Magictorn - Leia Stone

Traducido por: ValKarin24

Sloane se encuentra capturada y en presencia del malvado
druida Ardan.
Se necesitarán todos sus trucos astutos y la ayuda de sus amigos

para liberarse. Ahora comienza el verdadero trabajo.
Ha comenzado una guerra y Sloane no se detendrá hasta que

termine con ella y Logan felices para siempre.
* Advertencia de idioma: Sloane tiene una boca inútil…

Sinopsis
Guía
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Expresiones de gratitud

Skyborn: cambiaformas Dragón .
Earthbound: Druidas .
Hechiceros: brujas diluidas con ADN humano, pero
todavía existen de sangre pura, aunque es raro .
Cambiadores de animales: cambiadores
humanos/animales de todos los diferentes animales de
tipo terrestre.
Faery: Tierra de los Fae que está muerta y olvidada hace
mucho tiempo .

El sonido de pasos resonando por el pasillo del castillo de piedra
me hizo ponerme de pie. Seis horas. Habían pasado seis horas
desde que Ardan me había abandonado en una celda de acero
dentro de un castillo en Irlanda. Mi gruesa jaula de acero estaba
vacía, excepto por un inodoro y un lavabo. Sin ropa de cama, sin
libros, nada. Daba a un pasillo y una escalera de piedra. Una
gran ventana abierta en forma de arco sin vidrio, solo rejas, daba
a un hermoso paisaje. Si no tuviera miedo por mi vida, podría
disfrutar de las verdes colinas, el bosque y la playa rocosa. Logan
y el equipo estaban luchando para encontrar mi ubicación, pero
este lugar era una fortaleza mágica y no podían localizarlo de
forma remota. Gracias a Dios, mi charla mental, una cosa del
vínculo de pareja todavía funcionaba, o me habría vuelto loca a
estas alturas.
Lynn y el nuevo bebé estaban a salvo, Logan me había informado,

pero no por mucho tiempo, porque el hechizo de Eva sólo podía
ocultar el cambio del bebé por alrededor de veinticuatro a
cuarenta y ocho horas, y los ingredientes necesarios para ello
eran preciosos y difíciles de conseguir.
Probablemente cera del oído de los elfos o algo desagradable.
Cuando le pregunté por Rubén, cambió de tema. No lo presioné;

Estaba demasiado frágil emocionalmente para escuchar la
respuesta. Ruben y Steven se habían enfrentado justo antes de
que Ardan me llevara. ¿Podría haber sobrevivido a eso? Pensé en
el pequeño tatuaje barba roja en mi caja torácica, oré por no tener
que necesitar añadir un oso.
Logan me había hecho prometer que lo mantendría mentalmente

informado de todo lo que sucediera, ahora luché por decirle que
alguien venía. ¿Cuál era el punto de tener que preocuparlo?

Una cara emergió por encima de los escalones, y luego el hombre
más grande que jamás había visto subió las escaleras de piedra,
eso decía algo después de estar rodeado de enormes
cambiaformas. Tenía el cabello castaño y canoso peinado en una
cola de caballo en la nuca. Sus ojos eran oscuros, casi negros, e
irradiaba un poder que hizo que mi pulso se acelerara; el sudor
perlaba mi frente.
Ardan.
A su lado estaba el rey de los imbéciles, Steven, y alguien que no

conocía, pero sus brillantes ojos amarillos hicieron que mi
estómago se encogiera. Él era un brujo de la verdad. El mismo
brillo espeluznante había estado en los ojos del gorila de Eva.
Me apresuré a conectarme con mi pareja. —‘Logan, ha vuelto con

una bruja de la verdad’—. Eva me había advertido de los de su
clase, me había dicho que tenía que replantearme las cosas
cuando les respondía, para salirme con la mía. Pero nunca había
aprendido el arte de lo que ella llamaba engaños.
Mis ojos se posaron en una gran hoja roja brillante en la mano

de la bruja de la verdad. Tragué saliva. Era demasiado bonita y
estaba demasiado protegida para la tortura. Iba a decirle a estos
pendejos lo que querían para evitar ser cortada en rodajas.
—‘Estamos en un avión a Irlanda del Norte en el área general en

que Eva cree que podrías estar’—. La voz de Logan llegó fuerte y
clara. —‘Isaac tiene un amigo allí que podría ayudarnos a
encontrarte. Diles lo que quieran saber para que no te lastimen.’—
Eso sonó como un plan decente hasta que mi mente recordó las
cosas horribles que podían preguntarme: ¿Dónde estaba la tierra
de Isaac? ¿Cuántos nacidos del cielo más estaban vivos y dónde
vivían? El libro de direcciones de mi madre...
Me arrastré hacia atrás hasta que casi toqué la pared.

—'No. Enséñame a mentir,'— le supliqué a él .
Logan gruñó. —‘¡Se necesitan meses para aprender los trucos! ¡Te
torturarán! Sólo diles a ellos lo que quieran.’ —
—'¿Y si me preguntan por Casey? ¿El bebé de Lynn? ¡No!'— Grité

de vuelta a través de nuestro vínculo. Los hombres llegaron a los
barrotes y apreté los puños. ¿Dónde estaba Sophie cuando la
necesitaba? Probablemente haría cien cortes con ese cuchillo
antes de pronunciar una sola palabra.
Cubrí a Ardan con mi mirada más cruel. —Sabes, escuché que

los esteroides pueden causar algunos efectos secundarios
desagradables. Realmente deberías dejar de usarlos —.
Su rostro era una máscara de calma. Miró a Steven y asintió. Oh

mierda.
En un abrir y cerrar de ojos, Steven desapareció fuera de los

barrotes, reapareciendo dentro de mi celda, justo delante de mí.
Quería actuar fría y ruda, pero en cambio, grité y tropecé hacia
atrás, golpeando mi cabeza contra la pared. El dolor explotó en
mi cráneo, pero pude sacudirme y mantenerme erguida. Steven
sonrió y quise quitar esa mirada de suficiencia de su rostro. Si
pensara que mi dragón podría atravesar las barras de acero,
cambiaría ahora mismo, pero no tenía sentido. Yo era más bien
un pequeño dragón y el acero sin duda era lo suficientemente
fuerte para contenerme.
—Quiero su magia—, espetó Ardan. —No solo su magia de

dragón, toda ella. Quiero la magia de un druida de fuego.
Averigua cómo conseguirlo para mí —. Giró sobre sus talones y
se fue, bajando las mismas escaleras por las que había venido.
Oh, mierda de todas las mierdas, estaba tan jodida. No había

forma de que esto pudiera terminar bien. Tenía un poder
deshonesto que amenazaba con ponerme en coma si lo usaba, y

ningún bastón para controlarlo. Traté de controlar mi
respiración, pero me sentí a punto de hiperventilar.
Steven agarró mi antebrazo, acercándome a él. Mi corazón saltó

a mi garganta, temí lo que me haría. Hubo un ruido de
desbloqueo, metal contra metal, y la puerta de la celda abierta
raspó cuando la bruja verdad llegó al interior.
—Vamos a tener una pequeña charla—, me dijo el hechicero.
—‘Logan, me van a interrogar. ¡Tienes que enseñarme algo!

¡CUALQUIER COSA!’— Rugí a través de nuestro vínculo de pareja.
¿Por qué los hombres tenían que ser tan difíciles? Solo haz lo que
te pido la primera vez y no tendremos problemas.
—‘Eva tiene un plan. Usa nuestro vínculo de pareja, ábrelo de par

en par para que pueda escuchar lo que te pregunta, pero no te
concentres en lo que dice. Solo concéntrate en lo que te pregunto y
responde en voz alta’.—
¿Qué demonios? Eso fue lo más confuso que jamás había

escuchado.
Decidí que tal vez podría salir de esto con las palabras. —¿Qué
quieres saber?— Les pregunte. —Ya sabes que soy un Skyborn.
Y ya sabes que soy medio druida —.
Los ojos del brujo de la verdad cobraron vida entonces, mi

estómago se hizo un nudo.
—¿Estás emparejado?— preguntó, sus labios se curvaron en una

sonrisa maligna como si ya supiera la respuesta.
Carajo.
—'¿Me odias?'— Preguntó Logan .
—'¿Qué? ¡Por supuesto que no!'— Mi hombre había perdido la

maldita cabeza.

—‘No, respóndeme en voz alta. No te concentres en él’. —
Ohhh, oops.
—Te hice una pregunta. ¿ERES un dragón emparejado?— El

hechicero presionó su magia amarilla y me inundó, calidez y
hormigueo, cubriendo mi piel como una película.
—'¿Me odias?'— Logan preguntó de nuevo y se centró en esa

pregunta, haciendo caso omiso de la otra pregunta.
—No—, respondí con confianza.
El brujo de la verdad juntó las cejas y me miró con escepticismo.
—¿Sabes dónde están los otros Skyborn?— preguntó, dando un

paso más cerca de mí, haciendo que mi pulso se disparara.
—‘¿Quieres que le dé una patada a Hemlock?’ — Logan preguntó

de inmediato.
—‘Diablos, no. Y ahora extraño a mi perro…, gracias’.—
—No,— respondí en voz alta.
El brujo de la verdad me fulminó con la mirada. —Técnicamente

no ha mentido, pero no confío en sus respuestas—, le dijo al
druida.
Steven gruñó. —Supongo que tendremos que hacer algunos

experimentos, entonces —.
Se abalanzó sobre mí y no pude hacer nada más que volver a la

pared y cubrirme la cara. El brujo de la verdad arrojó algo
amarillo y de repente me quedé helada en el aire, con las manos
sobre mi rostro. Apenas podía respirar, pero no podía moverme.
—Gracias—, dijo Steven cortésmente a su colega.

Extendió la mano hacia atrás y blandió el cuchillo rojo brillante.
—Me pregunto si hago varias incisiones pequeñas, podré
convencer a su magia de dragón salir sin matarla.—
Oh, Dios.
El brujo de la verdad se frotó la barbilla. —Ella es mitad druida.

Apuesto a que su druida se alimenta de su dragón, y si matas a
su dragón, también podría matar a su druida. A menos que esté
emparejada —.
Steven acercó el cuchillo a mi brazo levantado, y fue entonces

cuando mi dragón rugió dentro de mí. Ya no podía protegerme,
así que ella lo iba a intentar. El problema era que estaba
congelada.
Steven pareció molesto. —¿Entonces qué propones?— Estaba

feliz con un cuchillo. Podía verlo en sus ojos mientras lo miraba
a través de mis dedos. Se moría por cortarme.
El brujo de la verdad extendió su mano, escaneando el aire ante

mí mientras mi dragón azotaba mi cuerpo, tratando de liberarse.
—Su magia está toda entrelazada. Necesitamos separarlas para
poder desviar la magia del dragón primero. Entonces puedo
transferir su poder de druida a Lord Ardan a través de un hechizo
de sacrificio —.
¿Sacrificio? ¿Dijo sacrificio? Desmayarse era una posibilidad

definitiva ahora .
—‘Logan, me van a matar’—, gemí a través del vínculo.
Sentí su nuevo pánico ardiente atravesándome cuando la

presencia de Logan saturó mi ser. —'Aguanta. Isaac tiene un plan.
Haz todo lo que puedas para ganarnos un par de horas’. —
¡Un par de horas! Eso parecía imposible, pero tenía que intentar
algo.

—¡Sé dónde está El Ojo!— Le espeté al brujo de la verdad. Me
complació descubrir que, aunque mi cuerpo estaba congelado, mi
boca aún funcionaba.
Inmediatamente me miró con interés. —¿Qué es esto, una ganga?

Aunque la perspectiva de adquirir El Ojo me intriga, no cambiaré
tu vida por eso —.
No jodas, Sherlock. Estoy tratando de ganar algo de tiempo.
—Yo sé eso. Pero si lo obtienes, tal vez puedas mirar hacia el

pasado y encontrar una manera de desenredar mi magia o lo que
sea que necesites hacer en lugar de ... en lugar de experimentar
conmigo —.
Su intriga lo picó. —¿Y por qué querrías ayudarme a matarte y

agotar tu poder para nuestro señor ?—
Mierda, atrapada.
—Porque si voy a morir de todos modos, me gustaría echar un

vistazo a mi madre por última vez. En su mejor momento, en los
viejos tiempos —. La verdad y la mentira se difuminaban aquí.
Ojalá fuera algo cierto, porque él lo diría si no lo fuera.
—¿Qué es el ojo?— Steven preguntó, claramente molesto por

estar fuera del circuito.
El hechicero miró al druida con leve desdén. Estaba claro que

solo trabajaban juntos cuando era necesario. —Solo uno de los
artefactos mágicos más valiosos que jamás haya existido —.
Ahora era el turno de Steven de parecer molesto. —¿Nos ayudará

a conseguir su magia para Lord Ardan?— le gruñó al hechicero.
El brujo de la verdad pareció sopesar la pregunta en su mente.

—Sí, creo que podría. Podría volver a una época en la que se hizo
algo similar a esto y aprender la técnica —.

Oh, Dios. ¿Alguien había hecho esto antes? Esa pobre alma .
Steven, afortunadamente, bajó el palo de tortura afilado y

brillante. —Vamos a conseguirlo—, declaró.
Cuando la bruja de la verdad se acercó, el hechizo sobre mis

extremidades congeladas se rompió. Mi dragón se había calmado
un poco, así que pude retener mi forma humana. Me hundí hacia
atrás contra la pared, tomando profundas bocanadas de aire.
—¿Dónde está?— me preguntó.
Aquí es donde tenía la esperanza de que siguiera mordiendo el

anzuelo. —Bueno, está con un hechicero llamado Hensel. Visto
por última vez en Fresno, California —.
Steven gimió. —Ella ni siquiera lo tiene!—
Pero el brujo de la verdad no se dejó llevar. La codicia brillaba en

su mirada. —Sé de Hensel. Dirige el mercado negro. Podemos
encontrarlo fácilmente —.
Steven me miró con desconfianza. —Volveremos—, me dijo, y

tomó el brazo del hechicero. En un abrir y cerrar ya se habían
ido, poof fuera de mi vista.
Santo infierno .
Me deslicé por la pared hasta quedar sentada. Ahora que la

adrenalina había seguido su curso, un agotamiento aplastante se
apoderó de mí. Pero de ninguna manera podría dormir con mi
vida en juego.
—'Se fueron. He comprado algo de tiempo, pero no sé qué tanto.'—
Esperé una respuesta de Logan.
—‘¿Logan?’ —

Esperé de nuevo pero solo hubo silencio. Lo último de mi fuerza
desapareció entonces, cuando las lágrimas comenzaron a caer
por mi mejilla en cálidos riachuelos. Lentamente me acurruqué
en una bola y miré por los barrotes de la escalera, rezando para
que no volvieran pronto.
Mis párpados se estaban volviendo pesados, había estado

despierta casi veinticuatro horas, pero se abrieron de golpe
cuando escuché la voz de Logan dentro de mi cabeza.
—‘¡Sloane!’ — él rugió.
Me senté, con la boca seca, el estómago retumbando y alerta.

—'¡Estoy aquí!'— El cielo se estaba oscureciendo cuando el sol
comenzó a ponerse. Se me estaba acabando el tiempo.
—'Oh, gracias a Dios. Hice un hechizo de vislumbrar en el avión

para tratar de encontrarte, y me dejo noqueado.'—
¡Qué! Eso no suena bien.
—‘El amigo de Isaac está entrando para liberarte’—. prosiguió

divagando, antes de que pudiera preguntar más. —‘Cuando ella
llegue, tendrás que cambiar y volar con ella. Ella te traerá con
nosotros. Estamos a punto de aterrizar’. —
Me puse de pie . —'Espera, ¿qué? Ella va a bailar el vals en la

guarida de Ardan para liberarme solo porque sí?'—
Silencio . — ‘Ella es ... pequeña’.—
Fruncí el ceño. Bueno. —'Logan, ¿este amigo es… un humano,

hechicero, druida o Skyborn?'— Rápidamente Recité todas las
especies sobrenaturales que conocía.
Silencio de nuevo. —‘Ninguno de esos’.—

Oh, Dios. Dejé pasar eso, porque no podía ir allí. No quería saber
qué tipo de criaturas Faery habían escapado antes de que la
tierra cayera. Criaturas con las que Isaac aparentemente tenía
amistad.
—‘Está bien, quieres que cambie, lo que alertará a Ardan, y luego

que vuele sobre Irlanda ...’ —
—'Sí.'— Su respuesta fue instantánea.
Mi compañero estaba loco, pero si eso evitaba que me cortaran

en pedazos, era un juego. Sabía que Irlanda estaba llena de
historias sobre criaturas míticas y sabía que les gustaba beber.
Con suerte, si me las arreglaba para salir de aquí y volar sobre
este lugar, cualquier ser humano que me viera estaría intoxicado
y pensaría que me imaginaron.
Sí, iba a ir con eso.
Pasé los siguientes veinte minutos paseando por mi celda.

¿Cuánto tiempo había estado aquí sin comida ni agua? ¿O la
energía reconstituyente de la Tierra? Más urgente, ¿cuánto
tiempo había pasado desde que volé? ¿Sabría siquiera cómo
hacer eso cuando llegara el momento? Creí escuchar un ruido y
me congelé, mirando la escalera, preguntándome si el pequeño
amigo intruso de Isaac estaría aquí.
—¡Psst!— —dijo una voz diminuta y aguda, no más fuerte que un

susurro. Apenas lo había escuchado. Todo mi cuerpo se puso
rígido mientras giraba hacia el sonido y me enfocaba en el
pequeño ...
Santa madre de las pequeñas hadas.
De pie entre los barrotes de mi gran ventana estaba ... un hada.

Como una criatura legítima, diminuta y con alas de gasa que
esperaba que llevara polvo de duendes. Su rostro era como el de
una muñeca pintada, con piel de porcelana y labios rosados, su

cabello corto y negro azabache. Llevaba un diminuto vestido azul,
con un arco y una flecha colgando de un hombro.
No supe que decir. Me quedé mirando con la boca abierta. Mi

maestro druida y yo necesitábamos tener una conversación seria
sobre sus “amigos”. ¿Cuántas criaturas sorpresa más conocía?
—¿Sloane?— preguntó, con esa diminuta voz cantarina. Tenía un

leve acento irlandés, lo que la hacía aún más adorable.
Asentí con la cabeza, aún con la boca abierta. Así es como

imaginé que sería tropezar con ácido. Pero fue real. Sin una
palabra más, saltó de su posición y voló hacia mí, tan rápido que
apenas tuve tiempo de retroceder antes de que ella estuviera
flotando frente a mi cara mirando dentro de mi boca. Ella era
como un colibrí en Red Bull.
—Usted tiene buenos dientes—, la voz pequeña dijo.
¿Perdóneme? Quizás este fue un viaje ácido.
—Gracias.— Me sonreí .
Ella asintió con la cabeza, aleteando, flotando en el aire .
—¿Isaac te ha hablado del pago?— Ella me escudriñó, levantando

su pequeña barbilla en mi dirección.
No.
—Sí. Todo está bien.— Toma mi alma si eso significa que puedes
liberarme de aquí. Cualquiera que fuera el pago, lo resolveríamos.
Logan pagaría cualquier cosa por liberarme.
Se veía emocionada y de repente esperé que no fuera mi alma lo

que Isaac le había prometido. —Prepárate para cambiar y volar,
Skyborn —.

Sacó una flecha del pequeño cabestrillo que llevaba alrededor del
hombro.
—Está bien ...— Di un paso atrás y sentí el revuelo de mi dragón,

listo para cuando la llamé.
Por favor, no dejes que esto sea un viaje de ácido.
Sin ceremonia, cargó una flecha en su pequeño arco y se

encendió con fuego azul. Di un paso adelante, repentinamente
interesada.
Soltó la flecha y se estrelló contra una de las barras de acero de

la ventana. Al segundo que golpeó, la barra desapareció. Sonreí,
tratando de contener mi emoción. Esta maldita pequeña hada me
estaba sacando totalmente de aquí.
—Cambia—, me dijo mientras cargaba y soltaba la siguiente

flecha, golpeando la segunda barra.
La ventana era un alto arco de piedra, pero sólo parecía de cinco

o seis pies de altura. Mi dragón medía al menos dos metros y
medio. Iba a ser un desafío atravesarlo, pero no tenía otras
opciones. Me quité la ropa rápidamente, sintiendo a mi dragón
salir corriendo a la superficie. La idea de dejar mi ropa interior
por Steven y Ardan me repugnaba, así que una vez que terminé
mi cambio, agarré el paquete de ropa en una de mis manos con
garras. Mi cuerpo se hinchó y mis alas presionaron los bordes de
la jaula.
—¡Volemos!— declaró el hada. Incineró la barra de acero final

justo cuando oí pasos subiendo las escaleras. Ardan.
El hada pasó rápidamente por la ventana abierta y yo estaba

justo detrás de ella, corriendo como un T-rex incómodo. Estaba
a punto de saltar desde el alféizar abierto, con la esperanza de

poder pasar mi gordo culo de dragón, cuando sentí un tirón en la
punta de mi ala.
Grité, mirando hacia atrás. Ardan se había metido en mi jaula y

estaba tratando de sujetarme. El calor cobró vida en mi vientre y
supe que si él hacía algo con mi ala y yo no podía volar, estaba
muerta.
Sin pensarlo, rugí, bañando al druida con fuego de dragón,

quemando la punta de mi propia ala en el proceso. Una vez que
sentí la presión sobre mi ala levantarse, salté. Los lados de piedra
de la ventana abierta se agrietaron cuando empujé mi peso a
través de ella, golpeando mi cabeza contra la parte superior del
arco, pero empujé más allá del dolor y la resistencia y luego caí.
Oh, mierda. ¡Olvidé cómo volar!
Con un gemido frenético, batí mis alas hacia la pequeña mariposa

de hada que me esperaba. La punta de mi ala estaba adolorida
por mi propio fuego, pero parecía volar bien. Mirando hacia abajo,
pude ver a Ardan y algunos de sus hombres abajo, listos con
arpones. Oh diablos no. Nunca más con esas cosas. Aleteé, más
y más alto hasta que estuve al lado del hada, que se alejó del
agua y se dirigió a un área del bosque.
—¡Ve al bosque y puedo ofrecerte invisibilidad!— chilló, y apenas

escuché sus pequeñas palabras sobre los vientos rugientes y los
gritos de los druidas.
Me arriesgué a echar un vistazo detrás de mí y deseé no haberlo

hecho. Ardan agitaba las manos en el aire y un ciclón se
preparaba ante él. Viniendo a la derecha por mí. ¡Mierda! ¡Podría
crear tornados!
Por supuesto que podría.
—'¿Que está sucediendo? ¿Estas FUERA?'— La voz de Logan

estaba llena de ansiedad .

—‘Sí. ¡No me dijiste que un hada de diez centímetros de altura
vendría a rescatarme!’— Grité mientras el hada se zambullía en
la línea de árboles. La seguí justo cuando el tornado cruzaba la
colina cubierta de hierba detrás de nosotras. Qué espectáculo de
mierda. Iba a ser imposible escapar de esto. Ardan era demasiado
poderoso.
—‘Solo sigue sus instrucciones y encuéntranos en el aeropuerto’—

me dijo.
Seguro. Fácil. Dejaré este tornado y este maldito druida

teletransportador y tomaré un taxi hasta el aeropuerto.
—‘Bueno ...’ — le dije a mi compañero. No quería preocuparlo y

no necesitaba la distracción en este momento. No había nada que
pudiera hacer por mí en el aire.
Estaba a punto de preguntarle al hada qué era lo siguiente,

porque Ardan había parpadeado y se había perdido de vista y
probablemente estaba en estos bosques controlando su tornado,
¡cuando me disparó con una flecha! Esta vez, fue una flecha
llameante rosa. Se me clavó en el cuello y jadeé, esperando caer
en picado al suelo o algo así. No dolía, solo se sentía como una
aguja de acupuntura o algo así.
Ella sonrió, luciendo complacida consigo misma. —¡Eres invisible

ahora!— ella chilló.
¿Que qué? Iba a tener que creer en su palabra, porque todavía

podía ver mis alas batiendo en mis periféricos. Llegué a la línea
de árboles y seguí su ejemplo sobre a dónde ir. No tenía ni idea
de dónde estábamos.
¿Por qué no me hizo invisible antes de irnos? Me preguntaba.

Quiero decir, estaba agradecida, pero nos habría ayudado a
escapar. No podía preguntarle en mi forma de dragón, así que
seguí volando, esperando ser de hecho invisible, y que Ardan no
estuviera dispuesto a empujar ese tornado directamente hacia mí
y cortarme las alas.

—No puedo controlar la magia de la invisibilidad sin mis
árboles—. Hizo un gesto debajo de nosotros, como si leyera mis
pensamientos.
Correcto. Por supuesto. Necesitaba sus árboles.
Isaac seguro tenía algunos amigos extraños, pero ella había

salvado mi trasero de ser cortado en sushi de dragón, así que no
me importaba qué peculiaridades tenía.
Mis alas ya estaban cansadas. Volar con mi gran cuerpo de

dragón era como correr, y yo no era una corredora. El hada
estaba descendiendo en picado hacia la línea de árboles, y me
arriesgué a mirar detrás de mí para ver que el tornado había
desaparecido y no había señales de Ardan. Gracias a Dios por los
pequeños favores.
Por favor, deja que ese idiota se pierda en estos bosques.
Mi pequeño compañero de vuelo bajó a un pequeño prado donde

había un vehículo tipo todoterreno con apariencia de Jeep negro
esperándonos. La tapa estaba abierta y parecía que no había
nadie adentro. La línea de árboles había terminado, y con ella,
supuse, su capacidad para mantenerme envuelto. Bajé mi torpe
cuerpo de dragón al prado, rozando algunos árboles con mi gran
envergadura. Cuando aterricé sobre mis garras, miré hacia abajo
e hice un inventario de mi paquete de ropa. ¡Maldita sea! Había
perdido mi sostén en algún lugar del vuelo.
—Cambia. Debemos irnos rápido —, me dijo, mientras sus

pequeños ojos escudriñaban el bosque detrás de mí.
Hice lo que me pidió. Ella no me había llevado por mal camino

todavía, aunque tenía que admitir que no me entusiasmaba
volver a mi forma humana. Sin mi bastón me sentí tan… débil.
Al menos mi dragón podía exhalar fuego y volar. Mis huesos se
agrietaron y encogieron, y una vez que estuve completamente
cambiada, miré hacia arriba para verla mirando mi cuerpo
desnudo.

Incómodo.
—¿Cuánto mides?— preguntó ella .
¿Qué demonios? Estaba drogada, decidí .
—Cinco-ocho—, le dije mientras me ponía mi ropa, sin sujetador.

Me sentí tan desnuda sin mi bastón. No podía creer que se
hubiera ido, reducido a cenizas. ¿Qué diablos iba a hacer al
respecto?
—Ohh, eso es alto—, susurró, barriendo lujuriosamente sus ojos

sobre mi cuerpo.
Estaba vestida, así que asentí y señalé el auto. —¿Tú, eh, quieres
que conduzca ?—
Ella puso los ojos en blanco. —Obviamente. Es el auto de mi

novio, ¡así que ten cuidado con él ! —
Me quedé helada. ¿Novio? Ella solo dijo novio, ¿Cómo un novio

humano? No, no quería saberlo. Simplemente salté adentro y
agradecí a mi estrella de la suerte que mi novio de la escuela
secundaria me hubiera enseñado a manejar con palanca de
cambios en su Mustang.
Puse el coche en primera, apretando un poco el embrague, y

luego salí por el camino de tierra que conducía al prado en el que
estábamos. Después de dos minutos, llegamos a un camino
empedrado, sin nada más que colinas a la vista. Seguí ese camino
durante unos minutos más, y luego me llevaron a un camino
principal donde mi amigo alado me dijo que fuera a la izquierda.
Después de conducir por el lado equivocado durante unos
segundos y escuchar su chillido, me di cuenta de que se suponía
que debía conducir por el lado izquierdo de la carretera y no por
el derecho. ¡Ups !

Condujimos a través de tierras de cultivo, que se abrieron a un
pueblo que se convirtió en una ciudad bulliciosa, todo en veinte
minutos. Fue una locura lo rápido que pasamos del medio de la
nada a edificios de apartamentos de cuatro pisos y un mercado.
—‘Acabamos de aterrizar ’—, me dijo Logan con ansiedad.

—'¿Estás bien?'—
Podía ver las señales del aeropuerto más adelante. —‘Estoy bien.
Estamos a cinco minutos de ti’—.
Mis ojos seguían moviéndose rápidamente hacia el espejo

retrovisor; Seguí oliendo el aire, cualquier cosa que me dijera si
Ardan estaba tras nuestro rastro. Yo no lo creía. No me había
cambiado y si él estuviera tras mi rastro, seguramente se habría
metido en el auto con su magia. ¿ Verdad ?
Llegamos al aeropuerto.
—¡Entrada de avión privado!— chilló el hada a mi lado. Había

estado volando todo este tiempo, no sentada en el asiento como
una persona normal, bueno, ella no era una persona, así que
tenía sentido. Seguí la señal de la pequeña entrada lateral que
conducía al hangar del avión privado. En el segundo en que
doblamos la esquina, un sollozo salió de mi garganta. No pensé
que me emocionaría del todo, pero ver a Logan, Isaac, Eva, Danny
y Keegan todos parados en la puerta esperando por mí me abrió
la boca. Esta era mi familia y casi muero sin ellos. Detuve el coche
y apreté el freno electrónico. Saltando, estaba apenas a dos pasos
de la calle cuando Logan acortó la distancia y me tomó en sus
brazos. Su cuerpo duro se estrelló contra el mío y las lágrimas se
escaparon de mis ojos. Su aroma amaderado me abrumaba
mientras inhalaba profundamente.
—Nunca más te perderé de vista. Lo siento mucho —, dijo con

brusquedad.

Me invadía tanta emoción que no podía hablar.
El hada se aclaró la garganta detrás de mí. —¿El asunto de mi

pago ?—
Logan me soltó. La manada estaba mirando a la criatura hada

flotante de diez centímetros de altura.
Le sonreí. —Sí. Paga a esta mujer lo que quiera. Ella me salvó la

vida —, le dije al grupo.
Isaac se aclaró la garganta con nerviosismo e hizo una mueca que

solo hacía cuando yo hacía algo estúpido o él se sentía incómodo.
Miré al hada, que sonreía de oreja a oreja.
—Isaac—, dijo ella. —Sabes lo que necesito. ¡Tiene que ser un

molar! Usted lo sabe —.
Mi rostro decayó. ¿Ella ... ella solo dijo molar ?
El buen druida se frotó la nuca con nerviosismo mientras mi

compañero se acercaba a él. —¿Cuál es el pago, Isaac?— La voz
de Logan podría cortar vidrio.
El hada gruñó de repente y se lanzó al rostro de Logan. —Me

prometieron el pago por salvar a tu Skyborn. ¡No me jodas! —
Tiró de su arco y la flecha brilló en azul.
Oh, mierda. El azul hacía desaparecer las cosas. Para siempre.
Logan parecía divertido, pero no sabía de lo que esta pequeña

cosa era capaz.
Levanté la mano. —¡Cálmate! Recibirás tu pago. Me salvaste la

vida. Es justo —.
Miró a Logan un segundo más, bajó la flecha y miró a Isaac.
A regañadientes, sacó un par de alicates increíblemente grandes.

Los ojos de Logan se agrandaron. —¡Lo sabías !—
Isaac miró al suelo. —Nunca hubieras estado de acuerdo. Es solo

un diente y luego podemos irnos a casa. El crecerá de vuelta—.
Casa. La tierra de Isaac y nuestra casita sobre la cascada eran

ahora nuestro hogar. Lo deseaba tanto. Si el brazo de Logan
pudiera volver a crecer, seguramente mi diente lo haría.
—Toma el mío—, gruñó Logan. —Usted no la está tocando —.
El hada pareció ofendida. —¡No soy un hombre!—
Todos lucimos confundidos hasta que Eva dio un paso adelante,

con una mirada de fascinación en su rostro. —Se rumorea que
una hada puede ... consumir el diente de una mujer Skyborn y le
dará una forma y un tamaño idénticos a los de esa mujer nacida
del cielo durante más de una década antes de que vuelva a su
forma pequeña —.
El hada asintió. —Así es, y he sido pequeña durante demasiado

tiempo. No me gusta tener un pene, así que tiene que ser su
diente —.
Mi cerebro todavía estaba atascado en la palabra consumir . ¿Se

iba a comer mi diente? Un escalofrío me recorrió. Esta cosa dulce
no era dulce en absoluto. No es de extrañar que felicitara mis
dientes cuando me vio por primera vez.
Casey, Lynn, Nadine y el bebé, estaban todos en casa ...
—Solo hazlo. Quiero largarme de aquí —le grité a Isaac.
Asintió, dando un paso adelante.
—¡Espera!— Logan gritó. Miró a Danny y Eva. —¿No puedes

adormecerla o algo así?—
—No mucho, pero ayudará un poco—. Eva dio un paso adelante

y puso una gasa amarilla de magia sobre mi cara. De repente,

mis labios se aflojaron y supe en un momento que habría baba
allí.
—Abre,— ordenó Isaac. Mi mano apretó la de Logan. Danny se

deslizó detrás de mí y abrí la boca mientras el hada apareció a la
vista.
—¡Quiero ése!— dijo, señalando codiciosamente a mi molar

trasero izquierdo como si fuera de alguna manera superior a mis
otros dientes.
La gran mano llena de tenazas de Isaac apareció a la vista y sentí

el frío metal, abriéndose camino hasta la parte posterior de mi
boca. Miré a Logan, quien miró hacia otro lado, hacia el suelo.
Hubo un clic metálico y luego el dolor estalló en mi mandíbula.
Un gemido con gárgaras llenas de babas salió de mi garganta y
luego perdí el conocimiento.

—¡Se suponía que debías darle un hechizo de dolor!— Logan
rugió.
—El hechizo es para un dolor leve—, escuché a Eva tomar

represalias. —Se rompió cuando Isaac le arrancó el diente de la
mandíbula —.
Gemí, abriendo mis ojos. —Mmm bien—, balbuceé. Mi mandíbula

estaba hinchada y en carne viva. Podía saborear la sangre y noté
entonces que mi cabeza estaba apoyada en el regazo de alguien.
Al levantar la vista, la preciosa cara de Danny inundo mi vista.
Acarició mi frente. —Hola, amor —.
Sonreí, pero luego hice una mueca porque eso dolía. —Te
extanee—, le dije sobre la hinchazón. Danny y Nadine se habían
convertido en mis amigos más cercanos a través de todo esto.
Él sonrió. —Yo también te extrañé. Pero me alegro mucho de que

no tuvieras que ver a esa perra devorar tu diente como si no
hubiera comido en años, y luego crecer cinco pies justo delante
de mis ojos. Voy a tener pesadillas para siempre —.
Me incorporé de un tirón, el dolor punzante en la boca aumentó

y miré a mi alrededor. El Jeep se había ido. Ella se había ido.
—¿Realmente se lo comió?— Yo pregunté. La curación de mi

cambiaformas ya estaba haciendo efecto, así que mi mandíbula
no dolía tanto, no estaba tan hinchada.
Danny se estremeció. —Como si fuera una trufa de dos mil

dólares —.
Oh, Dios. Desagradable. —¿Ella es alta ahora?— Mi mente no

pudo procesar eso.

Danny se inclinó hacia adelante. —No solo alta. Ella ... se parecía
a ti. No en la cara, pero tenía ese grupo de pecas junto a la
clavícula —. Hizo un gesto hacia mi pecho.
Mi mano voló hasta mi clavícula. —¿Siguen ahí los míos?—

Pregunté, presa del pánico. ¡Quizás ella los tomó, maldita ladrón
de cuerpos!
Eva sonrió. —Por supuesto que todavía están allí. Ella solo
reprodujo tu tipo de cuerpo. Nada más —.
Esta ... mujer iba a caminar en mi cuerpo durante la próxima

década. Qué inquietante. Entonces me di cuenta. Ella era el hada
de los dientes . No sabía si reír o llorar.
—Está bien—, ladró Keegan mientras Logan me ayudaba a

ponerme de pie. —Le hemos pagado al hada, hemos recuperado
a Sloane. ¡Vámonos de aquí ! —
—¿Estás bien?— preguntó mi compañero, sus dedos acariciaron

tiernamente mi sensible mandíbula.
Un hada de diez centímetros acaba de comerse mi diente y ahora

iba a ver a su novio y hacer Dios sabe qué con mi cuerpo ...
—Estoy bien —.
Iba a meter ese conocimiento en mi profundo lugar oscuro y

trataría de olvidarme de ella.
Danny le disparó al alfa una mirada furiosa. Bueno, no parecía

que lo estuvieran haciendo mejor, pero él también se puso de pie,
y luego nos pusimos en camino, caminando hacia un pequeño
avión privado que debe haber costado una fortuna reservar en el
último minuto.
Mientras subíamos al avión pequeño, Logan extendió la mano

para levantarme y vi el tatuaje nuevo en su brazo.

—¡No!— Grité mientras miraba la pequeña cabeza de oso justo al
lado de la pequeña barba roja.
Ruben…
Sospeché que podría haber sido gravemente herido ... ¿pero

muerto? Dios ... el dolor se apoderó de mí al pensar en otro
miembro de nuestra manada caído. Logan hizo una mueca y
me levantó mientras lágrimas calientes corrían por mis mejillas.
—¡No me lo dijiste!— Grité. Probablemente inteligente
considerando que estaba tratando de mantenerme con vida, pero
aun así. Pobre Ruben ... que murió protegiendome.
Keegan se aclaró la garganta y se paró detrás de mí. —Fue mi

culpa. Fue idea mía separarte a ti y a Logan. Pensé que enviarte
con un solo cambiaformas sería más limpio y rápido, que no
llamarías la atención sin un gran detalle de seguridad. No
sospechaba que los druidas estuvieran encima de nosotros —. Su
voz se quebró por un segundo y supe que se lo estaba tomando
mal. Estos cambiaformas eran suyos para proteger.
Steven y Ardan no habían causado nada más que dolor en

nuestras vidas. ¡Los quería a los dos muertos!
—Necesitamos eliminar a Ardan. ¡Estoy harta de esto!— Gruñí

mientras una azafata se acercaba por el intercomunicador y nos
pedía que nos sentáramos y nos abrocháramos el cinturón.
Isaac, descalzo y sosteniendo uno de sus bastones, asintió.

—Pero tu varita de tierra ha sido destruida —.
Oh sí. Eso. Y Griddish estaba muerto, así que no quedaban más

elfos para hacerme otro.
Me encogí de hombros. —Tal vez podamos derrotarlo sin mi

bastón...—
Isaac negó con la cabeza. —Te partirás en dos. Incluso ahora tu

magia está rota —.

Logan se puso rígido a mi lado. —¿Ella va a estar bien ?—
Isaac me miró durante mucho tiempo. Demasiado tiempo. —Eso

espero. Necesitamos una nueva ancla para su magia —.
No jodas, Sherlock. —Bueno, Griddish está muerto, así que

estamos jodidos, ¿verdad? A menos que tengas otros 'amigos' de
los que deba saber —, le pregunté, un poco amargamente.
Quizás estaba escondiendo toda una red de criaturas mágicas.
Isaac solo sonrió. —Tengo algunos amigos más especiales, pero

ninguno que pueda ayudarnos con este problema —.
Danny levantó la mano como si estuviera en la clase de jardín de

infantes.
—¿Qué?— Le pregunté al hechicero.
Hizo una mueca. —Perdóname, pero ... ¿no dijiste que tu mamá
tenía un collar especial ?—
Fruncí el ceño, mis cejas se juntaron. —Sí, lo hacía —.
Isaac se levantó de un salto. —¡Sí! Necesitamos el collar de tu

madre. Su poder es tan similar al tuyo, estoy seguro de que
funcionaría —.
Eva asintió con la cabeza como si estuviera de acuerdo con este

estúpido plan.
Umm, ¿se estaban olvidando de algo?
Mi boca se abrió de golpe. —¡Por favor, dime que no estás

sugiriendo que desentierre el CUERPO DE MI MADRE!— Grité,
con suerte para hacerles entrar en razón.
Danny apretó su pecho dramáticamente. —¡Dios no! Logan y

Keegan lo harán —. Hizo un gesto con la mano en su dirección
general.

Keegan se burló, echando la cabeza hacia atrás, pero Isaac
asintió, sus ojos brillaban como si este fuera el mejor plan de
todos. —Sí. Este collar es exactamente lo que necesitamos. Dile
al piloto que vaya a Arizona —.
Oh. Mi. Dios. Iba a necesitar tanta terapia cuando terminara toda
esta aventura.
***
Después que aterrizamos, compré unas flores para poner en la

tumba de mi madre.
Los chicos compraron palas.
Sabía que ella no estaba en la tumba que estábamos a punto de

profanar. Eso eran solo huesos, un cuerpo que una vez albergó
su alma. Pero aun así… perturbar su lugar de descanso me
estaba causando ansiedad, trayendo de vuelta todos los viejos
recuerdos de ella. Ella hubiera querido que yo tuviera su collar.
Nunca imaginé hacerlo de esta manera. Para ella era muy
importante. Quería que descansara con ella, pero el universo
tenía otros planes.
Alquilamos una camioneta grande y nos relajamos, conduciendo

por la ciudad hasta el anochecer. Fuera de las puertas cerradas
del cementerio en Tempe, Arizona, miré a mi alrededor, mi lengua
explorando el enorme agujero en la parte posterior de mi boca
donde antes había estado mi diente, mientras Eva hacía algo de
magia en la cerradura de la puerta. Tempe era la ciudad en la
que mi madre y yo habíamos vivido, en la que ella había
enseñado. Incluso desde donde estábamos, podía ver las luces
del estadio de la ASU. Debe haberse estado jugando un partido.

