola, invirtiendo en productos Light e
incluso lanzando sus propias marcas de aguas y jugos.
Los jugos y las aguas representan otro competidor indirecto muy importante, más que nada por el
importante crecimiento que ha logrado en los últimos años y la elevada sincronización que posee
con la nueva cultura natural mencionada anteriormente. Estas bebidas aparecen cada vez con mayor
frecuencia, no solo en las comidas sino en cualquier actividad habitual de las personas, ya sea
deporte, estudio, eliminación de la sed, etc. Pero la gran ventaja radica en que afortunadamente, los
jugos y aguas compiten principalmente con las bebidas gaseosas y las cervezas, y no tanto con la
sidra.
Como consecuencia, se puede decir que, dentro de las bebidas sin alcohol, los competidores a tener
en cuenta son principalmente las bebidas gaseosas, por lo que será fundamental comprender sus
puntos fuertes y débiles. Según la Dirección Nacional de alimentos, una de las principales armas de
estas empresas es el fuerte gasto publicitario, el cual se ha incrementado con el tiempo y con la
intensificación de la competencia, y en muchas oportunidades pasa a ser el único elemento
diferenciador entre marcas y consolidador de la posición de mercado. Sin embargo, esta estrategia
no sería muy efectiva si no fuera acompañada de un elevado dinamismo por parte de dichas
organizaciones que le brindará al público una variedad cada vez mayor de sus productos. Un ejemplo
es la bebida con sabor a mate “Nativa” de Coca-Cola o las variedades frutales de “Mirinda” de Pepsi,
aunque no solo puede verse reflejado en el producto en sí, sino también en su presentación, como el
pasaje de botellas de vidrio a las de plástico. En definitiva, se trata de empresas que buscan
reinventarse constantemente como para no quedar olvidadas en el tiempo y poder mantener el
liderazgo que traen desde hace tantos años, lo cual podría resultar una estrategia interesante a ser
aplicada para la sidra, de manera de lanzar un producto totalmente alineado con las nuevas
tendencias consumidoras.
vino:
La demanda del mercado de vinos resulta ser relativamente compleja como consecuencia de la
amplia gama de variedades en el producto, ya sea por color, tipo de uva, rango de precios o proceso
de elaboración en sí. Puede tratarse de vinos de mesa, vinos finos o vinos espumosos, vinos tintos o
vinos blancos, de alta gama o económicos (se trata de unos de los productos con mayor gap entre el
precios más alto y más bajo), vinos en tetra-brik o en botella, etc. De cierta forma, se puede decir
que dentro del mercado de vinos existen numerosos sub-mercados, cada uno con características
muy propias que implican un estudio por separado del resto. El mercado argentino de vinos es un
mercado muy peculiar, que se ha mantenido muy dinámico desde 1980, cuando se produjo un punto
de inflexión en la mentalidad y cultura del consumidor, el cual comenzó a interiorizarse más en el
producto en sí y a ser más exigente. Esto produjo un cambio de enfoque por parte de las bodegas,
las cuales comenzaron a darle una mayor importancia a la calidad que a la cantidad y así se dio inicio
a una nueva generación de vinos.
A diferencia de la sidra que es un producto festivo, el vino es una bebida que suele acompañar la
mesa de muchas personas durante todo el año, con gran uso en restaurantes y reuniones de amigos
donde apunta a un grupo de gente fuera de los adolescentes.
Espumantes:
A contramano de la tendencia de pelear por cada punto de share contra otras categorías hoy muy
instaladas, la comercialización de espumantes no solo venía resistiendo, sino que comenzó a
dispararse a partir de 2010. Espectacular crecimiento del consumo de vinos espumantes que dio
lugar a una gran expansión de bodegas tradicionales.
En 2016 (considerando el período cerrado al mes de marzo), se vendieron en el país 5,3 millones de
cajas de 12 botellas, equivalente a 9 litros. Esto representó unos 47,7 millones de litros, marcando
un récord histórico. En efecto, en los últimos doce meses, con datos cerrados a marzo, el volumen se
desplomó hasta los 3,36 millones de cajas, lo que representa unos 30,2 millones de litros.
MERCADO DISTRIBUIDOR
Comercialización
● Supermercados e Hipermercados:
La principal ventaja que poseen estos establecimientos radica especialmente en la variada oferta
que presentan, así como en los altos volúmenes de compra que realizan a los proveedores. Esto
último les permite lograr bajas importantes en los costos por grandes cantidades, obteniendo así un
poder de negociación mayor al de los demás tipos de puntos de venta. La tendencia del consumidor
a concentrar sus compras en el canal supermercados alcanzó su máximo esplendor en 2002, donde
llegó a representar un 48,9% de participación. Hoy, el fenómeno del “supermercadismo” en nuestro
país ha mermado, pero aún concentra gran parte de la comercialización de alimentos,
representando aproximadamente el 32,4%. Se puede distinguir entre cadenas grandes y medianas,
considerando como grandes a aquellas que facturaban más de 20 millones por mes al momento de
la inclusión en la encuesta de supermercados del INDEC. Según los datos de INDEC, existen
alrededor de 80 cadenas de supermercados, de las cuales se puede distinguir entre 14 grandes y 66
cadenas medianas, con un total de 1450 bocas a nivel país.
