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DESARROLLO HISTORICO
EPOCA APOSTOLICA Y POST- En la Iglesia primitiva para los pecados graves la practica penitencial incluía la
APOSTÓLICA exclusión de la comunidad de la Iglesia y la readmisión.
El sacramento fue aplicado a aquellos pecados graves o morales y no a los veniales.
DIDACHÉ O DOCTRINA DE LOS Los pecados veniales pueden expiarse con ayuno, oración y obras de caridad.
DOCE APOSTÓLES Los pecados graves podrían ser perdonados a través de un proceso que parecía
implicar la confesión y un periodo de separación de la Iglesia hasta que tenía lugar
la contrición.
PASTOR DE HERMAS (180) El Cristiano que ha caído en un pecado mortal se debía dar solo una posibilidad de
arrepentimiento después del bautismo.
SAN IRENEO Confesión de Pecados graves:
El pecador iba donde el obispo o el sacerdote y ellos lo llevaban a la conversión
infligiéndole una pena. En algunos casos la excomunión
La confesión publica debía comprender una penitencia publica
DIDASCALIA APOSTOLORUM Todos los pecados podían ser perdonados. Un periodo de penitencia (2 a 7
semanas) venía impuesto después de la excomunión, seguida de la reconciliación
obtenida por el obispo mediante la imposición de manos.
TERTULIANO El sacramento de la penitencia es la segunda tabla de salvación después del
naufragio de la pérdida de la gracia
-la Penitencia publica: para que fuese evidente quien la padecía
CONCILIO DE NICEA El sacramento no puede negarse a un moribundo
SAN CIPRIANO Sacramentalidad de la Penitencia en 3 fases:
1. Confesión privada hecha al obispo. Le era impuesto un periodo de
penitencia (ayuno, oración, obras de caridad)
2. El pecador pide al obispo, clero y comunidad ser readmitido
3. Reconciliación mediante imposición de manos por el obispo
ACTOS DEL PENITENTE CONTRICIÓN: Es un dolor del alma y un detestar el pecado cometido, con propósito de
no pecar en adelante. Al reino de Cristo solo se puede llegar por la metanoia. De esta
contrición depende la verdad de la penitencia.
CONFESIÓN: nace del verdadero conocimiento de si mismo ante Dios y de la contrición
de los pecados. La confesión exige la voluntad de abrir su corazón al ministro de Dios; y
por parte del ministro, un juicio espiritual mediante el cual, como representante de
Cristo y en virtud del poder de las llaves, pronuncia la sentencia de absolución
SATISFACCIÓN: la verdadera conversión se realiza con la satisfacción por los pecados, el
cambio de vida y la reparación de los daños. Debe acomodarse a cada penitente, para
que así cada uno repare el orden que destruyó y sea curado con una medicina opuesta a
la enfermedad que le afligió.
ABSOLUCIÓN: al pecador que manifiesta su conversión al ministro de la Iglesia en la
confesión sacramental, Dios le concede su perdón por medio del signo de la absolución
y así el sacramento de la penitencia alcanza su plenitud.
NECESIDAD Y UTILIDAD DE ESTE SACRAMENTO: a aquellos que por el pecado grave se separaron de la comunión con el
amor de Dios, el sacramento les devuelve la vida que perdieron. A quienes caen en pecado venial, el sacramento les
restaura las fuerzas, para que puedan alcanzar la plena libertad de los hijos de Dios.
- Para alcanzar fructuosamente el remedio que nos aporta el sacramento, el penitente debe confesar al sacerdote
todos y cada unos de los pecados graves
- El uso frecuente y cuidadoso de este sacramento ayuda a perfeccionar la gracia del bautismo.
- Para que el sacramento llegue a hacer fructuoso debe impulsar a los fieles a una entrega cada vez más al servicio
de Dios y de los hermanos.
FUNCIÓN DE LA COMUNIDAD: La Iglesia como pueblo sacerdotal, actúa de diversas maneras: predicación de la Palabra
de Dios, intercede por los pecadores y ayuda al penitente con atención y solicitud maternal para que reconozca y
confiese sus pecados y así alcance la misericordia de Dios.
MINISTRO: la Iglesia ejerce el sacramento por los Obispos y presbíteros quienes llaman a los fieles a la conversión por la
predicación de la Palabra de Dios e imparten el perdón de los pecados en nombre de Cristo.
Los presbíteros, en el ejercicio de este ministerio, actúan en comunión con el Obispo y participan de la potestad y
función de quien es el moderador de la disciplina penitencial.
RITO PARA RECONCILIAR UN SOLO RITO PARA RECONCILIAR A VARIOS RITO PARA RECONCILIAR A MUCHOS
PENITENTE PENITENTES CON CONFESIÓN PENITENTES CON CONFESIÓN Y
INDIVIDUAL ABSOLUCIÓN GENERAL
1. Preparación del sacerdote y 1. Ritos iniciales Imposibilidad física o moral
penitente 2. Celebración de la Palabra de Dios Amenace un peligro de muerte y el
2. Acogida del penitente 3. Rito de Reconciliación sacerdote no tenga tiempo de por la
3. Lectura de la Palabra de Dios - Formula de confesión general confesión.
4. Confesión de los pecados y - Oración dominical Una grave necesidad
aceptación de la satisfacción - confesión, aceptación de la 1. invitación a arrepentirse de los
5. Oración del penitente y absolución satisfacción y formula de absolución pecados
del sacerdote - acción de gracias 2. manifestación abierta de recibir la
6. Acción de Gracias y despedida del 4. Despedida del pueblo absolución
penitente 3. el sacerdote invoca al Espíritu
Santo y da la absolución sacramental
4. el sacerdote invita a la acción de
RITO BREVE gracias
Mantenerse integra: confesión de los
pecados y la aceptación de la
satisfacción, invitación a la contrición,
formula de absolución y formula de
despedida.
MINISTRO: solo el sacerdote es el ministro propio de la unción de los enfermos. Los obispos, los párrocos y vicarios
parroquiales, capellanes de sanatorios y superiores de comunidades religiosas clericales.
FORMULA DE ABSOLUCIÓN: POR ESTA SANTA UNCIÓN Y POR SU BONDADOSA MISERICORDIA, TE AYUDE EL SEÑOR CON
LA GRACIA DEL ESPÍRITU SANTO, PARA QUE, LIBRE DE TUS PECADOS, TE CONCEDA LA SALVACIÓN Y TE CONFORTE EN TU
ENFERMEDAD.
6. Bendición Final
SACRAMENTO DEL ORDEN