Isaac se inclinó cerca de mí desde donde yo estaba sentada en la
camioneta. —Ya sabes, Sloane—, susurró. —Un entierro
adecuado para tu madre, como druida terrestre, sería colocarla
directamente sobre la Madre Tierra y no en una caja que impida
que la energía de Gaia acceda a ese druida que se fue —.
Me reí. —Sabes, eso es algo que mi mamá dijo en sus últimos

momentos. Que no la pusiera en un ataúd, solo que la dejara en
la Tierra —. Lo había olvidado por completo hasta ahora. Lo había
descartado como una charla loca, junto con el resto de las cosas
salvajes que había dicho sobre los dragones y la magia. Ojalá
pudiera recordarlo todo, pero en ese momento estaba
entumecida. Ella lo había estado haciendo mejor; los
tratamientos contra el cáncer estaban funcionando, y luego se
hundió durante la noche y murió horas después.
Se me llenaron los ojos de lágrimas y asentí con la cabeza hacia

Isaac. Sabía que me estaba pidiendo permiso para dejarla
descansar adecuadamente después de que la exhumamos y
tomáramos el collar.
Apretó mi mano y asintió con la cabeza.
La apertura de las puertas atrajo mi atención al cementerio. Los

fantasmas eran mi kriptonita. No podía ver películas de terror
que presentaban posesiones o fantasmas, porque creía en esa
mierda. Me asustó hasta la médula. Solo vine aquí los domingos
durante el día; mi razonamiento era que los domingos eran días
de iglesia y los fantasmas no perseguían a la gente en esos días.
Lógica débil, pero funcionó para mantener el miedo a raya.
Hoy no era domingo. No era de día tampoco.
—¿Los fantasmas son reales?— Le pregunté a Danny en el

asiento delantero. Pensé que si alguien tenía la capacidad de
verlos, o sabía de ellos, sería él.
Hizo una mueca. —Sí, muchacha. Pero no como piensas. La gente

común simplemente muere y se va a donde sea, al otro lugar.

Pero los que hicieron cosas realmente malas en la vida, como a
los niños pequeños e inocentes, no se quieren ir. Así que se
quedan y ... —
Extendí una mano para detenerlo. Mi corazón latía con fuerza en

mi pecho, mi dragón amenazaba con liberarse. —No importa. No
quiero saber —.
Danny se limitó a sonreír. —Estarás bien. Estás conmigo —.
Asentí con la cabeza, pero la gravedad de la situación me golpeó

entonces. Estábamos entrando a escondidas en un cementerio y
cavando la tumba de mi pobre madre para robar su collar. Me
sentí enferma.
—¿Estás bien? ¿Quieres ayuda para relajarte?— Preguntó

Danny, y un símbolo mágico amarillo se arrastró desde su palma
y se cernió sobre su mano.
Me encogí de hombros. ¿Por qué no? Agitó una mano en mi

dirección y el símbolo amarillo brillante salió disparado y se
estrelló contra mi frente. En el momento en que impactó, una
calidez y paz se extendió por todo mi ser, calmando mis nervios
y mi dragón. Di un suspiro de satisfacción y me hundí en el cojín
del asiento. —¿Qué fue eso?— Pregunté, sintiéndome un poco
loca y emocionada.
Danny se limitó a sonreír. —Una especie de valium mágico si se

quiere. Solo dura unos diez minutos. Ayuda con los ataques de
pánico y ese tipo de cosas —.
Logan hizo un ruido extraño con la garganta desde el asiento

delantero, pero no dijo nada mientras nos conducía a través de
la valla. Isaac se sentó en silencio mirando por la ventana,
mientras Eva y Keegan estaban a pie afuera y nos siguieron al
trote.
—Ve a la derecha—, le dije mientras el camino se dividía. Mi

madre estaba al borde del cementerio. Había estado aquí tantas

veces que podía caminar con los ojos vendados. Una vez que
Logan llegó al final de la calle, se estacionó y yo señalé en la
dirección de la lápida.
—Ella está allí.— Me pellizcó la garganta.
Logan asintió y luego miró a Danny. El hechicero se acercó y tocó

mi mano.
—Oye, amor, vamos a dar una vuelta. Regresaremos cuando todo

haya terminado —.
Esa fue una gran idea, porque estaban a punto de desenterrar el

cuerpo de mi hermosa madre y quitarle el collar de sus huesos y
no podía ver nada de eso. Ni siquiera podía pensar en eso. Si no
fuera por este Valium mágico sería un desastre caliente justo
ahora.
Solo asentí.
Isaac se inclinó sobre mi regazo y agarró las flores que sostenía.

—Voy a hacer lo correcto por ella—, me prometió. —Darle un
entierro de druida de la tierra —.
Mi garganta se pellizcó cuando las lágrimas se escaparon de mis

ojos. Es lo que ella hubiera querido. Mi madre ... la druida de
batalla. No podía expresar mi gratitud sin caer en un charco de
lágrimas, así que solo asentí.
La puerta del auto se abrió y Logan estaba parado allí. Danny,

que había estado en el asiento del pasajero delantero, salió del
auto y se sentó en el asiento del conductor. Me paré y caí en los
brazos de mi pareja. Iba a desenterrar un cuerpo para mí. Este
hombre merecía un premio por su lealtad.
—Te amo—, le susurré.
Se apartó y me miró a los ojos. —‘Y yo te amo’— , dijo, a través

del vínculo.

Le apreté la mano y eché una última mirada por encima del
hombro a la tumba intacta de mi madre antes de volver al coche.
El hechizo mágico de Valium de Danny había desaparecido y me
volvía a sentir melancólica.
Lo siento, mamá, pero sé que es lo que hubieras querido.
En el segundo en que cerré la puerta, Danny aceleró el coche y

los neumáticos chirriaron un poco.
Le arqueé una ceja al hechicero. — ¿ Tienes prisa ?—
Me dio una rápida mirada de reojo. —No me gusta la muerte —.
Me acomodé en mi asiento para el paseo. Lo entendí. Algunas

personas estaban bien con la muerte y el oscuro arte de morir,
otras no tanto.
—Sabea, yo tenía una hermana,— Danny me dijo mientras se

abría camino para salir de la puerta y me llevó a la derecha en la
Avenida Universidad.
Me incorporé un poco más recta. —¿Qué pasó?— Tenía una

hermana. Sentencia en Pasado.
Danny miró fijamente a los coches que pasaban y pasó un

momento antes de que hablara. —Conductor ebrio. Ella era una
bruja de sangre pura y la sacó un conductor ebrio —. Sus
nudillos agarraron el volante.
Me dolía el corazón por él. No podía imaginarme perder a un

hermano. Ese tipo de pérdida ... se quedaba contigo para
siempre. —¿Qué edad tenía ella ?—
Danny suspiró. —Dieciséis. Yo tenía dieciocho. Lo más irónico de

todo es que mostró afinidad por la curación, pero murió
instantáneamente. No se pudo haber hecho nada. No estuve bien
durante mucho tiempo después de eso —.

Dieciséis. Dulce Jesús. ¿Por qué les sucedía una mierda horrible
a niños inocentes? Hizo hervir mi sangre.
—Sí, algunos días me pregunto si estoy bien ahora—, le dije con

sinceridad.
Se rio entre dientes, girando hacia Avenida Mill. —Yo también,

niña. Yo también —.
Nunca sería la misma persona que era cuando mi madre estaba

viva y sana. Esa inocente y feliz Sloane había muerto. —Logan
me hace sentir bien—, dije con sinceridad.
Él asintió con la cabeza, cuando pasamos a un policía de

bicicletas. —Keegan me hizo sentir bien también .—
Mi corazón se aceleró. Oh, cómo deseaba poder obligar a esos dos

a volver a estar juntos. ¡Eran perfectos el uno para el otro y
miserables separados! Pero la vida no funcionaba de esa manera.
Necesitaba averiguarlo él mismo. —¿Quizás puedas confiar en él
... una vez más?— Yo ofrecí. Si lo jodía de nuevo le daría una
patada en los huevos por mí misma.
Danny se quedó callado durante un minuto entero viendo el

espectáculo que era Avenida Mill por la noche. Estudiantes
universitarios borrachos salían de los bares y hablaban en voz
alta con el tipo de gestos locos con las manos que solo haría una
persona extremadamente intoxicada. —Sí, tal vez podría—, dijo
finalmente. Sonaba derrotado, como si él no tuviera la energía
para mantenerse alejado de Keegan más tiempo.
Algo en mi corazón se elevó entonces. No quería presionarlo, pero

su admisión me llenó de alegría. Había pasado mucho tiempo con
Keegan y Danny, y el amor seguía siendo tan fuerte entre ellos.
Los músculos de Danny se tensaron de repente cuando sus ojos

escudriñaron la carretera.

—¿Qué es?— Le pregunté, sentándome hacia adelante en mi
asiento y mirando a los juerguistas borrachos. Había un grupo
de hippies golpeando la batería, haciendo música genial, pero
nada que pareciera peligroso.
—Acabo de tener esta sensación en las últimas horas ... como si

me estuvieran observando—, dijo, y se lo quitó de encima con un
movimiento de cabeza.
Todo mi cuerpo se congeló, recordé que me había olvidado de

decirle algo muy, muy importante.
—Um, sí ... hipotéticamente, si le dijera a otro brujo, donde

estaba el ojo, podría conseguirlo y espiarnos a nosotros ?—
Danny frenó con tanta fuerza que mi cara casi golpeó el tablero .
—¡Sloane Murphy! ¡Dime que no lo hiciste! — rugió, y los autos

detrás de nosotros tocaron sus bocinas.
Me estremecí. —Yo lo hice. Fue lo único que podría ganarme

tiempo sin ser torturada —.
El hechicero gruñó, un gruñido honesto con Dios, y luego lo

disparó. —¡Usted debería habernos contado!—
Bueno, mierda, ¡yo estaba un poco ocupada consiguiendo que mi

diente fuera arrancado!
—Lo siento, se me debe haber olvidado cuando me desperté y me

dijiste que un hada se comió los dientes y creció un metro y
medio—. Rugí de vuelta. Y darme cuenta de que Rubén había
muerto me destripó por completo y me hizo olvidar que incluso
había dicho la verdad sobre El Ojo.
Giró bruscamente a la derecha y se dirigió hacia el cementerio.

—Okey. Buen punto, pero no soy lo suficientemente fuerte para
protegernos de El Ojo. Necesitamos a Eva —.
Saqué mi teléfono y le envié un mensaje de texto a Eva.

–Oopsie se olvidó mencionar que los druidas ahora podrían tener
El Ojo. Puedes protegernos? —
Sin respuesta. Probablemente estaba muy ocupada con los restos

de mi madre.
—Okey. No entremos en pánico —, dijo Danny en voz alta, casi

para sí mismo.
—'¿Todo bien?'— Le pregunté a Logan. ¿Qué pasaría si los

druidas estuvieran ahora en el cementerio, luchando contra
Logan por el invaluable collar de mi madre? Apuesto que Ardan
de alguna manera podría tomar el poder de ella.
—'Bien. ¿Por qué?'— fue su respuesta .
—‘Dile a Eva que revisé su teléfono ...’— le dije. Estaba demasiado

asustada para admitir lo que había hecho. Debería habérselo
dicho antes, pero estaba demasiado preocupada por el hada y
luego la mención de Danny de conseguir el collar de mi madre y
la muerte de Ruben ...
Un segundo después pude sentir los nervios a través del vínculo.

—‘Regresa aquí. ¡ Ahora !’ —
Mierda. Si hubiera una clase de fastidiarla, obtendría una A+.
Danny condujo duro y rápido de regreso al cementerio, volando

a través de las puertas abiertas.
En el segundo en que llegamos al final del camino, vi un

resplandor blanco brillante. Logan, Keegan y Eva fueron
iluminados por él. Isaac estaba de rodillas haciendo algo en el
suelo, de donde venía la luz. Mi garganta se apretó mientras huía
del coche. Esa luz, me atrajo tanto. Era suave pero magnífica.
Cuando me acerqué, Logan se giró y corrió hacia mí.
—Estás a salvo—, suspiró, tomándome en sus brazos.
Asentí y miré la luz. —¿Es eso…?— No podría decirlo.

Logan tomó mi mano y me llevó al montículo de tierra donde Isaac
se arrodilló antes.
—‘Isaac dijo que es la esencia de tu madre que finalmente se une

a la Tierra.’— Me lo dijo mentalmente. —‘Todos los huesos están
enterrados para que no veas nada ... desagradable’ —.
Por eso estaba agradecida.
La luz se filtraba ahora del montículo de tierra en astillas. La

varita de Isaac fue empujada a la tierra mientras su bola de
cristal naranja pulsaba en la punta. No había tenido mi varita de
tierra por mucho tiempo, pero mis dedos ansiaban tocarla de
nuevo, sentir ese poder y seguridad. ¿Y si el collar de mi mamá
nunca me daba eso? Los pulsos de luz se hicieron más rápidos a
medida que me acercaba, y de repente se encendió tanto que tuve
que protegerme los ojos y apartar la mirada. Después de treinta
segundos completos de brillo, se detuvo abruptamente y miré el
montículo con asombro.
—¿Qué es?— Le pregunté a Isaac, mientras mis ojos vagaban

sobre la única flor blanca que ahora estaba en el centro del
montículo que contenía los restos de mi madre. Los ojos de Isaac
estaban llenos de lágrimas.
—Es una flor de vida. Confirmación de la Tierra de que la esencia

de tu madre ha sido recibida y redistribuida en Nwyfre. Ahora es
parte de la energía que usarás para luchar y curarte. Ella es una
con la Madre Tierra de nuevo —. Su voz croó un poco de asombro.
Caí de rodillas ante la única flor blanca. Me di cuenta de que era

una flor de amapola, la favorita de mi madre. Las lágrimas corrían
libremente por mis mejillas, mi garganta se apretó. Todo este
tiempo había mantenido a mi madre en una caja y lejos de la
Tierra. No lo sabía. Ahora ella estaba ... en todas partes. Casi
podía sentir una pizca de su energía única cuando puse mis
manos en el suelo.

Isaac se inclinó más hacia mí. —La última flor de vida que vi fue
la de mi propia madre. Si la hueles, su aroma será
exclusivamente suyo —.
Su proclamación me sorprendió. ¿Esta amapola iba a oler como

mi madre? ¿Mi madre fallecida? Mi corazón dio un vuelco cuando
me incliné hacia adelante con manos temblorosas. Lo que no
daría por volver a respirar su aroma. Me había quedado con uno
de sus suéteres, pero ya apenas contenía su perfume. Había
adquirido el aroma único de “vivir en un automóvil”.
Cuando mi cara se acercó a la amapola, inhalé. Cuando el olor

me golpeó, un sollozo salió de mi garganta.
Mamá.
Romero, lavanda y mamá . olía como ella. Entonces mi sollozo se

convirtió en una risa en toda regla, fue tan loco.
Isaac también se ri. —Increíble, ¿no?— preguntó, sonriéndome.

Sólo él sabía cómo era.
Asentí. Quería arrancar la flor y conservarla para siempre, pero

sabía que si lo hacía moriría. Mejor mantenerla aquí y esperar
que se mantuviera viva para poder ir a olerla en cualquier
momento que quisiera.
—Te quiero, mamá. Te voy a hacer sentir orgullosa —, le dije a la

flor. Entonces, una mano cálida cayó sobre mi hombro y supe
que era Logan.
—Deberíamos salir—, dijo Logan, por encima de mi hombro. Eva

cree que los druidas están cerca. Ahora nos ha protegido, pero
tenemos que volver a California —.
Tomé una bocanada más de la flor y no pude evitar la sonrisa que

apareció en mi rostro. En cierta forma, Isaac la había traído a la
vida de nuevo.

—Gracias,— le dije al druida, caminamos de regreso al auto.
Isaac tenía algo en la mano, envuelto en una tela blanca. —De

nada—, dijo, y me entregó la tela.
Estaba un poco húmedo, y cuando lo abrí y vi el collar de mi

madre, me alegré. Lo habían lavado y el gran rubí rojo brillaba a
la luz de la luna. Toqué esta cosa un millón de veces, más cuando
era niña, sentada en su regazo o acostada con ella, pero nunca
me la había puesto. Nunca.
—¿Debería ... hacer esto ahora?— Le pregunté, mientras todos se

amontonaban en la camioneta.
Isaac asintió. —Si tiene ... algún tipo de reacción, yo preferiría

que suceda aquí que en la tierra donde te pueden realizar un
seguimiento —.
Con mi historial, la reacción iba a ser insuficiente.
—¿Qué pasa si no funciona como lo hizo mi bastón? ¿Para

perfeccionar y anclar mis poderes? — Le pregunté a mi mentor.
Ese maldito bastón era perfecto para mí. Todavía negaba que se
hubiera ido.
Él se encogió de hombros. —Entonces iremos al plan B —.
Arqueé una ceja. —¿Qué es… ?—
Una lenta sonrisa se deslizó por su rostro. —Todavía estoy

trabajando en eso —.
¡Ja! El plan B no era nada. Genial . Todos estaban en el auto

ahora excepto Logan. Había venido a pararse pacientemente a mi
lado .
—Tienes esto—, dijo .
Correcto. Como si una explosión nuclear de color púrpura no

estuviera a punto de salir disparada de mí y ponerme en coma.

Por favor, no me dispares y me pongas en un estado de coma, Oré.
Tenía que creer que nada de lo que había creado mi madre podría
lastimarme. Abriendo el candado, lo deslicé alrededor de mi
cuello, conteniendo la respiración mientras Logan fijaba el broche
detrás de mí.
—Quítate los zapatos—, gruñó Isaac .
Oh. Cierto. Zapatos estúpidos.
El rubí frío y pesado yacía contra mi piel, enviando pequeñas

chispas de poder a lo largo de mis nervios, pero nada aterrador.
En el momento en que mis pies descalzos tocaron el suelo, una
ola de calor brotó dentro de mí y amenazó con hacerme explotar.
Fue rápido y caliente, pero se apagó igual de rápido.
—Estás sonrojada—, dijo Logan, preocupado.
—Estoy bien—, chillé. Un depósito de poder se había abierto

como un sumidero dentro de mí, tan vasto y… vivo. El calor
enrojeció mi piel por un momento mientras un leve zumbido se
construía en mi pecho. Respiré hondo y se asentó, pero todavía
estaba allí, justo debajo de la superficie, listo y esperando.
—Magia de fuego—, dijo Isaac, y pasó su mano sobre mi energía,

a siete centímetros de mi cuerpo. Podía sentir algún tipo de tirón,
como si mi cuerpo le respondiera, a pesar de que no me estaba
tocando. Mi dragón se deslizó dentro de mí, empujando contra la
magia allí. Era como si me hubieran llenado donde antes estaba
medio vacío, y ahora estaban compitiendo por el espacio. La
advertencia de Isaac de mantener a mi dragón fuerte para que mi
magia druida no la consumiera saltó a la vanguardia de mi
mente.
Mantente fuerte, chica , le dije a ella .
—¡Vamos!— Eva gritó por la ventana, golpeando la puerta con la

palma abierta.

Casi había olvidado que los druidas nos perseguían,
posiblemente con El Ojo. De la forma en que salí de Irlanda,
Ardan estaba sin duda dispuesto a arrancarme la cabeza y beber
mi magia en un estallido de furia. Me volví para irme cuando
Isaac me agarró del brazo.
—No tan rápido. Quiero verte usarlo —, dijo .
—¿Usar mi magia? ¿Aquí?— Miré el lugar público. Por supuesto

que estaba cerrado, pero no había forma de saber qué podría
hacer mi fuego púrpura en un lugar como este. Un lugar de
descanso.
Isaac asintió. —No puedo permitir que experimentes con magia

tan poderosa en la tierra y traigas a los cazadores. Tu dragón está
cerca de la superficie. No le gusta el nuevo torrente de poder. Si
va a salir, mejor aquí —.
¡Este maldito hippie era un lector de mentes! ¿Cómo diablos sabía

todo eso? Sabía que era mejor no preguntarle. Pero tenía razón.
El collar de mi madre era diferente. No era como el bastón,
anclándome a la Tierra. Era como un maldito faro, canalizando
cantidades incalculables de magia a través de mí, Y anclándome
a la Tierra, pero solo un poco. Mi dragón estaba incómodo con la
cantidad de magia que zumbaba alrededor de mi cuerpo.
Necesitaba probarlo aquí y asegurarme de que no me obligara a
cambiar.
Yo asentí.
—Espera.— Logan me agarró del brazo. —¿Es seguro ?—
Nadie dijo nada. La verdad es que no lo sabíamos. Pero, de nuevo,

tenía que creer que nada de lo que mi madre hizo podría
perjudicarme.
—Estaré bien—, mentí .

Soltó mi brazo mientras yo caminaba hacia un pequeño árbol
joven. Un árbol de sissoo. El árbol estaba recién plantado y solo
tenía unos cuatro pies de altura. Odiaba experimentar algo con
él, pero si lo dañaba, prometí plantar dos árboles nuevos
mañana. Tal como me enseñó Isaac. No tenía bastón para
señalar, así que no estaba exactamente segura de dónde saldría
la magia hasta que sentí que mis manos se calentaban
ligeramente.
—Eso es,— la voz profunda y tranquilizadora de Isaac llegó por

encima de mi hombro. —Simplemente conecta tus pies con la
Madre Tierra y deja que tu magia de fuego fluya fuera de ti —.
Sabía que estábamos en una crisis de tiempo, así que sin

ceremonia levanté mis manos hacia el árbol.
Vamos, mamá, ayúdame, Le recé al collar, como si de alguna

manera tuviera una parte de ella. Con una respiración profunda,
me concentré en mis cálidas palmas y ... empujé. No había otra
forma de explicarlo, simplemente exprimí la magia de mis palmas
y una corriente de fuego púrpura envolvió el árbol,
consumiéndolo por completo. Sacudí mis manos y se detuvo,
tropecé hacia atrás.
En todas las semanas de entrenamiento con mi bastón apenas

pude obtener un rayo concentrado de magia, y ahora era como si
una manguera de fuego hubiera apagado el arbolito y más allá.
Danny corrió hacia adelante con un hechizo mágico para apagar
el fuego.
Isaac me miró con una sonrisa. —Ardan va a sufrir una muerte

ardiente—, declaró.
Sonreí. Sí ... sí lo haría.

El viaje de Arizona a la tierra de Isaac en el norte de California
tomó el doble de tiempo porque Eva tuvo que seguir lanzando
hechizos de escudo para contrarrestar el Ojo que nos buscaba.
Tomamos una ruta en zigzag para deshacernos de ellos y luego,
finalmente, nos detuvimos a través de las altas secuoyas y
llegamos a la tierra. El momento más loco del viaje llegó cuando
Eva recibió una llamada de Lynn, diciendo que anoche su collar
se había encendido y parecía estar funcionando de nuevo.
Especulamos que mi magia de fuego estaba alimentando el collar
de mi madre y la enviaba hacia el de ellos. Los collares de Geoff
y Casey también volvían a funcionar, y esa era la mejor noticia
que había escuchado en semanas.
—¿Hemos tenido noticias de Dee?— Pregunté, mientras

conducíamos entre las grandes secuoyas que salpicaban el
perímetro de la tierra de Isaac. La nueva alfa femenina que
Keegan había contratado había estado manteniendo el fuerte en
nuestra ausencia. En cualquier ocasión normal, eso sería un
gran problema, pero con el nuevo bebé de Lynn, a quien supe que
llamaba Lily en honor a mi madre, era aún más desafiante.
Eva asintió. —Me envió un mensaje de texto para decir que todo
estaba bien. Las protecciones que puse en la habitación de Lily
parecen estar aguantando —.
Lily era un adorable dragón naranja y crema cuando cambió,

pero desde que el cambio trajo a los druidas, era menos adorable
y más… aterrador. Gracias a Dios, Eva pudo hechizar un
pequeño espacio que le permitió cambiar libremente sin ser
detectada.

—Entonces, ¿Lily no puede salir de la habitación?— Yo pregunté.
Eso sonaba bien por ahora; ella era solo una bebé que dormía y
hacía caca todo el día. Pero cuando empezará a gatear y
necesitará más espacio, eso podría convertirse en un problema
grave.
Eva frunció el ceño. —No, ella no puede. La única razón por la

que mis hechizos de ocultación funcionan es porque ella es muy
pequeña. Su cambio no produce mucho rastro mágico, pero a
medida que crezca ... — Dejó que la frase colgara abierta y todos
la leímos, alto y claro. —Y solo tengo una parte de los ingredientes
mágicos necesarios para el hechizo. Cuando nos quedemos sin
ellos...—
La fatalidad y la tristeza era básicamente lo que estaba diciendo.
Logan maniobró el SUV en el espacio vacío detrás de los dos

enormes autobuses de los que ahora éramos dueños. Extrañaba
el autobús escolar amarillo brillante. Ahora era un bronceado
descolorido, fingiendo ser de un hogar de ancianos.
Había extrañado a todo el mundo, incluso a Sophie, si era

honesta. La puerta del coche se abrió y todos salimos, doloridos
por el largo viaje. Todavía usaba el collar de mi madre, pero no
había probado más magia desde que quemé el árbol. Algo me dio
la sensación de que Isaac y yo íbamos a entrenar mucho en un
futuro cercano.
—¡Sloane!— Nadine chilló. Me aparté del coche y corrí hacia esa

voz. Pero patiné hasta detenerme cuando la vi parada allí,
agarrada de la mano de Gear. ¡Tomados de la mano!
¿Qué demonios? Me había ido como dos días. Una lenta sonrisa
se deslizó por mi rostro. Nadine sabía exactamente lo que estaba
haciendo cuando dejó la manada. Ella estaba consiguiendo a su
hombre.
Miró a sus manos entrelazadas y se sonrojó antes de dejar caer

su mano y venir a envolver sus brazos alrededor de mí.

—Estábamos todos tan preocupados—, suspiró. A medida que
sus brazos se apretaron a mi alrededor, vi el tatuaje fresco de la
cabeza de oso en su bíceps y me acordé de Ruben, nuestro dulce
cambiaformas oso que cayó protegiéndome.
—Rubén—, le dije, con lágrimas en los ojos mientras ella se

alejaba.
—Está cenando en el cielo con Cooper—, dijo Roxy, detrás de mí.
Me quedé helada. No estaba preparada para verla. Ni siquiera

supe qué decir. Dando vueltas, rápidamente me sequé las
lágrimas. —Yo lo, lo, lo si… —
Ella levantó una mano. —No nos criaron como tú, pensando que
la muerte es algo débil y triste. Morir por proteger a un nacido en
el cielo es la mayor gloria que puedes tener. Mi familia está muy
orgullosa. Lo extrañaremos, pero estamos orgullosos de él —. Su
rostro era una mezcla de exactamente eso, anhelo y orgullo. No
iba a tomar eso de ella.
—Está bien—, dije, pero todavía me sentía como si estuviera

esperando que el gran bruto caminara por la esquina. La muerte
era extraña. Se tomó un tiempo para asimilarlo.
—Okey.— Ella asintió y me dio un abrazo lateral.
—Tenías que irte y ser secuestrada por los malos, ¿no?— Gritó la
voz de Sophie. Tenía los ojos enrojecidos y parecía que no había
dormido en un tiempo. La muerte de Ruben debe haberla
aplastado, ellos se estaban acercando antes de que su vida fuera
tomada.
Sonreí mientras giraba. —Y tu tenías que restregármelo, no?—
La Sra. Boobs estaba parada con una mano en su cadera,

dándome una mirada fingida. —La carrera de obstáculos se ha
estado enfriando.—

Sonreí, pero se desvaneció rápidamente cuando pensé en cómo
Rubén había ayudado a construir el curso y me había ayudado a
entrenar. Sophie debe haber tenido el mismo pensamiento,
porque su cara cayó también.
—Vamos, Dominic cocinó. Es un milagro verlo —, dijo Sophie, y

todos caminamos hacia el campamento.
Cuando miré hacia atrás, Logan y Keegan estaban desempacando

el auto y él me hizo señas para que siguiera adelante, haciéndome
saber que no necesitaba mi ayuda. Gear había dejado a Nadine
para ayudar a los chicos, así que ahora solo estábamos Roxy,
Sophie, Nadine y yo. Cuando estábamos fuera del alcance del
oído de los chicos, pero aún no en el campamento, me detuve y
giré hacia Nadine.
—Cuéntamelo. Todo. Ahora —exigí, con los ojos muy abiertos.
Su rica risa resonó mientras miraba a través del claro a Gear.
—¿Sí, qué tal? ¿Ustedes finalmente fueron a Ciudad sin hueso?—

Preguntó Sophie, moviendo las cejas.
Mi mandíbula se abrió. ¿Ciudad sin hueso? ¡Qué asco !
Nadine golpeó al coyote cambiaformas en el brazo. Duro.

Entonces ella me miró. —¿Sabes la otra noche ... cuando dejé la
manada y él se escapó al bosque?—
Asentí. Trae los detalles jugosos .
Ella sonrió. —Él ... bueno, ustedes estaban en Fresno haciendo

la cosa de las escamas, y él irrumpió en mi casa y ...— Ella se
sonrojó.
Sophie dio un paso adelante con una ceja enarcada. —¿Y qué?
Detalles, chica, vamos ...—

Nadine sonrió. —Básicamente, declaró su amor eterno por mí y
me tiró a la cama, haciendo realidad cada una de mis fantasías
sobre él —.
Maldita sea. ¿Se disparó la temperatura? Porque me estaba

sintiendo un poco caliente ...
—Ve, niña—, le dije, y le di un golpe en la cadera .
Ella solo sonrió de nuevo. —Entonces, estoy en la manada de Dee

ahora, y él está con ustedes, no se rompen las reglas. Somos
pareja —.
Gruñí. —Estas reglas son realmente estúpidas. Keegan tiene que

ver eso y hacer cambios —.
—De acuerdo—, dijo Roxy, y sus ojos encontraron su camino

hacia Dominic, que estaba atendiendo una parrilla afuera .
Sonreí. Si pudiéramos lograr que Keegan rompiese su regla,

podría haber un final feliz para todos nosotros .
— ¡Waaaaa! —
Escuché el grito de la cabra demasiado tarde. Su cabeza se

estrelló contra la parte posterior de mi pierna y me lancé hacia
adelante, dando vueltas.
—¡Esta cabra demoníaca todavía está aquí!— Lloré, mirandola.
Nadine se rio y se inclinó cuando la cabra se acercó

inocentemente a ella y le dio un ligero golpe en la mano mientras
le acariciaba la espalda.
—Te fuiste como dos días. ¿Crees que la cabra desapareció en ese
tiempo? —
Estaba esperando.

—¿Con qué diablos la estás alimentando para agradarle?— Me
pregunté en voz alta.
Nadine puso los ojos en blanco. —Nada. Simplemente no la llamo

cosas como 'cabra demoníaca'. Los animales pueden sentir
cuando no gustas de ellos —.
Hablando de animales ... un fuerte ladrido sonó detrás de mí, y

la cabra demonio despegó como si su cola hubiera sido prendida
en llamas.
—¡Hemlock!— Grité y corrí hacia mi perro de rescate. ¡Se veía tan

saludable! Su pelaje marrón bronceado era brillante y, aunque
tenía cicatrices, parecía curado. Meneó la cola, lamiendo mi
mano extendida. Hombre, este perro había recorrido un largo
camino.
— Mewww .— La pequeña señal de llamada de Mittens vino de

debajo de Hemlock, y la levanté. Ella estaba creciendo. Ya no era
un gatito bebé, más como un niño pequeño.
—¿Ustedes dos se portaron bien mientras yo no estaba?— Les

pregunté, mientras una cálida sensación difusa irradiaba de mi
pecho. Este era mi hogar. Nadine, Isaac, Mittens y Hemlock.
Incluso Sophie. Esta era mi familia, y yo tenía que hacer todo lo
posible para protegerla.
—Mittens se ha acostumbrado a montar en la espalda de Hemy,

así que estamos pensando en hacerle una silla de montar—, dijo
Nadine.
Solté una carcajada. —Hemy, ese es un buen apodo para ti—, le

dije, y besé la parte superior de su cabeza.
Dom dio un fuerte silbido de taxi en Nueva York. —¡La cena está
lista!— llamó, y los cambiaformas comenzaron a salir de las
chozas de barro, las hamacas y las tiendas de campaña.
Habíamos acumulado un mini ejército de cambiaformas, todo

para proteger a los Skyborn y ayudarnos a terminar con el
gobierno de Ardan.
Empezamos a caminar juntos hacia el olor a comida; Miré a

Sophie. —¿Cómo se están llevando las dos manadas?—
Ella se encogió de hombros. —Bien, excepto por esta perra

llamada Gracie .—
Sonreí y miré a Nadine a los ojos. No sería apropiado de Sophie

si no odiara a alguien.
A medida que nos acercábamos, Dominic se me acercó con una

hamburguesa con queso y champiñones.
—Una hamburguesa vegetariana para uno de nuestros

vegetarianos residentes—, me ofreció Dominic.
Correcto. —Gracias.— Sonreí, preguntándose quiénes eran los

otros vegetarianos residentes, y también pensando que era la
sentencia más larga que jamás había me había dicho.
Casey dio la vuelta a la esquina con Geoff. Se estaban riendo de

algo, y cuando me vio, su rostro adoptó una expresión de
sorpresa y echó a correr.
Una vez que me alcanzó, se detuvo justo antes de chocar contra

mí. Parecía que quería abrazarme pero no estaba segura. —Estás
bien—, suspiró.
Sonreí. —Estoy bien —.
Un maldito hada de diez centímetros se comió mi molar, pero estoy

bien.
Compartió una mirada con Geoff y luego me miró. —¿Te

lastimó?— preguntó, con los ojos verdes llenos de furia, como si
le dijera que sí , se marcharía a Irlanda y patearía el trasero del
malvado druida.

—Nah. Me escapé antes de que pasara algo malo —, les dije. Era
muy consciente de que Ardan y sus druidas mataron a su madre.
Ella lo más probable era que estuviera reviviendo algunos detalles
en este momento, así que no iba a volver a traumatizarla.
Ella pareció aliviada. —Vamos, tienes que ver a Lily—. Ella tiró
de mi mano libre y sonreí. Casey era como la hermana pequeña
emocionada que nunca tuve.
Y así, durante la siguiente hora me comí mi hamburguesa

vegetariana, que en realidad era realmente buena, mientras veía
a Lily pasar de humana a dragón mientras Lynn trataba de
“entrenarla” para que se mantuviera en forma humana. Y por
entrenar era ella realmente suplicándole para que se cambiara
de nuevo a humana cuando aparecieron las escamas naranjas.
Si no solucionábamos esta situación, parecía que Lily y Lynn iban
a quedarse atrapadas en esta pequeña habitación durante años,
hasta que Lily pudiera aprender a controlar a su dragón, o hasta
que Eva se quedara sin ingredientes mágicos.
Después de desearles buenas noches, regresé a la casa de la

cascada de la mano de Logan. Una vez que estuvimos dentro, me
acercó a él; Descansé mi cabeza en el hueco de su cuello mientras
su mano serpenteaba por mi camisa y acariciaba mi espalda.
—Casi me vuelvo loco cuando te llevó—, dijo con voz ronca.
—Está loco—, murmuré. —No se detendrá ante nada para

volverse más poderoso. Tenemos que matarlo —.
Logan se apartó y sus ojos verdes vibrantes se encontraron con

los míos. —Nunca te dejaré fuera de mi vista de nuevo .—
Sonreí. —Eso puede resultar un poco incómodo en el baño —.
Él se encogió de hombros. —Que mal .—
Me reí mientras él me recogió y me acostó con cuidado en la

cama, desnudándome lentamente.

—¿Puedo preguntarte algo?— dijo, quitándose los jeans
ajustados que había estado usando.
—¿Mmm?— Menos hablar, más desvestirse .
—Si tuvieras que elegir ser dragón o druida, ¿cuál elegirías?— Lo

dijo todo con indiferencia, pero no había nada casual en esa
pregunta.
¿Por qué me pregunta eso? Eso era como pedirme que eligiera
entre mi vínculo de pareja con él y mi conexión con mi padre, y
luego mi capacidad para derrotar a Ardan y mi conexión con mi
madre. Nunca pude elegir .
—Yo ... yo no podría elegir—, le dije finalmente. Había dejado de

desnudarme y solo me miraba con ojos verdes tristes.
Me dio una pequeña sonrisa. —Eso es lo que pensé —.
Iba a preguntarle más, sondearlo sobre por qué mencionaría tal

cosa, pero se quitó la camisa y la necesidad se apretó dentro de
mí. No habías visto la belleza hasta que viste a Logan Sharp
desnudo.
***
Sophie me despertó a la mañana siguiente con su megáfono,

decidí que podía matarla y de alguna manera hacer que pareciera
un accidente en el entrenamiento. No era una persona mañanera.
Agregue un saludo de megáfono encima de eso antes de que
tomara mi café y alguien iba a morir.
Después de comerme un muffin de desayuno y prepararme

rápidamente, llegué al curso de capacitación que ella había
diseñado con Ruben. Se habían realizado mejoras sustanciales
desde la última vez que lo vi. Ahora había extintores en la base

de los árboles, cada diez pies, y platos de papel estaban pegados
a la parte superior de los palos que estaban incrustados en el
suelo, esparcidos esporádicamente a lo largo del campo.
—¿Que es todo esto?— Le pregunté a Sophie, pensando por su

bien que no mencionaría la llamada de atención del megáfono en
la cascada.
Ella sonrió. —Estoy tan contenta de que lo hayas preguntado.

Este es tu nuevo centro de formación dual. Entrenarás a tu
druida de fuego aquí, así como a tu dragón. —
Mi dragón no tenía tiempo de entrenamiento desde que estaba

encerrada dentro de mi cuerpo, pero no pensé que mencionar eso
sería útil. Sabía lo que quería decir.
Una ramita que se partía me alertó sobre la aproximación de

Isaac. Sostenía ambos bastones, las puntas brillaban de un
naranja ardiente. —Y entrenaré contigo. Esta es la única forma
en que derrotaremos a Ardan. Juntos —.
Ardan. ¡El hombre podría teletransportarse! ¿Cómo íbamos a

vencerlo? Pero no dije eso, solo quería enfocarme en la posibilidad
de que se pudiera lograr matar a Ardan .
—¡Muy bien, hagámoslo!— Les dije a ambos. Fingir mi camino a

través de esto, con una actitud demasiado positiva, podría
ayudar, ¿verdad?
Sophie pareció complacida con mi entusiasmo. —Muy bien,

comencemos con calma. Sloane, me han dicho que puedes
disparar fuego de tus manos ahora ?—
¡Ja! Eso hice una vez. —¿Supongo?— Ni siquiera estaba segura

de cómo sucedió esa noche en el cementerio; todo fue tan
abrumador.

Sophie puso los ojos en blanco, aparentemente molesta.
—Bueno, comencemos con usted trotando y prendiendo fuego a
los platos de papel a unos cinco pies de distancia —.
Mis ojos se abrieron como platos. —¿Ese es el comienzo fácil? No

quiero saber lo que el difícil —.
Las manadas habían salido de sus espacios habitables y se

dirigían al curso de formación.
Oh, Dios. Lo último que necesitaba era una multitud.
Isaac estaba sonriendo. Al hombre le encantaba verme incómoda.

No es de extrañar que adorara a esa cabra demoníaca. Eran dos
guisantes en una vaina.
—Bien,— dije. No iba a mejorar si me quedaba lloriqueando.
Me quité los zapatos y me conecté con la Tierra. Ese zumbido

subió por mis piernas y se conectó con el collar en mi pecho,
creando una fuerza de poder que derribó a mi dragón. La sentí
retirarse profundamente dentro de mí y me asustó muchísimo.
De repente me acordé de la advertencia de Isaac de que mi magia
druida se estaba alimentando de mi magia de dragón y
eventualmente la consumiría si no podía detenerla de alguna
manera. ¿Pero cómo hacía eso?
No podía lidiar con eso ahora, frente a todas estas personas, pero
tendría que ponerlo en la parte superior de mi lista de
prioridades, porque ahora que lo sabía, sentía que podía sentir a
mi dragón menos de lo que lo hice por primera vez el día que me
caí del Gran Cañón. Ella estaba ... muy lejos. Y no ser capaz de
cambiar no ayudaba.
—Lista cuando tú lo estés—, gritó Sophie a través del megáfono.

Miré al coyote cambiaformas y sentí que mi magia de fuego se
elevaba dentro de mí. Sophie estaba siguiendo la línea de amigos
y enemigos hoy, cruzando cada vez más hacia el territorio
enemigo.
Logan, Gear, Nadine, Casey y un grupo de gente nueva estaban

parados mirando. Dom, el nuevo alfa Dee y Keegan se adentraron
en el bosque, recogiendo los extintores. Sin duda, estaban listos
para rociar cualquier cosa a la que prendiera fuego. Mi única
preocupación era si encendía a uno de ellos en fuego.
Isaac dejó sus varas y se acercó a mí. Debió haber sentido mis
nervios y sin duda iba a tener una especie de charla de ánimo.
—Sólo he hecho esto una vez,— le susurré a él.
Se detuvo ante mí, trayendo consigo los aromas de la naturaleza

y la tierra, de pie fuerte y alto, me miró sabiamente con esos ojos
color miel. Poniendo ambas manos sobre mis hombros.
—Sloane. Eres la hija de tu madre. Conjurar fuego como un

druida de fuego es similar a respirar. Una vez que lo has hecho
una vez, es sólo una cuestión de tiempo para flexionar ese poder
de nuevo y aprender a afinarlo—.
Asentí nerviosamente. Él estaba en lo correcto. Mi madre era

claramente una druida de batalla ruda, segunda en poder solo
por detrás de la reina de las hadas.
Apretó mis hombros. —Usted puede hacer esto. Creo eso con todo
mi ser. Juntos derrotaremos a Ardan y pondremos fin a su
bárbara costumbre de matar a los nacidos en el cielo —.
Entonces mi garganta se apretó cuando las emociones me

recorrieron. Miré y vi a Casey y Geoff riendo juntos, señalando a
Hemlock y Mittens, que habían venido a mirar. Eran tan ...
inocentes. No quería que este mundo les quitara eso. Ardan lo
haría, si no lo detuviéramos. Rompía el futuro lejos de todos
nosotros.