● Distribuidores y mayoristas:
Estos clientes, posibilitan a las empresas llegar a colocar sus productos en la mayor cantidad de
puntos de venta distribuidos en todo el país. Su poder de negociación es medio, y este se encuentra
bastante controlado por la importancia de los supermercados.
● Despensas y Almacenes:
Se trata del canal de ventas tradicional, aquellos puntos de venta donde la gente compraba previo a
que se consolidaran las grandes cadenas de supermercados. Hoy en día se mantienen especialmente
en las pequeñas ciudades de menos de 60.000 habitantes, donde los supermercados han decidido
no penetrar, o en los pueblos. También han perdido muchos consumidores como consecuencia de
los minimercados, que han comenzado a brotar en los últimos años en todos los barrios, con
mejores precios y más variedad, como por ejemplo los supermercados chinos.
● Transporte:
Se considera el transporte y distribución directa, donde se cuenta con dos camiones para el
transporte tanto de materia prima e insumos como así también, del producto terminado.
El costo está compuesto por los gastos de mantenimiento, de combustible, de seguros y chofer.
Según lo estimado, considerando cierto kilometraje anual, el costo por año total ronda los noventa
mil pesos.
Mercado proveedor.
Proveedores del proyecto.
El análisis del mercado proveedor es fundamental, puesto que en él se definen todos los aspectos
relevantes relacionados con el abastecimiento de las materias primas que permitirán elaborar el
producto terminado que se pretende y llevar a cabo el proyecto en cuestión.
Un procedimiento de compra efectivo representa uno de los muchos factores que contribuyen a
lograr la meta de permanencia y crecimiento de la micro, pequeña y mediana empresa. Conseguir
buenos precios, buena calidad, disponibilidad de materia prima, proveedores confiables, tiempos de
entrega apropiados y plazos de pago considerables ayudan a llevar a cabo el negocio de forma
exitosa.
La idea del proyecto es inicialmente, comprar las manzanas y peras a los productores para así
dedicarse exclusivamente a la elaboración de sidra, logrando de esta manera evitar una inversión
que resultaría enorme al principio y difícil de recuperar durante los primeros años. Dado que la
manzana y pera es la principal materia prima involucrada en el proceso, se le dedicará casi la
totalidad del análisis del mercado proveedor.
Variedades: El 65% de la cosecha nacional de manzana corresponde a la variedad Red Delicious y sus
clones; el 15% corresponde a Gala y sus clones, coincidiendo este porcentaje para Granny Smith. El
5% restante se reparte entre Pink Lady, Rome Beauty, Golden Delicious, Fuji y Braeburn.
En cuanto a las variedades cultivadas de pera, el 45% corresponde a Williams y el 30% a Packham’s
Triumph. Le siguen la Beurre D’Anjou con el 10%, Red Bartlett con 6% y Abate Fetel con el 2% del
volumen producido. El porcentaje restante incluye a Beurre Bosc, Beurre Giffard, Clapps Favourite y
Red Beurre D’Anjou.
Insumos
Más allá de la materia prima, para la realización del producto final se requiere de diversos
productos, los cuales podemos mencionar a continuación:
Azúcar.
Clarificantes agregados.
Dióxido de azufre.
Dióxido de carbono.
Botella de 750ml.
Etiqueta.
Caja de cartón para embalaje.
Tapón y precinto de plástico.
Pallets.
Bobina de film paletizador
Tamaño.
Introducción.
En forma simple, en formulación y evaluación de proyecto, tamaño se puede definir como lo que se
va a producir y vender. Mientras que capacidad es aquello que esta dado por la tecnología definida
para el proyecto en su máximo ritmo de trabajo. Esta unidad de tiempo representa un periodo de
tiempo de funcionamiento, que se considera normal para las circunstancias y tipo de proyecto que
se trate. La solución óptima en cuanto al tamaño será aquella que conduzca al resultado económico
más favorable.
• Tamaño – Tecnología: Aquí intervienen las relaciones de tamaño con la inversión y costos de
producción. Se tienen en cuenta las economías de escala. Este ítem, da el tamaño mínimo viable, el
cual se medirá desde un punto de vista operativo, es decir, que el tamaño mínimo será el que
proporcione la tecnología con el menor costo operativo. Sin embargo, este factor es un limitante del
tamaño de nuestro proyecto, ya que existen opciones tecnológicas con mayor nivel de producción
pero que se traducen en mayores costos de inversión.
• Tamaño – Materias Primas: La disponibilidad de materia prima y los insumos necesarios para la
producción de un bien o servicio pueden ser un factor crítico a la hora de determinar el tamaño de
un proyecto. Como ya definimos previamente en el estudio de mercado, nuestro país produce 1,8
millones de toneladas de manzanas y peras, distribuidas casi por partes iguales. También es la
primera exportadora de peras del hemisferio sur y la quinta en manzanas a nivel mundial. Por lo
tanto, podemos definir que este ítem no es un factor limitante del tamaño de nuestro proyecto.