—Tengo esto—, le dije a mi mentor con fuerza en mi voz.
Practicaría día y noche, y no descansaría hasta estar cien por

ciento segura de que podía prender fuego a Ardan sin siquiera
tocarlo. Por mi papá, por la mamá de Casey, por los innumerables
nacidos en el cielo que mató y succionó, lo haría pagar.
Isaac se hizo a un lado entonces y tomé una respiración

profunda, llamando a mi poder, sintiéndolo latir desde el collar
por mi brazo y hasta mi palma. Apunté al primer plato de papel
a mi derecha, a unos cinco pies de distancia, pero en cambio,
una corriente de diez pies de fuego púrpura brotó de mi palma,
casi golpeando a Sophie y Nadine, formando un arco sobre el
plato y fallando por completo.
Sophie agarró a Nadine y se tambaleó hacia atrás.
Oops. Estreché mi mano y se detuvo.
Sophie se llevó el megáfono a la boca: —Todos retrocedan. Ella

necesita práctica —.
Y práctica fue lo que hice. Durante la semana siguiente estuve

entrenando en el curso con Sophie e Isaac, meditando y
aprendiendo sobre las plantas, o trabajando con Logan en ciertos
aspectos de la magia del dragón. Podía golpear los platos de papel
directamente desde unos diez pies de distancia, pero si se
estaban moviendo era menos precisa. También aprendí a
aprovechar el poder de Isaac y sacudir un poco la tierra, lo
suficiente como para hacer que Dominic se cayera. Isaac pudo
aprovechar mi poder y hacer que la piel de Sophie se calentara.
Escucharla gritar —¡Alto!— con miedo fue uno de los aspectos
más destacados de mi formación. Así que parecía que Isaac no
podía conjurar el fuego, pero podía hacer que alguien se sintiera
bastante incómodo y distraerlo. No pensé que pronto abriría
sumideros, pero sacudir la tierra fue suficiente para darme la
ventaja en una pelea.

Temprano en la mañana, una semana después, Logan y yo nos
reunimos para una lección cerca de la cascada.
—No quería molestarte con esto antes—, confesó Logan, —pero

creo que estás lista ahora, y podría ayudar a fortalecer a tu
dragón —.
Fortalecer a mi dragón era algo bueno. Podía sentirla, pero a

medida que practicaba la magia de fuego cada vez más, parecía
hasta ahora lejos.
Logan tenía una hoja de druida de color rojo brillante en su mano

derecha. Llevaba un guante, así que tenía curiosidad por saber a
dónde iba.
—Cuando un druida muere, toda la magia de dragón que ha

tomado abandona su cuerpo. Si no es reabsorbido por un nacido
en el cielo, se disipa por completo —.
Asentí. Recordé cuando estábamos en su casa y había matado a

ese druida. Un fino humo mágico verde había salido del cadáver
del druida, y Logan lo había absorbido.
—No puedo asumir más magia de dragón. Estoy lleno, por así
decirlo, pero tú, Casey y los demás pueden. Si vamos a la guerra
con los druidas, también podríamos recuperar nuestro poder —,
afirmó, mirando la hoja brillante.
—¿Por qué tengo la sensación de que me vas a cortar con eso?—

Observé la hoja roja brillante.
Me miró a los ojos. —¿Crees que alguna vez te lastimaría ?—
Ni en un millón de años. —No,— respondí honestamente.
El asintió. —Voy a cortarme y liberar un poco de magia de dragón.

Quiero ver si puedes respirarlo en ti misma —.
Me senté más derecha con eso. —¿No puede esa cosa matarte?
¿Dónde incluso la conseguiste?—

La cara de Logan se veía oscura. —Fue encontrado cerca de
Rubén. Podría matarme, pero solo si se queda atrapado en mí por
un tiempo. No un pequeño deslizamiento rápido como este —.
Mi mente recordó cuando había muerto en la parada de

camiones, pero lo había traído de vuelta. Había sido uno de los
peores momentos de mi vida, y yo estaba contenta de haberlo
superado.
—Ahora, si tu dragón no está listo, simplemente no lo absorberá

y se perderá, llevado por el viento —.
—Parece bastante fácil ...—
Él sonrió. —Lo es, y es una herramienta muy poderosa cuando

se lucha contra los druidas. Por cada fragmento de magia de
dragón que les quitamos, la balanza del poder se inclina a favor
de la humanidad —.
—Bien entonces. ¿Necesito prepararme de alguna manera ? —
Sacudió la cabeza. —O naciste para poder aprovechar la magia o

no. Es como ser sumiso o dominante en una manada. Algunas
personas simplemente nacen con su propia magia, y eso es todo
lo que pueden manejar. Otros nacen para poder tomar grandes
cantidades del poder de otros y mantenerlo. Ese soy yo —.
Sonreí. —Bueno, claramente no soy sumisa, así que tengo esto.—
Él se rio entre dientes, y me di cuenta de que había pasado un

tiempo desde que lo escuché reír, ya que acabábamos de tener
una conversación despreocupada como esta.
—Te amo—, confesé. No sabía cuánto tiempo tendríamos juntos

en el futuro. Los días venideros parecían ser oscuros, y sabía por
experiencia con mi madre que cuando la gente moría, te
arrepentías de no haberles dicho que los amabas. Logan dejó el
cuchillo brillante y extendió su mano sin guantes para enredarla
en mi cabello rojo.

—Sloane, no tienes idea de cuánto tiempo te esperé. Cuánto
tiempo te amé antes de conocerte. — Sus labios rozaron los míos
y no pude evitar la sonrisa que se extendió por mi rostro. Logan
Sharp era un romántico de armario. Algunas de las cosas que me
dijo pertenecían a una tarjeta de Hallmark.
Cuando se apartó, sentí un pulso de calor en mi interior, mi

dragón crujió de emoción. —Hmm, es demasiado pronto para el
calor en mí,— le dije a él .
Se rio entre dientes, dándome una sonrisa devastadoramente

hermosa. —Ese es mi encanto—. Me hizo un guiño.
Ahora era mi turno de reír. —Está bien, hagamos esta cosa

mágica del dragón—. Hice un gesto hacia el cuchillo en el suelo.
Logan me miró con sus deslumbrantes ojos verdes. —Está bien,

cierra los ojos y toma tres respiraciones profundas, a
continuación, ábrelos.—
Yo lo complací. En el tercer aliento, abrí los ojos para ver que el

antebrazo de Logan había sido cortado y una niebla verde se
deslizaba por el pequeño corte allí .
Vaya, estaba filtrando magia de dragón.
—Bien. Respira y vea qué pasa —, me instruyó.
Cuando habíamos hablado de eso antes, parecía estar bien, pero

ahora que me enfrentaba a respirar la esencia de mi pareja, era
un poco extraño.
—Cualquier día… perdiendo magia aquí—, me dijo Logan.
Cierto. ¡Oops !
Me incliné hacia adelante cerca de la corriente de energía verde

que se filtraba por el corte de Logan e inhalé.

Por favor trabaja. Por favor, sé un dragón dominante rudo, Me
cantaba a mí misma.
Mientras inhalaba, el humo verde se desvió de su camino hacia

el cielo y se dirigió a mis fosas nasales. En el momento en que lo
inhalé, una ráfaga de adrenalina me golpeó y mi dragón se
despertó temblando, empujando mi magia druida a un lado para
dar un paso adelante y recibirla. Era difícil de explicar ... era
como si acabara de tomar cuatro cafés, pero al mismo tiempo,
como si hubiera descansado bien de una siesta de tres horas.
Logan bajó el brazo; el corte estaba cicatrizando y sonreía de oreja

a oreja. —Sabía que podrías hacerlo. Keegan me debe veinte
dólares —.
Mi boca se abrió de golpe. —¿Apostó en mi contra? ¿Como se

atreve?— Crucé mis brazos.
—Se siente increíble, no es así?—
Fue mi turno de sonreír. —Lo hace —.
Parecía que por primera vez en mucho tiempo era más un dragón
que un druida.
Estaba a punto de decir algo cuando sonó mi teléfono. Rara vez

lo mantenía conmigo en estos días, especialmente desde que
Isaac dijo que se metía con mi Nwyfre. Mirando la pantalla, vi que
era uno de los doce nacidos del cielo que habíamos contactado
desde la libreta de direcciones de mi madre. Habían dicho que
iban a hacer su camino hacia nosotros desde Vermont hace más
de una semana, pero necesitaban terminar las cosas primero.
Era un chico joven llamado Dylan y su novia hechicera, M algo.
Marisa?
—¿Hola?— Yo respondí .

En realidad, apenas había hablado con este tipo o con ninguno
de ellos. Habían sido incómodas llamadas telefónicas y
videollamadas, donde les dimos nuestra ubicación y les
preguntamos si querían unirse a nosotros. Conecté cada número
en mi celular, pero desde que estábamos con Casey, Lynn y el
bebé, honestamente me había olvidado de todos los demás.
Algunos ni siquiera habían accedido a venir, pero habían pedido
tiempo para pensar en ello, nunca supe de ellos. No quería ser
demasiado agresiva.
—Sloane, son Dylan y Maggie—, me dijo, sonando presa del

pánico. ¡Maggie! Ese era, pero la ansiedad en su voz me hizo
levantarme rápidamente.
—¿Qué ocurre?— Me di cuenta de que algo no estaba bien.
Él suspiró. —Estamos a una hora de usted y simplemente nos

detuvimos a buscar algo de comida. Hay un druida femenino
pelirrojo sobre mi culo ahora —.
Mi adrenalina por inhalar la magia del dragón no era nada

comparada con lo que fluía a través de mí ahora. —¡Estamos
yendo!— Le dije y le pregunté por su ubicación .
Logan se paró frente a mí. —Keegan y yo nos encargaremos—,

dijo en voz alta.
Dylan debió haber oído eso. —De ninguna manera. No confío en

nadie más. He estado en esto demasiado tiempo. Solo confío en
ti, Sloane o Lily. —
Lily, mi mamá, estaba muerta.
— Estoy llegando a conseguirte, Dylan. No te preocupes.— Colgué

cuando llegó un mensaje de texto con su pin de GPS y su
marcador de millas.

—¿Quieres dejarme atrás? ¿Hacer lo de la separación de
nuevo?— Le pregunté a mi compañero. No estaba segura de qué
habían hecho Logan y Keegan en caso de que hubiera otro ataque
de druidas.
Logan parecía que lo hubiera abofeteado. —De ninguna manera.

Mira lo bien que resultó eso antes —.
Cierto. Pero juntos podríamos morir. Separados, no podíamos, o

al menos eso había dicho Isaac.
—Ojalá me dejara ir y traerlo—. Logan me dijo .
Negué con la cabeza. —Esta gente ha estado huyendo de los

druidas toda su vida. Solo una persona ha tratado de ayudar a
ocultarlos y esa fue mi mamá. Ella les dio a todos mi foto,
preparándome para este papel. Yo no confiaría en nadie más ,
tampoco —.
Logan gimió, —¡Pero soy un maldito Skyborn!—
—Ellos no saben eso. Vamos, vamos —, le dije, y comencé a

trotar. Una cosa de la que estaba segura era que Logan y yo
estábamos mejor juntos que separados .

Llenamos uno de los autobuses con cambiaformas en menos de
cinco minutos. La manada de Keegan estaba entrando en la
ubicación de la marca mientras Logan, Danny, Eva y yo
estábamos en mi auto siguiéndolos. Le habíamos pedido a Isaac
que se quedara con el resto de la manada para proteger a la
familia de Lynn y a Casey. Si traer más de veinte cambiaformas
para maltratar a un druida rebelde era demasiado, no nos
importaba. No más errores. Nos exageraríamos cada vez que
tuviéramos que hacerlo. Les había dicho a Dylan y Maggie que
rodearan la ruta, alejando al druida de la tierra de Isaac y
soltando un nuevo alfiler si la mierda se iba al sur. La mierda
debe haber ido al sur, porque recibí un nuevo mensaje de texto
con una nueva ubicación y todo lo que decía era: Nos hemos
quedado sin gasolina.
¡Tonterías! Algo tan simple como quedarse sin gasolina podría ser
el final de la vida de este hombre.
—Tenemos una nueva ubicación. ¡Se han quedado sin gasolina!—

Le grité a Logan, que estaba detrás del volante, mientras le
reenviaba el mensaje de texto a Keegan, y también traté de trazar
un mapa de lo lejos que estábamos de él.
—¡Bájate!— Grité, cuando me di cuenta demasiado tarde de que

la salida que estábamos pasando era en la que estaban.
Logan frenó de golpe y cortó el auto a la derecha, llevándonos al

carril de salida. El autobús que llevaba a Keegan y la manada
estaba delante de nosotros y tendría que tomar la siguiente salida
y dar la vuelta. Mis dedos anhelaban estar envueltos en mi
bastón. El collar de mi madre era bonito, pero todavía no estaba
acostumbrada. El bastón había estado conectado a la tierra y me
hizo sentir segura con solo envolverlo con los dedos. El collar
estaba ahí en la base de mi garganta, un recordatorio constante

de mi madre. Pero ahora que sabía que estaba alimentando
energía a los otros collares de Skyborn que mi madre había
hecho para ayudar a ocultarlos, no podía quitármelo.
—¡Ve a la izquierda! Hay un camino más allá de la parada de

camiones en la que se pararon —. Señalé a Logan para que girara
el auto en la dirección del pin de mi teléfono.
Por favor, estén bien. Por favor, estén bien, coreé en mi cabeza.
Nos detuvimos en una pequeña ciudad con nada más que árboles
y una parada de camiones. Era mediodía pero la parada de
camiones estaba vacía. Supuse que no era un lugar popular para
cargar gasolina. Pasando la parada, le indiqué a Logan que girara
a la izquierda en Capella Road, lo que nos llevaría a Dylan.
Agachándome, me quité los zapatos y los calcetines, lista para
aterrizar mis pies en la Tierra y hacer estallar a este druida del
cielo con mi fuego púrpura. Dylan nos había preguntado
previamente si su novia Maggie también podría venir a la tierra,
pero había dicho que no era una bruja poderosa, solo una cuarta
parte pura. No estaba seguro de qué tipo de magia le daba, pero
esperaba que fuera suficiente para mantenerlos a ambos con
vida. Al doblar por la calle y contemplar la escena frente a
nosotros, jadeé.
Dylan estaba en su forma de dragón completo. Un impresionante

dragón verde esmeralda. Maggie estaba lanzando algún tipo de
hechizo de humo para cubrir el lugar donde estaban, pero a su
alrededor había más de una docena de druidas. No cazadores.
Druidas completos . Tatuados y todo.
Eva gruñó. —Esto es la guerra —.
Esas palabras me congelaron hasta los huesos. Guerra. Este no

era un druida persiguiendo a un dragón con la esperanza de
obtener un pequeño impulso de poder con su magia. Esta era la
matanza de una especie. Ésa era su intención. ¿Por qué si no
vendrían así, en tan gran número?

Logan apretó los frenos y el auto se detuvo con un chirrido,
atrayendo las miradas de varios de los druidas, y reconocí a la
mujer pelirroja de la pelea del bar que casi mata a Dom. En el
momento en que nos vio, arrojó una daga roja brillante
directamente al dragón verde de Dylan .
Eva y yo salimos del coche al mismo tiempo. Fluyendo de las

manos del hechicero había una esfera mágica geométrica
amarilla. Tuve que empujar a mi dragón hacia abajo porque
quería moverse y luchar al lado de Dylan, pero ahora necesitaba
permitir que mi magia druida saliera a la superficie. Esta perra
ardería. Ella ardería viva.
Los druidas se abrieron en abanico, la pelirroja me miró a los ojos

y sonrió de oreja a oreja.
Ella me señaló. —Ella es mía —.
De repente, el agua burbujeó debajo de mí; mis pies se hundieron

en el barro cuando la succión me empujó hacia abajo,
bloqueando mis tobillos en su lugar.
Druida de agua.
Isaac me había preparado para esto. Me contó los diferentes

trucos que podían usar. Logan estaba unos pasos por delante de
mí, corriendo a toda velocidad hacia Dylan y Maggie, mientras
disparaba hacía donde podía. No parecía que el cuchillo de la
pelirroja hubiera golpeado a Dylan, y por eso estaba agradecida.
Todos los druidas habían creado un escudo rojo a su alrededor,
pero parecía que Danny y Eva no tenían ningún problema en
hacerlos estallar como burbujas.
No me asusté. No luché. Respiré hondo, encontré mi Zen interior

y permití que la Tierra pulsara su magia de conexión a tierra a
través de mis pies, mientras sentía que mi conexión con Isaac
repentinamente estallaba con fuerza. Estaba sintonizando
conmigo a través de nuestro vínculo maestro-aprendiz, o lo que
fuera, y yo sabía lo que tenía que hacer.

Mientras el druida pelirrojo acechaba hacia mí, envié mi energía
hacia adelante y le di un empujón, usando la magia terrestre de
Isaac como me había enseñado. El suelo tembló de repente; las
hojas de los árboles se sacudieron y la pelirroja tropezó y cayó.
¡Sí!
Luego, envié esa energía debajo de mí, sacudiendo el barro y el

agua que me sostenía, para soltarla, le pedí a la Tierra que la
absorbiera y me liberara. Fue un poco más lento de lo que
esperaba, pero el barro se deslizó lejos de mis tobillos, que pronto
estuvieron libres para moverse. También fue algo bueno, porque
la pelirroja estaba levantada y sosteniendo una bola de fuego,
luciendo enojada como el infierno. Con un poco de esfuerzo,
saqué completamente el pie izquierdo del barro empapado y luego
el derecho. Al pisar tierra firme, me encontré con la cabeza de la
druida justo cuando lanzaba esa bola de energía roja. Con un
grito, llevé mi magia hacia adelante y la lancé, rociando la bola
que se aproximaba con fuego, se disipó en mis llamas. Pero tan
fácilmente como lo había hecho, una bola de agua apagó mis
llamas y la parte delantera de mi camisa. Ella era poderosa. Y
rápida.
Mirando hacia arriba, vi a la druida pelirroja sonriéndome, el

agua goteaba de sus manos. —¡Eres un druida de fuego! Siempre
me he preguntado cómo pelearía un druida de agua y fuego —.
Bueno. Quemarla parecía una opción menos probable, pero tenía

otras ideas, cosas que enorgullecían a Sophie. —Oh, estoy segura
de que resolveremos algo—, le dije mientras sacaba una hoja de
caza de treinta centímetros de la funda de mi pierna. Ella también
sacó una hoja, una roja brillante, y de nuevo esa sonrisa enferma
apareció en su rostro.
Con una mirada rápida detrás de mí, vi que habían llegado

refuerzos. Keegan salía corriendo del autobús con su escopeta en
la mano. Me di la vuelta justo a tiempo para ver un destello de

miedo cruzar el rostro de Red antes de abalanzarse sobre mí con
un grito.
La esquivé fácilmente. Su movimiento fue descuidado, falto de

gracia. Me balanceé con la mano del cuchillo en un amplio arco,
cortando la parte superior del brazo expuesto. Ella gritó y tropezó,
pero captó el equilibrio antes de enderezarse a sí misma y viniera
hacía mí de nuevo .
Si Sophie me había enseñado una cosa sobre las peleas con

cuchillos, era que apestaba y nunca ganaría una. Tenía poco
alcance y era lenta. Así que hice lo que me dijo. Bajé a la druida
al suelo con una fuerte patada en la rodilla, escuchando el
satisfactorio crujido del hueso. Un rugido de dolor salió de sus
labios mientras caía hacia atrás torpemente. Luego saqué mi
arma. Estaba metida en mi espalda baja. No había querido usarla
hasta que la tuve justo donde la quería. Puse mi dedo en el gatillo,
sosteniendo el cañón sobre su pecho y ... vacilé. ¿Era un asesino?
¿Como este tipo de asesino que acaba de disparar a las personas
en el pecho mientras estaban de espaldas?
La vacilación de mi momento fue demasiado. De la nada me lanzó

una bola roja de magia druida. No tuve tiempo de bloquearlo, ni
de apartarme del camino, ni siquiera de contener la respiración.
Se estrelló contra mi estómago, empujándome hacia atrás con la
fuerza de la explosión, justo cuando le disparé dos tiros en el
pecho. Golpeé el suelo con fuerza en mi trasero y el aliento salió
volando de mí, un dolor punzante se encendió en mi abdomen.
Mi dragón chilló y empujó contra la superficie de mi piel. Siempre
me había preguntado cómo se sentía ser golpeado con una de
estas pequeñas cosas. Oh, dolía como una madre, pero no estaba
muerta, así que asumí que iba a estar bien. Me senté con cautela
y contemplé la escena frente a mí.
Red estaba muerta, tendida en un charco de sangre con los ojos

fijos en el cielo. Me quedé mirando su pecho durante unos buenos
treinta segundos para asegurarme de que no quedaba vida en
ella. La prueba definitiva llegó cuando una niebla mágica verde

comenzó a levantarse de su cuerpo. Magia de dragón. Me puse de
pie, sin querer dejar que una gota de la magia de mi gente se
desperdiciara. Entré en la neblina verde, inhalándola en cada
uno de mis poros. El poder latió a través de mí y sentí que mi
dragón se hinchaba por dentro, atrapando y filtrando la magia.
Me quedé allí durante medio minuto respirando la niebla verde y
dejé que mis ojos recorrieran la escena que tenía por delante .
Dylan estaba ahora en su forma humana, sangrando con un

arpón clavado en su hombro, y Logan estaba en forma de dragón,
de pie frente a Dylan y su novia, lanzando fuego contra
cualquiera que se acercara a ellos. Estos druidas eran poderosos;
había habido una docena de ellos antes y parecía que solo la
mitad había sido asesinada. Aún quedaba una buena cantidad,
y aunque habíamos traído un montón de cambiaformas, estos
druidas les lanzaban bolas de fuego y se refugiaban en los
árboles.
—'¿Estás bien?'— Logan habló a través del vínculo .
No quería mentir, pero tampoco quería distraerlo mientras

peleaba. Mi estómago dolía algo feroz, pero me lo guardaría para
mí.
—'Estaré bien. Voy a acercarme detrás de esos druidas en el

bosque y rociarlos con fuego'. —
Un grupo de tres druidas estaban de pie con la pesada cubierta

de árboles a sus espaldas, arrojando todas las armas, mágicas o
de otro tipo, a nuestra manada desde la seguridad de su posición.
—‘Mantente a salvo’—, fue todo lo que dijo.
Estaba tan atrás de la pelea que los druidas me habían olvidado,

lo cual era bueno. Estaba a tres metros de nuestro coche y podía
escabullirme fácilmente hacia el bosque sin que me vieran. Ahora
que ya no surgía más magia verde de la druida pelirroja, estaba
cien por ciento segura de que estaba muerta. Me moví lentamente
hacia la línea de árboles y me agaché, tratando de perderme en

la maleza del suelo de helechos de hojas verdes. Mi estómago se
sentía como si me hubiera tragado hojas de afeitar y comenzara
a sangrar por mi trasero en cualquier momento, pero seguí
adelante. No quería pensar en lo que había hecho esa bola de
fuego roja. Una vez que resolviéramos la amenaza, podría hacer
que Eva me curara, o abrazaría un árbol o algo.
Mientras me sumergía en el bosque, metiéndome descalza en el

bosque cubierto de musgo, traté de evitar rocas afiladas o palos
que se romperían y alertarían mi presencia. Con cautela, me
acerqué cada vez más a los tres druidas escondidos en lo que
pensaban que era una posición segura. Bajé la mirada a mis
manos y respiré hondo, tirando de mi magia de fuego druida
dentro de mí y fuera de mis palmas. Un pequeño destello de fuego
púrpura brilló en mis palmas y asentí. Solo revisando. No quería
correr hacia estos tipos con un grito de batalla solo para
descubrir que no estaba funcionando o algo así. Una parte de mí
temía que la bola de fuego roja pudiera haber apagado mi poder
... pero parecía estar destrozando mis entrañas.
A medida que me acercaba pude ver a Keegan a través de los

árboles, de cara a los hombres a los que estaba a punto de
acercarme sigilosamente. El druida más a la derecha tenía un
cuchillo en la mano, la hoja brillaba en rojo. Se abalanzó sobre
Logan, que estaba a unos tres metros de distancia en forma de
dragón.
Fue entonces cuando el infierno se liberó.
Me tambaleé hacia adelante, empujando mi magia. Huyó de mis

palmas en una larga corriente de fuego, bañando a los dos
druidas en llamas. El tercero había saltado fuera de mi alcance
para ir por Logan, solo para ser interceptado por Keegan. Era
como ver un tren chocar en cámara lenta. Keegan debe haber
estado sin balas, porque sostenía su escopeta como un
murciélago, listo para romper al druida en la cabeza, pero su
puntería estaba equivocada. El druida estaba a medio camino de
Logan, agachado, pero al ver a Keegan saltar frente a él, golpeó el

cuchillo en la caja torácica del alfa. Entró con tanta fuerza que
no se detuvo hasta que alcanzó la empuñadura.
No podía respirar, no podía moverme.
La voz de Danny atravesó el bosque mientras gritaba el nombre

de su amante. Magia amarilla se lanzó por todas partes. Fui
lanzada unos metros en el aire con la fuerza del poder de Danny,
y luego caí con fuerza sobre mi tobillo, al escucharlo estallar, sin
duda se había roto. Los dos druidas que había rociado con fuego
estaban corriendo hacia el bosque, envueltos en llamas púrpuras
que no parecían morir por mucho que les dieran palmaditas.
Sentí el estómago como si hubiera comido la comida tailandesa

más picante viva y que me dispararon en el tobillo, pero al oír los
lamentos de Danny me apoyé en una pierna y salté hacia Keegan.
Estaba tirado en el suelo en un charco de sangre a unos cinco
pies del druida que lo había lastimado. El druida estaba muerto;
parecía que le habían roto el cuello y que estaba en un ángulo
extraño. Si no hubiera tenido venas amarillas resplandecientes,
yo no habría sabido que Danny de alguna manera lo había
matado mágicamente.
El hechicero estaba de rodillas. Sacó la hoja del costado de

Keegan, metiendo musgo en la herida con una mano y
acariciando la frente del alfa con la otra.
—No. No. No, —estaba murmurando Danny.
Keegan sonrió, luciendo loco y fuera de sí. —Sabía que ... me

querías de vuelta—, dijo con voz ronca.
Danny sollozó entre risas. —Por supuesto que sí. Siempre fue mi
intención estar contigo eventualmente. ¿Lo sabes bien, No? Que
te amo y… — No pudo terminar, los sollozos se habían apoderado
de su voz.

—¡EVA! Haz algo —chilló Logan. Mi compañero estaba medio
desnudo con los ojos abiertos y las manos temblorosas, mirando
a su mejor amigo sangrado.
Eva se acercó con la mano a la boca en estado de shock. —Logan,

curo enfermedades mágicas. Esto es ... —
No. Joder, no . Barba roja, oso pardo… NO MÁS tatuajes.
—¡Recógelo!— Le dije a Danny con la voz más severa que pude

reunir. Saqué mi teléfono y llamé al buen druida. Isaac respondió
al primer timbre. Nunca llevaba su teléfono celular con él. Nunca.
El universo se estaba alineando para esto. Podía sentirlo.
—¿Qué ocurre?— preguntó, presa del pánico.
—Keegan se está muriendo de una herida de cuchillo mágico, y

tú me vas a ayudar a salvarlo—, le dije. Esto no estaba en
discusión y no quería ninguna negatividad. Estaba sucediendo y
eso fue todo. Keegan se curaría.
Se quedó en silencio por un momento. —Okey. Encuentra el árbol

más fuerte que puedas y avísame cuando estés allí —.
Asentí con la cabeza, entregándole el teléfono a Eva, quien lo

tomó y lo puso en altavoz, sin hacer preguntas. Las lágrimas
rodaban por mis mejillas. Quería ser fuerte y manejar mi mierda,
pero la idea de que Keegan muriera amenazaba con superarme.
Mi estómago se sentía como si estuviera en llamas, mi tobillo
palpitaba y estaba completamente roto, pero nada comparado
con la sensación de pesadez en mi corazón. Keegan era familia y
yo no iba a perder más familia.
Solo… respira.
Logan apareció a mi lado. —Te vi la noche en que Isaac curó a

Dom. Estabas ... inspirada. Eres un druida terrestre, Sloane.
Este es tu destino —. La forma en que me miraba con tanta ... fe,
me llenó de algo que necesitaba. Y así, el peso y la tristeza

desaparecieron de mí como si Logan lo hubiera arrancado.
Cojeaba hacia el bosque, Danny detrás de mí con Keegan en sus
brazos.
—Estás herida—, dijo Logan, al verme cojear y sujetarme el

estómago.
—Estoy bien—, le dije, y extendí mi mano, sintiendo la energía en

el aire, buscando el árbol curativo de Keegan. Pasé un mezquite
fuerte y agradable que era bueno pero era demasiado femenino
para Keegan. Él era un alfa. Necesitaba la fuerza de una secuoya
gigante. La mayoría de la gente miraba las secuoyas altas del
norte de California y pensaba que eran eso, todas secuoyas, pero
yo había aprendido de Isaac que había secuoyas y secuoyas, y
que eran diferentes en tamaño y especie, aunque solo fuera
marginalmente. Escuché a Danny gruñir detrás de mí y sentí la
presión de simplemente coger cualquier árbol. Pero sabía que el
árbol que escojiera determinaría la curación que Keegan recibiría.
Finalmente, lo sentí, el poderoso tirón de Nywfre. La energía de

la Madre Tierra se concentró en un árbol a mi derecha. Me volví
y me paré frente a él, admirando su belleza. Ella medía más de
doscientos pies de altura. Tuve que estirar el cuello
completamente hacia atrás para verlo completamente.
Inspeccioné su corteza de color canela, que era espesa y
saludable, y me incliné hacia adelante para oler su aroma
amaderado. Ella era la indicada.
—Tengo el árbol—, le dije a Isaac. Eva se paró a mi lado con el

teléfono afuera mientras Danny caía de rodillas, colocando a
Keegan justo en la base. El alfa parecía apenas consciente, pálido
y respirando entrecortadamente. Teníamos tiempo prestado.
—Sloane—, dijo Keegan con voz ronca, y me arrodillé ante él,

clavando los dedos de los pies en la tierra fría para anclar mi
energía, ajena al dolor en el tobillo, el estómago o cualquier otra
cosa.

—Si no puedes hacerlo ... está bien—, susurró.
Oh, Dios. Incluso en su lecho de muerte que estaba tratando de

protegerme.
Me encontré con sus ojos oscuros. —Te estoy curando, Keegan—

declaré, y respiré hondo, colocando mis manos en el árbol,
encontrándome con un zumbido de energía a lo largo de mis
palmas. Keegan estaba atrapado entre mis rodillas y el árbol
mientras creaba un capullo energético con mi cuerpo. Isaac me
había estado enseñando la pose curativa y cómo canalizar la
energía atrapando a la persona o animal herido entre mi cuerpo
y el tronco.
—Estoy lista—, dije en voz alta.
La voz de Isaac se quedó tranquila por un momento. —Ahora

invocas el poder a través de mí. Encuentra tu conexión conmigo
y tira, tira tan fuerte como puedas. Voy a entrar en mediación y
les daré todo lo que tengo —.
Casi lloriqueé de miedo. Isaac había dicho una vez que él y yo

estábamos conectados, que la Tierra me había iniciado y que
nuestros poderes estaban atados. Había extraído algo de su
poder antes, como antes cuando hice que la tierra se moviera,
pero esperaba, por el bien de Keegan, poder tirar mucho más. Iba
a necesitar algo de magia terrestre seria para curarlo, no la magia
de fuego que yo poseía.
—Está bien—, dije, y mi voz tembló un poco.
La mano de Keegan encontró su camino hasta mi rodilla y la

apretó ligeramente. Estaba mirando al cielo. Conocía ese
sentimiento. Cuando los cazadores me hirieron, sangrando en
Flagstaff, Logan y la manada vinieron por mí, me salvaron. Sentí
esa sensación de muerte inminente, pero salí de ella. Yo había
sobrevivido. Y Keegan también saldría de eso. Estaba decidida.

Cerré los ojos para no tener más distracciones. Tomando una
respiración profunda, llamé a la energía de la Madre Tierra. La
sentí por todas partes, en el árbol, bajo mis pies, en el aire que
acariciaba mi piel con la suave brisa. Nywfre. Entonces sentí por
Isaac, mi mentor, mi maestro, mi maestro. Isaac era mi vínculo
más fuerte con la Tierra. Cuando sentí esa conexión con él, el
Nywfre debajo de mis palmas se intensificó y un zumbido
comenzó a subir por mis dedos de los pies, a través de mi tobillo
dolorido, y subió por mi pierna. El collar en mi garganta comenzó
a latir y pude sentir cálidos riachuelos de poder bañándome. Era
como el árbol y yo estaba creando un círculo de sanación con
Keegan en el medio, subiendo por los dedos de los pies, a través
de mi cuerpo, fuera de mis manos, hacia el árbol, a través de la
Tierra y dentro de mis dedos de nuevo.
—Está funcionando—, dijo la voz asombrada de Logan detrás de

mí.
Abrí suavemente un ojo para ver una cegadora luz naranja-

púrpura que envolvía a Keegan, y luego lo apreté para no perder
el enfoque. Sentí esa conexión con Isaac y luego tiré. Lo saqué a
través de mí con todo lo que tenía. El dolor en mi estómago se
alivió entonces, así como el latido en mi tobillo; Sentí que la
corteza bajo mis dedos se debilitaba y se volvía cenicienta. Abrí
los ojos de golpe para ver que la corteza que alguna vez fue de
color canela era tan negra como el carbón alrededor de un tercio
de la altura del árbol.
Miré a Keegan y vi que la herida de su cuchillo ya no derramaba

sangre libremente; su color parecía un poco mejor. Me estaba
mirando con la boca abierta. El resplandor púrpura anaranjado
continuó bailando a nuestro alrededor mientras nos miramos el
uno al otro. No me atreví a mover mis manos del árbol o mis pies
del suelo. Meneé un poco mi tobillo malo y, cuando no sentí dolor,
me eché a llorar. El árbol e Isaac también me habían sanado.
—Gracias—, le susurré, mientras que la pantalla de luces de

colores finalmente se desvaneció.

La mano de Keegan todavía estaba en mi rodilla, como si yo fuera
su tabla de salvación para el mundo vivo y él tenía miedo de
dejarme ir.
—Nunca hablaré una mierda sobre druidas mientras viva—,

declaró con voz débil, y todos nos reímos.
—Te obligaré a eso—, dijo Isaac por teléfono, y Eva sonrió, se lo

puso en la oreja y se alejó, presumiblemente para contarle todo.
Tendría que agradecerle enormemente cuando llegáramos a casa.
Danny se agachó a mi lado y se inclinó sobre su amor, colocando

una mano sobre el pecho de Keegan y mirándolo a los ojos.
—Deberíamos casarnos—, declaró, y mi boca se abrió en estado

de shock. Todavía me estaba recuperando del hecho de que nos
había curado a los dos, ¡y ahora esto!
Keegan sonrió de oreja a oreja y bajó los párpados en una mirada

sexy y ardiente. —¿Estás preguntando?—
Danny gimió. —Sí. Quiero estar a tu lado para siempre. Para bien
o para mal. Enfermedad y salud, y todo eso. Entonces ... ¿te
casarás conmigo?
Keegan se encogió de hombros. —Voy a pensar en ello.—
Danny jadeó y lo golpeó en el brazo. Keegan soltó una carcajada,

pero luego rápidamente hizo una mueca, sujetándose el costado
de dolor. —Por supuesto que me casaré contigo, idiota .—
Mientras se inclinaban para besarse, mis ojos se encontraron con

los de Logan y vi que estaban más que un poco empañados.
—'Eso estuvo cerca,'— le dije a él.
Se acercó y metió la mano debajo de mis rodillas, levantándome

y acunándome junto a su pecho.

—¿Estás herida?— me pregunto.
Negué con la cabeza, mirando hacia el árbol ceniciento. Parecía

que se había quemado. Tal vez mi magia hizo eso, o tal vez eso
fue solo parte de lo que nos había dado. De cualquier manera,
estaba agradecida.
—El árbol también me curó —.
Él asintió con la cabeza, mirándome a los ojos y guardó silencio

durante un minuto. —‘¿Es el matrimonio algo que quieres? Quiero
decir ... si tú quieres eso, yo también.’ —
Me reí. —‘Nunca he sido una gran admiradora de todo esto. Creo

que lo que tenemos es suficiente y una hoja de papel o una
ceremonia no cambiarán eso'.—
Él sonrió. —‘Pero vamos a tener hijos, ¿ verdad ?’—
Puse los ojos en blanco. —‘Cuando tenga como treinta. Deja de

intentar hacer bebés conmigo’— , bromeé.
Se inclinó y besó mi cuello. —‘Oh, no creo que nunca dejaré de

intentar tener bebés contigo. Es muy divertido.’— Me guiñó un
ojo.
Me reí. —Puedes bajarme ahora. Ya no estoy lesionada —, dije en

voz alta esta vez.
Sacudió la cabeza. —No quiero.—
Lo ignoré. —¿Perdimos a alguien?— Pregunté, mientras Logan

me acompañaba por el bosque en sus brazos, de regreso al
autobús y al auto. Solo nuestro círculo íntimo había estado
presente para la curación del árbol de Keegan. Todos los demás,
Dylan y Maggie estaban de vuelta esperando en el autobús.
Sacudió la cabeza. —No. Gracias a ti no lo hicimos —.

Sus palabras se asentaron en mí. Keegan estaba bien. Yo estaba
bien. Todo iba a estar bien.
—¡Sloane!— Dylan gritó cuando atravesamos la línea de árboles.
Esta vez Logan me bajó, y descubrí que mi tobillo estaba sensible

pero no tan destrozado como lo había sentido antes. —¡Dylan!
¡Maggie! — Yo les salude.
—¿Tu amigo está bien?— Preguntó Maggie con preocupación,

mirando a través de los árboles como si tratara de vislumbrar a
Keegan.
Asentí. —Él lo está—.
Dylan estaba mirando mi collar. Era un tipo alto, parecía de la

edad de Logan, pero eso no significaba que lo fuera. Tenía cabello
rubio, ojos verdes y una constitución impresionante. Sostuvo la
mano de Maggie suavemente en la suya, sacudiendo la cabeza.
—Nos salvaste. Si no hubieras venido ... estaríamos muertos —.
—Estoy contenta de que lo hicimos a tiempo,— le dije a ellos .
—Eso fue una completa emboscada—, dijo Logan. —Una docena

de druidas para conseguir un dragón. Están tratando de acabar
con nosotros. Más ahora que nunca —.
Dylan le tendió la mano. —¿Eres Logan? Lamento no haberte

creído antes sobre ser un Skyborn. Gracias por ayudarme—.
Logan tomó su mano y se dieron un abrazo de hermano. Cuando

Dylan se apartó, sus ojos volvieron a fijarse en mi collar. —Eso
era de ella, ¿no? Quiero decir, se parece al de ella ... —
Mi mamá. No podría escapar del recuerdo de esa mujer si

quisiera. Menos mal que no lo hacía.
—Lo era—, le dije, y lo toqué.

Se pasó una mano por el cabello y luego sacó un colgante a juego,
pero más pequeño y más masculino, de su camisa. Colgaba de
una cadena larga, palpitando con un pequeño resplandor. —Me
encontró cuando tenía diecisiete años, segundos después de ser
casi asesinado por cazadores, algo así como hoy. El collar dejó de
funcionar por un tiempo, pero luego ayer se encendió de nuevo.—
Me pellizcó la garganta. ¿Cómo no sabía que mi madre era esta

increíble guerrera protectora nacida del cielo? Me mató haberme
sentado junto a ella en la mesa del comedor, hablando de la
escuela, el maquillaje y los chicos. Pero supuse que eso era lo que
ella quería para mí, solo una vida normal.
Me alegré de ver que mi collar parecía estar alimentando a todos

los Skyborn. Tal vez eso significaba que podría ganarnos tiempo
para que Ardan no encontrara los que escondió mi mamá.
—Bueno, me alegro de que estamos todos juntos ahora,— le dije

a él.
Pasó un brazo alrededor de su novia y asintió. —Es lo que ella

siempre quiso. Una comuna de dragones. Hablo de conseguir algo
de tierra algún día, para que pudiéramos vivir todos juntos.
Cuando fueras mayor —.
Jesús. ¿Mi madre había derramado su corazón y su alma por

todas las personas menos por mí? Mayor ... nunca llegó a verme
crecer. Ese pensamiento me entristeció, pero lo dejé pasar.
Logan parecía saber que yo estaba luchando con qué decir, le dio
una palmada en la espalda a Dylan. —Bueno, tenemos la tierra
ahora, y no puedo esperar a que conozcas a los demás —.
Mientras caminaban hacia el autobús, miré hacia el cielo

nublado. Esperaba que mi mamá me estuviera mirando y la que
la enorgulleciera. Ahora más que nunca podría usar su guía.
Estaba atrapada en medio de una guerra que no estaba segura
de poder ganar.

Después de hacer el viaje de regreso a la tierra, fui directamente
a donde Isaac y abracé al druida, dándole las gracias por
ayudarme a salvar a Keegan. Parecía cansado. Estoy segura de
que ayudarme a curar a distancia esa gravedad le había quitado
mucho. Hablamos de ello durante unos minutos y luego me
encontré preguntándome sobre otra cosa.
—Oye, Isaac, tengo una pregunta seria ...— Estábamos sentados

en nuestro parche de césped favorito cerca de la base de la
cascada. La cabra mascota psicópata de Isaac estaba masticando
hierba a quince metros de distancia, mientras me miraba. Si
venía hacia mí, le quemaría la punta de la cola.
—Okey. ¿Qué es?— Se sentó más erguido y, como de costumbre,

quedé hipnotizada por el contraste de su piel oscura con el color
miel de sus llamativos ojos.
—Así que tú y yo mataremos a Ardan. ¿Y luego qué? ¿Cómo se

resuelve toda esta guerra matando a uno o dos hombres?
Definitivamente estaba matando a Steven. Eso no era negociable.
Isaac asintió. —¿Viste hoy cómo pudiste aprovechar mi poder y

curar a Keegan ?—
Asentí. Isaac me había dicho que Ardan estaba conectado con

todos sus druidas, alimentando poder desde y hacia ellos.
—Bueno—, continuó, —cuando eliminemos la cadena de mando

superior, los druidas de nivel inferior de Ardan se encontrarán
tan increíblemente débiles, con la pérdida de poder, que no
podrán defenderse. Se volverán a la Madre Tierra con dolor y
arrepentimiento, pidiendo su poder para hacerlos completos
nuevamente —.

Me moví en mi asiento. Isaac tenía una forma de hablar como si
algo fuera una certeza. Lo había hecho desde el día en que lo
conocí. —Está bien… pero ¿y si no lo hacen? ¿Qué pasa si vienen
por nosotros y nos matan, y se levanta un nuevo Ardan? Quiero
decir, ¿cómo puedes estar seguro de que volverán a la magia de
la tierra y dejarán en paz a los nacidos del cielo? — Odiaba
interrogarlo. Era un tipo tan feliz, irradiaba una energía tan
positiva. No quería derribarlo.
El solo sonrió. —Porque, niña, lo he visto tan claro como vi que

la Tierra me enviaría a ti. Es uno de mis dones tácitos. Algo que
no me gusta compartir con mucha gente. Sé cosas —.
Oh. Oh. ¡Era un psíquico! Lo sabía. —¿Sabías que Keegan iba a

resultar herido hoy o que me secuestrarían?— Yo pregunté. Si lo
hizo, ¿por qué no me lo dijo?
Él se burló. —No. ¡Por supuesto que no! No lo sé todo . Recibo

mensajes con imágenes más grandes en mis meditaciones. Solo
confía en mí. Una vez que nos ocupemos de Ardan, reinará una
nueva paz en la Tierra para los humanos y los Skyborn —.
Me estaba pidiendo que confiara en él. ¿Cómo no iba a hacerlo?

Le di una leve sonrisa. —Okey.— Ahora el único problema a la
mano era cómo matar a Ardan.
Isaac miró el collar de mi madre. —¿Cómo está el collar

trabajando para usted ?—
Me encogí de hombros. —Bien. Puedo usar mi poder sin dolores

de cabeza ni nada. —
Isaac asintió con la cabeza, pero sus labios estaban hacia abajo.
—¿Qué?— Pregunté nerviosamente, descruzando mis piernas.
Abrió las palmas de las manos y se encogió de hombros. —Creo

que es genial que tengamos el collar de tu madre. Creo que ha
hecho maravillas para amplificar tu magia de druida de fuego. —

De acuerdo ... había una advertencia a esto, sólo lo sabía.
—Pero…?—
Isaac suspiró, luciendo más cansado de lo que nunca lo había

visto. —Pero por lo que puedo sentir, está apagando la magia de
su dragón más rápido que cualquier otra cosa antes .—
Respiré profundamente y extendí la mano rápidamente,

desabrochando el broche y tirando de él. Cayó al césped y patiné
sobre mi trasero, de modo que estaba a unos metros de él. Mi
dragón era mi vínculo con Logan, nuestro vínculo de pareja.
Mi mentor se acercó y lo recogió, sosteniéndolo en sus manos.

—Sloane, es posible que debas prepararte para el hecho de que
podrías perder a tu dragón y convertirte en un druida de fuego
completo, que ya no podrá cambiar a su forma de dragón —.
Fue como si me hubiera apuñalado en el estómago. ¿Perder mi

dragón? ¿Estaba drogado? No. Esa ni siquiera era una opción.
¿Perder mi capacidad de cambiar, perder mi vínculo de pareja
con Logan …?
—De ninguna manera,— dije con los dientes apretados, y sentí

que mi dragón se elevaba dentro de mí. Quería cambiar, volar,
demostrar que todavía era un nacido en el cielo.
Él suspiró. —Puede que haya una última cosa que podamos

intentar. Después de saber que te habían llevado y destruido tu
bastón, fui al lugar y recogí las cenizas del bastón —.
Me animé; la esperanza brotó en mi pecho. — Está bien ...—
—Se lo llevé a Eva y ella y Danny probaron todos los hechizos

imaginables para volver a hacerlo completo. Nada funcionó —.
Me encogí sobre mí. —Esta es una historia de mierda —.

Él rio entre dientes. —Tengo un último amigo de la tierra de las
hadas que puede ayudarnos a arreglar tu bastón —.
La mitad de esa frase fue genial; la otra mitad me hizo desconfiar.

—¡La última vez que uno de tus amigos Faery me ayudó, perdí
un diente !—
Mi lengua fue al lugar donde me habían arrancado el diente. En

lugar de un enorme agujero, había una pequeña protuberancia
redondeada de hueso. ¡Vaya! Recordé cuando Logan contó la
historia de perder un brazo mientras luchaba contra Ardan y
cómo había vuelto a crecer. Increíble.
Isaac me ahuyentó con la mano, devolviéndome al presente.

—No, no, esto no será nada de eso. Aceptará escamas para el
pago. No tienen precio para un alquimista —.
Levanté una ceja. —¿Un alquimista? Bueno, vayamos a conocerlo

y preguntarle. Si pudiera mágicamente hacer que mi bastón
volviera a estar completo, y yo pudiera anclar mejor mi magia con
él, entonces tendría la oportunidad de conservar mi dragón.
Isaac se sonrojó, si eso era posible. —Hay un pequeño

problema—, dijo tímidamente .
Oh, Señor, lo sabía. Alguien necesitaba mis dientes o mi pis o

algún otro pedazo de mi cuerpo que no estaba dispuesta a perder.
—¿Qué?— Presioné.
El druida suspiró. —Me odia. Probablemente me matará en el

acto —.
Mis cejas golpearon la línea del cabello. — ¿Por qué ?—
Contempló los árboles como si tuvieran alguna respuesta. —La

última vez que me vio estaba en la cama con su esposa —.
¡Oh cielos! Una sonrisa astuta se deslizó por mi boca. —¡Isaac!

Eso es tan impropio de ti —.

El asintió. —Lo sé. No es lo que piensas. Y es una larga historia,
pero, sin embargo, Rufus Emerson dijo que si alguna vez volvía a
ver mi cara, me volvería la cabeza de piedra. Es bastante capaz
de eso también —.
Me estremecí. Maldita sea. —Bueno, tal vez ha terminado por

ahora ?—
Isaac hizo una mueca como si no estuviera seguro de creer eso,

pero luego extendió la mano y me dio una palmada en la rodilla.
—Iremos a verlo. Estoy seguro de que se distraerá con las
brillantes escamas de dragón y se concentrará menos en hacerme
una estatua —.
Mis cejas se fruncieron. —¿Estás seguro? Quiero decir, si estás

realmente preocupado de que te lastime, no tenemos que ... —
Por favor diga que está seguro. Necesito mi bastón de vuelta.

Necesito mantener vivo a mi dragón.
Me sonrió justo cuando la cabra dio un calentamiento de

—Waaaaa— y me estremecí en caso de que se estuviera
preparando para atacar. —Estoy seguro. Tu felicidad es
importante para mí, Sloane —.
Mi corazón se apretó en ese momento. Isaac era realmente tan

buena persona, que no estaba segura de lo que hice en la vida
para merecerlo.
—Está bien, tienes que decirme algo ...— Lo miré a los ojos con
una sonrisa. Su charla de estar en la cama con alguien me había
recordado a una pregunta que estaba muriendo por hacerle.
El asintió. — ¿Qué ?—
—¿Tu y Eva salieron alguna vez? Porque estoy recibiendo algunas

vibraciones importantes allí —.

Los ojos de Isaac brillaron mientras sonreía. —No beso y digo,—
dijo y se puso de pie, ofreciéndome su mano.
Hah. Salieron totalmente, lo sabía. Harían una buena pareja si la

guerra druida-dragón pudiera ralentizarse lo suficiente como
para que cualquiera de nosotros tuviera tiempo para el amor.
—Ven, démosle la bienvenida a Dylan y Maggie—, dijo Isaac.

—Mañana por la mañana iremos a ver al alquimista —.
Caminamos hacia las casas y la cabra nos siguió. La mantuve

vigilada todo el tiempo. Cabra demente.
Fue un agradable paseo de cinco minutos hasta el campamento

donde se alojaban la mayoría de los cambiaformas. Isaac tenía
toneladas de viviendas sostenibles repartidas por toda su
propiedad, pero no era suficiente para nuestro grupo grande, por
lo que algunos tuvieron que dormir en tiendas de campaña. No
pareció importarles. Era como un gran viaje de campamento.
A medida que nos acercábamos, pude ver a Dylan parado en el

centro del grupo contando una historia. Debe haber sido
divertido, porque todos sonreían o reían. Dylan parecía tener una
personalidad despreocupada y amante de la diversión. Algo que
necesitábamos por aquí. Cuando me acerqué, finalmente pude
escuchar lo que estaba diciendo.
—Pero estoy enamorado de esta chica, y no quiero herir sus

sentimientos—, dijo, señalando a Maggie, quien sonrió.
—Así que él se lo bebió—, concluyó ella, haciendo una mueca.
La multitud estalló en carcajadas. Incluso Dom tenía una sonrisa

extraña. —Todavía podría matarte— Considéralo.
—Y esa fue la última vez que intentó una poción. Tuve un

sarpullido extraño durante semanas —, dijo Dylan.

Los labios de Eva se curvaron. Ella estaba encontrando la historia
graciosa. —¿Qué porcentaje eres?— preguntó a la joven
hechicera.
Maggie se encogió de hombros. —No mucho. ¿Como el veinte por

ciento tal vez? Mi abuela era hechicera, así que mi mamá recibió
un poco de ella, pero mi papá es humano —.
Eva se puso de pie y se acercó. —Esos fueron algunos

encantadores hechizos de humo que les lanzaste a los druidas
cuando estábamos llegando —.
Maggie se sonrojó. —Gracias. Eso es todo lo que puedo hacer —.
—¿Puedo?— Eva pidió su mano extendida.
Maggie asintió y abrió la palma de la mano, ofreciéndola a Eva.

La hechicera mayor trazó las líneas y se inclinó para olfatear su
mano. Finalmente, se puso de pie y la soltó. Tienes más de veinte
años. Estás alrededor del cuarenta y cinco por ciento, y tu madre
tenía afinidad por la magia curativa. Me vendría bien un asistente
si quieres entrenar —.
La boca de Maggie se abrió de golpe y sonrió, mirando a su novio,

que sonreía de manera alentadora.
—¡Dios mío, me encantaría! Como ... eso es todo lo que siempre

he querido —.
Eva sonrió. —¡Perfecto! Puedes empezar ahora. Te enseñaré cómo

hacer el hechizo de ocultación de nuestro bebé dragón. Evitar que
ella cambie para activar a los druidas —.
Maggie se levantó de un salto emocionada y corrió tras el

hechicero de pura cepa .
Dylan se volvió, notándome. —¡Sloane!— dijo emocionado.

—¿Estás bien ?—

Logan estaba sentado junto a Danny y Keegan, que estaban
abrazados. El resto de la gran manada se mezclaba entre sí,
hablando y riendo. Era como un gran campamento de fiesta para
adultos.
—Estoy genial.— Sonreí. Por lo que pude ver, Dylan tenía esta
actitud contagiosamente positiva todo el tiempo.
Inspeccionó el campamento, los cambiaformas, los jóvenes

Skyborn Casey y Geoff, hablando entre ellos con gran atención.
—Aquí está sucediendo algo asombroso. Gracias por
invitarnos.—
Asentí. —Es todo de Isaac—. Hice un gesto al druida que estaba

a mi lado. —Dylan, este es Isaac. Es un druida terrestre como mi
madre y yo —.
Un destello de escepticismo cruzó por su rostro, pero luego

desapareció. Extendió su mano para saludar al druida. —Gracias
por invitarnos, señor—, dijo en tono respetuoso.
Isaac sonrió, estrechándole la mano. —El placer es todo mío —.
Todavía podía ver la cabra en mis periféricos, rodeándonos a

todos ... acechando.
Keegan se aclaró la garganta y se puso de pie con cautela, usando

el brazo de Danny como apoyo. —Tengo un anuncio que hacer.—
Dee y los otros cambiaformas también estaban presentes, dando

vueltas, bebiendo cervezas y charlando. Dejaron lo que estaban
haciendo y escucharon con gran atención.
Keegan miró a Nadine y Gear tomados de la mano. —He tenido

una regla de larga data de no tener citas o relaciones sexuales
dentro de mi manada. Sentí que era una distracción y nunca
terminaron bien … —

Roxy se colocó un rizo detrás de la oreja y tragó saliva, mirando
a Dominic.
—Estaba equivocado—, dijo. —Estoy acabando con esa regla.

Todos ustedes son adultos. Pueden elegir qué hacer con su vida.
Simplemente no vengan a llorar conmigo si no funciona, y están
atrapados juntos en la manada —.
Dee levantó su cerveza. —¡Aquí, Aquí!— ella vitoreó, y todos

aplaudieron, haciendo clic en sus bebidas y riendo.
Logan se deslizó a mi lado. —Supongo que ya no tenemos que

mantener nuestro amor en secreto—, bromeó con un guiño.
La risa burbujeó dentro de mí, estaba a punto de hablar cuando

por el rabillo del ojo vi a Dominic acechando lenta y
deliberadamente hacia Roxy. Ella estaba congelada en el lugar,
apoyada contra la base de uno de los grandes árboles, mirándolo
mientras se acercaba. Solo algunos de nosotros nos dimos
cuenta: Sophie, Nadine, Logan y yo. Todos los demás estaban
charlando y pasando un buen rato.
Dominic se abrió paso en silencio entre la multitud hasta que

estuvo a unos metros de ella. Abrió la boca y dijo algo. No podía
decir que desde tan lejos, pero no dejó de caminar. Simplemente
se estrelló contra ella, la tomó en sus brazos, una mano detrás
de su cabeza, y la besó apasionadamente .
Oh. Mi. Dios. Sonreí. Parecía que la regla de Keegan había estado
frenando a más de una pareja.
—¡Owwwoww!— Sophie gritó, a su manera inmadura e irritante.
Dom y Roxy se separaron sonriendo y miré a Dylan.
—Bienvenido a nuestra manada loca—. Le guiñe un ojo.
Levantó su copa y me asintió con la cabeza.

Logan se inclinó. —¿Pueden los dragones machos estar en celo?
Porque creo que lo estoy — susurró en mi oído, y la risa brotó de
mí de nuevo, que se convirtió en un grito agudo cuando me
levantó y comenzó a alejarse conmigo.
—¡Déjame al menos despedirme de todos!— lo regañé.
Sus ojos estaban ardiendo y negó con la cabeza. — Nop .—
Sonreí. —¿Vas a llevarme todo el camino hasta la cascada ?—
Como en respuesta, su agarre se apretó; me apretó contra su

pecho duro como una roca y mi vientre se calentó. Dios, amar a
Logan fue tan fácil.
***
A la mañana siguiente nos despertamos listos para reunirnos

con este alquimista. Anoche, después de llegar a casa, le conté a
Logan todo lo que Isaac me había dicho. Estuvo de acuerdo en
que al menos valía la pena intentar arreglar mi bastón,
especialmente si eso ayudase a mi dragón y mantendría mi
energía druida conectada a la Madre Tierra. Informamos a
Keegan y él pensó que era mejor ir con un equipo pequeño, ya
que teníamos que asumir que los druidas sabían sobre los
autobuses que usábamos ahora. Además, Isaac nos aseguró que
su amigo lo odiaba pero no a los Skyborn, por lo que no sería una
amenaza. Eva había vendido nuestras escamas anoche después
de que nos fuéramos de la fiesta, así que Logan tendría que sacar
una allí como pago. Una vez más, Isaac nos aseguró que este
hombre era amigo de los Skyborn. Al final, apilamos a Danny,
Keegan, Dominic y Sophie en mi auto mientras Logan y yo
salimos con Isaac en el coche de Tony.

Cuando partimos en nuestra mini caravana, supe que el hombre
vivía en el lago Tahoe, a solo unas horas de distancia.
—Entonces, ¿cómo conociste a este chico?— Le pregunté a Isaac,

haciendo una pequeña charla mientras nos dirigíamos fuera de
la ciudad y hacia la línea del estado de California y Nevada .
Isaac se rio entre dientes. —Lo conocí justo después de que Faery
fuera destruida. Muchas de las criaturas sobrenaturales que
habían salido formaron una pequeña alianza, por lo que
podríamos llamarnos unos a otros si necesitábamos ayuda para
navegar por este nuevo mundo de humanos. Él y yo estábamos
en la alianza —.
Me animé. Una alianza de criaturas fae sobrenaturales. Logan

asintió mientras cambiaba de carril. —Eva mencionó algo sobre
la alianza. Dijo que fracasó con el tiempo —.
Isaac miraba por la ventana a los árboles que pasaban. —Al

principio fue fuerte. Teníamos reuniones anuales en las que nos
reuníamos y ofrecíamos ayuda a quienes la necesitaban, o
simplemente brindamos apoyo a quienes aún luchaban por
aclimatarse al nuevo mundo. La mejor parte era que creía que
deberíamos integrarnos en este mundo, con los humanos, y todos
eran muy anti-druidas, los malos, por supuesto —.
—Por supuesto,— dije .
—Bueno, Rufus y yo nos hicimos amigos rápidamente. Ambos

lamentamos la pérdida de Faery, pero disfrutamos y respetamos
este nuevo mundo —.
—¿Y él es un alquimista?— Me pregunté si era como pensaba.

¿Podría convertir la caca de perro en oro?
El buen druida asintió. —Sí, puede transmutar ciertos objetos y,

a veces, restaurar los rotos. Por eso creo que podría arreglar su
bastón. Lo vi una vez restaurar un libro que había sido arrojado
al fuego —.

Un escalofrío me recorrió. Si pudiéramos recuperar mi bastón,
tendría lo mejor de ambos mundos, el collar de mi madre y mi
bastón. Ardan no tendría ninguna posibilidad contra mí. Podría
sacar mi magia de la Tierra y mantener vivo a mi dragón, al
mismo tiempo que mantendría a los nacidos del cielo escondidos
con mi collar.
—Ahora, si lo hará o no, es otro asunto—, dijo Isaac,

recostándose y cerrando los ojos.
Compartí una mirada con Logan. Le hablé de la confesión de

Isaac de haberse acostado con la esposa de Rufus. Este iba a ser
un día interesante.
A medida que nuestro automóvil subía la elevación, la nieve

comenzó a salpicar las copas de los árboles y me recordó a
Flagstaff. Estaba a un mundo de distancia de esa época. Le había
escrito a mi mejor amiga Jen solo para decirle que mi viejo
teléfono celular se había ido y que no tenía Internet para mi
computadora portátil. Le había dado mi nuevo número pero no
sabía nada de ella. Ella todavía estaba deambulando por Europa,
ajena a la vida que yo estaba viviendo. No pensé que jamás podría
volver a eso, a ser normal, humano o lo que sea. Esto era. Miré a
mi compañero y le cogí la mano. Logan era mi vida ahora, al igual
que Casey, Nadine y toda la manada. Hacer del mundo un lugar
seguro para nosotros era mi misión. La misión de mi madre
también.
—¿Estás bien?— Preguntó Logan.
Le di una sonrisa fácil. —Solo recordando Flagstaff, la

universidad y esas cosas —.
El asintió. —Se siente como hace toda una vida, ¿ eh ?—
Suspiré. — Sí —.
Apoyé la cabeza contra el fresco cristal de la ventana y el sueño

empezó a tirar de mí. Siempre había sido narcoléptico en los

coches, algo sobre la suavidad del viaje. Si era un pasajero, tenía
la garantía de tomar una siesta. Cuando mis párpados
comenzaron a cerrarse, dejé que la pesadez del sueño me llevara
e inmediatamente comencé a soñar.
—¡Lo tenemos, señor!— dijo el brujo de la verdad mientras estaba

de pie en la esquina de la habitación del castillo de piedra.
Ardan estaba sentado detrás de un gran escritorio, con las manos

juntas y los ojos afilados como una navaja. —¿Me la has traído?—
El brujo de la verdad se hundió dónde estaba y miró al suelo.

—Bueno, no, señor, pero he descubierto una manera de transferir
su magia druida de fuego a usted .—
Ardan pareció levemente impresionado. —Bueno, la necesitamos

de vuelta para hacer eso, ¿no es así ?—
El brujo de la verdad tragó saliva. —Sí, señor. Estoy trabajando

en eso —.
Ardan extendió la mano y una ráfaga de viento golpeó al hechicero

contra la pared de piedra. —¡ESFÚERZATE MÁS!— él bramó.
Entonces se abrió la puerta de la pared del fondo y entró Steven

con una docena de druidas de aspecto poderoso. Todos vestían
elegantes trajes de negocios con algún tipo de tatuaje celta en la
cara o el cuello .
—Señor, tenemos noticias de que la han visto en el norte de

California. Ella ... sacó una manada de druidas que enviamos tras
un nacido del cielo que estaba en el área —.
Ardan se puso de pie, con las venas estallando en su cuello,

luciendo enfurecido. — ¿ Ella qué ?—
Steven no se repitió. Se limitó a mirar al suelo.
Ardan miró a los hombres que tenía delante. —Caballeros, gracias

por venir. Ha llegado el momento de limpiar la tierra de los débiles,

para que los fuertes puedan prosperar. Traeremos de vuelta la
tierra de las hadas, las hadas existirán en la Tierra —.
Todos los hombres levantaron los puños en señal de acuerdo y de

repente escuché un grito.
—¡Sloane!— La voz de Isaac cortó mi sueño y el grito, me di

cuenta entonces que era mi propia voz resonando en el aire.
El sueño ... se sintió tan real ... creo que fue real. —Tuve un
sueño sobre Ardan—. Me senté y rápidamente conté todo. Los
nudillos de Logan se blanquearon cuando agarró el volante con
un puño de hierro.
—Él vendrá por nosotros en masa para tratar de sacarnos, y la

humanidad junto con nosotros—, dijo Logan.
Isaac exhaló. No le había contado a Logan lo que el buen druida

me había dicho sobre vislumbrar el futuro. Claramente era algo
privado y lo respeté. Pero esperaba que Isaac no hubiera visto
nada parecido a lo que Logan acababa de pronosticar.
Tocó el hombro de Logan. —Creo que tienes razón. Sólo tenemos

que estar preparados para él cuando llegue aquí —.
Mordí mi labio interior. —Sabía que estábamos en el norte de

California—, dije, paranoica.
Isaac asintió. —Pero él no sabe dónde exactamente, así que

mientras podamos mantener nuestra ubicación en secreto
tenemos la mano superior.—
—Ya casi estamos aquí de todos modos—. Logan miró la pantalla

de navegación del coche.
Miré por la ventana y noté que pasábamos por algunas

casas realmente bonitas. Como mansiones de un millón de
dólares. —¿Este tipo es rico o qué?— Le pregunté a mi mentor .

Isaac se rio entre dientes. —Puede convertir el papel higiénico en
platino. Sí, tiene cantidades de dinero impías —.
Gruñí. —Entonces, ¿por qué nos ayudaría? Incluso si necesita

escamas de dragón, podría comprarlas todas en el mercado
negro—.
Isaac miró por la ventana y suspiró. —Porque esa mujer con la

que te dije que estaba, la que amaba ...—
Yo asentí.
—Ella era Skyborn y él la amaba más que a la vida misma —.
Oh, mierda. ¿Por qué Isaac se acostaría así con la mujer de

alguien? Era tan diferente al hombre que conocía. Pero había
hecho algunas cosas enredadas en mi vida, incluso huir de la
manada y dar mi sangre a una bruja malvada, así que no iba a
juzgar. Tampoco se me pasó por alto que habló sobre la mujer en
tiempo pasado.
Me di la vuelta y vi que Keegan estaba detrás de nosotros al igual

que Logan sacó el coche a una parada.
—Estamos aquí.— apago el coche.
Había conocido a un elfo, un hada, y ahora iba a tachar

“alquimista” de mi lista.
—Hagamos esto—, dijo Isaac, y salió del coche.
Aquí no pasa nada.

La finca era enorme. El camino de entrada solo era más grande
que la mayoría de las casas. Estaba encaramado en una colina
boscosa, privado y apartado. Había un muro alto y una puerta de
guardia lo cerraba todo. Isaac me indicó que me acercara y le
dijera quién era yo. Solo cuando saliera revelaríamos que
habíamos traído al druida con nosotros. Era un plan de mala
calidad, pero era todo lo que teníamos. Isaac agarró su bastón y
se acurrucó detrás del auto estacionado, a unos diez pies de
distancia con el resto del equipo mientras Logan y yo nos
acercábamos a la puerta.
—¿Simplemente decirle al azar a un extraño por un

intercomunicador que soy un cambiaformas de dragones? No
parece inteligente —le dije a Logan mientras caminábamos.
El asintió. —Pero de qué otra manera podemos llegar a él para

que nos deje entrar ?—
Suspiré. Era el único plan que teníamos.
Nos acercamos a la pequeña caja gris. Logan me asintió con la

cabeza y presioné el botón.
Hizo un sonido de atracón como una campana y una voz

masculina firme se escuchó por el intercomunicador.
—Sin solicitantes. Gracias —, dijo y terminó la llamada.
Caray. Él debe tener una cámara en esa caja también.
Pulsé el botón de nuevo. Su voz regresó por el intercomunicador,

frustrada y enojada. —No estoy comprando… —

—Bien, no estoy vendiendo una mierda—. Lo interrumpí. —Soy
Skyborn,— yo grité.
Silencio. —¿Qué dijiste?— Su voz contenía asombro, curiosidad.
Logan levantó el brazo hacia la caja, a unos treinta centímetros

de distancia, y la transformó en escamas negras.
Las puertas se abrieron de inmediato y Logan me guiñó un ojo.
—'Presumido.'— Ojalá pudiera aprender a cambiar parcialmente

así. Sería muy útil cuando necesite escamas o para demostrar
quién soy ... o simplemente para presumir. Isaac y el resto de la
tripulación salieron de detrás del coche y nos siguieron mientras
entramos. Dominic tenía sus armas en la mano, sostenidas a los
costados. La escopeta de Keegan estaba contra su pierna
izquierda y vi una pistola Taser en la mano derecha de Sophie.
Hmm, eso era nuevo. Isaac sostenía uno de sus bastones en una
mano y una bolsa de plástico con las cenizas de mi bastón en la
otra. Danny simplemente caminaba casualmente al lado de
Keegan, pero sin duda estaba listo para lanzar magia cuando
fuera necesario. Si este tipo era amigable con Skyborn, ¿por qué
estábamos tan fuertemente armados?
La puerta principal se abrió de golpe y un hombre alto y apuesto,

de cabello negro y gris, se quedó allí mirando con entusiasmo a
Logan y a mí. Su piel era oscura pero no tan oscura como la de
Isaac, y vestía un traje impecable. Cuando sus ojos escanearon a
nuestro grupo, su rostro se transformó en una máscara de odio.
—Tú,— escupió en dirección a Isaac.
Isaac se aclaró la garganta. —Hola, viejo amig... — Las palabras

apenas habían salido de su boca cuando el alquimista extendió
el brazo e Isaac agarró su garganta, ahogándose.

—¡Oye!— Grité, cargando los escalones, pero Logan me agarró del
brazo. Keegan amartilló su escopeta y el alquimista miró al alfa a
los ojos.
—Esto no tiene nada que ver contigo. Él y yo tenemos algunos

asuntos pendientes —se enfureció Rufus cuando los labios de
Isaac empezaron a tornarse cenicientos— .
—¡Déjalo ir ahora o te prenderé fuego!— Rugí, tendiéndole la

mano.
Sus ojos se posaron en mí, fascinado una vez más. Pareció pensar
en ello y empujé un poco de mi magia, dejando que una pequeña
bola de fuego púrpura se prendiera a lo largo de mi palma.
El alquimista inmediatamente dejó caer su poderoso control

sobre Isaac. El druida cayó al suelo jadeando, apoyándose en su
bastón, tratando de tomar algo de aire.
—¡¿Qué le hiciste ?!— Grité, luciendo preocupada por mi amigo.

Recordé cómo había dicho que este hombre era capaz de convertir
su cabeza en piedra.
Rufus me miró enarcando una ceja. —Acabo de convertir sus

pulmones en metal momentáneamente. Nada que no se
mereciera —.
Isaac tosió y se puso de pie. —¡Ella me suplicó! La presionaste

durante tanto tiempo por tener un hijo. Solo estaba tratando de
ayudar —.
Rufus voló desde la puerta y se dirigió a Isaac. —¿Entonces te

acostaste con mi esposa?— rugió, y todos retrocedieron, dándoles
espacio. Si parecía que Rufus iba a matarlo, entonces
intervendría, pero sabía que el druida podría manejar lo suyo.
Isaac no se inmutó y se quedó allí mientras Rufus se levantaba
frente a él.

—Eras estéril, yo no. Querías un bebé y ella quería dártelo —. La
voz de Isaac tenía tanto pesar, y mierda, esta historia se puso
jugosa.
Rufus soltó una carcajada. —¡No contigo! Quería uno con ella o
no quería nada —.
Isaac miró al suelo. —Bueno, cumpliste tu deseo —.
Antes de que pudiera moverme, el brazo izquierdo de Rufus salió

y golpeó a Isaac en la mandíbula. Una grieta rebotó en la casa
grande y todos hicimos una mueca. Dominic dio un paso adelante
con el arma en alto.
—¿Terminaste?— Preguntó Dom .
Rufus volvió a mirar al cambiaformas león. —Sí, me siento mucho

mejor, gracias.—
Isaac se frotó la mandíbula. —Está bien, me lo merecía, pero

necesitamos tu ayuda—, dijo con los dientes apretados, sus ojos
color miel clavados en el alquimista. Ya conocía a mi mentor.
Había permitido que Rufus le diera ese golpe como una sensación
de venganza, pero si el hombre se le acercaba de nuevo, lo
pondría de rodillas.
—¿Y por qué debería ayudarte?— le escupió.
Isaac hizo un gesto a Logan y a mí. —Hazlo por ellos, no por mí.
Por Laney —.
Rufus inhaló profundamente y luego suspiró. Laney debe haber

sido el nombre de su difunta esposa.
—¿Que necesitas?— me preguntó, resignado.
Aquí no pasa nada.

—Tenía un bastón como el de Isaac, pero luego Ardan, el gran
druida malvado, lo redujo a cenizas, y necesito que lo hagas
nuevo de nuevo—. Dije apresuradamente. Keegan levantó la
bolsa de cenizas que Isaac había dejado caer cuando casi tenía
los pulmones dorados.
RIP Bastón.
—Ardan—, gruñó Rufus. —¿Por qué no dijiste eso antes? Entra.

Haré mi mejor esfuerzo —.
El alivio me invadió. Iba a intentarlo y no mató a Isaac. Las cosas

estaban mejorando. Caminó hacia la puerta abierta e hizo un
gesto para que lo siguiéramos. Logan fue primero y yo lo seguí.
Al principio, no estaba segura de sí lo que estaba viendo era
correcto. Pero después de que mi cerebro tuvo un momento para
procesarlo, vi que sí, la moldura, los pomos de las puertas, los
accesorios de iluminación y la escalera eran de oro brillante.
—¿Eso es oro de verdad?— Le pregunté a nuestro no tan amable

anfitrión.
Él sonrió, mostrando un conjunto de hermosos dientes blancos y

rectos. —Sí, soy más poderoso con los metales preciosos, así que
me rodeo de ellos —.
Metas.
—Isaac, ¿por qué no nos preparas un poco de té? ¿Recuerdas

dónde está todo, sí? Rufus agitó una mano hacia mi mentor como
si fuera el ayuda contratado. —
La mandíbula de Isaac se apretó, pero luego vi el momento en

que se sumergió profundamente en su calma interior y la ira se
desvaneció. Iba a recibir este castigo del alquimista porque
todavía se preocupaba por él. Pude ver que extrañaba su amistad.

—Sí—, dijo Isaac, y caminó por un pasillo opuesto por donde debe
estar la cocina.
—Ven, te mostraré mi estudio. Tiene más oro que la Reina de

Inglaterra —, nos informó Rufus .
Dominic había cerrado la puerta principal y estaba de pie frente

a ella, con las armas en la mano. No nos siguió. Supuse que iba
a volver a trabajar en el perímetro. Keegan y Sophie nos
flanqueaban a Logan y a mí, pistolas y pistolas Taser en la mano
mientras caminábamos por un pasillo abierto y bien iluminado
hacia un conjunto de ... no es broma ... puertas dobles doradas.
Acarició las puertas. —Traté de hacerlos sólidos, pero eran

demasiado pesados para permanecer unidos, por lo que solo
están chapados —.
¡Ja! Sólo.
Giró los pomos dorados y abrió las puertas. Tuve que levantar el
brazo para evitar cegarme momentáneamente por la cantidad de
oro en la habitación. El suelo era de baldosas lacadas y doradas;
el escritorio de oro macizo; las persianas de las ventanas
chapadas en oro; estanterías de oro; todo oro excepto el techo y
las paredes .
Rufus sonrió ante mi reacción. —Parece un poco como que los

noventa vomitaron aquí, ¿ eh ?—
Yo también sonreí. No quería agradarme porque era un idiota

para Isaac. Pero era divertido.
—Bien.— Palmeó su escritorio. —Pon el contenido aquí y

cuéntame todo lo que le pasó al bastón. ¿De qué estaba hecho,
cuánto tiempo lo poseías y cómo fue destruido ?
Keegan se acercó, dejó la bolsa en el suelo y Rufus le indicó que

la volcara y vaciara las cenizas en su escritorio dorado y estéril.

Keegan me miró con extrañeza antes de complacer la petición del
alquimista.
Me quedé mirando el triste montículo de cenizas. —Ahh, bueno,

un amigo duende de Isaac lo hizo .—
Rufus sonrió. —Yalash. Buen hombre —.
Negué con la cabeza. —No, Yalash está muerto. Su hermano

gemelo Griddish lo fabrico —.
Rufus frunció el ceño. —Ah, vale.— Parecía que no había oído

hablar de la desaparición de los elfos .
—Estaba hecho de olmo blanco—, continué. —Pero solo lo tuve

por poco tiempo. Unas pocas semanas más o menos —.
Me detuvo con la mano. —Sé que eres un híbrido, pero ¿qué tipo
de druida eres? Supongo que hay fuego de esa exhibición afuera,
pero eso no puede ser correcto —.
Keegan dio un paso adelante, con la escopeta suelta a su lado.

—¿Por qué le preguntas eso ?—
El alquimista sonrió y me miró. —¿Es siempre tan protector ?—
Asentí. —Sí, es una de sus mejores cualidades —.
Keegan ignoró nuestras bromas, su mirada fija en Rufus.
El alquimista hizo un gesto con la mano en dirección al montón

de cenizas. —Si voy a recrear esto, necesito hacerlo bien. Si lo
recreo con un druida de tierra o agua en mente, no funcionará.
Necesito asumir la esencia de lo que es para arreglar esta arma.—
Arma, cada vez que escuché eso en relación a mi bastón me

sorprendió. Por lo general, nunca pensé en ello como un arma,
pero lo era.

—'Dile. No tenemos otro lugar adonde ir'—, me dijo Logan a través
de nuestro vínculo. Sabía que este bastón sería bueno para mi
dragón, que ayudaría a equilibrar la potencia de fuego del collar
y conectarlo todo a la Tierra, con la esperanza de mantener vivo
a mi dragón y mantener el vínculo de mi pareja con él.
—Soy mitad nacido en el cielo, mitad druida de fuego—, dije, y

no pude evitar sentir un poco de orgullo. Ojalá hubiera conocido
a mi padre antes de su muerte.
Los ojos de Rufus se abrieron como platos justo cuando Isaac

entró con el té.
—A Laney le hubiera encantado conocerla ... conocer a otros

como ella—, le dijo Rufus a Isaac, aparentemente atrapado en el
recuerdo. Era casi como si odiara la presencia de Isaac aquí, pero
también la necesitaba. Le trajo de regreso a su difunta esposa .
Isaac se rio entre dientes. —Ella te habría golpeado por pedirme

que preparara el té —.
Rufus sonrió, tomando una taza ofrecida de la bandeja. —Sí, lo

habría hecho. Lo hago mejor de todos modos —, dijo, con una
ligera curvatura de sus labios.
Parecía que iba a tomar más que el adulterio para desgarrar a

estos viejos amigos completamente aparte.
El alquimista metió un dedo en la pila de cenizas y comenzó a

girarlo mientras volcaba su té de un trago como si fuera un trago
de vodka y lo volvía a colocar en la bandeja. —¿Sigues en la tierra
de las secuoyas?— le preguntó a Isaac.
Isaac asintió. —Con otros seis nacidos en el cielo y más de

cincuenta cambiaformas protectores —.

Rufus se detuvo y sus ojos se abrieron para encontrarse con los
de Isaac. —¿Qué estás planeando ?—
Isaac se encogió de hombros. —Lo mismo que he estado

planeando desde que nos unimos a la alianza —.
Esta vez el alquimista evaluó a su amigo con una

mirada respetuosa, sin dejar de remover la ceniza con el dedo.
—Finalmente va a tomar esa polla con mierda en el cerebro hacia
fuera?—
Traté de no reírme de lo que supuse que era el término de Rufus

para Ardan.
Isaac solo asintió.
Rufus agitó más las cenizas. —¿Puedo ayudar?— Era difícil para
él preguntar eso, se notaba. Isaac todavía no le agradaba, pero le
gustaba. Era una paradoja .
Isaac se encogió de hombros. —Si les parece bien—. Extendió su

brazo hacia Keegan, Logan y yo.
Antes de que pudiera responder, Keegan movió sus ojos hacia el

montón de cenizas. —Vuelve a hacer eso entero y puedes venir a
la tierra en cualquier momento —.
Rufus sonrió. —Me encantan los buenos desafíos —.
Sin apartar el dedo de la ceniza, extendió la mano hacia atrás y

sacó un libro de la pared. Detrás del libro había un pequeño
frasco de polvo de color dorado. Dejó el libro sobre el escritorio y
agarró el polvo. Levantó la tapa del frasco, vertió el oro en polvo
en la pila de cenizas y comenzó a girar de nuevo, reemplazando
el frasco y el libro.
—¿Quieres saber lo irónico de que vengas a verme?— preguntó,

mientras seguía dando vueltas.

—¿Qué es eso?— Jugué con su pregunta .
—Necesitas que vuelva a completar este bastón, pero no puedo

hacerlo sin el poder curativo de los Skyborn. Necesito una
escama —.
Logan dio un paso adelante. —Daré la escama —.
Rufus hizo una mueca. —Lo siento, amigo, es su bastón. Ella lo

manejará. Por lo tanto, debe renacer de su poder sanador —.
Mierda.
Keegan le lanzó una mirada a Isaac. —No nos dijiste eso .—
Isaac se encogió de hombros. —No lo sabía —.
No trajimos un equipo lo suficientemente grande para cambiar y

conseguir una de mis escamas. Los druidas se arrastraban por
todo el norte de California a estas alturas, si mi sueño era una
indicación, no podía arriesgar la vida de mis amigos solo por este
bastón.
—‘Necesitas este bastón. Sin él, Isaac dijo que tu dragón podría no
sobrevivir un mes más.’ —
Yo palidecí. ¿Él había dicho eso ?
—‘No puedo arriesgar la vida de todos. Trajimos un pequeño

equipo, e incluso si volviéramos por más, es probable que los
druidas ya se hayan acercado, esperando que uno de nosotros
cambie.’ — Le estaba poniendo una cara a Logan, mentalmente
tratando de convencerle de que no quería más amigos muertos.
Rufus jadeó de repente, mirando a Logan y a mí. —Espera un

segundo. ¿Sois compañeros? —

Debe haber captado nuestra conversación mental de alguna
manera. Yo asentí.
El alquimista sonrió genuinamente. —¿Por qué no lo dijiste?

¡Compañeros dragón! Su escama funcionará bien si eres una
pareja apareada —.
Uf. Crisis evitada. Creo que toda la habitación se hundió de alivio.
Logan empujó su brazo hacia adelante rápidamente y se movió

parcialmente, las escamas negras aparecieron sobre él. Era como
si temiera que Rufus cambiara de opinión. El alquimista parecía
fascinado, pero nunca quitó el dedo de ese montón de cenizas
ahora doradas y relucientes. Keegan se acercó y tocó una escama,
Logan apenas hizo una mueca.
—Será mejor que tome dos ... uno como pago—, dijo Rufus,
sonriendo.
Keegan puso los ojos en blanco, pero tomó dos, colocando cada
uno en el borde de la mesa. Logan había perdido muchas
escamas durante el último mes. Esperaba que no fueran
demasiadas o se debilitaría. Rufus tomó uno entre sus dedos y lo
miró por un momento. Sus ojos se volvieron brumosos pero él
sacudió la cabeza como para aclarar sus pensamientos y luego
me miraron.
—Quémalo—, me dijo, sosteniendo la pequeña escama negra

entre sus dedos.
Fruncí el ceño. — ¿ Eh ?—
Continuó haciendo girar la ceniza con una mano y me acercó la

escama. —Haz tu magia de fuego y quema la escama. No
lastimará mi mano —.
Miré a Isaac, que se encogió de hombros. De acuerdo ... si

quemaba la mano de este tipo y él volvía mi cabeza de piedra en
represalia, me cabrearía.