• Tamaño – Tasa de Descuento: Para tasas de descuento (r) altas, no es conveniente hacer grandes
inversiones. Por el contrario, cuando tenemos una tasa de descuento baja, es alentador realizar
grandes inversiones. Este ítem es un factor limitante del proyecto.
• Tamaño – Capacidad de Gestión: A la hora de definir el tamaño, se debe tener en cuenta las
posibilidades que existen para gestionar el proyecto en cuestión. En el caso, la planta necesitará
mano de obra intensiva. Es así que, la planta estará compuesta por un grupo de 32 personas. Por
ende, nuestro proyecto será algo dificultoso de gestionar. Por otro lado, la disponibilidad de mano
de obra tampoco será factor decisivo, ya que se dispone en gran parte de la mano de obra
especializada para los puestos gerenciales, jefatura y controles de calidad. Por todo lo mencionado
anteriormente, definimos que este ítem será un factor limitante del tamaño del proyecto.
• Tamaño elegido: Como en el caso del proyecto, no se puede calcular las alternativas para los
distintos tamaños, se optó por elegir el tamaño mínimo viable, facilitando así la selección del
personal. Teniendo en cuenta los factores analizados anteriormente, se determinó que el proyecto
puede funcionar aplicando el criterio de tamaño mínimo, tomando como aspecto limitante la la tasa
de descuento, la tecnología y la gestión.
Localización.
Macro localización.
A priori se decidió localizar el proyecto en Argentina, no sólo por la alta calidad y cantidad de
materia prima para la producción del producto en cuestión, sino para incentivar los mercados
nacionales ofreciendo un producto de calidad. Para establecer una localización aproximada de la
planta se estudiarán y compararán los beneficios y desventajas de ciertas regiones del país en
relación directa con factores que se consideran importantes. En Argentina, las industrias que se
dedican a la elaboración de sidras y derivados están concentradas mayormente en las provincias de
Mendoza y Rio Negro; siendo las regiones de Valle de Uco y Alto Valle, respectivamente, de mayor
cantidad de plantaciones de manzana y pera del país (elementos primordiales para la producción y
elaboración de sidras). Para elegir las regiones a analizar se basa en la cantidad de materia prima
disponible en cada una de las mismas, la cercanía entre ellas y también la cantidad de competidores
en la región. Siendo consideradas en el estudio: Mendoza (San Rafael, Lujan de Cuyo y Tupungato) y
Rio Negro (Gral. Roca, Choele Choel y Viedma).
Requisitos obligatorios.
Acceso a servicios básicos: agua, gas natural y red eléctrica.
Red eléctrica: Se requiere para las máquinas que se utilizan en la planta de producción.
Gas natural: Elemento primordial para el uso de algunas máquinas del proceso.
Cantidad y competidores directos: indispensable conocer los partícipes del mercado, y lo tanto que
abarcan del mismo; ya sea a nivel regional como a nivel nacional.
Cercanía de los Mercados: por demanda de sidra y costo logístico por transporte de recursos y
producto final.
Costo de energía eléctrica: uso significativo en todo el proceso productivo, siendo importante
reducir costos.
Beneficios fiscales: que pueden reducir significativamente los costos de realización y consumo,
costos impositivos tales como ingresos brutos pudiendo beneficiar el aspecto económico de la
empresa.
Es importante destacar que se limita la selección a zonas de Parques Industriales ya que se considera
beneficioso en diversos aspectos en cuanto a la disponibilidad de servicios y beneficios prestados,
además de ser lugares diseñados y aptos para industrias de este tipo. Debido a la cercanía a
proveedores, los tres parques a evaluar son:
Requisitos deseables.
-Proximidad de la materia prima: el costo logístico de transporte de los recursos será de relevancia.
-Beneficios impositivos: los beneficios que pueda traer cada Parque Industrial será un factor
importante para analizar teniendo en cuenta la reducción de costos que implica esto los primeros
años de funcionamiento de la planta. Dado que todas las opciones se encuentran en la misma
provincia, se analizarán los beneficios impositivos municipales.
-Proximidad al centro urbano más cercano: el acceso a un centro urbano cercano será importante
para asegurar la accesibilidad del personal y servicios de emergencia.
-Servicios: además de los servicios básicos e indispensables los servicios adicionales que puedan
otorgar los Parques Industriales podrían ser de gran utilidad.
-Seguridad: las dimensiones de los parques suelen ir sujetas a una seguridad mayor, también por las
zonas aisladas donde se encuentren.
A continuación, se presenta entonces los ítems para tener en cuenta, ordenados de mayor a menor
relevancia y la ponderación considerada para cada uno de ellos.
Tabla de los factores ponderados Micro
El análisis indica como resultado que la planta debería ubicarse en Argentina, provincia de Rio Negro
en la localidad de General Roca, en el Parque Industrial II de la Localidad de General Roca.
Cumpliendo en mayor medida a los factores considerados importantes, entre los más destacables:
Por otra parte, las empresas radicadas en el parque hacen aportes importantes de conocimiento,
tecnología y dinamismo al entramado productivo.