Conjuré mi fuego, dejándolo reposar en mi palma, y luego lo
incliné hacia sus dedos extendidos. Fue entonces cuando vi que
un brillo dorado cubría su piel, hasta la muñeca. Genial. Mojé su
mano, viendo cómo la escama se convertía en ceniza blanca y
caía sobre el escritorio.
—¡Gracias!— Dijo, y llevó sus brillantes dedos dorados hacia el

montón de cenizas, mezclando toda la escama de dragón
quemada del escritorio y de sus dedos.
Mientras agitaba, el oro en polvo que había puesto anteriormente

comenzó a licuarse y convertirse en un metal dorado húmedo,
rodando en la ceniza, recogiendo el hollín negro y enhebrando su
oro a través de él. El alquimista se inclinó hacia adelante y respiró
lenta y constantemente sobre la mezcla arremolinada. Noté que
Danny dio un paso adelante con intriga.
—Isaac, un libro por favor. No uno de mis favoritos —.
Isaac dio un paso adelante y eligió un libro del estante,

entregándoselo a Rufus. Una vez en la mano del alquimista,
comenzó a transformarse en un ladrillo de oro macizo.
Santa madre ...
—Soy el tipo de sobrenatural equivocado. Quiero ser tú cuando

sea grande —, le dije, y él se rio entre dientes.
El libro de ladrillos de oro comenzó a derretirse en su mano y se

derramó en la mezcla de cenizas arremolinadas, todo esto
sucediendo solo en un escritorio dorado, sin cuenco, nada para
evitar que se derrame más que su propio poder.
—¿Sabes lo que he aprendido al tener una riqueza infinita?— me

pregunto.

Me encogí de hombros. —Que ser rico es asombroso—.
Obviamente.
Una sonrisa tiró de sus labios. —Ese dinero no puede comprar la

felicidad. No puede comprar la salud, y no puede llevar a la gente
de vuelta de la muerte —.
Me quedé en silencio. Tenía razón y era una mierda.
Finalmente, sacó su dedo de la masa negra y dorada que giraba.

No quedó ni una gota de hollín ni de oro en su piel y la mezcla en
el escritorio continuó arremolinándose incluso sin su
intervención. No estaba segura de quién pensaba que era mejor,
Danny o yo.
—Ahora esperamos. Aproximadamente doce horas deberían

hacerlo. Por la mañana sabremos si tuve éxito. Puede que tenga
un aspecto diferente al anterior, pero es de esperar que aún
funcione para usted. Todos son bienvenidos a quedarse aquí.
Sería un honor acogerlos —.
Miré a Logan y asintió. —¿Incluso Isaac? Puede quedarse

también ?—
Rufus gimió como si hubiera olvidado su enemistad con el

druida. —Sí, se puede quedar también .—
Sonreí. —Bien entonces. Gracias a usted —.
No valdría la pena conducir todo el camino de regreso, o incluso

quedarse en un hotel si él estaba ofreciendo que nos quedáramos
aquí. Parecía más seguro. La casa estaba detrás de una gran
puerta, y él podía convertir los pulmones de la gente en oro, así
que apostaba a que él podría defenderse en una pelea de druidas.
Se levantó. —Llamaré a mi proveedor de servicios de catering.

Isaac, ¿sigues siendo vegetariano ? —

Isaac asintió. —También lo es Sloane —.
Maldita sea. Me olvide de eso. Cuando mi mentor me miró, sonreí.

Una sonrisa un poco forzada. Los ricos solían comer muy bien.
Como costillas y cubiertas de tocino ... No pude ir allí.
—¿Por qué no se acomodan todos y los veo para cenar en unas

horas?— Dijo Rufus .
Asentimos y salimos de la habitación, él procedió a darnos un

recorrido rápido por la casa. Cuando nos mostró a Logan y a mí
nuestra habitación, entramos y cerramos la puerta. Era un
espacio simple pero lujoso. Una cama de lujo con una zona de
estar a un lado. Caí en el colchón mientras Logan se sentaba en
la silla. Mientras yacía allí, encontré mi lengua sondeando mi
boca y una conmoción me recorrió cuando sentí que mi molar
casi volvía a crecer.
—¡Mi maldito diente está creciendo de nuevo!— declaré.
Logan se rio entre dientes. —Muy bien, ¿ eh ?—
Asentí con la cabeza, pero luego me encontré preocupándome por

el estado de mi varita.
—¿Crees que funcionará? ¿Mi bastón?— Le pregunté a mi

compañero, dándome la vuelta para encontrarme con su mirada.
Él se encogió de hombros. —Espero que sí .—
—¿Qué crees que pasó con ese sueño que tuve en el auto? ¿Crees
que fue real? — Le pregunté a él .
Asintió sin dudarlo. —Sí, desafortunadamente lo hago. Los

druidas tienen desde hace mucho tiempo un plan para restaurar
la esencia de las Hadas limpiando la Tierra de humanos para que
solo queden los sobrenaturales de sangre pura —.

La rabia hervía dentro de mí, tan caliente y abrumadora que
pensé que escupiría fuego en ese mismo momento.
—¡Como se atreve! ¿Cómo se atreve siquiera a pensarlo? Lo voy a

matar—, dije con los dientes apretados, sentándome
completamente.
Logan abrió los brazos y me deslicé de la cama y caí en ellos,

sentándome en su regazo con la cabeza en el hueco de su cuello.
Acarició mi cabello y luego bajó por mi cuello hasta mi brazo,

sosteniendo mi mano. —Mi madre y mi padre te habrían amado—
dijo.
Me quedé helada. Apenas habló de ellos. Siempre pensé que era

demasiado doloroso. —Mi madre te hubiera amado—, le dije. —Y
mi padre ya lo hizo —.
Él sonrió. —Sí, cuando Marcus no me llamaba un exaltado

egoísta, me amaba — .
Sonreí. —¿Cómo eran tus padres?—
Logan miró un rincón vacío de la habitación. —Mi madre fue la

mujer más terca que jamás hayas conocido. Podía dominar una
habitación entera con su energía. Su dragón era todo blanco,
muy raro —.
Sonaba hermoso.
—Mi padre era el amable, el sabio. Me enseñó a pensar antes de

hablar y a darle a la gente el beneficio de la duda. Su dragón era
completamente negro. Eran opuestos de muchas maneras.
Quizás por eso funcionaron tan bien —.
Nunca llegué a ver a mi madre enamorada con ningún hombre.

Siempre me había dicho que había tenido su gran amor y que no
estaba interesada en nada deficiente. Nunca la cuestioné.

Estaba a punto de comentárselo cuando su teléfono celular
comenzó a sonar en su bolsillo. Salté de su regazo y él tiró de él
hacia fuera.
—Eva—, me dijo y contesto.
—¿Hola! Qué tal?— le preguntó a la hechicera. Me incliné para

poder escuchar .
—Tenemos una pequeña situación. ¿Cuándo van a regresar

chicos?—
Logan se sentó erguido, casi golpeándome la frente. —¿Cuál es la

situación? Estábamos planeando pasar la noche aquí. Su bastón
no estará listo hasta la mañana, pero podemos volver ... —
Eva no dijo nada durante un momento. —Bueno, no te asustes,

pero algunos de los lobos de Dee estaban corriendo por el
perímetro y se encontraron con un druida explorando el área —.
—¿Qué?— Logan y yo gritamos al mismo tiempo.
Eva suspiró profundamente en el teléfono. —Lo sé, pero pudieron

matarlo antes de que pudiera informar o algo así. La Tierra tomó
su cuerpo y todo está bien ahora. No es necesario volver —.
Logan se puso de pie y yo retrocedí mientras él caminaba por la

alfombra. —¿Deberían irse? Ir en movimiento por un tiempo.
¿Vivir fuera de los autobuses ? —
La puso en el altavoz para que pudiera escuchar. —No, no creo

que sea una buena idea. Lynn está encadenada a esa habitación
con el bebé. La dejaría sola y desprotegida. Y saben que ahora
viajamos en autobús —.
—¡Mierda!— Logan maldijo.
—Va a estar bien. Estoy mejorando mis hechizos alrededor de la

propiedad. Iré más lejos y estableceré alertas para que si alguien,
humano o no, cruce los límites, yo sea consciente —.

Logan dejó de caminar. —Está bien—, suspiró.
Eva guardó silencio por un momento. —Ese fue el problema

número uno. ¿Estás listo para el problema número dos ? —
Logan gimió. —Por favor, dime que estás bromeando —.
—Ojalá lo fuera, querido. El otro problema es que unos treinta

minutos después de que matáramos a este druida, otro Skyborn
llamó. Esos gemelos de México —.
¡Mierda! Empecé a caminar.
—¿Qué tan lejos están? ¿Me necesitan? — Me acerqué al lado de

Logan y hablé por teléfono.
—Están a unas tres horas de distancia. Pudieron hablar con

Dylan. Lo conocen a través de tu madre, Sloane, y confían en él,
pero no estoy segura de que deba dirigirlos aquí ahora mismo. —
Si. Si hubiera druidas en la zona, deberíamos evitar que los

recién llegados o los coches entren y provoquen sospechas.
Admitiría fácilmente que era la reina de las ideas estúpidas, pero
la mayoría de ellas tenían un poquito de genio ... y ahora tenía
una idea.
—Tengo un plan ...— ofrecí, Logan me acaba de dar esa mirada

de “mujer, será mejor que no sea una idea estúpida”.
—Es cincuenta por ciento estúpido y cincuenta por ciento

genial—, dije, preparándolos a ambos.
—Yo seré el juez de eso—, dijo Logan, e hizo un movimiento con

la mano que decía que siguiera adelante .
Dile a los Skyborn que se detengan y consigan un hotel para esta

noche. Mañana por la mañana nos obtendremos los que sea en
que se convierta mi bastón y ... voy a entrar en el bosque aquí y
cambiare, atraeré a los druidas lejos de la tierra de Isaac para
que los nuevo Skyborn puedan llegar —.

—¡DE NINGUNA MANERA!— Logan rugió y me estremecí. Sabía
que lo odiaría, pero tenía mérito.
—En realidad no es tan malo—, dijo Eva por el altavoz. —Mejor

aún, tú y Logan se separan a diez millas el uno del otro, y ambos
cambian para deshacerse de ellos. Pensarán que nuestro
escondite está cerca del lago Tahoe. Especialmente con dos
nacidos del cielo cambiando en esa área —.
Logan gimió, lo que significaba que no le gustaba, pero era una

buena idea. —Apenas trajimos a algún cambiaformas para
protegernos si aparece una docena de druidas ...—
—Puedo enviar más. Voy a tener que irme ahora —, Eva ofrecio.
Mi compañero hizo una mueca. —Me temo que si ese gran

autobús sale de la tierra, cualquier explorador druida sabrá con
certeza que estamos allí —.
—Cierto. ¿Y Gear y Nadine? Tiene su motocicleta. Ella puede

viajar en la parte de atrás. No es mucho, pero son dos personas
más. El equipo puede ser tu ojo en el cielo —.
Logan se estaba mordiendo el labio. —Muy bien, envíalos. Debo

hablar con Keegan. Te devolveré la llamada si algo cambia —. Ella
le deseó lo mejor y lo colgó.
Logan se guardó el teléfono en el bolsillo y me rodeó con sus

fuertes brazos, casi aplastándome contra su pecho duro como
una roca.
—Si Ardan estuviera muerto, no tendríamos que preocuparnos

por cosas como esta—, murmuró.
—Créeme, no hay nada que quiera más—, le dije a mi pareja.

Estaba trabajando en eso. Esperaba estar cerca de poder
encender a ese hijo de puta con mi mente. Quizás el bastón y el
collar a la vez ayudarían.

Se apartó y besó mi frente. —Odio ponerte en peligro de esa
manera .—
—Es solo la realidad de nuestra vida ahora. Hasta que ganemos

esta guerra y pongamos de rodillas a los druidas de Ardan —.
Logan sonrió. —Suenas súper sexy cuando estás conspirando

para derrocar —.
Me reí entre dientes, dándole un suave beso. —Busquemos a

Keegan y esperemos que acepte la idea —.
Logan se apartó y deslizó su mano en la mía. —Realmente no

tenemos otra opción. Si los druidas están en los límites exteriores
de la tierra, es solo cuestión de tiempo antes de que encuentren
nuestro campamento. No podemos dejar que lleguen hasta
Casey, Lynn y el bebé —.
Estuve de acuerdo. Solo esperaba que no fuéramos a atraer a

Ardan aquí. No estaba lista para enfrentarme a él todavía.

A la mañana siguiente, me desperté todavía llena de la cena de la
noche anterior. Rufus hizo que entrara toda una empresa de
catering y preparó bandejas y bandejas de comida.
Sorprendentemente, las opciones vegetarianas fueron increíbles.
Había comido pedazos de tofu a la barbacoa que sabían a pollo
real y un pastel de queso de lima para morirse. Después de que
terminé de ducharme y cepillarme los dientes, salí y vi a mi
compañero abrocharse los zapatos. Su cabello todavía estaba
húmedo de nuestra ducha juntos y estaba sentado sin camisa.
Yo no podía dejar de observarlo.
Maldita sea.
Miró hacia arriba y me miró con sus sexy ojos de dormitorio.

—Sabes, Keegan y Danny están pensando en celebrar su boda en
Hawái —.
—¿Oh?— Caminé más cerca.
El asintió. —Me ha pedido que sea su padrino de boda, así que

supongo que puedo llevarte como mi cita —.
La risa salió de mí. —¿Supones, eh?— Me hice la tímida.
Extendió la mano y me colocó encima de él rápidamente,

haciendo que mi dragón se calentara hasta el corazón. —Pero
solo porque quiero verte en bikini de nuevo—, dijo, chupándose
el labio inferior.
¿De nuevo? Ah, claro, esa monstruosidad violeta del bar de Eva.
Estaba a punto de responder cuando alguien llamó a la puerta .
—El bastón está listo—, llamó la voz profunda de Keegan a través

de la puerta.
Ay, Dios mío. ¿Estaba listo? ¿Qué significaba eso?

Salté de Logan y abrí la puerta. Keegan echó un vistazo a Logan
sin camisa en la cama y mi cabello desordenado y solo se rio.
—¿Funciona? Quiero decir, ¿está completo? — Le pregunté al

alfa.
Él se encogió de hombros. —Isaac acaba de decir que estaba

'listo'—. Hizo citas en el aire.
Corrí por el pasillo caminando tan rápido como pude sin parecer
demasiado ansiosa, todo el tiempo rezando para que funcionara,
que fuera mejor. Entonces podría tener lo mejor de ambos
mundos, usar los collares para ayudar a proteger a los nacidos
del cielo como lo hizo mi madre, pero tener el bastón para atraer
mi poder druida a la tierra y salvar el vínculo de mi pareja con mi
dragón.
Por favor. Por favor. ¡ Por favor !
Las puertas dobles doradas de la oficina de Rufus estaban

abiertas; él e Isaac estaban hablando. Habían llegado a una
amistad extraña como teníamos Sophie y yo.
En el segundo en que entré, mis ojos se posaron en el escritorio.
—Santa madre—, suspiré.
Rufus sonrió y pasó los dedos por todo mi bastón. Estaba

completo de nuevo, pero había cambiado. Los dos tercios
inferiores de la madera eran de oro macizo y terminaban en una
punta afilada. La mitad superior todavía se parecía a su forma
original pero el cristal, que fue una vez un color morado oscuro,
ahora tenía una tonalidad dorada en ella.
—¿Funciona?— Pregunté, mientras miraba a mi bastón

resucitado.
Rufus envolvió sus dedos alrededor de la madera y me la entregó.

—Dímelo tú —.

Miré a Isaac, quien asintió. —Afuera.— Inclinó la cabeza detrás
de él .
Cuando giré, vi que la manada estaba despierta y vestida, parada

en la entrada abierta. Se separaron para Isaac y para mí,
mientras caminábamos por la casa hacia el exterior. No me había
aventurado en el patio trasero anoche, pero cuando salimos a la
gran terraza, lo asimilé todo. Era tal como esperaba que fuera:
un vasto césped bien cuidado con un paisaje prístino, que incluye
arbustos de formas perfectas. y árboles. A la izquierda se
encontraba una gran piscina, rodeada de baldosas de travertino,
y una pequeña cascada al final .
Ser rico era maravilloso.
Mi mentor señaló un arbusto circular. —Pruébalo—, alentó .
Me estremecí. —No quiero arruinar su patio trasero —.
—Está bien. De todos modos, tenía la intención de rehacer el

paisaje. Agregar una casa de la piscina, ese tipo de cosas —, dijo
el alquimista, desde algún lugar detrás de mí.
Está bien ... cierto. Este tipo había convertido un viejo libro
polvoriento en un ladrillo de oro macizo. ¿Por qué debería
preocuparme por arruinar sus posesiones materiales? Por otro
lado, se sentía una mierda quemar el pobre arbusto en el proceso
de probar mi bastón, y si funcionaba, quién sabía cuántos más
destruiría hasta que aprendiera a dominarlo. Suspiré, resignada.
Vi mucha plantación de árboles en mi futuro.
Rodé el bastón en mis manos. Se sentía diferente y, sin embargo,

algo todavía me resultaba familiar, pero no podía describir qué.
Sacudiendo la cabeza para aclarar mis pensamientos, respiré
hondo y me concentré en el arma, llamando a mi poder druida.
Salí del porche para que mis pies descalzos pudieran hundirse
en la hierba fría, e inmediatamente sentí que el poder subía por
mis piernas y llegaba al bastón. Zumbó a lo largo de mi brazo
hasta mi clavícula y dentro del collar, de regreso al poste de

madera dorada y fuera de mis pies. Empujo el bastón hacia
afuera, apuntando el extremo de cristal hacia el arbusto. Fue
como si hubiera disparado un lanzallamas. El fuego se disparó a
ciegas, con una ráfaga concentrada, rápida y directa, y dio en el
blanco a seis metros de distancia. El arbusto se redujo a una
masa quemada de color negro verdoso.
—Mierda—, dijo Rufus, detrás de mí.
Santa mierda de hecho. Mi puntería era mejor, el fuego de alguna

manera parecía más caliente y más rápido, y no sentí a mi dragón
retroceder en protesta cuando llamé a la energía druida. Esa
familiaridad ... me di cuenta de lo que era. Logan. Su escama en
mi bastón era perfecta. Me di la vuelta y me enfrenté al
alquimista.
—Te debo una. Sé que no necesitas dinero, pero te daría lo que

quisieras —.
Él sonrió y agarró mi hombro. —Mata a ese gran druida tonto y

me habrás pagado cien veces —.
Sonreí. — Trato —.
Se volvió y miró a Isaac. —Vendré a visitar la tierra pronto —.
El asintió. —Nos gustaría eso —.
Se quedaron allí por un momento incómodos, y por un segundo

pensé que podrían abrazarse .
—Bueno, será mejor que te vayas si vas a atraer a los druidas

aquí—, dijo Rufus.
Si. Casi me había olvidado de nuestro plan. Eva envió un mensaje

de texto esta mañana diciendo que había sentido otra brecha en
la seguridad de su frontera durante la noche. Fueron disuadidos
por su magia, pero teníamos que cebarlos lo antes posible.

Logan revisó su teléfono. —Nadine y Gear llegaron tarde anoche
y consiguieron un hotel. Están afuera ahora —.
Rufus levantó un dedo. —Tengo un pequeño regalo para todos

ustedes. Alpha, ven conmigo —.
Keegan enarcó una ceja, ser llamado “alfa” y recibir una orden
directa eran sus dos cosas menos favoritas, pero fue tras él de
todos modos .
Todos entramos, tomamos un bagel y un poco de café que

habíamos servido, y nos pusimos las mochilas justo a tiempo
para ver a Keegan gimiendo bajo el peso de una caja, con absoluta
sorpresa escrita en su rostro.
Rufus señaló la caja. —Sé cuánto debe costarle esta operación, y

Laney habría querido que le ayudara —.
Me puse de puntillas, y sí ... la caja estaba llena de lingotes de

oro. Miré con aprecio a Keegan, debe de haber tomado toda la
fuerza de su magia de cambiaformas para sostener eso.
—¿Está seguro?— Jadeé. No sabía qué decir ni dónde venderlos,

pero estaba agradecida.
—Absolutamente—, dijo, y abrió la puerta para nosotros .
Logan y yo no tendríamos que preocuparnos por cambiar para

vender escamas durante mucho tiempo. Fue algo
extremadamente amable.
—Muchas gracias—, le dije al alquimista y le di un abrazo .
—Buena suerte—, nos dijo, y nos despidió con la mano .
Guau. Cuando empezamos aquí, Rufus casi asfixia a Isaac hasta

la muerte, no pensé que nos iríamos con mi bastón intacto y una
caja llena de lingotes de oro. Mientras recorríamos el largo
camino de entrada hacia las puertas abiertas, donde Nadine

estaba sentada detrás de Gear en su motocicleta, me incliné
hacia Isaac. —No ha sido tan malo, al verlo de nuevo .—
Isaac se rio entre dientes. —No para ti. No convirtió tus pulmones
en metal —.
Una sonrisa tiró de mis labios. —Es cierto, pero parece que
ustedes podrían volver a ser amigos algún día —.
Mi buen druida miró hacia la casa y asintió. —Un día. El tiempo

cura muchas heridas —.
Parecía que esta mujer Laney estaba tan desesperada tratando

de darle un bebé a su esposo estéril que había pedido ayuda a su
mejor amigo. Estúpido de Isaac, sí, pero aun así era dulce. Esto
fue probablemente a principios del siglo XIX cuando IFV ni
siquiera existía. ¿Hasta dónde llegaría para darle a Logan todo lo
que quería en la vida?
Nadine dejó caer una bolsa de lona al suelo y se abrió, revelando

un alijo de armas. —California está plagada de druidas. Olí media
docena en nuestro camino por la ciudad mientras venía aquí —.
Ella los olió . No quise preguntar.
—Bien, contamos con eso—, dijo Keegan, y comenzó a cargar

armas en su persona. —El plan es que Danny, Dom, Nadine y yo
llevemos a Sloane a Marlette Lake. Es un bonito lugar aislado
para que un dragón se cambie. Mientras tanto, Sophie y Gear
irán con Logan, dirigiéndose a Zephyr Cove. Logan y Sloane se
transformarán durante aproximadamente un minuto antes de
volver a cambiar y salir de allí —.
Logan asintió. —Un dragón moviéndose aquí arriba puede ser

solo un accidente, pero con los dos seguramente atraerá a los
druidas. Parecerá que nos estamos escondiendo en estos
bosques—.

Keegan asintió. —Cada uno de nosotros cogemos un coche y nos
reunimos en tierra. Si alguien siente que lo están siguiendo,
aléjese de la tierra de Isaac y baje a Fresno —.
Todos asintieron. Era un plan sólido.
Mientras empacaban los dos autos, Logan me atrajo para

un abrazo, pasando sus dedos por mi cabello todavía húmedo.
—Odio separarme—, murmuró .
Asentí. —Lo sé, pero los desviará un poco para que no vengan
por nosotros toda la manada. Dividirlos es más inteligente —.
Él suspiró. —Lo sé —.
—Y yo no soy el estúpido y frágil humano que alguna vez fui—,

discutí.
Él sonrió. —Estás bien. Ya no eres humano — .
Entendiendo lo que quería decir, le di un puñetazo en el brazo.
—Oww.— Él rio. —Eso realmente dolió. Simplemente no salgas

corriendo y des tu sangre a más brujas oscuras, ¿de acuerdo? —
Esta vez fui por el otro brazo, su risa aumentó. Imbécil. Tenía
miedo de que me decapitara por ser medio druida. No es bueno
burlarse de mis momentos bajos en la vida.
—Aww, solo estoy bromeando—. Tomó mi rostro entre sus

manos. —¿Quieres saber qué me vuelve loco de ti y qué me
enorgullece al mismo tiempo ?—
Asentí. Quería saberlo .
—Que al final no seré yo quien derribe a ese idiota. Es todo Isaac

y tú. Tienen esto —. Me plantó un beso en los labios que hizo que
se me doblaran los dedos de los pies.
Bien, perdonado.

Le di una palmada en el trasero por si acaso. —Nos vemos donde
Isaac —.
—¡Oye! Si te golpeo el trasero es sexista, ¿pero tú puedes golpear

el mío? — Levantó una ceja .
Asentí. —Bastante—. Le di un guiño y recogí mi bolso.
Lo último que escuché antes de entrar al auto fue su distintiva

risa gutural.
Dios, amaba a este hombre.
***
Aparcamos el coche hasta un lugar apartado en el lago y le dio la

vuelta, listo para hacer nuestra escapada en el segundo después
de que me cambiara.
—Está bien ...— Keegan llamó a nuestro pequeño grupo para que
lo rodeara. Sloane va a cambiar. Voy a cronometrar un minuto y
luego ella volverá a ser humana y nos largaremos de aquí —.
Dominic estaba encaramado en el techo de mi auto, sosteniendo

una pistola en cada mano. Hombre, ese tipo tenía la compulsión
de estar siempre en terrenos más altos. Empecé a desnudarme,
arrojando a Danny mi ropa para que no tuvieran que sentarse en
el suelo sucio del bosque. Mi bastón yacía a mis pies y deslicé
fuera mi collar también, que entregué a Danny también.
—Sabes, para ser un hombre gay, he visto demasiadas tetas este

mes—, se lamentó Danny.
Solo me reí entre dientes. —¿Cuáles son mejores? ¿Mías o de

Sophie ? —

Nadine sonrió, escuchando nuestra conversación .
Danny pareció considerar esto. —Bueno, ya que aunque no me

gusten las tetas y las suyas son más pequeñas, menos a la
mirada en ...—
Cogí una piña y se la tiré. Solo se rio.
—Basta de juegos, niños. Estamos a punto de atraer a media

docena de druidas aquí —, refunfuñó Keegan.
—Sí, papi—, dijo Danny, batiendo las pestañas.
Amaba a mi familia disfuncional. Ahora que estaba allí

completamente desnuda, respiré hondo y llamé a mi dragón,
trayendo el cambio. Por un momento, no pasó nada. Era como si
mi dragón estuviera dormida, entré en pánico. Entonces la sentí
crujir y salir a la superficie como siempre hacía cuando yo
provocaba el cambio. Al principio no tenía control sobre cuándo
podía cambiar de un lado a otro, pero ahora estaba orgullosa de
decir que creo que finalmente había dominado a mi dragón.
Danny, Dom y Nadine me miraron fascinados mientras me

transformaba. Una vez que estuve completamente formado,
Keegan no perdió el tiempo.
—Muy bien, un minuto a partir de ahora—, dijo, y amartilló su

arma, mirando su reloj.
—¿Por qué un minuto?— Preguntó Nadine, escaneando el área .
Keegan se encogió de hombros. —Logan y yo pensamos que un

cambio rápido era demasiado obvio que era un señuelo. Un
minuto completo es más creíble —. No parecía seguro, pero tenía
sentido para mí. Los druidas serían más cautelosos ahora, por lo
que un minuto completo en esta forma podría parecer que uno
de nosotros se había deslizado y cambiado por miedo o calor.

Después de unos momentos más, Keegan miró su reloj de nuevo
y suspiró aliviado. —Está bien, eso es todo. Dom, enciende el
auto. Sloane, retrocede . —
Asentí con mi gran cabeza de dragón y llamé a mi forma

humana...
No pasó nada .
Mi dragón latía con poder como si ... estuviera luchando contra

mí.
¡Vuelve atrás, tonta! ¡Nos estás poniendo en peligro! Me dije a mi

misma.
—¡Sloane! ¡vuelve a cambiar! — Keegan gritó .
Retrocedí, sacudiendo la cabeza frenéticamente.
Bueno. Solo respira .
Nadine me miraba de forma extraña. —¿Creo que está

atascada?— dijo, como si fuera una pregunta. Moví mi cabeza
arriba y abajo frenéticamente.
—Joder—, maldijo Keegan, y sacó su teléfono celular .
—‘¡Logan! Estoy atrapada en mi forma de dragón. ¡Ella está

peleando conmigo!’ — Llamé desesperadamente a mi compañero.
Hubo una pausa. La incredulidad atravesó el vínculo. —‘Dile que

es seguro. Usted está más seguro como un ser humano’— me rogó.
No fue así. No estaba asustada. Pero ella lo estaba. Era como si

temiera que en mi forma humana mi druida se apoderara de ella
y la consumiera.
—‘No es eso. Tiene ... miedo de que mi magia druida se la coma

viva.’ — Podía sentir el miedo saliendo de ella. Éramos una,
después de todo, y esos temores eran mis temores también.

—‘Mierda’— , dijo.
—Umm, ¿qué hacemos? ¡Los druidas llegarán en cualquier

momento! — Nadine chilló .
—No lo sé—, dijo Keegan, sonando perdido por primera vez en la

eternidad.
Danny recogió mi collar y el bastón, los envolvió en su mano con

mi ropa y se acercó a mí.
—Puedo hacerte invisible por un tiempo. ¿Puedes volar conmigo

en tu espalda? —
—¡QUÉ!— Keegan gritó .
Asentí. No era fácil. Casi había dejado caer Sophie cuando ella
trató de volar en mí la última vez, pero que podía hacer.
Danny miró a Keegan. —Haz que Gear vuele y síguelo en tu auto

para que podamos seguirles la pista a ti y a Logan. Vamos a subir.
Es la única forma de mantenerla a salvo. La última vez que lo
comprobé, los druidas no podían volar —.
Eso era cierto, pero no tuve el corazón para contarle sobre la vez
que Ardan envió un tornado detrás de mí.
Keegan parecía desgarrado. —Está bien—, dijo finalmente, y se

metió en su teléfono otra vez.
—‘Danny me mantendrá invisible y vamos a volar hasta que pueda

averiguar cómo hacer que mi dragón se calme’—, le dije a Logan .
—‘Buen plan’— , respondió. —‘Ya estoy a medio camino de ti’— .
Incliné mi cabeza en confusión. —‘¿Qué quieres decir? ¿Estás

conduciendo aquí?’ —
No lo digas, Logan. No te atrevas a decirlo.
—'Estoy volando también.'—

Mierda. Lo dijo.
Danny saltó sobre mi espalda y tuve que reprimir un chillido. El

chico pesaba mucho.
—¡Adelante y hacia arriba!— Danny dijo mareado.
Ay, Dios mío. Los druidas me dispararían, yo estaba atrapada

como un dragón, ¿y él se estaba divirtiendo?
—Manténgase a salvo. ¡Intentaremos atraerlos al suelo! — Dijo

Keegan.
Fue agradable decirlo, pero no era cierto. Vendrían por mí. Logan
y yo y nuestro delicioso aroma a dragón.
Sin más fanfarrias, extendí mis alas. Keegan retrocedió y sujetó

con fuerza su escopeta. Danny me apretó con más fuerza.
Por favor, no lo dejes caer, Me dije a mi misma.
El despegue fue fácil, mis piernas y alas tenían poder. Fue la

parte del equilibrio lo que fue difícil. Danny sostenía mi bastón y
podía sentir el frío metal dorado contra mi espalda.
—Whoa—, dijo Danny, en un tono asustado pero emocionado.

—¡Esto es asombroso !—
No estamos aquí para festejar , quería decirle, pero no tenía forma

de comunicarme con el hechicero. De repente, una gasa amarilla
cayó sobre mis ojos y entré en pánico.
—Solo es mi hechizo de invisibilidad—, gritó Danny por encima

del sonido del viento.
Bombeé mis alas más rápido llevándonos más y más arriba de la

línea de árboles.
—'¡No te veo!'— Logan dijo, presa del pánico .

—‘Bueno, Danny me hizo invisible, así que tú no lo harás. ¿Dónde
estás ?’ —
—‘Al oeste del lago Marlette.’ —
—'¿Oeste? ¡Necesito izquierda o derecha!'— Yo grité .
Logan gimió dentro de mi cabeza. —‘¡Mira el océano!’ —
Ahh, ese era un idioma que hablaba. Me di la vuelta mirando en

dirección a la tierra de Isaac, hacia el océano, y vi a su dragón
negro volando bajo por encima de la línea de árboles.
—'Te veo. Estamos llegando.'— Empecé a volar en esa dirección,

acercándonos a mi pareja. Cuando estábamos a unos cinco pies
de él, Danny gritó:
—¡Booo!—
El dragón de Logan se estremeció y luego miró hacia arriba con

los ojos llenos de odio.
Estoy segura de que el hechicero estaba sonriendo. —Te haría

invisible, pero tendrías que volar más cerca y creo que sus alas
se tocarían —.
Él estaba en lo correcto. El dragón de Logan era enorme, de seis

metros de alto y el doble de envergadura. Ahora que estábamos
cerca pude ver que en sus garras agarraba una mochila. Llena de
ropa y armas sin duda.
—‘¡Súbete a mi espalda!’ — Logan gritó a través de nuestro

vínculo de pareja.
¿Umm que? Mi compañero debe estar tropezando. Sonaba como

si acabara de decir…
—‘Súbete a mi espalda. ¡Puedo llevarlos a los dos!’ —

Finalmente lo había perdido. Pensé con certeza que yo sería la
primera en perder la cabeza, pero no, fue él.
—'No, gracias. Quiero vivir,'— le dije a él .
—‘¿Quieres que nos vean los druidas? Estoy a la vista. O te subes

a mi espalda o nos separamos de nuevo’. —
Él estaba en lo correcto. Cubrir solo a uno de nosotros no

ayudaría si Logan estuviera volando a plena vista, y yo no quería
separarme. Oh, pobre Danny, no tenía ni idea de lo que estaba a
punto de suceder. Solo esperaba que entendiera el punto y
aguantara. Bombeé mis alas para llevarme más alto, y luego,
cuando estaba directamente sobre Logan, comencé a llevar mi
cuerpo sobre sus hombros. Yo era un pequeño dragón, de sólo
dos metros y medio, como un jugador de baloncesto muy alto.
—¡Sloane! ¿Qué estás haciendo?— Los muslos de Danny se

apretaron entonces, casi rompiéndome la caja torácica. Había
captado el punto.
Cuando aterricé en la espalda de Logan, traté de no usar las

puntas de mis afiladas garras. Crucé mis brazos y piernas
alrededor de él y lo sostuve con mis muñecas y tobillos de dragón.
—Oh Alegría. Siempre quise morir rompiéndome el cuello —, gritó

Danny. Pero lo vi extender la gasa amarilla para repasar la forma
de Logan también.
—‘Muy bien, volaré a unas diez millas de distancia ya que los

druidas vendrán a este lugar. Luego aterrizamos e intentaré que
tu dragón retroceda.’ —
—'Suena como un plan.'— Estaba al borde del pánico por dentro

de que mi dragón nunca retrocedería y estaríamos huyendo,
volando por los cielos para siempre, pero traté de mantener todo
eso en mi lugar profundo y oscuro al que no iba a menudo.

El vuelo de Logan fue sin esfuerzo. Su envergadura hizo que no
necesitara bombear frenéticamente como yo. Simplemente se
deslizó en el aire y fue hermoso. El pobre Danny estaba
murmurando el Santo Rosario encima de mí, mientras casi me
partía las costillas mientras se aferraba a mi por su vida.
Finalmente, encontramos un claro abierto en un parche de

árboles y Logan comenzó su descenso. Estábamos a medio
camino entre los puntos en los que él y yo habíamos cambiado.
Con suerte, no tenía nada que ver con nadie, humano o druida.
Nuestro aterrizaje fue un poco accidentado. Me las arreglé para
medio volar y medio caer de él en el último momento. Danny
gruñó cuando hice un aterrizaje forzoso junto al ala derecha de
Logan. Un rápido escaneo de la zona me dijo que estábamos
solos. Danny saltó fuera de mí y tiró la ropa y el bastón abajo .
—¡Sobreviví!— Cayó de rodillas y procedió a besar el suelo.
No estaba segura de que un dragón pudiera reír, pero lo hice. Fue

un resoplido de algún tipo y llamó la atención de Danny.
—¿Crees que es gracioso? ¡Mi vida pasó ante mis ojos allí arriba!
¿Aterrizando sobre la espalda de Logan? ¿Estás loca mujer? —
dijo dramáticamente.
Asentí con mi gran cabeza, lo que le hizo sacudir la suya .
—Está bien, Sloane ...— Logan se cambió, se vistió y tenía una

pistola metida en la cintura. Maldita sea, el chico fue rápido.
—Voy a persuadir a tu dragón para que se relaje para que puedas
cambiar y podamos largarnos de aquí —.
Yo asentí.
Relájate, niña, me dije. Vas a hacer que nos maten .
Entonces ella se encabritó contra mí, haciendo una demostración

de poder, y mis escamas se tensaron. La chica del hogar no quería
relajarse, quería demostrar que era más fuerte que mi yo druida.

Mierda .
—‘Ella realmente está peleando conmigo’—, le dije a Logan

mientras sentía que mi garganta se apretaba por la emoción
contenida. Ahora no era el momento para esta demostración de
poder de dragón, pero al mismo tiempo me enorgullecía. Ella
estaba luchando por Logan y nuestro vínculo de pareja.
Logan se acercó a mí lentamente, extendiendo la mano, con un

suave brillo verde que emanaba de su palma. —Shh, no necesitas
hacer esto. Nada en este mundo podría quitarte mi vínculo de
pareja —, dijo en voz alta, y sentí lágrimas calientes derramarse
de mis ojos abiertos. Cuando su palma descansó sobre mi pecho,
mi dragón suspiró de satisfacción. —No dejaré que nada le pase
a tu dragón, Sloane—, juró, mirándome directamente a los ojos,
y la veracidad de sus palabras me habría puesto los pelos de
punta ... si tuviera alguno.
Mis escamas comenzaron a retirarse cuando mi forma humana

tomó el control. Mi dragón estaba satisfecho ... por ahora. Una
vez que fui completamente humano, le di a Logan un abrazo
rápido.
—Gracias—, le dije, todavía conmovida por lo que había dicho y

por la fe que tenía en nuestra relación. Danny me tiró la ropa y
comencé a vestirme mientras el hechicero se ponía en su teléfono.
—Sí, ella es humana. ¿Gear puede encontrarnos? No estoy seguro

de dónde aterrizamos —, dijo Danny, presumiblemente a Keegan.
—Vi un camino a unos doscientos pies más adelante. Dile que

caminaremos y lo llamaremos desde allí —, dijo Logan.
Danny transmitió las instrucciones y colgó justo cuando aseguré

el broche de mi collar y recogí mi bastón. Estaba descalza y decidí
quitarme los zapatos hasta que estuviéramos a salvo en la tierra
de Isaac.

Logan puso un brazo protector alrededor de mis hombros. —Muy
bien, caminemos hacia el…— El chasquido de una ramita hizo
que el brazo de Logan se apartara de mis hombros; su arma salió
en segundos.
Los dos giramos al unísono y murmuramos la misma maldición.
Frente a nosotros había más de una docena de druidas en toda

regla y unos cinco o seis cazadores.
Comenzaron a abrirse en abanico, y me sentí un poco aliviada

por el hecho de que Ardan no estaba entre ellos. Pero ese
bastardo baboso de Steven lo estaba. Sabía que podía parpadear
y desaparecer en cualquier momento y estar a mis espaldas.
Saltarina ni siquiera comenzó a describir cómo me sentía. ¿Cómo
diablos había más de una docena de druidas aquí? Estaba
tratando de no entrar en pánico.
—Ha sido un placer conocerlos—, dijo Danny con seriedad, a

Logan y a mí.
Logan gruñó. —Cállate. Coge a Sloane y corre o vuela. ¡Fuera de

aquí, ambos —.
—Ni en una oportunidad en el infierno—, le dije a mi compañero,

ampliando mi postura y preparándome para la pelea.
Logan miró a Danny. —Llévala por la fuerza, mágica si es

necesario. ¡Es una orden!— él gritó .
Danny negó con la cabeza. —Mi prometido nunca me perdonaría

por dejar morir a su mejor amigo, y tampoco lo haría Sloane.
Estamos juntos en esto —.
Logan finalmente se volvió hacia mí. —Sloane, te lo ruego. Corre

... por favor, — gimió .
La ira me recorrió con fiereza y calor. Solo intentábamos vivir

nuestras vidas y ser felices. No les hicimos una mierda a estas

escorias druida y, sin embargo, se habían propuesto acabar con
toda nuestra raza. Una quemadura lenta se desplegó en mi pecho
mientras la ira alcanzaba un punto de ebullición y ya no me
importaba nada. Tuve un momento de desapego. No me
importaba si vivía o moría, no me importaba ser humano o estar
emparejado. Solo me importaba haber borrado esa sonrisa de
suficiencia de la fea cara de Steven.
—Entonces, ¿aquí es donde te has estado escondiendo?— el

druida se pavoneó.
No pude aguantar más. Levantando mi bastón, solté un grito

espeluznante y dejé que todo el calor y la rabia me atravesaran.
Golpeé el bastón contra el suelo y una ola de fuego salió de mi
cuerpo y salió disparada como una marea creciente, cubriendo a
los druidas directamente frente a mí. Steven parpadeó antes de
que llegara el rugiente fuego, mientras que Logan y Danny fueron
arrojados hacia atrás con la reacción. Pero ardieron, esos altos y
poderosos bastardos druidas ardieron vivos.
Entonces llovió el caos, todo sucedió muy rápido. Logan estaba

levantado, hundiendo balas en los druidas restantes que habían
estado fuera de mi alcance. Danny estaba colocando escudos que
bloqueaban sus bolas de fuego rojo. Me giré, sabiendo que el
cobarde Steven aparecería detrás de mí e intentaría tomarme de
nuevo. Ni siquiera le daría un segundo para respirar antes de
quitarle la vida.
Efectivamente, justo delante de mí, Steven parpadeó a la vista .
No pensé, no esperé a que él hablara. Levanté la punta afilada y

dorada de mi bastón y arremetí. Le perforó la carne justo debajo
de la clavícula y se tambaleó hacia atrás en estado de shock. Mi
plan se basaba en esperar que si estaba lo suficientemente
herido, no podría hacer su cosa de teletransportarse. Avancé con
él, mirándolo tropezar hacia atrás al suelo, mi mano permaneció
en mi bastón mientras lo alimentaba con magia. Vi su rostro
contorsionarse de dolor .

—Eres un pedazo de mierda racista, y el mundo está mejor sin
ti—, dije, sacando mi arma de detrás de mi espalda .
Su mano se disparó; una ráfaga de viento me golpeó, pero ya era

demasiado tarde. Disparé tres balas directamente en su frente,
incluso cuando fui lanzada hacia atrás en el aire. Seguí
disparando. Bajé con fuerza sobre mi trasero y me apresuré a
levantarme. Quería asegurarme triple de que estaba realmente
muerto. Sin pensarlo dos veces, saqué mi bastón de su clavícula
y lo giré, apuntando el extremo de cristal hacia él. No me gustaba
matar, o la muerte, o cualquiera de esto, pero a veces las viejas
formas de pensar tenían que estrellarse y arder para que una
nueva manera se elevará.
Invocando mi poder de druida, con un empujón final, dosifiqué

su cuerpo en llamas púrpuras. La parte superior de su torso se
sacudió cuando el fuego lo consumió, y miré hacia otro lado, un
poco avergonzada por lo que había hecho. Finalmente, detuve las
llamas, el bastón cayó a mi lado. Estaba a punto de darme la
vuelta y ver si Logan y Danny necesitaban ayuda cuando vi la
niebla verde concentrada que se elevaba de sus restos humeantes
y flotaba hacia mí.
Magia de dragón. Amigos y familias asesinados. ¡Él tomó eso! Sus

almas por el poder. Ya no sentía ni una pizca de arrepentimiento.
Dando un paso adelante en la neblina verde, respiré hondo,
absorbiéndolo todo en mi cuerpo. Mi dragón surgió dentro de mí,
tirando la niebla hacia abajo y envolviéndola como una cálida
manta. El poder saturó mi esencia mientras la magia verde tejía
dentro de mí, encontrando su lugar.
—Bien hecho—, dijo Logan, detrás de mí.
Me volví para ver que su hombro estaba sangrando, pero por lo

demás parecía intacto. Mis ojos se posaron en Danny, que se
estaba limpiando las manos en la hierba, tratando de librarse de
la sangre. Había eliminado a la docena de druidas con mi muro
de fuego y ellos habían acabado con los cazadores.

—¿Fue ese el imbécil homofóbico que arrojó a Keegan por la
puerta de la cabaña en Flagstaff?— Preguntó Danny, mirando los
restos carbonizados de Steven.
Asentí. —Y su jefe habrá sentido esa pérdida de poder, así que

vámonos de aquí —.
Todavía no estaba lista para reunirme con Ardan. Me sentí

agotada después de esa exhibición. Incluso absorber la magia de
dragón no fue suficiente para prepararme para encontrarme con
el malvado maestro druida. Mis ojos vagaron por el bosque y me
complació ver que mi fuego no había hecho daño. Algunas
marcas de quemaduras en la hierba, pero no había árboles
encendidos. Era casi como si el fuego estuviera consciente y
conociera sus objetivos previstos.
Un graznido desde arriba llevó mis ojos al cielo, donde vi a Gear

dando vueltas por delante.
Logan parecía un poco perdido en sus pensamientos, o tal vez en

una conversación mental con el halcón.
—Keegan está en la carretera. Vamos a trotar —, dijo Logan .
Creo que todos queríamos largarnos de aquí. La Tierra había

comenzado su trabajo de deshacerse de los cuerpos de los
druidas y cazadores, abriéndose para tragarse su maldad entera.
Gracias , envié una oración silenciosa a la Madre Tierra y recogí

mi bastón de la hierba.
Yo había matado a Steven. Maté a uno de los malos grandes. No

podía dejar de pensar en eso. Parecía que por primera vez en la
eternidad la balanza se inclinaba a nuestro favor.
Mientras corríamos, me agarré con fuerza a mi bastón y recé para

que Ardan no pestañeara frente a mí y empeorara este día.
Estaba cansada, me sentía lenta y necesitaba una siesta, sin
mencionar toneladas y toneladas de terapia. Lo apuñalé, le

disparé y lo quemé. Me sentí como un monstruo. La cantidad de
ira que había desatado, ese muro de fuego, ¿qué decía sobre mí
como persona?
—¿Estás bien?— Preguntó Logan cuando llegamos a la carretera.
Solo asentí. Necesitaba hacerse. Él era malvado y tenía que

hacerlo, pero no lo hizo más fácil.
Keegan detuvo el auto y las puertas se abrieron. Nadine nos hizo

entrar, Keegan casi lloró al vernos a todos vivos.
Mientras nos lanzaba de regreso a la carretera, Gear voló a través

de la ventana abierta del pasajero y aterrizó en el regazo de
Nadine. Ella simplemente acarició sus plumas como si no fuera
gran cosa.
Keegan nos miró. —¿Qué diablos pasó ?—
Logan y Danny me miraron. —Como veinte druidas aparecieron—

Fue Danny quien habló. —Pensé que estábamos muertos, pero
Sloane … —
—Yo los maté. Incluido Steven —. Mi voz era hueca.
Nadie dijo una palabra, y yo simplemente apoyé la cabeza en la

fría ventana de vidrio y me quedé dormida.

Me dormí todo el camino de regreso a la tierra de Isaac. En algún
momento dejamos a Gear y Nadine en su motocicleta, y se
encontraron con los Skyborn recién llegados de México, y los
trajeron a casa también. No estaba despierta para nada de eso.
Era de noche cuando regresamos. Inmediatamente, fui a

sentarme junto a la cascada fuera de nuestra casa. Le había
pedido a Logan un tiempo a solas. Necesitaba pensar. Lo que hice
allá atrás, el muro de fuego, tanta muerte, fue destrucción a gran
escala y me entristeció. Me entristeció que los druidas que se
enfrentaran a nosotros tuvieran que morir todos para que
pudiéramos vivir. Se sintió contraproducente. ¿Por qué no
podríamos coexistir todos? Sabía que estaba haciendo preguntas
ancestrales, y si había una respuesta fácil, nunca habría guerra,
pero aun así ... anhelaba una solución mejor que la aniquilación
de los druidas. Significaba que no éramos mejores que ellos .
—Tu corazón está pesado—, dijo Isaac detrás de mí, y salté. Con
el riachuelo rugiente no lo había oído acercarse. Miré hacia arriba
y se tocó el pecho. —Lo siento. A través de nuestra conexión —.
No pude aguantar más. Las lágrimas se derramaron por mis

mejillas. —Yo estuve increíble. Todo lo que hemos estado
entrenando, para convertirme y aún ... —
Él asintió con la cabeza, aparentemente en comprensión. —Y sin

embargo, se siente horrible —.
—¡Sí!— El alivio me invadió, comprendió .
El buen druida se sentó frente a mí y me dio una de sus radiantes

sonrisas. —Eso es porque los druidas terrestres tratan sobre la
vida, la belleza, la curación… rara vez la destrucción. Tuviste que
ir en contra de tu naturaleza y lo estás sintiendo ahora —. Asentí
con la cabeza, aliviado de que alguien me entendiera. —A veces,

la Tierra también tiene sus momentos de destrucción. Temblores,
inundaciones, incendios. No puede sentirse bien para ella, pero
a veces es una limpieza necesaria —.
—Yo solo… no quiero ser la razón por la que no hay más druidas.
No quiero rebajarme a su nivel. ¿Tú sabes?— Compartí mi más
profunda preocupación con él.
Asintió con la cabeza, mirando hacia la orilla del río donde el agua
caía sobre la cornisa. —¿Sabes por qué compré toda esta tierra
en los años cincuenta ?—
Me encogí de hombros. —¿Te gusta la naturaleza ?—
Él sonrió. —Me gusta la naturaleza, pero no. Mi principal razón

para TODA esta tierra, y TODAS estas viviendas que he
construido en ella es… — De repente se veía tímido, como si le
avergonzara compartir.
—¿Qué es?— Me incliné hacia adelante.
Él rio entre dientes. —Siempre pensé que algún día esta guerra
druida-dragón terminaría, y yo podría… dirigir una escuela para
druidas terrestres. Enseñarles cómo extraer energía de la Tierra
nuevamente. Y skyborns también podrían estar aquí. Todos los
sobrenaturales podrían hacerlo. Un campo de enseñanza sobre
cómo usar todos nuestros poderes juntos. No uno contra el otro.
Grandes males se han levantado antes y volverán a surgir. Es
mejor que aprendamos a luchar juntos que unos contra otros. —
Me puse de pie rápidamente, la emoción estalló en mi pecho.

—¡Sí! ¡Es una gran idea! Podría ser maestra para los niños más
pequeños. Enséñarles conceptos básicos como andar descalzo y
meditar —.
Isaac sonreía de oreja a oreja. Él también se puso de pie. —Y

pensé que podríamos enseñar las curaciones de árboles como un
curso de nivel avanzado, incluso conseguir que los hechiceros
ayudaran —.

La alegría pura corría a través de mí. —Y los nacidos en el cielo,
podrían donar escamas para ayudar a sanar. Incluso podríamos
curar a los humanos —.
Los ojos de Isaac estaban llenos de lágrimas. —¡Sí! Eso es lo que

imaginé. Algo así —.
—Bueno, ¿cómo lo vamos a llamar?— Le pregunté a mi mentor.

Necesitaba esto, algo positivo a lo que aferrarme, incluso si era
solo una idea. Las ideas se convertían en cosas poderosas.
Isaac sonrió. — ¿ Escuela de la Tierra ?—
Yo sonreí. —Escuela de la Tierra—. Me incliné hacia adelante

espontáneamente y lo abracé. Mientras me rodeaba con sus
brazos, vi que los sacrificios que tendríamos que hacer serían
para que la próxima generación pudiera aprender a vivir de la
manera correcta.
Cuando nos retiramos, Isaac parecía emocionado. —¡Y

podríamos conseguir más cabras !—
Mi rostro decayó. —¡De ninguna manera! ¡No más cabras ! —
Se dobló de risa y fue entonces cuando me di cuenta de que

estaba bromeando.
Puse una mano en su hombro. —Pero en serio, si sobrevivimos a

esto, haremos la Escuela de la Tierra —.
Su risa se desvaneció y me miró con expresión pensativa. —Sería

el trabajo más grande de mi vida, además de ser tu mentor —.
Sonreí. —Me da algo positivo que esperar, y estoy agradecida por

eso —.
Apretó mi mano. — Yo también .—
A veces, una charla de ánimo de Isaac era justo lo que necesitaba.

Decidimos unirnos a la fiesta del campamento que iba a dar la

bienvenida a nuestros recién llegados Skyborn que habían venido
desde México. Isaac y yo caminamos hacia la fiesta de la fogata
en perfecto y amigable silencio. Fue justo antes de que llegáramos
allí que decidí hablar.
—Oye, gracias por llevarme a ver a Rufus. Sé que no fue

exactamente fácil después de todo lo que pasaron —. Quería que
supiera lo mucho que significaba para mí que pudiera ir antes
que su amigo con todo ese bagaje viejo .
Una triste sonrisa adornó su rostro. —Sí, y Rufus ni siquiera sabe

la mitad de eso. Pero le prometí a Laney que no se lo diría, así
que no lo he hecho —.
Asentí. —Parece que ustedes solo estaban tratando de hacer lo

que pensaban que era correcto —.
Isaac se encogió de hombros. —Sabía que estaba mal, pero pensé

que, dado que ninguno de los dos tenía sentimientos románticos
el uno por el otro, estaba bien. Eran mil novecientos cincuenta y
cuatro y las opciones de fertilidad no estaban exactamente
disponibles. Además, no estábamos seguros de si los médicos
verían algo ... sobrenatural si nos examinaran más de cerca —.
Mierda. Eso fue muy triste. Todo lo que quería era un bebé.
—¿Entonces qué pasó?— No quería entrometerme, pero
realmente quería saber.
Isaac dejó de caminar. Habíamos llegado al borde de la abertura

que nos llevaría a la fiesta. Ya podía escuchar a la gente
hablando. Se quedó en silencio durante un rato, mirando hacia
los árboles como si reviviera el recuerdo. —Nunca ha habido un
informe de que un alquimista y Skyborn tengan un hijo, pero aun
así ... lo intentaron. Lo intentaron durante dos años y Laney
lloraba hasta quedarse dormida cada vez que tenía su ciclo
mensual —.
Oh, Dios, qué terriblemente triste .

—Rufus me decía lo frustrado que estaba por no poder darle un
bebé—. Isaac prosiguió. Y pensó que todo era culpa suya.
Entonces, cuando Laney vino a verme con la idea de embarazarla,
acepté. Le dije que iba a descubrirlo con el tiempo cuando el bebé
saliera con la piel más oscura y poderes de druida, pero
estuvimos de acuerdo en decirle antes de esa fecha, si el
embarazo se desarrollaba —.
Qué posición tan difícil para ponerme. ¿Qué pasa si no puedo

darle un bebé a Logan? ¿Le pediría ayuda a Nadine? Obviamente,
hoy en día teníamos tratamientos de fertilidad, pero aun así ...
podía ver cómo una mujer podía ir por este camino .
—¿Pero te atrapó?— Estaba demasiado absorta en la historia

para no escuchar el final completo .
Isaac suspiró, viéndose repentinamente triste y abrumado por la

emoción. —Sí, nos atrapó antes de que lo hiciéramos. Se veía tan
mal. No dejó que ninguno de los dos se explicara. Me echó. Más
tarde descubrí que incluso después de que ella le contó todo, él
también la echó. Estaba tan emocionada, tan asustada de
perderlo que no podía controlar a su dragón —.
—¡No!— Jadeé, agarrando mi garganta mientras escalofríos

estallaban en mis brazos.
Isaac asintió. —Ella se transformó a unas diez millas de su casa,

en un motel. Los druidas vinieron por ella y la mataron. Ahora
Rufus me culpa por todo —.
—Oh, Isaac, lo siento mucho—. Extendí la mano cuando las

lágrimas llenaron mis ojos, tocando su hombro. —Apuesto a que
se culpa a sí mismo. Él es el que la echó y no quiso escuchar —.
Isaac solo asintió. —Probablemente tengas razón. Pero el pasado

está en el pasado y he aprendido de él. Eso es todo lo que
importa—.

—Sí—, dije. Lamenté haberle pedido que me contara la historia.
Sentí una terrible sensación de malestar en el estómago,
habíamos sido tan felices hace un momento. Si alguno de
nosotros se emocionaba demasiado o no podía controlar a
nuestro dragón, traería a los druidas aquí y firmaría nuestras
órdenes de ejecución.
—No te preocupes por el pasado, Sloane. No es saludable.

Especialmente cuando eres inmortal. Hay mucha mierda en la
que pensar —, me dijo con una sonrisa .
—¿Es la primera vez que maldices?— Le pregunté con una

sonrisa .
Se rio entre dientes y mi viejo druida feliz regresó. —Quizás.— Me

hizo un guiño .
Logan nos vio acercarnos y nos hizo señas. Estaba hablando con
quienes asumí que eran los gemelos de México. Parecían tener
unos veintisiete o veintiocho años. Hemlock yacía a los pies de
Logan con Mittens en la espalda. Esos dos eran inseparables. A
medida que me acercaba, Hemlock se levantó y Mittens se cayó,
pero de alguna manera aún aterrizó sobre sus pies. Le di a mi
perro de rescate un masaje rápido mientras Mitsy se frotaba
contra mis tobillos. Una cabra, un perro y un gato. Bien
podríamos hacer de esto una granja.
—¿Sloane?— La niña gemela se me acercó con la mano

extendida.
Me paré completamente para saludarla. —Oye, es un placer

conocerte. Siento haber estado ocupada antes —, le dije. —Solo
necesitaba tiempo a solas —.
Ella asintió con la cabeza, dándome una sonrisa genuina.

Su largo cabello castaño caía en espesas ondas hasta sus codos.
—Soy Isabella, y este es mi hermano Marco—.
Sorprendentemente, no tenía mucho acento .

Estreché la mano de Marco, presentándome a Isaac y a mí .
—Estamos muy contentos de que hayan podido venir a la

tierra,— le dije a ella .
Miró a Casey y Geoff riendo cerca de la chimenea, arrojándose

malvaviscos y sonrió. —Este es un lugar especial. Tenemos el
honor de venir y ayudar a protegerlo —.
Protegerlo. Porque por un solo momento había olvidado que

teníamos que protegernos de la constante amenaza de los
druidas.
—Isabella me acababa de decir que ella y su hermano han

realizado un entrenamiento militar extenso—, me dijo Logan.
—Les gustaría trabajar con los miembros de la manada —.
¿Dos Skyborn más que pudieran volar y luchar cuando llegara el

momento? —Me suena bien—, les dije. Esa decisión final, por
supuesto, recayó en Keegan .
Ellos sonrieron. Dee los llamó, y ellos se excusaron a sí mismos .
—¿Dónde está Eva? ¿Ha tenido más problemas con la frontera?—

Le pregunté a mi compañero.
Sacudió la cabeza. —No, gracias a Dios. Parece que piensan que,

de hecho, teníamos nuestro bastión en el lago Tahoe. Pero ahora
está trabajando en un problema con Baby Lily —.
Todo mi cuerpo se tensó. —¿Qué pasa ?—
Logan frunció levemente el ceño. —Bueno… nada todavía. Eva

dijo que el bebé está fascinado con los cambios y lo hace con
demasiada frecuencia, lo que está agotando su hechizo. Muy
pronto, nos quedaremos sin ingredientes y ya no podrá
esconderla — .
Era como si alguien me hubiera dejado sin aliento. Incluso Isaac

hizo un ruido ahogado a mi derecha.

—Bueno… consigue más suministros. Hagamos lotes adicionales
y dejémoslos en espera ... —
Logan extendió una mano. —Sloane, hemos pensado en todo eso.

La realidad es que no queda suficiente sangre de unicornio en
este mundo para mantener esta farsa —.
Lo siento, ¿acaba de decir sangre de unicornio ?
—¿Los unicornios son reales?— ¿Por qué nadie me dijo esto ?
Logan me dio una sonrisa maliciosa. —Ellos solían serlo. En

Faery. Pero solo una pequeña y preciosa cantidad de ese
ingrediente logró salir —.
Miré a Isaac. —Tienes amigos unicornio de los que no nos has

dicho?—
Él rio entre dientes. —No, lo desearía —.
Logan suspiró. —En algún momento tendremos que decidir si

mantenemos a Lynn y al bebé aquí, donde todos podamos
protegerlos. O ... que se vayan a la carretera con un grupo
pequeño y esperen lo mejor —.
—Dejarán esta tierra sobre mi cadáver—, dije, con los dientes

apretados. No había manera en el infierno de que permitiera que
una nueva madre y su hijo inocente huyeran asustados.
Los ojos de Logan brillaron de un verde brillante. —Estoy de

acuerdo. Pase lo que pase, pasará. Haremos todo lo que esté a
nuestro alcance para protegerlos —.
Isaac levantó su bastón y lo estampó ceremoniosamente en el

suelo. —Estoy de acuerdo. Mi tierra es un lugar seguro para los
Skyborn. Si el bebé trae a los druidas aquí, entonces la guerra
comenzará y terminará en esta tierra, para bien o para mal —.
Para bien o para mal. Realmente esperaba algo mejor. No sabía

por qué, pero desde que Ardan me llevó a su casa franca en

Irlanda, imaginé que esto terminaría con nosotros asaltando su
castillo y matándolo en su propia casa. Algo acerca de mostrarle
que no tenía dónde esconderse me atrajo. Pero la realidad era que
no iba a poder controlar nada de esto. Como si no pudiera
controlar lo que había sucedido en Lake Tahoe. Estaba a merced
del destino. Solo tenía que estar lista.
***
Me desperté a la mañana siguiente sintiéndome rígida y de mal

humor. Nos habíamos quedado despiertos hasta tarde de fiesta
con todo el mundo, pero había una pesadilla y una tristeza
superpuestas una vez que Eva nos informó que su hechizo para
contener los cambios de la bebé Lily estaba desapareciendo. ¿Qué
tan rápido? No lo sabíamos. Pero se había corrido la voz por toda
la fiesta y ahora era un juego de espera. Después de todo ese
trabajo para alejar a los druidas, eventualmente nos
encontrarían aquí. En nuestra casa.
Al menos libraría a la Tierra de Steven. Ardan tenía que sentir la

pérdida de poder de su segundo al mando. Había recuperado una
tonelada de magia de dragón, magia de la que Ardan ya no podía
sacar. Tanto es así, que mi dragón se sintió más fuerte y más
cerca de la superficie.
Estaba terminando de desayunar con Logan cuando alguien

llamó a la puerta.
—¡Adelante!— Grité, sin mirar.
La puerta de vidrio de nuestra pequeña casa de contenedores de

envío se abrió y Casey asomó la cabeza. —Lo prometiste.
¿Recuerdas ? —
Sonreí. —Pensé que podrías olvidarlo —.

Empujó la puerta de par en par y mostró su atuendo de
entrenamiento, las manos envueltas en tiras de tela como un
boxeador.
Me reí, mirando a Logan. —Bien. Tengo que entrenar a una chica

ruda de catorce años —. Me incliné y le di un beso.
Sonrió, mirándome irme con Casey, con un brillo en sus ojos.
—'Vamos a tener tantos bebés'— , me dijo .
Casi me atraganto con mi saliva. Casey me miró y le dije que se

fuera.
—‘Umm, dos niños y estoy bien’—, fue mi respuesta. Este hombre

estaba loco por hacer bebés conmigo.
—‘Ya veremos’—, fue todo lo que dijo .
¡Ja! Como si tuviera el control. Yo era la que iba a tener que

expulsar a esos tontos. Tengo que elegir cuantos.
—¿Por qué no le pides a Sophie que te entrene o algo así? No soy

tan buena —, le dije a Casey mientras avanzábamos por el
sendero que bajaba por la cascada. Le había prometido anoche
junto al fuego que la entrenaría para ser una luchadora.
Casey puso los ojos en blanco. —¡Sophie no ha nacido del cielo!

Y te he visto. Eres más increíble de lo que piensas —.
Eso me hizo sentir bien en realidad, incluso si venía de un niño

sin entrenamiento de lucha.
—Bueno, te enseñaré todo lo que sé, pero considerando que me

apuntaste con un arma cuando nos conocimos, no creo que
necesites mucha más ayuda —.
Ella solo sonrió.

Entramos y salimos de los árboles y noté que había entrado una
niebla. Dios, amaba esta tierra. Se sentía como en casa y
esperaba, si todos sobrevivíamos a esto, que Isaac nos dejaría
quedarnos aquí. No podía imaginarme estar en ningún otro lugar.
—¿Quieres realizar el curso de formación de Sophie conmigo?—

Le pregunté a ella.
Ella asintió con la cabeza, saltando sobre sus talones. —¿Vamos

a tirar cuchillos y esas cosas también ?—
Me reí. —Habrá lanzamiento de cuchillos, sí —.
Ella chilló. —Esto va a ser increíble —.
Le di un manotazo en el brazo. —¡ETIQUETADA, usted está en

él!— Dejé mi bastón y me puse en camino descalza por el curso
que Sophie había establecido. Casey golpeando detrás de mí.
Durante la siguiente hora entrenamos duro. Casey fue un

estudiante maravilloso. Escuchó, lo dio todo y no se rindió. Me
estaba preparando para interrumpir el lanzamiento de cuchillos
cuando Logan y Eva se acercaron luciendo malhumorados.
Mierda.
—Tomemos un descanso por un minuto. Vuelvo enseguida —le

dije a Casey, al verla asentir y caminar hacia donde Lynn había
preparado una jarra de agua para nosotros. Antes, Tony y Geoff
se habían ofrecido a cuidar al bebé para que Lynn pudiera tomar
un poco de aire fresco y tomarse un descanso, pero, por
supuesto, ella simplemente dio la vuelta y cuidó a todos, viendo
lo que necesitaban.
—¿Qué ocurre?— Le pregunté a Logan y Eva. Por la expresión de

sus rostros, me di cuenta de que algo no estaba bien .

Eva parecía estar al borde de las lágrimas. —No hay
absolutamente nada más que pueda hacer. El hechizo es tan
tenue ahora que es solo cuestión de horas —.
El shock me atravesó; mi dragón se precipitó a la superficie tan

rápido que tuve que empujarla hacia abajo. —¡Horas! Nos lo
acabas de decir anoche —.
Eva suspiró. —Lily cambia cada veinte minutos. Ella piensa que
es divertido. Cada vez que cambia, absorbe parte del hechizo.
Envié a Danny en medio de la noche a mi última fuente que
podría tener sangre de unicornio, no fue bueno —.
Una idea me vino a la cabeza. —¡Los collares! ¿Por qué no le

ponemos el collar de Lynn a Lily? — La esperanza se disparó
dentro de mí.
—Lo intentamos. No funcionó —, dijo .
Y la esperanza se detuvo por completo.
—Tu madre los hizo específicamente para cada persona. Sí, el

collar de tu madre trabaja un poco en ti, pero no es lo mismo que
cuando lo usaba, estoy segura —.
Ella tenía razón. No era lo mismo que mi bastón.
Otra idea apareció en mi cabeza. —¡Logan puede ponerla en un

sueño de dragón !—
Logan frunció el ceño. —Sloane, come cada dos horas. Ella

moriría de hambre. Tu dragón adulto puede pasar tres días sin
comer, pero un bebé no duraría más de seis horas —.
Mierda. Estaba empezando a entrar en pánico. Esta tierra,

nuestro refugio seguro, estaba a punto de convertirse en una
zona de guerra. Yo no estaba lista.

Lo sentí antes de que hablara. Al volverme, vi a Isaac sosteniendo
ambos bastones y con esposas de metal en los brazos, parecía
apto para la batalla. —Sloane, me gustaría hablar contigo en
privado .—
Miré a Logan, quien me apretó la mano y asintió. —Estamos

convocando una reunión de manada. Ven al pozo de fuego
cuando hayas terminado —.
Asentí con la cabeza, mientras se acercaba e hizo que Casey lo

acompañara .
Con el corazón apesadumbrado, me enfrenté a mi mentor.
—Esta aparente catástrofe es un regalo—, me dijo .
¿Cómo demonios podía ver esto como un regalo? Solo le di una

cara apestada y él sonrió.
—Tenemos un aviso por adelantado, así que nos preparamos.

Podemos elegir dónde queremos que pase. En nuestro
territorio.—
—No estamos listos—, le supliqué. Al final, éramos Isaac y yo los

que derribaríamos a Ardan, y no había entrenado tanto como
deberíamos.
Dejó su bastón y puso ambas manos sobre mis hombros.

—Nunca estaremos preparados para algo como esto. Solo
tenemos que acabar con esto —.
De acuerdo, no es el consejo más sabio, pero probablemente sea

un buen punto. Arranca ese curita fuera.
—Hay como sesenta de nosotros y cientos de ellos—, dije .

El asintió. —¿Y cuántos de ellos arrojan fuego y pueden crear
sumideros ?—
Eso me sacó una sonrisa. —Somos una especie de tipos duros,

¿no?—
Isaac se rio entre dientes. —Lo somos y la Madre Tierra está de

nuestro lado —.
Asentí con la cabeza, sintiendo una renovada sensación de

confianza .
Isaac apretó mis hombros, dejando que sus manos cayeran a sus
costados. —Quiero que sepas que me he puesto en contacto con
mi abogado, en el caso de mi muerte les dejé la tierra a usted y a
Logan —.
Mis ojos se abrieron como platos. La visión de un pequeño tatuaje

de bastón pasó por mi mente. —¿Qué? No. No vas a ir a ningún
lado —.
Solo me dio una mirada plana. —Ciertamente espero que no, pero
un anciano debe planificar su desaparición algún día —.
No, me negué a permitir la desaparición de Isaac. —No voy a dejar

que eso suceda, Isaac. Tú y yo saldremos de esto vivos, juntos, y
estamos comenzando La Escuela de la Tierra —.
El asintió. —Eso espero, niña. Eso espero.— Sin decir una

palabra más, se inclinó, recogió sus varas y caminó hacia la
multitud que se congregaba junto al fuego.
¿Qué demonios acaba de pasar? Dios, si me quitas a Isaac, ya no

seremos amigos . Envié mi oración amenazante, bastante segura
de que no fue así como funcionaba, pero valió la pena intentarlo.

No más pérdidas. No podría soportarlo.
Después de algunas respiraciones para estabilizarme, también

alcancé mi bastón y caminé hacia el pozo de fuego. Dee y Keegan
estaban parados en sillas, elevándose sobre la multitud de
cambiaformas y una pizca de Skyborn.
—Entonces—, dijo Keegan, —todos ustedes tienen que tomar una

decisión. Pueden quedarse aquí y luchar cuando llegue el
momento, o irte ahora y ser perdonado. Nadie pensará menos de
ti —.
—¡Nos quedamos!— Isabella gritó .
—¡Así somos nosotros!— gritó un grupo de cambiaformas de culo

grande de la manada de Dee. Las voces del grupo se alzaron
cuando cada persona declaró su decisión. Lynn estaba llorando
en los brazos de Tony y odié ver la culpa en sus ojos. Podría haber
sentido que era culpa suya. No debería ser un crimen tener un
bebé de otra raza. Esa mierda iba a terminar .
—¡Bien!— Gritó Dee. —Vamos a prepararnos, entonces. Mi grupo

establecerá un perímetro. Los quiero en los árboles con pistolas,
cuchillos, arco y flecha, lo que sea que tengamos. Lleven comida
y botellas para orinar, porque no vamos a bajar hasta que esto
termine —.
¡Vaya! Ella era incondicional. Enamoramiento de la mujer .
Keegan asintió y luego tomó el centro del escenario. —Mi manada

será el equipo de tierra. ¡Nuestro único trabajo es proteger a los
Skyborn! Casey, Geoff, Lynn y Tony se esconderán en la cabaña
con Lily. Dylan, Isabella, Marco y Sloane lucharán junto a
nosotros, pero si viene Ardan, crearemos un círculo alrededor de
ellos y no lo dejamos pasar —.

Casey gimió, luciendo completamente devastada por no poder
enfrentarse cara a cara con Ardan .
Oh, tener catorce de nuevo.
Keegan fue valiente al decirle a su manada que me protegiera a

mí y a los otros Skyborn primero, pero en realidad Isaac y yo
éramos los únicos lo suficientemente fuertes para enfrentarlo. Iba
a necesitar una combinación de nuestros poderes de druida para
acabar con él.
Me volví hacia Eva. —¿Cuánto tiempo tenemos ?—
Se volvió, mirando por encima del hombro para ver la cabaña

donde Lily estaba durmiendo, viendo algo que mis ojos no
mágicos no podían ver.
—Quizás al anochecer, probablemente antes—, dijo resignada.
Jesús. ¿Cómo había sucedido esto tan rápido? En cualquier

momento podrían aparecer y causar estragos en este hermoso
lugar, lastimar a esta maravillosa gente. Me asustó y me cabreó
a la vez.
—¡Sloane!— Keegan llamó desde donde estaba parado con Logan

e Isaac .
Le di a Eva un pequeño asentimiento antes de dejarla para

unirme a los chicos. Caminé lentamente, como si el acto por sí
solo pudiera ralentizar el tiempo y hacer que este momento
inevitable nunca llegara .
—Necesitamos un plan—, dijo Keegan. —Sé que no querías que

sucediera tan pronto, pero Ardan vendrá y necesitamos algún
tipo de plan —.

Nunca lo había visto tan agotado. Ardan era poderoso, sí, pero
como Isaac me había dicho hace unos momentos, podía hacer
esto. Nunca estaríamos “listos”, porque eso sería esperar la
perfección, que no existía .
—Tengo esto—, le dije a Keegan con total confianza. —Tú y los

demás mantenéis a cualquiera de sus druidas y cazadores fuera
de mi camino, Isaac y yo lo acabaremos. Estamos terminando
esta guerra. Esta noche.— Fue una confianza totalmente forzada,
pero tuve que aguantarlo y creer en mí misma en algún momento,
y era mejor ahora que nunca.
Isaac me sonrió con orgullo, apoyándose en su bastón y

evaluándome con sus ojos naranjas.
Logan, sin embargo, parecía enfermo.
—‘Quiero golpearte en la cabeza y enjaularte en un sótano muy,

muy lejos de todo esto’ —, dijo a través de nuestro vínculo .
Traté de no resoplar. —‘Eso fue espeluznante y romántico al

mismo tiempo’ —.
—'Lo digo en serio. Todo esto me parece mal. Quiero protegerte'.—
Me acerqué a él. —‘No puedes protegerme de esto’.—
Sus ojos se abrieron cuando la desolación total y absoluta cruzó

sus rasgos. Este hombre me amaba más que a nada. Tuve mucha
suerte de tener ese tipo de lealtad y devoción.
—Sloane—, me llamó Isaac. —Deberíamos entrenar —.
El aire se cargó con Logan y mi amor, con todo lo no dicho que

fluía entre nosotros en ese momento. Pero tenía que ponerme en
modo guerrero. Tenía que desconectarme de él por un momento
y concentrarme en esta tarea con Isaac.

—Te veré en un momento—, dije en voz alta, y extendí la mano
para apretar su mano .
Cuando mis dedos agarraron los suyos, me apretó y tiró de mí

hacia adelante, de modo que volé a sus brazos .
Sonreí a pesar de las terribles circunstancias y me incliné hacia

adelante para encontrarme con sus labios. Me besó
frenéticamente y luego se apartó. —Buen intento, pero estaré
pegado a tu lado durante las próximas veinticuatro horas —.
Isaac se rio entre dientes. —Bueno, entonces, chico amante,

vámonos. Necesito trabajar en algunos movimientos con ella —.
Chico amante. Eso suena bien.
Mientras caminábamos de la mano hacia donde Isaac quería

entrenarme, me sentí bien con el futuro. Tenía mi bastón, mi
collar y había estado entrenando durante un tiempo con Isaac y
Sophie. Pero la mejor parte fue Logan a mi lado. Realmente creía
que juntos podríamos superar cualquier cosa .

Había estado mirando la hoja durante más de una hora. Estaba
cansada, sedienta y nerviosa como el infierno. Logan se sentó a
mi lado, walkie-talkie en mano. Toda la manada estaba en alerta
máxima.
¡Enciéndete en fuego, pequeño bastardo! Le grité mentalmente a

la hoja.
Nada.
Isaac gimió. —Te estás esforzando demasiado. Puedo decir que la

energía se exprime cuando haces eso. Simplemente relájate y
prende fuego a la hoja —.
Amaba a Isaac. Yo lo hacía. Pero quería darle un puñetazo .
Podría apuntar mi mano y usando la energía del collar prenderle

fuego. Podría apuntar mi bastón y usar la punta de cristal para
prenderle fuego. ¡Pero no podía saltar por el aire y prenderle fuego
con mis ojos!
En ese momento, un zumbido bajo subió por mis pies, llamando

mi atención al suelo .
¿Que ca...?
¿Estaba la Tierra tratando de comunicarse conmigo, como Isaac

insistía en que ella siempre lo hacía? Me quedé mirando la hoja.
El suelo volvió a zumbar.
¿Qué? ¿Qué está tratando de decirme?
Las briznas de hierba entre la hoja y yo se movieron entonces,

muy levemente, y mis ojos se abrieron como platos. La bombilla
se apagó en ese momento. No había aire entre la hoja y yo, estaba
la Tierra. Quería que la usara para dirigir mi magia a la hoja.

Salté tan rápido sobre las puntas de mis pies descalzos que Logan
cayó hacia atrás y sacó su arma.
—¿Qué ocurre?— preguntó, mirando a su alrededor.
Yo solo sonreí. —Voy a prender fuego a la hoja ahora—, dije con

absoluta confianza.
Logan frunció el ceño, enderezando su posición en la hierba de

modo que estuviera sentado erguido. — Está bien ...—
Isaac se acercó y tomé una respiración profunda, centrándome.

Busqué el suelo, la energía que corría allí, y me abrí a él. A menos
que algo estuviera suspendido en el aire, lo cual no era mucho,
podría usar mi conexión con la Tierra para aprovechar mi magia
de fuego. No vi por qué no podía encender nada que estuviera
tocando la Tierra.
Ante ese pensamiento, una gran sacudida de energía subió por

mis pies. La Madre Tierra aprobó mi idea. Había entrado
oficialmente en Villalocura con Isaac, porque acababa de tener
una conversación con la Tierra.
Colocando mis pies a una buena distancia, invoqué mi magia de

fuego. En lugar de desearlo hacia afuera a través de mis manos,
mis ojos o cualquier otra cosa que hubiera intentado antes, traté
de dirigirlo a lo largo de ese camino de hierba, canalizándolo a
través del suelo y hacia la hoja. Pero no empujé de inmediato
porque no quería prender fuego a la hierba y dejar un rastro,
simplemente lo dejé fluir sin pensar demasiado en eso, como
Isaac había dicho, y luego cuando sentí mi conciencia golpear la
hoja, empujé, solo un movimiento de mi poder mágico, y llamas
púrpuras y naranjas brotaron de ella.
Tropecé hacia atrás, jadeando y riendo, en estado de shock total,

cuando Isaac saltó hacia mí. —¡Sí! ¿Ahora ves? Esa es la forma
de hacerlo!—

Logan me estaba mirando, con la boca abierta, a punto de hablar,
cuando el walkie de su cinturón cobró vida.
—Están aquí—, dijo Keegan en un tono bajo entrecortado.
¡Oh, mierda!
Los tres entramos en acción, Logan en busca de su segunda

pistola, yo agachándome para coger mi bastón, e Isaac agarrando
ambos bastones, luego cargando los diez metros hacia el claro
donde habíamos dejado al grupo.
—Te quiero. Cuídate —ordenó Logan, antes de trotar conmigo

detrás de Isaac.
—'Lo mismo para ti',— le dije. Yo estaba en la zona. ¡Me estaba

volviendo loca encendiendo una hoja en llamas con mi mente!
Ardan iba a arder .
Isaac llegó primero a la abertura y se detuvo, así supe en ese

momento que algo andaba mal. Si Ardan tocaba una escama en
el cuerpo de Lily, explotaría de ira y quemaría todo a mi paso.
—¿Qué pasa?— Grité, acercándome detrás de él para evaluar la

situación.
Cuando vi a Ardan de pie en una burbuja de magia protectora

amarilla, rodeado por una docena de hechiceros, quise gritar .
—¿Qué demonios está haciendo?— Me pregunté .
Isaac apretó los dientes. —Es listo. Tiene protección, pero no trajo
combatientes. Probablemente solo esté aquí para ti, Sloane. Esto
parece un secuestro —.
—¡Como el infierno!— Logan rugió, uniendo su brazo con el mío

enganchando el codo. —No la va a llevar a ningún lado de
nuevo—.

Ardan estaba allí de pie con una maldita sonrisa de suficiencia
detrás de una impenetrable pared amarilla. Danny y Eva se
pararon directamente frente a ellos, la manada detrás de ellos,
lanzando bolas amarillas de magia a la pared en vano.
De repente me pregunté si mi magia de fuego podría entrar en

ese escudo. No me sentía muy seguro de poder sacar un escudo
erigido por una docena de hechiceros. Estaba bastante lejos.
Necesitaría acercarme para tener una oportunidad.
—Acércame—, le dije a Logan y él asintió .
Con Isaac al frente, pasamos por delante de Dominic y algunos

de los otros, hasta que nos paramos justo al lado de Keegan y
Nadine, que estaban directamente detrás de Danny y Eva.
—¿Podemos bajar ese escudo o qué?— Keegan rugió a nuestros

hechiceros de manada.
Danny estaba sudando, tratando de hacer que su bola de energía

fuera cada vez más grande. —O qué…— respondió.
Maldita sea, no es la respuesta que estaba esperando.
Keegan apuntó su escopeta a la parte superior de la cúpula y

disparó, provocando que se ondulara, pero permaneció ilesa. Las
balas parecían no penetrar en él tampoco.
El crujido de una ramita detrás de nosotros hizo que Logan y yo

nos volviéramos justo a tiempo para ver a media docena de
druidas acercándose sigilosamente a Dominic, que estaba en el
perímetro de nuestra pequeña situación. Dom giró al mismo
tiempo y dejó volar las balas de su glock. Pandemonium llovió
sobre nuestra tierra. La media docena de druidas tenían los
escudos levantados y las balas de Dominic rebotaban. Me había
olvidado de Dee y su manada en los árboles hasta que vi las
flechas volar hacia el pecho y los hombros de algunos de los
druidas que se acercaban, rompiendo sus escudos. Los escudos
de druida brumosos rojos parecían ser más débiles, y solo

funcionaron durante un tiempo en comparación con los escudos
amarillos de los hechiceros.
Dando la vuelta, supe que tenía que actuar con rapidez si iba a
acabar con Ardan. Si esto fuera una masacre, habría traído a más
gente. Tenía un plan y odiaba no saber qué diablos era. Usé mi
conexión con la Tierra, a través de mis pies descalzos, para enviar
algunos sensores. Mi energía se arrastró por el suelo, pasando a
Eva y Danny. Sentí una emoción ante la idea de poder quemar
vivo a ese Hijo de puta, pero luego la energía golpeó una pared y
se apagó. Las brujas lo estaban protegiendo completamente
arriba y abajo.
De acuerdo, plan B.
—¿Asumo que no puedes hundirlo?— Le pregunté a mi mentor .
El suelo había temblado unas cuantas veces, así que supe que lo
estaba intentando. Simplemente negó con la cabeza, derrotado .
Tomando mi bastón con ambas manos, apunté a la cúpula que

lo protegía.
Llamé a mi magia de fuego, sintiendo la quemadura, ya que viajó

hasta mis pies, a través de mis brazos y luego hacia mi bastón,
latiendo dentro de mi collar.
—¡Bajen!— Le grité a Danny y Eva, quienes se volvieron para ver

la punta de mi bastón brillando en rojo mientras se apartaban
del camino a trompicones.
En el momento en que estuvieron despejados, solté mi magia. Un

arco púrpura, similar a un rayo, salió disparado de mi bastón y
se adhirió a la pared del escudo, donde se extendió como dedos
que abarcan toda la cúpula.
Vi gotas de sudor en la frente de Ardan. En sus ojos había un

destello de miedo, aunque solo fuera por un momento. Nada me
produjo más satisfacción que verlo preguntarse si sus

protecciones se mantendrían o no. No me detuve, empujé toda mi
magia a través de ese bastón. La cúpula comenzó a adelgazarse
y a oscilar. Los hechiceros también parecían estar sudando. Creo
que mi magia estaba haciendo un calor insoportable para todos
ellos.
Barbacoa de druidas malos viene en camino.
Ardan aplaudió con fuerza entonces; Un trueno crujió en lo alto

cuando una ráfaga de viento se levantó, golpeando mi espalda.
Isaac se acercó a la cúpula y se inclinó, hundiendo su mano
desnuda en la tierra.
—¡Esta funcionando!— Nadine me gritó con una sonrisa salvaje

en su rostro. Tenía el arpón de Sophie en la mano. Sophie había
recibido instrucciones de proteger a la familia de Lynn y a Casey.
Todos estaban escondidos en su choza mientras esto bajaba. Solo
esperaba que se quedaran allí, a salvo .
Sin previo aviso, Ardan se hundió unos centímetros en la tierra

cuando la tierra se abrió a sus pies .
¡Sí! Isaac y yo íbamos a hacerlo. Juntos vamos a detener todo

esto y matarlo.
En el momento en que tuve ese pensamiento, el malvado druida

se desvaneció, desapareció.
—¡Keegan!— Logan gruñó y se enganchó en mi brazo con más

fuerza.
Keegan se giró, apuntando su escopeta justo por encima de mi

cabeza, mirando mi espalda mientras continuaba rompiendo la
cúpula. Tener un hombre lobo alfa apuntándome con una
escopeta a la cabeza no era mi idea para mantenerme a salvo.
Solo esperaba que su puntería fuera buena.
Saber que alguien podría aparecer detrás de ti y llevarte a Irlanda,

hizo que fuera realmente difícil relajarse y dejar fluir tu magia.

Estaba tratando de seguir enviando mi fuego a la cúpula y
desgastarlo, pero estaba perdiendo la concentración. Sabía que
Keegan me respaldaba. Estaba mirando mi frente, y Logan me
estaba agarrando como un tornillo de banco, pero aun así, me
hacía difícil concentrarme.
—¿Dónde está?— Gruñí. Miré por encima del hombro

rápidamente para ver a la manada de Dominic y Dee enfrascados
en una batalla con sus druidas, pero no con Ardan.
Ahora que había matado a Steven, Ardan estaba jugando a lo

seguro. También significaba que tenía miedo de mi poder,
trayendo consigo a una docena de hechiceros para protegerlo.
Justo cuando pensé que tal vez se había ido a casa, Ardan
apareció frente a mí, tiró a Nadine en sus brazos y salió.
Todo mi cuerpo se debilitó cuando mi magia se redujo a nada,

cortándose de mi bastón. No podía moverme, no podía respirar.
Todo había sucedido demasiado rápido. Gear graznó en algún
lugar de los cielos.
Ardan se llevó a Nadine.
Keegan rugió, girando en círculos frenéticos, buscándola. De

repente, dentro de la cúpula, Ardan apareció en la realidad con
Nadine a su lado, una gran sonrisa plasmada en su cara tonta .
—¡Déjala ir!— Rugí, liberando mi brazo de Logan y corriendo

hacia la cúpula. Tal vez si acabo de golpe en él podría conseguir
atravesarla.
—¡Sloane, no!— Eva gritó, lanzando su mano con desesperación

mientras yo saltaba en el aire, con el bastón primero e intentaba
abrir una brecha en la cúpula .
En el momento en que esa cosa amarilla golpeó mi piel fue como

si me hubieran abofeteado. Me empujaron hacia atrás con fuerza
y caí con fuerza sobre mi trasero, mi cuello se movió hacia atrás

lo suficiente como para doler. Logan estaba allí, levantándome y
arrastrándome hacia atrás en contra de mi voluntad .
Ardan abrazó con fuerza a Nadine, su arma de arpón en una

mano, apuntando a su garganta. No parecía asustada, era Nadine
de la que estábamos hablando, pero yo sabía que lo estaba .
—Aquí está el trato—, comenzó Ardan. Si vienes conmigo, Sloane,

dejaré a todos tus amigos con vida. La dejaré ir y todo estará
bien—.
El sonido de cinco balas golpeando rápidamente la cúpula hizo

que el druida se estremeciera y mirara a mi compañero .
—Ni una oportunidad—, gritó Logan después de vaciar uno de

sus clips en la pared amarilla .
Nadine giró la cabeza para mirar directamente a Ardan y le

escupió a un lado de la cara en respuesta a su demanda .
Oh mierda.
La mano de Ardan con el arpón subió tan rápido que cuando

golpeó el costado de la sien de Nadine, apenas lo vi. Ella se arrugó
contra él y él soltó el arpón, sujetándola con fuerza por los
hombros.
—Muy bien, haremos esto de la manera difícil. La tomaré y

cortaré un dedo cada día que no aparezcas para recuperarla. Al
décimo día, le cortaré la cabeza —.
—¡No!— Grité, dando un paso adelante. —Está bien, iré—, dije

desesperadamente, mientras miraba su cabeza hundida contra
su cuello.
Logan tiró de mí hacia atrás con tanta fuerza que tropecé y me

senté. —Perdóname—, suspiró mientras la magia verde brotaba
de sus palmas.

—¡Logan, NO!— Grité, pero ya era demasiado tarde. Me había
enjaulado. El hijo de puta me había inmovilizado contra el suelo.
Ardan pareció disgustado. —Mi ejército está en camino para

acabar con todos ustedes. Tendré el poder de Sloane, incluso si
tengo que tomar a sus amigos uno por uno y matarlos hasta que
ella venga a mí —.
Luego, él y Nadine se fueron. Ido.
Me senté allí por un segundo en estado de shock, preguntándome

si tal vez volvería con ella y anunciaría que estaba bromeando.
No sucedió. Ambos habían desaparecido. Se había llevado a mi
mejor amiga e iba a lastimarla. La rabia se desenrolló conmigo;
Sentí que mi dragón subía a la superficie. Las escamas se
desplegaron en mi piel y las llamas púrpuras se precipitaron de
mis manos, rompiendo el hechizo de enjaulado de Logan como si
estuviera hecho de papel.
—¡Sloane!— Logan gritó, pero ya no me importaba. Al diablo con

las reglas. Mis músculos se hincharon en mi forma de dragón y
tome vuelo mientras Logan comenzó a derramar su ropa,
llamando detrás de mí.
—'¿Qué estás haciendo?'— preguntó, desconcertado.
La rabia dentro de mí no se había calmado, solo se había

intensificado. —'Voy a matar a todos estos hechiceros y luego Voy
a volar a Irlanda para obtener Nadine vuelta'—
Sentí que la conmoción atravesaba nuestro vínculo.
—‘¡No puedes volar a Irlanda! ¿Has perdido la cabeza?’ —
—‘Sí. Lo hice’— respondí, abriendo la boca y desatando un

torrente de llamas sobre la cúpula que tenía ante mí. Crepitó
cuando mis llamas mágicas chamuscaron los bordes de la
cúpula. Los hechiceros del interior estaban asustados, se

quitaban la ropa en un esfuerzo por mantenerse frescos y
lanzaban más y más magia amarilla a las protecciones.
Con un poderoso grito, Eva lanzó la bola de magia amarilla más

grande que jamás había visto. Era del tamaño de una silla. Se
lanzó por el aire y se estrelló contra el campo protector,
finalmente rompiéndolo. En el momento en que desapareció la
cúpula amarilla, los hechiceros se dispersaron, corriendo en
todas direcciones. Tenía dos a la vista, corriendo hacia la línea de
árboles. Estas personas habían ayudado a Ardan a secuestrar a
Nadine. Estaban aquí para lastimar a Lily. Dejé que mi furia se
desatara en un torrente de fuego púrpura, envolviéndolos,
poniéndolos de rodillas gritando. Al darme la vuelta, vi a Logan
aleteando sobre otro hechicero que corría hacia la cabaña de Lily.
Oh diablos no.
Giré en esa dirección, batiendo mis alas tan fuerte como pude, y
me acerqué por detrás de Logan justo cuando él empapaba al
hechicero con fuego. Al escanear el área, vi que Isaac tenía su
bastón encajado en la ingle de algún druida y lo estaba
bombardeando con magia naranja mientras Dominic lo remataba
con su arma. La tripulación de Dee se había bajado de los árboles
y se había ocupado del resto de los hechiceros con la ayuda de
nuestros nuevos Skyborn luchadores, Isabella y Marco.
El movimiento a mi derecha llamó mi atención. Vi a Gear correr

medio desnudo desde donde acababa de aterrizar y cambiar a su
forma humana.
—¡Nadine!— estaba gritando. Sabía que había visto la conmoción

desde arriba, pero no debió haberlo visto todo o lo estaba
negando. Oh, Dios .
Con las cosas relativamente tranquilas por el momento, giré

sobre mi compañero y aleteé peligrosamente cerca de su cara .
— ‘¡Deberías haberme dejado entregarme! ¡Ahora la tiene y es

culpa tuya!’ — Grité, aunque en realidad no lo decía en serio.

Sus ojos de dragón verde oscuro parecían doloridos.
—‘Keegan, Nadine, Dom y todos hicieron un pacto cuando estabas

hablando con Isaac de que si Ardan hacía algo así, no te
dejaríamos rendirte. Está claro que quiere tu poder, lo necesita
para derrotar a Isaac y seguir adelante con sus planes de pura
raza. Todos estuvimos de acuerdo en que una vida no valía la pena
en comparación con toda la humanidad’.—
Incliné la cabeza hacia atrás y rugí hacia el cielo, dejando que el

fuego saliera de mí al mismo tiempo. Tenía razón desde un punto
de vista lógico. Si me hubiera entregado para salvar a Nadine,
Ardan probablemente me diseccionaría en Irlanda en este
momento, desviando mi poder hasta que me drenara cada gota.
Luego derrotaría a Isaac y mataría a todos los Skyborn,
eliminando a la humanidad.
—‘Lo siento’— dijo Logan finalmente.
Resoplé, sintiendo que mi ira se calmaba ahora que la amenaza

inmediata había pasado.
—‘No quise decir eso. No es tu culpa’,— le dije. No podía culparlo

por protegerme.
—‘Está bien’—, fue todo lo que dijo .
—'Vámonos. No tenemos tiempo que perder'—, le dije a mi

compañero, lista para volar a Irlanda, en cualquier dirección que
pudiera ser.
—'Aterricemos. Tengo un plan'— , me dijo, y empezó a descender.
Quería discutir, decirle que no teníamos un momento que perder,

pero la verdad era que, aparte de asaltar el castillo de Ardan,
prenderle fuego y salvar a Nadine, no tenía un plan. Decidí
escucharlo, y si su plan no supuso salvar a Nadine y hacer
barbacoa a Ardán, me iría y volaría allí por mí misma si tuviera
que hacerlo.

Aterrizamos y cambiamos, encontrando nuestra ropa y
vistiéndonos al azar. Gear estaba devastado, de pie junto a
Keegan, con las manos temblorosas mientras miraba hacia el
bosque.
Dee y su grupo de árboles estaban detrás de Keegan mientras

nuestro grupo se acercaba detrás de mí. Vi a Sophie abrir la
puerta de la cabaña y asomarme, Casey la empujó para salir y
ver el daño. Por ahora la amenaza había desaparecido, y estaban
a salvo, pero era sólo una cuestión de tiempo antes de que el resto
de los druidas de Ardan aparecieran de nuevo.
—¡Bien! Esto es lo que vamos a hacer —, gritó Logan. Fue una de

esas raras ocasiones en que superó a todos y se hizo cargo sin
preguntar.
Hizo un gesto a mi mentor. —Isaac, ¿crees que Rufus se haría

cargo de la manada de Dee y ayudaría a proteger a la familia de
Lynn y a Casey ?—
Isaac asintió. —Sin dudarlo —.
Logan asintió con la cabeza. —Entonces ese es el plan. La

manada de Dee subirá inmediatamente al autobús para quedarse
en la casa de Rufus en Lake Tahoe. Es un alquimista y amigo de
los Skyborn. La manada de Keegan se subirá inmediatamente a
un avión privado con nosotros. Terminaremos esto. Obtendremos
a Nadine, matar a ese hijo de puta de Ardán, y todo esto
acabará—.
Dee asintió, estaba de acuerdo con el plan y miró a Keegan.

Keegan asintió con la cabeza y se hizo. Así de simple. No tenía ni
idea de cómo íbamos a alquilar un avión privado de última hora.
Pero yo sabía que teníamos ladrillos de oro por ahí, así que estaba
segura de que podía resolverlo.
El plan de Logan me tranquilizó de inmediato. Lynn, Baby Lily y

Casey estarían a salvo e íbamos a buscar a Nadine.

—Quiero ir—, Casey gimió detrás de mí.
Me giré para enfrentarla. Las lágrimas brotaban de sus ojos, pero

tenía el ceño fruncido con determinación. Extendiendo la mano,
la agarré por ambos hombros. —Te diré que. Sophie y yo te
entrenaremos más, y cuando tengas diecisiete, podrás ir a
misiones para matar druidas con nosotros, ¿de acuerdo? —
Ella sonrió, pero rápidamente fue reemplazada por una mirada

de tristeza. —¿Es Nadine ...?—
—Ella regresará, viva—, le dije rápidamente, y ella asintió con la

cabeza. —Todos lo haremos —.
No podía manejar emocionalmente a un amigo muerto más. Solo

esperaba no haberle mentido a Casey y que todos volviéramos a
estar juntos.

El vuelo a Irlanda fue más que espantoso. Saber que un hombre
malvado tenía a alguien cerca de ti e iba a lastimarlo, y no había
nada que pudieras hacer más que sentarte allí ... era horrible.
Debe haber sido como Logan y todos los demás se sintieron
cuando me secuestraron.
Habíamos llenado el avión con quince cambiaformas, nuestros

dos hechiceros, Isaac, y cuatro Skyborn, Logan, Isabella, Marco
y yo. Eso es todo lo que cabía en el jet privado o hubiéramos
traído más. El tiempo era esencial, y las horas de espera para un
avión más grande estaban fuera de discusión. Estábamos a solo
una hora de aterrizar en Irlanda y recorrer todos los escenarios
posibles, diferentes formas en las que podríamos sacar a Ardan.
Logan me miró. —¿De verdad crees que puedes encontrar el
castillo de Ardan de nuevo ?—
Asentí. —Yo ... estoy bastante segura, sí —.
Volamos a través de esos árboles, luego estaba el agua, y conduje

el Jeep a través de la pequeña ciudad. Estaba bastante segura de
que podría encontrarlo de nuevo haciendo ingeniería inversa en
mi ruta.
Isaac se inclinó hacia adelante en su asiento. —Minka se reunirá

con nosotros para ayudarnos a encontrarlo nuevamente. Ella
recuerda . —
¡Minka! ¡Esa hada que se comió mi diente!
Me quedé helada. —¿Y exactamente qué tipo de pago requerirá

Minka? porque no le estoy dando más dientes —.
Isaac sonrió. —Ella está feliz con su nuevo cuerpo, así que lo hace
como un regalo de agradecimiento —.

Me estremecí. Iba a encontrarme con mi doble doppelganger de
cuerpo. Nuevamente mi lengua fue al lugar de mi boca donde mi
diente estaba creciendo de nuevo. Casi se había formado por
completo, lo cual era increíble y extraño. Eso pasó a la historia
como la cosa más extraña que había hecho en mi vida. Había
hecho algunas cosas raras en los últimos meses, pero darle mi
molar a un hada para que pudiera hacer crecer un cuerpo como
el mío encabezó las listas de extrañas.
Keegan se paró de su lugar en la parte delantera del avión con

Danny y Eva, colgó un teléfono satelital y caminó de regreso a
donde Logan y yo estábamos sentados .
—Acabo de recibir noticias de Rufus de que la manada se ha

instalado a salvo en su casa, y todo está tranquilo allí—, dijo
Keegan. —Aparentemente, está obsesionado con el bebé nacido
en el cielo. Ya le ha regalado un collar de oro —.
Sonreí. Rufus era algo genial una vez que mirabas más allá de su
semi odio por Isaac. Y era generoso con su riqueza, lo cual fue
agradable, ya que así fue como conseguimos que el amigo de Eva
nos llevara en su Learjet privado en el último minuto.
—Bien—, dijo Logan distraídamente. Nadine era como una

hermana pequeña para él y sabía que esto le estaba afectando.
Miré al otro lado del pasillo para ver a Gear hundido en su

asiento, mirando por la ventana en una depresión completa. No
podía imaginar lo que estaba sintiendo. Él acababa de declarar
su amor por Nadine y ahora ella estaba ...
Traté de no pensar en lo que Ardan le estaba haciendo en esa

jaula de metal.
Mis ojos fueron atraídos hacia Isabella. Hablaba en voz baja con
su hermano. Habían resultado ser invaluables para ayudarnos a
eliminar a los hechiceros restantes. Eran buenos voladores y
buenos con las armas. Me alegré cuando se ofrecieron como

voluntarios para ayudar a traer de vuelta a Nadine y acabar con
Ardan .
La mano de Logan encontró la mía y la apreté. Íbamos a

recuperarla y terminar con todo esto de una vez por todas. Solo
esperaba no tener que sacrificarme para hacerlo, porque
realmente quería más tiempo con el hombre a mi lado.
Antes de que me diera cuenta, estábamos aterrizando. No había

dormido nada. Estaba demasiado subida de adrenalina y
preocupada por Nadine. Cuando la azafata abrió la puerta todos
nos apuramos en salir, y coger las maletas de armas que colamos
a través de un hechizo de ilusión con nosotros.
La pista me resultaba familiar. Era la misma zona, y la puerta

lateral, que había atravesado cuando me habían rescatado.
—Me pregunto si tienen el ojo puesto en los aeropuertos—,

exclamó Keegan.
Danny y Eva caminaban delante de nosotros, magia amarilla

saliendo de sus dedos. —No importará. Todo lo que verán es lo
que quiero que vean —gritó Eva por encima del hombro.
Ella debe haber tenido una ilusión arriba. Por lo que sabía,
parecíamos un grupo de hombres de negocios japoneses
caminando hacia una limusina que los esperaba.
En cambio, estábamos caminando hacia ella. Minka.
Se sentó en el capó del mismo Jeep que antes, con un hombre

alto y larguirucho a su lado. Un hombre que asumí era su novio.
Sus grandes alas de gasa flotaban detrás de su espalda. Llevaba
unos diminutos pantalones cortos y una camiseta muy corta que
dejaba al descubierto su vientre.
—¿Ella solo hace eso al aire libre?— Le susurré a Logan. Si el

piloto o cualquiera vieron sus alas, ellos enloquecerían .

Logan pareció confundido por un minuto, luego se dio cuenta.
—Oh, ¿las alas? Solo nosotros podemos verlos por nuestra
naturaleza mágica. Ella le parece humana a cualquier otra
persona —.
Correcto.
—¡Sloane!— Saludó con la mano y saltó del capó del jeep.
Oh, Dios. Ella no pensaba que ahora éramos amigas, ¿verdad?

¿Come tu diente y conviértete en mejores amigas
instantáneamente?
Danny me miró y estaba pálido como una sábana. Me acordé de

su descripción de ella devorando mi diente y creciendo cinco pies.
Me estremecí. Ciudad de pesadilla.
La saludé con la mano y me encontré mirando su cuerpo.

Reconocí su vientre. Mi barriga. ¡Ese era mi ombligo! Miré a
Logan, que conocía mi cuerpo bastante bien por ahora, y se veía
perturbado también.
A medida que nos acercábamos aún más, olí algo sobre su novio.
Parecía humano ... pero no lo era .
—'¿Que es el?'— Le pregunté a Logan .
La boca de Logan estaba al revés. —'No sé. Algo antiguo y

poderoso de Faery'.—
Oh, Dios. Claramente, muchas más criaturas de Faery habían

escapado de lo que nos habían dicho o pensado. Pero escuchar a
mi compañero decir que no sabía lo que era, solo que era viejo y
poderoso, no me tranquilizó. El hombre no era grande ni parecía
demasiado aterrador, pero había cierto aire en la forma en que se
comportaba. Tenía el pelo rubio desgreñado que caía en ondas
sobre su cabeza, y sus ojos eran de un azul penetrante. Su nariz
estaba torcida, como si se hubiera roto un par de veces y nunca
hubiera sanado bien. Se apoyó en su Jeep, con los brazos

cruzados, mirándonos a todos con una mirada indescifrable.
Parecía tener unos veintiocho años, pero sabía que
probablemente ese no era el caso.
Minka se abrió paso entre la multitud de cambiaformas hasta

que estuvo de pie frente a mí. —¡Oye, gemela!— Ella me guiñó un
ojo .
Oh Dios. Ella iba a hacer esto dolorosamente incómodo, no?
Solté una risa nerviosa. —Oye ... eres mucho más alta que la
última vez que nos vimos—, le dije incómoda.
Ella sonrió, pasando las manos desde los lados de los senos hasta
las caderas. —¡Este cuerpo es maravilloso! Gracias de nuevo —.
No pude evitar frotar mi diente nudoso con mi lengua. Solo

asentí. Como si tuviera elección. Ella había amenazado con
dispararle a mi novio con sus flechas de fuego azul que volvían
las cosas invisibles.
—Lamento escuchar lo de tu amiga. Mi novio se enojó mucho

cuando se enteró de lo que hizo Ardan, y no quieres verlo
enojado—.
Otra risa nerviosa se me escapó. —¿Oh? Si gracias. Estamos aquí

para recuperarla. Ustedes van a ayudarnos?—
Ella asintió. —Esos druidas nos causan un infierno a las

criaturas Faery que vivimos en la zona. Queremos que se vayan.
Para siempre —.
Abrí la boca mientras procesaba lo que decía. —¿Hay ... hay más
de ustedes ?—
Ella se rio y extendió la mano, golpeándome el brazo. —Bueno,

duh. Mi mejor amiga Paisley, ella también es un hada. Dijo que
te pidiera uno de tus dientes y que haría cualquier cosa a cambio.
Cualquier cosa —.

Me quedé paralizada, la sangre se me escapó de la cara. Entonces
Logan dio un paso adelante.
—No me interesa, pero gracias, Minka. Ahora, planeemos cómo

vamos a salvar a Nadine —. Logan tomó mi mano con la suya,
arrastrándome lejos del hada.
Saqué mis labios tensos sobre los dientes para así no mostrarle
más la mercancía.
Querido Dios, por favor déjame salir de esto viva y con todos mis
dientes. No más dobles de cuerpos de Sloane.
Isabella y su hermano estaban hablando con Keegan en voz baja

y él negaba con la cabeza. —No, no me gusta.—
Logan y yo nos acercamos a él, con Minka detrás de mí. Ella

estaba demasiado cerca. Claramente ella no tenía límites.
—¿Qué pasa?— Le pregunté a Keegan, ignorando la presencia de

Minka a mi espalda.
Keegan se volvió hacia nosotros, el estrés se mostraba en su

rostro, que parecía fatigado y cansado. —Isabella y Marco quieren
conducir a veinte millas de aquí y cambiar para intentar alejar a
la mayor parte de los druidas del castillo mientras lo asaltamos
y atrapamos a Nadine —.
Era un plan brillante, pero uno que probablemente podría

terminar con ellos muertos.
Negué con la cabeza. —Demasiado peligroso —.
Minka asomó su carita, enmarcada por su cabello negro muy

corto, por encima de mi hombro. —Eso es realmente una buena
idea. Paisley está en el castillo de los druidas ahora mismo,
comprobándolo por mí. Dijo que hay más de cien druidas y
cazadores allí —.
Mis ojos se abrieron como platos. Más de cien ...

La miré, asqueada por lo cerca que estaba mi ladrón de cuerpos.
—¿Cuánto tiempo hace que te dijo eso ?—
—Justo ahora—, respondió Minka .
Fruncí el ceño. No la había visto atender una llamada telefónica.

Minka se rio y se golpeó la cabeza. —Las hadas comparten una
mente colmena —.
Oh Dios, como si esta chica no fuera lo suficientemente

aterradora. Asentí con la cabeza, inclinándome más cerca de
Logan, esperando que ella retrocediera y me diera espacio. Lo
único que me reconfortó fue cuando dijo que necesitaba mi diente
de buena gana para que funcionara. Me dio un poco de alivio que
no me golpeara en la cabeza y me arrebatara todas mis muelas
para sus pequeñas amigas hadas .
Keegan comenzó a caminar, noté que Minka retrocedió unos

pasos y comenzó a caminar en círculo alrededor de nuestra
manada. Sus ojos estaban clavados en Isabella, mirando su
cuerpo de arriba abajo. La nacida del cielo también lo sabía; sus
ojos se abrieron para mirar al hada .
—Eres una Skyborn, ¿no?— Preguntó Minka .
Isabella era una chica latina dura. Ella no se acobardó. Ella solo
asintió .
Minka parecía absolutamente encantada. —Sabes, podría

enviarte un destacamento de seguridad. De esa manera usted
tendría una mejor oportunidad de sobrevivir cuando atraigan a
los druidas lejos del castillo —.
Keegan dejó de caminar. —¿Qué tipo de detalle de seguridad ?—
Minka caminó hacia el alfa. —Una docena de hadas y tres

trolls.—

Hice un sonido ahogado ante la palabra troll ; todos me miraron
mientras lo convertía en tos. Keegan miró a Minka, impresionado,
no sorprendido en lo más mínimo por la existencia de trolls.
¡Malditos trolls!
—‘¡Eso es lo que es su novio!’ — Logan dijo, a mi lado. —‘Pensé

que todos habían muerto cuando cayó Faery’ —.
Mis ojos se movieron rápidamente hacia el novio, que no se había

movido del jeep para unirse a nosotros, y permaneció apoyado en
su vehículo. Supuse que llevaba algún tipo de ilusión, porque no
me parecía un troll. No es que tuviera idea de cómo se suponía
que debía verse un troll.
—¿Qué deseas a cambio?— Le pregunté directamente. Sabía que

estaba detrás de uno de los dientes de Isabella.
Ella me miró un poco y puso una mano en su cadera, mi cadera.

—Quiero su molar para Paisley—, admitió, señalando a Isabella.
Isabella no parecía desconcertada. Ella simplemente se encogió

de hombros. — Trato —.
Mis ojos se abrieron de par en par y lo alineé con el cielo. —No

creo que lo entiendas, ella quiere tu diente para que su amiga
pueda comérselo y crecer como cinco pies más alto —.
Isabella se rio y puso una mano en mi hombro. —He tratado con

hadas antes. Es solo un diente. Va a crecer de vuelta —.
Su completa “conformidad” con la situación me dejó en silencio.

Miré a Danny, que parecía que se iba a desmayar. Creo que él y
yo éramos los únicos horrorizados por esto.
Minka juntó las manos y chilló. —¡Perfecto! Están en camino —.
Ay, Dios mío. Usó su mente colmena para contactarlos. ¿Por qué
las hadas y los elfos no podían ser la gente cariñosa y brillante
de mis fantasías infantiles, no estos monstruos de la realidad que

comen dientes? Prometí en ese momento que nunca mentiría a
mis futuros hijos sobre el Hada de los Dientes que deja dinero
debajo de las almohadas de los niños.
—Vámonos. ¡Tiene a Nadine! — Gear gruñó, haciendo que mis

pensamientos volvieran al asunto urgente que tenía entre manos.
Minka enarcó una ceja y olfateó el aire en su dirección. —¿Eres

un aviador ?—
Él la miró, como si le molestara que ella se hiciera cargo y les

hiciera preguntas a todos. —Si. Soy un halcón —.
Ella asintió. —Ya no puedo explorar cerca del castillo porque soy
tan grande. Si cambias, te daré instrucciones y podrás transmitir
cuántos de los druidas caen en el plan de atracción. Voy a sacar
a Paisley de la vigilancia del castillo para ayudar a tus amigos. —
Él pareció considerar su propuesta. Ella tenía razón. Sabíamos

que había alrededor de un centenar de ellos, pero ¿cuántos se
enamorarían del plan de Isabella y Marco para ser engañados?
¿Diez? ¿Uno? ¿Cincuenta? Esperaba cincuenta.
Gear miró a Keegan, quien asintió. —No se .—
Gear empezó a quitarse la ropa, sin querer perder un momento,

y noté que Minka le echaba un vistazo extra largo a su pecho y
abdomen, sin importarle que su novio estuviera allí.
—‘Ella me está asustando’—, le dije a Logan .
Sonrió a mi lado. —‘Las hadas son embaucadores astutos con

pocas habilidades sociales’ —.
¡Ja! Podrías decir eso de nuevo. Atrás quedó la dulce Tinker Bell
de mi infancia. RIP polvo de duendecillo .
—Muy bien, hemos alquilado algunas SUV—, declaró Minka,

aplaudiendo. —Están a la vuelta de la esquina. Todos suban y

sigan nuestro Jeep. Lo llevaremos al bosque que bordea la
propiedad donde se encuentra detenida su amiga —.
La multitud se dispersó, Minka fue a la forma ahora de pájaro de

Gear y comenzó a explicar las instrucciones sobre cómo volar al
castillo. Vi a Keegan acercarse para tener unas palabras rápidas
con Isabella y Marco, y algunos cambiaformas a quienes parecía
que iba a enviar con ellos.
Danny se acercó a mí y miró a Minka. —¿Quién la puso a

cargo?—
Lo miré boquiabierta. —¿Lo sé, verdad? Ladrón de cuerpos —.
Danny sonrió. —Oye, tenía la intención de preguntarte. ¿Te

gustaría ser una de mis damas de honor en nuestra boda?
Necesito algo bueno para centrarme —.
Este viaje oscuro y aterrador se llenó de luz de repente. —¡Por

supuesto que lo hare! Ustedes están planeándolo ya ?—
Danny asintió. —Solo en mi cabeza. Me mantiene cuerdo. Una

vez que matemos a este bastardo, quiero que todos escapemos a
Hawai, Keegan y yo nos casaremos y será perfecto. Estoy
pidiéndoselo a Nadine también —.
Me encantaba que actuara como si la sacaríamos de aquí sin

problema. Eso fue realmente dulce y nos dio a todos algo que
esperar. —¿Y Sophie?— Pregunté, señalando al rubio coyote
cambiador que se estaba subiendo a una camioneta.
Él pareció ofendido. —De ninguna manera, sus tetas se robarán

el show —.
Me reí. Espera ... ¿eso significaba que solo nos estaba

preguntando a Nadine y a mí porque no nos robaríamos el show?
Antes de que pudiera comentar, Logan me estaba arrastrando a

una de las camionetas.

—¡Te veré allá!— Le dije a Danny. Asintió, siguiendo a Keegan e
Isaac a un gran coche verde oscuro.
—¡Twinnie! Ustedes dos pueden viajar conmigo —, le gritó Minka

a Logan y a mí, su novio abrió la puerta de su Jeep y se subió al
lado del conductor.
—‘Si me vuelve a llamar gemela, le voy a arrancar las alas’—, le

dije a Logan .
—'Buena suerte.'— Sonrió, como si él no creyera que pudiera

hacerlo.
Ella se ofrecía a ayudarnos, así que no quería ser grosera.
—Gracias—, murmuré, y Logan y yo nos subimos al Jeep .
Su novio troll se dio la vuelta. —Gracias por darle el diente a

Minks—, gruñó con la voz más profunda y rasposa que jamás
había escuchado. Era como Griddish pero diez octavas inferior, y
agrega un hábito de fumar un paquete al día en lo alto de eso.
Tragué saliva. —A la orden—, murmuré .
Dio media vuelta, puso en marcha el coche y nos marchamos,

seguidos de dos SUV grandes llenos de cambiadores. Mierda, esto
era todo. Iba a matar a Ardan. Finalmente había llegado el
momento. Íbamos directo a por él. No me iría de Irlanda sin
cumplir mi promesa de poner fin a su régimen racista.

Estábamos apostados en el bosque donde Ardan había enviado
un tornado a través de los árboles detrás de mí la última vez. La
evidencia de esa lucha, troncos y ramas rotas, aún cubrían el
suelo. A unos doscientos metros de nosotros, había druidas
esparcidos en el césped de la fortaleza de Ardan. Eva y Danny
estaban haciendo hechizos para enmascarar nuestro olor y
mantenernos ocultos por ahora.
Keegan estaba hablando por teléfono con Isabella. Colgó y asintió

con la cabeza a Logan. —Van a cambiar ahora—, susurró. —Los
trolls y las hadas están con ellos —.
Logan solo asintió.
—¿Sloane?— La voz de Isaac vino detrás de mí.
Me volví, bastón en mano para ver a mi mentor mirándome con

esos sabios ojos color caramelo.
—Oye—, susurré .
Hizo un gesto con la cabeza hacia un grupo de árboles caídos.

—¿Podemos hablar en privado un momento ?—
Apreté la mano de Logan, antes de seguir al buen druida a un

lugar tranquilo.
—¿Qué pasa?— Le pregunté, sintiéndome repentinamente

nerviosa. ¿Qué tipo de charla animada me daría?
—Me di cuenta de algo acerca de tu poder y quería llamar tu

atención —.
Se me revolvió el estómago. —Está bien ...— murmuré

nerviosamente.

—He notado que eres más poderosa cuando estás enojada. Es
común entre los druidas de fuego, y quería que lo supieras para
que puedas usarlo en tu beneficio —.
De acuerdo, no me esperaba eso. No me estaba diciendo que

abrazara árboles, me estaba diciendo que me enojara. —¿Cómo
es eso?— Le pregunté a él.
—Piensa en un volcán hermoso, mortal y feroz. Ella se sienta,

espera y cocina hasta que finalmente ... —
Sonreí. —Ella explota—. Y mata a miles de personas inocentes,

diezmando pueblos, pero no le traería esa parte a la conversación.
Isaac asintió. —Normalmente, te aconsejaría que transmutes esa

racha de ira que tienes en otra cosa, pero no esta vez. Esta vez
quiero que te pongas lívida. Será tu mejor herramienta contra
Ardan —.
Ya podía sentir que mi ira comenzaba a salir a la superficie.

Ardan entró en nuestra pacífica tierra y se robó a mi mejor amiga.
Me había amenazado y había matado a innumerables parientes
míos.
Isaac bajó la cabeza hacia mí. —Recuerda, tú y yo somos una

manada propia. Puedes usar mi poder y yo puedo usar el tuyo.
Hoy somos un equipo, ¿de acuerdo, Sloane?— Asentí con la
cabeza y, de repente, me dio un abrazo aplastante. —Ha sido un
honor enseñarte los caminos de los druidas terrestres,—
murmuró en mi oído, la emoción apenas contenida sangraba en
su voz.
Lo empujé hacia atrás gentilmente, las lágrimas llenaron mis

ojos. —No hagas eso. No digas adiós, Escuela de la Tierra,
¿recuerdas ? —
Él asintió con la cabeza, una sonrisa curvó los bordes de sus

labios. —Nunca lo olvidaré —.

Los dos nos quedamos allí en silencio por un momento agarrados
a nuestro bastón, con los pies descalzos en la hierba. No pude
evitar tomarme el momento para apreciar lo lejos que había
llegado, lo mucho que me había enseñado. Era el momento de
hacer lo que sentí como si hubiera sido creado: sacar a este
maníaco del poder, para que una nueva paz pudiera reinar en la
Tierra.
—¡Funcionó!— Keegan susurró y gritó detrás de nosotros .
Hubo una conmoción en el castillo. Podía escuchar pisadas

fuertes, las revoluciones de los motores, el chirriar de los
neumáticos. Mientras Isaac y yo nos dirigíamos hacia Keegan, vi
el halcón de Gear dando vueltas arriba.
Logan parecía estar en una intensa conversación mental, y

supuse que Gear estaba hablando con él.
—Gear dice que aproximadamente la mitad de los druidas y

cazadores se han ido para localizar a Isabella y Marco—. Logan
transmitió. —Nadine está en lo más alto en una especie de
habitación enjaulada. Puede verla a través de la ventana. Ella lo
ha visto también, para que sepa que estamos viniendo —.
Di un paso adelante. —Esa habitación está en lo alto de una

escalera. Barras de acero. Minka puede hacerlos desaparecer con
su arco y flechas mágicos. Un equipo debería subir las escaleras,
pero alguien debería volar también, en caso de que necesite salir
por la ventana, como hice yo —.
No sabía lo que le estaban haciendo o lo que harían una vez que

se dieran cuenta de que estábamos aquí, pero quería que todas
las salidas y entradas estuvieran cubiertas.
Keegan asintió. —Vamos a buscarla. ¿Tienes un plan para

anunciar nuestra presencia ? —
Isaac avanzó a grandes zancadas, agarrando ambos bastones,

con los ojos de un naranja llameante. —Lo hago —.

Sin previo aviso, soltó un grito de batalla inesperado y golpeó con
sus bastones la tierra, que comenzó a temblar.
Santa mierda. Isaac había estado esperando años por este

momento, para derribar a Ardan, y no iba a ser fácil. Los druidas
que habían estado holgazaneando en el jardín delantero del
castillo corrían en zigzag presas del pánico. Algunos se
derrumbaron con lo mucho que tembló la tierra.
Keegan asintió de manera impresionante a Isaac, y luego el suelo

dejó de temblar.
—¡Vamos!— Keegan rugió, amartillando su escopeta. Dominic,

que estaba en forma de león, despegó a un ritmo alarmante, saltó
a través de los árboles y salió al aire libre, Sophie y su arma de
arpón estaba justo detrás de él .
Miré a Logan. Deberías cambiarte y volar hasta la habitación de

Nadine. Minka puede hacer desaparecer las rejas de la ventana.
Podrías derribarla ahora que los druidas están distraídos —.
Mi “gemela” asomó la cabeza por encima de mi hombro,

haciéndome saltar. Ella debe haber estado a mi acecho .
—Claro que puedo, cariño. Hagámoslo —le dijo a Logan con un

guiño, los ojos recorriendo su pecho mientras él se quitaba la
camisa.
Tenía muchas ganas de darle un puñetazo en la cara y arrancarle

uno de los dientes, pero lo pensé mejor. Logan, sin camisa y a
punto de cambiar a su forma de dragón, me atrajo para un beso
rápido, ignorando a Minka y su cuerpo de Sloane robado.
—Voy a ir arriba y conseguir a Nadine, pero estoy manteniendo

un ojo en ti—, me dijo mientras me soltaba.
Asentí. —¡Mantente salvo!— Luego estaba corriendo, Isaac a mi

lado, pensamientos de Logan y cualquier otra persona en el fondo
de mi mente.

¿Dónde estás, Ardan? Era hora de acabar con esto .
Cuando Isaac y yo atravesamos los árboles, fue un caos. Los

druidas y los cazadores se enfrentaron a la batalla con los
cambiaformas y los hechiceros. Eva y Danny lanzaban bolas de
magia amarilla para combatir las rojas que chocaban contra
nuestras fuerzas.
Miré hacia arriba y vi a Logan y Minka volando hacia la ventana

de Nadine. Entonces mis ojos se posaron en la puerta principal,
que Keegan estaba abriendo de par en par con su escopeta. De
acuerdo, Nadine estaría bien.
Iba a sugerir que asaltemos el castillo y busquemos la oficina de

Ardan cuando una pequeña pero notable ráfaga de viento golpeó
mi espalda. Al mismo tiempo, la cabeza de Isaac se volvió hacia
mí con los ojos muy abiertos por el horror.
Antes de que pudiera siquiera pensar, o darme la vuelta, una

mano desnuda sujetó mi cuello por detrás y luego me tiraron. El
castillo frente a mí parpadeó y desapareció y yo estaba girando
en un agujero negro. Me había llevado. Lejos de todos.
Oh, Dios.
Mis pies chocaron contra una superficie dura y de repente estaba

dentro de algún tipo de granero. Mi estómago dio un vuelco
mientras trataba de orientarme del viaje espasmódico y miré
alrededor. Había heno en el suelo pero no había animales algo
que mi escaneo rápido pudo decirme. Las dos ventanas
superiores estaban abiertas para dejar entrar la luz y el aire
fresco, pero por lo demás era un espacio cerrado y mohoso con
una luz en el techo.
Ardan salió de detrás de mí, agarró mi bastón antes de que me

diera cuenta de que debía usarlo y lo arrojó con fuerza contra la
pared del fondo, donde se estrelló y cayó al suelo.
—¡Su collar también!— escupió una voz familiar.

Brujo de la verdad. Salió de las sombras y levanté mi mano para
disparar fuego púrpura a Ardan antes de que pudiera tomar mi
collar. Pero parpadeó fuera de mi alcance, apareció detrás de mí
y me arrancó el collar, rompiendo el broche antes de que pudiera
moverme.
Fue rápido. Realmente rápido. Estaba tan jodida.
Cerré los puños a los costados y retrocedí para que ambos

hombres estuvieran a mi vista.
—¿Dónde estoy?— Pregunté, tratando de mantener el pánico

fuera de mi voz.
El malvado druida sonrió, satisfecho de sí mismo. —A unas dos

millas por la carretera de tus amiguitos, en una granja de mi
propiedad —.
El alivio me atravesó por el hecho de que no estaba en China o

en algún lugar lejano. Dos millas. Podría volar dos millas.
Demonios, creo que incluso podría enorgullecer a Sophie y correr
dos millas.
—‘¡Sloane!’ — Logan rugió en mi cabeza, el pánico se apoderó de

nuestro vínculo.
—‘No puedo hablar. Necesito concentrarme. Ardan me tiene a dos

millas de distancia, en un granero de una granja’. —
—‘Te encontraré’— , prometió, y luego me dejó sola para

ocuparme de la situación que tenía ante mí.
Podría llevarle horas volar dos millas en todas direcciones en

busca de graneros, pero traté de mantener la esperanza.
Ardan parecía molesto con el brujo de la verdad. —Bueno,

hagamos esto y terminemos con eso —.
El hechicero salió de su trance y lanzó los brazos hacia adelante.

Bandas de hechizo amarillas me envolvieron, inmovilizándome

los brazos a los costados. Con un gruñido, caí hacia atrás sin
gracia, metiendo la barbilla hacia adentro para no romperme la
cabeza.
El hechicero siguió pasos silenciosos hasta que se cernió sobre

mí, con un objeto circular rodando en sus manos.
El ojo. Mierda.
—Gracias por llevarme a esto. Me ha ayudado a aprender a

drenar tus poderes —.
Doble mierda. ¿Por qué fui tan estúpida?
Miró a Ardan. —Debido a que ella mató a Steven, necesito que

me ayudes. Consigue las espadas de druida y dragón, pero ponte
los guantes primero —.
Ardan asintió, mirándome con avidez como si fuera Minka, y de

repente le hubiera ofrecido cada molar de mi boca.
Traté de no dejar que el pánico se apoderara de mí. Estar

restringida en bandas de magia amarilla no ayudó, pero luché
por pensar en una salida. La última vez que exploté con mi magia
sin mi collar o bastón estuve a punto de entrar en coma, así que
no pensé que fuera una buena idea. Tal vez podría hablar para
salir de eso.
—¡Sé dónde están más Skyborn! Puedo llevarte a ellos, ¡pero no

me hagas daño! — Nunca haría eso, por supuesto, pero podría
ganar tiempo hasta que Logan pudiera llegar aquí.
Ardan repentinamente se elevó sobre mí, dos espadas brillantes

en sus manos. —Oh, los encontraré eventualmente, pero eres tú
a quien quiero ahora —.
Bien, es hora de entrar en pánico. La adrenalina me recorrió

mientras luchaba contra las bandas mágicas, retorciéndome.
Cada vez que intentaba retorcerme, se apretaban.

Inmediatamente me quedé flácida, no quería apretarlos más,
tratando de no dejar que la ansiedad se apoderara de ellos.
El hechicero deslizó El Ojo en su bolsillo y comenzó a hacer girar

magia amarilla en sus manos. —Está bien, cuando yo lo diga,
debes cortarle el brazo izquierdo con la hoja del dragón y su brazo
derecho con la hoja del druida al mismo tiempo. Se tiene que
hacer al mismo tiempo —.
Oh, Dios.
Ardan se acomodó para estar de pie sobre mí, luego cayó de

rodillas, sentándose a horcajadas sobre mí, alineando las
espadas sobre mis brazos. Una parte de mí tenía la esperanza de
que fuera un tipo viejo con puntos de vista al revés que tal vez
solo necesitara ser educado, pero al verlo colgarse
codiciosamente sobre mí con esos cuchillos, pude ver que su
mente estaba enferma sin remedio.
Antes de que pudiera pensar en qué hacer, la bruja de la verdad

gritó: —¡Ahora!— y saturó mi cuerpo con una magia almibarada
amarilla que cubrió mi piel. Las muñecas de Ardan cayeron como
un rayo al mismo tiempo, cortando enormes cortes en mis
antebrazos.
Mi dragón se enfureció dentro de mí, mientras un ardor como

nunca había sentido atravesaba mis brazos, mi cuello y mi
cabeza antes. Me sentí como si estuviera en llamas .
Fuego.
Mi dragón no podía cambiar, no con estas bandas amarillas, y no

podía explotar con mi magia por miedo a entrar en coma, pero
había una cosa que podía hacer sin mi bastón, sin mi collar.
Clavé mis talones desnudos en la tierra y recé para que la Madre
Tierra estuviera aquí conmigo, consciente de lo que estaba
pasando y capaz de ayudar. Traté de no perder mi mierda cuando
la magia del dragón verde se levantó de mi brazo izquierdo y la

magia de druida naranja se levantó de mi derecha, mezclándose
en una masa púrpura ante mí.
Ardan con avidez comenzó a inhalar y chupar en sí mismo .
Cerré todo, el ardor en mis brazos, el hecho de que estaba

bastante segura de que me estaba muriendo, Logan gritando a
través del vínculo, mi dragón tratando de aguantar, los recuerdos
de mi madre ... Apagué todo y me concentré únicamente en las
pulsaciones. de la energía de la Tierra a mis pies.
Yo era la hija de Racine McCallister.
Yo era una druida de fuego .
Sería la muerte de Ardan si fuera lo último que hiciera. Incluso

si moría en el acto, juré dejar la Tierra sin su presencia maligna.
Tomé todo este testamento, este poder y empujé. Empujé con

tanta fuerza que las bandas amarillas que me sujetaban se
partieron. Los ojos de Ardan se abrieron cuando las llamas
comenzaron a lamer los muslos de sus pantalones. Si me quemó
con él, entonces que así sea.
Parpadeó hasta desaparecer entonces, evitando que el fuego lo

envolviera, pero también liberándome. Salté y el remolino de
magia verde, naranja y púrpura que me había estado dejando se
estrelló contra mi cuerpo, causando que el hechizo amarillo
almibarado desapareciera también. Mi fuego se había apagado,
pero al menos estaba libre. No tenía la intención de dejar que me
cayeran encima de nuevo.
Pasé mi magia por el suelo hasta donde estaba el brujo de la

verdad, aturdida y arremetí de nuevo. Las llamas lo encendieron
y, presa del pánico, gritó, se bajó los pantalones mientras corría,
chocó con las puertas del granero y las abrió de golpe. Pero no
sin antes prender fuego a la esquina de la puerta. Sin perder
tiempo, corrí hacia donde había caído mi bastón y envolví mis

dedos alrededor de él justo cuando una bola de magia púrpura
se arqueó en el aire y se estrelló contra mi estómago.
Me quedé sin aliento. Sentí que nunca volvería a tener oxígeno.

El calor saturó mi cuerpo, el sudor me caía por la cara, pero
gracias a Dios no me prendí fuego.
Me di la vuelta en medio agachada, incómoda, para ver a Ardan,

libre de mis llamas, de pie a tres metros de mí, con fuego púrpura
en las manos y los ojos encendidos de orgullo.
—Parece que tengo suficiente de tu magia, ya no te necesito. Esto

debería ser divertido —.
Las llamas que habían prendido fuego a la puerta del granero se

lamieron hasta la pared, atrapando la madera seca al instante.
Estaba atrapada y ese hijo de puta tenía algo de mi poder para
usar en mi contra.
No me molesté en hablar con él. No tengo nada que decir. Solo

quería matarlo. Empujé con mi bastón, disparando un rayo de
magia púrpura en él. No lo había estado esperando y se estrelló
contra su hombro derecho, desgarrando un profundo corte, la
sangre carmesí se filtró por la herida. No esperé el siguiente golpe,
reaccioné como Isaac me enseñó, como la Tierra me estaba
instando. Tirando de mi maestro druida, sentí mi conexión con
él; estuvo aquí, dentro de mi corazón, siempre. La Tierra había
vinculado nuestros poderes e iba a usar eso en mi beneficio.
Bajando mi bastón con fuerza, miré hacia donde estaba parado
Ardan, y efectivamente la tierra se hundió, agarrándolo de los
tobillos, inmovilizándolo en su lugar.
Di un paso hacia él, el bastón apuntando a su pecho, lista para

acabar con él. El granero se estaba poniendo humeante;
Necesitaría irme pronto o quemarme viva. Extendió su brazo sano
y una ráfaga de viento me levantó, lanzándome de lado. Navegué
a través del granero, tratando de mantener el agarre en mi arma,
incapaz de hacer nada más que prepararme mientras atravesaba

las puertas cerradas del granero, haciendo cortes en mis brazos
desnudos. Aterrizando con fuerza en el suelo áspero afuera,
escuché un chasquido, y luego un dolor agudo en mi costado me
dijo que me acababa de romper una costilla .
Antes de que pudiera siquiera levantarme, Ardan se acercó a mí,

sosteniendo un fuego púrpura en su mano, la sangre goteando
de su hombro herido. Abrió la palma de su mano buena,
apuntándola directamente a mi pecho. Una ráfaga de viento tan
fuerte que hizo que mis labios se despegaran me inmovilizó en su
lugar. Ni siquiera podía mover mis brazos para defenderme o
proteger mi rostro.
Por eso Isaac siempre había dicho que nos haría falta a los dos
para derrotarlo. ¡Ardan fue tan rápido como el viento! ¡Más fuerte
que un tornado, y ahora podía lanzar fuego púrpura! Estaba tan
jodida.
Justo cuando me había decidido a morir a manos de este

maníaco junto a mi propio fuego, vi una franja negra en el cielo
que se elevaba sobre el granero en llamas.
Logan.
Sus alas bloquearon el sol por un segundo y miré hacia arriba

para ver que Nadine lo montaba, con el arpón de Sophie agarrado
con fuerza en sus manos. El alivio me atravesó al ver a mi mejor
amigo viva y bien.
La magia del viento de Ardan se cortó mientras giraba, para ver

qué había bloqueado el sol, pero ya era demasiado tarde. Nadine
había disparado. La flecha se hundió en la carne de su abdomen.
Gritó, perdiendo la magia de fuego púrpura en su mano. Pateé,
libre de su trampa de viento, y mi talón se conectó con su ingle.
Se desplomó hacia adelante, rodando sobre mí y hacia un lado,
con las manos agarradas al eje de la flecha que sobresalía de su
estómago. En ese momento, el suelo comenzó a temblar. Miré

hacia arriba para ver a Isaac acercándose al granero con Keegan,
Eva y Danny.
Si permitíamos que Ardan se concentrara y recuperara su control

mental, simplemente desaparecería. No. Esto estaba terminando
ahora. No podría vivir ni un segundo más compartiendo espacio
con este idiota en la Tierra. Me puse de rodillas, ignorando el
dolor en mis costillas, y levanté mi bastón, bajando con fuerza
con la estaca de oro, perforando su muslo. Gritó y un trueno
crepitó en lo alto cuando una gran ráfaga de viento se levantó,
sacudiendo mi cabello por todos lados .
Isaac corrió hacia nosotros y, a mitad de camino, volvió a golpear

la tierra con sus varas. Los pies de Ardan se hundieron diez
centímetros en la tierra. Fue entonces cuando comenzó el rayo.
No tenía ni idea de cómo un hombre que podía controlar el viento
también controlaba los rayos. Parecía que debería ser una cosa
de druida de fuego, pero un rayo se arqueó desde el cielo y lamió
el suelo a unos pocos metros de donde yo estaba arrodillada.
El granero estaba en llamas, Logan aterrizaba y todos corrían

para ponerse a cubierto. Fue como una pesadilla. Lo único que
podía hacer era derribar mi miedo y bloquear todo. Extraje mi
bastón de la pierna de Ardan justo cuando de alguna manera
encontró la fuerza para estallar de sus ataduras de tierra y
levantarse, espeluznantemente como si el viento lo empujara
desde atrás. Flotó unos centímetros sobre el suelo antes de
golpear hacia abajo. Parecía débil, demasiado débil para
mantener esta farsa por mucho más tiempo. Volvió a caer un
rayo, y esta vez levanté mi bastón para atraparlo, por temor a que
me golpeara la cabeza. El rayo se conectó con el cristal del bastón,
enviando una sacudida de poder a mis manos. Estaba caliente,
muy caliente , pero no me atrevía a dejarlo ir .
Isaac se paró detrás de Ardan, colocó sus dos bastones hacia

abajo, con los brazos separados, y el arco de relámpago de mi
cristal se unió al suyo, atrapando efectivamente a Ardan dentro
de un triángulo de electricidad viva. Los ojos de Ardan se

agrandaron. Por la expresión de su rostro me di cuenta de que
estaba atrapado, incapaz de desaparecer como solía hacerlo. Ya
sea porque estaba demasiado herido, o porque la electricidad
estropeaba sus poderes, no me importaba.
Isaac gritó por el sonido del viento. —¡Tu tiempo de torturar a los
Skyborn ha terminado !—
El viento se hizo más fuerte y sentí que me levantaban, casi me

levantaban en el aire con la fuerza del mismo. Los pies de Isaac
estaban firmemente plantados a quince centímetros de la tierra.
Básicamente era un árbol. Sentí mi conexión con el poder de
Isaac e hice lo mismo, atrayendo el poder de la tierra hacia mí.
Sentí que mis pies caían al suelo, anclados para que el viento no
me llevara.
Ardan me señaló. —¡Los Skyborn me lo quitaron todo! ¡La reina,

tu madre! ¡Nuestra tierra entera fue arrasada por su amor por
una estúpida y raza frágil ! —
En ese momento, con saliva y sangre saliendo de su boca, incluso

la ira en su voz parecía un demonio.
Isaac negó con la cabeza. —¡No! No pudiste dejar que una reina
amará a un pueblo que lo merece. Tú eres el que nos quitó a
Faery. ¡Hiciste la guerra hasta que no quedaron más que
cenizas!—
Todo el tiempo que Isaac y Ardan habían estado hablando, había

estado usando mi conexión profunda con la Tierra para enviar mi
magia hacia adelante, a través del canal del suelo, buscando los
pies de Ardan. Sus mentiras me habían enfurecido, así que hice
lo que Isaac me había aconsejado que hiciera. Usé esa ira y rabia
e invoqué mi magia de fuego. Tiré más de lo que había hecho
antes. Tan pronto como sentí esa conexión de la Tierra con los
pies de Ardan, la empujé, a través de la tierra y hacia el espacio
que estaba ocupando. Llamas gloriosas y devoradoras se
dispararon. En un segundo, seis pies de fuego brotaron de las

plantas de sus pies y envolvieron todo su cuerpo. Su grito fue
espantoso. La tormenta de viento y relámpagos se cortó
inmediatamente cuando su energía comenzó a fallar. Trató de
usar su energía eólica para apagar las llamas, pero eso solo las
alimentó, las hizo vacilar de izquierda a derecha.
Ardan se dejó caer de rodillas y comenzó a parpadear dentro y

fuera, parpadeando hasta desaparecer, tratando de hacer
cualquier cosa para salvar su vida. El viento soplaba de nuevo,
tratando de recuperar energía.
Una presencia apareció detrás de mí e instintivamente supe que

era Logan. Llevaba una Glock en sus manos. Apuntó a la cabeza
de Ardan y me miró.
Asentí. Yo no era un monstruo. No quería que él sufriera…

demasiado. Solo quería que se fuera. Giré la cabeza mientras
Logan descargaba el arma en el malvado druida. El ruido sordo
cuando su cuerpo golpeó el suelo probablemente perseguiría mis
sueños para siempre. Llamé al fuego, deseando que cesara, y
miré hacia atrás para ver que las llamas habían dejado de arder.
Acurrucado en posición fetal, hundido hasta la mitad de la tierra,
estaba el monstruo de todos los monstruos. Muerto.
Un resonante crujido resonó por todo el valle y los pájaros volaron

de sus árboles.
Miré a Isaac en busca de una explicación. Estaba mirando a

Ardan. —Su poder sobre esta tierra, sobre sus druidas, está
roto—.
Bueno, gracias a Dios por eso.
Me volví para alejarme. Quería dejar este horrible lugar. Entonces

la mano de Logan salió y agarró mi brazo.
Girando hacia el cuerpo de Ardan, vi un espeso zarcillo de magia

verde que se elevaba desde el pecho del druida y se dirigía hacia
mí.

Los ojos de Logan se encontraron con los míos. —Tómalo, Sloane.
Recupera todo el poder que nos robó —.
Las lágrimas llenaron mis ojos y tuve que reprimir un sollozo, me

di cuenta de que la magia verde que venía hacia mí eran todos
los nacidos del cielo que había matado. La mamá de Casey, mi
papá, toda su magia que él había tomado con avidez en un
esfuerzo por matar a lo que él consideraba una raza débil.
Entré en el río verde, respirándolo por mis fosas nasales,

sintiendo la ráfaga cuando golpeó mi sistema. Ni siquiera me di
cuenta de que estaba cambiando hasta que mi dragón se
transformó por completo. Me quedé allí a cuatro patas, con las
alas extendidas detrás de mí, respirando la magia verde de mis
parientes caídos, y el poder que se apoderó de mí fue
indescriptible. Mi dragón era mucho más fuerte y tenía menos
amenaza de ser abrumada por mi magia druida. De alguna
manera había encontrado un lugar pacífico entre mi collar, mi
bastón y anclar mi energía a la Tierra, donde podría ser tanto un
cambiaformas de dragón como un druida, terrenal y nacida del
cielo.
Nada le quitaría mi vínculo de pareja a Logan.
Una vez que absorbí toda la magia que pude, mi dragón volvió a
mi forma humana. Mi ropa estaba hecha jirones, así que Logan
se quitó la camisa y me la dio, y me la pasé por la cabeza.
—Lo hiciste—, dijo Logan, sonando casi estupefacto. Se limitó a

mirar el cadáver que la Tierra estaba absorbiendo.
—Todos lo hicimos—, le corregí, y luego miré en dirección al

castillo. —¿Perdimos a alguien? ¿Cómo están Isabella y
Marcos?—
Logan frunció el ceño. —Perdimos a algunos de los miembros más

nuevos de la manada, Jon, Tori y Kevin. Isabella y Marcos están
bien —.

Supongo que no era posible no tener muertes en una batalla
como esta, pero aun así me mató escuchar que habíamos perdido
gente incluso si no hubiera estado muy cerca de ellos.
Me di la vuelta y mis ojos se posaron en Nadine. —¡Estoy tan

contenta de que estés bien!— Corrí hacia ella y la abracé.
—Está bien, gracias por mostrarme—, gimió Danny detrás de mí.

—Ahora realmente necesito unas vacaciones —.
Me reí, dándome la vuelta con una sonrisa. Al mismo tiempo,

Keegan me tiró un par de pantalones deportivos de su mochila.
Un buen cambiaformas alfa siempre llevaba ropa extra. Mientras
me los ponía, estaba a punto de replicarle algo gracioso a Danny
cuando me di cuenta de que Isaac estaba más allá de él. No se
había movido de su lugar cerca del cuerpo de Ardan. Se
balanceaba, apoyado en su bastón, con un charco de sangre a
sus pies.
—¡Isaac!— El grito salió de mi garganta cuando hice rápidos

pasos para encontrarme con él.
Cayó en mis brazos en el momento en que llegué allí y lo bajé al

suelo, dándole la vuelta para evaluar de dónde venía la sangre.
Cuando miré por encima de su hombro, vi que la parte de atrás
de su camisa estaba empapada de sangre alrededor de su espalda
baja.
—Fue herido en el castillo. Parecía que lo apuñalaron, pero dijo

que estaba bien —, dijo Keegan, de pie junto a nosotros con el
ceño fruncido.
Me temblaban las manos cuando le subí la camisa. Cuando la

sangre salió a borbotones de una herida de tres pulgadas Sollocé
y apreté la mano en la herida con el fin de detenerla.
—¡Corriste todo el camino hasta aquí con esa herida!— Le grité,

las lágrimas corrían por mi rostro. Había enloquecido al quedarse

allí sosteniendo el rayo conmigo para ayudar a matar a Ardan, a
la vez que sangraba hasta la muerte!
Estaba mirando el cielo nublado, con una sonrisa en su rostro.

—Tenía que venir a ayudarte. Era el propósito de mi vida. Ahora
he hecho lo que estaba destinado a hacer —.
—¡Cállate!— Le grité, lágrimas y mocos corrían por mi rostro

mientras lloraba feo ante la idea de perder a Isaac. Él era como
un padre para mí. —¡No te estás muriendo, así que deja de decir
adiós !—
Miré a mi alrededor frenéticamente en busca de árboles, pero no

había ninguno en las inmediaciones. Estábamos en un maldito
valle interminable de verdes colinas cubiertas de hierba y playas
rocosas. La única línea de árboles que podía ver estaba a más de
una milla de distancia, en el castillo. No podría arrastrar a un
hombre medio moribundo sangrando una milla. Tampoco estaba
segura de poder curarlo como un árbol, porque necesitaría su
poder para hacerlo, y estaba muy débil.
—¡Eva! Sánalo. ¡Ayúdame!— Miré a la bruja.
Estaba paralizada, horrorizada al ver a Isaac en el suelo, en un

charco de sangre. Estaba pálido y ceniciento, lo que decía mucho
sobre un hombre de piel oscura.
—Yo ... mi magia no ... las escamas de dragón son para heridas
mágicas y … —
—¡Eva! Me importa una mierda lo que creas que sabes —le espeté
a la hechicera. —Te estoy pidiendo que lo intentes. ¡No te quedes
ahí parada y lo veas morir ! —
Ella se sacudió visiblemente, saliendo de ella, y una mirada de

determinación la atravesó. —¡Logan, dame una escama! Danny,
acelera tu magia. Voy a necesitar tu ayuda —.

Suspiré aliviada de que lo intentara. Luego me señaló. —No estoy
haciendo todo esto sola. Habla con la Tierra o lo que sea, y
encuentra una manera de curarlo sin un árbol —.
Mierda. Básicamente me había escupido mis palabras, pero tenía

razón. Si ella iba a encontrar una manera de curarlo sin saber
cómo, entonces yo podría hacer lo mismo.
Miré los deslumbrantes ojos color miel del druida y recordé cómo
los había dibujado justo después de mi sueño. Era como si
supiera que este hombre se convertiría en una gran parte de mi
vida.
—Ayúdame. Dime qué hacer —le susurré, agarrándome con

fuerza a su herida sangrante.
Parpadeó lentamente, respirando superficialmente. —Si es mi

momento, la Tierra me llevará, y estoy de acuerdo con eso —.
Gruñí: —¡Eso no es lo que te pregunté, Isaac!— Rompí a llorar de

nuevo, incapaz de controlar mis emociones.
Extendió la mano lentamente y me las secó. —Nada muere

realmente, porque a través de la Tierra todo renace—. De repente,
su brazo quedó flácido cuando perdió el conocimiento.
—¡Isaac!— Eva gritó frenéticamente, mientras se lanzaba hacia

adelante con la escama de Logan entre sus dedos .
No podía moverme, no podía respirar. Estaba rumiando sus

palabras. A través de la Tierra, todo renace.
Si.
Eva volteó a Isaac con un gruñido y me hizo un gesto para que

apartara la mano de la herida. Cuando lo hice, ella sostuvo la
escama sobre la profunda herida abierta.
—Quema la escama—, me instruyó, y vi a Danny moverse a la

vista con una forma amarilla geométrica brillante entre sus

manos. La manada estaba subiendo la colina, hacia el incendio
del granero. Pronto verían la forma inerte de Isaac .
Había quemado la escama de Logan para el hechizo de Rufus y

había fijado mi varita, así que tal vez ella estaba en algo. Agarré
la punta de mi bastón, ya que mi collar estaba actualmente en el
piso del granero en llamas, y canalicé mi magia a través de él
hacia mi palma, encendiendo una pequeña cantidad de fuego
púrpura allí. Eva dejó caer la escama en mi palma, donde
inmediatamente se convirtió en cenizas.
—Ahora sacúdelo sobre la herida—, instruyó .
Corté las llamas y vertí las cenizas de ceniza en la herida abierta

justo cuando Danny lanzaba un intrincado patrón geométrico
amarillo sobre ella. Eva luego cantó e inundó su cuerpo con
magia amarilla. Se entrelazó sobre su cuerpo con fuerza como un
capullo, y pude ver los bordes de su herida comenzando a unirse
ante mis ojos. La esperanza estalló en mi pecho.
Eva se sentó sobre sus talones y luego me miró. —Está despierto.

Eso es todo lo que tengo. Todavía está inconsciente —.
A través de la Tierra, todo renace.
Asentí. —Dame un poco de espacio—, pedí, y todos dieron un

paso atrás. Alargando la mano, tomé mi bastón en una mano y
uno de los bastones de Isaac en la otra. La magia púrpura y
naranja inmediatamente comenzó a formar un arco de los
cristales en el momento en que los toqué. Con un gemido, me
puse de rodillas. La forma inerte de Isaac estaba acurrucada
sobre su costado, apoyada contra mis muslos. Coloqué ambos
bastones detrás de él para crear un túnel sobre él. Cavé con los
dedos de los pies con fuerza en la tierra y anclé mi energía .
Entonces establezco mi intención. Tenía la intención de curar

completamente a este hombre. Me negué a hacerme más tatuajes
o a lamentar más muertes. Yo lo curaría. Eva me había dicho una
vez que la magia de un druida de fuego era similar a la de un

hechicero puro. Bueno, no estaba completamente entrenada,
pero estaba motivada y era la hija de mi madre.
Madre Tierra, ayúdame a curarlo, supliqué en silencio. Entonces

dije otra oración a mi propia madre, si ella estaba allí, o era uno
con la Tierra, preguntándole si podía ayudarme a salvarlo.
La Tierra respondió, palpitando en mis rodillas, luego en mis

dedos de los pies. El bastón de repente se volvió loco,
encendiéndose y pulsando como luces estroboscópicas.
Vagamente escuché a Logan llamar mi nombre, pero lo
desconecté. Me concentré en ese latido, el latido del corazón de
la Tierra, golpeando a Isaac a través de mí. Una concha mágica
naranja y púrpura envolvió a Isaac, y fue entonces cuando la
hierba comenzó a morir.
Toma lo que necesites de mí si es necesario, le dije a la Madre

Tierra.
Un anillo de una vez exuberante hierba verde se estaba volviendo

marrón y creciendo hacia afuera. Recé para que eso significara
que estaba funcionando. De repente me sentí abrumada por el
agotamiento. Mis piernas se sentían débiles y me dolían las
costillas con cada respiración, pero no me detuve. No lo haría
hasta que Isaac estuviera consciente y en movimiento.
—‘¡Sloane!’ — Logan gritó, usando nuestro vínculo.
—‘Está funcionando’—, le dije con entusiasmo, sacando más y

más magia de mí misma, yendo a las profundidades de donde se
escondía.
—‘Te estás balanceando, como si estuvieras a punto de caer’— ,

gritó a través de la espesa magia que me rodeaba.
—'Estoy bien.'— Mis ojos se movieron hacia arriba por un

momento y vi que la mayor parte de la manada estaba reunida
alrededor, el círculo de hierba muerta avanzaba poco a poco
hacia ellos.

Entonces me invadió una ola de mareo y recé para no
desmayarme. No antes de que pudiera salvarlo. Las emociones
de todo esto se volvieron demasiado; Las lágrimas comenzaron a
rodar por mis mejillas.
—¡Vamos, Isaac! ¡Levántate!— Grité mientras la magia giraba

más rápido alrededor de él y yo, creando un tornado de color
púrpura y naranja.
De repente, dos manos fuertes me sujetaron por los hombros, la

magia verde se disparó por mis brazos y la energía recorrió mi
cuerpo, dándome fuerza.
Logan ...
Siempre que lo necesitaba, él siempre estaba ahí. Mi mejor mitad.
Isaac rodó sobre su espalda, jadeando por aire, y me miró con los
ojos muy abiertos, goteando lágrimas.
Alivio vierte a través de mí, ya que aflojó las manos con los
nudillos blancos de entre el bastón, dejando el túnel de viento
mágico, y cayendo encima de él, llorando y abrazándolo.
Él se rio entre dientes y luego hizo una mueca. —Sabía que

podías hacerlo—, me dijo, dándome palmaditas en la espalda.
—Y también tu cabello está en mi boca —.
Estallé en una carcajada dolorosa y con las costillas rotas, y me

aparté para verlo mejor. Su coloración era más saludable y sus
ojos tenían más vida. Iba a estar bien.
Caí de espaldas a su lado, permitiéndome relajarme y acostarme,

soltándome por primera vez desde que me caí de ese cañón. Por
una vez, podría estar en paz con quien era. Si cambiaba, no me
perseguirían ni me matarían.
Logan, sin decir palabra, yacía a mi lado, sosteniendo mi mano,

y los tres miramos las prístinas nubes blancas.

—Están locos—, dijo Danny, cerniéndose sobre nosotros.
Keegan dejó su escopeta y se dejó caer en el suelo junto a Logan.

—Supongo que me quedé sin trabajo, ¿eh?— le preguntó a Logan.
Los Skyborn ya no necesitaban protección. Qué sentimiento tan

asombroso.
Logan se rio entre dientes. —Creo que todavía te mantendré

cerca—.
—Sí. Necesitaremos seguridad para nuestra nueva Escuela de la

Tierra —, les dije a ambos, y eso me gano una palmada en la
mano de Isaac.
Lo hicimos. Habíamos extinguido la oscuridad. Por una vez, los

buenos habían salido victoriosos.

Un año después ...
—¡Oh, Dios mío, no puedo soportar la ternura!— Danny chilló .
Se veía elegante con su traje gris carbón, completo con pajarita

azul oscuro. Lily tenía un año y estaba caminando. El pequeño
vestido de niña de las flores que llevaba era demasiado adorable
para las palabras. Rosa claro, se ceñía a la cintura y gritaba como
un vestido de princesa.
—¿Puedes creer que me voy a casar? Ahora realmente me

arrepiento de no haber sido más salvaje en mi adolescencia —,
dijo Danny. Danny había querido casarse justo después de
Irlanda, pero la planificación de las bodas tomó tiempo y tuvimos
más de lo que pensábamos en casa .
Nadine y yo nos reímos. —Estoy segura de que eras bastante

salvaje—, le dije. Había escuchado suficientes historias para
saber que era verdad.
Lynn estaba tratando de pelear con Lily y conseguir que un lazo

rosa se quedara en su cabello, pero la niña no dejaba de
arrancarlo. El sonido de las olas rompiendo afuera era pacífico y
tranquilo, como lo había sido el año pasado. Habíamos tenido
algunos enfrentamientos con druidas que intentaban atacarnos
o hacerse cargo de la misión de Ardan, pero eran débiles. Como,
“apenas conjuraban una bola de magia roja” débil. Cuando Ardan
murió, se absorbió su magia con él. Ahora se vieron obligados a
intentar cazar a los nacidos en el cielo, pero no eran lo
suficientemente fuertes para hacerlo, y eran muy pocos, o se
escondían. Isaac tenía esperanzas de que pudiera llevarlos a
emprender el druidismo terrestre como en los viejos tiempos.
Tenía la esperanza de que iban a recordar que la naturaleza
podría darles el poder también.

Abrimos la Escuela de la Tierra hace tres meses, con solo cinco
estudiantes. Casey, Geoff, una pequeña hada que era amiga de
Minka, prima de Danny que era hechicero y luego una joven
druida que quedó huérfana por la batalla en Irlanda. Era un
grupo al azar, pero teníamos a Danny actuando como profesor de
hechicería. Eva había empezado a enseñarle magia al hada.
Logan y Sophie estaban entrenando a Casey y Geoff. Y luego Isaac
y yo trabajamos con la chica druida. Lo mejor de todo ... eran
amigos. Todos ellos. Comían juntos todas las comidas y pasaban
el rato en grupo tan a menudo como podían. Nuestra escuela no
tendría divisiones raciales si pudiera evitarlo. Casey incluso
ofreció su molar para hacer grande al hada, Jaslene.
Danny centró su atención en Nadine. —Cuando se casan tu y

Gear?—
La tatuadora le sonrió y levantó la mano izquierda. Había un

pequeño símbolo de infinito tatuado en su dedo anular.
Mi boca se abrió. —¿Cuándo sucedió eso y por qué no me

invitaron?— ¿Cómo se atreve ella!
Nadine había ocupado el lugar de mi mejor amiga. Jen y yo

todavía hablamos y enviábamos mensajes de texto a menudo,
pero ella estaba en la escuela de posgrado y vivía una vida
diferente. Nadine y Gear todavía vivían en la tierra, y en el caso
de que tuviéramos que inscribir a algunos estudiantes
adolescentes cambiantes, se habían ofrecido a enseñarles.
Mientras tanto, actuaban como jardineros. Nadine había
agregado otro perro callejero a nuestra creciente lista de
animales. Hemlock y Mittens ya se había tomado amablemente
al chihuahua tuerto al que habíamos llamado Cyclops .
Nadine sonrió. —Anoche, pasé por una tienda de tatuajes en

Waikiki —.
Danny gimió. —Qué aburrido. ¿Te haces un tatuaje y eso es todo?

¿No tienes pastel? ¿Sin vestido ? —

Nadine se rio. Ella y yo compartimos los mismos puntos de vista
sobre el matrimonio. No necesitábamos una gran canción y baile
para demostrar que nuestro amor era para siempre. —Estoy en
un vestido ahora y conseguiré el pastel esta noche—, le dijo,
guiñando un ojo.
Él rio entre dientes. —Sí, MI pastel. Ese vestido te queda

increíble, por cierto —, declaró.
Nadine y yo llevábamos vestidos de cóctel de seda púrpura a

juego, y nuestro cabello estaba recogido en una cama de rizos.
—Gracias. El traje te hace lucir bastante apuesto ati también—,

dijo ella.
Presionó sus manos en el saco para alisarlo. —Estoy nervioso.

¿Qué pasa si hace demasiado viento, o si la comida no es lo
suficientemente buena o ... ? —
—Todo estará bien. Además, estoy bastante segura de que vi a

Rufus envolviendo una barra de oro como tu regalo —.
Los ojos de Danny se agrandaron mientras se animaba.

—Bendice al tío Rufus—. Nuestro alquimista se había convertido
en un benefactor importante de la Escuela de la Tierra,
proporcionándonos dinero ilimitado para financiar los edificios y
la infraestructura que necesitaríamos a medida que la escuela
creciera. Él e Isaac volvieron a ser buenos amigos, dejando el
pasado en el pasado. Eva e Isaac eran ahora pareja, y Ruby y
Dominic también se habían unido. Todos estaban realmente
felices y en paz. Incluso Sophie había encontrado a alguien a
quien amar, Johnny, un miembro modesto de la manada de Dee.
Su grupo prácticamente se había disuelto después de Irlanda,
pero todavía nos manteníamos en contacto .
—Muy bien, hagamos esto—, declaró Danny .
Me acerqué y le di un beso en la mejilla. —Va a ser la mejor boda

de la historia —.

Y lo fue. O al menos de la mínima cantidad de bodas a las que
había asistido. Bailamos, comimos, bebimos y reímos. Eva bebió
un poco de más y casi se jactó ante una mesa de hechiceros de
que tenía El Ojo: Isaac pudo meterle un panecillo en la boca antes
de que ella pudiera. Lo tomé del cuerpo del brujo de la verdad, en
Irlanda, y se lo di. Algún tiempo después nos enteramos de que
el brujo de la verdad había matado a Hensel, así que no tuvimos
que preocuparnos más por él. Era de ella.
Cuando se puso el sol, estaba en el patio del hotel junto a la playa

con Logan, Sophie, Keegan, Danny, Dominic, Ruby, Nadine y
Gear. La manada original. Keegan levantó su copa. —Para Cooper
y Ruben, a quienes extrañamos durante esta noche especial —.
Levantamos nuestros vasos. —¡Cooper y Ruben!— hicimos eco .
Toqué el collar de mi madre en la base de mi garganta y deseé

que ella también pudiera estar aquí para ver lo que habíamos
logrado y para conocer a mis amigos ... mi familia. El collar estaba
un poco descolorido por el fuego del granero, pero funcionaba
bien.
Logan y yo felicitamos a Danny y Keegan una vez más, y luego

caminamos por la playa, tomados de la mano, hacia nuestra villa.
—Entonces estaba pensando, cuando tendremos hijos, Logan

Junior para un niño y Racine para una niña, después del nombre
real de tu madre—, dijo Logan .
Me reí. —¡Logan Sharp! Deja de intentar tener bebés conmigo.

Soy demasiado joven —.
Se rio entre dientes y me puso la piel de gallina. Me encantaba

su risa. —Estás bien. Tenemos para siempre para tener hijos—.
Deslizó sus ojos a lo largo de mi cuerpo y mi vientre se calentó.

Dando dos pasos rápidos, de repente se apretó contra mí. Cuando
sus labios presionaron contra los míos, gemí, el calor cobró vida
dentro de mí .

Logan se apartó, sonriendo .
—¿Qué?— Pregunté, mis manos encontrando su camino hacia

sus bíceps .
—Estás en celo—, reflexionó .
Sonreí. Esta noche iba a ser divertida. Fui la chica más

afortunada del mundo en pasar el resto de mi vida inmortal con
él. En celo o no, él lo era todo para mí.
—Bueno, entonces, creo que debería probarme la lencería que

Danny me regaló como agradecimiento por ser su dama de
honor—.
Los ojos de Logan prácticamente brillaron de color verde. —¿Es

costumbre llevar lencería para damas de honor? Pensé que era al
revés —.
Me reí. —No, pero es de Danny de quien estamos hablando.—
Logan se rio entre dientes y tiró de mí, continuando el camino

hacia nuestra habitación .
—¿Sloane?—
Lo miré, admirando la forma en que la puesta de sol proyectaba

sombras sobre su fuerte mandíbula. — ¿ Hmm ?—
—Eres lo mejor que me ha pasado—, dijo .
No tenía ni idea. Me había salvado, literal y figurativamente .
—¡Bien! Tres años, —gemí juguetonamente.
Frunció el ceño, aparentemente confundido. — ¿Qué ?—
—En tres años podemos empezar a intentar tener un bebé—, le

informé con una sonrisa.

La pura alegría que se extendió por su rostro me iluminó por
dentro, y mi dragón prácticamente ronroneó. Entonces me
levantó en brazos, me reí y pateé mis piernas mientras corría a
toda velocidad hacia nuestra habitación.
Lo hicimos. Nos habíamos conseguido nuestro felices para

siempre después.
Yo espero que amaras la historia de Sloane y Logan. Tengo una

idea para extender este mundo haciendo un spin-off en el futuro
con Isaac, Sloane y el equipo dirigiendo la Escuela de la Tierra en
su tierra, y haciendo que jóvenes adolescentes con poderes
sobrenaturales (muchas criaturas fae ocultas) vengan a
aprender.
Sería con el punto de vista de un personaje principal diferente.

Alguien joven y atrevido. Si esto es algo que le interesaría,
¡dígame que lo escriba! Únase a mi manada Matefinder o envíeme
un correo electrónico y hágamelo saber =) ¡Gracias por leer!

Esta serie fue muy divertida de escribir!
A continuación, tengo que agradecer a mi increíble asistente Lela

y al lector beta Steven. Aprecio todo lo que haces. Para la manada
Matefinder y mi equipo de lanzamiento, gracias por no matarme
por ese suspenso en Earthbound y por apoyarme y hacerme reír
todos los días. Para mi editor Lee en Ocean's edge edition y
Stephany Wallace, mi correctora de pruebas, no sería tan bonito
sin ustedes. Jaymin Eve, mi cordura en este mundo editorial
independiente, gracias por lidiar con mis GIF y memes diarios.
Por último, lo más importante, gracias a mi familia por todo su
amor y apoyo. Estoy viviendo mi sueño.
***

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Se necesitarán todos sus trucos astutos y la ayuda de sus amigos

Ha comenzado una guerra y Sloane no se detendrá hasta que

* Advertencia de idioma: Sloane tiene una boca inútil…

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Lynn y el nuevo bebé estaban a salvo, Logan me había informado,

Probablemente cera del oído de los elfos o algo desagradable.

Cuando le pregunté por Rubén, cambió de tema. No lo presioné;

Logan me había hecho prometer que lo mantendría mentalmente

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A su lado estaba el rey de los imbéciles, Steven, y alguien que no

Me apresuré a conectarme con mi pareja. —‘Logan, ha vuelto con

Mis ojos se posaron en una gran hoja roja brillante en la mano

—‘Estamos en un avión a Irlanda del Norte en el área general en

Me arrastré hacia atrás hasta que casi toqué la pared.

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—'¿Y si me preguntan por Casey? ¿El bebé de Lynn? ¡No!'— Grité

Cubrí a Ardan con mi mirada más cruel. —Sabes, escuché que

Su rostro era una máscara de calma. Miró a Steven y asintió. Oh

En un abrir y cerrar de ojos, Steven desapareció fuera de los

—Quiero su magia—, espetó Ardan. —No solo su magia de

Oh, mierda de todas las mierdas, estaba tan jodida. No había

Traducido por: ValKarin24

Steven agarró mi antebrazo, acercándome a él. Mi corazón saltó

—Vamos a tener una pequeña charla—, me dijo el hechicero.

—‘Logan, me van a interrogar. ¡Tienes que enseñarme algo!

—‘Eva tiene un plan. Usa nuestro vínculo de pareja, ábrelo de par

¿Qué demonios? Eso fue lo más confuso que jamás había

Los ojos del brujo de la verdad cobraron vida entonces, mi

—¿Estás emparejado?— preguntó, sus labios se curvaron en una

—'¿Me odias?'— Preguntó Logan .

—'¿Qué? ¡Por supuesto que no!'— Mi hombre había perdido la

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—Te hice una pregunta. ¿ERES un dragón emparejado?— El

—'¿Me odias?'— Logan preguntó de nuevo y se centró en esa

—No—, respondí con confianza.

El brujo de la verdad juntó las cejas y me miró con escepticismo.

—¿Sabes dónde están los otros Skyborn?— preguntó, dando un

—‘¿Quieres que le dé una patada a Hemlock?’ — Logan preguntó

—‘Diablos, no. Y ahora extraño a mi perro…, gracias’.—

—No,— respondí en voz alta.

El brujo de la verdad me fulminó con la mirada. —Técnicamente

Steven gruñó. —Supongo que tendremos que hacer algunos

Se abalanzó sobre mí y no pude hacer nada más que volver a la

—Gracias—, dijo Steven cortésmente a su colega.

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El brujo de la verdad se frotó la barbilla. —Ella es mitad druida.

Steven acercó el cuchillo a mi brazo levantado, y fue entonces

Steven pareció molesto. —¿Entonces qué propones?— Estaba

El brujo de la verdad extendió su mano, escaneando el aire ante

¿Sacrificio? ¿Dijo sacrificio? Desmayarse era una posibilidad

—‘Logan, me van a matar’—, gemí a través del vínculo.

Sentí su nuevo pánico ardiente atravesándome cuando la

Traducido por: ValKarin24

Inmediatamente me miró con interés. —¿Qué es esto, una ganga?

No jodas, Sherlock. Estoy tratando de ganar algo de tiempo.